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España
Ganadería
En el México prehispánico casi no existían animales domésticos que se
aprovecharan como alimento y para el vestido y el trabajo. Los españoles
trajeron consigo una gran cantidad de nuevas especies. Por ejemplo,
caballos y burros para el transporte; cerdos, cabras, vacas y gallinas como
alimento, y ovejas que además de carne y leche proporcionaban lana. En la
antigua Mesoamérica la mayor parte de la tierra fértil se destinaba a la
agricultura de maíz; sin embargo, con el colapso demográfico buena parte
de las tierras fueron abandonadas, por lo que los españoles las utilizaron
para criar ganado de todo tipo. En otros casos los indígenas fueron
despojados de sus tierras con el mismo fin. Aunque también muchos
agricultores indígenas comenzaron a criar ovejas, gallinas y puercos.
Minería
La minería fue la actividad productiva más importante de nueva España,
pues no solo fue el motor de la economía colonial, sino de España en
general. El metal más codiciado era el oro, que se extrajo de los yacimientos,
que se encontraban en los pies de las cordilleras y en los lechos de los
libros, pero al agotarse el recurso, la minería ahora se dedicaba a la
explotación de la plata. En este re requirió mayor inversión para su
explotación. Entre 1531 y 1552, se descubrieron ricos yacimientos de plata
en Taxco, Zacatecas, Guanajuato y Real del Monte.
Agricultura
La actividad que transformó el paisaje novohispano fue la agricultura,
debido a la diversificación de cultivos que trajeron los españoles: cereales,
como trigo, arroz, cebada y centeno; hortalizas, verduras y legumbres, como
zanahoria, lechuga, cebolla, ajo, etcétera. Además de frutos y cítricos como
vid, naranja, limón, durazno y manzana; y de especial interés para la comida
colonial, la caña de azúcar y los árboles de morera para la crianza del
gusano de seda. Los indígenas adoptaron las semillas, plantas y frutos para
su producción en las huertas de la casa y para su consumo. También los
españoles hicieron lo propio con la diversidad de platas cultivadas en
Mesoamérica, en especial el cacao, debido a su preciado consumo en forma
de bebida y su uso como moneda de pago para los indios.