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Preguntas Frecuentes

FRECUENTES:
1 Y 2 TESALONICENSES
Trasfondo de 1 Tesalonicenses

Esta es probablemente la carta más antigua que tenemos de Pablo. SU trasfondo se encuentra en Hechos
17: Pablo y Silas fueron a la ciudad griega de Tesalónica para predicar el Evangelio de lo cual nació la
primera comunidad de iglesias formada por judíos y griegos. El anuncio de que Jesús era el Señor del
mundo no tardó en traer problemas a esta comunidad, acusada por los romanos como un desacato a la
autoridad del César. Esto produjo una gran persecución, al punto de que Pablo y Silas debieron huir de la
ciudad. Esta carta que nos ocupa es el intento de Pablo de volver a conectar con los cristianos de
Tesalónica, una comunidad de cristianos que a pesar de la adversidad estaba creciendo fielmente en su
seguimiento a Jesús, el único Señor.

¿Cómo se estructura Pablo la carta de 1 de Tesalonicenses?

La carta de basa en torno a dos movimientos principales: 1) Celebración de la fidelidad de los


tesalonicenses (1-3). 2) Reto a seguir creciendo como seguidores de Jesús (4-5). A su vez, hay tres
oraciones fundamentales en la carta: La primera está al principio de la primera parte (1:1-5), la segunda es
una oración de transición, entre la primer y la segunda parte de la carta (3:11-13) y la tercera es una
oración de conclusión, situada final de la segunda parte de la carta (5:23-28).

¿De qué temas trata 1 Tesalonicenses?

1) Celebración de la fidelidad de los tesalonicenses (1-3)

La primer oración de Pablo es una acción de gracias por la fe de los Tesalonicenses (1:1-5), su amor por los
demás y esperanza en Jesús a pesar de la persecución. Pablo les recuerda que su historia de conversión.
Les recuerda que ellos antes eran idólatras y todo lo que hacían en su vida estaba perreado por las
instituciones y prácticas de honra a los dioses griegos y romanos. Pero hace esto apra recordarles que
los dejaron aquellos ídolos para servir al Dios vivo y verdadero disponiendo en la actitud de esperar la
venida de Jesús.

En una ciudad como tesalónica, transferir tu lealtad al Dios creador de Israel y al Rey Jesús tenía un
costo: aislamiento familiar y social. Pero para los Tesalonicenses el amor de Jesús, quien murió, resucitó
y volverá, era motivo suficiente para soportar cualquier adversidad.

A continuación Pablo habla de sus relaciones personales con los hermanos de Tesalónica. Usando
metáforas muy íntimas y familiares. Pablo dice que se sintió como un hijo entre ellos, y que él se hizo
como padre de ellos. Al punto de decir: nos hemos complacido en compartir el Evangelio pero también la
propia vida (2:8). Pablo enseña que la esencia de su liderazgo no está en la autoridad, sino en las
relaciones saludables y el servicio generoso.
Pablo le establece un paralelismo entre Jesús, él y los tesalonicenses. Pues así como Jesús fue
rechazado y asesinado por su pueblo, también él está siendo perseguido por los judíos y los
tesalonicenses viven hostilidad por parte de sus conciudadanos griegos. De este modo, los sufrimientos
que juntos padecen son una forma de participar en la vida y resurrección de Jesús (2:13-16).

Pablo relata que cuando supo de las persecuciones padecidas por los tesalonicenses entró en una gran
amargura. Por eso, envió a Timoteo para cuidarlos en el camino de la fe. (2:17-3:10).

Aquí encontramos la oración de transición (3:11-13): en ella ora para que Dios siga haciendo su capacidad
de amar y fortalezca su compromiso con la santidad.

2) Reto a seguir viviendo como seguidores de Jesús (4-5)

Pablo reta a sus hermanos a seguir viviendo una vida consistente con las enseñanzas de Jesús.

Lo primero que de aquí se implica es el compromiso con la santidad y la pureza sexual. En contraste con
la promiscuidad de su alrededor, están llamados a seguir la enseñanza de Jesús a vivir la sexualidad de
experimentar la belleza y poder de la sexualidad dentro del refugio de una relación de pacto matrimonial
comprometida. Dios toma en serio la impureza sexual, dice Pablo, pues esta destruye a las personas y su
dignidad (4:1-8).

