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PASTORAL INFANTIL SAN LORENZO

Lineamientos pastorales (en construcción).

La NIÑEZ es una prioridad dentro de la formación del ser humano. Es la etapa


de la vida que constituye una ocasión maravillosa para la transmisión de la fe
y los valores. Es urgente y necesario guiar, acompañar, educar y formar a los
niños y niñas en su desarrollo Humano-Cristiano.

Es una población frágil, vulnerable, expuesta a peligros, tales como:


pobreza absoluta, abandono, indigencia, violencia intrafamiliar, abuso sexual
y enfermedades de alto riesgo, trabajo forzado, la guerra, pornografía y
prostitución, real como virtual, la no formación en la vida espiritual y en los
valores humanos.

Es un deber de la Iglesia evangelizar la niñez y del estado velar por su


protección. Una niñez debidamente atendida es garantía para un buen futuro
de la sociedad.

Como respuesta a esta realidad, la Pastoral Infantil San Lorenzo de Iquique, se


propone fortalecer y articular todos los esfuerzos en favor de la niñez.

Objetivo general:

Acompañar desde la Pastoral Infantil San Lorenzo de Iquique, procesos


de formación en una perspectiva de participación, articulación, y comunión de
las diferentes iniciativas infantiles, donde los niños y niñas sean protagonistas
de su propia evangelización.

Metodología:

La pastoral infantil se fundamenta en una metodología de reflexión y


evaluación inspirada en el evangelio, logrando unir la fe y la vida. El método
está organizado en cinco puntos que permiten analizar mejor la realidad de la
comunidad para transformarla desde su entorno: ver, juzgar, actuar, celebrar,
avaluar.

Parámetros de evaluación:

Después de cada actividad se evaluarán las actividades desarrolladas en


conjunto. Evaluación periódica cada tres meses.
Catequesis

El objetivo propio de la catequesis es profundizar y madurar la FE dentro de


un proceso sistemático humano-cristiana.

La catequesis es anuncio de salvación, el anuncio de la buena nueva que


resuena una y más veces en los oídos y en el corazón del hombre, mostrando
el camino de conversión hacia Dios y lo que ello significa: ir pasando de la
esclavitud a la libertad, del odio a la entrega el amor, de la tolerancia a la
fraternidad, de la muerte a la vida.

Estrategias:

Diseñando planes de acción pastoral para los niños a escala familiar, escolar y
comunitario con miras a lograr que ellos fortalezcan su autoestima y ejerzan
liderazgo a partir de los siguientes momentos:

- Al descubrir que, a pesar de sus limitaciones, tienen mucho para dar a los
demás;
- Entender y aceptar que como niño necesita de la ayuda de los otros, pero
que también hay otros niños que necesitan de él;
- Sintiendo que también son actores importantes dentro de la vida familiar,
parroquial y su comunidad.

Actividades:

 Conocer y amar a Jesús a través de la catequesis.


 Participar activamente en la Eucaristía dominical.
 Adelantar jornadas de oración por los niños del mundo.
 Organizar eventos infantiles e involucrar a los niños en actividades de la
parroquia y la comunidad en los que asuman responsabilidades y
compromisos.
 Generar actividades lúdicas (deporte, caminatas ecológicas, celebraciones
de cumpleaños, día del Niño, etc.) con miras a ocupar el tiempo libre sano
y productivamente.
 Propiciar espacios culturales con el propósito de interesar a los niños en el
desarrollo de sus talentos (valores y aptitudes).
 Participación activa en la comunidad en las distintas celebraciones y
actividades.
En un espacio apretado, pero elocuente, el evangelista Lucas nos da un retrato
de Jesús como niño
(Lucas 2.52):

crecía en estatura (lo físico);


crecía en el conocimiento (el intelecto);
crecía en su relación con Dios (lo espiritual); y
crecía en su relación con las personas (lo social y comunitario).

Si tomamos a Jesús como modelo de ser humano, será necesario concluir que
la evangelización bíblica y verdadera es la que desafía a todo hombre y mujer
a una vida plena en el Señor. Se evangeliza a todo el ser humano; no sólo a su
"alma" o entidad espiritual.

Una evangelización completa se propondrá no nada más a formar al niño en la


piedad y devoción, sino también en el logro de un cuerpo sano, una mente
educada y relaciones humanas saludables.

La evangelización integral busca también la formación de los niños en la no-


violencia. En un mundo violento, la iglesia necesita ejercer una pastoral que
contrarreste la fuerza destructiva de la sociedad en que vivimos.

El niño evangelizado deberá crecer en un ambiente donde no sea ni sujeto ni


objeto de violencia. Los juegos y juguetes, la educación y profesión, las
opciones éticas y políticas, todas deben darse en el espíritu de las
bienaventuranzas: "Felices los que crean la paz..."

Asesores de la Pastoral Infantil:


- Mayores de 18 años
- Asumen la asesoría como un servicio a los niños y niñas.
- Han hecho una opción personal para la niñez.
- Cuentan con la aceptación de los padres de familia, niños y niñas.
- No es un ministerio exclusivo del sacerdote o del religioso.

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