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SENTENCIA
San Salvador, a las quince horas con treinta minutos del día siete de febrero de dos
mil veinte
La vista pública fue conducida por la señora Jueza, VIRGINIA LORENA PAREDES
DE DUEÑAS, quien ha sido la responsable de redactar los argumentos que sustentan la
presente Sentencia de Mérito, luego de la respectiva valoración sobre los medios de prueba
producidos en juicio.
El hecho delictivo, ocurrió el día veinticuatro de febrero de dos mil diecisiete, como
a las nueve horas con treinta minutos, en momentos que las victimas realizaban labores de
pesquisas en la zona en la cual delinque la Mara Salvatrucha MS, por lo cual se
encontraban al final del pasaje treinta de la Lotificación Altos de Santa María uno,
Jurisdicción de Ciudad Delgado, como a unos seis metros de distancia se ubica una casa al
final del pasaje que tiente tela ciclón como cerco; clave “Montenegro” ingresa por un
costado y observa a dos sujetos que por su trabajo identifican el primero “El Maniaco” y
el segundo “El Cruel” ambos pandilleros perfilados de la zona, les observan que estos
portan armas de fuego tipo pistolas en sus manos y es en ese instante que los sujetos
observan a las víctimas y sin mediar palabras comienzan a dispararles a las víctimas.
Clave “Vengador” que iba con “Montenegro” por el otro costado, en ese instante
comienzan a huir buscando una vaguada; observan que el sujeto alias “El Cruel” porta
una mochila negra, los sujetos corren por una vereda en una zona con abundante
vegetación que da a un rio y une a las colonias Santa Rita con Altos de Santa María, por lo
que las victimas comienzan a darles persecución y a la vez solicitan apoyo; ya que los
sujetos mientras huyen les realizan disparos contra sus personas.
-Seguidamente como a unos quinientos metros desde el lugar que huyen, el sujeto
alias “El Cruel”, deja una mochila negra que portaba los sujetos, avanzan y se pierden,
dentro la mochila naylon, color negro, marca GO se encontró un arma de fuego, tipo
pistola, calibre 9x19 milímetros, marca Smith y Wesson, modelo 910, serie VKN 5750,
con cacha de material sintético, un cargador metálico para la misma y cuatro cartuchos sin
percutir.
PRUEBA PRODUCIDA EN EL JUICIO
I) DECLARACIÓN DEL IMPUTADO SOBRE LOS HECHOS
A los señores Marlon Alejandro Flores Mercado y David Ernesto Villalobos
Aguilar, se le hizo saber en detalle los derechos que la ley define para personas que tienen
la condición de imputados, así como los hechos que le eran atribuidos y las consecuencias
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legales que podrían serle aplicables; manifestando que los comprendían plenamente y que,
en ejercicio del Derecho de Defensa Material, se abstendrían de rendir su declaración
Extremo que así consta en la grabación de la audiencia y, de igual manera, así ha de
figurar en el acta de vista pública elaborada bajo responsabilidad de la secretaría de este
Tribunal.
II) TESTIMONIAL
Por interés de la acusación se contó con la declaración de una de las víctimas, de
cuya deposición sólo se refieren los asuntos de interés probatorio que pudieron extraerse,
tal como se anota a continuación; con el propósito de dejar constancia de los efectos que
produjeron en la valoración efectuada por la Suscrita.
de la MS del sector con los nombres, alias y características físicas; el cruel se llama
Alejandro Flores Mercado; y el maniaco, se llama David Ernesto Villalobos Aguilar.
Ambos sujetos fueron los que le realizaron los disparos, su persona es miembro de
la corporación policial
A preguntas realizadas por la defensa técnica, manifestó: Que, el día de los hechos
estaba armado, no hubo intercambio de disparos, no le encontró arma de fuego adherida al
cuerpo al señor Marlon Alejandro Flores Mercado, la distancia variaba cuando le daban
persecución a los sujetos, en medio de la persecución iban como a ocho o diez metros de
distancia cuando iban en la vaguada, al final de la persecución iba como a quince metros de
persecución.
A preguntas realizadas por la representación fiscal, manifestó: Que, no hubo
intercambio de disparos porque ellos buscaron cobertura para protegerse de los disparos.
No le encontró arma de fuego adherida al cuerpo al cruel porque la dejó tirada en la
persecución. Su persona estaba armado, tenía dos, un fusil y una pistola.
