Humanos sin espíritu

montalk.net » 27 abril 09

(Este artículo reemplaza a Matrix

Agents: Profiles and Analysis )

Gente vacía. Gente de marionetas.

Recortes de cartón. Drones. Portales
Orgánicos. Personajes de fondo. ¿Por
qué existen estos términos? Porque por
necesidad tuvieron que ser inventados
por aquellos que de forma independiente
notaron el mismo fenómeno
desconcertante, uno para el cual no hay
un nombre oficial: algunas personas
parecen estar perdiendo algo muy
importante en su interior. Si bien no son
necesariamente menos inteligentes,
exitosos o físicamente saludables que
cualquier otra persona, sin embargo, no
muestran indicios de tener componentes superiores en su conciencia.

A lo largo de los años he recibido correos electrónicos de lectores que llegaron a esta misma
conclusión. Se dieron cuenta de que algunas personas eran extrañamente unidimensionales y
huecas por dentro. Esta observación no es difícil de pasar por alto, pero es fácil racionalizarla,
especialmente con el lavado de cerebro de la sociedad moderna con el concepto políticamente
correcto pero poco realista de que todos son completamente iguales en todos los sentidos, lo
que ignora las diferencias funcionales debidas a factores ambientales, genéticos, y lo más
importante, factores metafísicos.

Antecedentes

La idea de las personas vacías se me ocurrió por primera vez en 1999 después de haber
investigado mucho sobre sociópatas y psicópatas, cuya condición se conoce médicamente
como APD o "Trastorno de personalidad antisocial". Mi interés en el tema surgió de haber sido
forzado durante muchos años a sufrir por alguien que más tarde supe que tenía todos los
signos de ser un sociópata. Sin corazón y sin alma eran términos descriptivos, pero no sabía
cuán literalmente ciertos eran. Había notado en esta persona un vacío detrás de los ojos y una
esencia consciente muy superficial, que parecía estar en la raíz de los comportamientos que
observaba.

Eventualmente me di cuenta de que esta misma condición de raíz estaba presente en algunos
otros que no eran aparentemente sociópatas, pero cuya falta de corazón estaba enmascarada
por un exterior social bien adaptado. En otras palabras, lo que la psiquiatría diagnosticaría
como APD era solo la manifestación más extrema, criminal y descuidada de una condición que,
de otro modo, se expresaba más ampliamente de una manera socialmente aceptable y menos
incriminatoria. Esto último es lo que puede dar cuenta del cuerpo de personas vacías presente
en la población.

Pero, ¿qué les falta exactamente? La respuesta es clara si observamos sus comportamientos
comunes y cualidades de conciencia.

Características conductuales y psíquicas

Su comportamiento tiende a ser simplista, superficial, egoísta, narcisista, mundano, depredador

y materialista. A veces, estos rasgos están camuflados por un exterior social pulido, pero
cualquiera con un ojo perspicaz puede ver a través del disfraz. Carecen de individualidad,
pensamiento independiente y están fuertemente sesgados hacia una mentalidad de rebaño.
Carecen de comprensión de cualquier cosa más allá de la esfera material de los cinco sentidos,
y no tienen ningún interés en asuntos metafísicos como no sea como accesorios llamativos para
mejorar su imagen social. También parecen completamente incapaces de empatía, examen de
conciencia y autosacrificio deliberado. Sin embargo, en presencia de otros pueden mostrar una
llamativa muestra de preocupación, angustia o altruismo con fines de manipulación social; por
ejemplo, lágrimas de cocodrilo para provocar simpatía,

Escanear psíquicamente su conciencia revela algo interesante. Hay una cierta simplicidad,
planitud e inercia en su esencia, incluso si sus intelectos están muy desarrollados. A diferencia
de otras personas, su energía consciente es más difusa, aburrida, transitoria y amorfa que
sólida, chispeante, cristalizada y concentrada. Dicho de otra manera, sus mentes son como
castillos de arena en lugar de castillos reales. Hay algo animal y rudimentario pilotando sus
cuerpos. Parece que tienen conciencia como las plantas y los animales, pero no la conciencia
de sí mismos como se supone que tienen los humanos. Hay una diferencia importante entre la
conciencia y la autoconciencia.

Espíritu: el componente que falta

El factor faltante debe ser algo que dote a un ser de autoconciencia, volición y la capacidad de
valorar ideales trascendentales. Esto va más allá de los meros factores físicos como la falta de
partes del cerebro, la genética defectuosa o una mala educación, porque estos últimos son solo
defectos en el hardware y la programación de la máquina biológica, mientras que el problema
aquí involucra la conciencia que opera la máquina. Lo que capta la percepción intuitiva o
clarividente sobre su conciencia involucra factores metafísicos en cambio.
¿Cómo llamar a este componente superior de la conciencia ausente en algunas personas? Por
lo general, se llamaría el alma, pero eso ha causado demasiada confusión en el pasado. Por
ejemplo, los lectores ocasionales que no están familiarizados con la definición adecuada de "sin
alma" pensaron que significaba "completamente desprovisto de conciencia" cuando en realidad
significaba "desprovisto de conciencia individualizada". No, tienen algún tipo de energía del
alma en virtud de estar vivos, pero el alma no está imbuida de una chispa superior de verdadera
sensibilidad y autoconciencia.

Por lo tanto, llamaré a esta chispa superior "espíritu" y la definiré de la siguiente manera: el
espíritu es el núcleo de la conciencia individualizada, ese aspecto permanente del ser de uno
que representa el verdadero Ser, que acumula experiencias y sabiduría espiritual a lo largo de
la vida, sobrevive a la muerte física y permanece intacta al reencarnar para seguir creciendo
hacia la realización de su potencial. Es la chispa divina divina, el asiento del libre albedrío, el
fragmento holográfico del Creador que reside en el mismo centro de tu ser, el "yo" que eres tú,
el observador interior consciente capaz de observar incluso su propia auto-observación.

