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RESUMEN
1. INTRODUCCIÓN ...................................................................................................... 1
4. RESULTADOS .......................................................................................................... 11
5. DISCUSIÓN .............................................................................................................. 51
6. CONCLUSIONES ..................................................................................................... 65
7. AGRADECIMIENTOS ............................................................................................ 68
8. REFERENCIAS.......................................................................................................... 71
I
RESUMEN
A pesar de la considerable atención que han recibido los ecosistemas de manglar,
estos siguen desapareciendo como consecuencia de diversas actividades
socioeconómicas llevadas a cabo en zonas circundantes a los bosques de mangle;
estas pueden generar, en mayor o menor grado, estrés e impacto en el desarrollo,
evolución y conservación de estos ecosistemas. La siguiente investigación evalúa la
pérdida de la estructura y función de los ecosistemas de mangle que bordean el
Golfo de Fonseca, como consecuencia del estrés ocasionado por el desarrollo de las
actividades antrópicas y los efectos de eventos hidrometereológicos. Esto basado en
el diagnóstico ambiental de las condiciones fisicoquímicas del agua intersticial y
suelo, así como variables biológicas. Para este fin, se definió la similitud de las
características ambientales del agua intersticial y suelo, además de los atributos
forestales, mediante un análisis de conglomerado jerárquico (clúster), a partir de la
información generada en campo y análisis en laboratorio. Los resultados exhiben
como factor determinante de los atributos forestales (área basal y altura) a la
concentración de la salinidad, compuestos nitrogenados oxidados y fosfatos de tipo
antrópico en el agua intersticial. Se definen diferencias significativas entre El
Salvador, Honduras y Nicaragua, con respecto a la salinidad y potencial redox del
agua intersticial; las cuales presentaron cambios en la distribución de especies,
siendo Laguncularia racemosa y Avicennia germinans quienes se vieran beneficiadas a
lo largo de la costa del Golfo de Fonseca y baja tasa de regeneración natural; como
respuesta a los parámetros físicos y químicos del agua intersticial, estableciéndose
condiciones ambientales en general en el ecosistema de manglar, de tipo óxicas a
hipóxicas y en algunos bosques de mangle de Nicaragua hasta anóxicas (-300 mV);
con condiciones más reducidas a una profundidad de 15 a 45 cm en el suelo en
Honduras y Nicaragua (hasta -400 mV); propiciando inhibiciones enzimáticas y
fotosintéticas, cambiando con ello la dominancia de las especies y estableciéndose
bosques secundarios, con dominancia de las especies más resistentes y capacidad de
invasión de hábitat con tiempos de residencia del agua altos y menor inundación,
así como concentraciones altas de salinidad y nutrientes. Esto último, al registrar
II
altas concentraciones de compuestos nitrogenados, desde 6.9 a 10.3 mgL-1 (NO2-) y
fosfatos desde 0.27 a 4.0 mgL-1 (PO4-3) en el agua intersticial; condiciones de tipo
eutróficas hasta hipertróficas. Condiciones ambientales generadas por las extensas
hectáreas de salineras y granjas camaroneras, altas tasas de crecimiento poblacional
y limitadas oportunidades económicas, fragmentación del hábitat y cambios
hidrológicos, deforestación derivada de la extracción de la madera para uso como
leña y aprovechamiento de taninos, descargas de agua residual con altos niveles de
nitrógeno y aporte constante de sedimentos; causantes de azolvamiento, acreción y
eutrofización. Derivado de los escenarios antes descritos, se establece en general
como conservados y conservación media, los bosques de mangle de El Salvador, con
baja a mediana vulnerabilidad y baja. Para el manglar de Honduras se definió como
conservados y baja conservación, presentando mediana y baja vulnerabilidad. En el
caso de Nicaragua los manglares exhibieron mediana a baja conservación y baja, con
vulnerabilidades bajas y altas. Con base en el grado de conservación y
vulnerabilidad se establece que las políticas ambientales— para restaurar, preservar
y conservar — a los manglares del Golfo de Fonseca deberán ser planeadas a partir
de la información generada por cada sitio, considerando la presión y las posibles
acciones para mitigar el estrés que ocasionan las diversas actividades antrópicas de
la cuenca alta y baja— visión integral, a gran escala y “justo a la medida” (por sitio)
—; y por ende los servicios ecosistémicos que estos proveen. En conjunto de la
actualización de la legislación ambiental vigente que permita preservar, conserva y
restaurar los humedales de mangle a partir del estado actual, derivado de su
fragilidad y fuerte presión antrópica que se ha registrado históricamente, los
manglares de El Salvador, Honduras y Nicaragua deberán ser zonificados de
acuerdo con los usos potenciales que posean. Al zonificarse, se deberá incluir, en
todos los casos, un área núcleo de protección imperiosa. Donde en ella se deberán
mantener muchos de los servicios y funciones que de forma natural proveen como
ecosistema de mangle; mediante un programa de vigilancia a nivel federal y en
colaboración entre los países que componen el Golfo de Fonseca. La extensión de las
zonas núcleo deberán estar delimitadas a partir de la presión de uso que esta posea.
Con la finalidad de potencializar la capacidad de fitorremediador que se le atribuye
al manglar y con ello disminuir el impacto en la calidad del agua por efluentes de
los estanques para camarones y en la misma permanencia de la cobertura y grado
de salud. Así como, considerando las proyecciones que indica la FAO para los años
III
2020 y 2080 sobre el aumento de más de 4°C en la temperatura y déficit de la
precipitación para las costas del Pacífico y costas del Golfo de Fonseca.
IV
1. INTRODUCCIÓN
El Golfo de Fonseca, es un entrante protegido del océano Pacífico, con una extensión
de 3,200 km2, aproximadamente, localizado al oeste de Centroamérica, con límite al
noroeste con El Salvador, al noreste y este con Honduras y al sur con Nicaragua.