A preguntas realizadas por la defensa técnica, manifestó: Que, estaban de espalda
ambos sujetos cuando corrían el Cruel y el Maniaco.
A preguntas aclarativas realizadas por la suscrita Juez, manifestó: Que, el cruel y
el maniaco ambos iban de espalda cuando corrían y por eso no dispararon, también porque
buscaron cobertura, es decir, buscaban cubrirse para que no les impactaran los disparos; los
sujetos en ocasiones les dispararon, no fue continuo, pero fue unas ocho o diez veces; desde
el primer momento que los vieron mientras realizaban pesquisa, hasta el momento que los
perdieron de vista durante la persecución, esto duró no más de quince minutos.
III) PERICIAL
IV) DOCUMENTAL
antecedentes penal); mientras que el señor Marlon Alejandro Flores Mercado, no posee
registro alguno. Fs. 14 al 23.-
que la persona a identificar es el número cinco, por lo que el imputado si fue reconocido.
Fs. 41 al 43.-
dicha rueda, contestando en sentido afirmativo y señalo al número dos, por lo que el
imputado David Ernesto Villalobos Aguilar, sí fue reconocido. Fs. 203 al 205.-
i.- Que, en este punto, luego de haber analizado la prueba testimonial, documental,
pericial e ilustrativa la cual ha sido descrita en el apartado correspondiente; concierne a esta
Juzgadora analizar la existencia de los hechos, partiendo que se contó con la deposición de
la víctima identificada con la clave, Montenegro, quien fue víctima del delito de homicidio
en grado de tentativa, hecho ocurrido aproximadamente a las nueve horas con treinta
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minutos del día veinticuatro de febrero de dos mil diecisiete, a la altura del final pasaje
treinta de la Colonia Santa Rita seis, jurisdicción de Ciudad Delgado.
Lo anterior, se pudo corroborar con el acta de inspección ocular y procesamiento
de la escena en el lugar de los hechos, agregada a folios 8, realizada en el interior del lote
número veinticinco “D” de la Lotificación Altos de Santa María uno, jurisdicción de
Ciudad Delgado, a las once horas con diez minutos del día veinticuatro de febrero de dos
mil diecisiete; dejando constancia agentes investigadores del Departamento de
Investigaciones de la Delegación de la Policía Nacional de Ciudad Delgado, que se
apersonaran al lugar antes referido ya que, las victimas ahora identificadas con las claves
Vengador y Montenegro y otros agentes policiales habían sido atacados con disparos de
arma de fuego por sujetos identificados con los alias de “maniaco” y “cruel” perfilados
como miembros de la “MS”, mientras aquellos realizaban labores de patrullaje y pesquisa,
en el final del pasaje treinta de la colonia Santa Rita jurisdicción de Ciudad Delgado,
aproximadamente a las nueve horas con treinta minutos del día veinticuatro de febrero de
dos mil diecisiete; y habiendo dado persecución a ambos sujetos a través de veredas
buscando la lotificación Altos de Santa María uno, fue imposible la captura de los mismos,
no obstante, uno de ellos dejó una mochila de nylon, color negra, y en su interior se
encontró un arma de fuego tipo pistola, marca Smith & Wesson, serie VKN 5750, con un
cargador del interior del a evidencia; un pantalón de tela color gris ; un cincho de nylon,
color negro, marca Nike, con hebilla de metal; y una camisa de tela color azul, manga larga.
ii.- Los hechos aludidos fueron acreditados por medio de la víctima identificada
con la clave Montenegro, quien en compañía de la víctima clave Vengador -quien no
compareció a la audiencia de vista pública- y junto con otros compañeros, acreditó que en
la calidad de miembros de la Policía Nacional Civil, realizaban actividades de pesquisa al
final del pasaje treinta de la Colonia Santa Rita seis, jurisdicción de Ciudad Delgado, a las
nueve horas con treinta minutos del día veinticuatro de febrero de dos mil diecisiete,
cuando observaron a dos sujetos reunidos, quienes intentaron intervenirlos; sin embargo,
ellos al presenciar a los agentes policiales, les realizaron disparos con armas de fuego;
consecuentemente, la víctima mencionó que buscaron protegerse del ataque, y luego
procedieron a dar persecución a los dos sujetos durante un aproximado de quince minutos,
por una pendiente o vaguada como lo refiriera la víctima; sin embargo, indicó que resultó
imposible la captura de los dos sujetos a quien refirió con los alias de el “cruel” y
“maniaco o sambo”, perfilados como miembros de la mara salvatrucha del sector, el
primero dijo que es identificado como Marlon Alejandro Flores Mercado; y el segundo,
como David Ernesto Villalobos Aguilar. Finalmente, mencionó que al imputado Flores
Mercado durante la persecución arrojó una mochila que contenía un arma de fuego.