Parece que no todos los humanos tienen espíritu. Por lo tanto, no tienen autoconciencia,
individualidad, sabiduría, empatía, inteligencia creativa o conciencia. Lo que confirma aún más
esta hipótesis es que, como se discutirá más adelante, uno puede observar una ausencia total
de destino, sincronicidad, sueños simbólicos, lecciones espirituales, crecimiento del alma y
karma en sus vidas. Esto es de esperar si no tienen nada permanente en ellos que sobreviva a
la muerte y reencarne, porque solo el espíritu puede ganar con tales cosas. Sin espíritu, son
seres temporales cuya conciencia se forma poco antes del nacimiento y se disuelve poco
después de la muerte. Y si es así, entonces para ellos, las lecciones de vida espiritual no sirven
para nada, el karma de vidas pasadas no existe, no hay un Yo superior que actúe como
acompañante, ni tendrían un interés genuino en nada que tenga un propósito más allá de su
existencia mortal actual. Por lo tanto, es de esperar que sean particularmente materialistas,
mundanos y mundanos en sus ambiciones; la observación también lo confirma.

Otros componentes

¿Cómo podemos entender mejor todo esto? Al comprender los diversos componentes y cómo
se combinan para formar la totalidad de un ser, podemos captar las numerosas diferencias y
similitudes entre los humanos con espíritu y los sin espíritu 1 .

Aparte del espíritu, los otros componentes son el cuerpo y el alma. El alma es la interfaz
energética no física entre el cuerpo y el espíritu. Los ocultistas dividen el alma en cuerpos
etérico y astral. Las personas “vacías” antes mencionadas tienen cuerpo y alma, pero no
espíritu. De esta manera, es claro que tienen algún tipo de energía consciente, pero no el
núcleo permanente que retiene la continuidad a través de las encarnaciones.

El alma consta de dos componentes, el etérico y el astral. El componente etérico es un campo

de polarización cuántica que evita la desintegración entrópica del cuerpo físico. O para decirlo
de manera más simple, es la energía de la fuerza vital la que evita que el cuerpo se deteriore.
El componente astral es más abstracto e intangible. Funciona como el asiento de los
sentimientos y pasiones experimentados conscientemente. Los sentimientos no son solo
reacciones químicas en el cerebro, ni son pensamientos abstractos en la mente. Más bien son
energías vívidas que residen en algún punto intermedio, y esa zona de amortiguamiento entre
lo completamente físico y lo completamente metafísico es el componente astral del alma.

Cuerpo y Ego

El cuerpo es el instrumento biológico a través del cual interactuamos con nuestro entorno físico.
El cuerpo viene con sus propias disposiciones hereditarias, impulsos e instintos biológicos y
algoritmos de comportamiento estampados en él a través de la programación social. Estas
influencias deterministas convergen para crear una inteligencia artificial en una persona que,
por defecto, hace funcionar el cuerpo como una computadora de piloto automático que hace
funcionar un avión.

Esta inteligencia artificial se denomina “ego”. Su propósito fundamental es asegurar la

supervivencia del cuerpo mediante la optimización de su comportamiento para el entorno físico
y social que lo rodea. En otras palabras, el condicionamiento externo programa al ego para
lograr la supervivencia en el entorno del que se origina ese condicionamiento.

Pero el ego no tiene verdadera conciencia propia. Es solo una computadora que se ejecuta en
hardware neuronal (y por poder, etérico) que simula una identidad viva. Su principal ventaja es
que, al ser solo una computadora, solo tiene que calcular mecánicamente y reaccionar ante
situaciones en lugar de reflexionar profunda y conscientemente, por lo que puede responder
mucho más rápido a situaciones externas.

Para el espíritu, el ego funciona como un dispositivo de software que automatiza las
interacciones con otros humanos y proporciona una máscara de identidad, programada desde
el nacimiento, apropiada para el entorno local. Algo así como el avatar de un jugador en el
juego Sims, que se ve y actúa como una persona y parece hacer lo suyo cuando no lo dirige el
jugador.

El problema es que el ego es enteramente un producto del pasado y el espíritu completamente

fuera del tiempo lineal. El primero es completamente determinista, el segundo es
completamente no determinista. La primera es una propiedad emergente de la materia, la
segunda una condensación permanente de la conciencia. Los dos tienen impulsos que a
menudo son diametralmente opuestos, uno tirando hacia la materialidad, el otro hacia la
espiritualidad. Nuestra conciencia diaria, también conocida como el yo inferior, es una mezcla
de ambos, a saber, la parte del espíritu que brilla a través de la máscara del ego y se identifica
con él, análoga a un conductor tan absorto en el acto de conducir que para él el automóvil se ha
convertido en una extensión de su cuerpo 2 .

Influencias físicas o espirituales sobre el alma

Ahora bien, el alma, al residir entre el cuerpo y el espíritu y mediar entre ellos, está influenciada
por ambos. Asume su organización y función de acuerdo con los impulsos tanto del espíritu
como del cuerpo. Por ejemplo, el cuerpo astral respondería tanto a una droga química que
induce un sentimiento de euforia a través del cuerpo, como al espíritu invocando
voluntariamente un elevado sentimiento de alegría espiritual, aunque los efectos en el astral no
son idénticos.

Asimismo, el cuerpo etérico puede tener su estructura alterada por alguna lesión en el cuerpo
físico, o por algún bloqueo o anormalidad en el cuerpo astral que filtra su influencia hasta el
nivel etérico. Cualesquiera que sean las influencias que el cuerpo y el espíritu ejercen sobre el
alma, sus efectos continúan permaneciendo en el alma, como el té que sigue circulando
después de haber sido removido. Es por eso que dije que el ego funciona tanto con hardware
neural como etérico. A pesar de originarse en lo físico, el ego imparte el impulso de su
condicionamiento sobre lo etérico 3 .

Consecuencias de la falta de espíritu

Con lo anterior en mente, considere lo que sucede cuando alguien tiene cuerpo, ego y alma,
pero carece de espíritu. En primer lugar, toda su composición sería el resultado de influencias
materiales como la genética y el medio ambiente. El asiento de su aparente inteligencia sería el
ego. Y sin el contrapeso del espíritu, su ego reinaría. Así, de acuerdo con la función del ego,
tales personas estarían completamente dedicadas a la supervivencia material y social.

