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“Dificultades atravesadas por los estudiantes de la Universidad Nacional

Agraria La Molina (UNALM), ante la virtualidad y cómo lograron adaptarse a


esta situación durante la pandemia”

Alejandra Cabanillas Huamani (100%)


Facultad de Agronomía. Universidad Nacional Agraria La Molina.
E-mail: 20180909@lamolina.edu.pe
Milagros Lynch Uscata Ceperian(100%)
Facultad de Agronomía. Universidad Nacional Agraria La Molina.
E-mail: 20170069@lamolina.edu.pe
Rigel Arturo Llerena Arroyo(100%)
Facultad de Agronomía. Universidad Nacional Agraria La Molina.
E-mail: 20171046@lamolina.edu.pe
Rosa María Custodio Jaimes(100%)
Facultad de Ciencias. Universidad Nacional Agraria La Molina.
E-mail: 20181002@lamolina.edu.pe
Yesenia Milagros Condor Martinez(100%)
Facultad de Agronomía. Universidad Nacional Agraria La Molina.
E-mail: 20180914@lamolina.edu.pe
RESUMEN

El presente trabajo recoge como muestra el testimonio de cinco estudiantes de la


Universidad Nacional Agraria La Molina, siendo cuatro de la facultad de Agronomía y una
estudiante de la facultad de Ciencias, a través de entrevistas que tuvieron como fin conocer
el impacto que la pandemia produjo en el ámbito personal y académico de ellos. En las
entrevistas se hicieron diversas preguntas generales y personales a fin de recopilar la
información necesaria, con intención de conocer: si contaban con las herramientas
necesarias para hacer frente a la virtualización de las clases que se vivió; sobre la
disponibilidad de un ambiente adecuado para un correcto desempeño académico y la
afectación a la salud física y mental de los estudiantes. Los resultados arrojan opiniones
similares en cuanto a la sobrecarga y el estrés soportado por los estudiantes desde el inicio
de la virtualización debido a la buena o regular conectividad a internet, a no contar con un
dispositivo adecuado y la falta de un ambiente propicio, repercutiendo en el desempeño. Sin
embargo, a pesar de las contras, cabe destacar que la virtualización de los cursos teóricos
sí fue un aspecto positivo de la situación.

palabras clave: pandemia, COVID-19, estudiantes universitarios, virtualidad, dificultades

ABSTRACT

The present work collects as a sample the testimony of five students from the La Molina
National Agrarian University, four from the Faculty of Agronomy and one from the Faculty of
Sciences, through interviews that had the purpose of knowing the impact that the pandemic
produced in their personal and academic environment. In the interviews, various general and
personal questions were asked in order to collect the necessary information, with the
intention of finding out: if they had the necessary tools to deal with the virtualization of
classes that was experienced about the availability of an adequate environment for a correct
academic performance and the affectation to the physical and mental health of the students.
The results show similar opinions regarding the overload and stress endured by students
from the beginning of virtualization due to poor or no internet connectivity, not having an
adequate device and the lack of a suitable environment, which have repercussions on
Performance. However, despite the cons, it should be noted that the virtualization of the
theoretical courses was a positive aspect of the situation.

key words: pandemic, COVID-19, university students, virtuality, difficulties

INTRODUCCIÓN

El 6 de marzo del 2020, Perú reportó el primer caso de COVID-19 en el territorio peruano.
En consecuencia, se restringieron las actividades presenciales no esenciales, como las
culturales, deportivas, culinarias y sobre todo la educación presencial. Así, en cuanto a la
realidad educativa en la que se encontraba el país, de acuerdo con lo señalado en la Ley
Universitaria 30220, el régimen de estudios se puede dar en la modalidad presencial,
semipresencial o a distancia. En particular, para los estudios de pregrado, esta última
modalidad no puede ser mayor al 50% del total de créditos (Superintendencia Nacional de
Educación Universitaria [SUNEDU], 2014).

