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Diseño y operación de zoocriaderos abiertos de babas (Caiman crocodilus

crocodilus) en Venezuela. Design and operation of spectacled caiman (Caiman
crocodilus crocodilus) farms in...

Article · January 1996

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Enrique O Martinez Moreno

Ingeoambiente
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ZOOCRIADEROS Recibido: 12-04-96
Vol. 1 Nº 2 Art. 3 pp. 11-20, 1996 Aceptado: 21-07-96
DISEÑO Y OPERACIÓN DE ZOOCRIADEROS DE BABAS EN VENEZUELA
ISSN 0798-7811 Publicado: 30-08-96
D.L. pp 92-0341 © 1996 CIRES

DISEÑO Y OPERACIÓN
DE ZOOCRIADEROS ABIERTOS DE BABAS
(Caiman crocodilus crocodilus)
EN VENEZUELA
Enrique O. MARTÍNEZ M.
Centro de Investigación y Reproducción
de Especies Silvestres [CIRES]
Apartado Postal 397 Mérida 5101
VENEZUELA

RESUMEN
La cría comercial de cocodrilos es una alternativa económica viable que cumple a su vez con la
conservación de especies amenazadas o susceptibles de estarlo si no se lleva a cabo un manejo racional
de las mismas. En Venezuela en 1990 se estableció la cría comercial de la baba (Caiman crocodilus),
con la finalidad de sustituir la explotación de las poblaciones silvestres que ha venido disminuyendo
hasta el presente. El sistema de cría adoptado es el de zoocriaderos abiertos, en los cuales se incuban
huevos provenientes de nidos ubicados en medio silvestre a una temperatura de 31 °C. Una vez salidos
del huevo, los neonatos son colocados en estanques divididos en zonas secas y húmedas a 31 °C, y
mantenidos con una dieta de proteína animal hasta alcanzar el primer año de edad. En Venezuela la
actividad de los zoocriaderos está bajo la supervisión del Servicio Autónomo PROFAUNA dependiente
del Ministerio del Ambiente y de los Recursos Naturales Renovables.
Palabras Clave: Alimentación, Aspectos Sanitarios, Baba (Caiman crocodilus), Cría de Cocodrilos,
Comercial, Conservación, Estanques, Huevos, Incubación, Zoocriaderos,
(MARNR), Neonatos, Nidos, PROFAUNA, Venezuela.

DESIGN AND OPERATION OF SPECTACLED CAIMAN

(Caiman crocodilus crocodilus)
FARMS IN VENEZUELA
ABSTRACT
Commercial crocodile farming is a feasible economical alternative, that in time helps the
conservation of endangered species or susceptive of being, if there isn't a sound management of
their populations. In Venezuela in 1990 caiman (Caiman crocodilus) farming was established in
order to replace the diminishing hunting of wild populations. The rearing system adopted is open
farms or ranchs, where the eggs coming from nests located in the wilderness, are incubated at a
temperature of 31 °C. The nestlings are placed in pens divided in dry and wet zones at 31 °C, and
feeded with an animal protein diet until they reach their first year. In Venezuela, the activity of
caiman farms is controlled by Autonomous Service PROFAUNA depending on Ministry of
Environment and Natural Renewable Resources (MARNR).
Key Words: Commercial, Conservation, Crocodiles, Crocodile farms, Eggs, Feeding, Health,
Incubation, MARNR, Nestlings, Nests, Pens, PROFAUNA, Rearing Spectacled
caiman (Caiman crocodilus), Venezuela.

11
 ENRIQUE O. MARTÍNEZ M.
INTRODUCCIÓN
Desde el año 1987, varios hatos ganaderos
agremiados bajo la Asociación para la Cría y
Conservación de la Baba, Asobaba, han venido
desarrollando un programa experimental de
zoocriaderos de Caiman crocodilus crocodilus, cuyo
objetivo inicial era la repoblación de áreas sometidas
a la aplicación del programa de aprovechamiento de
las poblaciones naturales de esta especie (Espinoza,
1988). Esta actividad fue reconocida por el Ministerio
del Ambiente y de los Recursos Naturales Renovables
en la Resolución N° 60 del 12-IX-88. Sin embargo,
después de varias experiencias infructuosas de
liberación de los animales nacidos en cautiverio
(Espinoza, 1989 a), se evidenció la necesidad de
definir los objetivos de los zoocriaderos hacia una
actividad comercial directa y no dedicada
exclusivamente a la conservación de la especie. Esta
situación vino a resolverse con la Resolución N° 79
del 14-VI-90, la cual permitió el establecimiento de
los primeros zoocriaderos comerciales de esta especie
(Martínez et al., 1990). Actualmente la Resolución
N° 260 del 18-XI-94 establece una normativa gene-
ral que regula el establecimiento y la actividad de los
zoocriaderos de diferentes especies de la fauna
silvestre en general, con lo cual se percibe un cambio
de actitud positivo hacia el manejo sostenible por
parte de los usuarios y los administradores de los
recursos naturales renovables.
