Está en la página 1de 51

Diseño de la terminación de pozos

Introducción

El pozo VP.Nq.FP-20 (Fortín de Piedra)

Programa de completación

Diseño de la terminación de pozos

Gasi cación y pérdidas de circulación

Referencias

Descarga en PDF
Lección 1 de 7

Introducción

Una vez finalizada la perforación y cementado el último revestimiento,


comienza la etapa de terminación. Su objetivo central es obtener el mayor
volumen de hidrocarburos al menor costo posible. Uno de los pasos
fundamentales para alcanzar dicho objetivo es planificar todas las
actividades que van a desarrollarse y así completar satisfactoriamente el
proceso. Esto incluye, entre otras cosas, el programa operativo, el análisis de
información, la determinación de recursos y pruebas puntuales.

Un programa operativo incompleto, que no defina las secuencias operativas


paso a paso, o no considere la aplicabilidad en ambientes difíciles o la
disponibilidad de los recursos e insumos a ser utilizados, terminará por
reducir significativamente la vida útil del pozo al generar eventos
operacionales inesperados producto de una mala planificación, y ocasionará
inclusive daños colaterales como la contaminación ambiental.

En este módulo, abordaremos los contenidos necesarios para diseñar y


planear un acertado programa operativo, el cual debemos incorporar e
implementar como futuros técnicos en hidrocarburos y geociencias, para que
la eficiencia y eficacia que buscamos en cada entrega venga de la mano de
acreditaciones y logros personales, grupales y profesionales. Esto será
acompañado con el caso propuesto del pozo VP.Nq.FP-20, operado por la
empresa Veros Production, que debió optimizar su planificación estratégica
para no verse involucrada en una catástrofe por fallas en la secuencia
operativa y superó algunas barreras que obstaculizaban sus correctas
operaciones.

En el módulo anterior, afirmábamos que la comunicación, el trabajo en


equipo y el profesionalismo disciplinar son competencias innatas que se
deben tener en campo para el correcto desenvolvimiento de las operaciones.
Si el profesional no cumple con estas competencias, se verán perjudicados él
y su entorno. Esto lleva a que no solo necesitemos dominar la disciplina
básica que nos caracteriza y nos imparten los docentes expertos, sino que
debamos aprender a ser flexibles, abiertos, ágiles y creativos al momento de
atravesar situaciones complicadas, tomar decisiones y crear nuevas ideas.
En este mix se pondrán en juego ambos tipos de competencias, las cuales
necesitan tener los equipos que gerencian un proyecto de tal envergadura.

Con el objetivo de entender el conjunto de factores que atañen al


desempeño de una terminación de pozo, vamos a releer el caso expuesto,
perteneciente al pozo VP.Nq.FP-20, en el que se detallan las características y
condiciones del programa operativo que utilizó la compañía para completar y
poner productivo el activo, recordando que la meta de esta empresa es
generar procedimientos y resultados de impacto mundial a muy bajo costo
económico.
A continuación, te invitamos a leer el informe sobre las operaciones
realizadas por la compañía operadora Veros Production, en el cual se
exponen las distintas etapas de la construcción de un pozo y se relata cuáles
son los atributos que necesita potenciar en sus profesionales para mantener
el espíritu de excelencia de la empresa. Como podrás leer, además de las
características distintivas de la empresa, en este momento se apunta a
trabajar las capacidades laborales como puntos de desempeño óptimo del
equipo multidisciplinario que la integra.

C O NT I NU A R
Lección 2 de 7

El pozo VP.Nq.FP-20 (Fortín de Piedra)

Justificación técnica

Lo que se conoce de la fase de exploración fue escasamente inferido de


estudios geológicos y geofísicos y de interpretación sísmica. Se seleccionó el
yacimiento Fortín de Piedra para perforar este activo a fin de que facilitara un
incremento en el factor de recobro de petróleo en las arenas, aprovechando
espesores de 300 m de la roca madre, además de permitir mejorar la
caracterización estática y dinámica del yacimiento a través del plan de
captura de información (registros eléctricos).

No obstante, se desconoce cómo los trabajos de perforación continuaron con


un grado de incertidumbre tan alto. No se poseía información firme y
concreta sobre la estructura a ser perforada más allá de la ubicación
geográfica del pozo, localizado en un yacimiento que atraviesa la formación
Vaca Muerta, indiscutible lugar de acumulación de hidrocarburos del tipo
shale.

Se afirma, según los testimonios aportados por geólogos que estuvieron


presentes en dicha fase, que solo se contaba con la experiencia de los
profesionales a cargo y el hecho de haber realizado las mismas actividades
en pozos y yacimientos con características y condiciones similares.

El reto al cual se enfrenta esta nueva gerencia parece ser de proporciones


épicas. Con tan poca información sobre la estructura perforada; análisis de
las plegaciones, distribución y estructura interna de las rocas reservorios;
evaluación de las excelentes, buenas, regulares o negativas perspectivas de
las condiciones geológicas en el subsuelo explotado —es decir, todas
aquellas incidencias relacionadas directamente con el proyecto—, se hace
casi imposible que este grupo de expertos pueda cumplir con las exigencias
operacionales y, al mismo tiempo, con el marco legal que rige esta materia
en la Argentina.

Ubicación del pozo

El pozo VP.Nq.FP-20 se encuentra ubicado al suroeste del yacimiento Fortín


de Piedra, en el flanco norte del pliegue asimétrico correspondiente a la
estructura del compartimiento denominado Fondo de la Legua,
departamento de Añelo de la provincia de Neuquén. Con esta propuesta de
completación, se esperó confirmar y explotar la sección estratigráfica
perteneciente al Jurásico.