Estos humedales están representados por los bosques de manglares, con una
extensión total en toda la costa del Golfo de Fonseca de 75,589 ha, distribuidas
principalmente en las costas de Honduras, con 62%; Nicaragua del 32%, y para El
Salvador en un 6% (Ellison, 2004). Derivado de su importancia ecológica, en la
Ecorregión Central y del Caribe, es considerado, a nivel internacional, como uno de
los 25 sitios prioritarios para la conservación marina y costera. Debido a que, se
distribuyen gran cantidad y variedad de humedales, los cuales proveen fuentes
importantes de nutrientes para el mantenimiento de la producción pesquera y la
exportación de estos nutrientes a ecosistemas adyacentes.
Gran parte de esa pérdida se ha asociado a los impactos directos de las actividades
económicas como: camaronicultura, extracción de sal, expansión poblacional,
movilidad para el ingreso de buques abastecedores de combustible, productos de
exportación e importación, desarrollo turístico, construcción de carreteras,
producción ganadera, aportes de aguas residuales, contaminación de las cuencas
hidrográficas, agricultura de la llanura costera, entre otras. Además de los usos
comunes de la madera como: leña, material de construcción de casas, así como el
arte de pesca artesanal (peces, moluscos, etc). Destacándose que estas
transformaciones ocurrieron sin mantener la integridad del ecosistema o tomar en
cuenta las alteraciones al caudal de ríos y cauces naturales como los cambios hídricos
(Ellison, 2004; MARENA, 2008). Aunado a la fuerte presión que reciben los
manglares por la frecuencia de los eventos climáticos extremos; como los huracanes,
tormentas tropicales, lluvias y sequías extremas (PNUD, 2010). Por la falta de
lineamientos específicos que contribuyan al mantenimiento o recuperación de los
1
bienes y servicios ecológicos, así como socioeconómicos que proveen los manglares.
Al respecto, Rivera Monroy et al. (2002) indican que aproximadamente el 77% del
área cubierta por estanques para la producción del camarón en el Golfo de Fonseca,
se ubicó en Honduras en 1999 del total del territorio costero del Golfo de Fonseca.
2. MATERIALES Y MÉTODOS
2
Figura 1. Ecosistema de mangle que bordea el Golfo de Fonseca en Centroamérica
Estaciones de muestreo.
En cada sitio se analizó el bosque que bordea la línea costera, además de investigar
4 perfiles de vegetación; uno en El Salvador, otro en Honduras y dos más en
Nicaragua, donde se consideró la actividad antrópica que se desarrolla adyacente a
los bosques.
En los bosques que bordean El Salvador (ELS#), se establecieron cinco sitios, donde
se incluye en ELS5 el análisis de un perfil de vegetación; con dos franjas (Figura 1).
En Honduras se registraron 16 sitios (HND#), donde se incluye en HND18 un perfil
de vegetación; con dos franjas (Figura 1). En Nicaragua se registraron 7 sitios
(NIC#), con perfiles de vegetación de tres franjas en NIC27 y NIC28 (Figura 1). #:
número de estación.
Agua intersticial
4
Figura 2. Colecta de datos in situ de los parámetros fisicoquímicos del agua
intersticial en bosques de mangle que bordean el Golfo de Fonseca en El Salvador,
Honduras y Nicaragua.
5
2.3. Suelo
6
De los 70 núcleos colectados, se evaluó la densidad aparente del suelo, como un
indicador indirecto del comportamiento del hidroperiodo de los bosques de mangle,
generándose 204 datos en total en los 35 bosques.
Una vez identificadas las sub unidades de muestreo (parcelas) en cada sitio y franja
según fue el caso, se procedió a contar e identificar la especie de cada uno de los
árboles. Para árboles adultos de A. germinans, A. bicolor y Laguncularia racemosa se
midió el diámetro a 1.30 m de altura y en el caso de Rhizophora mangle y R. racemosa
la medición se llevó a cabo 30 cm, después de la última raíz. Se obtuvieron las alturas
aproximadas y se contó el número de fustes, según fue el caso (Figura 4).
7
incrementar la precisión en la toma de datos dasométricos en campo (Figura 5). Todo
lo anterior, considerando los criterios citados en Agraz Hernández et al. (2007).
8
Figura 6. Identificación de las especies in situ de acuerdo a las características en
hojas, flores y tallo. Bosque mixto de Avicennia germinans y Avicennia bicolor.
2.5. Bioindicadores
9
Figura 7. Bioindicadores de cambios en la calidad del agua, comportamiento del
hidroperiodo y establecimiento de especies derivado de las descargas de agua
residual rica en nutrientes (e.i. nitrógeno y fosfatos). Neumatoforos;
Enteromorpha sp.; arbustos de Laguncularia racemosa.
Se elaboró una base de datos con los atributos forestales (diámetro, altura, densidad)
y los parámetros fisicoquímicos del agua intersticial (pH, potencial redox,
temperatura, salinidad, nitritos, nitratos, amonio, sulfatos y fosfatos) y suelo
(potencial redox, pH y densidad aparente) en los bosques de mangle que bordean
El Salvador, Honduras y Nicaragua en el Golfo de Fonseca.
Se aplicó un análisis de varianza de una vía para determinar las diferencias entre los
sitios (áreas de manglares en estudio). Para este análisis se validó la normalidad de
las variables fisicoquímicas y atributos forestales por el método de Shapiro y Wilk
(1965) con un nivel de significancia de α = 0.05, al no cumplir con el supuesto de
distribución normal, se transformaron los datos usando el método de Box-Cox como
recomienda Zar (2010). Con la finalidad de determinar los parámetros ambientales
de mayor importancia del agua intersticial y variables biológicas (atributos
forestales) en los bosques de manglar, se aplicó un análisis de componentes
principales (ACP). Posteriormente, se realizaron análisis de correlación de Pearson
para establecer la relación entre los parámetros fisicoquímicos del agua intersticial
10
con respecto a los atributos forestales. Los análisis estadísticos se realizaron con un
nivel de significancia de α = 0.05, utilizando el programa Statgraphics Centurion
XVII software (Statpoint, 2014).
3. Permisos de importación
4. RESULTADOS
11
Fisher se ratifican estas diferencias significativas entre los bosques muestreados
(F5,11= 5.73; p=0.028).