ZOOCRIADEROS DE COCODRILOS
EN EL MUNDO
Los cocodrilos se han venido explotando en forma
intensiva para comercializar sus pieles, dados los
elevados precios obtenidos en el mercado. Hasta hace
poco tiempo, la demanda de pieles se sostenía
exclusivamente en la cacería de poblaciones silvestres,
y sólo recientemente es que la actividad de cría en
cautiverio se ha venido incrementando notablemente,
combinando la actividad comercial junto con la
conservación de especies amenazadas o en peligro de
extinción (Da Silva, 1989; Rodríguez, 1989 a).
Los primeros zoocriaderos de estos reptiles estaban
destinados solamente a la exhibición de los animales al
estilo de un parque zoológico (Luxmore et al, 1986).
No obstante, la cría para la producción de pieles y carne
se ha venido incrementado, pudiéndose contar para la
década de los ochenta alrededor de 50 países dedicados
a esta actividad.
12
Existen tres tipos de zoocriaderos, los abiertos, los
cerrados, y los mixtos.mejor conocidos como granjas
turismo (Luxmore et al., 1985). Los zoocriaderos
abiertos o ranchos, son aquellos en donde parte del ciclo
de vida de la especie criada tiene lugar en ambientes
naturales; ya sea por la recolección de huevos o captura
de ejemplares recién nacidos.
Los zoocriaderos cerrados, también conocidos
como granjas, funcionan con base en la reproducción
en cautiverio de los individuos a ser comercializados.
No obstante, aún cuando la reproducción en cautiverio
de los cocodrilos es más costosa y compleja en lo que
concierne al mantenimiento del plantel reproductor,
se ha observado una tendencia a la conversión de los
zoocriaderos abiertos en granjas, los cuales pueden
tener ingresos adicionales por concepto de turismo
(Luxmore et al., 1985).
Finalmente, los zoocriaderos mixtos se caracterizan por
adoptar las dos modalidades anteriores.
EXPLOTACIÓN COMERCIAL DE LA
BABA EN VENEZUELA
La baba ha estado sujeta a la explotación
comercial desde los años 60 y se calcula que a
partir de esa época y hasta la declaración de veda
fueron sacrificados cerca de 3.000.000 de
ejemplares (Medem, 1983). Posteriormente, a
partir de 1982 se inició el Programa de
Aprovechamiento de la Baba, el cuál ha estado
sometido a continuas revisiones y mejoras, al
tiempo que se apoya en una base científica
creciente (Cartaya, 1988), la cual superaba la cifra
de 130 artículos para finales de los ochenta
(Rivero & Parra, 1989). De hecho, se hace
necesario reconocer que a pesar de las
controversias de tipo conservacionista, que
Venezuela es la mayor fuente de pieles legales de
cocodrilos en el mundo, y que para esa época llegó
a poseer una cuota de exportación anual asignada
por la Convención Internacional sobre el
Comercio de Especies de Fauna y Flora
Amenazadas, CITES, de 150.000 ejemplares
correspondiente a un 10 % de la demanda mundial
(Gorzula, 1989). Actualmente, las cuotas de
explotación no sobrepasan cuando mucho los
30.000 ejemplares al año, debido a contracciones
del mercado y por estimaciones más precisas de
las poblaciones existentes realizadas a partir de
1991 (Szeplaki, comunicación personal).
