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Mar 1:16 Mientras caminaba junto al mar de Galilea, vio a Simón y a Andrés, hermano de Simón,

echando una red en el mar, porque eran pescadores.

Mar 1:17 Y Jesús les dijo: Seguidme, y yo haré que seáis pescadores de hombres.

Mar 1:18 Y dejando al instante las redes, le siguieron.

Luc 5:4 Cuando terminó de hablar, dijo a Simón: Sal a la parte más profunda y echad vuestras redes
para pescar.

Luc 5:5 Respondiendo Simón, dijo: Maestro, hemos estado trabajando toda la noche y no hemos
pescado nada, pero porque tú lo pides, echaré las redes.

Luc 5:6 Y cuando lo hicieron, encerraron una gran cantidad de peces, de modo que sus redes se
rompían;

Luc 9:28 Y como ocho días después de estas palabras, Jesús tomó consigo a Pedro, a Juan y a Jacobo,
y subió al monte a orar.

Luc 9:29 Mientras oraba, la apariencia de su rostro se hizo otra, y su ropa se hizo blanca y
resplandeciente.

Luc 9:30 Y he aquí, dos hombres hablaban con Él, los cuales eran Moisés y Elías,

Luc 9:31 quienes apareciendo en gloria, hablaban de la partida de Jesús, que Él estaba a punto de
cumplir en Jerusalén.

Luc 9:32 Pedro y sus compañeros habían sido vencidos por el sueño, pero cuando estuvieron bien
despiertos, vieron la gloria de Jesús y a los dos varones que estaban con Él.

Luc 9:33 Y sucedió que al retirarse ellos de Él, Pedro dijo a Jesús: Maestro, bueno es que estemos aquí;
hagamos tres enramadas, una para ti, otra para Moisés y otra para Elías; no sabiendo lo que decía.

Luc 9:34 Entonces, mientras él decía esto, se formó una nube que los cubrió; y tuvieron temor al entrar
en la nube.

Luc 9:35 Y una voz salió de la nube, que decía: Este es mi Hijo, mi Escogido; a Él oíd.

Mat 26:37 Y tomando consigo a Pedro y a los dos hijos de Zebedeo, comenzó a entristecerse y a
angustiarse.

Mat 26:38 Entonces les dijo*: Mi alma está muy afligida, hasta el punto de la muerte; quedaos aquí y
velad conmigo.

Mat 26:39 Y adelantándose un poco, cayó sobre su rostro, orando y diciendo: Padre mío, si es posible,
que pase de mí esta copa; pero no sea como yo quiero, sino como tú quieras.

Mat 26:40 Vino* entonces a los discípulos y los halló* durmiendo, y dijo* a Pedro: ¿Conque no
pudisteis velar una hora conmigo?

Mat 26:41 Velad y orad para que no entréis en tentación; el espíritu está dispuesto, pero la carne es
débil.
Mat 16:16 Respondiendo Simón Pedro, dijo: Tú eres el Cristo, el Hijo del Dios viviente.

Mat 16:21 Desde entonces Jesús el Cristo comenzó a declarar a sus discípulos que debía ir a Jerusalén y
sufrir muchas cosas de parte de los ancianos, de los principales sacerdotes y de los escribas, y ser
muerto, y resucitar al tercer día.

Mat 16:22 Y tomándole aparte, Pedro comenzó a reprenderle, diciendo: ¡No lo permita Dios, Señor!
Eso nunca te acontecerá.

Mat 16:23 Pero volviéndose Él, dijo a Pedro: ¡Quítate de delante de mí, Satanás! Me eres piedra de
tropiezo; porque no estás pensando en las cosas de Dios, sino en las de los hombres.

Jua 6:67 Dijo entonces Jesús á los doce: ¿Queréis vosotros iros también?

Jua 6:68 Y respondióle Simón Pedro: Señor, ¿á quién iremos? tú tienes palabras de vida eterna.

Jua 6:69 Y nosotros creemos y conocemos que tú eres el Cristo, el Hijo de Dios viviente.

Mat 14:28 Respondiéndole Pedro, dijo: Señor, si eres tú, mándame que vaya a ti sobre las aguas.

Mat 14:29 Y Él dijo: Ven. Y descendiendo Pedro de la barca, caminó sobre las aguas, y fue hacia Jesús.

Mat 14:30 Pero viendo la fuerza del viento tuvo miedo, y empezando a hundirse gritó, diciendo:
¡Señor, sálvame!

Mat 14:31 Y al instante Jesús, extendiendo la mano, lo sostuvo y le dijo*: Hombre de poca fe, ¿por qué
dudaste?

Jua 13:36 Simón Pedro le dijo*: Señor, ¿adónde vas? Jesús respondió: Adonde yo voy, tú no me puedes
seguir ahora, pero me seguirás después.

Jua 13:37 Pedro le dijo*: Señor, ¿por qué no te puedo seguir ahora mismo? ¡Yo daré mi vida por ti!

Jua 13:38 Jesús le respondió*: ¿Tu vida darás por mí? En verdad, en verdad te digo: no cantará el gallo
sin que antes me hayas negado tres veces.

Jua 18:10 Entonces Simón Pedro, que tenía una espada, la sacó e hirió al siervo del sumo sacerdote, y
le cortó la oreja derecha. El siervo se llamaba Malco.

Mat 26:40 Vino* entonces a los discípulos y los halló* durmiendo, y dijo* a Pedro: ¿Conque no
pudisteis velar una hora conmigo?