Figura 1: Ubicación geográfica del yacimiento Fortín de Piedra. Añelo,


provincia de Neuquén, Argentina
Fuente: Adaptado de BNamericas, 2018, recuperado de https://bit.ly/2HJRZNZ

La locación en donde se realiza el proyecto posee una influencia de gran


impacto sobre este, debido a que define la interacción de las actividades, y la
magnitud y alcance de estas con cada componente del entorno.

Antecedentes de la perforación del pozo

De acuerdo con un breve reporte sobre la producción de pozos vecinos en el


área y el último informe dejado por el equipo de perforación, se logra dilucidar
que el método artificial de producción utilizado en la zona fue el bombeo
electrosumergible, en condiciones poco favorables, debido a que se registró
un alto corte de agua de formación: alrededor de 500 mil barriles por día, lo
que representaba el 98 % del caudal producido.

Una de las problemáticas más recurrentes con la que tuvieron que lidiar las
gerencias anteriores fue, justamente, la disposición final de esta agua de
formación, lo que dejó un descontrol importante al momento de verter esta
agua producida en zonas urbanas por no poseer las capacidades de
almacenamiento y disposición correctas, indicadas en el marco legal de
estas operaciones.

La unidad de perforación estuvo compuesta por lo reglamentario y


estrictamente necesario para el corriente desarrollo de las operaciones. Se
comenta que esta serie de irregularidades estuvieron provocadas por un
recorte importante de presupuesto, lo que derivó en una metodología fuera
de la planificación programada.

La etapa de perforación se inició con el izamiento de la torre o cabria y la


creación del agujero inicial, el cual conduciría, posteriormente, los fluidos
producidos desde el fondo hasta la superficie. El diámetro inicial de este
agujero era considerable en anchura, sin embargo, se fue reduciendo
gradualmente a medida que se iban definiendo mayores profundidades.
Cuando el trépano penetró la formación infrayacente, rápidamente se colocó
y cementó la tubería de revestimiento con un grado de acero alto a fin de
controlar el pozo y aislar las capas nefríticas, de modo tal que se protegiera el
medioambiente y las zonas aledañas.
Esta tarea cumplió con su objetivo, el cual proponía evitar la filtración fluidos
no deseados a las capas superficiales de agua dulce o que estos alcanzaran
descontroladamente la superficie.

El pozo VP.Nq.FP-20, que se perforó con una verticalidad total y de forma


convencional, alcanzó una profundidad vertical verdadera (TD) de 3180 m en
dos etapas de construcción:

Etapa superficial: 0-230 m.

Etapa de producción: 0-3100 m.

Etapa de terminación y perfilaje para el pozo VP.Nq.FP-20

El objetivo principal de esta etapa, tarea que le competía llevar a cabo a todo
el equipo que conformaba la gerencia de Explotación y Producción (E&P), fue
terminar el activo con las condiciones necesarias para obtener una
producción óptima de hidrocarburos al menor costo posible. Teniendo como
antecedentes el histórico de producción de pozos vecinos que, en síntesis,
habían sido abandonados temporalmente por alto corte de agua, se habían
aislado varias capas de la formación productora y se había obtenido el
mismo resultado. Los pozos no habían superado los tres años de producción
estable, aminorando su caudal de forma progresiva.
Figura 2: Equipos de terminación del pozo VP.Nq.FP-20 en la cuenca
neuquina, operados por la empresa Veros Production, Argentina

Fuente: VM-5, s.f., recuperada de https://ibb.co/wcrtszQ

Como consecuencia de la falta de información que se había evidenciado en


la fase de perforación del pozo, el equipo de relevo decidió inspeccionar los
reportes suministrados por este grupo y adquirir datos relevantes que
sirvieran de guía y soporte para las subsiguientes tareas. Se puso de
manifiesto que el problema más complejo es aquel al que no se le busca
solución. Conscientes de que esta incertidumbre condicionaría en gran
medida las operaciones de terminación, se analizó la fase de revestimiento
del pozo y las fuerzas a las cuales estuvo sometido este elemento, a fin de
repasar cualquier detalle omitido que pudiese significar un evento de gran
magnitud al momento de completar el pozo VP.Nq.FP-20.

Otro punto importante a destacar fue que, antes de la elaboración y


ejecución del programa de terminación del pozo VP.Nq.FP-20, el equipo
perteneciente a la gerencia E&P decidió realizar unos cambios de último
minuto en relación con el proveedor que les suministraría de los elementos
tubulares para la finalización de esta etapa.

Se decidió cambiar de la empresa Tenaris, compañía metalúrgica


multinacional líder mundial en la producción de tubos de acero para la
industria del petróleo, a la empresa regional Steel Open S. A. La decisión de
este cambio tuvo su asidero en el hecho de que la compañía regional
disponía de mejores valores de mercado en su stock y de disponibilidad
inmediata para el traslado.

Además de esta notable irregularidad, no se realizaron las inspecciones


necesarias para la preparación de estos equipos, por lo cual faltó un informe
detallado en el que se verificase la cantidad de tuberías solicitadas, el peso
de acuerdo con el diseño prescrito, las conexiones idóneas y la
compatibilidad entre los elementos tubulares y los accesorios.

Con esta irregularidad en puerta, se pasa a la evaluación del reporte de la


fase de revestimiento, punto que fue repasado de forma breve debido a que
la premura de completar el pozo superó el entusiasmo de un diagnóstico
completo de las condiciones mecánicas del pozo tras su perforación.
Reporte equipo de perforación

El activo VP.Nq.FP-20 fue inicialmente planificado con el objetivo de ser


construido en 5 fases: conductora, superficial, intermedia, de producción y un
liner o tubería corta. Sin embargo, la escasez de personal especializado, la
tardanza en el suministro de las tuberías, los costos elevados de
manufactura y el contrarreloj de productividad que nos presionaba orillaron a
nuestro equipo a terminar el revestimiento del pozo con solo dos etapas
aisladoras.

