Documentos de Académico
Documentos de Profesional
Documentos de Cultura
Etimológicamente
El término “cultura” originalmente significaba la cultivación del alma o la mente hasta que
en el siglo XVIII empezó a tomar distintos significados en los escritos de distintos
pensadores alemanes, además de esto, existe un contraste entre “cultura” y “civilización”
que son dos significados primarios de cultura que surgen en este período: cultura como un
espíritu folclórico con una identidad única, y cultura como la cultivación de la
espiritualidad o la individualidad libre, donde el primer concepto se adapta a nuestro uso
actual del término “cultura” y el segundo significado juega un rol importante en lo que
debería ser o lograr ser la cultura, como expresión plena del ser único y autentico.
Cultura y civilización
La cultura se entendió como sinónimo de la civilización (significaba la refinación de las
costumbres), la civilización no es un proceso terminado, es constante, e implica el
perfeccionamiento progresivo de las leyes, las formas de gobierno, el conocimiento y tal
como la cultura, también es un proceso universal que incluye a todos los pueblos, incluso
a los más atrasados en la línea de la evolución social. En los albores del siglo xix, ambos
términos, cultura y civilización eran empleados casi de modo indistinto, sobre todo en
francés e inglés (Thompson, 2002: 186).
Definiciones marxistas
La gran aportación del marxismo en el análisis de la cultura es que esta es entendida como
el producto de las relaciones de producción, como un fenómeno que no está desligado del
modo de producción de una sociedad y de igual manera la considera como uno de los
medios por los cuales se reproducen las relaciones sociales de producción, que permiten
la permanencia en el tiempo de las condiciones de desigualdad entre las clases.
Evolución cultural
Esta definición, atiende a la característica principal de la cultura, que es una obra
estrictamente de creación humana, a diferencia de los procesos que realiza la naturaleza,
por ejemplo, el movimiento de la tierra, las estaciones del año, los ritos de apareamiento
de las especies, Exactamente lo contrario ocurren en el caso de las obras, ideas y actos
humanos, ya que estos transforman o se agregan a la naturaleza, por ejemplo, el diseño
de una casa, la receta de un dulce de miel o de chocolate son cultura y sin la creación
humana no existirían por obra de la naturaleza.
En 1998, Jesús Mosterín publicó su libro ¡Vivan los animales!, donde explica qué es la
cultura
La cultura no es un fenómeno exclusivamente humano, sino que está bien documentada
en muchas especies de animales superiores no humanos. Y el criterio para decidir hasta
qué punto cierta pauta de comportamiento es natural o cultural no tiene nada que ver
con el nivel de complejidad o de importancia de dicha conducta, sino sólo con el modo
como se trasmite la información pertinente a su ejecución
Industria cultural
La industria cultural la define la UNESCO como aquella que produce y distribuye bienes o
servicios culturales que, «considerados desde el punto de vista de su calidad, utilización o
finalidad específicas, encarnan o transmiten expresiones culturales, independientemente
del valor comercial que puedan tener. Las actividades culturales pueden constituir una
finalidad de por sí, o contribuir a la producción de bienes y servicios culturales»
Socialización de la cultura
La importante aportación de la psicología humanista de, por ejemplo, Erik Erikson con una
teoría psicosocial para explicar los componentes socioculturales del desarrollo personal.
Cada miembro de la especie podría acceder a ella desde una fuente común, sin limitarse,
ejemplo de ello: el conocimiento transmitido por los padres ha de resultar universalmente
compartible por todos aquellos que poseen un lenguaje racional y significativo.
Así, entonces el ser humano tiene la facultad de enseñar al animal, desde el momento en
que es capaz de entender su rudimentario aparato de gestos y sonidos, llevando a cabo
nuevos actos de comunicación; pero los animales no pueden hacer algo parecido con
nosotros. De ellos podemos aprender por la observación, como objetos, pero no mediante
el intercambio cultural, es decir, como sujetos