 DISEÑO Y OPERACIÓN DE ZOOCRIADEROS DE BABAS EN VENEZUELA
CRÍA EN CAUTIVERIO DE
COCODRILOS EN VENEZUELA
Las primeras experiencias de reproducción en
cautiverio y de recolección e incubación artificial
de huevos de cocodrilos se remontan a los inicios
de la década de los setenta; algunas dedicadas
exclusivamente a la preservación de algunas
especies en peligro como los caimanes de la Costa
y del Orinoco, Crocodylus acutus y C. intermedius
respectivamente (Blohm, 1973) y otras teniendo en
consideración el aprovechamiento comercial de un
recurso que se “desperdicia” en condiciones
naturales (Rivero, 1974). A partir de entonces, se
comenzó a considerar la cría en cautiverio de la baba
como alternativa para fomentar a las poblaciones
naturales sometidas a explotación (MARNR, 1982;
Thorbjarnarson y Blohm, 1986: Ayarzagüena et al.,
1988; Rivero, 1989). Paralelamente, se efectuaron
investigaciones para evaluar la incubación artificial
de los huevos y el crecimiento en cautiverio de la
baba (Rodríguez, 1984; Romero, 1984), las cuales
sentaron las bases para el establecimiento de
zoocriaderos experimentales de esta especie
(Espinoza, 1988, 1989 b; Rivero, 1989).
Para el año 1991 existían 21 zoocriaderos
comerciales registrados mixtos (Baquero & Quero,
1996), de los cuales hay uno sólo en funcionamiento
dedicado a la producción de pieles y a la venta de
juveniles como mascotas en el mercado
internacional. Este zoocriadero, con una capacidad
de 20.000 animales, pertenece a una importante
empresa algodonera y está ubicado en Puerto
Miranda, Estado Guárico (Omar Hernández, com.
pers.). Esta empresa también ha desarrollado un
programa experimental de zoocriaderos de anaconda
o culebra de agua ( Eunectes murinus gigas)
conjuntamnete con PROFAUNA, y actualmente está
esperando por la aprobación de un zoocriadero
comercial de morrocoyes o tortugas terrestres
(Geochelone carbonaria), destinados al mercado de
mascotas. Es necesario señalar que el cierre de
varios zoocriaderos se debió a que iniciaron
operaciones antes de la legalización de la actividad,
de modo que no cumplían con los requisitos
establecidos en la resolución N° 79 (Baquero &
Quero, 1996) y que los mismos tenían capacidades
de operación inferiores a los 20.000 especímenes,
cifra a partir de la cual la cría de esta especie se
hace rentable (Omar Hernández, com. pers.).
13
DISEÑO Y OPERACIÓN DE LOS
ZOOCRIADEROS EN VENEZUELA
OBJETIVOS DE LOS ZOOCRIADEROS
DE BABAS
1. Garantizar una producción comercial sostenida de la
baba, Caiman crocodilus crocodilus, en condiciones
de cautiverio.
2. Garantizar el manejo adecuado del recurso en términos
de la conservación de las condiciones ecológicas de
la especie.
3. Utilización del zoocriadero para programas de
investigación y desarrollo, turismo ecológico y
educación ambiental.
BASES CONCEPTUALES
Los zoocriaderos abiertos de babas fueron concebidos
como una adaptación de los establecimientos que operan
en los Estados Unidos con Alligator mississippiensis
(FGFWFC, 1989) y Colombia con C. c. fuscus
(Rodríguez, 1989 b), en las cuales se introdujeron
modificaciones propias de los diseñadores (Espinoza,
1989 b; Szeplaki, 1989; Báez & Michelangeli, 1990;
Martínez & Szeplaki, 1990), y se escogió el método de
operación abierto por la abundancia de la materia prima
bajo la forma de nidos. Adicionalmente se ha tomado en
cuenta la información existente sobre los siguientes
tópicos:
1. Información general sobre zoocriaderos de cocodrilos
(NRC, 1983; Hutton, 1989).
2. Localización de nidos (Rivero, 1974; Staton y Dixon,
1977; Ayarzagüena, 1983; Johnson et al., 1988).
3. Incubación de los huevos (Joanen & Mc. Nease, 1977,
1981, 1987, 1989; Ferguson & Joanen, 1983; Romero,
1984; Joanen et al., 1987; Foggin et al., 1988).
4. Mantenimiento de neonatos y juveniles (Joanen & Mc.
Nease, 1976, 1977, 1987, 1989).
5. Enfermedades (Chiriví-Gallego, 1973; Soifer, 1978;
Wallach, 1978; Foggin et al., 1988; Jacobson, 1989).
6. Comportamiento (Staton & Dixon, 1975; Marcellini,
1979; Ayarzagüena, 1983).
7. Estimación de poblaciones (Seijas, 1986; Velasco et
al., 1989).
8. Manejo y conservación (Muñoz, 1988; Gorzula &
Seijas, 1989).
 ENRIQUE O. MARTÍNEZ M.

