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REDES SOCIALES

¿QUÉ SON?
Las redes sociales son estructuras formadas en Internet por personas u organizaciones que
se conectan a partir de intereses o valores comunes. A través de ellas, se crean relaciones
entre individuos o empresas de forma rápida, sin jerarquía o límites físicos.

son sitios y aplicaciones que operan en niveles diversos – como el profesional, de relación,
entre otros – pero siempre permitiendo el intercambio de información entre personas y/o
empresas.
Los individuos ​no necesariamente se tienen que conocer previo a tomar contacto a
través de una red social, sino que pueden hacerlo a través de ella, y ese es uno de los
mayores beneficios de las ​comunidades virtuales​.

Cuando hablamos de red social, lo que viene a la mente en primer lugar son sitios como
Facebook, Twitter y LinkedIn o aplicaciones como Snapchat e Instagram, típicos de la
actualidad. Pero la idea, sin embargo, es mucho más antigua: en la sociología, por ejemplo,
el concepto de red social se utiliza para analizar interacciones entre individuos, grupos,
organizaciones o hasta sociedades enteras desde el final del siglo XIX.

En Internet, las redes sociales han suscitado discusiones como la de falta de privacidad,
pero también han servido como medio de convocatoria para manifestaciones públicas en
protestas. Estas plataformas crearon, también, una nueva forma de relación entre empresas
y clientes, abriendo caminos tanto para la interacción, como para el anuncio de productos o
servicios.
Las más usadas son…
Facebook, Instagram y YouTube son las redes sociales más utilizadas

El estudio muestras que los mexicanos que cuentan con acceso a internet poseen en
promedio 5 redes sociales. Casi la totalidad de los internautas del país cuentan con
Facebook, y 9 de cada 10 tienen Whatsapp. Youtube creció 10% con respecto al año
pasado, y 8 de cada 10 mexicanos la frecuentan

.
https://www.eleconomista.com.mx/tecnologia/7-graficos-sobre-los-usuarios-de-internet-en-M
exico-en-2018-20180517-0077.html

El uso de redes sociales es la actividad preponderante de los mexicanos en internet. Cabe


destacar que las compras en línea, según revela el estudio, crecieron 17% en el rubro de
usos de internet con respecto al estudio del 2017.
En México, hay una población de más de 120 millones de habitantes, de los cuales,
alrededor de 63 millones están conectados a internet y son usuarios de perfiles en alguna
red social, aseguró Leobardo Hernández Audelo, maestro en Ciencias Computacionales por
la UNAM.

https://www.excelsior.com.mx/hacker/2018/01/18/1214650​.

Riesgos:

Riesgos en las redes sociales Las categorías de riesgos a los que los adolescentes se
enfrentan en las redes sociales son básicamente las mismas a las que hacen frente en
general en Internet, resumidos por De Moor y colaboradores (2008). Hay tres categorías
diferentes de riesgos.

La primera describe los riesgos de contenido. Un ejemplo típico de contenido provocador


que pueden encontrar los adolescentes en las redes sociales son los mensajes de odio.
Estos mensajes pueden ser bastante directos, como actualizaciones de estado o
publicaciones de carácter agresivo en el muro de alguien, pero también pueden ser
indirectos, por ejemplo, uniéndose a grupos de odio. Los adolescentes necesitan igualmente
desarrollar habilidades críticas para juzgar la fiabilidad de la información. La información
errónea que podría aparecer en las redes puede ser intencionada, por ejemplo un cotilleo
publicado por otros usuarios, o involuntaria. Esta última puede darse cuando alguien publica
una broma que puede ser mal interpretada como in - formación veraz. Entre los ejemplos
típicos encontramos artículos de revistas satíricas publicadas en el muro de una red social.

La segunda categoría de riesgos incluye los riesgos de contacto, que son aquellos que
tienen su origen en el hecho de que las redes sociales puedan utilizarse como herramienta
para comunicarse y establecer contacto con otros (Lange, 2007). Junto a la mensajería
instantánea, las redes son los medios más populares utilizados para el ciberacoso
(Livingstone, Haddon, Gör zig & Olafsson, 2011), ya sea a través de chat, me - diante la
publicación de mensajes ofensivos o creando páginas de grupos de odio. Además, también
se pueden utilizar para solicitar servicios sexuales, como se observa en el proceso de
captación de menores, donde un adulto con intenciones sexuales logra establecer una
relación con un menor a través de Internet (Choo, 2009). Por otra parte, los usuarios se
enfrentan a los riesgos de privacidad dada la gran cantidad de información personal que
publican en línea (Almansa, Fonseca & Castillo, 2013; Livingstone & al., 2011). Asimismo, el
29% de los adolescentes mantiene un per fil público o ignora la configuración de su
privacidad, y el 28% opta por una configuración parcialmente privada para que los amigos
de sus amigos pueden ver su perfil (Livingstone & al., 2011).

