CAPiTULOIV

EL FUNCIONAMIENTO DE LAS ARMAS

Y SU APTITUD PARA EL DISPARO

l. INTRODUCCIÓN

Este estudio permite establecer si el arma de fuego, de acción

neumática o a gas, como también la de cualquier tipo de ele-
mento que se precie de tener la condición de arma, sea propia o
impropia, cumple su función principal, que es la de arrojar un
proyectil a distancia o causar una lesión que puede llevar a la
muerte, provocar un daño, etcétera.
Teniendo este punto como objetivo principal, definiremos a
qué nos referimos cuando establecemos las condiciones de fun-
cionamiento de un arma. Para ello, el estado general, respecto
de todos los sistemas que forman parte de ella, debe ser compa-
rado con las condiciones establecidas por el productor al momen-
to de salir de fábrica.
Más allá del propósito forense, el cual está bien determinado,
que es el de saber si un arma funciona o no por sobre todas las
cosas, no debemos obviar estas condiciones de uso, que harán a
la parte principal de la cuestión, cuando se trate de un disparo
accidental, de un disparo involuntario en una lucha o forcejeo,
accionamiento de un arma involuntario o accidental por parte
de niños, etcétera.
Por ello es necesario considerar algunas pautas comunes a
los sistemas de armas, que deberán ser corroborados en cada
caso especial.
 11/ /'IIN< '/UNAM/I',N I'() /l/' / ¡In ¡1/,'M,ln ~ :,/1 11/'1'/,/'11/) I'II/~II ...
h MAI~rA lq~lmANI)A Iq',1 11' 1 \)

Straín screw: tornillo tensar del muelle

2. I'UN '1 NAMmNTO GENERAL DE LOS REVÓLVERES
sP' ing: r sorte de la estrella
1 11 IG/()f de martillo
Trigger. disparador
1 1,1111 : rmadura
FRONT SIGHT
Trigger guard: arco de guardamonte
t ton: sight: guión
Trigger lever. barra del disparador
11 mmer. martillo
Trígger spring: resorte recuperador del
Ilammer Stud: eje del martillo disoarador
Trigger stud: perno eje del disparador
Hammer block: seguro del martillo
Yoke: pieza de unión. Brazo de tambor.
Hammer nose: percutor (firing pin)

Éste es un caso donde el sistema de disparo es totalmente

STRAIN SCREW
mecánico. Sus piezas principales son:
r.:\."UIio-':"+-MAIN SPRING TAIGGER