Tenga en cuenta que las personas con espíritu que están despiertas a sus impulsos espirituales
a menudo toman decisiones deliberadas que no sirven para obtener ganancias financieras,
sociales o egoístas, que van en contra de las expectativas de los principios evolutivos
darwinianos y que solo sirven para fines espirituales. Tales impulsos están ausentes en las
personas sin espíritu, por lo que están realmente optimizados para sobrevivir en el mundo
físico. Sin la conciencia, la empatía o la batalla interna entre el ego y el espíritu que los retiene,
pueden tener éxito más rápida y fácilmente en sus entornos mundanos, independientemente del
costo para los demás.

Para comprender mejor sus diferencias metafísicas, considere lo que les sucede a las personas
con y sin espíritu después de la muerte física.

Espíritu y alma anidados uno dentro del otro, juntos salen del cuerpo físico. Después de un
tiempo, el componente etérico del alma se desintegra, dejando solo el espíritu anidado dentro
del cuerpo astral. El cuerpo astral entonces también se desintegra. La desintegración de los
cuerpos etérico y astral, es decir, la disolución o abandono del alma, se conoce en el
esoterismo cristiano como la muerte segunda 4 . El espíritu liberado luego avanza hacia el más
allá antes de reencarnarse.

La reencarnación implica que el espíritu forme a su alrededor una nueva alma y luego se
deslice hacia un nuevo cuerpo físico. En las reencarnaciones secuenciales, qué talentos,
predisposiciones y desequilibrios ha adquirido de vidas anteriores influye en la nueva
encarnación.

En el caso de las personas sin espíritu, la vida comienza de la siguiente manera. A medida que
el cuerpo fetal se gesta en el útero, el alma se forma por primera vez, como la arena de la playa
que se junta en forma de castillo, y se une al cuerpo. Esta combinación produce una conciencia
rudimentaria. Después de nacer, tal persona se convierte en nada más que un producto de la
genética y el medio ambiente debido a la ausencia de espíritu. Sin un contrapeso espiritual, los
impulsos biológicos y la programación social se convierten en sus impulsos primarios en la vida.

Tras la muerte física, su alma evacua el cuerpo, tal vez conteniendo una huella persistente del
ego, y después de algún tiempo se desintegra y es reabsorbida en el lago de energías del que
se formó originalmente. Nada de su identidad sobrevive. Para las personas sin espíritu, esta
vida es la única. Se forman al entrar y se disuelven al salir. No puede ser de otra manera si
carecen de un núcleo de conciencia individualizada.

Por lo tanto, todo lo que tiene una persona con espíritu debido a la continuidad de sus
encarnaciones, falta en la vida de una persona sin espíritu. Por ejemplo, los sin espíritu no
tendrían necesidad de lecciones de vida o experiencias de aprendizaje espiritual. ¿Cuál sería el
propósito si lo que se gana desaparece después de la muerte? Por lo tanto, las personas sin
espíritu son aquellas que no pueden aprender lecciones espirituales, que no pueden
beneficiarse espiritualmente de las pruebas de la vida, que no pueden pasar lo ganado a sus
sucesivas encarnaciones. Y por eso no les preocupan las lecciones de humildad, empatía,
compasión, comprensión o perdón. En lugar de cambiar como personas a través de la
maduración espiritual en la vida, solo cambian en el sentido de adaptarse mejor a la vida a
través del condicionamiento. Por ejemplo, mientras que una persona animosa puede ver el error
de sus caminos y volverse humilde,

El karma es otro factor metafísico ausente en la vida de las personas sin espíritu. Hay muchos
conceptos erróneos sobre el karma, así que primero explicaré mi comprensión del mismo, antes
de mostrar cómo su ausencia afecta la vida de una persona sin espíritu.

Karma (el tipo negativo) es simplemente una deuda o desequilibrio espiritual adquirido al violar
el libre albedrío de uno mismo o de otro. La violación de tu propio libre albedrío ocurre cuando
tomas una decisión durante un estado de ignorancia, como cuando te identificas con el ego y
actúas según sus impulsos, lo que viola una elección hecha durante un estado más
espiritualmente sobrio.

Al cometer una violación del libre albedrío, el aspecto superior de la conciencia asociado con el
espíritu lamenta el error y se compromete a corregirlo, incluso si el aspecto inferior asociado
con el ego trata de ignorarlo. El desequilibrio kármico atrae entonces experiencias que enseñan
una lección corrigiendo esa ignorancia, ya sea en esta vida o en la siguiente. La lección
aprendida es universal y no requiere el recuerdo de la elección original que la provocó, solo la
comprensión de la lección. La experiencia kármica en sí no es lo que está destinado, sino la
lección aprendida, por lo tanto, el karma a veces puede mitigarse a través de la comprensión y
el perdón preventivos sin necesariamente tener que aprenderlo de la manera más difícil a
través de la experiencia.

Pero sin espíritu, no hay verdadero libre albedrío ni verdaderas lecciones que se puedan
aprender. Por lo tanto, los sin espíritu no tienen karma y en cambio viven completamente bajo
las leyes del azar y la ley de la jungla. Mientras que un individuo con espíritu puede nacer con
impedimentos kármicos, para los que no tienen espíritu estos impedimentos serían
estrictamente una cuestión de azar o herencia y no tendrían ningún propósito metafísico
superior. Lo mismo con el momento y la forma de su muerte; mientras que las personas
enérgicas pueden haber planeado vagamente su vida antes de encarnar, incluida la forma en
que morirán, las personas sin espíritu mueren según circunstancias aleatorias sin propósito ni
significado, a menos que su muerte de alguna manera juegue un papel importante en el guión
anterior a la encarnación de un individuo enérgico. .

Otros factores que faltan incluyen sueños simbólicos significativos, sincronicidades, una guía
intuitiva superior y su mano personal del destino. Las personas sin espíritu no experimentan
ninguno de estos porque no pueden ni necesitan hacerlo. Esto debería ser obvio al comprender
el papel del espíritu, pero lo elaboraré en aras de la claridad.

