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LOCALIZACIÓN DE LA OBRA

Título de la obra: El Sexto


Autor, Biografía y Obras:
Autor: José María Arguedas
Biografía:
José María Arguedas Altamirano, nació el 18 de enero de 1911 en la ciudad de Andahuaylas, provincia de Andahuaylas, departamento de
Apurímac. Era hijo de Víctor Manuel Arguedas Arellano, un abogado cuzqueño que ejercía de Juez endiversos pueblos, y de Victoria Altamirano
Navarro, perteneciente a una acaudalada familia de Andahuaylas. Cuando tenía dos años y medio de edad, falleció su madre, víctima de cólicos
hepáticos; pasó entonces a vivir a la casa de su abuela paterna, Teresa Arellano, en la ciudad de Andahuaylas.
En 1915, su padre, al ser nombrado Juez de primera instancia de la provincia de Lucanas (departamento deAyacucho), se trasladó a dicha sede,
donde poco después se casó con una rica hacendada de San Juan de Lucanas, Grimanesa Arangoitia Iturbi viuda de Pacheco (1917).
El día de su entierro, tal como el escritor había pedido en su diario, el músico andino Máximo Damián tocó el violín ante su féretro, acompañado por
el arpista Luciano Chiara y los danzantes de tijera Gerardo y Zacarías Chiara, y luegopronunció un breve discurso, en palabras que transmitieron el
sentimiento del pueblo indígena, que lamentó profundamente su partida.
OBRAS
Obra Indigenista:
- Agua.
- Amor Mundo.
- Yawar Fiesta.
- Diamantes y Pedernales.

Indigenismo no ortodoxo:
- Los ríos profundos.
- La agonía de Rasu-Ñiti.

Obra no Indigenista:
- El sexto.- Todas las sangres.
- El zorro de arriba y el zorro de abajo.

Estructura de la Obra: Capítulos, escenas.


CAPÍTULOS: 9
• N° DE PÁG: 129

Género literario: Novela


Especie Literaria: Literatura carcelaria
Corriente literaria: Indigenismo

IV. LECTURA ATENTA:


10 palabras nuevas y su significado:

1. Gamonal - Persona que en un grupo ejerce un poder abusivo.


2. Vituperar.- Criticar con mucha dureza o reñir a una persona.
3. Tiznar.- Manchar una cosa con tizne, humo, hollín o ceniza:
4. Granate.- Mineral formado por un compuesto de hierro, aluminio y silicio cuyo color más frecuente es el rojo oscuro
5. Petulancia.- Cualidad de la persona petulante
6. Indultos.- Perdón total o parcial por parte de la autoridad competente de la obligación de cumplir una pena que tiene una persona por
imposición de un juez o un tribunal.
7. Embrollo.- Asunto o situación difícil de resolver, especialmente si va acompañado de alboroto
8. Mole - Corpulencia o bulto grande..
9. Acogotado - Matar con una herida o golpe dado en el cuello.
10. Faramalla - Persona mentirosa o embustera.

1. Pedro es un gamonal de la Hacienda.


2. El pueblo vituperó al Alcalde por mentirles.
3. Carola cocina a leña y el humo le tizna la cara.
4. La corona de la reyna Isabel tiene piedras de granate.
5. Eugenio estudió maestría y ahora es petulante.
6. El Presidente del Perú otorgará indultos en el mes de Diciembre.
7. El Juez no dicta un fallo por el embrollo de la situación.
8. La vaca de Julia carga un mole en su lomo.
9. Ese ratero lo tenía acogotado a su víctima para robarle.
10. Victoria es una persona faramalla y causa dolor a otro.

PALABRA NUEVA SINONIMO ANTONIMO


Gamonal Jefe Siervo
Vituperar Censurar Alabar
Tiznar Ensuciar Blanquear
Granate Carmesí Blanco
Petulancia Insolencia Humildad
Indultos liberación condena
Embrollo Invención Verdad
Mole Bulto pesado liviano
Acogotado Intimidado Soltar
Faramalla mentirosa Veraz

Alejandro cámac Jiménez y Gabriel serán compañeros de celda. Cámac, a medida que pasaban los días, le fue enseñando a los presos uno por
uno: Maraví, el amo del sexto; el Negro Puñalada, el Piurano, Rosita, el Pato, el Pacasmayo, entre otros.
También le dice que en el primer pabellón están los vagos (2º piso) están los delincuentes mas avezados (violadores, asesinos, estafadores) y en el
tercer piso, se encuentran los presos políticos.