Frente a estas disposiciones, muchas instituciones de educación superior no se


encontraban preparadas para el cambio en el modelo de enseñanza de un aprendizaje
presencial a uno totalmente virtual y a distancia, lo cual implicó un gran reto para las
autoridades universitarias, docentes y estudiantes. La carencia de herramientas
tecnológicas, así como la inacción de los directivos, supuso una barrera educativa que se
observó de manera acentuada en diferentes universidades del Perú.

Los estudiantes, debido a esto, asumieron el compromiso de una mayor autonomía y


responsabilidad en su proceso de aprendizaje, a pesar de no contar con ambientes
adecuados de estudio, de falta de dinero para disponer de equipos modernos o de
situaciones externas que afectan su concentración.

El presente estudio tiene como objetivo conocer las diferentes situaciones que atravesaron
los estudiantes de la Universidad Nacional Agraria La Molina, en el contexto de la pandemia
del COVID-19.

METODOLOGÍA

Para el logró de estos objetivos, en primera instancia, se formularon una serie de preguntas,
desde las de índole general, hasta las de carácter más personal, que serían usadas en las
entrevistas de los participantes. Así, se entrevistó a cinco estudiantes de la Universidad
Agraria La Molina de la facultad de Agronomía. Los datos de los entrevistados (al inicio de la
pandemia) se presentan en el cuadro 1.
Cuadro 1: Datos de los entrevistados
Entrevistado Edad Sexo Ciclo

E1 (alejandra) 21 Femenino IV

E2 (Yesenia) 19 Femenino IV

E3 (Milagros) 22 Femenino V

E4 (Rigel) 23 Masculino VI

E5 (Rosa Maria) 23 Femenino VII

RESULTADOS

Respecto al servicio de internet y dispositivos

A puertas de una cuarentena debido a las recomendaciones dadas por la Organización


Mundial de la Salud (OMS) a causa de la expansión pandémica del Covid-19 (OMS, 2020),
las instituciones de educación superior debieron hacer frente a estas disposiciones para
poder continuar con el desarrollo de sus programas educativos, superando dificultades
como falta de equipo y capacitación, resistencia a la adopción de nuevas tecnologías por
parte de docentes y alumnos, etc (Sapién et al., 2020). Ante ello, la UNALM procedió a
desarrollar un “plan de virtualización”, con el objetivo de capacitar a docentes y alumnos,
para resguardar la calidad pedagógica, asegurando un adecuado proceso de
enseñanza-aprendizaje (UNALM, 2020). Sin embargo, un aspecto importante para esta
virtualización es la disponibilidad de herramientas tecnológicas que le permitan tanto a
docentes y alumnos, poder desarrollar sus actividades académicas eficientemente (Alfonso,
2003; Juca, 2016). En este respecto, en el presente apartado del informe se plantearon una
serie de preguntas que permitieron conocer la situación vivida por los entrevistados,
respecto a la disponibilidad de dispositivos y servicio de internet durante la cuarentena, así
como la implicancia de las mismas sobre los quehaceres universitarios.

Las respuestas de los cinco entrevistados ante la pregunta: “durante la cuarentena, ¿de qué
dispositivos disponían para llevar clases remotas?”, resultó que todos disponían de, al
menos, un smartphone al inicio de la cuarentena. Los entrevistados E1, E4 y E5 sí contaban
con una computadora desde el inicio, luego, tras algunas semanas, todos disponían de esta
herramienta. Por otro lado, a pesar de que los cinco entrevistados disponían de una
conexión a internet, algunos presentaron problemas, los cuales se detallaron como
respuesta a la pregunta: “¿considera usted que el servicio de internet fue un factor que le
causó dificultades durante las clases virtuales?”. Tanto E1 y E4, no presentaron problemas,
pues manifestaron que tenían una buena conexión para poder tomar las clases virtuales. E1
señaló que su servicio de internet era relativamente bueno, y a pesar de que algunas veces
se le fue el servicio en pequeños instantes, se recuperó la señal con facilidad. El
entrevistado E4 señaló que nunca tuvo problemas de este tipo. Por otro lado, los
entrevistados E2, E3 y E5 respondieron que no contaban con una buena conexión. El
entrevistado E2 respondió:
“Si, ya que en mi cuarto había momentos en que el internet no
llegaba bien, por lo que tenía que trasladarme a la sala. Y a veces
tuve que ir a la casa de mi tía que vivía al frente de mi casa porque
en la mía éramos muchas personas utilizando el internet.”

