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¡Estamos completos en Cristo!

Para utilizar el poder de Dios, para vivir la vida más abundante que Jesucristo hizo disponible,
nosotros debemos confesar y actuar en La Palabra de Dios. Esto incluye creer la verdad de que
estamos completos en Cristo.
Debido a que Dios ha hecho a cada creyente renacido, completo en Cristo, entonces estamos
completos, y no le permitimos a nadie que nos persuada de lo contrario.
Yo tenía a un almacenista que estaba haciendo un buen trabajo para mí en un almacén de
muebles, yo le había dado acceso extra a nuestro sistema de computación para que hiciera cosas
que estaban por encima de sus responsabilidades normales, permitiéndole actualizar los precios
de los productos, y yo le enseñé cómo hacerlo. Una semana después, me enteré de que estaba
permitiéndole a un experto que estableciera los precios por El.
Cuando yo le pregunté ¿Por qué había hecho eso?, él respondió que un vendedor veterano le
había dicho que se podía meter en problemas si él cometía un error. Aún y a pesar de que yo
como su supervisor le había dado todo lo que necesitaba para hacer el trabajo, (el acceso, la
autoridad, y el entrenamiento), el permitió que lo persuadieran de que él no podía hacerlo.
Lo mismo le puede suceder a los cristianos en su andar con Dios, su Padre Celestial. Nosotros
tenemos total autoridad y acceso a Dios, tenemos todo lo que necesitamos para vivir la vida
más abundante que Él nos llamó a vivir, pero si alguno de nosotros es persuadido de lo contrario,
si quizás es convencido de que no es lo suficientemente bueno, o tiene miedo de fallar, esa
persona estará lejos de vivir la vida de "más que vencedor" a la que Dios lo ha llamado (Romanos
8:37)

De nuevo, debido a que Dios nos ha hecho completos en Cristo, nosotros estamos completos,
no le permitimos a nadie que nos convenza de lo contrario.

La Palabra de Dios enfáticamente declara nuestra condición de completos en Cristo.

Colosenses 2:9, 10
Porque en él habita corporalmente toda la plenitud de la Deidad,
Y vosotros estáis completos en él, que es la cabeza de todo principado y potestad.

Allí lo dice claramente, pero la palabra en español "completo" en el versículo 10, apenas
comienza a comunicar la profundidad de esta verdad. El idioma arameo expresa el significado
mucho más claramente. Existen cuatro formas gramaticales diferentes para expresar la
intensidad de un verbo en el idioma arameo. El español no tiene una forma equivalente al cuarto
nivel del arameo.

Aún en el arameo, la conjugación del cuarto nivel es rara. La primera conjugación es llamada
"peal" en arameo Estranguelo, y es igual a una forma simple en el español. El siguiente nivel de
intensidad es "pael" en arameo Estranguelo, lo cual sería una forma intensiva en el español, el
tercero es "aphel", o lo cual sería una forma extensiva en español.

Para mostrar alguna comparación con el español, utilizaremos el verbo pasivo "estar completo",
la forma intensiva mostraría un estar completo más intenso ("estar completamente
completo"), la forma extensiva indica aún más intensidad ("completamente y absolutamente
completo"), la cuarta y más intensa forma en arameo (shaphel), ocurre solamente un puñado
de veces en la Biblia. Esta sería una forma extra extensiva en el español.
Una forma para indicar en el español el nivel de intensidad de nuestra condición de completos
sería: "estamos completamente, completamente, absolutamente completos"
Así que, Dios nos está diciendo en la forma gramatical más enfática y raramente usada, cuan
completos estamos en Cristo. Nosotros no solamente estamos completos, no solamente
estamos completamente completos, ni siquiera estamos completamente, completamente
completos. No, Dios dice que nosotros estamos "completamente, completamente,
absolutamente completos en Cristo"

No hay categoría de nuestras vidas para la cual Dios no haya provisto todo lo que necesitemos.
¿Perdón?, Estamos completos (1 Juan 1:9)
¿Autoridad?, Estamos completos (Efesios 3:12), ¿salud?, Estamos completos (1 Pedro 2:24)

1 Corintios 1:30
Más por él estáis vosotros en Cristo Jesús, el cual nos ha sido hecho por Dios sabiduría,
justificación, santificación y redención;

Usted póngale nombre, Dios ha cubierto todo por medio de Jesucristo Nuestro Señor.

Volvamos al ejemplo del almacenista que trabajaba para mí, él tenía todos los recursos
necesarios para hacer su trabajo; acceso, entrenamiento y toda mi autorización. Pero alguien lo
persuadió de lo contrario, el olvidó que yo le había dado la libertad y la autoridad para hacer la
tarea, él estuvo muy feliz de hacerlo cuando yo le recordé todo eso.

Nosotros podemos creer que nosotros tenemos lo que La Palabra de Dios dice que tenemos, y
que podemos manifestar lo que es legalmente nuestro como hijos de Dios. Por ejemplo, Dios
nos ha dado acceso completo a su corazón, tenemos completa autoridad para hablar su palabra
de liberación, tenemos todo el poder que necesitamos para llevar a cabo nuestro llamamiento
como sus hijos y como sus embajadores (2 corintios 5:20)

Dios no nos dice esto en términos vacilantes, no nos falta nada.


Colosenses 2:9,10
Porque en él habita corporalmente toda la plenitud de la Deidad,
Y vosotros estáis completos en él, que es la cabeza de todo principado y potestad.

Confesemos y practiquemos la verdad de que nuestro Padre Celestial de verdad nos ha dado la
libertad, el poder, los recursos y la autoridad para vivir la vida más abundante a la cual él nos ha
llamado (Juan 10:10).

Sin duda alguna nosotros estamos "completamente, completamente, absolutamente


completos en Cristo."

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