Balderas, Luis, se encuentra su nombre así es, tranquilamente, y no le ataca el estrés, capoteando la pandemia, aunque todo esté al que acaba con mucha revés gente. No hay plazo que no se Todos le temen al virus, cumpla, ni que es el COVID fecha que no se llegue, diecinueve, dice la canija muerte, siento que mis piernas y me llevo a quien se tiemblan, deje. Ojalá que no me lleve. Con un cortejo de Personaje muy querido, brujas, respetado y apreciado, la calaca aquí llego, que siempre ha sido el preguntando por Luis, mejor, nuestro que enseguida se puso estimado profesor. gris.
Más de nada le valió,
lo que Luis previo, al fin la malvada muerte, al panteón se lo llevó.