La primera, la  tubería de revestimiento superficial de 0 a 230 m, con una


resistencia de grados de acero más bajos de lo planificado debido a la
disponibilidad en stock del fabricante. Esta tubería, asociada a la seguridad y
estabilidad del pozo por ser la que soportará las válvulas BOP (blowout
preventer) y el peso de las demás tuberías, fue ensamblada con una nueva
tecnología de enrosque, orden ejecutada por el supervisor líder de
operaciones, quien adoptó esta nueva modalidad denominada dopeless, de
la empresa Tenaris, antigua proveedora de tubulares de nuestra compañía.

En relación con la segunda tubería utilizada, denominada tubería de


revestimiento producción, de 0 a 3100 m —la cual, en un orden normal, es la
cuarta que se baja—, puedo expresar mis reiterados intentos por asentar y
cementar una tubería de esta clase fabricada con un grado de acero de P-
110, sin embargo, se terminó por utilizar un grado N-80, con un peso por
lb/pie de #29, con lo cual al menos se garantizó el aislamiento zonal de la
sección de interés y la protección del arreglo de producción que sería armado
e instalado en la fase de terminación.

El recorte en la planificación de las tuberías de revestimiento redujo


significativamente las etapas de aislación y protección de las paredes del
pozo; todo el peso de la columna formacional e hidrostática recayó en esta
sola tubería, lo que podía generar una deformación elástica del elemento al
encontrarse sometida a este conjunto de fuerzas, en donde la variabilidad de
su longitud final se estaría comprometiendo en grandes proporciones.

Por último, debo aseverar que el diseño de este programa de revestimiento


no se vio afectado por negligencia del equipo que integró nuestra gerencia,
sino por la ausencia de éste dentro de las operaciones, la excesiva presión de
acondicionar el pozo para la producción y los recortes de presupuesto, con lo
cual dejó asentado que en ningún momento se dejó de lado la aplicación de
las propiedades mecánicas y geológicas del activo para la selección y
planificación de las distintas etapas conductoras.

Ramón Pérez, Supervisor de Operaciones de perforación.

C O NT I NU A R
Lección 3 de 7

Programa de completación

Datos del pozo:

Formación aperturada: Fm. Vaca Muerta.

Profundidad de punzados Fm. Quintuco y Fm. Vaca Muerta: 2890-


2999-3008-3020-3050 m.

Presión promedio del yacimiento: 5000 psi.

Casing de 7”, ID: 6.184”, 29 lb/ft: 0-3100 m.

Porosidad promedio en formación Vaca Muerta: 10 %. Dato


enteramente estimativo, obtenido a partir de la experiencia de los
especialistas involucrados, no fue corroborado por perfilaje.

Tubing 3 ½”, 7.5 lb/ft a profundidad de 2500 m.

Tras el delineamiento del programa de completación del pozo, se iniciaron


las operaciones de terminación el día 18/01/20 a las 11:30 a. m. En la
siguiente figura (figura 3), se muestra en detalle el diseño mecánico del
proyecto, donde se diferencian cada una de las fases, superficial y
producción, el diámetro y disposición de las cañerías que se utilizaron y las
profundidades promedio del asentamiento del zapato, importante para
diferenciar las profundidades programadas y los topes formacionales.

Figura 3. Diseño mecánico del pozo VP.Nq.FP-20. Fortín de Piedra. Añelo,


provincia de Neuquén, Argentina

Fuente: Elaboración propia.


El equipo perteneciente a la división que ejecutaría dicho programa detalló en
su reporte de operaciones que las tuberías solicitadas, desde las empleadas
por perforación (revestidores) hasta las tuberías de producción que
acondicionarían el pozo para la explotación de hidrocarburos, fueron
manufacturadas sin costura. Además, se decidió fijar la tubería de
producción con una empacadura fija, al encontrarse el casing cementado.
Este diseño le aportaría al pozo mayor estabilidad en las operaciones de
punzado y producción.

Montaje y prueba del equipo de terminación

Antecedentes

Se logró obtener un breve reporte de las operaciones de


perforación, en el que se contemplan algunos procedimientos
operacionales que realizó el equipo antes de revestir el pozo a la
profundidad programada.

Se verificó la correcta colocación de los accesorios de acuerdo con


el programa elaborado.

Se verificó solo la numeración de los tubulares, sin sincerar los que


se encontraban en malas condiciones producto del deficiente
traslado, por razones de tiempo.

Se seleccionó la tubería de producción del mismo grado de acero


que la tubería de revestimiento.

Se verificó calibración para garantizar una cementación primaria en


óptimas condiciones.

Se calculó la velocidad de introducción de las tuberías de


revestimientos y se procedió a realizar la operación de izado,
enrosque y torqueado de ésta.

Se procedió a bajar lentamente la tubería hasta alcanzar el fondo


programado, se cementó y esperó el fragüe del cemento. El detalle
de esta operación aún no es ubicado para su análisis por parte de la
gerencia actual del pozo.

Estado actual

El pozo VP.Nq.FP-20 se encuentra actualmente revestido hasta la


profundidad de 3100 m, atravesando 30 m de la formación Tordillo. En
función de los topes estimados para esta localización, no se esperan
cambios significativos en cuanto a fluidos a lo largo de la estratigrafía que se
perforó. Se estima que, a nivel del objetivo, se obtendrá un crudo con
gravedades API (American Petroleum Institute) entre 28° y 32°. Sin embargo,
con todos los contratiempos acontecidos y las irregularidades permitidas
hasta este punto en el proyecto, el equipo de E&P solo pudo garantizar dos
de los tres pilares fundamentales para la filosofía de diseño de estas
operaciones: la seguridad y la economicidad. Se deja de lado el punto de las
acciones futuras.