Figura 8a. Parámetros físicos y químicos del agua intersticial, por estaciones en los
bosques de mangle que bordean El Salvador en el Golfo de Fonseca. *Piezómetro sin
agua.
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Por otra parte, se establecen a su vez diferencias significativas, en las
concentraciones de las salinidades del agua intersticial de El Salvador entre los
bosques muestreados de Honduras y Nicaragua (F2,59= 2.56; p=0.05).
Con respecto a los parámetros físicos y químicos del agua intersticial en los
manglares ubicados en Honduras se exhibieron, en general, condiciones de tipo
ácidas en un 59% y neutras de 41%, con dominancia óxicas en un 62% e hipóxicas
del 31%; el 7% restante fueron anóxicas (Figura 8b). La salinidad de tipo mesohalina
dominó en un 93% y euhalina en un 6.3% (HND18). Definiéndose tres
comportamientos: a) zona noroeste de tipo neutra, hipóxica y mesohalina, con
25.3oC; b) zona sur: ligeramente neutra, óxica y mesohalina, con temperaturas de
26.8oC y, c) zona noreste: ácida, óxica y euhalina, con 28.9oC (Figura 1 y 8b).
13
Figura 8b.Parámetros físicos y químicos del agua intersticial, por estaciones en los
bosques de mangle que bordean el Golfo de Fonseca en Honduras ubicados en el
Golfo de Fonseca.. *Piezómetro sin agua.
14
En los bosques de mangle de Nicaragua, se registraron condiciones ácidas, óxicas
tendientes a hipóxicas, así como euhalinas tendientes a mesohalinas, con
temperaturas de 27.4±2.0oC (Figura 1 y 8c). Estableciéndose diferencias significativas
entre los sitios en estudio, con respecto a la temperatura, al registrar las máximas en
NIC28, posterior NIC33 (F4,14=5.04, p=0.017).
Figura 8c. Parámetros físicos y químicos del agua intersticial, por estaciones en los
bosques de mangle que bordean en Nicaragua ubicados en el Golfo de Fonseca.
*Piezómetro sin agua.
15
Las condiciones antes citadas, fueron sustentadas mediante una ANOVA de una vía;
al definirse diferencias significativas entre El Salvador y Nicaragua, con respecto a
la concentración de la salinidad del agua intersticial (p≤0.05). Caso contrario a
algunas estaciones cercanas entre sí de El Salvador y Honduras (intersección)
(Figura 9). Así mismo, por las diferencias significativas a su vez, definidas con la
salinidad entre Honduras y Nicaragua (F2,59= 2.56; p=0.05), esto validado aplicar la
prueba post hoc de Fisher (Figura 9). Caracterizándose en general la salinidad en El
Salvador (40.5 ±14.3 g Kg-1; figura 8a) y Honduras (36.1±8.1 g Kg-1; figura 8b) como
mesohalina; caso contrario en Nicaragua, al registrar condiciones euhalinas
tendientes a mesohalinas (45.0 ±19.5 g Kg-1; figura 8c).
50
CB
Salinidad (g/ kg)
45
A
40
A B
35
30
El Salvador Honduras Nicaragua
País
La desviación estándar agrupada se utilizó para calcular los intervalos.
Figura 9. ANOVA de una vía aplicada con las concentraciones de la salinidad del
agua intersticial de 35 bosques de mangle distribuidos en el Golfo de Fonseca en El
Salvador, Honduras y Nicaragua.
16
estas la diferencia de El Salvador, con respecto a Honduras y Nicaragua, así como la
similitudes de estos dos últimos países (Figura 10).
-100
-120
A
-140
Redox (mV)
-160
-180 B B
-200
-220
-240
-260
El Salvador Honduras Nicaragua
País
La desviación estándar agrupada se utilizó para calcular los intervalos.
Figura 10. ANOVA de una vía aplicada con los valores del potencial redox en el
agua intersticial de 35 bosques mangle distribuidos en el Golfo de Fonseca en El
Salvador, Honduras y Nicaragua.
17
del agua en cada país, al detectarse mayores concentraciones de NOx, con
acumulación de fosfatos por país (Figura 11 a,b,c).
18
Figura 11a. Concentración de los nutrientes en el agua intersticial en los bosques de
mangle que bordean El Salvador ubicados en el Golfo de Fonseca.
19
Figura 12a. Concentración de los sulfatos en el agua intersticial en los bosques de
mangle que bordean El Salvador ubicados en el Golfo de Fonseca. * Piezómetro sin
agua.
20
Figura 11b. Concentración de los nutrientes en el agua intersticial en los bosques
de mangle que bordean en Honduras ubicados en el Golfo de Fonseca.
21
Figura 12b. Concentración de los sulfatos en el agua intersticial en los bosques de
mangle que bordean Honduras ubicados en el Golfo de Fonseca.
22
Figura 11c. Concentración de los nutrientes en el agua intersticial en los bosques de
mangle que bordean en Nicaragua ubicados en el Golfo de Fonseca.
23
Figura 12c. Concentración de los sulfatos en el agua intersticial en los bosques de
mangle que bordean Nicaragua ubicados en el Golfo de Fonseca.
24
4.2. Suelo
En general las condiciones fisicoquímicas del suelo en los bosques de mangle que
bordean el Golfo de Fonseca se caracterizaron como ácidos ligeramente neutros, con
condiciones óxicas al noroeste, hipóxicas con tendencia anóxicas hacia el noroeste
(Figura 13) y conservando el criterio de ubicación espacial propuesto en el capítulo
de estructura forestal de esta investigación.
25
Figura 13a. Comportamiento de los parámetros fisicos y químicos del suelo en los
bosques de mangle que bordean El Salvador ubicados en el Golfo de Fonseca.