Esa realidad –que no es paisaje natural– cosificada en el volumen En diálogo con Cámac, su compañero de celda, sindicalista minero,
oscuro de la cárcel, lo incita al recuerdo de la infancia serrana, bajo intuitivo y serrano como él, Gabriel aprende las más claras lecciones
el sol brillante que fustiga el campo. La lluvia menuda, el cielo sobre la cárcel y la vida. Cámactenía un ojo enfermo que l le
descolorido le recuerdan que la cárcel está en Lima; el ruido de los supuraba sin pausa; pero por el sano irradiaba una luz convincente,
automóviles, la torre de la iglesia cercana, no obstante su de tenaz rebeldía. La opacidad y el fulgor de sus ojos impresionan a
proximidad, le recortan el espacio y lo insertan en el paisaje de la Gabriel y trasuntan la lucidez y el desvarío delas pláticas; entretanto,
prisión, crucero principal de la ciudad moderna. El Sexto, erguido y el monstruo cosificado adquiere otra significación: en él se apretuja
voluminoso, se le antoja un monstruo que tritura a sus huéspedes la estructura humana y económica del Perú contemporáneo, sólo
imperturbablemente. que, paradójicamente, el sector popular ocupa el nivel más alto, cual
si se hubiese invertido la pirámide..

PERSONAJES Y SITUACIONES:
5.1 Gabriel, el narrador-protagonista, es un joven estudiante, serrano, artista, idealista, apolítico. Es natural del pueblo de Larcay, cerca de
Chalhuanca. Alejandro Cámac, hombre maduro, alto, flaco, serrano, campesino de origen, carpintero de minas, sindicalista y comunista. En
Morococha (región minera en la sierra central del Perú) había sufrido encierro y torturas, antes de ser trasladado a Lima. Compañero de celda de
Gabriel, quien llega a admirarle por su sentido de justicia, que estaba por encima de su militancia partidaria. Muere en prisión y sus camaradas lo
homenajean, sumándose incluso los apristas al acto, pues todos le reconocen como un gran luchador social. Pedro, el líder de los comunistas,
pronuncia un discurso en su honor.
Juan, apodado «Mok’ontullo», joven, alto, blanco, arequipeño y aprista. Es la esperanza de su partido, aunque él se define solo como el músculo
del mismo, siendo otros los cerebros. Empero, no es fanático y hace amistad con Gabriel.
Francisco Estremadoyro, apodado «Pacasmayo», por ser natural del puerto de ese nombre, situado en el departamento de La Libertad, donde
tenía un negocio de lanchas. Estaba como acusado de aprista, pero en realidad era apolítico y según su versión su encierro era obra de un diputado
liberteño a raíz de una disputa por el amor de una mujer. Es muy jovial, conversador y lleno de energía, pero de pronto es aquejado de una extraña
enfermedad que le hace enrojecer el rostro. Ello, sumado al deprimente espectáculo de la prostitución de un muchacho apodado Clavel en plena
cárcel, hace que enloquezca y se suicide arrojándose contra los barrotes de la celda del muchacho.
El piurano Policarpo Herrera, natural de Chulucanas. Es un hombre alto y fornido, pequeño propietario, agricultor cañavelero, que según su
versión estaba en prisión por su enemistad personal con el subprefecto de su provincia. Como todo hombre andino siente aversión hacia la
homosexualidad; detesta por eso al Rosita y a los violadores como el Puñalada y su banda de negros.
Maraví, delincuente de alta peligrosidad, gordo, bajo y achinado. Es uno de los jefes de El Sexto, rivalizando con Rosita y Puñalada por el control de
los negocios en el interior del penal.
Puñalada, es un negro ladrón y asesino. Es alto, corpulento y con mirada de caballo. Es jefe de una de las bandas que existen dentro de la prisión.
Es también el encargado de llamar a los presos desde la puerta del penal. Controla el negocio de prostituir a un joven llamado Clavel, así como el
tráfico de alcohol, hojas de coca y droga dentro de la prisión. Se enamora del Rosita pero éste lo rechaza.
Rosita, homosexual y travestido, quien purga prisión por ladrón y asesino. Es otro de los líderes del Sexto, en rivalidad con Maraví y Puñalada. Es
hábil con la navaja y muy respetado por todos. Su pasatiempo favorito es el canto que entona con delicada voz. Convive en su celda con «el
Sargento», un preso común condenado por estupro.
5.2 Gabriel: No se alínea ni con los apristas ni con los comunistas, pues siente aversión por las doctrinas y disciplinas políticas que, según él,
limitan su libertad. Prefiere juzgar a los individuos no por sus diferencias políticas, sino por su personalidad, y es así como se hace amigo por igual
del comunista Cámac y el aprista «Mok’ontullo». Es muy sensible y le atormentan las terribles escenas que ve en la cárcel. En los momentos de
mayor angustia recuerda las bellas y apacibles imágenes de su tierra natal, a manera de paliativo.