Los sueños significativos sirven principalmente para alertar a una persona sobre los
desequilibrios espirituales que deben corregirse, pero una persona sin espíritu no necesita tales
mensajes. Tampoco tienen nada más alto para enviar tales mensajes. Sin un núcleo
permanente de individualidad, no tienen un "Yo superior", que es la manifestación futura
perfeccionada del espíritu que se remonta a través del tiempo para ayudar a las extensiones de
sí mismo aún en el pasado lineal. Y sin un Yo Superior, no tienen una guía interna intuitiva que
les brinde ciertos empujones y protección en la vida. Por lo tanto, mientras que una persona con
espíritu podría experimentar sincronicidades extrañas y la flexión de las leyes de la realidad
para salvarlos de una muerte prematura, una persona sin espíritu que carece de esa dirección y
protección perecería según el azar.

Diferencias de chakra entre enérgico y sin espíritu

También hay una diferencia entre los que tienen espíritu y los que no lo tienen en cuanto a los
chakras que tienen. Los chakras son centros de energía en forma de vórtice que unen el alma
con el cuerpo y unen el espíritu y el cuerpo a través del alma. Cada centro coincide
posicionalmente con las principales glándulas del cuerpo físico, y cada uno cumple una función
conductual diferente.

Los chakras inferiores están asociados con facetas del comportamiento tales como el instinto
físico, los impulsos sexuales, las emociones básicas, el poder personal y la actividad intelectual.
Todo el mundo posee estos. Los sin espíritu, sin embargo, no tienen necesidad de los chakras
superiores, es decir, los chakras del corazón, de la coronilla y del tercer ojo porque estos son
los que se vinculan exclusivamente con el espíritu.

El chakra del corazón, el centro de las emociones superiores como la compasión, la empatía, el
júbilo espiritual, falta en los sin espíritu porque no hay un espíritu presente que se asocie con
estas emociones. También falta el chakra de la corona, a través del cual se manifiesta una
mayor comprensión intuitiva, originalidad y creatividad, y una conexión con la verdad objetiva.
El chakra del tercer ojo, ubicado entre las cejas, se usa normalmente para la percepción de
fenómenos y conceptos más allá del ámbito material, y las personas sin espíritu confinadas al
mundo de los cinco sentidos tampoco lo necesitan.

En consecuencia, otra diferencia entre los enérgicos y los sin espíritu es que los primeros tienen
los siete chakras, mientras que a los últimos les faltan los tres superiores, el corazón, la
coronilla y el tercer ojo 5 . Esto contribuye aún más a la percepción intuitiva o clarividente de
que las personas sin espíritu son planas e inertes por dentro, independientemente de cuán
animadas estén por fuera, porque al espectro de sus vibraciones etéricas o áuricas les faltan
ciertos colores y, por lo tanto, tienen una resolución general más baja.

Todo lo anterior se deriva de un simple postulado: que algunas personas carecen de espíritu y
que, por lo tanto, también carecen de los chakras superiores. Si contemplas profundamente lo
que esto implica, comprenderás cómo este postulado explica la gama completa de
observaciones que tenemos sobre las llamadas personas “vacías”.

Diferencia entre personas sin espíritu y espiritualmente dormidas

En este punto, quizás se pregunte cuál es la diferencia entre las personas sin espíritu y las
personas con espíritu que están espiritualmente dormidas en la vida o simplemente inmaduras.
Después de todo, ambos pueden ser mundanos en sus metas y completamente atrapados en la
ilusión de la “Matrix”. Ambos pueden no ser conscientes de los sueños o sincronicidades, ni
mostrar mucha empatía. Por ejemplo, hay personas negativas que están completamente bajo la
influencia de sus egos y fuerzas negativas externas, que pueden cometer crímenes violentos e
incluso asesinatos en masa sin pestañear. No todos ellos son sin espíritu. Pero todos ellos
carecen de la influencia del espíritu cuando se trata de participar en comportamientos tan
inhumanos. Algunos carecen de espíritu, otros están dormidos para el espíritu.

La diferencia es que una persona enérgica pero infantil/dormida todavía tiene un potencial
espiritual latente. Así que todavía tienen, incluso en pequeñas cantidades, la presencia de esos
factores y dinámicas espirituales mencionados anteriormente. Todavía pueden sufrir las
consecuencias de la deuda kármica provocada por elecciones tontas, aún pueden recibir
sueños simbólicos que intentan alertarlos sobre los desequilibrios espirituales en la vida, incluso
si los ignoran, aún pueden experimentar ayuda sincrónica para dar forma a sus vidas contra
viento y marea. si no pueden verlo.

Las personas sin espíritu carecen por completo de ese potencial. No pueden crecer
espiritualmente. Esta no es una declaración teórica, sino una dolorosa lección aprendida por
haber tratado con demasiadas personas que nunca mostraron signos de crecimiento o
evolución, sin importar cuánta ayuda y oportunidad de mejora se les brindó. En el mejor de los
casos se adaptan, pero más por condicionamiento y cálculo que por comprensión real.

Hay otra diferencia importante. Los enérgicos tienen vidas apropiadas a sus necesidades
espirituales. Entonces hay una correspondencia entre su madurez espiritual y el tipo de vida.
Los espíritus infantiles llevarán vidas toscas, porque una existencia básica es todo lo que
necesitan, y cualquier otra cosa sería demasiado para ellos para manejar o ganar. Mientras
tanto, los sin espíritu viven la vida a la que se ven empujados por las circunstancias y su propia
astucia, lo que puede significar ser un mendigo, un ejecutivo corporativo o un autor famoso de
todos modos. Sin restricciones establecidas por necesidades espirituales, los sin espíritu no
tienen límites espirituales ni currículos que estructuren sus vidas. Y es por eso que las personas
"vacías" no son todas espiritualmente dormidas o infantiles, porque existe una clase de
personas que comparten la misma inercia detrás de sus ojos sin importarde su tipo de vida, su
posición social, su destreza intelectual y su apariencia física.

