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Contrato de Trabajo en El Ámbito Familiar
Contrato de Trabajo en El Ámbito Familiar
LILIANA CARDELLI(*)
INTRODUCCIÓN
Este trabajo pretende conocer la implicancia de la familia en el mundo del trabajo, tema que roza el derecho del trabajo y
de la seguridad social y al derecho civil y de familia.
Las relaciones laborales de familia están referidas a las prestaciones laborales dadas por determinados sujetos, a favor
de una explotación o unidad de producción perteneciente a un familiar directo o en grado próximo.
CARACTERÍSTICAS
El trabajo familiar es entendido como el brindado entre parientes de grado próximo, como ser por ejemplo:
- Cónyuges entre sí (aplicable tanto al matrimonio constituido por dos personas del mismo sexo como al constituido por
dos de distinto sexo).
- De ascendientes a favor de descendientes o viceversa (sean estos de sangre o adoptivos).
- Hermanos entre sí.
- También respecto de quienes han constituido unión de hecho (convivientes).
Es decir que quien brinda la prestación laboral está unido al empleador por lazos familiares en grado próximo.
Si bien en la legislación laboral no se han tratado estas situaciones en forma precisa y analítica, la jurisprudencia ha sido
la que sentó las bases para su categorización.
En principio podríamos distinguir los rasgos tipificantes de estas relaciones:
- La convivencia.
- El grado de parentesco.
- La asistencia recíproca.
- La falta de remuneración determinada.
- El fondo común de los gastos de subsistencia.
d) Que se verifique la dirección de uno hacia otro para la ejecución de la tarea (funciones de dirección).
Veamos a continuación distintas situaciones en cuanto al trabajo de familiares y la posibilidad de aplicar o no esta
presunción.
a) Trabajo del cónyuge
En este título nos referimos a la relación laboral en la que una de las partes presta servicios a favor de otra, en una
explotación comercial de titularidad del cónyuge.
La jurisprudencia de la Cámara Federal de Seguridad Social ha resuelto que no existe contrato de trabajo entre cónyuges,
con basamento en el artículo 1358 del Código Civil y en el artículo 27 de la ley de sociedades comerciales.
En el marco de nuestro ordenamiento civil, el matrimonio supone un régimen de comunidad de bienes, siendo su
característica la conformación de una masa común. De ahí que las prestaciones de cada uno de los cónyuges se den en
beneficio común y de la comunidad que ambos integran.
En el fallo “Segurotti, Luciana c/ANSeS s/prestaciones varias”(1), se consideró que “la circunstancia de que la labor que
despliegan la esposa o esposo es en favor de la sociedad conyugal, que integra con su cónyuge a partir del acto nupcial
(arts. 1261 y 1764, CC), de allí que entre ellos no pueda existir contrato que cree una relación de trabajo en los términos
de los artículos 21 y 22 de la ley de contrato de trabajo(2) (ver en este sentido Vázquez Vialard, A.: “Tratado de Derecho
del Trabajo” - T. III - pág. 444)”.
La normativa laboral (arts. 21 y 22, LCT) regula el trabajo dependiente, subordinado, circunstancia esta que resulta
incompatible con la institución matrimonial por cuanto el legislador asigna prioridad al vínculo matrimonial sobre los de
otro carácter.
En tales circunstancias, no es posible la existencia entre las partes de un contrato de trabajo. Agrega el fallo: “aunque el
establecimiento donde trabajaba fuera un bien propio del esposo, los frutos son gananciales (art. 1272, CC), y gananciales
habrían sido también los salarios percibidos. Tal confusión patrimonial hace imposible la ajenidad, que es de la esencia
del contrato del trabajo”.
Es entonces que según la CFSS, la relación invocada no puede calificarse como “dependiente”.
Este tema, si bien es de índole laboral, tiene sus consecuencias en el ámbito previsional.
