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La guayaba tiene dueño


Copyright © 2012 Jorge Serrano Elías
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Revisión: Ariel Barría


Revisión: Barr ía A.
Portada
Po rtada:: Amelie Serrano
Ilustración: Miguel Valencia
Diseño y diagram
diag ramación:
ación: Rogelio Terán
Terán

Se reservan todos los derechos. Ni la totalidad ni parte de esta


obra puede reproducir
reproducirse
se por ningún
ningú n procedimiento electrónico
o mecánico, incluyendo fotocopia, grabación magnética
o cualquier almacenamiento de información y sistema de
recuperación, sin autorización expresa de su autor.
autor.

Impreso en Panamá
por Universalbooks.

Impreso
  en papel reciclable.
 

 J
 Jorge
orge Serrano
Ser rano Elías

LA
GUAYABA
TIENE
DUEÑ
El secuestro del Estado
de Guatemala

Panamá, República de Panamá


2012
 

Dedico este libro:

A Dios Padre
a Jesucristo, Todo Poderoso,
su unigénito
un igénito h ijo,
hij o, nuestro
nuestro
Salvador,, y al Espirit
Salvador Espirituu Santo, nuestro
nuestro gran
gr an
consolador y consejero

A mi padre Jorge Adán Serrano Vásquez, para-


digma de dignidad, civismo e integridad, quien me
enseñó a amar la libertad y sobre todo con su ejemplo
de lucha por lograrla.
A mi madre Rosa Elías de Serrano quien con su
sabiduría me enseñó a apreciar las relaciones familia-
res, a valorar la paz y el amor al prójimo.
A mi esposa Magda Bianchi de Serrano, mi gran
compañera, quien idóneamente ha estado conmigo,
apoyándome en todo momento de mi vida y siendo
un bastión en la realización
real ización de mis ideales. Ha sufrido
sufr ido
 y gozado
g ozado conmi
conmigo go y hah a sido el gra
g rann bala
ba lance
nce en la es-
tabilidad
A misde
dehijos,
mi familia.
fami lia. Arturo, Juan Pablo, Magda y
Jorge,
Amelie a quienes doy inmensa gratitud
g ratitud por el respeto,
respeto,
cariño y grandes satisfacciones que cada uno de ellos
me ha dado, sobreponiéndose
sobreponiéndose con carácter a lasl as adver-
sidades que nos ha tocado vivir.
A mis nueras, que vinieron a la familia a traernos
grandes satisfacciones y nos han dado un gran apoyo
solidario, en nuestros problemas.
A mis nietos, quienes han traído nuevas esperan-
zas y un reto a mi conciencia, para que entienda que

5
 

todavía tengo mucho por hacer y decir, como una in-


eludible
elu dible responsabil
responsabilidad
idad hacia ellos.
A mis hermanas, cuñados, sobrinos, y sus fami-
lias, a mis sobrinos nietos, primos y demás familia,
por su solid
brindadosolidar
enaridad
idad momento.
todo y por el apoyo
apoyo y cariño
car iño que nos han
A mi suegro Arturo
Art uro Bianchi,
Bianchi, mi grang ran amigo,
am igo, con-
con-
sejero, correligionario, por todo su apoyo irrestricto, a
mi suegra Irma Lazari de Bianchi, por todo su cariño
 y apoyo y a todos los fa fami
mililiares
ares políticos que nos han
h an
favorecido con su aprecio y cariño.
A Paco Perdomo y Chita su esposa, a sus hijos,
Paquito,
Paq uito, Alejandra y Gabriel, que en form formaa solidaria
solidar ia y
abnegada,
abn egada, han transitado
t ransitado juntamen
junta mente te con nosotros
nosotros los
caminos
cam inos pedregosos del ostracismo.
Al pueblo panameño en general, por el cariño y
generosidad con la que nos han recibido y cobijado y
muy particularmente a amigos, colaboradores, com-
pañeros de trabajo y funcionarios, que sin prejuicios
nos han tendido la mano y con apego a la justicia y el
derecho, nos han apoyado y protegido en la persecu-
ción.
 Al pueblo de Guatemala, al que tanto amo y en
part
particular
icular con
sus vidas a aquellos guatema
guatemaltecos,
devoción ltecos, que
y empeño a la han
lucha dedicad
dedicado
por lao
libertad y la justicia.
En forma muy especial quiero rendir un u n tribu
tr ibuto
to de
gratitud, a todos aquellos hermanos que han perdido
sus vidas
vida s en la lucha,
lucha, mani
ma nifestándoles
festándoles a sus seres
seres queri-
dos, que
que sus nombres
nombres están inscritos
in scritos en una lista
l ista inédita
de los héroes
héroes ignorados de nuestra querida patria.
patr ia.
6

Agradecimientos

A LOS SERRANISTAS
Muy especialmente, un reconocimiento a todos
aquellos
aque llos amigos,
am igos, colaboradores
colaboradores y correligionarios,
correligionar ios, que
que
valerosamente y contra
contra toda corrien
corr iente,
te, han defen
defendido
dido
nuestras causas y que por años han sido atacados y se-
ñalados
ñal ados como SERRAN
SERR ANIST ISTAS;
AS; a los “GALLOS”que
“GALLOS”que
han esperado con ansias que yo hablara, se que cuan-
do lean este libro, sabrán que ahora es el tiempo, que
nuestra lucha no ha sido en vano, ni tampoco ha ter-
minado.

A MIS HERMA
HER MANOS NOS PANAM
PANAMEÑO EÑOSS
Un voto
voto de gratitud
grat itud para todos aquellos
aquellos paname-
pan ame-
ños, de todos los estratos sociales,
socia les, e ideologí
ideologías
as que nos
han brindado
bri ndado su amistad
ami stad y su colaboración
colaboración en en difere
di feren-
n-
tes momentos.
Con especial gratitud quiero mencionar al Presi-
dente
den te Guillermo
Guil lermo Endara
Endara Gari
Ga rimany
many,, quien concon fir
f irmeza
meza
no solo
solo nos dio un lugar para refugia
refugiarnos,
rnos, sino que una
patria para vivirla; a los presidentes Ernesto Pérez Ba-
lladares, Mireya
en diferentes Moscosodey laMartín
momentos Torrijos,
persecución quienes
contra mí,
 

reaccio
reaccionaron
naron digna,
dig na, soberana y enérgicamente, en de-
fensa de principi
pri ncipios
os fundamenta
fu ndamentalesles como
como lo constituye
para los latinoamericanos
lati noamericanos el del asi asilo
lo político.
político.
Quiero también testimoniar mi agradecimiento
a los ministros de Estado y funcionarios de estos go-
biernos, que nos han proveído de seguridad física y
 jurídica
 jur ídica a tr
través
avés de estos años. Ag Agradezco
radezco ta también
mbién la
cortesía y congruencia
congr uencia con
con esas políticas
polít icas de Estado que
el actual
actua l gobierno y principalmente
principal mente queque el Presidente
Presidente
Ricardo Martinelli, ha mantenido con nosotros.
A todos los
los amigos
am igos que nosnos han brindado
bri ndado su amis-
amis -
tad y cariño,
car iño, cuya lista sería
serí a muy larga y a quienes pre-
pre-
sento disculpas
discu lpas por no mencionarlos
mencionarlos personalmente.
persona lmente.
res, yAami
Margran
Maria amigo
ia Ruth y hermano
su esposa,
su MaLucas
a Mayi Zarak amiga
yinn Correa, Lina-
am iga
fiel e invaluable, y a Hugo Giraud, quien me ha dis-
tinguido con su caballerosa amistad. A ellos y a sus
familias por todo lo que hemos recibido de ellos, en
cariño, ánimo y respaldo.
Quiero agradecer especialmente a mi amigo y
gran escritor panameño, Ernesto Endara, el “Neco”
por el estímulo y sabios consejos, que como escritor
viejo me dio,
dio, estimulá
esti mulándom
ndomee a escribir este libro
l ibro..
8

Ingeniero Jorge Antonio Serrano Elías


Presidente de la República
Repúbl ica de Guatemala
Guatema la 1991–1
1991–1993
993
9
 

Contenido

A manera de prólo
prólogo
go 15
Introducción 27

CAPÍTULO I 37
Día “D”: golpe de Estado
En la Casa Presidencial
En
De el Palacio
vuelta a lade Gobierno
Casa Presidencial

CAPÍTULO II 65
La democracia propone,
propone, algunos
al gunos disponen y
otros descomponen 
descomponen 
Los planteamientos
planteamientos progra
programáticos
máticos y la guerrilla
guerri lla
Los entendimientos de las cúpulas

CAPITULO III 83
 El país
pa ís está cada
c ada día
dí a peor
El entorno mundial y lasl as acciones de gobierno
gobierno
Líneas políticas: la patronal y la de la ranchería
 
CAPITULO IV 88
Trabajando para el desarrollo
desar rollo de Guatemala y
la democracia
Aspectos económicos
Recaudación y finanzas públicas
Subsidios y presupuesto
Inflación
Infla ción y recuperación económica
económica
Rese
Reservas
rvas y balanza
ba lanza
La estabilización de pagos
económica
 

Política salarial
salaria l
Bono 14
Reapertura de ventanilla, reducción de los subsidios y
apoyo a las municipalidades
Titulación de tierras
Políticas sociales
Educación
Salud
La Ley Serrano y las emergencias en los hospitales
nacionales
El cólera
Vivienda
Hogares comunitarios
Niños de la calle
ca lle y juventudes con problemas
problemas
Logros políticos

CAPITULO V 118
Privatizaciones
El caso de la energía
Telefonía. GUATEL
Nuestro programa
La telefonía
telefonía rural
rura l
El problema

CAPÍTULO VI 133
 El retorno
retor no de los refugiados
refugi ados y la paz
CAPÍTULO VII 150
La paz
La confrontación sorda pero definitiva.
Lo que nunca aceptaron.
La cúpula militar,
mil itar,
A pesar de la conspiración
conspir ación
Cosas curiosas

CAPÍTULO VIII 163


Y entonces, ¿Por qué el Golpe?
12

CAPÍTULO IX 175
Días antes del golpe

CAPITULO X 184
La construcción
Fachada de legalidad de la fachada
Fachada de legitimidad
Títeres y titiriteros
La filosofía de los titiriteros

CAPÍTULO XI 198
Los problemas después de la función
fu nción
La fachada de la sucesión

CAPÍTULO XII 2100


21
La persecución
Se abre la persecución y el acoso
La persecución legal

CAPÍTULO XIII 229


 Esto ¿Por
¿ Por qué
qué ?

CAPÍTULO XIV 237


 Entonces, ¿qué
¿ qué fue lo que pasó?
pasó ?

CAPÍTULO XV 242
 El secuestro
sec uestro del Estado
E stado de Guatema
Guate malala
A partir
part ir de ese momento,
momento, el secuestro
El caso de los Gutiérrez
El secuestro del Congreso de la Repú
República
blica
El secuestro de los medios de comunicación

CAPITULO XVI 284


 El  grand finale
fin ale
Elites delincuenciales
Arzú al
a l poder 
poder 
Portillo al ruedo. Albacea del Gobierno de Efraín
13

Ríos Montt
Berger y Stein a la Presidencia
Berger, gobierno
gobierno de privilegios
privi legios
Temática de segur
seg uridad
idad
Narcotráfico
Crisis del sistema bancario
El Banco
Ba nco de Comercio
Comercio
Las ganancias
gana ncias se privatizan
privatizan y las
la s pérdidas
pérdidas se estatizan
estatiza n
Diferencias con otros problemas bancarios
Mensaje final

CAPÍTULO XVII 308


Mea Culpa, pero hablemos claro

ANEXOS
Anexo uno 320
LA PERSECUCIÓN
PERSECUCIÓN JUDI JU DICIAL
CIAL
Anexo dos 337
DIEZ AÑOS ANTES DE
SER PRESIDENTE DE LA REPÙBLICA
Anexo tres 342
CARTA
CART A DE DIONISIO
DIONISIO GUTIERRE
GUTIER REZ ZA
RAMIRO DE LEON CARPIO
Anexo cuatro 344
HISTORICA CARTA DEL CACIF, MAYO 1993
Anexo cinco 346
UNIVISIÓN PEDIRÁ EXCUSAS AL
PRESIDENTE SERRANO
Anexo seis 348
LO INCREÍBLE
INCR EÍBLE;; ESTO YA YA ES EL COLMO
Anexo siete 3511
35
PROCLA
PROCLAM M A DEL 25 DE MAYO
MAYO DE 1993 DEL
PRESIDENTE JORGE ANTONIO SERRRANO
ELÍAS CONOCIDA
CONOCIDA COMO EL “SERRANA“SERR ANAZO”
ZO”
14

A manera de prólogo

Esta primera edición de La guayaba tiene dueño 


nace
guntarásinpor
prólogo de autor
qué. Pues invitado.porque
simplemente El lector se pre-
deseo que
sea usted el que lo vaya escribiendo a lo largo
la rgo de la lec-
tura
tu ra de esta experiencia de vida que hoy hoy le presento.
presento.
Se supone que el prólogo debe dar un contexto
general de la obra, incluir opiniones sobresobre la misma
mism a y
sobree su autor.
sobr autor. Normalmente
Norma lmente es escrito
escr ito por una perso-
na a la que se invita, ya sea por amistad,
amist ad, identificació
identif icación,
n,
reconocim
reco nocimiento
iento o admiración
adm iración que le tiene al autor. El
pról
prólogo
f iqueogo ayuday para
la obra pa ra que alguien
contribuyaalgauien
que ajeno
aje no al escritor
el lector escr itor justi-
se orientejusti-
en
la lectura
lectu ra del libro.
Quien realiza el prólogo suele presentar la obra
 y a su autor, ante un público que desconoce la l a temá
temá--
tica. Cuando el autor es nuevo, como en mi caso, el
prólogo suele escribirlo un personaje reconocido para
presentarlo
 Yoo he decid
 Y decidido
ido renunciar
renunci ar a todo
to do esto,
est o, pues cua
c ual-
l-
quier cosa que diga alguien en el prólogo, podría ser
cuestionado por la inmensa campaña que mis detrac
tores han realizado, durante más de 20 años, contra

mi persona; período en el que sistemáticamente me


han bloqueado cualquier posibilidad de defensa o de
simple aclaración.
Me aseguran
nocido; han tratado
trat
asegu ranado
quedegané
gapolítico improvisado
improvisado
cia de lay Repú-
né la Presidencia
Presiden desco-
blica de Guatema
Guatemala,la, por casualidad
casual idad y que
que cuando gané
estaba endeudado.
endeudado. Me han acusado de corrupció
corr upción,
n, de
haber sido un “aprendiz de dictador” e incluso llega-
ron prácticamente a copiar
copiar todos los delitos que figu-
f igu-
ran en el Código Penal, para perseguirme.
La verdad es que para que haya un asesino, debe
haber una persona asesinada, un cadáver que sirva
de evidencia y sobre todo, pruebas. Para perseguir al
supuesto asesino, debe haber indicios razonables de
su crimen. Igualmente, si se acusa a una persona de
ladrón, algo debe haber desaparecido y deben exis-
tir evidencias irrefutables del delito. Sólo entonces se
debe perseguir al acusado.
En mi caso, mis enemigos, me han llamado co-
rrupto y ladrón. Sin embargo, a lo largo de 20 años
no han dicho que fue lo que se desapareció, y no lo
han hecho, simplemente porque yo no tomé ni un
centavo del Estado guatemalteco. Tampoco participé
en ning
ni ngún
ún negocio, lo que
que está bien demostrado en el
informe de la Contraloría General de Cuentas de la
Nación,
Nació n, como consta en los expedien
exped ientes
tes judiciales
judicia les le-
vantados en mi contra. La misma
mism a Cancillería
Cancil lería de Gua-
Gua-
temala, en informes que se presentarán más adelante,
declara que no hay pruebas para sustentar los delitos
de los que se me acusó.
Cuando
pudieran incrvieron
incrim
imina r,que
inar, no había
entonces
entonc nada
es ¿qué con lo Simple-
hicieron? que me
mente decir que había comprado 100 fincas en un

16

día, noticia que se desplegó en todos los periódicos


del país. Incluso dieron a conocer, también con gran
despliegue,
desp liegue, el
el número
número de las matrícula
m atrículass de las fincas.
f incas.
Pero
de los obsérvese
centros la saña: las
comerciales 100 fincas eran
denominados locales
“Novicen-
tros”, ubicados en la zona 5 y 11 de la capital guate-
malteca; centros comerciales de mi propiedad que yo
había desarrollado en los años 1978 y 1979, es decir
más de 10 años antes de ser Presidente. Fue una ca-
lumnia criminal y al día de hoy, mucha gente la cree,
al extremo
ext remo de
de que han pedido que esas fincas
f incas se repar-
tan entre los necesitados.
necesitados.
los periódicos
Lo que másque memásdoliódespliegue
en este caso,
hizofue
f ue
deque
la noticia,
uno de
fue el diario La Hora, en su edición del lunes 14 de
 junio
 jun io de 1993.
1993. Esto yo no lo podíapod ía entender en aquel
momento, porque Toyita Godoy, la mamá de Oscar
Clemente
Cleme nte Marroquín
Mar roquín Godoy
Godoy,, director
d irector del medio, ha-
bía sido una de las la s entusiastas
entusia stas promotoras y vendedo-
vendedo-
ras de esos proyectos. Ella era una dama excepcional
que trabajó conmigo durante muchos años, a quien
siempre estimé y quise mucho. (Ver anexo, Dos)
Otro ejemplo, de los cientos que podría citar, es
haber repetido y repetido durante la campaña elec-
toral, que yo era un hombre endeudado. Incluso, los
partidar
part idarios
ios de Jorge
Jorge Carpio
Car pio Nico
Nicolle
lle pusieron mesas
mesas en
todos los municipios de la República, con copias de
las escritura
escr itura de los créditos
créd itos que yo
yo había tenido para el
desarrollo de más de doce proyectos inmobiliarios en
los que había participado
par ticipado..
No dijeron,
dijeron, sin embargo, que esos créditos habían
sido
estabapagados.
CarEdmond
con Carpio Mulet,
pio Nicolle
Nicolle que
lo sabía en esemente,
perfecta momento
perfectamente, pues
él había trabajado conmigo, su oficina estaba al lado

17

de la mía, era mi abogado de planta y era el notario


ante el cual se habían hecho la mayor parte de esas
escrituras. (Anexo, Dos)
Cuando yo asumí
asum í la Presidencia de la República,
República,
el total de mis deudas era de Doscientos Cincuenta
Mil Quetzales. Tampoco aclararon que en el Banco
Industrial y en el Banco Agrícola Mercantil habían
depósitos por
por más de Quinientos
Qui nientos Mil Quetzales,
Quetza les, como
como
consta en la declaración jurada que presenté a los siete
días de haber asumido el cargo y en los estados de
cuenta de los respectivos bancos.
En dicha
tr imonio
trimonio declaración
era superior a lostambién consta
llonesque
Veinte Millones
Veinte Mi de mi pa-
Quet-
zales.
za les. No
No obstante, con con una propaganda insidiosa,
i nsidiosa, han
ha n
hecho creer a la gente que yo estaba quebrado y lo
repiten cada vez que pueden.
Cosa similar hicieron con mi honra personal y la
de mi familia, cuando vieron que no había nada más
de qué acusarme. Un día fui avisado de que pronto
habría
habr ía un nuevo ataque ordenado y orquestado por un
 jefe milit
mi litar
ar cercano
cerca no a Ram
Ra m iro De León
L eón Carpio
Car pio.. A los
pocos días salió,
sa lió, como
como chisme en lasla s noticias, que me
había ido con una cubana; que me había divorciado,
que Magda, mi esposa, me había dejado en la calle y
que mis hijos
h ijos e hijas estaban en situacion
situ acioneses que no me
atrevo a repetir.
Fue algo horrible. Mucha gente se comunicaba
conn mis fam
co f amililiares
iares y con los
los de Magda; unos para ma-
nifestar su preocupación por lo que estaba sucediendo
 y otros
otros,, nat
natura
uralmente,
lmente, con el án
ánimo
imo de logrlograr
ar in
infor-
for-
mación fidedigna. Casi tuvimos que mandar fotos de
la familia con periódicos en los que se viera la fecha,
para que nuestros pobres familiares pudieran aclarar.

18

Sin embargo, hoy veinte años después, todavía hay


gente que
que sigue creyendo
creyendo tan inf
i nfame
ame mentira.
Aprovecho para aclarar que tenemos una familia
integrad
integrada:
todos nosa: han
m is dado
mis cincolashijos
má sson
más sograndes
n una
gra ndesbendición de Dios,
satisfacciones, por
por
su comportamiento, su desempeño familiar, laboral
 y profesional
profesional.. Unos tienen tres tít título
uloss un
universita
iversitarios
rios
 y otro tiene ci
cinco;
nco; tenemos tre tress nueras que son un unas
as
hijas para nosotros y siete nietos, que son los que nos
han hecho la vida feliz. A Dios gracias somos una
familia, normal con nuestros defectos y problemas y
también con algunas cosas buenas.

 Jorgee y Magda
 Jorg Mag da Ser
S erra
rano
no

Con Magda vamos a cumplir, primero Dios, 43


años de casados. Lo único que puedo decir es que
quienes nos conocen, son los que mejor testimonio
pueden dar de lo que es nuestra familia. Lo que sí
puedo afirmar, es que todo lo dicho contra ella ha
sido una infame mentira, salida de mentes depravadas
a las que me ha costado perdonar, pero lo he logrado,

19

dejando esto eenn manos de Dios y su justicia, confian-


conf ian-
do en que, aunque tarde, la verdad siempre sale a luz.
Permítame contar, para que usted juzgue si yo
soy un improvisado, que nací en un hogar en el que
la política era el gran tema. Mi padre, el licenciado
 Jorge Adán Serrano,
Ser rano, conocido como el
el “Canche”
“Canche” Se-
rrano, fue un verdadero patriota, amante de la liber-
tad, un luchador contra las dictaduras, tanto contra la
de Manuel Estrada Cabrera, conocida como la de los
20 años, como contra la de Jorge Ubico Castañeda,
conocida como la l a de los
lo s 14.
14.
Se destacó por su valentía, cuando siendo muy
 jov
 joven
en cr
Camilo cruzó
uzó la lílínea
Bianchi, nea
paradellegar
fuego,al en compañía
compañ
Fuerte de íala de don
Palma,
lugar en el que se encontraba atrincherado el tirano,
para entregar a Estrada Cabrera, la nota en la que se
pedíaa su rendición. Ya
pedí Ya adulto,
adu lto, le tocó, con el licencia-
do Federico Carbonel,
Carbonel, ir al a l Palacio Nacional y entre-
garr a Ubico,
ga U bico, el famoso Memoria
Memor iall de los 31311, en el que
se le pedía la renuncia.
Cuando mi padre murió la prensa entera, y todas
las instituciones cívicas y políticas, le rindieron todo
tipo de reconocimientos. Los titulares señalaban que
cincuenta
cinc uenta años de oposición y lucha lucha cívica ejemplar
ejempla r se
cerraban con su muerte.
Quiero decirle a mis detractores que yo no me
improvisé en la política. Me involucré en ella desde el
día que tuve uso de razón y mi primer discurso polí-
tico lo pronuncié a los nueve
nueve años en el parque central
centra l
de Santa Cantarina Pinula; mi primera entrevista de
prensa la di a los diez años en el noticiero Radio
Sucesos” del periodista Oscar Conde.
Fui Presidente
Pre sidente de mi promoción en elel Liceo Gua-
temala,
tema la, Presidente de
de la Asociación de Estudiantes
Estudia ntes de

20

Ingenierí
Ingenieríaa (AEI) de la
l a Universidad
Universidad de San Carlos, dos
veces
vec es Miembro de la Directiva
Direct iva de la Asociación de Es-
tudiante
tudi ante Universitar
Universitarios
ios (A
(A EU), Coordinador
Coordin ador del Plan
Plan
de los 100 días, para la recuperación del país después
del terremoto de 1976. Ocupé cargos en organismos
regionales e internacionales.
Fui Presidente del Consejo de Estado, organis-
mo encargado
encargado de plantear el camino
cam ino para el retorno a
la constitucionalidad después del Golpe de Estado de
1982.
Fui candidato a la Presidencia de la República,
postulado
postul ado por la coalición del Partido Democrático de
Cooperación
obteniendo unNacional y el Partido
14% de votos Revolucionario,
válidos en las elecciones
generales
genera les de 1984.
1984.
Me desempeñé como miembro de la Comisión
Nacional de Reconciliación, electo en representación
de los partidos políticos de oposición; candidato a la
Presidencia
Presiden cia de la
l a República,
República, por el Partido
Part ido Movi
Movimien-
mien-
to de Acción
Acción Solidaria
Solidar ia (MAS);
(M AS); y electo Presidente
Presidente de
la República a los 45 años de edad.
que Este es el
dieron resumen
motivos paradeque
mi s yo
mis posicio
posiciones
fueranes públicas,am-
públicas,
conocido las
pliamente en el país. Sin embargo, mis detractores,
continúan diciendo, veinte años después, que yo era
un impro
i mprovisado.
visado.
Desde niño,
ni ño, mi padre
pad re me dijo que lo que me iba a
dejar era una buebuena
na educación y se lo agradezco,
ag radezco, pues
pues
aproveché todas las oportunidades que me dio. Así,
obtuve dos
dos títulos
tít ulos en la Unive
Universidad
rsidad de San
Sa n Carlos de
Guatemala; estudié economía y desarrollo en Suecia;
obtuve una maestría en la Universidad de Standfor y
terminé
term iné en ACE,
ACE, el doctorado
doctor ado en educación. También
También
fui catedrático en dos universidades de Guatemala.
21

Estoy seguro que usted ha oído mucho más de


parte de mis
mi s detractores;
detractores; y quizá los párrafos anterio-
res sean los únicos
ú nicos donde conoce
conoce ahora algo di difere
ferente
nte
sobree mi
sobr m i persona.
Lo único
ún ico que
que quiero pedir ala l lector es que limpie
su mente, que no me crea a mí, pero que tampoco
prejuzgue lo que va a leer. Que observe que he re-
currido a documentos y hechos de dominio público;
 y m i interés no es
e s otro que hacer
h acer que la verdad sa salg
lgaa
a flote, pues soy fiel creyente en que solo el conoci-
miento de la verdad nos hará libres.
l ibres.
Cuando el objetivo del prólogo de una obra es
defenderla,
los riesgos yseque
denomina  galeato.sea
el prologuista, Miusted
deseomiesquerido
tomar
lector. Por supuesto, no le pido que haga un  galeato,
solo le pido su objetividad. Estoy seguro que si usted
lee esta obra, es porque le interesa el tema y si eso
es así, es porque conoce la inquietante situación de
Guatemala y le interesa. También podría ser que us-
ted es o vive en otro país latinoamericano, en el que
situaciones similares están aconteciendo o por acon-
tecer,
mismasdado
misma quehertzianas.
s ondas
ondas estas mañas viajan más rápido que las
¿Qué más le puedo decir yo a alguien que como
usted vive y sufre lo que se pretende relatar en este
libro?
En pocas palabras: deseo con todo mi corazón
que sea usted el que haga el Prólogo, ya sea que lo
escriba y me lo mande o que lo guarde en su mente
como fuente de una experiencia vivida por mi patria,
mi fami
fa milia
lia y yo.
yo.
Se que si usted tuvo la paciencia de leerme, mere-
ce ser el
el prologu
prologuista
ista de mi
m i obra.
Muchas
Muc has gracias
g racias de todo corazón.
22

Mi padre, Jorge Adán Serrano Vásquez, el “Canche Serrano”. En su me-


moria, los sobrevivientes del grupo de los 311 colocaron esta leyenda sobre
su tumba:
LA LEY FUE TU NORM
NORMAA
TU ESCUDO EL DERECHO
LIBERTAD TU NORTE
CULTO
CUL TO LA HONRADEZ
HONR ADEZ
DESAFIAN DO SÁTR
DESAFIANDO SÁTRAPAS
APAS
EXPUSISTE EL PECHO
EN SOBERBIO
SOBER BIO CULTO
DE GRA
GRANN ALTIVEZ
ALTIVEZ
Soneto escrito por Guillermo Flores Avendaño
Expresidente de Guatemala

23

Mi padre f irm
irmando
ando la Constitución de 1945,
1945, dado que él fue miembro de la
Asamblea Constituyente y miembro de la Comisión
Comi sión de los Quince encarga-
da de redactar
redact ar el proyecto de la Constitución.
24

Reunión de algunos
alg unos de los 311
311 firm
fi rmantes
antes del Memorial
Memor ial en que se le pidió
pidió la
renuncia a Ubico.
U bico. Foto tomada en 1947 1947.. Mi padre, Jorge Adan
Ada n Serrano
Serr ano está
est á
sentado de quinto en la primera fila; a la izquierda en la foto está sentado
el licenciado Luis Arturo
Ar turo González,
Gon zález, quien fue presidente de la República,
 y a su
s u derech
de rechaa el doc
doctor
tor Jul
Julio
io Bianch
Bia nchi,i, tío
t ío abuelo
abu elo de
d e Magd
Ma gda,
a, mi
m i espos
es posa.
a. Al
Al
extremo derecho de la foto, foto, en la fila
f ila de los sentados, está el coronel Guiller-
Guil ler-
mo Flores Avendaño, mi padrino de bautizo, quien también fue Presidente
de Guatemala.
25

Día de mi graduación como Ingeniero en la Facultad de Ingeniería de la


Universidad de San Carlos, honrosamente apadrinado por el licenciado
Federico Carbonel Rodas y mi padre, patriotas valientes que tomaron la
responsabilidad de entregar el “Memorial de los 311” al tirano de los 14
años. Como acotación histórica, todos los que habían intentado cosa seme-
 jantee anterio
 jant ante riorm
rmente,
ente, fueron
f ueron encarc
enc arcelad
elados
os o liquid
l iquidados
ados.. Firma
Fir marr el Memoria
Memor iall
constituía una hazaña temeraria, pero llevarlo al destinatario era un acto
heroico, reconocido así por la historia.
26

Introducción

Durante
Dura
bre mis nte mucho
mucho tiempo
experiencias; he tratado
he trat ado
sin embargo, de vez
cada escribir
queso-
lo
intentaba, sentía que hacer un anecdotario sobre mi
vida, sería algo que solo disfrutaría mi familia y que,
por otro lado, podría
podr ía verse como
como un documento apo-
logético.
Así han pasado casi veinte años. Múltiples veces
lo he intentado sin lograr
log rar concretar mi
m i proyecto,
proyecto, pues
pues
a decir verdad, siempre me faltó la motivación sufi-
ciente
Unpara
díarealizar unallamada
recibí la aventura
dedeuneste tipo.
viejo amigo, el
periodista Salvador Bonini, quien me comentó que
vendría a verme, pues tenía un regalo muy especial
que hacerme. Llegó a Panamá y el gran regalo eran
cinco mil
mi l negativos de fotos con
con toda la historia
hi storia de mi
primera campaña
ca mpaña a la
l a Presidencia
Presidencia de la República.
República.
También me traía un folleto editado por la
Presidencia de la República sobre el Proceso de Paz
en Guatemala. Obviamente, mi curiosidad me llevó
a revisar rápidamente el contenido y, al hacerlo, me
di cuenta de que toda referencia a mi persona y, so-
bre todo, a mi participación en el proceso, había sido

borrada, no sé si por casualidad o con toda la inten-


ción del caso.
Esto
en, para
Irig oyen,
Irigoy m íPresidente,

siendo no era nte,
Preside algo sistemáticamente
nuevo, pues
nuevo,
sistemát pu es Álvaro
icamente lo Arzú
A
hirzú
hizo.
zo.
Eso yo lo entendía, porque la paz para él fue como
un elemento de marketing político, por lo que en
su mentalidad, dar crédito a quien él percibía como
competencia, no era lógico; y como digo, eso yo lo
entendía.
Sin embargo, se me hacía sumamente difícil en-
tenderlo si esto también venía de otro ex presidente,
Álvaro Colom Caballeros, quien inició su carrera po-
lítica precisamente cuando lo nombré como director
del Fondo Nacional de la Paz (FONAPAZ).
No puedo explicar por qué este hecho sí me in-
dignó. Pero al reflexionar, me di cuenta de que no
era culpa de ellos, que el único culpable era yo, pues
como bien dice el dicho: “El que calla, otorga”.
Irresponsablemente,
Ir responsablemente, yo nunca escribí escr ibí sobre lo que
viví, y dejé queque otros, incl
i ncluyen
uyendodo mis
mi s enemigos, con-
taran
tar an su verdad, muchas veces adulterando los hechos, hechos,
ignorándolos o haciendo falsas y temerarias interpre-
taciones de situaciones que, de sobra, tuvieron una
 justiff icación hi
 justi histór
stórica
ica en cad
cadaa un
unaa de lalass coyunt
coyuntura
uras.
s.
 Y eso, ¿quién
¿qu ién más
má s que yo,
yo, podrí
pod ríaa saberlo?
saberlo ?
Todo eso me llevó a una reflexión profunda. Lo
primero que vino a mi mente fueron mis nietos, que
 ya est
estánán l lega
legando
ndo a ununaa edad en la que quieren
qu ieren saber
s aber
más y más de cuando fui Presidente de Guatemala;
 y pensé que si no escr
escribía,
ibía, ello
elloss serí
serían
an víct
víctim
imas
as de
los escritos
hijos, de mis detractores.
mis hermanas, sobrinos Mi esposa
y, en Magda,
general todamis
la
familia, había vivido la experiencia y ellos ya tienen
su propia
propia opinión;
opin ión; pero mis nietos
n ietos no.
no.

28

Esto realmente me aterró; de inmediato empecé


a escribir con el deseo de dar no solo a mis nietos,
sino que también
to quiero, al pueblo
pueblode
la oportunidad de conocer
Guatemala
Guatemala,mi, al que tan-
versión tade
n-
los hechos, a la luz de mis experiencia de vida y más
de veinte
veinte años dede reflexión;
ref lexión; de una reflexión
ref lexión madura
madura,,
un tanto alejada de las pasiones de mi juventud; una
reflexión inspirada en un legado a las nuevas gene-
raciones y con el profundo deseo de que Guatemala
f inal
inalmen
mente
te encue
encuentre
ntre un camino de dignidad
dig nidad y desa-
rrollo.
Hoy soy hombre de dos patrias, una que me vió
nacer, que me crió, me dió todo su amor para desa-
rrollar
rrol larme,
me, pero
pero que el egoísmo y la codicia desmedida
de algunos
alg unos de sus hijos la llevaron
l levaron al borde del
del abismo,
la humilla
humi llaron
ron,, la han
ha n ensangrentado.
ensangrentado. Una patria cuyas
calles han llenado de dolor, han enfermado la con-
ciencia de mis herma
hermanos,nos, al extremo
ex tremo de que lo bueno
bueno
es malo, y lo malo es perfectamente justificable.
Cuán doloroso resulta para uno, que ya no está
inmerso en esa cultura de codicia y muerte, cuando
habla con un paisano y le pregunt
preguntaa cómo
cómo están lasla s co-
sas, y con la mayor inconsciencia le responden: “Pues
aquí todo igual, nada nuevo, los mismos muertos de
siempre”.
Sin embargo, los grupos que la han exprimido,
que le han chupado
chupado su dignidad
dig nidad,, esos hoy son los res-
petables, a los que les
les echan porras,
porra s, los que gobierna
gobiernan,
n,
a los que se les exalta.
Esa patria sufrida es la que amo, en la que el co-
razón de la gente
no muerto. sencilla y pobre
Lamentablemente, está enfermo,
es hoy pero
ejemplo de lo
malo ante el mundo, y compite en las estadísticas del
horror,, del abandono y de la miseria.
horror m iseria.

29

No obstante, mi pueblo, el secuestrado, espera


ansiosamente que llegue
lleg ue el momento
momento en que su llanto
lla nto
Dios lo cambie
medicina; en sus
que en gozo; quey para
calles su enfermedad
montañas no se veahaya
hmás
aya
la sangre
sang re de sus
sus márt
má rtires
ires;; que en sus campos la voz voz de
la marimba,
mar imba, el tun y la chiri
chirimía
mía abandonen
abandonen su melan-
melan-
colía y canten con aleg
alegría
ría al
a l festejar su liberación.
liberación.
A nuestro
nuest ro Creador, Dios Todopoderoso, debemos
rogarle que nos perdone por tanta maldad, y le pedi-
mos de todo corazón,
corazón, que haga explícitos los caminos
cam inos
de esa liberació
l iberación.
n.
Hoyme
de Dios tengo otra patria:
recogió la que por
del abandono, curóla misericordia
mis heridas,
me dio ánimo y me proporcionó espacios de digni-
dad para sobrevivir, para vivir y, que sobre todo, me
proporcionó la sombrilla que cubrió y protegió a mi
familia.
Lo más grande que mi amada Panamá me ha
dado es haberme perm permitido
itido desarrolla
desarrollarr y formar a mis
m is
hijos, ver crecer a mis nietos fuera de una cultura de
muerte.
mue rte. Es un
u n país en que la vidav ida vale y se respeta, en
que la codicia existe, pero el propio Estado y su gente
la regulan
regu lan;; en la que sus poderosos
poderosos creen en en ella, y sus
fortunas
fortu nas están all
a llí,í, con
con rostro
rostro humano, apuntal
apuntalando
ando el
el
crecimiento
crecim iento y el desarrollo.
desarrol lo.
Mi Panamá no vive de los ahorros de los pobres
que laboran en el extranjero. Ella, caritativamente, es
refug io no solo
refugio solo para exilados
exi lados como yo,
yo, sino para dece-
nas de miles de desplazados que huyen de situaciones
de inseguridad y amarg
a margura
ura en otros países.
países. Panamá no
recibe,
En ella caritativamente
pocas envía lasha
palabras, mi Panamá remesas.
sido mi cueva
de Adulam, desde la cual espero, confiando en Dios,
la liberación
liberación de mi otra patria, mi
m i amada Guatemala.

30

En Guate
Guatemal
mala,
a, la guayaba, además
además de identif
identificar
icar
la deliciosa fruta que todos conocemos, es un mo-
dismo
teniendo queunausamos para identificar
connotación de poder ay lamando,
presidencia,
sobre
todo político.
La guayaba tiene dueño relata cómo los grupos de
elite, los grupos del poder en Guatemala, han mani-
pulado y definido la historia a su sabor y antojo. En
sus páginas presento casos que ayudarán a entender
las estrategias de desprestigio, corrupción y dominio
que estos pequeños grupos han implementado con
algunas
mella endesuslasintenciones
instituciones que les pudieran
de apoderarse hacer
del poder, se
llamen estas Ejército, Organismo Judicial, Congreso
de la República, partidos políticos, líderes políticos,
universitarios, sindicales, líderes gremiales, religiosos,
“miembros de la sociedad
sociedad civil”
civi l” y hasta
hast a Instancias
Insta ncias Na-
cionales de Consenso, fachadas manipuladas, usadas y
desechadas.
Como posiblemente el lector podrá observar,
obser var, uno
de mis grandes
g randes problemas
problemas o pecados, fuef ue que
que yo me di
cuenta de lo que digo hace más de veinte años, en el
momento
mome ál gido en que los dueños de la guayaba tenían
nto álgido
herida la soberbia y esto atentaba frontalmente
frontal mente contra
contra
sus ambiciones de controlar los codiciados monopo-
lios estatales, y a través de estos, SECUESTRAR EL
ESTADO.
Los señores dueños del país, los que me dieron el
golpe de Estado en mayo de 1993, los que con bom-
bos y platillos proclamaron que ellos eran los adalides
del constitucionalismo
el país una Dictadura dely Empresariado,
la legalidad, impusieron en
y hoy siguen
manejando el país a su sabor y antojo, porque sutil o
abiertamente, han eliminado o comprado a todos los

31

gr
grupos
upos que les
les pudieran hacer sombra.
A mí me han desprestigiado. Decir Serrano Elías
dentro de los grupos allegados a ellos es símbolo
todo lo malo. Sin embargo, como podrán ver, el país de
que yo les dejé y lo que hice en dos años y medio, no
tiene nada
nad a que ver con
con lo que ellos han
ha n hecho en vein-
vein-
te. Mi lucha
lucha era legítima,
legíti ma, aunque a ellos no lesles gustara
gust ara
o no les conviniera. La lucha de ellos es despiadada-
mente egoísta.
egoísta . Si no, veamos
veamos lo que se ha dicho
d icho de los
resultados de los gobiernos de los dueños de la guayaba :
“La cadena británica BBC retrata al país como
uno de los
tránsito demás peligdesde
peligrosos
drogas rosos del planeta, hacia
planeta,
Colombia l a rutaMéxico
la de may
m ayor ory
Estados Unidos, transacciones que involucran a peli-
grosas pandillas
pandil las guatemaltecas
g uatemaltecas y de la región.
región.
En su análisis,
aná lisis, la perio
periodista
dista Zeinab Badaw señala
que aunque el crimen organizado y las pandillas no
tengan poder político a través de un partido part ido,, tienen al
país en sus manos, ya que controlan el territorio, los
recursos,, las
recursos la s instituci
inst itucion
ones
es estatales y la cultura.
cu ltura.
Guatemala ha perdido una generación completa
de sus jóvenes por la violencia y el crimen, lo que se
ha cobrado costos humanos y económicos muy altos,
 y al
algu
gunos
nos creen que el paí paíss ya es un est
estado
ado fafall lido”
lido”..
(Fuente:: reportaje
(Fuente report aje en prensalibre.c
prensal ibre.com
om 21/
21/12/
12/110 : JUS-
JUS -
TICIA)
En el diario El País, de España,
Españ a, del 21 de enero de
2008, el señor M.Á. Bastenier, comenta:
comenta:
“¿Es Guatemala la Somalia de América Latina?
O, más próximamente, ¿el Haití de Iberoamérica? El
Estado guatema
g uatemalteco
lteco cumple con
con impecable
impecable tenacidad
todos los requisitos para convertirse en un Estado fa-
llllido
ido,, si es que aún no lo es: zonas del país
paí s –corredores

32

estratég
estratégicos
icos los llama
lla man– n– escapan al control
control de las fuer-
f uer-
zas de seguridad, y son santuarios del narco–delito;
60 muertes violentas por 100.000 habitantes al año,
cuando el índice español no llega a tres; impunidad
que sonríe por igual al que le tira la basura al portal
vecino,, que al asesino
vecino asesi no industrial
industria l en serie;
serie; y una Admi-
Adm i-
nistración
nist ración que
que regu
regulala indifere
indi ferente
nte la pasivid
pasividad,
ad, en luga
lugarr
de prestar servicio
ser vicio al
a l ciudadano
ciudada no””.
No quiero
quiero entrar en la discusión
d iscusión de si Guatema
Guatemala la
es un estado fallido o no, pues esto también es relati-
vo,, como dice el dicho “cada
vo “cada quien
qu ien habla de la fiesta,
f iesta,
según
va a serle fallido
fue enunella”. Porque
Estado los dueños
parallena
que los , cómo
de contratos,
al que le pueden vender bienes y servicios al precio
que quieran, el que les protege sus privilegios y sus
prebendas; el que les obedece en la aplicación de la
 justicia,
 justic ia, el que les tolera
t olera hacer todo
t odo lo que se les da
d a la
la
gana, incluso usar los medios de comunicación a su
disposición para hacer juicios y emitir
emit ir sentencias.
Tampoco para los delincuentes
del incuentes bien
bien organizados,
organ izados,
lavadores de dinero y narcotraficantes, el Estado está
fallido. Tal como lo predije el 25 de mayo de 1993,
ellos están en el mero “paraíso” y más aun, si les lle-
gan a legalizar el narcotráfico, entonces sí se sentirán
como la Alicia en el País de las Maravillas, de Lewis
Carroll.
Sin embargo, el Estado sí podría estar
esta r fallido
fal lido para
aquellos que ven que ese Estado es incapaz de pro-
tegerlos frente a los intereses y abusos de una ínfima
minoría, para los que mendigan justicia porque no la
pueden o no la quieren comprar, para los que pasan
trabajos para comer, los simples asalariaros, los profe-
sionales, obreros
obreros o campesinos,
ca mpesinos, para los que viajan
v iajan en
buses expuestos a que los maten. O sea, en general, sí

33

es un Estado Fallido para la inmensa mayoría de los


guatemaltecos.
Liberar al
a l pueblo
pueblo del Secuestro del Estado,
Est ado, es aca-
bar con la alev
a levosía
osía y ventaja con
con la que se ha man manipu-
ipu-
lado a los políticos, los diputados, los jueces y magis-
trados, los medios de comunicación y, en general, a
muchos
muc hos de los miembros de la sociedad civi c ivil.l.
 Yoo qui
 Y quise
se evita
ev itarr que llegá
l legára
ramos
mos a esto, en la pro-
clama del 25 de mayo de 1993, lo que mis detractores
llamaron el autogolpe. Manifesté entre otras cosas:
“Durante dos años y medio he estado sometido al
chantaje
Congresopolítico por parte un
de la República: de chantaje
algunos miembros del
que hace im-
posible goberna
gober narr en beneficio
benef icio del pueblo…
pueblo…” También
También
expresé:”La irresponsabilidad con la que el Congreso
de la República han resuelto los casos de antejuicio,
es impresionante. Cuántos diputados que incluso han
sido sorprendidos in fraganti en la comisión de de-
litos y a quienes se les ha planteado antejuicios por
múltiples causas, el Congreso se ha negado a darles
trámites”.
En relación a la justicia señalé: “tenemos que re-
conocer que la presente Corte Suprema de Justicia,
desde su elección estuvo viciada. Quisimos trabajar
con ella, pero lamentablemente, su conducta de apli-
car justicia en forma selectiva, es inaceptable….hemos
hecho grande esfuerzos por llevar delincuentes a la
 Justicia
 Justic ia , pero má
máss han tardado
tard ado en entra
entrarr a las cárceles,
que en ser puestos en libertad por los jueces y por la
misma Corte”.
Fui claro en esa proclama: “lo único que me
mueve a tomar esta decisión trascendente, es garanti-
zar que nuestra Guatemala no sea presa del narcotrá-
f ic
ico;
o; que nues
nuestro
tro país no sea
sea un jardín para las mafias;
maf ias;

34

que nuestro país tenga un destino sin corrupción, sin


vena
venalidad
lidad,, sin demagogi
dema gogiaa”. Acoté que
que las medidas
medida s to-
madas para la depuración del Estado, eran necesarias
 y urgentes,
urgentes , “porque
“porque en nuestro país
pa ís el narcotrá
narcot ráff ico ha
crecido de una manera impresionante…. Las canti-
dades de tráfico decomisado durante el año pasado y
lo que va del presente, son cantidades sin precedentes
que superan en mucho el mismo presupuesto de la
nación”. “En ese mismo momento, hace veinte años
dije: “ me siento
siento sumamente
suma mente frustrado
frust rado de ver
ver la visión
v isión
de corto plazo, lo miope que son mchos guatemalte-
cos que apor
que
aferran cosasganar u n pocoyde
un
inmediatas depierden
popular
popul aridad
deidad política,
vista se
esa fun-
ción trascendente, de largo plazo , que se debe tener
para gobernar
g obernar nuestro país…”
país…”
Por todo esto, consideraba y sigo considerando,
que liberar ala l pueblo
pueblo del Secuestro del Estado, es acabar
acaba r
con la alevosía y ventaja
ventaja con
con las
la s que se ha manipulado
man ipulado
a los polít
políticos,
icos, los
los diputados, los jueces
jueces y magistrados
mag istrados;;
los medios de comunicación, y en general, a muchos
de losSémiembros de lapresenta
que este libro sociedad
presenta una civirealidad
civil.
l. lidad cruda
rea cr uda e in-
édita, pues la información allí
al lí ha estado. Sin
Sin embargo,
ha llegado segmentada a los guatemaltecos y en algu-
nos casos tergiversada u orientada con la interpreta-
ción que los dueños le han querido
querido dar al
a l manip
man ipularla.
ularla.
Lo que relato en este libro tiene un respaldo do-
cumental considerable, pues si algo he querido hacer
es apegarme a la verdad. No me cabe la menor duda
de que
que mis
mi s detractores
detractores usarán toda su inf lu
luen
encia
cia para
volve
vo lverme
rme a insu
insultar,
ltar, acuñando
acuñ ando todos los apelativos que
sus comunicadores expertos les vuelvan a recomen-
dar.
No me cabe duda de que tratarán también de

35

impedi
impedirr que esta verdad
verdad se sepa. No obstante,
obstante, les digo
dig o
a todos y a cada uno de ellos, que si verdaderamente
están preo
preocupados
cupados por la situación del país y su deseo
es descalificarme, increparme por delitos o contrade-
cirme, que esta vez lo hagan sin cobardía, sin men-
tiras, sin verdades a medias. Si es cierto que tienen
argumentos
arg umentos y buena
buena voluntad,
voluntad, que los discutan
di scutan frente
f rente
a frente conmigo. Yo estoy dispuesto a hacerlo en el
foro que escojan; dispuesto a reconocer mis propios
errores y, por supuesto, a defender mis causas, sobre
todo las que dieron resultados positivos para el bien de
mi patria, Guatemala.
36

CAPÍTULO I
Día “D”: Golpe de Estad
Estadoo

Lunes 31 de mayo de 1993.


Desde el domingo 30 de mayo, los corredores
 y sa
salones
lones de la Cas
Casaa Presidencia
Presidenciall de Guatem
Guatemal alaa estesta-
a-
ban ocupados por el Vicepresidente de la República,
Gustavo Espina; por diputados, ministros de Estado
 y correl
correlig
igionar
ionarios.
ios. Est
Estaban
aban tatambién,
mbién, m is fa
famm ililia
iares
res y
amigos.
Esto ocurría a escasos 21 días de haber ganado
las elecciones
elecciones para
para las
la s alcaldías
alcald ías del país con mi partido
par tido
político, Mo
Movivimiento
miento de Acción
Acción Solida
Solidaria
ria (MA
( MAS); S); y a
escasos 6 días de la disolu
di solución
ción –con el f in de depura
depurar- r-
los– del Congreso Legislativo y de la Corte Suprema
de Justicia.
Siendo ya la madrugada del día 31, todavía se-
guíamos
gu íamos a la expectativa
expectat iva de la llegada (o en su defecto,
defecto,
de una llamada telefónica) de los diputados con cuya
presencia tendríamos una mayoría calificada para in-
tegrarr una nueva
tegra nueva Asamblea
Asa mblea Nacional.
Nacional.
Ese interminable
interm inable domingo,
domin go, que estuvo muy muy lejos
de ser un día
d ía de descanso,
desca nso, nos dejó múltiples presiones
presiones
 y tensiones que
que no sabr
sabría
ía cómo
cómo descr
describir.
ibir. Sabía que
que así

La guayaba tiene dueño

como nosotros
como nosotros estábamos procurando una salida sa lida insti-
i nsti-
tucional al conflicto, la cúpula del sector empresarial
(grupo Pirámide) y la cúpula militar (grupo golpis-
ta) estaban urgidos de encontrar una salida legal que
permitiera sacarme de la Presidencia y entrar ellos al
abordaje.
En verdad, el agotamiento que experimentaba
era el resultado de sentirme a la orilla de un mar de
propuestas que no son las que uno quisiera para su
país. Todo eso llega cargado con un equipaje lleno
de hastío; hastío que conduce a una especie de fatiga
“presidencial” que incita a abandonarlo todo. Es la
tentación del desapego,
desapego, de lal a indiferen
ind iferencia.
cia.
Sin embargo, por otro lado estaba el compromi
compromiso so
conmigo mi mismo,
smo, con
con los ideales
ideales y con mi país,pa ís, de en-
frentar lo que habíamos comenzado: depurar un u n Con-
greso corrupto
corr upto y una Corte
Cort e de Justicia
Justicia espuria
espur ia y venal
venal,,
 y así
as í dar
d ar paso
pa so a un
u n cambio
ca mbio en el Estado
E stado g uatem
uatemalt alteco
eco
que permitiera el fortalecimiento de las instituciones
democráticas, para que garantizaran los derechos de
los ciudadanos
los grupos
gr ynantes.
upos domi no solo los derechos
dominantes. derechos y privilegios
privi legios de
Los amigos insistían en que descansara un rato.
Pero yo sentía que acostarme era casi una rendición.
Sin embargo, el cansancio
cansa ncio y la tensión fueron
fueron hacien-
do mella y por fin accedí a retirarme. Entré en un
cuarto de visitas habilitado en la Casa Presidencial,
me quité los zapatos y me tiré en una
un a cama
cam a con la ropa
puesta. Era tan grande el cansancio que al principio
no pudeientos,
conciliar
pensamientos,
pensam rel sueño.
se reprodu cíaTenía
eproducía un a ylaotra
una cabeza
vez repleta
el alud de
acontecimientos que, de hecho, habrían de cambiar
mi vida y la historia de Guatemala. Súbitamente, y
acaso sin
si n quererlo,
quererlo, quedé profu
profundamente
ndamente dormido
dorm ido..

38

Día “D”: Golpe de Estado

Mientras en la Casa Presidencial sucedía esto, en


el Palaciojefe
Molina, Nacional el coronel
de la Dirección de Otto Fernando
Inteligencia del Pérez
Ejér-
cito (G2) llamaba a los ocho jefes de las unidades de
inteligencia bajo su cargo y les ordenaba que se pre-
sentaran al
a l Palacio Naciona
Nacionall en uniforme
uni forme de combate
combate
 y con todo su arma rmamento.
amento. También
También les le s ordenaba que
cada uno de ellos trajera, igualmente preparados, a
dos oficiales militares bajo su mando: un mayor y un
capitán.
Pérez Molina se reunió entonces con los oficia-
les convocados y les manifestó que era necesario to-
mar medidas rápidas, pues aparentemente yo estaba a
punto de lograr una mayoría de diputados, constituir
quóru
quó rumm y así restablecer
restablecer una Asamblea
Asa mblea depurada,
depurada, para
pa ra
lograr la salida
sal ida institucional
institucional al
a l conf
conf licto surgido por
por la
disoluciónn de los organismos
disolució organ ismos antes citados.
Les hizo notar también que, la tarde anterior, el
Presidente había sostenido reuniones –sin los resulta-
dos esperados– con Jorge Carpio
Car pio Nicolle,
Nicolle, del Partido
Part ido
Unión
Cabreradel CentrodeNacional
Hidalgo, (UCN)Cristiana
la Democracia y con Alfonso
Guate-
malteca (DC
( DCG).
G).
La salida
sal ida institucional
inst itucional que yo buscaba,
buscaba, obvia
obviamen-
men-
te, iba en contra de los acuerdos que, en las reuniones
en el Centro de Estudios Militares, sostuvieron los
milita
mi litares
res con elemen
elementos
tos del sector privado,
privado, en las
la s que
se convino en tres puntos fundamentales:
1o. La crisis había que resolverla lo más rápido
posible.
2o. El Vicepresidente Espina y yo teníamos
tenía mos que re-
nunciar, y el Congreso debía nombrar a sus sucesores;
 y
3o. Había que depurar el Congreso.
Cong reso.

39

La guayaba tiene dueño

Pérez Molin
Molinaa agregó
ag regó que esa decisión tomada por
él consectores,
otros el sectory que
privadosi yoya había darle
lograba
lograba sido
da comprada
rle una por
sal ida ins-
salida
titucional a la
l a crisis,
cri sis, todo lo que
que intentaban se vendrvendría
ía
a tierra.
En esa reunión, los oficiales de inteligencia, con
Pérez Molin
Molina, a, decidieron actuar
actua r en dos direccio
di recciones:
nes:
1o. Mi renuncia tenía que obtenerse ese mismo
día; y
2o. La Corte de Constitucionalidad
Constitucional idad tenía que de-
finir la transición del traspaso de mando a un Jefe de
Estado interino.
Decidieron entonces poner la estrategia en movi-
miento. Pero
Pero como
como el Mini Mi nistro
stro de la Def
Defensa,
ensa, general
 José Domi
Domingo ngo García Samayoa,
Sam ayoa, el Jefe del Est
Estado
ado Ma-
 yor del Ejército, general
genera l Jorge Perussi
Peru ssina,
na, y el Jefe del
Estado Mayor de la Presidencia,
Presidencia, general Luis Francisco
Fr ancisco
Ortega Menaldo, no habían establecido una posición
clara respecto de mi m i persona como Presidente,
Presidente, deter-
minaron
min aron dirigirse
dirig irse primero al general
general Mario
Mar io Ren
Renéé En-
ríquez, Subjefe del Estado Mayor del Ejército.
A esa reunión, Pérez Molina se hizo acompañar
del coronel Barrios Celada y otros oficiales más. En-
ríquez escuchó los argumentos respecto de una ac
ción inmediata y estuvo de acuerdo con la estrategia
planteada. Comentó a Pérez
Pérez Molina que
que,, una
un a vez esta
estrategia fuera puesta en acción, ya no había marcha
atrás.
atrá s. No obstante lo delicado y trascendente de lolo de-
cidido, este acuerdo lo hicieron como cuando un par
de ni ñoscomérsela.
niños
deciden encuentra una
encuentra u na caja de chocolates
chocolates escondida y
De inmediato, Pérez Molina mandó a tomar
control del Palacio Nacional y desarmar a la Guar-
dia Presidencial que estaba encargada de cuidar el

40

Día “D”: Golpe de Estado

edificio. Ordenó que buscaran a los miembros de


la Corte Mientras
Palacio. de Constitucionalidad
tanto, Enríquez y que los trajeran
llamaba al
a algunos
comandantes de la ciudad que simpatizaban con el
movi
mo vimiento
miento militar,
mil itar, para
para asegurar
asegu rar la decisión
decisión tomad
tomada,
a,
lo que también hizo
hi zo con los líderes del sector privado
que estaban en la jugada.
Después
Despu és de eso decidiero
decidieronn comunicarse
comunicar se con líde-
res de los par
partidos
tidos políticos, sindicatos, Iglesia Católica
 y con la Embajada
Em bajada de los Estado
E stadoss Unidos.
Enríquez y Pérez Molina, acompañados de una
veintena de oficiales (todos vistiendo traje de fatiga y
fuertemente armados) van y le presentan su posición
al Jefe del Estado Mayor del Ejército, general Perusi-
na. Este, de inmediato, se comunicó con el ministro
García Samayoa, quien aceptó recibirlos. Pérez Mo-
lina explicó al ministro su posición, en el sentido de
que Espina y yo teníamos que renunciar y, en con-
secuencia, que la Corte de Constitucionalidad tenía
que encontrar una forma legal de designar un Jefe de
Estado interino.
Aquí se estableció
estableció una discusión,
d iscusión, pues estaban de
acuerdo con que yo renunciara, pero García Samayoa
 y Pe
Peru
rusin
sinaa consideraba
considerabann e in insist
sistía
íann en que era al vi-
cepresidente Espina al que le correspondía tomar po-
sesión de la Presidencia. Pérez y Enríquez argumen-
taban que “Espina
“Espina era cómplice,
cómplice, que había salido
sa lido con
Serrano en las
la s entrevistas
entrevista s de prensa
prensa y públicamente lo
respaldaba, diciendo que él sería leal a Serrano, que
se mantendr
mantendría
fuera ía como
Presidente y queVicsaldría
Vicepresid
epresidente
enteél”.
con mientras Ser rano
Serrano
Por otro lado
argumentaban que dejar a Espina era dar la cara del
continuismo y que, en ese momento no importaba lo
que la ley estableciera.

41

La guayaba tiene dueño

Finalmente, después de una discusión desagra-


dable, decidieron
Vicepresidente que irse.
debían tantoLuego,
el Presidente como el
por el desarrollo
de los acontecimientos
acontecimientos y por un conf conf licto que resultó
entre ellos, se comprobó que la insistencia de García
Samayoa y Perusina en que se quedara Espina no era
para cumplir
cu mplir lal a ley,
ley, sino para
par a evitar
evita r que, una vez Pérez
Pérez
Molina se consolidara en el poder, los sacara de sus
puestos, lo que en efecto sucedió, cuando los hizo a
un lado, después de haberlos
haberlos utili
uti lizado.
zado.
Una vez de acuerdo y al término de la reunión,
más o menos a las ocho ocho de la mañana,
maña na, García Samayoa
Sa mayoa
llama a la Casa Presidencial y habla con el general
Francisco Ortega
Orteg a Menaldo y le informa que se ha de-
cidido pedirle la renuncia el Presidente, y lo instruye
para que se lo comunique.
Uno de loslos amigos
am igos presentes, quien había dormido
en un sillón
sil lón de una de las salas
sal as de la Casa Presidencia
Presidencial,l,
entra a la habitación en la que yo estaba descansando
 y me dice:
dice :
 —Presidente, el Ejército te est estáá pidiendo la re-
nuncia.
¿Qué ejército pide mi renuncia? Vos dirás que
algunos
alg unos comandantes
comanda ntes del ejército
ejército……
 —Así es –me responde– a lg lgunos
unos coma
comanda
ndantes
ntes
del ejército.
 —Bueno –le dije. Graci
Gracias,
as, en cinco m inutos es-
toy afuera.
Apenas salió
sal ió mi amigo,
am igo, me fu
fuii al cuarto
cuar to en el que
que
estaba durmiendo
 —Levántate,
 —Levá mi esposa
ntate, Mag
Magda Magda.
da,, y pónga
pónganse
nse a orar, porque
se está cumpliendo
c umpliendo lo que el Señor
Señor nos había anuncia-
a nuncia-
do: el ejército me está pidiendo la renuncia.
Entré a la recámara de mis hijas y a la de mis

42

Día “D”: Golpe de Estado

hijos; les conté lo que estaba pasando y también les


pedí Mequearreglé
se juntaran
arreg lé y,
y, al saa lir,
a l saliora
orar.r. detenerme
r, evité detenerme a conversar
conversar
con los
los amigos
am igos presentes
presentes y me encaminé directad irectamente
mente
al despacho del Jefe del Estado Mayor de la Presiden-
cia.
Al entrar, el general Ortega Menaldo, que esta-
ba en su escritorio, de inmediato se puso de pie y lo
saludé.
 —¿Qué
 —¿ Qué está
est á pasando,
pasa ndo, General?
General ?
dos  —Señor Presidente,
en el despacho
despac unistro
gr upo
grupo
ho del Ministro
Min dede
l a of
la oDefensa,
f icia
iciales,
Defe les, reuni-
nsa, le está
est á
pidiendo la renuncia.
 —¿Hay
 —¿ Hay algo
a lgo que podamos
pod amos hacer?
h acer?
 —No, señor –me contestó– contest ó– Nos han h an cort
cortado
ado la
lass
comunicaciones,
comunica ciones, incluyendo los teléfonos
teléfonos de dos ci cifr
fras
as
 y nos tienen práct
prácticamente
icamente aislados.
aisl ados. He
He ordenado em-
plazar arti
ar tillería
llería en las esquinas. La Guardia Presiden- Presiden-
cial nos es fie
f iell y está lista para garantizar
gara ntizar su seguridad
 y la de su famil
fam ilia.
ia. Les he advertido que ante cualquiercualqu ier
movi
mo vimiento
miento contra nosotros, abriremos
abri remos fuego.fuego.
 —Muy bien, Genera Generall –le respondí
respondí–– AhoraAhora,, por
favor, llame usted al Ministro de la Defensa y díga
le que venga a mi despacho con los oficiales que lo
acompañan para que dialoguemos.
Salí de la sala. Mientras me dirigía a las habita-
ciones tranquilicé con gestos y palabras a los que se
acercan preocupados por las noticias que ya estaban
en el aire.
En la recámara encontré a mi familia orando y
les dije:
 —Creo
 — Creo que los debía haber sacado de aquí a to-
dos y haber enfrentado esto yo solo.
Magda, mi esposa, me interrumpió enfáticamente:

43

La guayaba tiene dueño

 —No, Jorge,
Jorge, estamos
esta mos como debemos estar:
esta r: todos
 juntos,
Miporque Dios así
hijo Arturo, acomo
sí lo haesquerido.
quer ido. saltó y dijo:
habitual,
 —No papá, esto ya lo sabía sabíamos.
mos. Aquí est
estamos
amos y
Dios sabe por qué. Quizá sea para su propia protec-
ción. Siempre hemos estado juntos, ¿por qué ahora
habríamos de separarnos?
Lo que hice fue extender
extender los brazos para tomar
toma r la
mano de mim i esposa y la de mi hija
h ija Amelie, que
que estaba
a su lado, y juntamos las manos con Arturo y Jorgito,
Magdita
grac
gracias y Juanpues
ias a Dios Pablo. Así,
mosnos
sentíamos
sentía quepusimos
proteacción
orar,estaba
su protección a dar
presente. Una vez más, Él se manifestaba en forma
sobrenatu
sobr enatural
ral en momentos
momentos cruciales
crucia les dentro de nuestra
nuestra
unidad familiar. Sabíamos se cumpliría y pasaría lo
que estaba dentro de su soberana voluntad.
voluntad.
A l termina
term inarr de orar, pensé:
pensé: “Ahora,
“Ahora, Jorge, te toca
prepararte para enfrentar los negros fusiles de la trai-
ción, pero iré adelante, con ánimo”.
Cuando entré en el despacho privado, el general
Ortegaa Menaldo me estaba esperando.
Orteg esperando.
 —¿Qué
 —¿ Qué nuevas me tiene, General?
Genera l?
 —Dice el señor Mi Mininistro
stro que ellos no vienen
aquí.
 —Entonces –respondí
–respondí–– prepárese porque noso-
tros sí vamos allá.
Al salir del despacho, me reuní con algunos de
los diputados que estaban esperando que se lograra
el quórum (muchos de ellos habían dormido en los
sillon
sil lones
es y sofás de la Casa Presidencial) y les dije:
 —Less pido que gu
 —Le guardemos
ardemos la cacalm
lma,
a, pues no les
puedo explicar nada, porque yo mismo no sé exacta-
mente lo que está pasando, por lo que todavía no he
tomado decisiones sobresobre las
la s acciones
acciones a segui
seguirr.

44

Día “D”: Golpe de Estado

Estaba terminando de hablar con los diputados,


cuando
formóllegó
informó
in que noel se
general Ortega
podía pasar
pasa r porMenaldo, quien
el túnel que me-
comu
comu-
nica con el Palacio Nacional, porque lo tenían blo-
queado del otro lado.
 —Ni modo –respondí–
–respond í– cruz
cr uzaremos
aremos lal a cal
ca l le.
En efecto, con una comitiva formada por varios
oficiales
of iciales del Estado
Est ado Mayor
Mayor Presidencia
Presidencial,l, con el general
general
Ortegaa Menaldo y elemen
Orteg elementos
tos de seguridad
segur idad a la cabeza,
nos encaminamos por el llamado Callejón Manchén,
para
sobreentrar al Palacio por las puertas traseras, que dan
la 5ª Calle.
Apenas salimos pudimos ver que la Casa Presi-
dencial estaba
est aba fuertemente protegida,
protegida, con dos tanqu
ta nque-
e-
tas emplazadas a la entrada y la Guardia Presidencial
bienn armad
bie ar mada.a. Sin embargo, obser
obser vé francotiradores en
las azoteas de los edificios vecinos, y no sabía a quié-
nes eran leales esos hombres, cuyos fusiles asomaban
amenazantes.
En ese momento
momento estaba consciente de que mi vida v ida
corría peligro, pero la adrenalina empujaba y estaba
más decidido
decid ido que
que nunca a enf
enfrentar
rentar a los oficiales
of iciales que
estaban ya reunidos
reun idos en el despacho
despacho deldel Minist
Mi nistro
ro de la
Defensa.
Al llegar a la altura de la iglesia Presbite
Presbiterian
riana,
a, en
la esquina del Callejón Manchén y 5ª Calle, fuimos
divisados por un grupo de periodistas, quienes ense-
guida corrieron y nos rodearon. Es lamentable, pero
ese era un mal
ma l momento
momento para acercarse con ciert ciertaa im-
pertinen
perti nencia
cia a un hombre que que va camino
cami no a enfrentar el
problema
prob lema más grande
g rande de su vida, lleno de incert
incertidum-
idum-
bres, tensiones y por qué no decirlo:
decirlo : también
ta mbién temores.
La comitiva se abrió paso
pa so a la fuerza
f uerza entre el compacto
compacto
grupo de tenaces periodistas armados de grabadoras y

45

La guayaba tiene dueño

micrófonos. Gritaban, insultaban, acusaban e interro-


gaban.
Por supuesto, al no detenernos ni contestarles, los
periodistas se irritaron sobremanera, lo que produjo
un desagradable y lamentable incidente de altercados
e insultos.
En el Palacio
Palac io de Gobierno
Gobierno

Al acercarnos al despacho del Ministro de la De-


fensa, pude escuchar
más parecía escu
una char
corrienuntef luir
corriente de voces
de aguas en sordina,
en
oscuras que
f iltrándose
filtrándose
entre matorrales.
matorra les. Cuando entraentramos,
mos, encontramos
encontramos a un
grupo de oficiales del Ejército, unos sentados y otros
de pie. De pronto se escucha una voz que exclama:
 —¡Atención
 — ¡Atención!! ¡El
¡ El Presidente
Pre sidente de la República!
República !
Se produjo un silencio, hasta que todos se pu-
sieron de pie. Los saludé y rápidamente recorrí con
la vista la cara de los presentes. El ministro, general
García Samay
Sam ayoa,
oa, me seña
señalóló la silla
sil la que me reservaban.
Ocupé el lugar y volví
volví a observar al grupo g rupo de oficiales
of iciales
presentes, notando que algunos
presentes, alg unos de aquellos rostros me
decían claramente que no estaban de acuerdo con lo
que allí
al lí estaba aconteciendo
aconteciendo..
No obstante, hay dos rostros que quedaron gra-
bados en mi mente: el del coronelcoronel Luis Fernández
Ferná ndez Li-
gorría,
gorr ía, Segundo
Segu ndo Jefe
Jefe de la Policía,
Policía, quien estaba de pie,
pie,
pero recostado en el dintel de la puerta del despacho.
Me miraba claramente con cierto desafío, quizás no-
tando que yo me preguntaba qué estaba haciendo él
allí,
al lí, pues se trataba de una
u na reunión de ejército
ejército y no de
policía; pero rápidamente,
rápidamente, recordé el compadra
compadrazgo zgo de
él con Pérez
Pérez Molina,
Molin a, quien siempre lo defendía a capa
 y espada y quien,
quien, parado
par ado en un
unaa tercera
tercera fil
f ila,
a, mantení
ma nteníaa

46

Día “D”: Golpe de Estado

en su
su rostro una mirada
mirad a muy
muy similar
simi lar a la de Fernández
Ligorría. En ese momento entendí que ya tenían ali-
neada a la policía. Se produjo entonces un incómodo
silencio,, roto por mí:
silencio m í:
 —Entiendo,
 —Ent iendo, señores, que ha hann tomado ustede
ustedess
una decisión
deci sión que
que ahora deben explicarme.
explicar me.
Repuesto de la sorpresa, el general García Sama-
 yoa pretendió hacer un preámbu
preámbulo,lo, pero yo lo inte
inte--
rrumpí:
 —Genera
 — General,l, ahór
ahórreme
reme la fórmu
fórmula la y vayamos a l
grano.
 —Como
 — Como usted g uste, señor –respondió, m ir irán-
án-
dome porpor primera
pri mera vez– El Ejército
Ejército ha decidido
decid ido pedir-
le la renuncia.
 —Estoy aquí
aqu í para
par a que dialog
di aloguemos
uemos –respondí.
 —No hay nad nadaa que di
dialog
alogar
ar – sentenció el genera
generall
Mario
Mar io Enríqu
Enr íquez–
ez– El Ejército ya tomó
tomó una decisión.
 —El Ejército, General,
Genera l, no me puede pedirped ir la re-
nuncia. YoYo fui
fu i elegido por el pueblo.
pueblo. Este es un asunto
a sunto
civil en que
sugiero el que
no seustedes
metan.no tienen nada que ver. Les
 —No, señor
señor.. El ejército ya tomó un unaa decisión y
la va a mantener –intervino otra vez el general Enrí-
quez.
 —Y
 — Y yo les
le s digo
d igo a ustedes
u stedes que se vanva n a ar
arrepenti
repentirr
de haberse metido en esto, porque no tienen derecho
constitucional para hacerlo y les advierto que con con esta
actitud le están
está n causando un grav g ravee daño
da ño al propio
propio ejér-
cito. Yo soy un presidente democráticamente electo;
no fui
fu i puesto por ustedes, y se los dejo perfectamente
claro: no voy a renunciar, por lo que si quieren qui-
tarme tendrán que deponerme, darme un golpe de
Estado y cargar
ca rgar con las
la s consecuencias
consecuencias de ello.
 —La decis
decisión
ión del ejército está
est á tomada
tom ada –repitió, a

47

La guayaba tiene dueño

falta de argumentos el general Enríquez.


Entonces,
Entonc es, me puse de pie y les manifesté:
man ifesté:
 —Parece que no tenemos nad nadaa má
máss de que ha-
blar.
Antes de salir, le extendí la mano a cada uno de
los presentes y en aquellos apretones percibí que había
acertado al pensar que en muchos de aquellos oficia-
les era todavía indecisa su obediencia a tal acción. Es
decir, no estaban completamente de acuerdo con la
decisión a la que fueron empujados por Enríquez y
PérezAlMolina.
dirigirme hacia la puerta de salida, me llamó
nuevamente la atención ver en esta reunión, y casi
escondido entre dos oficiales, al coronel Fernández
Ligorría. Al pasar cerca de él, escuché que un oficial
de la comitiva presidencial dijo, en un tono que Fer-
nández lo pudiera escuchar:
 —Ot
 — Otra
ra tra
t raición
ición más,
má s, vos, hijo
h ijo de puta.
Entonces aceleré el paso porque presentí que los
ánimosestábamos
pues podrían caldearse y llevábamos
desarmados. las de
Regresamos a laperder,
Casa
Presidencial por el túnel ya despejado, para no hacer
el trayecto sobre
sobre la calle
cal le y así, evitar
evita r incidentes públi-
públi-
cos.
Creo que yo aún no llegaba a la Casa Presiden-
cial, cuando el Ministro de la Defensa y sus princi-
pales colaboradores, pasaron a un salón aledaño, en
el que continuarían la búsqueda iniciada desde muy
temprano: una salida jurídica a mi deposición como
Presidente de la República. Para ello, el ministro y
los oficiales presentes, contaban ya con un grupo de
asesores empeñados en encontrar vías de legalidad al
golpe de Estado.
A esa hora, los licenciados Eduardo Palomo

48

Día “D”: Golpe de Estado

Escobar, Fernando Quezada Toruño, Marco Au-


gusto García Noriega y Carlos Enrique Reynoso
Gil, ya esperaban el resultado
resu ltado de la reunión,
reun ión, para saber
si yo renunciaría o no. Supuse que ya tenían algunos
puntos preparados
preparados para
par a una eve
eventua
ntuall propuesta
propuesta de re-
solución.
Desde temprano de esa mañana, el Ministro de
la Defensa había pedido por radio a los magistrados
de la Corte de Constitucionalidad que se presentaran
a su despacho en el Palacio Nacional. Solo se presen-
taron
 y Gabr los
Gabriel magistrados
iel La
Larios
rios OchaitJorge
Ochaita. Mario García
a. Los otros dos ma la
magi Guardia
gistr
strados
ados
que estaban activos,
act ivos, incluido el Presidente
Presidente de la Cor-
te, doctor Epam
Epaminondas
inondas González
Gonzá lez Dubón,
Dubón, se negaron
a asistir al despacho del Ministerio de la Defensa. Por
otra parte, la quinta magistrada, licenciada Josefina
Chacón de Machado, ya había renunciado.
El Ministro de la Defensa, con evidente nervio-
sismo, insistía en que se tenía que encontrar un pro-
cedimiento
complicaba, para
debidoremoverme
a que en legalmente. Todo se me
la reunión conmigo les
negué a renunciar, dejando muy claro que si me que-
rían quitar tendrían que darme un golpe de Estado.
Al no encontrar la salida que el ministro deseaba, la
tensión crecía.
crecía. ¿Cómo
¿ Cómo hacer
hacer para que el golpe
golpe milita
mi litarr
pareciera legal, de manera que quedara impoluta la
cara del ejército?
ejército? Lograr
Log rar esto sería una
u na labor para ver-
daderos titanes del engaño y la triquiñuela.
Otto Pérez Molina y el grupo de oficiales a su
servicio, presionaban ahora al general Enríquez y al
Ministro García Samayoa para que no flaquearan en
la decisión de sacarme
sacar me de la Presidencia, pues ya todos
estaban muy comprometidos.
comprometidos.
Por otra parte,
par te, y desde tempranas
temprana s horas del 1º de

49

La guayaba tiene dueño

 jun io, se había


 junio, habíann dado a la ta
tarea
rea de l lalama
marr y tr
traer
aer al
Palacio a los personajes
personajes y dirigentes
dir igentes que en una u otra
forma deberían servir de fachada al golpe de Estado
que se hallaba en proceso. Sin embargo, debido a mi
negativa a renunciar,
renunciar, iba a ser difícil
dif ícil hacerlo en form
formaa
rápida y dar con la fórmula jurídica que tuviera algún
grado de credibil
credibilidad.
idad. Mientras
Mientras más
m ás discutían
d iscutían los dos
magistrados presentes con los asesores del Ministro,
más difícil resultaba encontrar una salida civil y jurí-
dica al golpe militar
mil itar..
Por otra parte, la situación se complicaba por
la presión de los presidentes de Centroamérica que
instaban al Ministro de la Defensa para que ayuda-
ra a encontrar una fórmula que restableciera el orden
Constitucional, respetando la integridad y continua-
ción del gobierno popularmente electo. A ello se su-
maba la ausencia de dos magistrados de la Corte de
Constitucionalidad, la falta del apoyo incondicional
que ellos hubieran querido de parte de Álvaro Arzú
Irig
Irigoy
queoyenen y de Efraín
provocaron EfraRigoberta
ín Ríos
R íos Montt,
Montt, a más
Menchú, máPremio
s del incidente
incidente
Nobel
de la Paz y el Dr. Alfonso Fuentes Soria, Rector
de la Universidad de San Carlos, en la plaza central.
Todo aumentaba los temores del Ministro de que se
pudiera hacer manifiesta la división que existía en el
ejército, lo cual podría convertirse en un conflicto
serio y sangriento.
sang riento.
Por estas razones se urgía a los abogados y magis-
mag is-
trados presentes a encontrar rápidamente una salida
a la crisis. Otra dificultad que enfrentaban era que el
Congreso no estaba en funciones y que el grupo de
diputados fiel al gobierno, haría imposible armar algo
con la celeridad que las circunstancias imponían.
Por fin decidieron lanzar una serie de proclamas

50

Día “D”: Golpe de Estado

por los
los medios de comunicación,
comunicación, para darsedar se ellos mis-
mis -
mos alguna credibilidad, y plantearon una resolución
en la cual se afirmaba que yo había abandonado el
puesto (aún cuando estaba en mi m i propio
propio escritorio en
la Casa Presidencial) y le daban al ejército el rol de
salvaguard
salvag uardaa del orden constit
constitucio
uciona
nal.l. Todo,
Todo, con
con el fin
f in
de salvar la cara de la institución
institución armada.
ar mada.
Se encargó al coronel Pérez Molina que consi-
guiera las firmas de los magistrados que no estaban
presentes y que trajera al Magistrado Presidente para
la conferencia de prensa, durante la cual podrían dar
a conocer la resolución de la Corte de Constitucio-
nalidad y la proclama del Ejército en la que avalaban
mi destitución. Esto resultaba grotesco, ya que tanto
la resolución de esta Corte, como las proclamas del
ejército, eran preparadas en el propio despacho del
ministro y por el mismo grupo de personas.
Sin embargo, todavía existían baches en el cami-
no, pues para la resolución de la Corte aún faltaban
las firmas de
al llamado del los magistrados
Ministro que no yrespondieron
de la Defensa que, por lo
tanto, no estaban en ese despacho. A eso se sumaba
que las mencionadas “resoluciones” o “proclamas”
 –lla
 –l lamémosla
mémoslass así– se bas
basaban
aban en dos hechos tota
totalmen-
lmen-
te falsos: que yo había abandonado el cargo y que el
Vicepreside
Vice presidente
nte Gustavo Espina Salg
Sa lguero
uero también pre-
sentaba su renuncia, argumentando
arg umentando que esta se encon-
traba en el escritorio del Ministro
Min istro de la Defensa.
De vuelta a la Casa Preside
P residencial
ncial

Al regresar, me vi rodeado de familiares, compa-


ñeros, amigos, secretarios, diputados, ministros, e in-
cluso miembros del cuerpo diplo
d iplomát
mático
ico que deseaban

51

La guayaba tiene dueño

saber
litares.el resultado de la reunión sostenida con los mi-
Nos acercamos al llamado “Salón de los Espe-
 jos” y les conté loslo s pormenores
pormenores:: que los m ililita
itares
res me
habían pedido la renuncia y que enfáticamente yo les
contesté que no renunciaría y que el único camino
que tenía
teníann era darme
dar me un golpe de de Estado.
Mientras esto acontecía en la Casa Presidencial,
llegaron al Palacio de Gobierno Rigoberta Menchú
 y el Dr. A lfonso Fuentes SoriSoria, a, con el propósito de
presentar al Ministro de la Defensa su propuesta para
la formación de un triunvirato, iniciativa que fue re-
chazada por el Ministro. Allí mismo se pudieron dar
cuenta de lo queque se estaba frag
fr aguando.
uando.
Entonces salieron del despacho ministerial y se
dirigieron al Parque Central, donde la Premio Nobel
de la Paz comenzó a protestar a voz en cuello:
 —¡E
 — ¡Esto
sto es un
u n golpe mil
m ilita
itar,
r, es un golpe mil
m ilita
itar!
r!
Unas doscientas personas reunidas frente al Pala-
cio  —
Nacio
Nacional
 —¡ nal,, la rodearon
¡ Gobierno rodea
civ il,ron
civil sí ; ymi
, sí; mempezaron
i lit ares no! a corear:
litares
 A renglón seguido empezaron a llamar traidores
a todos los personajes y dirigentes civiles que estaban
entrando al Palacio. Incluso quisieron agredir a Jorge
Carpio
Car pio Nicolle,
Nicolle, quien para protegerse tuvo que correr
hacia una residencia cercana. Lo mismo sucedió con
Alfonso
Al fonso Cabrera,
Cabrera, Secretario General de la DC, a quien
también lo abuchearon, insultaron y hasta intentaron
ag
agredir,
redir,
dias
dia Pdebiendo
debi
s del Pal endo
alacio. ser
acio. ser protegido por los mismos guar-
g uar-
Los noticieros televisados y radiales no cesaban
de transmitir las novedades y los comunicados que se
enviaban desde el despacho del Ministro de la De-
fensa, todas destinados a disfrazar el golpe de Estado,

52

Día “D”: Golpe de Estado

haciendo creercuando
do el puesto,
puesto, que yola había renunciado
real idad
realidad era otra. y abandona-
Como antes dije, yo estaba en la Casa Presiden-
cial, sentado en la silla presidencial, escuchando con
indignación las comunicaciones que se daban a los
medios: “El Presidente ha renunciado”, decían; y yo,
aislado, con una comunicación muy restringida, con
todos los teléfonos internos cortados. Solo entraban
las llamadas que ellos permitían. Estaba claro: tenían
que seguir
segui r anunciando
anuncia ndo que el Presidente
Presidente abandonó el
puesto para ganar tiempo y seguir dándole todas las
vueltas posibles a la Constitución Política que ellos
proclamaban defender pero que estaban violando en
la forma más descarada, esperando sin éxito, encon-
trar un artículo en el cual respaldarse para lograr sus
propósitos.
Llegaban a la Casa Presidencial informes espo-
rádicos e incompletos de los esfuerzos que hacían los
golpistas por sumar dirigentes civiles al movimiento,
trat ando de mantener lo
tratando lo que bautiza
bautizaron
ron como
como Instan-
cia Nacional de Consenso, formada apenas 48 horas
antes, y en la que se sentían tranqui
t ranquilos
los los empresar
empresarios
ios
poderosos. No obstante, no podían llegar a acuerdos
con los dirigentes
dir igentes de los
los partidos
part idos polít
políticos,
icos, al extremo
de que Alfonso Cabrera trató dos veces de salir, pero
fue forzado a permanecer
perm anecer en en el lugar por miembros
m iembros de
la inteligencia militar
mil itar..
Todo esto hacía
hac ía aumentar
aument ar la tensión.
ten sión. El golpe fue
planificado
empresa rios aDionisio
empresarios lo largo
Dion de muchas
isio Gutiérrez
Gutiér reuniones
rez y Leonel por
Toriello,
Toriel los
lo, con
Pérez Molin
Molina. a. A pesar de tener el dominio
domin io total sobre
varios de los integrantes de la Instancia Nacional de
Consenso, sese miraban
mi raban debilitados
debil itados por el
el desarrollo
desar rollo de
los acontecimientos
acontecim ientos..