ELABORACIÓN DEL PROYECTO BIOLOGÍA DE LA BABA

Actualmente el MARNR a través del Servicio La baba, babilla o caimán de anteojos, es el cocodrilo
Autónomo PROFAUNA, es la entidad que regula el de distribución más amplia y mayor abundancia en
establecimiento y la actividad de los zoocriaderos de Venezuela. La clasificación taxonómica de la baba
diferentes especies, incluyendo a la baba (Baquero et corresponde a la siguiente:
al., 1996). Estas regulaciones incluyen la presentación
Phylum Vertebrata
de un proyecto avalado por un profesional acreditado,
Clase Reptilia
conjuntamente con una serie de soportes legales y
Orden Crocodylia
técnicos, en donde se busca garantizar la protección
Familia Alligatoridae
de las poblaciones naturales conjuntamente con la
Género Caiman
viabilidad económica del zoocriadero (Baquero &
Especie Caiman crocodilus
Quero, 1996).
El proyecto a ser presentado ante PROFAUNA para
Hasta el presente se han identificado dos subespecies
obtener la licencia de instalación y funcionamiento estará
en el país: Caiman c. crocodilus y C.c.fuscus. La primera
constituido por lo siguientes aspectos:
habita en las sabanas inundables de la cuenca del río
1. Título, Autor y Fecha Orinoco, y en algunas cuencas que drenan hacia el mar
Caribe y océano Atlántico, ubicadas en los estados
2. Diagnóstico
Miranda, Anzoátegui, Sucre, Monagas y Delta Amacuro.
2.1. Datos e información general del predio o lugar Por su parte, la segunda subespecie se encuentra
de ubicación del zoocriadero restringida a las cuencas que drenan hacia el Caribe y el
lago de Maracaibo, en los estados Zulia, Falcón y Yaracuy
3. Plan de Inversiones
(Medem, 1983). Es muy probable, sin embargo, que las
3.1. Costos estimados dos subespecies pudieran coincidir en determinadas
3.2. Cronograma de inversiones cuencas ubicadas en los estados Yaracuy, Carabobo,
3.3. Recursos económicos Aragua y el Distrito Federal.
4. Planificación La baba del Llano, C.c.crocodilus es un cocodrilo de
talla mediana (1,2 a 2,2 m de longitud), cuya biología
4.1. Introducción
4.2. Objetivos y metas está estrechamente ligada al ciclo hidrológico de los
4.3. Funcionamiento del zoocriadero ambientes que ocupa. Su dieta está constituida
fundamentalmente por peces e invertebrados,
5. Patrón Tecnológico particularmente guabinas (Hoplias malabaricus), curitos
5.1. Diseño de instalaciones (Hoplosternum littorale) y los camarones del género
5.2. Equipos Macrobrachium (Seijas & Ramos, 1980), aunque también
5.3. Manejo del zoocriadero se alimentan de caracoles y cangrejos de los géneros
5.4. Personal Pomacea y Dilocarcinus (Castroviejo et al., 1976),
5.5. Índices técnicos de los animales anfibios (Gorzula, 1978), reptiles, mamíferos y aves
(Chiriví-Gallego, 1973). Fitzgerald (1988) informa de una
6. Análisis Financiero variación en la dieta del animal a medida que este se va
6.1. Volumen y valor de la producción desarrollando, comenzando con insectos (Coleoptera -
6.2. Costos de producción Hydrophiliidae) en su primer año de vida, y
6.3. Relación Ingresos-Egresos o flujo de fondo posteriormente dirige sus preferencias hacia animales de
tallas mayores. Aún así, se ha concluido que la baba no
7. Análisis de Mercado
posee preferencias alimentarias de ningún tipo y que más
8. Pronóstico de Impacto bien es un depredador oportunista (Staton & Dixon, 1975),
9. Anexos lo cual le ha permitido adaptarse a diferentes hábitats y
en particular, a los artificiales originados por la
9.1. Planos de las instalaciones construcción de diques, módulos y préstamos (Rivero,
9.2. Cuadros o gráficas 1989; Seijas et al., 1989).

14
 DISEÑO Y OPERACIÓN DE ZOOCRIADEROS DE BABAS EN VENEZUELA
En lo referente a la reproducción, luego del cortejo y
apareamiento que tiene lugar al comienzo de las lluvias
(mayo y junio), la hembra construye el nido a partir de
material vegetal durante los meses correspondientes al
máximo de precipitaciones, julio y septiembre.