Seguir a Jesús también implica el compromiso de amar y servir a los demás. Por ello los cristianos deben
ser conocidos en la ciudad como personas confiables y trabajadoras para generar recursos para sí y para
los necesitados (4:9-12).

Después Pablo trata temas referentes a la esperanza que los cristianos tenían sobre la esperanza en el
regreso de Jesús (4:13-18). Frente a ello, intenta responder ante preguntas pastorales: algunos cristianos
habían muerto, probablemente asesinados como como mártires. La pregunta era: ¿cuál sería de ellos
cuando Jesús regresara si no estaban ya presentes? Pablo deja claro que a pesar del dolor y la pérdida ni
si quiera la muerte puede separar a los cristianos del amor de Jesús. Los que murieron en el Mesías se
levantarán (4:16).

Pablo dice que Jesús vendrá como un rey y será recibido por una delegación de su pueblo que se
encontrarán con él en el aire, dandole la bienvenida y escoltándolo hasta el mundo, donde Jesús
establecería su reino de justicia y paz.

Pablo recuerda que no es el César quién trae seguridad al pueblo (eso sí, a través de la violencia y el
poder militar). Frente a ello, hablo afirma que Jesús es el que regresará un día como rey confrontando
estas injusticias (5:2-3). Así que los seguidores de Jesús deben vivir en el presente como si Jesús ya
reinara plenamente, a pesar de la maldad humana. Los cristianos deben permanecer sobrios y alerta,
contemplando la luz de Dios, que resplandece aquí en la tierra como en el cielo (5:1-11).

Pablo concluye con una oración final (5:23-28). En ella pone su esperanza en que Dios perree sus vidas
con santidad, diferenciando a los creyentes para que sean devotos y sin culpa hasta el día del regreso
del rey Jesús.
1 Tessalonicenses recuerda que desde el principio seguir a Jesús como único Rey genera una forma de
vivir contraculturas y santa/apartada, lo que no está exento de hostilidad por parte de nuestro vecinos
y familia. Pero la respuesta de los seguidores de Jesús ante la hostilidad debe ser el amor, enfrentando la
oposición con gracia y generosidad. Motivados a vivir en la esperanza del reino venidero de Jesús, que ya
comenzó con su resurrección.

Trasfondo de 2 Tesalonicenses

No mucho después de escribir 1 Tesalonicenses, Pablo recibió noticias de que los problemas tratados en
la carta anterior habían continuado y empeorado. Las persecuciones se habían intensificado y los
cristianos estaban atemorizados y confundidos respecto del regreso de Jesús.

¿Cómo se estructura la carta de 2 Tesalonicenses?

Pablo estructura la carta en tres partes, abordando los tres problemas fundamentales a los que quiere
dar respuesta.: 1) Esperanza en medio de la persecución; 2) esclarece cuestiones sobre la venida del
Señor; 3) reto a los ociosos. Como en el caso anterior, las oraciones son fundamentales.

1) Esperanza a pesar de la tribulación

Pablo sabe que sus vecinos griegos y romanos han intensificado la persecución a los cristianos. Esta
minoría se enfrenta a una violenta persecución que pone en tela de juicio su seguimiento al Señor (1:1-3).
Por ello, Pablo lee recuerda que su sufrimiento, al estar asociado a Jesús, es una forma de participar del
Reino de Dios. Jesús fue coronado por su sufrimiento en la cruz, por lo que sus seguidores mostrarán su
victoria en el mundo través de la no violencia y la actitud de perseverancia que encontramos en Jesús
(1:4-12).

Pablo les recuerda que este dolor no durará para siempre. Puesto que cuando Jesús regrese
implementará su justicia sobre los que han derramado sangre inocente, siendo su castigo la exclusión
de su presencia y la gloria de su poder (1:9). Pablo especula sobre el destino de los que rechazan a Jesús,
excepto para decir que quienes a lo largo de sus vidas excluyeron a Jesús, al final obtendrán lo que
desean: ser distancias de una relación con su creador y rey. Para Pablo, ¡esta es la peor de las tragedias!
¿Por qué elegir la separación de Jesús, fuente de vida y amor? ¿Por qué abrazar la propia perdición?

Pablo cierra esta parte con una oración (1:11-12). Ora para que el Señor use el sufrimiento de sus hermanos
para cambiar su carácter de modo que sus vidas honren el nombre de Jesús.