26
Los parámetros físicos y químicos del suelo en los manglares ubicados en Honduras
exhibieron dos comportamientos; en un 68.5% de los sitios HND6 a HND 18
condiciones ácidas (6.5±1.40) e hipóxicas-anóxicas (-263.91±129.19 mV) y el 31.3%
restante de tipo ácido (6.23±0.46) e hipóxico-óxico de HND19 a HND24 (-62±219.75
mV). En particular el bosque ubicado en HND16 registró condiciones de alta
alcalinidad (10.13±0.89) e hipoxia (-185.8±52.3 mV) (Figura 13b). La densidad
aparente del suelo fue registrada como media, de 1.03±1.10 g cm-3., comparada con
lo evaluado en El Salvador y Nicaragua.
27
Figura 13b. Comportamiento de los parámetros fisicos y químicos del suelo en los bosques de mangle que bordean
Honduras ubicados en el Golfo de Fonseca.
28
En los bosques de mangle de Nicaragua, se registraron condiciones ácidas (6.3±0.6)
y óxicas tendientes a hipóxicas (-59.9±224.9 mV), con densidad aparente alta, de
3.53±1.1 g cm-3 (Figura 13c).
Figura 13c. Comportamiento de los parámetros fisicos y químicos del suelo en los
bosques de mangle que bordean Nicaragua ubicados en el Golfo de Fonseca.
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4.3. Caracterización y fisonomía de los bosques de mangle
30
Tabla 1. Análisis de Componentes Principales (ACP), aplicado en parámetros
químicos en suelos de bosques de mangle. Con una acumulación del 68.4% de la
varianza total en los primeros 3 factores en los bosques de mangle del Golfo de
Fonseca en El Salvador, Honduras y Nicaragua. AI: agua intersticial.
Lo antes citado, valida a su vez que los factores que determinan en forma general
los atributos forestales, y por ende la fisonomía de los manglares del Golfo de
Fonseca en El Salvador, Honduras y Nicaragua, son la salinidad y la temperatura
del agua intersticial. Esto sustentado con los resultados de las correlaciones de
Pearson aplicadas entre las condiciones ambientales y los atributos forestales (Tabla
2).
31
Tabla 2. Correlaciones de Pearson en variables de importancia ambiental, con
respecto a los atributos forestales en el Golfo de Fonseca en El Salvador, Honduras
y Nicaragua.
Variables de importancia r P
Altura vs. salinidad -0.47 0.006
Altura vs. temperatura -0.40 0.031
32
En el caso de la fisonomía de los bosques de mangle de El Salvador, esta se
caracteriza como ribereños; borde con tendencia ribereño, y borde y cuenca con un
25% cada uno (Figura 14). Las especies dominantes son A. germinans (30%), R. mangle
(30%) y L. racemosa (20%), con presencia de R. racemosa (10%) y A. bicolor (10%)
(Figura 15). Esta fisonomía y dominancia de las especies están inversamente
relacionadas con la concentración de la salinidad y el nivel trófico del agua
intersticial, que a su vez este último establece el grado de disponibilidad de oxígeno
disuelto en el agua intersticial. Esto validado al aplicar una prueba de ACP con los
parámetros fisicoquímicos del agua intersticial, pues los factores regulatorios del
área basal y la altura de los árboles se establecieron en un 67.2% del total de la
varianza a partir de la concentración de la salinidad, sulfatos y nitritos. Así como el
grado de óxido reducción en el suelo (potencial redox); definido lo anterior en los
componentes 1 y 2, donde explican el 51.9% de la tendencia fisonómica de los
bosques y dominancia de las especies (Tabla 3). El tercer componente explica en un
15.4%, las condiciones externas que los bosques de mangle de El Salvador enfrentan
actualmente, esto al definir como factores determinantes a la temperatura del agua
intersticial y la densidad aparente del suelo; además del potencial redox y la
concentración del amonio en el agua intersticial (Tabla 3).
33
Tabla 3. Análisis de Componentes Principales (ACP), aplicado en parámetros
químicos en suelos de bosques de mangle. Con una acumulación del 67.2% de la
varianza total en los primeros 3 factores en los bosques de mangle en El Salvador
del Golfo de Fonseca en El Salvador, Honduras y Nicaragua. s: suelo; AI: agua
intersticial.
Los manglares que bordean las costas de Honduras se tipificaron como ribereño en
tan solo un 6.1%, borde con tendencia ribereño y borde con 31.3%, cuenca en un
18.8%, el restante se establece como matorral y matorral con tendencia cuenca, con
25% y 18.8%, respectivamente (Figura 14). Se registró como especie dominante R.
mangle, seguido por L. racemosa y con presencia de A. germinans (13.8%) (Figura 15).
Estos parámetros dasométricos y dominancia de las especies se encuentran
regulados por la temperatura, la concentración de la salinidad y nitritos del agua
34
intersticial (factores determinantes). Lo anterior, validado mediante los resultados
de la prueba de ACP al definir en un 53.9% los como factores regulatorios, el
comportamiento del área basal y la altura de los árboles (Tabla 4). Donde en un
23.4% la concentración de la salinidad y el nivel trófico está influenciando el
comportamiento de los atributos forestales, el 17.2% la relación inversa entre el
potencial redox del suelo, la concentración de la salinidad, sulfatos y amonio del
agua intersticial. El 12.4% restante define la disponibilidad de los nitritos en el agua
intersticial, derivado de la relación indirecta con el potencial redox en el agua
intersticial (Tabla 4).
35
Tabla 4. Análisis de Componentes Principales (ACP), aplicado en parámetros
químicos en suelos de bosques de mangle. Con una acumulación del 53.9% de la
varianza total en los primeros 3 factores en los bosques de mangle en Honduras del
Golfo de Fonseca. AI: agua intersticial; s: suelo.
37
A través de los resultados obtenidos de las correlaciones de Pearson, se valida a su
vez como la fisonomía (atributos forestales) en los bosques de mangle de Nicaragua
se encuentran reguladas por la temperatura y salinidad del agua intersticial (Tabla
6).
Variables de importancia r P
38
Figura 14. Atributos forestales y tipos fisonómicos en el ecosistema de manglar que bordean el Golfo de Fonseca. E#: Sitio de muestreo;
F#: número de franja; F1: bosque ubicado en la orilla del agua; F2, F3: bosque interno.