Psicópatas, sociópatas y narcisistas

Las manifestaciones más extremas de una ausencia de espíritu se conocen en psicología como
trastornos de personalidad psicopáticos, sociópatas o narcisistas. Las personas animosas que
se ajustan a esta condición son descarriadas y rehenes de sus egos, pero pueden ser
rehabilitadas. En lugar de carecer de empatía, su empatía es reprimida o desplazada. Estos no
son verdaderos psicópatas, sino personas enérgicas con trastornos de personalidad.

Sin embargo, la psicopatía y la sociopatía verdaderas no se pueden curar porque hay algo
fundamentalmente defectuoso en el núcleo de tales personas. Carecen por completo de
empatía y remordimiento, y estas cualidades no se pueden recuperar porque, para empezar,
nunca estuvieron allí. La naturaleza incurable de la psicopatía es un hecho aceptado en
psicología. Se cree que la causa es una anomalía en los centros del dolor y el miedo del
cerebro. Aun así, sin la influencia equilibradora del espíritu, tales anormalidades introducirían
errores sin control en la programación del ego, que luego corre desenfrenada hasta el punto de
llamar la atención de los sistemas legal y médico. Lo que el sistema médico puede diagnosticar
es solo la manifestación extrema y descuidada de una condición que está más extendida entre
la población.

¿Por qué sin espíritu? Lo que otros dicen

Abundan las teorías sobre por qué algunas personas carecen de un componente superior en su
conciencia y para qué sirven en el esquema más amplio de las cosas. Dado que no soy el
primero en hacer esta observación, ahora analizaré brevemente lo que otros han dicho para
que pueda sopesar las opciones disponibles.

John Baines escribe en su libro The Stellar Man que los humanos, como todas las especies
animales, tienen un alma colectiva única para su especie. Este inconsciente colectivo ejerce
una influencia desindividualizadora en los humanos, empujándolos hacia la mentalidad de
mafia, la mentalidad de rebaño y siguiendo a la multitud. Rupert Sheldrake llamaría a esto el
campo morfogenético humano. Las personas que no han desarrollado su propia individualidad
consciente son meros autómatas que siguen la influencia soporífera del inconsciente colectivo,
como si fueran extensiones de una mente colmena. El objetivo del entrenamiento esotérico es
separarse del rebaño, desarrollar la voluntad propia y, por lo tanto, convertirse en un ser libre.

Rudolf Steiner expresó sentimientos similares. Su obra fundacional, La filosofía de la libertad ,

abordó este problema. Steiner dijo que mientras los humanos obedezcan la autoridad externa,
sus propios instintos biológicos o las partes animales de sí mismos en común con el resto de la
humanidad, no son seres libres. La libertad proviene de la elección basada en la comprensión
intuitiva de lo que implica cada opción y lo que significa. Este acto de libre albedrío requiere
introspección y perspicacia espiritual para actuar desde un lugar de verdadera comprensión.
Steiner reconoció que no todo el mundo hace una introspección en la medida necesaria para
tomar decisiones inteligentes con libre albedrío. En conversaciones privadas, Steiner fue aún
más lejos:

Dr. Steiner: Esa niña pequeña LK en primer grado debe tener algo realmente muy
malo dentro. No hay mucho que podamos hacer. Están aumentando los casos en
que los niños nacen con forma humana, pero no son realmente seres humanos en
relación con su Yo superior; en cambio, están llenos de seres que no pertenecen a
la clase humana. Bastantes personas han nacido desde los años noventa sin yo, es
decir, no se reencarnan, sino que son formas humanas llenas de una especie de
demonio natural. Hay una cantidad bastante grande de personas mayores que en
realidad no son seres humanos, sino que son solo naturales; son seres humanos
sólo con respecto a su forma. No podemos, sin embargo, crear una escuela para
demonios.

Un maestro: ¿Cómo es eso posible?

Dr. Steiner: El error cósmico ciertamente no es imposible. Las relaciones de los

individuos que llegan a la existencia terrenal se han determinado desde hace
mucho tiempo. También hay generaciones en las que los individuos no tienen
ningún deseo de venir a la existencia terrenal y conectarse con lo físico, o de irse
inmediatamente desde el principio. En tales casos, intervienen otros seres que no
están del todo preparados. Esto es algo que ahora es bastante común, que los
seres humanos anden sin yo; en realidad no son seres humanos, sino que tienen
sólo una forma humana. Son seres como espíritus de la naturaleza, que no
reconocemos como tales porque andan con forma humana. También son bastante
diferentes de los seres humanos con respecto a todo lo espiritual. Por ejemplo,
nunca pueden recordar cosas como oraciones; tienen memoria solo para palabras,
no para oraciones.

El enigma de la vida no es tan simple. Cuando tal ser muere, vuelve a la naturaleza
de la que provino. El cadáver se descompone, pero no hay disolución real del
cuerpo etérico, y el ser natural vuelve a la naturaleza. También es posible que
ocurra algo como un autómata. El organismo humano completo existe, y podría ser
posible automatizar el cerebro y desarrollar una especie de pseudomoralidad.

No me gusta hablar de esas cosas ya que a menudo nos han atacado incluso sin
ellas. Imagínese lo que diría la gente si escuchara que decimos que hay personas
que no son seres humanos. Sin embargo, estos son hechos. Nuestra cultura no
estaría en tal declive si la gente sintiera con más fuerza que hay un número de
personas que, debido a que son completamente despiadadas, se han convertido en
algo que no es humano, sino que son demonios en forma humana.

