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La ética debe ser considerada como constante disciplina para la vida, pues nos obliga a
realizar nuestras labores con eficiencia y a mantener una actitud de rechazo frente a todo lo
que minimice nuestra dignidad. De aquí es que se dice que el hombre es un ser
inexorablemente moral, pues su vida no le viene dada con dignidad y moral, sino que debe
hacerla, debe construirla con moral y dignidad.
La personalidad moral se va definiendo a través de cada uno de los actos humanos. Con
cada nueva posibilidad que nos apropiamos, con cada actualización de un vicio o de una
virtud, descubrimos, corregimos o subrayamos los rasgos de nuestro carácter.
Las normas éticas, generalmente aceptadas, proveen al profesional de un medio eficaz para
evaluar su propio trabajo y poder determinar si este satisface sus responsabiliades.
El hombre que se gradúa hoy y deja de estudiar mañana, estará ineducado para el día
siguiente. Debe perfeccionarse constantemente, poniéndose al día con los nuevos avances
que se registran en el mundo; pues aunque los principios fundamentales sean los mismos,
las técnicas cambian y las máquinas se perfeccionan.
El hombre que conoce la carrera que ha elegido, y ayudado por una buena formación ética,
o lo que es lo mismo apoderado del sentido del deber y del derecho de lo que se debe hacer
en moral, está llamado a triunfar en el desempeño de sus actividades.
Toda profesión lleva sobre sus hombros el peso de graves deberes y de hondas
responsabilidades, que el profesional solo podrá vencer si pone sus conocimientos al
servicio de una conciencia fina y delicada.
Todo profesional está obligado a amar la verdad, a dedicarse plenamente a la investigación
científica y a practicar el bien en todas sus gradaciones.
El profesional debe ser un hombre de conciencia, capaz de amar el cumplimiento del deber
por encima de las garantías materiales, ventajas o provechos personales.
Todo el que tiene sentido de su dignidad profesional debe empezar por respetarse a sí
mismo, no ofreciendo nunca, ni en su vida privada, ni en su vida profesional, ni en su vida
pública ciudadana, motivo de escándalo. Debe matener a raya sus pasiones y ser un ejemplo
vivo de buen comportamiento, un comportamiento verdaderamente ÉTICO.
INTRODUCCION
Más adelante se explicarán diferentes tópicos acerca de esta importante ciencia. ahora nos
referiremos a nuestra profesión, la ingeniería civil, la cual planea, diseña y construye la
infraestructura del país; aquel que incide directamente en el desarrollo, y el progreso, y
aquel que combina conocimiento científico y técnico, manejo administrativo, humano y
comunal, con a veces, frías ecuaciones, formulaciones numéricas, proyectos de
investigación, tecnologías y procesos.
“El hombre es “el único animal que conoce”. Puesto que conoce la calidad moral de su
comportamiento, puede sentir tanto la culpa como la autoprobación.”Partiendo de éste
supuesto podremos comprender mejor el rol ( o papel) que juega el dueño, presidente,
director general... de una empresa., éticamente con respecto a sus inferiores.
Kant dice que el gerente nunca debe usar a nadie como un mero medio para sus fines
personales, ni tampoco permitir que nadie lo use así a él; a esto se le llama Principio
primario.
Estoy de acuerdo porque se podría decir que un negocio ha sido bueno no solo porque se
han beneficiado ambas partes sino porque uno ha sacado meyor provecho. La ética no es
un ingrediente para triunfar en los negocios.
Esto es una actuación de guerra, donde la mente del consumidor es el campo de batalla.
Esta batalla no puede ser sobrellevada bajo un sentido ético.”
Creo que una buena actuación ética es al mismo tiempo, una buena actuación profesional.
La ética descubre en los hombres algo de más valor que la simple actuación. La ética es una
exigencia de la persona, cualquiera sea su trabajo. La ética en la profesion, supone que sus
principios son los mismos de la moral general.
Esto puede al menos interpretarse como sujetos que no son personas sino recursos (con
todas las implicaciones éticas que esto signifique).
Estos recursos son atractivos en la medida que cumplan con juventud, dedicación,
resultados, identificación con la empresa, esfuerzo que vaya más alla de la estricta
responsabilidad, ser capaz de trabajar en equipo, ser agradables, saber de computación y
tener un idioma alternativo. Mejor aun si su costo es "bajo".
Una vez que este recurso se ha desgastado --y luego de haber entregado la vida a la
empresa (sin olvidar que la familia también vive este proceso)--, puede ser friamente
reemplazado por otro recurso joven, que sepa de computación, de bajo precio,etc., etc.
Este es el comportamiento de las empresas hacia los recursos humanos (personas con
familias que dependen de ellos, aspiraciones, necesidades, sentido de dignidad, sueños de
justicia) en la mayoría de las empresas que interactuan en un ambiente de competencia, y
sin embargo existen empresas que no dudan en mencionar que las personas son uno de sus
principales activos.
La ética empresarial, en cuanto a tal, sin embargo, significa actuar en un ambiente que no
solo procura el más alto respeto y dignidad de sus empleados (personas y nunca
recurso),sino que procura que la empresa se presente frente a la sociedad de manera
honrada, veraz y honesta , más idealmente en la procuración del bien social.