2) El día del Señor

Pablo trata un tema específico: el regreso de Jesús y el día del Señor. Unos maestros ponían en Pablo
palabras que él no había pronunciado.
Decían que el acto final de la justicia de Dios sobre la maldad humana (día del Señor) ya había llegado.
Esto pudo venir de la mano de predicciones sobre distintas fechas sobre el fin de los tiempos. No
obstante, estos predicadores asustaban y angustiaban a los cristianos. Quienes en un medio de
persecución, podían llegar a pensar que Jesús había venido y ellos habían sido dejados atrás. ¿Habría
Dios abandonado a los tesalonicenses en su sufrimiento?

Para Pablo, esto era una completa distorsión de su enseñanza. Pues el regreso de Jesús no debía
provocar miedo, sino esperanza y confianza.
Para contrarrestar esta enseñanza les hace un resumen de lo que es realmente el regreso del Señor. Esta
explicación es breve pero profunda, no obstante su interpretación es difícil. Lo que queda claro es que
Pablo cita a Isaías (Is 13-14) y Daniel (Dan 7-12) cuando dice que los reinos de este mundo producen
gobernantes en rebeldía contra Dios, tal como lo hicieron Nabucodonosor y el rey del norte. El pecado de
estos reyes fue exaltarse a sí mismos y asignarse autoridad divina. Para Pablo, estos antiguos reyes
y profecías nos muestran un Platón que se ve cumplido por los emperadores romanos: Calígula y Nerón.
Esta escala solo podría llevar a un último gobernante, “el rebelde”, quien desataría el caos y la violencia
en el mundo de Dios. Aunque esto no será para siempre. Pues cuando Jesús regrese confrontará al
rebelde y quienes cometen maldad, para librar a su pueblo.

Así, el punto de Pablo no es alentar la especulación sobre la fecha de los últimos tiempo o los agentes
protagonistas, sino consolar a los tesalonicenses. Pablo recuerda las enseñanzas de Jesús en Marcos 13.
Quien dijo que los anuncios que darían pie a su regreso serían públicos y evidentes. De moto que ningún
cristiano necesita estar atemorizado por haber sido dejado atrás. Lo que les compete es ser fieles hasta
que Jesús regrese.

En su oración final (2:16-17), Pablo le pide a Dios que fortalezca a los Tesalonicenses para que sigan fieles
al camino de Jesús.

3) Un reto a los ociosos

Todo lo anterior prepara el camino para que Pablo lance un reto a los ociosos. Los ociosos no son
solamente los perezosos, sino quienes se muestran irresponsables, negándose a trabajar para
sostenerse a sí mismos. Pablo había tratado este tema en 1 Tes 4:10-12,5:14).

Sin embargo, este tema empeoró por algún motivo. Probablemente las personas se negaban a trabajar
por lo mencionado anteriormente. Algunos podían pensar que Jesús regresaría tan pronto que no era
necesario trabajar. Pero es más probable que Pablo hable con un problema relacionado con una práctica
de cultura romana llamada “patrona”. Esta cultura consistía en aprovechar la pobreza de las personas
para convertirlas en sirvientes personales de los ricos.

Los sirvientes en ocasiones se veían involucrados en la forma corrupta que muchos patrones tenían de
vivir, comprometiendo su fe. Sin mencionar que su salario era impredecible. Parece ser que a estos se
refiere Pablo cuando los acusa de llevar una vida desordenada, sin trabajar e inmiscuidos en los asuntos
de otros.
Pablo les recuerda cuál fue su ejemplo: nunca les pidió dinero, trabajó para sostenerse y se dedicó a sus
hermanos. Este es su ideal de servicio: imitar a Jesús en su servicio para poderse entregar por los
demás.

Pablo concluye con una oración (3:16-18), para que Dios conceda paz en medio del sufrimiento a través de
Jesús, el mesías.

Esto nos ayuda a ver que la creencia de los cristianos en el regreso de Jesús y la esperanza en el juicio
final, no eran ideas que deben llevar a especulaciones sobre las fechas de los tiempos apocalípticos, sino
creencias que trajeran esperanza, devoción y fidelidad a Jesús, especialmente para los cristianos
perseguidos con violencia y oposición.

Para las futuras generaciones, sean que vivan o no persecución, esta carta enseña lo siguiente: lo que
esperamos que suceda moldea aquello por lo que vives.

Bibliografía:
BibleProject - Español. Lee la Biblia: 1 y 2 Tesalonicenses

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