nº: 00000

Otoño 2021
Saturday October 23rd, 2021 =
Sweetmorn The Aftermath 4th, YOLD 3187

Textos: www.samuelhereza.com
Ilustración de Portada: Juan Venganza
Maquetación: www.oddcity.net
Ilustración Xtra: www.elgato500euros.com

Colección “Lxs Ultras del Amor”

Nº00000

Magic Spells & Sigils: www.udermohr.com

Zaragoza (S-Pain) 2020@Mágica Eléctrica Editorial

This Books is licensed under a Creative Commons

Attribution-NonCommercial-NoDerivatives 4.0 International
(CC BY-NC-ND 4.0)
 DON’T GET ME
WRONG

Zaragoza es una bonita ciudad donde vienen a mezclarse el bien y el mal.

Al Noroeste de la valla publicitaria de Osborne y a unos 400 km del McDo-
nald del Escorial, esta ciudad es conocida por su gusto jotero a la romana y
un idealismo mas que ingenuo de las clases medias-altas hacia el progreso.
Gusta pensar en Zaragoza como una Long Island de interior, como de un
valle encantado donde los nuevos viejos ricos y las buenas gentes del sur de
la península o del sur de todas las venas interplanetarias vienen a plantar
sus prosperas viñas. La maña es la denominada virtud especial que florece
en las gentes de la región y de esa forma tan natural da fruto la reconocida
afabilidad que encontramos en estos habitantes ultra retrógrados, afincados
en un sin cielo y en un muy saberse de su tierra. Tan humanos y tan terrestres,
levantar la mano para el tortazo o el abrazo es lo suyo, en pos de este pro-
gresivo pesimismo de izquierdas que caracteriza la entrada de los cenizos
a la edad nos encontramos. Generaciones que han cimentado unos carac-
terísticos prejuicios coolturalas emprenden negocios y escancian sus aho-
rros. Las magníficas supersticiones conservadas de lo progre se acumulan
y cercan con su necedad la situación psicogeográfica que comentaba. En
esta Long Cariñena to latina entre peñascos de machicrudos se dibuja una
ciudad donde las depresiones físicas más objetivas del valle del Ebro son el
habitual clima moral. Nuestro clima es tan freshhhh, íntimo y tan sufrido que
le recorren continuos cambios que alteran al carácter más acostumbrado a
los altos contrastes.

Estos furores que bien vengo a matizar, como en toda ciudad se prefijan y
caracterizan por vivir o alternar en el centro de la urbe. Dentro de estas mura-
llas Zaragozanas o no muy lejos de ellas, se concentran los más persistentes
retratos de la desfasada juventud que desbarra en decadencia. Ma´swa-
ggg abierto al tejido de intensidades lo canta primo. La alegría es táctil
cuando uno tiene veinte años, aun moviéndose la angustia y la paranoia en
intervalos deformados, y sin recordar bien el ke lo ke con lo temporal, las pe-
queñas comunidades de chavalades hacen juego interno con esta depresión
y neurosis que parece autónoma. Sin tener colindante la zona universitaria, y
alejando de ahí una felicidad engañosa que mantenga el estado de ánimo
estable se deshace la flema en tu boca, xolah se maca la flema, loco tas pa-
saoo esos cuantos hoods de más y has terminado viviendo en el puto centro
la city; y como todo centro imanta, el postureo en la droga y las cervecis te
mantienen en la ola peligrosamente revitalizado, pasas del punkicidio al We
will RockU con el paso de los años, de disfrutar el calimocho más chopero
al ambiente costra provinciano en rutina e identidad. Una panda de moder-
nflowers se sienten activos prolongando un poco más la escena caducada.
Del hardcore punk al Gucci pal Akira van estos ritmos rápidos sobre una
prosa medio chillada y riffs de postureos que en la superficie moral de su
despertar a lo social ni se autogestionan. Hay un feminismo que irradia de
boca en boca y se arrastra como una sanguijuela porque este coño quiere
droga y quieresetmesete follar-te el alma. Nunca me han gustado los boca-
zas que hablan de más y luego no tienen voluntad ni para endiñarla al final
del día. Al igual que la boca, las imágenes han sufrido una alteración que
reside en función de que cojones te interesa y tenerla con tiempo para oír la
broma del relato que sigue.