Llevar a cabo una vida completamente honesta y que esto repercuta positivamente en la
forma de vida necesita una gran dosis de suerte y de trabajo. Esto significa que una persona
honesta tiene menos herramientas para conseguir los objetivos fijados para la vida
profesional. Esto es: una persona honesta tiene que pasar mayores complicaciones para
llevar a cabo sus ambiciones.
Disfrutar de la vida, terminarla de modo que tengas la sensación que has hecho todo lo
necesario, todo lo que debías hacer, es harto difícil. Para ello se debe alcanzar un nivel de
bienestar casi perpetuo en el que la honestidad (para con uno mismo, no me canso de
repetirlo, lo que piense el mundo no importa excepto en el aso de meterse dentro de la
libertad de los demás), en el que la honestidad y una conciencia plácida son, aunque entre
bastidores, directores principales.
Para hacer esto no nos cabe otra opción que ser humanos y fieles a la dinámica y fuerza de
la vida. Y nuestra vida es el día a día, el presente y no el futuro; que no sólo uno mismo
pueda ver el sol y la luna si no todas las personas que estén a tu alrededor y a las que uno
quiera.
Honradez
Honestidad
Estudio
Independencia
Carácter
Cortesía
Investigacion
Equidad en el cobro de honorarios
Prestigio de la profesión
Cuidado de la cultura
Puntualidad
Discreción, etc.
Concepto de Etica
Disciplina que trata de la valoración moral de los actos humanos, además de conjunto de
principios y de normas morales que regulan las actividades humanas.
La ética viene del griego «ethos», el término ética equivale etimológicamente al de moral
(del latín «mos, moris»: costumbre, modo de comportarse); sin embargo, el uso parece
asignar a este segundo término una connotación teológico-religiosa, atribuyendo al primero
otra más filosófica, o bien reserva el de moral para la moral práctica o vivida, mientras que
designa con el de ética la reflexión sistemático-filosófica sobre dicha moral. Como filosofía
moral, la ética habla del comportamiento humano bueno o malo; sin embargo, también
apunta a aquella fuerza moral a la que aluden expresiones como moral elevada o alta y
moral baja, que se manifiesta en sentimientos, inclinaciones y pasiones que a veces ciegan,
pero cuya ausencia lleva a un estar sin moral, a la falta de esperanza, a la «acedia» de los
medievales, esto es, a la pereza radical, al tedio y al hastío.
Después de la ética antropológica vendrá la ética normativa que evalúe contenidos morales;
sin embargo, ésta nunca ha sido única, sino que ha estado determinada por el criterio
adoptado como norma: en la ética teleológica, el fin (que pudo ser a su vez el bien moral,
en la ética de la virtud, o el bien supremo: ya fuese la felicidad, en el eudemonismo, o Dios,
en la ética teológica); en la ética deontológica kantiana, el «deber» (el dictado de la
conciencia y la buena voluntad), etc. Aún de forma inconsecuente (la conciencia del deber
implica una dimensión social), el individualismo acompañó a la ética kantiana, provocó la
reacción de Hegel y exige aún hoy buscar una ética civil de convivencia: aunque no puede
suprimirse el pluralismo práctico de morales vividas, ha de convenirse en unos mínimos
comunes a todo ciudadano (esto es, los mínimos propios de la convivencia democrática),
jurídicamente establecidos por la constitución, de modo que el teórico de la moral pasa de
la ética filosófica a la filosofía del derecho.
Más sutil que tales reduccionismos ha sido sin duda el de la metaética (discurso sobre el
discurso ético), que sustituye la ética por la lógica del lenguaje moral y por el análisis
lingüístico del mismo. Pero el hallazgo de la dimensión pragmática del lenguaje mismo
(cuyos juegos resaltó Wittgenstein) abre una comprensión ética del juego del discurso y de
la acción comunicativa.
Aunque parezca que se reincide en la ética utópica, no se trata aquí de una realidad
alternativa empíricamente posible (como en las utopías clásicas), sino de una anticipación
contrafáctica, o idea regulativa kantiana no individualista. Por eso es preciso redescubrir al
hombre, mediante una antropología ética, como un ser radicalmente moral, ético, y buscar
en el diálogo con los otros (continuación del propio intradiálogo) un contenido moral, regla,
modelo, virtud, «ethos», deber, valor, del que se pueda dar razón no como algo superpuesto
a la condición humana, sino como proyecto que ésta, anticipándose, es y cuya realización
requiere fuerza moral (la moral elevada que sustituya a un estar sin moral).
Etica y Política
Tanto la moral, como el derecho y los usos sociales, forman parte de un todo mayor: la
ética. Hablar de ética es hablar del bien y del mal. La ética no es una abstracción, es el otro.
Cada acto está obrando directa o indirectamente sobre una vida: "Nunca se roba algo, se le
roba a alguien".
La moral hace referencia a aquellas pautas interiorizadas por el individuo quien se las
autoimpone no como obligación sino como necesidad, por el simple hecho de provenir o
formar parte de "lo bueno".