39
Figura 15. Dominancia de las especies de mangle que bordean el Golfo de Fonseca. E#: sitio de muestreo.
40
4.4. Bioindicadores
41
con 44% para juveniles y 89% para plántulas. En el caso de Honduras, las plántulas
se presentaron en un 47.1% de los sitios analizados y en el caso de El Salvador se
registraron plántulas y juveniles en el 40% del total del territorio analizado. En
particular la mayor densidad de plántulas de mangle se definió en Honduras, con
3491±355 plántulas ha-1, seguido de Nicaragua, de 2731±1799 plántulas ha-1 (Figura
17a). Así mismo, los juveniles se registraron con la mayor densidad en Honduras,
con 1543±609 juveniles ha-1, seguido de El Salvador, de 950±212 juveniles ha-1 (Figura
17b).
42
Figura 17a. Comportamiento de juveniles en el sotobosque de los bosques de mangle que bordean el Golfo de Fonseca en
El Salvador, Honduras y Nicaragua.
43
Figura 17b. Densidad y altura de plántulas en sotobosque en bosques que mangle que bordean el Golfo de Fonseca
en El Salvador, Honduras y Nicaragua.
44
4.5. Conservación y vulnerabilidad
Con base en los resultados de los modelos estocásticos utilizando los valores y concentraciones del agua intersticial y suelo,
así como las actividades antrópicas que ejercen un grado de estrés por bosque en estudio, se generaron las siguientes tablas
de ponderación para determinar el grado de conservación y vulnerabilidad.
Tabla 7 . Grado de conservación de los manglares que bordean El Salvador en el Golfo de Fonseca, con base en los resultados
de los modelos estocásticos utilizando los valores y concentraciones del agua intersticial y suelo, así como las actividades
antrópicas que ejercen un grado de estrés en el humedal, aplicando ponderaciones.
Nutrientes del
Potencial redox del agua
Salinidad (g Kg-1)
Desechos hospitalarios
Tipo fisonómico
urbanos adyacentes al
Cambios hidrológicos
Granjas camaroneras
borde por canales de
Producción de caña
Clasificación
Descargas de agua
residual urbana e
Construcción del
Suma total
intersticial
Construcción de
construcción de
Asentamientos
Asentamientos
Agroindustria
Azolvamiento
Nivel trófico
(Dragados o
Sitios
Ganadería
carreteras
industrial
humedal
urbanos
diques)
Salinas
riego
PO4-³
NO3-
SO4-²
Tala
ELS1 4 2.5 1.5 2.5 1.5 2 0 0 1 0 1 1 1 0 1 0 0 1 1 1 1 1 4 28 C
ELS2 1 2.5 3 3 2 1 0 0 1 0 1 1 1 1 1 0 0 1 1 1 1 1 2 26 C
ELS3 3 1.5 2.5 2 3 0 1 0 1 0 1 0 1 1 1 0 1 1 1 1 0 1 2 25 CM
ELS4 0 2.5 2.5 1.5 1.5 1.5 1 0 1 0 1 1 1 1 1 0 1 1 0 1 0 0 3.5 23 CM
1.7
0 1 1 0 1 0 25
ELS5 3 2.5 2.3 5 1.5 2 1 0 1 0 1 0 1 1 1 1 2 CM
1.7
1 1 0 0 1 1 1 1 1 28
ELS6 3 2.5 2.3 5 1.5 2 0 0 1 0 1 1 1 4 C
45
Tabla 8. Grado de vulnerabilidad de los manglares que bordean El Salvador en el Golfo de Fonseca, con base en los
resultados de los modelos estocásticos utilizando los valores y concentraciones del agua intersticial y suelo, así como las
actividades antrópicas que ejercen un grado de estrés en el humedal, se generaron las siguientes tablas de ponderación para
determinar el grado de conservación, aplicando ponderaciones.
Nutrientes del
Amenazas
agua intersticial
Potencial redox (mV) AI
(Dragados o construcción de
Salinidad (g Kg-1)
Asentamientos urbanos
Asentamientos urbanos
adyacentes al humedal
Desechos hospitalarios
Tipo fisonómico
Cambios hidrológicos
Granjas camaroneras
Producción de caña
Clasificación
urbana e industrial
Suma total
canales de riego
Agroindustria
Azolvamiento
Nivel trófico
Ganadería
diques)
Salinas
PO4-³
NO3-
SO4-²
Tala
ELS1 4 1 1 0.5 1.5 1 1 1 3 1 1 1 4 21 VA
ELS2 1 0.5 0.5 0 1 2 1 1 3 1 1 2 14 VB-M
ELS3 3 1 0.5 1 0.5 2 1 3 2 1 1 4 20 VA
ELS4 0 1 0.5 1 1.5 1 1 3 1 1 1 1 3.5 17 VM
ELS5 3 0.75 0.75 1.25 1 1 5 4 3 1 1 1 2.5 25 VA
ELS6 3 0.75 0.75 1.25 1 1 1 2 3 1 1 4 20 VA
VA: vulnerabilidad alta; VB-M: vulnerabilidad baja a media; VM: vulnerabilidad media
46
Tabla 9 . Grado de conservación de los manglares que bordean Honduras en el Golfo de Fonseca, con base en los resultados
de los modelos estocásticos utilizando los valores y concentraciones del agua intersticial y suelo, así como las actividades
antrópicas que ejercen un grado de estrés en el humedal, aplicando ponderaciones.
Nutrientes del
Salinidad (g Kg-1)
Tipo fisonómico
urbanos adyacentes
Producción de caña
borde por canales
Construcción del
Construcción de
Suma total
construcción de
intersticial
Asentamientos
Asentamientos
Agroindustria
Azolvamiento
camaroneras
Clasificación
Nivel trófico
hidrológicos
(Dragados o
al humedal
Sitios
Ganadería
carreteras
Cambios
de riego
urbanos
Granjas
diques)
Salinas
PO4-³
NO3-
SO4-²
C: conservado; CM: conservación media; CM-B: conservación media a baja; CB: conservación baja;
47
Tabla 10. Grado de vulnerabilidad de los manglares que bordean Honduras en el Golfo de Fonseca, con base en los
resultados de los modelos estocásticos utilizando los valores y concentraciones del agua intersticial y suelo, así como las
actividades antrópicas que ejercen un grado de estrés en el humedal, aplicando ponderaciones.