( Reuniones de la facultad con Rudolf Steiner Vol. 2, 3 de julio de 1923, p. 649-650)

GI Gurdjieff habló en la misma línea. Sus conferencias en Views from the Real Worldresumir su
posición. Los humanos nacen como pizarras en blanco, como máquinas biológicas sin
conciencia de sí mismas. En algún momento de la vida, una persona desarrolla un "yo" o se
ramifica en el camino opuesto hacia una mayor mecanización y decadencia. Entonces, según
Gurdjieff, las personas “vacías” son aquellas que nunca han desarrollado su autoconciencia
como deberían, pero todos comenzamos en igualdad de condiciones. No creo que esto sea
cierto porque hay bebés y niños que claramente tienen una alta sensibilidad detrás de sus ojos
y comportamientos esperados de autoconciencia, mientras que otros bebés y niños carecen de
ella, lo que sugiere el factor de la reencarnación en algunas personas y completa. ausencia de
espíritu incluyendo el potencial de espíritu en otras personas.

Boris Mouravieff ha escrito extensamente sobre el tema de las personas sin espíritu. Ver sus
tres volúmenes de la Gnosisserie, particularmente el segundo y tercer volumen. Su enfoque se
basa en el cristianismo esotérico y, por lo tanto, cita en gran medida las escrituras y tiene
mucho en común con la tradición del Cuarto Camino de Gurdjieff, que parece remontarse a las
enseñanzas sufistas. Según la interpretación de Mouravieff del Libro del Génesis, existieron
humanos antes de Adán y Eva, pero solo Adán y, por poder, Eva y sus descendientes recibieron
el aliento del espíritu de Dios. Así hoy en día existen dos subrazas mestizas de humanos, los
pre-adámicos sin espíritu, y los adámicos que lo tienen. Mouravieff explica que los preadámicos
tienen el propósito de recolectar energía de los adámicos como parte de la cadena alimenticia
cósmica. También explora las diferencias metafísicas entre los dos, con respecto a los pre-
Adámicos a los que les faltan ciertos "centros". que son análogos a los chakras. Mouravieff cree
que los preadámicos tienen un alma grupal única para su colectivo, y que solo después de más
eones de evolución su alma colectiva se diferenciará en espíritus individuales como los que ya
tienen los adámicos.

El Corpus Hermeticum , un famoso texto hermético y gnóstico escrito hace casi dos mil años,
afirma igualmente que no todos los humanos tienen la chispa de la razón divina (llamada Nous )
activa dentro de ellos, y que sin Nous un humano es más como una “criatura irracional”. ”
(animal) en sus motivaciones, percepción limitada y forma de vida. Uno tendría que leer el texto
completo para entender esto en el contexto apropiado. Ver la traducción al inglés titulada The
Way of Hermes: New Translations of the Corpus Hermeticum (Inner Traditions, 2000).

Por último, las Transcripciones Casiopeasaborda las obras de Mouravieff y proporciona algunas
ideas clave sobre el tema en cuestión. La fuente canalizadora afirma que algunas personas son
portales vacíos a través de los cuales pueden trabajar otras inteligencias, que tienen auras
uniformes entre ellos, carecen de los chakras superiores, pueden ser muy hábiles para imitar a
las personas con "alma" (enérgicos) reflejando su propia energía del alma. , y que, en última
instancia, sirven como conductos de los cuales nuestra energía puede ser extraída para ser
recolectada por seres hiperdimensionales negativos. Todo esto está en línea con mis
observaciones y los escritos de Mouravieff y Gurdjieff, excepto que es un poco más realista que
los puntos de vista de esos dos tradicionalistas. Mientras que John Baines dice que algunos
humanos son extensiones del alma humana colectiva, los Casiopeos dicen que son extensiones
de almas de grupos animales particulares.

Así que lo que estoy diciendo en este artículo no carece de precedentes. Simplemente hice la
observación de personas "vacías" de forma independiente en 1999-2001 y luego pasé por
varias especulaciones personales y teorías existentes antes de decidirme por la actual que se
explica en este artículo.

Creo que hay varias formas en que las personas terminan sin espíritu. Algunos nacen así
porque nunca echó raíces ningún espíritu, como las butacas de teatro que quedan vacías
porque nadie les compró entradas. Otros pueden haber comenzado con el espíritu, pero se les
fue en algún momento de la vida. Podría haberse evacuado a través del abuso o un trauma
extremo repentino, o evaporarse gradualmente de décadas de rutina que mata el alma. No todo
el que muere cae necesariamente muerto. Las personas pueden seguir existiendo como
caparazones vacíos, como ecos de sí mismos, ahora desprovistos del espíritu que alguna vez
les dio chispa. Hay otros fenómenos más oscuros, como personas muertas que son reanimadas
por extraterrestres con tecnología avanzada, clones humanos y otros tipos de humanoides
artificiales que carecerían de espíritu.Simulacros humanos ).

Aquí me refiero principalmente a un sector más grande de la población que naturalmente

carece de espíritu, que siempre lo ha tenido a lo largo de la historia, y que en virtud de su
naturaleza depredadora y mundana ha gravitado hacia la cima de las jerarquías sociales,
económicas y políticas y ha hecho el mundo. antagonista hacia los impulsos espirituales.

Los beneficios de la comprensión

Como puede ver, esta idea de que algunas personas carecen de espíritu explica mucho sobre
el lado robótico, animal y depredador de la humanidad. Muchos de nosotros estamos bajo la
falsa suposición de que todos somos iguales por dentro, que si camináramos en los zapatos de
otro entenderíamos completamente sus motivaciones. Pero no todos los actos inhumanos se
remontan a meras variables ambientales. Hay casos en los que, aunque nos pongamos en su
lugar, no actuaríamos igual. Eso es porque la causa de sus motivaciones no es ambiental, sino
metafísica: la ausencia del espíritu y el reino supremo del ego.

Aquellos que ignoran la posibilidad de personas sin espíritu continuarán sacudiendo la cabeza
con frustración por comportamientos que simplemente no pueden calcular y deben ignorar o
racionalizar. Cuando se trata de un psicópata sin espíritu, por ejemplo, tales individuos son
fácilmente engañados y manipulados.

Solo después de quemarse una y otra vez se dan cuenta de que algunos humanos son un tipo
diferente de animal, que algunos humanos no son remediables porque están actuando de
manera plena y saludable de acuerdo con su naturaleza depredadora sin espíritu. Esto es
especialmente cierto en el caso de la élite psicópata que dirige este planeta prisión; no se les
puede rehabilitar, hacer ver el error de sus caminos, o convencerlos apelando a la empatía.