• Disparador
Barre/: cañón Hand: leva de la estrella
El disparador es la pieza inicial en el circuito de disparo;
cuenta con cuatro puntos criticas, siendo el primero la cola del
Barrellug: anclaje de cañón Hand spring: resorte de la estrella disparador propiamente dicha, exteriormente visible, con posi-
Barrel pín: perno de sujección de I Lockíng bolt: perno retén del eje de la bilidad de ejercer dos tipos de fuerza o intensidad, según se la
cañón estrella reaulable accione en simple o doble acción.
Bolt plunger.émbolo del perno de Lockíng bolt spríng: resorte del perno En acción simple, es decir, cuando el martillo queda montado,
tambor retén el disparador queda en una posición retrasada, con una sensibi-
Maín spríng: muelle o resorte principal
Bolt: perno retén de tambor lidad mayor que en el caso de la acción doble. Esta sensibilidad
del martillo
Rebound slíde: corredera o guía de es variable según el tipo de arma de la cual se trate.
Center pin: eje del tambor El otro punto es su parte posterior, la cual jugará un rol im-
retroceso
Center pín spríng: resorte del eje de portantísimo en el contacto con el martillo. Posee una uña, con
Rebound slíde stud: eje de la corredera
tambor la cual quedará retenido al martillo en la muesca de la acción
Sear spríng: resorte de la leva de la
Cylínder. tambor simple, o bien llevará a la leva de la acción doble (llamada tam-
acción doble
bién "fiador de la doble acción") hacia arriba hasta sobrepasarla
Cylínder stop: freno del tambor Sear. leva de la acción doble y liberarla. Su desgaste afecta especialmente a la simple acción.
Cylínder stop spríng: resorte del freno Síde plate: platina
En tal caso, los disparos pueden sucederse simplemente al lle-
var el martillo hacia atrás, y liberarlo manualmente, a menos
Stírrup: estribo o calce del muelle del
Cylínder stop stud: perno-eje del freno que el arma posea un seguro de interposición solidario con el
martillo
disparador. También es común que al quedar retenido, sutil-
Extractor. extractor- estrella Stock: cacha
mente, empujándolo con la mano, se libere, sin hacer presión
Extractor rod: vástago de la estrella Stock pín: perno de cacha sobre el disparador.
 M/\I'I/\ Iq'.I'N/\NIl/\ FI':I'I'I';YI'()
1',1 11'1 (1'1 punto 'H l' l .xtr 'm ant rior, el cual artl '1 ti 1 ('OL1
1 I 11 ('110 del 1111t1l r. 81 punto final es el anclaje de la 1 v d 1
1 111\ h( 1, P i( %n 1 ic in roniza su movimiento con el freno, pro-
dll('il nd I gir d 1 tambor y retención necesaria para que la
1)('I'('II:lon a la ad cuada (sea central o anular), y que el cartu-
I h 1 j do n 1 alvéolo superior quede coaxialmente alineado
('01 el ñón.
L f lta de esta alineación provoca percusiones excéntricas, a
ve' inidóneas, y un choque anómalo del proyectil con el cono
el • i gr so al cañón, haciendo que se produzca un roce en ángu-
lo sobr la ojiva del proyectil fuera de la zona de forzamiento, en
clir ión distinta al estriado como lógica posición del elemento
1\ nt s de tomar contacto con la estría. Si la falta de alineación es
111 • s profunda, además de la abrasión antes citada, se desplaza
In t rial hacia atrás, deformando la base del proyectil; esquirlas
1'1 proyectil salen despedidas hacia atrás y a los lados, llegan-
do hasta tomar contacto con el tirador. Como consecuencia de
ello, también se puede sentir alterada la trayectoria debido a un
e mbio de posición del centro de gravedad, el cual transitará
p r la línea de trayectoria, pero los otros puntos componentes
1 1proyectil pueden cambiar el sentido de avance, tumbando la
ojiva o rotando sobre dicho centro, para finalmente desviar la
Lrayectoria o impedir la previsión del punto de impacto. Tarn-
bié n se puede producir otro fenómeno donde los gases que lo
impulsan adquirirán muchísima velocidad cuando salgan por la
boca del arma, por el reborde de menor longitud que por donde
.. produjo el estiramiento del metal. El estado de la estrella del
tambor es esencial en este juego de piezas.
• Fiador
Esta pieza muchas veces es llamada de diferentes formas,
Il ro lo esencial como cualquier fiador es que su trabajo es el
1 retener al elemento que ejecute, directa o indirectamente, la
Jl rcusión. En realidad, cuando nos preguntamos qué pieza es
('1fiador, especialmente en la acción simple, no hallamos ningu-
11 entre el disparador y el martillo. Es que simplemente es una
muesca que forma parte de otra pieza, como ser el martillo.
El fiador de la acción simple es una muesca en forma de "L"
hl 1 IJNl Ir JN/INlII';NI'U I)/~ I,A.' ANMA.· Y 'u fd'I'I'I'(JIJ I'AI\'A ... '1
iJ v rtid , el nd nganchará el extremo posterior del dispara-
d r. El fiador de la acción doble es móvil, articulando con el
uerpo medio del martillo, a fin de que su movimiento sea inde-
pendiente de éste, pero coordinado.
• Martillo
Lo más importante del martillo es que generalmente contie-
ne al percutor y que transmite la fuerza de percusión mediante
su resorte o muelle. La cresta del martillo tiene, como única
función, la de facilitar el armado del sistema en acción simple
("monte del martillo"). Si no estuviera (de fábrica o por rotura
posterior) sólo se dificulta o se imposibilita el armado de la sim-
ple acción, quedando el arma limitada a la acción doble. La po-
sibilidad de montarlo de igual forma existe, ya que presionando
el disparador, al comenzar el martillo su movimiento hacia atrás
puede ser tomado manualmente y así llevarlo hasta quedar re-
tenido en la muesca de la acción simple.
La falta de tensión en el resorte o muelle del martillo puede
ocasionar percusiones débiles, las que a pesar de ello serían ser
idóneas para producir disparos, especialmente en acción simple
(mayor recorrido de la pieza y mayor tensión del resorte), por
sensibilidad del fulminante entre otras circunstancias.
• Percutor
Es común hallarlos fijos, moviles. o flotantes. Su estado es
relevante, especialmente en lo que respecta a su longitud. En
los percutores móviles es común que se rompan en el extremo
anterior, debido a que en los de pobre calidad o material blando
golpearán sobre la parte posterior del espaldón y se deforma-
rán, torciéndose o acortándose, agregando además el daño al
espaldón, cuyo orificio de salida de percutor queda con defor-
maciones y, por ende, colaboran en la descentralización de la
percusión resultante.
Muchas veces se encuentran reparados, con lo cual extien-
den la longitud normal de esta pieza, llegando a perforar los
cartuchos. A los fines de producir el disparo todo es viable, pero
no debemos olvidar la pérdida de gases que se produce en esa
fuga provocada en el fulminante.
Los percutores flotantes pueden tener algunos incidentes,

