DE LA BELLEZA A LA POBREZA, LA DESGRACIA DE

JUANA.
Esta es la historia de una Srta. que pasó de ser la mujer más privilegiada a la
Sra. que solo vendía leche.

Juana Các., era una mujer muy hermosa, tanto así que la consideraban la
mujer más hermosa del país; era una mujer muy dedicada al estudio, que
pasaba qd. en la Bibl. de la U, que practicaba Deps., y se levantaba desde las
5:00 a.m. para tener el tiempo suficiente para hacer todo el sin núm. de cosas
que hacía y así poder ir a dormir a las 9:00 p.m.; con tanta “dedicación” Juana
ganó muchos títulos como Abg., Lic., Arq., Ing., e incluso Dra., que le
permitieron hacer parte de organizaciones, empresas, instituciones, etc.,
mundiales muy reconocidas e importantes como FECODE, DANE, UNESCO,
DIAN, e I.C.F.E.S.

Realmente era una mujer de admirar porque con todas sus virtudes, como la
de ser la mujer más hermosa, admirada y deseada; oportunidades, como p.
ej., ser la única heredera de lo que dejó su padre quien para ese entonces era
el Pdte. de Colombia y que nunca le concedió el deseo de tener hnos., porque
luego de que su madre falleciera el día en que ella nació, él decide quitarse la
vida; y demás, logró conocer la U.E. y mín. 3 idiomas aprendió a hablar.

Seguir contando de cómo fue su juventud y c/u de sus logros tomaría mucho
tiempo y ese no es el punto importante de la historia.

Lo que sí importa es lo que sucedió cuando Juana pasó de ser una toda una
Srta. a ser toda una Sra., resulta que Juana no sabía que lo que realmente le
había permitido en juventud ser tan exitosa fue su belleza, una belleza que al
cumplir 40 años desaparecería por completo, ¿Por qué? Nunca se supo,
únicamente el día de su cumpleaños N° 40 despertó con el rostro más feo que
pudiera existir. Y desde allí todo cambió, y ya nada estaba a/f de ella.

Como Juana era tan bella, todo mundo demandaba por ella, todas las
empresas, organizaciones e instituciones y tb. universidades, la aceptaban
para que su imagen fuera más reconocida, para que atrajera gente, clientes y
todo lo que les conviniera. Pero cuando despertó se convirtió en una desc. y ya
no era recibida en ningún puesto de trabajo, las personas no le creían cuando
ella les decía quién era, mostraba sus papeles, como la CC., y lo único que le
decían era que la de la fotogr. era muy bonita para ser ella, y tb. por esta razón
no podía salir siquiera del Dpto. para dirigirse a otro país.

Le empezaron a negar sus ingresos, lo que quedaba de su herencia y se vio

obligada a vender todo lo que tenía, incluyendo s. c., dejando de consuelo tres
cosas, una fotogr. de cuando formó parte de la NBA, otra de cuando conoció al
equipo que conformaba la F.I.F.A, y por último una US.B. que contenía todo lo
que la belleza le permitió hacer, y este al parecer era su mejor rdo.

Con el dinero que Juana recibió, después de varios intentos, le vendieron una
humilde casa a las afueras de la ciudad de Btá., con algunos animales que le
proporcionaban alimentos con los cuales subsistía y que vendía en la cl.
cuando la gente le compraba luego de verla ya en la máx. desgracia y pobreza.

Juana pasó allí sus últimos años de vida triste y sola; murió de tristeza una
noche mientras veía sus recuerdos, y fue encontrada gracias a la curiosidad de
un vecino que se le extrañó el silencio de la casa ya que siempre que la
rondaba la escuchaba llorar.