Precaución y Conclusión

Sin embargo, sería imprudente mirar con desdén a los sin espíritu. Son lo que son, viviendo sus
vidas de acuerdo con su constitución. Deben manejarse de la misma manera que uno maneja a
un animal salvaje que actúa de acuerdo con su naturaleza salvaje. Solo tratando de mantener a
los sin espíritu en estándares espirituales más altos se establece la frustración. Sin esperar
demasiado de ellos, y al comprender por qué se comportan como lo hacen, la frustración da
paso a una comprensión tranquila.

Tampoco vale la pena esforzarse por tratar de detectar quién no tiene espíritu, porque en casos
ambiguos es probable que se equivoque del lado de la paranoia. Dado que los
comportamientos sin espíritu forman un subconjunto de los comportamientos de las personas
enérgicas, solo los comportamientos exclusivos de las personas enérgicas pueden permitir una
identificación rápida y segura, y solo entonces de quién es definitivamente enérgico. La
detección solo funciona para elegir quién es verdaderamente enérgico, lo que sucede más
fácilmente con un individuo enérgico en su longitud de onda. Sentirás la vida en sus ojos, la
energía clara y única detrás de sus palabras y la originalidad e independencia detrás de sus
procesos de pensamiento.

Apéndice I: Preguntas comunes

¿Cómo sé que no soy una persona sin espíritu? – Si has experimentado incluso un rasgo
único del espíritu, entonces no eres sin espíritu. El mismo hecho de que te hayas preguntado
esto, que no estés seguro y desees saberlo con certeza, muestra autoconciencia e
introspección, que es otro rasgo de tener espíritu. De todos modos, es mejor asumir que tienes
espíritu y trabajas en desarrollar sus cualidades como la intuición, la empatía y la lucidez, al
mismo tiempo que eres consciente de tus impulsos egoístas inferiores y evitas actuar sobre
ellos.

Sospecho que mi (amigo, cónyuge, padre) es una persona sin espíritu, ¿qué hago? – Deja
a un lado por un momento la cuestión de si son animosos o no, y céntrate únicamente en si
puedes seguir estando con ellos. ¿Son tan manipuladores, agotadores, abusivos o dañinos
para su bienestar que tiene que alejarse? Si es así, entonces no importa si tienen espíritu o no.
¿Son tan amigables y tranquilos que te va bastante bien tenerlos en tu vida? Si es así, entonces
no importa si tienen espíritu o no. Entonces, desde una perspectiva práctica, solo debe
preocuparse por si puede lidiar con tenerlos en su vida. Donde la distinción entre enérgico y sin
espíritu noentran en juego es en el trato con personas psicópatas, donde incluso después de
prometer cambiar siguen volviendo a sus formas abusivas; luego, en algún momento, en lugar
de racionalizar que simplemente están equivocados y necesitan aún más tiempo y atención, es
mejor concluir que tal vez están actuando perfectamente de acuerdo con quienes realmente
son. Las personas ingenuas que piensan que todos son igualmente buenos por dentro seguirán
racionalizando y tomando el abuso, pero aquellos con mayor comprensión reconocerán las
señales de advertencia de futilidad antes y se ahorrarán el problema.

¿Cómo es que este concepto de personas sin espíritu no es de alguna manera divisivo,
racista, persecutorio y antitético a la idea de igualdad humana, unidad, armonía y
hermandad?– Si la teoría es cierta, que algunas personas de hecho carecen de espíritu,
entonces la verdad del asunto no debería ser ignorada en aras de la corrección política. Cuando
se aplica correctamente, el conocimiento puede conducir a una mayor estabilidad y armonía a
largo plazo. Por ejemplo, todos los intentos de sociedad utópica han fracasado porque se
basaron en suposiciones ingenuas sobre la composición de su ciudadanía; individuos egoístas,
psicópatas, depredadores, acaban corrompiendo la utopía. Si la utopía se basara en la
comprensión total de tales tipos, entonces se podrían haber implementado medidas para
prevenir la corrupción. Además, no se debe culpar a una teoría por las consecuencias de su
mala aplicación; aquellos que lo aplican mal lo usan como un vehículo para la satisfacción de
sus propios egos en lugar de aplicarlo desde una perspectiva espiritual. En lugar de descartar la
teoría debido a su mala aplicación, se debe hacer un mayor esfuerzo para evitar su mala
aplicación. Por último, se puede reconocer la unidad de toda vida sin sacrificar la conciencia de
la diversidad funcional que la comprende; y sólo mediante la comprensión adecuada de cada
parte de esa unidad puede reconocerse el todo con total claridad en lugar de una mera felicidad
ignorante.

Apéndice II: Fuentes de correlación

John Baines – El Hombre Estelar

Rudolf Steiner – Teosofía

Rudolf Steiner – La Filosofía de la Libertad

Rudolf Steiner – Esquema de la Ciencia Oculta

GI Gurdjieff – Vistas desde el Mundo Real

PD Ouspensky – En Busca del Milagroso

Clemente Salaman, et al… – El Camino de Hermes (Corpus Hermeticum)

Dion Fortune – Autodefensa psíquica

Boris Mouravieff – Gnosis, Volúmenes I- III

LKJ , et al… – Las Transcripciones Casiopeas

Amit Goswami – El Universo Autoconsciente

Para obtener extractos de algunas de estas fuentes, consulte este PDF .

Apéndice III : Permutaciones de componentes metafísicos

Para mostrar la necesidad de conceptos como espíritu, cuerpo, etérico y astral, aquí hay una
lista de cómo estos componentes se combinan para formar diferentes tipos de entidades. Como
verá, la diferencia entre estas entidades no se puede explicar con menos de esos
componentes.