se dejó constancia y se ilustra las evidencias que refirió la víctima clave “Montenegro”,
como la que fueron arrojadas por el imputado Marlon Alejandro Flores Mercado, alias el
cruel, siendo una mochila de nylon, color negra, marca G; un arma de fuego tipo pistola,
marca Smith &Wesson, serie VKN 5750, con un cargador y tres cartuchos para la misma;
un pantalón de tela color gris, con un cincho de nylon, color negro, marca Nike, con hebilla
de metal; y una camisa de tela color azul, manga larga.
iv.- Que, el arma de fuego antes detallada e identificada como evidencia 1.1/1,
consistente en el arma de fuego tipo pistola, calibre 9x19 milímetros, marca Smith &
Wesson, modelo 910, serie VKN 5750, pavón gris, con cacha de material sintético color
negro, fue sometida a pericia, según consta a folios 56 y 57, el informe pericial de la
sección de balística, de fecha seis de marzo de dos mil diecisiete, elaborado por Enrique
Adalberto Ortiz, perito en calibre y funcionamiento de armas de fuego, por medio del cual
concluyó que, el arma se encuentra en buen estado de funcionamiento y apta para efectuar
disparos. Asimismo, a través del informe de registro y licencia de uso de armas, agregada a
folios 13, emitido por el Director de Logística del Ministerio de la Defensa Nacional, quien
informa que los señores David Ernesto Villalobos Aguilar y Marlon Alejandro Flores
Mercado, no poseen armas de fuego registradas a su nombre y no tiene licencia para el uso
de las mismas.
v.- Que, las declaración brindadas por la víctima identificada con la clave
Montenegro ha sido corroborada con información objetiva que se encuentra en el proceso,
es decir, con la prueba documental y pericial; y sobre esa base, se ha determinado que su
versión es cierta y verdades, acreditando los extremos objetivos del tipo penal, pues los
sujetos activos mediante el uso de armas de fuego ejercieron disparos con armas de fuego
contra agentes de la Policía Nacional Civil, y según el relato brindado por ellos, se advierte
que los disparos eran destinados a quitarles la vida; sin embargo, el hecho no fue
consumado, estableciéndose la figura imperfecta de Tentativa regulada en el artículo 24 del
Código Penal que establece que “hay delito imperfecto o tentado, cuando el agente, con el
fin de perpetrar un delito da comienzo o practica todos los actos tendientes a su ejecución
por actos directos o apropiados para lograr su consumación y esta no se produce por
causas extrañas al agente”.