Mat 26:41 Velad y orad para que no entréis en tentación; el espíritu está dispuesto, pero la carne es
débil.

Jua 21:20 Pedro, volviéndose, vio* que les seguía el discípulo a quien Jesús amaba, el que en la cena se
había recostado sobre el pecho de Jesús y había dicho: Señor, ¿quién es el que te va a entregar?

Jua 21:21 Entonces Pedro, al verlo, dijo* a Jesús: Señor, ¿y este, qué?

Mat 26:73 Y un poco después se acercaron los que estaban allí y dijeron a Pedro: Seguro que tú
también eres uno de ellos, porque aun tu manera de hablar te descubre.
Mat 26:74 Entonces él comenzó a maldecir y a jurar: ¡Yo no conozco a ese hombre! Y al instante un
gallo cantó.

Jua 21:2 Estaban juntos Simón Pedro, Tomás llamado el Dídimo, Natanael de Caná de Galilea, los hijos
de Zebedeo y otros dos de sus discípulos.

Jua 21:3 Simón Pedro les dijo*: Me voy a pescar. Ellos le dijeron*: Nosotros también vamos contigo.
Fueron y entraron en la barca, y aquella noche no pescaron nada.

Jua 21:4 Cuando ya amanecía, Jesús estaba en la playa; pero los discípulos no sabían que era Jesús.

Jua 21:5 Entonces Jesús les dijo*: Hijos, ¿acaso tenéis algún pescado? Le respondieron: No.

Jua 21:6 Y Él les dijo: Echad la red al lado derecho de la barca y hallaréis pesca. Entonces la echaron, y
no podían sacarla por la gran cantidad de peces.

ua 21:15 Entonces, cuando habían acabado de desayunar, Jesús dijo* a Simón Pedro: Simón, hijo de
Juan, ¿me amas más que estos? Pedro le dijo*: Sí, Señor, tú sabes que te quiero. Jesús le dijo*:
Apacienta mis corderos.

Jua 21:16 Y volvió a decirle por segunda vez: Simón, hijo de Juan, ¿me amas? Pedro le dijo*: Sí, Señor,
tú sabes que te quiero. Jesús le dijo*: Pastorea mis ovejas.

Jua 21:17 Le dijo* por tercera vez: Simón, hijo de Juan, ¿me quieres? Pedro se entristeció porque la
tercera vez le dijo: ¿Me quieres? Y le respondió: Señor, tú lo sabes todo; tú sabes que te quiero. Jesús le
dijo*: Apacienta mis ovejas.

Luc 24:13 Y he aquí que aquel mismo día dos de ellos iban a una aldea llamada Emaús, que estaba
como a once kilómetros de Jerusalén.

Luc 24:14 Y conversaban entre sí acerca de todas estas cosas que habían acontecido.

Luc 24:15 Y sucedió que mientras conversaban y discutían, Jesús mismo se acercó y caminaba con
ellos.

Luc 24:16 Pero sus ojos estaban velados para que no le reconocieran.

Luc 24:17 Y Él les dijo: ¿Qué discusiones son estas que tenéis entre vosotros mientras vais andando? Y
ellos se detuvieron, con semblante triste.

Luc 24:18 Respondiendo uno de ellos, llamado Cleofas, le dijo: ¿Eres tú el único visitante en Jerusalén
que no sabe las cosas que en ella han acontecido en estos días?

Luc 24:19 Entonces Él les dijo: ¿Qué cosas? Y ellos le dijeron: Las referentes a Jesús el Nazareno, que
fue un profeta poderoso en obra y en palabra delante de Dios y de todo el pueblo;

Luc 24:20 y cómo los principales sacerdotes y nuestros gobernantes le entregaron a sentencia de
muerte y le crucificaron.

Luc 24:21 Pero nosotros esperábamos que Él era el que iba a redimir a Israel. Pero además de todo
esto, este es el tercer día desde que estas cosas acontecieron.
Luc 24:22 Y también algunas mujeres de entre nosotros nos asombraron; pues cuando fueron de
madrugada al sepulcro,

Luc 24:23 y al no hallar su cuerpo, vinieron diciendo que también habían visto una aparición de
ángeles que decían que Él vivía.

Luc 24:24 Algunos de los que estaban con nosotros fueron al sepulcro, y lo hallaron tal como también
las mujeres habían dicho; pero a Él no le vieron.

Luc 24:25 Entonces Jesús les dijo: ¡Oh insensatos y tardos de corazón para creer todo lo que los
profetas han dicho!

Luc 24:26 ¿No era necesario que el Cristo padeciera todas estas cosas y entrara en su gloria?

Luc 24:27 Y comenzando por Moisés y continuando con todos los profetas, les explicó lo referente a Él
en todas las Escrituras.

Luc 24:28 Se acercaron a la aldea adonde iban, y Él hizo como que iba más lejos.

Luc 24:29 Y ellos le instaron, diciendo: Quédate con nosotros, porque está atardeciendo, y el día ya ha
declinado. Y entró a quedarse con ellos.

Luc 24:30 Y sucedió que al sentarse a la mesa con ellos, tomó pan, y lo bendijo; y partiéndolo, les dio.

Luc 24:31 Entonces les fueron abiertos los ojos y le reconocieron; pero Él desapareció de la presencia
de ellos.

Luc 24:32 Y se dijeron el uno al otro: ¿No ardía nuestro corazón dentro de nosotros mientras nos
hablaba en el camino, cuando nos abría las Escrituras?

Luc 24:34 que decían: Es verdad que el Señor ha resucitado y se ha aparecido a Simón.

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