Los usos sociales recogen comportamientos deseables y aprobados por una comunidad, es
decir costumbres sociales. Son normas consuetudinarias.
El hombre, por naturaleza tiene la capacidad de perfeccionarse y de superarse día a día, por
lo que tiende a alcanzar la plenitud. Para llegar a tan preciada meta como lo es la plenitud,
es necesario vivir en sociedad; el ser humano necesita de los demás para construir un
mundo o ambiente propicio en el cual alcanzar la plenitud, causa esencial de la felicidad.
Es por ello que el hombre necesita de la sociedad política, pues nada es pleno si no se
comparte, confronta y comunica a los demás, ya que el bien es expansivo, comunicativo:
"De nada sirve la sabiduría si no se la comunica mediante la educación".
La política es la ciencia social y práctica cuyo objeto es la búsqueda del bien común de los
integrantes de una comunidad.
El bien común no es sólo la tarea del poder político sino también razón de ser de la
autoridad política.
Por lo tanto, es el bien común el principio y fin ético de la política. Será bueno todo aquello
que beneficie, tienda, acreciente o promueva el bien común. Será malo todo aquello que
tienda a perjudicarlo, disuadirlo, disminuirlo, etc.
El bienestar general se logra por medio de una auténtica justicia social cuya finalidad es
obtener una más justa distribución de la riqueza entre todos los grupos sociales. Hace falta
la presencia de un estado capaz de generar este equilibrio. Un estado que no elimine la
responsabilidad de las personas, de las comunidades y de las organizaciones intermedias.
Un estado que no convierta en dependientes a los ciudadanos y en pupilas a las
comunidades y organizaciones intermedias. Un estado que no les quite sus obligaciones.
Esa orientación de la intervención estatal ha sido nefasta para la sociedad civil, la ha hecho
débil. Pero tampoco sirve un estado ausente, que deje la suerte de sus habitantes al juego de
la oferta y demanda. Ni un estado indiferente a los problemas sociales. El estado debe
intervenir para asegurar el mínimo de bienestar para todos. Sin demagogias.
a-) El economicismo.
Este tipo de corrupción se da siempre que el dinero ocupa un lugar preferencial en la escala
de valores de una sociedad. Y lo cierto es que así parecen estar hoy las cosas en la mayoría
de los países. Lo común es que un funcionario viole sus deberes de lealtad al pueblo por
alguna condición económica, es decir, porque hay dinero de por medio.
Max Weber distinguió entre los políticos que viven para la política y los que viven de la
política. En el último caso, la ambición política deja de valer por sí misma y se rebaja al
nivel de un valor instrumental al servicio del enriquecimiento.
A fines del siglo XIX, Leandro Alem sostenía: "... el interés material será para un pueblo de
mercaderes, no para el nuestro...", "...no conviene materializar las sociedades, aflojando los
resortes morales de su espíritu...", "... Se nos quiere halagar con las promesas de
engrandecimiento material. Yo prefiero, porque lo considero más digno de una sociedad
como de un individuo, vivir con menos lujo y con menos pompa, siempre que me dirija yo
mismo. Prefiero una vida modesta, autónoma, a una vida esplendorosa sometida a
tutelaje...".
Todo poder tiende a corromper; el poder absoluto corrompe absolutamente. Alguien que
carece de una sensibilidad moral excepcional, y que no es sino una persona ordinaria,
común y corriente, puede sucumbir frente a la tentación extraordinaria que surge de las
inmensas posibilidades del poder, a menos que se la limite y se la controle. Expresaría
Elpidio González: "... El radicalismo es una fuerza principista. Para la Unión Cívica
Radical los gobiernos son medios de servir al país y no fines...".
Bajo cualquier sistema político existe un orden político natural al cual la acción política
debe sujetarse en aras de la estabilidad y el bienestar de la nación.
Por lo tanto una conducta será éticamente positiva siempre que el hombre encamine su vida
conforme a las costumbres sociales y normas jurídicas vigentes, y cuyos principios morales,
que por naturaleza indican qué es lo bueno, no queden sólo en el campo de la abstracción o
el conocimiento, sino que los concrete mediante su observancia.
En resumen, será una conducta acorde a la ética aquella conducta virtuosa. La virtud es la
disposición constante del alma a conducirse de acuerdo al bien y a evitar rigurosamente el
mal. Las virtudes que hacen ética a una conducta, y que son además indispensables en un
estado democrático, son las siguientes:
Espíritu de Trabajo: Inclinación a realizar con entusiasmo y eficacia los labores que
se emprenden.
Es fácilmente entendible entonces que los tres factores de desnaturalización del estado
tienen su semilla o su fundamento en una conducta éticamente negativa: en el materialismo,
en la mentira, la deslealtad, la intolerancia, el egoísmo, en la carencia de patriotismo, etc.
El radicalismo cree que el fin no justifica los medios, y que los altos fines sólo se alcanzan
cuando los medios son adecuados a su altura. Colocándose así los medios en el plano del
deber constante e inmediato, y surge la filosofía realmente creadora de conducta, que es
unidad e interacción entre el esfuerzo moral-personal y el político o social que lo incluye.