53

La guayaba tiene dueño

Incluso,
Incluso
llevadas , hubo
a cabo decision
decisiones
en el Centroesde
Centro tomad
tomadasas en Milita
Estudios las litares
Mi reuniones
res que
que
se les hacía imposible implementar. Por ejemplo, de-
cidieron convocar a una manifestación el lunes 31 de
mayo, en la cual se demostraría un “amplio rechazo
a Serrano”. Sin embargo, no necesitaron mucho para
darse
dar se cuenta de que no tenían poder de conv convocatoria,
ocatoria,
pues toda la gente que ya tenían
tenía n adentro, escasamente
se convocaba a sí misma. Por otro lado, la gente que
estaba en la calle respaldaba las medidas de disolución
del Congreso y de la l a Corte Suprema de Justicia.
En poco tiempo cambiaron de estrategia y es así
comoo decidieron, de manera
com ma nera precipitada,
precipitada, forta
fortalece
lecerr la
organización
organ ización de fachada
fachada que sirviera
sirv iera a sus fines,
f ines, como
como
era la Instancia Nacional de Consenso: enfocada fun-
damentalmente en sacar al Presidente y al Vicepresi-
dente de la República y a depurar el Congreso.
Cong reso. Esto lo
concretaron con éxito el mismo 30 de mayo, cuando
tomaron conciencia
conciencia de la debilidad
debilid ad popular de su pla-
tomaron conciencia
conciencia de la debilidad
debilid ad popular de su pla
nificad
nif icadoo mo
movim
vimie
iento
nto..
A pesar de la gravedad del caso y de la fragili-
dad del movimiento que fraguaron, se precipitaron
para organizar una conferencia de prensa, presidida
por el Ministro de la Defensa, general García Sama-
 yoa, quien apareció completamente un unifor
iformado,
mado, con
brillante botonadura, charreteras, bastón de mando
 y el pecho cubierto de in innumerables
numerables condecoracio-
nes, hablando en nombre de la Instancia Nacional de
Consenso. Con civil,
un movimiento el fin estuvo
de mostrar que representaba
acompañado de funcio-a
narios y “dirigentes” de algunos sectores. La escena
me provocó risa.
Resultaba paradójico y tristemente ridículo que
un militar, el propio ministro de la Defensa (que se

54

Día “D”: Golpe de Estado

supone
obedienteporyleyno ydeliberante)
constitucionalmente
aparecieraundando
funcionario
la cara
“civi
civil”
l” del golpe de Estado y actuando
act uando como port portavavoz
oz
de la llamada Instancia Nacional de Consenso.
Me asombró la habilidad de los magnates que
burdamente
burdame nte utilizaron
utiliza ron a los
los militares
mi litares para dar
da r un nue-
vo golpe de Estado. Siendo honesto,
honesto, sentí penapen a al ver a
otras bue
buenas
nas personas
persona s que estaban de pie, respaldando
la conferencia,
conferencia, con una cara solemne de circunstancia
circunst anciass
 y que no tení
teníanan la má
máss m ín
ínim
imaa sospecha de la form formaa
en que los estaban utilizando. Algunos de ellos tam-
poco tenían la más remota idea de cómo les pagarían
este favor.
favor. Cierta
Ciertamente
mente nono visual
vi sualiza
izaron
ron los alcances de
la conspiración, de la queque muy pronto
pronto sería
seríann víctima
vícti mas,
s,
tanto el Ministro
Mini stro como
como otros of of iciales militares
mil itares y mu-
chos de los
los dirig
di rigentes
entes civiles presentes. Fueron
Fueron usados,
desechados y hasta asesinados.
Durante todo el día recibí llamadas de los Pre-
sidentes de Costa Rica, El Salvador y Honduras que
estaban reunidos en San Salvador por los sucesos de
Guatemala.
Guatemal a. Después
Después de haber real
realizado
izado múltiples
múlt iples ges-
tiones, me manifesta
man ifestaron
ron que
que no había nada
nad a que hacer,
hacer,
indicándome que todos habían suscrito una carta en
la que exigía
exigíann respeto
respeto a mi integridad
integr idad física
f ísica y la de mi
familia.
De manera personal, los mandatarios me sugi-
rieron que abandonara el país. Agradecí las muestras
de solidaridad de mis colegas centroamericanos, pero
pensaba que taltener
es muy duro cosaque
no entraba en mis
abandonar, mempujado
is planes, porque
por las
bayone
bayonetatas,
s, el puesto que se ganó con tanto
t anto esfuerzo
esf uerzo y
con tantos votos.
 Yaa por la tarde,
 Y ta rde, poco a poco
poco se fue desalojando
desa lojando la
Casa Presidencial. Los comcomun
unicados
icados y los movi
movimientos
mientos

55

La guayaba tiene dueño

de tropas
ánimo de por todo el
la gente. Sinpaís abrumaban
embargo, e influían
muchos en el
decidieron
quedarse para acompañarnos. De pronto, don Artu-
ro Bianchi, mi suegro, entró en el despacho privado,
acompañado del Vicepresidente Gustavo Espina y me
dijo:
 —Mirá
 —M irá,, Jorge, ta
tall como está la situ
situación,
ación, creo
que lo
lo más
má s sensato sería que Gustavo
Gustavo asumiera
asum iera la Pre-
sidencia, eso le daría continuidad a lo que iniciaste y
sería —
unYofreno
 —Y para tus
entiendo sus enemigos.
razones
ra zones –le respondí. Si Gus-
tavo cree que puede lograr algo, yo no seré quien me
oponga; pero les digo que yo, yo, de ning
ni nguna
una manera
m anera voy
voy
a renunciar, pues no voy a dar legitimidad a este gol-
pe. Pero tampoco me opondré a que Gustavo asuma
la Presidencia, aunque, sinceramente les digo, esta es
una opción a la que no le veo la menor posibilidad,
pues esta gente no ha llegado hasta aquí para devol-
vernos después el poder. Ya se la jugaron y se quedan
con él; sin embargo, adelante Gustavo.
Gustavo.
 —Hass pensado bien –dijo
 —Ha –d ijo mi suegro–
sueg ro– Te
Te sugiero
sug iero
que hablés con los diputados que aún están aquí y que
les pidás el apoyo para Gustavo. Solo dame tiempo
para llamarlos
llama rlos..
Entonces subimos al segundo piso de la Casa
Presidencial, donde se ubicaba el nuevo Salón de Ga-
binete y nos reunimos con los diputados presentes,
comunicándoles la decisión. Se produjeron discur-
sos de lealtades y ratificaciones de agradecimiento y
amistad, al igual que algunas reflexiones. Esta vez la
despedida era definitiva y por eso se dio con grandes
muestras de cariño
car iño y respetos mutuos.
Gustavo salió a reunirse con los militares. Cuan-
do regresó a la Casa
Ca sa Presidencial, nos encontramos
encontramos en

56

Día “D”: Golpe de Estado

uno
a un de los pasillos
pasil
teniente quelos venía
y nos corriendo
detuvimospor
a platicar.
plat
el icar. Eneneso,
pasillo esoel,
que conv
conversábamos,
ersábamos, se le cayó
cayó una de las
l as granad
g ranadas
as que
llevaba en el chaleco, y el artefacto rodó, pasando al
lado mío y de Gustavo. Cuando la granada se detuvo
sin explotar, nos dijimos que no era “nuestra hora”,
pero ¡qué susto!
 —¿Cómo te fue con los militares? –pregunté a
Gustavo.
dió– —Sus condiciones
Rechazaron eran inaceptables
in aceptables
mis propuestas y entre–me otrasrespon-
cosas,
querían que firmara mi renuncia de antemano. Fue
una entrevista de lo más estéril.
En esas estábamos cuando el Presidente de Costa
Rica, Rafael Ángel Calderón Fournier me llamó por
teléfono
teléfono y después
después de hacer
hacer alguna
alg unass reflexion
ref lexiones,
es, insis-
insi s-
tió en que renunciar
renunciara:
a:
  ¡Renunci
¡Renunciá, á, Jorge
Jorge!! Estoy segu seguro
ro de que así se
tranquilizan y paran la persecución y el peligro que
hay sobre
sobre vos
vos y tu fami
fa mililia..
a....
 Yoo pensé: segu
 Y seguroro que Ra Rafa
fa Calderón tiene in-
formación que yo desconozc
desconozco; o; seguro
seg uro le hanha n hablado
los militares o quién sabe qué cosa esté pasando. Sin
embargo, repensé mi posición y le reafirmé que mi
respuesta
respu esta seguía
segu ía siendo
siendo la misma
m isma:: que no no renunciar
renunciaría.ía.
 —Bueno –me dijo dijo–– entonces sa salílí de al
allílí lo má
máss
pronto posible.
Luego se me avisó que miembros del cuerpo di-
plomático se hallaban en la Casa Presidencial y que
querían reunirse conmigo. Los recibimos, Gustavo y
 yo, en el Sa
Salón
lón de Banquetes. El vocero era el Nuncio
Apostólico. Nos manifestaron que estaban preocupa-
dos por nuestra seguridad física y que así lo hicieron
saber a las nue
nuevas
vas autoridades, a quienes les entregaron

57

La guayaba tiene dueño

una nota exig


familias. exigien
iendo
do nuestra protección
protección y la de nuestras
nuestra s
Les agradecimos su invaluable gesto humanitario
 y su justi
justiff icada y leal preocupación. Sin mucho más,m ás,
se retiraron.
 All quedar solos, yo traté
 A tr até de convencer
convencer a Gust
Gustavo
avo
de que tal vez era hora de abandonar el país. Me dijo
que iría a su casa para hablar con su familia y que
cuando todos estuviéramos listos, que nos nos llamá
lla másemos
semos
 y nos pusiéra
pusiéramos
 —Me mos
máss de
l lamá
lla a laacuerdo.
hora en Al A l despedir
que desped
decirse,
se,s.dijo:
te decidá
idás.
A l regresar al a l salón privado de la Presidencia,
Presidencia, reci-
bo otra llam
ll amada
ada del Presidente
Presidente de El Salvador,
Salvador, Alfredo
Alf redo
Cristiani. Me percibe un tanto indeciso e insiste:
 —Jorge, por favor sa salílí.. Te estoy envia
enviando
ndo un
avión y te veveníníss para acá, aquí estásestá s seguro.
  —Gracias, Fredy, pero hay cosas que todavía
tengo que hacer...
 —No hombre –respondió – estás est ás jugando
jug ando con tu
vida y la de tu familia. No hay más que hablar, te
mando unu n avión de inmediato.
inmed iato. ¡Por favor
favor,, Jorge, salí,
el avión va para allá!
Cuando el Presidente salvadoreño
sa lvadoreño colgó,
colgó, se incre-
mentó aún más la duda en mi cabeza, porque el tono
de la llamada de Cristiani no dejaba la más mínima
duda de que los golpistas se estaban desesperando y
hasta quizá provocando situaciones molestas que aún
era posible evitar.
Como la llamad
lla madaa telefónica
telefónica se dio cuando estába-
mos comiendo con mi familia, miré a mis seres que-
ridos y les dije:
 —Creo
 — Creo que es imprudente
impr udente seguir
segu ir aquí, no sé qué
piensan
piensan ustedes.
Todos asintieron con la cabeza, y Jorgito dijo:

58

Día “D”: Golpe de Estado

 —E s c ie
 —Es ierr t o, ¿ qu
quéé po
podedemo
moss h ac
acer er?? Me
Mejojorr vá-
monos.
Llamé al a l general Ortega,
Or tega, a quien
qu ien lele referí
referí el con-
tenido de lal a conversación
conversación con el Presidente
Presidente Cristian
Crist iani.i.
Le notifiqué
notif iqué que
que yo creía prudente salir sal ir y no provocar
provocar
algún conflict
conf licto. o.
 —Lass cosa
 —La cosass est
están
án seri
serias
as y percibo ta tanto
nto en Cri
Cris-
s-
tiani como en Calderón mucho nerviosismo y no
quiero complicar las cosas innecesariamente.
El general
cuando term inéOrtega
terminé escuchaba
de hablar, moviócon
él movió atención,
la cabeza hacipero
hacia
a los
lados y me dijo:
 —Señor Presidente, usted no tiene por qué sa salilirr
hoyy. Descanse, y mañana
ho mañ ana con calma,
cal ma, cuando
cu ando lo tenga
todo listo se va. La Guardia Presidencial y su Estado
Mayor estamos aquí para protegerlo y garantizar su
seguridad.
Agradecí sus palabras, pero le reafirmé que creía
que lo conveniente y prudente era salir tal como me
lo pidiera
pidiera el Presidente
Presidente Cristian
Crist iani.i.
Acto seguido pedí que me comunicaran con el
Vicepresidente Espina, y le dije:
 —Mir
 —M irá,
á, Gustavo,
Gu stavo, me llamó
ll amó Crist
Cr istian
ianii e insi
i nsiste
ste en
que salgamos hoy; incluso, me está enviando su pro-
pio avión para que no haya problemas. Después de
oírlo, creo que eso es lo prudente. Ya ordené que lo
preparen todo.
 —Mir
 —M irá,
á, m i herm
hermano
ano –me responde Espin Espina–a– yo
estoy en la cama
cam a ya, lo hablé con ThelmThelmaa y los patojos
 y nosotros nos vamos a queda
quedar; r; es má más,s, ha
hann venido
varios hermanos, hemos orado, y nos sentimos tran-
quilos con la decisión.
 —Gustavo,
 — Gustavo, a mí me parece imprudente.
impr udente. Acorda-
Acorda-
te que siempre, vos mismo decías: “Juntos entramos,

59

La guayaba tiene dueño

 juntos sa
salilimos”
mos”,, pero yo entiendo que esae sa es tu deci-
sión y la respeto.
 —Así es, gr gracia
aciass –me responde Gust
Gustavo–
avo– Como
te dije, ya estoy
estoy en la cama
cam a y nos quedamos.
 —Bueno, m i herm hermano,
ano, yo cum
cumplí
plí con avis
avisar
arte.
te.
Que el Señor te bendiga a vos y a todo tu familia y
espero que te vaya bien
 —Igua
 —Ig ualmente,
lmente, Jorge, que el Señor los bendig
bendiga. a.
Porr favor desped
Po despedime
ime de los patojos y de Magda.
Magd a. Espe-
ro que
Al pronto volvamos
terminar a estar
de cenar, juntos.
fuimos a arreglar el poco
equipaje que llevaríamos. Magda se recuerda del sal-
mo 27:3 “Aunque un ejército acampe contra mí, no temerá
mi corazón; aunque contra mí se levante guerra, yo estaré
confiado”.
 —Sin embar
embargogo –le dije
dije–– estoy conf
confia
iando
ndo en el
Señor, pero creo que ya no es prudente provocar aún
más a estos, que ya están lo suficientemente nervio-
sos.  Y de un
unaa vez
vez me vi vino
no a la memoria lo queque dice la
Palabra: “No se cae la l a hoja de un árbol fuera de la voluntad
de Dios”. Y nuevamente con Magda y mis hijos, di-
mos gracias al Señor que nos sacaba con vida de esta
conspiración.
Orando estábamos cuando recordaron un sueño
que dos
dos semana atrás
at rás nos conta
contara
ra el herm
hermano
ano Juanito,
con el que muchas veces yo me juntaba a orar, quien
al final del servicio dominical en la iglesia el Shadai,
se acercó y me dijo:
 —Hermano
 —Herm ano Jorge, tuve un unaa vi
visión
sión en un mo-
mento en que estaba cabeceando, hace como cinco
días,
 —Pues, cuéntemela, herma her mano
no
 —Vi
 — Vi una gran
g ran mano
m ano que pasaba sobre el el mapa de

60

Día “D”: Golpe de Estado

Guatemal a y lo tomaba a usted y a su fam


Guatemala famililia.
ia. Los vi, a
los siete,
siete, en la pal
palma
ma de esa mano, a la hermana
herman a Mag-
dita, a usted, a Arturito, Jorgito, el Pato (Juan Pablo),
Magdita y Amelie, y después vi cómo un hacha caía
sobre el mapa de Guatemala y al golpearlo lo hacía
añicos, volaban las astillas por todos lados.
 —Impresionante,
 —Impresiona nte, herm
hermano
ano –le respondí– Así es
la misericordia
m isericordia de Dios cuando decide protegernos.
protegernos.
Agradecí aquellas palabras, y como tantas otras
veces,
momento
mome registré
nto lo queviviendo
que estaba
que me habíacon
codicho.
n mi famEnilia,
f amil ese crucial
ia, aquello
vino a mi mente y ratifiqué mi convicción de qué
grande es Él, pues ciertamente todo, pero todo, Él lo
tiene bajo control.
control. Eso
E so quiere decir que lo que estába-
mos viviendo, ya Él nos lo había dicho. Le recordé a
mi fam
f amililia
ia que todo lo que
que sucedía
sucedía era obra del Señor,
Señor,
quien nos estaba protegiendo en ese momento.
Cuando estuvimos listos, hablé con el general
 yOrtega Menaldo,
de la Guardi
Gua con los oficiales
rdiaa Presidencial.
Presidencia l. Una vez dellesEstado
vez Mayor
agr adecimos
agradeci mos
su cariño y sobre todo su fidelidad, ellos se despidie-
ron de toda la familia con abrazos efusivos e incluso
conn lágrimas.
co lágr imas. Magda
Magd a les dijo:
dijo:
 —Hoy nos vamos tristes
tr istes,, pero el Señor
Señor permiti
perm itirá

que un día regresemos alegres.
Acto seguido salimos de la Casa Presidencial.
Nuestra caravana iba acompañada de carros de fami-
liares
lia res y amigos
amig os que quisieron llegar hasta
hast a el aerop
aeropuerto
uerto
militar La Aurora. Solo permitieron pasar a los carros
de la caravana presidencial
presidencial y los carros
car ros de mis hijos. Al
llegarr a la base, el general Pozuelos,
llega Pozuelos, comandante de la
Fuerza Aérea Guatemalteca, nos recibió y me dijo: d ijo:
 —¿Cómo está, señor ingeniero?
Antes de que yo contesta
contestara,
ra, un
u n mayor de la Fuerza

61

La guayaba tiene dueño

Aérea que estaba en segunda fila se adelantó y cua-


drándose,
drá ndose, dijo
dijo en voz muy
muy alta:
alta :
 —¡Pa
 — ¡Part
rtee sin novedad,
novedad , señor Presidente!
Presidente !
Entonces, el comandante reaccionó, diciendo:
 —Señor Presidente, aquí tenemos su avión l isto,
a sus órdenes.
 —Graci
 — Gracias,as, genera
general,l, pero me iré en el avión que
me envió el presidente de El Salvador. Allí estaban el
capitán y su copiloto salvadoreños. Los oficiales del
Estado Mayor Presidencial y la Guardia Presidencial,
con los oficiales de la base aérea presentes, formaron
una línea
l ínea frente a la escalinata
escali nata de entrada del DC–3 de
la Fuerza Aérea de El Salvador.
Nos despedimos de cada uno de los oficiales con
abrazos; recibimos palabras de aliento e innumerables
muestras de cariño.
En solo treinta y cinco minutos el avión aterrizó
en San Salvador. Al bajar de la aeronave tomé plena
conciencia de mi calidad
pública de Guatemala. Quede estaba
ex Presidente
allí para de la Re-
iniciar un
forzado exilio, pero siempre con esta convicción: no
hay despropósito en lo que Dios dispone y la bendi-
ción está en aceptarlo y bendecirlo por eso.
Hechos y cronologías tomadas del libro Dictating
Demócracy, Guatemala and the end of Violent Revolution.
De Rachel
Rachel M. McCleary
McClear y, University Press of Florida,
1999.

62

Día “D”: Golpe de Estado


Seis meses antes del golpe militar, escoltado a la izquierda por el ministro
minist ro de
la Defensa, José Domingo Samayoa;
Sam ayoa; atrás el jefe del Estado Mayor Presiden-
cial, general Francisco Ortega Menaldo y a la derecha, atrás, parcialmente
cubierto, el general Mario René Enríquez, subjefe del Estado Mayor del
Ejército, El general Jorge Perusina, jefe del Estado Mayor del Ejército, y el
general Pozuelos,
Pozuelos, Comandante
Comanda nte de la Fuerza Aérea.

63

La guayaba tiene dueño


Momento en que el general
Momento general García
G arcía Samayoa, ministro
min istro de la Defensa Nacio-
nal, me imponía la máxima
máx ima Condecoración
Condecoración al Mérito Militar, por las actitu-
des y acciones que yo había tenido como Comanda
Com andantente General del Ejército,
en beneficio del país y de la institución. Seis meses antes del golpe.

64

CAPÍTULO II
La democracia propone, algunos
disponen y otr
otros
os descomponen

Con el objeto de enmarcar los hechos y los ac-


tores que mencionamos en el capítulo anterior y que
mencionaremos mas adelante en el contexto del li-
bro, considero importante, referir algunos elementos
de mi contexto personal, que como todo en la vida,
constituyen realidades que influyen en el desenvolvi-
miento social,
toria, como pasómuchas
con el veces
golpe afectando
de 1993. la misma his-
Por diferentes circunstancias, la gran mayoría
de los actores participantes en la cúpula empresarial
de aquel momento, eran mis amigos. Unos, desde
la infancia, jugamos juntos o fuimos compañeros de
colegio; otros de las épocas de mi juventud, pues pa-
rrandeamos y formamos parte del mismo grupo de
amistades. Otros, por razones familiares, relaciones
comerciales o empresariales, incluso en actividades
gremiales que compartimos. Lo cierto es que ni yo
era desconocido
desconocido para ellos,
el los, ni ellos eran descon
desconocidos
ocidos
para mí; mejor dicho: el problema era que nos cono-
cíamos demasiado
dema siado bien.
bien.
Cuando el golpe de Estado de 1982, ese mis-
mo grupo me había propuesto como Ministro de

La guayaba tiene dueño

Relaciones Exteriores y durante las elecciones del


84, muchos de ellos me apoyaron en la candidatura
a la Presidencia, cuando fui lanzado por el Partido
Democrático de Cooperación Nacional y el Partido
Revolucionario; elección en la que quedé en tercer
lugar con el 14% de los votos.
Pero todo en la vida es coyuntural. Para 1990,
los amores o conveniencias del Grupo Pirámide se
alinearon hacia Jorge Carpio Nicolle y Álvaro Arzú
Irigoyen. Pensaron que si concentraban su apoyo en
estos dos candidatos y se lo daban por igual, lo más
probable sería que llegaran ambos a la segunda vuelta
electoral. Al final, tendrían un presidente puesto por
ellos. Rápidamente esta decisión del Grupo Pirámide
se divulgó dentro del sector privado y me imagino
que, unos de acuerdo y otros no, todos lo respalda-
ron.
Cada vez que nos nos acercábamos
acercábamos a pedir
pedi r ayuda para
par a
la campaña, se me argumentaba que no estaba con la
línea del sector y se me sugería que lo mejor sería que
me uniera a alguno de los dos candidatos, porque esa
era la realidad: que la suerte estaba echada.
Muchas
Muc has de las
la s pluma
plumass pagadas
pagada s por ellos o simple-
mente simpati
simpatizantes
zantes del gr grupo
upo,, claramente manifesta-
mani festa-
ban que yo no tenía ning n ingún
ún chance y que lo mejor que que
podría
podr ía hacer era ponerme
ponerme el pijam
pijamaa e irme
ir me a dormir
dormi r.
Como yo siempre
siempre he sido
sido necio y tenaz,
tenaz , al
a l darme
da rme
cuenta
hacerle de esa situación,
frente a la mayorentendí quelosyogastos
parte de tendría
de que
mi
campaña, para lo cual vendí un par de propiedades y
procedí
proc edí a prepararme
prepara rme para una campaña
ca mpaña de bajo costo.
costo.
De ell
ella,
a, mis
m is propios
propios asesores y amigos extranjeros
ext ranjeros me
decíann que era posible, siempre
decía siempre y cuando
cua ndo yo meme invo-
lucrara personalmente y lograse un contacto directo

66

La democracia propone
propone,, algunos disponen y otros descomponen

con los electores, como lo habían hecho Kennedy en


Estados Unidos y Carlos Andrés Pérez en Venezuela
en su primera campaña, con el lema “Ese hombre sí
camina”.
 Yoo sabía lo que est
 Y estaba
aba haciendo, no má
máss m íti
ítines
nes
con gente traída, o mejor dicho acarreada. Yo iba en
bus y caminando a cada comunidad, daba la mano,
abrazaba a la gente, dormía en la casa de mis dirigen-
tes y correligionarios. La propaganda que pegábamos
en la calle la imprimíamos en la sede del Partido, en
una máquina offset  que
  que habíamos comprado. La pin-
tura la fabricaba Gustavo Espina, quien diseñara una
fórmula barata, que ya habíamos probado en las elec-
ciones municipales y nos funcionó por el tiempo que
la necesitamos.
programaa Gente para Gobernar , implemen-
Con el program
tado durante los últimos cuatro años, pusimos a toda
la dirigen
dir igencia
cia a motivar
motivar y organizar
organi zar la campaña, la mo-
vililización
vi zación y control
control de las la s elecciones
elecciones en el
el Día D.
En lo que a medios se refería, tuvimos que hacer
decisiones
decision es dif
di f íciles, pues este sí era
era un renglón costoso
 y en el que nuestros adversa adversarr ios est
estaban
aban muy fuer-
tes, ya que todas las campañas, principalmente las de
Carpio
Car pio Nico
Nicolle,
lle, Arzú
Ar zú Irigoy
Ir igoyenen y Alfonso
Al fonso Cabrera
Cabrera Hi-
dalgo eran fundamentalmente mediáticas e intensas,
hasta abusivamente intensas.
Previendo esto, yo sabía que la intensidad no era
posible por parte
compensarlo nuestra.y rigor
con calidad Entonces, teníamos
científico en el que
uso
de los medios. Decidimos no ir a prensa escrita, pues
ese sector lo tenían prácticamente tomado nuestros
adversarios, sobre todo con la participación de Jorge
Carpio
Car pio,, dueño
dueño del segundo diario
dia rio del país.
Seleccionamos cuidadosamente los programas

67

La guayaba tiene dueño

en que debíamos estar y la intensidad mínima que se


requería para hacernos notar. Sin embargo, aun así,
parecía como si nosotros no existiéramos, ante
a nte la ava-
lancha publicitaria de los contrincantes.
Nos quedaba la esperanza de la calidad de los
anuncios
anunc ios y en
en esto nos estábamos
estába mos concentra
concentrando.
ndo. Cabe
decir que, desde hacía algún tiempo, yo había com-
prado la mayor parte de las
l as acciones de un laboratorio
de producción de televisión, TVN Televisión. Tam-
bién había instalado un laboratorio de producción de
audio, denomi
denominado
nado Dabar Estudio.
Est udio. Así que con el en-
tusiasmo de los socios, fundamentalmente el de Jorge
Quiñónez, hombre de gran experiencia en produc-
ción y con la asesoría y gran colaboración de Marito
Rivera, de Hondura
Hondurass –alia
–a liass “Chanito”–,
“Chanito”–, mi hijo
h ijo Jorge
Jorge
que en ese momento solo tenía 19 años, se encargó
de la producción de los mensajes. Así logramos salir
con anuncios como el de “LOS MISMOS NO”, al
ca nciónn María Cristina. Hasta la
ritmo de la canció l a fecha,
fecha, esos
mensajes son recordados y figuran como ejemplos en
la historia de las
la s campañas políticas de Guatemal
Guatemala. a.
Los amigos del Grupo Pirámide no sabían todo
eso, ya que su vista estaba en los medios y en las en-
cuestas que ellos mandaban a diseñar y desarrollar. Su
tranquilidad era absoluta y estaba puesta en las opcio-
nes Carpio–Arzú, que según ellos era tiro seguro.
Nosotros empezamos tarde la campaña, porque
no 1teníamos
tenía
990,mos
de 1990, en lacómo
en cóm o hacerlo
semif
semifina fantes.
inall delAsícampeona
inall y fina campqueeonato
el 7 to
de mun-
junio
diall de fútbol, y cuando el país entero estaba pegado
dia pegado al
al
televisor,
tele visor, lanzamos a nuncio “LOS MISMOS NO”.
lan zamos el anuncio
 Y pegó con tubo, como decimos deci mos en buen chapín.
El gobierno brincó y amenazó con demandarme.demandar me.
 Yoo les dije: “Adelant
 Y Adelante,e, que no hayh ay tra
t ranca”
nca”,, esperando
esper ando

68

La democracia propone
propone,, algunos disponen y otros descomponen

con ilusión que


que lo hiciera. Los piramid
pira midales
ales empezaron
a intensificar su campaña para minimizar mi ascenso
 y,, por supuesto, a bajar
 y bajarme
me todo lo que podí
podían
an en la
lass
encuestass que ello
encuesta elloss preparaban
preparaba n a su sabor y convenien-
convenien-
cia.
Gracias a Dios, en ese momento ya había “pa-
teado”, o mejor dicho recorrido, ampliamente el te-
rritorio del país y mi campaña caminaba con solidez.
Esto vino
vi no a forta
“Conversemos”fortalece
 al lecerse
querse
yocon el resultado
el
había del invitación
asistido por programa
progr ama
del entonces Presidente Vinicio Cerezo Arévalo, para
hablar sobre la realidad
real idad del país. Ni Carpio
Car pio Nico
Nicolle,
lle, ni
Efraín Ríos Montt, ni Álvaro Arzú Irigoyen habían
aceptado tal invitación.
La campaña en mi contra, con la que el Grupo
Pirámide sistemáticamente me bloqueaba, pretendía
romper la psicología de triunfo que tanto nos costaba
a nosotros construir; al extremo que la gente decía:
“Serra
“Ser rano
no es el mejor, pero no gana”
ga na”..
Las encuestas que ellos publicaban en medio de
grandes eventos, eran para nosotros noches de fune-
ral. Esto, indiscutiblemente, agrió las relaciones con
ellos. Me entero entonc
entonces
es que una semana
sem ana antes
a ntes de las
la s
elecciones, la firma Aragón y Asociados presentó los
resultados de la última encuesta y les hace ver que yo
estaba ya en un segundo lugar y que, además, iba su-
biendo consistentemente. Esto fue como un balde de
agua fría, y en
me pusiera entonces obligaron
tercer lugar al encuestador
y de esa a que
manera se dieron
a conocer los resultados. Este fue el último intento
por bloquearme y de paso,
pa so, proteger su inversión. Pero
Pero
esto era como querer tapar
tapa r el sol con un dedo, porque
la suerte estaba echada y el domin
domingo,go, día de la primera
vuelta electoral, se sabría el resultado final.

69

La guayaba tiene dueño

El 11 de noviembre de 1990, la noche de funeral


fue para ellos. No lo podía
podíann creer.
creer. Al día
d ía siguien
sigu iente,
te, la
prensa decía que se había producido un “Serranazo”.
Todos sabían que en la segund
segundaa vuelta electoral, Car-
pio Nicolle no tenía ya nada que hacer, y que yo era
el futuro Presidente de Guatemal
Guatemala. a.
Esa noche fue intensa, para mí, más bien atrope-
lllladora.
adora. Me
Me fui a acostar en la madrugad
madr ugadaa del día lunes,
sin entender
cuando ni creerlogré
finalmente lo que pasaba. Alencuentro
levantarme, día siguiente,
que
mi casa estaba totalmente invadida:
invadida: la sala fami
fa miliar,
liar, los
cuartos
cuar tos de mis hijos,
h ijos, los
los pasillos,
pasil los, el recibidor
recibidor de entra-
da, las
l as salas
sa las del primer
pr imer piso, el
el comedor
comedor,, desayunador
desayun ador,,
 jard ines,, biblioteca,
 jardines biblioteca , oficin
of icinas,
as, etc. En todos
to dos los lugares
lug ares
veía gente, mucha que tenía años de no ver y mucha
que yo sabía que estaba con otros candidatos. Pero yo
pensaba lo que siempre me decían los asesores: “En
política se barre para adentro”.
Tengo que reconocer que los señores piramidales y
sus adláteres asimilaron la situación mucho antes que
 yo.. Así,
 yo A sí, cua
c uando
ndo se me ibaniba n acercando,
acerca ndo, el discu
d iscurso
rso era
muy, pero muy interesante, no sé si sería consigna o
bienn era producto de una habilidad
bie habi lidad col
colectiva,
ectiva, pero to-
dos me decían: “Jorge, estamos muy contentos, no
te ayudamos antes, porque no creíamos que tuvieras
oportunidad, pero siempre supimos que eras el mejor,
pero ahora aquí estamos y vamos con todo”.
Algunos, como los Gutiérrez, sí me dijeron que
aunque
aunq ue ellos sabían
sabían el resultado fina
f inal,l, me querían
querían decir
que siempre
siempre le darían
dar ían a Car
Carpio
pio Nicolle
Nicolle lo que le habían
ofrecido. A todos se los agradecía, pero en broma les
decía “están perdonados y gracias por pagar la peni-
tencia” haciéndoles saber que yo llegué hasta ahí sin
compromisos y que así entraría al Palacio Nacional.

70

La democracia propone
propone,, algunos disponen y otros descomponen

A partir de ese momento empecé a preparar la


segunda vuelta electoral. Básicamente como un for-
mulismo,
mul ismo, pues las coordinadoras serranist
serra nistas,
as, surgiero
surg ieronn
en todo el país como salen los hongos en el campo.
cam po. En
muchos municipios hasta las integraban los “ucenis-
tas” despechados o insatisfechos.
in satisfechos.
Mientras tanto, comencé a formular esquemas
de gobierno, lamentablemente sin poder hacer defi-
niciones finales,
inseguridad de lapues quiera
segunda que no,
vuelta, puesaún
como persistía
es bienla
sabido, “del plato
plat o a la
l a boca se cae
c ae la sopa
sopa””.
A medida que iba avanzando en la definición de
gabinete y en la concreción de las políticas de go-
bierno, me fui dando cuenta de que la agenda de los
piramidales
piram idales no estaba tan alineada
al ineada con la recuperaci
recuperación ón
del país de la crisis en que estaba. Antes bien, estaba
orientada en términos de las privatizaciones, funda-
mentalmente en la de la energía y las telecomunica-
ciones.
Amigos políticos y empresarios locales y del ex-
terior me visitaban para hablar del tema. Todos me
hacían ver que era la agenda del mundo y que era la
oportunidad para que Guatemala también lo hiciera
 y así poder tener recur
recursos
sos par
paraa la inversión socia
social.l. A
todos les agradecía
ag radecía sus consejos, pero no les daba fren-
te, pues yo tenía mis propios conceptos. Conocía los
fiascos de las privatizaciones de Argentina y la verdad
 yo no era tatann cánd
cándido
ido como parparaa tr
trag
agar
arme
me la arg
argu-u-
mentación que se me daba.
Los planteamien
planteam ientos
tos programáticos
 y la guerri
guer rill
llaa

En campaña yo había explicado hasta la saciedad

71

La guayaba tiene dueño

que un eje fundamental


funda mental de mi m i gobierno,
gobierno, sería “procu-
rar la paz”, pero que no concebía la paz solo como la
ausencia de un conflicto armado, sino como la crea-
ción de las condiciones que le permitieran al guate-
malteco desarrollarse y pros
prosperar
perar concon dignidad.
dig nidad.
Claramente explicaba que la guerrilla tenía clara
la lucha;
lucha; y bastaba
bast aba leer
leer sus análisis
anál isis y comunicados para
saber que ellos tenían tres frentes definidos:
El frente acompañada
las montaña, mi litar,
milita r, expresado
acompañad a por el en
etrabajo
n la lucha
lucideológico
ha armad
arógico
ideol madaa en
en
las poblaciones marginadas del país; lucha que acom-
pañaban con acciones
acciones terroristas
terrorist as para lograr
log rar presencia
en los sectores urbanos. Esas acciones se concretaban
volando puentes, torres de energía eléctrica, bombas
en áreas urbanas, etc.
El frente internacional. La guerrilla era mucho
más activa que los gobiernos,
gobiernos, tenía presen
presencia
cia en Euro-
pa, toda
en Estados
América
Unidos, Latina.
Can adá,
Canadá,
EllosMéxico
sí entendían
y prácticamente
la impor-
tancia de ese trabajo
tr abajo,, primero
pri mero porque
porque políticamente lo
usaban para desacreditar la democracia de fachada del
país, así como para lograr apoyos económicos funda-
mentales para la lucha en que estaban invo involucrados.
lucrados.
El frente interno, en el que debilitaban en todo
lo que fuera posible
posible el el desarrollo
desar rollo de las instit
i nstitucio
uciones
nes y
denunciaban todos los esquemas de privilegios, pro-
curando sistemáticamente aislar, local e internacio-
nalmente, al Ejército. Sabían que todo eso repercutía
en los recursos que ese ejército recibía, bajando así la
moral del milita
mi litarr combatiente,
combatiente, al que le tocaba llevar a
cabo su tarea en condiciones
condiciones difíciles.
dif íciles. En este frente el
bienestar y seguridad de la población era fundamen-
tal,l, pues yo sí estaba claro,
ta cla ro, que sin el apoyo
apoyo del pueblo
pueblo
mismo,
mi smo, no era posible
posible resolver
resolver el conflicto.
conf licto.

72

La democracia propone
propone,, algunos disponen y otros descomponen

Como se puede ver, estos son tres frentes defini-


dos, pero íntimamente relacionados. ¿Cómo podría-
mos nosotros ganar credibilidad internacional si no
podíamos
podía mos mejorar
mejorar la
l a situación de los derechos
derechos huma-
nos, si no podíamos enseñar los logros en la recauda-
ción fiscal y en la inversión social?
La guerrilla sí mantenía a la comunidad interna-
cional perfectamente informada. Cada vez que uno
llegaba a algunala visita
país europeo, a Washington
guerrilla o en cualquier
ya había pasado por allí.
Nuestros interlocutores estaban debidamente entera-
dos, no solo de la situación macro del país, sino que
tam biénn de casos muy particula
tambié part iculares,
res, con nombre
nombre y ape-
ape-
llido. Eran casos que, en muchas ocasiones, nosotros
no los habíamos ni siquiera oído mencionar, pero que
en el ambiente internacional ya existía un expediente
completo
comp leto que la guerril
guerr illa
la o sus orga
organinizaciones
zaciones para
parale-
le-
las habían construidolay guerrilla,
En conclusión, documentado.
tenía dos fuentes de
abastecimiento
abastecim iento de recursos, la nacional y la extranje
extra njera:
ra:
si queríamos tener éxito en las pláticas con ellos, no-
sotros teníamos
tenía mos que luchar
luchar también en los tres frentes.
En el militar, haciendo nuestro trabajo, para aislarlos
 y hacerles
h acerles dif
d ifíci
ícill sus
su s operaciones;
operac iones; en el inter
internaciona
nacional,l,
teniendo presencia en todo foro internacional en que
nos fuera posible,
posible, visitando
visita ndo todos los países,
países, explican-
ex plican-
do nuestra intenciones, pero sobre todo presentando
hechos
hec hos concretos,
concretos, que indicaran
indicar an que un
u n cambio
cam bio se es-
taba dando en el ejercicio de la justicia, en el respeto
a los derechos humanos y, en general, en la construc-
ción de una democracia de amplia participación y no
una democracia formalmente electorera como la que
existía.
En el frente interno, la seguridad ciudadana, el

73

La guayaba tiene dueño

empobrecimiento real de la población, expresada en


la absurda inflación a la que el gobierno de Cerezo
Arévalo había llevado al país, pero que hacía inmensa-
in mensa-
mente felices a algunos empresarios cuyas eficiencias
estaban basadas en la pura especulación, sin importar
cuán ma
mall la estuviera pasando
pa sando el pueblo.
pueblo. A ese pueblo
pueblo
al que ya nada le alcanzaba, y en realidad ya no tenía
aguje
ag ujeros
ros en el cinturón
cintu rón para apretárselo.
apretárselo. Mas
Ma s yo sabía
que esto tenía que ar
arregla
reglarlo,
rlo, y rápi
rápido.
do.
Por otro lado, en el ejército se percibían dos mo-
rales: la de los mandos altos a los que en cierta forma
el conf
conf licto los afectaba poco, pues
pues ellos mismos
mi smos ya no
combatían y, además, administraban los recursos que
se destinaban para el conflicto; y, por el otro lado, la
moral de la gran
gra n mayorí
mayoríaa de los
los oficiales,
of iciales, personal téc-
nico y de tropa, quienes tenían que corrercorrer los riesgos,
r iesgos,
enfrentar el malestar y abandono de sus propias fami-
lia
liass y sufrir,
sufrmía.
la economí
econo ir,a.igual
igua l que toda la población,
población, el desastre de

Los entendimien
entendim ientos
tos de las cúpulas

Todo el gobierno y mism is colaboradores insistíamos


insist íamos
en la profu
profundidad
ndidad de la lucha y la realidad de los fren-
tes en los que la misma debía darse, es decir, la lucha
por una paz firf irme
me y duradera, que
que yo había
había planteado
a la guerril
guerr illa.
la. Para eso yo había
había consultado a todos los
sectores de la sociedad: iglesias, sector privado, sindi-
catos, cooperativistas, universidades, colegios profe-
sionales,
siona les, etc. Yo
Yo proponía clara
cla ramente
mente los objetivos
objetivos y la
estrategia en la que ellos debían centrarse; sin embar-
go, las elites empresariales y militares, que aunque se
hallaban conformes con el planteamiento teórico, en
el fondo pensaban que eso estaba bien como fachada

74

La democracia propone
propone,, algunos disponen y otros descomponen

 y para deci
decirr que lo íba
íbamos
mos a hacer. Sin embarg embargo,
o,
cuando yo iba a implementa
implementarr mi pensam
pensamien iento
to con ac-
ciones, ellos decían, como claramente lo expresó un
militar en los días de la crisis, “en eso no habíamos
quedado”.
Al sector privado le era
era dif
di f ícil oponerse
oponerse a un plan
de esa naturaleza,
natu raleza, pero la agenda
ag enda social o socioeconó-
socioeconó-
mica siempre les sonaba a demagog
demagogia. ia. Ellos
El los no tenían
la más míni
m ínima
ma idea de lolo difícil
dif ícil que era
era para el Estado
conseguir apoy
apoyoo internacional
inter nacional ya fuera de cooperación
cooperación
o de crédito, pues nuestra reputación era muy mala,
debido a los hechos que
debido que la lucha armad
ar madaa producía y la
activa acción
acción de la guerril
guerr illa.
la. Por
Por otro lado, faltaba co-
herencia cuando se comparaba la contribución fiscal
 y la acu
acumul
mulación
ación de capita
capitall gu
guatema
atemalteco
lteco en el ex
ex--
tranjero. Tampoco se daban cuenta, con una miopía
impresionante, que
que todo eso contribuía a cerrarnos
cerra rnos el
acceso a muchosmimercados.
Recuerdo visita a Indonesia, con motivo de
la Cumbre de los No Alineados. Me entrevisté con
el Presidente Suharto y con varios de sus ministros, y
se abrió ante mis ojos un mercado impresionante en
el que ya países como Chile estaban participando en
forma inteligente y muy conveniente.
Regresé entusi
entusiasmado.
asmado. Entonces
Entonces inicié las gestio-
gest io-
nes para abrir una embajada en un país con más de
ciento ochenta millones de habitantes y pedí que se
organizara un almuerzo en Santo Tomás con todos
los dirigentes del sector privado. Con entusiasmo les
relaté lo que viví en Indonesia y les presenté un es-
trategia para vincularnos seriamente a esos mercados.
La respuesta fue muy escéptica, pero pensé que ellos
tendríann que
tendría que interiori
interiorizar
zar el planteam
planteamien
iento,
to, in
informa
formarse
rse
un poco y que después volveríamos a hablar. Les pedí

75

La guayaba tiene dueño

a los ministros
min istros de Economí
Economíaa y de Relacion
Relaciones es Exterio-
Exter io-
res que se organizara una misión comercial para que
los empresar
empresariosios fueran y se dieran cuenta del potencial
potencial
al que yo me estaba refir
ref iriend
iendo.
o.
Cuál va siendo mi sorpresa, cuando los ministros
me dicen que la misión no era posible, pues no había
ambiente dentro
dentro del sector privado
pr ivado para llevarla
l levarla a cabo.
Lo más
má s triste
tr iste fue que me dijeron
dijeron que
que del almue
al muerzo
rzo en
Santo Tomás, solo salieron burlas, ridiculizaciones y
comentar
come ntarios
ios irónicos. Parecía que el sector privado es-
taba más
m ás interesado
i nteresado en la creación de condicio
condicionesnes más
favorables en el mercado interno y la
favorables l a privatización
privati zación de
las empresas de energía y telecomunicaciones. “Saltó
la liebre
l iebre””, dije para
par a mis
mi s adentros. Me equivoqué, debía
de haber llamada a empresarios grandes y medios en
lugar de haber perdido
perdido mi tiempo
t iempo con los
los piramida
piram idales
les
 y sus adlátere
ad láteres.
s.
en suPara sera,claros:
cúpula,
cúpul estaba la
linteresado,
a única
ún ica agenda een
era enn lalafiscal
que ,elpara
f iscal, sector
sector,
pa-,
gar lo menos
menos que fuera posible;
posible; en la
l a moneta
monetaria ria,, tener
siempre una divisa sub valuada y garantizar sus planes
de expansión nacionales de altísima rentabilidad; y en
la compra de las empresas del Estado. Cualquier otro
tipo de agenda era coyuntural y solo les interesaba si,
en alguna manera, se afectaban sus intereses.
Para la pequeña cúpula militar, la agenda era más
sencilla.
sencill
se a. Nopacíficamente
resistían podían decir que no querían
querían la
a comprometerse l a paz, pero
del todo.
Lo que en el fondo les preocupaba era que al termi-
nar el conflicto su poder real se viera deteriorado y
que si, por algún motivo, se planteaba la reducción
del ejército
ejército,, los recursos que ellos manejab
ma nejaban
an se verían
vería n
seriamente disminuidos. Esa cúpula no confiaba en
las múltiples declaraciones mías, en las que afirmaba

76

La democracia propone
propone,, algunos disponen y otros descomponen

verbalmente y por escrito que Guatemala necesitaba


un ejército capaz,
capaz , bien equipado y comprometido
comprometido con
la seguridad; que yo no iba a transar en reducciones
arbitrarias y que, en todo caso, el tamaño del ejérci-
to se definiría por las necesidades del país y por los
acuerdos de balance que se estaban conversando con
nuestros vecinos.
Tal como se desprende de las opiniones de los
críticos serios e informados, las motivaciones para el
golpe de Estado estaban claras: miedo de la cúpula
militar a una reducción del ejército y el terror de los
grupos piramidales de que el tiempo pasaba y que no
se veía
veía claro lo de las
la s privatizacion
privatiz aciones.
es.
Esta carta,
car ta, fechada el 3 de mayo
mayo de 1993
1993,, fir
f irmad
madaa
por Mario Granai, Presidente del CACIF, que según
se me in
informó
formó fue redactada con la ayuda de la G2, y
que trancribo y adjunto como anexo cuatro, explica
muchas
enviada cosas,
20 díassobre
antestodo si vemos
de que que la la
le produjera misma
crisisfue
de
mayo del 93, que terminaría con el golpe de Estado,
la carta
cart a dice así:
“Señor Presiden
P residente:
te:
El pasado jueves 29,
29, nos reunimos con la Comi-
sión Negociadora
Negoc iadora de la Paz,
Paz, del Gobiern
G obierno.o.
Consideramos importante expresarle
expre sarle nuestra pre-
ocupación por el para
de negociaciones rumboalcanzar
que pueda tomarcomo
la paz, el proceso
conse-
cuencia
cuenc ia de la actitud que
que ha asumido la dirigen
dirigencia
cia de
la URNG,
UR NG, de endurecer sus posiciones
posiciones y exigencias
como resultado de la debilidad militar, política y de
apoyo internacional a la que ha llegado.
La posición del CACIF le ha sido manifestada
en varias oportunidades
opor tunidades y en diversas formas a partir
77

La guayaba tiene dueño

del Acuerdo de Oslo. De la misma forma, la que


mantuvimos en nuestras conversaciones sostenidas
con la insurgencia en Ottawa, especialmente y con
mayor énfasis y amplitud, en la respuesta que le
dimos a su consulta sobre el documento “GU
“GUA ATE
TE--
MALA, UNA PAZ JUSTA Y DEMOCRÁ-
TICA: CONTENIDO DE LA NEGOCIA-
CIÓN” elaborado por la URNG y presentado a
su Gobierno.
En el pasado, reiteradamente le solicitamos que se
nos informara de las negociaciones y, como resultado
del informe recibido
rec ibido de los miembros de la Comisión,
el jueves pasado nos percatamos del avance que lleva lle va
el proceso y los riesgos que se corren.
Nuestra preocupación responde
re sponde a que, a partir del
 próximo cinco de mayo,
mayo, se iniciará una nueva
nue va etapa
de negociaciones, en la cual la insurgencia, además
de
tajaendurecer
en que sesuencuentra,
posición por la situación
diera pábulo a deque,
desven-
apa-
rentando buena voluntad, se suscribiera un acuerdo
que comprometa a la Comisión Negociadora, a su
Gobierno y con ello a la Nación.
 Atentamente le solicitamos que no se precipite la
 firma
 fir ma de ningún documento que no conduzca ex-
clusivamente a un compromiso firme y claro de un
cese al fuego, la desmovilización y desarme de la
URNG.
 Al agradecer al Señor Presidente su atencatención
ión a
nuestra preocupación, le solicitamos con carácter de
urgente, una audiencia para tratar este importante
tema. Asimismo, le ofrecemos nuestro concurso en
este difícil e importante
impor tante proceso, para
para que Guatema-
la alcance la paz que todos anhelamos.
Hacemos propicia la oportunidad para expresarle
78

La democracia propone
propone,, algunos disponen y otros descomponen

nuestros sentimientos de estima y consideración”


consideración”..
Firma Mario Granai,
Presidente del CACIF.
Cualquier persona entiende
entiende que esta carta
car ta contie-
ne profundas contradicciones, primero, fija criterios
ilusorios e irreales, pues, lo que en el fondo se plan-
tea, es la rendición de la guerrilla, lo cual a la luz de
los conceptos planteados anteriormente era imposible.
Cualquiera que conóce la experiencia de los Estados
Unidos en Vietnam, sabe que en el mundo de hoy,
no basta con ganar a tiros, pues la lucha, tal como lo
manifesté
man ifesté anteriormente, se da en varios var ios frentes.
Cuando me ofrecieron su concurso y mencionan
la reunión de Ottawa, pensé para mis m is adentros, eso es
 justo lo que no queremos, pues precisa precisamente
mente esa re-
unión
un ión fue la única
ún ica de las llevadas
l levadas a cabo concon la URNG,
UR NG,
en la que no se pudo hacer una declaración conjunta
 y cada
cad a grupo
g rupo la
l a hizo
h izo por separado, ciert
c iertamente
amente yo no
estaba en ese espíritu,
espír itu, yo si buscaba entendi
entendimientos
mientos y
no fachadas.
Entonces, resultaba
resu ltaba obvio, que los señores
señores del CA-
CIF, lo hacían para cerrar filas con la cúpula militar.
De esta manera ellos expresaban claridad el concepto
muy parparticu
ticular
lar de las cúpulas, y las
la s verdaderas
verdaderas motiva-
ciones de ambos grupos, el militar y el empresarial.
Sin embargo
claramente este hecho
su objetivo, hizo conjuntamente
y buscaran que identificaranel
abordaje del poder, sin asco y con toda la mala leche,
lo cual lograron con el apoyo de un buen grupo de
ingenuos, a quienes solo tomaron en cuenta, como ya
dijimos, para una
u na participación
par ticipación “patr
“patriótica
iótica”” ocasional.
Fueron los títeres de una sola función
fu nción..
De allí en adelante, todo es historia.

79

La guayaba tiene dueño


Mitin en la ciudad de Quetzaltenango, en la primera campaña a la presi-
dencia en 1985. Postul
Postulado
ado por el Partido Democrático
Democr ático de Cooperación
Cooperac ión y el
Partido Revolucionario.

80
 

La democracia propone
propone,, algunos disponen y otros descomponen
Saludando a la gente en campaña, acompañado por el candidato a Vicepre-
sidente,, licenciado Mario
sidente Mar io Fuentes Perucin
Perucini.i.

81
 

La guayaba tiene dueño


Segunda campaña, postulado por el partido Movimiento de Acción Soli-
daria
dar ia (MAS),
(MA S), la que se llevó a cabo caminando,
camin ando, estrechando manos, dando
abrazos y pronunciando breves
breves discursos
discur sos en tarimas
tarim as colocadas sobre los bu-
ses que iban
iban en las caravanas.
caravana s.

Mítines relámpagos de los que se realizaban en las plazas centrales de los


pueblos,
pueblos, sin acarrear
acar rear gente, solo
solo llamándola
ll amándola con los altoparlantes.
altoparla ntes.

82
 

CAPÍTULO III
El país está cada día peor 
El entorno mundial y las acciones de gobierno

Me tocó asumir la Presidencia cuando el mun-


do, estupefacto, presenciaba
presenciaba el inicio
in icio de la Guerra del
Golfo. Además, el ordenamiento mundial cambiaba
aceleradamente, a la par
tad, democracia y régimen que las aspiraciones
régi men de derech
derechoo irru de liber-
ir rumpían
mpían con
fuerza en sociedades sojuzgadas y, por añadidura, se
consolidaba en otras partes del planeta un proceso de
reivindicación del hombre, sus derechos y libertades,
como resultado del final de la Guerra Fría.
Guatemala no era la excepción en el concierto de
las naciones. Nuestra democracia también se consoli-
daba al traspasarse la Presidencia de la República de
un
ele Presidente
electos.
ctos. civildea un
Se trataba
t rataba uotro civil,
n hecho
hech trambos
o trascenden popularmente
ascendentatall en nues-
tra historia
h istoria política.
política.
Pero el proceso democratizador se veía opacado
por el hecho de que problemas estructurales y ances-
trales no resueltos se sumaban a un rampante déficit
f iscal, una inf
i nf lació
laciónn fuera de con
control,
trol, la constante
constante de-
valuación de nuestra moneda y la creciente pérdida

La guayaba tiene dueño

del poder adquisitivo de nuestra


nuestra moneda –el – el quetzal–
en medio de al
alzas
zas de las
la s tasas
tasa s de interés y de la erosión
erosión
de las econ
economías
omías famil
fam iliares.
iares.
Estos problemas, aderezados por un conflicto in-
terno armado y vigente durante más de treinta años,
desafiaban al segundo gobierno de nuestra reciente
restauración democrática.
ciero,Ensocial,
mediopolítico
de eseycomplicado panorama
administrativo, tuvimosfinan-
que
priorizar nuestras políticas y estrategias, dado que so-
bre nuestra realidad se sumaba el hecho de que en
la economía mundial se presentaban complejas inte-
rrogantes. Nadie podía decir cuál sería el futuro del
petróleo y de la economía mundial frente al conflicto
del Golfo.
El concepto
concepto básico que que animó
an imó el desarrollo
desar rollo de mi
mi
plan de acción gubernamental, está claramente defi-
nido en la presentación
presentación de mi primer informe
in forme al Con-
greso
gre so de la República, en enero del año 1992, 1992, cuando
cu ando
manifesté:
“Ratifico mi voluntad de lograr la paz fir-
me y duradera y no escatimaremos esfuerzos
hastaa consegu
hast conseguirla.
irla. La paz es un imperativo para
la justicia,
justicia , el respeto a los derechos
derechos humanos y
el desarrollo del país.
 Los retos y la tarea son muy grandes. Las
metas serán posibles en las aspiraciones del
pueblo, solo mediante el esfuerzo consciente
de cada uno de nosotros con una actitud res-
ponsable.
El proceso de paz total y reconciliación ha
constituido la base de mayor trascendencia
del Organismo Ejecutivo, para terminar con
la era de la destrucción de vidas humanas, de

84

El país está cada día peor 

recursos naturales y de las instalaciones de in-


versión pública y privada.
 Tenemos consciencia de que este conflic-
to, por más de treinta años, ha desangrado a
nuestra sociedad, especialmente
especial mente a los
los habitan-
tes indígenas en el área rural.
rura l.
Nuestros esfuerzos en ese proceso no se
conforman con alcanzar
la lucha armada, porque lalaPresidencia
terminaciónde de
la
República ha venido insistiendo firmemente
en que la paz descansa en cuatro pilares fun-
damentales:
a) Term
Terminación
inación de la lucha armada.
arm ada.
b) El impulso paralelo que garantice el res-
peto a los derechos humanos.
c) La urgencia de lograr la mayor equidad
econ
económica
d)ómica y social.
socia
La profundiz
profu l.ación del
ndización del proceso democrá-
democrá-
tico y sus instituciones.
in stituciones.
El proceso de paz también busca garantizar
un ambiente de armonía con los vecinos de
nuestras fronteras y con la comunidad inter-
nacional.
Por ello ratifico que la insurgencia no es el
único interlocutor del Gobierno.”

Durante toda mi campaña política hablé claro y,


como Presidente, mi discurso fue consistente: la paz
como yo la entendía y la predicaba era un prerrequi-
sito para la libertad
l ibertad y el progreso de la nación.
nac ión. Consi-
Consi-
dero que el pueblo
pueblo así lo entendió
entend ió y por eso me eligió,
elig ió,
como Presidente
Presidente Constitucional de la Rep República,
ública, el 6
de enero de 1990,
1990, con el 68%
68 % de los votos. Mi pecado
pec ado
fue el haberlo logrado sinsi n el consentimiento
consentim iento,, apoyo
apoyo ni

85

La guayaba tiene dueño

aprobación de los dueños de la guayaba y de los grandes


señores de la “pirámide”.
En esta perspectiva, nuestro trabajo como Go-
bierno en general y en lo personal como Presidente,
lo encaminamos en el sentido claramente expresado,
el que se podría concretar en actividades específicas
que llevamos a cabo en la ejecución
ejecución gubernamental.
guberna mental.
una Para mí, la agenda
negociación con la de la paz no
guerrilla. Estaeraerasimplemente
uno de los
interlocutores como lo señalé clara e insistentemen-
te; pero había otros interlocutores a los que con todo
esfuerzo e inversión de tiempo los oíamos y dialogá-
bamos con ellos en el marco
m arco del Foro del PactoPacto Social
Socia l
 y de igu
i guaa l forma
form a como lo hacía
h acíamos
mos con los líderes
l íderes de
los partidos políticos.
La comun
comunidad idad internacional
internaciona l también era parte de
nuestra agenda,
diplomáticas comotanto
en en
las nuestras
relacionesrelaciones
comerciales político
y fi-
nancieras.
Para efectos prácticos voy a presentar, por separa-
do, cada uno de los aspectos fundamentales
funda mentales de nuestro
trabajo, haciendo
haciendo la salve
sa lvedad
dad de que todos ellos tenían
tení an
una interrelació
inter relaciónn orientada en forma
forma integra
i ntegral.l. Así, por
ejemplo, las medidas económicas siempre se decidían
tomando en cuenta todas las aristas; igualmente su-
cedía con las negociaciones con la guerrilla, o con
los interlocutores financieros o comerciales interna-
cionales.
Confieso que este estilo de gobierno al que el
sector privado no estaba acostumbrado, es lo que les
llevó a desesperarse, pues en el pasado, así como suce-
dió posteriormente, para ellos la agenda de la Nación
es la de ellos o la que los pueda afectar, las demás se
ponen de acuerdo en ignorarlas y dejan entonces que

86

El país está cada día peor 

el Presidente “se mate con su propia mano”


m ano”..
Así que su responsabilidad como dueños no llega
hasta aquellos aspectos en los que sus intereses no es-
tán directamente comprometidos. El resto del país es
para ellos como lo era
era para los tradicionales
trad icionales finquer
f inqueros
os
del país, la “ranchería”, que así se le llama al lugar en
el que viven los mozos que trabajan en el campo.
Desde esa perspectiva, result
resultaa irónico comprob
comprobar
ar
que, para tener el beneplácito de los dueños y no ser bo-
tado, enviado a Panamá y perseguido, hay que tener
muy claras las dos líneas políticas en que uno, como
Presidente, debe moverse:
La patronal , a la que debe ser obediente y seguir
los lineamientos de los dueños; y
La de la ranchería, en la que se puede tener auto-
nomía, siempre y cuando las acciones que se imple-
mente
menten
dueños.n no afecten
a fecten los derechos
derechos y los privi legios de los
pr ivilegios
A la luz de estos conceptos, permítaseme hacer
una presen
presentación
tación de lo que fueron
fueron las
la s políticas y accio-
nes de mi gobierno, pues en cada caso entenderemos
cómo los dueños de la guayaba expresaron sus intereses
 y cómo se comportaron.
comport aron.
Espero que las eviden
ev idencias
cias que presentaré
presentaré a conconti-
ti-
nuación sirvan
sirva n para con
conocer
ocer la verdad
verdad de lo que real-
mente sucedió en esta parte de la historia de Guate-
mala, no para inducir acusaciones, sino con el fin de
que enmendemos
enmendemos nuestras lílíneasneas de conducta, porque
estoy seguro de que si seguimos
segu imos como hasta hoy hoy,, pasa-
rán otros quinientos
qui nientos años y estaremos igualigua l o peor.
peor.

87

CAPÍTULO IV
Trabajando para el desarrollo de
Guatemala y la democracia
Aspectos económicos

La economía internacional estaba en un franco


proceso de desaceleración, los países industrializados
mostraban tasas sumamente bajas de crecimiento, al
igua
ig uall que la producción
producción mundial
mundi al que, en el 91 91 presen-
tó la tasa
ta sa más
má s baja desde 1982.
1982. Los países latinoameri-
lat inoameri-
canos presentaron
presentaron unaun a tasa
tas a de crecimien
crecim iento to general del
2.4%. Sin embargo, con las medidas económicas que
tomamos, tuvimos durante mí período de gobierno
una tasa
t asa de crecim
crecimiento
iento del
del 4.13%
4.13% promedio,
promedio, casi dos
puntos por arriba
arr iba del promedio
promedio de la región.
reg ión.
En este contexto mundial,
mundia l, el reto que se nos pre- pre-
sentaba era cómo
cómo crecer,
crecer, ante lal a realidad
real idad de la desace-
leraciónn mundial
leració mundia l y las amenaza
a menazass que nos nos presentaba
presentaba la
guerraa del Golfo.
guerr Golfo.
Recaudación y finanzas públicas

Nosotros optamos por incentivar la producción,


todo lo que fuera posible en ese contexto, generando
confianza en los inversionistas. Pusimos en orden las

Trabajando para el desarrollo


desar rollo de Guatemala y la democracia

finanzas públicas, racionalizando el sistema tributa-


rio, eliminado una gran cantidad de impuestos, tasas
 y arbitrios
arbitr ios y fijando
f ijando tari
ta rifa
fass impositiva
impos itivass racionales,
raciona les, que
incentivaran másmá s el pago de los impuestos que que la eva-
sión de los mismos.
Dejamos solo solo cuatro
cuat ro impuestos:
Impuesto al Valor Agregado –IVA–.
Impuesto sobre la renta –ISR– con una tarifa
máxima
máxi ma de
de 25%
25%..
Impuesto territorial.
Los impuestos de importación,
import ación, sujetos
sujetos únicamen-
te a cuatro tar
tarifas,
ifas, 5, 10,
10, 15
15 y 20%,
20% , eliminado
elimi nado la tarifa
tarif a
cero y otra cantidad de tarifas que llegaban hasta el
160%, que para lo único que servían era para fomen-
tar el contrabando y la corrupció
corr upción.
n.
Aunque parecía que haciendo estos cambios po-
dríamos
centivar recaudar menos impuestos,
el pago, racionalizando las sabíamos que in-
tasas, tendríamos
mejores resultados. La realidad en la recaudación fis-
cal fue
f ue que
que de 2.344 mil
m illon
lones
es de quetza
quetzales
les recaudados
recaudados
en 1990, lo subimos a 4,452 millones de quetzales en
1992. Es decir que se había prácticamente duplicado
la recaudación con nuestro plan. (Fuente, Liquidación
de Presupuestos Ministerio de Finanzas)

Subsidios y presupuesto
Las otras medidas fiscales importantes que to-
mamos estuvieron encaminadas a reducir los déficits
fiscales, que en un momento habían llegado hasta un
65% del presupuesto de la nación. Esto, causado fun-
damentalmente
damenta lmente por los
los subsidios que
que el Estado daba al
transporte urbano y a la energía eléctrica.
 Yoo consideraba que dichos subsidios eran
 Y

89

La guayaba tiene dueño

totalmente injustos, pues el Estado, con su recauda-


ción fiscal estaba subsidiando a los sectores de pobla-
ción de mejores condiciones económicas y en los que
estaban concentrados
concentrados los servicios.
ser vicios.
• Transpor
Transporte
te urbano
Por eso permitimos el incremento del pasaje al
transporte público, para eliminar los subsidios, pero
para no perjudicar el ingreso salarial del ciudadano,
 ya ma
maltrecho,
ltrecho, decreta
decretamos
mos un aumento sa
sala
larr ia
iall que cu-
briera ese incremento.
Esta medida no fue nada fácil. Sin embargo, nos
mantuvimos firmes y en el marco del foro del Pacto
Social, los ministros mantuvieron horas y horas de
diálogo y negociaciones, tanto con sindicatos y orga-
nizaciones populares, como con miembros del sector
empresarial. Al final logramos ponernos de acuerdo
 ylosf ijar lass cant
la
salarios,cantidade
idades
tanto s que
del se deberí
sector deberían
públicoan como
incrementar
increment ar a
del sec-
tor privado, para compensar el incremento que se les
causaría a las familias con el aumento del precio del
transporte.
Con éxito logramos trasladar un costo social que
figuraba como carga del Estado, al beneficiario, que a
la final
f inal era el mismo empresario
empresario..
• Energía electr
electrica
ica

mos Cosa sim ilar


simil
conciencia, ar que
hici mos
hicimos con la energía,
con
el campesino porqucandela
porque
que usaba e crea-
 y baterí
bat erías
as desechables era el que más m ás caro pag
pagaba
aba por
cada kilovatio–hora y que no era justo que, además,
con sus impuestos subsidiara la energía que consumía
la industria
indust ria,, el comercio
comercio y las residencias de poblacio-
nes con mayores ingresos. Este aspecto fue un poco
más traumático
t raumático,, pero nosnos mantuvimos
mantuvi mos firmes
f irmes y lo lo-
gramos.
90

Trabajando para el desarrollo


desar rollo de Guatemala y la democracia

• Logros
El resultado fue que por primera vez en muchí-
simos años, los presupuestos de 1991 y 1992 cerra-
ron prácticamente nivelados;
nivelados; logro
log ro que por
por la falta
fa lta de
responsabilidad de las administraciones siguientes, se
hiciera imposible mantener, llegándose a la situación
actual en la que el déficit fiscal es extremadamente
grande
gra nde y completamente
completamente fuera de con control.
trol.
Solo basta con ver la información del Banco de
Guatemalaa sobre la ejecución
Guatemal ejecución presupu
presupuestar
estaria
ia del Esta-
do. Los últimos presupuestos del gobierno del presi-
dente Cerezo Arévalo, con un déficit de más de 700
millones de quetzales, y los dos presupuestos de mi
gobierno. Uno de estos, con superávit de 5.8 mil mi l lones
 y el otro con défdéficit
icit de 10.8 m ilillones
lones de quetza
quetzales.
les. Para
efectos reales, ambos fueron nivelados y después,después, otra
otr a
vez la fiesta. Durante el periodo de Ramiro
el déficit fue de 944.5 millones y 1.053 millones, por de León,
eso es que con los datos en la mano, puedo afirmar,
que ni antes ni después los dueños de la guayaba, han
permitido una disciplina fiscal: no les conviene y no
les gusta. (Fuente Banco de Guatemala)
Lo importante es hacer notar que esta disciplina
f iscal orientada
or ientada a que pague el que usa el servicio evitó
que los sectores más desfavorecidos
desf avorecidos de la población ab-
sorbi
sorbieran
debidoeran
a laundisciplina
g olpe al poder
golpe adquisitivo
presupuestaria delde sus salar
sal arios,
Estado, ios,
prác-
tica que había sido y sigue siendo muy común,
común, cuando
c uando
se le carga ala l Estado los costos de los subsidios.
Inf lación y recuperació
recuperación
n económica
económica

Nuestros presupuestos se nivelaron cerrando


prácticamente sin déficit con el crecimiento de la
91

La guayaba tiene dueño

economía 2% por encima del promedio de América


Latina, la inflación reducida de 60% al 9%, las re-
servas creciendo, de cero hasta casi 800 millones de
dólares, entonces, se produjo
produjo la estabil
estabilidad
idad económica
que estábamos buscando,. Solo estos datos son sufi-
cientemente elocuen
cientemente elocuentes,
tes, para
par a demostrar
demostra r la efectividad
de nuestra política eco económica.
nómica.
Los resultados
resu ltados no se hicieron esperar, la recauda-
ción de impuestos se duplico en dos años, los salarios
ganaron en valor adquisitivo en los dos años por mas
del 16%. (Datos de Instituto Nacional de Estadísticas
 y Banco de Guatema
Guat emala) la)
Nuestras políticas económicas estuvieron orien-
tadas
tad as a traslada
tra sladarr el costo
costo social a quien lo debe y puede
puede
pagar y no al estado o a los trabajadores, por eso es
que después del Golpe, de inmediato regresaron a las
políticas que favorecen
favorecen a los grandes
gra ndes y especuladores.
especul adores.
Reservas y balanza de pagos

El tipo de cambio en el período tuvo una va-


riación inferior al 3%, lo que para el país era muy
pequeña.
Aunque la información del Banco de Guatemala
plantea que había 24.
24.7 millones
mi llones de dólares en reservas,
reserva s,
cuando recibimos
mos ni para cubrir el gobierno
la factura en realidad, no tenía-
petrolera.
Las ventanillas de las instituciones internaciona-
les de Crédito también estaban cerradas, por falta de
pago.
Decidimos implem
i mplementar
entar el sistema de CENIV
CENI VA-
CUS, que no era otra cosa que un mecanismo suma-
mente atractivo en rentabilidad, para estimular que el
capital guatemalteco en el exterior se repatriara. Así,
92

Trabajando para el desarrollo


desar rollo de Guatemala y la democracia

en 1991 se logró un incremento en las reservas mo-


netarias internacionales absolutas del orden de US$
556.2 millones. Se trataba de un resultado nunca an-
tes observado en la historia económica nacional. Mas
sorprendente fue que cuando me dieron el Golpe de
Estado en el 93,
93, ya teníamos
tenía mos en reser
reser vas $736.6
$736.6 millo
mi llo--
nes. (Fuente: Banco de Guatemala).
Guatemal a).
La estabilización
estabil ización económica
económica

De todas formas, en este punto nos quedaba un


pedacito por resolver: cómo pagar los atrasos que te-
nía el país heredados del gobierno
gobierno de Cerezo Arévalo
A révalo
con las instituciones
in stituciones internacionales de crédito.
Después
Despu és de darle muchas vueltas al asunto,
a sunto, llega-
mos a la conclusión de que lo único que podríamos
hacer era poner un impuesto o generar un bono obli-
gatorio de estabilización económica. Pero ¿quién le
pondría el cascabel al gato?
En ese momento ya teníamos institucionalizado
el Foro del Pacto Social, con participación de sindi-
catos, empresarios y gobierno. Decidimos hacer una
presentación
presentación de la problemática,
problemática, de la cua
cuall se encargó
Richard Aitkenhead,
Aitkenhead, Ministro
Mini stro de Finanzas,
Finanza s, Juan Luis
Mirón, Ministro de Economía, Mario Solórzano,
Ministro
SEGEPLAN. de Trabajo, y Fernando Fuentes Mohr, de la
La presentación era crucial, pues ciertamente el
Estado
Est ado necesitaba urgentemente,
urg entemente, por un lado, resolver
todo el desequilibrio heredado; y por el otro, tener
acceso a créditos para los proyectos destinado a los
sectores sociales.
Con el hecho
hecho de ponernos
ponernos al día
d ía lograrí
logra ríamos
amos que
se desembolsaran sumas que nos tenían retenidas, las
93

La guayaba tiene dueño

que nos permitirían terminar una serie de instalacio-


nes de salud, como hospitales; reparar las carreteras
que estaban en un estado calamitoso;
cala mitoso; reparar
repara r los puen-
puen-
tes de la carretera del sur del país que fueron volados
por la guerrilla, e inversiones muy necesarias en agua
potable, educación, etc.
FondoPero sobre todo,
Monetario yo no quería
Internacional, negociar
en vista de lacon el
reali-
dad fiscal que nuestros números presentaban, porque
sabía que la receta tendría un costo social muy alto
para la población de Guatemala, en particu
par ticular
lar para los
grupos
gr upos de población
población más necnecesitados.
esitados.
La lucha en el Pacto Social fue muy difícil. El
sector privado estaba muy duro, los sindicatos tam-
bién estaban cautelosos, pues no estaban tan seguros
de cuánto les iba a afectar las medidas que estábamos
proponiendo. Lo cierto es que esto se estancó y no
se miraban asomarse algunas flexibilidades; incluso
nosotros habíamos presentado un plan más ambicio-
so, sabiendo
sabiendo queque tendríamos
tendrí amos que tener margen para par a la
negociación, pero ni dando indicios de ceder conse-
guíamos alguna esperanza.
A todo esto, al terminar
term inar las reunion
reuniones,
es, siempre
siempre
Richard Aitkenhead
A itkenhead meme daba un resumen
resu men y cuando se
podía llegar
l legar a alg
a lgún
ún acuerdo diferente
diferente de lo conv
conversa-
ersa-
do, élPasaron
me lo consultaba.
los días y las semanas y se empezaron a
ver algunas flexibilidades, sobre todo porque aparen-
temente los sectores tomaron consciencia del proble-
ma y fueron entendiendo
entendiendo la necesidad de enfrentarlo
enf rentarlo..
Pero no se aterr
aterrizaba
izaba en nada
nad a y nosotros teníamos
tenía mos que
afrontar los compromisos y ponernos en posición de
negociar con el Fondo Monetario.
  Cada vez que me encontraba al embajador de
94