Finalmente, después de un período de incubación que dura
aproximadamente 70 días (octubre a enero), nacen las
crías con una talla de 21 cm (Rivero, 1974: Staton y Dixon,
1977).
Se ha estimado que alrededor de un 80 % de los huevos
son depredados (Staton y Dixon, 1977), y en el caso de
los recién nacidos sólo un 3 % alcanza el primer año de
vida (Ayarzagüena, 1983). A partir de entonces, la
probabilidad de llegar a la edad reproductiva, entre 6 y 9
años, aumenta considerablemente (op. cit.).
RECOLECCIÓN DE LOS HUEVOS
En lo que concierne a la operación del zoocriadero, el
primer aspecto a considerar es la recolección de los huevos
en los nidos autorizados por una licencia de caza
suministrada por el MARNR, la cual otorgará una cuota
máxima del 50 % de los nidos censados. En cualquier
caso ya sea que se trabaje con nidos ubicados en el medio
natural o construidos por ejemplares adultos en cautiverio
se recomienda hacer lo siguiente:
1. Los nidos de las babas tienen la forma de montículos
de 1 m de altura y están construidos con material
vegetal en descomposición. Los mismos pueden
ubicarse en las cercanías de los cuerpos de agua, en
particular los someros tales como charcas y esteros.
2. Para alcanzar la cámara donde se localizan los huevos,
se debe destapar el nido por la parte superior en
aquellos casos en donde sea posible, ya que con
frecuencia los nidos están ubicados debajo de
matorrales de difícil acceso. Por otra parte, se debe
tener cuidado con la madre que estará dispuesta a
defender el nido.
3. Los huevos deben ser recolectados durante las 12
horas siguientes a la puesta, o 4 semanas después de
la misma o de haber sido localizado el nido. De esta
manera se minimizan las pérdidas de huevos por la
manipulación de los mismos.
4. Para recoger los huevos, se destapa el nido y se coloca
una marca indeleble en la parte más alta del huevo,
con el fin de mantener la posición que presentan los
mismos dentro del nido. Posteriormente, si no se
dispone de material adecuado, se coloca en el envase
destinado al transporte de los huevos, suficiente
15
material del nido para amortiguar el movimiento de
los huevos durante su transporte. Aún así, se deben
tomar precauciones para minimizar las sacudidas del
envase donde se transportan los huevos. Se insiste en
el cuidado que se debe tener particularmente durante
esta etapa, ya que los embriones son muy susceptibles
a la manipulación.
5. Cuando el zoocriadero se ubique en un predio que no
disponga de poblaciones naturales o por carecer de
suficientes cantidades, se puede establecer un
convenio con hatos o fincas que si dispongan de este
recurso. En este caso, el traslado de los huevos hacia
el zoocriadero debe estar amparados por una guía de
movilización otorgada por PROFAUNA.
INCUBACIÓN DE LOS HUEVOS
1. Los huevos deben incubarse en un recinto con
capacidad para mantener constantes las siguientes
condiciones:
1.1. Humedad relativa de 90 %. Si no se dispone de
vaporizadores, se puede emplear envases con
agua a los cuales se les inyecta aire por medio de
un compresor o vibradores para acuarios.
1.2. Temperatura de 31 °C. Si no se dispone de una
incubadora con capacidad de regulación, es
necesario diseñar un sistema controlado por un
termostato con capacidad de activar los
sistemas de calentamiento o enfriamiento del
ambiente que rodea a los huevos. Otra solución
puede ser la de un sistema manual que será
activado por un operador que observará
diariamente un termómetro, particularmente
durante aquellas horas del día en las que se
producen los mayores cambios de temperatura.
Un sistema sencillo de control de temperatura
puede prepararse mediante el empleo de
lámparas de bombillos incandescentes
conjuntamente con rociadores de agua.
1.3. Ventilación adecuada. Si el recinto es
completamente cerrado, se debe disponer de un
sistema de rejillas o ventiladores que permitan el
intercambio de aire con el exterior.
2. La construcción debe realizarse con materiales que
permitan facilitar la limpieza de los mismos,
particularmente el piso, que no debe ser de tierra.
3. El personal a cargo de las incubadoras debe estar
atento a las vocalizaciones que emiten los animales
dentro de los huevos al final del período de incubación,
 ENRIQUE O. MARTÍNEZ M.
el cual dura aproximadamente 70 días. Este deberá
ayudar a los animales recién nacidos a salir de los
huevos rompiendo parte de la cáscara.