Así las cosas, en el presente caso se acreditó una tentativa acabada, ya que los
imputados realizaron todos los actos necesarios para obtener el resultado –muerte de la
víctima- pero por razones ajenas a su voluntad, en este caso, ante la reacción inmediata de
los agentes policiales, evitaron que los hechos se consumaran. Sin embargo, este Tribunal
estima que las acciones de los acusados se adecuan a la descrita en las disposición legal
mencionadas, y únicamente a lo contenido en el Art. 128 Pn., del Homicidio en su figura
básica, pues las agravantes no fueron probadas, situación que se desarrollará en su apartado
correspondiente, por lo que deberá calificarse definitivamente el delito de Homicidio
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ii.- No obstante, este tribunal tiene por sentado que ambos testigos estaban en el
lugar de los hechos realizando pesquisas como un acto de investigación por pertenecer a la
corporación policial y fue precisamente en el desempeño de sus funciones por órdenes
mediante una dirección funcional que pudieron haber tenido de sus superiores o por
dirección fiscal estaban realizando dicha actividad de investigación en el lugar de los
hechos, y es cuando según refiriera el testigo clave Montenegro que observaron a dos
sujetos conocidos, perfilados con nombres y alias como miembros de la mara salvatrucha
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entre los más buscados de la zona; asimismo, mencionó el testigo con régimen de
protección que, ambos sujetos al observar la presencia policial, estos comienzan a
efectuarles disparos con armas de fuego, y ante dicho ataque, según lo declarado por la
víctima, buscan cubrirse o asegurarse a fin de no ser impactados por un disparo; como
consecuencia, en la función de agentes de seguridad pública proceden a dar persecución a
los dos sujetos, y a preguntas aclaratorias realizadas por la suscrita Juez, la víctima
mencionó que la persecución duró un aproximado de quince minutos; y aunque no se logró
la captura de los dos sujetos activos, ya que estos corrieron hacia un barranco o vaguada
como lo refiera la víctima, y por lo escabroso del terreno, provocó la imposibilidad que los
agentes policiales pudieran dar alcance a los imputados, sin embargo, durante el
interrogatorio al que fue sometido la víctima, mencionó que los dos sujetos estaban
perfilados en los archivos policiales como miembros de la mara salvatrucha de la zona, son
conocidos con los alias de el “cruel” y “maniaco o sambo”, el primero identificado como
Marlon Alejandro Flores Mercado; y el segundo, como David Ernesto Villalobos
Aguilar. Finalmente, mencionó que al imputado Flores Mercado durante la persecución
arrojó una mochila que contenía entre otros objetos un arma de fuego.
iv.- Que, por medio de actas en la que consta los cardex fotográficos o
reconocimiento por fotografía en sede fiscal, agregados a folios 35 a 46, realizado en el
interior de la oficina de la Sección de Delitos Relativos a la Vida del Departamento de
Investigaciones de la Policía Nacional Civil, de la Delegación Policial de Ciudad Delgado,
los días veintiséis y veintinueve de octubre del año dos mil diecisiete, se determinó en un
inicio la identidad de los sujetos que participaron activamente en los hechos, pues las
víctimas Montenegro y Vengador señalaron que la persona referida con el alias de
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vi.- Este Tribunal considera con los abundantes medios probatorios valorados bajo el
Principio de Libertad Probatoria conforme a los Arts. 176 y 177 del CPP., que la
individualización de los imputados quedó debidamente demostrada través de los actos
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los agentes, a fin de evitar ser capturados por el delito de Portación Conducción Ilegal o
Irresponsable de Armas de Fuego; consecuentemente, los procesados huyen de la escena de
los hechos evitando ser capturados por los agentes policiales.
viii.- Los hechos anteriores, fue objeto de debate por la defensa técnica, quien
solicitó el cambio de calificación del delito de Homicidio Agravado en grado de Tentativa
al delito de Disparo de Arma de fuego, previsto y sancionado en el Art. 147-A del CP., el
cual prescribe: “El que dispare arma de fuego contra una persona sin intención homicida
que pueda deducirse de las circunstancias en que el disparo fue ejecutado, será
sancionado con prisión de uno a tres años, siempre que no causare daño personal.
Quien de forma injustificada alguna, disparare arma de fuego en lugar habitado, en
su vecindad, en la vía pública o en sitio público frecuentado, será sancionado con prisión
de seis meses a dos años.
Si resultaren lesiones el hecho se considerará, por regla general como homicidio
tentado a menos que el juez estimare por la situación de las lesiones por la poca gravedad
de éstas o por otras circunstancias que no hubo intención de matar. en este caso, se
aplicará la sanción que corresponda al delito de lesiones cuando éstas tengan mayor pena
que el delito de disparo; pero si las lesiones tuvieren menor pena, se aplicarán las reglas
del concurso ideal de delitos.
“Si el disparo se ejecuta contra un miembro de la policía nacional civil o de la
fuerza armada en el ejercicio de sus funciones se impondrá el límite máximo de la pena,
aumentada hasta en una tercera parte.
-Sin embargo, el tipo penal en comento es realizado bajo el supuesto cuando el
sujeto activo dispara un arma de fuego, pero sin ningún objetivo o fin específico, es decir,
no existe un objeto o ser a qué disparar careciendo la voluntad e intención de ocasionar o
consumar un homicidio, siendo un delito de peligro abstracto que se realiza al disparar un
arma de fuego, en uno de los lugares mencionados en el artículo anterior, llevándose a
proteger como bien jurídico, la vida o la integridad física de las personas, que podrían
encontrarse cerca del lugar, en el que se realizan los disparos.