También se evidenció una carencia significativa en el diseño de la columna


tubular, en donde la bajada y cementación del revestimiento ocurrió sin
mayor planificación y sobre la marcha, y faltó definir previamente las
condiciones de carga de los elementos y las especificaciones de resistencia
de estos, lo que generó una reducción en los factores de diseño para la
columna tubular dispuesta del pozo VP.Nq.FP-20.

A continuación, se procedió a ensamblar el equipo de terminación, se armó


BHA de calibración, se instaló BOP y se probó su funcionamiento, además del
sistema general de circulación y elevación. Se acondicionó el pozo para bajar
casing de 7”. La compañía de entubación bajó y cementó 129 juntas de 7” y
el asentamiento del zapato de 7” a una profundidad de 3100 m.

Con trépano de 6” con raspador, se limpió el cemento desde 3070 m hasta


3080 m. Una vez llegado al fondo, se circuló el pozo para acondicionarlo
implementando la siguiente metodología:

Acondicionamiento

Se utilizó un sistema de fluidos limpios llamado NEW DRILL. Con su


tecnología de formulación mejorada se buscó aplacar los problemas que se
venían arrastrando desde la fase de perforación. Además, se usó un fluido de
control WOF, que incluyó los siguientes productos:

Surfactantes.

Secuestradores de oxígeno.

Agente de control de filtrado.

Formiato de potasio.

Inhibidor de arcillas.

Limpiador de tubería con preventor de cambio de mojabilidad.

Bactericida.

Antiespumante.

El detalle de la concentración del producto y la cantidad estimada utilizada


fue expuesto en un informe adicional requerido por el área de formulación y
ejecución del acondicionamiento.

Se preparó un total de 700 bls de fluido de control con los productos antes
descritos, buscando mantener las propiedades del sistema lo más
invariables posibles, propiedades tales como densidad, viscosidad,
porcentaje de sólidos, etc.

Procedimiento operativo

1 Se constató la correcta bajada y calibración de la tubería de trabajo


hasta la profundidad de 3100 m.

2 Se bombearon 50 bbl de agua con 0.32 lb/bbl de soda cáustica.

3 Se prepararon y bombearon 50 bbl de píldora viscosa con 4 lb/bbl


de aditivo Xan plex D, (biopolímero con agente dispersante).

4 Se bombeó fluido de control WOF para limpiar el pozo y verificar


circulación.

5 Finalmente, se bombearon 50 bbl de fluido de completación NEW


DRILL, que se desplazó con fluido WOF, con lo que se hizo énfasis
en la zona de interés de la fase de punzado.

Se dejó el sistema de fluidos en el pozo homogéneo para la corrida del perfil


de cemento USIT (mapa de cemento ultrasónico), en combinación con los
perfiles CBL – VDL – GR – CCL. Se circuló el pozo hasta tener retorno limpio.
De ser necesario, se sacarían 6 barras y se esperaría alrededor de 5 horas a
que se asiente el material en suspensión, para luego repetir la secuencia de
bajar y volver a circular.

Sin embargo, tanto los registros de cemento como la prueba de integridad


del casing no fueron realizados por factores de tiempo, costo/beneficio y
producción acelerada. Decisión que fue tomada de forma muy apresurada
por presiones externas que irrumpieron en la planificación llevada hasta el
momento.

Las operaciones continuaron basadas solo en la experiencia del personal a


cargo, quienes confiaron en que el estado mecánico del pozo era óptimo y no
presentaba ningún deterioro.

Punzado de la zona productiva

Se decidió realizar una terminación bajo balance con TCP por varios motivos
—uno de ellos, la seguridad—, ya que a través de esta modalidad se tendría
un mayor control del pozo durante la fase de punzado, además de que de
esta forma se evitaría generar más daño a la formación.

Otro de los motivos residió en el hecho de estabilizar el pozo garantizando la


limpieza de sus canales generados tras los punzados, lo que reduciría costos
en tiempo y maniobras de equipos de workover (WO).
Se inició la fase de punzado retirando el equipo de terminación e instalando
el árbol de surgencia. Se efectuó el punzado de la zona de interés con
presión a favor de la formación, es decir, en desbalance, lo que provocó la
reacción inmediata del pozo. Se armó y bajó el arreglo de cañoneo con las
cargas distribuidas regularmente, buscando obtener detonaciones de largo
alcance y uniformes. Se circuló a una alta tasa hasta obtener retorno con
presencia de hidrocarburos, lo que confirmó la presencia de estos a la
profundidad seleccionada. Se retiró la sarta a superficie y se acondicionó el
pozo para la instalación del arreglo de producción.

Bajado de la instalación de producción

Se armó y bajó conjunto BES (bombeo electrosumergible), con un


rendimiento de entrada PI (inflow performance), según el análisis de 8.8
bfpd/psi. Se bajó el aparejo con tubing (tbg) de diámetro de 3 ½" y bomba
seleccionada, con un promedio de alrededor de 15 tubos por hora. Las
especificaciones de eficiencia de la bomba empleada fueron 69 S8000N @
5000ft con un protector de 66L BPBSL, serie 540, y un motor de 2x200HP,
serie 540. Además, se presentó un reporte final de producción, el cual arrojó
los siguientes números: 130 BOPD (barriles de petróleo por día) x 5,700
BWPD (barriles de agua por día) x 5,830 (barriles de líquido por día), valores
muy por debajo de lo esperado si se considera que la planificación
representaba entre 600 y 700 BOPD.
Etapa final. Resumen

El pozo VP.Nq.FP-20 se encuentra actualmente revestido y completado hasta


la profundidad de 3100 m, atravesando 30 m de la formación Tordillo. En
función de los topes estimados para esta localización, no se esperan
cambios significativos en cuanto a fluidos a lo largo de la estratigrafía que
perforar. Se estima que, a nivel del objetivo, se obtendrá un crudo con
gravedades API (American Petroleum Institute) entre 28° y 32°.

