HITOS DE LA TERAPIA PSICOANALÍTICA DE FAMILIA

Es nuestro interés mostrar el recorrido que ha tenido la psicoterapia psicoanalítica de familia, que
para muchos es un campo aplicado del Psicoanálisis. Ya en los tiempos de Freud, en un
comunicado anterior dedicado a Freud se mencionó, se dieron breves intervenciones terapéuticas
a familias, el caso Juanito, Dora; ahora nos ocuparemos de los tiempos posteriores a Freud en
torno al tema familia, para los años 40 la [IPA], Internacional se ocupó de organizar un Congreso
Psicoanalítico sobre neurosis familiar, que tuvo lugar en Suiza. En dicho evento, Laforgue
compartió su experiencia de analizar a varios integrantes de una familia y dio cuenta de cómo los
miembros de una pareja se comunicaban inconscientemente, de tal manera que sostenían sus
neurosis complementarias. Desde ese tiempo a la actualidad, en cuánto a qué ha evolucionado el
pensamiento psicoanalítico de familia?. Me pregunto si el psicoanálisis de familia habrá
evolucionado de los tiempos de Freud, Spitz, Laforgue, para dar cuenta ya no de los mecnaismos
represivos sino de las identificaciones proyectivas que sostienen algunos miembros de una
familia? Y no dejemos el límite aquí, sino que avancemos a explorar qué mecanismo psíquico
sostiene la dinámica familiar patológica que hace que perdure en el tiempo el vínculo aun cuando
en ocasiones pueden darse crisis confusionales en el seno de la familia, de carácter violento, y aun
así, se mantienen los lazos.

Al parecer, el interés por analizar a la familia se inició con los tratamientos de pacientes graves,
Esquizofrénicos, Borderline entre otros y con los tratamientos de niños, donde los terapeutas
sintieron la necesidad de incorporar a la familia, tal vez con la idea que este tipo de pacientes
puede ser el síntoma de la familia, especialmente, se dice que el niño es síntoma de la dinámica
familiar. Al decir de P. Riviére, estos son los “portavoces” del sufrimiento familiar. Bowlby, que
hizo estudios sobre el apego, se dio cuenta de la importancia de incorporar a la familia al
tratamiento del paciente que iba a tratar.

En USA, Frida Fromm-Reichmann trabajó con el concepto de madre esquizofrenógena, similar a los
estudios de Laing en Inglaterra que desarrolló su concepto de “familia internalizada” como
defensas transpersonales que significan que una persona trata de regular el mundo interno de los
otros actuando sobre la experiencia de los demás, de ese modo preserva el suyo propio; fue
característico de este autor el de la madre que esquizofreniza al hijo a través de su discurso
mistificador. Creo que estos autores, junto con Bowen empiezan a señalar que lo que patologiza a
uno de los integrantes o a todos los integrantes de la familia son las fallas a nivel de narcisismo
estructurante del yo diferenciado, Bowen resalta al respecto el concepto de masa indiferenciada
del yo familiar, Batesosn en esta misma línea desarrolló la teoría del “doble Vínculo” como modelo
comunicacional de las familias esquizofrénicas.

Por su parte, W. Bion desarrolló una teoría sobre los grupos, este autor planteó que existen
niveles primitivos de funcionamiento grupal y que éste precede al individuo. Es decir, al comienzo
está el grupo, el individuo nace en un entorno grupal, o matriz familiar, por lo tanto la primera
identidad humana es de carácter grupal que es un “sistema protomental” caracterizado por la
indiferenciación entre individuo y grupo; entre mente y cuerpo. En este funcionamiento primitivo
existe una cultura grupal que termina siendo una alianza entre las necesidades del individuo y la
mentalidad grupal. En este funcionamiento primitivo es fundamental una madre sana, que a
través de la función reverie de las angustias del niño, éste puede sentar las bases mentales para
pensar. Cosa que se ve afectada en el niño con trastorno global del desarrollo. Claro esto nos
plantea si la problemática es producto de una falla en el reverie materno y se puede retejer en la
terapia o es una cuestión más de fondo que tiene que ver con cómo significa el individuo lo que
vive con la madre y el grupo familiar en su globalidad, en otras palabras que el individuo no tiene
los elementos básicos, los ladrillos del lenguaje para ubicarse en el discurso de la historia familiar,
sino que se forcluye tal experiencia y la sustituye por otra historia atemporal, tal vez porque en un
punto el sin sentido se apersona tanto de si miso como del entorno.

Con Klein comienza el desarrollo de la teoría de las relaciones objetales y las fantasías
inconscientes asociadas a dichos objetos, fue con ella que por primera vez se teorizó sobre una
psique relacional, ya que el concepto de fantasía inconsciente establece que la pulsión busca un
objeto específico para su satisfacción, de ese modo se gesta la Dimensión Vincular que es uno de
los fundamentos de la terapia psicoanalítica de familia.