También, el entrevistado E3 respondió:

“Si, ya que no contamos con servicio de internet en casa y menos


con una computadora, laptop o tablet.”

La UNALM comenzó una campaña de donación de herramientas tecnológicas (tablets y


módulos de WiFi), basados en encuestas por formularios, dirigida a los alumnos que, en su
momento, necesitaban de dichos equipos. Para esta entrevista, los entrevistados E1, E2, E3
y E5, respondieron que no recibieron ningún dispositivo electrónico (tablet y módulo WiFi),
sólo el entrevistado E4 respondió que sí recibió un módulo WiFi (no tablet):

“Si, bueno, me dieron un dispositivo que daba internet mediante Wifi.


Me sirvió para llevar clases mientras estaba fuera de casa. A veces
tenía que salir media hora antes de mi casa para llegar al trabajo, y
este dispositivo me ayudó muchísimo para poder seguir con las clases
mientras estaba en movilidad. Aunque no era lo óptimo, me ayudó
bastante en esas ocasiones”.

En síntesis, los cinco entrevistados disponían, al menos durante la cuarentena, tanto


de dispositivos electrónicos (desde celular hasta computadoras), como de una
conexión a internet moderada que les permitió continuar con sus estudios
universitarios. Cabe señalar que, si bien disponer de estas herramientas son
fundamentales para llevar a cabo las clases remotas, no está relacionado
directamente con el desempeño académico, por lo que ese análisis será hecho a
continuación mediante otras preguntas.

Respecto a la disponibilidad de un ambiente adecuado

La pandemia y el consecuente confinamiento de los ciudadanos, en muchos casos, causó


que el hogar, la escuela y el trabajo se fusionaran en un único espacio. Naturalmente, esta
coyuntura, que es, por sí misma, agobiante, fue intensificada por la falta (o al menos
acondicionamiento) de ambientes adecuados para el desarrollo de estas actividades
(Escudero, 2021). Por ello, en la presente entrevista se convino formular la pregunta:
“¿disponías de un ambiente adecuado para tus quehaceres universitarios?”, para conocer
las realidades de los entrevistados y poder analizar la implicancia en su desempeño
académico. En ese sentido, los entrevistados E1 y E2 refirieron que sí contaban con un
espacio adecuado en su habitación; no obstante, tres de ellos (E3, E4 y E5) alegan que no.
El entrevistado E3 respondió:

“No, ya que la computadora estaba ubicada en la sala y siempre


había gente en la sala”.
Mientras que el entrevistado E4 señaló que:

“Dimensionalmente, el espacio era suficiente, pero no era lo


suficientemente aislado, osea, no me aislaba de los ruidos
externos”.

Por su parte, la entrevistada E5 respondió:

“No tenía un espacio de estudio adecuado y además tenía que


compartir ese espacio con mis hermanos menores.”.

La mayoría de los entrevistados no contaba con un ambiente adecuado para el desarrollo de


sus actividades académicas, por las situaciones antes expuestas. Esta variable, sin duda,
puede afectar el rendimiento académico (Picardo et al., 2020), por lo que es necesario
conocer sus circunstancias para ponderar el grado en que afecta en el rendimiento del
estudiante.