La tercera categoría de riesgos contiene los riesgos comerciales. Estos incluyen el uso
indebido de datos personales. La información se puede compartir con ter ceras empresas
mediante aplicaciones, del mismo modo que se puede realizar un seguimiento al
comportamiento del usuario para ofrecerle anuncios publicitarios y publicidad social
orientados a su perfil (De - batin, Lovejoy, Horn & Hughes, 2009). Todos estos riesgos
constituyen una amenaza, ya que hay estudios que indican que la exposición a los riesgos
en línea provoca daños y experiencias negativas en un número importante de casos
(Livingstone & al., 2011; Mcgivern & Noret, 2011). El acoso en Internet es visto como un
importante problema de sa lud pública, con los agresores haciendo frente a múltiples
problemas, entre ellos una mediocre relación pa dres-hijo, consumo de drogas y
delincuencia (Ybarra & Mitchell, 2004). Además, algunas teorías predicen que los
adolescentes son menos propensos a reconocer los riesgos y las futuras consecuencias de
sus decisiones (Lewis, 1981). Igualmente, se constató que tienen más dificultad para
controlar sus impulsos y poseen niveles más altos de búsqueda de emociones y
desinhibición que los adultos (Cauffman & Steinberg, 2000). Esto podría aumentar el riesgo
que asumen los adolescentes (Gru - ber, 2001), sobre todo porque pu blicar fotos e
intereses ayuda a crear y revelar la identidad del individuo (Hum & al., 2011; Lange, 2007;
Liu, 2007

file:///C:/Users/mx/Downloads/Dialnet-EnsenarALosAdolescentesLosRiesgosDeLasRedesS
ociale-4738222_1.pdf

Grooming

Es un conjunto de estrategias que una persona adulta desarrolla para ganar la confianza
del/la joven a través de internet , adquiriendo control y poder sobre él/ella, con el fin último
de abusar sexualmente de él/ella. Tiene distintas etapas:

1.​Amistad.​ El abusador se hace pasar por otr@ joven y se gana la confianza de la víctima,
seduciéndola y obteniendo así sus datos personales (¿Qué edad tienes?, ¿Con quién
vives?, ¿Cuál es tu dirección?, ¿Qué hacen tus padres?, ¿En qué colegio estás?).

2.​Engaño.​ El abusador finge estar enamorado de la víctima para conseguir que se desnude
y realice actos de naturaleza sexual frente a la webcam, o le envíe fotografías de igual tipo.

3.​Chantaje.​ El abusador manipula a la víctima amenazándol@ con que va a hacer público


el material sexual, si no continúa enviándoselo. Las repercusiones del grooming en la
víctima están asociadas a depresión, baja autoestima, desconfianza, cambios de humor
repentinos y bruscos, bajo rendimiento académico, aislamiento, alteraciones del sueño y de
la alimentación, ideas e intentos de suicidio

ciberbullying

La ciberviolencia o violencia virtual se refiere a la forma en que los medios de comunicación


(internet, telefonía móvil, sitios web y/o videojuegos online) pueden favorecer la violencia e
incluso ejercerla sobre distintos grupos de personas. Los niños y jóvenes vinculados al
fenómeno del matonaje escolar utilizan los medios de comunicación como otra forma de
ejercer violencia hacia sus pares, especialmente desde el anonimato. Suele ser una
extensión (virtual) del maltrato realizado presencialmente . Implica un daño recurrente y
repetitivo que tiene un impacto significativo en la o las víctimas.

Se puede manifestar de distintas formas: publicar en internet una imagen, video, “memes”,
datos privados y cualquier información que pueda perjudicar o avergonzar a alguien o
hacerse pasar por otra persona creando un perfil falso, ya sea para exponer aspectos
privados de ella o agredir a terceros, entre otros.
Es fundamental que los adolescentes que están expuestos a este fenómeno logren pedir
ayuda para poder generar un equipo de trabajo que ​investigue, detenga, sancione y
repare​ .

Las intervenciones deben estar dirigidas tanto a las víctimas como a los agresores y a las
familias involucradas.