Esta filosofía radical de la conducta es la única que podrá reintegrar al hombre-espíritu y
salvar a la humanidad del posible desastre de los siglos.
Krause, filósofo de gran influencia sobre la doctrina radical, sostenía que la ley moral lleva
implícita la libertad y el orden, siendo su máxima de conducta más difundida: "Haz el bien
por el bien mismo".
La pérdida del camino ético de la política, no es más que el reflejo de una sociedad que
también lo ha perdido. Al fin y al cabo, los hombres de la política, forman parte de la
sociedad a la cual representan y dirigen.
Principios Eticos
Algunas veces los principios elegidos no tienen especificado su valor ultimo en la creencia
de que tal determinación es imposible. Esa filosofía ética iguala la satisfacción en la vida
con prudencia, placer o poder, pero se deduce ante todo de la creencia en la doctrina ética
de la realización natural humana como el bien ultimo.
Tipos de Etica:
Etica Cristiana: el advenimiento del cristianismo marcó una revolución en la ética, al
introducir una concepción religiosa de lo bueno en el pensamiento. Según la idea cristiana
una persona es dependiente de por entero de Dios y no puede alcanzar la bondad por medio
de la voluntad o de la inteligencia, sino tan solo con la ayuda de la gracia de Dios. La
primera idea ética cristiana descasa en la regla de Oro.
“Lo que quieras que los hombres te hagan a ti, házselo a ellos” (Ud.7,12); en el mandato de
amar al prójimo como a uno mismo (lev.19,18) e incluso a los enemigos (ut.5,44), y en las
palabras de Jesús: “ Dad al cesar lo que es del cesar y a Dios lo que es de Dios.”
Etica Axiológica: esta ética fue desarrollada en la primera mitad del siglo XX
preocupada mas por el “contenido” que por la “forma” de la acción moral.
Esta corriente confiere al valor el puesto central de la teoría ética. Es bueno aquello que
realiza un valor y malo aquello que lo impide. El valor moral de la persona radica en los
valores objetivos, de carácter positivo o negativo, que encarnan en su conducta.
Algunos consideran el valor como un ser ideal, otros lo consideran como una cualidad
objetiva que se da en los seres.
Los valores plasman ideales de perfección que el hombre capta intuitivamente y frente a los
cuales se sienten atraídos en orden a una realización o práctica concreta del mismo. De la
percepción del valor surge el sentido del deber moral
Según ellos, él diálogo es el único medio que nos queda para saber si los intereses
subjetivos puede convertirse en normas universales. Esta ética se fundamenta en la
autonomía de la persona, que confiere al hombre el carácter de autolegislador, y en la
igualdad de todas las personas que les da derecho a buscar una normativa universal
mediante el diálogo. Para hacer posible la ética dialógica, todos los miembros de la
comunidad se debe reconocer recíprocamente como interlocutores con los mismos derechos
y se debe obligar a seguir las normas básicas de la argumentación.
El objetivo de la Etica
Enseña Aristóteles en su ética a Nicómaco que lo pasado, las cosas ya hechas, jamás
pueden ser objeto de la preferencia moral.
Este procede de que es imposible deliberar sobre un hecho realizado. Solo se delibera sobre
el porvenir y lo posible, porque lo que ha sucedido, es decir, lo pasado. Por esto el poeta
Agathón tuvo razón al decir: “En este punto ni el mismo Dios tiene libertad. Lo que fue,
necesariamente ha sido”.
Divídanse las virtudes del corazón y virtudes del espíritu. El hombre moral, el sujeto de la
moralidad, se refiere al tiempo que aun no transcurre, y pasa el tanto las virtudes del
corazón, como las de la mente, cobran sentido.
Los medios de que dispone el alma para la realización de las virtudes del espíritu son: la
inteligencia, el arte, la ciencia, la prudencia y la sabiduría.
Mas la inteligencia no solo conoce los principios, sino que en ellos mira las conclusiones
que del mismo proceder.
Los cirenaicos, sobre todo Aristipo de Cinere, eran hedonistas y creían que el placer
era el bien mayor (en tanto no dominara la vida de cada uno), que ningún tipo de
placer es superior a otro y, por ello, que solo es mensurable en grado y duración.
Los megáricos, seguidores de Euclides, propusieron que aunque el bien puede ser
llamado sabiduría, Dios o razón, es uno y que el Bien es el secreto final del universo
que solo puede ser relevado mediante el estudio lógico.
Los hallazgos e hipótesis de Newton provocaron que los filósofos tuvieran confianza en un
modelo ético tan racional y ordenado como se suponía que era la naturaleza.
Utilitarismo
La doctrina ética y política conocida como Utilitarismo fue formulada por el británico
Jeremy Bentham hacia finales del siglo XVIII. Bentham explico el principio de utilidad
como el medio para contribuir al aumento de la felicidad de la comunidad.
Creía que todas las acciones humanas están motivadas por un deseo de obtener placer y
evitar el sufrimiento.