Trabajando para el desarrollo


desar rollo de Guatemala y la democracia

los Estados Unidos, me daba


d aba una confer
conferencia
encia sobre la
necesidad de que nos sentáramos con el Fondo a ne-
gociar. Pero yo, que ya sabía lo que era negociar con
ellos de los tiempos en que trabajé en la SEGEPLAN,
sabía del tipo de información que requerirían, y le
decía que sí lo haríamos. No le decía cuándo, pues
ni loco
mi lo haría
política antes delatener
económica, que resultados
yo prometíapositivos de
que sería
sin sacrificio social, sin políticas de las llamadas de
“shock”.
Decidimos que sería mejor que interviniera yo
directamente, para ver si con la presencia del Pre-
sidente se podía llegar a algo. Invitamos a todos los
participantes del Pacto Social a la Casa Presidencial,
nos reunimos en el Salón Sa lón de los Espejos
Espejos y empezamos
a discutir como a las once de la mañana. Los invité a
almorzar, para evitar que se ausentaran de la reunión;
la cual siguió
sig uió durante toda la tarde y llegamos hasta las
once de la noche, hora en que ya contábamos con al-
gunos
gu nos acuerdos.
acuerdos. Entonces
Entonces nos fuimos
fui mos juntos a cenar y
allí en la mesa logramos los últimos entendimientos.
Después comentábamos de manera jocosa, que
solo asistidos por el hambre logramos
logra mos un acuerdo que, que,
más o menos, satisfacía
satisf acía a todos los sectores:
sectores:
Primero: el monto de la contribución sería un
porcentaje
porc entaje
presas; calculado con base en el capital de l
las
as em-
Segundo: cada empresa podría decidir que, si
quería pagar
paga r un bono,
bono, pagarían
pagar ían el 2%
2 % y ese bono
bono sería
redimible en 20 años sin intereses. Las empresas que
quisieran pagar un impuesto, sería este del 1% y no
sería rescatable
rescatable..
Tercero: el Gobierno daría a conocer este
acuerdo como una decisión unilateral y que ellos se
95

La guayaba tiene dueño

comprometían a sacar solo un campo pagado atacán-


dolo. Pero como todos sabíamos que eso era funda-
mental, nadie
nad ie haría
harí a mayor caso de eso.
Esta decisión, más la utilidades que habíamos
conseguido mediante la buena administración de
GUATEL, con Ernesto González y Francisco Perdo-
mo, quien
on enenuna
pusieron
pusier esesituación
momentobuena estabapara
de negociar
subgerente,
connos
el
Fondo, porque cuando buscaron los subsidios ya no
estaban, las
l as insolv
in solvencias
encias tampoco
ta mpoco,, la recaudación me-
me-
 jorando y con un unaa reform
reformaa implementad
implementada. a. Todo lo
ácido estaba arreglado y el país listo y en disposición
para arrancar
ar rancar..
Pero
Pe ro cuando bon ito, a los “dueños”
cua ndo ya todo estaba bonito,
no les gustó este estilito
esti lito y empezaron a conspira
conspirar,
r, has-
ta que los recursos que no quería dar para estabilizar
el país, lo diero
d ieronn para botarme
bota rme y hacer del país lo que
tienen ahora los guatemaltecos.
guatema ltecos.
Política
Política salarial
salar ial

La política salarial aplicada durante mi período


de gobierno estuvo establecida sobre bases de justicia,
tratando de lograr la compensación que por años se
les había negado a sectores asalariados específicos del
país.
Entre otros, podemos mencionar los siguientes
beneficios: Aumentos en los salarios nominales para
los empleados del Organismo Judicial, Aumento para
los maestros y ajuste del escalafón para el Magisterio
Nacional, se creo la bonificación profesional para los
servidor
serv idores
es públicos
públicos con título unive
un iversita
rsitario
rio y con cali-
dad de colegiados activos, se creo el Bono
Bono de antigüe-
antig üe-
dad para los empleados de la administración pública,
96

Trabajando para el desarrollo


desar rollo de Guatemala y la democracia

pagadero mensualmente de conformidad con el nú-


mero de años de servicio.
ser vicio.
Se otorgó
otorgó una Bonificaci
Bonif icación
ón extraordinar
extraordinaria
ia anual
para las
la s clases pasivas del Estado, se incrementó
incrementó el pago
mensuales de las l as prestaciones en jubil
jubilacion
aciones,
es, pensio-
nes y montepíos del Estado, a part pa rtir
ir de enero de 1993,
1993,
se otorgó unEjecutivo,
Organismo incremento
incremento desalar
sal75%
aria
iallpara
a loslos
trabajadores del
del
profesionales
 y entre 18 al 2222%
% para el resto
re sto de los tr trabajadores,
abajadores, se
otorgó un subsidio para nivelación salarial de los em-
pleados
plead os municipales,
mun icipales, se incremento a las la s pensiones de
personas que formaban las clases pasivas del Estado.
Definitivamente que las políticas saláriales, fue-
ron parte importante del incremento de la actividad
económica global, sin embargo resultaba incompren-
sible para mi,
m i, que esto no se entendiera así, sobre todo
por los dueños.
Bono 14

Consciente de la incapacidad
Consciente i ncapacidad que el el guatema
g uatemalteco
lteco
asalariado tiene de generar ahorro, por lo limitado de
su salar
sal ario,
io, me pareció
pareció conveniente
conveniente que en lugar de dar d ar
un aumento porcentual al salario que devengaban en
ese momento
momento,, sería mejor crear un salar sa lario
io extra.
Este bono debería estar fuera de su presupuesto
regular y servirle para disponer de él para gastos ex-
traordinar
traordi narios
ios o bien
bien para hacerse de algunos
alg unos bienes
bienes de
uso permanente
perm anente a los que, por su capacidad
capacidad de ahorro,
no tiene acceso con sus ingresos regulares. Así que lo
concebimos como una forma de ahorro, la que favo-
rece al trabajador, pero que también ha venido a ser
comoo una
com un a Navidad a medio año a ño..
Ahora, cuando se acerca el pago del Bono 14, se
97

La guayaba tiene dueño

llenan los medios de anuncios, ofreciendo todo tipo


de bienes
bienes y serv
servicios,
icios, lo cua
cuall a mí me llena
l lena de satisfac-
ción, pues para ser sincero,
sincero, cuando
cua ndo yo lo impulsé,
impul sé, fue
teniendo en mente
mente fundamental
funda mentalmente
mente a los trabajado-
trabajado-
res, pero hoy con los años, me satisface el efecto que
causa en la economí
economíaa del país.
comoEsta
Leyidea
de seBonificación
convir tió enAnual
convirtió ley el para
2 de los
juliotrabajado-
de 1992,
1992,
res del Sector Público y Privado, y se conoce como
BONO
BON O CATOR
CATORCE. El Decreto 42–92 del Congreso Cong reso
de la República establece que un salario extraordina-
rio adicional de un mes se les debe pagar a todos los
trabajadores asalariados a finales del mes de junio.
Este benef
beneficio
icio es uno de los logros
logros más
má s importan-
importa n-
tes obtenidos por los trabajadores guatemaltecos du-
rante las últimas
adicional décadas,a pues
que constituye su vezrepresenta un ningreso
un a inyección
una inyecció anua l
anual
a la economía nacional, por varios miles de millones
de quetzales, según lo ha hecho ver sistemáticamente
el Instituto Guatemalteco de Seguridad Social.
Según esa
e sa misma
mi sma fuen
f uente,
te, más del veinte por
por cien-
to de la población económicamente activa recibe este
beneficio actualmente, y lo hacen efectivo varias de-
cenas de miles de empresas privadas.
Un amigo, bromeando conmigo, me decía que
este es el día
dí a en que más se me recuerda
recuerda en Guatema-
la: unos para bendecirme y otros para insultarme, y
que supiera que él es de los segundos.
Reapertura de ventanilla, reducción de los
subsidios
subsidios y apoyo a las municipal
municipalidades
idades

La reapertu
reaperturara de las ve
ventani
ntanilla
llass internacionales
internacionales de
crédito, con
con lo recaudado con la Ley de Estabil
Est abilización
ización
98

Trabajando para el desarrollo


desar rollo de Guatemala y la democracia

Económica, abrió nuevas posibilidades para obtener


recursos para la inversión pública que el Estado ne-
cesitaba. Estas ventajas son las que usufructuó el go-
bierno del presidente Arzú,
Arz ú, pues como es lógico, todo
proyecto lleva tiempo para elaborarlo y conseguir su
aprobación, pero lo importante es que el país se be-
nefició.
La eliminación de los subsidios hizo posible que
nosotros fuéramos el primer gobierno que entregó el
8 % del Presupuesto
Presupuesto General
General de Ingresos
Ing resos y Egresos a la
Nación,
Nació n, a las Municipal
Municipalidades
idades del país.
paí s. Siempre
Siempre luché
luché
por esto, pues consideraba que era la única forma de
iniciar una descentralización del Estado, a sabiendas
de que la mayoría de las alcaldías no tenían capacidad
para admin
adm inistra
istrarlo
rlo.. Pero
Pero yo
yo estaba seguro de que para
ellas elhay
pues asumir
obraslanecesarias
responsabilidad
en los sería algo que
pueblos saludable,
jamás
van a ser vistas y mucho menos consideradas por el
gobierno
gobie rno central.
centra l.
Titulación de tierras

No hay cosa que le dé más estabilidad a un siste-


ma democrático, que el acceso que la población tenga
a la propiedad.
En Guatemala hay un problema, sobre todo en
el medio rural, y es que gran parte de la gente tiene
tierras o pequeñas parcelas, pero no tiene título de
propiedad, simplemente se manejan con el ejercicio
de un derecho posesorio, institución débil y suma-
mente vulnerable que lo único que da es inseguridad
 y ni
ning
ngun
unaa posibi
posibilid
lidad
ad al propietar
propietario
io para obtener un
crédito sobre ella y, lo que es peor, al no figurar en
ningún registro, su transferencia o herencia resultan
99

La guayaba tiene dueño

sumamente complicadas.
Le pedí a Enrique Ortega, a quien nombré en el
Instituto de Transformación Agraria, que estudiára-
mos la forma de agilizar el otorgamiento de títulos
de propiedad a todos esos guatemaltecos que estaban
en tal circunstancia. Él se entusiasmó con la idea y la
asumió
asum
por loiómenos
con empeño.
con empeño
1,200 .títulos
Nos fijamos
f ijamos
por mesla ymeta de entregar
así iniciamos el
programa de titulación, a través del cual repartimos
miles de títulos, en decenas de parcelamientos.
Nunca se me vava a olvidar
olvida r que cuando los campe-
sinos recibían su certificado, lo colocaban dentro de
una bolsa plástica, lo doblaban y se lo ponían dentro
de la camisa. De esa manera veía yo, el cuidado que
tenían sobre ellos, a tal extremo que cuando les pe-
dían
foto oque levantaran
video, los títuloslaspara
solo levantaban manostomarles
pero elalguna
título
no, ya
ya que por
por ningú
ni ngúnn motivo lo lo iban a arriesga
ar riesgarr.
Agricultura
Agr icultura artesanal y los
los fertilizantes
fertili zantes

Dada la gran importancia que la agricultura de


subsistencia o artesanal de pequeña escala tiene para
el sustento de la familia guatemalteca y en general
para la economía nacional, en campañaca mpaña ofrecí bajar el
precioo a los fert
preci fertililiza
izantes,
ntes, pero no lograba cumplir
cumpli r con
con
esta promesa, por lo que que cada vez que salía
sal ía al
a l interior
inter ior
del país la
l a gente me lo reclamaba, incluy
incluyendo
endo los pro-
pios líderes del MAS.
Hablaba con Fito Boppel, Ministro de Agricul-
tura, y con muchos de los amigos del sector agrícola
sobre este aspecto, hasta que un día alguien me pre-
guntó si yo era amigo de Boby Dalton, y yo le dije
que sí; entonces me dijo “¿Y por qué no lo llamás, si
100

Trabajando para el desarrollo


desar rollo de Guatemala y la democracia

alguien
alg uien te puede
puede dar una
u na idea es él”.
él”.
Enseguida
Ensegu ida pedí que llamara
llam arann a Bobby
Bobby.. Quedamos
de vernos al día siguiente, ya en la tarde. Le conté en
el problema
problema que estaba
est aba y que si a él se le ocurrí
ocur ríaa cómo
podría cumplir con esa promesa.
 —Mirá
 —M irá Jorge –me dijo Bobby– creo que yo puedo
ayudarte;
ayudar te; solo dejame
dejame un par de díasdí as y yo te llamo
lla mo..
 —V
 — Venite en cua
c uanto
nto puedas
pueda s –le dije.
Al día siguiente cuando me habló por teléfono,
le recordé:
 —Si tenés una solución, vamos
vamos a ver cómo la po-
demos implementar.
 —Y
 — Yo lo puedo hacer –me propuso Bobby– Solo
necesitaría dos cosas: primero, que aceptes que en-
treguemos el fertilizante paletizado, para que no lo
utilicen los quealloverdadero
esté orientado aplican con máquina,deesauto
campesino decir, que
subsis-
tencia, y segundo,
segu ndo, queque me consigas unau na forma
form a en que
 yo pueda manejar
ma nejar gra
g raneles
neles en el puerto Quetzal
Quetz al,, para
par a
abaratar el manejo de descarga de la materia prima.
 —Mirá
 —M irá –le respondí
respondí–– a lo del fert
fertililiz
izante
ante peleti-
zado no le veo problema y entiendo que esto es para
que tu margen sea menor en este producto. Respecto
a lo del manejo de graneles en Puerto Quetzal, dame
hastaa mañan
hast ma ñanaa y te contesto cómo
cómo lo vamos
vamos a hacer.
Hablé con la gente de la Portuaria Quetzal y les
pedí que encontraran una solución; rápidamente me
contestaron que ya la tenían y que fuera Bobby a ha-
blar con ellos.
Se arreglo todo y muy pronto pudimos lanzar al
mercadoo un fertil
mercad fert iliza
izante
nte que
que se llamó
ll amó GAVILÁ
GAVILÁN, N, que
se produjo en la planta
plant a de Tecu
Teculután
lután,, en el Oriente
Or iente del
país. Ellos mismos se las arreglaron para distribuirlo
 y de esta mamanera,
nera, con la excele
excelente
nte ayud
ayudaa de BobbyBobby,,
101

La guayaba tiene dueño

pude cumplir con esta promesa de campaña, dar un


fert
fertililizante
izante barato.
barato.
Polít
Políticas
icas sociales

Tanto la política económica, como la de privati-


zaciones (fundamentalmente, lo que acontecería con
GUATEL y el INDE) sí eran  políticas de los patrones,
sobre las que ellos opinaban y mantenían puesto el
ojo.. Sin embargo las
ojo l as políticas de la ranche
ranchería
ría solo las mi-
m i-
raban de reojo, no eran de su interés, pero tampoco
querían que se salieran de contexto y que pudieran
llegar a afectar sus intereses.
Me refiero
ref iero a la salud, educación, previsión
previsión y asis-
asis -
tencia social, ciencia y tecnología; y en nuestro caso
muy particular:
de derechos repatriación de refugiados, y política
humanos.
En el caso de la paz, sí mantenían algún inte-
rés en informarse, pero cobró especial interés para los
dueños del país cuando se dieron cuenta de que en esta
acciónn había un
acció u n foco de descontento
descontento de la cúpula mi-
m i-
litar y que ese malestar podría servir para amalgamar
intereses entre las dos cúpulas, tal y como finalmente
sucedió.
De modo
o apología
apologí a de lobreve,
que sey hizo
sinzopretender
hi hacer publicidad
en el gobierno, voy a pre-
sentar las líneas nuestrass políticas
l íneas de acción y logros en nuestra
de ranchería.
Educación

Creo que durante mi gobierno, la educación del


país tuv
t uvoo uno de los rostros más positiv
posit ivos,
os, en la perso-
na de la licenciada María Luisa (Mau) Beltranena de
102

Trabajando para el desarrollo


desar rollo de Guatemala y la democracia

Padilla, en quien se conjugaba un gran sentido social


con gran dedicación e inteligencia y responsabil
responsabilidad.
idad.
Siempre en forma pausada y muy diligente se
presentaba a mi despacho, con soluciones y buenas
ideas, era fácil entenderse con ella. Tenía un sentido
práctico de lo posible, hecho que en la educación, y
sobre todo en la relación con el magisterio, es una
cualidad invaluable.
Con ella logramos, con beneplácito del magis-
terio nacional, que se promulgase una nueva Ley de
Educación Nacional,
Naciona l, Decreto No. 12–91,
12–91, donde entre
otras cosas, se hace obligatorio
oblig atorio que se dedique el
el 35%
de los ingresos ordinarios del Presupuesto Nacional a
la educación.
Con esta ley logramos, durante el primer año de
gobierno,
el segundocrear
año,800 plazas
1992, nuevas5,060;
creamos para maestros; y en
y en el tercer
año, 1993
1993,, fueron creadas otras
ot ras 4,000 plazas,
pla zas, superan-
do las expectativas del Movimiento de Dignificación
 y Reivindicación
Reivind icación del Magister
Mag isterioio Nacional.
Nacional .
Este impacto generó un progra programa
ma de útiles
úti les esco-
lares que benef
benefició
ició a medio millón
mi llón adicional de alum-
nos. Ademá
Además, s, fueron comprados
comprados y distribuidos
dist ribuidos 80,000
pupitres, los cuales beneficiarían a más de doscientos
mil educandos de diferentes escuelas del interior del
país.
Equipamos 400 escuelas en los nive
n iveles
les de prepri-
maria y primaria a las que designamos como núcleos,
que tendrían
tendría n proyecció
proyecciónn para atende
atenderr 2,000
2,00 0 estableci-
mientos educativos.
Escalafón magisterial

También modificamos el escalafón magisterial,


103

La guayaba tiene dueño

pues nos dimos cuenta de que un maestro, con la de-


valuación y el criterio del escalafón vigente, al dar
más años de su vida a la educación pública, lo úni-
co que lograba era empobrecerse más, ganar menos
e incrementar notoriamente su inseguridad para el
retiro. Adicionalmente, habíamos decidido hacer una
nueva
nue va revisión a esa modif
modificació
icación.
n. Pero
Pero vino
vi no el golpe
de Estado y ya nunca supe cuál fue el destino de este
programa.
Val
alija
ija docente

Creamos el programa de entrega de la Valija


Docente, que se proporcionó en 1992 y 1993, a cada
maestro con los libros de texto, cuadernos, y material
didáctico básico como yesos, almohadillas,
Cuando con la Ministra de Educación hicimospapel.
las primera
primerass entregas, fue muy emocionante
emocionante ver como
como
los profesores
profesores recibían este material
mater ial,, pues nunca antes
habían recibido ni un lápiz. Entendí que eso era mu-
cho más que una simple ayuda didáctica. Habíamos
hecho
hec ho un reconocim
reconocimieniento
to a la importa
i mportancia
ncia de la labor
l abor
del docente.

Nueva ley
Otro logro importante fue pasar una nueva Ley
Nacional
Nacio nal de Educación,
Educación, la que introducía una serie de
elementos importantes para el futuro del país; se les
daba una participación más protagónica a los padres
 y a la
lass autorid
autoridades
ades comunit
comunitar
aria
iass en la orient
orientación
ación y
control del proceso educativo. Lamentablemente ya
no pudi
pudimos
mos llegar a imple
i mplementarla.
mentarla.

104

Trabajando para el desarrollo


desar rollo de Guatemala y la democracia

Salud
Durante mi mandato hubo dos ministros de Sa-
lud: el Dr. Miguel Ángel Montepeque, y el Dr. José
Eusebio del Cid, con quien había trabajado cuando
elaboramos el plan Nacional de Desarrollo 1974–79.
También había sido alto a lto funcio
fu ncionar
nario
io de la Unión Pa-
namericana de la Salud –OPS–; era un gran g ran salu
sa lubrista,
brista,
con una gran experiencia.
La situación
situ ación de este sector era verdaderamente
verdaderamente di-
f ícil
ícil:: desde los hospitales
hospitales metropolita
metropolitanos,
nos, hasta los más
remotos centros de salud estaban en situación crítica.
Por otro lado, gran parte de los recursos que podrían
servirnos para resolver por lo menos algunos de los
problemas de infraestructura estaban congelados por
el cierre
cierre de la ventan
ventanilillas
las de los bancos intern
internacionales
acionales
de crédito debido a la insolvencia en el pago de las
obligaciones en que había caído el Gobierno.
Al resolv
resolverse
erse ese problema,
problema, pudimos termina
term inarr dos
hospitales departamentales, que eran fundamentales
para el funcionamien
funcionam iento to de la red: el hospital
hospital de la An-
A n-
tiguaa Guatemal
tigu Guatemalaa y el de Malacatán, San Marcos; y la
construcción de 27 puestos de salud en el interior del
país y 3 en la periferia de la ciudad de Guatemala.
En cuanto a atención
la Organización Mundial pripde
rima
maria
la ria en salud,
Salud – OMS–en 1992,
1992,
y la
OPS elogiaron este renglón, por la atención primaria
realizad
real izadaa en Escuintla,
Escui ntla, considerándolo comocomo el mejor
mejor
programa de atención primaria en salud de seguridad
social en América Latina.
Impulsamos la fortificación del azúcar con vita-
mina A y la yodización de la sal, programas que se
habían dejado de lado en el país.
Creamos sistemas de acueductos de agua ag ua potable,
105

La guayaba tiene dueño


acompañados de un programa de letrinización, insta-
lando 57,620 letrinas, para beneficiar a 229,410 per-
sonas.
Debido a la problemática que el sector presen-
taba en el área de recursos humanos, impulsamos la
capacitación de enfermeras profesionales, técnicos en
las áreas de fisioterapia, radiología, inspectores sanea-
miento, laboratorio y terapia respiratoria. También se
implementaron cursos de actualización para coma-
dronas tradicionales, promotores de salud rural, cola-
borador
bora dores
es de malar
ma laria,
ia, vigila
vig ilantes
ntes de puest
puestos
os de agua y
acueductos.
acuedu ctos. Mediante
Media nte programas
program as sin
si n precedentes
precedentes en el
país, en dos años y medio 25,000 personas pasaron
pasa ron por
por
los diferentes programas que realizamos

La ley Serrano
Serra no y las emergencias en los hospi-
tales nacionales

Señalo estos programas entre los más indicativos,


pero tuvimos que emprender también un programa
de recuperación
recuperación de las áreas
á reas de emergencia en los hos-
pitales, pues el criterio generalizado de los médicos
era que en la práctica registraban
registr aban un colapsado.
Pusimos la ley seca a partir de la 1 de la mañana,
 ymero
estaa de
est medida
medid a redundóy de
accidentados inmedi
in mediato
heridos atoingresaban
que en que el anú-
las
emergencias de los hospitales, se redujera en más de
un 60% en las madrugadas.
Mi pobre progenitora fue muy mencionada, y a
mí me decían: “Evangélico desgraciado,
desgrac iado, ¿por qué nos
nos
haces esto?”. Sin embargo, un día venía escuchando
en la radio un programa de comentarios telefónicos.
Oigo a un hombre que me me estaba dando una insult
i nsultada
ada
por la medida. Silencio absoluto, ningún comentario
106

Trabajando para el desarrollo


desar rollo de Guatemala y la democracia
de los oficiales
of iciales que iban conmigo.
conm igo. Pero
Pero,, acto seguido
segu ido,,
entra la llam
ll amada
ada de una señora, y se destapa totatotalmen-
lmen-
te en el
el otro sentido,
sentido, insulta
insu lta al que habló antes, insulta
insu lta
al locutor por darle cabida a tanta n atrevidos comentar
comentarios
ios
 y le dice
dice:: “Qué
“Qué bien
bien se ve que ustedes no son madre y
no
quesea pasan
su hijola noche en velaloesperando
lo balearon, que olesloavisen
atropellaron acu-
chillaron, que ustedes no son de los que acompañan
a sus vecinos a buscar a sus hijos o a sus maridos a la
morgue del Hospita
Hospitall General o al a l Hospital Roos
Rooseveevelt,
lt,
mejor piensen antes de d e hablar”
habl ar”..
Entonces fui yo el que rompió el silencio, me reí
 y pedí
ped í que me averig
averigua
uara
rann quién
qu ién era esa señora, pues
quería personalmente agradecerle la defensa, pues a
decir verdad, yo mismo no la hubiera podido hacer
mejor ni, por supuesto, con esa vehemencia.
La ley seca se quedó y lo curioso es que hoy, des-
pués de veveinte
inte años, sigue
sig ue vigente en el el país y alg
a lgunos
unos
le llaman
lla man “la
“ la ley Serrano”.
Serrano”.
El cólera

Dicen que a todo perro flaco


f laco se le
le pegan las
la s garra-
gar ra-
patas, pues a nosotros se nos vino
v ino encima el problema
problema
 ydelencólera.
cólera. Ya nuestro
Ya
cuidados
cu idados sistema
intensivos.
inten sivos. sanitar
san
Ahora itario
lo io estaba
teníamos
tení sensible
amos que ha-
cer reaccionar
reaccionar ante la l a amenaza
amena za que se nos presentaba,
presentaba,
porque
porq ue ya en nuestra
nuestrass fronteras se estaban
est aban detectando
casos y no quedaba otra cosa que reaccionar.
 Yoo no tení
 Y teníaa la menor idea de qué se tr trataba
ataba,, así
que lo priprimero
mero que
que hice fue pedir
pedi r información
in formación y cómo
se podía contrarrestar el peligro. De igual forma hice
que todo el el gabinete y principales funcionarios
f uncionarios públi-
cos tomaran conciencia del problema y organizamos
107

La guayaba tiene dueño


una comisión intersectorial para que planteara un
programa con el fin enfrentar la emergencia. Así se
hizo, sacamos recursos de muchos ministerios y de-
pendencias
pende ncias y pusimos
pusi mos en marcha el programa.
program a.
Cuando se nos presentó
presentó el primer caso
ca so ya estába-
mos
ción,preparados
por lo que yelcon un plan
impacto preventivo
de la epidemia en
en opera-
el país
tuvo efectos muy reducidos,
reducidos, la manejamos bien tanto
ta nto
preventiva como asistencialmente.
Vivienda

La vivienda en el país es y ha sido uno de los


problemas endémicos más difíciles de resolver. Yo sa-
bía por mi experiencia en Planificación Económica,
que en todo el el Estado no existía
exi stía ni
n i siquiera un simple
programa de vivienda. El Banco Nacional de la Vi-
vienda (BANVI)
(BAN VI) era una institució
instit uciónn obsoleta,
obsoleta, refugio
de favorecidos políticos, que yo quería disolver, pero
que al ser el ente que representaba al Estado E stado era
er a el que
tenía la poca ayuda internacional que se recibía para
impulsar
impul sar el sector.
sector.
Así que decidí, antes de elevar el sector a la ca-
tegoría de Ministerio, crear lo que se llamó el Fondo
Guatemalteco
Guatem alteco de la Vivienda
Viv ienda (FOGUAVI
(FOGUAVI), ), creado por
Acuerdo Gubernativo
Gubern ativo No. 759–92
759–92 del 10 10 de septiem-
sept iem-
bre de 1992, con el objetivo de planificar, desarrollar
 y f in
inanci
anciar
ar progr
program
amasas y proye
proyectos
ctos urba
urbanos
nos y rururarales,
les,
para proveer
proveer de solucion
soluciones
es habitacionales a fam f amililias
ias de
ingresos medianos y bajos.
FOGUAVI fue fundado con un capital de Q100
millones. Su objetivo, dotar de vivienda a 800 mil
guatemaltecos durante mi período y coordinar
toda la asistencia y el financiamiento internacional.
108

Trabajando para el desarrollo


desar rollo de Guatemala y la democracia
Lamentablemente, por el golpe de Estado, este pro-
grama pasó a ser un apéndice de las políticas de ran-
chería y ya no llegó a tener la dimensión para la cual
fue creado.

Hogares Comunitarios 
Mi esposa fue
f ue invitada por doña Blanquita de Pé-
rez, esposa de Carlos Andrés Pérez, Presidente de Ve-
nezuela
nezue la (quien me había privilegiado
privi legiado con una amistad
am istad
muy especial) para que la visitara y conociera el pro-
gramaa de Hogares Comunitar
gram Comunitarios ios que
que ellos desarrolla-
ron en el marco de la Secretaría de la Primera Dama
de la Nación es ese país.
Cuando Magda regreso de esa visita y pudo vivir
lo que encontró, me dijo:
 —Jorge, eso lo tenemos que hacer aquí. aqu í.
Desde el gobierno del presidente Juan José Aré-
valo, en Guatemala no se hacía nada serio en este
sector. Fue doña Elisa de Arévalo, Primera Dama de
entonces, quien había creó las famosas “Guarderías
Infantiles”, programa que al no haber tenido conti-
nuidad en los siguientes
sig uientes gobiernos,
gobiernos, se quedó raquítico
 y altamente
alt amente burocrat
buroc ratizizado.
ado.
Existía también un programa privado dirigido
por Carmen de Asturias, la esposa de mi gran amigo
Ricardo Asturias Valenzuela, quien con otras ilustres
personas crearon La Casa del Niño, programa altruis-
ta, caritativo, pero a todas luces insuficiente para lle-
nar las grandes necesidades de la niñez guatemalteca.
No me atrevería
atrevería a dar
d ar estadísticas,
estad ísticas, pero creo que
que entre
los dos programas no se atendían más del 2% de las
necesidades
necesi dades de la nación.
n ación.

109

La guayaba tiene dueño


Magda creó el “Programa de Hogares Comu-
nitarios”, dirigido a niños de escasos recursos y a sus
familias, para apoyar y complementar los esfuerzos de
asistencia infantil y crear un ambiente físico y social
que promoviera el desenvolvimiento del niño, no solo
físicaElsino emocional,
program
programa intelectual
a consist
consistía
ía en organ y socialmente.
organizaizarr a doce mad
madres
res
que trabajaban, con hijos en edad preesc preescolar
olar y que te-
níann problemas
nía problemas para cuida
c uidarr de ellos. Se seleccio
seleccionaba
naba a
dos de esas madres a las que llam ll amamos
amos “Madres comu-comu-
nitaria
nita rias”
s”,, quienes dejarí
dejarían
an sus empleos y se dedicar
dedicarían
ían
a cuidar a los niños de las otras diez. Por ese trabajo
recibirían un sueldo aportado por las madres parti-
cipantes y un complemento que el Estado proveería.
De esta manera, las madres comunitarias tendría un
ingreso similar
sim ilar al de las otras
otra s madres, peropero su trabajo
trabajo
sería cuidar a los niños de las demás, mientras ellas
trabajaban.
El Estado
Est ado provee
proveeríríaa capacitación a las madres
mad res co-
munitarias y supervisión, para que todo el programa
se desarrollara de acuerdo con normas éticas, morales
 y de ef eficiente
iciente ser
servicio
vicio socia
social,l, porque sabía
sabíamos
mos que
cualquier
cua lquier proble
problema
ma que surgiera
surg iera se nos cobrar
cobraría
ía caro.
De igual forma, el Estado proveería el pequeño
mobiliario que se necesitaba para dotar a cada casa
con los elementos para atender a los niños, juguetes,
material educativo, mesas, sillas, estufa para cocinar
los alimentos de los niños, a los que se les daba un
desayuno, merienda
merienda a media mañana,
maña na, almue
al muerzo
rzo y me-
rienda en la tarde
t arde antes de que sus padres los recogie-
ran. Luego tuvimos que poner dietistas para diseñar
menús, y capacitar a las madres en la preparación de
los alimentos.
Un día se presenta Gustavo Bianchi, quien tenía
110

Trabajando para el desarrollo


desar rollo de Guatemala y la democracia
a su cargo el programa y me cuenta la forma en que
los niños se estaba desarrollando. Le sugerí que hi-
ciéramos un examen psicológico de los niños antes
de entrar al programa y que monitoreáramos su de-
sarrollo. El día que pudimos comparar los primeros
resultados
básicamentequeuna
señal
señalaban
aban la evo
evoluci
alimentación lución
ón intelectual,
intelectual
diferente , con
y un poqui-
to de amor y atención técnica, comenté: “Vamos en
grande y prepárense para crecer”.
Para entonces,
entonces, ya habíamos tenido experiencia no
solo con la capacitación de las madres comunitarias,
sino con la reacción de las madres
m adres que estaban siend
siendoo
beneficiadas. Estas ya se reunían periódicamente para
apoyarse
apoy arse y empezamos
empeza mos a notar que la mística
míst ica del pro-
pro-
grama
ahora yaestaba trascendiendo
no solo a las comunidades;
estaban enfocadas que
en los hogares,
sino también
ta mbién en
en las comunidades
comun idades como un todo.
todo.
A decir verdad, el programa superaba lo que ha-
bíamos visto en Venezuela: ellos nos apoyaron en el
principio y ahora venían a ver lo que estaba sucedien-
do con lo nuestro
nuestro y a tomar ideas.
En el presupuesto del Estado no existía partida
para impulsar el programa, por lo que todos los gas-
tos se cubrían con los fondos de los llamados “Gastos
Confiden
Conf idencia
ciales
les”” de la Presidencia.
Presidencia. El progr
programa
ama crecía
como un fuego en pajonal, nos pedían de los depar-
tamentos que los ayudá
ayudáramos
ramos y que llegáramos
llegár amos con el
el
programa hasta esos lugares. Ya teníamos fácilmente
300 hogares en funcionamiento y los “Gastos Confi-
denciales” ya no daban más para eso, aunque en ese
momento contábamos con algún apoyo de otras de-
pendencias.
Cuando promoví la creación ya formal del pro-
grama (en reunión con Pepe Lobo, Presidente del
111

La guayaba tiene dueño


Congreso, y Obdulio Chinchilla, diputado) sobre la
necesidad
necesi dad de fondos para el mismo,
m ismo, cuál va siendo
siendo mimi
sorpresa, cuando me dicen que eso no iba a ser posi-
ble,, pues ese programa
ble program a era de orien
or ientación
tación política.
Entonces se me salió
sal ió el cobre,
cobre, como se dice, se me
subió el apellido
dictador o como
como loa laquieran
cabeza,llam
quieran mear.
salieron
l lamar. las palabras:
En pocas
pocas dotes des:
palabra
me encabroné. Les dije: “Lo voy a presentar y prepá-
rense a negar los fondos ante las treinta mil madres
que les voy a parar frente al edificio del Congreso en
la Novena Avenida y a ellas les van a tener que expli-
car que no les importan sus hijos”.
Con Magda,
Magda , ya nos habíamos dado
d ado cuenta de que
no importaba qué se hiciera en el programa. Incluso
los noticieros
nunca, cubrían losn eventos
nunca informaban
informaba delcomo
nada ; iban
nada; programa,
com pero,
o a husmear,
husmear
pero el bloqueo era manifiesto, era dramáticamente
obvio.
Un día, en una visita de Christian Tomuschat,
Relator de Naciones Unidas para los Derechos
Humanos, lo llev
l levéé a ver unos cuantos
cua ntos hogares en fun-
cionamiento, escogidos al azar a zar por él mismo.
m ismo. Se con-
con-
movió y me dijo: “Presidente, pero de esto, ¿por qué
no se sabe más? ¿Por qué la comunidad internacional
no lo sabe?”
sabe? ”. Claramente
Cla ramente le dije que no tenía respues-
ta, que hacíamos lo posible, pero que existía un blo-
queo inexplicable. Muy emocionado me respondió:
“Esto lo voy a incluir en mi reporte”.
En efecto,
efecto, así lo hizo;
hi zo; y así, nos dio el único
ún ico cré-
dito que recibimos por el el programa.
progra ma.
Para la Navidad del 92, Gustavo llegó y me dijo
que tenían preparado un festejo navideño para las
madres comunitarias en el parque de la Industria, al
que con
concur
curri
rimos
mos con con Magda.
Magd a. ¡Qué emocionante
emocionante fue!
fue !
112

 
Trabajando para el desarrollo
desar rollo de Guatemala y la democracia

Nunca antes en mi vida, ni en los momentos álgidos


de mi campaña, vi una multitud tan genuinamente
emocio
emo cionada.
nada. Eran casi cinco mil
mi l madres
mad res agradecidas,
muchas lloraban haciendo todo tipo de comentarios.
Recuerdo que solo me volteé
volteé y le dije a Magda
Ma gda:: “Aquí
“Aquí
está nuestro pago y que el Señor nos permita seguir
adelante”.
Hasta aquí, los dueños parecían indiferentes. Pero
después me enteré de que ellos, al igual que los ma-
ñosos políticos, identificaban ya este programa como
“políticamente peligroso”. Comentaban que esto
apoyaría cualquier intento mío de perpetuarme en el
poder, pues la organización de las madres era un ver-
dadero peligro.
cionesCon estosproblemas
a los criterios, sociales
será imposible
del país.plantear solu-
En verdad,
esto no es nuevo, de qué me extraño, pensaba para
mí, si lo mismo pasó con el presidente Arévalo y su
programa de las Guarderías Infantiles y con el esfuer-
zo innovador de las Escuelas Comunitarias a las que
l la
lamó
mó “Tipo Federación
Federac ión””.
Nos dieron el golpe y, como era de esperar, ni el
Procurador ni los sucesivos gobiernos de la privatiza-
ción hicieron nada por continuar e incrementar este
programa. Antes bien, Sanda de Colom le dio el tiro
de gracia.
Tampoco hicieron nada por continuar con los
grupos
gr upos de voluntar
voluntarias
ias que había organizado
organi zado mi esposa
 y Thelm
Thelmaa de Espin
Espina,
a, y que desempeñaba
desempeñabann una labor
encomiable en las guarderías infantiles, en el trabajo
con delincuentes, en el hogar de niños discapacita-
dos.

113

 
La guayaba tiene dueño

Niños de la calle y Juventudes con problemas


delincuenciales

Cuando que el Dr. Tomuschat visitaba el país, yo


procuraba buscar tiempo y conversar con él, porque
siempre daba un reporte de sus preocupaciones, las
que eran muy acertadas; y siempre en el caso de los
niños y jóvenes él ponía mucho énfasis, así que yo
tomaba muy en cuenta sus recomendaciones.
Recuerdo que uno de los grandes problemas era
el que presentaban los niños transgresores. Primero,
porque el Estado no tenía una estructura legal para el
tratamiento de ese problema y tampoco existía una
infraestructura física medianamente aceptable para la
recuperación
la sociedad. y reinserción adecuada de los jóvenes en
No todos los jóvenes eran y son iguales frente a
las tra
transg
nsgresio
resiones
nes en las que se ven
ven involucrados.
involucrados. Hay
situaciones de más gravedad que otras. Sin embargo,
el Estado los trataba por igual.
igu al. Así
A sí que los
los primero
pri mero que
que
hicimos fuef ue implementar
implementar un programa
program a que permpermitiera
itiera
evaluar cada casoca so antes de que
que los juec
jueces
es intervin
interv inieran.
ieran.
Establecimos coordinación con la Corte Suprema de
 Justicia,
 Justic ia, el Mini
Mi nister
sterio
io de Gobernación,
Gober nación, el Procurador
Procu rador
de los Derech
Derechos os Humanos,
Huma nos, la Policía y la Secretaría
Secretar ía de
la Primera
Pri mera Dama.
Dama.
Magda y Thelma de Espina, consiguieron una
casa antigu
ant igua,a, grande,
gra nde, pero
pero en
en bastante
basta nte buen
buen estado,
estado, en
la 6ª Avenida y 2ª Calle, Zona 1 de la capital. La to-
mamos en alquiler y la habilitamos rápidamente, para
hacer un centro
centro de dia
diagnost
gnostico
ico y tratamiento
trata miento preli
prelimi-
mi-
nar a niños y jóvenes transgresores.
Allí, con la ayuda de las dependencias an-
tes mencionadas, armamos rápidamente un equipo
114

 
Trabajando para el desarrollo
desar rollo de Guatemala y la democracia

interdisciplinario, con trabajadoras sociales, psicólo-


gos, abogados, sociólogos, jueces, y personal especia-
lilizado
zado en el manej
ma nejoo de los menores.
menores.
La idea era que cada joven o niño, al ser captu-
rado, no fuera llevado a ningún centro correccional,
como era la costumbre, pues allí el que no era de-
lincuente, muy rápido tenía que aprender y hacerse
delincuente para sobrevivir.
A partir de ese momento, cada niño o joven era
llevado a este Centro, en el que habíamos habilitado
dormitorios, facilidades médicas y de alimentación,
para los que quedaran recluidos en forma temporal
mientrass eran evaluados. Ya
mientra Ya con dictamen
dicta men de los espe-
cialilistas,
cia stas, entonces se decidía
decidía qué hacer en cada caso.
Cuandose llego
el Centro, el Dr.yTomuschat,
emocionó y lo que
no podía creer llevéena ver
tan
poco tiempo hubiéramos podido establecer algo así.
Por supuesto, no teníamos partidas presupuestarias
para ese programa, pero lo hicimos con los llamados
“Gastos Confidenciales”.
Recuerdo que cuando recorrrecor r imos con el Dr. To-
To-
muschat las instal
inst alacion
aciones,
es, observamos a un grupi
gr upito
to de
10 a 15 jóvenes sentados en el piso viendo televisión.
 yLadijo:
directora
“Ese nos señaló
chico ya haa un niño
ado de
matado
mat unospersona
a ocho doce años,
personas;s; y
el otro que está a su lado, sacó el carro de su padre y
atropelló a una persona. Estos son los casos que nos
toca evaluar para saber qué hacer con cada uno de
ellos, pues los delitos
delitos no tienen
tienen ninguna
ning una simil
sim ilitud
itud en-
tre sí”.
Centro correccional
correccional Las
L as Gaviotas

El otro problema era “Las Gaviotas”, un centro


115

 
La guayaba tiene dueño

correccional que más eso era un “Centro de Altos Es-


correccional
tudios Delincuenciales”
Delincuenciales”.. All
A llíí los jó
jóve
venes
nes entraban con
un “Licenciatura”
“Licenciat ura”,, o con un diploma
diplom a de “Técnicos en
Delincuencia” y en un par de años se graduaban con
honores con una “Maestr
“Mae stría”
ía” o con un “Doctorado”
“Doctor ado”..
Este sí era un problema; sin embargo, nos habla-
ron de
de una institución españo
española la llamada
ll amada REMA
R EMAR, R, la
que tenía mucha experiencia en ese tipo de proble-
mas. Así que cuando fuimos a Madrid, a la Cumbre
Iberoamericana de Presidentes, Magda, mi esposa,
 y m i herm
hermananaa Iv
Ivette
ette Serr
Serrano
ano de Fuentes (quien nos
ayudaba muchísimo con el programa)
program a) se quedaron en
España para
par a conocer
conocer de
de cerca el el REM
R EMAR AR y evaluar
evalua r la
posibilidad de que nos ayudaran
ayudara n con el el gran
gra n problema
problema
que teníamos en “Las Gaviotas”.
Cuando regresaron venían muy satisfechas de lo
que vieron. Pero como se trataba de una institución
evangélica, teníamos
tenía mos que
que prep
prepara
ararnos
rnos para las críticas.
crít icas.
Entonces les dije: “Allí me las den todas. Si con el
Señor no podemos, con nada podremos resolver este
problema; vamos para adelante”. Muy pronto estába-
mos firmando un acuerdo, el que fue una verdadera
bendición. Los de REMAR entraron a “Las Gavio-
tas”
algo ytotalmente
no sé cómo hicieron,el pero
diferente, al mes,delincuencial
ambiente aquello era
había desaparecido y se vivía un clima de relativa cal-
ma y trabajo
trabajo..
Gracias a Dios, como estas eran políticas de ran-
cherí
che ríaa y no de patronales, nadie
nad ie les dio pelota.
pelota. Tampo
Tampo--
co la prensa
prensa puso ning
ni ngún
ún interés en ellas,
ella s, nunca repor-
repor-
tó nada,
nad a, solo nos alentaban los comentarios
comentar ios del Relator
Relator
de Naciones
Naciones Unidas, quien
qu ien sí hacía constar estos logros
en sus informes.

116

 
Trabajando para el desarrollo
desar rollo de Guatemala y la democracia

Otras actividades

No es mi intención continuar relatando otras


actividades fundamentales de mi gobierno en otros
temas sociales, pues parecería que estoy haciendo
haciendo pro-
pagando lo que sinceramente no es mi intención ni
me interesa.
Lo que sí me interesa es dejar claro
cla ro estos concep-
concep-
tos, para que mis amigos, los dueños del país, tomen
conciencia de que no todo es billete, y que el Estado
requiere de muchas otras cosas más, que bien valdría
la pena que las miraran como acciones necesarias de
 justicia
 justic ia socia
social,l, y no como mera car
caridad
idad,, como suelen
hacerlo.

117

 
CAPÍTULO V
Privatizaciones

u n tema candente de los intereses de los


Esta si era un
dueños, muchos
muchos insistían
insist ían en que las privatizaciones,
pr ivatizaciones, que
estaban de moda,
para el Estado, yopodrían
como loserrelaté
una fuente de ingresos
anteriormente, no
tenía claro
cla ro cuán conveniente
conveniente seríseríaa para el país privati-
pr ivati-
zar, simplemente porque otros lo estaba haciendo.
Antes bien, yo tenía serias reservas sobre si era
conveniente vender empresas de capital del Estado y
destinar los fondos al gasto público, perdiéndose así
un valioso
val ioso patr
patrimonio
imonio de los guatemaltecos,
guatema ltecos, comocomo enen
efecto sucedió
sucedió con la privatización
pr ivatización llevada
l levada a cabo du-
rante el gobierno
gobierno de Álvaro Arzú A rzú Irigoye
Ir igoyen.
n.
Al respecto, claramente establecí:
Que yo no vendería ni las empresas de energía
eléctrica, ni las de teléfonos del Estado. Léase: GUA-
TEL y el INDE.
Que jamás transfe
tra nsferir
riría
ía un monopolio
monopolio estatal
estatal a un
grupo
gr upo privado, pues consideraba
consideraba que eso era un hecho
injusto con
con los usuarios,
usuar ios, los que
que quedarían
quedarí an sujetos a las
decisiones de los dueños de los monopolios.
Con base en estos criterios, empezamos una polí-
tica de desmon
desmonopolización
opolización de los sectores, dividiendo
d ividiendo

 
Privatizaciones

las actividades,
act ividades, en el caso de la energía en:en : generación,
generación,
transmisión y distribución. Y en el caso de la telefo-
nía: conmutación, interconexión y red primaria.
Estudiamos
Estud iamos también
t ambién el caso de la telefonía
telefonía celular,
que se estaba iniciando en el país y la interconexión
para el tráfic
tráf icoo internacional.
internacional.
Energía eléctrica. INDE

El caso de la energía : encontramos un sistema al-


tamente dependiente de Chixoy, una hidroeléctrica
del Estado, que estaba presentado problemas por falta
de lluvia. Ello hacía que los niveles bajaran más de
lo esperado; también
t ambién presentaba
presentaba problema
problemass de asolva-
a solva-
miento, es decir
decir de tierra
tierr a y arenas que estaban llenan-
l lenan-
do el embalse, los que al reducir la cantidad d agua
disponible, estaban limitando seriamente la capacidad
de producción de la planta.
Las otras
otra s plantas de generación
generación de energía
energía hidráu-
h idráu-
lica, Los Esclavos, Jurún Marinalá y Aguacapa, pre-
sentaban también
ta mbién serios
serios problemas
problemas de asolvamiento;
a solvamiento; y
en los tres casos
ca sos los equipos de generación
generación estaban en
muy mal
ma l estado, lo que hacía urgente
u rgente su reparación.
reparación.
El parque
paración térmico
térm
in mediata,
inmediata, ico
de de Escuint
Escuintla
fond
fondo, la en
o, pues necesi
necesitaba
las taba una re-
condiciones
con diciones
en que se encontraba su operación no era totalmente
confiable,
conf iable, y se
se hacía necesario
necesar io sacarlo a menudo
menudo,, total
tota l
o parcialmente, del sistema, y eso se traducía en un
permanente riesgo.
Existía una térmica pequeña en el Oriente del
país, pero era tan ineficiente, que generar energía a
través de ella costaba ocho veces más de lo que se
vendía.
En conclusión, el sistema de generación eléctrica

119
 

La guayaba tiene dueño

del Estado se encontraba


encontraba a punto de colapsar o quizá
qu izáss
 ya colapsado y lo que esta
estaba
ba espera
esperando
ndo era que se lo
notificaran…
La única que estaba funcionando era la térmica
de Amatitlán,
S.A., que pertenecía
y esta sí registraba a la Empresa
un manteni
m antenimiento Eléctrica,
miento aceptable.
acep table.
Cuando me senté con Alfonso Rodríguez Anc-
ker, a quien yo nombré presidente del Instituto Na-
cional de Electrificación (INDE) me dio el reporte
de las condiciones en que habíamos recibido el sector.
Me dijo que eso no era todo, que si se concretaban
las amenazas de la llamada Corriente del Niño, nues-
tra situación iba ser mucho peor, pues la escasez de
agua
ag ua nos llevaría
llevarí a a una situación muy crít
crítica,
ica, en la que
que
posiblemente tendríamos que llegar hasta el raciona-
miento de la energía.
Ante esa situación, le di instrucciones para que
manejáramos este problema como una emergencia;
que buscáramos alguna forma de abastecernos de
energía adicional, lo que se miraba sumamente difícil
porque los países vecinos que podrían en algún caso
provee
pro veernos,
rnos, se encontraban
encontraban en situacion
situac iones
es parecidas
parecida s a
las nuestra o quizás peores.
Sin embargo,
me contó que había muyunaspronto me en
barcazas llamó Alfonso
Houston, quey
aparentemente estaban listas para generar 110 mega-
vatios, que el posible usuario había tenido problemas
 y que podr
podría
íann est
estar
ar di
disponibles
sponibles para ar
arrenda
rendarla
rlas.
s. Me
indicó, además, que el problema
problema sería que habría que
ubicarlas en Puerto Quetzal, y que a los señores de la
portuaria no les gustaba la idea, pues les ocuparía en
forma permanente un espacio considerable de mue-
lles. Le pedí que negociara las barcazas y que yo

120
 

Privatizaciones

hablaría con los señores de la portuaria para hacer-


les ver el problema que teníamos y así lo hicimos. Se
consiguieron las barcazas con un contrato con el que
se les pagaría, si mal no recuerdo, a 5.5 centavos de
dólar Y
 Yapor k ilovatio.
kilovatio
a con . r idad mí
esa segu
segur míni
nima
ma,, procedi
procedimos
mos a re-
parar el parque térmico de Escuintla y después las
hidroeléctricas de Los Esclavos, Jurún Marinalá y
Aguacapa. Esta solución era muy temporal e insufi-
ciente, pues solo una nueva siderúrgica que se esta-
ba estableciendo en Escuintla requeriría consumir la
energía de las barcazas. Así que decidimos encontrar
una forma en que el sector privado pudiera ayudar
en esto; sin embargo, existía un problema: la ley del
INDE prohibía la generación de energía energía privada.
Les pedí a mis asesores legales que estudiaran
este asunto y muy pronto viniero
vin ieronn con una solu
solución:
ción:
la disposición establecida en la ley del INDE era in-
constitucional, porque era anterior a la Constitución
Política de 1985, en la que expresamente estaban pro-
hibidos los monopolios.
Me sugirieron que, por medio de un Acuerdo
Gubernativo, declarara la inconstitucionalidad de los
artículos de la ley que nos limitaban y así lo hicimos,
emitiendo en julio el acuerdo gubernativo 1021–92 y
en enero del año siguiente el acuerdo 9/93.
Con esto se abrió la posibilidad
posibilid ad de que
que se iniciara
inicia ra
un proceso de generación y cogeneración privada en
el país, lo que fue para nosotros una gran solución.
Muy pronto los ingenios y otras empresas iniciaron
su producción y la venta al Estado, a tal extremo que
cuando
cua ndo se da el golpe de Estado,
Esta do, ya el 47%
47% de la ener-
gía que
Un se usabadeen
grupo losel
edueños
l país era de origen
del paísor igensí privado.
, que privado. ar
quería entrar
quería entr
121
 

La guayaba tiene dueño

 y estaba listo
li sto para hacerlo, pedí
pedían
an 8.4 centavos por k i-
lovatio
lovatio y en una junta con ellos en la Casa Presidencial
 y con A lfonso Rodr
Rodrígíguez,
uez, Presidente del IN
INDE,
DE, les
hicimos ver que lo que estábamos dispuestos a pagar
eran 6.5 centavos,
las barcazas, unoestudios
y que por más de quelo que pagábamos
habíamos hechoa
encontrábamos que ese era un excelente negocio para
ellos.
Supe que al salir de la reunión no solo me men-
taron a mi progenitora, sino que decían: “A este hay
que enseñarle que no es el Rey Salomón, sino que un
simple presidente”.
Lo irónico
i rónico es que durante años trataron
tr ataron de vender
vender
energía al Estado y no pudieron, y ahora que yo les
abría las puertas, en lugar de estar contentos y agra-
decidos, como yo creí que iba a acontecer, lo único
que saqué fue que se alinearan para botarme lo más
pronto posible, pues lo que estaban dejando de ganar
con nuestras posiciones era mucho dinero.
Sin embargo, yo me hallaba contento, pues en-
contramos una fórmula para que en Guatemala no se
sintiera la crisis energética que hubo en los países ve-
cinos; y porque al mismo tiempo pudimos reparar la
térmica de Escuintla, y las tres
t res hidroeléc
hidroeléctrtricas.
icas.
A veces
veces yo me pregunto:
pregunto: ¿Qué
¿ Qué día sería
serí a más feliz
feli z
para estos señores? ¿El día que supieron que iban a
poder generar
generar energía, o el día
d ía que les informaron
inform aron que
 Jorge Serrano
Serr ano ya estaba
est aba en Panamá
Pana má??
El asalto fallido

De todas formas, la lucha siguió, pues a los due-


ños estoquerían
lo que no les gustó mucho,
era un porque
traslado algunos de ellos
del monopolio, para
122
 

Privatizaciones

poder definir a su sabor y antojo todo lo referente a


la energía. Entonces fueron al Congreso de la Repú-
blica y promovieron la reforma a la ley del INDE, la
que regulaba el sector de la producción de la energía
eléctrica.
¿Qué hicieron? Cambiaron la directiva
d irectiva y se la en-
tregaron al sector privado. Lo lograron con dinero y
en contubernio con diputados que tenían interés de
participar en la planta generadora de energía eléctrica
de Champerico, en el Sur Occidente del país.
Cuando fui informado de cómo, en forma sor-
presiva y mediante un procedimiento de “fast track”
se aprobó la reforma a la ley, sin que nosotros ni si-
quiera
do de laconociéramos
conmisma,
ociéramos
ordené
ni de
quela
l ame
existencia
pasaranni
nuna
i el conteni-
conte
copia ni-
de
ella. Compro
Comprobé bé que se sacaba al gobierno de cualquier
cua lquier
injerencia en el sector de energía eléctrica. Para ser
franco, me causó indignación, me dio asco lo burdo
de la maniob
man iobrara e inmediata
inmed iatamente
mente orden
ordenéé al Secretario
Secretar io
General de la Presidencia que preparara un veto, pues
 yo no esta
estaba
ba dispuesto
di spuesto a sancionarla
sanciona rla,, ni en artícu
ar tículo
lo de
muerte.
Consideraba que si los señores del sector privado
querían el INDE, que por lo menos pagaran por él,
pero que nos se lo robaran, y que los funcionarios y
diputados corruptos que se prestaron a eso, pues que
fueran devolviendo el dinero que les fue pagado. Esa
fue la Ley
L ey 59 de 1992,
1992, que fue inmediata
in mediatamente
mente vetada
vetada
por mí.
Se abre la batal
batalla
la

A partir
part
mucho, ir de
pues se este
hizomomento
mome
cada nto
vez las
máscosas se deterioraron
evidente la alianza
123
 

La guayaba tiene dueño

 y entendi
entendim
m iento de empresa
empresarios
rios del sector que que-
rían la energía, con funcionarios comprometidos con
ellos. Pero para no ser yo precisamente quien haga la
denuncia, simplemente
simplemente transcribo
tran scribo lo que literalmente
literal mente
aparece
de Rachelen McClear
la página
Mc pági del libro Dictating Democracy,
nay:100, del
Cleary:
“El impasse
impas se en el Congreso fue creado por el pre-
sidente del Congreso, un Demócrata Cristiano, que
con el Presidente de la Corte
Cort e Suprema
Suprema de Justicia
Justic ia Juan
 José Rodi
Rodill y con el legi
legislador
slador Obdul
Obdulioio Chi
Chinchi
nchill la Vega
estaban buscando la concesión
concesión para generar energía en
el puerto de Champerico, al sur oeste de Guatemala
(…)) “Lobo Dubon y los Demócrata
(… Demócrata Cristi
Cr istianos
anos estaban
estaba n
amenazando
amenaz
ta Serando
ranocon
de Serrano parabloquear
bloquear
verenlos
remover
remo loselsubsidios
Congresoa la electrici-
propues-
electr ici-
dad, al menos que el presidente les garantizara a ellos
el contrato de Champerico. Rodil, como Presidente
de la Corte Sup
Suprema,
rema, ofrecía sobres
sobresella
ellarr los cargos que
en materia penal existían contra Rodríguez Anker si
Serrano llegaba a un acuerdo con Chinchilla Vega y
Lobo Dubon. Si Serrano no cooperaba, amenazaba
con considerar cargos de corrupción contra Serrano,
una vez el Congreso lo despojara de su inmun i nmunidad.
idad.””
Con el pasar de los años me vine a dar cuenta de
cómo se habían manejado en el Congreso y entendí
entonces cómo es que la famosa
fa mosa Ley 59 pasó casi
cas i en la
clandestinidad. Se constituyó una alianza estratégica
entre los pulcros y cristalinos dueños, y Lobo Dubón,
Presidente del Congreso, Juan José Rodil Presidente
de la Corte Suprema
Suprema de Justicia y Obdulio Chinchill
Chinchi llaa
Vega, Diputado por Chiquimula, quienes querían el
con
contrato
trato
perico,
perico , a de generación
generació
ca mbio
cambio enntregar
de energía
de entrega INeléctrica
eléctr
DE. ica de Cham-
r el INDE.
124
 

Privatizaciones

Como este asqueroso chantaje


cha ntaje era a favor de todos
ellos, debería ser visto como una simple estrategia po-
lítica de “un sector que quería lo mejor para el país”:
manejar la energía eléctrica
eléctr ica y apoderarse
apoderarse del INDE.
Telefonía. GUATEL

Cuando entramos al gobierno, nos dimos cuen-


ta que GUATEL era una empresa que debería estar
contribuyendo fuertemente a las finanzas públicas, e
impulsando el desarrollo nacional. Pero cómo lo iba
a hacer, si su desempeño era totalmente ineficiente y
anacrónico, solo teníamos instaladas cerca de ciento
och
ochenta
tal,l, enta
ta mi l líneas
mil
con una lídemanda
neas y de
demand ellasisfecha
el 85%enestaban
a insatisfecha
insat ese momenen la to
momento capi-
de
seiscie
seis cientas
ntas mil
m il líneas.
Era claro que el número de líneas instaladas que
encontramos, era absolutamente insuficiente para
acompañar al país en su crecimiento y mucho menos
para comunicar a las comunidades rurales del país.
Como meta
meta nos propusimos
propusimos insta
i nstalar
lar en el primer
pri mer
año de gobierno
gobierno doscienta
doscientass cincuenta milmi l líneas,
lí neas, meta
esta que logramos ya en el segundo año, es decir en
1992. Esto significó que en dos años instalamos mas
líneas, que las que se habían instalado en la historia
completa de las telecomunicaciones en el país, en un
período cincuenta años.
GUATEL, en el año 1990 sólo dio utilidades por
106 millones de Quetzales anuales. En el primer año
de nuestra administración, año 1991, las utilidades de
GUATEL fueron de 405 millones de Quetzales, es
decir un aumento del 380 380%% , y ya para el año 1992,
1992, las
la s
utilidades
util idades fueron de 542 mi millones
llones de Quetza
Quetzales,les, es de-
cir 510% mas que en el año 1990, último de Cerezo.
125

La guayaba tiene dueño

Así el aporte de GUATEL al Gobierno en 1991 fue


de Q. 182.6 millones de Quetzales y en 1992 fue de
Q.244.1 millones.
Para conseguir una nueva línea, los potenciales
usuarios
usuar ios tenían que esperar mucho
mucho tiempo y pagar
paga r por
ella, hasta ochocientos o mil quetzales, hechos estos
que promo
promovía
víann una gran
g ran corrupció
corr upciónn dentro de la ins-
titución.
Las llamadas internacionales, que deberían ser
una de las principales fuentes de ingreso y por ende
de utilidades, estaba prácticamente en manos priva-
das, en un acto sublime de corrupción, porque las lí-
neas a través de las que se realizaban,
reali zaban, estaban
est aban ubicadas
en
altoscasas de familiares,
funcionarios, amigos,militares
diputados, socios ooqueridas
empleados de
de GUATEL.
El procedimiento era sencillo: cualquier persona
llamaba
lla maba a esa línea “inte
“i nternacional”
rnacional” y pagaba al a l que la
tenía a su cargo. Sin embargo, esas líneas no pagaban
nada a GUATEL por las llamadas internacionales, así
que este era un negocio redondo
redondo para ellos.
el los. Se trataba
trat aba
de sangría brutal para GUATEL, entidad que asumía
los costos y estaba privada de obtener las ganancias
que el tráfico internacional debería dejar.
Hago ver que el tráfico internacional era impor-
tantísimo, pues la cuota que el usuario pagaba por lí-
nea era prácticamente simbólica, 4 quetzales al mes,
es decir casi ochenta centavos de dólar. Muchas ve-
ces comentamos con Ernesto González, Gerente de
GUATEL, si acaso mejor sería no cobrar nada, pues
la admi
ad minist
nistración
ración del cobro
cobro y el correo,
correo, prácticamente
salían
salí an más costosos.
costosos.
En GUATEL como en el INDE, encontramos
una gran burocracia, pues eran instituciones en las
126

Privatizaciones

cuales se podía fácilmente colocar personas que eran


recomendadas
recomendadas por altos
a ltos funcionarios
funcionar ios de gobierno,
gobierno, di-
putados o jefes militares.

Nuestro programa
Nuestro
 
Al tener clara la
l a situación, rápidamente nosnos dimos
di mos
cuenta que para incrementar los ingresos
ing resos era necesar
necesarioio
actuar rápidamente en el manejo de la red interna-
cional, para lo cual se hacía necesario ampliarla. Para
eso, primero había que digitalizarla, porque hasta ese
momento
mome nto se manejaba en en forma ana
a nalógica
lógica lo cual im-
i m-
ponía muchas limitaciones.
Así lo
la, para quecual,
procedimos
proc edimos a ampliar
entramos la redventure”
en un “joint y digitali
dig italizar-
zar-
con
ATT
TT,, MCI y COMSA
COMSAT T; ampli
a mpliamos
amos la esta
estación
ción Terre
Terre--
na Quetzal e instalamos una estación terrena nueva,
seis veces mas grande que la Quetzal a la que llama-
mos Hezriel y la ubicamos en la avenida
avenida La Reform
Reforma. a.
Como referencia, quiero contar que esa estación nos
costó, CIENTO CINCUENTAMIL DÓLARES, lo
que era un contraste inmenso,
i nmenso, comparado con el cos-
to de la estación
QUINCE MILLONES
terrenaDE Quetzal,
DÓLARES.
que había costado
De las estaciones terrestres subíamos a los saté-
lites de INTERSAT, a quienes les pagábamos por el
tráfico, tanto de voz como de datos. Al tener las dos
estaciones operativas, vimos que el tráfico aumentó
exponencialmente y que el pago de los servicios de
tráff ico se
trá se hacía cada vez mayor.
mayor.
Revisando
Re visando un día
d ía esta informació
in formación,
n, me llamaron
lla maron
la atención las cifras y entonces llamé a Neto Gon-
zález, le manifesté mi sorpresa sobre la subida de ese
renglón y le pregunté cómo podríamos bajarlo. Me
127

La guayaba tiene dueño

contestó que la única forma sería que compráramos


parte de un satélite.
s atélite. Le solicité que
que se informara
informa ra sobre
cómo podríamos hacer para comprarlo y cuanto nos
costaría.
costar ía. Dijo que
que aprovec
aprovechar
haría
ía que en dos días
día s saldría
sald ría
para Acapulco, México a una reunión de la Union
Internacional de Telecomunicaciones y que allí haría
la diligencia.
A los tres días
día s y ya de noch
noche,
e, recibo
recibo una llam
l lamada
ada de
Neto,, en la que me decía que un “transponder” (parte
Neto (par te
de un satélite), costaba alrededor de tres millones de
Dólares; pero el problema era que no había ninguno
disponible; que si queríamos, los de INTELSAT, que
en ese momento estaban sentados frente a él, le ofre-
cían —que podr ían reubicar
podrían
 —Compremos
Compremos unolosy adjudicár
dos, pues adjudicárnoslo
vamos noslo.. ar, le
a necesitar,
necesit
dije.
 —¿Est
 —¿ Estás
ás seguro
seg uro?? –respondió.
–respond ió.
 —Dale
 —Da le viaje, Neto. No tengás
tengá s miedo.
m iedo.
Al entregarnos los “transponders”, empezamos a
manejar todo nuestro tráfico de voz y de datos a tra-
vés de ellos. El primero, lo llenamos a los seis meses
de operar y el segundo también muy pronto. Cuando
Neto —¿meQue
comentaba
 —¿Que ta l que esto,
tal no tesolo me decía:
hubiera
hubiera hecho caso?
hecho
La inversión en la estación terrena se recuperó
en un mes y la de los satélites se recuperó en no más
de tres meses. Ante esto, yo pensaba: ¿Cómo carajos
quieren que vendamos esta empresa, si las utilidades
proyectadas
pro yectadas para el año
a ño con esos simples ajustes, ya se
estimaban
esti maban en más de quinquinien
ientos
tos millones
mi llones de quetzales;
es decir: cien millones
mi llones de dólares. Para ubicar
ubicarnos,
nos, esto
equivalía al 50% del déficit presupuestario del último
año de Vinicio
Vin icio Cerezo
Cerezo Arévalo.
128

Privatizaciones

Mientras tanto, también estábamos trabajando


en la ampliación de la red externa (fibra óptica, cable
coaxial y línea de cobre); y en la red interna (centros
de conmutación, conocidas como centrales telefóni-
cas),
cas ), con ATT,
ATT, Erickson,
Er ickson, MCI, Telefónica
Telefónica de Españ
E spaña,
a,
Simex, en la capita
capital.l. En el interior del país lo hacíamos
con la empresa italiana Italtel.
Nuestra meta era triplicar, para finales del 93, el
número de líneas que
GUATEL y sus antecesores, habían instalado en
cincuenta años. Entra
Entramos mos de ininmediato
mediato en una franca
 y di
dinánám
m ica tatarea
rea de in insta
stalación
lación par
paraa l lega
legarr a la
lass qui-
nientas
nien tas mil
mi l lineas.
Con ATT, MCI y COMSAT, la negociación
un tanto peculiar, porque debido a que no teníamos fue
suficien
suf iciente
te dinero
d inero para inversi
inversión,
ón, entonces
entonces se les pidió
a ellos que consiguieran sus propios recursos. De esa
forma, GUATEL les pagaría por un sistema de “lea-
sing”, a 10 años plazo, para lo cual se les otorgaron
soloo cartas
sol cart as bancarias
bancaria s de garantía de pago.
pago.
En nuestro segundo año de operación, ya GUA-
TEL dio más de setecientos millones de quetzales de
utilidad. Ese año pedí
ciall para entregarle
cia a losque se hiciera
res deun
t rabajadores
trabajado GUacto
GUA ATELespe-
TEL,, el
equivalente al 5% de esas
esa s utilidades
uti lidades que les correspon-
día de acuerdo con la ley.
Fue ese, indiscutiblemente, uno de los días más
satisfactorios que el Gobierno me proporcionó. Re-
cuerdo la cara de un viejo barrendero, que duran-
te años trabajó en la institución. Cuando recibió su
cheque de dividendos, por el equivalente a veintitrés
meses de salario, al señor se le llenaron los ojos de
lágri
lág rima
mas,
s, no lo podía creer,
creer, nunca soñó
soñó con tener
tener una
cantidad así a su entera disposición. De inmediato el
129

La guayaba tiene dueño

ag ua en los ojos se le volvió


agua volvió una catarata
cata rata y el llanto
l lanto no
se hizo esperar
e sperar..
Cada empleado de GUATEL recibió su cheque.
Algo no imaginable, pues si mal no recuerdo, el que
menos recibió fueron doce veces su sueldo, ya que en
la distribución se dio mayor número de salarios a los
de menor ingreso y se fue reduciendo el monto a los
que tenían mayores salarios. Lo cierto es que todos
quedaron felices y yo, aun más feliz y emocionado.
Pero como decía el Quijote a Sancho, “cosas ve-
redes, Sancho amigo, que harán
har án hablar
h ablar las
la s piedras”.
piedras”.
Hoy veo cuán Quijote era yo. Cada vez que le
comentaba a alguno de los dueños o a sus adláteres so-
bre los logros de GUATEL, reaccionaban mal. Siem-
pre estaban diciendo que el Estado era ineficiente e
incapaz, que para lograr eficiencia debía pasarse esa
empresa a la iniciativa privada. Yo seguía sin enten-
derlos.
La telefonía rural

Ante los resultados muy satisfactorios de la em-


presa, entoncesrural
entonces
var telefonía decidimos hacer
a lugares un ejercicio
ejercici
remotos o pararural.
del área lle-
Cuando Ernesto González me presentó un bosquejo
del proyecto y el costo, ciertamente me parecía que
este era alto por teléfono, puesto que había que ins-
talar un panel solar con su batería y con su antena
satelital al teléfono. Toda la lógica indicaba que era
una inversión no rentable; sin embargo, le dije que lo
hiciéramos aunque esa telefonía fuera subsidiada por
la telefonía urbana, y así iniciamos el programa.
Se empezaron a instalar los llamados Teléfonos
Comunitarios y empezaron a funcionar. Dos o tres
130

Privatizaciones

meses después, recibo una llamada de Neto Gonzá-


lez y me dice que teníamos una sorpresa: los teléfo-
nos rurales estaban facturando mucho más de lo que
habíamos considerado, porque recibían muchísimas
llamadas de los Estados Unidos, provenientes de los
compatriotas emigrantes; y que si eso seguía así, la
telefonía rural se auto sustentaría y que hasta podría
dejar algún beneficio.
Me alegré muchísimo con la información, por-
que estábamos cumpliendo con con una función social de
la empresa y nos estaba resultando muy bien. Pensa-
ba, para mis adentros, que esa era otra razón para no
privatizar, porque con los problemas que la telefonía
rural presenta, no iba a existir compañía privada que
quisiera afrontarlos con una utilidad marginal. Por
lógica, cualquier empresa privada invierte en aquello
que le da mayor rentabil
rentabilidad.
idad.
El probl
problema
ema

Algunos grupos de poder económico se habían


saboreado con la idea de la privatización, basados en
mi
mis
tors de
actuac
actuacion
iones
energíaescomo
y decisiones para mejorar
mejSe
el de telefonía. orarsumaba
ta nto ela esto
tanto sec-
sec-
que no me pareció adecuada la propuesta de ley pre-
sentada por la Comisión que nombré para estudiar el
tema. Claramente, y en una forma atrevida, el sector
privado se había “despachado con la cuchara grande”,
pues sacaban al Ejecutivo, al Legislativo e incluso a la
misma Contraloría General de Cuentas, de todos los
mecanismos de privatización
privati zación que proponían.
proponían.
cómoAlserán
ver esto yo meydije:
las fiestas”, como“Sidecimos
así sonenlasbuen
vísperas,
cha-
pín: Enseñaron muy pronto el cobre , Por lo menos

131

La guayaba tiene dueño

para mí, ellos querían ser, en aras de una supuesta


transparencia, los que manejaran el proceso de priva-
tización. Por supuesto, solo me reí y engaveté la pro-
puesta,apues
entrar pu
considerarla.
es era tan cínica
cí nica que ni siquiera valía la pena
Esto provocó la ira de sus redactores y decidie-
ron, con gran alarde, retirarse en bloque, manifestan-
do que el sector privado renunciaba a la Comisión de
Privatización, lo cual para mí fue como un caramelo.
A decir verdad, yo no pensaba que deberíamos pri-
vatizar, menos en ese momento en que las empresas
estaban en franca
f ranca recuperación
recuperación y que su valor de mer-
cado no sería nada
nad a atractivo
atract ivo.. Sin embargo, después, y
al margen de toda consideración social, Álvaro Arzú
las privatizó y todo lo demás es historia.
El único que puede juzgar hoy los resultados es
el propio pueblo quien paga las tarifas y también los
que tenemos conciencia y sabemos que el país se des-
capitalizó
capital izó y se empobreció.
empobreció. Anualmente
Anual mente,, la economía
guatemalteca sufre una sangría cuando las empresas
que se vieron favorecidas por la privatización reciben
sus dividendos, que dicho sea de paso, no son pocos.
132

CAPÍTULO VI
El retorno de los refugiados
 y la paz

Como relaté anteriormente, estaba siempre muy


prese
presente
nte en
plazados. M mi
Mi mente el tema
i experiencia comodepresidente
los refugiados
presiderefug
nteiados y des-
del Conse-
 jo de Est
Estado,
ado, en 1983, al visitar
visit ar los campos de retorno
de los desplazados, indiscutible
ind iscutible me marcó de por vida.
Cualquier descripción dantesca al a l respecto se quedaba
quedaba
pequeña. Siempre pensé que si en la tierra estuviera
el infierno, sería algo como eso, en términos de la
situación, desgracia e inseguridad en la que los des-
plazados regresaban de la montaña y la poca capacidad
del
que gobierno paradramát
político, era
político, atender
dra este problema,
máticamente
icamente ano.el cual más
humano.
hum
Pedía que se me diera un informe sobre la situa-
ción de los
los guatemaltecos
gu atemaltecos en los campos de refugiados,
refug iados,
porque
porq ue ya estaba cansado
can sado de que se dijera que eran
eran una
u na
extensión de las Comunidades en Resistencia, que
eran grupos comunistas, que prevalecía la corrupción
de parte de las autoridades mexicanas que manejaban
el programa, que cualquier política de retorno forta-
lecería a la guerrilla, que no existían condiciones en
el país para aceptar de regreso a 35,000 guerrilleros.
En fin, la cantidad de argumentos mencionados eran

La guayaba tiene dueño

pocos, comparados
comparados con la realidad
real idad de las personas
persona s que
vivían en esos campos de refugiados.
Se decidió enviar a unas personas para que tra-
 jeran
nuncaun reportee de
report
regresaron, lo la
quesitu
situación
ación
fue prevaleciente.
un argumento másEstos
para
que se argumentara
argumentar a que lo que que se hallaba
hal laba del otro lado
de la frontera guatemalteca era un santuario de la in-
surgencia, más que campos de refugiados.
Sin embargo,
emba rgo, yo me paré (como “aprendiz
“aprendiz de dic-
d ic-
tador”,, según
tador” def inen los dueños y sus mercenar
segú n me definen mercenarios)ios)
 y ma
maninifesté
festé que para m í, resolver el problema de los
refugiados
refug iados y desplazados no era una simple
si mple acción
acción po-
lítica sino, fundamental
funda mentalmente
mente,, una acción patr
patriótica
iótica y
cristianamente humanitaria. Declaré que mi gobier-
no y yo seguiríamos adelante. Gracias a Dios que de
esta política, como era de ranchería, no se enteraron
los dueños, porque lo que estábamos haciendo era un
problema ubicado a cuatrocientos kilómetros de sus
privilegios. Por eso sus radares no lo registraron.
Di instrucciones al ingeniero Sergio Mollinedo,
un hombre de mucha sensibilidad social y conoce-
dor de la situación agraria del país, quien era, en mi
gobierno, Director de la CEAR, una entidad creada
para coordinar la repatriación de las poblaciones de
refugiados que estaban en México, al ingeniero Enri-
que Ortega, Presidente del Instituto de Transforma-
ción Agrar
Agr aria
ia (INTA
( INTA).). También
También involucré
involucré a Bernardo
Bern ardo
Neumann, un hombre y amigo extraordinario, judío
practicante y sensible en grado sumo a las violacio-
nes a los derechos humanos, quien siempre me de-
cía que la historia de sufrimiento de sus antepasados
en las persecuciones
cumplir lo comprometía
con entusiasmo y dedicación,ylalofunción
motivaba
quea
 yo le había dado en m i gobierno, él actactuaba
uaba como

134

El retorno de los refugiados y la paz

personero del Presidente en materia de derechos hu-


manos y Presidente de la Comisión Presidencial para
la Defensa de los Derechos Humanos. Coordinaban
estenombré
 yo proceso,Direc
contor
DirectorÁlvaro ColomNaciona
del Fondo Caballeros,
Nacional l paraa laquien
Paz
(FONAPAZ
(FONAP AZ)) y posteriormente
poster iormente,, ya en el proceso mis- m is-
mo, con Francisco Perdomo, “Paco”, como Ministro
de Gobernación.
Abrimos
Abri mos un proc
proceso
eso de acercamiento
acercam iento,, después de
negociación con los representantes de las comisiones
permanen
perma nentes
tes de refugiados guatema
g uatemaltecos
ltecos en México,
México,
proceso que fue conducido por parte del gobierno g obierno por
la Comisión Nacional de Repatriados, Refugiados y
Desplazados (CEAR).
Los acuerdos
acuerdos estaban encam
encaminados
inados a garantiza
garant izarr los
los
derechos de los retornados, fundamentalmente el de-
rechoo a la vida,
rech v ida, a la libre organización,
organ ización, a la propiedad
propiedad
de la tierra, a su seguridad, y al reconocimiento del
Estado respecto de su identidad. Esto último, porque
muchos
muc hos de ellos no tenían
ten ían ni un simple
si mple papel
papel en el que
constara quiénes eran, ni siquiera cómo se llamaban.
Si no tenían eso, que era elemental, mucho menos
iban a tener papeles
papeles sobre las tierra
tierrass que abandonaron
por el conflicto y que ahora estaban enmontadas o
bien,
bien, ocupadas
ocupada s por invasores
i nvasores..
La problemática
problemática era grande,
g rande, pero una de las cosas
que me animaron a seguir fue constatar, en las re-
uniones con los representantes de las comisiones de
refugiados,
refug iados, que ellos,
ellos, sincera
si ncera y correcta
correctamente
mente,, estaban
representando a sus compañeros; que eran sinceros en
los temores
temores que planteaban y que todas sus exigencias exigencia s
teníaAlgunas
tenían
n una sustentación
personas enlógica y justa.
justa. se manifestaban
el Ejército,
preocupados, pues dentro de lo que se negociaba era