como sufrir fracturas no perceptibl s en principio, ñuras que
facilitarán roturas posteriores, o desgaste en su xtr 'lTI s,
especialmente en el anterior. Este tipo de percutor s af ta-
do también por las deformaciones, cortes, y/o ausencia d su
resorte recuperador, pudiendo quedar trabado en su posición
anterior, asomado por el espaldón, circunstancias que pueden
sumar características a las vainas de los cartuchos que roten
con el tambor y la alteración de las particularidades de su extre-
mo anterior por el desgaste en esta maniobra.
• Tambor
Es la pieza que representa a esta arma. Posee partes impor-
tantes para el sistema de repetición, como ser la capacidad de
almacenar cartuchos, las "muescas de encastre del freno" con
las que inmoviliza al tambor en su giro, la "estrella" con la cual
producirá el giro y ubicación de las recámaras o alvéolos frente
al cañón en su conexión con la leva.
Su conformación es relevante para el tipo de cartucho uti-
lizado, ya que debe estar tanto en condiciones de soportar las
presiones que éste genere, como correctamente ubicado para no
estrechar el espacio de cabeza o aumentarlo.
La rotura de los rebordes de los alvéolos del tambor (estrella)
puede ocasionar deformaciones en la vaina servida del cartucho
disparado por falta de contención. En el calibre .22 es muy co-
mún ver tambores con sus partes posteriores deterioradas por
continuas percusiones en vacío, mal alineadas, haciendo que se
pierda material en la zona, y allí es por donde se quebrarán los
cuerpos de vainas al momento de la deflagración de la pólvora.
Las dilataciones de los alvéolos pueden provocar fisuras en
las vainas, pérdida de gases, adherencia de las vainas en esos
alvéolos y, por ende, la imposibilidad de mover la estrella en su
función de "extractor" y posibilitar una nueva carga.
• Leva
La leva de la estrella, accionada por el disparador y pcsicio-
nada hacia delante por su resorte o muelle, tiene la importante
función de hacer que se cumpla el sistema "de repetición" de
",/ /'IIN( '/ClNI\M/I' N re} /l/', 1.1\:; 1\/'MI\.'l \' :;11 1\I''I'/lV/) I'I\/~I\ .. ,
I'nl I 1111110, e,' clcc ir, I ' r ar m . nicamente en cada disparo.
1',11 lo,' I ('V ilvcr "cargar 1arma" puede ser sinónimo de alinear
In 1'('('.1 I1HH 1 ñón y por ende, presentar al cartucho que va
uLido.
11 sólo hay que tener en cuenta que la falta de su resorte
o mu 11, o bien si éste estuviera mal ubicado o con disminu-
ión de tensión, provoca que el tambor no gire correctamente o,
dir ctamente, que no gire. Todo se soluciona con la gravedad,
pero es lógico que no es una "posición normal de tiro" el apun-
tar hacia abajo, no obstante debe ser considerado si es que se
tuviera que analizar algún hecho especial que así lo amerite (p.
ej., un disparo desde un balcón hacia la calzada).
• Freno
El freno del tambor es una pequeña pieza que articula con el
disparador y se recupera con la armadura, o sea que se libera
del movimiento del primero en el punto justo en que el tambor
deberá ser retenido, yeso es antes de finalizar todo el movimien-
to del disparador. Posee un resorte que lo recupera, y un perno
o, a veces, un orificio donde un perno fijo de la armadura lo
mantiene en su lugar.
• Cañón
Es una parte importante del arma, aunque no imprescindi-
ble, es decir que el disparo se produce de la misma form~; en
ese supuesto se verán afectados la trayectoria por ausencia de
movimiento de rotación, el alcance del proyectil, y lo que se es-
peraría balísticamente de él.
Particularmente el cañón de un revólver tiene un punto críti-
co, que es el cono de ingreso, superficie que si bien está diseña-
da para que el proyectil en su vuelo libre logre ingresar y tomar
el estriado, es la generadora de todas sus alteraciones morfoló-
gicas y balisticas, salvo en revólveres de mucha calidad, corto
vuelo libre o perfecta alineación del alvéolo con el cañón .
Allí se acumula gran cantidad de metal dejarda por los proyec-
tiles antes disparados, provocando muchas veces características
accidentales o temporales de poco valor en la faz identificativa.
 vo
• I 'lnt in,
La pl tina es una pieza a menudo despreciada en la biblio-
¡""di' d c:
rmas, pero en los peritajes balísticas es important
q 1 tambIe:n sea analizada especialmente en lo que respecta a
u corrdicióri al momento de la recepción, Su ajuste, la posición
dc Ios tormllos que la sujetan y su estado pueden ocasionar
1t raciones en el me~anismo del arma, especialmente en aque-
11s donde las piezas internas tienen una sujeción o fijación en-
d ble.
• Seguros
Es ~o~ún co~t~r con revólveres con seguro de interposición
a~tomatlc~, no visibles exteriormente, que sólo se retiran al ac-
cicnar el dIsparado~, También están aquellos que trabajan con
1 c,oncepto ~ontrano al anterior, es decir que, al momento de
accionar el diaparador, sup.lementan al martillo para que llegue
a tomar contacto con el talan del percutor, Si no se contara con
este: tIP~ de_seguro es posible que, al llevar el martillo hacia
atr~~ y liberándolo antes de quedar retenido en la muesca de la
a~cIOn SImple, se pr~~uzca la percusión idónea y, por ende, el
disparo. La deformacIOn de la pieza que representa al seguro su
rotura? f~ta, es sumamente importante al momento de eval~ar
un peritaje de disparo accidental o involuntario,
2,1, SISTEMA DE DISPARO
Aquí hablaremos del sistema más común y generalizado
los revólveres,
Acción simple: Para producir el disparo en acción simple, es
necesario llevar el martillo hacia atrás hasta que quede retenido
por el fiador de la acción simple, Mientras esto estaba ocurrien-
do, el freno del tambor bajó liberando momentáneamente su
movrrmerrto La ,l~~a hizo girar a la estrella, hasta que el freno
ahora en su pOSICIOnnormal por acción del resorte o muelle que
lo recupera, encastra en uno de las muescas del tambor y lo de-
tiene, para quedar así enfrentado uno de los alvéolo s en la zona
supenor, almeándose coaxialmente con el ánima del cañón, El
disparador quedó posicionado muy cerca de la parte posterior
interna del arco de guardamonte, presto para ser accionado,
1,,/ "'INI /uN/lA/I/';N/'C) Ilh /'/1.'; /I/'M/I.· \ .,,'(1/lf'"I'/rU/J /';\/'/1... 7 L
Al apli r 1 fu rza mínima determinada para la acción sim-
I le '[ C' da arma (alrededor de 1.500 gramos) sobre la cola del
eli .P r dar, la parte posterior del cuerpo principal del dispara-
I r leva, liberando al martillo de la retención, el cual irá vio-
I ntamente hacia delante por acción del resorte del martillo, con
1 fuerza que le transmita su tensión, sus vueltas o su integri-
dad. Así haremos que el percutor tome contacto con la "cápsula
fulminante", la cual contiene al iniciador explosivo o detonador,
y así comienza el disparo .
Acción doble: A diferencia de la antes detallada, el arma está
en estado de reposo aparente, es decir que su martillo no está
montado y su resorte no está tenso. Para iniciar el mecanismo
es menester accionar el disparador que está en su posición más
adelantada, llevarlo hacia atrás con una fuerza que supera am-
pliamente a la del caso anterior (alrededor de los 3.000 gramos)
y así, mientras mecánicamente se lleva el martillo hacia atrás
por acción del extremo posterior del disparador sobre la leva o
fiador de la acción doble, el freno del tambor desciende, la leva
de la estrella lo gira por empuje sobre ella hacia arriba, y antes
que, el extremo del disparador sobrepase al fiador y libere al
martillo, el freno habrá detenido al tambor. Al liberarse el mar-
tillo, el percutor golpea contra la cápsula iniciadora, y así se
sucede el disparo.
de 2.2. CIRCUNSTANCIAS EVENTUALES Y COMUNES EN LOS REVÓLVERES
• El seguro del martillo no funciona: Es posible que este sis-
tema de seguro, generalmente automático y oculto, no llegue a
funcionar correctamente por deformaciones en la pieza que lo
representa, rotura, o bien ausencia de ella. Si así ocurre, puede
producirse un disparo accidental o involuntario si se golpea el
martillo, aun estando desmontado.
• No se producen disparos por excentricidad en la percusión:
Esto puede ocurrir si faltase la leva de estrella o su resorte, por
lo cual el giro del tambor se deberá hacer manualmente, o bien
el freno no cumple su función por desgaste, ausencia o falta de
su resorte por ejemplo, o bien de él mismo. Es así que si se trata
de un arma de fuego anular, el percutor golpea con sólo una pe-