El desarrollo científico que más afecto a la ética después de Newton fue la teoría de la
evolución presentada por Charles Darwin facilitaron soporte documental al modelo algunas
veces denominado ética evolutiva, según el cual la moral es solo el resultado de algunos
hábitos adquiridos por la humanidad a lo largo de la evolución. El filosofo alemán Friedrich
Nietzche dio una explicación asombrosa pero lógica de la tesis darwinista acerca de que la
selección natural es una ley básica de la naturaleza. Según Nietzche, la llamada conducta
moral es necesaria tan solo para el débil. La conducta moral es particular la defendida por
el judeocristianismo, que según él es una doctrina esclava tiende a permitir que el débil
impida la autorrealizacion del fuerte.
Psicoanálisis y Conductismo
La ética moderna esta muy influida por el psicoanálisis de Sigmund Freud y sus seguidores
y la doctrina conductivas basadas en los descubrimientos sobre estimulo-respuesta del
fisiológico ruso Ivan Petrovich Pavlov. Freud atribuye los problemas del bien y del mal en
cada individuo a la lucha entre el impulso del yo instintivo para satisfacer todos sus deseos
y la necesidad de yo social de controlar o reprimir la mayoría de esos impulsos con el fin de
que el individuo actuara dentro de la sociedad.
Los seres humanos, por lo tanto, se hallan solos en el universo y tienen que adoptar y
asumir sus decisiones éticas en la conciencia constante de la muerte.
Entres otro filósofos modernos, como el estadounidense John Dewey, figuran los que se
han interesado por el pensamiento ético desde el punto de vista del instrumentalismo.
Según Dewey, el bien es aquello que ha sido elegido después de reflexionar tanto sobre el
medio como sobre las probables consecuencias de llevar a cabo ese acto considerado bueno
o un bien.
Estoicismo
Epicuerismo
En los siglos III y IV AC, él filosofo griego Epicúreo desarrollo un sistema de pensamiento,
mas tarde llamado epicureísmo, que identificaba la bondad mas elevada con el placer, sobre
todo el placer intelectual y al igual que el estoicismo, abogo por una vida moderada incluso
ascética dedicada a la contemplación.
Los epicúreos mantenían también que es mejor posponer el placer inmediato con el objeto
de alcanzar una satisfacción más segura y duradera en el futuro por lo tanto, insistieron en
que la vida buena lo es en cuanto se halla regulada por la autodisiplina.
Consideraciones de la Etica
Esquema Biologicista:
Dentro de las tendencias que reducen la ética a la biología o que al menos interpreta el
hecho moral dentro de los cuadros biológicos conviene destacar la corriente evolucionista.
El padre de esta orientación es H. Spencer, cuyo Danwinismo social aplicado a la ética es
una síntesis en la que se asocia elementos en la tradición del llamado estado de naturaleza
con puntos de vista de origen Darwinano. Otro representante cualificado de la ética desde
los presupuestos de la teoría Evolucionista de C.H Waddington.
Para Waddington el discurso reflexivo sobre la ética hay que situarla dentro del marco
ideológico de la hipótesis evolucionista. Si la tarea de la reflexión ética es buscar un criterio
que nos permita juzgar, modificar y ampliar los sistemas éticos que irreflexivamente se nos
han inculcado, esa tarea solamente es posible se inserta en el examen de la evolución de los
animales y el hombre.
Lo ético con minúscula se identifica con los códigos recibidos, con lo que de hecho hace la
gente cuando se deja llevar por el sentido gregario o por el sentido utilitarista.
Sin embargo, la ética con mayúscula consiste en el criterio para juzgar y orientar el
conjunto de los códigos recibidos en cuanto que esto es mas o menos ventajoso en orden a
propiciar una evolución adecuada de la especie humana.
Esquema Sociologista
El supuesto de esta teoría es la hipótesis de una conciencia colectiva, realidad distinta de los
individuos, anterior y superior a ellos, que se apodera de las conciencias de estos.
La diversión de Lévy-Bruhl insiste en que la ética como conciencia normativa entraña una
contradicción ya que pretende ser a la vez teórica y practica; no se puede confundir las dos
operaciones mentales de conocer lo que es y aplicar los resultados de estos conocimientos a
la realidad.
De ahí que, según Lévy-Bruhl la ética debe quedar reducida a una ciencia descriptiva de las
costumbres morales. La ciencia de las costumbres morales, ese estudio de los hechos
morales, tratados con la metodología general de la sociología. De este modo la génesis del
orden moral no esta mas que en la sociedad.
Bergson intenta refutar el sociologismo moral, pero propone una solución que queda dentro
de sus mismas fronteras. Concede Bergson al socialismo que la moral puede consistir en
pura presión social, aunque en este caso se trata de lo que el llama moral -cerrada, estática,
pasiva, meradamente recibida.
Junto a ella esta moral-abierta, dinámica, activa, de aquellos hombres a los que llamaba
héroes) que reacciona frente al medio social.
La ética en mi trabajo
Antes de referirnos a la ética del trabajo primero comenzaremos por definir el trabajo.