5.3
Luis preso político, natural de Cutervo en el departamento de Cajamarca. Es el líder de los apristas. Estos, que entre sí se tratan de «compañeros»,
son los más numerosos (más de 200).
Pedro, preso político, viejo, limeño. Es el líder de los comunistas, que conforman una minoría entre los presos políticos (unos 30 «camaradas»).
Torralba, preso político, obrero fornido, serrano y comunista.
«El Clavel», un muchacho homosexual, de tez clara, que es traído de la calle y encerrado en una celda donde el Puñalada y su gente lo prostituyen,
cobrando a cada usuario diez soles. Enloquece y los guardias lo sacan de la prisión, desconociéndose su final. Se decía que era hijo de unos
inmigrantes serranos instalados en Cantagallo, quienes lo abandonaron aun niño.
«El Pianista» o «el Músico», es un preso vago, quien sufre de maltratos, humillaciones y violaciones de parte de Puñalada y otros presos avezados,
y termina por enloquecer. Se le ve en los pasillos simulando tocar el piano en el suelo y en los barrotes. Termina por enfermar gravemente y Gabriel
trata de paliar su sufrimiento regalándole ropa y dándole comida, pero después aparece muerto en su celda. Se contaba que antes de recalar en la
prisión había sido, en efecto, un estudiante de piano, que de día trabajaba de dependiente en una tienda.
«El Japonés», es un preso vago, de ascendencia oriental, quien es objeto de la burla y el maltrato de parte del Puñalada y otros presos. Una de las
torturas a la que le sometía el Puñalada consistía en impedirle que defecara tranquilamente, haciendo que se revolcara en su suciedad.
Un negro idiota y exhibicionista, que enseña su enorme miembro viril a cambio de unos centavos. Él es quien, al final de la novela, mata al
Puñalada cortándole en el cuello.
Libio Tasaico, un muchacho de 14 años, serrano y sirviente, quien llega al Sexto acusado por su patrona de robar un anillo costoso. Llevado a una
celda, es abusado sexualmente por Puñalada y otros negros. Rechaza el dinero que Puñalada le quiere dar. Se hace amigo de Gabriel, de quien era
paisano. Al día siguiente sale en libertad pues su patrona avisa que ya encontró su anillo.
«El Pato», inspector de la policía y soplón (informante o delator al servicio del gobierno), odiado por los presos políticos, que es muerto de una
cuchillada por el Piurano, al final de la novela.
«Pate’Cabra», otro de los líderes del primer piso de El Sexto, aunque no tiene protagonismo en el relato.
Los vagos, son presos comunes encerrados por vagancia y por andar indocumentados; algunos se ponen al servicio de los delincuentes más
avezados, como mandaderos o guardaespaldas.
Los paqueteros, vagos al servicio de Puñalada, Maraví y el Rosita.
El Comisario de la prisión, que es un mayor de la policía, algo loco y abusivo.
El Cabo, el Sargento, el Teniente y los guardias de la prisión.

5.4 Las menudas disputas doctrinarias que se dan entre los presos políticos, existe ideales comunes que en determinados momentos hermana a
todos ellos: la lucha contra una dictadura totalitaria y el deseo por implantar en el país la justicia social.
5.5 Son reales, basada en la experiencia carcelaria del autor en la prisión limeña del mismo nombre, entre los años de 1937 y 1938, bajo la
dictadura de Oscar R. Benavides.
5.6 Una prisión en la ciudad de Lima, conocida como “El Sexto”

6.1 TEMA O IDEA CENTRAL


La denuncia del horror carcelario, las experiencias del estudiante universitario Gabriel. En este lugar será testigo de las injusticias y demás
aberraciones que se cometen dentro de una prisión, como el dolor, la angustia, el sufrimiento y la muerte.