135

La guayaba tiene dueño

que no habría presencia militar en los lugares en que


se produjeran los asentamientos y que las autoridades
serían básicamente civiles. Esto, que principió siendo
un argumento
cuando empede
se empezaron enfrentamiento,
zaron a dar las se fue
la s primeras disipando
repatr
repatriacion
iaciones
es
 y los m i lit
litares
ares en la zona se empeza
empezaron
ron a da
darr cuenta
de que no había diferencia significativa entre los que
estaban regresando
reg resando de México con con los que habían ba-
 jado de la montañ
mont aña.a.
El 13 de noviembre de 1991 firmé como Presi-
dente de la República una Carta de Entendimiento
con la Alta Comisionada de la Naciones Unidas para
los base,
de Refugiados,
Refug iados,
con Sadako Ogata.
conjuntamente
juntamente Este documento
con la Declaración sirvió
sir viól
Unilatera
Unilateral
de mi
m i Gobierno expresad
ex presadaa en el punto 7.4
7.4 sobre Dere-
Dere-
chos Huma
Humanosnos (del 7 de agosto de 1992,
1992, en el marco
m arco
de las negociaciones con la URNG)
UR NG) para que después
el Gobierno suscribiera con los refugiados el acuerdo
que finalmente se firmó en octubre de 1992.
Por su valor histórico, me permito reproducir
fragmentos del discurso que pronuncié el 8 de octu-
bre de 1992, día en que se firmó el Acuerdo entre el
Gobierno de Guatemala, representado por la CEAR,
 y las
l as Com
Comisiones
isiones Permanentes
Perm anentes de Refugi
Refu giados
ados Guate-
Gu ate-
maltecos en México. (El discurso fue improvisado y
lo que se reproduc
reproducee es una
un a trascr
tr ascripció
ipción):
n):
“Estamos reunidos esta mañana, en el seno
de la Comisión Nacional de Reconciliación.
Para mí,
m í, en lo personal,
persona l, esto que hoy acontece
acontece
tiene gran significación; es como un primer
paso en la culminación de grandes esfuerzos,
por lo que no
no vengo
ni acusaciones. a hacer larecrimi
Represento recri minaciones,
unidadnaciones,
nacio-
nal por mandato constitucional y la soberana

136

El retorno de los refugiados y la paz

voluntad
voluntad del pueblo,
pueblo, expresada
expresada en las ur
urnas
nas
Lo único que quiero manifestar a quienes
hoy están sentados en esta mesa, es lo que in-
diqué a mis hermanos
terminamos la discusiónguatemaltecos,
del acuerdo decuando
Oslo:
‘nuestro
‘nuestross brazos
braz os están
est án abiertos’
abier tos’,, y hoy me siento
honrado y gustoso de poderlos recibir, como
guatemaltecos que se reintegran a su país.
Es una obligación de justicia que nos co-
rresponde y la hemos encarado con dignidad
 y valentía.
valent ía.
Bienvenidos a Guatemala, a esta tierra que
va logrando
gracias a que un nuevo un
hacemos estándar
esfuerzode como
dignidad,
go-
bierno por respetar y hacer que se nos respe-
te.
El acto de hoy es singular, porque se logró
un acuerdo de repatriación entre guatemalte-
cos (…)
(…) con el esfuerzo fundamenta
fu ndamentall de nues-
tro pueblo
pueblo..
Las propiedades que hemos adquirido, los
recursos puestos a disposición de los refugia-
dos, son fruto de trabajo y esfuerzo de todos
los guatemaltecos.
repatriac ión sui generis, diferente a las
Una repatriación
demás, una
un a repatr
repatriación
iación que
que arranca
arra nca de la pro-
funda convicción y deseo de que, en nuestro
país demos pasos fundamentales para encon-
trar la paz (…), la paz que se construye con
hechos, y lo que sucede hoy lo garantiza.
Quieroo agradec
Quier ag radecer
er a COMA
COMAR, R, a CEAR,
CEA R, al
ACNUR
CNU R ypor
paciencia
paciencia el trabajo
tesonera que han
que
actitud, ha stareali
hastarealograr
lizado
zado
logra con
r acer-
camientos sucesivos; a la instancia mediadora,

137

La guayaba tiene dueño

 y muy par
particu
ticula
larr mente a su
s u presidente, Mon-
señor Jorge Mario Ávila; (…)a los países que
sirvieron como parte del grupo de apoyo: a
México
México, , Canadá,
ComisionadoCanaddeá, las
Francia y Suecia;
Naciones Unidas(…)para
al Alto
A los
lto
Desplazados y Refugiados;
Refugiados ; y a la Conferencia
Conferencia
Episcopal
Episco pal de la Iglesia
Ig lesia Católica, a las diferentes
d iferentes
Iglesias Evangélicas aquí representadas, por el
trabajo que han hecho.
Todos estos
est os esfuerzos
esf uerzos son los que hoy hacen
posible que demos un paso fundamental en la
pacificación de nuestro país, generando con-
diciones de justicia
de repatriados, y equidad
refugiados pa ra la atenci
para
y desplazaos.atención
ón
No sería justo si no rindiera
r indiera homenaje
homenaje a una
un a
persona, Monseñor Rodolfo Quezada Toru-
ño; y a un organismo que nos sirve el día de
hoyy de anfitriona
ho anf itriona y de marco
ma rco para este evento
evento
histórico: la Comisión Nacional de Reconci-
liación (…) integrada por Monseñor Rodolfo
Quezada Toruño, Monseñor Juan Gerardi, la
periodista Tere Bolaños de Zarco, el Coronel
Francisco Luis Gordillo, el licenciado Mario
Permuth, el exvicepresidente Roberto Carpio
Nicole, el ingeniero Leopoldo Sandoval y el
suscrito, que hoy como Presidente de la Re-
pública concurro a este acto (…)
Hoyy, al
Ho a l haber fir
f irmado,
mado, lo hago com
comoo repre-
sentante de la unidad nacional, como testigo
de calidad,
cal idad, porque esta declaración constit
constituye
uye
un público reconocimiento a la voluntad del
pueblo guatemalteco
pueblo guatema lteco por
por la paz.
pa z.
Treinta años han sido suficientes para de-
mostrar, queridos hermanos,
herma nos, que hoy
hoy empiezan

138

El retorno de los refugiados y la paz

a regresar a su país, que este conflicto no ha


dejado nada positivo, solo muerte, desolación
 y angust
ang ustia.
ia. Ustedes lo han dicho
d icho en su discur-
discu r-
so y nosotros
nosotros lo ratif
rati f icamos plenamente.
plenamente.
Mi gobierno manifiesta, una vez más, la
voluntad
vo luntad de continuar en el camino
cam ino de buscar
la paz. Mi
M i gobierno
gobierno establece, una vez más, su
política clara y definida de reconciliación.
Más de mil quinientos refugiados han en-
trado este año, debidamente registrados, y
otros mil quinientos por su propia cuenta.
Tres mil guatemaltecos han retornado al país
 ycomunidades
están
est án reincor
reincorporados,
y porados, con di
a Dios gracias,digghasta
nidad,
nid ad,
esteenmo-
sus
mento nadie puede señalar violaciones a sus
derechos
derec hos humanos,
huma nos, ni ha habido actos reñidos
con la legislación o el correcto ejercicio del
poder,, al
poder a l que mi gobie
gobierno
rno está
est á obligado.
Espero que la repatriación,
repatr iación, que hoy empieza
en cantidades mayor
mayores,
es, sea un ejemp
ejemplo lo para el
mundo entero. Pero esto es responsabil
responsa bilidad
idad de
todos los guatemaltecos. No podemos echar
toda la responsabilidad
responsabil idad al gobierno.
Mi gobierno ratifica que la verificación
internacional, por parte de las Naciones Uni-
das,
da s, siempre será bienvenida
bienvenida en el campo de la la
reincorporación de los refugiados y de cual-
quiera de los acuerdos a que lleguemos con la
insurgencia para poner fin al conflicto arma-
do.
Creemos que la paz está en plena cons
trucción. No creemos que la paz deba espe-
rar a construirse hasta cuando se llegue a un
acuerdo con la insurgencia. Mi gobierno ha

139

La guayaba tiene dueño

mostrado grande
gra nde y clara amplitud
amplit ud en el
el proce-
proce-
so de reconciliación. No son las palabras sino
los hechos los que hablan.
Hemos aceptado la propuesta
propuest a del señor con-
ciliador en el tema de los derechos humanos.
Hace tres meses que esperamos una respuesta
categórica de la URNG
U RNG y este es el momento
momento
que no la tenemos.
Es lamentable que ni la disposición del go-
bierno por firmar de inmediato un tratado
de derechos humanos, ni la de globalizar el
temario, para resolver, de una vez por todas,
la problemática
tomadas de la luchay con
en consideración interna, han sido
seriedad, por
la insurgencia.
Han preferido desgastarse en temas de in-
terés estratégico para ellos que en aquellos de
interés para el pueblo
pueblo de Guatemala.
Guatema la.
Finalmente,
Fina lmente, quiero ma
mani
nifestar
festar nuestro des-
acuerdo, en que nono ha sido tomada seria
ser iamente
mente
en cuenta la propuesta del gobierno de la Re-
pública dela pedir
empiece a las de
redacción Naciones Unidas que
un documento
permita, de inmediato, sentar las bases para
la desarticulación de los frentes guerrilleros y
plantear los mecanismos de verificación para
la finalización del conflicto.
Repito, con toda sinceridad, entereza y
el aval
aval moral que me dan mis m is actos, como Co-
mandante General del Ejército y Presidente
Constitucional de la República
República de Guatemala,
Guatemal a,
que estamos listos para firmar la paz y dar las
garantías que todos los guatemaltecos necesi-
tan para vivir y que no nos eximimos de que

140

El retorno de los refugiados y la paz

esa paz y esas garantías que hoy públicamente


doy a mi país y a la comunidad internacional,
sean verificadas con todos los instrumentos
que las Naciones Unidas deseen.
Las acusaciones en la comunidad interna-
cional no nos van a llevar más que a agudizar
nuestras diferencias.
d iferencias. Lo que el pueblo
pueblo de Gua-
temala quiere, y hoy queda más que manifes-
tado con este gesto de buena voluntad y mu-
tua confianza que estamos presenciando esta
mañana,
mañ ana, es la paz y la solución
solución a los problemas
problemas
del país.
dosQueridos hermanosmuchísimas
a su Guatemala, refugiados:gracias
bienveni-
por
ese corazón patriótico y esa fe que ustedes han
puesto en estos guatemaltecos
guatema ltecos queque hoy les da-
mos un abrazo fraterna
fraternal.l. La confianza
conf ianza en que
 juntos podremos
pod remos construi
constr uirr un futu
f uturo
ro mejor.
mejor.
Quiero pues, en nombre del Estado gua-
temalteco, pedir que un representante de las
comisiones permanentes venga acá, para en-
tregarle,
ciona
cional, estcomo
l, esta representante
a copia de laque
del documento
del unidad na-
debemos
guarda
gu ardarr todos como testitestimonio
monio fiel
f iel de nuestra
nuestra
voluntad
vo luntad y comp
compromisos.
romisos.
¡Muchísimas gracias! Que el Señor nos
bendiga, nos dé coraje y nos permita seguir
adelante en esta tarea. Que le dé animo a
aquellos que están en las tareas de la recons-
trucción y del acercamiento, y que podamos
muy pronto firmar el acuerdo para una paz
f ir
irme
me y duradera”.
duradera”.
En este momento ya me sentía más seguro, pues

141

La guayaba tiene dueño

los tres mil refugiados que regresaron estaban siendo


atendidos por nosotros, sin mayores incidentes. Ha-
bíamos tomado cierta experiencia de los problemas
que afrontaríamos, el más importante de todos, el
reconocimiento de la identidad y registro de todos
aquellos que no tenían ningún documento que los
acreditara (ni siquiera algo donde constara cómo se
llamaban), mucho menos documentos que certifica-
ran la propiedad de la tierra, si es que tenían alguna
parcela, que por las circunstancias habían sido obliga-
dos a abandonar.
A través del programa de adquisición de tierras
paratenía
 ya tenlaíamos
reubicación
mos compradde
compradas losásrefugiados
as más
m my ildesplazados,
de veinte mil hectáreas
hectá reas y
FONAPAZ se hallaba conceptualizando los progra-
mas de ayuda.
Iniciamos el programa de repatriación, el cual se
defin
def inió
ió como
como de carácter
car ácter voluntar
voluntario
io.. Pensábamos
Pensábamos que
se daría lentamente, pero, como en este caso, ya los
tres mil
m il que viniero
vin ieronn primero daban testimonio
testi monio de su
situación.
situ ación. Entonces sucedió lo m ismo que con con los des-
plazados, que cuando
de las condiciones
condicion recibían
es existentes parainformación
retorn ar, losrespecto
retornar, gr upos
grupos
iban haciéndose cada vez mayores.
Tuvimos que formar campos temporales en lu-
gares fronterizos para realizar los primeros trámites
administrativos, y desarrollar algún trabajo muy pre-
liminar de carácter social. Nuestro programa era que,
desde esos campamentos, cada grupo fuera llevado
directamente al lugar en el que sería asentado de ma
nera definitiva
defi nitiva y que, básicamente,
básicamente, eran sus lugares de
origen.
Sin embargo, algunos
alg unos de los grupos de acompaña-
acompaña-
miento siguiero
sigu ieronn presionando
presionando para que los refugiados
refug iados

142

El retorno de los refugiados y la paz

entraran por la costa del Pacífico guatemalteco y que


se hiciera un recorrido
recorrido hasta
hast a la capita
capital,l, y después
después hasta
Cobán, en la Alta Verapaz, y de allí, a sus lugares de
origen.
La presión
presión internacional
internaciona l no se hizo esperar, y da-
ban apoyo
apoyo a esta in iniciativa
iciativa que encabezaba
encabezaba Rigoberto
R igoberto
Menchú.
Mench ú. Yo
Yo me reuní
reun í con embajadores, les mostré fo- fo -
tos del tránsito que estos grupos tendrían que seguir.
Nosotros considerábamos sumamente difícil para el
gobierno montar toda la logística; sobre todo por la
situación de salud de mujeres y niños, quienes ten-
drían
dr ían que transitar
transit ar y vivir
vivi r en condicio
condiciones nes críticas, por
lo menos,
menos, durante dos semanas.
semana s.
Pero mi verdadera angustia era que algún grupo
de los que estaba en contra de esta acción pudiera to-
mar ventaja y provocara
provocara un atentado que podría daña d añarr
en forma irreparable el trabajo humanitario que de
buena
bue na intención estábamos desarrolla
desar rollando
ndo..
Tuve una conversación muy larga con Christian
Tomuschat, Relator sobre la Situación de los Dere-
chos Humanos en Guatemala, designado por Nacio-
nes
mis Unidas.
temores,Lele hice
puse ver los problemas
un helicóptero paray. que
sobrevisitara
todo.
los lugares y que recorriera el tramo de caminos que
tendrían que recorrer las familias de Cobán Alta Ve-
rapaz, al
a l norte del Quiché.
Tomusc
omuschat
hat hizo
h izo su trabajo
t rabajo y llegó a la Casa Presi-
dencial un
u n sábado en la noche,
noche, y me dijo:
d ijo:
 —Presidente, estoy de acuerdo con usted usted,, pero
¿qué hacemos?
 —Primero,
 —Pr imero, si esto se real
realiz
izaa –le respondí– me re-
levo de toda responsabilidad de lo que pueda suceder.
Esto no quiere decir que no les vaya a dar todo el
apoyoo de seguridad
apoy segur idad que sea necesario
necesario y aun más,
m ás, si es

143

La guayaba tiene dueño

posible. En segundo
posible. segu ndo lugar, habría
habrí a que ver
ver si los países
pa íses
amigos, que nos han ayudado y que han manifestado
su apoyo
apoyo a esa idea, estaría
esta ríann dispues
di spuestos
tos a colaborar en
establecer un puente aéreo de Cobán a Playa Grande,
en Quiché
Qu iché y así hacer
h acer posible la aventura.
aventu ra. Tercero,
Tercero, que
no sea más que un grupo y no todos los que hagan el
recorrido, así se logra el efecto de la marcha, pero no
afectamos
afecta mos a todos y hacemos más manejabl
m anejablee el asunto.
Por último,
últi mo, usted es el fiduciario
f iduciario de lo que yo le estoyestoy
manifestando y me exime de toda responsabilidad si
algo llegara
l legara a pasar.
pasar.
Tomuschat sonrió y me dijo que le parecían ade-
cuadas mis observaciones y que él trabajaría para que
así se hiciera.
Prácticamente todo lo planteado fue aceptado y
así se hizo. Gracias a Dios la marcha se llevó a cabo
en forma ordenada y sin incidentes. Países amigos
colaboraron con el puente aéreo y lo único fue que,
durante los casi diez
d iez días que duraba el traslado,
tra slado, yo no
no
tenía paz.
pa z. Constanteme
Consta ntemente nte preguntaba cómo iba todo
 y solicitaba
sol icitaba que se me infor
i nforma
marara el desenvo
de senvolvilvim
m iento
de
veni
ve cada
r de actividad,
nir cua lquier pues
cualquier lado: sabía
de losque
queun atentado
estaba a fav podría
f avor
or o de
los que estaba en contra.
contra. Cualquier
Cua lquier grupo podría
podr ía usar
usa r
esto para adversar el proceso de paz y, por supuesto,
al gobierno.
Logramos
Logr amos la repatriación,
repatr iación, los ubicamos
ubicamos con nues-
nues-
tros propios recursos, cumplimos con todos nuestros
compromisos. Lo que resulta triste es que nunca los
dueños preguntaron en qué podían ayudar, porque
como
vez ya lo dije,
pensaban: este la
“Que problema estaba
ranchería se lasmuy lejos,por
arregle y tal

sola”.

144

El retorno de los refugiados y la paz

Para mí, este programa sin lugar a dudas, cons-


tituyó uno de los retos más grandes que tuve como
Presidente;
Presiden
más te; y quizá
íntimas. qui zá unasorprendente
Resulta de las
la s satisfaccion
satisf acciones
cómoeslos
personales
críticos
de mi gobierno nunca mencionan este programa. Sin
embargo, es evidente que sí hacen monografías com-
pletas de todos aquellos casos en los que los intereses
directos de los dueños est
 están
án compr
comprometidos.
ometidos.
Cuando en algunos
alg unos ocasiones he he manifestado
man ifestado que
la conciencia de algunos de los poderosos de mi país
esta cauterizada, me refiero exactamente a situacio-
nes como esta, en que la miseria humana, el dolor,
el hambre, la marginalidad del desarrollo, no figuran
en la agenda de los que lo tienen todo, porque están
seguros de que elel país está
est á organizado
organ izado por ellos y para
ellos.
145

La guayaba tiene dueño

Inter vención ante la Asamblea General


Intervención Genera l de las Naciones Unidas, en enero de
1993, en la que tuve el honor histórico
histór ico de leer la declaración
declar ación que, en acuer-
do unánime,
unán ime, habíamos redactado todos los dirigentes del país, por una paz
pronta, justa
just a y duradera. Con su presencia en aquel imponente auditorio,
auditor io, se
avalaba la decisión del pueblo de Guatemala.
146

El retorno de los refugiados y la paz

Esta fotografía
fotograf ía fue tomada durante
dura nte la Reunión de los
los Partidos Políticos, con
con
la URNG,
UR NG, en El Escorial, España en el años 1990, yo participé en ella como
Miembro de la Comisión Nacional de Reconciliac
Reconciliación
ión CNR.
A la izquierda está Rodrigo Astur
A sturias,
ias, conocido como
como Gaspar Ilóm, seudó-
nimo con el cual él se identif
identif icaba en el
el movimiento guerrillero.
guerri llero.
A Rodrigo lo conocía desde niño, pues yo visitaba la casa de sus primos,
Gonzalo y Pedro Asturias Montenegro, hijos de Don Maco y doña Teco,
quienes residían
su hermano en la casa
y siempre vecina a la
lo recordaré,
lo tía las
pues Lita, consequien
ca sas
casas vivía Rodrigo
comunicaban unya
por una
pequeña puerta.
Loli era el sobrenombre que familiarmente se le daba, el era mayor que yo,
 y por un tiem
tiempo,
po, fue
f ue el cu
cuidad
idador
or del
d el bus
bu s escol
e scolar
ar en el que yo me iba,
ib a, pero
p ero
como yo era algo inquieto y no pasaba desapercibido, muchas veces me
ordenaba, “vos Serrano sentate aquí cerca de mi para controlarte”.
Rodrigo, era hijo de Miguel Ángel Asturia Ast urias,
s, Premio Nobel de Literatura,
Literatura,
muy amigo y compañero de mi padre, a el le decían Moyas, quien cuando
esporádicamente visitaba Guatemal
Guatemala, a, visitaba a sus amigos, llegó
l legó así una que
otra vez a almorzar a mi casa, y así fue como yo lo conocí.
A la derecha, está Mario
Mar io Sandoval Alarcón, liberacio
l iberacionista
nista que había entrado
con Castillo
Castil lo Armas
Ar mas en 1954.
1954. Mario
Mar io era el líder de la derecha beligerante del
país, fundador
fund ador del MLN, prácticamente el barco insignia de la l a lucha ideoló-
ideoló-
gica y efectivavivían
Los Sandoval contraaeltres
contra comunismo
cuadras dey mi
la guerrilla
guerri
casa, lla
mi en Guatemal
Guatemala.
nana, a. que me
la Rome,
cuidó desde que nací, había
habí a trabajado en esa casa
cas a por muchos años, y cuando
cua ndo
me sacaba a pasear, iba a hacer visita donde los Sandoval, así as í que para mi,
m i, era
muy familiar
famil iar llegar a esa casa y ser consentido por Mila y Aida, las hermanas
herm anas

147

La guayaba tiene dueño

de Armando y del Mico como le decían a Mario. Muchas veces, me tocaba


ir dos veces en un mismo día, pues el doctor Fernando Sandoval, padre de
ellos, era amigo de mi papa, y muchas veces cuando daba paseos con él,
pasaba a verlo, y de paso hacer algo de política.
Para a reunión
la importancia
importa de que
ncia de El Escorial,
Escoria l, yo
él fuera
él a lavisité personalmente
reunión guerrailla
con la guerril Mario
la y mey dijo
le hice ver
”Mirá
 Jorgito,
 Jorg ito, ya hay
h ay que ponerle
pone rle f in a esto,
e sto, sí voy, solo quisier
qu isieraa que me acompa
ac ompa--
ñara mi sobrino Carlos Rivers”. Siempre admiré este gesto de Mario, pues
para mi era un salvavidas,
sa lvavidas, pero para el país era, ni mas ni n i menos, un mensaje
determinante
determina nte y categórico.
categórico. Corriendo
Corr iendo,, al salir,
sa lir, llamé
ll amé a Monseñor Quezada
Quezada
Toru
oruño,
ño, a Tere
Tere de Zarco para
pa ra darles
da rles la excelente noticia,
notic ia, y me recuerdo que
ella me dijo, aunque me tenga que robar la plata, pero Carlos va, déjame
eso a mí.
Cada vez que veo esta foto, pienso, que esa es simplemente la punta del
iceberg, pues todo lo que política y familiarmente hay debajo, es mil veces
mas grande que lo que la misma foto comunica. Espero que el Señor, me
de la oportunidad
oportu nidad de poder contar muchas otras otr as cosas referente a esa lucha
por la paz.
148

El retorno de los refugiados y la paz

Foto histórica de quienes participamos en la reunión del Escorial, en junio


de 1990 primera que se da dentro del marco del Acuerdo de Oslo, llamado
“Acuerdo básico
básico para la
l a búsqueda de la paz por medios políticos, que firma-
fir ma-
mos con la guerrilla
guerri lla en marzo
ma rzo de 1990.
1990.
De izquierda a derecha, primera fila, Abundio Maldonado, Francisco Luis
Gordillo, Tere de Zarco, Cardenal Rodolfo Quezada Toruño, funcionario
de la Cancillería española, Catalina Soberanis, Oliverio García, Eduardo
Meyer. Segunda fila, Luis Morales Chua, Mario Sandoval Alarcón, Carlos
González, Monseñor Juan Gerardi, Jorge Serrano Elías, Mario Permuth,
Gaspar Ilom, Frances Vendrel (ONU), Mario Solórzano, Miguel Ángel
Sandoval. Tercera fila: Carlos Rivers Sandoval, Luis Becker, Miguel Án-
gel Montepe
Montepeque,
Carlos Enrique que,Chavarría,
Luis FloresYago
Ast urias,
Asturia s, Pablo
Pico, de la Monsanto,
Cancillería Renán
Renán Quiñónez,
Quyiñónez,
española, Fran-
cisco Villagrán.
Estos dif
di f íciles encuentros,
encuent ros, no hubieran
hubieran sido posibles, sin el apoyo y decisión
del Presidente del del Gobierno español Felipe Gonzales, un gran amigo y del
apoyoo y entusiasmo
apoy entusia smo de la Canciller
Ca ncillería,
ía, principalmente,
principal mente, del
del Embajador Yago
Yago
Pico de Coaña y de Juan Pablo de la Iglesia, quien en ese momento, estaba
de Embajador de España en Guatemala.
Guatemal a.
El trabajo para encontrar escenarios neutrales, que presentaran la condi-
ciones para reuniones de este tipo, no era fácil, piases como Noruega, Ca-
nadá, Ecuador, Venezuela, entre otros, fueron muy consecuentes en abrir
sus puertas para otros eventos de esta naturaleza, sin embargo, en nuestras
vecindades, el apoyo
apoyo de México y de su presidente Carlos Salinas
Salin as de Gorta-
Gor ta-
ri, también
ta mbién un gran amigo,
am igo, con quien
quien permanentemente
permanentemente y sin formalidades
formal idades
proporcionaba
Cosa semejantelos apoyos
con Oscarnecesario.
Ar ias en Costa Rica,
Arias R ica, bajo cuyos
cuyos auspicios tuvi-
mos las primeras
primeras reuniones informales, y posteriormente fue Rafael Angel
Calderón, quien conf
confirm
irmando
ando la vocación
vocación democrática y pacifista de Costa
Rica, nos designó a Hernan Casto mi gran amigo y hermano, quien en
ese momento era Vice Canciller, para viabilizar cualquier requerimiento
logístico.
149

CAPÍTULO VII 
La paz

est aba más


Aquí la cosa estaba má s clara que el agua. Yo hice
compaña ofreciendo procurar la paz y hacerla reali-
dad; no porque fuera un punto propagandístico, sino
porque verdader
verdaderamente
amente creía en eso y lo había demos-
demos -
trado con mi trabajo junto a quienes integramos la
Comisión Nacional de Reconciliación. Le habíamos
dedicado muchas horas, días y meses de nuestras vi-
das, para buscar y encontrar un camino posible hacia
la terminación del conflicto que nos desangraba, en-
frentaba
Como y rezagaba.
ya relaté antes, todas las veces que hice
algoo por la paz,
alg pa z, tanto
ta nto como
como Presidente del del Consejo de
Estado
Est ado o como m iembro de la ComisiónComis ión de Recon
Reconci-
ci-
liaron Nacional,
Nacional, corrí riesgos
r iesgos,, sufrí
sufr í amenazas y serios
sinsabores. Pero
Pero en mi caso,
c aso, la suerte estaba echada. El
día que tomé posesión como Presidente de la Repú-
blica declaré tajantem
t ajantemente:
ente:
“Después de más de treinta años de con-
frontación
que todos ylosviolencia
violen cia en el país,
guatemaltecos paíys, especialmen-
es imperante
i mperante
te mi gobierno, fijemos como una de nues-
tras metas principales el logro de la paz y la

La paz

reconciliación;
reconcil iación; pues hemos vivido unau na heren-
cia dolorosa de distanciamiento, luto y en-
frentamiento
frentam
esfuerzoiento entrepor
de todos hermanos,
herm anos, que reclama
superarla. reclama un
un
Buscamos la paz total y no una simple tre-
guaa o cese de fuego,
gu f uego, conscientes
conscientes de que la sola
ausencia del conflicto no es garantía de paz si
permanece
perma necenn las causas
c ausas que lo motivaron.
motivaron.
Se trata pues, de lograr una paz duradera
fundamentada en la paz social, que elimine
con justicia y solidaridad las causas y razones
que
para en forma directa
fomentar o indirectadelhan
la permanencia servido
conflicto,
 y que polít
políticamente
icamente se den opciones para
pa ra que
aquellos que se sienten social, económica o
políticamente agredidos, encuentren meca-
nismos no violentos para resolver sus diver-
gencias”.
 Yo hablé cla
 Yo claro
ro y no enga
engañe
ñe a nad
nadie
ie y el pueblo
me eligió, creyó en mí. Si en la DEMOCRACIA la
“voluntad descansa en el soberano” (léase en el pue-
blo), yo entendía muy claramente que mi mandato
estaba, en el caso de la paz, orientado a buscar la paz y
procurarla y punto
punto..
Inteligente y patrióticamente sí; pero sin los pre-
rrequisitos de rendición de la insurgencia o de cese al al
fuego incondicional, como los dueños del país y los de
la cúpula militar exigían, porque eso no era ni lógico
ni viable.
v iable. Exi
Exigi
girlo
rlo de esa manera suponía
suponía un profundo
desconocimiento de la complejidad del conflicto, tal
como lo explique antes.
De igual modo, la paz que se buscaría no impli-
caba solo
solo un diálogo
di álogo con la insurgencia,
insurg encia, sino acuerdos
acuerdos

151

La guayaba tiene dueño

 y compromi
compromisossos naciona
nacionales
les con tod
todasas la
lass fuerz
fuerzasas del
país, pues la paz solo se consegui
conseguiríríaa como
como fruto
fr uto de un
esfuerzo nacional que garantizara la preeminencia del
bien común sobre el bien individual, el respeto irres-
tricto a la dignidad y derechos de la persona humana
 y la modern
modernizización
ación y fort
fortalec
alecim
imiento
iento de la lass in
instit
stitu-
u-
ciones del país. Se trataba de garantizar los derechos
del individuo frente a los abusos del Estado o de los
poderosos.
La confrontación sorda,
sorda, pero defin
def initiva
itiva

Es obvio que ni los dueños ni los de la elite


elite militar
mi litar
creyeron que yo sí iba seriamente tras esos objetivos.
Estimaron que yo era otro que llegaba y que se iba
a perder en el camino, con sus dádivas o amenazas.
Cuando se dieron cuenta de que la cosa no era así,
empezaron a decir que yo no escuchaba a nadie, que
era un “aprendiz de dictador”, que me creía el rey
Salomón y que ellos me iban a enseñar que yo era un
pinche presidente.
Esto venía fundamentalmente del sector de los
dueños del país. Los militares
mi litares eran un poco más suti
sutiles,
les,
ellos me decían: “Señor Presidente, no trabaje tanto,
las cosas
cosa s van a su tiempo, haga comcomoo el Presidente
Presidente Ce-
rezo, váyase los viernes, firme el despacho y regrese
los martes, así tiene más tiempo para pensar y ya más
descansado, toma decisiones”.
Lo que hoy
hoy resulta claro m í es que cuando los
cla ro para mí
dueños decían que yo no escuchaba, era porque no les
hacía caso
ca so en lo que
que ellos quería
querían.
n. Lo que yo
yo hacía es-
taba en contra de sus intereses, pero no no se anim
an imaban
aban a
decirlo así de claro.
cla ro. Ellos querían que yoyo trabajara por
la paz y que reordenara las instituciones del Estado,

152

La paz

para que después


después ellos las
la s manejaran
ma nejaran a su antojo.
antojo.
Cuando empezaron a decir que yo era un apren-
diz de dictador y que me creía el rey Salomón
Salomón y no un
pichee presidente, la verdad es
pich e s que yo me creía un Pre-
Pre -
sidente y nunca me consideré un pinche presidente.
Ellos no me eligieron, el pueblo me eligió en
contra de ellos y sus súbditos. Yo tenía mil veces más
compromisos con el pueblo y con mi ideales, los que
dicho sea de paso nunca escondí. No estaba dispuesto
d ispuesto,,
como otros presidentes antes y después de mí, a ser-
virlos
vi rlos y aceptar sus malas
mala s crianza
cria nzas,
s, tolerar
tolerar las evasiones
evasiones
de impuestos,
de los recursos susdel estafas
Est adoaly,
Estado y, fisco,
comoelpasó
aprovechamiento
poster iormen-
posteriormen-
te, sus políticas delincuenciales.
Si ellos querían que no se les pusieran arbitrios
para cubrir la destrucción de las carreteras de la cos-
ta sur durante la zafra, si ellos querían quedarse con
GUATEL y el INDE, si ellos querían que se pararan
la conversaciones
conversaciones con con la guerril
guerr illa,
la, si ellos querían
quería n que
 yo perdiera
perd iera la
lass elecciones del 91 y la lass del 93, y ta
tanta
ntass
otrascomo
 yo, cosas,Presidente
debían
Pre sidentedeyhaber
h aber ente
entendido
con base
ba se ndido
en m isy compromi
aceptado que
compromisos
sos
con el país, no estaba
e staba dispuesto
d ispuesto a complacerlos.
complacerlos.
En justicia, mis prioridades estaban en sentido
diferente a las de ellos; simplemente nuestra agenda
era diferente. Yo tenía a varios de los ministros, para
que dialogaran de modo permanente con ellos en el
marco del diálogo del Pacto Social, con el propósito
de llegar,
llega r, de modo
modo civili
civi lizado,
zado, a acuerdos
acuerdos de benef
beneficio
icio
nacional.
Pero ese diálogo
di álogo los inco
i ncomodaba,
modaba, porque estaban
acostumbrados al monólogo y a que se les obedeciera
incondicional
incon dicionalmente
mente.. Ese no era mi prob
problema,
lema, yo esta-
blecí el mecan
mecanismo
ismo de entendi
entendimiento,
miento, no para recibir

153

La guayaba tiene dueño

órdenes, sino para dialoga


órdenes, di alogar.
r.
Ellos
El los no terminaban
term inaban de entender
entender que,
que, aunque yo
no tenía el control del Congreso, sí tenía un manda-
to popular contundente. El problema estaba en que
 yo así lo creía, pues ese es el concepto un universa
iversall de
la democracia participativa. Para ellos la democracia
consistía
consist ía en “darle
“d arle al
a l pueblo atole con el dedo”
dedo” y,
y, para
ellos, un buen trago
tra go de whisky
whisk y.
El resultado de esa confrontación fue que yo salí
con vida, pero ellos se quedaron
quedaron con Guatemala, ma- m a-
nejándola a su sabor y antojo, y lo que han hecho con
ella es historia.
Todos lo hemos sufrido.
suf rido.
Lo que nunca aceptaron
aceptaron

Quienes hablan de democracia y libertad, nunca


aceptaron que perdieron las elecciones de 1991, aun
teniendo dos candidatos: Jorge Carpio Nicolle, de la
UCN,, y Álvaro
UCN Á lvaro Arzú
Arz ú Irigoye
Ir igoyen,
n, del PAN,
PAN, con toda la
la
plat
plataa del mundo.
elecciones mundo . Tampoco
del 93,Tquince
ampocodías
acepta
aceptaron
rondelaque
antes pérdida de las
la s
me dieran
el golpe, cuando el pueblo en las urnas ratificó una
vez más su respaldo a mis políticas.
Perdieron y querían mandar como que si hubie-
ran ganado; manipularon y destruyeron el país. Hoy
son inmensamente más ricos, más poderosos, más
abusivos,
abusiv os, y también
t ambién viviendo con más miedo
m iedo,, con más
guardaespaldas y coexistiendo con mafias y carteles
del crimen organizado.
Pobres
Po bres los choferes de buses que no pueden pagar paga r
guardaespaldas, los habitantes de áreas marginales
marg inales que
tienen que
que esconder
esconder a sus hijas
h ijas de las mar
maras,
as, los dueños
de pequeños negocios
negocios que tienen que pagar
paga r impuestos

154

La paz

a los delincuentes para vivir,


vivi r, los que
que salen de sus casas
 y no saben si van a regresar.
regresa r. El
Ellos
los sí que la pasan
pasa n duro,
pues lejos
lejos de haberse enriquecido
enr iquecido se ha hann empobrecido
 y muchos subsisten, no por la pujanza
pujan za empresar
empres aria
iall del
país, sino porque sus seres queridos han tenido que
emigrar, separándose de sus familias, para conseguir
sustento, con la única esperanza de lograr un futuro
digno
dig no para sus descendientes.
descendientes.
¿Cómo hacer entender a estos señores que la paz
se construye con tolerancia y respeto, cediendo en sus
privilegios, y limitando sus ambiciones, al punto en
que
restoestas
de losnoguatemaltecos?
atropellen las garantías y derechos del
Nadie niega que el empresariado debe tener un
papell importa
pape i mportante
nte en el país, pero
pero,, ¿cóm
¿ cómoo hacerles en-
tender que ellos no son los dueños de la finca, que
hay que compartir y que el país es como un barco
en el que viajamos todos y la función de cada uno es
importante y ninguna despreciable ni marginal? Esa
es la parte fundamental de la paz que ellos no han
entendido o nomuertes
ocurrido más quierendespués
entenderdey la
porfirma
eso esdeque ha n
han
la paz,
que antes de ella.
Me pregunto si esto es el resultado de la privati-
zación de la Presidencia y el secuestro del Estado.
La cúpula
cúpula militar
mil itar

Con todo realismo tengo que reconocer que la


cúpula militar, una de dos: o creyó en el cuento que
les echaron los dueños, o bien sintieron que sus pre-
bendas y privileg
priv ilegios
ios se les venía
veníann abajo.
abajo.
Creo que se asustaron y desde el 14 de enero de
1993, después de mi discurso de rendición de cuentas

155

La guayaba tiene dueño

a la nación ante el Congreso de la República, empe-


zaron a conspirar abiertamente, pues ya sus motiva-
ciones eran varias.
Sin embargo, la inquietud por el golpe venía de
atrás. Gustavo Porras Castejón, en su libro “Las hue-
llas de Guatemala”, después de hacer una reseña de
la posición del Ejército que, desde el tiempo de Julio
César Méndez Montenegro se oponía a una solución
negociada, cita un comentario que le hiciera el gene-
ral Julio
Jul io Balconi:
Balconi:
“…en 1992, cuando el Presidente Jorge
Serrano le ordenó a su Ministro de Defensa
que le
le proporcio
proporcionar
naraa una lista
l ista de oficiales
of iciales que
pudieran integrarse a las negociaciones, este
le respondió que los oficiales no se sentarían
con delincuentes. El Presidente, sin embargo,
embarg o,
reiteró su mandato, pero cuando el general
García se retiró de su despacho, les dijo a sus
funcionarios allí presentes: “Muchá preparé-
monos para un golpe de Est
Estado”
ado”.. (Págin
(Pág inas
as 227
 y 228)
228 )
Hagoo ver que este incidente fue
Hag f ue en julio
jul io de 1991
1991,,
antes de la reunión en Querétaro, México, es decir,
a escasos seis meses de que yo tomase posesión como
Presidente.
Presiden te. Según recue
recuerdo,
rdo, fui enfát
en fático
ico en que
que no es-
taba pidiéndoles opinión, sino que dando una orden.
 Y al
allílí est
estuvo
uvo presente Garc
Garcíaía Sam
Samayoa,
ayoa, quien en ese
momento era Jefe de Estado
Esta do Mayor del Ejército, el ge-
neral Luis Enrique Mendoza, en ese entonces Minis-
tro de la Defensa; y no fue en mi despacho, sino que
en la antesala de la oficina del Jefe de Estado Mayor
de la Presidencia, en la que ciertamente
cierta mente estaban otros
militares presentes.

156

La paz

El germen del golpe de Estado venía desde ese


momento y, como manifesté antes, la misma esposa
de García Samayoa lo expresó. Estoy seguro de que
ellos estaban
estaba n convencid
convencidos os de que yo,
yo, al igu
igualal que Jul
Julio
io
César Méndez Montenegro
Montenegro o Vinicio
Vi nicio Cerezo Aréva-A réva-
lo, cedería a sus posiciones
posic iones de no involucrar al a l ejército
en la búsqueda de una paz negociada y civilizada.
Resulta que al convencerse ellos de que conmi-
go era diferente, entonces los señores militares de la
cúpula, en la madrugada del 30 de mayo, les entró el
fervor por la defensa de la Constitución, la cual estoy
seguro que ni siquiera habían leído,
leído, pues en el Artícu-
Art ícu-
lo 244 claramente
clara mente establece:
establece:
“El Ejército
Ejército de Guatemal
Guatemalaa es una institución
in stitución des-
tinada a mantener la independencia, la soberanía y el
honor de Guatemala, la integridad del territorio, la
paz y la seguridad
segu ridad interior
i nterior y exter
exterior
ior..
Es único
ún ico e indivisible, esencia
esencialmente
lmente profesional,
profesional,
apolítico, obediente y no deliberante”.
Queda absolutamente claro que en la Consti-
tución, al Ejército
la renuncia no se lecomo
al Presidente, da latampoco
función se
de lepedirle
da la
función de tutelar a los políticos en sus actuaciones;
mucho
muc ho menos se le da discrecional
d iscrecionalidad
idad para establece
establecerr
cuándo la política de un Presidente respecto a la ob-
tención de la paz debe ser previamente aprobada por
ellos.
La Constitució
Constit uciónn es clara,
cla ra, pero muy clara:
clara : “el
“el Ejér-
cito debe ser profesional, apolítico y no deliberante”.
Salirse de
cuando esto es violar
el artículo la Constitución,
246, claramente sobre todo
establece:
 “El Presidente de la República es el Comandante
Coma ndante
General del Ejército
Ejército e impart
impa rtirá
irá sus
su s órdenes
órdenes por con-
ducto del oficial general o coronel o su equivalente

157

La guayaba tiene dueño

en la Marina de Guerra, que desempeñe el cargo de


Mi nistro
Minist ro de claro
Queda la Defensa
que laNacional
Naci onal””.
Constitución establece una
única cadena de mando, la cual el ejército está obli-
gado a respetar. De aquí pues que el ejército debe
cumplir con la ley, y su actuación no está sujeta a la
presión, conveniencia o disposición de ningún grupo
de presión, sea este el CACIF, el GAM, la Instan-
cia Nacional de Consenso, los patrulleros civiles, el
Grupo Pirámide,
Pirám ide, las Muchachas
Muchachas Guías,
Guía s, las Sociedades
Protectoras de Animales, el Comité de Solidaridad
con las Especies en Extinción, etc. Y mucho menos
del Jefe de la G2, Dirección de Inteligencia del Ejér-
cito.
Resulta que ahora todos estos señores se confconfabu-
abu-
lan para defender la Constitución, violándola. Eso es
como decir que se va a proteger la virginidad de una
niña, abusando de ella.
En mis largos
la rgos ratos de ref
reflexión
lexión he llegado a pen-
pen-
sar que a los señores
señores de esta cúpula milm ilitar,
itar, cuando les
enseñaron
ron que esaelobediencia
concepto no
de era
obediencia, no del
a los dueños lespaís
explica-
, sino
que a sus superiores.
Siempre recuerdo las palabras que les dije en el
despacho del Ministro
despacho Min istro de la Defensa, cuando me esta-
ban dando
d ando el golpe: “Este no es prob
problema
lema de ustedes,
es un problema político y es a nosotros, los políticos,
a los que nos toca resolverlo”. También les dije: “De
esto que ustedes están haciendo, se van
van a arrepentir
a rrepentir al
al
involucrar
 Y como al Ejército”.
les profeticé, los dueños  los usaron, los
manejaron, los instrumentalizaron y después ellos
mismos los desecharon, los humillaron, y lo que ellos
temían: los redujeron; y lo que es peor, entregaron el

158

La paz

país al crimen
cr imen organ
organizado
izado..
Meinstrumentalizados
fueron imag ino lo que esta
imagino estarán
rán pensando
comopensa ndo ahora
“títeres de unalos sola
que
que
función”. A muchos de ellos los veo en la Asociación
de Militares de Guatemala (AVEMIGUA) firmando
declaraciones defendiéndose, justificándose y hacien-
do todo lo posible por no ir a la cárcel, ahora que
sus aliados “los tiraron a los leones” y los usan como
fachada para
par a esconder
esconder las atrocidades ellos, los due-
at rocidades que ellos,
ños, han cometido. Basta
Basta leer a Lafitte
Laf itte Fernández en el
libro “Crimen de Estado. El caso del Parlacen”.
A pesar de la consp
conspiración
iración

A pesar de la conspiración y ejerciendo


ejerciendo mis
mi s dotes
“dictatoriales”, incluí al Ejercito en la delegación del
Gobierno
Gobi erno de Guatemala,
Guatema la, y con la invaluable coopera-
coopera-
ción de Monseñor Rodolfo Quezada Toruño y Tere
de Zarco, por un lado, y la del Presidente de México,
Carlos Salinas de Gortari, por el otro, logramos que
se llegaran
rétaro, a sentarsecon
el gobierno en los
unadirigentes
misma mesa,
de la en Que-
guerrilla
insurgente, aglutinados en la URNG. Fue así como,
el 25 de julio de 1991, se firmó el primer acuerdo
entre el Gobierno de la República y la insurgencia,
en la ciudad de Querétaro, México, al que se le de-
nominó,
nomi nó, “Acuerdo
“Acuerdo de Querétaro”
Querét aro”,, un
u n acuerdo marco
m arco
sobre democratización para la búsqueda de la paz por
medios políticos.
Ellicenciado
por el acuerdo fue suscrito,
Manue
Manuel por el
l Conde, parte del gobierno,
ingeniero Mano -
Mano-
lo Bendfeldt Alejos, el licenciado Fernando Hurtado
Prem, el general José Domingo García Samayoa, el
general Mario René Enríquez Morales, el coronel

159

La guayaba tiene dueño

 Julio
 Jul io Balcon
Balconii Turcios, el coronel Ma
Marco
rco Gonz
González
ález
Taracena, el licenciado
ingeniero Amílcar Ernesto
Burgos Solís Viteri Echeverría,
y el señor el
José Luis
Asensio Aguirre
Por parte de la Unidad Revolucionaria Nacional
Guatemalteca (URNG), suscribieron el Acuerdo: su
comandante, Gaspar Ilom, comandante Pablo Mon-
santo, comandante Rolando Morán, y los miembros
de la comisión Político Diplomática de la URNG:
doctor Francisco Villagrán Muñoz, doctor Luis Be-
kker Guzmán, licenciado Miguel Ángel Sandoval y
licenciado Mario Castañeda.
Por la Comisión Nacional de Reconciliación
firmaron: Monseñor Rodolfo Quezada Toruño,
Concililiador;
Conci ador; señora Teresa
Teresa Bolaños
Bola ños de Zarco, profesor
Alfonso Cabrera Hidalgo, licenciado Mario Permuth
Listwa, licenciado Oliverio García Rodas, mientras
que por las Naciones Unida
Unidass rubricó
r ubricó el documento el
doctor Francesc Vendrell.
Ahora, con el correr de los años, me pregunto,
cómo es posible que los generales Enríquez Morales y
García Samayoa fueran partícipes, en 1993, del golpe
de Estado contra mí?
El los estuvieron sentados
Ellos sentados conmigo
conmig o y la Comisión
de la Paz del Gobierno por horas y horas en la Casa
Presidencial; siempre oyeron de mi parte instruccio-
nes de mantener la dignidad y legalidad del Estado y
del Ejército, llevar las negociaciones con apego a la
 justicia
 justic ia y las convenienci
conveniencias
as del país, como const
constaa en el
documento “Iniciativa
que yo firmé, para la paz
como Presidente, pael
z total
tota
8 del de l a Nación”
la
abril Nación”,
de 1991,
así como la “Respuesta
“Respuesta al Planteam
Planteamiento
iento Global
Global de la
U RNG”
RNG”,, en mayo
m ayo de 1992.
1992.

160

La paz

Esos generales conociero


conocieron,
n, estudiaron
estud iaron y discutie-
di scutie-
ronfir
 yo hasta
mé ella30
f irmé saciedad el de
de junio
jun io documento que,, ning
1992. Nunca,
Nunca nfinalmente,
inguno
uno de
los dos, comentó nada contrario al espíritu en que se
llevaba adelante el diálogo; aportaban ideas y colabo-
raban. De repente,
repente, yo era el monstruo que quería vio- v io-
lentar la firma de la paz. Lo curioso es que esto solo
sucedió después de las conversaciones entre Dionisio
Gutiérrez y Otto Pérez Pérez Moli
Molina,na, descritas
descr itas ampliamente
ampl iamente
por Jua
Juann Luís Font y Rachel
Rachel McCleary
McClear y y otros autores
mas, las que se venía llevando a cabo desde enero del
93.
A pesar de todo logré, antes de que me dieran el
Golpe, que firmáramos el documento “Puntos para
un Acuerdo sobre Derechos Humanos”, instrumento
quee fue vital
qu vita l para defini
def inirr las garantías
g arantías que el
el Gobierno
Gobierno
de Guatemala daría a los refugiados que serían repa-
triados desde México. Yo hice una declaración uni-
lateral sobre el el cumplim
cumpl imiento
iento de esos puntos y acepté
acepté
la supervisión de Naciones Unidas, hechos estos que
fueron ampliamente reconocidos por la comunidad
internacional e hicieron posible que 35,000 guate-
maltecos abandonaran los campos de refugiados y se
incorporaran a su país
paí s con dignidad
dign idad y respeto.
respeto.
Cosas curiosas

Cuando vi, con el tiempo, cómo el general Pérez


Molina, con los miembros de la Comisión de Paz de
Arzú, corrían de
rica, firmando todountipo
lugardeaacuerdos,
otro en Europa
entendíyque
Amé-
los
dueños ya habían dado
d ado el sí.
Todo me resultó mucho más claro cuando, en
el marco de la conmemoración de los 15 años de la

161

La guayaba tiene dueño

Firma de la Paz, Álvaro Arzú dijo, en una entrevista


que le ical”
Dominical
Domin hiciera
” deElsie Sierra
Telediario
Telediar en ell abierto
io,, canal
cana segmento
abie “Cafecito
rto de Guatema-
la, que “la fir
f irma
ma de la paz para él fue fácil,
fácil , que se sen-
sen-
tó con los dirigentes guerrilleros en El Salvador, que
se dieron las mano y... ¡ya!”. De esa manera los dueños
del país habían logrado la paz que querían: un cese al
fuego,, una terminació
fuego term inaciónn de hostilidades, firm
f irmarar lo que
fuera y después cumplir lo que quisieran.
El único
ú nico consuelo es que, aunque nada mejoró en
Guatemala
los ejerycicio
aunque
en el ejercicio los dueños
ro  ahora
del secuestro
secuest se quedaron
del poder, so-
hay algo que
tenemos que reconocer
reconocer al Presidente
Pres idente Arzú,
Ar zú, y es que ya
no hay muertos como consecuen
consecuencia
cia de ese conf licto.
162

CAPÍTULO VIII
 Y entonces, ¿P
¿Por
or qué el Golpe?

Esa era la pregunta


pregu nta que insistentemente meme hacía
frente a lo sucedido; cuando me vi frente al golpe de
Estado que me propinaron. Declaro que aunque esta-
ba en el
el centro
centro del huracán, me era sumamente difícil
dif ícil
poder entender lolo que estaba pasando.
pas ando. La complejidad
de los acontecimientos, la actitud de los actores, los
intereses de los grupos
gr upos y de las personas, hacían
hacía n suma-
mente difícil para mí entender lo que ocurría.
Pensaba, para mis adentros, quizá ingenuamente,
que el buscar la paz era indiscutiblemente un obje-
tivo nacional, que el estabilizar la economía, sin un
“shock”
“sh ock” social,
social , sin afectar
a fectar más
m ás a los ya empobrecidos,
empobrecidos,
era también un deseo generalizado. Que repatriar a
los refugiados y regresarlos con dignidad a su país,
era también un anhelo bien aceptado. Que luchar por
la reinserción de Guatemala en la comunidad inter-
nacional nos favorecía a todos. Consideraba que re-
solver el caso
nacional, sería de Belice como
ampliamente parte de por
respaldada esa estrategia
todos los
sectores, en particular los que se suponía que tenían
cierta inteligencia y capacidad para razonar.

La guayaba tiene dueño

En resumen, creía que la creación de las la s condicio-


nes
f igumíni
mínimas
iguraban mas de civi
civilización
lización y co
conci
ncien
encia
raban como intereses de todos los gr cia humanita
humanitaria
grupos
upos y secto-ria
res: intelectuales, económicos, étnicos, y en general,
de la sociedad en su conjunto.
Casi veinte años de estar sometido a una perse-
cución sin precedentes en la historia del país y de un
humillante exilio, me han servido para que, alejado
de las
la s pasiones, de los prejuicios y, por qué
qué no decirlo,
alejado también del ambiente de la cultura de muer-
te, corrupción
sociedad guatema y cinismo
lteca, heen
guatemalteca, el quereflexionar
podido
podido refselexionar
desenvuelve
mucho.
mucho la.
He podido estudiar, conversar con amigos, correli-
gionarios e incluso con algunos de los enemigos co-
 yuntu
 yu ntura
rales
les que tuve en esos momentos cr críticos
íticos que
describí antes.
Como decía, he reflexionado tratando de alejar-
me, tanto como humanamente
huma namente es posible, de los pre-
 juicios, y trtrata
atando
ndo de busca
buscarr la mayor objetivid
objetividad
ad en
el estudio de múltiples documentos. He buscado, buscado, más
má s
que su letra,
letra, el espíritu
espírit u bajo el
el cual
cua l fueron elaborados,
escritos o usados en cada estadio del conflicto.
Cada vez más, encue
encuentro
ntro que la crisis
cr isis que se pro-
vocóó con mis accio
voc acciones
nes y salida
sa lida del gobierno,
gobierno, ha servi-
serv i-
do para poner en evidencia situaciones
sit uaciones que en nuest
nuestro
ro
país han venido existiendo, pero que que lamentabl
la mentablemen
ementete
fueron
fuer on mediatizadas.
mediatiz adas.
Lo positivo de toda mi experiencia vivida tiene
su raíz en una generación de personas que tenían su
ombligo bien enterrado en Guatemala; que tenían
apego a valores tales como el patr
patriotismo,
iotismo, la justicia, la
libertad,
libert ad, la democracia, y que con sus actitudes y posi-
ciones, hicieron que en cada momento se pudiera vi-
virr con
vi con la genuina esperanza en un cambio; esperanza

164

 Y entonces, ¿P
¿Porqué
orqué el Golpe?

que hoy,
hoy, aparentemente,
apa rentemente, no existe.
ex iste.
Confieso ingenuamente que creí en esos valores,
por los que hombres y mujeres, verdaderos patriotas,
se expusieron,
expusieron, fuero
f ueronn perseguidos
persegu idos e incluso hasta mu-
rieron. Creía que esos valores significaban lo mismo
para todos los guatema
g uatemaltecos;
ltecos; y que siendo
siendo conceptos
conceptos
universales, todos entendíamos lo mismo cuando los
invocábamos. Pero, ¡oh, sorpresa!, ni son los mismos
para cada uno,
uno, ni signif
sign ifican
ican lo mismo,
mismo, ni se enseñan,
ni ejercen
ejercen de la misma
m isma manera
ma nera en
en cada grupo
gr upo de
de gua-
temaltecos.
Muchísimas vivencias impactaron mi vida y mi
formación en general. Desde la educación en mi
hogar, el ejemplo y consejos de mi padre; los estu-
dios universitarios en las facultades de Ingeniería y
de Humanidades de la Universidad de San Carlos; la
participaci
part icipación
ón política
política en la dirig
di rigencia
encia del mo
movi
vimiento
miento
estudiantil, tanto en la Asociación de Estudiantes de
Ingeniería (AEI) como en la Asociación de Estudian-
tes Universitarios (AEU).
De igual modo influyeron en mí los estudios en
Suecia, los de posgrado
Suecia, posg rado en los Estados Unidos, princi-
pri nci-
palmente
pal mente los que
que realicé
real icé en la Universidad
Universidad de Stanford,
Sta nford,
California. Fue también importante la experiencia,
el trabajo en instituciones internacionales, particu-
larmente en la Secretaría de Integración Económica
Centroamericana (SIECA), y en la Organización de
Estados Americanos (OEA).
No me cabe la menor duda de que todo esto me
sirvió para salir del “aldeanismo” y tomar contacto
con un mundo diferente al que se nos querían impo-
ner en
en Guatemala.
Guatemal a.
Por otro lado cuentan mis vivencias como em-
presario: las limitaciones para realizar los proyectos,

165

La guayaba tiene dueño

las angustias de los días de pago de planillas, las pre-


siones de los créditos, los pagos a proveedores. Todo
ello desgasta, requiere sacrificios, los que no se pue-
den ignorar. He vivido en diferentes etapas etapas de mi
m i vida
las más
m ás dive
d iversa
rsass realidades
real idades en mis
mi s negocios.
negocios. Todos
Todos son
hechos
hec hos que
que han sido parte integral
integ ral de mi
m i formación.
El trabajo
t rabajo con
con las
la s cooperativas
cooperativas y con los promoto-
promoto-
res sociales de la Universidad Rafael Landívar,
La ndívar, de Gua-
Gua-
temala, así como el contacto que tuve con la realidad
educativa, de salud y bienestar
bienestar social, cuando
cua ndo dirig
dir igíí el
Plan de Desarrollo
la Secretaría GeneralSocial para el período
de Planificación 74–79, en
(SEGEPLAN)
me pusieron
pusieron en contacto
contacto con una realid
rea lidad
ad que intuía,
intuí a,
pero que no la conocía en toda su dimensión y, sobre
todo, con la problemática que presenta y limita la re-
solución de los problemas del país.
Todo eso me formó. Pero hay dos cosas que im-
pactaron profundamente mi espíritu. La primera,
cuando como Presidente del Consejo de Estado, tuve
contacto
rdaderayy vi
verdadera
ve conllante
humi
humill mis miseria
ante propios
miser ojos
ia en quelalos
que realidad de la
desplazados
moribundos bajaban de la montaña, arriesgando sus
vidas para encontrar una mínima esperanza de vida.
La segunda, cuando como Coordinador del Plan de
los Cien Días, después del terremoto de 1976, visité
las comunidades destruidas y enlutadas, en las que la
miseria
mi seria no les daba ni
n i siquiera el derech
derechoo a llorar
l lorar a sus
muertos.
Perdónese mi brusquedad al expresarlo, pero to-
davía se me hace intolerable y ofensivo escuchar los
argumentos interesados de los empresarios, políticos,
formadores de opinión, e incluso intelectuales, que
hablan de la realidad guatemalteca sin conocerla, sin
entenderla y,
y, por supuesto, sin la más mín
m ínim
imaa vocación
vocación

166

 Y entonces, ¿P
¿Porqué
orqué el Golpe?

para resolv
resolverla.
erla.
Todos hablamos de libertad, democracia, desa-
rrollo, justicia y tantos otros conceptos que usamos
comoo valores subli
com sublimes,
mes, universales e indiscutibles.
ind iscutibles. Lo
importante sería saber qué entendemos cada uno de
nosotros respecto de esos valores. ¿Será lo mismo el
concepto
con cepto de justicia para un empresario
empresar io miembro del
Grupo Pirámide, que para un empresario medio, o
para un profesional o para un habitante del interior
del país que vive en
en una cabecera municipal o en una
aldea sinservicios
ni a los luz ni
n i agua
agde
ua salud?
potable, sin acceso a la educación
educación
Sin ánimo de entrar en acusaciones de carácter
condenatorio, pero sí en aras de encontrar caminos
que nos conduzcan por sendas de realismo, los últi-
mos veinte
veinte años de ref lexión me han demostrado que
los conceptos
conceptos difiere
dif ierenn según
segú n la posición de cada actor
social.
No dudo que, desde los asalariados hasta los em-
presarios (pequeños,
dales) pasando por losmedianos y grandes,
profesionales, existenola pirami-
posibi-
lidad de que los conceptos
conceptos antes mencionados tengan
algún
alg ún nivel de similit
simi litud
ud y cercanía. Sin embargo, para
algunos miembros del gran capital, que lamentable-
mente tienen gran inf
i nf lue
luencia
ncia en los medios
medios de comu-
comu-
nicación, en los organismos y estamentos del Estado,
en los jueces, magistrados, fiscales, sus propios inte-
reses son predominantes e irrenunciables. Ellos, que
por tradición son conocidos como “dueños del país”,
aunque son muy pocos son muy influyentes. Para
ellos, la mayor parte de los habitantes del país no son
compatibles con sus conceptos.

167

La guayaba tiene dueño

En la sede de la OEA, en Washing


Washington,
ton, presidiendo
presidiendo una reunión
reun ión de la Comi-
sión Ejecutiva Permanente del Consejo Interamericano para la Educación,
la Ciencia y la Cultura. A la izquierda, el Secretario General de la OEA,
doctor Alejandro Orf
Or f ila, y a la derecha el licenciado
licenciado Jorge Luis Zelaya Co-
ronado.
168

 Y entonces, ¿P
¿Porqué
orqué el Golpe?

Sesión solemne del 14 de septiembre de 1982, cuando se instaló el Con-


sejo de Estado, organismo encargado de diseñar el proceso de retorno a la
constitucionalidad, después del golpe de Estado de marzo de ese año. Este
organismo creó el Tribunal Supremo Electoral y La Nueva Ley de Partidos
e Institucion
Inst ituciones
es Políticas.

169

La guayaba tiene dueño

En 1983,
1983, siendo Presidente del Consejo de Estado, fui
fu i recibido en la Oficina
Of icina
Ovall de la Casa Blanca por el presidente Ronald Reagan
Ova Reaga n y el vicepresidente
George Bush. Aparecen también el entonces embajador de Estados Unidos
en Guatemala, Fred Chapin y el embajador de Guatemala en Washington,
 Jorgee Luis
 Jorg Lui s Zelaya
Zelay a Coronado.
Coron ado.

170

 Y entonces, ¿P
¿Porqué
orqué el Golpe?

Asamblea General de la International Democratic Union, Tokio Japón, un


año antes de ser electo Presidente de Guatemala. Momento en que era fe-
licitado por la Primera Ministra
Min istra de Inglaterra,
Ingl aterra, Margaret
Marg aret Thatcher,
Thatcher, y por el
el
Vicepresidente los Estados Unidos, Dan Quayle, por la designación como
uno de los vicepr
v icepresidentes
esidentes de dicha organización.
organiz ación.

171

La guayaba tiene dueño


En el Palacio de Oriente, con los Reyes de España, en la recepción que
ellos ofrecieron en ocasión de la visita oficial que se realizara a España en
el año 1992.

172

 Y entonces, ¿P
¿Porqué
orqué el Golpe?
Foto con el presidente venezolano Carlos Andrés Pérez, con quien tuvimos
una buena amistad, y quien fue un gran
gra n aliado político de nuestro país, en
aspectos tan trascendentes
t rascendentes para nuestra política internacional, el proceso de
paz y el caso de Belice.

173

La guayaba tiene dueño


Participación como observador, Presidiendo la Delegación de la IDU, en
las elecciones de Nicaragua, aquí junto a la Presidenta Electa Violeta Cha-
morro.

174

CAPÍTULO IX
Días antes del golpe

En verdad, yo consideraba que mi gobierno estaba


est aba
caminando bien: la economía, creciendo; los salarios
incrementando su valor adquisitivo en forma signifi-
cativa; las
la s tensiones
tensiones sociales con una clara
clar a tendencia
tendencia a
reducirse; la situación fiscal haciéndose manejable al
disminuirse los subsidios.
Con la actualización tributaria y los impuestos
de estabilización,
manejable; comoelpuse
y como presupuesto
d ía los se
al día hacía mucho
préstamos imás
en las ins-
ns-
tituciones internacionales de crédito, se abrieron sus
ventanillas de nuevo, y se planteaba la posibilidad de
tener fondos para la inversión social y la infraestruc-
tura,
tu ra, detenida durante
dur ante el gobierno
gobierno de Vinicio Cerezo
Arévalo.
Por otro lado, se había firmado un nuevo acuer-
do con el Fondo
Fondo Mone
Monetatario
rio Internacional
Intern acional (FMI)
( FMI) para
par a
apoyo en la balanza
nal,, encaminada
nal encamin de pagos;
ada a lograr la política
un reconocim
recon ocimien internacio-
iento
to de acep-
acep-
tación para el país, tenía un éxito interesante, sobre
todo por tres aspectos fundamentales. En primer lu-
gar, la política realista y moderna respecto de la so-
lución del problema de Belice. En segundo lugar, el

La guayaba tiene dueño

reconocimiento
esfuerzos del Gobiernode la comunidad internacional
en su búsqueda a los
por la paz y,
por ende
ende,, la final
f inalizació
izaciónn de un conf
conf licto armado
arm ado que
que
 ya l legaba a los trei
treinta
nta años, el que en ese momento
era el más viejo de América. Y, en tercer lugar, los
progresos en materia
materi a de derechos
derechos humanos, que esta-
ban claramente reconocidos por el relator especial de
Naciones Unidas, Dr. Christian Tomuschat, así como
en los reportes de varias instituciones y organismos
internacionales.
Paralelo a esto, en los sondeos de opinión que se
realizaban, la popularidad del Gobierno y la mía en
lo personal, estaban siempre por arriba del 60%, lo
que me hacía saber que el apoyo de la población en
términos de su aprobación a las acciones de gobierno
era una realidad.
Todos esos
eso s hechos, claros
cla ros y comprobables, fueron
f ueron
reaf irmados
reafir mados el día 9 de mayo de 1993 1993,, cuando mi m i par
tido Movimiento de Acción Solidaria (MAS) obtuvo
más del 50% de los votosvotos en las
la s elecciones
elecciones municipales
del país. Ello,
E llo, a pesar
pesa r de que el “sector
“sector privado”
privado” (léase
( léase
Grupo Pirámide) había instado a los partidos y comi-
tés cívicos de oposición a que se unieran o hicieran
coaliciones en todo
todo el país para derrotar
derrota r al MAS.
M AS. Supe
después que
que estos dirigentes
dir igentes y sus candidatos, recogían
recogía n
dinero
di nero en la propia
propia Cámara de Industria
Industri a para sustentar
sus candidaturas.
Recuerdo que esa noche del 9 de mayo, me pre-
senté en
en el Parque de de la Industria
Industr ia a escuchar la l a confe-
rencia de prensa donde el Tribu Tribunanall Supremo
Supremo Electoral
Electora l
daba a conocer los los resultados
resu ltados de las
la s elecciones.
elecciones. Obser-
vé que
que el ambiente era era como el de un funeral:
fu neral: los par-
tidos políticos y sus dirigentes tenían, como se dice,
cara de circunstancias. La mayoría de los políticos de

176

Días antes del golpe

oposición y los
oposición los fisca
f iscales
les de los
los partidos
part idos se habían retira-
retir a-
do. Obviamente,
Obviamente, yo estaba estaba feliz y mis
m is correligionarios
correlig ionarios
también. Di una entrevista a los medios de comuni-
cación que aún se encontraban en el lugar y luego me
dirigí
dir igí a la casa de nuestro
nuestro partido
part ido..
Cuando íbamos hacia la sede del MAS, el gene-
ral Francisco Ortega
Or tega Menaldo, Jefe Jefe del Estado Mayor
Presidencia
Presiden ciall me dijo:
 —Y
 — Yo no estaestarí
ríaa ta
tann contento, señor Presidente.
Esto es loque
m iendo peor
no que nos pudo
lo festejen haber pasado y le reco-
mucho.
Confieso que sus palabras me cayeron extrema-
damente mal. No entendía cómo él podía decir que
el apoyo popular otorgado por el pueblo en forma tan
contundente, podría ser malo para un gobierno de-
mocrático. Algunos de los que oyeron esas expresio-
nes no tardaron
tarda ron en comen
comentarl
tarlas,
as, sin que nadie, enten-
enten-
diera qué había detrás de ellas. Sin embargo, en esos
momentos la tensión se sentía en el ambiente, casi se
podía cortar con el filo de un cuchillo.
El 12 de mayo, en horas de la tarde, se presentó
un amigo mío a la Casa Presidencial. Pidió hablarme
de urgencia y lo hice pasar, pensando que que tenía algú
a lgúnn
problema. Cuando entró en mi despacho, me pre-
guntó en forma un poco alterada, si yo creía que nos
estarían grabando. Entonces le dije, para que tuviera
conf
co nfianza,
ianza, que salié
sal iéramos
ramos a caminar
cami nar por los
los corredo-
corredo-
res, y así lo hicimos. De inmediato
inmed iato me dijo:
 —Mirá
 —M irá Jorge, de muy buena fuente supe que ayer
se reunieron en casa de los Gutiérrez, en La Antigua
Guatemala, algunos empresarios y dos o tres milita-
res, para analizar lo que pasó el domingo anterior en
las elecciones. Dijeron que después de lo que había
pasado no habría forma de pararte, que lo único que

177

La guayaba tiene dueño

les quedaba era matarte o matar a uno de tus hijos,


para desmoronarte como a Menem.
Apenas creí lo que me dijo, pero
pero cuando el amia migo
go
se retiró asocié lo que el general
general Orteg
Ortegaa Menaldo me
dijera el día de las elecciones y me entró una gran
duda y una gran inquietud.
Durante toda la noche medité en qué hacer. No
quise hablarlo con
con nadie. A l día siguiente
sigu iente llllamé
amé al ge-
neral Ortega a mi despacho y le comenté lo que me
habían contado.
que pensaba sacarLea dije que pensaba
mi familia jugár
jugármela
del país, mela
pues ensolotodoy
caso el responsable de todo era yo y por supuesto, el
que tenía que correr los riesgos.
riesg os. Me escuchó con con aten-
ción y casi sin meditarlo
medita rlo me dijo:
 —Señor Presidente, si s i usted
ust ed saca a su fam
f amililia,
ia, es-
taría dando un mal mensaje, yo le respondo con mi
vida por la vida de usted, la l a de doña
doña Magda
Magd a y la de sus
hijos, pero por favor, no los saque del país.
embargo,
Lo queles me
pedídijo
a todos
me quetranquilizó
no salieran
un de
poco;
la Casa
sin
Presidencial, hasta que tuviéramos más información
sobre lo que estaba sucediendo.
En esos días
dí as había recibido la carta
cart a del presidente
presidente
del Comité Coordinador de Asociaciones Agrícolas,
Comerciales, Industriales y Financieras (CACIF),
Mario Granai, en la que requería que detuviera las
negociaciones con la guerrilla, argumentando que
esa agrupación estaba débil y que era muy peligroso.
(Véase el anexo Cuatro)
No entendí la lógica del argumento, pero sí la
intención; sobre todo cuando me contaron que en la
redacción de la carta
car ta estaba
est aba la mano
ma no del coron
coronel
el Otto
Pérez Molina, director militar de inteligencia (G2).
Me pedían,
pedían, en la misma carta,car ta, una cita y se las di.

178

Días antes del golpe

La reunión no fue nada feliz, pues ya un tanto


molesto,
mol esto, les dije que
que yo quería
quería parar
pa rar el derram
derr amam
amiento
iento
de sangre, y que si ellos querían continuarlo, que me
mandaran las listas de los que irían al frente, porque
 yo iba a reti
retirar
rar a los soldados que se estaban
estaba n muriendo
allí,
al lí, sin
si n saber ni por qué.
qué.
Al terminar esa reunión, me quedó un vacío en
el estómago, como cuando se presiente
presiente algo malo.
m alo. In-
quieto como estaba, llamé al general Ortega, le referí
lo sucedido
 —Señory Presidente,
me dijo: la cosa estestáá di
diff íci
ícil,l, hay un
golpe de Estado caminando. O nos lo dan o se los
damos.
Cuando salió, confieso que me quedé más con-
fundido. Yo seguía pensando que todo estaba bien,
qué carajos estaba pasando, cuál era la fuente de tan-
to odio y tanto rencor. En realidad no lo entendía.
Esto coincidió con que el Vicepresidente Espina se
encontró
le dijo quecon Fernando
nosotros
nosotros Andrade
estába
estábamos Díaz–Durán,
mos ciegos y que quéquien
cara-
 jos le estaba
est aba pasando
pa sando a Ortega
Or tega,, que ya había
h abía un
u n golpe
gestándose y no lo desarticulaba. También la esposa
del mismo vicepresidente, se encontró con la esposa
del Ministro de la Defensa, general Domingo García
Samayoa, viniendo ambas en un vuelo de Miami, y
le comentó que si las cosas seguían así, nos darían un
golpe de Estado.
Con el tiempo, y ya en el exilio, leyendo el libro
Dictating Democracy, de Rachel McCleary, encontré
que en la página 164, la autora refiere una conversa-
ción con un hombre de negocios, quien le pidió per-
manecer en el anonimato. Él le contó que el 3 de ju-
nio, días
día s después del golpe,
golpe, en una reunión
reun ión en casa de
 Juan Luis
Lui s Bosch, convocada
convocada por JuaJuann José Gutiér
Gutiérrez
rez y

179

La guayaba tiene dueño

en presencia
presencia de otros empresarios, el general Domin-
Dom in-
go García Samayoa, entonces Ministro de la Defensa
Nacional, dijo que la única forma que él tenía “para
parar a Serrano,
Serra no, era pegándole un tiro”
t iro”..
A l leer lo expuesto por McClear
McClearyy en su libro
l ibro,, en-
tendí que todo lo que nos habían dicho era verdad;
 y ag
agradez
radezcoco a Dios que nos haya protegido, pues la
conspiración era mucho más real de lo que se pensaba
 y vi muy cla claro
ro que era motivad
motivadaa por los temores e
insatisfacciones
también pequeñadecúpula
una pequeña cúpula militar y una
empresarial.
 Yaa aquí la cosa se hací
 Y hacíaa evidente,
ev idente, no así quiénes,
cómo y cuándo; pero como dice el dicho, “al diablo
siempre se le ve la cola”.
Tanto en el libro de McCleary, como en el artí-
culo del periodista Juan Luis Font, titulado “La his-
toria tras bambalinas”, en referencia a la junta entre
Dionisio Gutiérrez y Otto Pérez Molina, realizada el
29 de “La
mayo, los
iónautores
reunión
reun coinciden
que habría cuando
de señalar
señal alse
ar la alian lee:
ianzaza entre
sectores civiles y militares para derrocar a Serrano se
desarrolla en el curso de esa madrugada” ( Siglo XXI,
Magazine 21, Nº 56 del 22 de mayo de 1994 ).
En ese mismo artículo, Font hace dos comenta-
rios muy importantes para entender la trayectoria de
la conspiració
conspiración,n, cuando afirm
af irma:
a:
“Nada podía inquietar más má s a los of
of iciales del Ejér-
Ejér-
cito que una decisión tan av aventurad
enturadaa de un Presidente
al que se le desconfía tanto. Un Presidente que em-
peñadoo en la firm
peñad f irmaa de la paz, no
no dudaría en sacrificar
sacrif icar
al Ejército para alcanzar este logro político. Para los
oficiales, Serrano había perdido la solvencia moral en
ese mal
m alhad
hadado
ado viaje
v iaje a Nueva York.
York.””
Primero: Observemos que el argumento que se

180

Días antes del golpe

esgrime en ese artículo, es decir, el temor de los ofi-


ciales es, en esencia, el mismo que se expone en la
carta del CACIF, de fecha 11 de mayo. Esto indica
que la reunión entre Otto Pérez y Dionisio Gutiérrez
fue para conf
confirm
irmar
ar y fij
f ijar
ar el plan
plan de acción
acción final
fi nal en el
que ya habían venido trabajando y coordi coordinando
nando entre
ambos grupos. Prueba de ello es, también, que Pérez
Molina invitó a varios del grupo
gr upo de los allegados
al legados a los
Gutiérrez, para que dieran charlas a los oficiales de
la G2, con lo que logra que los oficiales a su mando
estuvieran en la misma línea golpista.
Hago ver que esto último se lleva a cabo mucho
antes del 25 de mayo, día en que disuelvo
di suelvo el
el Congreso
Cong reso
 y la Cort
Cortee Suprema de Justic
Justicia.
ia. Po
Porr otra par
parte,
te, ta
tam-
m-
bién hago ver que en la comisión que estaba llevando
a cabo las negociaciones con la guerrilla, estaba de-
bidamente representado el Ejército, con oficiales de
prestigio y carácter. Ellos eran testigos de la forma en
que
para seelaborar
buscaban los consensos
y presentar en la Casadel
las posiciones Presidencia
Presidenciall
gobierno
en la mesa de negociaciones.
Segundo: Observamos cómo Font hace mención
al incidente de Nueva York,
York, como un hecho que min m inaa
mi solvencia moral dentro del Ejército, cuando se sa-
bía que ese incidente fue planificado y llevado a cabo
por la dirección de inteligencia G2 a cargo de Otto
Pérez Molina, con la participación activa del general
 José Domingo
Domi ngo Garcí
G arcíaa Samayoa.
Sam ayoa.
Efectivamente,, fue un
Efectivamente u n día
dí a llen
l lenoo de éxitos en Nue-
va York, en el que, como Presidente de Guatemala y
acompañado de toda la dirigencia política y social del
país, pronuncié
pronuncié un discurso
discur so en el cual fijamos
f ijamos una po-
sición total y nacionalmente consensuada. Tan es así,
que el
el texto del discurso
di scurso mismo,
m ismo, fue elaborado en un

181

La guayaba tiene dueño

sa lón del hotel en Nueva York,


salón York, con la partpa rticipación
icipación de
todos los integrantes
integra ntes de la delegación.
delegación.
Todos estábamos eufóricos: se le había puesto el
cascabell al gato. La guerrilla
cascabe guerri lla estaba acorralad
acorraladaa y ahora,
por primera vez, la comunidad internacional
i nternacional en pleno
nos apoyaba y veía con agrado y sobre todo con con-
fianza, la sólida posición de las fuerzas democráticas
del país.
Mientras esto acontecía, la G2 trabajaba activa-
mente en desvirtuar el triunfo de la democracia re-
presentativa del país, contratando a un camarógrafo
para que se presentara a una “barra show” con el fin
de tomar un video.
 Yoo nunca pedí ir a ese luga
 Y lugar.r. Fui
Fu i l levado, acom-
pañado de mis hijos y de toda la delegación. Cuando
llegué al sitio, dije que yo no quería entrar. Entonces,
un oficial
of icial me dijo
d ijo que
que estaba bien, pero
pero que esperára-
esperára-
mos a que llegara el general García Samayoa, pues él
dijo que íairía
se juntaría
juntar cona realizar
nosotros.un mandado y quedó que allí
nosotros.
Perm
ermanecimos
anecimos esperando por espacio de quince
qui nce a
treinta minutos.
m inutos. Llegó García Samayoa y pedí que nos
nos
retiráramos.
retirá ramos. Entonces se me informó que la televisión
estaba afuera.
af uera. Ingenuamente pensé que
que qué iba a estar
haciendo la televisión en Nueva York, en las afueras,
en una calle marginal; que eso era un absurdo. Pero
allí había una luz, grabándolo todo a la loca. Horas
despuésUnivisión,
cadena ese video conestaba
todasiendo transmitido
una versión que eraporim-
la
posible que la hubiera redactado un camarógrafo que
“casua
casualmente
lmente pasaba por allí
al lí””.
Lograron
Logr aron el escándalo que los los golpistas querían;
querían ; y
 ya después, las disculpas
discu lpas presentadas
presentada s por Univ
Univisión,
isión, así
comoo otros testimonios,
com testi monios, no sirviero
sirv ieronn de nada: habían
h abían

182

Días antes del golpe

golpeado mi integridad y reputación. Y aún más, al


país y a la esperanza justa del pueblo por la paz. Esta
conspiración y su historia íntima y sórdida, amerita
otro libro que tengo en preparación. (Véase Anexo:
Cinco)
Puedo ahora decir que “aquí el diablo ya no solo
enseñó la cola, sino que trajo un retrato de cuerpo
entero”. A la luz de todo lo anterior, hoy sí que tiene
sentido la observación de Ortega Menaldo: “O nos
dan el golpe, o se los damos”. Mi conclusión ahora,
después de tantos años, es que el golpe yo lo di, pero
no a quien debía
debía de habérselo
habér selo dado; entonces ellos me
lo dieron a mí.
La conspiración quedó clara, venía gestándose
desde muchos meses antes. Las macabras intenciones
de matarme a mí, matar a uno de mis hijos, o darme
el golpe de Estado, encontraron un detonante con los
eventos del 25 de mayo, los que pusieron velocidad a
 ylosDioni
acuerdos
Dionisio del 29rez,
sio Gutiér de mayo,
Gutiérrez, entre OttoenPérez
aparentemente Molin a
Molina
representa-
ción de sus respectivos sectores.
Ahora solo suena en mis oídos las palabras que
pronunció
pro nunció el oficial
of icial del Ejército que
que me seguía
seguí a cuan-
cua n-
do, el 31 de mayo de 1993, salíamos del despacho del
Ministro de la Defensa: “Otra traición vos, hijo de la
gran puta”.