Desde mi punto de vista el trabajo no es algo que deba ser remunerado ni obligatorio si no
absolutamente voluntario. El trabajo es algo que nos forma como personas y nos permite
disfrutar de la vida. Es más el trabajo nuestro es la vida y nuestra obligación es disfrutarlo
con honestidad y empeño porque nuestra única verdadera posesión es la vida.
Así pues queda claro que el concepto de trabajo está unido estrechamente a la vida y se
compenetran y ordenan de forma muy compleja. Una parte esencial del disfrute y bienestar
en la vida la juega la conciencia y aquí a formar parte, a su vez, la ética y la honestidad.
Llevar a cabo una vida completamente honesta y que esto repercuta positivamente en la
forma de vida necesita una gran dosis de suerte y de trabajo. Esto significa que una persona
honesta tiene menos herramientas para conseguir los objetivos fijados para la vida
profesional. Esto es: una persona honesta tiene que pasar mayores complicaciones para
llevar a cabo sus ambiciones.
Disfrutar de la vida, terminarla de modo que tengas la sensación que has hecho todo lo
necesario, todo lo que debías hacer, es harto difícil. Para ello se debe alcanzar un nivel de
bienestar casi perpetuo en el que la honestidad (para con uno mismo, no me canso de
repetirlo, lo que piense el mundo no importa excepto en el aso de meterse dentro de la
libertad de los demás), en el que la honestidad y una conciencia plácida son, aunque entre
bastidores, directores principales. El sentimiento de fidelidad hacia la propia persona, el
cumplimiento del concepto propio y personalísimo de justicia y el disfrute de los ratos de
ocio a la vez que saber procurar la felicidad de las personas a tu alrededor y la mejora del
ambiente que nos rodea no es otra cosa que nuestro verdadero trabajo.
Nuestro trabajo es, como conclusión, nuestra vida y su completo aprovechamiento. Para
hacer esto no nos cabe otra opción que ser humanos y fieles a la dinámica y fuerza de la
vida. Y nuestra vida es el día a día, el presente y no el futuro; que no sólo uno mismo pueda
ver el sol y la luna si no todas las personas que estén a tu alrededor y a las que uno quiera.
La cuestión que se plantea ahora es la de saber con mayor precisión cuál es el objeto, tanto
material como formal, de la ética y, al mismo tiempo, la importancia que tiene tanto en el
orden especulativo como en el orden práctico. Antes de definir el objeto material y el objeto
formal de la ética debemos señalar que muchas de las acciones que realizamos se producen
sin la representación consciente por nuestra parte y sin intervención de nuestra libertad. Son
acciones, por así decir, que radican en el hombre sin pertenecerle: "actos del hombre" pero
no "actos humanos".
En efecto, hay una gran diferencia entre los "actos del hombre" y los "actos humanos". Los
primeros son actos hechos por el hombre, voluntarios o no. Los segundos son actos propios
del hombre y que, por tanto, provienen de su voluntad libre. Los actos que el hombre
realiza inconscientemente no comprometen su libertad. Si por ejemplo, uno de estos actos
perjudica a alguien, puedo sentir tristeza, pero no me puedo arrepentir ni sentir
romordimiento.
Sin duda no parece que procedan de mi yo más real y más auténtico; yo no soy responsable
de ellos. En todo caso, estos actos, considerados en sí mismo, no son morales.
Algo muy dintinto sucede cuando, por ejemplo, yo decido materializar, libre y
conscientemente, una acción determinada. En este sentido se trata de una acto estrictamente
humano, puesto que intervienen la voluntad y la libertad. De ahí que el acto moral implique
una referencia a la fuente de donde emana, a saber, la voluntad libre. En otros términos,
obrar humanamente es obrar libremente; pero obrar libremente es obrar con miras a un fin.
De lo dicho anteriormente se infiere que el objeto material de la Etica son los actos
humanos, los hábitos o costumbres, el carácter de la persona. La vida, decía Ortega y
Gasset, es un que hacer, una tarea. El hombre va haciendo su modo de sar y cuanto mayor
sea el número de actos, tanto mayor la determinación del ser humano: "puede decirse que el
ir viviendo o existiendo consiste en ir haciendo cosas, no sólo materiales sino inmateriales,
y al ir haciendo las unas y las otras, ir haciéndose cada cual a sí mismo; y lo que cada cual
va haciéndose es lo que va siendo" (Aranguren, Op. cit., pág. 395)
Lo expresado confirma que el objeto material de la ética es, en última instancia, no la vida,
sino el carácter adquirid en ella. A lo largo de la vida conquistamos un carácter, un "haber"
por apropiación, y éste es el que importa éticamente.
"Somos, a la vez, "agentes, autores y actores de nuestros actos. Agentes, en cuanto que
emergen de nuestra naturaleza; autores, en cuanto que con libres, dependen, no se aquella,
sino de nuestra volición; actores, en cuanto que definirnos nuestra propia figura aun en
aquello -naturaleza- de que no somos dueños". (Citado por José Luis Araguren, Op.cit.,
pág. 396)
El ethos, carácter o personalidad moral, va siendo definido a través de cada uno de los actos
humanos. Con cada nueva posibilidad que nos apropiamos, con cada actualización de un
vicio o una vitud, describimos, corregimos o subrayamos los rasgos de nuestro carácter.