4. A continuación, se procede a curar el ombligo de los
neonatos con un cicatrizante y se mantienen dentro
de las incubadoras por 48 horas o el tiempo necesario
para que el vitelo sea reabsorbido.
RECINTOS DE CRÍA Y MANTENIMIENTO
1. Los neonatos una vez salidos de la incubadora o
capturados del medio silvestre, se colocan en estanques
o tanquillas construidas con cemento u otros materiales
debidamente impermeabilizados, que faciliten la
limpieza de las mismas. De acuerdo a la normativa
vigente en Venezuela, los neonatos deben ser marcados
por funcionarios de PROFAUNA para su control.
2. La superficie de los estanques debe ser lisa con
excepción de la rampa de pendiente suave que
comunica el área seca con la acuática. De esta manera
no se maltrata la piel de los animales ni gastan energía
al desplazarse entre el agua y el área seca facilitándose
simultáneamente la limpieza de estos recintos.
3. La profundidad del área acuática de los estanques tiene
que ser aquella que permita que los animales se
sumerjan por completo, alrededor de 30 cm. No es
recomendable aumentar exageradamente la
profundidad, porque de ese modo será más difícil
calentar el agua y se alargarán los tiempos de llenado
y vaciado de los mismos.
4. La superficie de las tanquillas debe ser tal que el área
acuática como seca deben permitir albergar a todos los
animales con el espacio suficiente para desplazarse y
alimentarse libremente. La superficie de las tanquillas
debe ser el doble de la ocupada por los animales (largo
x ancho x 2). Por ejemplo si tuviésemos a 100 animales
de 1 m de longitud, los cuales ocupan un área de 0,6 m
cuadrados individualmente, estaríamos hablando de un
estanque con un tamaño mínimo de 120 m2. Si los
animales tienen 60 cm de longitud, 100 animales
requerirían de un estanque de 24 m2.
5. Los estanques deben construirse de una forma tal que
permitan mantener condiciones constantes de
temperatura. Esta debe estar alrededor de 31 °C. Para
este fin se recomienda construirlas en recintos cerrados,
y de ser posible los estanques deben disponer de algún
sistema que caliente el agua, sea eléctrico o por energía
solar. En este caso podría construirse los estanques
con un techo transparente a modo de invernadero.
16
6. Los estanques deben construirse en áreas alejadas del
tránsito o actividades de personas, animales y
maquinarias, y protegidas de la incursión de
depredadores. Las babas son muy susceptibles al stress
o tensión nerviosa, el cual puede disminuir su velocidad
de crecimiento, apetito o incluso provocar la muerte.
7. Los animales deben ubicarse en los recintos de
acuerdo a su talla. Las diferencias de la longitud
hocico-cloaca no debe superar los 5 cm en los
animales menores de 6 meses y 10 cm en los mayores.
8. Los estanques deben limpiarse por lo menos cada dos
días, evitando molestar a los animales en lo posible..
Para facilitar dicha tarea los mismos dispondrán de
un sistema de desagüe o drenaje. Las aguas servidas
deben disponerse en un pozo séptico o laguna de
oxidación, según las dimensiones del zoocriadero.
9. Los animales se mantienen en el zoocriaderos hasta
que alcancen la talla de beneficio o de exportación como
mascotas si es el caso. Particularmente en Venezuela
este período dura aproximadamente un año, alcanzando
los animales tallas que oscilan entre 50 y 100 cm.
10. Para disponer de los animales ya sea por sacrificio o
movilización en vivo, se notificará a PROFAUNA, a
los fines de obtener las guías de movilización de los
animales o sus productos, y en caso de exportación
los respectivos permisos amparados por la CITES.
ÁREA DE BENEFICIO O MATADERO
1. El área de sacrificio o matadero debe cumplir con las
normas y permisos sanitarios vigentes,
particularmente si se va a comercializar la carne. Estas
normas son aún más estrictas si el destino de la carne
es el mercado internacional.
2. Si se va a vender la carne, se debe disponer de un
área de lavado previo de los animales.
3. El área de sacrificio debe disponer de mesas diseñadas
de tal modo que permitan las decapitación de los
animales y faciliten el drenaje de la sangre. Esta área
debe estar aislada del medio exterior empleando al
menos mallas en las ventanas para evitar la entrada
de insectos.
Si las instalaciones lo permiten se pueden sacrificar
los animales por un choque térmico con agua fría
(freeze-chilling), como se estila en las piscifactorías.
Este método ahorra sufrimientos a los animales y
evitan el maltrato de las pieles.