183

CAPITULO X
La construcción de la fachada

De lo relatado por algunos de los cronistas del


golpe de Estado del 1º de junio de 1993, orquestado
por la alianza Gutiérrez Bosch–Pérez Molina, se de-
duce que sus principales problemas para consolidarlo
estaban en lograr legal
legalidad,
idad, sea como fuere y,
y, en con-
secuencia, obtener una legitimidad aunque fuera de
fachada.
Fachada
Fac hada de legalidad
legal idad

Está claro en la legislación guatemalteca, que al


Presidente de la República no se le puede destituir;
solamente si el Congreso (después de seguir un lar-
go procedimiento avalado por una mayoría calificada
de votos) lo declara loco o simplemente en estado de
interdicción, por lo tanto incapacitado mentalmente
para ejercer el poder.
poder.
Gracias a Dios que a estos señores
señores no se les ocurrió
ocurr ió
este procedim
procedimiento
iento,, pues si no,
no, aun estaría
esta ría en un ma-
nicomio, sirviendo de escarnio para el cumplimiento
de sus aviesos fines. La “solución” encontrada por los
asesores del Mi
Minist
nistro,
ro, ante la rotunda
rotund a decisión
decisión mía de

La construcción de la fachada

no renunciar, fue declarar


declara r el abandono del puesto,
puesto, sin
importar que yo estuviera sentado en mi escritorio y
en mi
m i propio despacho.
Causa espanto que esta solución fue encontrada
 y suger
sugerida
ida por cuat
cuatro
ro aboga
abogados
dos ajenos a la CortCortee de
Constitucionalidad:
Constitucional idad: Eduardo
Edua rdo Palomo
Palomo Escobar,
Escobar, Marco
Augusto García
Ga rcía Noriega , Fernando
Fern ando Quezada Toruño Toruño
 y Carlo
Carloss Enr
Enrique
ique Reinoso Gil
Gil.. Eso sí, con la autor
autoridad
idad
e investidura que proporciona el decretar la legalidad
de un acto como ese, en el propio despacho del Mi-
nistro
nist ro de la Defensa, apoyados
apoyados en los fusiles,
fusi les, y “acon-
“acon-
sejando”” a un par de titimoratos
sejando moratos magistrados
magi strados (García
(Ga rcía La
Guardia y Larios Ochaita), quienes también habían
concur
con currido
rido al despacho a prestar
prestar sus servicios
ser vicios legales y
ponerse a disposición de los patriotas .
Según ellos,
el los, en defensa
defensa de la democracia,
democracia, la viola-
v iola-
ban, atropellando no solo sus instituciones, sino tam-
bién ignorando fundamentales y sagrados principios
del derecho
derecho.. Estos principios, si los viola
v iola un individuo
i ndividuo
o autoridad común, constituye un hecho delezna-
ble, paro si lo hace el ente encargado de defenderlos
es horroroso, como lo calificó el propio Ramiro de
León Carpio, en aquel momento Procurador de los
Derechos Humanos, cuando en la entrevista dada al
periodista Haroldo Shetemul, manifestó:
“…la resolución emitida por la Corte el 25 de
mayo en contra de Jorge Serrano, fue una resolución
política,
malismo que si biennoayudó
jurídico tenía a absolutamente
salir de la crisis,nada.
de for-
Al
contrario, algunos juristas connotados la califican de
horror juríd
ju rídico.
ico.””
Sin embargo, un nuevo concepto se acuña en la
legislación guatemalteca y es “el horror jurídico”; lo

185

La guayaba tiene dueño

que quiere decir que cuando un hecho se realiza al


amparo del poder de las elites (empresariales y mili-
tares) y sobre todo, en el despacho mismo del señor
Ministro de la Defensa, este constituye fuente de de-
recho.
rech o. Léase cuidadosamente:
cu idadosamente: se perfecci
per fecciona
ona un golpe
de Estado, sin importa
i mportarr que nombre
nombre se le de.de.
Es inconcebible, y al mismo tiempo preocupante,
que muchos
muchos de los formadores
form adores de opinión
opin ión pierden
pierden ob-
 jetividad
 jetiv idad en el an
anál
álisi
isiss e inter
interpretación
pretación de los hechos,
pues si quieren que sean publicados, tienen que estar
dentro de la línea marcada por los editores. O lo que
es peor: la de los dueños de los editores. Así que, por
eso y por las consabidas “fafas” (este término, es sim-
plemente
ple mente un soborno para cualquier
cua lquier mort
mortal,
al, pero para
un comunicador social es simplemente una “fafa”) la
opinión pública se traga un dinosaurio de este o de
cualquier
cua lquier tipo.
A la luz de esta realidad, los golpistas pudieron
dar un barniz de legalidad, pero quedó manifiesta la
vergonzosa irresponsabilidad del sistema de justicia;
sistema que a partir
part ir de ese momento
momento ha sido fiel
f iel y obe-
diente a los dictados de las l as elites económicas, quienes
se protegen comprando jueces, magistrados y fiscales.
Pero no ha quedado
quedado allí,
al lí, pues el sistema de manipula-
man ipula-
ción y compra
compra de la justicia
just icia que ha impuesto esta elite
el ite
económica, ha favorecido el narcotráfico y el crimen
organizado, quienes, haciendo uso del mismo, tienen
en Guatemala
describió un paraíso
la cadena BBC depara delinquir,
Londres, tal como
en reportaje
report quloe
aje que
publicó sobre la impunidad en Guatemala y el diario
El Pais de España, entre otros.
Este sistema, como veremos más adelante, lo
han usado para perseguir a las personas que en algún
momento se les han insubordinado; para debilitar al

186

La construcción de la fachada

mismo Ejército, persiguiendo selectivamente a algu-


nos de sus oficiales; cubriendo escándalos financieros
comoo el interno dentro
com dentro de la fami
fa milia
lia Gutiérrez, que ha
tenido fallos de tribunales internacionales y en Gua-
temala, que es el país afectado y estafado, parece que
no existiera.
Así también,
ta mbién, el
el sistema ha protegido a los esbir
esbirros
ros
utilizados para los “tumbes” de droga, contrabando e
incluso
lidad ya para
no hay
la mal
sistema
llamada
de justicia,
limpiezase social.
ha ultrajado
En rea-
el
derecho y lo que es peor: se ha alienado la conciencia
de toda una nación, que sabe que la “justicia” tiene
dueño.
A manera de ilustración, relato lo que me conta-
ba hace poco un Magistrado de la Corte Suprema de
 Justicia.
 Justic ia. Recién l legado al puesto, recibió la vi visita
sita de
uno de los abogados
abogados litiga
lit igantes
ntes de un grupo
gr upo econó
económi-mi-
camente poderoso y le dijo que sabía que le tocaba a él
ser ponente
ponente en un caso ca so en el que estaban invo i nvolucrados
lucrados
sus representados.
representados. Le explicó
expl icó que
que su visita
vi sita tenía el ob-
 jetivo de entregarle
entreg arle el tenor de la l a resolución que ellos
querían que se emitiera, lo cual le ahorraba al magis-
trado la pérdida de tiempo. Y que además, el conte-
nido del borrador ya estaba debidamente conversado
 y viabi
v iabililizado
zado con otros
otro s mag
m agist
istrados.
rados. Tam ambién
bién le hizo
h izo
ver cuánto era lo que al magistrado le correspondería
por sus “buenos
“ buenos oficios”
of icios”..
Fachada de legitimidad

¿Cómo hacer para que la comunidad internacio-


nal y la ingenua conciencia nacional, que estaba feliz
con que yo hubiera disuelto el Congreso de la Re-
pública y la Corte Suprema de Justicia, se tragaran el

187

La guayaba tiene dueño

cuento de que no eran Gutiérrez


Gutiér rez Bosch–Pérez Molin
Molinaa
 y compañí
compa ñía,
a, los autores y ejecutores del golpe
g olpe de Es-
tado?
Lo primero que soñaron y decidieron, según lo
relatado por Juan Luis Font y Rachel McCleary en
sus documentos,
documentos, fue organ
organizar
izar una
u na manifestació
ma nifestaciónn ma-
siva el 31 de mayo, dando el respaldo al movimiento
golpista y demostrar así, repudio a las medidas toma-
das por golpista
euforia mí. Aparentemente esta manipuladora,
y su capacidad ilusión nacida de su
duró
poco,, pues ambos autor
poco autores
es relatan
relata n que, tanto Dionisio
Gutiérrez como Otto Pérez Molina, se dieron cuenta
de que no tenían capacidad de convocatoria y que su
ilusión no era más que eso: una ilusión imposible de
concretarse.
Eso resultaba lógico, porque la gente estaba feliz
con las medidas tomadas. No entusiasmaba a nadie la
idea de los militares nuevamente, ni mucho menos la
idea de los Gutiérrez al poder. Antes bien, en la mis-
ma puerta del Palacio Nacional, la propia Rigoberto
Menchú, con un grupo de unas cien personas, grita-
ban que se estaba dando un golpe militar, y agredie-
ron a los civi
civiles
les que se estaban prestando a eso; tal t al fue
f ue
el caso de Jorge Carpio Nicolle, de Alfonso Cabrera
 y de
d e sus
su s respect
re spectivas
ivas comit
comitivas.
ivas. El gr
grito
ito en la
l a cal
c alle
le era
lo suficien
suf icientemen
temente te elocuente:
elocuente: “¡Es un u n golpe militar!
mil itar!””,
“¡Mililitares
“¡M itares no,
no, civiles sí!”
sí! ”.
Para resolv
resolver
er en forma i
inmediat
nmediataa el incidente,
golpistas juntaron a las pocas personas que estaban en los
el Palacio; a unos los sentaron y a otros los pusieron
de pie, en el Salón de Recepciones y con todos ellos
enmarcaron el escenario, procedieron a leer el atroz
parapeto jurídico con el que, según ellos, salvaban el
bache que el golpe de Estado les representaba.

188

La construcción de la fachada

Conscientes de que la foto no era suficiente, co-


rrieron a buscar caras para apoyarse y lo hicieron en
lo que llamaron
lla maron la
l a “Instancia
“Insta ncia Nacional de Consenso”,
Consenso”,
que cobró vida el 30 de mayo, dando continuidad al
Foro Multisectorial del CACIF, incluso reuniéndo-
se en la misma sede de la Cámara de Industria. Eso
demuestra que también estos señores se convierten
por sus habilidades y dinero, en los dueños de la “le-
gitimidad”, para
Gutiérrez–Pérez
Gutiérrez–Pé lavar la había
rez Molina cara aconsumado.
todo loado.
consum que ya el eje

Títeres
Títeres y titir
tit iritero
iteross
Con perdón de quienes hacen del espectáculo de
títeres un aporte significativo a la educación de niños
 y jóv
jóvenes,
enes, considero necesar
necesario io ilu
ilustr
strar
ar est
estaa par
parte
te de
mis reflexiones, con un símil entre los títeres y los
titiriteros políticos que montaron el golpe de Estado
del 31 de mayo de 1993. Encontré unas definiciones
en Internet, de autor desconocido, pero que sirven
para apuntalar el concepto de lo que referiré en este
mismo capítulo:
“Una
“U na mario
mar ione
neta
ta o un títe
t ítere
re es una figur
f igurililla
la o mu-
ñeco que se gobierna de manera que parezca que su
movimiento
movim iento es autónomo
autónomo.. Su movimiento
movim iento se efectúa
con la ayuda de muelles, cuerdas, guantes, alambres,
hilos, palos y demás utensilios adaptados a cada tipo
de marioneta o títere. Las marionetas hablan siempre
con una voz aguda, chilch illona
lona y falsa”
fa lsa”..

189

La guayaba tiene dueño


Reunión llevada a cabo, el 1 de junio de 1993, en el Salón de Recepciones del
Palacio Nacional
Nacional de Guatemala, en la que un grupo de civiles,
civi les, aparecen apoyan-
apoyan-
do el golpe de estado, perpetrado esa madrugada por la cúpula militar.Hecho
curioso para los que todavía dudan si fue un golpe. En la foto, vemos que el
segundo
segu ndo de pie de derecha a izquierda,
izquierd a, es el famoso locutor de TGW Radio Na-
cional de Guatemala
Guatem ala,, Otto Rene Mansill
Mansi lla,
a, a quien se le conocía
conocía como la voz
voz del
“Golpe de Estado”, con micrófono en mano, listo para relatar un golpe mas.

Cuando reviso esta


est a foto,
foto, una
un a y otra vez, encuentro
encuentro
en ella que hay gente buena,
buena, mezclada con oportoportun
unis-
is-
tas, con maleantes y desconocidos; personas sedientas
de protagonismo. Lo que es una realidad es que allí
estaban todos: algunos prestando su cara y otros solo
su bulto. Supongo
Sin embargo,
emba que la mayoría
rgo, aunque de buena
he comprado fe. una
dos lupas,
más fuerte que la otra, no he podido encontrar en
la foto a los verdaderos responsables de la conspira-
ción. Observe el lector que no está Juan Luis Bosch,
ni Dionisio Gutiérrez, ni Otto Pérez Molina, ni Luis
Fernández Ligorría. Entonces me pregunto: ¿por qué

190

La construcción de la fachada

estos señores
señores no dieron la cara?
car a? ¿En
¿ En dónde estaban en
ese momento? ¿Qué estaban haciendo? Solo me doy
cuenta de que, siendo ellos los titiriteros, no podían
dejarse ver,
ver, pues así, el espectáculo
espectácu lo perdería su efecto
en tan interesante funció
fu nción.
n.
Para ser más claro en el concepto, he recurrido a
Wikipedia para obtener una explicación de lo que es
un titiritero, la cual transcribo a continuación:
“Elbasado
tación titiritero
en diseña el contenido
historias, de la represen-
cuentos o tradiciones po-
pulares o bien en argumentos de su propia invención.
Escribe el guion de la representación y lo adapta a
los muñecos de que dispone. Busca y selecciona otros
objetos o materiales que serán utilizados por los mu-
ñecos en el desarrollo de la obra. Pinta el fondo de
escenario y lo decora.
En el momento de la representación, provoca su
movimiento manejando los hilos, cables o varillas de
las
Paramar
m arion
ionetas
animar etasloso introducie
imuñecos,
ntroduciendo
ndo
hablasu omano
cantaenimitando
el interior.
la
voz de los diferentes personajes.”
Viendo así la cosa, ya se entiende mejor lo que
pasó ese día y también entenderemos un poco mejor
lo que pasó en los años venideros, pues los señores
títeres de la
l a foto, hoy
hoy después de veinte años ya no es- es -
tán,, o están presos, son
tán son persegu
perseguidos,
idos, están margi
ma rginados
nados
o en el abandono y anonimato.
anonim ato.
Sin embargo, los titiriteros de esta historia han
gozado de toda clase de impunidad y mantienen su
vigencia, sobre todo los Gutiérrez–Bosch,
Gutiérrez–Bosch, quienes han
usufructuado el poder al máximo. Incluso, llegaron a
privatizar la Presidencia de la República en tiempo
de Oscar Berger Perdomo. Lo que falta por ver es
si su compañero de la aventura del 93, general Otto
Pérez Molina, ya como Presidente de la República de
191

La guayaba tiene dueño

Guatemala, se les subordinará y les hará caso; o bien,


 ya con la band
bandaa en el pecho, buscar
busc aráá su autonomía e
independencia. Esto solo lo podremos saber, cuando
se empiecen a pelear entre ellos.
Regresando a nuestra foto, los casos más dramá-
ticos son los de Jorge Carpio Nicolle, Epaminondas
González
Gonzá lez Dubón
Dubón y Ramiro
Ram iro de León Carpio.
 Jorge Car
Carpio
pio Nicolle, un buen hombre, como
político
sincero ymuyde orientado a suhumana;
gran calidad deseo deobviamente,
ser presidente;
en
la foto lo colocaron de pie, como figura prominente.
Quién le iba a decir al pobre tocayo, como yo le lla-
maba, que un mes después lo iban a asesinar en una
forma tan cobarde, tan inhumana, tan deleznable y,
en una palabra: tan horrenda.
Quiero decirles que cuando supe de su muerte
lo lloré y mucho, a pesar de la diferencia que él y yo
habíamos tenido. Jamás un hombre así, al que el país
le debía mucho, merecía tal muerte.
En cuanto a Epaminondas González Dubón, se
trataba
trat aba de un abogado de reputación, a quien yo
yo traté
muy poco, básicamente dentro de la relación institu-
cional. Sin embargo, conversar con él era suficiente
para aquilatar su capacidad.
El no asistió al llamado que le hizo el Ministro
de la Defensa. Sé que su dignidad se lo impedía, y
por eso no me explico por qué aparece en la foto.
Tengo entendido
desacuerdo con la que
salida
después,
jurídicaélque
mismo
le impusieron
comentó sua
la Corte de Constitucionalidad.
En forma misteriosa armaron un atentado, que
algunos dijeron que era para impedir que hablara, y
que lo que pretendían era solo amedrentarlo; pero la
bala no les hizo caso, pues al fraccionarse en el resor-
te de un asiento, hace que una esquirla llegue a uno
192

La construcción de la fachada

de sus pulmones y desgraciadamente lo mata. Otra


muerte cobarde, inhumana y condenable desde todo
punto de vista.
vist a. No es justo que a hombres
hombres así los ase-
sinen de esa manera.
Ramiro
Ram iro de León Carpio
Car pio,, también
ta mbién un buen
buen hom-
bre, un poco ansioso de protagonismo, quería ser Pre-
sidente, pero no tenía claro cómo lo podría lograr.
Recuerdo unos meses antes del golpe, me pidió una
entrevista y por supuesto,
tregar el informe lo recibí.
de su primer año deMe llegó como
gestión a en-
Procurador de los Derechos Humanos. Cuando a la
ligera lo revisé,
revi sé, le dije:
 —Ra m iro, qué
 —Ram qué bueno que se te acabaacabaron
ron la
lass fotos
tuyas, porque si no hubieras entregado un reporte de
mil hojas.
Él solo se echó a reír y me dijo:
 —¡¡ Qué jodido sos
 — so s !
A Ramiro lo utilizaron de tal forma, que le ex-
primieron su dignidad, haciéndolo que se atropellara
a sí mismo;
m ismo; que atropellara
atropella ra sus convicciones
convicciones e incluso
incluso
sus propios ideales, llevándolo a una muerte en vida,
la que no pudo sobrellevar y según me cuentan algu-
nos de sus amigos,
am igos, eso fue
f ue lo que
que lo mató.
A Francisco Reyes López lo uti utililizaron
zaron bien, pero
pero
solo por unos momentos, pues ya estando en el go-
bierno como Vicepresidente se dio cuenta de la reali-
dad de las cosas, tomó actitudes que no solo lo sepa-
extremo los dueños
raron de que del país,susino
le montaron
montaron tinque
tingl adoloyenf
glado eno
nfrentaron,
rentaron, al
estuvieron
satisfechos hasta que lo metieron preso.
Con Eduardo Palomo Escobar la cosa no fue di-
ferente. A él lo usaron. Paradójicamente, fue perse-
guido después, durante el gobierno de Berger, el de
la privatización de la Presidencia. Palomo era socio y
abogado del Presidente del Banco del Café, Eduardo
193

La guayaba tiene dueño

Gonzá lez, personaje


González, personaje que
que pretendió
pretendió defini
defi nirr una política
independiente,
independien enf rentándose políticamente a los due-
te, enfrentándose
ños del país. Tuvo
Tuvo suerte, pues aunque
au nque quedó sin poder
ni dinero, lo cierto es que quedó vivo. Le cerraron
el banco de su propiedad y para acallar este abuso, lo
persiguieron a él y a sus colaboradores (incluyendo a
Palomo Escobar)
Escobar) matando así las l as posibilidades
posibil idades de que
Eduardo González
Gonzá lez pudiera
pudiera llegar
llega r a la Presidencia
Presidencia y de
paso, En
castigándolo
tampor
biénnpretender
la foto tambié hacerles
está Carlos Vielmasombra.
Vielman,
n, el perso-
naje que más cercanía
cercan ía tien
t ienee con los Gutiérrez–Bosch.
Hombre fiel y extremadamente obediente a ellos.
Posteriormente, cuando se disuelven los estamentos
de inteligencia del Estado, es Vielman a quien ellos
designan para organizar su inteligencia, pero ya en
forma privada, llevándolo en el Gobierno de Berger,
el de la privatización de la Presidencia,
Presidencia, hasta
ha sta la impor-
i mpor-
tante posición de Ministro de Gobernación.
¿Qué hicieron con Vielman
Vielman?? Eso es historia. Bas-
ta leer el libro “Crimen de Estado. El caso Parlacen”,
escrito por Lafitte Fernández, para saber hasta dónde
fueron capaces de llegar con el poder en las manos.
Hoyy, Carlos Vielman
Ho Vielm an está
e stá preso en España,
E spaña, esperando
e sperando
ser enjuiciado.
A los militares presentes, antes de lo que canta
un gallo les habían puesto la punta del zapato en la
rabadilla y los tenían de patas en la calle; tal fue el
caso del general
gene
Perussina. Losralotros,
Domcomo
Domingo
ingo García
Ga rcía Samay
Sam ayoa
Enríquez, oa y Roberto
Roberto
tuvieron mejor
suerte y duraron un poco más.
El resto, son personajes como Mario Solórzano,
Arturo Soto, Alfaro Mijangos, Reinoso Gil, Mario
García la Guardia, Larios Ochaita, Rodolfo Orozco,
personajes que no sé si sabiéndolo o no, prestaron la
cara. Con el tiempo los han reciclado, les ha dado
194

La construcción de la fachada

un poco de protagonismo, pero en general, hoy si no


están muertos, disfrutan de la marginación y el ano-
nimato.
Entre los otros hay algunos que no distingo o no
recuerdo, y algunos a los que me referiré posterior-
mente, pero creo que lo que aportaron fue el bulto,
para hacer volumen en la foto, lo cual como vimos
anteriormente, también es responsabil
responsabilidad
idad del titi
titirite-
rite-
ro: organizar el escenario.
La filos
f ilosofía
ofía de los titirite
titir iteros
ros
Ellos y sus acompañantes y adláteres están con-
vencidos de “que lo que es bueno para ellos es bueno
para el país” y que todo aquel que se oponga a tan
 justa y conv
conveniente
eniente premi
premisa,
sa, es un enemig
enemigoo del Es-
tado, sacrílego de la libertad, antidemocrático y mal
elemento
ele mento para el desarrol
desa rrollo
lo..
Naturalmente que esto los lleva a “su” realidad:
los buenos gobernantes son los que les obedecen, los
dóciles, los que se hacen de la vista gorda y les permi-
perm i-
ten usar al Estado y sus instituciones para apuntalar y
promover su progreso, pues de acuerdo con su filoso-
fía, si ellos progresan, también el país progresa.
¿Hasta donde hemos llegado en Guatemala, con
esa filosofía? En aras de la defensa de la Constitución
se le viola, siempre y cuando sea con la venia de ellos.
el los.
En ara s de la defensa
aras
de injusticias, siempredeylacuando
justicia,sea
se comete
come te todo tipo
para protegerlos.
En aras
ara s de la defensa del derecho
derecho,, se atropellan
atropella n los más
má s
elementales
elementales principios
pr incipios que
que lo sustentan. ElEllos
los siempre
siempre
lo justifican diciendo que eso es para evitar mayores
males. En aras de la defensa del pueblo, se aseguran y
consolidan los privi
pr ivilegios
legios de los poderosos, convenci-
convenci-
dos de que ellos son el termómetro del bienestar en el
195

La guayaba tiene dueño

paí s, y lo que es peor, parece que hubieran convencido


país,
al pueblo de que, en aras de la subsistencia misma del
Estado, hay que venderlo a unos pocos, que se auto-
proclaman como los productivos, los proveedores del
empleo y los garantes de la seguridad.
Que un ministro de la Defensa, apoyado por las
bayone
bay oneta tass y fusiles,
fusi les, llame
ll ame a cuatro abogados, los ponga
a redactar
redacta r una resolución
resolución de la Corte de Constitucio-
Const itucio-
nalidad y
que la ratif que
rati f iqu
iquendespués
en y fir llame
f irmen, a los magistrados
men, en su propi
propioo despacho,para
despacho, eso
lo consideraron práctico, conveniente y necesario, es
decir, un caso vital para el país.
Entonces
Entonc es ¿por
¿ por qué nos asustamos de que los abo-
gados de los poderosos dicten justicia, sobornando o
amenazando jueces? ¿Por qué nos asustamos de que
esos mismos abogados redacten las resoluciones de
 jueces y corte
cortes,
s, si el ejemplo estestáá bien sustent
sustentado
ado en
la habilidad y astucia de remover a un Presidente por
el hecho de no alinearse? Bueno, se abrió la puerta
 y ahora la usa todo aquel que teng tengaa bil
billete
lete suf
suficiente
iciente
para llegarle
l legarle al precio a los
los jueces
jueces y magistrados.
mag istrados. Eso sí
es perversión del derecho.
Sin embargo, para ellos, el fin justifica los medios,
siempre y cuando sean los que controlen y utilicen
esos medios. Permítanme, para cerrar este capítulo,
repetir la expresión de RamRamiro iro de León Carpio cuan-
do, siendo
siendo presidente
presidente de facto, manifestó
man ifestó en entrevista
entrevist a
concedida
concedida
 “…laaresolución
la ya citada
c itadaemitida
revista por
“Crónica
“C rónica”:
”: el 25 de
la Corte
mayo en contra de Jorge Serrano, fue una resolución
política, que si bien ayudó a salir de la crisis, de for-
malismo jurídico no tenía absolutamente nada. Al
contrario, algunos juristas connotados la califican de
horror juríd
ju rídico.
ico.””

196

La construcción de la fachada
De izquierda a derecha, el licenciado Epaminondas González
Gonzá lez Dubón, presi-
dente de la Corte de Constitucionalidad, y el ministro
min istro de la Defensa, gene-
ral Domingo García Samayoa, cuando este último se dirigía a la prensa en
nombre de la Instancia Nacional de Consenso, agrupación organizada dos
días antes. Resulta irónico que fuera un militar, con todas sus insignias y
charreteras, quien
qu ien representara
representara a una instancia
in stancia supuestamente “civil
“civil””.

197

CAPÍTULO XI
Los problemas después
de la función
La fachada de la sucesión
sucesión

Como decimos en buen chapín: “el atol estaba


listo, solo pendiente de ser repartido con el dedo”.
Nuevos
Nue vos actores aparecen
aparecen en escena, y alg
a lgunos
unos de
los títeres,
cuenta al pasarle
de que no todolaeraeuforia,
color deserosa,
color empezaron
ni entusiaa smo
entusiasmodar
golpista.
¿Quién me debía sustituir? Esa se convierte en
una interrogante
inter rogante crucial.
crucia l. La Constitución Política,
Política, en
su Artícu
Ar tículo
lo 189
189,, claramente
clar amente determina
determi na que, en ausen-
cia temporal
tempora l o absoluta del Presidente de la República
“lo sustituirá el Vicepresidente. Si la falta fuera ab-
soluta, el Vicepresidente desempeñará la Presidencia
hasta la terminación del período constitucional”.
Más clara no podía estar la cosa. Si verdadera-
mente estaban defendiendo la Constitución,
Constit ución, qué me-
 jor ejemplo que cumplc umplirl
irlaa y respeta
respetarla,
rla, reconociendo
la autoridad de Gustavo Espina, el Vicepresidente.
Pero esto no era lo que querían los dueños. No habían
llegado hasta allí, para cumplir con una norma que
no les convenía, porque la Constitución y las leyes

Los problemas después de la función

son para
para ellos indicativas
ind icativas de un mero
mero form
formalalismo
ismo para
que las cumplan otros. Ellos son los dueños y están por
arriba
ar riba de la
l a ley.
ley.
Pero, ¿qué sucede? Empiezan a reaccionar los de
la foto y los militares, García Samayoa, Perusina, Or-
tega, y otros más
m ás se dan
da n cuenta de que
que con Espina
Espina hay
h ay
seguridad
segur idad para ellos, y que sin Espina su suerte está en
la nebulosa.
Mientras tatanto,
nto, se enteran
enteran de que Enríquez,
En ríquez, Pérez
Pérez
Molina y sus aliados están buscando otra solución,
que para ellos era incierta y peligrosa. Estos habían
soñado con mi renuncia y la de Espina, las que se
comprometieron a conseguir en determinado mo-
mento, pero que nunca obtuvieron. García Samayoa,
llegó a afir
af irmar
mar que él tenía en su mano esas renuncias.
renuncias.
Me imagino que creyó que al enseñarnos las pistolas
accedería
acced eríamos,
mos, corriendo,
corriendo, a entregárselas.
entregársela s.
Ante esta realidad, los tres abogados que tenían
trabajando en el parapeto jurídico, llegaron al despa-
cho del Viceministro de la Defensa, José Luis Quilo
Ayuso, con el fin de ultimar los detalles que le die-
ran una cara legal al gobierno provisional que ellos
querían. Esto no era fácil, pues la Corte de Consti-
tucionalidad, técnicamente, no podía emitir ningún
fallo, sino solamente un decreto o una resolución, lo
que terminó
termi nó siendo
siendo un Acta
Act a de Ejecución.
Ejecución. Eso no te-
nía la fuerza
Presidente legal para dar paso
y Vicepresidente a la menos
y mucho destitución del
a llamar
la instalación de un Gobierno Provisional que era lo
que los militares golpistas querían y forzaban, ante las
circunstancias planteadas. Sobre todo para la evitar la
llegada de Espina.
Ellos creyeron que nosotros íbamos a ser dóci-
les o quizá miedosos, como lo eran los famosos de

199
 

La guayaba tiene dueño

la Instancia Nacional de Consenso, quienes al estar


la declaración
declarac ión lista, rápidamente
r ápidamente reaccionaron
reaccionaron cuando
el Viceministro de la Defensa, Quilo Ayuso, irrum-
pió en el cuarto donde los tenían reunidos. Tal como
lo relata McCleary, literalmente les “ordenó a todos
que se fueran. Que la conferencia
conferencia de prensa iba a ini-
i ni-
ciarse”. De ese calibre eran los gestores del golpe: se
habían cambiado
ca mbiado
obedientes los papeles,
papeles, losMenudos
y no deliberantes. civi les eran
civiles ahora los
“dirigentes”
que van al espectáculo
espectácu lo sin siquiera saber a ciencia cier-
ta qué era lo que se iba a presentar.
Esa famosa
f amosa Acta
Act a de Ejecución,
Ejecución, documento que se
le presentó a García Samayoa, llamaba a los militares
a que prestaran “el auxilio necesario” para asegurar
que la primera resolución se convirtiera en una ley.
De esta manera, los mi milita
litares
res no iban a estar actuando
actua ndo
por propia
propia iniciativa,
in iciativa, sino más
m ás bien de acuerdo con con la
autoridad democrática civil. ¡Qué ironía más triste!
Los militares ya habían actuado y lo que estaban ha-
ciendoo era darle viso legal
ciend lega l a lo ilegal;
ilegal ; y repito:
repito: estaban
impidiendo que la sucesión se diera en el marco de lo
que ordenaba
ordenaba lal a Constitución.
Const itución.
Se trasladaron ahora al escenario de los hechos,
en donde
donde ya Quilo
Qui lo Ayu
Ayusoso había mandado
ma ndado a colocar el
telón de los respaldos o, como yo lo veo, el de la ver-
güenza. García Samayoa anunció que el alto mando
con
conti
te detinuar
nuaría
ía su reunión
Constitucionalidad,
Constitucional concon
con
idad, loselmagistrados
magi
f in strados
fin de inar
de determ la Cor-
determina r los
procedimientos legales para que el país regresara al
“orden constitucional”.
En la declaración de García Samayoa, quedaron
establecidos conceptos dignos de una tragicomedia.
Predice el retorno a la constitucionalidad, de la si-
guiente manera:

200
 

Los problemas después de la función

Para dar cumplim


cumpl imien
iento
to al artícu
ar tículo
lo 189
189 de la Cons-
titución, Espina asumiría la Presidencia, pero que de-
bería renunciar inmediatamente.
Que la renuncia de Espina sería presentada al
Congreso, para que fuera ratificada.
Que el Congreso que ratificaría la renuncia de
Espina, sería previamente purgado, pues deberían
haber
apare renunciado
aparecían
cían todos los diputados depurables que
en una lista.
l ista.
Que después, el Congreso, ya depurado, elegiría
al nuevo Presidente y al nuevo Vicepresidente.
Que se reconocía la autoridad de la Corte de
Constitucional para que le asignara el papel que el
Ejército debería de jugar.
Definitivamente que esto es propio de un país
de opereta. Casi doy la razón a quienes nos apodan
como “repúblicas bananeras” (“Banana Republics” ).
Solo observemos: el Ministro de la Defensa establece
que Espina asume temporalmente, lo cual es un he-
cho inconstitucional. Dice que debe renunciar, hecho
inconstitucional; que el Congreso debe dar posesión
a Espina y aceptar su renuncia. O sea, está aquí deci-
diendo por el Congreso y, lo que es aún peor, deter-
mina
mi na que el Congreso que realice
real ice estos actos debe ser
previamente depurado. Es decir, que todos los dipu-
tados de la lista deben renunciar previamente. Todo
esto es un
lo diga uarbitrario
n Minist e inconstitucional.
Mi nistro
ro de la Defensa;
Defensa; pero Qué horror
mayor que
horror
es que lo
lo avalen los
los magistrados
mag istrados de la Corte
Cor te de Cons-
titucional. Si esto no fue un golpe militar, habría que
definir un término más contundente en lugar de la
palabra golpe .
Pero esto no queda aquí. Determinan que ese
Congreso ad hoc , depurado y obediente
obediente,, deberá elegir

201
 

La guayaba tiene dueño

al nuevo “Presidente y Vicepresidente”


Vicepresidente” constituciona-
constit uciona-
les, por supuesto
supuesto… …
No contentos con todas estas medidas de hecho,
tambié
ta mbiénn legisla
legisl a por la autoridad
autoridad de las
la s charreteras y los
fusiles, declarando que el Ejército y los militares asu-
mirí
mi rían
an el papel
papel que
que la Corte de Constit
Constitucio
uciona
nalidad
lidad les
habían asignado. Norma esta muy sui generis, ya que
no está
subordi
subor previsto
dine
ne en la Constitución,
a una Corte, pero como queloelhacían
como ellos ejército
hacía se
n y los
dueños del país estaban en la jugada, jug ada, eso no era incons-
titucional,, sino que completamente
titucional completamente legal…
Van con Espina
Espin a a plantearle
plantea rle el pla
plan,
n, pero le hacen
ver que para darle posesión, el sector privado exige
que previamente presente su renuncia; a lo que Espi-
na, con toda razón se niega. Al no cumplirse con la
condición de los dueños, Espina ya no era una opción.
¿Y ahora qué?
La depuración del Congreso tampoco estaba fá-
cil. Cabrera
Cabrera Hidalgo
Hida lgo de la DC, para impulsarla,
i mpulsarla, pedía
que se quita
quitara
ra de la lista
l ista de depurables a Lobo Dubón
 y Jorge CarCarpio
pio de la UCN. Tam ambién
bién pedí
pedíaa que se
quitara de la misma
m isma lista
li sta a Edmund Mulet.
Mulet.
Rodil y los magistrados de la Corte también se
defendían de la depuración que querían hacer con
ellos y,
y, hábilmente
hábil mente,, estaban formando
forma ndo una alian
al ianza
za con
los partidos políticos para apoyar la tesis de Espina, la
que se oponía frontalmente a las ambiciones del sec-
tor privado y la de los milita mi litares
res que apoyaban
apoyaban a Pérez
Pérez
Molina y a Enríquez.
El 2 de junio, en medio de todo este relajo, apare-
ce Espina en televisión acompañado de García Sama-
 yoa y Peru
Perussi
ssina,
na, af
a f ir
irma
mandondo que él no había renuncia-
renunci a-
do y que ya había hablado con diferentes sectores y
representantes
repr esentantes de países,
pa íses, incli ncluso
uso con el Departamento
Depart amento

202

Los problemas después de la función

de Estado de los Estados Unidos y que todos lo re-


conocían a él como el único y legítimo Presidente
de Guatemala. Declaró también que las depuraciones
tanto de la
l a Corte como del Congreso, no eran viables,
porque no existía ningún medio legal para realizar-
las.
Ese mismo día, Pérez Molina se entera de que,
tanto él de
tituidos como nueve oficiales
sus cargos por alterar más, habíanjerárquico
el orden sido des-
e insubordinación. Al enterarse de esto, el sector pri-
vado contactó a Pérez Molina y a su segundo, Mario
Mérida, para que se pusieran en actitud de combate,
pues se decía
decía que los oficiales
of iciales jóvenes
jóvenes iban a ser trans-
tran s-
feridos a Alta Verapaz o al Quiché, lugares en donde
había hostil
hostilidades
idades con
con la guerrilla.
guerri lla.
Según cuentan, el sector privado fina f inanció
nció a algu-
alg u-
nos oficiales para que salieran del país y evitar así que
se concreta
concretara ra su nue
nueva
va designación.
desig nación.
De golpe y porrazo, como se dice comúnmente,
el escenario estaba complicadísimo. Los militares que
habían dado el golpe se habían dividido, por temores
 y am
ambiciones
biciones pura
puramente
mente persona
personales.
les. Est
Estaa div
división
isión le
daba una oportunidad a los políticos y a Rodil, de
recobrar
reco brar algo
a lgo de protagonismo.
protagon ismo.
El sector privado, sintiéndose amenazado, estaba
dispuesto a explotar cuanto cartucho tuviera a su al-
cance. Los Estados Unidos enviaban severas órdenes
a los militares de Guatemala, principalmente al alto
mando, de no permanecer bajo un régimen militar.
Esto último,
ú ltimo, aparentemente
aparentemente les fuef ue comunicado como
una decisión tajante tomada al más alto nivel en el
Departamento de Estado en la que participó Meter
Tardoff, Subsecretario de Estado para Asuntos Políti-
cos, y Bernard Aroson, Subsecretario de Estado para

203

La guayaba tiene dueño

Asuntos Internos de América Latina.


¡ Qué horror o qué tragedia
traged ia!! Todo
Todo se había vuel
v uelto
to
un enjambre de ambiciones
ambiciones y posiciones
posiciones para reparti
repar tirr
el puesto
puesto que yo
yo tenía y que sin ning
ni nguna
una autoridad me
quitaron.
Me contaron que en el propio sector privado ya
las ambiciones se hacían sentir. Alejandro Botrán se
sentía el ungido,
quien anduvo pero también
presentando Edgar
un plan paraHeinemann,
pedirme la
renuncia, pensando que una un a mediocre presentación
presentación lo
habilitaba para dirigir el país. Supe después, de buena
fuente, que la discusión con sus amigos era si debían
pasarse a vivir a la Casa Presidencial o deberían que-
darse
dar se en su casa. Eso me hace pensar tambié
ta mbiénn que, en
en
la “profu
“profundidad
ndidad”” de sus elucubraciones,
elucubraciones, discutieron
di scutieron el
tamaño
tama ño de las male
ma letas
tas que podrían llevar
llevar..
Hábilmente,
García Sa mayoa yelotros
Samayoa sector privado,
res, losen
mi litares,
milita conuna
conven junta
ce de con
vence que
que
el camino era elegir a un nuevo Presidente por parte
del Congreso, tal como estaba; es decir deci r sin depurar, y
a un nuevo Vicepresidente,
Vicepresidente, asum asu m iendo nuevamente
nuevamente el
Ministro la responsabilidad de conseguir la renuncia
de Espina.
A estas altur
a lturas,
as, un nuevo
nuevo golpe se fraguaba
frag uaba dentro
de los mi
mismos
smos militares.
mil itares. Enríqu
Enr íquez,
ez, en contubernio
contubernio con
el sector privado
privado y en reuniones secretas, había llegado l legado
al acuerdo
acuerdo de impulsar
impulsar una
u na salida
sal ida a la crisis, aislando
a islando a
los líderes de los grupos populares y de los sindicatos
 y contacta
conta ctado
do persona
per sonalmente
lmente a los lo s comand
com andante
antess de la
lass
principales
princip ales zonas milm ilitares
itares del país.
También hábilmente, este grupo que caminaba
de manera soterrada para conseguir una solución a su
medida, hacía
h acía que los representantes
representantes del sector priva-
do involucrados en estas reuniones secretas, siguieran

204

Los problemas después de la función

participando en la Instancia Nacional de Consenso, a


la que ya en ese momento, se les habían unido líderes
populares del FMS, con excepción de Helen Mack y
de Rigoberta
R igoberta Men
Menchú
chú..
En este entorno, Rigoberta
Rig oberta Menchú,
Menchú, quien sí te-
te -
nía claro lo que estaba pasando, denunció que cuatro
golpes militares tuvieron lugar. Estas determinantes
declaraciones
García Samayoa, de Rigoberta encendieron latrataba
quien desesperadamente furia de
de
encubri
encub rirr y negar enfáticamente
enf áticamente la participaci
part icipación
ón de los
milita
mi litares
res en el golpe
golpe o los golpes, como
como lo declar
declaraba
aba la
Premio Nobel de la Paz.
Las cosas así,
a sí, daban al
a l sector privado
privado una posición
privilegiad
privi legiadaa en las negociaciones
negociaciones con García Samayoa
 y compañ
compañía, ía, porque ma mantení
nteníanan una relación form
formaa l
con los militares, a través de la Instancia Nacional de
Consenso;
terminante mantenían una negociación
en las reuniones secretas conactiva y de-y
Enríquez
compañía. Así también, habían logrado marginar de
las negociacio
negociacionesnes reales a los líderes
l íderes de los sectores
sectores po-
pulares;
pula res; pero forma
formalmente
lmente los seguí
seguían
an saludando
saluda ndo enen la
Cámara de Industria, en el marco de las reuniones de
la Instancia.
Estos titiriteros sí que habían jugado fino, usan-
do a su sabor y antojo y aprovechado para sí mismos
las divisiones
d ivisiones que clara
claramente
mente se planteaban
planteaban dentro del
grupo
gr upo militar;
mil itar; tanto entre los
los grupo
gr uposs de García Sama-
 yoa, como en el de Enr Enríquez.
íquez. También
También aprovechaban
la división
d ivisión que se daba en los sectores populpopulares,
ares, entre
los grupos de Rigoberta Menchú y Helen Mack y el
de Nineth Montene
Montenegro,gro, Arma
Ar mandondo Sánchez
Sánchez y Alfonso
A lfonso
Fuentes
Fuen tes Soria.
Sori a.
Me han asegurado que es ahí cuando nace la
grann amistad
gra am istad entre Nineth Monten
Montenegro,
egro, dirigente
dir igente del
del

205

La guayaba tiene dueño

Grupo de Apoyo
Apoyo Mutuo (GAM)
(GAM ) y el empresario Dio-
nisio Gutiérrez.
Buscando el formalismo y aterrizando una solu-
ción, se pide a la Instancia que elabore una terna de
candidatos para que dentro de ella el Congreso escoja
al Presidente y Vicepresidente. Dicha terna debía in-
cluir candidatos
cand idatos que fueran aceptables
aceptables para los grupos
g rupos
participantes. Finalmente,
la siguiente manera: Ramirola de
listaLeón
quedó integrada
Carpio, de
Procu-
rador de los Derechos Humanos; Arturo Herbruger
Asturias, Presidente del Tribunal Supremo Electoral;
 y Ma
Mario
rio Qu
Quiñones
iñones Amé
Amézquit
zquita,a, ex min
m inist
istro
ro de Rela-
ciones
cion es Exteriores.
E xteriores.
Los sectores populares, al ver la propuesta, de-
cidieron abstenerse de apoyarla, pues declararon que
los propuestos eran personas políticamente alineados.
Sin
vota
vo embargo,
taron favoren
ron a favor peroarastampoco
ta de encontrar
mpoco una
los veta ron.solución,
vetaron. no
Esta actitud
act itud
hizo
hi zo que los miembros de sector privado los acusaron
de carecer de un espíritu de participación y apoyo,
alimentado
al imentado por su falta falt a de experiencia
experiencia en la participa-
ción política y falta de entendimiento del proceso de
negociación.
Hoy,, recordando
Hoy recorda ndo eso, entiendo que lo que sucedió suced ió
es que los dirig
di rigentes
entes de los sectores populpopulares
ares inv
i nvolu-
olu-
crados en la Instancia, ya sabían o intuían intuía n que una ne-
gociación paralela, sin participación
par ticipación de
de ellos, se estaba
llevando a cabo entre el sector privado organizado y
algunos
alg unos de los militares,
mil itares, como en efecto sucedió.
sucedió.
Cualquiera
Cua lquiera que conociera a los personajes invo i nvolu-
lu-
crados en la lista
list a sabía que
que todos eran buenas
buenas personas;
personas ;
pero que Mario Quiñónez no tenía el más mínimo
chance, pues
pues a mim i criterio,
cr iterio, solo
solo lo habían incl
i ncluido
uido para
relleno, ya que él seríseríaa muy independiente y eso no les

206

Los problemas después de la función

convenía a los señores que estaban batiendo el choco-


late en forma determinante.
Arturo Herbruger, un buen hombre, muy dig-
no, íntegro, pero la edad ya no lo favorecía, y todos
los grupos tenían la duda de quienes serían los que
finalmente lo rodearían y los que eventualmente ma-
nejarían el gobierno. Hago ver que cuando yo era
Presidente del Consejo de Estado, apoyé e impulsé
con entusiasmo su designación como magistrado del
Tribuna
ribunall Supremo
Supremo Electoral y también
t ambién su designación
como Presidente del mismo.
Ramiro de León Carpio fue, desde un princi-
pio, el incluido para ganar. Tenía todo el perfil que
los señores del sector privado querían (por ende con
muy buena entrada en la derecha ideológica del país)
 y ta
también
mbién el que los m ililita
itares
res del gr
grupo
upo de En
Enríquez
ríquez
deseaba.
Ramiro
Ram iro había sido elel secretario privado de Mario
Sandoval
Sandov al Alarcón,
A larcón, líder de la derecha política del país
 y fu
fundador
ndador del Movim
Movimiento
iento de Liberación Naciona
Nacionall
(MLN). Cuando Sandoval Alarcón fue vicepresiden-
te y presidente del Consejo de Estado, en tiempo del
Presidente
Presiden te Kjell Eugenio Laugerud García.Ga rcía.
Por otra parte, también Ramiro había sido Ge-
rente de
de la Asociación
A sociación Nacional
Nacional de Azucareros;
Az ucareros; es de-
cir, fue un f iel y obediente
obediente operador de este oligopolio
cartelizado del país, hecho que le daba una confianza
absoluta
absolu ta a los miembros del sector privado que estaban
participando
part icipando en el movi
movimiento.
miento.
Ramiro fue también el segundo en mando en el
partido
part ido Unión del del Centro Nacional (UCN)( UCN) lo que le
daba acceso a lasla s bases del partido,
par tido, aunque su relación
relación
con Jorge Carpio Nicole, su primo, en ese momento
fuera mala. Todo esto estaba bien, pero además tenía

207

La guayaba tiene dueño

en su haber ser el Procurador de los Derecho Hu-


manos, posición desde la cual trabajara un perfil de
izquierda, denunciando hechos violatorios y atacando
ataca ndo
sistemáticamente a las Patrullas de Autodefensa Civil
(PAC).
Se podría
podrí a decir que él,
él, Ramiro,
Ram iro, era el piloto
piloto ideal,
pues podría sacar la mano hacia la izquierda y cruzar
a la derec
derecha
ha sin
si n problemas.
problemas.
Irónicamente, Ramiro de León ocupaba el alto
cargo de Procurador porque yo lo había apoyado y
prácticamente negocié su reelección, a pesar de que
 Jorge Carpio
Car pio me dijo: “Tocayo,
“Tocayo, no
no hagas
hag as eso, si insis-
in sis-
tís te voy a apoyar, pero dejame decirte que te vas a
arrepentir”.
Para cerrar este capítulo, quiero simplemente re-
producir partes de la carta que Dionisio Gutiérrez el
golpista
antess de en
ante jefe, enviara
ser designado
design a Ramiro
ado como de León
presidente, que Carpio,
y que incluyo
como anexo 3.
Notemos sus conmovedores comentarios: “esta-
ré fuera de Guatemala solo 4 dias, quiero que sepas
que me voy con el corazón tranquilo porque dejo a
mi Pais, ……, en manos de un hombre digno……..”
 yo me im imag
agino
ino al leer est
estaa expresión, el al
alivio
ivio que
sentía Dionisio, cuando el golpe en que había soñado
 yseguridades
trabajado
tr abajado apor
susel,privilegios
estaba
est aba concretado, y asíaseguradas.
y ambiciones todas
tod as la
lass
Continúa en la carta dejándole instrucciones, “te
pediré que en los próximos 2 años y medio, es que
reivindiques y des el lugar que le corresponde a nues-
tros amigos patriotas que arriesgaron su vida por la
democracia y ahora están pasando momentos que no
merecen, además, creo que tu seguridad dependerá
de que tengas hombres como ellos a tu alrededor, que

208

Los problemas después de la función

sabrán aconsejarte en muchas decisiones difíciles que


tendrás que tomar”. En este caso, es obvio, que se re-
fería concretamente al General Enríquez, al Coronel
Pérez Molin
Molinaa y su grupo.
g rupo.
En la pos data, le dice una cosa sumamente
interesante,”Ps. Pido disculpas por no llamarte Señor
Presidente, pero a la hora que escribí esta nota, no te
habían puesto la banda presidencial,….”, una de dos,
será que
que este señor
señor es adivino
adivi no o un gran
gra n manipulador
man ipulador,,
pues como iba a saber cual sería el resultado de una
votación que se llevaría a cabo en el Congreso de la
República posteriormente.
Por supuesto para terminar, le da una última ins-
trucción: “Ps. No te olvides del referéndum”

209

CAPITULO XII
La persecución
El hecho estaba consumado: “Habemus Presidente”.
El Congreso, espurio, depurable y en artículo de
muerte, había sido habilitado por el sector privado y
los militares, para que les sirvieran y les proporciona-
ran una, salida
ducido,
ducido sa lida
inst legayl para
legal
instigado
igado encubrir
encubrir
d irigido
dir igido el golpe
por los golp e milita
señores
señores mi“dueños
litar,
r, con-
del
 guayaba””, e instrumentalizado por los obedientes y no
 guayaba
deliberantes general Enr Enríqu
íquez
ez y coro
coronel
nel Pérez
Pérez Moli
Molina.
na.
Fue la tesis mil
m ilitar,
itar, con el apoyo
apoyo del sector
sector privado, la
que triunfó
triun fó en la disputa
d isputa dentro del ejército
ejército..
De allí en adelante todo lo político no fue más
que buscar fachadas y acom acomodo
odo a los difere
di ferentes
ntes secto-
res, mien
m ientra
trass los verdaderos objetiv
objetivosos del Grupo Pirá-
Pi rá-
mide, no se hicieron esperar y se fueron concretando
como ya veremos más adelante.
Sin embargo, para los golpistas, el hecho de que
 yo no hubiera renunciado les le s continuaba
conti nuaba molestando,
molest ando,
pues claramente sabían que era una un a piedra en el zapa-
to para la legalización de todos los horrores cometi-
dos; sobre todo porque en el seno del ejército existían
fisuras que ellos mismos no podían prever a dónde
podrían llegar. De igual forma, la situación con los

La persecución

sectores sociales no estaba del todo resuelta


resuelta satisfacto
sat isfacto--
riamente.
 Yoo estaba
 Y est aba en El Sa
Salvador,
lvador, tratando
trat ando de estabi
e stabililiza
zar-
r-
me con mi familia y preocupado por lo que podría
ser nuestro futuro. El Presidente Cristiani y todos los
miembros de su gobierno se portaron con nosotros
en una forma muy especial, y nos arreglaron la es-
tancia en el Hotel Presidente.
Presidente. Al terce
tercerr día
dí a recibimos
la visita de un funcionario, quien llegaba sumamente
preocupado,
preocu pado, pues
pues tenían ininformación
formación de inteligencia,
no completamente comprobada, que indicaba que se
podría
podr ía llevar
l levar a cabo un atentado
atentado contra mí, y que por
eso nos iban a trasladar a una casa a la orilla del lago
Coatepeque.
En efecto, el traslado se hizo de noche y cam-
biando vehícu
vehículoslos a mitad
mit ad de la ruta,
r uta, posiblemente
posiblemente para
despistar. Llega
Llegamos
mos a nuestro
nuestro destino: unaun a casa semia-
bandonada,
band onada, habilitada con algunas
algun as camas
cama s y catres, sá-
banas y toallas; así como con provisiones. También
colocaron
colocaron un equipo muy discreto de seguridad.segur idad.
Esa noche casi no dormimos. Estábamos mi es-
posa, mis hijos, y nos acompañaba mi sobrino Jorge
Antonio Fuentes Serrano. Ya se había unido a noso-
tros, desde el día anterior, Francisco Perdomo, quien
escondido, pudo salir de Guatemala. De verdad, no
tengo palabras
combinado con para describir el efecto
la descompresión abruptadedelsoledad,
poder.
En la práctica, habíamos pasado de una realidad
real idad a otra,
en forma intempestiva, inimaginable.
No había ni siquiera empezado a mitigar mis he-
ridas, cuando allí donde estaba, en lo más profundo
del barranco, empezaron las presiones para insistir en
que concretara mi renuncia al cargo de Presidente de
la República de Guatemala. Amigos del exterior que

211

La guayaba tiene dueño

tenían alguna relación con las nuevas autoridades de


Guatemala, me decían que si yo renunciaba, pararían
toda amenaza todo contra mí; que me garantizaban
que no habría persecución. Esos buenos amigos tra-
taban de persuadirme, pero yo siempre consideré que
eso era darles la solvencia histórica que los traidores
necesitaban; pero yo no iba a certificar como un acto
de heroísmo, lo que en realidad constituyó una trai-
ción.
A l segundo día dí a de estar en el sitio que nos habían
proporcionado, vimos, en el jardín frontal de la casa
que aterrizaba un helicóptero. De él bajaron dos bue-
nos amigos: Armando Calderón Sol, alcalde de San
Salvador,, y Oscar Santa
Salvador Sa nta María
Ma ría,, en ese momento
momento Can-
ciller de El Salvador. Nos dio mucho gusto recibir a
tan distin
di stingu
guidos
idos visit
visitantes,
antes, quienes
quienes eran portadores
portadores de
un mensaje del Presidente Cristiani. Me dijeron que
tenían mucha presión y pena por mi seguridad y la
de mi fami
fa milia,
lia, pues la cercanía
cercanía a Guatemal
Guatemalaa nos hacía
muy vulnerabl
vul nerables.
es. Cristian
Crist ianii recomendaba
recomendaba que me me mo-
viera a un país que estuviera más lejos del alcance de
mis enemigos de Guatemala.
Oscar me indicó
i ndicó que ellos habían hec hecho
ho gestiones
 y que Espa
España,
ña, México y Bras Brasilil ofrec
ofrecían
ían concederme
asilo
asi lo si yo lo solicitaba;
solicitaba; y que tambié
ta mbiénn todos los países
centroamericanos
otras opciones, pero y la
queRepública Dominicana
si yo quería permanecereran
en
El Salvador, me decía el Presidente que me darían la
seguridad que fuera necesaria.
Les hice
h ice ver
ver que yo
yo no querí
queríaa salir
sal ir de Centroamé-
rica, pues eso daría base a que mis detractores pudie-
ran legitimar sus actuaciones y así acusar el abandono
de puesto, argumento que esgrimieron para justificar
el golpe militar.

212

La persecución

En ese dilema estaba. Entendía perfectamente la


preocupación
preocu pación de Freddy
Freddy Cristian
Crist iani,i, pues yo
yo mismo
m ismo ha-
bía insistido en borrar los controles fronterizos entre
los dos países y sabía perfectamente que el paso era
prácticamente libre
l ibre..
 Justo entonces recibo un
unaa l la
lamad
madaa de Lucas Za-
rack, enquien
namá, ese momento
me dice Presidente del Congreso
que se enteraronCong
delreso de Pa-
problema
de mi seguridad; que el Presidente Guillermo Endara
me mandaba a decir que me fuera para allá, que allí
“ni con tanques me sacarían”. Agradecí muchísimo
a Lucas el mensaje y le pedí que le diera las gracias a
Guille
Guil lermo
rmo Endara.
Al concluir la conversación, mi familia y yo sen-
timos claramente una paz muy grande, la que en esas
circunstancias solo puede venir de Dios. Dimos gra-
cias al Señor, e inmediatamente pedí que le comuni-
caran a Calderón Sol o a Santa María, que Panamá
nos parecía la mejor opción y que las expresiones de
Guillermo Endara y Lucas Zarack, nos daban mucha
seguridad. Hicieron los arreglos y al día siguiente, en
el avión presiden
presidencia
ciall de El Salvador
Salvador,, nos traslad
tr asladaron
aron a
Panamá.
Como mi renuncia no se producía, los miembr m iembros
os
del sector privado de la Instancia Nacional de Con-
senso, con elaafán
presionaron de poner
su vez presión Público,
al Ministerio sobre mi para
persona,
que
esta institución iniciara acciones legales contra mí y
contra Gustavo Espina Salguero, con el objetivo de
evitar la posible instalación de él como Presidente de
la República.
Así, en conferencia pronunciada el 2 de junio, el
Procurador Interino de la Nación, licenciado Edgar
Tuna Valallada
ladares,
res, y el fiscal
f iscal Walter Robles,
Robles, anunciaron
a nunciaron

213

La guayaba tiene dueño

que nosotros habíamos violado un sinnúmero de ar-


tículos del Código Penal y de la Constitución. Creo
que invocaron todos los artículos que se les atravesa-
ron en la mente.
mente. El Código Penal no tenía suficien
suf icientes
tes
ar tículos
artícu los para tipificar
tipif icar todos los
los delitos que
que se nos im-
putaban, por lo que no vacilaron en inventar uno que
otro Órdenes
por allí.
por al lí. de captura fueron emitidas contra Gus-
tavo Espina, Francisco Perdomo y contra mí. En mi
caso y en el de Perdomo se pedía también la extra-
dición desde El Salvador; y en el caso de Espina, se
le amenazaba con que si no renunciaba, se le abriría
antejuicio.
Porr supuesto, todo esto era un verdadero espectá-
Po espect á-
culo publicitario
publicitar io,, organizado
organ izado por los promotores
promotores mer-
cadológicos del la Instancia. Tan era así, que cuando
el gobierno de Panamá recibió la transferencia de las
órdenes de detención, se sintió ofendido, pues todas
la pruebas aportadas por Tuna Valladares eran cuatro
recortes de prensa y un anónimo. Este último, de un
señorr que me acusaba de todo lo imag
seño im aginable,
inable, pero que
al fina
f inal,l, decía queque el nono firm
f irmaba,
aba, pues
pues tenía
tenía mied
m iedoo a la
reacción que pudiera provocar su escrito. En conclu-
sión, la prueba más contundente era un simple si mple peda
pedazo
zo
de papel
papel malma l escrito
escr ito..
A la larga, esa grotesca persecución sirvió para
que elel gobierno panameño nos otorgar otorgara,a, de inmedia-
in media-
to, el asilo a nosotros y a nuestras familias.
Mientras todo esto ocurría, ocurr ía, ya los mi
mismos
smos aboga-
aboga-
dos que asesoraron el golpe en el mismo despacho del
Minist
Mi nistroro de la Defensa,
Defensa, asesoraban ahora a la InstaInstancia,
ncia,
para que la Corte de Constitucionalidad
Constitucional idad prohibiera
prohibiera al
Congreso dar posesión de la primera magistratura a
Gustavo Espina. Así se perfeccionaba el golpe, hecho

214

La persecución

a la medida
medid a de los acuerdos
acuerdos llevad
l levados
os a cabo entre Dio-
nisio Gutiérrez y Pérez Moli
Molina.na.
Se abre la persecución y el acoso
A partir
part ir de este momento,
momento, la prensa
prensa del país inicia
in icia
la campañ
campaña
páginas a más llenas
enteras despiadad
despiadada a que atacándome
de odio, jamáss yo hub
jamá hubiera
iera visto:
con algu-
nas cosas ciertas, verdades
verdades a media
medias,s, mentira
mentiras,s, injur
injurias,
ias,
groserías.
groserí as. No importaba lo que yo yo dijera; el periodista
que me entrevistaba ponía lo que le daba la gana, o
con una satírica
satí rica introduc
int roducción
ción cuestionaba,
cuestionaba, demeritaba
o ridicul
rid iculizaba
izaba lo que yo yo decía. La avalancha de ataques
salpicados de un feroz odio, de resentimientos, llega-
ron a tal extremo que cualquiera que quisiera ganar
popularidad o simpatía, lo único que tenía que hacer
era insultarme o relatar alguna historia o cuento que
me denigra
denigrara. ra.
Al principio tuve la intención de hacer algunas
aclaraciones,
acla raciones, pero los ataques iban con lujo de desplie-desplie -
gue y rellenos de mentira, en primera plana. Cual-
quier aclaración la ponían mutilada en quinta página
 y con un encabezado m il veces má máss in
insidioso
sidioso que la
noticia.
Recuerdo que un día, ante una ofensa a mi dig-
nidad, le pedí a Gonzalo Marroquín que, en vista de
que él era Jefe de la Comisión de Libertad de Expre-
sión de la Comisión Interamericana de Prensa (CIP),
intervin
interv iniera
iera para que se entendiera
entendiera mim i derecho
derecho a con-
testar y aclarar lo que en su medio de comunicación
se dijo sobre mi persona. Le solicitaba que lo hiciera
según como la ley lo mandaba: en el mismo m ismo espacio y
con la misma importa
i mportancia
ncia de la noticia con
con la que me me
difamaron.

215

La guayaba tiene dueño

Entonces recibí una contestación en la que me


decía que con mucho gusto, publicaría mi aclaración
en la sección de cartas
carta s de los lectores,
lectores, y que yo podría
estar seguro de que esa sección era muy leída. Pensé
que ser insultado ya es duro, pero que, además, me
vieran cara de estúpido, era aun peor. Pensé para mis
adentros:
pensamiento,si quien
hace seesto
supone
a un defiende la libertad
expresidente, del
qué pue-
de esperar un ciudadano sin rango ni preeminencia
alguna.
Pero, en realidad, son hechos como el descrito
lo que tienen a mi país como está actualmente. No
son las maras, no son las pandillas, no es el crimen
organizado,
organ izado, no es el
el narcotráfico
narcotráf ico.. La raíz
raí z está en todo
eso que tiene su justificación en el abuso de los que
tienen poder, de los que alienan y castran al pueblo,
al coartar
coar tar sus
su s derecho
derecho y libertades.
libert ades. No han entendido
entendido
que la libertad y los derechos son para todos. No han
entendido que el hecho de ser propietarios de un me-
dio de comunicación no da derecho a hacer lo que se
quiera,
quie ra, incluido
incluido destruir lal a moral, atropellar
atropellar la dign
digni-
i-
dad de la persona, sea cual esta fuere; porque incluso
el criminal más grande tiene derecho a su defensa.
Esto es lo humano, lo justo. Pero cuando los podero-
sos o los abusivos cercenan esos derechos, promueven
la violencia, enseñan la intolerancia, ofenden y hu-
millan. No se dan cuenta de que actitudes como esas
crean, como pasó con los poderosos
poderosos franceses
f ranceses del siglo
XVIII, las condiciones para una revolución implaca-
blee y sangu
bl sanguinar
inaria.
ia.
Parece que los dueños del país  y sus adláteres no
quieren entender que todo en este mundo tiene un
límite, y que no solo hay que predicar sino que hay
que actuar de acuerdo con lo que se predica.

216

La persecución

En ese mismo medio en el que trabajaba el men-


cionado “adalid de la libertad”, se publicó un edito-
rial, que bajo el título de “Líbranos Señor de toda
tentación”, decía en una de sus partes conducentes,
que no faltaría alguien que, haciendo abstracción de
sus principios cri
cristia
stianos,
nos, fuera a Panam
Panamáá y me
me matara.
matar a.
P
esodr
odría
quía
que contarpoderosos
contar
e estos m iles de fhistorias
miles histor ias de este
inanciaron
ina nciaron tipo. artículos,
estudios, Loículos,
art cierto
publicaciones y hasta “spots” televisivos para subir a
internet y atacarme.
Durante casi veinte años no me han soltado, al
extremo de que un amigo
am igo me decía: “Estuve en Gua-
temala, y para mi sorpresa, mucha gente te recuerda
con mucho
mucho respeto; sin
si n embargo,
embarg o, cada vez que he leí-
do algo sobre ti, solo he visto cosas malas. O tus ene-
migos
le son muy
respondí
respondí activos
que se trata odetúlas
la snodos
te cosas:
has defendido”. Yo
m is enemigos
mis
son muy activos y no sé por qué después de veinte
años, aún siguen atacando y yo no me he defendido,
tampoco he tenido cómo hacerlo, pues cada vez que
aclaro algo, más me atacan.
Con frecuencia nos enteramos, por medio de
amigos, que un nuevo ataque se aproxima. Por ejem-
plo, cuando hicieron correr la noticia de que yo me
había divorciado, que me había fugado con una cu-
bana, que mis hijos andaban en drogas, y otras cosas
que no me atrevo ni siquiera a mencionar. Muchos
lo creyeron, pero también supimos que en la oficina
de un alto dirigente de la Instancia, se comentó que,
comoo no encon
com encontraban
traban nada
n ada grueso
g rueso contra mí, era fun-
f un-
damentall conti
damenta continuar
nuar minando
mi nando mi reputación y que esa
información debían difundirla. Alguien se enteró y
fue a la casa de mis suegros, a contarles lo del nuevo
ataque que venía. Mi suegro me llamó y me contó,

217

La guayaba tiene dueño

según él, para que estuviéramos preparados. Me dijo


que tuviéramos paciencia y me bendijo. Le agradecí
su bendición, le aseguré que el Señor nos daría la pa-
ciencia, pero en cuanto a la preparación, yo pensé para
mis adentros: en esto no hay forma de prepararse, lo
único
ún ico que
que queda es resignar
resig narse,
se, perdonar
perdonar y dejar a Dios
que haga justicia,
abundancia justestos
justicia
dur ante
durante icia que sí hemos
veinte años. podido ver en
Recuerdo
Recu erdo que
que hace cuatro años vino
v ino un periodis-
period is-
ta que traía una lista de los problemas que han tenido
algunos
alg unos de los personajes que me habían perseguido
persegu ido y,
y,
sonriendo, me dijo:
 —Me sugsugir
irieron
ieron que le pregu
pregunta
ntara
ra que les hi
hizo
zo
usted.
 Yoo me reí y le respondí:
 Y respondí :
valor —No le digo, porque si le digo, usted no tiene
de publicarlo. t iene el
Me juró que si yo se lo decía, él se comprometía
a publicarlo
 —Bueno, vamos ambos am bos a graba
g rabarr la conversación,
para que estemos seguros de que lo que usted va a
publicar es exactamente lo que yo le voy a decir.
 Y así lo hic
hicimos.
imos. Todav
odavía
ía tengo presente la car caraa
del amigo en mi mente, sentados tomándonos una
taza
ta za de café en la cafetería
c afetería del hotel Holiday
Holiday Inn, Inn , hoy
Crown
Cro wn Plaza
Plaz a de Panamá.
Panam á. Esto fue lo que le dije:
 —Lo que hice fue perdonarlo
perdonarlos, s, y los perdono
cada día. Me he comprometido ante Dios a no levan-
tar una
u na mano
ma no contra
contra ellos y he dejado la justicia
justicia en las la s
manos de Dios.
Lo que asegu
aseguré
ré suena
suena fácil, pero es didiff ícil. Créan-
melo, esto es lo que la palabra del Señor recomienda
 y a la la
larga
rga es lo ún
único
ico que le perm
permiteite a uno viv vivir
ir y
dejar vivir.

218

La persecución

La persecución legal
Cada vez que se producía
producía un
u n cambio
cam bio de gobierno
gobierno
en Guatema
Guatemala, la, el cambio de un fiscal
f iscal en el Mi
Minister
nisterio
io
Público o bien
bien cuando
cua ndo necesitaban
necesitaban distraer
d istraer un
u n poco a
la opinión
opin ión pública,
pública, entonces
entonces venía la pub
publicidad
licidad en mimi
contra,
con tra, ya sea anuncia
anunciando
ndo una solicitud de extrad
extradició
medidas judiciales, órdenes de captura, avance de los ición,
n,
procesos o cualquier otra cosa que daba prestigio al
funcionario ejecutante. En todo caso, bien servía de
cortina de humo. Esto, como se dice popularmente,
 ya era “de cajón
c ajón””.
Sin embargo,
embargo, para mi persona
persona y mi m i famil
fam ilia,
ia, cada
vez que eso sucede, es un momento difícil y humi-
llante. Afecta íntimamente a la familia entera. Nadie
puede
de estosimaginarse lo que uno
procedimientos, algúnsufre cuando,sepor
desprecio causa
produce
contra mi esposa o alguno de mis hijos, o de mis fa-
miliares o allegados. Cuando alguna oportunidad de
negocios o de otra índole se cae por la insidia
insidi a y el odio
con que los enemigos nos han atacado, esto no tiene
explicación ni tampoco existe ungüento para aliviar
el dolor. Solo El Señor ha podido darnos la fortaleza
para que nuestras almas no se corroan en rencores y
amarguras. Bendito sea Él, que nos ha consolado y
restaurado perma
permanente
nentemente
mente..
Desde el año 1993 he sido perseguido por pode-
rosos, por funcionarios públicos venales, con menti-
ras, arbitrariedades
arbitra riedades y manipulac
ma nipulacion
iones
es de la justicia
justicia y el
derecho, así como por algunos magistrados, jueces y
fiscales indignos, que se han dedicado a usarme para
lograr prebendas o favf avores
ores personales o bien para lan-
zar cortina
cort inass de humo
humo con elel fin
f in de distraer
dist raer a la opin
opinión
ión
pública de los temas fundamentales que angustian y

219

La guayaba tiene dueño

oprimen al pue
pueblo
blo de Guatema
Guatemala.
la.
Ellos saben que la Convención de Montevideo
del 26 de diciembre de 1933, de la cual Guatemala y
Panamá son signatarios, trata sobre la extradición y
reglamenta
regla menta el asilo, estableciendo
estableciendo que:
“El Estado requirente (en este caso Guatemala)
tiene que reconocer la soberanía del Estado asilante
(en este caso Panamá) y acatar su fallo y no hacer de
ello un motivo de disputa entre los dos países”.
El Estado panameño, en cuatro ocasiones, ha
analizado y juzgado todas las acusaciones y supuestas
pruebas enviadas sistemáticamente por el Estado gua-
temalteco. Cuatro gobiernos distintos y de diferentes
partidos han negado la petición de extradición, por
no sustentar el fondo de las acusaciones, ni cumplir
con las formas previstas según las respectivas conven-
ciones.
Muy cortés y tolerante ha sido el Estado pana-
meño y sus ilustrados gobiernos, en haber recibido
 y procesado tres veces la lass solicit
solicitudes
udes de ext
extrad
radición,
ición,
pues el mismo tratado de Montevideo establece en el
Artículo 12 que “negada la extradición de un indivi-
duo, no podrá solicitarla de nuevo”. Sin embargo, los
gobiernos guatemaltecos lo han hecho ilegalmente,
violando los convenios con el acostumbrado despre-
cio que ellos han tenido por la ley que repetida
repetidamente
mente
declaran defen
defender
der.. Esto es parte de la creencia de que
los poderosos del país tien
t ienen,
en, de que la ley no es para
ellos.
Estos señores, con gran desfachatez, han escon-
dido al pueblo de Guatemala que el 25 de junio de
1993, el Estado panameño rechazó por primera vez
la solicitud de extradición, declarando que lo hacía
porque no se había cumplido con lo establecido en la

220

La persecución

Convención de Montevideo.
Convención
Un año después, ante el segundo pedido de ex-
tradición, el 24 de agosto de 1994, el Gobierno de la
República de Panamá, por medio de la Resolución
Ejecutiva No. 10, declara que:
  “Luego de un minucioso estudio de la docu-
mentaciónn aportada,
mentació aportad a, resuelve
resuelve negar la
l a extradición
extr adición del
expresidente de la República de Guatemala, JORGE
ANTO
AN TONIONIO SERRANO
SERR ANO ELÍAS, por considerar que que
los hechos y delitos que motivaron la misma son de
carácter político.”
Finalmente, el 18 de febrero de 1998, y ante las
reiteradas impertinencias e ilegalidades de las autori-
dades guatemaltecas, el gobierno panameño denegó
la última petición de extradición de la siguiente ma-
nera:
“RESUELVE: PRIMERO: Negar como en
efecto niega la solicitud formal
forma l de extradició
extrad iciónn del ciu-
ciu-
dadano
dada no guatemalteco
guatema lteco JOR
JORGEGE ANTONIO SERR SERRA- A-
NO ELÍAS, presentada por el Gobierno de la Repú-
blica de Guatemala,
Guatemal a, para ser procesado
procesado por la supuesta
supuesta
comisión de los delitos de USURPACIÓN, FRAU-
DE Y ABUSO DE AUTORIDAD, por cuanto tal
asolicitud no se apega
lo establecido en laniConvención
en la forma de
n i en
ni su contenido
contenido
Montevideo de
26 de diciembre de 1933 y en la legislación panameña
vigente; no es cónsona con la práctica y la doctrina
latinoamericana en la materia; no respeta la califica-
ción soberana de la situación histórica que originó la
concesión del asilo
asi lo político, derecho que
que le otorgan lasla s
conve
con vencion
nciones
es vigentes en la materia
mater ia al Estado
E stado Asilante
Asi lante
de manera exclusiva; no observa la correspondiente
obligación de terceros Estados de respetar ese derecderecho
ho

221

La guayaba tiene dueño

de calificación y de no convertirlo en un punto de


tensión internacional, por cuanto el acto se considera
pacífico
pacíf ico,, apolítico y excl
exclusivamente
usivamente humanitar
human itario io””.
Resulta vergonzoso que, que, a pesar de esta cátedra
cátedr a de
dignidad y derecho, funcionarios guatemaltecos sigan
poniendo en ridículo al país y lo que es peor, expo-
niéndoloo a que se le
niéndol le vuelva a dar otra cátedra
cáted ra aun másmá s
vergonzosa
ve rgonzosa;; y todo porpor querer
querer instrumental
instr umentaliza
izarr públi-
públi-
camente el derecho
derecho y la justicia en beneficio
benef icio persona
personall
o por servilismo hacia los que, con obscuros fines,
fomentan
fom entan o patrocinan
patroci nan la l a persecución
persecución en mi contra.
El día que fui notif
noti f icado de esta Resolución,
Resolución, asist
asistíí
al Min
M inisterio
isterio de Relaciones
Relaciones Exteriores;
Exter iores; me leyeron
leyeron la
Resolución y después me hicieron firmar de confor-
midad
mid ad lo recibido
recibido.. No pude
pude evitar que las lágr
lá grim
imasas se
asomaran abundantemente;
eran solo por la paz que la pero a decir
seguridad verdad,a mi
aportaba no
familia, sino que también sentía vergüenza e indig-
nación, pues no era justo que malos guatemaltecos,
quizá por ganarse
gana rse alguna
alg una prebenda,
prebenda, pusieran al país en
el predicamento de que otro Estado los calificara de
incapaces, pues
pues su petición no se apega ni en su forma,
ni en su con
contenido
tenido a la norma que invoca.
Está demostrada su ignorancia porque descono-
cen na.laSon
titina. práctica de la doctrina
i rrespetuosos
irrespetuosos porquedenonoasilo en América
respetan el derecho La-
soberano que tiene el Estado asilante de calificar, en
forma exclusiva, la situación que originó orig inó el asilo
asi lo.. Son
temerarios, pues el Estado requirente tiene la obli-
gación de aceptar la decisión del Estado que otorga
el asilo, ya que constituye un acto pacífico, apolítico
 y exclusivamente hum humananita
itario,
rio, ta
tall como lo seña
señala la la
Resolució
Reso luciónn antes transcr
tra nscrita.
ita.
En mi interior
i nterior pensaba:
pensaba: si así procede un canciller
canci ller

222

La persecución

como Eduardo Stein, que supuestamente sabe leer y


escribir, ¿qué podemos esperar
esperar en el país?
país ? Sin embar-
go, no imaginaba cuáles eran las grandes vinculacio-
nes y servicios que él prestaba a los “dueños del país”,
los que solo
solo se pusieron
pusieron de manif
man ifiesto
iesto después,
después, cuando
cua ndo
fue nominado como candidato a vicepresidente, con
Oscar Berger. Ambos gobernaron durante el período
de la “presidencia privatizada” y más recientemente,
cuando
cua ndo Stein se desempeña como el brazo derecho de
Pérez Moli
Molina,
na, en la
l a transición
tra nsición del gobierno
gobierno de Álvaro
Á lvaro
Colom Cabal
Caballeros
leros al de el actual
actua l presidente.
presidente.
Resulta mas inexplicable que el Gobierno de
Guatemala, se pusiera en este entredicho, a pesar de
que ya el Departamento de Asuntos Jurídicos de su
propia
prop ia Cancillería
Cancil lería había advertido en sendos
sendos dictáme-
nes que elel Minister
Mi nisterio
io Público de Guatemal
Guatemalaa no tomó
en cuenta.
En repetidas
repetidas oport
oportun unidades,
idades, diferentes inst
institucio-
itucio-
nes hicieron ver tanto a la Fiscalía como a los jueces
encargados, que “no existían pruebas que sustentaran
las acusaciones que se le hacían al expresidente Jorge
Antonio Serrano Elías”; e incluso el propio Departa-
mento Jurídico del Ministerio de Relaciones Exte-
riores de Guatemala
Guatema la les hizo
h izo ver que con
con la eviden
ev idencia
cia
presen
presentada
tadapanameño
el Estado no se probaban
probab oantorgaría
los delitos
no otorgar del
ía itos imputados
la extradición
ext y lici-
que
radición solici-
so
tada. Asimismo sugirió al fiscal que se buscaran nue-
vos elementos que efectivamente probaran los hechos
que se me imputaban.
La realidad
real idad es que no hay delitos comunes come-
tidos por mí, mucho menos pruebas. Pero la presión
de los poderosos en este caso era, y sigue siendo, in-
culparme
culpar me de todo lo que se se pueda. Incluso,
Incluso, temeraria-
mente,, han llegado
mente l legado a decir que la razón por la que no

223

La guayaba tiene dueño


se me ha podido
podido extradita
extr aditarr es por culpa del del Estado pa
nameño.
na meño. Pero hahann escondido al a l pueblo
pueblo que sonson cuatro
cuat ro
los gobiernos en Panamá que han juzgado mi caso.
Todos estos gobiernos pertenecen a diferentes parti-
dos políticos y con grupos
gr upos muy disímiles
disím iles ejerciendo
ejerciendo el
poder, y todos han coincidido en el mismo juicio.
Permítanme reproducir las opiniones que fue-
ron emitidas por la Dirección de Asuntos Jurídicos y
Tratados del Ministerio de Relaciones Exteriores de
Guatemala:
PRIMERA OPINIÓN:
Oficio de la Dirección de Asuntos Jurídicos y
Tratados del Ministerio
Min isterio de Relaciones
Relaciones Exteriores, fir- f ir-
mado por el Director,
Director, licen
l icenciado
ciado Guiller
Gui llermo
mo Sáenz de
Tejada, dirigido al Señor Ministro, Dr. Arturo Fajar-
do Maldonado, en relación con el oficio, sin número,
de fecha 4 de enero de 1994, enviado por el entonces
Presidente del Organismo Judicial, licenciado Juan
 José Rodil
Rodi l Peralta.
Peralt a.
En el numeral 2) 2 ) de dicho documento,
documento, se estable-
ce textualmente:
textua lmente:
“... de la demás documentación no se despren-
den los hechos
hechos que tipifican
tipif ican los delitos por lo que está
siendo
siendo procesado,
procesado, principalmente
pri ncipalmente lo que se refiereref iere a la
malversación y el peculado.”
Asimismo, en el literal E) se manifiesta textual-
mente:
“Por lo anteriormente expuesto se considera que
la documentación recibida por esta Cancillería, debe
ser devuelta a fin de que la misma sea ampliada y que
se llenen los requisitos mínimos a que hace referen-
cia el art
a rtículo
ículo 5º de la Conv
Convenció
enciónn sobre Extradición
Extr adición
de Montevideo, ya que de presentar la solicitud de
224

La persecución
extrad iciónn únicamente amparad
extradició amparadaa con
con la cert
certifificació
icaciónn
extendida por el Juzgado Cuarto de Primera Instan-
cia Penal de Instrucción, existe la posibilidad de un
rechazo por parte del Gobierno panameño. Sobre el
particular cabe hacer la observación que de confor-
midad con el artículo 12 de la indicada Convención,
“negada la extradición
ext radición de un individu
indiv iduo,
o, no podrá
podrá so-
licitarse de nuevo por el mismo hecho imputado”.
La contundencia de la l a opinión anterior
a nterior,, demues-
tra claramente que no había pruebas para acusarme
de los delitos que se me imputaban. Esto,
E sto, dicho por
por la
propia
prop ia canciller
canci llería
ía guatemalteca.
gu atemalteca. ¿Cómo
¿ Cómo enton
entoncesces pre-
pre-
tendían que la cancillería panameña me extraditaría?
Todo era y ha sido un juicio mediático, amparado y
fomentado
fom entado por los mismos.
m ismos.
SEGUNDA OPINIÓN
Se trata del memorando número 366 de fecha
6 de noviembre de 1996, firmada por los Asesores
de la Dirección de Asuntos Jurídicos y Tratados del
Ministerio de Relaciones Exteriores de Guatemala,
licenciado Oscar H. Vásquez
Vásquez Oliva, licenciada Ánge-
Áng e-
la Elizabeth García Urrutia y el Director, licenciado
Guillermo Sáenz de Tejada.
Como
rídico estey memorando
amplio fundamental,contiene
plenamenteun análisis
basado ju-
en
el Derecho Internacional y apegado a las normas ju-
rídicas vigentes en Guatemala, considero importante
adjuntarlo como
como anexo,
anexo, y transcr
tra nscribir
ibir literalmente
literal mente su
su
CONCLUSIÓN:
“Por lo antes expuesto se estima que, para que
exista la posibilidad de obtener la extradición del Ex-
presidente Jorge Antonio Serrano Elías, es necesario
que el Ministerio Público, así como el Tribunal de
225

La guayaba tiene dueño


conocimien
conocim iento,
to, recaben las pruebas
pr uebas indispensables
indi spensables con
con
relación a los delitos que la motivan, expresando con
la debida precisión
precisión cada uno u no de los ilícitos
il ícitos penales que
se le atribuyen, y que se concreten y se aporten prue-
bas de los artifici
artif icios
os utilizados
util izados para defraudar
defraudar al Estado
de Guatemala.
 