Como se puede observar, hay, pues, un círculo entre estos tres conceptos, codo ético de ser,
hábitos y actos, puesto que el primero sustenta los segundos y éstos son los principios
intrínsecos de los actos, pero, recíprocamente, los hábitos se engendran por repetición de
actos y el modo ético de ser se adquiere por hábito. Estudiemos, pues, a continuación, y en
general, los actos, los habitos y el carácter, considerados como objeto material de la ética.
Empezando por los actos, lo primero que debemos preguntar en cuáles, entre los actos que
el hombre puede ejecutar, importan a la ética. La Escolástica establece dos divisiones.
Distingue, por una parte, los "actus humanis", es decir, actos del hombre y en cuanto tal
hombre. Sólo éstos constituyen propiamente objeto de la ética, porque sólo éstos son
perfectamente libres y voluntarios.
La ética escolástica también admite los hábitos como objeto material de la ética, en cuanto
que los considera como "principio intríseco de los actos". En realidad, la personalidad
moral se define a tráves de cada uno de los actos y de los hábitos, por los cual éstos no
pueden ser relegados a un segundo término al hablar del objeto de la ética. La vida como
totali0dad nos remite a los actos que la resumen -el "instante, la repetición"-, y al "carácter"
en que queda impresa. Al hablar de la vida en su totalidad no debe olvidarse que ésta no es
solo duración, sino también futurición y emplazamiento:
"En el tiempo como futurición proyectamos el destino moral que vamos a forjar. En el
tiempo como emplazamiento y "mientras llega la muerte", estamos a tiempo de rehacer este
destino moral... El hombre proyecta y se propone, se esfuerza y se afana en el tiempo;
dispone un tiempo limitado para hacerse asi mismo, para realizar su cualidad ética".(José
Luis Aranguren Op.cit.Págs.195-196).
El objeto formal de la ética está constituidopor el aspecto moral de los actos humanos.
Todas las actividades realizadas libre y voluntariamente son buenas o malas, justas o
injustas. Por eso, cuando un acto implica degradación de la propia dígnidad enseguida lo
catalogan como inmoral; pero en lugar de degradarla la engrandecen, entoces lo calificamos
de positivo. De ahí que la misión principal de la ética consista en jusgar el aspecto moral de
nuestro actos, es decir, valoral si las actividades que cada persona realiza son o no son
compatibles con su propia dignidad .
La ética analiza los problemas fundamentales de la moral individual y social, y los pone de
relieve en los estudios de los deberes profesionales. Trata de definir con claridad y
concisión la naturaleza de la profesión y la distintas relación con los elementos humanos
que sufren su influencias o los ejercen. Además tratan permanente y vigurosamente de
combatir el divorcio que se ha pretendido establecer entre las ideas y la vida, es decir, la
actitud negativa del profesional que se expresa en los siguientes términos: ''respetemos la
regla moral a la distancia, pero no nos compliquemos la vida; vivamos como todo el
mundo, sin tantas investigaciones. Disimulemos y llevemos de la mejor manera posible
nuestro fardo de defectos y dejenmos a los filósofos especular sobre las virtudes''.
Es un error el creer que la moral es respetada en los libros. Un profesional que halla
adquirido un moral bien pertrecha espiritualmente, no piensa en esta forma, sino que se
resuelve a luchar y a hacer fermento de renovación humano en todos los ordenes.
Debemos tener presente que el trato social es más exigente para el profesional que para el
hombre común, pues mientras a este se le perdonan faltas quizás por su ignorancia frente a
las normas éticas, se presume que el profesional sea, por el contrario una persona
preparada, con una buena formación moral y con principios relevantes en el terreno del
bien. Tiene el deber ineludible de ser ejemplo de rectitud en su proceder.
La ética le exige dedicarse plenamente a su tarea especifica y le señala una serie de normas
para que actue acorde a ellas. De ahí que se califique de inmoral o corrupto al que
comprendiendo lo que debe hacer no lo hace. Al que posee sentido moral pero carece de
fuerza moral y es arrastrado por las pasiones.
La vida, como ha hecho notar Ortega Gassete, es quehacer, pero el quehacer, eticamente es
quehacer, y por eso pudo Cicerón definir prefilosóficamente la moral como: " modo de
conducir la vida ". Cuando un hombre incurre en inmoralidades el modo de conducirse es
deficiente.
La profesión según Peinado Navarro, es una actividad del hombre que desempeña una
función social. Toda persona que ejerza una profesión ha de tener la idea de permanecer en
ella durante largo tiempo, buscar en ella los medios de sustentación de la vida y que esa
profesión o trabajo sea duradero.
Lo esencial de la profesión es, ante todo, que sea personal: "ni las máquinas ni los animales,
que duraderamente llevan a cabo una determinada labor en beneficio de la sociedad, ejercen
una profesión. Prestan sencillamente un servicio y nada más ". (Peinado Navarro, Moral
Profesional, pag 5).
