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Diferencias Significativas en las Experiencias Diarias de los Niños Pequeños.

Betty Hart and Toddd R. Risley.

Brookes Publishing, 1995 (4ta edición, enero 2003)

Resumen Ejecutivo:

Mientras que los niños con diferente capital y bagaje cultural desarrollan las habilidades del
lenguaje típicamente a la misma edad, la velocidad en que los niños adquieren el vocabulario es
fuertemente influida por cuanto los padres conversen con sus hijos. Los niños que provienen de
familias cuyos padres son profesionales universitarios (que curiosamente son aquellos que les
hablan más) adquieren mucho más rápido el vocabulario, si los comparamos con niños cuyos
padres pertenecen a la clase trabajadora, sin estudios superiores y con aquellos niños cuyos
padres están adheridos a programas de financiamiento del gobieno.

Objetivos del estudio:

Examinar el desarrollo del lenguaje en los niños pequeños, y los efectos que tienen las
interacciones y experiencias en el hogar en su desarrollo.

Método:

Grabar y analizar las interacciones verbales de 12 familias, desde los diez meses hasta los tres años
de edad del niño. Los investigadores agruparon a las familias en tres grandes categorías
socioeconómicas basadas en la ocupación de los padres: familias profesionales, familias de clase
trabajadora y familias beneficiadas por programas del estado. Los grupos estuvieron fuertemente
asociados con el nivel de educación de los padres y el ingreso económico familiar. Las familias
fueron observadas durante una hora cada mes por al menos dos años y medio. Los niños variaban
en nivel socioeconómico, género, lugar de nacimiento y número de personas que componen la
estructura familiar. Todas las familias fueron consideradas como “con un buen funcionamiento”.

Resultados:

 Los niños de los tres grupos comenzaron a hablar alrededor del mismo periodo, y
desarrollaron un buen uso y estructura del lenguaje.
 Los niños de familias profesionales escuchaban más palabras por hora, lo que conlleva una
mayor acumulación de vocabulario.
 En las familias profesionales, los niños escucharon en promedio 2153 palabras por hora,
mientras que los niños de la clase trabajadora escucharon en promedio 616 palabras por
hora. Esto significa, que en un año los niños de familias profesionales escucharon un
promedio de 11 millones de palabras, mientras que los niños de familias de clase
trabajadora escucharon en promedio alrededor de 6 millones de palabras y los niños de
familias que se encuentran beneficiadas por programas del estado escucharon un
promedio de 3 millones de palabras.
 Para la edad de 4 años, un niño de una familia subsidiada por el estado escucha 32
millones de palabras menos que un compañero, hijo de una familia profesional.
 Para los 3 años, el vocabulario acumulado para un niño perteneciente a familia profesional
fue de 1100 palabras. Para los niños de familias de clase trabajadora, el vocabulario
acumulado fue de 750 palabras y para los niños de familias subsidiadas por el estado se
mantiene debajo de las 500 palabras.
 Los niños de familias profesionales escuchan más estímulos y son desafiados
constantemente, que sus pares pertenecientes a las otras dos categorías de familias.

Implicaciones para la normativa:

 El aspecto más importante de las experiencias para desarrollar lenguaje es la calidad de


ellas.
 El aspecto más importante a evaluar en los centros que se dedican al cuidado de niños
pequeños es la cantidad de conversaciones que éstos tienen momento a momentos, con
sus cuidadores principales.

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