Está en la página 1de 3

Hel-Espejo

Manuel, un joven de 27 años y talentoso comediante, es un hombre el cual vive en


Ámsterdam, precisamente en un edificio al lado de la Plaza Dam, un lugar sumamente
atractivo y lleno de turistas.

Un día, Manuel estaba yendo directo al sastre para comprarse nueva ropa, hasta que de la
nada, su esposa Leslie, una dama de 30 años con un color de ojos indescriptible lo llamó.

-¡Oye espera! -grito de forma desaforada- no te olvides de también comprarle ropa al bebe.

-Vale -dijo el joven Manuel de forma indeseada.

Manuel y Leslie eran una pareja con poca química, pero de igual forma permanecían juntos
porque los dos tenian la fe de tener una familia feliz, de ahí nació su bebe llamado Esther.

Un día, Martes 13 de Septiembre, Manuel decide comprarse un espejo, para el cumpleaños de


Leslie, desafortunadamente Manuel estaba muy adeudado con la mafia, por ende apenas tiene
dinero así que no se le ocurrió mejor que buscar un espejo barato en una feria India, luego de
largas horas de búsqueda y caminata, encontró un puesto que parecía que vendía viejos
muebles y aparatos de extraña procedencia, los cuales tenían un gran bajo precio, y entre los
muebles encontró un espejo perfecto para su esposa, un espejo bien alto y blanco, lo malo es
que tenía una esquina rota, aún así le pregunto al vendedor si la pude comprar.

-Disculpe -dijo con seguridad- ¿usted vende este espejo?

-Si -dijo riendose de forma sospechosa- lo vendo a quienes estén dispuestos a hacer sacrificios.

Manuel confundido compró el espejo por más que el vendedor le haya dicho eso.

Manuel contento llevo el espejo dentro de su Volkswagen Beattle, un vehículo el cual no era
un imponente pero lo valoraba mucho ya que era herencia de su padre, condujo durante
varias horas hacia un almacén que tenía al lado de su casa. Antes de salir del auto notó que un
viejo señor lo miraba desde lejos, era el hombre que le había vendido el espejo.

-¿¡Hola!? -dijo gritando- ¿que hace usted ahí a estas horas? ¡No es seguro!

Manuel indignado tras ser ignorado, se metió al almacén con su espejo recién comprado a
esconderlo para luego unos días después mostrárselo a su esposa, pero sin antes hacerle un
mantenimiento.

Mientras limpiaba el espejo, noto que el reflejo del espejo estaba un poco enrojecido, como si
se tratase de un filtro raro -Sera un tipo de espejo Indio -pensó.

Al día siguiente Manuel se despidió de su pareja y de su bebe para ir a trabajar como es de


costumbre, al salir de su departamento revisó si el espejo no le había pasado nada malo, al
entrar al almacén notó que todo estaba bien, solo que el espejo tenia un tono aún más rojizo,
pero a Manuel le dio igual y pensó que era algo de la iluminación.

Tras varios días de trabajo, llega el cumpleaños de su esposa, Manuel le entrega el espejo a
Leslie; ella encantada del regalo abrazo con mucha fuerza a Manuel

¡Es hermoso! -dijo felizmente- ¡ahora podré maquillarme sin problemas!


Luego de unas horas, mientras todo el vecindario dormía, Manuel se dirigió al espejo para
verse de lo tan orgulloso que estaba, de la nada empezó a ver una extraña silueta en el espejo,
decidió acercarse y tocarlo, sintió miedo y otras emociones negativas que no pudo describir,
rápidamente se dirigió a la cama para dormir como si se tratase de un niño pequeño.

Al día siguiente decidió investigar un poco, así que se dirigió a una biblioteca loca, una
extravagante biblioteca llena de libros de varios tipos e idiomas, cómodamente se sienta a leer
un libro de una leyenda de Ámsterdam sobre cómo unos pescadores y un perro escaparon de
una tormenta y unos cazadores Indios. La leyenda decía que estos pescadores eran los
primeros habitantes de Ámsterdam pero no habla nada de esos cazadores, por ende empieza a
investigar más sobre los Indios. Luego de varias horas, encuentra un libro de conjuros y
misterios sobre India, en el libro decía que los Indios que se manifestaban contra sus
superiores usaban los espejos como medio de comunicación con el diablo para maldecir a
dichos superiores, aunque tenían que tener mucho cuidado porque si se les llagaba a romper
el espejo, el portador del espejo iba ser maldecido dependiendo el como estaba el espejo.

Manuel asustado e intrigado se dirige a su departamento para echarle un ojo al espejo

Una noche a las 20:00 pm, hacía mucho frío, un clima espléndido para la manifestación de
espíritus, Manuel se acercó al espejo para dictar unas palabras que había leído en el libro

-shaitaan krpaya prakat karen -había dicho con inseguridad.

Se acerca al espejo y se siente absorbido por el espejo, había entrado al mismisimo infierno, o
por lo menos eso creía. Encontró una gran fila de almas de personas perdidas, se acercó a
preguntarles donde estaba, pero ninguno respondió.

Hacía mucho frío, era un lugar con varias estructuras y un montón de niebla, también había
una especie de nieve lo cual él no entendía porque según él, estaba en el infierno. Recorriendo
el lugar, se encuentra otro espejo, pero un espejo inmenso, se acerca y logra ver una silueta
blanca de una persona, él intrigado le preguntó donde estaba. Inmediatamente Manuel
empieza a ver todo oscuro y de la nada despierta en su departamento.

Asustado, no sabe si investigar más o acudir a la policía, pero tenia miedo de que no le
creyeran así que investigo más, luego de varios días, descubrió que no estuvo en el infierno,
estuvo en Helheim, el reino de la muerte.

Intrigado vuelve al espejo para hacer el mismo proceso, pero esta vez no funcionó, también
notó que su esposa no estaba, lo cual hizo que se ponga desesperado, se pone a buscarla por
todos lados pero no la encuentra.

-¡El espejo la absorbió! -pensó.

Acudió a la policía ya que él no podía hacer nada la policía pensaba que él había asesinado a su
esposa y que estaba loco, entonces deciden arrestaron y meterlo en un juicio.

Fue sentenciado 25 años de prisión, dejaron su bebe a manos de sus vecinos.

Indignado, Manuel intento varias veces escapar de la prisión para intentar rescatar a su esposa
Leslie, tras varios intentos desafortunadamente lo sentenciaron cadena perpetúa y nunca
pudo volver a ver a su amada esposa Leslie y su bebé Esther.

A día de hoy no se sabe si lo que estaba diciendo Manuel era verdad o simplemente estaba
loco y él había matado a su esposa.

También podría gustarte