Con D. Winnicott se enriqueció la teoría vincular especificando su carácter intersubjetivo; para

este autor el bebé no es una unidad al nacer, sino que es una organización formada por el medio
ambiente y él, ya que sólo por las identificaciones primarias generadas en esta unidad organizada
es que puede emerger la psique individual. Para Winnicott el síntoma tiene un sentido
intersubjetivo, es decir, para el Dr., el niño se nos presenta como el enfermo pero hay alguien más
que sostiene ese trastorno. Para el autor, muchas veces el niño se identifica inconscientemente
con los aspectos patológicos de la madre, es así que da variados ejemplos sobre la madre
hipocondríaca donde quien padece el síntoma es el niño; el caso de colitis que simboliza la
indiferenciación corporal entre otros. Algo similar, plantea del trauma como patología vincular
cito: es la ”irrupción de un hecho real demasiado súbito e impredecible” proveniente de la falla de
los mecanismos protectores hacia el niño que debe ejercer la función familiar

Otros autores se dedicaron a perfilar la tipología familiar y las describieron de la siguiente manera:

1.- la familia normal: familia-pareja que está en condiciones de modular el sufrimiento de sus
integrantes y favorece la adecuada introyección de sus funciones

2.- la familia casa de muñecas “caricatura de familia”: los padres tienen recursos internos frágiles y
recurren a mecanismos defensivos masivos

3.- Familia Matriarcal/patriarcal: donde domina una u otra figura parental que genera trastornos
del carácter

4.-Familia Banda: padres fuertemente narcisistas, con identificaciones antisociales

5.-Familia Invertida: donde uno de los padres es psicótico, perverso, o con tendencias criminales,
con organizaciones confusionales
6.-Familia de supuestos básicos que funcionan en cualquiera de los 3 supuestos básicos:
dependencia, lucha y fuga y acoplamiento que genera borderline y psicópatas.

Pichon Riviére planteó su teoría vincular del “portavoz” del sufrimiento familiar, que también se
denomina el “alcahuete” que denuncia la situación caótica subyacente de la familia. Además,
reportaba que en la dinámica familiar había un integrante que era el depositario de las angustias
familiares, de los pactos secretos de la familia, es decir inconscientemente se sostenía esta
identificación con la conspiración del silencio; que cuando eclosiona este integrante, se trata de
apaciguar con el testimonio del “malentendido”, reforzando la enfermedad o idea del “loco” de la
familia.

P. Rivière teoriza al respecto, señalando que el malentendido es el resultante de la confrontación

del grupo interno con el grupo externo; entendido como la internalización del grupo familiar
externo modificado o distorsionado por las necesidades y fantasías del individuo.

De hecho, cuando se analiza a una familia eminentemente narcisista se observa que la dinámica es
patológica, uno de los padres dominantes establece alianza con los hijos que son más frágiles y
actuadores en contra del otro padre, que aunque dominante en su estilo, es descalificado por la
pareja caracterizándolo de agresivo, loco, impulsivo; generando ambivalencia en los hijos que
comparten el mismo género para identificarse con éste, a veces lo defienden y otras lo atacan,
como lo hace su pareja, y el hijo que se alía a este padre es catalogado igual de loco, agresivo y
enfermo que éste. Estas alianzas subyacentes, sostenidas en ocasiones a través de gestos, cuando
se rompen el padre dominante descalificador, cambia de posición y se torna en víctima con
síntomas depresivos con culpa hacia si mismo, lo que moviliza la compasión y consideración de los
integrantes de la familia, restableciendo así el sistema inconsciente establecido. En esta dinámica,
llama la atención que dentro de este sistema familiar existen “sistemas loops” que responden a
intereses utilitarios que alguno de los integrantes persigue por su beneficio, de ese modo apoya a
uno de los padres por conveniencia, pero al segundo posterior puede erigirse en un violentador de
este mismo padre que protegió por un instante al formar alianzas con el otro; igualmente ocurre
que cada hermano se adosa a uno de estos padres, sólo es ocasional la alianza fraterna siempre y
cuando no afecte los intereses egotistas. Además, en esta dinámica se observa el carácter violento
con que circula la comunicación entre los integrantes, sea este manifestado aparatosamente o de
forma silente, pues produce la misma erupción violenta en uno de los integrantes que luego es
catalogado como el pobre loco, que en palabras de ciertos autores estudiosos de la dinámica
familiar sería el depositario de la enfermedad de la familia y que mientras no eclosiona se torna en
el regulador de la dinámica.

Los conceptos de P. Aulagnier de contrato narcisista y los de alianzas inconscientes, pacto

narcisista y pacto denegativo de Käes enriquecen la forma de pensar el funcionamiento familiar. El
contrato narcisista se define como el lugar que se le asigna a un integrante desde las generaciones
anteriores; el pacto narcisista es una forma de paz impuesta, son acuerdos inconscientes
defensivos y también de organización del vínculo en el conjunto que son inconscientes y producen
inconsciente.
Esto nos plantea que los integrantes de una familia se mueven en dos planos de profundidad el de
lo consciente y el de lo inconsciente; en dos planos de simetría y asimetría; de sincronía y
diacronía.