De conformidad con el análisis efectuado, esta
Dirección considera que el expediente recibido por
esta Cancillería, debe ser devuelto a fin de que el
mismo sea modificado a efecto de que la solicitud de
extradición tenga la expectativa que sea resuelta en
forma favorable.
Se considera así mismo conveniente que se haga
del conoci
conocimm iento del Señor Fisca
Fiscall general de la Repú-
blica la posición
posición de esta Cancillería,
Cancil lería, a fin
f in de que como
como
parte acusadora, coopere con el tribunal juzgador en
obtener pruebas más concluyentes de los hechos ilíci-
tos de que se le acusa al sindicado.”
Queda claro que la Fiscalía de Guatemala, para
darle un carácter legal a esta injusta y descalificada
persecución, escogió los delitos y después salieron a
buscar pruebas; o a usar las mismas supuestas pruebas
para
se lest
tratar
ratar de
les ocurría. encajarlas
ocurr ía. Confirm en
Conf irmació cad
cada a uno de los delitos que
aciónn de ello es lo manifestado
en el último párrafo de la página 4 del Memoran-
do 366 de la Cancillería de Guatemala, cuando en el
cuerpo
cue rpo del mismo se se manif
mani f ies
iesta:
ta:
“Se establece
esta blece que la documentación
documentac ión queque se aport
aportaa
como prueba de indicios razonables de culpabilidad
por la comisión
com isión de los delitos
del itos de USURPA
USU RPACIÓ CIÓN N DE
ATRIBUCIONES Y FRAUDE, es la misma que
se acompañó en la primera solicitud de extradición
226

La persecución
presentada a la República
presentada República de Panamá,
Pana má, apoy
apoyando
ando la co-
misión de los delitos de USURPACIÓN DE FUN-
CIONES
CIONES Y PECULA
PECU LADO”DO”
A pesar de estos hechos claros y declarados, se
tiene
de la desfachatez,
acusar pormeño
a l Estado Panameño
al Pana partededel
nofiscal
no coopeMario
cooperar, Leal,
rar, cuando
la obligación del Estado requerido es de juzgar la in-
tencionalidad de las peticiones del Estado requirente
 y no inventa
inventarr la lass prueba
pruebass que el requi
requirente
rente no puede
aportar.
En tres ocasiones consecutivas
consecutivas Panamá
Panam á les ha ne-
gado las
l as peticiones por su profundo sentido político y
por no ajustarse ni en la forma ni en el fondo a lo es-
tablecido en la Convención de Montevideo; es decir,
no tienen justificación alguna.
Sin embargo, una vez más, con gran alarde pu-
blicitario,
blicitar io, el fiscal
f iscal Leal
L eal y la jueza Lam se compleme
complemen- n-
tan para
pa ra realiza
real izarr un nuevo
nuevo episodio de persecució
persecución; n; y
basados en las mismas supuestas pruebas, ordenar mi
captura por medio de la Interpol, a sabiendas de que
eso no es posible, pues ya media la protección que
un tratado internacional otorgó a través de la acción
soberana y justa del Estado panameño pan ameño..
 Y como si esto fuera poco, los citado citadoss fu
funcio-
ncio-
narios, así como todos los jueces, magistrados y fis-
cales que se han prestado a ese juego, han violado la
doctrina
doctr ina constitucio
constit uciona nall guatemalteca
gu atemalteca que, desde 194 19455
ha prohibido la persecución por razones políticas, así
que con su conducta han atropellado la Constitución
Política de la República, que los perseguidores dicen
proteger.
Ha sido tan molesto todo esto para el Esta-
do panameño y, sobre todo, para las dependencias
227

La guayaba tiene dueño


adm inistrat
admin istrativas
ivas del
del Mi
Minister
nisterio
io de Re
Relaciones
laciones Exter
Exterio-
io-
res, que mediante Decreto Ejecutivo No. 78 del 17
de junio de 2009, el señor Presidente de la República
de Panamá, decretó que “el asilo territorial otorgado
al expresidente de Guatemala Jorge Antonio Serrano
Elías y su familia, es de carácter permanente”.

228

 
CAPÍTULO XIII
Esto ¿por qué?

Siempre hay
Siempre hay cosas en la vida que resulta
resultann dif
di f íciles
de explicar, pero que en algún momento o de algún
modo,, se les va encontrando
modo encontrando cierta
ciert a lógica, o al menos
va apareciendo alguna justificación que explique los
motivos que pudieron haber desencadenado los acon-
tecimientos.
En mi caso, he de manifestar que me ha costa-
do mucho entender lo que pasó y mucho más cómo
pasó. El Presidente se aísla, o lo aíslan; o el Estado
guatemalteco es muy complejo debido al desorden
propio de nuestra idiosincrasia y de la anarquía de los
intereses que se mueven. O bien, debido a las malas
prácticas heredadas
colonización.
coloniz ación. desde
Pero sobre
sobr las etapas
e todo, por elde la conquista
concepto que te-y
nemos
nem os de la
l a ley,
ley, a la
l a que la sociedad guatema
g uatemalteca
lteca la ve
simplemente como una manifestación de intenciones
 y no como una norma nor ma oblig
obl igator
atoria
ia de cumpli
cu mplim m iento.
De todos modos, veinte años de desintoxicación
 y ref
reflexión
lexión no ha hann sido suf
suficientes
icientes para l lega
legarr a ex-
plicarme por qué se acumuló tanto odio contra mí.
Quisiera explicarme qué les hice para que tuvieran
tan grandes razones para conspirar contra mí en la

La guayaba tiene dueño


forma en que lo hicieron; y sobre todo, por qué si ya
no estoy en Guatemala y ya no soy un factor en la
política del país, me siguen atacando, me denigran,
siguen inventa
inventando
ndo cosas contra
contra mí.
m í. Con una saña im-
i m-
presionante me persiguen, asociándome siempre con
lo peor.
Cada día
dí a le doy
doy más gracias
grac ias a Dios, que
que conmigo
la persecución no llegó hasta
ha sta donde llegó con Manuel
Colom Argueta, Adolfo Mijangos, Danilo Barillas,
 Jorge Car
Carpio
pio Nicolle, Monseñor Juan Gera Gerardi,
rdi, Isi-
doro Zarco, Alberto Fuentes Mohr, , Epaminondas
González, Jaime Cáceres, Leonel Sisniega Otero, y
miles y miles más que en diferentes fechas han caído
asesinados por balas disparadas con el único objetivo
de cambiar
que la queríaladi
historia
difere nte.en beneficio de algún ingrato
ferente.
Como es natural, en veinte años sin visitar mi
país, veinte años alejado del protagonismo al que es-
tuve acostumbrado desde niño, n iño, veinte
veinte años sin
si n recibir
el chisme de primera mano, siempre llegado en un
refrito, me han hecho recurrir a la lectura y al análisis
de la documentación, agudizando mi espíritu crítico,
para no solo seguir la literalidad de lo escrito, sino
 –como dije anteantes–
s– busca
buscarr ta
también
mbién la intenciona
intencionalid
lidad
ad
 y el espíritu
espír itu de lo leído o inda
i ndagado.
gado.
Cuando finalmente encontré el libro “Dictating
Democracy”  escrito por Rachel McCleary y vi en el
prólogo los agradecimientos y elogios para Juan Luis
Bosch Gutiérrez, Víctor Suarez, Carlos Vielman,
Edgar Heinemann, Marco Augusto García Noriega,
Otto Pérez Molina, José Domingo García Samayoa,
Roberto Letona Ora y otros más, pensé que había
tirado mi dinero, pues creí que iba a ser más de lo
mismo, pero decidí leerlo, con el único objetivo de
230

Esto ¿por qué?


entender los motivos de mis
entender mi s perseguidor
persegu idores.
es.
Confieso que este y otros documentos me han
hecho reflexionar sobre muchos de los errores que se
cometieron, así como los que yo personalmente co-
metí. También he podido enterarme de la cantidad
de
en cosas
medioque
de suceden
todo, mea espaldas
ha quedadodel Presidente;
claro, pero pero,
muy
claro, que es el
el egoísmo el motor
motor fundamental
funda mental de mis
m is
paisanos, no solo para interpretar la historia sino para
motivar los hechos que la producen.
Me impuse la lectura
lectu ra del libro
l ibro de McClear
McClearyy, que
como manifesté elogia y agradece a mis perseguido-
res todos su apoyo, orientación y aportaciones. En-
contré entonces comentarios como los que señalaré a
continuación.
Eduardo PalomoEn Escobar,
el Preámbulo
Escobar pág inadel
, página x iv,libro,
xiv d ice:escrito por
, dice:
“Como lo señala el autor, Serrano ciertamente
fue el presidente
presidente civil
civi l que por primera vez, durante la
transición hacia la democracia, ejercitó su autoridad
como comandante
comand ante general
g eneral sobre el ejército”
ejército”.
Manifiesta McCleary más adelante, página 40,
en la sección dedicada a las Elites y la Transición, lo
siguiente:
“No fue sino hasta que Jorge Serrano Elías asu-
mió la presidencia, que algún grado de autoridad fue
impuesta sobre
sobre las instituciones militares.
mil itares. Serrano en-
tendió el poder que él tenía como Comandante en
 Jefe y lo uso para poner
poner bajo ararresto
resto a ofoficia
iciales
les envuel-
tos en violaciones a los derechos humanos. Serrano
tambié
tam biénn destituyó
destit uyó a miembros del alto mando ma ndo que no no
cumplieron
cum plieron sus
su s órdenes”.
órdenes”.
En la Introducción de “Dictating Democracy”,
Richard N. Adams,
Ada ms, Profesor Emérito de la Universi-
dad de Texas,
Texas, Austin,
Austi n, página
pági na xv se lee:
231

 
La guayaba tiene dueño

“Las frust
f rustracion
raciones
es que llevaron a Serrano a romper
la Constitución fueron terriblemente reales. Muchos
legisladores, jueces, oficiales militares, y burócratas
del Estado, fueron más conspicuamente deshonestos
que el propio Ejecutivo
Ejecut ivo..
El país se convertía en foco de una gran transfe-
rencia y lavado de dinero para narcotraficantes, para
bandas locales e internacionales de ladrones, secues-
tradores y asesinos, operando casi sin interferencia;
 y el envo
envolvi
lvimm iento cr
crim
imininal
al de policí
policías,as, combina
combinados
dos
con militares, que por sus abusos e impunidad incre-
mentaban el deterioro de la vidavid a civil.
civi l.””
Nada más cierto que la percepción del profesor
Adams. Solo le faltó apuntar que todo ese deterioro
no
dos,sesino
daba
queúnicamente dentro
ta mbiénn dentro
tambié de poderosos
de los los gruposdel
señala-
país,
quienes han tenido una gran parte de la culpa de esta
situación, pues la fuente del dinero de la corrupción
viene fundamentalmente de ellos. También hay que
reconocer que sin su activa participación, el lavado de
dinero no hubiera sido posible en la forma en que se
venía presentando y, mucho menos, en las dimensio-
nes en que hoy se evidencia en el país.
Pedí en una oportunidad al Ministro de la De-
fensa, general García Samayoa, que juntamente con
el Jefe de la G2 (Dirección de Inteligencia del Ejérci-
to) coronel Pérez Molina, hicieran una presentación
a los directores de los medios de comunicación y a
dirigentes del sector privado, sobre los peligros que
advertíamos de la penetración del narcotráfico en sus
respectivos
respect ivos sectores. Con esto, yo quería poner una luz
lu z
amarilla y tratar de iniciar un diálogo para tratar de
formular una agenda sobre el particular. Los comen-
tarios
tar ios no se
se hicieron esperar,
esperar, nadie le dio importancia
import ancia
232

 
Esto ¿por qué?

 y muchos lo toma
tomaron
ron a burl
burla,
a, por supuesto, acus
acusándo
ándo--
me de querer
querer intervenir en la libertad
l ibertad de prensa.
En los aspectos económicos, hasta mi llegada al
poder, Guatemala tal como lo refiere McCleary, no
había implementado
implementado los requerim
requerimientos
ientos de
de las instit
i nstitu-
u-
ciones financieras internacionales, referidas como las
de primera generación, que fundamentalmente con-
sistían en la estabilización macroeconómica del país y
la liberalización del comercio. Estos eran elementos
fundamentales para poder llegar a un entendimiento
 y f ir
irma
marr un acuerdo con el Fondo Monetar
Monetarioio Inter-
nacional.
Nosotros, como vimos anteriormente , y como la
misma autora lo refiere en la página 97 de su libro,
lográbamos avances:
“Para 1993 Serrano exitosamente había mejorado
la imagen del país ante las instituciones internaciona-
les, así como con los proveedores
proveedores de créditos
crédito s comercia-
les. La conf
confian
ianza
za de los inve
inversionista
rsionistass privados, ambos
domésticos e internacionales en el país, fue primaria-
mente
men f irmaa del Standbay Agreement  
te estimulada por la firm
con el Fondo Monetario Internacional (FMI) y con
el restablecimiento del crédito con las Instituciones
Financieras
fue que el avance
Internacionales
logrado reduciendo
de crédito. laLadeuda
parte fiscal
baja
e implementando
implementando las l as reformas
reforma s de primera
pri mera generación,
generación,
no eran de primera importancia para la opinión pú-
blica en Guatemala, dado que estas no se trasladan en
forma tang
ta ngible
ible de inmediato
inmedi ato a los sectores de ing
ingresos
resos
medios y bajos, consecuentemente la mayoría de los
guatemaltecos pareciera que no apreciaron la mejoría
que en el clima económico trajeron las reformas”.
No obstante los logros apuntados anteriormen-
te, habíamos logrado reducir la inflación que Cerezo
233

 
La guayaba tiene dueño

Arévalo nos dejó en 60%, a menos del 10%. Los sa-


larios ganaron considerablemente en su valor adqui-
sitivo, la economía crecía por fin, las ventanillas de
los bancos internacionales de crédito se abrían,
abría n, con el
sistema de los Cenivacus generamos una reserva con-
siderable de divisas, que nos permitía operar sin las
angustia
ang ustiass en que
que nos dejó
dejó el gobierno
gobierno anterior.
anterior. En fin,
f in,
los negocios iban creciendo, las exportaciones tam-
bién,
bié n, sobre todo las de productos
productos no tradicio
trad iciona
nales
les a las
que incentivamos especialmente
especial mente..
Según mi perspectiva y las estadísticas del país,
que se pueden
pueden revisa
revisarr en los anales
ana les del Banco de Gua-
temala, todo parecía que estaba entrando en orden,
que mejorábamos
mejorábamos y que nos preparábamos para dar d ar un
un
salto.
de losCreo que estesectores
que
má s diversos
más sentim iento
sentimiento lo compartían
lo compart ían varios
del país. var ios
La misma Rachel McCleary, en la página 103 de
su libro, en las conclusiones de su tercer capítulo, es-
tablece claramente que:
“La liberalización
liberal ización de la economía
economía bajo Serrano fa-
voreció la apertura
apertu ra del mercado doméstico. Para
Para mayo
m ayo
de 1993, el sector privado organizado, en su mayor
parte, estaba de acuerdo con la dirección que estaba
teniendo l a política
la
Un día pol
meítica económ
económica”
pidieron ica”.audiencia
una . para el pre-
sidente de la Financiera del Banco Mundial, y se la
concedí para un sábado en la noche, pues así fue so-
licitada, dado que él tenía un agitado itinerario de
viaje. Cuando el señor llegó a la Casa Presidencial,
iba acompañado, entre otras personas, por Juan Luis
Bosch. Fueron conducidos por un oficial al salón
Maya e inmediatamente me avisaron, llegué y saludé
a los presentes, incluyendo
incluyendo al visitante.
v isitante.

234

 
Esto ¿por qué?

Me llamó la atención
atención que todo siguió desarrollá
desar rollán-
n-
dose enen una forma bastante informal,
informa l, hasta que por
por fin
f in
el señor del Banco Mundial, preguntó que si alguien
sabía a qué horas iba a llegar el Presidente. Hubo un
silencio, e inmediatamente uno de los asistentes, con
mucha discreción, le indicó que el Presidente era yo.
La cara del pobre fue de susto, no sabía cómo ex-
cusarse ni cómo salir de lo que en buen castellano
llllama
amamos
mos “una
“una metida
metid a de pata”
pata”, la cual
cua l a decir verdad
no era de él, sino que mía y de los presentes, que por
la confianza
conf ianza en que nos
nos tratábamos, nono dimos ningún
ni ngún
indicio de que el Presidente había llegado. Este inci-
dente rompió el hielo.
De inmediato el funcionario del Banco Mundial
habló. Dijo que había
para conocerme hecho la parada
personalmente en Guatemala
y porque quería sa-
ber,, de primera
ber pr imera mano,
m ano, qué era lo que estaba pasando
pasa ndo,,
pues llamaron a la sindicalización de un crédito para
la compra de unas barcazas por parte de Enrow, por
cincuenta millones
mi llones de dólares y que,
que, para su sorpresa,
él mismo se había sindicalizado en menos de veinte
minutos. Agregó que al ver eso, pidió información
sobre la economía en Guatemala y que le dijeron que
allí se estabayogestando
imaginarse, me sentíaunsumamente
milagrito. satisfecho
Como podrán
de lo
que estaba oyendo y por supuesto muy contento que
eso lo estuvieran oyendo los presentes, incluyendo
 Juan Luis
Lu is Bosch.
Con todo esto, les confieso que todavía hoy,
veinte años después, luego de revisar y revisar datos
 y comentar
comentarios,
ios, sé que lo que estába
e stábamos
mos haciendo era
lo correcto y que la economía
economía iba por el camino
cam ino ade-
cuado, no solo para el crecimiento,
creci miento, sino que habíamos

235

 
La guayaba tiene dueño

logrado ya una recuperación básica que nos permitía


empezar a pensar en inv
i nversión
ersión social y políticas
política s de de-
sarrollo. Siendo sincero, sin plata, no hay nada que
repartir.

236

 
CAPÍTULO XIV
Entonces, ¿qué fue lo que pasó?

Aunque los sondeos de opinión daban que yo te-


nía por arriba
ar riba del 60%
60 % de aceptación,
aceptación, lo cual fue
f ue con-
con-
firmado
me percatéen las
de elecciones
que todo lodelanterior
9 de mayo
no mede fortalecía.
1993, no
Pensaba que lo que sucedía era un logro, porque esto
me permitiría mayor respaldo popular para presionar
a la guerrilla en las negociaciones de paz.
Notemos que McCleary, en la página 103 en el
mismo capítulo denominado
denominado “Desunidad, Extremis-Ex tremis-
mo y Moviliz
Movilizació
aciónn” manif
man ifies
iesta:
ta:
“Confrontando una situación de incremento de
desestabilización, convergieron los intereses de la eli-
te. Esta convergencia resultó obvia cuando Serrano
parecía negociar una forma rápida de term termina
inarr el con-
flicto armado, sin tomar primero en consideración la
viabilidad institucional de los acuerdos de paz para el
sector privado
privado y los mil
m ilitares”
itares” (…)
(…) “Serrano, al conti-
nuar las negociaciones sin insistir en un cese al fuego,
amenazaba
amenaz aba los intereses institucio
instit uciona
nales
les de los dos gr
gru-
u-
pos de elite”.
Ahora, y solo ahora, entendí las palabras del ge-
neral Ortega Menaldo cuando, el 9 de mayo de 1993,

 
La guayaba tiene dueño

día en que habíamos ganado


g anado las
la s eleccion
eleccioneses municipales
(veinte
(veinte días
d ías antes del golpe)
g olpe) me dijo: “Señor Presiden-
te, yo no estaría tan contento, esto es lo peor que nos
pudo haber pasado, y yo le recomendaría que mejor
no lo festejen mucho”.
Entendí que no importaba lo positivo que yo
hubiera hecho como gobernante. Lo que si no podía
hacer, a la luz de lo que sucedió, era ir contra los in-
tereses de aquellos
aquellos que lucraban
lucraban con el conflicto
conf licto o de
quienes veían
veían el conf licto como una fuente f uente de
de poder;
poder que yo sin pensarlo, pero sí convencido de que
para eso me habían
había n elegido, se los los vine
vi ne a plantear con
mis acciones de gobierno. En mi “loca y vana fan-
tasía” yo creí que la autoridad venía del pueblo que
me había respaldado y más aun del mandato que esos
mismos días me fuera ratif ratificad
icadoo en las urnas.
Curiosamente, cuando McCleary se refiere a mi
personalidad, y hace algunos comentarios de diversa
índole, señala:
“Serrano correctamente interpretó la prioridad
de iniciar directamente conversaciones de paz con la
guerrilla, y él sabía que estratégicamente los militares
deberían de part
pa rticipar
icipar en el proceso
proceso.. Su fuerte perso-
perso -
nalidad
negociarleensirvió biencon
la mesa a él,la para sentar
llaa”. a los militares a
g uerrill
guerri
Indiscutiblemente ellos se sentaron con la gue-
rrilla, pero desde el día que les di la orden quisieron
botarme y, sin lugar a dudas, este pequeño grupo de
militares que sí se aprovechaba del poder empezaron
la conspiración de la elite a que se refiere
ref iere McClear
McClearyy.
Por el otro lado, la elite económica veía con des-
esperación que el tiempo pasaba y que yo no les de-
finíaEstado.
del la forma
Su en
Su angque
ustiaseseiban
angustia vio acolmada
privatizar
colmad las empresas
a cuando en una

238
 

Entonces, ¿qué fue lo que pasó?

encerrona que me dieron en el Hotel Camino Real,


les hice ver a sus representantes
representantes que no permitir
perm itiría
ía que
un deleznable monopolio estatal pasara a ser un de-
leznable monopolio privado; que eso lo consideraba
injusto
mentalespara el consumidor
intereses del país. y lesivo para los más ele-
Les manifesté que primero desmonopolizaría y
después privatizaría, garantizando que el pueblo ten-
dría
dr ía opciones
opciones para escoger y que
que las empresas tendrían
tendría n
que competir dándole al país calidad y precio. Por
otro lado, les hice ver que toda la presión estaba sobre
la electricidad y las telecomunicaciones, pero que el
Estado tenía más de cincuenta empresas que debería
vender y que si querían carne, que también presenta-
ran un plan para vender el hueso.
Esto terminó de angustiar a los pobres empresa-
rios que con tanta ilusión se saboreaban con las em-
presitas que ellos habían soñado y que ya sus colegas
disfrutaban
disfr utaban en países
países de América Latina.
Hoy veo que hablar de que los intereses de las
elites eran democráticos, es un farsa.
fa rsa. Lo que era cierto
es que se sentía
sentíann amenazados
amenaz ados y coincidieron
coincidieron en cons-
pirar. Mucho antes de que yo decidiera disolver el
Congreso
es que caday ladíaCorte, ellosmás
se veían ya tenían
tenía n su plan.y Lo
acorralados cierto
compro-
baban con angustia un fortalecimiento nuestro en el
gobierno,
gobie rno, aún cuando
cua ndo la situación en el Congreso era
sumamente complicada.
Ni las votaciones, ni las encuestas indicaban que
nosotros estuviéramos mal, pero ellos ya convenidos
 y conf
confabul
abulados,
ados, comenza
comenzaron ron a in
insist
sistir
ir en que yo era
un impro
i mprovis
visado,
ado, que
que llegué
lleg ué a la presidencia
presidencia por casua-
lidad,
que el que
MASeranouneradesconocido, que era
un partido, que no simplemente
tenía apoyo,

239
 

La guayaba tiene dueño

un comité electoral, que yo era un corrupto, porque


tenía caballos y había hecho una casa en Río Dulce,
que me había descarrilado en Nueva York. Bueno,
argumentaron
arg umentaron todo lo imaginable,
imag inable, me lo
lo echaron en-
cima y además,
que hicieron hoyespaldas,
a mis me doycon cuenta de tantas
la clara cosasa
tendencia
enemistarme
enemista rme con diferentes sectores.
sectores.
Me da tristeza
tr isteza que tantos
ta ntos buenos
buenos hombres
hombres y mu-
 jeres se comiera
comierann el cuento y lo respa respalda
ldaron
ron con ve-
hemencia,
heme ncia, incluso haciéndole
haciéndole propaga
propagandanda a una
u na de las
la s
burlas más gra grandes
ndes que se han hecho contra
contra el pueblo
pueblo
de Guatemala y su deseada democracia.
Tengo que reconocer que hubo hubo una
u na voz en lal a ca-
lle, que con valentía en ese momento, se levanté e
hizo una denuncia y fue la de Rigoberta Menchú,
Premio Nobel de la Paz. Se relata en la edición de
Siglo Veintiuno, del miércoles 2 de junio de 1993, en
la página
pági na 6, lo que que ella gritó
g ritó en la calle
cal le y manifest
mani festóó a
la prensa:
“Llamo a la población a resistir el nuevo golpe
de Estado… Los mismos corruptos tratan de apode-
rarse del mando, avalados por los militares, lo que no
significa un triunfo sino un nuevo retroceso… Dijo:
los nuevos
nuevos golpistas
golpista s usurparon
usur paron mim i nombre, colocando
colocando
una sill
si llaa con el nombre
nombre de la Premio Nobel,Nobel, y eso no
me lo consultaron; por lo tanto rechazo y condeno
este nuevo golpe de Estado”.
Cada vez que conozco y entiendo más sobre lo
acontecido y veo los lamentables motivos de los que
participaron, sus ambiciones y motivaciones y, sobre
todo, al ver lo que han hecho con el país, lamento
profundamente no haber triunfado en 1993 en la de-
puración del Estado,
la República comenzando
y la Corte Suprema por el Congreso
de Justicia. Con de
el
240
 

Entonces, ¿qué fue lo que pasó?

cuartelazo perpetrado por una pequeña cúpula mili-


tar, claramente
claramente estimulada y financiada
f inanciada por la cúspide
cúspide
de una pirámide mal llamada empresarial, se abrió el
camino
cam ino para llegar
l legar a lo que el país es hoy: un conjunto
conjunto
de instituciones
micas, políticas,
secuestradas, jurídicas, sociales
sin credibilidad y econó-
ni autoridad Y
para muchos,
muchos, fallidas.
fal lidas.
También lamento que se haya cumplido lo que
predije en varios de los discursos y múltiples inter-
venciones de hace veinte años, pues tristemente hoy,
la autoridad la tienen, en las ciudades, el crimen orga-
nizado, en el interior del país el narcotráfico, y en la
economía las grandes lavanderías de dinero que unos
 y otros tienen orga organi nizad
zadas
as en perfec
perfecto
to contuber
contubernio,
nio,
haciendo funcionar perfectamente, lo formal e insti-
tucional
tucio nal con lo informal
informa l y mafma f ios
ioso.
o.
Ver que el país subsiste hoy, no por su produc-
ción, sino por las remesas de los pobres guatemaltecos
guatema ltecos
que en el exterior trabajan y sufren. Sin sus aporta-
ciones,
cion es, la situación rural
rura l de nuestro
nuestro país sería aun más má s
desastrosa, el consumo nacional estaría por los suelos
 y,, por ende la indust
 y industrr ia, los ser
servicios
vicios y la ag
agric
ricult
ultura
ura
no serían posibles. Sin las remesas de los pobres, sería
imposible pagar las importaciones de todos los bienes
 y ser
servicios
vicios,, ya sean de capita
capitall o de consumo, inclu-
 yendo todos
to dos los arartícu
tículos
los lujosos de que di disf
sfrut
rutan
an los
privilegiados “dueños del país”, los dueños de la Gua-
temala de hoy.
¡Qué
¡Q ué tragedia
traged ia!! Pero
Pero yo
yo lo dije…
dije…

241
 

CAPITULO XV
El secuestro del Estado
de Guatemala

El 6 de junio de 1993 debe ser recordado como


el día en que se formalizó el secuestro del Estado de
Guatemala.
Las cúpulas
cúpula s empresar
empresariales
iales del país siempre
siempre resulta-
ron importantes
importa ntes en el manejo de los acontecim
acontecimientos
ientos..
Su relación con los militares fue de relativo respeto
 y logr
lograron
aron entendi
entendimm ientos que los hic
hicieron
ieron coexis
coexistitirr
compartiendo el poder, permitiendo, por períodos,
respiros democráticos y ciertas libertades políticas; o
bien,
bien, en otras
otra s épocas, apoyando a dictadores para pro-
teger sus privilegios.
Cualquiera
lo sabrá que porque
inter pretar,
interpretar, se interese
por que en launexistencia
exipoc
pocoo por de
stencia la historia,
histor
Gabino ia,
Gaínza,
Gaínz a, Rafael Carrera, Justo Ruf Rufino
ino Barrios,
Barr ios, Manue
Manuell
Estrada Cabrera y Jorge Ubico (más recientemente,
Lucas García y compañía) están los más elocuentes
ejemplos de lo que ha sido el resultado del contuber-
nio entre elites empresar
empresariales,
iales, oligarcas,
olig arcas, conservadoras
 y libera
l iberales,
les, que se ama
a malg
lgam
amaron
aron con grupo
g ruposs mil
m ilita
itares
res
para ejercer el poder.
poder. Como se diríadir ía hoy en el leng
lenguaje
uaje
empresarial
es decir, ende moda, han vivido
interpretación un “joint
castellana: venture”,
una “aventura
compartida”.
 

El secuestro del Estado de Guatemala

Pero en mayo de 1993 surgió un nuevo estilo:


 jóvenes,
 jóvenes, atrevidos
at revidos y “patriota
“patr iotas”
s” como ellos mismos
m ismos se
definen, en la carta de Dionisio Gutiérrez, deciden
protagonizar una de las hazañas más audaces en la
histor
historia
ia de
ligencia la democracia.
Milita
Militar Log ran
Logran
r mande a traer loque
a los el istrados
Jefe de Inte-
Jefe
s magistrados
mag de la
Corte de Constitucionalidad,
Constitucional idad, los llev
l levee al despacho del
del
Ministro de la Defensa, en donde ya ilustres aboga-
dos habían sido convocados para que asesoraran a los
“ineptos” magistrados.
Todo eso con el fin de encontrar una fórmula
legal de violar
v iolar la Constitución
Const itución Política
Política de la Repúbli-
ca de Guatemala. Eso era “pasarse por los forros” las
normas más elementales
nadie puede ser condenado del sin
derecho, como sido
antes haber es la oído
que
 y vencido en juicio. AdemáAdemás, s, logr
logran
an en form
formaa abu-
siva quitar al Presidente de la República, electo por
el 68% de los votos ciudadanos; y también quitar al
Vicepresidente, a quien
qu ien le “ofrec
“ofrecieron
ieron”” que se queda-
qued a-
ra, pero que al f ina
inall le dije
d ijeron
ron siempre
siempre no, aduciendo
aduciendo
que “juntos
“ juntos entraron y que juntos
juntos saldr
sa ldrían”
ían”,, lo cual
cua l de
plano lo inhabilitaba para acceder a la más alta magis-
tratura de la nación.
¿Cómo le sonaría esto a un estadounidense, si le
dijeran que el jefe de la CIA mandó a traer a los ma-
gistrados de la Suprema Corte de Justicia de los Esta-
dos Unidos, para llevarlos a la oficina del Secretario
de Defensa en el Pentágono, para que firmasen una
resolución preparada por unos distinguidos abogados
independientes, mediante la cual se sustituiría al Pre-
sidente
siden te y al
a l Vicepresidente
Vicepresidente de los Estados Unidos?Unidos ?
¿Qué pensaría ese ciudadano estadounidense si,
además, le dijerandel
to los integrantes queSenado,
no se preocupara,
como los del porque tan-
Congreso
243
 

La guayaba tiene dueño

serían depurados porque


porque eran tremendamente corr
corrup-
up-
tos; que integrarían otro Senado y otro Congreso; y
que en cualquiera de esos congresos, se elegiría a los
nuevos
nue vos dignatar
dignat arios
ios de la Nación?
Nación?
estosEn efecto, eso
“patriotas fue lo queElhicieron
bananeros”. hecho enensíGuatemala
mismo ya
es funesto, pero la enseñanza que obtuvieron de esta
situación fue más funesta
f unesta aun, pues marcó el principio
 y la man
m anifest
ifestación
ación brutal d el Secuestro del Estado.
brut al del
Los dueños de la guayaba lo lograron ahora sí. Po-
níann en la Presidencia un títere
nía t ítere,, aunque esto no era lo
importante.
import ante. Descubrieron
Descubrieron cómo,
cómo, de manera brutal,
bruta l, se
podía intervenir la Justicia; cómo al poder político se
le
dadpodía
pocivil
día man
mseanipular
ipularinstrumen
podía y poner
pone
instr r de
umental rizar
rodi
odillllas
talizar yas; ; cómo
que
qu cóm o la socie-
e instituciones
institucion es
como el Congreso eran dúctiles y maleables ante la
presión. Y lo más importante: por fin encontraron la
fórmula de doblegar
doblegar a los mi
milita
litares,
res, estimulándoles
estimul ándoles sus
temores
temor es y div
dividiéndo
idiéndolos.
los.
Estaba claro que los dueños  no quería compartir
el poder, así que la división entre García Samayoa,
Perussina y Ortega por un lado; con Pérez Molina
 y Enr
Enríquez
íquez por el otro, les favoreció, al a l ext
extremo
remo que
estos últimos, al haber sido seleccionados para apoyar
al gobierno de Ramiro de León Carpio y, posterior-
mente al de Arzú, fueron también instrumentalizados
para la misma desintegración del Ejército, dejando
así al país con un solo poder: el de los dueños, hoy
compartido con los narcotraficantes y miembros del
crimen organizado
organ izado..
A partir de ese momento, el secuestro

En efecto, a partir el Secuestro del


part ir de ese momento el
244

El secuestro del Estado de Guatemala

Estado vino a ser una realidad.


real idad. Con algunas
algu nas excepcio-
excepcio-
nes, los jueces y magistrados, fiscales y procuradores,
bailan al son del billete o de las presiones o preben-
das. Los abogados privados redactan las resoluciones
de jueces y cortes, y por qué no, si ya lo hicieron los
de la Corte
Cor te de Constitucionalidad
Constitucional idad en 19931993.. Qué cosa
mejor, que el ponente de una determinada resolución
sea el mismo que va a ser beneficiado, porque de esta
forma ya no hay nada que arreglar.
arreg lar. Sea buena
buena o mala,
ma la,
los dueños queda
 quedann contentos. PorPor supuesto, ahora ya no
son solo los dueños: el camino
cami no se abrió y por él transita
tran sita
todo tipo de criminales, siempre y cuando tengan ac-
ceso a esta
est a innov
in novadora
adora forma de ejercer
ejercer la “ justicia”
justicia”..
a losNi modo,
modo,
jueces ahora para simplificar
y magistrados simplif
mejoricar aun más lasel cosas
legalicemos nar-
cotráfico
cotráf ico,, pues ya de hecho,
hecho, el asesinato,
a sesinato, el secuestro,
el hurto, la estafa, etc., están ya legalizados por un
procedimiento sencillo llamado impunidad .
Por supuesto, de este procedimiento quienes más
se han beneficiado son los señores del crimen orga-
nizado, sean estos descamisados,
descamisados, de camiseta y tatua-t atua-
 jes, o bien de camisa
cam isa corbata
corbat a y de traje confeccionado
por los maestros Salvatore FerraFerraga
gamo
mo o de don HugoHugo
Boss, o el de la esquina.
La propia comunidad internacional se alarma de
lo que pasa en el país, por eso se sugirió crear la Co-
misión Internacional (CICIG, auspiciada por las Na-
ciones Unida
Unidas).s). Pero, sorpresa!! , los dueños resulta-
Pero, ¡oh sorpresa
ron más listos de lo que nos imaginábamos. Ni bien
llegó el señor Carlos Castresana, como Jefe de dicha
institución,
inst itución, lo coparon,
coparon, lo invitaron,
i nvitaron, lo sedujeron
sedujeron y lo
alinearon, a tal extremo que en lugar de perseguirlos,
los protegía, según
seg ún se desprende de la documentación
que aporta Lafite Fernández en su libro “Crimen de
245

La guayaba tiene dueño

Estado.
Est ado. El Caso
Ca so del Parlacen
Parl acen””.
Sin entrar a hacer juicios sobre el fondo de los
asuntos, sino comentar acerca de algunos de los he-
chos que relata Fernández, que nos ayudan a entender
qué tan lejos se ha llegado con el secuestro de la justi-
cia, transcribo
transcr ibo algunas
alguna s citas de ese libro
libro..
En la página 156, capítulo 9, “Un crimen con sus
 propias reglas”, el autor
autor relata
relata que a los fiscales
f iscales interna-
i nterna-
cionales de la CICIG, al llegar e iniciar las investiga-
ciones en el caso del Parlacen (o sea: el asesinato de
diputados salvadoreños del Parlamento Centroame-
ricano, en 2009) les llama la atención que el fiscal
encargado, Álvaro Matus,
Matu s, declara a la prensa que ni el
director
de mando, de la Policía,
serían ni el subdirector,
llamados ni el tercero
a declarar. Entonces los
fiscales de la CICIG se dan cuenta de que “el caso
era filoso desde el principio, pero los indagadores de
la CICIG sabían que llegaron a Guatemala a trocar
la historia de adversidades judiciales en proyectos de
esperanza para que la justicia se enderezara”.
Más adelante dice: ”…en febrero del 2009 los in-
vestigadores
vestig adores de la CICIG
CICIG ya habían
había n penetrado la Poli-
cía guatema
g uatemalteca
testimonios lteca”
ajenos”, yalagrega
ag rega el oficial
paquete libro que
que”los pr imeros
primeros
encontraron
en los expedientes revelaban que en todo aquello es-
taban metidos algunos de los máximos rectores de la
instituciones de seguridad de Guatemala. Los nom-
bres y apellidos eran prominentes. Eran casi los mis-
mos que pillaron como participantes en las matanzas
de los reclusos”.
Estas matanzas se refieren a las ejecuciones extra
 judiciales
 judicia les ocur
ocurrid
ridas
as en los pena
penales
les conocidos como
Pavón y El Infiernito, contra varios detenidos que,
como testigos o involucrados en la muerte de los
246

El secuestro del Estado de Guatemala

parlamenta rios, estaban guarda


parlamentarios, gu ardando
ndo prisión en esos pe-
nales y que, obviamente, constituían un peligro para
los autores
autores del crimen.
cr imen.
Los mismos fiscales, según se relata en la página
165 del libro, determinan un curso de acción que los
llevará a pistas
pista s más relevantes en el esclareci
esclarecimiento
miento del
caso, pues
pues claramente
clara mente visua
visualilizaban
zaban que el curso y acti-
tudes de los fiscales
f iscales guatemaltecos estaban totalmente
sesgados:
“La idea era hurgar en la vida de los diputados
asesinados, sus negocios, sus posibles contactos con
guatemaltecos, entre otras cosas. Esas eran, en parte,
acciones obligadas para cumplir una buena investiga-
ción. La respuesta
respusorprendió
a El Salvador esta de dió
sorpren Castaresana
Castresana a la solicitud Simple-
los investigadores. de viaje
vi aje
mente les dijo no podían cruzar la frontera con El
Salvador, sin dar muchas explicaciones. Los colabo-
radores de la CISIG se quedaron mudos, incrédulos.
No podían miram irarr con benevo
benevolenlencia
cia esa decisión. Para
Para
ellos era un
u n error no pisar
pisa r suelo salvadoreños,
salvadoreños, si verda-
deramente, se quería llegar a la profundidad necesaria
en el caso.”
“¿Por
lo sabe. qué Castresana
…para esa época eltomó esa decisión?
español mostraba unSolocla-
él
rísimo
rí simo retroceso en la vo voluntad
luntad que se necesitaba para
darle nuevos ímpetus técnico–jurídicos
técn ico–jurídicos al
a l tema”.
tema”.
Más adelante en la página 170, al relatar el desa-
rrollo de las pesquisa, Lafitte Fernández cuenta que
los fiscales
f iscales internacionales
i nternacionales encontra
encontraron
ron involu
involucrados
crados a
dos grupos
gr upos oficiales
oficia les muy poderosos
poderosos que
que operaban n la
Policía y Gobernación:
”En esos temas el mando era vertical. Sin em-
bargo, también involucraron en la cúpula de la or-
ganización al ministro Carlos Vielman Montes, un
247

La guayaba tiene dueño

empresario con fuertes vínculos con los principales


capitales de Guatemala y expresidente de la Cámara
de Industria que gozó, antes de su renuncia, de todo
el apoyo del expresidente Berger y de los sectores
empresariales organizados. (…) La CICIG tenía un
número abultado de testigos de todas las operaciones
que hacían sus hombres más cercanos, las conocía al
dedillo
dedi llo Vielman”
Vielman”..
En el capítulo
capítu lo 10,
10, denominado “Perseguir,
“Persegui r, silen-
ciar, destruir”, la fiscal costarricense, Gisele Rivera,
de la CICIG, le dice al periodista Lafite Fernández, y
él así lo relata en la página
pág ina 191:
191:
“Lee bien
bien esa transcr
tr anscripció
ipciónn y verás que hablamos
de
manola corrupción
cor
derupción
Figueroa ennos
l a CICIG.
la CICI G. Puedes
informaba leer
de las que el her-
reuniones de
Castresana con la cúpula económica y de sus pactos.
Ellos
El los nos daban información.
infor mación.””
Estas citas no necesitan comentario alguno, pues
se explican por sí mismas. Sin embargo, lo que sí me
llamó la atención, es cuando ella, la fiscal Gisele Ri-
vera, cuenta que el día 18 de octubre de 2010, luego
de dejar la CICIG, una costarricense de apellido Ga-
rita
ella.entabla
Entonces un acomprende
una demanda porquedifam
diflaamación
ación había
batalla en contra
contra de
empe-
zado. Dice Fernández, en la página 181:
“Es obvio, sin embargo, que la acusación esta-
ba vinculada al esfuerzo de fiscales y autoridades de
Guatemala de callarla. Todos los que no querían que
ella llegara, a ese país, a testimoniar ante un estrado
 judicial,l, tení
 judicia tenían
an un
unaa enorme ventaja sobre ell ella:
a: Gise-
le estaba a casi mil kilómetros de distancia de ellos
 y sus agagresores
resores pod
podían
ían invest
investir
irse
se de autorid
autoridades
ades en
un sistema judicial manifiestamente dudoso como es
el guatemalteco. Tenían el dominio de las acciones
248

El secuestro del Estado de Guatemala

 judicia les para


 judiciales par a inventarse
inventar se cualquier
cua lquier cosa”.
cosa”.
A todas luces era claro que buscaban una orden
de captu
captura
ra para evitar que ella se presentara
presentara a testificar
testif icar
ante la justicia guatemalteca, sabiendo, dice Fernán-
dez, que: “Gisele no tenía copia de la demanda en
su poder. La distancia entre Costa Rica y Guatemala
era la misma
mi sma entre su necesidad
necesidad de información
in formación básica
que necesita cualquier ser humano para defender su
honor, y su prestigio”.
Ella misma relata que de darle curso a la deman-
da, la difamación es una acción privada, que no con-
templa prisión preventiva, pero que hay jueces que
“estiran las leyes a su antojo para atropellar libertades
 y valores hum
humanos.
anos. Tiene
Tienenn la capacid
capacidadad de ajusta
ajustarr el
camino de la justicia a sus intereses personales. Esto
no es cosa nueva…”
Sin embargo, en un hecho
hecho al que ellellaa llam
ll amaa insó-
lito, en tiempo récord
récord de solo cuatro días,
d ías, se le levan-
levan-
tó la inmunidad que ella tenía como funcionaria de
Naciones Unidas, y se decretó una orden de captura
internacional por parte de la INTERPOL, para que
fuera capturada en cualquier lugar del globo terrá-
queo.Como dice la canción “te pareces tanto a mí”; yo
podría decir que conmigo el sistema judicial guate-
malteco si no inventó, por lo menos practicó, perfec-
cionó y modernizó este tipo de procedimientos. El
Procurador Tuna Valladares, alentado por el mismo
grupo económico que persiguió a la fiscal Rivera,
hace quince años me persiguió a mí y en cuarenta
 y ocho horas saca
sacaron
ron un
unaa orden de captu
capturara inter
interna-
na-
cional pidiendo que me detuvieran, aportando como
pruebas de los delitos cometidos cuatro recortes de
prensa
prensa y una nota anónim
anónima,a, mal escrita. ¿Qué tal?
tal ?
249

La guayaba tiene dueño

Si el sistema de justicia guatemalteco fuera siem-


pre así de eficien
ef iciente,
te, Guatemala
Guatemal a no tendría el índice
í ndice de
impunidad
impun idad más alto
a lto del mundo
mundo.. Al respecto, según un
fiscal que me visitó en Panamá hace unos años, ni el
1% de los casos
c asos delincuenciales
del incuenciales se resue
resuelve
lven.
n.
La propia BBC de Londres en un reportaje his-
tórico, dijo irónicamente, que si usted quería hacer
turismo delincuencial, el lugar ideal era Guatemala,
pues allí
all í es el paraíso de los delincuentes.
Lo que le faltó al a l reportaje, es recomendarles
recomendarles a los
delincuentes
deli ncuentes que no se vayan vayan a meter con los dueños del
 país, porque entonces no hay coraza ni ley que valga,
porque así sí los pueden perseguir. Tal es mi caso:
llevan casi 20 años persiguiéndome, sin importar si
hay o no delitos, aunque autoridades nacionalesnaciona les como
la misma Cancillería de Guatemala manifiesten que
no existen pruebas ni evidencias que sustenten la co-
misión de los delitos que se me imputan. Pero, ¿quién
dijo que los señores dueños necesitan delitos para per-
seguir?
segui r? Cuando ellos ya lo han dispuesto
di spuesto,, no se nece-
nece-
sitan pruebas y punto. ¿Acaso el país no es de ellos? ellos ?
No quiero ni es mi intención hacer una mono-
gra
graf
nenf íamucho
de los más
abusos de estos
ingenio queseñores,
seyo
ñores,
paraporque
po rque ellos
inventar tie-
proce-
dimientos
di mientos para la realización
real ización del secuestro del Estado.
Imagínense: ellos hace veinte años o quizás más, ya
tenían claros cómo se podía llevar a cabo este secues-
tro. En cambio, a mí me tocó pensar y estudiar mu-
cho, para llegar a entender la desgracia de lo que al
país le ha pasado.

El caso de los Gutiérrez


Considero que este es, sin lugar a dudas, un caso

250

El secuestro del Estado de Guatemala

emblemático de lo que ha sido, con todo su drama-


tismo, el secuestro de la justicia en el país. En él se
ve hasta dónde han sido capaces de llegar Juan Luis
Bosch y Dionisio
nipulándola e instrumentalizándola;
Gutiérrez, burlandoutilizando
la justicia, jue-
ma-
ces, magi
ma gistrados,
strados, fiscales,
f iscales, preside
presidentes.
ntes. Y,
Y, por supuesto,
supuesto,
utilizando a mercenarios como Víctor Rivera, al que
tuvieron a su servicio personal, lo prestaron al Eje-
cutivo, lo pusieron como operativo de Vielman en el
Ministerio
Min isterio de Gobernación
Gobern ación y bueno
bueno… … ¡solo
¡ solo Dios sabe
cuántas cosas más hicieron con él a su servicio!
Como en el caso anterior de la CICIG, no pre-
tendo opinar ni juzgar el fondo de esta controversia
familiar. Simplemente señalo los mecanismos usados
por este dúodúo poderoso en la manipulación
man ipulación de la justi-
cia. Es
E s lamentable
la mentable que ese ha sido uno de los ejemplos
ejemplos
más nefastos para la destrucción de las instituciones
 judiciales
 judicia les del paí
paíss y, como veremos, los actores son
básicamente los mismos que en el caso anterior y en
tantos otros
ot ros casos en los que se ha atrope
at ropellllado,
ado, no solo
solo
la justicia de Guatemala, sino la dignidad misma de
nuestra sociedad.
Conozco
Conozc
Arturo o desde
Gutiérrez, hace más
a quien se ledeconoce
cuarenta
hoyaños
a ños
comoa Juan
“El
Tío” o “Don Artu
Ar turo”
ro”,, porque entré siendo muy joven
joven
como socio del Club Rotario de la Ciudad de Gua-
temala, al que le llamaban el “Club de los Viejos”.
Fui apadrinado por Eduardo Mayora Dawe, mi buen
amigo “Guayo”, abogado, mayor que yo, pero parte
del grupo con el que yo jugaba golf en el Guatemala
Countryy Club.
Countr Club.
Luis Conocí también
y a Dionisio a Alfonso
Gutiérrez, Bosch,
padre padre deA Juan
de Dionisio. ellos
los traté muy poco,
poco, ambos
a mbos muriero
mur ieronn en un
u n accidente

251

La guayaba tiene dueño

aéreo cuando en su propio avión iban a Honduras a


dejar ayuda humanitaria, por una catástrofe sufrida
en el vecino país, y en la que el Club Rotario estaba
dando
cia
cial carapoyo.
l cariño Siempre
iño y gran
gra respeato;ellos
n respeto; ambosse lesfuero
recordó
f ueron con espe-
n personas que
dejaron un gran vacío en el Club y durante años se
honró su memoria.
Así que el concepto que yo siempre tuve de esa
famililia
fam ia Gutiérrez fue muy bueno bueno,, y mejor
mejor aún, cuan-
do en tiempos del expresidente Romeo Lucas García,
tuve problemas con el gobierno. Juan Arturo, siendo
Presidente de la Cámara de Industria, se portó con-
migo como todo un caballero y verdadero amigo, al
igual que Mario Echeverría, que era Presidente de la
Cámara de Comercio, Juan Maegli, Bernardo Neu-
mann y Edy Carrete, mis compañeros de la Junta di-
rectiva de la Asociación de Amigos Amigo s del País.
País.
A los sobrinos del “Tío Arturo” solo los conocía
por referencia, sobre todo a Juan José y a Dionisio,
que eran compañeros de colegio y amigos de barrio
de mis sobrinos Jorge Antonio y Juan Carlos Fuentes
Serrano.
era unEmpecé a tratar
di rigente
dirigente a Juanal (dich
empresari
empresarial Luis
(d ichoBosch
o sea decuando ya él
paso, activo
paso,
 y entu
entusiasiasta)
sta) y después de que ello ellos,s, en 1982, había
habíann
tomado la dirección de las empresas y Juan Arturo se
había trasladado con con su fam
famililia
ia a vivir al Canadá.
Can adá.
Un día, ya viviendo yo en Panamá, me llamó
mi suegro, don Arturo Bianchi, quien siempre fue
un dirigente del sector empresarial y me contó que
 Juan ArArtuturo
ro Gutiér
Gutiérrez
rez lo vi visitó
sitó en su residencia
residencia.. El
propósito era que se enterara de primera mano de lo
que se iba a destapar, pues los sobr
sobr inos lo perjudicaron
perjud icaron
seriamente en sus intereses y que él iba a proceder

252

El secuestro del Estado de Guatemala

contra ellos.
contra el los. Mi suegro me dijo:
d ijo: “Yo
“Yo creo que Artu
Ar turo
ro
tambié
tam biénn querrá que yo te pase esta información,
in formación, pues
me imagi
ima ginono que sabrá del problema
problema que tú tien
t ienes
es con
ellos
ellos,
viene, así
algoque te lo cuento, para que estés enterado que
grueso”.
En efecto, muy pronto se empieza a comentar
el incidente, pues como lo relata Gerardo Reyes en
el periódico El Nuevo Herald, del 16 de octubre de
2005, en un artículo titulado “Un imperio de pollos
se despluma en Miami”:
“La tranquilid
tranqui lidadad que se respiraba
respiraba en el am-
biente del elegante salón del Hotel Sonesta de
Key Biscayne, esa mañana del 16 de febrero
de 1999, alimentó las esperanzas de algunos
de los presentes de que la reunión a puerta
cerrada pondría punto final a una larga dis-
puta de una de las familias más poderosas de
Centroamérica.
Durante la primera parte de la sesión, uno
de los grgrupos
upos familia
fami liares
res escuchó
escuchó pacienteme
pacientemen-
n-
te las
la s explicaciones del otro respecto a los ne-
gocios de la enorme y próspera empresa Aví-
cola Villalobos. No hubo gritos ni diatribas.
Pero la vida de todos los presentes cambió
cuando Juan Artu Ar turo
ro Gutiérrez,
Gutiérrez, uno de los pa-
triarcas
tria rcas de la familia
fami lia en discordia, más conoci-
conoci-
do en Guatemala como Don Arturo, oprimió
el botón de play de un aparato de DVD.
En la pantalla apareció el propio Don Ar-
turo
tu ro acusando a los los miembros del
del grupo
gr upo fami-
liar opositor de ladrones y mentirosos, y para
sustentar
que habíansussido
señaltomad
señalam
toamien
ientos
astossecretamente
madas proyectó imágenes
proyectó duran-
te una reunión
reun ión en
en Canadá
Canad á a mediados del año
anterior.
253

La guayaba tiene dueño

En las imágenes aparecían dos altos eje-


cutivos de Avícola Villalobos explicando, sin
escrúpulos, una serie de maniobras presun-
tamente
millonarios fraudulentas
a espaldas para
de laobtener
contabilidadingresos
de
la empresa y engañar al fisco de Guatemala,
quedándose con con los impuestos a las la s ventas.
ventas.
Allí también se citaba el testimonio de un
auditor del grupo famifa milia
liarr que describió cómocómo
los sobrinos
sobrinos de Don Ar Artu
turo
ro uti
utililizaban
zaban cuenta
cuentass
bancarias en Miami para esconder ingresos y
dividendos de la empresa.
Como despedida del documental, el em-
presario les advirtió que se prepararan para
una acción legal.
En ese momento, de acuerdo con la ver-
sión de los demandados, las puertas del salón
del hotel se abrieron y apareció una tromba
de notificador
notif icadores
es judiciales que abordaron a los
ejecutivos para que firmaran citaciones a un
proceso civil que la empresa matriz de Don
Arturo, Lisa S.A., acababa de entablar en una
corte
co rte estatal de Miami.
Miam i.
Una cámara, a la entrada del salón, insta-
lada por investigadores de los demandantes,
captó la llegada y la salida de los asistentes y
en otro lugar del hotel se tomaron imágenes
de los automóviles de los invitados”.
En Miami,
Mia mi, Don Arturo
Art uro y su hijo
hijo Juan Gui-
llermo Gutiérrez, en nombre de Lisa, S.A.,
adelantaron dos procesos civiles, uno estatal,
por
por uso de propiedades
propiedades
confabulación para robadas,
ter yactos
cometer
come otrofraudu-
federal
f raudu-
lentos y lavado de dinero bajo la figura legal

254

El secuestro del Estado de Guatemala

del RICO Act (Racketeer Influenced


Inf luenced and Corrupt
Organizations).
Los acusados principales eran los dos dirigentes
más Dionisio
v isibles
visib les del
deGutiérrez
l emporio
emporio Mayorga,
fam iliar:
famil iar: líder empresarial,
periodista de televisión y financista político con am-
biciones presidenciales, a quien popularmente se le
conoce como “Diosito” por su extraordinario poder.
Gutiérrez ocupa el cargo de copresidente
copresidente de la corpo-
corpo -
ración Mult
Multi–Inv
i–Inversion
ersiones,
es, la empresa matri
mat rizz del grupo
gr upo
famililiar.
fam iar. Es sobrino
sobrino de Don
Don Arturo.
Ar turo.
 Juan Lui
Luiss Bosch, presidente de Mult
Multi–Inversiones.
i–Inversiones.
Es uno
do de los
de Libre más destacados
Comercio promotores CAFTA,
de Centroamérica, del Trata-y
adalid de la batalla contra la dependencia petrolera de
la región, en manos
ma nos de los designios
design ios del presidente
presidente de
Venezuela, Hugo Chávez.
Ch ávez.
“Edward H. Davis, abogado de la mayoría
de los demandados, dijo a El Nuevo Herald
que se abstenía de dar declaraciones sobre el
caso. La decisión fue tomada un día después
de que el abogado
abogado aceptara una entrevista
entrev ista con
este reportero.
‘Discúlpenos por la señales contradictorias,
pero hemos llegado a la conclusión de que
preferimos no hablar de litigios pendientes’,
explicó Davis.
‘Esa una muestra más de que no tienen ar-
gumentos’, dijo el abogado de Don Arturo,
 Juan Rodríg
Rodr íguez
uez ‘¿Q
‘¿Qué
ué respuest
respuestaa pueden
pueden tener
a los famosos vídeos
v ídeos en donde
donde el ejecutivo
ejecutivo más
má s
import
importante
do queante de Guatemala
Guatema
blanquea dinerolanegro
neaparece
gro?? ’ reconocie
reconocien-
n-
En varios memoriales presentados en las

255

La guayaba tiene dueño

dos cortes
cortes de Miami,
Mia mi, los demandados han sos-
tenido que la querella
querella es una forma
form a de ‘extor-
‘extor-
sión’ y han concentrado su defensa en alegatos
de quejurisdicción
tienen los tribunales de elEstados
sobre Unidos
caso, pero no
no han
respondido en profundidad a los señalamien-
tos de presunto lavado de dinero en bancos de
Miami
Mia mi a trav
tr avés
és de compañías
compañía s de fachada”.
fachada”.
Después de estos incidentes, parece que se tra-
tó de llegar a una negociación de compra–venta de
acciones, pero al parecer la oferta de los sobrinos fue
insultante para el Tío Arturo. Esto da inicio a una
nueva batallapara
muy difícil queJuana partir
Arturodeyese momento,
su hijo resulta
Juan Guiller-
mo, pues como era lógico, estos casos deberían ven-
tilarse en tribunales de justicia guatemaltecos, porque
es allí el lugar en que se estaban llevando a cabo los
actos ilícitos denunciados.
Tales delitos eran, primero, la falta de rendición
de cuentas por parte de los sobrinos al tío como in-
versionista, y el hecho de que por casi 10 años, no le
pagaban los dividendos a los que tenía derecho; en
segundo lugar, la apropiación indebida de fondos del
Estado de Guatemala
Guatema la de impuestos
i mpuestos por
por ellos cobrados
 y no entregados
entreg ados ala l fisco.
f isco.
Esos hechos, en efecto, quedaron demostrados
de manera fehaciente en las grabaciones de las con-
versaciones. Cito nuevamente el Artículo del Nuevo
Herald
He rald de Miami:
Miami :
“En esa reunión, argumentan los deman-
dantes (Tío Arturo y Juan Guillermo) que
Ro
Rojas
jasitieron
y Rosell
admitiero
adm n que(altos
( altos
un 50ejecutivos de de
por ciento los las
sobrinos)
la s ventas
de la empresa avícola
avícola no estaban registrada
regist radass en

256

El secuestro del Estado de Guatemala

los libros de contabilid


contabilidad.
ad.
 La empresa estaba vendiendo pollos vivos
por debajo de la mesa. También confesaron,
según documentos aportados a la demanda,
que por un error le habían entregado un re-
porte contable a Juan Guillermo, el hijo de
Don Arturo,
Art uro, que estaba destinado
desti nado a Bosch, su
contraparte.
Ámsterdam
Ám sterdam (Abogado de don
don ArArtu
turo),
ro), exi-
gió a los sobrinos de Don Arturo una lista de
documentos al tiempo que contrató a Rodrí-
guez en Miami
Miam i y a una legión de investigado-
res privados
la venta para que
irregular hicieranEnuna
de pollos. pesquidesaesa
pesquisa
medio de
investigación, según Rodríguez, Don Arturo
recibió una llamada del ex auditor interno de
la avícola, Mario de Águila Cancinos, quien
estaba buscando empleo.
De Águi
Ág uila
la ‘reveló el secreto’
secreto’, comentó Ro-
dríguez. En mayo de 1998, el ex auditor ex-
plicó ‘varios mecanismos que estaban siendo
usados por Bosch y Dionisio para desviar ga-
nancias y dividendos sin reconocer derechos a
Lisa [la
[ la empresa holdin
holdingg de Don
Don Artu
Ar turo]’
ro]’..
Agrega que De Águila `confirmó el fraude
en relación con la venta de pollos vivos por
dinero en efectivo y nos dio los indicios de
depósitos de grandes cantidades
cant idades de efectivo en
cuentas bancarias de Miami’.
Basándose en una declaración
decla ración jurad
juradaa de De
Águi
Ág uila,
la, los abogados pidieron
pidieron el embargo pre-
ventivo de bienes
ventivo bienes raíces en Miami,
Mia mi, la may
m ayoría
oría
situados en Key Biscayne,
Biscayne, compañías
compañía s de facha-
da que supuesta
supuestamente
mente usaron los acusados para

257

La guayaba tiene dueño

desviar el dinero, y de cuentas bancarias en


Hamilton Bank, Israel Discount Bank, Total
Bank, Republic International Bank of Nueva
 York,
 Y ork, Merr
Merrii ll Lynch, Chase
Ch ase Man
Manhat
hatta
tan,
n, Ma-
rine Midland
Midla nd Bank y Barclays
Barclays Bank.
Un avión Cessna Citation y un Pipper
PA31T fueron también embargados”.
Continúa el artículo del Herald:
 “El proceso funcionaba de la siguien
sigu iente
te ma-
nera. El dinero
di nero se depositaba en las cuentas de
los ejecutivos del grupo y con él se compra-
ba efectivo
otros en dólares
inst rumentos
instru mentos en casasque
monetarios
monetarios de luego
lucambio
ego erany
depositados en cuentas de Miami. Los fondos
de estas cuentas eran utilizados para comprar
casas y otros bienes en el sur de la Florida.
Para justificar
justif icar el envío
envío del dinero al exterior
exter ior se
se
creó una empresa en Panamá, Ancona Finan-
ce, que hacía ‘préstamos falsos’ a la compañía
avícola
avíco la en dólares.
La contabilidad doble se guardaba en una
oficina, conocida como ‘el cuarto de los tru-
cos’.”
A la luz de estos hechos, el profesor Gordon (the
Chesterfiel
Chesterf ieldd Smith Professor of Law at the University
University
of Florida) manifestó en un afidávit que Don Arturo
presentó en Florida: “que los demandados (Juan Luis
Bosch y Dionisio Gutiérrez) aparentemente quieren
que el caso sea transferido a los tribunales de Guate
mala,
ma la, no porque
porque Guatemala
Guatemal a ofrece un foroforo disponible
 y adecu
adecuado,
ado, sino porque ese foro est
estáá sujeto a ma
mani-
ni-
pulación y corrupción, lo cual imposibilita
imposibil ita que pueda
pueda

258

El secuestro del Estado de Guatemala

dicta rse una


dictarse un a resolución
resolución justa. Pero
Pero los demandados no
desean que los beneficios que pudieran derivar de la
manipulación del sistema judicial guatemalteco los
afecte adversamente por revelaciones sobre su con-
ducta en materia de evasión de impuestos”.
Por otra parte, en declaración personal, Juan Ar-
turo manifestó
ma nifestó que:
“Está preocupación puede ser la razón por
la que algunos
algu nos de los demandados lograron un
arreglo con el Gobierno de Guatemala para
que aceptara
aceptara un depósito dinerario
dinerar io como
como pago
de impuestos omitidos y multas, descrito por
el demand
demandado
ante adodel
la Corte Konrad
EstadoLosen en su deposici
de Florida. deposición
ón
Cabe mencionar que esas negociaciones
con el gobierno del Presidente Arzú se lleva-
ron a cabo con posterioridad a la iniciación
del juicio en Florida en febrero de 1999. Las
referidas negociaciones constituyeron
constituyeron una de-
mostración palpable de la impunidad que dis-
frutan
fr utan mis
m is sobrinos en las esferas del gobierno
gobierno
guatemalteco.
concedidas porLasel amnistías
Gobierno fiscales ad–hoc
de Guatemala
violan específicamente los Acuerdos de Paz
 y deberí
deberían
an investi
investiga
garse,
rse, debido a su fafalta
lta de
transparencia.
 Además, se ha descubierto posteriormente
que la documentación de tal amnistía fiscal
fue deliberadamente
deliberada mente consignad
consignadaa con fecha
fecha an-
terior a la iniciación
in iciación del
del juicio en la Florida, a
pesar que el presidente de la Avícola, Konrad
Losen, declaró bajo juramento que tal amnis-
tía ocur
ocurrió
rió a consecuencia del juicio.
juicio.
Al respecto, el ex Ministro de Finanzas

259

La guayaba tiene dueño

Pedro Lamport se ha negado a rendir decla-


raciones al respecto ante los tribunales de la
Florida”.
Es claro que todo esto solo muestra la forma en
que estos señores, los dueños, tienen a su disposición
para operar y cubrirse las espaldas: juzgados, fiscales,
presidentes, ministros y en general, el Estado. Da es-
panto el cinismo
cini smo de Dionisio,
Dionisio, cuando habla de corrup-
ción, de libertad
liber tad,, de democracia.
democracia . Yo
Yo me preg
pregunto
unto si él
 y su grupo
gr upo de admir
adm iradores,
adores, alg
a lguna
una vez han
ha n leído algo
alg o
sobre estos concep
conceptos tos o simple
si mplemente
mente se los imagina
imag inan.
n.
Me pregunto
pregu ntoosibien,
los intuyen; al guien
algu ien
lo se
quelosen
explicó o si podría
realidad simplem
simplemente
serente
es
que él sí se creyó lo de su apodo “Diosito” y creerá
que todo, en el mundo, es o debe ser como él lo quie-
re o como él cree que debe ser.
En la revista guatemalteca “¿Y qué?, edición 64
de enero del 2012, en un artículo en el que habla del
regreso de Dionisio Gutiérrez, en un gobierno a su sa-
bor y antojo, el
el autor reproduce
reproduce un documento
docu mento escrito
escr ito
por Pablo Nación
za Nueva Monsanto, Secretario
(ANN), que alGeneral
referirsedea Dionisio
la Alian-
Gutiérrez lo define de la siguiente manera: “Para lo-
grar sus propósitos ha instrumentalizado a partidos y
a políticos, seduciéndolos con sus ‘negocios y ayudas’.
De esa forma controla bancadas, diputadas y diputa-
dos, quienes presentan iniciativas de ley a favor del
modelo que permita poner el Estado bajo el control
del poder financiero y económico (…) Ha atacado la
institucionalidad del país con el fin de debilitarla; ha
tratado a diplomáticos, académicos, empresarios y di-
rigentes
rig entes sociales y populares, con prepotencia,
prepotencia, altane-
alta ne-
ría e imposición de ideas. Y desde ahí ha apoyado los

260

El secuestro del Estado de Guatemala

movimientos reaccionarios como el golpe de Estado


en Honduras y los intentos de golpes en los países de
Suramérica”.
Para completar esta brillante definición, yo solo
le agregarí
agrega ría:
a: “su intervención
intervención en el golpe de estado de
1993, en Guatemala”.
No hay quien se atreva a abrirles juicio en Guate-
mala.
ma la. Recuerdo
Recuerdo cuando
cua ndo el propio
propio Fiscal General, Juan
Luis Florido, a finales del año 2005, quiso sobreseer
los casos penales que por evasión de impuestos se te-
nían abiertos contra los Gurierrez–Bosch, denuncia-
dos por el tío, y documentados en los videos de los
propios ejecutivos
borrar todo trazo de los supuestos
tr azo a los expedientes. defraudadores, y
Cosa curiosa
cur iosa es que tres años después, en septiem-
septiem-
bre de 2008 ante el Tribunal Británico de Bermudas,
el propio
propio experto designado
de signado por los Gutiérrez–Bosch,
el Señor
Señor Wiliam
Wili am Lozada,
Lozad a, en el informe que rinde ante
ese tribunal, admite bajo juramento, que el dinero
proveniente de las cuentas de Guatemala, era dine-
ro negro y que por ende estaba siendo lavado por los
acusados,
señoresasíGutierrez–Bosch,
los señores comoo también
com ta mbién admite,
manteníque
mantenían es cierto
an dos juegosque
de
libros de contabilidad.
Basado en estas prueba y otras masma s el Tribuna
Tribunall de
bermudas, los condena
condena en un fallo
fa llo de 87 páginas,
pági nas, que
incluyee todos los considerandos
incluy considerandos imagi
ima ginables
nables y la reso-
lución correspondiente, la que queda en firme, dado
que los acusados no la apelaron.
Mi pregunta,
pregu nta, como es posible
posible que la justicia gua-
g ua-
temalteca, que debe saber de esto, pues todo figura
perfectamente documentado en la l a propia Internet, no
ha seguido
segu ido el proceso
proceso correspondiente
correspondiente en Guatemala,
Guatema la,
incluso podemos
podemos afir
af irmar
mar que se ha caído en los delitos
delitos

261

La guayaba tiene dueño

de encubri
encubrimiento
miento y omisión
om isión de denuncia
denuncia
Siempre
Siempre he pensado
pensado que Juan Arturo
Ar turo y Juan Gui-
llermo han tenido que andar como mendigos erran-
tes buscando un refugio jurídico en el que se puedan
cobijar, para que se les haga justicia. Han tenido que
abrir frentes en Estados Unidos, Canadá, Guatemala,
Panamá e islas Vírgenes y Bermudas incluso hasta en
el sistema interamericano, al recurrir
recurr ir a la interve
inter venció
nciónn
del Comité Interamericano
Interamer icano de Derechos
Derechos Humanos de
la OEA. Han tenido que contratar a firmas de aboga-
dos en más
má s de siete países, incl
i ncluyen
uyendo
do a abogados de la la
talla del conocido jurista canadiense Robert Ámster-
dam, quien representa, entre otros grandes del mun-
do, al magnate petrolero ruso Mijaíl Jodorkovsky, ex
presidente de la petrolera Yukos,
Yukos, en uno de los litig lit igios
ios
más sonados del último
últi mo siglo, contra
contra el Estado ruso.
r uso.
Imagínese el lector si Juan Arturo y su hijo, Juan
Guillermo Gutiérrez, con toda la plata y dedicación
que le han invertido a su defensa, habiendo logra-
do importantes fallos en cortes de Estados Unidos e
Bermudas, no han podido lograr que ni siquiera se
entreabra la puertaquedeestos
dado el secuestro los tribunales en Guatemala,
señores tienen del sector,
¿qué podemos esperar los simples mortales ante esa
prepotencia, altanería e imposiciones de tan altruistas
personalid
persona lidades,
ades, que lo único que los “pobres”
“pobres” quieren
es una “libertad” y una “democracia” a su servicio?
Como dije en una ocasión, cuando
cua ndo se me acusaba
de ser un aprendiz de dictador, después del golpe que
estos señores fabricaron contra mí y mi país: “Si ser
aprendiz de dictador es impedir que los Gutiérrez– 
Bosch, hagan lo que les da la gana y se adueñen del
país, entonces sí soy aprendiz de dictador”.
Por demás está hacer ver que en el caso que estos

262

El secuestro del Estado de Guatemala

señores han mantenido


señores m antenido contra
contra mí,
m í, los procedi
procedimientos
mientos
son los mismos o parecidos, como lo hemos podido
ver. Pero lo que es más aterrador, es que los esbirros,
los sicarios, los torturadores, los ayudantes, llámen-
los como quiera, son los mismos. Los personajes se
repiten, en los casos de la CICIG, del tío Arturo, de
Serrano Elías, del Parlacen, de Pavón, El Infiernito,
de Port
Portii l lo, de Paco
Paco Reyes,
Reyes, de Ríos
R íos Montt… de todos
aquellos que en una u otra forma se han tenido que
meter con ellos, o con los que ellos se han querido
meter.
A todos los condenan en los medios y después
los condenan, con o sin pruebas, con o sin delitos en
los supuestos Tribunales de Justicia, que son de ellos.
Ellos son los dueños  y los tienen secuestrados. Sería
más fácil
f ácil violar
v iolar los sistemas de seguridad
segur idad del Banco de
Guatemala y entrar a sus bóvedas, que lograr abrir las
puertas de la justicia en el país, para que esta otorgue
alguna garantía al individuo frente a estos poderosos.
Esa es nuestra triste realidad y es indiscutiblemente la
fuente principal de la viol v iolencia
encia que dura
durante
nte siglos nos
ha azotado
Aunquey parezca
nos sigue
sigueunflagelando
f lagelando. io. lo que voy
sacr ilegio
sacrileg voy a decir,
lamento no haber triunfado en 1993 con el llamado
“autogolpe”, en la depuración del Estado, comenzan-
do por el Cong
Congreso
reso de la República y la CorteCor te Supre-
ma de Justicia, porque con la traición perpetrada por
una pequeña cúpula militar, estimulada y financiada
por la cúspide de una  pirámide  mal  mal llamada empresa-
rial, se abrió el camino para llegar a lo que el país es
hoy: un yconjunto
sociales de instituciones
económicas, políticas,
secuestradas, jurídicas,
sin credibilidad
ni autoridad y, para muchos, fallidas.
Tal como lo predije en mis discursos y múltiples

263

La guayaba tiene dueño

intervenciones hace veinte años: la autoridad la tie-


nen hoy, en las ciudades el crimen organizado; en el
interior
gra
grandes del país,rías
ndes lavanderí
lavande el de
as narcotráfico;
queen
di nero que
dinero la economía,
unos tienelasn
y otros tienen
organizadas en perfecto contubernio, haciendo fun-
cionar perfectamente lo formal e institucional con lo
informal y mafioso.
Es indiscutible que el sector justicia es el más
sensible de los sectores, porque representa el último
recurso para la segur
seg uridad
idad del ser
ser humano. La Biblia
Biblia en
el Eclesiastés 5:8–9 dice:
“Que no te extrañe
e xtrañe ver países donde a los pobres
se les maltrata y no se les hace justicia. Esto sucede
cuando a un funcionario importante lo protege otro
mas importante, y cuando aun otros más importan-
tes protegen a estos dos.
Sin embargo, te dirán: Esto lo hacemos por el
bien del país.”
(Biblia para todos, Lenguaje Actual, Actua l, So-
So-
ciedades Bíblicas Unidas)
 
unosEl400
libro
añosdeantes
Eclesiales, se estima
de Cristo, que fue
y sorprende queescrito
estos
procedimientos tan viejos, tengan la vigencia dramá-
tica que, hoy dos mil quinientos años después siguen
teniendo en Guatemala. No importa cuanta civiliza-
ción y cuanto desarrollo el mundo tenga, en los gua-
temaltecos de hoy, esta tragedia es tan vigente como
lo era en esa época. Tal es el sentimiento de impoten-
cia que se manifiesta frente a la angustia que provoca
la injusticia, producto de una justicia secuestrada.