t: ) MARtA FEI~NANDA FERRC:YIW
icn de su cuerpo en el reborde de la vaina, sin logr
tallido del iniciador. En el caso de fuego central, una
pt 1(\\ Ion xcéntrica puede afectar el borde interno del culot
dvl artu ha con lo cual se frena el golpe, o bien no logra un
t ont to interno apto con el yunque del fulminante. Pero si el
pCI u tor es largo o la fuerza es suficiente, aun siendo excéntrica
la p rcusión en ambos sistemas se puede lograr la detonación
del iniciador.
• El percutor fijo o el móvil aumentaron el orificio del espal-
ti· n a través del cual se asoma, y pierde orientación coaxial con
'1 entro del cartucho, percutiendo más arriba o debajo de la
zona idónea para la detonación.
. FUNCIONAMIENTO GENERAL DE LAS ESCOPETAS
Esta arma tiene una ductilidad que permite hallarla en los
istemas tiro a tiro, de repetición y semiautomática, o las de tiro
utomático, y cuenta con las siguientes piezas relevantes.
• Cañón
El cañón o cañones comúnmente son lisos por dentro, có-
) ices exteriormente, cilíndricos en su contexto interno, espe-
ialmente para las armas de las fuerzas de seguridad, y con
golletamiento o Choke propio o adicionado en el caso de las
scopetas de caza o tiro deportivo. La recámara, que se presenta
p rmanentemente alineada al cañón, es un par de milímetros
más grande en diámetro que el ánima de éste, y exteriormente
más robusta para resistir las altas presiones. Además de los ca-
ñones de ánima lisa, se cuenta con cañones parcial o totalmente
rayados, adecuados para el disparo de munición única.
Respecto de los cañones desde el punto de vista forense es
importante que se los mida, pues de ello depende la calificación
I gal que le otorga en nuestro país el ente de control (Renar). Su
longitud influye en la dispersión de la munición múltiple que
dispare, circunstancia relevante en la determinación de la dis-
Lancia de disparo.
Si hubiera que determinar el choke de un cañón, o bien cons-
l tar que lo tiene, debe tenerse en cuenta que "es la diferencia
rut« inc 'u 7
[1,1, '¡nNtIM/I'.N I'() U\ • /l/~M/I.· Y /lP,/,/'I'Uf) P/II'/I ...
('xi~;(('I1L ntr el diámetro interno medido en boca de fuego, con
1 v,'p' l al medido a 22 centímetros del plano de carga (recáma-
Ia). y uelen ir de Omm al, 1mm (cilíndrico a Jull choke) .
ierre
En las escopetas tiro a tiro, comúnmente el cierre es un pes-
tillo que queda ajustado cuando se cierra el arma y se libera al
ser accionado, mecánica y/o manualmente, por una palanca
o tetón exterior. Al cierre se le agregaron los extracto res , que
trabajan junto con el pestillo para extenderse y sacar de la re:~-
mara al cartucho en el momento de abrir el arma. La extraccion
puede ser parcial, ayudada con la toma total del cartucho por
parte del tirador, o bien de expulsión completa, en el caso de
extractores automáticos. Estos extractar es forman parte de la
estructura de la recámara, por lo tanto su estado e integridad
son importantes para la identificación de cartuchos servidos y
en el caso de accidentes.
• Percutores
En armas más antiguas se pueden encontrar percutores en
martillos expuestos, percutores en armadura y martillos indepen-
dientes, los que fueron reemplazad.os por percutores y r:nartillos
ocultos, debido, esencialmente, a una cuestión de segundad. En
estos mecanismos el percutor y su muelle están alojados dentro
de la armadura o cajón, Y se arman automáticamente cuando se
abre el arma para cargarla. En las escopetas de repetició~ el mc:r-
tillo queda montado al llevar el cerrojo manualmente hacia atras,
mientras que en las de sistema semiautomático lo hace cuando
recibe el impulso de los gases resultantes de la combustión de la
carga propulsara, es decir, cuando el arma se recupera.
• Seguros
En los sistemas de martillos externos el seguro 10 conforma
la posición de primer descanso de tales martillos, que son lleva-
dos a ella por acción manual del tirador. Cuando los martül~s
son internos, es común ver seguros externos en forma de teton
pasante, junto al disparador, especialmente en las armas de re-
petición y semiautomáticas, ya que los martillos no pueden ser
 MI\I 'rl\ I"I~lmANDA FEI~I~L~YIW
