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Lucas 13:6-9
6
Dijo también esta parábola: Tenía un hombre una higuera plantada en su viña, y vino a
buscar fruto en ella, y no lo halló. 7 Y dijo al viñador: He aquí, hace tres años que vengo
a buscar fruto en esta higuera, y no lo hallo; córtala; ¿para qué inutiliza también la
tierra? 8 Él entonces, respondiendo, le dijo: Señor, déjala todavía este año, hasta que yo
cave alrededor de ella, y la abone. 9 Y si diere fruto, bien; y si no, la cortarás después.
Mateo 5:16
16
Así alumbre vuestra luz delante de los hombres, para que vean vuestras buenas
obras, y glorifiquen a vuestro Padre que está en los cielos.
La decepción viene cuando algo no da fruto cuando las cosas no salen bien o no logramos lo
que queremos.
Dios busca el fruto de las semillas que el sembró. Porque Dios puso una semilla en nosotros y
el pregunta hoy donde esta este fruto (hablamos de talentos, dones) porque Dios a nosotros
nos dio la semilla del crecimiento debemos salir y predicar sin tratar de ser como otros porque
la gracia que Dios coloca en nosotros no la coloca en nadie más.
Todos los arboles crecen pero solo el de la higuera no daba fruto, Dios nos a colocado en tierra
fértil porque el terreno el barrio la familia el trabajo el ministerio donde Dios te ha puesto ahí
vas a dar fruto porque es una tierra fértil.
El árbol que no crece debe ser cortado porque si algo no da fruto debe ser cortado. Por eso
hay que vencer los malos pensamientos porque es ahí donde se gestan las decepciones pero la
decepción se vence con decisión y la decisión me lleva a mí a tener más compromiso, hay
muchas cosas en la vida que nos pueden hacer sentir fracasado por lo que alcanzamos o no
alcanzamos y esto puede ser en nuestra área sentimental, perdida de un familiar logros
ministeriales pero todas estas barreras se vencen tomando decisiones que nos llevan a
mayores compromisos y desafíos que alcanzar.
No sé en qué áreas te has sentido fracasado pero hay un poder en Dios cuando tomamos la
decisión de decirle a Dios dame una segunda oportunidad de encontrar el propósito que tú
tienes para mí. Este sembrador le pide un año más para abonar la tierra y esto tiene unos
pasos y lo primero es:
1. Cavar alrededor de ella. ( y las fuertes aguas no acabaran el árbol que da fruto a su
tiempo)
Debes cavar en tu vida y rodearte del agua de vida llenarte del espíritu
El enemigo dice es que uses el hacha para cortar y dejar todo ahí pero Dios nos dice
que debemos usar la pala que es la palabra de Dios y cavar porque Dios nos da otra
oportunidad.
2. Abonar la tierra.
El abono esta echo de un material que no huele bien
Y en nuestra vida van a ver circunstancias que no van a estar bien pero Dios nos dará
la victoria
Por eso no debe estar la mirada en las ramas debemos colocar nuestra mirada en la
raíz porque la decepción se rompe de raíz.
Nosotros colocamos la semilla para las generaciones que vienen detrás de nosotros.
y te digo hoy Dios te dice que en los próximos 365 días Dios va a cumplir en ti el propósito que
hay para tu vida.