264

El secuestro del Estado de Guatemala

El deterior
deter ioro
o de la Justicia

Mi padre
su primo era abogado
Edmundo y se que
Vásquez, graduaron juntos con
para efectos cla-
ros, era más su hermano e intimo amigo. Era el pa-
dre de Edmundo Vásquez Martínez a quien nosotros
lo llamábamos en casa “Mundito”. Un gran jurista,
era mayor que yo. Fue Rector de la Universidad de
San Carlos, cuando yo estaba estudiando Ingeniería y
Humanidades y fui activo participante en la campaña
para su elección como Rector.
Durante
Dura nte mi campaña
ca mpaña a la Presidencia de la Repú-
Repú-
blica en el 90, él era Presidente de las Corte Suprema
de Justicia.
Justicia. Cuando
Cuando asumí la primera magistratura
mag istratura de
la Nación,
Nación, no obsta
obstantente la relación
relación famil
fam iliar
iar de toda una
vida (así como el era Mundito para nosotros, yo era
 Jorgito para ellos
ellos)) me dijeron que él no quería asi asisti
stirr
a mi toma de posesión, debido a que yo había sido
muy duro en la campaña, en mis críticas al sistema de
 justicia.
 justic ia.
Le hablé, le mandé amigos mutuos para que lo
conve
con vencieran
ncieran y f
fina
inalmente
lmente co
concurr
ncurrió
ió.
.
Cuando ya como Presidente lo Recibí en la Casa
Presidencial y pudimos hablar a calzón quitado de lo
que era el sistema de justicia, sus problemas, limita-
ciones y potencialidades, llegamos a entendidos, sin
embargo a él, que
que conf
confiaba
iaba en sus
sus colegas,
colegas, le era difícil
dif ícil
compartir conmigo lo que yo miraba que sería el fu-
tu ro del Orga
turo Organi
nismo
smo Judicia
Judiciall si no se
se hacia algo
al go y muy
drástico. Me parece que él pensaba que yo exageraba.
Hoy veinte
to. Estoy vseguro
einte años
a ños
que después,
Mundito,c reo
creo que me aquedé
regresaría su tumbacor-
cor-
con gusto, en lugar de enfrentar la realidad de lo que
es hoy su querido y defendido sistema de justicia.
just icia.

265

La guayaba tiene dueño

Cong reso 
El secuestro del Congreso

puesHablar
los de esto se
los Congresos sinceramente
han distin
di stingu yaidonopor
guido potiene ni caso,
r venderse
venderse al
mejor postor. Hoy más que nunca se han vuelto casas
de chantaje. Ya no hay debate político ni ideológico;
unos ponen pautas de abuso y corrupción y los que
vienen atrás las perfecci
per feccionan
onan y las
la s superan.
superan.
Es ciertamente
cierta mente tr triste
iste el espectácu
espectáculo lo de los
los diputa-
dos que, recién
recién electos, empiezan
empiezan a negociar sus curu- cu ru-
les, sin asco, sin importarles quién los eligió, a quién
representan, qué responsabilidad tienen ante el país,
ante sus correligionarios, sus familias, sus amigos, ni
tampoco
ta mpoco ante sus conciencias.
conciencias.
La mayoría de los diputados piensan piensan que las la s curu-
cur u-
les las reciben en propiedad,
propiedad, por un período
per íodo de cuatro
años, como una locataria
locatar ia del mercado reciberecibe un pues-
to en el cual llega
l lega a vender
vender verduras,
verduras, peras, bananos
ban anos o
tomates.
tomat es. Estos
Esto s señores y señoras venden leyes leyes y resolu-
ciones
cion es (Y
( Y esto, dicho
dicho con perdón
perdón de las locatarias).
locatar ias).
Son muy flexibles, pues en pago reciben dinero,
principalmente; pero no se molestan si les pagan con
prebendas, o favores, o nombramientos, o viajes, o
comisiones o… eso, si son considerados.
Lo lamentable
la mentable es que en este contexto, los clientes
son todo aquel que tiene influencia, dinero, necesita
favores, quiere concesiones o negocios del Estado; es
decir todo aquel que tiene poder y dinero.
¿Q uiénes son entonces
¿Quiénes entonces los fuertes
fuerte s compradores de
leyes? Son los más
má s poderosos del poder económico, ya
que ellos, por que
Recordemos supuesto,
el paístienen
es de derecho a corromper.
ellos; son los narco-
traficantes que necesitan condiciones favorables para
operar con el menor riesgo posible y, por supuesto

266

El secuestro del Estado de Guatemala

también alguno que otro iluso, que se presenta con


una su idea, las
l as que a decir verdad solo quitan tiempo
t iempo,,
pero sirvenCon
al pueblo. a loseso
señor
señoreses dipu
d iputados
le echan tados
un para sentirse
poquito úti les
útiles
de ungüento
a sus conciencias.
 Y respecto del debate ideológico, estoy seguro de
que muchos
muchos de los señores diputados pregunt preg untar
aría
ían:
n: ¿Y
¿Y
eso cómo se come? Porque recuerdo a un líder polí-
tico de mis tiempos, que decía que las “ideologías se
habían acabado”, y yo pensaba para mis adentros: “A
vos también se te terminaron las ideas”. Por supuesto,
solo las de interés
i nterés colectivo
colectivo,, pues las de interés perso-
nal y lucrativo,
lucrativo, siempre
siempre las ha h a tenido muy claras.
A veces la educación lo jode a uno, u no, sobre todo en
un país como Guatemala, en el que el inmediatismo
es la doctrina
doctr ina preferida, el egoísmo su inspiración y el el
mercantilismo la fuerza que mueve los intereses y la
economía.
Un día recibo la visita de cinco diputados guate-
maltecos, que vinieron a Panamá a un congreso, me
llamaron
lla maron y los invité a almorzar, de casualidad estaban
también de visita, dos fiscales del Ministerio Público,
a quienes también había invitado, así que el almue al muerzo
rzo
fue de lo mas
ma s ilustrativo.
ilust rativo. Como
Como era lógico el tema de
la impunidad
impun idad salió
sal ió a relu
relucir,
cir, los fiscales
fi scales contaron de un
proyecto
pro yecto de ley que se había mandado
ma ndado al a l Congreso,
Cong reso, en
el que ellos y otros especialistas habían participado en
su elaboración.
Ellos relataron que en el Congreso le habían in-
troducido unos cambios,
ca mbios, que cua
cuando
ndo ellos los leyeron,
leyeron,
se
así,dieron
tendríacuenta que asi todos
que sacar se llegaba a promulgar
los presos la ley
recluidos en
el sistema penitenciario del país, y que para evitar tan
grann error, lo único que se
gra se podía hacer
h acer,, era evitar
evita r que

267

La guayaba tiene dueño

el Presidente Berge sancionara la ley y que la vetara,


pues con un minuto de vigencia, era suficiente para
 yque losr su
pedi
pedir presos
liberpudieran
libertad
tad.. argumentar que les favorecía
Inmediatamente
Inmedi atamente se produjo
produjo una carcajada
ca rcajada de par-
te de los diputados, quienes contaron las interiorida-
des del incidente. Resulta que un Diputado dijo, que
ese proyecto no se debía aprobar así como lo habían
mandado
mand ado y que
que alguna
algu na modificació
modif icaciónn le tenía
teníann que
que in-
troducir, para hacer
h acer valer su autoridad
autoridad.. Contaron que
enton
entonces
ces se habían
habían idoido al final
f inal de una de las fila
f ilass de las
curules
cur ules y que
decidido allílí unos paradolas
al
las modificaciones, y otros
cualessentados, habían
aprobaron sin
dilación.
Que susto, decían ellos
el los riéndose, cuando se dieron
cuenta de lo que habían hecho. Salieron corriendo a
la Presidencia, para hablar con el Presidente
Presidente y pedirle
que vetara la ley, que no se le fuera a ocurrir firmarla
 y manda
ma ndarla
rla a publicar.
publ icar.
Todos nos reímos por la forma jocosa como el
incidente fue referido, pero ya en frío comentamos
la tragedia, de nuestras instituciones, como se puede
hacer viable un país con ese tipo de responsabilidades
Pedirles un debate sobre el Desarrollo, El Bien
Común, El respeto a la Persona Humana o el per-
feccionamiento de las instituciones que nos ayuden
a vivir mejor y en paz, sería perder dolorosamente el
tiempo, esos son conceptos que quien sabe cuantos
lustros deberán pasar, antes de que un debate de esta
naturaleza pueda llevarse a cabo. Así, aunque parezca
crudo,
políticoses ycomo piensan ymuchos
por supuesto actúan muchos de nuestros
de nuestros legisla-
dores.

268

El secuestro del Estado de Guatemala

Lo real es que el Congreso, en nuestro pais está


para vender y comprar. Qué lástim
lást ima,
a, pues si queremos
queremos
alg
algún
ún futuro
nietos…fut uro di ferente
difere
ya estamos nte parapara
tarde nuestros
nuestros hijos,
cambiar, nietos,
pero bis-
bis-
intenté-
moslo, por favor.
Lamentablemente, la vehemencia y conceptos de
los debates están íntimamente ligados al aceite de las
fichas, a los empaques del billete. No me cabe la me-
nor duda de que así se han conseguido muchas leyes
favorables para los diferentes grupos, pero nos hemos
llevado al país entre las patas y lo que es peor, se le
ha abiertoa este
concurra la puerta
mercadoal crimen
a buscarorganizado parayque
sus prebendas sus
seguridades,
segur idades, en detrimento de los má máss elemen
elementa tales
les in-
tereses nacionales.
¿Qué más se puede decir? Esta realidad todos la
hemos vivido, nos ha condicionado, nos ha atrope-
llado y, como resultado, ha devaluado nuestro país,
entregando el poder no al que piense o quiera algo
mejorr para el país,
mejo pa ís, sino para
pa ra el que tenga el dinero
d inero o el
poder para comprarlo.
Los que condicionaron los votos para elegir a
los integrantes de la Corte Supremade Justicia en mi
tiempo, no saben, ni incluso creo que lo imaginan,
el grave daño que le causaron al país, el deterioro de
las Cortes, y en general a la desorganización total del
Estado que se ha dado en estos últimos
últ imos veinte años.
Para elegir esta corte, tal como lo manifesté, se
estaba llevando a cabo un debate, una negociación,
no querí
queríamos
amos ciertos personajes, queríamos una
un a corte
de Juristas no de políticos, queríamos una corte de
gente honorable, que le diera al sistema respaldo con
el ejemplo de sus vidas, no queríamos chantajistas, ni
vendedores de justicia, pero como se dice en Panamá,

269

La guayaba tiene dueño

“jugaron vivo”, se saltaron el procedimiento demo-


crático y en el Congreso
Congreso usaron
usa ron el
el dinero
di nero y la amena-
za para
País, y loestablecer la máxima
demás está autoridad de Justicia del
bien sabido.
El secuestro de los medios de comunicación

Los medios de comunicación deben ser como las


arteriass y venas por
arteria por las cuales
cua les puedan
puedan circular
circul ar las ideas
 y los conceptos, que vienen a ser como la san sangre
gre del
alma. Si esas venas están atrofiadas, si están escleró-
ticas,
puntosideestán calcificadas
estallar, o enfermas
no permiten que la de enfisema,
sangre circulea
correctamente y lleve oxígeno a todas las células del
cuerpo; entonces
entonces estas células
célula s empiezan
empiezan a enfermarse,
enferm arse,
a envejecer e incluso a morir.
El país
pa ís necesita medios de comunicación que que ga-
ranticen esa circulación
circu lación de ideas, pero
pero no solo las ideas
 y cr
criterios
iterios de los aprobados por
por el poder económico, o
de los dueños de los medios. El principi
pri ncipioo univ
un iversa
ersall de la
libertad
libert ad de expresión, no tiene nombre
nombre ni apellido
apell ido,, no
debe ver
ver ideología,
ideología, col
color
or de la piel, raza,
raza , ni relig
religión.
ión.
Por la horrible
horr ible experiencia personal vivida,
v ivida, quiero
qu iero
decirles que no sé qué es mejor,
mejor, si morirse
morir se físicamente
f ísicamente
o ver cómo lo lo matan
mat an a uno en su dignidad
dig nidad,, en su ho-
nor.. No entiendo cómo se puede
nor puede ser tan ruir uinn en decir
tantas mentiras, levantar tantas acusaciones, repetir
tantos insultos
i nsultos y creer que
que con eso se está cumpliend
cumpl iendoo
con una función periodística y que de esa forma se
está ejerciendo el derecho a la libertad de expresión.
No entiendo cómo en nuestra sociedad hemos
llegado a ser tan destruct
dest ructiv
ivos.
os. No tenemos
tenemos valores, no
respetamos a nadie, no le reconocemos nada a nadie,
no honramos la memoria de nadie, solo resaltamos

270

El secuestro del Estado de Guatemala

lo malo.
ma lo. Y ahora nos preguntamos
pregunta mos por qué es que en
Guatemala estamos con los niveles de violencia que
tenemos en las calles, en las casas, en las escuelas, en
todo lugar
luga r.
El mercantilismo en los medios es indiscutible-
mente una de lasla s enfermedades más
má s patéticas de nues-
nues-
tra sociedad. Son los anunciantes los que determinan
la cultura, los que fijan las agendas de comunicación,
los que determinan los favoritismos políticos, los que
dan la línea editorial e incluso los que determinan de
modo indirecto el sentido y orientación de los enca-
bezados de las noticias.
Es correcto que un medio tenga una línea edi-
torial, sea ideológica, religiosa, económica, etc. Esto
es lícito; lo que no es lícito es que marque una línea
tendenciosa
tende nciosa en la noticia. En
E n estos años
a ños yo he vivido,
por millares,
mil lares, la
l a experiencia de ver
ver en cada noticia que
se da sobre mi persona, sea de la índole que fuere,
que siempre va cargada de una expresión peyorativa,
insultante o denigrante, aunque sea para recordar al
pueblo de Guatemala que mi gobierno dio al traba-
 jador el Bono 14. 14. ¿Qué
¿ Qué nos pasa
pasa?? ¿Est
¿ Estamos
amos enfer
enfermos
mos
o qué?
Llevo casi veinte años en el exilio. Nadie podría
decir cuántas
cuá ntas veces se me
me ha aludido o se ha informado
in formado
mall de mí. Sin embargo,
ma emba rgo, nunca, nunca, nunca, se me me
ha permitido hacer una simple aclaración, y las veces
que lo he intentado solo ha servido para que el nivel
de las falsedades o insultos sean mayores, más ofensi-
vas y por ende,
ende, solo hagan
haga n más
má s profundo el daño.
Durante los últimos doce años en Panamá, he
ejercido de cierta manera el periodismo, como co-
mentarista radial en un programa que se llama “La
Palabra”, con la periodista Mayín Correa, que dicho
271

La guayaba tiene dueño

sea de paso es uno de los de mayor audiencia en el


país, y tuve un programa de opinión semanal que la
radio KW Continente llamaba “Opiniones de un Es-
tadist
tad istaa”, el que hace unos dos
do s años tuve
t uve que suspender,
suspender,
porque me exigía mucho tiempo, y no tenía.
Orientado o influido por las experiencia perso-
nales,
na les, me hice el propósito
propósito de nunca usar el micrófono
m icrófono
para denigrar a nadie. Eso sí, dar mis opiniones sobre
todo, pero
pero siempre
siempre dando una señal
seña l de esperanza, de-
 jando siempre en m is interintervencio
venciones
nes un mensaje de
optimismo, no importando cuán crítica pudiera ser
mi opinión.
La gente me reporta mis comentarios cuando
ando en la calle,
ca lle, siempre repiten
repiten la parte crít
c rítica
ica y sobre
todo enfatizan en el mensaje de optimismo. Funcio-
narios o personalidades me llaman para agradecerme
o bien para pedirme alguna ampliación sobre lo que
he dicho.
Muchas veces mis opiniones motivan editoriales
o estimulan a algún
alg ún column
columnista
ista a referirse
referirse al tema que
que
introducido
he visto o comentado.
que se puede En resumidas
hacer periodismo formcuentas,
y formar ar opi-
nión, sin insultos,
in sultos, sin sensacionalismo
sensacional ismo y con el el positi-
vismo que cualquier sociedad necesita. Hoy, después
de doce
doce años en la actividad,
activ idad, puedo af
afir
irma
marr con
con auto-
ridad, como decimos en buen chapín, que ya no me
pueden dar atol con el dedo”.
Cada día hago un firme propósito de perdonar,
de simplemente olvidar para poder seguir viviendo
 y tr
trabajando.
abajando. Sin embar
embargo,go, quiero poner un par de
ejemplos, no con el objetivo de incriminar a nadie,
sino buscando que reflexionemos sobre lo que hemos
hecho
hec ho mal y que el país
país ha
h a pagado.

272

El secuestro del Estado de Guatemala

Siempre he tenido aprecio por Gonzalo Marro-


quín, a quien incluso quería
quería nombrar como Secreta
Secretario
rio
de Relaciones Públicas de la Presidencia, hoy Secre-
taría de Comunicación Social. No obstante, es de la-
mentar que Gonzalo hubiese tenido un pleito muy
largo y profundo con Ángel González, propietario
en ese entonces de los canales de televisión 3 y 7 de
Guatemala. Por esos días, mis allegados me hicieron
ver que, nombrándolo a él, yo en forma automática
compraba un problema que no me pertenecía. Para
mí fue difícil acoger esta recomendación, porque me
parecía que el
he seguido Gonzalo era de
desarrollo unasubuena opción.
carrera, lo vi Siempre
llegar a
director
di rector de Prensa Libre,
Libre, y escalar
escala r hasta
hast a llegar
llega r a presi-
dente de la Comisión
Comi sión de Libert
Libertad
ad de Pensa
Pensamiento
miento de
la Sociedad Interamericana de Prensa (SIP).
Un día, a mediados del mes de mayo de 2005,
se comunicó conmigo el señor Carlos Menocal, pe-
riodista de Prensa Libre, y me pidió una entrevista.
Después de llegar a algunos entendidos, básicamente
en cuantoica,
periodíst a respeto,
periodística, no teníaaccedí
acnada.
cedí
nad a. aSimplemente
dá rsela.ente
dársela.
Simplem La entrevista,
entrevist a, de
se trataba
un cuestionamiento inquisitorio, insultos, comenta-
rios irónicos e hirientes. Con la prudencia que pude,
hice mis comentarios, di las explicaciones e intenté
ra zonarr con el señor Menocal, cosa
razona cos a que fue imposible.
La verdad es que, en ese momento, no entendí lo que
pasaba.
El día que se publicó la entrevista, nada que ver.
Todo lo que yo dije fue
f ue puesto como él lo quería,
querí a, todo
lo de él estaba resaltado y en lugar de abrir caminos
de reflexión, solo se me humilló. Ningún respeto a
lo acordado. Con los años, ese señor Carlos Menocal
fue nombrado Ministro
Mini stro de Gobernación no quiero
quiero ni

273

La guayaba tiene dueño

pensar por
por las inf
i nf lu
luen
encias
cias de quién.
Después de la aparición de la mencionada entre-
vista,
vist a, el 22 de mayo
mayo de 2005, envié
envié a Gonzalo
Gonza lo Marro-
Marro -
quín unu n correo electrónico
electrónico que literalmente
literal mente decía:
decía:
“Estimado Gonzalo:
En días pasados, me llamó el señor Carlos
Menocal para solicitarme una entrevista y yo
cortésmente accedí a concedérsela. Lamen-
tablemente, la misma muy rápidamente se
convirtió en un interrogatorio inquisitivo y
prejuiciado, más que en una entrevista perio-
dística que pudiera buscar mi opinión o
tos de vista sobre lo que aconteció hace doce pun-
años en el país.
Naturalmente hoy que he leído lo que se
publicó, me pregunto, ¿para qué me llaman
a entrevistarme, si de todas formas van a es-
cribir lo que quieren decir y dar a lo que yo
digo la orientación que previamente andan
buscando?
Han tenido
querido ten ido doce
doce años
e interpretar para decir
deci
los hechos cornlouna
con unque han
a pers-
pectiva determinada y están en su derecho.
Lo que no entiendo es para qué me buscan,
si no tienen la intención de respetar
respetar mi
m i punto
de vista y trasladarlo para que el lector, que
tiene derecho a la información, sea quien lo
 juzgue.
 juzg ue.
Gonzalo, me dio mucho gusto ver cuando
estuviste en Panamá que se te respetara tanto
como presidente de la Comisión de Libertad
de Expresión de la SIP, pero, ¿no te parece
que esa libertad de expresión, que es vital y
buena
bue na para ustedes, también
ta mbién debería
debería ser buena

274

El secuestro del Estado de Guatemala

para otras personas aunque estas no piensen


igual
igu al a ustedes? ¿No
¿ No te parece que
que después de
doce años, en aras de lal a búsqueda de una ver-
dad histórica, se debería respetar mi derecho
a expresarme libremente sin tutelajes, tergi-
versaciones
ve rsaciones y man
m anipulaciones?
ipulaciones? Considero que
parte
par te de ese derecho es que se publique lo que
 yo digo, a forma
form a de que lolo dicho haga
hag a sentido
 y tenga
teng a la coherencia con que fue planteado.
pla nteado.
Considero que esta manipulación a la que
me he referido anteriormente, es un atrope-
llo intelectual, y una falta de respeto para los
lectores, e indudablemente también viola el
derecho que ellos tienen a ser correctamente
informados. Yo por mi parte me siento utili-
zado.
Quizá tú no te habrás enterado de la en-
trevista y por supuesto tampoco interviniste
en su presentación final, pero como se dice
en términos militares, “lo que pase o deje de
pasar en un comando,
comandante”. Es por esoes responsabilidad del
que te envío esta
nota, pues no tengo ningún interés publicita-
rio, pero sí en aclarar
aclara r aquellos asuntos que me
atañen a mí y a mi famil
fam ilia.
ia.
Puedes estar seguro de que
que si algún
algú n día hay
la intención de hacer algo serio respecto a los
acontecimientos de mayo de 1993, pueden
contar conmigo.
 Jorge
Con elSerrano
Serr
afecto
ano de
E lías.
Elí siempre,
as.””
Gonzalo me contestó, que si yo tenía algo que
aclararr que le mandara
aclara manda ra una nota y que la incluiría
incluirí a en la

275

La guayaba tiene dueño

sección “Cartas de los Lectores”, que yo debería saber


que esa era una sección muy leída.
Me habían disparado a mi honor y dignidad, con
un cañón de alto calibre y ahora, el Gran Defensor
de la Expresión del Pensamiento del Continente me
ofrecía, generosamente,
generosamente, una pistola de balín,
bal ín, para
par a que
me defendiera.
Quiero decirles que
que me sentí
sentí humill
humi llado,
ado, insultado
en mi inteligencia y en mi dignidad, pero no quedó
allílí la
al l a cosa. Por
Por haberme atrevido a tan osado reclamo,
el editorial del día 23 de mayo me lo dedicaron tam-
biénn con mucho
bié mucho más
má s saña
sañ a y odio
od io.. Le envié otra nota,
el mismo 23, la que transcribo
transcr ibo a continuación:
continuación:
“Estimado Gonzalo:
Recibí la explicación que me das sobre la
entrevista mía que se publicara el día 22 de
los corrientes y créeme que sé que de tu parte
no hay intención de hacerme daño y como tú
bien lo indicas, es el afán periodístico lo que
te mueve
mayo a esclarecer los acontecimientos de
de 1993.
Sin embargo, al leer el editorial de uste-
des del día de hoy 23 de mayo, insultante,
grosero y escrito con el hígado más que con
la mente, impropio en su contenido y en su
forma de ser la expresión de uno de los más
importantes diarios del país, me doy cuenta
de que tus buenas intenciones como director
no seabiertamente
que ven reflejadascontradice
en el medio que diriges
la nota que hoyy
me enviaras.
Quiero decirte que no me extraña
extrañ a que esto
se dé, y que puedo imaginarme que viene de

276

El secuestro del Estado de Guatemala

alguien que tiene algún problema personal


conmigo, pues yaeditorial,
el mismo espacio en una ocasión, y usando
bajo el título “Lí-
branos Señor de tentación”, de fecha 10 de
agosto de 1994,
1994, instó a que alguien
alg uien alejándose
de sus principios cristianos viniera a Panamá
 y me ‘eli
‘elimi
mina
nara
ra de una
un a buena vez’
vez’, agrega
ag regando
ndo
que ‘sería mejor sumirme en el silencio eter-
no’’. (Siendo
no ( Siendo impropio totalmente
tota lmente que se useu se el
editoriall de Prensa Libre
editoria Libre para hacer una franca
fra nca
apología del delito y una abierta incitación a
delinquir).
Es cobardía que atrincherándose en el pe-
riodismo y en la reputación de un medio, lo
utilicen para sacarse espinas personales, sería
conveniente que a la persona que ha escrito
estos editoriales sí le pidieras que mandara sus
escritos a ‘Voces de los lectores’, y que los fir-
me y esto más,
má s, si tien
t ienee pruebas de todo lo que
me acusa que vaya a los tribunales y las pre-
sente,
realicenpues allí es donde
acusaciones corresponde
de esta naturaleza,que se
pero
esto no lo hará, pues él bien sabe que al no
poder probar
probar la sarta
sart a de falsedades
fal sedades que me
me im-
puta, cometería
cometería en forma
form a personal el delito de
calumnia y entonces sí sería sujeto a que se le
dedujeran
dedu jeran responsabilidades
responsabilid ades penales.
Gonzalo, como te manifesté ayer, en mi
nota
no ta por e–mail,
e–mai l, no tengo
tengo ningún
ning ún afán
af án de pu-
blicidad,
con todospero reen esta que
los recursos
cursos ocasión
tengame mdefenderé
a mii alcance
alca nce,,
pues creo firmemente que el pueblo de Gua-
temala
tema la después de 1212 años y al margen
m argen de toda
pasión política,
polít ica, tiene derecho a conocer
conocer la otra
otr a

277

La guayaba tiene dueño

cara de la moneda y no solo el resumen de


las campañaslanzaron
detractores negra que
en miencontra.
su momento mis
 Jorge Serrano
Serr ano Elí
E lías.
as.””
Este incidente se explica por sí solo: un medio o
alguien usando un medio, amparándose en el anoni-
mato, como un franco tirador, de apellido Sandoval
 y de nombre Ma Mario
rio Ant
Antonio,
onio, que se esconde dentro
de una multitud de frailes, usa como arma y capucha,
el editorial de Prensa Libre, tira a herir o más bien a
matar impunemente, sin ni siquiera respetar lo que la
ley establece en
en términos
térm inos del derecho
derecho de respuesta; sin
si n
considerar que aun el más grande de los criminales
tiene derecho a defenderse y a que se le respeten sus
derechos y dignidad.
Hoy, con los años, entiendo, que los mismos que
me imagino tenían en planilla al señor Menocal, los
que lo subieron a ministro, han de haber tenido en
planilla al editorialista que amparaba Gonzalo. Hoy,
a la luz de tantas cosas que he visto y que suceden en
Guatemala, imagino que tal vez, esos señores ni si-
quiera eran pagados o “fafeados” (como se le llama al
soborno a los periodista) sino que lo que ellos hacían
era simplemente congraciarse con los dueños del país.
No siendo
siendo yo del
del afecto de ellos,
el los, el atacarme
atacar me les daba
prestigio y posicio
posicionam
namiento
iento..
Quizá simplemente imitaban o se hacían simpá-
ticos con Dionisio Gutiérrez, que me cuentan que en
un programa
principal de suque teníaporque
menú, en televisión,
siempre yo
me era el el
hacía plato
fa-
vor de mencionarme para mantenerme vigente, por
supuesto insultándome, desprestigiándome o deni-
grándome.

278

El secuestro del Estado de Guatemala

De ese platito azucarado de estos señores yo no


soy
son el
losúnico privilegiado.
mismos, solo que en Loseste
actores
caso, del
en elotro bando
banco de
los acusados de Dionisio,
Dionisio, Juan
Juan Luis
Lui s y Gonzalo Marro-
Ma rro-
quín, están Juan Arturo
Ar turo y Juan Guille
Guil lermo
rmo Gutiérrez.
Gutiérrez.
Se quejan de que ni campos pagados les publi-
can, que solo
solo les tiran
tira n y que como
como par parias,
ias, igual
ig ual que el
pobre Serrano Elías, no tienen derecho a su defensa,
al extremo que el propio abogado de ellos tuvo que
mandarle una carta a Gonzalo Marroquín. Esa carta
la encontré en Internet y me ha parecido importante
reproducirla, porque me doy cuenta de que no solo
 yo soy el par
paria,
ia, sino todo aquel que ose o se desa iarr a los
desaff ia
dueños.
“Toronto, 20 de diciembre
“Toronto, d iciembre de 2001
2 001
Licenciado Gonzalo Marroquín
Director Editorial
Diario Prensa Libre
Ciudad
Ciu dad de Guatemala
Guatema la
Licenciado Marroquín:
En mi carácter
ca rácter de abogado del Sr.
Sr. Juan
Juan Ar-
A r-
turo Gutiérrez, esta carta la envío luego de
conversar telefónicamente con el Sr. Gonzalo
Marroquín,
Mar roquín, en uso de mi m i derecho
derecho de respuesta
respuesta
al editoria
editoriall de Prensa Libre publicado el 18 18 de
diciembre que hace referencia a mi persona.
Dichoo editorial
Dich editoria l reitera
reitera el criterio
criter io de ese diario
diar io
de que ‘...todo
miembros enfrentamiento
de sociedades judicial cons-
o de familias entre
tituye un asunto privado mientras no haya
un veredicto’, y, por lo tanto, Prensa Libre
no le brinda cobertura. En mi opinión, el Sr.

279

La guayaba tiene dueño

Gonzalo Marroquín intenta sin éxito escon-


der la posturasobre
de informar de Prensa
un temaLibre, en el pasado,
de trascendencia
nacional que excede el el ámbito
ám bito de una ‘disputa
‘d isputa
familiar’.
Incontables noticias de la crónica diaria en
cualquier
cua lquier país democrático del mundo no son
sino ‘disputas familiares’ que escalan a niveles
fuera de control de las partes
par tes involucrada
involucradas. s. En
nuestro caso concreto, una serie de actos de-
lictiv
lict ivos
os de dos guatema
g uatemaltecos
ltecos y sus ejecutivos,
ejecutivos,
tales como evasión fiscal y lavado de dinero,
han sido deliberadamente
deliberada mente ocultados del cono-
cono-
cimiento de la opinión pública guatemalteca
por parte de Prensa Libre. Las razones
ra zones de esto
son simples: los intereses y las presiones que
ejercen estos dos señores sobre ciertos medios
de prensa (tales como Prensa Libre) y sobre
ciertos individuos del medio (como el Sr.
Gonzalo Marroquín). A esto se suma el he-
cho de que el ingreso por publicidad, cuando
es utilizado como instrumento para ejercer
influencia en los medios, constituye un ele-
mento que corrompe la información veraz y
objetiva que la prensa debe procurar.
En otras palabras, los dos empresarios en
cuestión han estado comprando silencio en
detrimento no solo de mi representado, Juan
Arturo Gutiérrez, sino de toda la población.
Este actodecercena
libertad los inalienables
expresión y de accesoderechos de
a la infor-
mación de todos los guatemaltecos. Nosotros
simplemente hemos comenzado a demostrar
ante la comunidad internacional no solo esta

280

El secuestro del Estado de Guatemala

sino varias otras conductas delictivas involu-


crada
cradas
Ens la
endenuncia
este caso.
caso. presentada ante la Comi-
sión Interamericana de Derechos Humanos
(CIDH), don Arturo Gutiérrez es represen-
tado junto a mí, por el Dr. Oscar Fappiano,
ex–Presidente de dicha Comisión y una per-
sona cuya vida profesional ha sido dedicada
a la consolidación del estado de derecho y la
democracia en su país y a la promoción de los
derec
derechos
hos humanos
contamos en el continente.
con la objetiva Asim
Asimismo
colaboración delismo
Dr.
Luis Moreno Ocampo, abogado de recono-
cimiento internacional, presidente de Trans-
parencia Internacional para América Latina, y
reconocido por su dedicación a la lucha contra
la corrupció
corr upción.
n.
Cualquier observador medianamente
median amente obje-
obje-
tivo, tanto dentro como fuera de Guatemala,
puede
pue de darse
dar se cuenta
cuenta que personas
personas de la tal
t alla
la de
los Dres. Fappiano y Moreno Ocampo nunca
aceptarían manchar su prestigio defendiendo
un caso o una persona que no satisfaga sus
altos estándares de honorabilidad, rectitud y
verdad. Ese es precisamente el caso de don
Arturo
Ar turo Gutiérrez.
Gutiérrez.
He leído con tristeza la respuesta emitida
por los sobrinos de mi
m i representado,
representado, presuntos
evasores de impuestos y lavadores de dinero,
luego de conocerse nuestra denuncia
la CIDH. Resulta verdaderamente patético ante
comprobar que su respuesta es continuar ob-
cecadamente con su campaña de desinforma-
ción, a pesar de que este caso es ya de público

281

La guayaba tiene dueño

 y notorio conocim
conocimiento
iento en Guatem
Guatemal
ala,
a, y sin
dar
darse
dadseinternacional
cuenta quellos
cuenta
internaciona reflectores
ref
están lectores
a par de ahora
de
partitirr de la comuni-
enfo-
cados sobre
sobre ellos y sus actos. Esta mal m al aconse-
 jada act
actitud
itud de los sobri
sobrinos
nos de don Art A rturo
uro de
intentar tapar el sol con un dedo constituye,
para mi obvia satisfacción, un terrible error
estratégico.
El caso de Artu
Ar turo
ro Gutiérrez
Gutiérrez recién comien-
comien-
za y, como todo caso deberá ser evaluado por
sus
tes propios
propi os méritosy en
e imparciales, entribuna
tobservancia
ribunales
les independien-
del debido
proceso.
proc eso. Mientra
Mientrass tanto,
ta nto, se
se mantendrá
ma ntendrá vigente
el embargo que mi cliente ha logrado contra
todas lasl as propiedades
propiedades de los demandados en La
Florida y otras jurisdicciones.
Finalmente, en el editorial de Prensa Libre
en cuestión, usted, Sr. Marroquín comete la
ligereza de criticar a la Agencia de Noticias
EFE, ‘lamenta
‘ lamentando
ndo’’ que dicha agencia españo-
la, ‘haya
‘ haya podido dar da r cabida a un despach
despacho’
o’ que
que
‘solo
‘so lo informa
inform a de los criterios de una sola de las la s
partes...’. Si esta crítica a una agencia de noti-
cias tan seria como EFE hubiera provenido de
un gobierno autoritario no me sorprendería.
Que venga de un Vicepresidente de la SIP y
Director de Prensa Libre deja mucho que de-
sear de su objetividad
objetividad y ética periodística.
periodíst ica.
Atentamente.
Robert Amsterdam
Amsterdam & Peroff 
Baristers & Soliciters
Toronto, Ontario, Canadá”

282

El secuestro del Estado de Guatemala

Quiero reconocer que la radio y la televisión han


sido
tado medios másnidad.
objetivos,
má s la dignidad
más dig . Eso noque en general
en
quiere
quiere h anno
han
decir que
decir respe-
han
atacado, pero lo que sí es que, cuando lo han hecho,
por lo general
general han
h an sido más
má s respetuosos de las respues-
tas y han dado libertad para expresarse, por lo menos
en mi caso.
He usado el caso
ca so de Prensa Libre, pues en él con-
curren en forma obvia, todos los elementos que tipi-
f ican el abuso, la propiedad
propiedad del medio, el prestigio de
la
detribuna
fachadayyde su su director pordocilidad
incondicional su labor ante
internacional
el poder
de los dueños.
283

CAPÍTULO XVI
El grand finale 

Consumatum
Consumatum est:
est :  y la Presidencia
Presidenc ia se privatizó
privat izó

Efectivamente los dueños del país  habían tenido


victorias
victori as signif
sign ificativas.
icativas. En concre
concreto:
to: se deshicieron
deshicieron de
mí, col
colocaron
ocaron un Presidente que les estaba sumamen-
suma men-
te agradecido pues no tenía otra forma de llegar a esa
posición; un Presidente al que conocían y sabían que
era bueno
bueno para seguir
segu ir instr
i nstruccio
ucciones.
nes. Esto quedó claro
claro
en la cart
ca rtaa que el propio
propio Dionisio Gutiérrez le mandó,
antess de que fuera electo, y en la que incluso le indica-
ante ind ica-
ba que no se olvidara del referendo. ¿Cuál referendo?
Por otra parte, en la misma carta también le daba
instrucciones y le advertía que su seguridad estaba en
que él debería poner a los “patriotas” (léase Otto Pé-
rez Molina y Compañía) alrededor de él, pues ellos
eran quienes le garantizarían su “seguridad”.
Como el mismo Dionisio lo reconoció en su car-
ta del 5aldepaís
dejaba junen
junio
io de
bue1993
1nas
993,manos.
buenas , élanos.
m podía ir
irse
se tranquilo,
tra nquilo, pues
¿Qué pasaría con esas buenas manos? Pues era
más que predecible. De inmediato subieron el pre-
cio del azúcar en el mercado local; se adjudicaron

El grand finale 

las concesiones de generación eléctrica, incluyendo,


desde luego, la controversial de Champerico, con un
contrato digno de los contratos que el país firmara
a principios del siglo pasado al adquirirse la deuda
inglesa; porque en ellos el Estado no era suficiente
garantía y se dieron, como garantía adicionales, las
grandes cuentas de consumo del país, como la de la
Cervecería y la de Cementos Progreso.
Los dueños sí estaban contentos. Sin embargo,
el Ejército aún se preguntaba cómo era posible que
al verdugo
Patrull
Patru as dede
llas los derechos
Autodef ensa, sehumanos,
Autodefensa, le tuviera enemigo
rendirde
que rendi las
r ho-
nores.
Pérez Molina, ni corto ni perezoso, vistió al
pobre Ramiro de patrullero, le colgó un pañuelo al
cuello, lo uniformó, le dio un fusil, lo subió en una
tanqueta
tanque ta y lo hizo desfila
desf ilarr en el
el fuerte Mariscal Zaba
Zaba--
la, en un desfile
desf ile ante la prensa, el cuerpo diplomático,
diplomático,
personalidades
personal idades de Gobierno,
Gobierno, e invitados especiales.
especia les. El
mensaje f ue clarito
fue
Lo triste cla
esrito:
que: “A
““aA este ya
ya lo tenemos”
t enemos””. no solo lo
tenemos
aplaudieron las cúpulas militares y empresariales, sino
que el crimen organizado dijo: “Ahora es cuándo”, y
se desató una de las olas de mayor criminalidad en el
país. Los secuestros eran por docena y los ajusticia-
mientos extrajudiciales por miles, entre ellos pérdidas
irreparables
ir reparables como
como la de Jorge Carpio Nicole
Nicole y Epami-
Epam i-
nondas
non das Gonzá
González
lez Dubón. Resulta
Resulta que el “Procurador
“Procurador
había resultado mimill veces peor
peor que el aprendiz
aprendiz de Dic-
tador”, como se dijo en un tímido artículo de prensa
de la época.
A la famosa Instancia Nacional de Consenso se
le dieron las gracias por los servicios prestados como
títeres en la función. Aunque parece que a algunos sí

285

La guayaba tiene dueño

les pagaron,
paga ron, a otros no.
Elites delincuenciales

A partir de ese momento quedó establecido que


los motores de la política, la economía y la seguridad
serían a saber:
El contrabando
El lavado y la evasión fiscal
El narc
na rcotráf
otráfic
ico.
o.
estasPara desgracia
activ idadesde
tres actividades nuestro
se al inearonpaís,
alinearon entreloslosintereses
entre grupos
gr pen
upos po-
o-
derosos y tradicionales hasta entonces, únicos dueños
del país, con las fortunas
fortu nas emergentes. Sobre
Sobre todo las de
los narcos y lavadores de dinero, quienes muy pronto,
tal como yo lo advertí el 25 de mayo de 1993, busca-
rían sus cuotas de poder y tomarían también parte en
el secuestro del Estado lo que, lamentablemente, ha
venido aconteciendo.
cual Permítanme hacerles
pretendo explicar una veo
cómo gráfica, a través
lo que de la
ha pasado
en el país, y lo voy a representar sobreponiendo tres
círculos.

286

El grand finale 

Cada círculo
círcu lo representa
representa una de las actividades an-
tes mencionadas. Ya verán cómo es que la amalgama
se forma y cómo resulta difícil determinar las líneas
que pudieran separar los grupos criminales del país.
Hoy, como lo vemos en el esquema, tenemos la-
vadores, narcotraficantes, contrabandistas, y toda la
gama
ga ma posible de mezclas, participando
part icipando en
en ellas
ella s “hono-
rables” miembros de todos los sectores de la sociedad,
unos con gran reputación y prestigio, otros despres-
tigiados
tig iados y burdos, pero todos socios, y colaboradores,
colaboradores,
sin conciencia
conciencia algu
al guna
na de lo que hacen y han hecho al
país, Eso sí, todos con la esperanza de que los despe-
nalicen
nal icen y así ese molesto mote de delincuentes les sea
quitado de encima.
Cuando los señores Gutiérrez–Bosch y todos
sus aliados y sirvientes, patrocinaron su esquema de
poder, estoy seguro de que no se imaginaron lo que
le estaban haciendo al país. Yo, sabiendo de donde
vienen, el origen de su familia, declaro que a pesar
de todo,
hecho estonoa los creo tan Sin
conciencia. perversos como
embargo, comoparadice
haber
el
dicho, “de buenas intenciones está empedrado el ca-
mino al infierno”.
Ellos pervirt
pervi rtie
ieron
ron y subyugaron
subyugaron la precaria
precaria insti-
tucionalidad del país, para defender sus privilegios, y
demostrarle a un Presidente que no era el Rey Salo-
món, y así abrieron
abrieron el camino
cami no para que tirios
tir ios y troya-
nos hicieran de nuestra
nuestra Guatemala
Guatema la “el
“el país de la eterna
eter na
primav
prim avera
era delincuencial
del incuencial””.
Arzú al poder

Conozco a Álvaro desde que éramos niños; fui-


mos al mismo colegio, yo era un año mayor que él.

287

La guayaba tiene dueño

De jóvenes parrandeábamos juntos e hicimos política


 juntos en un unaa época de nuestra vid vida,
a, en el Part
Partido
ido
de Renovación Nacional (PNR), del cual él era el
Secretario General Adjunto y yo era el Presidente de
la Rama Profesional.
Fue Ministro de Relaciones Exteriores al prin-
cipio de mi Gobierno, Es uno de esos políticos con
ideas fijas, pragmático pero hábil para adaptarse a lo
que los estudiosos llam
l laman
an la
l a “real
“real politic”
politic”..
Porr ejemplo,
Po ejemplo, conmigo
conm igo sufr
su frió
ió mucho
mucho cuando
cua ndo yo le
pedí en Guadalajara que me acompañara para recibir
a Fidel Castro. Me dijo que eso lo podía afectara fectar en sus
pretensiones
prete nsiones a la Presidencia. Le dije:
 —No te preocupes, esta es una u na cita con la hi
histo-
sto-
ria,, ya sea que nos
ria nos guste
gu ste o no.
no.
Recuerdo que Magda, mi esposa, y Patricia, la
esposa de Álvaro, tampoco querían ir; sin embargo,
las convencí y me dijeron que estaba bien, pero que
ellas permane
perma necerían
cerían serias.
En menos
tiblemente de diez minutos,
un hombre Fidel,
carismático, nosque es indiscu-
tenía a todos
bromeando. Después he sabido que Álvaro dice que
Fidel era el único estadista en la reunión y que él lo
admira mucho. Qué bueno, pues si no me hubiera
acompañado,
acomp añado, hoy no podría
podr ía decir eso.
Recuerdo
Recu erdo también el caso de Belice. Era realmen-
real men-
te un caso de Estado, y no sabía cómo íbamos a salir.
Me dijo que eso sí lo podía afectar y que renunciaba.
Enrazón.
la esa ocasión, aunque yo no estaba de acuerdo, le di
¿Por qué yo no estaba de acuerdo? Porque él,
como Ministro de Relaciones Exteriores, debía ha-
berse dado cuenta de lo nefasto que era para noso-
tros como país, mantener una posición colonialista a

288

El grand finale 

f ina
inales
les del
del siglo 20, en con
contra
tra de todas las
la s políticas an-
ticoloniales de la comunidad internacional. Debía de
haber sabido que de esa manera se violaba el derecho
de todo un pueblo a su autodeterminación, tal como
lo garantizaban
garant izaban todos los tratados internacionales
intern acionales que,
que,
en materia de derechos humanos, Guatemala había
f irm
irmado
ado y ratificad
ratif icadoo en los últimos cincuenta
cincuenta años.
años.
Por otra parte él, como Ministro,
Min istro, debería haberse
dado cuenta de que las comunidades africanas y del
Caribe, votaban sistemáticamente en contra de Gua-
temala en todos los foros donde planteábamos algún
caso de nuestro interés como país. Solo había que
preguntarle a Jorge Luis Zelaya Coronado, por qué
había perdido la reelección como Secretario General
Adjunto en la OEA, contra un candidato oriundo de
Barbados.
Finalmente, Belice, como país, tenía más reco-
nocimientos que Guatemala, a pesar de que nosotros
existíamos como nación desde 1821.
quSiendo
de que realistas,
e tuviéramos nonahabía
a lguna
algu el más
esperanz
esperanzaa demínimo enchance
éxito en el di-
ferendo, en la forma en que estaba planteado. Simple-
mente era una linda cortina de humo, para echársela
encima a cualquier
cu alquier problema
problema nacional. Basta
Ba sta recordar
las excentricidades del ex presidente Miguel Idígoras
Fuentes, o las amenazas de Kjell Eugenio Laugerud,
otro expresidente.
Otro punto en el que nunca pude tener una
respuestalopositiva
Cuando de Arzú,
invitamos fue ende
a la reunión el El
tema de lal, paz.
Escoria
Escorial, dijo
que prefería que fuera Luis Flores Asturias. Cuando
fuimos con todos los dirigentes del país, en 1993, a
las Naciones Unidas, fue el único que declinó la in-
vitación. Siempre argumentó que podría afectarse su

289

La guayaba tiene dueño

candidatura.
cionó, Reconozco
pues llegó que su pragmatismo le fun-
a la Presidencia.
Creo que los dueños, quienes lo apoyaron por más
de seis años en la candidatura, se sintieron un poco
perdidos con él. Creyeron que iba a ser más obedien-
te; sin embargo, Álvaro hay que reconocer que tiene
carácter y en ciertas cosas se les paró, tal es el caso de
la privatización de GUATEL, pero los dejó entrar en
el tema de la energía eléctrica y creo que eso le sal-
vó el gobierno y evitó que estuviera aquí en Panamá
conmigo.
Como referí antes, él solo mencionó como pro-
blema para la fir
f irma
ma de la paz el caso de la señora
señora Olga
Alvarado de Novella. Qué bueno que solo eso vio,
pues si no
no quizá no hubiera
hubiera llegado a fir
f irma
marr los Acuer-
Acuer-
do de Paz, lo cual es un reconocimiento que el país
debe darle. No obstante, en el Libro
Libro “¿Quién mató al al
obispo?””, de Maité Rico
obispo? R ico y Bertrand de la Grange,
Gra nge, hay
un párrafo
pár rafo que me llllamó
amó muchísi
muchísimomo la atención:
atención:
duro“El asesinato
contra de Gerardi
el proceso había
de paz, sido el golpe
el principal logromásdel
gobierno. Y de repente, pensaba Porras, comenzaba
esa extraña implicación de oficiales cercanos a Arzú.
Desde que se había lanzado
lan zado a desmantelar,
desm antelar, en 1996,
1996, la
mayor red
red de contrabando del país, el secretario
secreta rio priva-
pr iva-
do del presidente
presidente estaba preocu
preocupado
pado.. La organ
organización,
ización,
denominada como la “red Moreno” tras la detención
de su testaferro, un ex agente de aduanas llamado
Alfredo
estructuraMoreno,
creada a tenía
finalessudeorigen
los añosen setenta
una compleja
por in-
teligencia militar, para vigilar el trasiego de personas
 y ar
arma
mass en los puestos fronter
fronterizo
izoss y de paso, obtener
fondos para financiar de forma clandestina la lucha
contra
con trainsu
insurgente.
rgente. Con
Con los años ese aparato paralelo
para lelo se
se

290

El grand finale 

había transformado
organizado, cuya inf
cuya in fen un sólido
luencia
luencia bastión
se extendía
se exten deliciales
día a of crimen
oficiales de
alto rango,
ra ngo, jueces,
jueces, abogados y políticos…
  Tras la ofensiva contra la mafia militar, Porras
había estado temiendo una venganza del grupo para
recuperar sus posiciones
pos iciones de poder. ‘Tengo
‘Tengo la sospecha’
so specha’– 
– 
comentó a sus compañeros– ‘de que hay una mano
peluda,
pel uda, si no detrás
detrá s del crimen, sí por lo menos
menos mani-
man i-
pulándolo’
pul ándolo’..” (Pág
( Págininaa 55)
Lástima que Arzú no se enteró de esto y sobre
todo que no hubiera sabido de esto cuando yo di el
golpe. Si por lo menos hubiera leído la proclama que
 yo di a la Nación el 25 de mayo de 1993, 1993, no me cabe
la menor duda de que, por lo menos, hubiera sido más
benigno en tratarme, pues solo el desconocimiento
excusa un apoyo como el que dio a los que después,
tal como lo relata Porras, le montaron o por lo menos
manipularon
man ipularon el detestable asesinato de Monseñor Juan Juan
Gerardi. En fin,
f in, la historia
h istoria se escribe
escribe con
con calma.
calm a.
Tengo que reconocer que, aunque Arzú nunca
dio ningú
ni ngúnn crédito a lo que yo
yo hice por la paz, por lo
menos él, en lo personal y como Presidente, evadió
atacarme
atacar me virulentamente;
viru lentamente; no
no así su canci
canciller,
ller, Eduardo
Stein, hecho que a decir verdad, no lo entendí en ese
momento. No fue sino hasta que vi cómo los dueños
del país lo hicieron Vicepresidente durante el nefasto
gobierno de Oscar Berger Perdomo, y después como
Presidente de la Comisión de Transmisión de Man-
do del gobierno
de que de PérezeraMolina,
el exguerrillero muchoque
másme di cuenta
realista, más
pragmático y menos idealista de lo que yo creía. El
bandazo que pegó era de ciento ochenta
ochenta grados y mu-
cho más, por lo que tampoco hoy lo culpo, pues en el
país ahora
a hora todo se vale.

291

La guayaba tiene dueño

Po
Porti
rtillo
llo al
Albacea delrued
r uedo
oierno Efraín
Gob
Gobierno Efra ín Ríos
R íos Montt
Montt

A Alfonso Portillo no lo conocí, nunca he con-


versado
ve rsado con él. Simplemente,
Simplemente, a la dista
d istancia,
ncia, he podido
seguir su carrera política. Yo sabía que Ríos Montt
casi había decidido lanza
la nzarr en ese momento
momento a Francisco
Bianchi como candidato a la Presidencia de la Repú-
blica. Esa era la información que se manejaba y que
me llegaba. De repente, me entero por los periódicos
que el FRG y Efraín Ríos Montt lanzaban a Alfonso
Portillo.
Conociendo como conozco a Efraín, pensé que
algo le había visto a Portillo y, como Ríos Montt es
fundamenta
fu ndamentalmente
lmente un estratega, sabía que un poquito
de izquierda le era sumamente importante para ganar
las elecciones, ya que le serviría para matizar en algo
su imagen y para dar garantías a sectores que de otra
forma no votarían
votar ían por el FRG.
FRG.
Desde luego, para no perder del todo el perfil,
puso a Francisco
Fra ncisco “Paco” Reyes, quien en ese momen-
to tenía una
u na vinculación aceptable con los dueños.
vi nculación aceptable
Cuando acababa de ganar las elecciones Alfonso
Portillo, un día recibo la llamada de un buen amigo,
quien me contó que la noche anterior estuvieron con
él, que parecía que tenía carácter y bue
buenas
nas intencio
intenciones
nes
 y que l la
lamó
mó su atención el hecho de que, cua cuando
ndo se
refirió a mí, dijo que lo que se hizo conmigo fue una
cabronada,
amigo que, ysique vería cómo
lo volvía a ver, me
queayudaba. Pedígracias
le diera las a mi
de mi parte.
Pasaron los días y nombraron a un nuevo Fiscal
General, Carlos David de León Argueta, y el fiscal
que estuvo encargado
encargado de mim i caso, el licenciado Mario
Mar io

292

El grand finale 

Leal,,La
Leal
 juez sem,
sintió
Lam, parainseguro
inpedirle
seguro
pedi en sulopuesto;
rle que ayudar
ayud fueque
ara,
a, y habló
él ibacon la
a pe-
dirr que se emitiera una orden de
di de captura internacional
intern acional
contra mí y que, por favor, ella la tramitara, pues esa
era la forma que tenía de impedir
impedi r que lo lo movieran de
su puesto. Así lo hicieron, por eso es que desde 2002
he tenido a Panamá
Panam á por cárcel.
Cuando esta orden se da, hablé con el Canciller
de Pana
Panamá,
má, José Miguel
Mig uel Alemán, y le hago ver que el
gobierno
de policía,guatemalteco,
estaba violando buscando
los tratados
un procedimiento
de Montevi-
deo, ya que el Estado de Guatemala estaba obligado
a respetar la decisión soberana del Estado panameño;
pero que yo no quería hacer de esto un caso que pu-
diera perjudicar las
la s relaciones
relaciones entre ambos países.
paí ses.
Alemán me dijo que él vería a Portillo en una
reunión la semana siguiente y que le tocaría el tema.
Así fue: me llamaron a la cancillería panameña y me
contó José Miguel
Mig uel que Porti
Portill lo le dijo que élél sabía que
no existía nada contra mi persona y que regresara a
Guatemala.
Que no existía nada no era noticia para mí, pues
tenía en mi poder todos los expedientes, las resolu-
ciones del gobierno panameño y la opinión legal del
propio
prop io Ministerio
Min isterio de Relaciones
Relaciones Exteriores
Ex teriores de Guate-
mala. Pero regresar así, simplemente, no era lo que yo
pedía, sobre todo conociendo el secuestró del Poder
 Judiciall que, en ese momento, ya exi
 Judicia existí
stía.
a. Simplemen-
te
losbastaba con que
correspondien teseltratados.
correspondientes Estado guatemalteco, respetara
t ratados.
Con el tiempo me enteré de que no fue única-
mente la motivación del fiscal Leal la que me perju-
dicó, sino que los dueños del país se habían disgustado
al saber que
que,, con mi famil
fam ilia,
ia, fui a pasar
pasa r unos días a El
Salvador.
293

La guayaba tiene dueño

ma laEntonces
mala vientendí
que me visitaron por qué periodistas
sitaron insistieron
in sistieron ver los de
en ver Guate-
boletos de
avión y los pasaportes, sobre todo el mío.
Empecé a ver el gobierno de Portillo como un
gobierno bien intencionado. Sin embargo,
embar go, muy pron-
to empezaron los roces con el grupo de los dueños.
Se decía que era por algunas importaciones de po-
llo, azúcar y cemento queque Porti
Portillo
llo había estimul
est imulado
ado y
que,, de alguna
que alg una manera,
m anera, habían parado
par ado entendiéndos
entendiéndose. e.
Pensé
van para mis
nar yadentros:
a perdonar
perdo vendrá lasiguerra.
geso fueYasíasíestos
uerra. fue. no se lo
La prensa se fue contra Portillo, igual que lo hi-
cieron contra mí, lo satanizaron, experiencia que yo
he vivido durante más de veinte años; lo arrinconaron
arr inconaron
 y lo ai
aisla
slaron.
ron. Ahor
Ahoraa lo tienen preso, al ig igua
uall que tu-
vieron preso
preso y humil
hum illaron
laron a Paco Reyes,
Reyes, quien fue el
vicepresidente
vicepresi dente durante la gestión
ge stión de Porti
Portillo.
llo.
¿Qué hicieron ellos, en este caso? No voy a juz-
garlo; lo que sí puedo afirmar es que Oscar Berger,
Eduardo Stein, Vielmann, Figueroa, Rivera y com-
pañía, hicieron cosas mucho peores y están libres y
protegidos por la más cruenta de las impunidades.
Se ha llegado hasta el extremo de plantear la ex-
tradición del expresidente Portillo. ¿Qué precedente
mundial sería si algún
a lgún país
paí s solicitara
solicitara la
l a extradición
extradición de
alguno de los expresidentes norteamericanos Bush
, Clinton o Carter? ¿Creen ustedes que los Estados
Unidos
Unid os lo permiti
permitirían
rían?? De ninguna manera.
m anera.
se leSidebería
durantejuzgar
su mandato Portillo cometió
en Guatemala, delitos,
y por supuesto,
cualquier país ofendido podría presentar sus pruebas
en el juicio; pero lo que sucede es que la justicia gua-
temalteca no tiene credibilidad por su situación de
subordinación a los dueños  y hoy también al crimen

294

El grand finale 

organ
organizado.
izado. A los que quiere
quieren
n juzga
juzgarr y se encuen
encuentra
tran
en el país, los quieren sacar; y a los que están afueran
no los quieren mandar a traer, por la venalidad de
nuestro sistema judicial. Tal es el caso del exministro
Carlos Vielmann, y de los jefes de policía del tiempo
de Berger,
Berger, Javier Figueroa y Erwin
Erwi n Sperinsen.
 Portilillo
 Port lo y Ríos Montt
Montt plantearon una confronta-
ción con los dueños, la cual
cua l se vio tipificada
tipif icada en lo que se
se
llamó “el Viernes Negro”,
de la dominación, pero enuna intentona
realidad de lograron
lo que liberarse
fue darle una justificación a los Gutiérrez–Bosch para
cerrar filas con sus aliados y plantear una ofensiva fi-
nal,, tomarse
nal tomar se la Presidencia con
con todo y todo.
Berger y Stein a la Presidencia
Al poder: el Grupo Pirámide,
Pirá mide, el G –5, La Mesa,
Mesa,
el CACIF. Llámenlo como quieran

El gobierno de Oscar Berger se establece como


resultado de una lucha abierta de los medios de co-
municación contra
contra el gobierno
gobierno de Alfonso
A lfonso Port
Portilillo,
lo, al
que desacreditaron a tal
ta l extremo
ext remo que,
que, a los ojos de los
guatemaltecos, este era, sin lugar a dudas, el “gobier-
no más corrupto de la histor
historia”
ia”..
El enfrentamiento con sectores poderosos que
manejan los grandes medios de comunicación de
Guatemala, descalificó a Portillo y esto provocó que
se hicieran extensas investigaciones sobre cada acto
 y seña
señala
lamm ientos, comprobables o no. Sin embar embargo, go,
eso no era lo importante. Desacreditarlo era el obje-
tivo. Mientras tanto, al gobierno de Oscar Berger lo
empezaron a tocar con pinzas y hacerle una fama de
bonachón,
bonach ón, lo que a la postre fue
f ue usado como una gran g ran

295

La guayaba tiene dueño

fachada para las incalificables acciones y los actos de


corrupción que a la sombra de ese gobierno se lleva-
ron a cabo.
Berger, gobierno de privilegios

Este gobierno se caracterizó por impulsar políti-


cas que favorecen los intereses de los empresarios que
lo apoyaron y de algunos de los grandes agroexpor-
tadores.
licas Su
públicas
púb proyectopara
de impacto paraelelfomento
fomagro carecía
ento de lasde políticas
economías
campesinas y, por supuesto, deficitario en iniciativas
sociales.
Al promover el enfoque empresarial en los pro-
gramas GUATE SOLIDARIA, GUATE CRECE,
GUATE COMPITE Y GUATE VERDE, este go-
bierno simplemente ratificaba su orientación funda-
mentalmen
mental mente
te empresaria
empresarial,l, afirm
af irmándo
ándolo
lo con la consti-
tución de su propio gabinete.
Temática de seguridad 

Desde el principio, el tema de seguridad fue su


talón de Aquiles; se evidenció que no existía una po-
lítica de seguridad y que solo se realizaban acciones
coyunturales
coyuntur ales que no tenían may
m ayor
or impacto.
Quizás
Qui zás en un esfuerzo por mostrar algú
a lgúnn nivel
nivel de
moderación, relanzó los acuerdos de paz, y anunció
la reducción del 35% de las plazas, del presupuesto y
las bases mil
m ilitares;
itares; medida demagógica que
que a la postre
fue contraproducente, pues no establecía cómo se iba
a llenar
llena r el vacío de autoridad
autoridad que esa acción
acción causaría.
causar ía.
Hoy, con los años, nos damos cuenta de que
los únicos que sí supieron aprovecharlo fueron los

296

El grand finale 

narcotraficantes “buenos”, como se les llama en el


interior del país, pues son los que vinieron a prestar
parte de la
l a ayuda social
socia l que, mal que bien, el
el Ejército
Ejército
proveía.
De allí pues que, en seguridad, sí hubo cam-
bios, pero consistentes en que las cifras de violencia
se incrementaron, así como una inexplicable ola de
muertes violentas atribuidas muchas veces a los po-
deres ocultos, y entre ellos al narcotráfico. Destacan
los
reoshechos ocurridos
y mareros presosenfueron
las cárceles, dondeTambién
asesinados. diferentes
el
caso cuando fueron asesinados tres diputados salva-
doreños del Parlacen y el piloto, por 4 agentes de la
Policía Nacional Civil
Civi l –PNC–.
–PNC–. Estos policías implica-
i mplica-
dos en el crimen fueron ajusticiados
ajusticiados más
m ás tarde,
ta rde, dentro
dentro
de una cárcel de máxima seguridad, sin que nadie lo
impidiera, sin responsables ni testigos, dejando lugar a
profundas dudas y grande temores.
Este espantoso
totalmente escándalo
la corrupta situaciónen deel cual se evidenció
la Policía Nacio-
nal, puso en el centro del huracán al Ministro Carlos
Vielm
Vie lmanann,
n, y al
a l gobierno
gobierno entero.
entero.
La inseguridad tocó fondo, las muertes violentas
contitinuaron
con nuaron y el colapso de las instit
i nstitucio
uciones
nes responsa-
bles de la seguridad
segur idad era evidente,
El Ministro Vielmann, hombre de confianza, y
colocado en ese puesto por el el grupo
gr upo Gutiérrez–Bosch,
Gutiérrez –Bosch,
afirmaba que lo ocurrido en los planteles penitencia-
rios se debía a la ruptura de un pacto de no agresión
que existía entre las maras, hecho que fue provocado
por el narcotráfico y por “los poderes ocultos”, y que
eso causó un brutal derramamiento de sangre.
Pero, curiosamente, en una interpelación en el
Congreso, no se le hi hizo
zo ningu
nin gunana pregunta al a l respecto,
respecto,

297

La guayaba tiene dueño

aunque se conocía públicamente que muchos de los


cadáveres
cadáver es de los mareros
ma reros presentaban
presentaban el tiro
ti ro de gracia,
graci a,
lo que revelaba una brutal actividad de “limpieza so-
cial”” como
cial como le llamaban.
La verdad sobre todo esto ha ido saliendo
sal iendo a luz
luz en
diferentes libros y publicaciones, en particular en in-
vestigaciones silenciadas, llevadas a cabo por valientes
f iscales de la CICIG
CICIG,, (Comisión
(Comi sión Internacional Contra
la Impunidad en Guatemala) de las Naciones Unidas.
Pero esto, sin mayores
los involucrados, a no serconsecuencias
para aquellos judiciales
que por unaparau
otra razón han sido eliminados físicamente para ca-
llarlos eternamente.
Narcotráfico
Sin lugar a dudas, la capacidad de Guatemal
Guatemalaa para
combatir el narcotráfico es limitada, lo que se veía en
el
losgobierno
gob
de ierno de Berger
Berger
los carteles aun más lim
guatemaltecos l imitada
itada
con lospor los víncu-
colombianos
 y mexicanos.
mexica nos.
Lo que resultaba aun peor, eran las insistentes
denuncias de los vínculos de todos esos carteles con
militares en retiro, con las maras, que podrían haber
sido armadas por los carteles. Así, fueron “tomadas”
muchas
muc has colo
colonia
niass residenciales, a cambio
ca mbio de extorsiones
extorsiones
 y secuest
secuestros
ros rápidos, pues la lass mi
misma
smass mamaras
ras se veían
involucradas como sicarios al servicio de otros gru-
pos delincuenciales y algu al gunos,
nos, incluso,
incluso, estrechamente
vinculados
vi nculados con escuadrones de la muerte, muerte, los llamados
llam ados
“de limpieza
li mpieza social”
social ”.
Otros grupos
g rupos de poder,
poder, de saco y corbata, de una un a
u otra forma se veían
veían vinculados
vi nculados con el el crimen
cri men organ
organi-
i-
zado. Directa e indiindirectamente
rectamente participaban
part icipaban en en activi-
dades de lavado,
lavado, contrabando
contrabando y hasta ha sta de narcotráfico
narcotráf ico..
298

El grand finale 

Al final del período y en una etapa preelectoral,


no se hicieron esperar las ofertas del narcotráfico para
agenciarse y garantizarse los espacios de poder, por
lo que nunca se llegaran a aprobar las reformas a la
Ley Electoral y de Partidos Políticos; sobre todo, en
materia de transparencia en el financiamiento de los
partidos.
Podemos decir que en el tiempo de Berger, la se-
guridad fue un laberinto en el que participaban todos
asussumás
sabor y antojo, incluyendo
altas autoridades. el propio gobierno, y
Un amigo me decía: “La limpieza social debía
haber empezado en la 6ª avenida
avenida y 6a
6 a calle,
cal le, zona uno,
 justo al
allílí en el propio Pal
Palacio
acio Naciona
Nacional.l. A l ext
extremo
remo
que, en la publica
publicación
ción de Internet “Redacción 5º PO-
DER”, Guatemala 12 de abril del 2012, relatan que,
al darle una información sobre el envolvimiento de
personas allegadas al presidente Berger en una activi-
dad de  “e
Derham droga, al embajador
 “encoleriz ado comodepocas
ncolerizado Estados Unidos,
veces James M.
, el represen-
tante del gobierno
gobierno americano,
amer icano, llama
lla ma a Berger y le dice
que es un corrupto, como nunca antes ha habido en
Guatemala”.
Crisis del sistema bancario

Miles de guatemaltecos se quedaron sin dinero


en efectivo a finales del año 2006. se establece “un
corralito”, porque el sistema decide quitar de enfrente
a Eduardo González, hijo de uno de los principales
accionistas de BANCAFÉ, cuarto banco de la Na-
ción, quien se
se perfil
perf ilaba
aba como
como posible
posible candidato por la
Gran Alian
Al ianza
za Naciona
Nacionall (GANA), actor
actor principal en el
escenario político y empresarial. Pero algunos dicen

299

La guayaba tiene dueño

que su pecado capital fue haber desafiado al grupo


principal de los dueños, que no lo querían para presi-
dente.
Selvin Girón y Luis Solano, redactores de Infor-
press, en el blog de “albedrio.org, del 4 de noviembre
de 2006, en un extenso artículo sobre la interven-
ción de BANCAFÉ, comentan, entre otras cosas, lo
siguiente:
“El proceso de intervención de Bancafé respon-
dería a intereses
i ntereses de grupos políticos y económicos
económicos do-
minantes del país. La decisión, tomada luego de un
cambio en las altas autoridades bancarias, obedecería
a fuertes presiones del principal bloque bancario para
dejar fuera al banquero y político Eduardo González
 y a su grupo”
g rupo”..
Allílí mismo
Al m ismo,, según la misma
m isma fuente,
fuente, los periodis-
periodis-
tas comentan;
  “Los efectos de la intervención del Banco del
Café
sionesS.A. (Bancafé),
tomadas desde evidencian una cadena
diferentes instancias de deci-
donde hay
representaciones de grupos políticos y económicos
que tienen objetivos aparentemente bien definidos.
En este sentido, cabe destacar que integrantes de
la Junta Monetar
Monetaria ia (JM),
( JM), la Superi
Superintende
ntendencia
ncia de Ban-
cos (SB) y algu
al gunos
nos miembros de la Junta Directiva del
Crédito Hipotecario Nacional, en su mayoría miem-
bros del influyente y politizado Comité Coordina-
dor de Cámaras Agrícolas, Comerciales, Industriales
 y Fin
Financiera
ancierass (CACIF), fueron precisa
precisamente
mente quienes
tomaron la decisión sobre qué hacer con el citado
banco.
Lo interesante de esta acción es que se dio jus-
to después del cambio de directorio en el Banco de
Guatemala al sustituirse a Lizardo Sosa, quien no

300

El grand finale 

pertenece al part
pertenece pa rtido
ido de gobierno,
gobierno, por
por la ahora ex mi-
nistra de Finanzas Públicas y ex gerente del Banco
Quetzal,
Que tzal, María
Ma ría Anto
A ntonieta
nieta de Boni
Bonilla,
lla, cercana al gru-
gr u-
po económico de Óscar Berger.
“Así se sabe que el segundo banco más grande
del mundo,
mundo, el inglés
ing lés HSBC , que adqui
adquirió
rió en julio
jul io el
Banco del del Istmo (Banist
(Ba nistmo),
mo), con
con sede en en Panamá,
Panamá , era
parte de las preocu
preocupacion
paciones
es de los banqu
ba nqueros
eros naciona-
les quienes
quienes se han estado movimovililizando
zando para consolidar
sus inversiones y no verse afectados con la competen-
cia inte
i nternacional
rnacional
Ese intento de compra habría sido sometido a fé-
rreos bloqueos de banqueros locales para impedir el
traslado
tra slado a manos
ma nos foráneas
foráneas de Bancafé”
Bancaf é”..
La fallida negociación de BANCAFÉ con el
HSBC, tiene un asombroso parecido con el intento
del grupo
gr upo salvadoreño
salvadoreño que también estuvo interesado
en comprar este banco.
Veamos:
medios. Pero el
el trasfondo apenasPérez
analista Edwin si apareció en los
(www.i–dem.
org – Nueva Época números 1079 079,, 26/1
26/10/200
0/2006)
6) af
a f ir
ir--
ma que: “…la decisión de la JM no es más que una
quiebra forzada de Bancafé y que para hacer un aná-
lisis más sereno, hace falta incluir algunos elementos
poco conocido
conocidos”
s”..
Según Pérez, “se sabe que el conjunto de ban-
queros
quer os nacionales desprecian la
l a posibilidad
posibilid ad que bancos
internacionales
hacer competencia.instalen en el país nuevas formas de
Para esto se buscó
buscó retrasar
retrasa r lo más posible la entra-
da del Banco
Banco Azteca, de algunas
algu nas financieras
f inancieras y se hizo
lobby para que fracasara la compra–venta de Bancafé
por un grupo
gr upo fina
f inancier
ncieroo salvadoreño.
salvadoreño.
En primera instancia, Bancafé representa ahora

301

La guayaba tiene dueño

millonarios réditos para este grupo de banqueros na-


cionales,
ciona les, puesto que sus activos no se venderán al pre- pre -
cio que tenían en libros, según el titular de la SIB ,
Willy
Wil ly Zapata “.“.
A esto comenta
comentann Girón y Solano:
“Unoo de los puntos importantes
“Un import antes en el plano polí-
tico es que, como apunta Pérez, de muchos es sabido
que Gonzá
Gonzálezlez no
no forma parte
par te de la cúpul
cúpulaa empresar
empresarial
ial
que se encuentran en el politizado CACIF , y que
tampoco
ta mpoco es de los que acostumbra
acostumbrann aliar
al iarse
se con
con las po-
derosísimas
der osísimas famil
fam ilias,
ias, que aglutina
aglutinann a más de 300 em-
presas con intereses económicos en múltiples países.
(Léase los Gutiérrez–Bosch
Gutiérrez–Bosch).
Por estas razones, González estaría siendo una
víctima de sectores interesados en destruir su carrera
política, pero cabe agregar, también interesados en la
liquidación de Bancafé y del Grupo Financiero del
País, por no ajustarse a una estrategia financiera de
largo plazo
contexto del de los grandes
Tratado de Librebanqueros
Comerciolocales en el
con Estados
Unidos (DR–CAFTA)”
Los beneficiarios de los activos del BANCAFÉ,
los que lo adquirieron a precio en libros y los vendie-
ron a precio de mercado, son, a juicio de los periodis-
tas Girón y Solano:
“El Banco de Desarrollo Rural (BANRURAL)
de capita
capitall mix
m ixto;
to; el Banco Reform
Reformador
ador (BANCOR),
(BANCOR),
de los principales
Banco accionistas,
Agromercantil
Agromercantil, Dionisio
, se reparten Gutiérrez
los bienes
bie car ytera
nes y carterael
de clientes de Bancafé
Bancafé , que se estima
estim a en 1.2
1.2 millones,
mi llones,
cuyas cuentas suman Q4,986 millones en depósitos
monetar
mon etarios
ios y de ahorro. Además de los activos, que es
la parte clave de la intervención.”

302

El grand finale 

El Banco de Comercio

En este caso la cosa es un tanto


ta nto diferente; sin em-
bargo, los procedim
procedimientos
ientos y los
los resultados en el mane-
 jo del botín
botí n son simil
sim ilares.
ares.
En un
u n memorial
memori al fechado el 10 de enero
enero del 2007
20 07,,
dirigido y recibido en la Presidencia del Banco de
Guatemala, los señores Jorge Ibarra–Rivera Iglesias y
Carlos Enrique Abularach Zablah, en su calidad de
Presidente del Consejo de Administración y Geren-
te General del Banco de Comercio, S. A., respecti-
vamente, notifican a la Junta Monetaria, que dicha
entidad incurrió en las causales contempladas en el
artícu
ar tículo
lo 75
75 de la Ley de Bancos y Grupos Financieros.
En consecuencia,
consecuencia, solicitan que la autoridad monetaria
monetar ia
proceda a suspend
proceda suspender
er de inmediato
in mediato las
l as operaciones del
Banco, argumentando que las causas de su incumpli-
miento están directamente relacionadas con la crisis
bancaria que vive
“La crisis el país
de confian
conf zay declaran:
ianza del público
público usuar
usuario
io respec-
respec-
to del sistema bancario
bancar io nacional
nacional en el últi
último
mo trimestre
tri mestre
del año pasado, resultante de la inesperada salida del
mercadoo de Bancaf
mercad Bancaféé Sociedad
Sociedad Anónima,
Anóni ma, de la corrida
bancaria de los depósitos del Banco G&T Continen-
tal Sociedad Anónima, y de la falta de una adecuada
provisión de billetes en nuestro medio circulante du-
rante diciembre dos mil seis (2006) y enero dos mil
siete (2007),
nuestros ocasionó
clientes que una importante
que import
y depositantes haya ante mayoría de
prescindido
nuestros servicios. Al día de hoy, es patente que nues-
tros depositantes no darán muestras de retomar sus
actividades bancarias en Banco de Comercio, S. A.,
dentro de los parámetros tradicionales de operación,
previos a la crisis
cr isis de Octubre
Oct ubre del
del dos mil
m il seis
seis””.

303

La guayaba tiene dueño

Los eventos antes señalados, no obstante que se


tratan de hechos extraordinarios e imposibles de pre-
verr y evitar, ajenos
ve ajenos totalmente
total mente a los
los actos de admin
adm inis-
is-
tración de la institución bancaria, desgraciadamente
han incidido en forma directa en el elemento más
determinante del negocio bancario, cual es el factor
“confianza”.
Resultado de ello es que nuestra obligación de
encaje
enca je respecto de las obligacion
oblig aciones
es depositarias
depositar ias se haya
cumplido de forma irregular en los meses de diciem-
bre del dos mil seis (2006) y enero de dos mil siete
(2007), lo cual en la vida jurídica del banco no había
sucedido”.
Finalmente los mismos socios y directivos del
banco, plantean ante la Junta Monetaria:
banco, Monetari a:
“Dados los hechos anteriores,
anter iores, y a los efectos de no
desatender los postulados del artículo 75 de la Ley de
Bancos y Grupos Financieros, la institución bancaria
que representamos ha acordado notificarlo a la Junta
Monetaria,
Monetar ia, con el propósito
propósito de que la autoridad
autorid ad mone-
taria
tar ia suspenda de inmediato
inmedi ato las operaciones
operaciones del Banco
de Comercio Sociedad Anónima y nombre la Junta
de Exclusión de Activos y Pasivos correspondiente, a
fin de propiciar una salida ordenada del mercado de
la institución
in stitución evitando con ello ello una
un a probable
probable crisis de
orden sistémico.
sist émico.”” (sic)
( sic)
Lo que se deduce del resto de los informes es que
el bancoylonoque
liquidez un realmente
problema
prob tenia
lema de era un
solidez. Enproblema
ca so,de
este caso, la
receta
receta fue
f ue la misma,
mi sma, solo que en este caso el banco
banco be-
neficiado fue : el Banco Industrial S.A., cuyos socios
mayoritarios, son los dueños de la guayaba.