6.2 ARGUMENTO
La obra El Sexto se trata de un libro testimonio, que denuncia el horror carcelario, las experiencias de un estudiante universitario llamado Gabriel
(Arguedas, recluido en el penal “El Sexto” por las protestas de los estudiantes universitarios, noviembre de 1937-
octubre de 1938) En este lugar conocerá las injustitas y demás aberraciones que se cometen dentro de una prisión.
Al llegar al penal El sexto, es enviado al pabellón donde se encuentran los políticos donde se conoce a los lideres de los apristas (Luis) y los
comunistas (Pedro), (Camác es un comunista con quién tiene que compartir la celda), luego de una conversación con los lideres de ambas
agrupaciones llega a la conclusión que ninguno de los partidos es compatible con sus ideas.
Puñalada es un asesino; jefe de unas de las bandas que existen dentro de la prisión; este controla el negocio de prostituir a un joven llamado clavel,
la venta de drogas y otros objetos dentro de la prisión. Este y los otros jefes de la prisión, “Rosita” y “Maraví”, desean controlar por completo el penal
motivo por el cual existe una cierta tensión entre ellos.
Todo lo que hay de depravado, inmundo y vil en la prisión es costeño. Los violadores del niño serrano, el degenerado que exhibe su gran miembro
viril por cuarenta centavos, el sádico repartidor de comida que se divierte a costa del hambre del japonés y del pianista. Los oficiales cínicos y
corruptos o el sanguinario soplón apodado el pato son criollos, sin duda limeños. En cambio, los espíritus generosos y nobles, o son serranos como
Alejandro Camác o Moc’ontullo, al menos provincianos como el piurano don Policarpo Herrera. Gabriel es un enemigo de la dictadura, pero, al
mismo tiempo, un hombre sin partido, un francotirador. Se halla lejos de los apritas, aunque se siente más cerca de los comunistas, tampoco es uno
de ellos.
Gabriel descubre, sorprendido, que en el Sexto es posible hablar sin tapujos de la situación política, expresar ideas que afuera eran
impronunciables: Pero la libertad de palabra es la única ventaja que el mundo de adentro tiene sobre el mundo de afuera. En todo lo demás el
claustro carcelario es una pesadilla. Hay presos de tres categorías y cada una de ellas ocupa una de las tres plantas en que se escalonan las
celdas: abajo, los vagos, asesinos y delincuentes avezados; en medio, los ladrones y forajidos principiantes y arriba, en el último círculo infernal, los
políticos.
En el Sexto, con una sola excepción, quienes hablan no son indios sino limeños, serranos que se expresan ordinariamente al español y gentes de
otras provincias de las costas. Arguedas trato de reproducir en la novela las variedades regionales y sociales – el castellano de los piuranos, de los
serranos, de los zambos, de los criollos a más o menos educados.
El escritor José Maria Arguedas cuenta el drama humano de una cárcel peruana. El dolor, la angustia, el sufrimiento y la muerte, son elementos
vitales que giran alrededor de la obra.

7.1 problema fundamental que plante el autor.


El mundo de los presos políticos en el Sexto refleja la realidad peruana de la década de 1930: comparativamente, los apristas son mayoría y los
comunistas solo una minoría.

7.2 Que, en su época era importante, presentar la realidad peruana en la cárceles.

7.3 Si y quizá mucho peor. Hoy en día las cárceles no han cambiado para bien. Hasta ahora existe la división de clases en la prisión y podemos ver
en reportajes, como algunos presos tienen preferencias, mucho abuso de drogas, alcohol, y uno que otros inocentes están mezclados con este tipo
de personas

8.1 Esta novela tiene demasiados cabos sueltos, episodios como la disputa entre los apristas y comunistas por el incidente del Pianista, que
carecen de poder de persuasión, o que no armonizan con el contexto como el discurso a la muerte de Cámac, o momentos que debieron ser de
gran dramatismo pero que no lo son por estar mal resueltos, como la muerte de Puñalada a manos del negro que exhibe su miembro viril.

8.2
- Arguedas define a "El Sexto" como una escuela del vicio, pero a la vez como una escuela de generosidad.
- En el lugar de El Sexto el escritor encontró lo peor que la sociedad ha parido pero a la vez la esperanza de quienes luchaban por cambiarla,
sufriendo no solo la privación de la libertad sino torturas y sufrimientos.
- Al margen de las menudas disputas doctrinarias que se dan entre los presos políticos, existe ideales comunes que en determinados momentos
hermana a todos ellos: la lucha contra una dictadura totalitaria y el deseo por implantar en el país la justicia social.

Bibliografía:
Arguedas, José María: El Sexto. Sexta Edición. Lima, Editorial Horizonte, 1980.
Sánchez, Luis Alberto: La literatura peruana. Derrotero para una historia cultural del Perú, tomo V. Cuarta edición y definitiva. Lima, P. L. Villanueva
Editor, 1975.
Vargas Llosa, Mario: La utopía arcaica. José María Arguedas y las ficciones del indigenismo. Fondo de Cultura Económica. México, 1996. ISBN 968-
16-4862-5.

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