Y eso es, este es nuestro espacio para el terror, la Madeleine; el espacio

cifrado por el que van a desfilar Lxs Ultras del Amor para darte un par de
patadas en la boca. Y es que tanto peor que la guarrada fascista es la
guarrada culturalilla. Bienvenidos al subterráneo top cheese explosivo de
una Zaragoza Cherry Bomb que explota en la cara de todos los pretenders.
-¿ Si hubiera una purga, a qué pedazo de progre del barrio os cargarías!?-,
suelta Maka a sus colegas mientras apura el culo de otra lata de cerveza.
Se centra el plano en sus caderas que muestran parte de la pelvis y los
riñones rosados al aire, desciende del perfil de su trasero hacia las ingles
un pantalón Adidas azul ajustado con cremalleras de rallas blancas; se
escacha la lata contra el suelo por unas Nike Shox de muelles negros y rosas.

Domingo, treinta y uno de Octubre, el cielo clama en límpido azul a esta hora
de la tarde, el sol arrea sobre los bancos de la plaza de la Madelein frente
a la iglesia, el ambiente que rodea la escena es el de un par de terrazas
casi vacías donde pequeños grupos de personas toman el café o continúan
con el prolongado vermú.

De esta wasa nos encontramos con los Lxs Ultras del Amor; se derriten y
caen en un glitch que ayuda un subtítulo enorme que anuncia las biolencias
contenidas en sus cuerpos de fantasmagoría. Enfocada para presentarse
parpadea la palabra HOT STUFF, estos jóvenes salvajes arden en un
contorno naranja que los aureola, proliferan genuflexiones espectrales de
sus cabezas, como si se tratara de la visión a través de una lente para la
realidad aumentada podemos ver los procesos de sus sinapsis cerebrales
malformándose. Manteniendo el plano en esta deformación suspendida
brotan veintenas de animadas personalidades zigzagueando de sus cuerpos
que separa un eje invisible de simetría. Se terminan invirtiendo los colores del
plano despedidas las cadenas de biocode por la reiteración de geometrías.
Intentaría un apunte de como son pero jalaxxx!! Logotipos en nylon, abalorios
de joyería feka y tatoos por todas liendres del cuerpo en tricomías azules
hacia el negro obturada la imagen general. No vocalizan del todo todavía,
pero emiten chillidos mientras gruñen tragando birra y fumando porros.
Cachos de pirulis en efervescencia resaltan de sus estómagos como si de
una cámara de rayos x se tratara mientras se aleja aun más la perspectiva
borrosa que los enfoca. Se recupera el tecnicolor y los vemos sentados al
sol del medio día en los bancos de la plaza de la iglesia. Nylón, mejillas
de veinteañeros en contornos de hombros, caderas, traseros acentuando el
atractivo de sus siluetas.

Jimmy, Tolo, Maggie y Maka se miran.

-Yo iría a por el tacaño ese del Kuki.-,dice Jimmy.

-Ese siempre está racaneando con la droga y tiene un par de tortas bien
dadas. De todos modos yo le jodería el rato a cualquiera de esos que tienen
perritos floreros, me da igual si es un galgo o un chihuahua; son una panda
pijos que viven en el centro y por las mañanas de resaca hacen yoga.-
Responde Tolo, seguida su respuesta de una risa entrecortada para continuar.
-También la jodería con el jambo que lleva la tienda de alimentación del
final del Coso, siempre que voy a por un par de papelas el muy cabrón me
las da pegadas y casi hay que darle las gracias por existir.-

Maggie sentada encima del respaldo del banco mira su lata de cerveza y
con una voz profunda y pausada confiesa se cargaría a su madre y al novio
de su madre. A todo esto le responden que estaban centrándose en la peña
del barrio, que su madre vive en Camino de las Torres.

Maggie afirmándose en su respuesta dice: -ojalá me tocara a mi ser la

víctima de la purga porque es la manera más directa de hacerle daño a
esa puta.