Ciberbullying

La ciberviolencia o violencia virtual se refiere a la forma en que los medios de comunicación


(internet, telefonía móvil, sitios web y/o videojuegos online) pueden favorecer la violencia e
incluso ejercerla sobre distintos grupos de personas. Los niños y jóvenes vinculados al
fenómeno del matonaje escolar utilizan los medios de comunicación como otra forma de
ejercer violencia hacia sus pares, especialmente desde el anonimato. Suele ser una
 extensión (virtual) del maltrato realizado presencialmente 25​ ​ . Implica un daño recurrente y
repetitivo que tiene un impacto significativo en la o las víctimas.

Se puede manifestar de distintas formas: publicar en internet una imagen, video, “memes”,
datos privados y cualquier información que pueda perjudicar o avergonzar a alguien o
hacerse pasar por otra persona creando un perfil falso, ya sea para exponer aspectos
privados de ella o agredir a terceros, entre otros.

Es fundamental que los adolescentes que están expuestos a este fenómeno logren pedir
ayuda para poder generar un equipo de trabajo que ​investigue, detenga, sancione y
 repare​ 26​
​ .

Las intervenciones deben estar dirigidas tanto a las víctimas como a los agresores y a las
familias involucradas.

Sexting

Es una práctica que consiste en compartir imágenes de tipo sexual, personal o de otros, por
medio de teléfonos o internet. El riesgo, es que las imágenes sean publicadas y viralizadas
sin permiso. Con ello la intimidad queda expuesta a la mirada pública, con todas las
 consecuencias a corto y largo plazo de este hecho 24​
​ .

Ciberadicción o conducta adictiva a internet

Se define como un patrón de comportamiento caracterizado por la pérdida de control sobre


el uso de internet. Esta conducta conduce al aislamiento y al descuido de las relaciones
sociales, de las actividades académicas, de las actividades recreativas, de la salud y de la
higiene personal, Autores sugieren que algunos jóvenes (entre un 10- 15% del total de
usuarios) desarrollan conductas adictivas similares a la dependencia a sustancias. Se
generan fenómenos de abstinencia y tolerancia, sensación de pérdida de control y se
utilizan como método para escapar de la realidad. Involucra serias alteraciones sociales y
familiares.

Algunos indicadores de ciberadicción son:

•El tiempo de uso ha ido en aumento

•El rendimiento académico ha disminuido notablemente porque dedica demasiado tiempo a


estar conectado
•Manifiesta una gran irritabilidad cuando alguien l@ interrumpe

•Se ve ansios@, nervios@, deprimid@ o aburrid@ cuando no está conectad@ a internet

•Deja de reunirse con sus amig@s por estar frente a la pantalla

•Se queda hasta muy tarde en la noche navegando, chateando, entre otros

•Está pendiente a cada momento de sus mensajes y mira en forma obsesiva el doble check
del ​WhatsApp

•Revisa constantemente su teléfono celular para ver si ha llegado un mensaje y presenta


vibraciones fantasmas

ESTRATEGIAS DE SUPERVISIÓN Y CONTROL ADULTO

El 33,1% de los usuarios de redes sociales en Latinoamérica son jóvenes entre 15 y 24


años y el 48% del tiempo de navegación lo usan conectados a una red (ComScore, 2011,
en Solis y cols., 2011). Lo anterior se relaciona con la necesidad de los adolescentes y
jóvenes de sentirse partícipes de algo, de tener su propio sitio personal y de construir una
red de amigos (Ministerio de Educación de la Nación, Argentina, 2010). Se buscan
sentimientos de pertenencia y afiliación, información, identidad y valores, los que
determinan la forma de relacionarse en las redes. En este contexto se considera además, el
concepto de autoestima colectiva que surge como un elemento propio del conocimiento del
adolescente y/o joven, de su participación en un grupo en particular y del valor que
representa para él la pertenencia a un grupo (collective selfesteem). A estos deseos y
necesidades se une el desarrollo cerebral incompleto del adolescente, todo lo cual lo hace
vulnerable y lo predispone a conductas de riesgo.

A partir de ello es que resulta indispensable por parte de un adulto, cumplir con las
funciones de supervisión a través de las siguientes intervenciones:

•Bajar el tiempo de uso de redes sociales y de objetos tecnológicos al mínimo (una o dos
horas por día)

•Ser modelos de un adecuado uso de las herramientas que proporciona internet

•Definir en familia espacios libres de aparatos electrónicos

•Educar en mecanismos de autorregulación, ayudando a equilibrar las actividades online


con las actividades offline. Es importante estimular actividades que no involucren pantallas y
que fomenten la comunicación directa y sin mediatizadores electrónicos

•Hablar con el/la adolescente sobre el uso de internet, mostrándole que se confía en sus
criterios y en su “no ingenuidad”; que se tiene interés por lo que hace; y que se respeta su
conocimiento sobre la tecnología. No hay que olvidar los dos puntos fundamentales en la
relación: el diálogo y la negociación, evitando acceder con una actitud desconfiada y
controladora para llegar a un acuerdo de uso seguro