 DISEÑO Y OPERACIÓN DE ZOOCRIADEROS DE BABAS EN VENEZUELA
4. El matadero también debe estar aislado del exterior,
de ser posible empleando acondicionadores de aire si
se va a comercializar la carne.
5. El deshollado de los animales y el tratamiento de las
pieles debe hacerse según las instrucciones
suministradas por los compradores de las pieles. Si la
carne va a ser comercializada el personal debe cumplir
con las normas de manipulación de carnes.
6. La manipulación de la carne debe hacerse con guantes,
gorro y tapabocas. Los cortes o forma de presentación
del producto estará determinada por su destino final,
sea industrial o mercadeo directo al público. En
cualquier caso debe disponerse de equipos de
refrigeración y congelación para almacenar la carne.
7. Se insiste en la asepsia que debe predominar en esta
área por lo que se recomienda construir estas
instalaciones con pisos de cemento y paredes
recubiertas por azulejos de cerámica, para facilitar su
limpieza con agua a presión. Los pisos deben poseer
un sistema de drenaje.
8. Las aguas servidas se dispondrán en un pozo séptico
si las instalaciones son pequeñas. En caso contrario
deben dirigirse al sistema de tratamiento de aguas
residules adopatdo por el zoocriadero.
ALIMENTACIÓN
1. Los animales deben ser alimentados a una misma hora,
a los fines de no ocasionarles molestias. La cantidad
y frecuencia de suministro dependerá de la talla de
los animales y de los estilos particulares que se ajusten
mejor a los requerimientos del productor.
2. El alimento estará constituido fundamentalmente por
proteínas de origen animal, complementadas con minerales
y vitaminas, manteniendo una relación de calcio-fósforo
de 1,5:1. Los suplementos utilizados en la cría industrial de
aves llenan estas condiciones. Las proporciones
recomendadas de suplemento están por el orden de 1 %. El
alimento balanceado para peces puede emplearse como
complemento o alternativa alimentaria. En todo caso es
recomendable hacer ensayos para determinar cual es la dieta
que rinde más desde un punto de vista operativo y
económico, y evitar el empleo de dietas a base de un sólo
rubro para evitar deficiencias nutricionales.
3. El alimento debe suministrarse molido y con sus
componentes finamente mezclados, y la presentación
será bajo la forma de embutidos largos y delgados
colocados sobre tablas. Estas últimas será retiradas
al momento de la limpieza de los estanques.
17
ASPECTOS SANITARIOS
1. Los encargados de los recintos de cría o albergues
deben familiarizarse con el comportamiento y estado
de los animales, a fin de detectar anormalidades en
los mismo, las cuales serán notificadas al veterinario.
2. Los animales débiles y enfermos serán colocados en
recintos de cuarentena, aislados de los estanques de
cría a los fines de evitar epidemias.
3. Se hace hincapié en la prevención de enfermedades y
en el mantenimiento de la asepsia de los recintos de
cría, ya que las enfermedades de los reptiles son de
difícil diagnóstico y cura. En los casos en que se logra
la curación, con frecuencia crecen a una tasa inferior
a la normal, representando pérdidas económicas según
el caso.
4. Existe un porcentaje de animales que no crecen e
incluso se vuelven raquíticos (caquexia), conocidos
como sutes. Estos deben separarse del resto y ser
alimentados con una dieta mínima, y no prestarles
mucha atención. La disposición de estos animales
dependerá del Servicio Autónomo PROFAUNA.
ASPECTOS ECONÓMICOS
El establecimiento y operación de un zoocriadero de
cocodrilos como cualquier otro proyecto con fines
comerciales, implica una serie de consideraciones
económicas que van a depender de los recursos y
facilidades de que disponen los ejecutores del proyecto.
A este respecto se pueden hacer algunos señalamientos
que deben ser tomados en cuenta antes de diseñar un
proyecto.
1. Ubicación del zoocriadero
1.1. Si se dispone de una unidad de producción
agropecuaria con abundancia del recurso en forma
natural o silvestre, se puede considerar establecer
un zoocriadero en dicho lugar o servir de fuente
de materia prima a otra granja.
1.2. La disponibilidad de facilidades tales como
electricidad, vías de comunicación, empresas
curtiembres (tenerías), fuentes o empresas
suministradoras de alimentos, pueden favorecer
la ubicación del zoocriadero en una localidad más
favorable y alejada del medio silvestre o rural.
2. Tamaño de las instalaciones
Las dimensiones de un zoocriadero estarán sujetas a
diversos factores
 ENRIQUE O. MARTÍNEZ M.