- Maka expulsa el humo de su cigarro al cielo corvando la nuca, su melena

negra resplandece. Del azul al enfoque de medio rostro sonrojado de Maggie
pasa el plano al de una mano rápida que da un collejón y un beso simple y
fresco a su amiga en los labios. Esto le ha puesto cachonda y decide ir a por
una botella de vodka sin responder a lo de la purga. Aureolada en verde, a
su vuelta del chino hacia los bancos Maka puede reconocer en sus amigos
la consolidación de un negro deseo que creciente toma protagonismo en
sus miradas. Han tomado la decisión de iniciar ellos su propia purga en la
noche de Halloween que se avecina.
A la entrada de la calle Las Arcadas revolotean los niños gitanos al grito de
nanainona, en la porta trasera del albergue siempre algún moscardón pide
el cigarrillo, la persiana automática del local sube mientras avanzan.
Maka responde, -descartando primero a la peña de hostelería y los mayores
de 50 años, mi víctima perfecta sería cualquier machicrudo con más de una
banderita de España en el cuerpo, me da igual si es en la puta mascarilla
o la pulserita. Se esta mierda tema suena bien casposo, pero hay que tener
muy poca personalidad y menos talento para reducirse a esa basura.

-Típico de los niños de papá, puta basurahhh-, remata Jimmy,

-Así es, mi querido Jimmy Crussshh-, gorgotea y alarga en su dicción Maka,
-puta pena no estemos todavía lo suficiente deshumanizados.-
Tolo refuerza con un, -menudos caaacho cerdosh.-
De hace ya meses que son unxs Monsters Modern du la Madalein, la
cosa nuevamente tuvo que ver con elucubraciones prematuras que no
conjugan con el desaliento; esto cambió su vida por completo y como
se podrá ver termina formando parte de la que quizás para muchos sea
conocida como “Lxs Ultra del Amor”, la “tropa de la wasa”. El local de la
calle Las Arcadas siempre está de after, la Semana Santa finaliza con una
resurrección magistral en un llamado Domingo de Gramos que inaugura el
inicio de una nueva Cuaresma, el Rosario de Cristal hace escarcha entre
la rutina y las cenefas. Se puede sentir el vidrio soplándosela a estxs
cuatro gansoperrasos. El gafapastismo les pille confesados, van a petar el
instagram al que no dejan de subir unas cuarenta historys al día… pa variar
tutto santo, tutto molto cristiano. Quizá cierta idea de libertad politizada
y bien abierta de piernas, como de miras, como bocazas, ha creado una
especie de comuna independentista. Son estas cuatro las cabezas de turco
que han conseguido darle el cariz adecuado; se cuentan y se contarán
historias de este local que aun hace poco funcionaba como centro de día
para ancianos. La apariencia de albergue destartalado para Erasmus en
su interior es obvia, esto poco nos importa, salvando los quebraderos que
deben llevar de vez en cuando nuestros protagonistas para saldar los
pagos y mantener en activo la machina, la vida sigue, confianza o no, la
convivencia se rige por un decálogo con una sola manga y molto ancha: la
vida sigue. Las facilidades que para cierto tipo de trapicheo ha dado este
espacio y este barrio, y la exponencial mitificación de sus espeluznantes
características en la que no hay verbalización to jarta pa que te hagas a
la puta idea les ampara.
Como si saliera de su voz a quorum escuchas:

-Controlamxs esta parte de la city, resguardadxs en sus pretenciosas

Arcadas, desde el final del Parque Bruil subiendo Asalto con San Vicente
de Paul cortando el Coso Alto; la PlaÇa España se la dejamos a los
Maoistas! Somos todo ojos, formada la destrucción en la mirada, somos
calle a calle todo ojos! ¡Transitad las anchas avenidas para estamparos
contra la Realidad de nuestro Amor! Nuestro local es tan sagrado como un
centro secreto de operaciones, os vigilamos so mamones!!-

Por lo demás, comparando rápidamente la singularidad de otras

residencias y lugares en común, el planazo cooltural que ofrece la city es
bastante más que lamentababoles. Uno no está donde una no se pone,
y aquí desde Lxs Arcadxs, Lxs ultrXs del Amor andan haciendo trinchera y
frontera to puestos.
Nadie tiene bien por seguro de donde han salido. De normal casi ni hablan
entre ellos, se tutean y resguardan bajo una suerte de pacto permisivo con
el convencionalismo, pero lo que aflora es un silencio siempre prominente
para no estrangular las secretas perversiones latentes de su radical
individualismo. La limitación de la descripción de sus fechorías se resuelve
en caracterizar sus poses derivadas de cada uno de los nuevos actos que
contradictoriamente ejecutan. De continuo una red cercenada los atrapa
y mantiene a una, es lo único que les importa y ayuda para entender el
aislamiento que como sistema mantiene su comportamiento. Ese silencio
interior se propaga como una llama ágil que se amplía mientras beben,
miran sus móviles, mientras se hinchan pensamientos inmóviles seguidos
de tics obsesivos solo producto de neurosis.