En el caso anteriormente comentado, la actora, en su carácter de esposa del titular de una empresa metalúrgica, había
solicitado a la ANSeS un beneficio jubilatorio que le fue denegado en virtud de que el lapso trabajado no podía
encuadrarse bajo tareas prestadas en relación de dependencia. En la resolución judicial se revocó la sentencia recurrida,
ordenando que el organismo administrativo dictara un nuevo pronunciamiento sobre la pretensión previsional deducida,
considerando como autónomos los servicios del período en cuestión.
En similar sentido se pronunció la CFSS, Sala I, en autos “Aranda, Olga Beatriz c/Caja Nacional de Previsión para
Trabajadores Autónomos s/dependientes: otras prestaciones”, sentencia definitiva 24252, del 30/3/1993; “Dinarelli, Delina
Dominga c/Caja Nacional de Previsión de la Industria, Comercio y Actividades Civiles s/Otras prestaciones”, sentencia
definitiva 27323, del 15/4/1992, y “Silberberg, Raquel c/INPS - Caja Nacional de Previsión de la Industria, Comercio y
Actividades Civiles s/autónomos: otras prestaciones” sentencia definitiva del 13/3/2000.
La Corte Suprema de Justicia de la Nación tenia dicho en “Piccioni de Bouzas, Ofelia Hilda” (Fallos: 292:400) “...que
corresponde confirmar el pronunciamiento por el cual se deniega a la recurrente el beneficio de jubilación ordinaria en
virtud de considerarse imposible admitir como existente el contrato de trabajo invocado entre la peticionante y su
esposo…”. Ahora bien, ello no es óbice, para que al cónyuge que realizó una actividad lucrativa en beneficio de la sociedad
conyugal, actividad por la que se efectuaron los correspondientes aportes y contribuciones de la seguridad social, se la
deba estimar cumplida por cuenta propia (como trabajo autónomo).
En el fallo “Gallo, Flora Antonia s/jubilación ordinaria” CSJN resolvió en lo sustancial, respecto a este tema, que la
actividad lucrativa realizada por los cónyuges en beneficio de la sociedad conyugal debe reputarse cumplida por cuenta
propia excluyéndola del régimen de trabajadores en relación de dependencia.
En virtud de los fallos reseñados, podemos indicar a priori , que el Alto Tribunal también se pronunció con sustento en el
Derecho Civil, considerando que la labor que despliegan los esposos es a favor de la sociedad conyugal y sus frutos,
gananciales.
Cambiando el criterio jurisprudencial histórico, (posiblemente debido al cambio en su composición) con fecha 26/11/2002,
la Corte Suprema de Justicia de la Nación en autos “Segurotti, Luciana c/ANSeS”, aceptó la procedencia de un contrato de
trabajo entre cónyuges, afirmando que “por una parte, en la legislación vigente no existe prohibición genérica de contratar
entre cónyuges, ni específica de celebrar contrato de trabajo; por la otra, la independencia de los patrimonios -aún
gananciales- de los cónyuges que estableció en primer término la ley 11357 y perfeccionó la ley 17711 (arts. 1276 y 1277,
CC) permite perfectamente conciliar sus derechos y deberes en la órbita matrimonial con la relación de dependencia propia
del mencionado contrato, que se limita a las actividades de la empresa. Por tanto, si
-como en el caso- se acredita el vínculo laboral invocado, la efectiva realización de tareas y la realización de los
correspondientes aportes al ente previsional correspondiente, no existen motivos para negar la prestación solicitada.
Conclusión que es válida igualmente para el supuesto de vigencia de la sociedad conyugal como para el de separación
judicial de bienes, en razón de que aquélla no es obstáculo a la referida independencia patrimonial”.
En el último fallo, la Corte Suprema de Justicia de la Nación resalta la importancia del cumplimiento de los requisitos de
aportes al régimen previsional como asimismo la acreditación de la efectiva prestación de servicios para considerar la
existencia de un vínculo laboral entre esposos y su eventual derecho a obtener el beneficio jubilatorio, haciendo hincapié
en que con el dictado de aquella sentencia se está introduciendo una modificación sustancial en el criterio existente.