Suma de impactos
Tipo fisonómico
Clasificación
borde por canales
Construcción del
Construcción de
construcción de
Asentamientos
Asentamientos
Producción de
Agroindustria
Azolvamiento
adyacentes al
camaroneras
Nivel trófico
hidrológicos
(Dragados o
Sitios
Ganadería
carreteras
humedal
Cambios
de riego
urbanos
urbanos
AI
Granjas
diques)
Salinas
PO4-³
NO3-
SO4-²
caña
HND6 4 0.5 1 0 0.5 1 1 1 1 1 1 3.5 16 VB
HND7 4 0.5 1 0.5 1 0.5 1 1 2 4 16 VB
HND8 4 1 0.5 0 0 2 1 1 2 3.5 15 VB
HND9 4 1 1 1 0 1 1 1 2 2 14 VB
HND10 4 0.5 1 0 1 0.5 1 2 1 1 3 3 1.5 20 VM
HND11 1 0.5 0.5 1 0 0.5 2.5 1 1 3 1 12 VB
HND12 1 1 0.5 1 0 1.5 2.5 1 3 2 14 VB
HND14 4 0.5 1 0.5 1 1 2.5 1 1 1 2 1 1 18 VM
HND15 3 1 0.5 0 1 2 2.5 1 1 1 13 VB
HND16 4 0 1 1 0 2 2.5 1 2 3 17 VB
HND17 4 0.5 2 0 0.5 0.5 5 1 3 3 20 VM
HND18 1 1 0.5 1 0.3 0.8 5 1 1 3 1 16 VB
HND19 1 0.5 1 0 0 1 1 1 2 1.5 9 VB
HND20 1 1 1 2 0.5 1 1 1 1 3 1.5 14 VB
HND21 4 0.5 1 0 0 0.5 1 1 2 1 2 3 16 VB
HND24 4 1 1 0 1.5 1 1 1 1 1 1 2 16 VB
48
Tabla 11. Grado de conservación de los manglares que bordean Nicaragua en el Golfo de Fonseca, con base en los resultados
de los modelos estocásticos utilizando los valores y concentraciones del agua intersticial y suelo, así como las actividades
antrópicas que ejercen un grado de estrés en el humedal, se generaron las siguientesaplicando ponderaciones.
Nutrientes del
agua intersticial Amenazas
Salinidad (g Kg-1)
construcción de diques)
Construcción carreteras
Asentamientos urbanos
Asentamientos urbanos
Construcción del borde
Tipo fisonómico
adyacentes al humedal
Granjas camaroneras
Cambios hidrológico
por canales de riego
Clasificación
intersticial
Agroindustria
Azolvamiento
Nivel trófico
(Dragados o
Ganadería
PO4-³
NO3-
SO4-²
NIC27 1.2 0.7 0.7 0.8 0.7 0.0 1.0 0.0 1.0 1 0 1 0 5 3 16 CB
NIC28 1.7 1.8 1.0 1.5 2.0 0.0 1.0 1.0 1.0 1 0 1 0 6 3.5 23 CM
NIC31 3.0 2.0 1.0 1.5 0.5 0.0 1.0 1.0 1.0 1 0 1 0 3 4 20 CB
NIC32 0.0 2.5 3.0 2.5 3.0 0.0 1.0 1.0 0.0 1 0 1 0 2 4 21 CB
NIC33 2.5 1.5 2.0 2.0 1.5 0.0 1.0 1.0 1.0 1 0 0 0 2 4 3 23 CM
49
Tabla 12. Grado de vulnerabilidad de los manglares que bordean Nicaragua en el Golfo de Fonseca, con base en los
resultados de los modelos estocásticos utilizando los valores y concentraciones del agua intersticial y suelo, así como las
actividades antrópicas que ejercen un grado de estrés en el humedal, se generaron las siguientesaplicando ponderaciones
Suma de impactos
Salinidad (g Kg-1)
Construcción de carreteras
Tipo fisonómico
Asentamientos urbanos
Clasificación
Cambios hidrológicos
Granjas camaroneras
Agroindustria
Azolvamiento
Nivel trófico
Ganadería
humedal
riego
PO4-³
NO3-
SO4-²
NIC27 3 1.8 2.0 0.5 1.5 1.2 1.0 0.0 3.0 0.0 0 2 0 1 5 3 25 VA
NIC28 1 1.3 1.3 0.8 1.3 0.8 4.0 0.0 0.0 0.0 0 2 0 1 6 3.5 23 VA
NIC31 4 0.5 1.0 1.5 1.5 2.0 1.0 0.0 0.0 0.0 0 2 0 1 3 4 22 VM
NIC32 4 2.0 0.5 0.0 1.0 0.0 2.5 0.0 0.0 4.0 0 2 0 1 2 4 23 VA
NIC33 4 0.5 1.5 1.0 1.0 1.5 1.0 0.0 0.0 0.0 0 2 2 1 2 4 3 25 VA
50
5. DISCUSIÓN
51
En algunos bosques de mangle analizados en El Salvador y Nicaragua se presentan
mayor desarrollo forestal, sin embargo en su mayoría, exhiben pérdida en estructura
y función. En el caso de Nicaragua, los tiempos de residencia del agua son
determinados por mareas diurnas, lo cual explica el por qué, pese a un nivel general
de deterioro ambiental alto, aún existe biota suficiente para mantener las actividades
de explotación del recurso (Carvajar Juárez y Soto Valdivia, 2005). En el caso de los
manglares de Honduras, estos registran bajo desarrollo en términos de área basal y
altura. De igual forma, se puede observar la presencia y dominancia de Laguncularia
racemosa y Avicennia germinans, debido a que su distribución y crecimiento se ha
favorecido con los cambios ambientales, mismos que son causa de la presión ejercida
negativamente por más de dos décadas por agentes alóctonos al ecosistema. Esto se
validó al establecerse como factores determinantes del área basal y altura de los
árboles, la concentración de la salinidad (mesohalinas e hipersalinas) y de los
compuestos nitrogenados (mesotróficas y eutróficas). Además, al definirse las
correlaciones significativas que se expresaron en esta investigación entre la altura de
los árboles, con respecto a la temperatura, salinidad y potencial redox (hipóxicas y
anóxicas) del agua intersticial en los bosques de mangle.