Aun siendo hermosos y jóvenes apenas tienen sexo entre ellos o sus
conocidos, salvando mañaneos pueriles y desquiciantes rebrotes de
furor en la química de su organismo desprecian el erotismo positivo con
cualquiera. Respiran en ese espacio cada vez más en incremento que les
define y afronta a la nada, aun en reposo sus cuerpos se modulan para
el recrearse en estos momentos de soledad aprovechando la inercia del
abandono que practican.

De sus pocas amistades no esperan tampoco nada, estas se dan de jueves

a domingo con la peña que encuentran para el mamoneo nocturno, con
la tropa que lleva las tiendas de tatuaje y un par de tenderos del barrio.
Sumadas estas últimas a la afinidad con un par de camellos y otro poco
de los camareros que rodean los bares de la zona no se tropiezan con
nada ni nadie que los cuestione o incrimine en el desorden insalvable de
sus fechorías.

¡Nos hacemos de sobra a la idea de que su rutina se basa en seguir

jodiéndola por puro malianteo!
Todo empezó queriendo hacer un socavón sobre cualquier víctima bien
elegida del barrio. Para variar, los planes se truncan, toman múltiples va-
riaciones y resulta que nos encontramos a nuestra panda de la wasa, Lxs
Ultraxs del Amor dirección a joderla a casa de la madre de Maggie en
Camino de las Torres.

Saben que su madre no va a estar y tienen acceso a que les abran la

puerta por el novio de esta.

Es temprano, cerca de las 21:30 p.m., la calle de Asalto hasta la plaza

San Miguel está amurallada de gente disfrazada en los garitos y terrazas
por Halloween. La temperatura es propicia conforme va anocheciendo,
los cuerpos policromados en inercia sonríen bajo sus máscaras. Jimmy y
Tolo con el altavoz a tope del móvil tararean canciones del Perreo de la
Muerte mientras Maggie y Maka dan palmadas y saltitos. Ruido, ruido
entremezclado al tráfico y el murmullo de las gentes avivando la armonía
interior que les anima.

Ejemplo secuencia: 1) Se llama al timbre

2) Se abre la puerta
3) Se hace el hijodeputa

Maggie llama al timbre y sin mayor problema el tontolava del novio de su

madre le abre la puerta.

Antes de subir se hacen un rayujo de palmo en la escalera. Una vecina

baja pero ni se cortan. Hoy es Halloween y lo menos que puede hacer
alguien es actuar como soplapollas.

Suben eufóricos en el ascensor hasta el cuarto piso pulsando la alarma

casi durante todo el tramo. Ya fuera, en el rellano del cuarto izquierda
esperan ansiosos del marco de la vivienda algo u alguien asome. Automá-
ticamente siempre algo, random, se integra en un haz la iluminada imagen
que se abre tras la puerta.
La irritabilidad linda con la impaciencia y se introduce otra imagen de
estos ocho ojos voraces en el plano. La silueta del residente acompañada
de imágenes irracionales concretas por la combustión de la droga hacen
que Jimmy le pregunte si aquí vive Felipe González al poco de asomar el
gaznate. Se complementa la desmoralización de la presentación cuando
Maka le suelta un tortazo incriminándole por parecerse a Rajoy. Maggie
explota en carcajadas y exhala entre temblores -se lleva el trozo del pastel
el presi… jijiji; viceculo- dice, y salta sobre las zapatillas de estar por casa
del recién elegido culo del gobierno. El cincuentón permanece noquea-
do, aturdido y rodeado en la entrada de su casa por nuestro séquito de
amiguis. Podemos ver como las actividades domésticas más normales se
estaban produciendo en el interior de la vivienda que como sospechaban
está vacía. De una incomprensión cada vez más lamentable tornada en
súplicas de piedad por parte de nuestra víctima, deriva la exasperación
de nuestros protagonistas. Maggie cuenta: 4, 5, 6, 7, 8, 9... Maka saca
un cuchillo de detrás de su espalda pero se detiene justo antes de desen-
fundar el arma. Por una especie de inacción acompasada por los cuatro
engendros abandonan la progresión en la euforia del homicidio. Permane-
cen los tres medio inmóviles en el rellano esperando Maggie vuelva para
salir a la calle. Maggie ha dejado una nota en el frigorífico de la cocina:
“Si me buscáis o llamáis a la policía me pego un tiro”. Mientras Maggie
fulminaba con su nota, Jimmy y Maka aprovechan para meársele encima.
Tolo pisa el cráneo para inmovilizarlo, le incita para que abra bien la
boca y repita tres veces el nombre de Pablo Iglesias. Saca unos donetes
nevados y al primer canto de “Pablo”, se los mete de tres en tres en la
boca. -like Pablo, Pablo, Pablo, Pablo- le gruñe a la cara. Lo remata de un
patadón con sus Martens. Bailan cordones amarillos entre reflejos cherry
empapados por la meada. Mientras suben las braguetas, fractales de
labios rojos debajo de sus máscaras, vigorosas fracturas en toda concien-
cia asumen la distancia de estas sonrisas endiabladas. Pegando brincos
como auténticos dibujos animados bajan los cuatros pisos to deformes.
Siguen la juerga. De casa en casa marujeando, bebiendo y drogándose
otro poco más, abierto el juego a nuevas plataformas y niveles esperando
amanezca otro día o se acaben las ganas de joderla o aparezca ese algo
que de verdad interesa. No hay nada interesante que contar joder, la es-
critura en este puto caso se resuelve al encuentro de un cuerpo a cuerpo o
encontronazo entre incendios. Buscan la chispa, buscan al cuerpo electro-
cutado sin espacio desnudo en la noche; un cuerpo solapado al incendio
infrarrojo devendrá y ellos lo saben.

