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CRIMEN Y
CASTIGO: ¿CUAL
ESLA VERDADERA
JAULA?.
¿Qué es lo que lleva un hombre a cometer un algo socialmente inaceptable?, ¿Cuál es el
punto de quiebre de un hombre? Considera estas preguntas como un punto en el cual partir
para entender la obra que se mencionara en este texto: Crimen y Castigo, escrita por uno de
los autores más relevantes eh influyentes de Rusia, Fiodor Dostoyevski. Tal como el nombre
enuncia hablara de un crimen cometido por un joven estudiante de San Petersburgo llamado
Rodión Románovich Raskólnikov, quien preferiría ser llamado “Rodia”, y castigo que va mas
halla del castigo impuesto por la sociedad, este castigo es propiamente mental, pasando por
lo ético y moral. Rodia esta sumido en la profunda pobreza, la cual nos deja ver claramente
su lamentable estado en la forma en que nos describe el sentir y la postura del personaje,
dándonos a detallar en cada fragmento de la obra, aspectos claves de la lucha contra sus
demonios y la decadencia en la que estaba hundido, por sus vestimentas desalineadas, sus
pensamientos estruendosos que pasan por su cabeza y las situaciones exasperantes que vive:

“Su cuartucho se hallaba bajo el tejado de un gran edificio de cinco pisos y, más que una habitación, parecía
una alacena. En cuanto a la patrona, que le había alquilado el cuarto con servicio y pensión, ocupaba un
departamento del piso de abajo; de modo que nuestro joven, cada vez que salía, se veía obligado a pasar por
delante de la puerta de la cocina, que daba a la escalera y estaba casi siempre abierta de par en par. En esos
momentos experimentaba invariablemente una sensación ingrata de vago temor, que le humillaba y daba a su
semblante una expresión sombría. Debía una cantidad considerable a la patrona y por eso temía encontrarse
con ella”.

La obra expone una premisa dictada por una de las filosofías de vida de Raskolnikov: La
maldad se justifica por los fines humanitarios. Y esta frase, no podemos aplicarla en casos
generales, pues podríamos justificar cualquier situación criminal. Se expone demasiado esto,
en escritos cortos y ligeros como los comics, en personajes típicamente catalogados como
enemigos o villanos. En gran parte de los personajes con inspiraciones malvadas podemos
llegar a empatizar con ellos, pues la mayoría empezaron con el deseo de ser un héroe y de
apoyar a su comunidad, sin embargo, sus ideas y modos que emplean para llegar a la justicia
deseada no encajan con los de la sociedad y comunidad de dicha historia. Raskolnikov en
esta obra, planeada acabar con una vieja usurera, inspirado por las quejas y las críticas que
se tienen de ella, llegando a la conclusión, que el mundo y la sociedad estaría mejor sin
personas como ella.
Un sentir heroico, Raskolnikov sentía que hacia algo correcto. Sentía que podría llegar a
librarse de la profunda decadencia en la que estaba sumido si decidía acabar con ella. Pero
las enseñanzas morales y el reprobamiento de los actos de asesinatos, hizo que Rodia se
atrapara en una cárcel de paranoia y culpabilidad en su propia mente. En ese punto iniciaría
una odisea de lucha interna contra los demonios en su interior. Su culpa no lo deja descansar
por las noches y le genera una gran paranoia que no deja estar en paz en el día. Y es que la
obra de Dostoyevski imprime lo que es el dualismo moral que se da a notar en cada generación
nueva que se incorpora a este mundo. El gran debate filosófico: ¿Qué podemos considerar
como lo bueno? y ¿Qué podemos considerar como lo malo?:

“Yo pretendía solamente obtener la independencia, asegurar mis primeros pasos en la vida. Después lo
habría reparado todo con buenas acciones de gran alcance. Pero fracasé desde el primer momento, y
por eso me consideran un miserable. Si hubiese triunfado, me habrían tejido coronas; en cambio, ahora
creen que sólo sirvo para que me echen a los perros.-Pero ¿qué dices, Rodia?-Me someto a la ética, pero no
comprendo en modo alguno por qué es más glorioso bombardear una ciudad sitiada que asesinar a alguien a
hachazos. El respeto a la ética es el primer signo de impotencia. Jamás he estado tan convencido de ello como
ahora. No puedo comprender, y cada vez lo comprendo menos, cuál es mi crimen”.

Para Aliviar un poco su aflicción Raskolnikov, recurre a una joven chica que trabaja de
prostituta por la necesidad de ayudar a su familia que esta en una grave situación. A pesar de
caer en los servicios sexuales, ella esta muy envuelta en los valores religiosos, por lo que es
en una parte de la obra obligada por Rodia a leer la historia bíblica de Lázaro. Esta obra esta
repleta de personajes que luchan con sus propios demonios, que dan fuerza al sentimiento y
al aspecto psicológico del que Dostoyevski quiere transmitir. Desde un exfuncionario que,
gracias a la bebida alcohólica, su familia de cuatro hijos y su esposa, están ahogados en la
miseria y la enfermedad. Hasta un libidinoso neocapitalista, que es presentado como la
salvación de la familia de Raskolnikov.

La llegada del Juez Porfirio Petrovich a la odisea de caos interno de Rodia, hace que este solo
siga aumentando mas y mas la paranoia que lo atormentaba. Porfirio lo cita a declarar, y este
pensando que la declaración refería al caso del homicidio de la vieja, Raskolnikov. Estuvo a
nada de soltar la verdad. Cuando nos vemos acorralado ante personas con el sentido de
autoridad nuestra valentía y contención se vuelve débil. Y es que desde chicos tenemos la
enseñanza del respeto y la intimidación ante una autoridad que tiene todo el poder de
reprimirte. Esto podemos apreciarlo en la actualidad con las marchas de movimientos débiles
que a la mínima confrontación con la autoridad, se cohíben. Ante los ojos de la sociedad, es
algo sensato detener algún tipo de acto violento enfrente de una autoridad. Pero ante la
ideología de impulso a Rodia a cometer tal crimen, dicha acción es inaceptable. Pues la gente
intelectual y la gente justa, es mala y este mas haya de una ley impuesta. De casualidad
Porfirio menciona el caso de la anciana y este reacciona con un desmayo. Se puede notar el
nivel de estrés y de saturación de Rodia puede presenciar, y su martirio no paraba. En realidad
su verdadero deseo era librarse de dicho secreto que solo atormentaba su cabeza segundo a
segundo. A este punto ya no importaba si la consecuencia era grave o extensa, el solo quería
liberarse toda culpa y pagar la deuda que socialmente adquirió. Por lo que al por fin llegar a
ser considerado culpable del asesinato y ser condenado a 8 años de trabajos forzados en Siria,
él ya se sentía en paz.

Podemos concluir que lo que nos orilla a cometer un crimen tan grave como el asesinar a otro
ser humano seria la cultura que adquirimos en nuestro entorno social y sumándole las
circunstancias personales que pueden atormentar y sentir como un clavo ardiente en nuestro
costado. El crimen de esta historia fue real y tangible, pero el castigo que tuvo que sufrir
Raskolnikov, fue estar encerrado en una abrumadora jaula de desesperación y culpa, que es
capaz de quebrar a cualquier humano hasta los huesos.