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Del Silencio a la Comunicación

Reunión Casa2 Cali 10 de Junio 2022

Jesús cambia el agua en vino


2 Al tercer día se celebró una boda en Caná de Galilea, y la madre de Jesús se
encontraba allí. 2 También habían sido invitados a la boda Jesús y sus
discípulos. 3 Cuando el vino se acabó, la madre de Jesús le dijo:
—Ya no tienen vino.

—Mujer, ¿eso qué tiene que ver conmigo? —respondió Jesús—. Todavía no ha
llegado mi hora.

Su madre dijo a los sirvientes:
—Hagan lo que él les ordene.

Había allí seis tinajas de piedra, de las que usan los judíos en sus ceremonias de
purificación. En cada una cabían unos cien litros.[a]


Jesús dijo a los sirvientes:
—Llenen de agua las tinajas.
Y los sirvientes las llenaron hasta el borde.

—Ahora saquen un poco y llévenlo al encargado del banquete —les dijo Jesús.
Así lo hicieron. 9 El encargado del banquete probó el agua convertida en vino sin
saber de dónde había salido, aunque sí lo sabían los sirvientes que habían sacado
el agua. Entonces llamó aparte al novio 10 y le dijo:
—Todos sirven primero el mejor vino y, cuando los invitados ya han bebido mucho,
entonces sirven el más barato; pero tú has guardado el mejor vino hasta ahora.
11 
Esta, la primera de sus señales, la hizo Jesús en Caná de Galilea. Así reveló su
gloria, y sus discípulos creyeron en él.
12 
Después de esto Jesús bajó a Capernaúm con su madre, sus hermanos y sus
discípulos, y se quedaron allí unos días.
Para los israelitas, el vino era un elemento infaltable en las ceremonias
nupciales. El vino en una boda simbolizaba alegría, medicina, consuelo
y abundancia en el futuro.

Las tinajas se usaban para llevar a cabo el ritual de purificación de los


judíos, los cuales tomaban las tinajas y las llenaban de agua para
purificarse las manos antes de comer o también incluía lavarse los pies
y la cara de acuerdo a sus ritos. Un “rito” era un habito o costumbre.
Pero Jesus hace una Transformación “El Agua en vino”, y no cualquier
vino sino una de gran calidad, representando la transformación que ha
hecho Dios en nuestros corazones, en nuestras imperfecciones,
rebeldías y dureza de corazón. Más en nuestro matrimonio, en nuestra
relación como esposos, como pareja, como hijos de Dios.

Pero llevándolos al lado de nuestro matrimonio encontramos un


problema en nuestra relación de pareja:

EL PROBLEMA

¿Cómo es posible que dos personas que se aman y que han


prometido amarse hasta la muerte, lleguen al punto de no dirigirse la
palabra por horas o hasta días?
tal vez podamos pesar… “Por lo menos, así ya no peleamos”, Sin
embargo, el problema sigue ahí, y la situación es incómoda para
ambos.

Es por esto que la falta de verbalización y la represión de los


sentimientos, a lo largo del tiempo, hace que se acumulen
resentimientos profundos hacia la pareja.

El estar en silencian con nuestra esposa(o) no es nada más que otra


forma de comunicarnos, solo que está ligado a la intención. A lo que yo
quiero hacer.

Por ejemplo:

1. Guardo Silencio para controlar el comportamiento del otro y


usarlo como castigo.
2. Guardo Silencio para no atender las necesidades de la pareja u
generar indiferencia.
3. Guardo Silencio para esconder la incertidumbre, o hacer esperar
una respuesta que no llegara.

Por eso el único silencio asertivo es cuando guardo silencio para


respirar, serenarme y de manera sabia controlar mis emisiones y
pensamientos.

Pero viene la transformación, así como Jesus transformo el Agua en


Vino…

Y eso pasando del Silencio a la comunicación…. Y a cuál Comunicación:

1. A la Comunicación de Poder y gran impacto en la relación


matrimonial.

Proverbios 25:11
Nueva Versión Internacional
11 
Como naranjas de oro con incrustaciones de plata
     son las palabras dichas a tiempo.
Colosenses 4:6
Nueva Versión Internacional

Que su conversación sea siempre amena y de buen gusto. Así sabrán cómo
responder a cada uno.
Decir las palabras a tiempo, con una buena conversación, de buen
gusto, para saber responder a cada uno.

2. Habla con palabras de bendición y edificación.

Nuestras palabras deberán ser para animar y fortalecer a nuestra


esposita (o) y también a todos los que nos rodeen.
Debemos Valorar más el Bien a los demás que salirse con la suya,
eso nos deja el ejemplo de Jesus.

Romanos 15:2
Nueva Versión Internacional

Cada uno debe agradar al prójimo para su bien, con el fin de edificarlo.
Romanos 14:19
Nueva Versión Internacional
19 
Por lo tanto, esforcémonos por promover todo lo que conduzca a la paz y a la
mutua edificación.
3. El escuchar con atención es uno de los componentes más
importantes de la comunicación.

A la medida que nos esforcemos por escuchar y entender a nuestra


pareja, le estás comunicando respeto, honra y amor.

Proverbios 18:13
Nueva Versión Internacional
13 
Es necio y vergonzoso
     responder antes de escuchar.

Romanos 12:10
Nueva Versión Internacional
10 
Ámense los unos a los otros con amor fraternal, respetándose y honrándose
mutuamente.

4. Debemos hablar la verdad en amor.

En nuestro matrimonio debemos hablar abierta y honestamente, sin


la excusa de tomar la honestidad para atacar al otro, ni
descargarnos con malas palabras.
Efesios 4:25
Nueva Versión Internacional
25 
Por lo tanto, dejando la mentira, hable cada uno a su prójimo con la verdad,
porque todos somos miembros de un mismo cuerpo.
Efesios 4:15
Nueva Versión Internacional
15 
Más bien, al vivir la verdad con amor, creceremos hasta ser en todo como aquel
que es la cabeza, es decir, Cristo.
La comunicación es el lazo de unión y transformación entre las
personas, con muchas más razones entre el esposo y la esposa, porque
disuelve las barreras, ayuda a la comprensión entre ambos, facilita la
solución de los problemas, malos entendidos y conflictos e inclusive
contribuye a prevenirlos; se unen las fuerzas para el logro del bien de
los dos y hace que la convivencia no sólo sea tolerable sino agradable,
en base al amor futuro y no sólo agradable sino también fructífera y
enriquecedora.

Así que transformemos nuestro Matrimonio, así como Jesus transformo


el Agua en vino, a través de la comunicación, lazo de Amor y Vedad.

Pasando del Silencio a la Comunicación.

Amen….

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