Son las 3:00 a.m.

A estas horas solo puede materializarse la carcajada, la pedrada, la nau-
sea; una aparente vuelta a la tranquilidad a tientas, es la inercia que
arrastras cuando te sorprende una arcada frente a la nueva normalidad.

- Vamos a por el primer caramierda- dice Tolo.

- Te acuerdas ayer cuando estabas encanao con lo del vídeo del presiden-
te americano que se suicidaba!??- Le suelta Jimmy cambiando de tema al
pokemon de Tolo que estaba esperando una respuesta que confirmara sus
amiguis se animaban para salir de caza.

Tolo les observa casi sin moverse girando la cabeza hacia los cuatro orde-
nadamente, con la mirada en negras llamas y la sonrisa preta en la man-
díbula dislocada por la gustera. Levanta el vaso de vodka con psilocibina.

- Bonne jour hermanos, comienza la cacería!! - Maka sentencia y agranda

con un estridente y ronco - Salud camaradassss!!.

Los cuatro Pokemonster del Amor levantan sus copas, en sus caras se dibu-
ja una picardia madura de diversión.
El diálogo corporal entre ellos se reinicia justo a las horas de dar un par de
tumbos por el barrio. A los pocos pasos de acceder al parque Bruil por una
de las entradas laterales que pegada al canal da con una larga pasarela
que conduce hacia el Ebro sus corazones se alertan y excitan. Allí, como si
de pronto se hubiera seccionado por un cataclismo mayor las dimensiones
de la tierra, acaban de divisar a lo lejos una pareja de progres paseando
a sus perros de matrícula.

Ni hace falta se cuestionen la siguiente jugarreta, como las extremidades

preparadas de un lobo, nuestros Ultras en tándem articulan la táctica de
su desenfreno instintivamente. El azar, a la par que el angosto tramo de
poca luminosidad apartado de zonas transitadas, hacen se recorte la es-
cena en subdivisiones mediante la fragmentación de su avance donde el
ataque mortal explota. Desdoblando el espacio hasta ver frontalmente a
las víctimas que tranquilamente pasean con sus mascotas no hay rostro ni
acto mediato, se intercala el espacio que les abisma en un incontrolable
vértigo de pesadilla sobre estallidos a rojo shock desde el fondo ya pre-
cipitados sobre ellos. Como al percibir un sonido que destaca de pronto
entre el montón de sentidos rayándolos, la fractura del plano sin imagen
es brutal ahora mismo. La apertura de los cuatro a la caza en la noche se
vuelve más oscura y fatal, sin conocimiento alguno, lo que les respira en la
oscuridad y mantiene obcecados en la depredación conjuga grácilmente
en un remolino de horror progresivo. Se tiene a las víctimas y basta, olea-
das de euforia aspirante y visceral que no se detuvieron hasta degollarlos
y tirarlos al tramo del río que encontraron más crecido para ocultar los
cuerpos. Las manos aun temblorosas sostenían las cabezas con las que
jugaban y de las que apenas goteaba sangre paseándolas como trofeos.