2.1. Área disponible para las instalaciones
2.2. La mayor proporción del zoocriadero estará
dedicada a los albergues, estimándose un área
mínima de 3.000 m2 para una capacidad de 20.000
animales con tallas de 60 cm. Otra instalación que
ocupa una superficie importante es la de las
lagunas de oxidación si se adopta dicho sistema.
2.3. Capital de inversión.
Este aspecto es muy variado y el mismo puede
estudiarse en textos dedicados a la elaboración
de proyectos. Sin embargo se puede destacar
2.3.1. Capital financiero y de producción
(facilidades) disponibles
2.3.2. Considerar si el proyecto forma parte de
un proyecto agropecuario o industrial
integrado. En este caso se disminuyen los
costos de alimentación o se incrementan
las ganancias sobre los productos del
mismo. A modo de ejemplo los
zoocriaderos pueden ir asociados a:
2.3.2.1. Haciendas ganaderas
2.3.2.2. Mataderos
2.3.2.3. Industrias de procesamiento de
carnes y pescados
2.3.2.4. Piscifactorías
2.3.2.5. Industrias dedicadas a la
curtiembre de pieles de reptiles
2.4. Volumen de producción
Este factor va a depender a su vez de
2.4.1. Disponibilidad de materia prima
2.4.2. Mercado
2.4.3. Rentabilidad
Todas las unidades de producción tienen
un tamaño mínimo para asegurar su
rentabilidad. Se ha estimado que los
zoocriaderos comerciales deben tener una
capacidad mínima cercana a los 20.000
animales.
3. Mercado
3.1. Los mercados de pieles están sujetos a
oscilaciones que dependen de la saturación, moda
y de la creciente actitud conservacionista.
18
3.2. El mercado internacional de carnes exóticas
(exquisiteces) es promisorio pero muy exigente
en lo que se refiere a normas de calidad,
volúmenes y fechas de entrega. Para obtener
información al respecto hay que dirigirse al
Instituto de Comercio Exterior y a las oficinas
comerciales de las embajadas.
3.3. El mercado de mascotas puede ser igualmente
oscilante, particularmente por ser la baba un
depredador cuyo mantenimiento se complica y
encarece a medida que el animal va creciendo.
IMPACTO AMBIENTAL
Y RESTAURACIÓN DE POBLACIONES
El impacto ambiental comprende a las alteraciones del
medio ocasionadas por las actividades humanas, las cuales
se caracterizan por cambios significativos que tienen una
intensidad, extensión, duración, probabilidad de
ocurrencia y reversibilidad variables (Rivero, 1989).
En el caso particular de los zoocriaderos abiertos, se ha
considerado que la recolección de una pequeña cantidad
de nidos no genera efectos negativos sobre las poblaciones,
ni se afectan las poblaciones de depredadores naturales de
estos huevos (Ayarzagüena et al., 1988; Rivero, 1989). Por
el contrario, el nacimiento y cría en cautiverio o la captura
de neonatos, y la posterior liberación de juveniles, pueden
incluso fomentar las poblaciones de ésta especie. A tal
efecto, y como medida de reposición PROFAUNA se
reserva entre 2 y 10 % de los individuos nacidos en el
zoocriadero los cuales serán liberados cuando alcancen una
talla de 60 cm, o cuando este servicio lo considere
conveniente (Baquero & Quero, 1996).
En lo concerniente al impacto que pudiese generar la
descarga de aguas servidas de los recintos de cría, se
considera que el mismo es despreciable en zoocriaderos
de pequeñas dimensiones. Sin embargo, si se opera a una
escala mayor o dependiendo de las regulaciones
ambientales aplicables al lugar de ubicación del
zoocriadero, es necesario disponer de lagunas de
oxidación o acondicionamiento, u otro tipo de sistema de
tratamiento de aguas residuales. En el caso de poseer un
sistema de lagunas, en las mismas se pueden sembrar peces
que no sean exigentes en lo que se refiere a la calidad del
agua y alimentación, tales como el curito (Hoplosternum
littorale), la guabina (Hoplias malabaricus), la mojarra
o San Pedro (Caquetaia (=Petenia) kraussi) o las tilapias
(Sarotherodon, Oreochromis. o Tilpia spp.). Estos peces
a su vez pueden servir de alimento a los animales del
zoocriadero.
 DISEÑO Y OPERACIÓN DE ZOOCRIADEROS DE BABAS EN VENEZUELA
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