c!e'.'111 nt do manualmente y se requiere un sistema d
1 je h. 1 Y al rta. La alerta suele estar dada por el color rojo d
se uros y la posición, interfiriendo notoriamente en la coloca-
( j 'n d 1 dedo en el disparador. En las armas de régimen tiro a
Lira puede verse el seguro en la parte superior de la culata, en
1 sición cómoda para el empuñamiento, y en algunos casos se
tivan automáticamente con el cierre del arma.
• Culata
Esta parte del arma no tiene importancia pericial por sí mis-
ma, pero es un punto fundamental en el tiro deportivo o la caza.
ada culata debería estar producida para un tirador en particu-
lar, adecuada a sus características físicas, con el fin de obtener
las mejores prestaciones. Tiene validez pericial cuando en su
interior se encuentran resortes recuperadores, por ejemplo, y se
las recorta con el fin único de ocultamiento, afectando el correc-
to funcionamiento de aquéllos.
3.1. SISTEMAS DE DISPARO
Tiro a tiro: Comúnmente se las ve de un caño o dos super-
puestos o yuxtapuestos, de cierre y apertura basculante; con
sistemas de disparo sencillos, conformados por disparador, fia-
dor, martillo y percutor, tanto simples, combinados o dobles.
Repetición: Aquí se presenta la posibilidad de contar con más
carga por la presencia de un tubo almacén cargador, y una pa-
lanca de alimentación o chimaza que facilita al operador la rea-
lización de los sucesivos disparos.
Semiautomático: Puede contar con un cañón fijo y cierre ob-
turador, cuya apertura se acciona por toma de gases en un pun-
to del cañón (Browning 2000). El sistema de disparo es sencillo,
conformado por disparador, fiador, martillo, percutor, muescas
de calce del cierre, extractores, retenes de cartuchos en almacén
cargador, elevadores, botadores, entre otras piezas que pueden
ser particulares para cada modelo.
Automático: Existen escopetas de repetición que por modifi-
caciones necesarias para la actividad policial, fueron diseñadas
con cañón y culata reducidos, con sistema optativo "serniauto-
I~/, "'UNe 'le IN,\AI/I'NI'() Il/'; 1,/\1; /\"'M/\.'i Y .')// /\II,.,.,'UIJ I'/\/~/\ ...
.zu 11111 t k-o" ionado m dian te un t tón (Franchi SPAS 12 y SPAS
l S I Sil K, S&W, Beretta).
t rs S poseen dispositivo selector de disparo automático
( , ws -Clase Assault Weapon System).
4. FUNCIONAMIENTO GENERAL DE LAS PISTOLAS
Es muy variado el grupo de pistolas actuales, pero, básica-
mente, todas cuentan con piezas fundamentales que, de una u
otra forma, cumplen con las funciones generales de un sistema
de disparo:
Cañón: Esta pieza se encuentra permanentemente alinea-
da con la recámara, por unión directa (una misma barra metá-
lica) o por soldaduras. Su ánima es rayada en distintas formas,
es decir, con tallado de estrías o surcos, o bien poligonales.
Hay cañones estriados muy variados. Se presentan con sur-
cos de bordes angulosos, con aristas redondeadas, en ángulo
recto, escalonado, dentado, o muy suaves y ondulados, llama-
dos también "escurridos". Ello no limita a hallar cañones con
estriado variable desde la recámara hasta la boca, aumentando
en su angulación de giro, o paso de estría.
Es importante recordar que el diámetro real y la longitud de
la recámara serán las medidas de "referencia" para establecer el
calibre del arma.
Corredera: Es una pieza móvil, en cuyo interior se aloja el
cañón y todo el sistema principal de percusión. Además alberga
los aparatos de puntería, el sistema de cierre, extracción, y a
veces el de seguro. Su peso, aunado a la tensión de su resorte
recuperador, determina la necesidad o no del cierre calzado, y se
conjuga con la presión de gases generados por la pólvora com-
bustionada. El material es variable; en la actualidad se tiende a
alivianarla, conformándose con chapa estampada, aleación de
aluminio, acero, etcétera.
• Armadura: También denominada "armazón", se comple-
menta con la corredera para la articulación de piezas que for-
man los sistemas de disparo, de seguro, de alimentación, de ex-
pulsión. Hoy contamos con materiales diversos como aleaciones
de aluminio, polímeros, y otros.
 7 1',1. 1'/lN< '/( IN/IM/I N /C) in: I.A,' A/~MA.' Y 'U AI'f'I'/'UIJ I'AI~A ... TI