Tras coger fuerzas con la premiada caza de la noche y aprovechando la

continuidad del pedo que deforma aun más la energía en sus cuerpos
resecos por el alcohol y las drogas, nuestra Panda de la Wasa decide
es hora de volver al local unas horas para manos a la obra redondear el
conjunto de sus fechorías.
La actividad de esta moderna ciudad de provincias donde vienen a
trajinarse el bien y el mal tiene poco de estabilidad en estas fechas
cercanas al término del año. Hay una deuda incurable en la población de
este pozo de garrulos autóctonos que se arrastra una vez se deja atrás la
estación del verano; no se vive mal, afectivamente sobra de donde mamar,
pero se respira tal tacañería lindante a la camaradería dentro de estas
murallas que hace unos a otros se arrastren a masticar polvorones para ir
pensando en la decoración navideña.

Y esta lección se tiene bien aprendida cuando uno se reconoce entre

los monstruos de la quebradiza hondonada Zaragozana en la cual hasta
donde nuestros amigos han podido llegar gobiernan el caos y el desorden
casi de manera justificada.

Encontramos a los cuatro nuevamente centrados en la apatía que les

devuelve un disimulado altar en la embriaguez, similar al espacio que se
reclama cuando los reveses de la vida exigen se renueve la poesía de la
vida frente al agotamiento más persistente.

Ven capítulos de la Patrulla Condenada mientras lían porros silenciados

por el globazo rayano al auxilio.

Dar rodeos de un extremo al otro del centro de la ciudad solo conlleva más
y más bruma, más y mayor embrutecimiento, por mucho se ponga el acento
del decoro en el oficio de las artes como excusa, nuestros Ultras del Amor
se precipitan en el espacio de la perfidia. Entonces la boca crece detrás
de los dientes desde el estómago, ciertos rasgos internos te sorprenden
por su singularidad y firmeza. De una manera u otra se alimentan de la
alegría de aplastar la carne y los cráneos. Pese a esto, el ser humano
muere también del mal de ser humano, cansados de animalizar sus penas,
fatigas, fracasos y de aceptar demasiado el enfrentamiento directo contra
el miedo de lo que no quieren ser el mismo organismo se lanza a la cura
o hacia algo desconocido a través de la psicosis y el ensueño.

Una voz interior resuena en Tolo…

“Caminarás perdido a través del desierto de asfalto hasta el amanecer y
borrado sobre ti mismo te sobrevivirás.”

Otra voz interior se desdobla en Maka…

“En el día de Todos los Santos, a la hora del medio día se producirán los
prósperos milagros. Quien quiera regalar que regale. Quien quiera juzgar
a sus vecinos que los juzgue. Todo aquel que se acerque y coma de nuestro
plato sanará. Encontrará a sus verdaderos hermanos.“

Un pantallazo a modo de PUBLICIDAD MORAL zanja el sistema nervioso

de Jimmy…

“Aquí están los días de fiesta nacional sin compromisos familiares, sin
bandera ninguna. Despellejada la cabeza de preocupaciones, decapitado
piel verde al galope por este cielo de nubes rosas y celestes; para ti son
estas autopistas rápidas al jangueo fresco bien peinado acelerando la
cobra tatuada del pecho sobre una CBR.“

No hay voz interior en Maggie que espatarrada en el sofá del amplio local
tararea canciones de Lana del Rey mientras lee a Kafka.
 *CROKETTAS DE HIPPY*
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Elaboración de la receta: Croquetas de Hippy

- Paso 1 -

Corta la mantequilla en dados y ponla a derretir en una cazuela mientras te fuerzas

en pensar en pornografía. Pica finamente tu cebolleta o tu diente de ajo cuando
hayas esclarecido unas cuantas perversiones, seguidamente añádelos a la cazuela.
Rehoga durante 5-6 minutos e incorpora el Hippy picado y saltéalo.

- Paso 2 -

Añade la harina y rehoga bien el gummycrushhh. Vierte la leche de tus segundas

intenciones poco a poco, sin dejar de remover la parte humedecida. Cocina esta
bechamel durante 20 minutos aproximadamente removiendo constantemente mien-
tras cocinas y tomando breves pausas si hace falta. Espolvorea con perejil picado el
cigarrillo para agilizar el trabajo.