-No obstante, la conducta realizada por los imputados Marlon Alejandro Flores
Mercado y David Ernesto Villalobos Aguilar, fue dirigida con un animus necandi
cobrando una especial relevancia para calificar la gravedad de la conducta, en el delito de
Homicidio en grado de Tentativa, ya que según lo refiriera la víctima clave Montenegro,
los imputados al ver la presencia policial deciden disparar en contra de las víctimas; y
aunque no hubo lesiones en la integridad física de los sujetos pasivos se ha valorado
diversas circunstancia a través del testimonio de clave Montenegro que prevén el ánimo o
intención de causar una lesión o muerte al disparar las armas de fuego asumiendo los
imputados los resultados que pudieron haber causado por la externalización de la conducta,
por lo tanto, quedó probada la intención de los sujetos activos al momento de accionar el
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arma de fuego que portaban, pues la nota diferenciadora para decantarse por la ocurrencia
del delito de Homicidio Tentado o Imperfecto y/o. Disparo de Arma de Fuego, lo
constituye esencialmente la posibilidad de establecer de manera inequívoca el animus
necandi, tal como ha sucedido en el presente caso, donde claramente se define la acción
que los procesados realizaron para intentar ocasionarle la muerte con un medio idóneo,
específicamente armas de fuego, pero a la rápida intervención de los agentes policiales y a
su experiencia o entrenamiento se resguardaron, protegiéndose a fin de evitar los impactos
de bala, logrando repeler el ataque y evitando que el hecho se consumara.
-Que, dicho lo anterior, es improcedente acceder al cambio de calificación jurídica
del delito y mantenerse la conducta realizada por los imputados Marlon Alejandro Flores
Mercado y David Ernesto Villalobos Aguilar, dentro del tipo de penal de Homicidio
Imperfecto o Tentado, previsto y sancionado en el Art. 128, en relación a los Arts. 24 y 68
del Código Penal, no obstante, las agravantes acusadas por el Art. 129 N°3 del Código
Penal no han sido probadas, ni fueron detalladas dentro de la tesis fiscal debiéndose
analizar la situación en el siguiente apartado.
que ha sido probada en el presente caso, pues el procesado fue sorprendido por la víctima
clave Montenegro portando un arma de fuego, misma que fue utilizada para provocar un
ataque en contra de los sujetos pasivos, y aunque la calidad que poseían como agentes de
autoridad pública es que dieron persecución al imputado Flores Mercado y al otro
acusado, observando que éste arrojara el arma en el interior de una mochila.
-Sin embargo, ante la acusación en contra del imputado Marlon Alejandro Flores
Mercado, por los delitos de Tenencia, Portación o Conducción Ilegal o Irresponsable de
Armas de Fuego, tipificado y sancionado en el Art. 346-B letra “a” del Código Penal, en
perjuicio de la Paz Pública; y Homicidio Simple Imperfecto o Tentado establecido en el
artículo 128 en relación a los Arts. 24 y 68 del Código Penal, en perjuicio de la vida de las
víctimas Montenegro y Vengador; si bien es cierto son dos bienes jurídicos diferentes, -la
Paz Pública y vida de las víctimas Montenegro y Vengador- deberá aplicarse la reglas
contenidas en el concurso aparente de leyes, sobre la base del Art. 7 N° 3 del Código Penal,
que establece “El precepto penal complejo absorberá a los preceptos que sancionan las
infracciones consumidas en aquél”.
-Por lo anterior, encontrándose las conductas realizadas por el imputado Flores
Mercado ante una relación de consunción o absorción que implica el contenido de ilícito y
la culpabilidad de un delito incluidos en otro, es decir, que la realización de un tipo (más
grave), por lo menos por regla general, incluye la realización de otro (menos grave);
implica que deberá subsumirse el delito Tenencia, Portación o Conducción Ilegal o
Irresponsable de Armas de Fuego, al tipo penal de Homicidio Simple Imperfecto o
Tentado establecido en el artículo 128 en relación a los Arts. 24 y 26 del Código Penal, en
perjuicio de la vida de las víctimas Montenegro y Vengador.
subyace la facultad de interponer Recurso de Apelación dentro de los diez días posteriores a
su formal notificación.
NOTIFÍQUESE.