En función de las pocas estadísticas de pozos vecinos de esta localización y


el historial de eventos para este yacimiento, se estiman problemas de
productividad del pozo asociados con la precipitación de asfaltenos, en
donde las arenas más problemáticas en función de las estadísticas del área
manejadas durante los últimos tres años son las integrantes del yacimiento
Fortín de Piedra. Sin embargo, el pozo puesto en producción es el que
presenta la mayor problemática por asfaltenos del yacimiento. En función de
esto, se recomienda bombear de forma periódica el pozo con sistema de
inyección de química dispersante continua.

En adición, el equipo especializado afirmó que es necesaria la realización de


una prueba de hermeticidad del conjunto y la corrida de registro de mapa de
cemento (USIT). Además, se propuso una reentrada de la cañería en caso de
presentar problemática de baja productividad por taponamiento de los
punzados. Por último, se planteó la implementación de un programa de
estimulación a través de la realización de un diseño de fracturamiento
hidráulico para este pozo, a pesar de la poca información de la cual se
disponía en ese entonces, tales como registros a pozo abierto, los cuales son
fundamentales para el diseño de este tipo de operaciones.

C O NT I NU A R
Lección 4 de 7

Diseño de la terminación de pozos

Planeación

La productividad de un pozo y su exitosa puesta en marcha por varias


decenas de años son garantizadas a partir de la eficiencia de los trabajos
realizados hasta el momento, es decir, la perforación, cementación y
terminación del proyecto. En aras de cumplir con dichas premisas, la
planeación de cada fase es indiscutiblemente necesaria, debido a que el
pozo debe quedar produciendo sin ningún tipo de pormenor.

Existen diversos factores para tomar en cuenta cuando se planean y diseñan


procedimientos tan complejos, además de todas las condiciones mecánicas,
tanto del pozo como del yacimiento, que deben ser consideradas (desde que
se inician las operaciones hasta el transporte y almacenamiento final del
hidrocarburo). Dichos factores engloban aspectos como la tasa de
producción estimada, las acumulaciones de cada zona perforada, los
mecanismos de producción imperantes en los yacimientos para terminar, el
control de pozos y arenamiento, la inversión necesaria para completar el
proyecto, métodos de producción artificial, recuperaciones terciarias y
futuras reparaciones o reacondicionamientos. Todas y cada una de estas
razones alimentan un sostenido programa operativo que atajará las
condiciones y variables de campo de la manera más eficiente y rentable, a
término con el proceso en cuestión.

Como podemos leer en las primeras líneas del informe suministrado, la alta
gerencia de Explotación y Producción (E&P) de la empresa Veros Production
planea continuar con los métodos de producción artificial utilizados en la
mayoría de los pozos perforados en la zona.

Este punto ¿es recomendable reevaluarlo?, ¿por qué es tan importante el


cotejo de la información adquirida en etapas previas a la terminación?, ¿solo
dependemos de la gran experiencia de los profesionales a cargo para tomar
decisiones? Las respuestas a estos interrogantes las iremos conociendo a
medida que avancemos en las lecturas. Pero sí es menester destacar de
antemano que, para liderar y conducir buenos proyectos de excelencia,
necesitamos, por un lado, un buen conjunto de conocimientos técnicos,
específicos y de gestión acerca de la temática que manejemos y, por otro, la
evaluación de la mayor cantidad de información disponible hasta el
momento para cotejar el comportamiento presente del activo con su
comportamiento futuro.

Programa operativo

El programa operativo consiste en un documento que funciona como guía de


todas las actividades que se van a llevar a cabo en la fase de terminación del
pozo. Allí se deben encontrar detallados los datos de perforación y tubería
del pozo, las profundidades y tipos de disparos que se llevarán a cabo, los
tratamientos que se realizarán en cada intervalo (limpiezas, estimulaciones,
fracturas, etc.). Además, se debe contemplar también una estimación de
tiempo y de los recursos que se utilizarán (costos, materiales), la
configuración y tipo de equipo de superficie que se colocará, consideraciones
con respecto a la seguridad, como presiones, caudales, velocidades mínimas
y máximas permitidos para realizar las operaciones.

Sobre las operaciones de la empresa Veros Production, podemos dilucidar


que, desde el inicio de los trabajos de exploración y durante la perforación del
agujero inicial, existió una falta de planificación muy alarmante, lo que
acarreó una metodología improvisada y poco efectiva, basada por completo
en la falta de información y comunicación entre responsables a cargo.

Iniciar de forma incorrecta un proyecto de tal envergadura genera un arrastre


de problemas operacionales que dificultan los trabajos posteriores y podrían
inclusive concluir con el cese de actividades y el abandono temporal del
activo. Debajo se expone un ejemplo de programa operativo de recuperación
secundaria para un pozo perforado al sur de la localidad de Comodoro
Rivadavia, provincia de Chubut.

Programa operativo de recuperación secundaria para un pozo al sur de


Comodoro Rivadavia, Provincia de Chubut
Bajar tapón con PKR fijo encima.

Fijar tapón y probar a 3000 psi con equipo de RTP.

Comprobar aislación y punzar en sobrebalance el o los horizontes prospectivos.


Comprobar sistema de presiones.

Ensayar punzados de acuerdo con los procedimientos, hasta estabilizar.

Definir fluidos del tratamiento.

Definir estimulación o acidificación.


Estimular.

Bombear los BBL correspondientes al tratamiento y posterior desplazamiento.

Desplazar los fluidos de terminación junto con BBL de agua.


Al finalizar el desplazamiento y lavado del pozo, dejar en reposo.