- Paso 3 -

Extiende la masa conseguida sobre lugares en común y puntos hostiles de vencidad

o situación geográfica. Unta la superficie de las caricaturas con un poco de man-
tequilla pornográfica como la de antes conseguida para que no se haga costra o
cubre aleatoriamente con marcas y logotipos el churumbel. Déjala enfriar.

- Paso 4 -

Cuando la masa esté fría, corta y moldea las crocoketekuen.

- Paso 5 -

Enharina, pasa por huevo y pan rallado y fríelas en un ambiente bien caliente. A ser
posible tras invocar al diablo.

- Paso 6 -

Cuando estén hechas, retíralas de tu subjetividad y prepáralas para ponerlas a

escurrir del exceso de jartadas sobre cualquier suceso reciente que ataña y dañe al
mayor número de personas.

- Detalle final -
Las croquetas de hippy solo deben comerse antes de Navidad.

- Consejo -

Para que no se formen grumos morales cuando hagas la bechamel, agrega los pre-
juicios más gratuitos templados o a temperatura ambiente como si estuvieras en la
cara de los comensales. ¡ Y recuerda, no dejes de remover toda esta parodia hasta
que quede una masa homogénea libre de opiniones facilonas!!
Tras limpiar y cocer los cráneos, decidieron que la
mejor idea de compartir la descarada carne que
les había ofrecido la noche era hacer croquetas
con las tiernas facciones de los progres. Llevaron
desmenuzados en un tupper los trozos a la hora
justa en que se abría el Entalto. Chus como otros
tantos mañaneos les ofreció café y torreznos.
El plano de sombra va al foco de la escena. Es uno de noviembre del día
de Todos los Santos a eso de las 12:00 p.m. de la mañana, grupos de
pretenders acechan con sus camisas a cuadros los garitos de tapeo de la
Madalena. Maka, Maggie, Tolo y Jimmy de empalmada esperan salgan
las primeras croquetas sentados en la terraza del Entalto.

-Progres comiéndose a progres, el overdose de la traición a su clase

social- apunta Jimmy mientras mete otro trago rápido de orujo de yerbas
al estómago.

-El problema más gordo es el de alternar con ciertas ideas mal

sobrepesadas y que hacen de cagadas intelectuales para alimentar tanta
vaca flaca y parda- contesta Tolo y continua, -nada, vale nada, ni si quiera
juzgaría a otra persona en función de la mierda de suerte en la que se
ha criado. La espontaneidad como la felicidad es gratuita y natural, viene
dada para que cada uno la coja o la desaproveche como le de la puta
gana.

Maggie permanece callada y tararea canciones mientras liga por

Tinder. Maka rompe la pedantería con la afirmación, -solo lo gratuito y
desinteresado viene dado del amor; ya sea bajo la forma de violencia
o respeto.- Jimmy continua, -no creéis que nosotros no podemos ser
clasificados bajo esa escala!??, somos como idiotas o locos, ni nuestros
familiares nos quieren.- Tolo retorciéndose en el asiento, -justo eso es lo
que debemos ofrecer, devolver todo ese amor.- Flamea su boca agrietada
en un amplio y gutural jajajaja, luego se calma y prosigue su reflexión.
-¿ Por qué creéis que hemos terminado asumiendo el rol de verdugos y
este comportamiento!?? Panda de come bolsas, acaso reflexionar os hace
más fuertes, está demostrado que no. Yo me imagino junto a Ranxerox o
con Finn en Hora de Aventuras, la movie mode hardcore flushhhh; joder…,
ando rodeado de Mortadelos y Carpantas… Esto no es Robinson Crusoe,
esta wasa de comedia se da en la Zarawaza del Señor de las Moscas:
Baal-Zhe-Vhao-flexxx… Nos aferramos hasta rader el puro hueso, hemos
arrancado de su boca la vida, de sus corazones la miseria de latido alguno
de moralidad. Si nuestras acciones valen algo, toman valor como trabajo
de crueldad, obramos enmudecidos a exigencia de una necesidad interior
superior, contra nosotros mismos.

-Los tres amigos se craquelan y retuercen en sus sillas después de tamaña

perorata de glacial lucidez.