•Trabajar en la comprensión de las consecuencias de lo que se hace y/o se dice en la web

•Instruirse en el uso de internet en general y en el de todas las redes sociales en particular,


conociendo la jerga que se utiliza en ellas, como requisito de la parentalidad moderna
•Recibir y pagar las cuentas de los celulares de los hijos, con el objetivo de tener la
información de uso. Así los adolescentes serán más cuidadosos

•Crear una lista de reglas (sitios a los que puede acceder, tiempos de uso, horarios,
contenidos). Los celulares en la noche se deben cargar fuera de la pieza

•Ubicar los computadores en lugares comunes (salas de estar)

•Instalar herramientas de filtros de contenido (programas diseñados para controlar qué


contenidos se permiten mostrar en la web), actualizándolos periódicamente. Esto, además
de la supervisión

Controlar el historial de las páginas que se han usado en el computador (si se ha vaciado el
fichero, probablemente es por alguna razón). Los adolescentes deben saber que el historial
del computador será verificado frecuentemente. Si sabe que lo están controlando, se va a
controlar solo. Asegurarse de que no haya contactos desconocidos en el email y en la
mensajería instantánea

•Desconectar wifi en la noche

•Averiguar si en el colegio existe supervisión y programas de filtro de internet

•Explicar a los hijos que la información contenida en celulares y computadores y otros


dispositivos puede ser vista y mal usada si son robados o perdidos. Es importante
transmitirles que es mejor no guardar imágenes o información comprometedora

•Si un adolescente tiene acceso a una página que no es aceptable, es importante que los
padres no reaccionen de forma exagerada. Para resolver la situación, resulta necesario
conversar sobre cómo se encontró la página y el tipo de información que se estaba
buscando.

•Educar respecto a los riesgos asociados al uso de las redes sociales

•Ser consistentes con las consecuencias de un mal uso de las redes sociales

•Frente a la transgresión de las normas establecidas pueden establecerse sanciones


consistentes y aplicables. Uno de los principales temores de los adolescentes es perder la
conectividad

•Estar alertas a cualquier variación significativa en el comportamiento físico, cognitivo,


emocional y social del adolescente

MEDIDAS DE PREVENCIÓN DE LOS USUARIOS

Algunas medidas que nos pueden ayudar para el mejor manejo de las redes sociales son
las siguientes:

1. Ordenar los contactos en grupos distintos. Separarlos por conocidos, familia, amigos,
escuela, etc. Y así, cuando las listas ​estén armadas, el usuario puede decidir quién puede
ver qué cosas.
2. Decidir que se permite ver. Configurar la lista de manera de determinar quién podrá ver la
información que se sube a la red social. Hay datos que solo podrán ver los familiares, otros
los amigos y los menos privados, los que no comprometen, los conocidos.

3. Dirección y Teléfono. Lo ideal, dicen los especialistas, es no subir a una red social la
dirección ni el número de teléfono. Para aquellos que aun así, prefieren hacerlo, lo mejor es
que seleccionen cuidadosamente quiénes podrán ver estos datos.

4. No estar siempre disponible. No es necesario –y a veces no es conveniente- estar


siempre disponible en una red social. El usuario puede configurar su página para que solo
los amigos, o solo los familiares puedan encontrarlo. Y de esta manera evitar a los menos
conocidos.

5. Informarse. Leer y utilizar las opciones de privacidad de las redes sociales permitirá crear
un ambiente seguro para poder utilizar las redes sociales de manera plena pero sin riesgo.

6. No aceptar a todos los que te envíen invitación: si no conoces a las personas no las
agregues.

7. No publiques el lugar donde te encuentras: ya que esto puede ocasionar asaltos a


viviendas o secuestros.

No dar demasiada información personal, no subir fotos privadas ni de otras personas sin su
consentimiento son acciones básicas que se pueden tomar. Las redes sociales han
brindado herramientas para expresarse a los jóvenes es su responsabilidad su uso. El
deber de los mayores es orientar en la medida de lo posible sobre medidas que pueden
ayudarles a no exponerse a riesgos.

REFERENCIAS:

● https://www.rdstation.com/es/redes-sociales/
● https://concepto.de/redes-sociales/#ixzz5kA0LJ1iW
● https://concepto.de/redes-sociales/
● https://sites.google.com/site/redessocialesamigasoenemigas/medidas-de-prevencion
-para-el-uso-de-la-redes-sociales
● https://www.sciencedirect.com/science/article/pii/S0716864015000048

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