Desempeño académico

Picardo et al. (2020) sugiere que la educación en línea puede verse afectada por
una serie de factores como la alfabetización digital, conectividad, equipamiento,
plataformas, ambientes de aprendizaje, evaluaciones remotas, empatía pedagógica
y los recursos didácticos. Estos factores pueden generar estrés, que es una variable
dependiente (de dichos factores) y que tiene implicancia en el rendimiento
académico de aquel que lo padece (Chávez et al., 2021). Entonces, al estar
confinados en el hogar, donde se unieron las actividades domésticas, laborales y
académicas, es muy probable verse afectados por la interacción de estos
componentes. Por ello, para hacer un análisis de las dificultades atravesadas por el
grupo de entrevistados, es conveniente plantear interrogantes acerca de dichos
factores que afectan el desempeño académico. Una pregunta importante planteada
a los entrevistados fue: “¿Sientes que las dificultades de personas de tu entorno cercano
afectaron el desarrollo de tus clases virtuales?”. Las respuestas reflejaron cierto grado de
paridad, donde los entrevistados E1 y E2 mencionaron que no se vieron afectados en su
desempeño académico por la convivencia más cercana con sus familiares; mientras que los
entrevistados E3, E4 y E5 replicaron que sí se vieron afectados por una convivencia más
cercana. Al respecto, E4 respondió que:

“Considero que sí. No es que tenga poca comunicación con mis


familiares, pero a veces, al tenerlos muy de cerca, veía sus problemas
o dificultades, también sus rabietas y demás, que me afectaba al
desconcentrarme. Obviamente, si hubiera estado en la universidad, de
forma presencial, esto no ocurriría, por lo que no me afectaría”.

Asimismo, la entrevistada E5 comentó:


“Sí, porque vi a muchos de mis amigos pasar por episodios de estrés y
ansiedad, de querer dejar la universidad y me afectaba verlos así”.

Otra pregunta que se hizo a los entrevistados para seguir con este análisis fue “¿cómo
afectó su desempeño académico el primer ciclo de las clases virtuales?”. Ante esta pregunta
los entrevistados E1, E2 y E5 respondieron que al principio afectó de una manera negativa
ya que tuvieron que acostumbrarse a esta nueva modalidad. E2, respondió:

“El adecuarse a una nueva forma de estudio, era necesario buscar


nuevas metodologías de estudio ya que en virtualidad no funcionaba
lo mismo que en un ciclo presencial. El encontrar estas nuevas
formas tomó un tiempo por lo que el primer ciclo más que nada se vio
afectado lo que bajó mi rendimiento.”

Mientras que E3 y E4 respondieron que afectó de una manera positiva. E4 respondió lo


siguiente:
“No afectó, creo que más bien las notas fueron mejores. La
disponibilidad de las clases grabadas, sobre todo, fue una gran
ayuda para el repaso de las clases. Eso permitió poder recuperar
toda la información y así prepararse bien para las evaluaciones.”

Con respecto a la pregunta “¿sentiste que recibir clases virtuales fue más ventajoso que las
clases presenciales?, por favor explique”. Solo E4 respondió que sí fue más ventajoso por
motivos económicos ya que no podía costearse su estancia en Lima. Mientras que los
entrevistados E1, E2, E3 y E5 tuvieron respuestas similares. E1 alegó lo siguiente:

“En la parte teórica si fue más ventajoso, ya que podía recibir clases
desde la comodidad de mi hogar. Pero algunos cursos de mi carrera
necesitaban más la parte práctica, por lo que la enseñanza no se
pudo aprender de una manera óptima.”

El entrevistado E3 respondió lo siguiente:

“No, más que todo en mi carrera hay cursos en los que era muy
necesario la parte de prácticas. Si bien pienso que las clases
virtuales facilitaron mucho el tomar las clases no compensa las
experiencias (mejor enseñanza) que se hubiera tenido en un ciclo
presencial.”

Mientras que E4 indicó:

“En algunos cursos sí, incluso a los de carrera propiamente dicho.


Hay cursos que fácilmente se pueden llevar de forma virtual, sobre
todo la parte teórica. Claro, la parte práctica si considero que debe
ser presencial. Las PPTs en la presencialidad no era muy vistosa, en
cambio, por vía remota, se veía bien, y se podía comprender
fácilmente, al menos a mi si me pareció así. Claro, pero quiero dejar
en claro que, sí considero que la práctica debe ser presencial, sobre
todo en cursos de carrera.”

Finalmente E5 respondió:

“En cierto sentido sí, porque el tiempo que antes ocupaba en el


transporte público en otras actividades pero al mismo tiempo era
agotador y fatigante estar sentada todo el día frente a la
computadora”.

