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La evolución e importancia de la familia

Darly Alexandra Collazos Carrillo

Daniela Vargas Ibarra

Facultad de Derecho, Ciencias Políticas y Sociales, Universidad del Cauca

Derecho de Familia

Sandra Liliana Zúñiga López

08 de abril de 2022
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La familia es la institución histórica que ha tenido presencia a lo largo de las distintas

etapas de la civilización y su origen se remonta a los albores de la humanidad.

El clan fue, la forma más primitiva de unión, destinada a lograr una posibilidad de

defensa que hiciera viable la supervivencia. La familia normalmente estaba constituida por un

varón y una o más mujeres e hijos, y a veces, por algunos parientes que se agregaban al núcleo

de personas, a cambio de obtener protección y ayuda del jefe del núcleo, colaboraban en las

labores del pastoreo y de caza.

Posteriormente en algunas organizaciones familiares primitivas, el hombre (padre) que

convive dentro del seno familiar, fue considerado como un “extraño” y era el tío materno, quien

asumía el rol del jefe de la familia, pues era quien ejercía influencia en la vida de los hijos de su

hermana, son los parientes de la mujer (madre), los que forman parte de la familia. Así se

constituyó el matriarcado en donde la línea de parentesco se estableció a través de la madre y los

hermanos de la madre.

Por el contrario, en Roma, la familia se organizó bajo un régimen patriarcal monogámico,

en el centro del cual se colocaba la autoridad del matrimonio, el jefe de la Familia era el único

dueño del patrimonio familiar, ejercía potestad absoluta sobre la mujer y los hijos. La Familia

Romana constituía así una unidad religiosa, política y económica que se fundó en el parentesco

civil.

A pesar de haberse conservado el carácter monogámico del matrimonio, en la actualidad

podemos observar que la familia moderna ya no solamente está conformada por el padre, la

madre y los hijos; pues cada vez es más frecuente ver familias sin hijos o formadas por parejas

del mismo sexo, así como familias en las que no existe un vínculo de consanguinidad.
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La familia está conformada por varias personas que están ligadas no sólo por vínculos de

consanguinidad, sino que también, por vínculos de afecto, respeto y solidaridad dados de manera

estable, que inspiran a todos sus miembros a tener un proyecto de vida en común.

La familia es en donde las personas desarrollamos nuestras primeras relaciones

personales íntimas, por tanto, es el eje central y núcleo primario de la sociedad, ya que, al ser la

familia la primera encargada de transmitir valores y costumbres a los niños y niñas, es la

encargada de propiciar su desarrollo como miembros de una nación y de un grupo, inculcándoles

un sentido de pertenencia y la capacidad de entender la responsabilidad que esto conlleva.

Un aspecto muy importante de la familia, es que, es en ella donde los niños y niñas

sientan las bases de su identidad personal, la cual determina en gran medida la forma en la que

ellos participarán y se relacionarán como adultos tanto en la vida social como familiar; en este

aspecto son muy importantes las formas de relacionarse y actuar de los adultos que conforman la

familia, ya que son ellos, a quienes los niños observan y toman como modelos para la

construcción de su propia identidad.

De igual manera, la familia, es quizá, el único espacio donde nos sentimos confiados y

plenos; la familia debe ser el refugio donde nos aceptan y festejan por los que somos, sin

importar la condición económica, cultural, intelectual, religión o preferencia sexual. La familia

nos cobija, apoya, nos ama y respeta a todos los miembros sin importar la situación en el que nos

encontremos.

Por otra parte, cada familia debe garantizar un cierto grado de independencia de cada uno

de sus miembros, un grado de autonomía que les facilite su crecimiento para mantener la

integridad de cada individuo, en un equilibrio entre lo permitido y lo prohibido, lo aceptado y

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rechazado. Del mismo modo, la familia debe establecer reglas y normas de comportamiento que

permitan mantener un orden y armonía dentro del hogar, como también, debe ofrecer a padres,

madres e hijos herramientas para la mediación, solución pacífica de sus conflictos, el manejo

asertivo de las diferencias, la promoción de acuerdos, la igualdad de derechos, deberes entre

todos y la responsabilidad.

Por tanto, las funciones de la familia son de vital importancia, ya que no sólo hacen

posible la vida en sociedad, sino que, además, están diseñadas para satisfacer las necesidades que

tiene cada uno de los miembros de la familia, y esto permite que una familia sea funcional.

La importancia de la familia para la vida digna radica en que esta nos brinda en la mayor

medida posible, seguridad económica, alimentaria, emocional, académica, que nos permite a los

integrantes de esta, alcanzar una calidad de vida en donde nos podemos desarrollar, crecer,

social, psicológica y físicamente.

Sin embargo, las familias no siempre poseen estas características de ser unidas, amorosas

y estables, lo que generalmente conlleva a que sus integrantes sacrifiquen de algún modo su

integridad mental, física y emocional, debido a que no encuentran en ella el apoyo, respeto y

amor que necesitan. Por eso nuestra responsabilidad como sociedad es proteger a la familia,

promover un ambiente de respeto, valores, educación, amor, entendiendo y reconociendo la

importancia de esta para el desarrollo de nuestra sociedad.