IJ, i( os 111 • nico ,siendo fundamental la diferencia en lo que

t ',' pcct los cuatro sistemas de disparo.

5. lSTEMAS SOMETIDOS A ANÁLISIS EN CUALQUIER ARMA DE FUEGO O ACCIÓN

N8UMÁTICA

5. 1. SISTEMA DE DISPARO

En él se incluye el sistema de percusron , por ser la razón

fundamental para que se cumpla el primero. Es importante rea-
lizar un reconocimiento del accionamiento de las piezas que lo
componen, con maniobras en vacío, suaves, con la utilización
de cartuchos inertes o de ejercicio, con lo cual se preserva el es-
tado del percutor, más allá de saber o suponer que el arma que
estamos probando soporta estas acciones.
ROHR
7 VERCHLUSS-FANGHEBEL Es posible plantear que sin desmontar el arma no se cono-
BARREL
CANON
SUDE CATCH LEVER cerán la integridad y el ajuste de las piezas que componen el
ARRETOIR DE CULASSE
CAÑÓN sistema, a lo cual se responde, con lógica, que si todo el accio-
RETÉN DE LA CORREDERA
2 VERSCHLUS 8 ABZUG
namiento es correcto y el perito no detecta anomalías, no hay
SUDE razón para pensar en la falta de alguna pieza o su desajuste, sin
TRIGGER
CULASSE DÉTENTE
CORREDERA
descartar que alguna de ellas no sea original, circunstancia que
DISPARADOR
3 KORN conforma otro tipo de cuestionamiento.
9 SCHLAGHEBEL
FRONT SIGHT lIAMMER Luego de esta operación, se prueba el arma con munición
GumON
CHIEN viva. Es en esta etapa donde se producen diferencias de opinio-
PUNTO DE MIRA MARTILLO
4 VISIER
nes entre especialistas, respecto de la cantidad de cartuchos a
10 ENTTSPANNHEBEL
REARSIGHT
DECOCK!NG LEVER
probar. Aplicando un criterio básico, se puede sugerir tomar 3
HAUSSE
LEVIER DE DÉSARMEMENTE o 4 cartuchos para las armas s emiautomáticas , donde se debe
ALZA
PALANCA DE DESARME probar una corta secuencia de disparo, la carga de cartuchos y
5 GRIFFSTÜK
11 MAGAZINHALTER
FRAME la eyección de vainas servidas.
MAGAZINE CATCH
POIGNEE
CHARGEUR Si lo que se quiere constatar en particular es el estado del
ARMADURA
CARGADOR cargador, será conveniente realizar disparos con la carga com-
6 ROHRHALTEHEBEL
T AKE-DOWN LEVEL
pleta, y así se podrán comprobar posibilidades de fallas en el
LEVIER DE DÉMONTAGE ascenso de los cartuchos, trabas del sistema, etcétera.
PALANCA DE DESMONTAJE En las armas automáticas, la cantidad también dependerá del
fin general o específico de la prueba; por ejemplo, si se quisiera
Las r~stantes armas, como los fusiles o carabinas, pistolones, verificar la cadencia de tres disparos que poseen algunos fusiles
etc., v~nan e~ sus modelos, pero todos los sistemas de disparo de asalto, se debe hacer constar con múltiplos de ese número.
y funcionamiento general responden a los mismos principios Para el caso de los revólveres, se hace necesario realizar prue-
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bas con la arga del almacén cargador completo para v rifictu 1(1
sincronización de la leva, el freno y la estrella del tambor, y, pOI
ende, la alineación axial del alvéolo con el cañón.
Las escopetas requieren maniobras de accionamiento con 1
carga máxima que admiten para constatar sus posibilidades d
funcionamiento aun en situaciones forzadas, especialmente en lo
que puede referirse a la longitud de sus cartuchos (12/70,12/65,
12/60), corroborando la admisión y efectividad del arribo a recá-
mara. Estas operaciones son obligatorias cuando se tratase de
armas que no guardan características originales de fábrica.
Si se peritara un arma con régimen tiro a tiro será prudente
probar dos cartuchos por cañón, a menos que se desee repetir
una acción específica para asegurar que la falencia detectada
es "constante", o, por el contrario, "ocasional", ante lo cual se
deberá tomar una cantidad mayor.
Es relevante establecer la longitud de los percutores, espe-
cialmente cuando se trate de "disparos accidentales", y cotejarla
con los valores normales de fábrica.
Cuando se estime la cantidad de cartuchos necesarios para
probar un arma, se debe considerar que hay armas de baja
calidad o en mal estado que no admiten pruebas de fuego pro-
longadas o forzadas, y que generalmente el abuso en la can-
tidad de cartuchos tomados no hacen que la prueba solicita-
da sea más certera, ya que puede cambiar las condiciones del
armamento y, lo que puede ser más grave, las posibilidades
de identificarla posteriormente con alguna vaina o proyectil.
Previendo estas vicisitudes, toda vaina servida y proyectil que
resultare de estas experiencias deberán ser adjuntadas al in-
forme pericial resultante.
5.2. SISTEivlA DE ALIMENTACIÓN
Se lo llama así aun en los casos de armas de régimen tiro a
tiro, ya que allí se incluye el estado general de la recámara, la
báscula de apertura en el caso de escopetas o revólveres, que
pueden entorpecer la carga. Se encuentra aquí el análisis de los
extracto res en todas sus formas, sus resortes recuperadores o
tensores, las uñas anteriores que hacen el trabajo de sujeción,
hl. I-UN('IUN MII/NH¡ /11~I,A.' A/-.'MA, , Y SU APl'ITUD PII/~II". 79
!I (' In I d 1aloj mi nto que puede influir en el trabado o entor-
pe e imi nto de su movimiento, etcétera.
L stuches cargadores, las cajas de carga, las cintas, etc.,
('O forman el inicio de la eficacia en la alimentación de un arma.
Por r una pieza separada en las pistolas, carabinas o fusiles,
(, necesario evaluar su estado "en conjunto con el arma", "se-
I rada del arma", y "el arma con otro cargador", si así fuera
m nester. La "ausencia" del estuche cargador puede inutilizarla
(1i tola con seguro de cargador) o cambiar su sistema de dispa-
r (pistola sin seguro de cargador) de semiautomático o automá-
Ii o a régimen tiro a tiro.
5.3. SISTEMA DE SEGURO
La función principal de un seguro es la de impedir que el dis-
1aro se produzca involuntaria o accidentalmente.
Los hay externos para que el tirador los coloque
cuando desee, o internos, llamados también "au-
tomáticos", porque el tirador no los puede accio-
nar ni quitar. Se los encuentra en forma de "aleta"
o palanca, actuando generalmente sobre el fiador,
el disparador, o el martillo; también como una
pieza adjunta a la empuñadura, bloqueando sus
fiadores o desconectores, anulable s al empuñar
correctamente el arma. Hay armas que poseen
seguro "de cargador", anulado al colocar el estu-
che correctamente, "de interposición", impidiendo
que el martillo tome contacto con el percutor in-
voluntariamente, o bien dejando un espacio que se suplementará al
ccionar el disparador para que logre llegar a ése.
5.4. SISTEMA DE CIERRE
Cumple con la misión de cerrar la recámara al momento del dis-
paro para el mejor aprovechamiento de gases, balance en el retro-
eso, y seguridad para el tirador, entre otras funciones mecánicas
específicas. La evaluación del estado de cierre de un arma es rele-
vante cuando se producen accidentes donde el tirador es el primer
afectado ante recámaras que se fragmentan o fisuran.
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El primer trabajo del especialista en armas automatiz d 1111 rma de fu g o cción neumática, no guardan relevancia en
será determinar el tipo de cierre, que puede ser calzado: con giro ('1 p ritaje balístico en sí. No obstante, su detalle y condiciones
de cañón, por encastre, de apertura retardada, o no calzado: d b hacerse para detectar maniobras de alteración del estado
inercia de masa; analizando además el estilo de automatismo, neral en el arma.
es decir "cañón y cierre móvil", "cañón fijo y cierre móvil", "de
corto o largo retroceso", "por toma de gases en un punto del ca-
ñón", etcétera.