De haber producción de fluidos, medir presión y tomar muestras para análisis.

Ensayar, de acuerdo con los procedimientos, hasta estabilizar.


Consultar y según los resultados de pruebas, definir el siguiente procedimiento.

Fin del proceso.

PKR: Empacadura o Packer.

TPN: Tapón.

RTP: Reparación y terminación de pozos.

BBL: Barriles.
Como se evidenció en el caso planteado, esta guía permitirá tanto al
company man —responsable operativo por parte de la empresa operadora—
como al ingeniero y supervisor, responsable por parte de la compañía de
servicio—, quienes estarán realizando el trabajo en pozo, ejecutar la
completación de acuerdo con el plan establecido. Cuanto más detallado sea
este programa y mejores planes de contingencia contenga, mayor será la
garantía de que exista una menor cantidad de eventos de calidad o
seguridad. Cualquier cambio que se precise realizar en este programa debe
ser autorizado tanto por la compañía que solicita el servicio como por la que
lo ejecuta.

Análisis de información

Para poder planificar e implementar un diseño óptimo de terminación de un


pozo, se debe analizar la mayor cantidad de información consistente posible,
bien sea de pozos vecinos o del pozo intervenido. Es muy importante
asegurar que la información que se utilizará para tomar las decisiones sea
confiable, veraz, actualizada y acorde con los procedimientos que se
realizarán, que abarcan desde la exploración hasta la etapa final de
producción del pozo.

La información cuyo origen se desconoce, cuyas lecturas de las


herramientas no son representativas, o bien no se tiene una garantía del
correcto funcionamiento de estos instrumentos, deberá descartarse
automáticamente debido a que tomar decisiones con base en información
no fidedigna, durante la terminación de un pozo, puede conducir al fracaso
irremediable del proyecto.

En la figura 4, podemos observar cómo aparecen tres tipos de métodos para


analizar la información proveniente de la formación productora. Esta
información deberá ser evaluada e interpretada por el grupo de expertos
involucrados, en pos de encontrar un resultado óptimo para la labor que
desempeñan.

Figura 4: Análisis de muestras

Fuente: Elaboración propia.

1. Muestras de cortes y núcleos.

2. Correlaciones de pozos.
3. Pérdidas de circulación.

Siguiendo nuestro caso, se hace evidente que, en el proceso de análisis de


información previo a la terminación, el equipo de la gerencia E&P desestimó
la importancia de un diagnóstico completo de las condiciones mecánicas del
pozo tras su perforación, lo que expone un panorama de gran incertidumbre
para la etapa próxima de terminación, debido a que, si no se conocen estos
parámetros técnicos básicos, no se podrá definir un programa operativo
efectivo, que se pueda seguir metodológicamente, para el desarrollo de
estas actividades.

Pese a ser una empresa transnacional, con base tecnológica y de servicios


destinados al mundo del petróleo y el gas, y una gran trayectoria en este
rubro, la masificación de pozos productivos nubló el norte a seguir, lo que
pudo acarrear consecuencias funestas para el desarrollo del proyecto. Es por
este motivo que el técnico en hidrocarburos y geociencias debe tener
interiorizadas las bases de una buena planificación y diseño de operaciones
con el objetivo de poder liderar y conducir en el futuro sus proyectos en
campo.

El desarrollo de la planeación a partir del análisis de información debe


comprender desde muestras de cutting y núcleos hasta pruebas PVT y
registros geofísicos, debido a que uno de los aspectos más importantes
durante la terminación de un pozo es el seguimiento geológico que se
realiza  in situ. Asimismo, su correcto y efectivo análisis dependerá de la
adecuada descripción de las muestras de núcleo y correlaciones que
provienen de la toma de muestras y de las pruebas de formación realizadas
durante la perforación; todo esto con la finalidad de optimizar la producción y
que el esquema final del pozo sea lo más eficiente y rentable posible.

Este es, quizá, uno de los puntos más alarmantes en toda la fase de
adquisición e interpretación de datos del pozo VP.Nq.FP-20, debido a que no
fueron realizadas las pruebas, mediciones y registros para la comprensión y
evaluación del seguimiento geológico y litológico de la formación. En otras
palabras, el equipo de la gerencia de E&P estaba trabajando a ciegas y con
mucha ambigüedad de funciones, solo considerando como pilar fundamental
la experiencia que estos profesionales tenían en campo, aseverando que su
objetivo primordial era mantener la relación costo/beneficio del proyecto,
dándole relevancia solo a la rentabilidad y no a la eficacia en las operaciones.
Debajo se expone (ver figura 5) un ejemplo de esquema de terminación para
recuperación secundaria del pozo EA-779, ubicado en la localidad de
Comodoro Rivadavia, provincia de Chubut.

Figura 5: Esquema de terminación para recuperación secundaria del pozo


EA-779. Comodoro Rivadavia, provincia de Chubut
Fuente: adaptado de Epsilon S. R. L., 2010.
Muestras de cortes y núcleos

Durante la perforación, el lodo arrastra a la superficie los cortes que va


realizando el trépano. Estos elementos sólidos son separados del lodo y se
guardan en registros para tener información muy valiosa de la litología
atravesada a lo largo de toda la profundidad del pozo. Estos cortes tienen
tamaños pequeños y algunos ensayos no se pueden realizar con ellos; para
eso, se llevan a cabo las extracciones de núcleos. Estas se hacen con
herramientas especiales y se realizan solo en aquellas zonas de interés con
potencial de contener hidrocarburos recuperables. Con estos núcleos, se
pueden realizar ensayos y obtener información más precisa, como porosidad
y permeabilidad de la roca, saturaciones de fluidos, tipo de roca, etcétera.
Toda esta información es crítica para realizar un correcto diseño de
terminación del pozo.