Llegandose a la conclusión que en la parte práctica hubiera sido más aprovechable que las
clases hubieran sido presenciales. Pero en la parte teórica si fue ventajoso llevar clases por
la modalidad virtual.

Otra pregunta que se realizó fue “¿pensó en suspender sus estudios universitarios durante
la cuarentena?”, las respuestas de E1, E2 y E3, fueron que no, pero E1 y E2 explican que
fue porque pudieron llevar más cursos. E2 responde:

“Realmente no, aunque ahora que lo veo de retrospectiva si hubiera


preferido dejar esos ciclos para un mejor aprendizaje y
aprovechamiento de las clases.”

E4 y E5 manifiestan que sí hubieran tomado la decisión de suspender las clases virtuales.


E4, responde:

“Si lo pensé al inicio ya que no contaba con internet ni un dispositivo


electrónico donde tomar mis clases.”

Mientras E5 lo hubiese hecho por temas económicos:

“Sí, lo pensé muchas veces para dedicarme a trabajar y ahorrar


dinero”

De las respuestas podemos inferir que las respuestas de los entrevistados E1, E2 y E3 en
un primer instante fueron negativas. No obstante el entrevistado E2 manifestó que si lo
pensaba bien si dejaría el ciclo virtual. Por su parte, E4 y E5 manifestaron con seguridad
que hubieran suspendido sus estudios virtuales.

Ante la pregunta “¿Alguna persona cercana a usted se contagió de Covid?¿Esto le causó


dificultades para estudiar?”, todos los entrevistados mencionaron que no por lo que no se
consideraria como un motivo para dejar el ciclo académico virtual.
E3 respondió:

“Aunque suene difícil de creer, particularmente, en mi casa, no hubo


casos de Covid. Si nos resfriamos, etc, pero nunca tuvimos mayor
complicación, por lo que no entró en consideración hacerse una
prueba.”
Otra pregunta que se realizó fue “¿Al tener acceso a internet sentía que tenía más
disponibilidad de información que al estar en la biblioteca de la universidad?” E1 y E5
respondieron que no ya que se hacía más complicado conseguir información 100%
corroborada, por otro lado E2, E3 y E4 tuvieron una respuesta positiva, E2 menciona:
“con la pandemia muchas instituciones u organizaciones virtualizaron
sus capacitaciones lo cual resultó muy favorable ya que podía tener
acceso a ellas a diferencia de un ciclo presencial en donde hubiera
resultado más complicado por tema de tiempo y lugar”.

Mientras que E4 menciona:

“sobre todo porque se puede cambiar rápidamente de documento,


también porque hay métodos para filtrar información”. Por último para
E3, no resultaba un problema por la accesibilidad que podía
encontrar en internet.

Otra pregunta que se realizó fue: “¿Cuánto tiempo le dedicaba al estudio? ¿Cree que ese
tiempo era suficiente?” Para E1 y E4 el tiempo les resultaba suficiente, por otro lado E4
menciona:

“Llevaba bastante tiempo, como dije, casi todo el día estaba en la


computadora. Si considero que fue el tiempo suficiente”.

Para E2 y al igual que el resto de participantes le resulta mucho el tiempo que le dedicaban
al estudio.

Otra pregunta que se realizó fue: “¿Sientes que todos los cursos que se dictaron durante la
virtualidad a nivel académico lograron desarrollarse adecuadamente?”
E1, comenta:

“No especialmente los cursos de práctica y sobre todo con la carrera


que estudio que es agronomía”
lo cual coincide con las respuestas de E2, E3 y E5, la cual comenta:

“No, muchos cursos demoraron en virtualizarse “correctamente”, y


otros que eran imposible adaptar.”

Mientras que E4 tuvo una respuesta positiva, insiste en que la parte de práctica no resultó
tan provechosa
“Se perdían conocimientos que en una clase de práctica presencial
no hubiéramos conseguido.” y el mismo continúa: “ Laboratorios
como edafología, entomología y otros cursos de carrera, no fueron
tan provechosos en forma virtual.”