Materia elemental:

cuerpo

Cristales y plantas:

cuerpo | etérico

Animales promedio:

cuerpo | etérico | astral

Humanos sin espíritu:

cuerpo | ego | etérico | astral

Humanos con espíritu:

cuerpo | ego | etérico | astrales | espíritu

Humanos enérgicos después de elegir encarnar, primera etapa:

astrales | espíritu

Humanos enérgicos después de elegir encarnar, segunda etapa

etérico | astrales | espíritu

Humanos enérgicos poco antes del nacimiento:

cuerpo | etérico | astrales | espíritu

Humanos enérgicos después de la infancia:

cuerpo | ego | etérico | astrales | espíritu

Humanos enérgicos después de la muerte física:

ego | etérico | astrales | espíritu

Humanos enérgicos después de la "segunda" muerte, durante la otra vida:

espíritu

Humanos sin espíritu después de la formación del embrión:

cuerpo | etérico

Humanos sin espíritu poco antes del nacimiento:

cuerpo | etérico | astral

Humanos sin espíritu después de la infancia:

cuerpo | ego | etérico | astral

Humanos sin espíritu después de la muerte física:

ego | etérico | astral

Humanos sin espíritu después de la "segunda" muerte:

(nada)

Humanoides artificiales:
 cuerpo | ego | etérico

Formas de pensamiento etéricas y fauna astral:

etérico | astral

Seres angelicales:

astrales | espíritu

Seres demoníacos:

ego | etérico | astral

Proyectores astrales enérgicos:

ego | astrales | espíritu

Alienígenas etéricos y humanos trascendidos:

etérico | astrales | espíritu

notas

1
En caso de que alguien se pregunte por qué necesitamos términos como espíritu, alma, astral
y etérico, es porque estos constituyen el modelo más simple que explica una gran cantidad de
observaciones conocidas, de acuerdo con la Navaja de Occam. Las personas que ridiculizan la
necesidad de tales distinciones metafísicas y creen solo en el cuerpo, o solo en el cuerpo y el
alma, están omitiendo ciertas observaciones cruciales, por lo que su modelo demasiado
simplista es suficiente para su conjunto más pequeño de datos. Sin embargo, el modelo debe
ampliarse para incluir observaciones de clarividentes, astutos perceptivos y cualquier persona
que haya experimentado lo paranormal. Al hacerlo, los conceptos adicionales de espíritu, alma,
astral y etérico entran en escena. Creo que estos son los componentes mínimos necesarios
para explicar a las personas sin espíritu. Pero explica mucho más, solo vea el Apéndicetercero
_ Sin embargo, estos términos tampoco son solo explicaciones ad hoc . En lugar de ser
simplemente teóricos, los cuerpos etérico y astral se pueden experimentar directamente a
través de la proyección astral y los clarividentes los pueden ver.

2 Amit Goswami explica con gran perspicacia cómo la conciencia no determinista adquiere

rasgos deterministas a través del condicionamiento en el cuerpo físico, cómo los sistemas
cuánticos pueden adquirir características clásicas. Véanse los capítulos 13 y 14 de su libro The
Self-Aware Universe .

3¿Qué significa que el ego se imprime sobre el componente etérico del alma? Por un lado, se

relaciona con mucho de lo que escribió Rudolf Steiner sobre el doble etérico, el doppelganger,
ese misterioso lado oscuro de nosotros mismos que es antagónico a nuestro bienestar
espiritual. También se relaciona con la mención de Steiner de que en Asia, donde el culto a los
antepasados ​es común, las entidades demoníacas pueden usar los caparazones etéricos
desechados de las personas fallecidas y, por lo tanto, recibir toda la energía psíquica otorgada a
esa identidad durante el culto. Además, el ego que continúa después de la muerte en forma
etérica puede explicar ciertos tipos de fantasmas, así como el problema de los impostores
astrales/etéricos en la canalización mediante los cuales una entidad negativa puede imitar de
cerca a un pariente fallecido. Todos estos fenómenos sugieren que una parte de la identidad
mundana (ego) de una persona sobrevive a la muerte, y dado que no puede ser a través del
cuerpo físico, debe ser lo siguiente más cercano: el componente etérico del alma. Y por último,
cuando se trata de verdadera inteligencia artificial en computadoras cuánticas y seres
cibernéticos, se debe esperar que estos estén acompañados de un campo etérico, tal como las
plantas tienen un campo etérico, lo que ayudaría a que la inteligencia artificial tenga algún nivel
de "vida" y no ser solo una máquina determinista con salida pseudoaleatoria.

4
El término “muerte segunda” es bíblico. “ El que venciere, no sufrirá daño de la segunda
muerte .” Apocalipsis 2:11. “ Y la muerte y el Hades fueron lanzados al lago de fuego. Esta es la
segunda muerte. Y el que no se halló inscrito en el libro de la vida fue lanzado al lago de fuego.”
Apocalipsis 20:14-15. Boris Mouravieff y los Casiopeos habrían interpretado esto
aproximadamente como sigue: 'vencer' significa haber desarrollado el espíritu, 'segunda muerte'
es la disolución de los componentes etérico y astral del alma, y ​'lago de fuego' representa el
alma grupal indiferenciada en que el alma disuelve. ¿Qué hace un fuego además de derretirse y
convertirse en cenizas, eliminando todo rastro de identificabilidad anterior? La segunda muerte
sucede después de la primera muerte. Si la primera muerte es la muerte de lo físico, entonces
la segunda tiene que ser la muerte de lo no físico. Creo en esta interpretación porque tiene
sentido.

5 “Superior” significa superior en función, no posicionalmente superior en el cuerpo, por lo que

el chakra de la garganta no es un chakra superior ya que está asociado meramente con el

habla y las funciones intelectuales. En el sistema del Cuarto Camino se correlaciona con el
“centro intelectual inferior”. Probablemente se desarrolló o evolucionó junto con la capacidad
humana para el habla y el pensamiento abstracto, algo de lo que carecen la mayoría de los
animales. Es por eso que los humanos sin espíritu también tienen un chakra de la garganta, y
por qué pueden ser intelectualmente agudos y no tener límites en sus habilidades para hablar.
Así que es uno de los chakras inferiores en términos de función.