Figura 6: Muestras de núcleos enteros y segmentados para análisis en


laboratorio
Fuente: Andersen, Duncan y McLin, 2013, p. 16.

Figura 7: Recortes de perforación para análisis en laboratorio

Fuente: [Imagen sin título sobre Recortes de perforación para análisis en laboratorio], s. f.,
recuperado de https://goo.gl/qwa3d6
Para continuar con la comprensión de esta temática, sumado a lo que vamos
conociendo de las operaciones de la empresa Veros Production, te invitamos
a leer la siguiente publicación, que trabaja dos puntos interesantes: por un
lado, la planeación de la toma de muestras a un pozo petrolero; por el otro,
los procedimientos operativos que se deben seguir durante y después de la
toma de la muestra. (UNAM, s. f, p.1-25).

Muestreo de rocas en pozos petroleros.pdf


11.3 MB

Fuente:  UNAM. (s. f). Capítulo 4. Muestreo de rocas en pozos petroleros. Recuperado de

https://drive.google.com/drive/folders/1uaxcTdT8_QK2C1DiNHXkHqjZQe_p9wcQ

C O NT I NU A R
Lección 5 de 7

Gasificación y pérdidas de circulación

Durante la perforación de los pozos, se van atravesando diferentes litologías


a medida que se profundiza. Cuando se perfora una zona con hidrocarburos,
es común que este aporte gas al lodo de perforación, específicamente, si la
presión de la formación supera la hidrostática de la columna de lodo con la
que se está perforando. En estos casos, a nivel de superficie, se obtiene una
mezcla de lodo y gas que debe ser separada para poder reutilizar el lodo y,
consecuentemente, quemar el gas (si el volumen es importante) y continuar
las operaciones de la forma más segura posible. Estos eventos permiten
saber las profundidades a las cuales se tiene hidrocarburos y la presión de
reservorios aproximadas.

Otros eventos que suceden durante la perforación y que otorgan información


para la terminación de pozos son las pérdidas de circulación. Esto ocurre
cuando en superficie se obtiene un menor volumen de lodo que el inyectado,
o directamente no existe retorno en superficie de este. En estos casos, se
puede determinar un valor aproximado de los gradientes de fractura, así
como también conocer la zona de baja presión de poro o existencia de
fracturas naturales en la formación. No obstante, ¿es posible perforar un
pozo sin que se encuentren presentes las gasificaciones y las pérdidas de
circulación? Generalmente, no, por lo cual se hace indispensable planificar la
injerencia de estos eventos y así estar preparados y poder reaccionar de
forma idónea y concreta ante la conjunción de estos fenómenos.

Correlaciones

Uno de los análisis que aporta información muy valiosa al proceso de


terminación de un pozo son las correlaciones. Estas se obtienen a través de
pozos aledaños a la zona intervenida. De acuerdo con los datos
suministrados en esos pozos y los diseños de terminación que se realizaron
en ellos, es posible evaluar si algún cambio puede generar un mejor
rendimiento o si es preferible hacer la terminación similar a esos casos
espejos. Esto ocurre en campos de explotación masiva, en los cuales, para
ahorrar costos y hacer economía de escala, se tiende a estandarizar las
terminaciones y se realizan casi de igual forma que en todos los pozos del
campo.

Además de lo antes expuesto, las correlaciones también son utilizadas con


información tomada del pozo intervenido, cotejando, por ejemplo, los perfiles
petrofísicos que determinan profundidad y saturación de fluidos con el
análisis de núcleo recién extraído del canal, lo que permite garantizar la
capacidad de producción de hidrocarburos del horizonte prospectivo. Debajo
podrás observar (ver figura 8) una correlación de pozos perforados en la
misma zona productora.
Figura 8: Correlación de pozos

Fuente: Instituto de Estudios Andinos Don Pablo Groeber, 2014, https://goo.gl/KbGdF3 

En lo que respecta al éxito de un proyecto de esta índole, es primordial saber


evaluar la información adquirida sobre la geología de la formación productora
haciendo uso de programas y tecnologías específicas, saber medir su
impacto en el rendimiento, comprender la lógica y el mecanismo de acción,
auditar los puntos negativos y proponer alternativas de mejora con lenguaje
técnico. Todo esto recae en datos y conocimientos propios de la disciplina, la
cual requiere una especial atención. A esto hay que sumarle que, luego de
seleccionar, decidir y justificar racional y formalmente el programa operativo
a aplicar, debemos comunicarle a nuestro equipo o empresa externa que los
contrata los beneficios y la administración de esta. Las preguntas son
¿alcanza con solo saber cómo funciona el programa operativo? y ¿la calidad
de experto en la temática es suficiente? Evidentemente, no, por lo cual aquí
es hora de utilizar nuestra otra caja de herramientas, que apunta a las
habilidades profesionales que cada persona tiene.

Ambas instancias comentadas anteriormente conforman las características


y habilidades estratégicas que todo futuro técnico en hidrocarburos y
geociencias debe aprender a identificar y desarrollar durante su proceso de
formación. Debe reconocer, comprender y aplicar sus conocimientos en el
área, para así poder dilucidar si el camino trazado es el correcto o no, en
conjunto con sus competencias específicas, sus aptitudes y sus actitudes
intra e interpersonales, con el fin de armar un gran combo y poner en práctica
todo lo aprendido hasta el momento.

Por todo lo dicho anteriormente, sostenemos que las habilidades


estratégicas son el conjunto de conocimientos, aptitudes y actitudes
necesarias para liderar y conducir proyectos de esta índole, que aporten valor
para la empresa en la cual se desempeña como técnico.