Esto siginifica que la profesión no consiste solamente en prestar un servicio, sino que
implicala personalidad. Es, además, una labor de carácter social: "la profesión supone una
sociedad organizada dentro de la cual las labores están distribuidas y contribuyen todas al
bien común . La profesión es, pues, de la sociedad organizada y para la sociedad
organizada". (Peinado Navarro, pag 6)
Por desgracia, la profesión no siempre coincide con la vocación. Esto constituira siempre
un desequilibrio sicológico en el sujeto y una fuente de malestar en él y de perjuicio para la
empresa; por el contrario, cuando la profesión coincide con la vocación esta será de
provecho para él y la empresa.
Cuando hay vocación ningún trabajo se hace pesado, todo se facilita, hay entrega y
dedicación. Toda actividad debe ejercerce vocacionalmente.
Introducción
Contenido:
Concepto de ética
Principios éticos
Tipos de ética
Escuelas griegas
Leyes de Newton
Utilitarismo
Psicoanálisis y conductivismo
Consideraciones de la ética
Etica y Política
La ética en mi trabajo
Conclusión
Referencias Bibliográficas
La profesión es un rango competitivo que conlleva a una capacidad cualificada
requerida por el bien común, con características esenciales que posibilitan el
crecimiento económico y social. El profesional adquiere el título que le
certifica la formación académica como tal, sin embargo no tiene todas las
cualidades éticas para ser ALGUIEN, porque es la manifestación de su
mundo interior, no por la naturaleza de la persona sino por sus cualidades,
principios y valores, como la idoneidad o aptitud que le asigna un nuevo perfil
a su personalidad.
tomada de patyadmi.blogspot.com
Integridad
Objetividad
Independencia
Responsabilidad
Confidencialidad
Justificación de la carrera
La carrera de Técnico agropecuario ofrece las competencias profesionales que
permiten al estudiante realizar actividades dirigidas a promover el desarrollo
sustentable, emplear técnicas agrícolas para la producción, manejar especies
pecuarias, procesar productos agropecuarios y operar proyectos de desarrollo
sustentable. Todas estas competencias posibilitan al egresado su incorporación al
mundo laboral o desarrollar procesos productivos independientes, de acuerdo con
sus intereses profesionales y necesidades de su entorno social. Asimismo,
contribuyen a desarrollar competencias genéricas que les permitan comprender el
mundo e influir en él, les capacita para aprender de forma autónoma a lo largo de la
vida, desarrollar relaciones armónicas, participar en los ámbitos social, profesional
y político. Con las competencias de productividad y empleabilidad:
•Trabajo en equipo
•Atención al proceso
•Orientación al logro
•Planeación y organización
•Orientación a la mejora continua
•Atención al cliente
•Ética profesional
Técnico Agropecuario
La carrera de Técnico Agropecuario ofrece las competencias profesionales que permiten al estudiante aplicar
los principios básicos de la agricultura, ganadería y agro-industrias con amplios conocimientos técnicos en las
actividades rutinarias y no rutinarias.
Asimismo podrá desarrollar competencias genéricas relacionadas principalmente con la participación en los
procesos de comunicación en distintos contextos, la integración efectiva a los equipos de trabajo y la
intervención consciente, desde su comunidad en particular, en el país y el mundo en general, todo con apego
al cuidado del medio ambiente.
Todas estas competencias posibilitan al egresado su incorporación al mundo laboral o desarrollar procesos
productivos independientes, de acuerdo con sus intereses profesionales o las necesidades en su entorno
social. Los primeros tres módulos de la carrera técnica tienen una duración de 272 horas cada uno, y los dos
últimos de 192, un total de 1200 horas de formación profesional.
Perfil de Egreso
Durante el proceso de formación de los cinco módulos, el estudiante desarrollará o reforzará las siguientes
competencias profesionales:
• Practica la agricultura
Además se presentan las 11 competencias genéricas, para que usted intervenga en su desarrollo o
reforzamiento, y con ello enriquezca el perfil de egreso del bachiller. Como resultado del análisis realizado por
los docentes elaboradores de este programa de estudios, se considera que el egresado de la carrera de
Técnico Agropecuario está en posibilidades de desarrollar las competencias genéricas antes mencionadas.
Sin embargo se deja abierta la posibilidad de que usted contribuya a la adquisición de otras que considere
pertinentes, de acuerdo con el contexto regional, laboral y académico:
1. Se conoce y valora a sí mismo y aborda problemas y retos teniendo en cuenta los objetivos que persigue.
4. Escucha, interpreta y emite mensajes pertinentes en distintos contextos mediante la utilización de medios,
códigos y herramientas apropiados.
6. Sustenta una postura personal sobre temas de interés y relevancia general, considerando otros puntos de
vista de manera crítica y reflexiva.
9. Participa con una conciencia cívica y ética en la vida de su comunidad, región, México y el mundo.
10. Mantiene una actitud respetuosa hacia la interculturalidad y la diversidad de creencias, valores, ideas y
prácticas sociales.
Es importante recordar que, en este modelo educativo, el egresado de la educación media superior desarrolla
las competencias genéricas a partir de la contribución de las competencias profesionales al componente de
formación profesional, y no en forma aislada e individual, sino a través de una propuesta de formación
integral, en un marco de diversidad.