Impacto del ciclo virtual en la salud mental y física


Respecto a la pregunta: “¿Ha experimentado pérdida de la motivación para estudiar durante
el tiempo que ha recibido en clases virtuales?” E1 comenta:

“el hecho de estar todo el día en casa resultaba muy estresante. Además
que en el ciclo virtual muchos profesores decidieron dejar más trabajos
con lo cual aumentaba la presión.”

Lo cual coincide con las respuestas de E2, E3 y E5, mientras que E4 tuvo una respuestas
positiva y no se sintió desmotivado.
“si me adapté a la modalidad virtual, nunca me sentí desmotivado”.

Otra pregunta fue: “La falta de interacción de manera presencial con amigos y/o compañeros
afectó en algún punto la motivación de llevar sus clases remotas?” E4 comenta:
“Yo siempre he estudiado mejor solo. También he repasado y ayudado a
compañeros, así como también he recibido ayuda, pero me entiendo
mejor solo. Se genera menos distracción.”
Lo cual coincide con las respuesta de E1 y E3 ya que esa falta de interacción con amigo no
fue motivo, pero por otro lado E2 si lo sintió pero más por el lado personal.
“Podría decir que sí más que nada, en lo personal, los momentos de
distracción fue algo a lo que no le di mucha importancia durante mi
primer ciclo virtual.”

Refiriéndose a la compañía académica, E5, responde:


“Sí, un poco. Aunque seguí en contacto con varios de mis amigos
cercanos, pero no era lo mismo, ya que a veces nos ayudábamos a
estudiar y hacer las tareas en la universidad”.

Otra pregunta fue: “¿Sientes que las dificultades de personas de tu entorno cercano
afectaron el desarrollo de tus clases virtuales?” E1 y E2 comentan que no pero E4 comenta:
“Considero que sí. No es que tenga poca comunicación con mis
familiares, pero a veces, al tenerlos muy de cerca, veía sus problemas o
dificultades, también sus rabietas y demás, que me afectaba al
desconcentrarme. Obviamente, si hubiera estado en la universidad, de
forma presencial, esto no ocurriría, por lo que no me afectaría.”
lo cual coincide con la respuesta de E3 y E5 que también se vieron afectados de la misma
manera.
Otra pregunta fue:”¿Ha sufrido algún tipo de dolor en rodillas o espalda por pasar mucho
tiempo sentado frente a la computadora?”
Todos los entrevistados afirmaron haber sufrido dolor de espalda como en el caso de E4:
“Naturalmente, pasaba horas de horas (sino todo el día) en clases,
repasando las mismas, también mediante un computador. Además,
también invertía tiempo para hacer tareas, informes, etc. Todo mediante
computadora, por lo que siempre estaba sentado y el dolor de espalda si
fue estresante.”

Cabe señalar que E3 fue la única que sí tuvo dolor de rodillas por la poca movilidad.

CONCLUSIONES
Respecto a los dispositivos y conexión a internet no hay duda que la disponibilidad de
equipos electrónicos (como smartphone o un computador), así como la capacidad de poder
contar con conexión a internet, es indispensable para la educación remota. En ese sentido,
si bien en algunos casos (E1, E4 Y E5) se contaba con computadoras, en otros no (E2 y
E3). No obstante, algo que es importante resaltar es que ninguno de los entrevistados dejó
de estudiar, debido a que pudieron solucionarlo llevando las clases desde sus smartphones,
aunque no es lo óptimo, sirvió, parcialmente, para poder continuar con sus estudios.
Además, como se refirió en las respuestas de los entrevistados (E2 y E3), existió una
capacidad adquisitiva que les permitió conseguir una computadora o laptop durante el
primer semestre virtual. Así, respecto a la disponibilidad de equipos hubo una respuesta
unánime referida a que se tuvo herramientas para poder llevar las clases virtuales. Por otro
lado, respecto a posibilidad de poner conectarse a internet, se refirió que cuatro de los cinco
entrevistados poseían internet permanente desde el inicio de la cuarentena (el entrevistado
que no lo tuvo lo consiguió durante el primer semestre virtual). Sin embargo, tres de los
cinco entrevistados (E2, E3 y E5) refirieron que su conexión a internet tenía fallas o “muchas
fallas”, pero este impase pudo ser solucionado, permitiendo a los mismos poder continuar
con sus estudios. Así, en síntesis, en todos los entrevistados, se dispuso de dispositivos y
conexión a internet que les permitieron continuar con sus estudios.