Muchos cierres son conocidos por sus creadores o patenta-

dores, tal el caso del "sistema Colt", diseñado por John Moses En lesiones provocadas por el golpe de un arma de fuego,
Browning, donde el cañón y la corredera forman un solo bloque utilizada como arma contundente, puede ser de importancia
de cierre al momento del disparo, mediante el encastre de re- probatoria. También lo es cuando sobre la piel de la víctima, en
bajos y resaltos que los solidariza. Otro sistema, el "Steyr", de el orificio de entrada del proyectil, disparado a boca de jarro, es
origen alemán, presenta la particularidad de que el encastre que decir, con la boca del arma apoyada sobre el plano de inciden-
engarza el cañón y el block de cierre, presenta unas ranuras de cia, se produce el llamado "signo de Puppe- Werkgartner".
forma helicoidal como el estriado del ánima, con perfecta coin-
cidencia, que hace posible el arrastre simultáneo hacia atrás del
grupo cañón-corredera cuando recupera.
La cota de fijación resulta sumamente importante cuando se
trata de casos accidentales, ya que a veces en armas de baja
calidad o aquellas tratadas como tales, se le suplantan piezas
como el tambor y/o el percutor, modifican los espaldones, etc.,
haciendo que ésta aumente o disminuya con los problemas
lógicos de esta maniobra, tales como disparos adelantados al
momento del cierre de una escopeta de quiebre por percutores
trabados en el orificio de salida en espaldón, o bien demasiada
holgadura en el cierre de una pistola, con el consecuente mo-
vimiento del cartucho y debilidad en la contención de la vaina
cuando la pólvora combustiona, etcétera.

5.5. SISTEMA DE PUNTERlA

Si bien los aparatos de puntería son elementos infaltables en