Recordemos que en los fallos precedentes -y que hoy no resultan aplicables- se resolvió en lo sustancial, respecto al
tema previsional, que la actividad lucrativa realizada por los cónyuges en beneficio de la sociedad conyugal debía
reputarse cumplida por cuenta propia excluyéndola del régimen de trabajadores en relación de dependencia.
En conclusión, en caso de que la relación laboral entre esposos, se admitiría la concertación de un contrato de trabajo y
no cabe duda de que le corresponde a dicho trabajador la totalidad de los derechos que surgen de la relación de
dependencia, entre ellos, la cobertura de salud establecida por la ley 23660 y los beneficios previsionales de la ley 24241.
Llama la atención que la CFSS no haya cambiado su criterio y siga fallando de acuerdo a lo interpretado de la normativa
civil.(3)
Cabe hacer una aclaración respecto del término “matrimonio civil” y conceptos relacionados, ya que en virtud de la ley
26618 la institución que contiene nuestro ordenamiento jurídico se entenderá aplicable tanto al matrimonio constituido por
dos personas del mismo sexo como al constituido por dos de distinto sexo, ya que se modifican los términos y los alcances
misma este destinada al sostenimiento del grupo familiar que conforma con aquel.
Ejemplos de esta situación pueden ser: trabajo de hermanos, de hijo mayor de edad y su madrastra o padrastro, abuelos
y nietos, etc.
CONCLUSIÓN
El trabajo de familiares no necesariamente tipifica una relación de dependencia. Hay que analizar cada caso en particular
y tener en consideración las posiciones de la jurisprudencia en el tema.
En principio, la presunción del artículo 23 de la LCT cae cuando se producen las siguientes situaciones:
- La convivencia.
- El grado de parentesco.
- La asistencia recíproca.
- La falta de remuneración determinada.
- El fondo común de los gastos de subsistencia.
En caso que se tipificara la relación laboral, indudablemente se deben cumplir todas las normativas laborales y todos los
regímenes vigentes en materia previsional.
BIBLIOGRAFÍA
- García Vior, Andrea (Coord.): “Derecho y familia” - Ed. Errepar - Colección Temas de Derecho Laboral - 2012 - Capítulo:
“Trabajo de familiares” - (Dr. Esteban Carcavallo).
- Labroca, José: “Trabajo de familia y socio empleado. Tratamiento y encuadre laboral” - ERREPAR - LQS - N° 59 -
abril/2011.
- LCT 20744.
- L. 26390 de prohibición del trabajo infantil y adolescente.
- CC de la República Argentina.
- Fallos de CFSS.
- Fallos de CSJN.
Notas:
(*) Contadora pública nacional, egresada de la Universidad Nacional del Comahue (2007). Docente de la Universidad del Comahue.
Vicepresidente de la Comisión Laboral y de la Seguridad Social del CPCE Neuquén. Profesional independiente, especializada en temática
laboral-impositiva
(1) “Segurotti, Luciana c/ANSES s/prestaciones varias” - CFSS - Sala I - 13/8/2001
(2) En adelante LCT
(3) Véase “Volpi, Marisa Silvia c/Ministerio de Trabajo, Empleo y Seguridad Social s/impugnación de deuda” Sent. definitiva 147944 -
20/9/2012
(4) “Volpi, Marisa Silvia c/MTEySS s/impugnación de deuda” - CFSS- Sala I - 20/9/2012 - Sent. definitiva 147944
(5) “Hadicke, Christian Pablo c/Iglesias, Mónica Gabriela s/despido” - CNTrab. - Sala VII - 22/9/2006
(6) “M.T.M. SRL c/AFIP s/impugnación de deuda” - CFSS - Sala I - 27/2/2009
(7) “Diorio, Daniel c/AFIP-DGI s/impugnación de deuda” - CFSS - Sent. definitiva del 16/10/2007