Para el análisis de preguntas respecto al bloque la disponibilidad de un ambiente adecuado


del total de entrevistados dos (E1 y E2) de ellos si contaban con un espacio adecuado para
poder llevar sus clases virtuales de una manera correcta, mientras que tres (E3, E4 y E5) de
ellos manifiestan que no. Por lo que se concluye que más del 50% de entrevistados no
contaban con un espacio idóneo para poder desarrollar las clases virtuales con comodidad,
debido a motivos como interrupciones por otras personas, sonidos externos y que tenían
que compartir el lugar con otras personas.

Entre los desafíos que enfrentaron los entrevistados fueron problemas de adaptabilidad a la
modalidad virtual e influencia por parte del entorno cercano que afectó el estado emocional
de los estudiantes. Así mismo los estudiantes le dedicaron mucho más tiempo al estudio, lo
cual los dejaba más agotados y cansados por lo que en definitiva ello tuvo repercusiones
directas en su salud mental. En cuanto al acceso a la información a un 60% de estudiantes
les resultó mucho más ventajoso recibirlo por internet que en una biblioteca, como lo hubiera
sido en un ciclo presencial.

Por otro lado a los entrevistados les pareció que llevar las clases de práctica hubieran sido
más aprovechables en presencial, ya que en su mayoría los participantes son estudiantes
de Agronomía por lo que la parte de prácticas son un componente muy importante para su
formación. Sin embargo, muchos coincidieron en lo ventajoso que resulta llevar la parte
teórica por la modalidad virtual.

En conclusión a un 40% de los entrevistados les resultó positivo la modalidad virtual por las
facilidades que brindaba a diferencia de la presencialidad.

Respecto al impacto en la salud mental y física del total de los entrevistados el 100%
manifestó haber sufrido algún tipo de dolencia física y por el lado emocional el 60% de los
entrevistados no se vio afectado por la falta de contacto con personas de su entorno regular
pero el otro 40% si se vio afectada por el no contacto con las personas y lo vieron reflejada
en su desempeño académico y así se le añadieron los problemas que tenían las personas
de su entorno familiar lo cual agravó la situación de E1, E2 y E5 y también afectó a E3 y E4.
Por otro lado, el hecho de no haber podido mantener una relación presencial para los
entrevistados fue algo que le ocasionó daño de una u otra manera como se ve reflejado en
la entrevista.

ANEXOS

1. Preguntas para la entrevista:


https://docs.google.com/document/d/1gcuopUHk5gl64MBKFqYaslLAhyCPPnlbLwdR
3A9Ocws/edit
2. Grabación de las entrevistas:
https://drive.google.com/drive/folders/1rJ3VzkqtFbBpBOlsty6rqFWbztpGxV5G?usp=s
haring
3. Transcripción de las entrevistas:
https://docs.google.com/document/d/1Ovd6J0bUVjsG7VYTtu6aXmUiIprKtTgLfJKwE
o2Pg0E/edit?usp=sharing

REFERENCIAS

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doi:https://doi.org/10.33996/revistahorizontes.v5i20.275

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Pïcardo, O., Ábrego, A., & Cuchillac, V. (2020). Educación y Covid-19: Estudios de factores
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http://ri.ufg.edu.sv/jspui/bitstream/11592
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Sapién, A., Piñón, L., Gutiérrez, M., & Bordas, J. (2020). La Educación superior durante la
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aprendizaje. Caso de estudio: alumnos de la Facultad de Contaduría y
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doi:https://www.doi.org/10.4185/RLCS-2020-1479

UNALM. (2021, enero 30). Plan de Virtualización UNALM. Centro de Innovación


Educativa.http://www.lamolina.edu.pe/uie/index.php/2021/01/30/plan-de-virtualizac
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