Por otra parte, los árboles de L. racemosa se ven beneficiados por las condiciones
actuales del ecosistema; a pesar de que debería dominar Rhizophora mangle en los
bosques que bordean el Golfo de Fonseca. Estos incrementos en la dominancia y
distribución de L. racemosa pueden ser atribuidos, a las condiciones mesotróficas
hasta eutróficas, por las descargas y escorrentías provenientes de asentamientos
urbanos, actividad ganadera y agricultura (i.e. cultivos de la caña de azúcar); con
mayor intensidad para los manglares de Honduras. Al respecto, Agraz-Hernández
(pers. commun.) menciona que L. racemosa es utilizada como bioindicador de estrés
antropogénico, tolerante a tiempos de residencia altos, y mayores concentraciones
de salinidad que R. mangle, por poseer glándulas desalinizadoras en el pecíolo de la
hoja. Esto validado nuevamente con la presencia de gran cantidad de Enteromorpha
sp. (bioindicador) en bosque de mangle de Honduras (HND20 y HND24—área del
estero Dorado y Tanisal; HND21—Guapinol); ya que es una macroalga considerada
como indicadora del grado de eutrofización antropogénico (por descargas durante
52
periodos prolongados, que provocan incrementos en la concentración del nitrógeno
y fosfatos). Asimismo, ante el aporte continuo de los sedimentos por la descarga de
agua residual de origen antrópico, se favorecen los procesos de acreción y
azolvamiento, y por ende, la generación de playones en el Golfo (i.e. en áreas de
Honduras), debido al aumento del tiempo de residencia del agua, incremento de
topografía, evaporación del agua y aumento de la salinidad. Este último parámetro
es considerado, para esta investigación, como el factor más importante que ayuda a
explicar los patrones de distribución vegetal, razón por la cual, se beneficia el
establecimiento y desarrollo A. germinans e incluso en las zonas más altas con poca
influencia de mareas Avicennia bicolor; tal como se observa en Honduras y
Nicaragua. Esto en conjunto de los efectos negativos que la producción salinera
ocasiona en el humedal de mangle, la deforestación, el incremento en la salinidad,
la pérdida de la estructura y función de los bosques adyacentes, así como el
desplazamiento de las especies, de Rhizophora mangle a Avicennia germinans. Autores
como Thom (1967; 1982) mencionan que existe una gran dependencia entre el nivel
de inundación, salinidad y geomorfología con la estructura y composición de los
bosques de mangle.
53
de la construcción de las salinas, aportes de agua residual urbana que ha propiciado
condiciones hipertróficas e incremento en el humedal, en 2.5 veces más la
concentración de los sulfatos presentes en el agua de mar (< 150 ha) (i.e. ELS5). Así
como, por los procesos de génesis del mismo Golfo de Fonseca (disminución de la
profundidad) y la continua influencia marina por las mareas. Escenarios validados
por los factores regulatorios que explican el 51.9% de la condición ambiental
prevaleciente; donde se genera a partir de la concentración de la salinidad, sulfatos
y nitritos, en relación inversa al potencial redox del agua intersticial.
54
Caserío El Icacal, así como el cambio de uso de suelo derivado de los asentamientos
humanos a orillas de calle hacia el Esterón específicamente en el caserío el Cerique.
56
durante dos décadas. Con la finalidad de dimensionar la magnitud e intensidad del
impacto en los manglares por estas dos últimas actividades, se tomaron datos de
extracción de 4,200 m3 de madera para el uso de taninos, equivalente a la pérdida de
2,800 árboles de Rhizophora sp., así como 4,363 m3 de madera extraída para venta de
leña, considerando una deforestación de 3,037 ha (Suma, 1994) y tomando los
valores de los atributos forestales de un bosque ribereño. Los resultados definen
pérdidas de 8,667,598 árboles en 3037 ha, aproximadamente; situación preocupante,
pues la productividad de estos bosques generaban más de 2,429,600 kg ha-1 año-1 de
pesca; tomando en cuenta capturas de 767 kg ha-1 año-1, por cada hectárea manglar
(Turner, 1991).
Con referencia a los bosques de mangle de Nicaragua, estos registran mayor acidez
e hipóxia, así como condiciones euhalinas tendientes a mesohalinas, esto comparado
con El Salvador y Honduras. Condiciones que caracterizan sólo a los manglares que
bordean el Estero Real, debido al incremento de las granjas camaroneras aledañas a
este, con un 27.8% (6,233 ha) más que en Honduras. Registrándose con ello, el
desplazamiento de R. mangle por A. germinans y disminución del ancho de la franja
del humedal a menos de 30 m. Esto debido a la mayor magnitud e intensidad de
estrés; principalmente por el incremento en la salinidad, azolvamiento (por aportes
de sedimentos) y mayor tiempo de residencia del agua, propiciando hipoxia y en
algunas áreas del humedal en el Estero Real, anoxia por el aporte constante de
nitrógeno y fosfatos provenientes de los efluentes de las granjas camaroneras. A
pesar de haberse declarado como Reserva Natural Protegida, en el año 1983
(DECRETO-LEY No. 1320, 1983). Por la cual, se define en esta investigación que la
fisonomía y la dominancia de los manglares que bordean el Estero Real están
regulados por la temperatura, la concentración de la salinidad y nitritos del agua
intersticial; siendo estos factores de estrés lo que genera mayor densidad aparente
en el suelo, y por ende aumento de la acidez del suelo. Al comparar la fisonomía
entre los bosques del Estero Real y los del Estero Padre Ramos (sitios NIC31, NIC32
y NIC33, de esta investigación), se puede definir que la fisonomía original de los
manglares en el Estero Real era de tipo ribereño, ribereño con tendencia borde o
borde, con distribución y dominancia Rhizophora mangle, seguida por R. racemosa,
57
Laguncularia racemosa y Avicennia germinans (Carvajar Juárez y Soto Valdivia, 2005).
