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Reacciones químicas

MARCO TEORICO

La reacción química es el proceso en el que una o más sustancias —los reactivos— se transforman


en otras sustancias diferentes —los productos de la reacción. Un ejemplo de reacción química es la
formación de óxido de hierro producida al reaccionar el oxígeno del aire con el hierro.
Los productos obtenidos a partir de ciertos tipos de reactivos dependen de las condiciones bajo las
que se da la reacción química. No obstante, tras un estudio cuidadoso se comprueba que, aunque los
productos pueden variar según cambien las condiciones, determinadas cantidades permanecen
constantes en cualquier reacción química. Estas cantidades constantes, las magnitudes conservadas,
incluyen el número de cada tipo de átomo presente, la carga eléctrica y la masa total.

En algunos casos, como en la combustión, las reacciones se producen de forma rápida. Otras


reacciones, como la oxidación, tienen lugar con lentitud. La cinética química, que estudia la
velocidad de las reacciones, contempla tres condiciones que deben darse a nivel molecular para que
tenga lugar una reacción química:

Las moléculas deben colisionar, han de estar situadas de modo que los grupos que van a reaccionar
se encuentren juntos en un estado de transición entre los reactivos y los productos, y la colisión
debe tener energía suficiente (energía de activación) para que se alcance el estado de transición y se
formen los productos.

Las reacciones rápidas se dan cuando estas tres condiciones se cumplen con facilidad. Sin embargo,
si uno de los factores presenta cierta dificultad, la reacción resulta especialmente lenta.

La velocidad de la reacción aumenta en presencia de un catalizador, una sustancia que no resulta


alterada o se regenera, por lo que el proceso continúa. La mezcla de gases hidrógeno y oxígeno a
temperatura ambiente no explota, pero si se añade platino en polvo la mezcla explosiona al cubrirse
la superficie del platino con el oxígeno adsorbido. Los átomos de platino alargan los enlaces de las
moléculas de O2, debilitándolos y rebajando la energía de activación. Los átomos de oxígeno
reaccionan rápidamente con moléculas de hidrógeno, colisionando contra ellas y formando agua y
regenerando el catalizador. Las fases por las que pasa una reacción constituyen el “mecanismo de
reacción”.

La velocidad de la reacción puede modificarse no sólo con catalizadores, sino también mediante


cambios en la temperatura y en las concentraciones. Al elevar la temperatura se incrementa la
velocidad a causa del aumento de la energía cinética de las moléculas de los reactivos, lo que
provoca un mayor número de colisiones por segundo y hace posible la formación de estados de
transición.

Con el aumento de la concentración se consigue incrementar la velocidad de la reacción, al


aumentar el número y la velocidad de las colisiones moleculares.

A medida que la reacción tiene lugar, disminuye la concentración de los reactivos según se van


agotando. Del mismo modo, la velocidad de la reacción también decrece. Al mismo tiempo
aumentan las concentraciones de los productos, tendiendo a colisionar unos con otros para volver a
formar los reactivos. Por último, la disminución de la velocidad de la reacción directa se equipara al
incremento de la velocidad de la reacción inversa, y cesa todo cambio. El sistema está entonces en
“equilibrio químico”, en el que las reacciones directa e inversa tienen lugar a la misma velocidad.

Los cambios en sistemas en equilibrio químico se describen en el principio de Le Châtelier, que


debe su nombre al científico francés Henri Louis Le Châtelier. Según este principio, cualquier
intento de cambio en un sistema en equilibrio provoca su reacción para compensar dicho cambio.
FUNDAMENTO

Cuando una o más sustancias logaran el rompimiento de sus enlaces químicos, generando un
ordenamiento de los átomos, es decir la formación de nuevo tipo de moléculas, ha ocurrido una
reacción química. Las nuevas sustancias formadas tienen propiedades diferentes a las iniciales.

Las reacciones se clasifican en grupos generales atendiendo a diferentes criterios, como los
que se exponen continuación:

1. De acuerdo a la energía calorífica involucrada: Exotérmica y Endotérmica.


2. Según la dirección del proceso: Reversible e Irreversible.
3. Según la velocidad de la reacción: Lentas y rápidas.
4. Por el tipo de compuestos: Iónicos y covalentes.
5. Por el mecanismo de reacción: Reacciones de combinación o síntesis, de
descomposición, de doble desplazamiento o doble sustitución (metátesis). En este tipo
de reacciones se encuentran las de neutralización, precipitación, desprendimiento de gas.
6. Redox: Oxidación o reducción.

MATERIALES Y REACTIVOS

- Tubos de ensayo
- Una gradilla
- Pipetas
-
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