Tolo se viene arriba y levanta de la silla de un salto que explota dada la

reacción de sus amigos -Se dice como se oye: da-a-muerte-el-que-mata.
No hay otra manera de contarnos lo que nos pasa. AMA A TU PRÓJIMO
HASTA EN LO QUE TE MATA. NO HAY OTRA MANERA DE CONTARNOS LO
QUE NOS MATA.-
Se patea la city solo para darse de frente contra la maraña de soplapollas
que viven en el centro. No hay politiqueo sincero para nuestros protago-
nistas dentro de esta corrala de la ciudad de heteromantenidos, solo so-
noridad entre gruñidos de perra con las amígdalas castradas como platos
pa hacer frescos zumos con quienquiera que se presente a conjunto con la
censura. Son demasiadas las circunstancias que les han llevado a nuestros
“Ultras del Amor” de una manera tan desquiciada como salvaje a lo suyo:
no creo que este barrio haya sufrido de estas jóvenes personas una actitud
tan biolenta, activa, seductora, atrayente por insidiosa y revolucionaria
para nada. Nuestros Ultras del Fandom son el verdadero fantasma despe-
llejado en el intento heroico por reconocerse colectividad. ¿Quién lxs para?
Conjugan una solidaridad abierta a la brutalidad, conectan los afectos de
los círculos más próximos para fortalecer sus lazos o desplazarlos hasta
la pérdida de esa afianzada naturalidad en la vida moderna. No dejes
de enfocar esta mano que se levanta para ocultar el rostro, los dedos del
puño cerrados donde el dedo corazón rampante permanece a tu concien-
cia bien encarado. ¡Que te jodan!
Al amanecer los chicos se levantan de sus ataúdes y salen desnudos por
la calle en ruinas, deliran. Al llegar al parque de una espesa maraña de
arbustos brota espeso humo en bloques tangentes al colapso florido. La
densa humareda impregna la escena para avivar la entrada de los no
muertos a la morgue que los engulle. Avanzan a través del césped intactos
hasta fundirse en el interior del arbusto del que empiezan a brotar ro-
sas azules y blancas espinas. Transiciones de luz circulares de los pétalos
móviles recortan sus cuerpos fríos y dormidos. Un olor dulce y lacerante
envuelve en la frondosidad estos perfiles que hemos amado por un instan-
te. Los Ultras del Amor son absorbidos en la frente de la planta que por
momentos quiere arrancarse del terreno que la contiene. Justo en el límite
que accede a este umbral y los aferra con los pies colgando al borde del
acantilado un aguacero de rocío les empuja y empapa para proyectarlos
aun más estériles al regreso hacia otro mundo. Los chicos como estatuas fu-
turas ríen vacíos y se desvanecen en azules, naranjas y degradados sepia
hacia el olvido. Un profundo éxtasis les separa de lo acontecido en horas
pasadas. Aún visible levantan un brazo que sobrevive sobre el fundido del
abismo negro. Te apuntalan señalando hacia la boca. ¿ Te acuerdas!? Lo
que allí señalan no es otra cosa que la corriente de luz más intensa se
difumina hacia el Silencio de tu verdadero Rostro, tu Segunda boca.

Volverán de entre los muertos, confían EN TI.

¿ Está bastante claro!?? ¿ O tengo que aclararlo más!!!??? Sois los pargue-
las carapijos que yo he inventado para hacer retorcerse de horror moral
este día de los muertos y no queda otra que joderla con el horror de
moralizar.

Hasta aquí hemos llegado. Sí. Aquí, hasta este medio día que se pinta con
un sol radiante sobre focazo negro. Pero algo siempre pasa, algo se pinta
de un matiz excesivo cada buen puto rato. Se dice que si algo funciona en
Zaragoza, funciona en cualquier parte del mundo gloria para lo civilizado;
si pasas el testeo rápido de esta parte del panorama no solo te salvas,
sino que de por vida estás bendecido. Como decía, hay una bruma que
aplasta para hacerse real y objetiva, un flujo de sombra permanente en la
garganta de nuestro colectivo. Te despiertas y en tu conciencia un abismo
abovedando el día a día te enmarca, te despiertas: Zaragoza se paladea
como un Sol Virgen que ilumina con su manto de neurosis toda fresca
Nocheccita.
 Udermohr es una manifestación más
de la SOCIEDAD DISCORDIANA
sobre la que aprenderás más y entenderás
menos.

Somos una tribu de filósofos, teólogos, magos,

científicos, artistas, payasos y maníacos
similares que están intrigados con
ERIS DIOSA DE LA CONFUSIÓN
y con sus tejemanejes.