Siendo relevante indicar que la mayor cantidad de L. racemosa, es reflejo de los
cambios ambientales que han ocasionado las granjas camaroneras, al aumentar el
tiempo de residencia del agua y salinidad, ante el mayor aporte de sedimentos ricos
en fosfatos provenientes de los efluentes de las granjas camaroneras y la población
aledaña al manglar, provocando el establecimiento de esta especie, en áreas
adyacentes a las granjas y principalmente en los bordos de los estanques. Estos
escenarios ratifican los resultados descritos en el documento denominado Estrategia
para el Desarrollo y la Conservación del Estero Real, Nicaragua del año 2000 y Perez
et al. (2001); donde indican niveles de degradación medio de los manglares de
Nicaragua ubicados en el Golfo de Fonseca, con una tendencia a incrementar su
deterioro. Esto por el azolvamiento derivado de la presión a causa de la agricultura
presente en la cuenca media y por las extensas hectáreas que abarcan las granjas
camaroneras.
58
Figura 18. Grado de conservación de los bosques de mangle que bordean el Golfo
de Fonseca, en El Salvador, Honduras y Nicaragua.
59
Figura 19. Grado de vulnerabilidad de los bosques de mangle que bordean el Golfo
de Fonseca, en El Salvador, Honduras y Nicaragua.
61
la pérdida de los manglares, de no tomarse medidas en un futuro cercano (Figura
19).
62
las costas del Golfo de Honduras y Nicaragua, con un aumento de 4°C y en El
Salvador de 4.8°C. Chan Keb et al. (2018) demostraron como la variación climática
en un periodo de 5 años, establece cambios significativos de la salinidad y potencial
redox del agua intersticial entre los años, y entre las épocas del año. Como
consecuencia de estas variaciones, estos autores indican registros significativos en la
producción de hojarasca, propágulos, flores y hojas en los bosques a lo largo del
litoral del Estado de Campeche, México entre años y sus épocas del año. E incluso
estos autores sugieren con base en sus resultados que R. mangle y A. germinans
expresan cierta habilidad resiliente ante los cambios ambientales.
63
HND10
EL
S6
,E
LS
HND18
5
HND20
64
6. CONCLUSIONES
Los manglares resultan esenciales para las comunidades ribereñas que cohabitan
con estos, debido a los servicios ecosistémicos que brindan; es por esto que la
industria pesquera resulta ser una fuente de economía fundamental para los tres
países que comparten el Golfo de Fonseca. Sin embargo, esta actividad exhibe
conflictos con el desarrollo de otras actividades en zona costera, i.e. la producción de
sal, que propicia la remoción de los manglares, su utilización en forma irracional
como combustible, las granjas de camarón y la industria de curtido de pieles, que
provocan la disminución de la productividad, de los atributos forestales en el
tiempo, así como la pérdida de la cobertura vegetal para obtener su corteza y extraer
tanino.
65
Deberán establecerse lineamientos específicos que permitan el mantenimiento y/o
recuperación de los bienes y servicios ecológicos, así como socioeconómicos que nos
proveen los manglares; pues a la fecha no se cuentan con ellos.
67
7. AGRADECIMIENTOS
Por este medio se agradece todo el apoyo incondicional que se recibió por parte de
El Salvador al Ministro de Medio Ambiente y Recursos Naturales Fernando Andrés
López Larreynaga/Ministro de Medio Ambiente y Recursos Naturales, Javier
Magaña/MARN, Raúl Artiga/CCAD, Salvador Nieto/CCAD, Melany
Machado/CCAD,Rosalba Álvarenga Parada/MAR, Catalino Alcides Sorto
Rosa/MAR, Manuel Hernández/ FUNSALPRODESE, José Herbert
Alvarado/FUNSALPRODESE. En Honduras al Ministro Elvis Yovanni Rodas /
Ministro de MiAmbiente+ Luis Rosaly Turcios/ Mi Ambiente+, Lorenzo Martín
Turcios Rodríguez/ DIGEPESCA-SAG, Olga Díaz/ ICF, José Luis Matamoros /ICF,
Felipe Antonio Maradiaga/ Mi Ambiente+, Ramón Gabriel Sánchez/CESCCO,
Anaun Teruel/ Base Naval de Amapala, Jorge Hernández / URPAGOLF, Omar
Rivera/ Guía Eco-tourístico, Lorenzo Oliva / Prestador de Servicios. Para
Nicaragua a la Ministra de Medio Ambiente-MARENA Fanny Sumaya Castillo
Lara/ Dr. Rene Catellón/Patrimonio Natural del MARENA, Francisco Joel
Martínez Carrasco/MARENA, Ana Julia Vargas/MARENA, José Quiroz
Martínez/Universidad de Léon, Nohemi Uriarte Blake/ Universidad de Léon,
Oscar Gonzaléz Quiroz/Universidad de Managua, Yanerlin Olivia
Artola/Universidad de Managua; para realizar los trabajos de campo, laboratorio y
gestiones en cada país. Gracias al apoyo otorgado se concluyó de manera
satisfactoria con el objetivo planteado para esta investigación. Cabe destacar que
derivado de la colaboración respetuosa, entusiasta, tenaz y de gran hermandad
entre los investigadores, estudiantes y funcionarios de El Salvador, Honduras,
Nicaragua y México; se han establecido lazos fuertes de colaboración, que
permitirán en un futuro próximo, continuar generando información de calidad para
mitigar los efectos del cambio climático e impactos derivados de las actividades
antrópicas en los manglares de todo Latinoamérica.
68
69
*El orden de los nombres y fotografías no refieren a un estatus.
70
8. REFERENCIAS
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