Pruebas durante la perforación


El proceso de perforación, más allá de ser necesario para alcanzar la zona
prospectiva, otorga muchísima información útil. Una de las características
más valiosas de esta etapa es que se tiene el pozo sin entubar, por lo que la
información recopilada es directamente obtenida de las áreas de interés.
Durante la perforación, se puede interrumpir el trabajo para hacer una serie
de pruebas y, de ese modo, seguir obteniendo información que será de vital
importancia en las subsiguientes etapas del proceso.

Un claro ejemplo de la importancia de la realización de estas pruebas


durante la perforación es el caso de la gerencia de E&P, adscrita a la
operadora Veros Production. En su gestión desorganizada y carente de toda
planificación, no realizaron las pruebas pertinentes para mitigar toda la
incertidumbre del proceso. Aquí no solo se pone en riesgo el éxito de esta
etapa, sino que también se ve afectado el proceso global de la construcción
del pozo.

Es menester empezar a dilucidar cuáles son los tipos de pruebas que se


deben realizar durante la perforación de un pozo y, además, identificar la
finalidad de cada una, para así tener un panorama más claro y poder
rediseñar y planificar las pruebas pertinentes para la correcta adquisición de
datos de la formación productora.

Prueba de integridad (FIT o LOT)



Consiste en cerrar el pozo con la herramienta cerca del fondo y aumentar la
presión de la columna de lodo con las bombas de superficie sin obtener el
retorno del lodo, y determinar a partir de qué presión comienza a tener
admisión el pozo y cuál es el gradiente de fractura. Esto se hace, en general,
luego de rotar zapato y perforar 3 metros de nueva formación.

Prueba de formación

Consiste en aislar una zona de interés y permitir que esta fluya a la superficie.
De esta forma, se evalúa el tipo de fluidos obtenidos en superficie y la relación
de caudal-presión. Esto se hace con el arreglo de perforación, pero bajando un
packer para aislar la zona que se quiere probar.

Video 1: Registros de Pozos, Lodo y DST. Parte I

Registros de Pozos, Lodo y DST. Parte I


Fuente:  Colombia, J. (19 de marzo de 2017). Registros de pozos, lodos y DST. Parte I. [Archivo de video].

Recuperado de https://www.youtube.com/watch?v=dBTa4fFqJn8

Como habrás podido ver, es interesante rescatar los conceptos relacionados


a los métodos de evaluación de la formación y con ellos responder a la
pregunta más aclamada desde el momento en que se perfora el pozo:
¿producirá petróleo o gas el pozo? Evidentemente, sí, ya que conocer esa
respuesta y dejar la incertidumbre de lado son la finalidad de la realización de
estas pruebas; en ellas podemos incluir los registros geofísicos, los registros
de lodo y las tomas de núcleos.

De acuerdo con el caso presentado al inicio y concluyendo con la temática


que nos convoca, podemos ver cómo el equipo de profesionales
pertenecientes a la gerencia de E&P de la empresa Veros Production ha
dejado de lado la eficiencia de una buena planificación y diseño del programa
operativo del pozo, para contemplar solo los factores económicos y la
celeridad de los trabajos, sin detenerse un segundo y pensar que cualquier
instalación, tanto de subsuelo como de superficie, es reemplazable, sin
embargo, un yacimiento hidrocarburífero no lo es. En tal sentido, diagramar
una secuencia operativa que respete las condiciones del yacimiento es de
vital importancia para cumplir con la excelencia en los procedimientos de la
empresa. Esto viene a colación debido a que los daños colaterales por una
mala praxis operacional, más allá de afectar las etapas subsiguientes,
podrían terminar en un abandono parcial, o inclusive total, del activo.
Entonces, ¿solo es necesaria la experiencia de campo para perforar y
terminar un pozo? El técnico en hidrocarburos y geociencias ¿solo participa a
través de su conocimiento y no de acuerdo con los procedimientos
operacionales establecidos? Como podemos ver, en todas las empresas se
necesita de personal calificado para desempeñar con éxito sus funciones,
comprendiendo que también se debe actuar con responsabilidad ante los
procedimientos prescritos, guardando mucho rigor por cada paso a ser
implementado en el activo.

C O NT I NU A R
Lección 6 de 7

Referencias

Andersen, M., Duncan, B. y McLin, R. (2013). Los núcleos en la evaluación de


formaciones. Recuperado
de https://www.slb.com/~/media/Files/resources/oilfield_review/spanish13/
sum13/2_core_truth.pdf

Colombia, J. (19 de marzo de 2017). Registros de pozos, lodos y DST. Parte I.


[Archivo de video]. Recuperado de https://www.youtube.com/watch?
v=dBTa4fFqJn8

Epsilon S. R. L. (2010). Solicitud servicios de perfilaje Aislación. Recuperado


de http://www.ambiente.chubut.gov.ar/wp-content/uploads/2014/08/2014-
05-IAP-Recuperaci%C3%B3n-Secundaria-EA-Anexos-Parte-17.pdf

[Imagen sin título sobre recortes de perforación para análisis en


laboratorio]. (s. f.). Recuperado de https://barbiedrilling.com/wp-
content/uploads/2015/08/Formation-Drill-Cuttings.jpg

Instituto de Estudios Andinos Don Pablo Groeber. (2014). Avances en el


conocimiento de la Formación Vaca Muerta [Imagen]. Recuperada de
http://www.idean.gl.fcen.uba.ar/wp-content/uploads/2014/03/Fig-2.jpg
UNAM. (s. f). Capítulo 4. Muestreo de rocas en pozos petroleros. Recuperado
de
https://drive.google.com/drive/folders/1uaxcTdT8_QK2C1DiNHXkHqjZQe_p9
wcQ

VM-5. (s.f.). Recuperada de https://ibb.co/wcrtszQ


Lección 7 de 7

Descarga en PDF

Módulo 2 - Lectura 1.pdf


3.2 MB

También podría gustarte