304

El grand finale 

Las ganancias se privatizan y


las pérdidas se estatizan 

Como se puede ver, esta premisa de la astucia


empresarial de los colaboradores de Berger, se hizo
una vez más una realidad
real idad en el
el país: cinco
ci nco bancos pri-
pri-
vados, propiedad de los dueños del país y sus ama m igos
igos,, se
llevaban los activos, por supuesto, comprados a muy
buenos precios.
Los depositantes perdían una buena parte de sus
ahorros, y el Estado usaba las cuentas del Fondo Para
la Protección del Ahorro y del Banco de Guatemala,
para absorber las pérdidas.
El doctor Sergio Morales, Procurador de los De-
rechos Humanos, responsabilizó al Estado, a la Jun-
ta Monetaria y a Willy Zapata, Superintendente de
Bancos, por los problemas en los bancos del Café y de
Comercio, y por la crisis de liquidez provocada en el
país.
El Procurador explicó que se cometió una gra-
vísima
vísi ma violació
v iolaciónn a los derechos
derechos económicos
económicos y sociales
socia les
de la población en los hechos
hechos ocurr
ocur r idos por esas even-
tualidades. Exigió a las autoridades investigar el caso
 y procesar a los empresa
empresarios
rios supuesta
supuestamente
mente vivincu
nculados
lados
a los delitos que se pudieron haber cometido en esos
bancos. Y respecto
respecto de Zapata, Morales, sí fue f ue enfático
enfát ico
en expresar que incurrió
incurr ió en omisión de denuncia.
denuncia.
Diferencia de estos casos, con otros
 problemas
 problemas bancar
ba ncarios
ios en la historia
histor ia del país

En el pasado, cuando casos de esta naturaleza


se dieron en el país, la Junta Monetaria, lo que hizo
fue nombrar una Junta Directiva integrada por gente

305

La guayaba tiene dueño

honorable, que dirigiera la institución en problemas,


que recuperara
recuperara los activ
act ivos
os en forma
form a correcta y que pa-
garaa a los depositantes y acreedores. Hubo
gar Hubo casos como
el del propio Banco Inmobiliario, en que el banco sa-
lió adelante, siguió operando y hasta fue vendido al
Banco de Santander
Sant ander..
A la luz de los acontecimientos que he relatado,
hoy por hoy, los dueños  no lo hubieran permitido,
comoLos deactivos
hecho fueron
lo hicieron.
para ellos, divididos
d ivididos entre cin-
co, para que no hubiera problemas y… todos todo s contentos
 y ca
call lados. El deposita
depositante,
nte, que se agagua
uante,
nte, aunque el
procurador diga que se le violaron sus derechos
derechos huma-
nos. Pero para aquellos 5, ¿qué carajos significan los
derechos humanos en lo económico de la población,
si estos no tienen nada que ver con la santísima PI-
RÁMIDE,
RÁ MIDE, puesto
puesto que
que ellos no los han santificad
santif icado?
o?
Las pérdidas para el pueblo, como debe ser, pues
así dirá
d iránn que se diluye el riesgo y nadie
n adie lo siente.
siente. Bue-
no, esa es la nueva realidad del país: el Estado es de
ellos y qué.
En 1993, el 25 de mayo, en mi proclama a la na-
ción como Presidente, al anunciar las medidas que
tomaría
tomar ía en la depuración del
del Estado dije:
”Lo único que me mueve a tomar esta decisión
trascendente, es garantizar que nuestra Guatemala no
sea presa del narcotráfico; que nuestro país no sea un
 jard
 jardín
no sinín para las maf
man,f ia
corr upción,
corrupció ias;
s; que
sin nuestro
venal
venalidad, sipaís
idad, sin tenga unia””desti-
n demagogia
demagog .
Irónicamente, muchos de los que participaron en
el golpe contra mí, ya sea como títeres o bien como
titiriteros,
titi riteros, fueron “patriota
“patriotass” como lo lo define
def ine Dionisio
Gutiérrez, héroes de esa efeméride, hace veinte años.
Lamentablemente, los nombres de muchos de ellos

306

El grand finale 

quedan escritos hoy en la historia de Guatemala


Guatema la como
los que han favorecido, protegido y hasta participado
en el narcotráfico
narcotráf ico,, como los queque han hecho del país un
 jardín
 jard ín para deli
delinqui
nquir,r, ta
tall como dijo la BBC de Lon-
dres: los que institucionalizaron el crimen, la corrup-
ción, la vena
venalidad
lidad y la demagogia
demag ogia en el gobierno.
gobierno.
 Y para ter
termi
minanar,
r, los que secuest
secuestra
raron
ron el est
estado
ado
 y sobre todo, siempre ejercieron sus derechos como
dueños de la guayaba.
El Gobi
G obierno
erno de Alv
A lvaro
aro Colom

De este gobie
gobierno
rno es sumamente
suma mente di
diff ícil decir algo,
al go,
pues estoy
estoy seguro,
segu ro, que
que hasta
hast a la fecha él mismo
m ismo no sabe
a ciencia cierta si fue Presidente.
Presidente.
Se definió como un Social Demócrata, sin en-
tender que era eso, creo que para él serlo, era poner
las fotos de los Presidentes Arbenz y Arévalo en el
palacio, e irle a dejar una condecoración a Fidel.
La política fundamental de su administración,
adm inistración, fue
gobernar para
pa ra hacer presidenta
presidenta a su esposa, no impor-
i mpor-
tando, la imagen que se dio del país en el exterior,
con la pantomima
pantomi ma del divo
d ivorcio
rcio.. Actitud, que fue muy
mal vista, pues vulneraba la institución familiar mis-
ma, siendo esta una de las instit
i nstitucio
uciones
nes mas necesarias
necesaria s
socialmente y de las mas difíciles de proteger en el
mundo actual.
peroPfinalmente
equeñas
eque ñas escara muzas con los dueños
escaramuzas
entendimientos, de la
amores, y guayaba
por su-,
puesto pactos que hoy más que nunca se hacen evi-
dentes.
Como me dijo una amiga, Colom gobernó de
noche.

307

CAPÍTULO XVII
Mea culpa,
pero hablemos claro
claro

Panam
Panamá,
á, 23 de marzo
ma rzo de 2012
2012
Señores
DUEÑOS DE LA L A GUAYABA
GUAYABA
Ciudad de Guatemala,
Presentes
Estimados señores:
 Ya han pasado casi veinte años, en los que ustede
 Ya ustedess
han gobernado. La historia ha empezado a recoger
con algún
alg ún grado
g rado de objetiv
objetividad
idad lo que han hecho con con
m i patria.
patr ia. Yo
Yo no soy quién para
par a juzgarlos
juzg arlos y sé que aún
siguen mandando
ma ndando y no sé porpor cuánto tiempo más.
No quisiera escribir esta carta cuando ustedes ya
no
me estén en mando,
preguntaría por pues
qué nodirlo
dirían
íanhice
que asoy un cobarde,
tiempo, así que,y
hablando claro, les voy
voy a facilitar
facil itar un poquito su traba-
 jo a los hi
histor
storiadores
iadores;; o por lo menos, da darles
rles pist
pistas
as para
que se les haga más fácil hacer su tarea.
Sin tapujos y como
como decía un bue buenn amigo
am igo mío,
m ío, “sin
“sin
ponerle
pon erle paracaíd
paracaídas
as al tetunte”
tetu nte”,, permítanme
permíta nme detallar
detal lar los

Un mea culpa, pero hablemos claro

temas de fondo que


que nos enemi
enemistaron
staron o enfrentaron:
enf rentaron:
 –ELECCIONES DE 1990 1990
Haberles ganado
gan ado las
la s elecciones
elecciones para Presidente de
la República de Guatemala, cuando ustedes, los due-
ños de la guayaba ya habían decidido, que el siguiente
Presidente debería
deber ía ser o Jorge
Jorge Carpio
Car pio Nicole
Nicole o Á lvaro
Arzú
Ar zú Irigoye
Ir igoyen.
n. Aunque ya lo sabía, yo debí
debí haber en-
tendido bien
bien la estrategia
estrateg ia de ustedes.
 –ELECCIONES PA PA R A ALCA
A LCALDES
LDES DE 1993
1993
Haberles ganado las elecciones para alcaldes el
9 de mayo, sabiendo el esfuerzo que ustedes habían
hecho, financiando todas las coaliciones posibles para
derrotar a mi partido, el MAS. Esto ya era mucho,
por eso con toda razón veinte días después, financia-
ron e instigaron el golpe de Estado para quitarme del
gobierno.
 –BONO 14 14
Haber atentado contra la estabilidad de sus bolsi-
llos, al
a l decretar el Bono 14
14 única
ún ica reivindicación labo-
ral real, para el pueblo de Guatemala, en los últimos
setenta años. Sin embargo,
emba rgo, lamento que ustedes no lo
hayan visto así.
 –R EPA
 –REP ATR
TRIACI
IACIÓNÓN DE 35,35,00
0000 R EFUGIA
EFUGIADOS DOS
GUATEMALTECOS
Haber retornado
retornado al país,
pa ís, a pesar de todas las
la s opo-
siciones
siciones y vallada
val ladares
res que se presentaron,
presentaron, a 35,000
35,000 gua-
g ua-
temaltecos que vivían en condiciones inhumanas en
campamentos de refugiados, en México. Quizás esto
a ustedes no les interesaba mucho, pues lo único que
oí en alguna oportunidad, fue el comentario de que,

309

La guayaba tiene dueño

“no entendían que hacía yo, trayendo de regreso a


todos esos guerril
guerr illeros
leros comunist
comunistas”
as”..
 – CREA
 –CR EAR R LOS HOGAR HOGARES ES COMUN
COMUNIT ITA-
A-
RIOS
Haber organizado
organi zado a través del
del programa
program a de Hoga-
res Comun
Comunitar
itarios,
ios, de la Primera
Pri mera Dam
Dama,a, 5,000
5,000 hogares
 y da
darle
rle atención huma
humanitnitar
aria
ia a por lo menos 50,000
niños
tos ya de la ciudad
reque
requerí an de capital;
rían y que,
esa atenci
atención, en los
ón, pues susdepartamen-
madres tra-
t ra-
bajaban. No hubo nunca la intención de entender la
proyec
pro yección
ción social del programa,
progra ma, sino que fue mordaz-
mente criticado por el impacto político que podría
tener en favor de nosotros.
 –R ECUPER
 –RECU PERA ACIÓ
CIÓN N ECONÓMICA
ECONÓMICA
Haber puesto disciplina en la economía, haber
reducido
redó a un 10%anterior
el gobierno la inflación galopante
de un 60%, la que
cualme he-
estaba
empobreciendo brutalmente al pueblo, sobre todo a
los asalariados.
Como las medidas que debimos tomar significa-
ron poner orden
orden en las fin
finanzas
anzas públicas, racional
racionaliza
izando
ndo el
sistema tributar
t ributario
io,, reduciendo
reduciendo los subsidios, nivelando
los presupuestos de la Nación y reducir la inflación
parando la especulación que durante años favoreció
a muchos poderosos, ustedes las adversaron, sin im-
portar lo que eso significaba para el bienestar de una
poblaciónn golpeada.
població
 –ELIM INACIÓ
 –ELIMINA CIÓN N DEL CU CUPO PO MILITAR Y
DIGNIFICACIÓN DEL SOLDADO
Desde la conquista, el Cupo Militar, es decir, el
reclutam
reclutamien
iento
to de soldados para servi
ser virr en el ejército,
ejército, se

310

Un mea culpa, pero hablemos claro

llevó a cabo en los mercados del interior de la Repú-


blica, persiguiendo a los jóvenes que tenían edad de
servicio, y sin preguntarles su voluntad o la situación
de su familia,
fami lia, eran lle
l levado
vadoss al cuartel,
cua rtel, rapados
rapados e ingre-
sados a las filas del Ejército.
Term
ermina
inarr esta deleznable costumbre fue un u n deber
de conciencia
conciencia y justicia para mí. m í.
Le puse el salario mínimo al soldado, lo que re-
 yprese
presentó
de ntó
esa un ingreso
ing
forma
form a reso tresmá
nunca veces
vec
máss estuv
mayor
imos que
tuvimos que ell levar
que tenía,
lazos
la zos
para incorporar soldados.
No tengo la menor idea de si se enteraron ustedes ust edes
de esto, pues estoy seguro que este, no sería tema con
sus interlocutores
interlocutores de la Cúspi
Cúspide
de Milita
Mi litar.
r.
 –PROCESO DE PAZ
 –PROCESO PAZ Y R ECONC
ECONCILI
ILIAACIÓ
CIÓN
N
NACIONAL
trabajéDesde la Comisión
arduamente por laNacional
por Paz Firme
Fir me deyReconciliación
Duradera de la
Nación. Fui quien presidió la delegación que negoció
 y f ir
irmó
mó el Acuerdo de Oslo, in inicié
icié la
lass negociac
negociaciones
iones
Gobierno–– Guerr
Gobierno Guerrililla
la en el 91
91.. Siempre me manejé con
absoluto
absolu to apego a la ley y a los más
má s caros intereses
i ntereses de la
patria.
patri a. Esto ha quedado
quedado claro en todos mis discursosdi scursos y
en los
los documentos
documentos firmados
fi rmados y enviados
enviados a la gue g uerr
rrililla.
la.
¿Por qué me odiaron? ¿Qué hice tan mal, para
que algunos de ustedes planearan matarme y que mi
propio ex ministro de la Defensa, dijera que lo único
que le quedaba
quedaba era “meterme un tiro”? t iro”?
 –PAZ EN
 –PAZ E N EL CAMPO
CA MPO
Cree CEAR, FONAPAZ, COPREDE y a tra-
vés del INTA compramos más de VEINTE MIL

311

La guayaba tiene dueño

HECTÁREAS, es decir CUATROCIENTAS CIN-


CUENTA CABALLERÍAS de tierras para ubicar a
los desplazados y repatriados.
Todos estos fueron programas de justicia y ser-
vicio humanitario, no entiendo por qué ustedes no
se interesaron en ellos, ya no digamos por qué no
presentaron en algún momento alguna iniciativa para
hacer algo por esas poblaciones, tan marginales y ne-
cesitadas.
Nunca voy a entender cómo es posible que no se
hayan dado cuenta de que trabajando por el bienestar
bienestar
de esos guatemaltecos, les estábamos creando condi
ciones
ciones para que pudieran
pudieran vivir
v ivir en paz, consigo mismos
m ismos
 y con sus paisanos
pai sanos y hermanos.
herm anos.
 –APOYO Y DI
 –APOYO DIGNIFICAC
GNIFICACIÓN
IÓN DEL EJÉ
EJÉRRCI-
TO
Como
por él, asumComandante
asumí propiaGeneral
í como propia del Ejército
su defensa Ejército tuve
cuando tdiuve
la cara
ca
que
quera
hacerlo, sin importar el foro o la posición en que eso
me tocara hacerlo.
Respeté
Respe té las jerarquías, grados
g rados y antigüedades;
antigüedades ; me
preocupé por el bienestar de la tropa, los especialistas
 y los oficia
of iciales,
les, fueran
f ueran estos
e stos superiores
super iores o subalternos.
subalt ernos.
Me preocupé, como ningún otro Presidente, en
equipar a la Fuerza Aérea, para dar servicio oportuno
a los elementos en zonas de combate. Me preocupé
por las viudas y huérf
huérfanos
anos del conf
conf licto, estableciendo
estableciendo
un programa para sus viviendas y futuro.
También en beneficio de la misma institución,
comoo un hec
com hecho
ho sin precedentes,
precedentes, cambié
ca mbié el Alto Man-
M an-
do Militar
Mil itar y aplique
aplique medidas
medidas disciplinarias
disciplinar ias a altos
a ltos je-
je-
fes militares, que directa o fortuitamente, se vieron
involucrados en actividades de insubordinación o de

312

Un mea culpa, pero hablemos claro

carácter delictivo
delictivo..
Todo esto lo hice con apego a la ley y con un
profundo respeto
respeto a la dign
d ignidad
idad de los sancionados.
Sigo convencido de que solo profundizando en
estos dos caminos,
cam inos, podremos tener en el país, no solo
un ejé
ejército
rcito apropiado,
apropiado, sino que tambié
tam biénn instit
i nstitucion
uciones
es
fuertes que den sustento a una un a verdadera
verdadera democracia.
Créanme señores, que el compadrazgo y la co-
rrupción que algunos de ustedes fomentaron con
algunos oficiales del Ejército, no es el camino para
fortalece
forta lecerr el sistema de derecho
derecho del país. Ese,
E se, sin lugar
a dudas, sí es el sistema para fortalece
forta lecerr y garantiz
gara ntizar
ar sus
privilegios,
privi legios, pero por favor
favor,, miren
m iren lo que han logrado:
un país con un Estado prácticamente fallido.
 –R ECONOCIMI
 –RECONOC IMIENTO
ENTO DE BELICE COMO
ESTADO INDEPENDIENTE
abrióEste es sin lugar
las puertas a dudas
al respeto de el hecho que más
la comunidad nos
interna-
cional. Era inteligente y digno aceptar con gallardía
una realidad que no podíamos cambiar y que estaba
amparadaa por todos los conv
amparad convenios
enios fir
f irmados
mados por el
el Es-
tado en el último siglo.
sig lo.
 Yoo no entendía por qué, si había decid
 Y decidido
ido pag
pagarar
el precio político de esa medida, la gente pensante,
 y supuesta
supuestamente
mente patr
patriótica,
iótica, no apoyaron la decis
decisión
ión
o simplemente se callaron. Antes quisieron utilizarlo
como una bandera política, ridícula ante los ojos del
mundo, y lo único que lograron fue mediatizar los
beneff icios que pudimos haber
bene h aber obtenido.
obtenido.
 
 –PRIV
 –PRI VATIZA
TIZAR R A UL U LTR
TRANZ
ANZA A
Como el sector privado lo quería, hacer la pri-
vatización a ultranza era malbaratar las empresas del

313

La guayaba tiene dueño

Estado, las que no val valían


ían nada
nad a por la situación caótica
caótica
en que se encontraban.
Sin embargo era regalar su potencial, trasladarlo
ingratamente a monopolios privados, dando la opor-
tunidad de explotar, para su propio beneficio, los re-
cursos más rentabl
rentables
es de la Nación; y sobre todo, dejar
a la población
población desprotegida
desprotegida en sus intereses y limitada
lim itadass
sus posibil
posibilidades
idades de desarrollo
desarrol lo de los ser
ser vicios más ur-
gentes.
 Yoo atr
 Y atribuía
ibuía a la codicia desmedida
desmed ida algun
alg unas
as de esa
esass
presiones; pero con el tiempo entendí que no solo
era eso, sino que también estaban de por medio los
múltiples negocios vinculados a los sectores con los
que ellos se saboreaban; sobre todo, el poder que en
los mismos se escondía. Se trataba del poder que la
liquidez que generan esas empresas otorga tanto para
la influencias bancarias como también para otro tipo
de actividades
Confieso queno tan
no mi santas.
intuición me lo decía, por eso
es que yo predicaba la desmonopolización antes que
la privatización;
privati zación; pero esto era venen
venenoo para algu
a lgunos
nos de
ustedes que iban
iban detrás
detrá s de algo
alg o más
má s que un negocio.
negocio.
Después de veinte años afuera, de observar y fi-
nalmente entender lo que las intenciones de algunos
encubrían, les digo señores, le doy gracias a Dios por
no haber cedido. Quizás hoy yo sería el hombre más
rico deo instr
parte iGuatemala,
Guatemal a, pero
nstrumento
umento no me
de toda esa perdonaría
pe
porrdonaría
porquería haber
quería en que sido
que han
metido a mi país.
 –LUCHA CONTR
CONT R A EL NARNA RCOTR
COTRÁFICO
ÁFICO
La lucha contra el narcotráfico fue frontal. In-
terceptamos cantidades sin precedentes, extraditamos
personas vinculadas, perseguimos el cultivo de la

314

Un mea culpa, pero hablemos claro

amapola, apoyamos el trabajo de las entidades foráneas


que se dedicaban al combate de la droga; le dimos
seguimiento a las denuncias de lavado de dinero, tal
como lo manifesté en la Proclama del 25 de mayo de
1993, porque el contrabando y la manipulación en las
aduanas,
aduana s, seguía
seguí a siendo
siendo uno de los más grandes
gr andes proble-
proble-
mas para
pa ra su control.
Con el tiempo pude entender que esa dificultad
venía de que los beneficiarios del contrabando eran
algunos de aquellos que se presentaban con saco y
corbata a conve
conversa
rsarr conmigo
conmig o y que eso sí les afectaba
a fectaba a
ellos y a los socios que tenían en el gobierno
Cuando yo planteé que lo mejor sería privatizar
el manejo de las aduanas, esto no les gustó a muchos
de ambos bandos. Hoy veo que ya no solo son socios
en el contrabando, sino que en el lavado y hasta en el
narcotráfico,
Mensaj
Mensajee final
f inal

Estas líneas van dirigidas a quienes despiadada-


mente me atacaron y nunca me dejaron defenderme;
que siempre con su poder impidieron que esta verdad
que hoy declaro al mundo se divulgara.
Pero el tiempo llegó de declararla
declara rla y lo hago
h ago como
un deber
deber para con
con mi patria,
patr ia, mi fami
fa milia,
lia, principalmen-
te paramimis
todo mcorazón.
is nietos
n ietos yTambién
sobrinos
sobri nosvan
nietos, a los que
dirigidas misamo con
palabras
a los hermanos
herma nos en Cristo; aunque se que que muchos
muchos han
sido arrastrados por años a juzgarme y condenarme,
pero el momento llego de aclarar las infames acusa-
ciones con la que me han difamado, usando mentiras
o verdades
verdades a medias,
med ias, que para el caso, son más horren-
das que las propias mentiras.

315

La guayaba tiene dueño

Ustedes, mis perseguidores, han hecho creer al


país que mi doloroso exilio ha sido dorado, cuando
este es el más duro de los castigos. Los griegos lo lla-
maron ostracismo; castigocast igo que daban sólo después de
una votación pública a mano alzada, la que se debía
ratiff icar dos meses después, en una votación
rati votación con con-
con-
currencia mínima de 6000 votantes, quienes en este
caso debían escribir
e scribir el nombre del sujeto
sujeto a este castig
castigo,
o,
en un pedazo de barro bar ro o en una concha
concha de ostras.
El exilio no era nunca permanente, eran diez
años como máximo; y además, la persona exiliada no
perdía jamás sus derechos ciudadanos e incluso podía
ser perdonada
perdonada por una un a nueva votación
votación de la asamblea;
a samblea;
cosas que a mi me han ha n negado.
Ustedes señores, votaron, me condenaron y han
hecho todo el daño posible, condicionando la justicia
para desterrarme permanentemente.
Por mis convicciones cristianas,
a ustedes que prueben un poco de lo que no puedo desear
que es un exilio
exi lio
“dorado”,, pues estoy
“dorado” e stoy convencido
convencido de que es mejor pa-
garr el mal
ga ma l con bien. Pero
Pero quiero que sepan que no hay
cosa mas horrible, que saber que uno es visto perma-
nentemente como un paria, y saber que mucha gente
lo ve, lo juzga y lo condena.
Es duro saber que uno no tienen derechos, que
uno no es un ciudadano, que es simplemente un ha-
bitante.
son paraEsmiduro comprob
comprobar
esposa Magdaaryqueparaveinte
mi, laaños de exilio
tercera exi lio
parte
de nuestras
nuestras vidas;
vidas ; para mis
mi s hijos, la mitad de las suyas;
 y parapar a mis
m is nietos
n ietos toda
tod a una
un a vida.
vid a.
Me dirijo
dir ijo a mis perseguidor
persegu idores,es, a los que para jus-
titiff icar sus cuestionables
cuestionables actitudes destruyeron mi hon-
ra, mancillaron mi dignidad,dign idad, desarraig
desarraigaron
aron mi familia
fami lia
de sus raíces,
ra íces, usaron sus medios de comunicación para

316

Un mea culpa, pero hablemos claro

destruirme y me han mantenido preso en un país al


que bendigo porque su conciencia no ha podido ser
envenenada como lo han hecho con muchos de los
sectores de mi propia
propia patria.
patr ia.
Quiero que sepan que los he perdonado desde
hace muchos años y testifico que la única esperanza
 y consuelo que nos ha ma mantenido,
ntenido, ha sido la fe en
Dios, nuestra creencia en las enseñanzas de nuestro
Señorr Jesucristo y la unidad
Seño u nidad y sanidad
san idad que Dios, en su
inmensa misericordia,
misericordia, ha dado a mi fami
fa milia.
lia.
Sin embargo, los invito a reflexionar en que, al
usar el sistema para la garantía de sus particulares in-
tereses, han venido destruyendo la necesaria convi-
vencia
ve ncia armónica
ar mónica que
que toda sociedad necesita
necesita para vivir
v ivir
en paz, han impedido que los valores trascendentes
como la equidad, la justicia y la solidaridad, sean una
realidad
real idad que promuev
promuevaa el equilibrio
equil ibrio social.
Al margen de mi situación personal, piensen que
la gran
gr an mayoría de los guatemaltecos,
guatema ltecos, sese sienten
sienten victi-
mas de un sistema, que ustedes han favorecido y ma-
nipulado perma
permanen
nentemen
temente.
te.
El cambiar a una actitud de respeto y compren-
sión, buscando la aceptación y el perdón de esa socie-
dad, constituye el ún
único
ico fu
fundamento
ndamento sólido
sólido para llegar
llega r
a estadios favorables de reconciliación nacional, pero
para eso es necesario abandonar el egoísmo,
egoísmo, estar dis-
di s-
puestos a dar respuestas
des y aspiracion
a spiraciones congrpueblo
congruentes
es de nuestro uentes
pueblo ycon
cno
on las
llas necesida-s
as revestidas
revestida
de codicia e indiferencia, que han llevado a nuestra
querida patria
patr ia a la
l a situación en que se encuentra.
encuentra.
No arrinconemos mas al pueblo, no lo empuje-
mos a reaccionar violentamente. Recuerden que para
el pueblo
pueblo,, Miam
Mi amii no es unaun a opción.

317
 
ANEXOS

319
 

AN
ANEX
EXO
O UNO

LA PERSECUCIÓN JUDICIAL 1
Acusaciones contra el Expresidente
Serrano Elías
Para efectos de presentar a la opinión pública las
MAL LLAMADAS PRUEBAS, hemos dividido la pre-
sentación en secciones, que permitan analizar las acusa-
ciones con base en la denominación de los delitos que se
imputan.
Para ello, extraerem
extr aeremos
os las
la s supuestas
supuestas pruebas conteni-
conteni-
das en los Expedientes
Ex pedientes de Solicitud
Solicitud de Extradición
Ext radición remiti-
dos por
por Guatemala,
Guatemala , para hacerlas públicas y quitar de una
vez por todas el misterio
m isterio del que los detractores del expre-
sidente Serrano Elías se han valido para desprestigiarlo y
condenarlo ante la opinión pública.

I) ENRIQUEC
EN RIQUECIMI
IMIENTO
ENTO ILÍCITO
ILÍCITO

ACUSACIÓN:
QUE EL EXPRESIDENTE JORGE ANTONIO SERRA-
NO ELÍAS SUSTRAJO GRANDES CANTIDADES DE DI-
NERO DEL ERARIO PÚBLICO, PRUEBA DE ELLO ES

1 Estudio realizado por el licenciado Francisco Perdomo Sandoval sobre la


persecución judicial contra el expresidente de la
l a República de Guatemala, ing-
eniero Jorge Antonio Serrano
Ser rano Elías, presentado
presentado a la
l a prensa y opinión pública en
la ciudad de
d e Panamá, en julio de 2002.

QUE COMPRÓ CIEN FINCAS EN UN DÍA, CUANDO ÉL


SE ENCONTRABA ENDEUDADO ANTES DE ASUMIR LA
PRESIDENCIA.

PRUEBAS:
Estas acusacion
acusaciones
es contra el expresidente Jorge
Jorge Anto-
A nto-
nio Serrano Elías fueron fuerte y sistemáticamente difun-
didas con el avieso fin de desprestigiarlo:
1. PARA APUNTALAR LAS MENTIRAS Y CALUM-
NIAS USAD
USA DAS EN CONTRA DEL EXPRESIDENTE
SERRANO ELÍAS, SE HA REPETIDO PÚBLICA Y
HASTA JUDICIALMENTE LA CAMPAÑA NEGRA,
QUE LA OPOSICIÓN
OPOSICIÓN LE HICIERA
HICIER A AL FINAL
FINA L DE LA
CAMP
CAM PAÑA ELECTORAL
ELECTOR AL DE 1990,
1990, EN EL SENTIDO
DE DEC
ECIR
IR QUE EL INGE
INGENI
NIERO
ERO ER A UN U N HOM-
HOM -

BRE
ESTOENDEUDADO.
ES TOTALMENTE FALSO Y LO DEMUES-
TRA LA DECLARACIÓN DE BIENES Y DEUDAS,
PRESENTADA EL 23 DE ENERO DE 1991, OCHO
DÍAS DESPUÉS DE ASUMIR LA PRESIDEN-
CIA, ANTE LA CONTRALORÍA GENERAL DE
CUENTAS DE LA REPÚBLICA DE GUATEMALA,
SEGÚN LO ESTABLECIDO EN EL DECRETO 203
DEL PRESIDENTE DE LA REPÚBLICA. (LEY DE

  PROBIDAD)
Como puede obser
observar
varse
se en dicha decla
declaración,
ración,
el total de las deudas ascendía a la cantidad de
TRESCIENTOS SESENTA MIL QUETZALES 
(Q. 360.000.00), pero solo en el Banco Agríco-
la Mercantil S.A. y el Banco Industrial S.A. de
Guatemala había QUINIENTOS OCHENTA
 Y CINC
CINCOO MI
MILL QU
QUETZ
ETZA LESS  (Q 585.000.00)
A LE

321

cantidad que cubría de sobra el monto


monto total de las
l as
deudas. De igual manera, la declaración muestra
que el patrimonio
patri monio conjun
conjunto
to del Ingeniero
Ingen iero Serra-
no Elías y su esposa Magda Bianchi de Serrano,
era de casi VEI
VEINTE
NTE MILLONES
MILLON ES DE DE QUETZA-
QUETZA-
L E S  (Q.20,000.000.00).
Estos documentos, que prueban la situación
situ ación eco-
nómica del Ingeniero Serrano antes de asumir la
Presidencia, todo el tiempo han obrado en poder
de los perseguidores de oficio y también forman
parte de las pruebas presentadas y contenidas en
los expedientes de extradición.
ext radición.

2. EN FORMA FALSA Y MALINTENCIONADA, SE


DIJO QUE
QUE EL INGENIERO SERRANO
SERRA NO ELÍAS, SIEN-
DO PRESIDENTE, COMPRÓ CIEN FINCAS EN
UN DÍA,
DÍA, HASTA SE REALIZARON DEMOSTRA-
CIONES PÚBLICAS PIDIENDO QUE SE REPAR-
TIERAN
TIER AN DICHAS FINCAS A LOS CAMPESINOS.

En los expedientes de extradición, con el ánimo


de sorprender al Estado panameño, se presenta-
ron certificaciones de la Dirección de Catastro y
Avalúos de Bienes Inmuebles del Ministerio de
Finanzas, conteniendo el listado de las matrícu-
las
confiscales
más dea nombre del tratando
100 fincas, IngenierodeSerrano
ignorarElías,
que
la adquisición de las mismas fue hecha diez años
antes de que él asumiera
asum iera la Presidencia.
Presidencia.
Cabe hacer notar
notar que las fincas
f incas señaladas
señalad as como las
famosas CIEN, corresponden
corresponden a los locales de dos
centros comerciales, propiedad del expresidente
Serrano Elías, denominados NOVICENTROS,

322

ubicados en la Zona 11 y Zona 5. Esto se com-


prueba con los números de las matrículas co-
rrespondientes, derivadas de las escrituras de
Constitución de los Regímenes de Propiedad
Horizontal, constituidas ante los oficios de los
Notarios
Notar ios Eduardo Mayora Dawe
Dawe y Edmod Mulet
Lessier
Les sier respectivamente,
respect ivamente, en los años 1979 y 1980.
1980.
Ambos profesionales del Derecho en Guatemala,
pueden constatar la veracidad de esta informa-
ción.
ción. (VER ANE
ANEX XO 2)

3. SE DIJO QUE EL EXPRESIDENTE SERRANO


SACÓ FONDOS DEL ERAR
SACÓ ER ARIO
IO NACIONAL.
NACIONAL.
PAR
ARAA CUALQUIER
CUALQUI ER EROGACIÓN
EROGACIÓN EN EL ESTADO,
SE NECESITA QUE EXISTA UNA PARTIDA EN EL
PRESUPUESTO
PRESUPU ESTO GENERAL
GENERA L DE GASTOS
GASTOS DE LA NA-
CIÓN, ESTA DEBE SER PREVIAMENTE APROBA-
DA POR EL CONGRESO DE LA REPÚBLICA,
REPÚ BLICA, Y SU
EROGACIÓN SUSTENTADA CON LOS COMPRO-
BANTES CORRESPONDIENTES.
  NO EXISTE EN LOS EXPEDIENTES PRESENTA-
DOS A PANAM
PANAMÁ,Á, NI EN NINGÚN DOCUMENTO
DOCUMEN TO
DE LOS QUE HAN ESTADO A NUESTRA DISPO-
SICIÓN, PRUEBA ALGUNA RELACIONADA CON
DICHA ACUSACIÓN PÚBLICA, REPETIDA VA-
RIAS VECES POR EL SEÑOR FISCAL.
  Como en este caso no se presenta
presentaron
ron pruebas,
ni siquiera falsas o tergiversadas como en los ca-
sos que expondremos posteriormente, solo se
han dedicado impunemente a calumniar y tra-
tar de impresionar a la opinión pública. De ha-
berse dado alguna sustracción de fondos de esta
o cualquier naturaleza, los que debieron haberlo

323

auto
autori
rizado
zado y sabido son las personas que actuaron
como Min
Ministros
istros de Finanzas
Finan zas durante
dura nte el Gobi
Gobierno
erno
del expresidente Serrano Elías, a saber la Licen-
ciada Raquel Zelaya
Zelaya y el Licenciado Richard Ai-
A i-
tkenhead, que podrán testificar si esto es verdad
o es una mentira más, producto de una injusta
persecución.
II) FRAUDE, PECULADO Y MALVERSA-
CIÓN DE FONDOS

ACUSACIÓN:
QUE EL EXPRESIDENTE JORGE ANTONIO SERRA-
NO ELÍAS RECIBIÓ GRANDES CANTIDADES DE DINE-
RO, BAJO EL RUBRO DE GASTOS CONFIDENCIALES,
FIRMANDO SIMPLES RECIBOS, CON EL ÁNIMO DE DE-
FRAUDAR AL ESTADO.

PRUEBAS:
Esta acusación se basa en las partidas de gastos con-
fidenciales recibidos por la Presidencia de la República,
durante el período que ejerció el Expresidente Jorge An-
tonio Serrano Elías. Es ampliamente conocido que todos
los Presidentes
Presidentes en Guatemala, al
a l igual
igu al que en otros países
del mundo, han tenido partidas de gastos confidenciales
o discrecionales, esto lo regula la
l a Ley y sus montos anual-
mente son aprobados por el Congreso de la República
cuando se aprueba el Presupuesto anual.
El artículo
ar tículo 35 de la Ley Orgánica
Orgá nica de Presupuesto
Presupuesto vi-
gente en dicho período, literalmente establece que:
“LOS GASTOS
GASTOS DE NA
NATU
TURA
RALEZA
LEZA CONFIDEN-
CONFI DEN-
CIAL SE COMPRUEBAN ÚNICAMENTE CON EL

324

RECIBO QUE EXTIENDA EL FUNCIONARIO


SUPERIOR DE LA DEPENDENCIA A LA QUE SE
ASIGNE EL GASTO”
GASTO”..

1. LA FIRMA DE LOS SIMPLES RECIBOS A QUE SE


REF IERE
REFIER E EL SEÑOR FISCAL, POR PARTE
PARTE DEL EX-
PRESIDENTE SERRANO ELÍAS, NO SON OTRA
COSA QUE EL CUMPLIMIE
CUMPLI MIENTO
NTO A LO QUE ESTA-
ESTA-
BLECE LA LEY.
  LOS 32 RECIBOS FIRM
FIRMADOS
ADOS SE ENCUENTR
ENCUENTRANAN
CONTENIDOS EN SU TOTALIDAD EN LOS EX-
PEDIENTES DE EXTRADICIÓN.
A ningún ciudadano se le puede acusar de deli-
to alguno por dar cumplimiento a los procedi-
mientos de la ley; también cabe señalar que las
erogaciones se hicieron a través de sus respectivas
Órdenes de Compra y Pago, acompañadas de los
Acuerdos Gubernativos y estableciéndose clara-
mente la partida presupuestaria correspondiente.
Las erogaciones cumplieron con los requisitos de
ley incluyendo el nombre y la firma del funcio-
nario del Ministerio de Finanzas que controlaba
las asignaciones
a signaciones presupu
presupuestar
estarias,
ias, el número de re-
gistro y la firma del Funcionario encargado de la
Dirección de Contabilidad del Estado, bajo los
controles del
controles del Ministerio
Min isterio de Finanzas
Finanz as y Contralo-
ría General de la Nación.

2. LA PROPIA SEÑORA JUEZ LETICIA LAM, RES-


PONSABLE DE LA SOLICITU
SOLICITUDD DE EXTR
EXTRADICIÓN,
ADICIÓN,
A SOLICITUD DEL MISMO FISCAL LICENCIADO
MARIO LEAL, EN RESOLUCIÓN DEL 2 DE SEP-
TIEMBRE DE 1997 CLARAMENTE MANIFIESTA,

325

AL REFERIRSE A LOS GASTOS CONFIDENCIA-


LES RECIBIDOS POR EL EXPRESIDENTE SE-
R R A NO ELÍAS, LO
LO SIG
SIGUIENTE:
UIENTE:
 
“EL IMPUTADO NO LAS RECIBIÓ EN DEPÓ-
SITO, EN ADMINISTRACIÓN O COMISIÓN,
COMO TAM
TAMPOCO
POCO TENÍA
TEN ÍA LA OBLIGACIÓN DE
DEVOLVER DICHAS SUMAS DE DINERO, Y
LOS MEDIOS PROBATORIOS NO PERMITEN
TENER UNA VISIÓN CLARA SOBRE LA CO-
MISIÓN DE HECHOS ILÍCITOS POR LOS QUE
LA JUZGADORA ESTIMA QUE NO SE DAN
LOS PRESUPUESTOS PARA ACCEDER A DIC-
TAR LA GESTIÓN DE EXTR
EXT R ADICIÓN.
ADICIÓN.”

 
ILÓGICAMENTE,, LA MISMA JUEZ,
ILÓGICAMENTE JU EZ, A SOLICITUD
SOLICITUD
DEL MISMO FISCAL Y POR EL MISMO HECHO,
IGNORANDO SU PROPIO CRITERIO, HOY EMI-
TE UNA NUEVA ORDEN DE CAPTURA, A TO-
DAS LUCES ILEGAL. 

Con la resolución firmada y sellada por la misma


 Juez Licenciada Leticia
Let icia Lam, en 1997
1997,, queda
queda pro-
bado que ella misma considera que NO EXIS-
TEN PRUEBAS para afirmar que el expresi-
dente Serrano Elías
El ías haya cometido delito porpor esta
razón. Sin embargo, después de esta declaración,
que consta en los expedientes correspondientes y
en forma increíble y basada en las mismas acusa-
ciones,
cion es, se ha gi
girado
rado la inexplicabl
i nexplicablee orden de cap-
turaa del cuatro de junio del
tur del 2002.

3. CONSIDERACIONES SOBRE LOS GASTOS

326

CONFIDENCIALES
  ES BIEN SABI
SABIDO
DO QUE LOS DISCUTIDOS GASTOS
CONFIDENCIALES, HOY LLAMADOS DISCRE-
CIONALES HAN EXISTIDO SIEMPRE, ASIGNA-
DOS A LA PRESIDENCIA DE LA REPÚBLICA Y A
OTROS FUNCIONARIOS CUYAS RESPONSABI-
LIDADES LO REQUIEREN.
LIDADES R EQUIEREN.
  ESTOS GASTOS SON FUN FUNDDAM
AMENTALMENTE
ENTALMENTE
DESTINADOS A CUBRIR PAGOS Y EROGACIO-
NESS NECE
NE N ECESA
SARI
RIAS
AS QUE NO
NO FUERON
FUERON CO
CONTEM-
NTEM-
PLADOS EN EL PRESUPUESTO ORDINARIO,
O BIEN QUE ES NECESARIO O URGENTE INI-
CIAR SU EJECUCIÓN, PARA SER INCLUIDOS
EN PRESUPUESTOS POSTERIORES, TAL FUE
EL CASO DEL FONDO NACIONAL PARA LA PAZ,
FONAPAZ.. ADICIONALMENTE SE IMPULSÓ
FONAPAZ
PROYECTOS COMO LA REMODELACIÓN DEL
PARQUE ZOOLÓGICO LA AURORA, EL DISEÑO
 Y PLA
PLANIF
NIFICACIÓN
ICACIÓN DEL MUSEO DEL MU
MUNDO
NDO
MAYA.
DICHOS FONDOS SE UTILIZAN TAMBIÉN PARA
CUMPLIR UNA SERIE DE RESPONSABILIDA-
DES QUE POR SU INVESTIDURA REQUIERE EL
PRESIDENTE, EN EL CASO DEL EXPRESIDEN-
TE SERRANO ELÍAS, FUERON DESDE IMPUL-
SAR EL PROGRAMA DE HOGARES COMUNI-
TARIOS, SUFRAGAR GASTOS ESPECIALES DEL
PROYECTO DE PAZ, APOYAR A LA COMISIÓN
ESPECIAL PARA EL ASENTAMIENTO DE REFU-
GIADOS C.E.A.R, AUXILIAR A HOSPITALES DE
CARIDAD, TAL ES EL CASO DE ANTIGUA GUA-
TEMALA Y OTROS CENTROS DE SALUD DEL
INTERIOR DEL PAÍS, APOYAR CASAS Y OBRAS

327

DE REHABILITACIÓN, PATRONATOS, ASOCIA-


CIONES
CIONES BENÉFI
BENÉFICAS
CAS O GREMIALES, QUE
QU E CONS
CONS--
TANTEMENTE
TANTEM ENTE REQUI
REQUIERE
EREN
N DE
DE APOY
APOYO PARA
EL DESARROLLO DE ACTIVIDADES ESPECIA-
LES, APOYAR A GUATEMALTECOS QUE SALÍAN
AL EXTERIOR EN REPRESENTACIONES CUL-
TURALES, ARTÍSTICAS O DEPORTIVAS O BIEN
AUX
UXILIA
ILIAR
R A FU
FUNCION
NCIONAR ARIOS
IOS O PERSONAS QUE
PERMANENTEMENTE REQUERÍAN AYUDA
HUMAN
HUM ANITARI
ITARIA
A PAR
PARA A RE
RESOLSOLVE
VERR SITUA
SITUACIONES
CIONES
PENOSAS O DELICADAS Y OTRAS COSTOSAS DE
SALUD, ASÍ COMO
COMO APUNTALAR ALGUNOS PRO- PRO -
 YEC
 Y ECTO
TOSS URGE
U RGENN T E S RE
R E L ACI
ACION
ONA
A DO
DOSS CON
CO N LA
LA
SEGURIDAD NACIONAL, NO PREVISTOS EN EL
PRESUPUESTO, PROVEER AUXILIOS INMEDIA-
TOS EN LOS CASOS DE CATÁSTROFES QUE SE
DIERON EN EL PERÍODO, TANTO EN EL PAÍS
COMO FUERA DE EL Y ASÍ SE PODRÍA CONTI-
NUAR MENCIONANDO MUCHAS OTRAS AC-
TIVIDADES Y ACCIONES QUE FUERON APOYA-
DAS CON FONDOS DE LOS CONFIDENCIALES
DURANTE EL PERÍODO DEL EXPRESIDENTE
SERRANO ELÍAS.

III) USUR
USURPPACIÓN Y ABUSO DE AUTORIDAD
AUTOR IDAD

ACUSACIÓN:
QUE EL EXPRESIDENTE JORGE ANTONIO SERRA-
NO ELÍAS OCULTO SUS PRETENSIONES DE APODE-
RARSE DE UN TERRENO DE OCHO MIL TRESCIEN-
TOS METROS CUADRADOS EN LA RIBERA DE RÍO
DULCE, DEPARTAMENTO DE IZABAL, A TRESCIEN-
TOS KILÓMETROS DE LA CIUDAD DE GUATEMALA Y

328

ABUSANDO DE SU INVESTIDURA, MANDÓ EN FORMA


CLANDESTINA A CONSTRUIR VIVIENDAS SIN CONO-
CIMIENTO NI AUTORIZACIÓN DE LAS AUTORIDADES
CORRESPONDIENTES. 
PRUEBAS:
En los mismos expedientes de extradición, figuran
las PRUEBAS que demuestran la FALSEDAD DE LA
ACUSACIÓN:

1. NO PUDO HABER ÁNIMO DE APROPIARSE IN-


DEBIDAMENTE DEL TERRENO EN MENCIÓN,
PUESS ESTÁ
PUE ESTÁ CLAR
CLA RO EN LAS SOLICITUDES QUE SE
TRATA
TRAT A DE UN SIMPLE ARRENDAMIENTO.
ARR ENDAMIENTO.

Miles de guatemaltecos solicitan a la Oficina En-


cargada del Control de Áreas de Reserva de la Nación
(OCREN) terrenos en arrendamiento y efectúan cons-
trucciones, sabiendo que la Ley determina que todas las
mejoras
mejo ras incorporadas al
a l vencer
vencer el contrato quedan en be-
be -
neficio
nef icio del Estado.
Estado.

Es malintencionada y calumniosa la afirmación del


Fiscal, al querer demostrar que la solicitud de arrenda-
miento, por venir del Presidente de la República, suponía
el ánimo
áni mo de apropiarse
apropiarse del terreno ilícitamente
il ícitamente..
ES TOTALMENTE FALSO QUE LA OCUPACIÓN
HAYA
HAY A SIDO CLANDESTINA,
CLA NDESTINA, HECHO QUE SE PUEDE
PU EDE
DEMOSTRAR CON TODOS LAS GESTIONES SEGUI-
DAS EN LAS DIFERENTES INSTITUCIONES DEL ES-
TADO, QUE TUVIERON QUE VER CON EL TRÁMI-
TE DEL EXPEDIENTE Y QUE CONOCIERON DE LA

329

SOLICITUD DE ARRENDAMIENTO.

Es mal intencionada y absurda la acusación de que


en forma clandestina se llevaron a cabo trabajos de cons-
trucción, pues como obra en el mismo expediente y se
demuestra en los documentos que figuran en él, las insti-
tuciones
tucion es respectivas tuvieron conocim
conocimien
iento
to de las mejo
mejoras
ras
incorporadas y sus autoridades ordenaron y practicaron
las inspecciones respectivas y practicaron dos avalúos por
parte de la DIRECCIÓN DE CATASTRO Y VALUA-
CIÓN DE BIENES INMUEBLES (DICABI), del Mi-
nisterio de Finanzas, documento que consta en el mismo
expediente.

LOS DICTÁMENES QUE EL MINISTERIO PÚBLI-


CO NO TOMÓ EN CUENTA

En repetidas oportunidades, diferentes instituciones


hicieron ver, tanto a la Fiscalía como a los Jueces encar-
gados, que NO EXISTÍAN PRUEBAS que
PRUEBAS que sustenta-
ran las acusaciones que se le hacían al expresidente Jorge
Antonio Serrano Elías, e incluso el propio Ministerio de
Relaciones
Relaci ones Exterior
Exter iores
es de Guatemala
Guatema la les hizo
h izo ver que, con
con
la evidencia presentada, no se probaban los delitos impu-
tados y que el Estado Panameño no otorgaría la extradi-
ción solicitada. Así mismo, sugirió al fiscal que se bus-
caran nuevos elementos que efectivamente probaran los
hechos que se le imputaban. Nos permitimos reproducir
algunas
alg unas de las
l as opiniones que
que fueron emitidas por diferen-
di feren-
tes asesores e instituciones, que apuntalan la afirmación
de que esta ha sido una persecución de carácter político
más que legal.

330

PRIM
PRIMER
ERA
A OPINIÓN
OPINIÓN DE LA DIR
DIRECCI
ECCIÓN
ÓN DE ASUN-
TOS JURÍDICOS Y TRATADOS DEL MINISTERIO DE
RELAC
RE LACIONES
IONES EXTERIORES
EXTER IORES DE GUA
GUATEMA
TEMALA
LA

Oficio
Of icio de la Dirección
Dirección de Asuntos Jurídicos y Trata-
Trata-
dos del Ministerio de Relaciones Exteriores firmado por
el Licenciado Guillermo Sáenz de Tejada, Director, y di-
rigido al señor Ministro, Dr. Arturo Fajardo Maldonado,
en relación al Oficio sin número de fecha 4 de enero de
1994, enviado por el entonces Presidente del Organismo
 Judicial,l, Licenciado Juan José Rodil
 Judicia Rod il Peralta.
Pera lta.

NUMERAL 2) DE DICHO DOCUMENTO SE


ESTABLECE TEXTUALMENTE:

“...
......
......
... de la demás
demá s documentación
documentac ión no se des-
de s-
prenden los hechos que tipifican los delitos por lo
que está siendo procesado, principalmente lo que
se refiere a la malversación y el peculado.”

ASÍ MISMO, EN EL LITERAL E) se manifiesta


textualmente:
“Por lo anteriormente expuesto se considera
que la documentación recibida por esta Cancille-
ría, debe ser devuelta a fin de que la misma sea
ampliada y que se llenen los requisitos mínimos
a que hace referencia el artículo 5º de la Conven-
ción sobre Extradición de Montevideo, ya que de
presentar la solicitud de extradición únicamen-
te amparada con la certificación extendida por el
 Juzgado Cuar
Cuarto
to de Pr
Primera
imera Instancia
Insta ncia Pena
Penall de Ins
Ins--
trucción, existe la posibilidad de un rechazo por
parte del Gobierno panameño. Sobre el particular

331

cabe hacer la observación que de conform


conformidad
idad con
el Artículo
Ar tículo 12 de la indicada
i ndicada Convención,
Convención, “negada
“negada
la extradición de un individu
indiv iduo,
o, no podrá solicitarse
de nuevo por el mismo hecho imputado”
i mputado”
LA CONTUNDENCIA DE LA OPINIÓN ANTERIOR,

DEMUESTRA
PARA ACUSARCLARAMENTE QUE NO
AL EXPRESIDENTE HABÍA PRUEBAS
SERRANO ELÍAS DE
LOS DELITOS QUE SE LE IMPUTABAN.

SEGUN DA OPINIÓN DE LA DIR


SEGUND DIRECCIÓN
ECCIÓN DE
DE ASUN-
TOS JURÍDICOS Y TRATADOS DEL MINISTERIO DE
R ELAC
ELACIONES
IONES EXTERIORES
EXTER IORES DE GUA
GUATEMA
TEMALA
LA

MEMO
ME MOR
R AN
ANDO
DO NÚMER
NÚM ERO
O 366 de fecha
fecha 6 de no-
viembre de 1996,Jurídicos
ción de Asuntos firmada por los Asesores
y Tratados de la Direc-
del Ministerio de
Relaciones Exteriores de Guatemala, Licenciado Oscar
H. Vásquez Oliva, la Licenciada Ángela Elizabeth Gar-
cía Urrutia y el Director Licenciado Guillermo Sáenz de
Tejada.
Este Memorando contiene un análisis Jurídico am-
plio y fundamental,
f undamental, ple
plenamente
namente basado en el Derecho In-
ternacional y apegado a las normas jurídicas vigentes en

Guatemala,
mos en este razón por la su
documento queCONCLUSIÓN,
lo adjuntamos, ylarelaciona-
que lite-
ralmente establece:

CONCLUSIÓN:
“Por lo antes expuesto se estima que, para
que exista la posibilidad de obtener la extradición
del expresidente Jorge Antonio Serrano Elías, es
necesario que el Ministerio Público, así como el

332

Tribunal de conocimiento, recaben las pruebas in-


dispensables con relación a los delitos que la moti-
van, expresando con la debida precisión cada uno
de los ilícitos penales que se le atribuyen, y que se
concreten y se aporten
concreten aporten pruebas de los artif
arti f icios uti-
lizados para defraudar al
a l Estado de Guatemala.
 De conformidad con el análisis
anál isis efectuado,
efectuado, esta
Dirección considera que el expediente
exped iente recibido por
esta Cancillería, debe ser devuelto a fin de que el
mismo sea modif icad
icadoo a efecto de que la solicitud
de extradición tenga la
l a expectativa que sea resuelta
en forma favorable.

Se considera así mismo conveniente que se


haga
de la del conocimiento
República del de
la posición Señor
estaFiscal Generala
Cancillería,
fin de que como parte acusadora, coopere con el
tribunall juzgador en obtener pruebas más conclu-
tribuna
yentes de los hechos ilícitos de que se le acusa al
sindicado.”

Queda claro que la Fiscalía de Guatemala, para darle


un carácter legal a esta injusta y descalificada
descalif icada persecución,
persecución,
escogió los delitos
usar las mismas y después
supuestas salieron
pruebas paraa buscar pruebas,
tratar de oa
encajarlas
en cada uno de los delitos
delitos que se les
les ocurría,
ocur ría, confir
conf irmación
mación
de ello es lo manifestado en el último párrafo de la pági-
na 4 de Memorando 366 de la Cancillería de Guatemala,
cuando en el cuerpo del mismo se manifiesta “se esta-
blece que la documentación que se aporta como
prueba de indicios razonables de culpabilidad por
la comisión de los delitos de USURPACIÓN DE

333

ATR
TRIBUCIO
IBUCIONES
NES Y FRA
FR AUDE, es la
l a misma que se
acompañó en la primera solicitud de extradición
presentada a la República de Panamá, apoyando
la comisión de los delitos de USURPACIÓN DE
FUNCIONES Y PECUL
PECULADO”
ADO”

Todavía
al Estado tiene la de
panameño desfachatez el fiscal
no cooperar, Leal ladeobliga-
cuando acusar
ción del Estado requerido es de juzgar la intencionalidad
de las peticio
peticiones
nes del Estado requirente y en tres ocasion
ocasiones
es
consecutivas Panamá les ha negado las peticiones por su
profundo sentido político y por no ajustarse ni en la for-
ma ni en el fondo a lo establecido en la convención de
Montevideo.
Una vez más, con gran alarde publicitario, el fiscal
Leal y la juezdeLam
vo episodio se compleme
complementan
persecución, ntan paraenrealiz
y basados realaslizar
ar un nue-
mismas su-
puestas pruebas, ordenar la captura por medio de la In-
terpol, a sabiendas que eso no es posible, pues ya media la
protección
prote cción que
que un tratado
t ratado internacional
inter nacional otorgó a trav tr avés
és de
la acción soberana y justa del Estado panameño.

R ESPUESTA DEFINITIV
DEFINIT IVA
A DE PANAM
PANAMÁÁ A LAS SO-
LICITUDES DE EXTRADICIÓN DEL EXPRESIDENTE

 JORGE ANTONIO
ANTON IO SERR
SER R ANO ELÍ
E LÍAS
AS
La RESOLUCIÓN EJECUTIVA No. 7 del 18 de
febrero de 1998, por la cual EL PRESIDENTE DE LA
REPÚBLICA DE PANAMÁ, DOCTOR ERNESTO
PÉREZ BALLADARES Y EL CANCILLER DOC-
TOR RICARDO ALBERTO ARIAS, en uso de sus
facultades constitucionales y legales, resuelven en forma
definitiva las solicitudes de extradición planteadas contra

334

expresidente Jorge
el expresidente Jorge Antonio
A ntonio Serrano Elías.
El ías.
Esta Resolución hace una relación a los hechos y as-
pectos jurídicos que se ven relacionados con el análisis y
profunda consideración que el Estado panameño dio a la
solicitud de Guatemala, con apego a lo establecido en la
Convención de Montevideo de 26 de diciembre de 1933
 y resolvió:
“PRIMERO: Negar, como en efecto niega la
solicitud forma
formall de extradición del ciudadano gua-
temalteco JOR
JORGE ANTONIO SERRANO
SERR ANO ELÍAS,
ELÍ AS,
presentada por el Gobierno de la República de
Guatemala, para ser procesado
procesado por la supuesta co-
misión de los delitos
del itos de USURP
USUR PACIÓN, FRAUDE
Y ABUSO DE AUTORIDAD, por cuanto tal soli-
citud No se apegaennilaenConvención
a lo establecido la forma nin i en
de su contenido
Montevideo
de 26 de diciembre de 1933 y en la legislación pa-
nameña vigente; No es cónsona
cónsona con la práctica y la
doctrina latinoamericana en la materia; No respe-
ta la calificación soberana de la situación histórica
que originó
origi nó la concesión del asilo
asi lo político, derecho
que le otorgan las convenciones vigentes en la ma-
teria al Estado Asilante de manera exclusiva; No
observa
estados dela respetar
correspondiente
respe obligación
tar ese derecho de calif de terceros
cali f icaci
icación
ón y de
no convertirlo en un punto de tensión internacio-
nal, por cuanto tal acto se considera
considera pacífico
pacíf ico,, apo-
lítico y exclusivamente humanitario.”

Estamos seguros de que ni el fiscal Leal ni la juez


Lam han leído la resolución antes transcrita, pues de ha-
berlo hecho, se darían cuenta del ridículo en que están

335

poniendo al estado guatemalteco, exponiéndolo a que


nuevamente se le recomiende que respete la convención
de Montevideo, de la cual Guatemala es signataria desde
1933, que se indaguen y estudien sobre la práctica y la
doctrina
doctri na latinoamericana
lati noamericana en materia de asilo,
a silo, que
que respeten
la soberanía de Panamá en el juzgamiento de esta situa-
ción, pues desde el momento en que Guatemala invocó
esta Convención para lograr la extradición, se obliga a
respetarla en su totalidad,
tota lidad, incl
i ncluyen
uyendo
do el fallo
fal lo soberano
soberano del
Estado asilante,
asi lante, aunque
aunque este no fuera de su agrado.
ag rado.
Las actitudes de los funcionarios antes aludidos, en
la repetición de su necedad, pone de manifiesto, o una
ignorancia total sobre los tratados, o una mala intención
al continuar utiliz
uti lizando
ando su investidura
investidura en una persecució
persecuciónn
incalificable e injusta.
Por otra, parte y tal como lo señala la Resolución de
Panamá, esta actitud viola también la convención, pues
con esta insistencia absurda podría llegar a crearse un
punto de tensión entre ambos Estados.
E stados.
Como que si esto fuera poco, es menester recordar a
los citados funcionarios, que en la doctrina
doctri na constitucional
guatemalteca, desde 1945, se ha prohibido la persecución
por razones políticas, así que con su conducta han violado
la Constitución Política de la República.

 EN CONCLUSIÓN:
CONCLUSIÓN:
NO EXISTEN PRUEBAS LEGALES QUE JUSTIFI-
QUEN ESTA PERSECUCIÓ
PERSECUCIÓN;
N; SIN EMBARGO,
EM BARGO, ES OB-
OB -
VIO QUE SÍ EXISTEN
EX ISTEN MOTI
MOTIVVOS DE OTRA ÍNDOLE
Í NDOLE
QUE
QU E LA
L A FOMENTAN.
FOMENTAN.

336

ANEXO DOS
LAS PROPIEDADES
PROPIEDADES QUE FIGUR
FIGURAN
AN EN ESTE
EST E
VERGO
VE RGONSO
NSOZO
ZO ARTÌCULOS, PERTENECEN
PERTENECE N A
LOS CENTROS
CEN TROS COME
COMERCRCIA
IALES
LES NO
NOVICENTROS,
VICENTROS,
UBICADOS
UBICA DOS EN LA ZONA 11 Y ZONA 5 DE LA CIUDAD
CAPITAL, DESARRO
DESAR ROLLA
LLADOS
DOS POR
El Ingenier
I ngeniero
o Jorge
Jorge Serrano Elías,
El ías,
EN LOS AÑOS 1978 Y 1979.

DIEZ AÑOS ANTES DE


SER PRESIDENTE DE LA REPÙBLICA

 
- La Hora,
Hora, Lunes 14 de junio de 1993 Pág. 3

Las propiedades
propiedades del ex Presidente Jorge
Jorge Serrano
Ser rano Elías
El ías
sólo en la capital suman casi 40 millones de quetzales se-
gún el detalle que dio a conocer esta mañana el Procura-
dor General de la Nación y Jefe del Ministerio Público,
Edgarr Tuna
Edga Tuna Val
Valladare
ladares.
s.
El informe es producto de investigaciones llevadas
a cabo por el Ministerio sobre propiedades adquiridas en
esta capital por el ex Presidente como producto de su en-
riquecimiento
Advirtió
Advir il ícito
ilícito
tió que estaysemana
peculado
el excesivo,
excesivo,io,
puntual
puntualizó.
Mi nisterio
Minister , dará aizó.
cono-
cer resultados de mas investigaciones sobre otras propie-
dades de Serrano Elías.

El detalle
detal le del
del Informe es el siguiente:

338

 
339

 
Nota, como puede verse , todos son locales de los centros

comerciales, escriturados en los años 1979 y 1980.


340

 
Guatemala, 15 de diciembre de 1979.

Nota: Según el “bril


“ brillante”
lante” o “venal”
“venal” procurador
procur ador Tuna
Tuna Valla-
dares, por arte de magia, yo disponía de fondos de la Presidencia,
desde diez años antes, para comprar propiedades como producto de
mi enriquecimiento
en riquecimiento ilícito.
Esto que parece trivial, fue una de las acusaciones falsas, que
mas han afectado mi reputación y que la gente mas recuerda y repi-
ten. Lo mas triste, es que nunca ningún medio de los que dio des-
pliegue sensacionalista a esta mentira, me permitió ningún tipo de
aclaración. Será esto el respeto a la ley y a la libertad de expresión.

341

 
ANEXO TRES

CARTA DE DIONISIO GUTIERREZ A


R AM
AMIR
IRO
O DE LEON CARPIO

 
Nota Curiosa, la carta fue fechada, un día antes de que Ramiro
de León, fuera designado por el Congreso. Que buen titiritero.

343

 
ANEXO
AN EXO CUATRO
CUATRO

HISTORICA
HISTOR ICA CART
CA RTA
A DEL CACIF
CACIF,, MA
M AYO 1993

344

 
345

 
ANEXO
AN EXO CINCO
CINCO

Esta primea página de Prensa Libre,


tienee dos noticias
tien noticias signif
sign ificativ
icativas:
as:

UNIV
UN IVISI
ISIÓN
ÓN PEDIR
PEDIRÁÁ EXCUSAS
EXCUSAS AL
PRESIDENTE
PRESID ENTE SERRANO
SERR ANO
Este sin lugar a dudas,
duda s, fue uno de los golpes
golpes mas duros
que me dieron, montaron una trama, inventaron hechos
que nunca sucedieron y me involucraron en un escándalo
que no existió.
Sorprendieron
Sorprendier on a UNIVISIO
UNI VISION, N, quien al darse
dar se cuenta
del complot, con gallardía pidió disculpas e hicieron las
aclaraciones pertinentes, pero el daño estaba hecho.
Se había mediatizado el gran triunfo de ese día en la
asamblea de Nacio
Naciones
nes Unidas.
Las instituciones democráticas del país, que habían
dado ante el mundo, un ejemplo de unión y testimoniado
su voluntad por obtener la paz, habían sido burlados, por
los intereses de una pequeñísima elite, que sin empacho,
planeo este golpe contra
contra mi moral, pero que fue también
t ambién
un golpe directo contra las mas justas aspiraciones de un
pueblo
pue blo por
por la paz y el futuro civil
c ivilizado
izado de sus hijos. A esto
se le conoce como La Sopa de Cebolla.

R ETORNO DE
DE REFUGIADOS
REF UGIADOS DE LOS CAM-
PAMENTOS DE MEXICO

Irónicamente, en este mismo


Irónicamente, m ismo periódico se report
reporta,
a, el
retorno de los refugiados que estaban en los campamento
de Mexico,
Mexico, este es el grupo
g rupo que daría
dar ía la vuel
v uelta
ta por la costa
346

 
sur, llegando a la capital y después hasta Coban.
La triste
tr iste real
realidad
idad de nuestra
nuestra patria, mientras unos
luchábamos por construir la paz con hechos, otros
trabajaban para minarla con acciones, dolosas y des-
leales.
Nuestro
 pági na,
 página, en la drama está sintetizado
que queda marcado el en esta primea
principio
pri ncipio de la
conspiración, tal como lo relatan varios de los analis-
tas de estas efemérides.

 
ANEXO SEIS

POSDA
POSDATA: LO INCREÍ
I NCREÍBLE
BLE

LO INCREÍBLE; ESTO YA ES EL COLMO

 Ya tenía este


 Ya e ste libro completamente revisado,
revi sado, y la Edi-
torial en proceso de diagramación, cuando, conversando
con un abogado y amigo am igo guatemalteco
g uatemalteco sobre loslos abusos y
manipulaciones que se dan dentro del Organismo Judi-
cial, me cuenta que Juan Juan Luis
Lu is Bosch y Dionisio Gutiérrez
iniciaron un proceso para despojar de sus acciones a Juan
Arturo, su tío.
Me quedé intrigado y no me aguanté. Llamé direc-
tamente a Juan Guillermo Gutiérrez, quien me confirmó
que efectivamente, los “Boys”, como ellos llaman a sus
primos, iniciaron un procedimiento administrativo, para
despojarlos de sus acciones.
 Yoo no lo podía creer. Le pedí que me expl
 Y explicar
icara,
a, lo
interrogué y lo interrogué, le pregunté y le repregunté,
hasta que él me dijo: “Mira, Jorge, mejor te voy a mandar
la información legal de todo este asunto”.
Pensé para mis
m is adentros, que si una acción
acc ión de despojo,
en la que el grupo mayoritario se apropia de las acciones
de un grupo minoritario, se llegara a dar, se terminaría
con el sistema legal
lega l corporativo
corporat ivo del
del país. De hecho, pensé,
se acabarían las sociedades de todo tipo, sean anónimas,
de responsabilidad limitada o de cualquier otra índole;
habría que cerrar lasla s bolsas de valores. Sería
Sería un
u n cataclismo
empresarial.
A los famosos
fa mosos “Boys” los creo capaces de mucho, pero
que en beneficio de sus muy particulares intereses fueran

 
capaces de tal acción, me parecía que eso ya era mucho.
Sobre todo a sabiendas del daño irreparable que se
haría al sistema empresarial, a la inversión privada, fuera
nacional o internacional, y en general a la economía del
país. En realidad, eso me parecía algo alg o exagerado.
Pero, ¡oh sorpresa!, recibo la información y cierta-
mente encuentro que sí son capaces de eso. Veamos Veamos:: el día
3 de mayo de 2011
2011, notifican
notif ican alegremen
aleg remente te al Tío Arturo,
Ar turo,
que ya no es socio de las empresas del Grupo Avícola Vi-
llalobos, basándose en resoluciones unilaterales de los so-
brinos, que lo habían decidido
decidido en su calidad
cal idad de accionista
accionistass
mayoritarios.
Este Grupo Avícola está compuesto por 22 empresas,
por lo que el Tío Arturo se ve obligado a presentar 22
demandas sumarias oponiéndose a la arbitraria exclusión
como socio. Tales demandas fueron interpuestas en di-
ferentes tribunales; lo curioso es que 14 de ellas fueron
rechazadas por resoluciones básicamente idénticas. Los
 jueces, simplemente invocaron los mismos motivos y usa-
ron la misma redacción y hasta en algunos casos no se
cuidaron ni de cambiar
ca mbiar los tipos de letra.
letra.
Ocho juec
jueces
es sí admitiero
adm itieronn para su trámite
trá mite las deman-
dema n-
das, dando
d ando lugar a que el Tío ArturoAr turo se pudiera defender
defender..
Hagoo ver que lo que
Hag que se está
est á peleando es si el Tío
T ío se puede
o no defender, no es ni siquiera
siqu iera el fondo del asunto.
asu nto.
Esto, por supuesto no queda allí, el Tío, para que lo
dejen defenderse, tuvo que presentar docenas de amparos,
revocatorias y apelaciones ante las Salas de Apelaciones
 y ante la propia Cort
Cortee Suprema de Justicia
Justicia,, inst
instancia
anciass en
las que tambié
ta mbiénn se le ratificó
ratif icó su condició
condiciónn de paria,
par ia, y por
ende se le negó el derecho a defenderse.
Tuvo entonces que ir a la Corte de Constitucionali-
dad,, la que según
dad segú n resolución de fecha
fecha 21 de marzo
mar zo de 2012
ordena que se admitan las demandas y que se le dé dere-
cho a defenderse,
defenderse, y esto solo después de un planteamiento
planteam iento
realizado en vista pública.

349

 
Miren ustedes la nefastas
nefast as consecuencias
consecuencias de este asun-
a sun-
to, la empresa afectada de Arturo Gutiérrez es Lisa S.A.,
que es subsidiari
subsidiariaa de una empresa canadiense llamada
llam ada Xela
Enterprises Ltd., hoy ya hay una demanda en Canadá,
pidiendo una indemnización por cuatrocientos millones
de dólares por se
prácticamente el les
lvalor
es están
de confiscando
conf
sus acciones
iscando eny dividendos,
Guatemala.
Guatemal a. que
No tengo la menor idea a dónde va ir a parar todo
esto; sin embargo, de lo que sí estoy seguro es de que este
abuso deja
deja muy mal parado
par ado al país.
Dejémonos de ilusiones, ¿quién va a venir a invertir
ante tal inseguridad?
No pierdo la esperanza de que empresarios no invo-
lucrados en el secuestro del Estado, fina f inalmente
lmente reaccionen
reaccionen
 y se unan
una n a la lucha que todos los guatemalteco
guatem altecoss debemos
dar para evitar
ev itar que estas
esta s acciones
acciones de prepotencia
prepotencia nos llev
l leven
en
a una confrontación social, seguros de que estos señores
la verán desde Miami, tal como se los dijo recientemente
con claridad meridiana el presidente del Banco Mundial,
Robert Zoellick, hecho que incluso la misma prensa del
país lo destacó así:

 
ANEXO SIETE

PROCLAMA DEL 25 DE MAYO DE 1993


DEL PRESIDENTE JORGE ANTONIO
SERRRANO ELÍAS CONOCIDA COMO
EL “SERRANAZO
“SERR ANAZO””

MARTES 25 DE MAYO DE 1993, 07:00 horas,


el Presidente de la República, JORGE ANTONIO SE-
RRANO ELIAS, en cadena nacional de Radiodifusión
 y Televisión, dio a conocer la di disposición
sposición de su gobier-
no y las razones que dieron origen a LA SUSPENCIÓN
PARCIAL Y TEMPORAL DE LA CONSTITUCIÓN
DE LA REPÚBLICA, según lo permite el Título VIII,
artículo 21 Transitorio de la Carta Magna y final de la
misma.
Mediante el Decreto 1-93. Que DISOLVÍA el Con-
greso de la República, Corte de Constitucionalidad y
Corte Suprema de Justicia, destituyendo además, al Pro-
curador General de la Nació
Naciónn y Jefe del Ministerio
Min isterio Públi-
co, y solicitaba al Tribunal Supremo Electoral a convocar,
en 60 días,
día s, una Asamblea
A samblea Nacional
Nacional Constituyen
Constituyente.te.
EN RELACIÓN A LAS RAZONES QUE LE IMPUL-
SARON A DISOLVER EL CONGRESO Y LA CORTE SU-
PREMA
PRE MA DE JUSTICIAEL PRESIDENTE
PR ESIDENTE JORGE
JORGE ANTONIO
SERRANO
SERR ANO ELIAS DIJO:
DIJO:

“QUERIDOS AMIGOS, VENGO EL DÍA DE HOY A

SUS HOGARES, Y QUIERO COMUNICARLES CON TODA

 
SINCERIDAD, UNAS MEDIDAS QUE HE DECIDIDO TO-
MAR, QUE SON QUIZAS LAS MEDIDAS MAS FUERTES
QUE HE TOMADO
TOMA DO EN MI VIDA.
TENGO QUE CONFESARLES QUE LLEGAR A ESTAS
DECISIONES
DECISIONES NO HASIDO
H ASIDO FÁCIL,
FÁCIL, PER
PERO
O EN MUCHOS MO-
MO -
MENTOS YO ME HE PREGUNTADO ¿PARA QUE ESTOY
EN LA PRESIDENCIA DE LA REPUBLICA?, ¿ESTOY PARA
TOLERAR QUE LA LEY SE SIGA VIOLANDO EN LA FOR-
MA QUE SE HA VIOLADO?, ¿ESTOY PARA VER QUE EL
SISTEMA
SISTEM A DE DER
DERECHO
ECHO ES ATROP
ATROPELLA
ELLADO
DO Y QUE CUAL
CUAL--
QUIER GUATEMALTECO SE CREE CON LIBERTAD DE
HACER LO QUE QUIERE EN EL PAÍS?, YO CREO QUE
NO, YO CREO QUE LA DEMOCRACIA NO ES ESO.
CIERTO, LA DEMOCRACIA ES LIBERTAD, PERO NO
LIBERTINAJE. LA DEMOCRACIA ES UN SISTEMA QUE
NOS PERMITE A TODOS VIVIR ARMONICAMENTE
PERO JAMAS ABUSANDO UNO DEL OTRO.
LO QUE NOSOTROS PUDIMOS VER LA SEMANA
PASA
ASADDA, ESAS ESCENAS
E SCENAS GROTESCAS QUE SE PUDIERON
PU DIERON
VER A TRAVES DE TODO EL PAÍS Y DE TODO EL MUN-
DO, DEJAN MUCHO QUE DESEAR DE LO QUE DEBERIA
SER UN SISTEMA DEMOCRATICO.
PERSONAS QUE SE DICEN DIRIGENTES Y QUE SE
TAPAN LA CARA PARA APARECER EN LA TELEVISIÓN;
ESO NI ES DEMOCRACIA, NI ES DIGNO, NI ES ADECUA-
DO.
LA VERDAD ES QUE EN NUESTRO PAÍS A LA LEY
NO SE LE HA DADO EL LUGAR QUE MERECE, Y QUIE-
RO DECIRLES CON TODA SINCERIDAD, POR LOS AR-
GUMENTOS QUE LES DARE POSTERIORMENTE, QUE

352

 
EL PAÍS NECESITA QUE LES SEAN CONMOVIDAS SUS
ESTRUCTURAS JURIDICAS, QUE DEPUREMOS REAL-
MENTE DE FONDO LOS PROBLEMAS QUE TENEMOS A
NIVEL DEL EJECUTIVO Y DE LOS OTROS ORGANISMOS

DEL ESTADO.
PERO
PERO TAM
TAMBIEN
BIEN NECESITAMOS
NECESITAMOS REFORMAR
REFORMA R NUES-
NUES -
TRO ESTADO
ESTADO PARA
PAR A HACERLO
HACER LO UN EST
E STADO
ADO MODERNO,
UN ESTADO QUE RESPONDA A LAS NECESIDADES DE
LAS GRANDES
GRA NDES MAYORIA
MAYORIAS,S, UN ESTADO
ESTADO QUE RESPONDA
R ESPONDA
A LAS NECESIDADES DE LOS MAS POBRES.
QUIER
QUIE RO DECIR
DECIRLES
LES QUE ME HA
H A DOLIDO
DOLIDO EN EL CO-
RAZON VER LA DEMAGOGIA CON LA CUAL ALGUNOS,
DICIENDO DEFENDER A LOS MAS POBRES SE ESCUDAN
PAR
ARAA DEFENDER SUS PROPI
PROPIOS
OS INTER
INT ERESES,
ESES, QUE EST
E STAN
AN
MUY
MU Y LEJOS DE
DE SER LOS INTERESES
INTER ESES DE LOS POBRE
POBRESS QUE
DEBEN SER DEFENDIDOS EN UNA DEMOCRACIA.
ME SIENTO MUCHAS VECES FRUSTRADO DE VER
LO INMEDIATO, LA VISION A CORTO PLAZO, LO MIOPE
QUE SON MUCHOS GU GUATEMA
ATEMALLTECOS QUE SE AFERR
AFE RRANAN
POR UN POCO DE POPULARIDAD POLITICA, COSAS IN-
MEDIATAS, Y QUE PIERDEN DE VISTA ESA FUNCION
TRASCENDENTE DE LARGO PLAZO, QUE SE DEBE TE-
NER EN LA ADMINISTRACION DE NUESTROS PAISES.
DEBEMOS DARNOS CUENTA DE QUE HAY MUCHA
GENTE QUE ESPERA RECIBIR MUCHOS SERVICIOS. LA
GENTE QUE
QU E GOZA DE ESOS SERVICIOS
SERVICIOS DEBE TENER UN
UN
ESPIRITU DE SOLIDARIDAD HACIA LOS OTROS, SOLO
ASI PODREMOS CONSTRUIR UNA GUATEMALA MO-
DERNA, PERO SOBRE TODO,
TODO, UNA GUATEM
GUATEMALALA
A JUSTA.
QUIER
QUIE RO DECIRLES
DECIRLE S QUE LAS
LA S DECISIONES
DECISIONES QUE
QU E HOY

353

 
COMPARTO CON USTEDES SON EXTREMADAMENTE
DIFICILES PARA MI, PERO ESTOY SEGURO DE QUE ES-
TAS DECISIONES SERAN PARA EL BIEN DE NUESTRA
PATRIA; PARA DEPURAR EL ESTADO DE TODAS LAS

FORM AS DE CORRUPCIÓN DE
FORMAS DE LAS CUALES
CUAL ES USTED
USTE D Y YO
YO
ESTAMOS COMPLETAMENTE CANSADOS; PERO TAM-
BIEN PARA CONSTRUIR UN ESTADO MODERNO QUE
LE DE UNA BASE PARA QUE LOS SIGUIENTES GOBER-
NANTES DE ESTE PAÍS PUEDAN REALMENTE TRABA-
 JAR,, Y PODAMOS COLA
 JAR COLABOR
BORAR
AR TODOS JU JUNTOS
NTOS EN LA
RECONSTRUCCIÓN DE UNA PATRIA NOBLE, DE UNA
PATRIA DIGNA.
HE DECIDIDO SUSPENDER TEMPORAL Y PARCIAL-
MENTE LA CONSTITUCIÓN DE LA REPUBLICA, SEGÚN
LO PERMITE EL ARTÍCULO 21 TRANSITORIO Y FINAL
DE LA MISMA CARTA MAGNA. ESTE ARTÍCULO PER-
MITE QUE LA CONSTITUCION CONTINUE CON PLENA
VALI
ALIDEZ
DEZ Y VIGENCIA, PERO AL MISMO TIEMPO,
TI EMPO, NOS DA
CABIDA A HACER ALGUNOS CAMBIOS QUE CONSIDE-
REMOS EXTREMADAMENTE URGENTES.
PAR
ARAA QUE NADIE SE CONFU
CONFUNDA,
NDA, QUIERO HACER
DOS SALVEDADES :
PRIMERO: QUE NO PRETENDO QUEDARME EN
EL PODER NI UN DÍA MÁS DEL PERIODO QUE TEN-
GO POR MANDATO POPULAR  Y   Y LEGITIMAMENTE HE
GANADO EN LAS URNAS, ES DECIR, QUE PRIMERO
DIOS ESTARE ENTREGANDO LA PRESIDENCIA DE LA
REPUBLICA  CON UN PAÍS RECONSTRUIDO, DIGNO Y
MODERNO, EL 14 DE ENERO DE 1996, TAL COMO CO-
RRESPONDE AL MANDATO QUE EL PUEBLO ME DIO.

354

 
SEGUNDO : QUIERO DECIR QUE EN ESTE PRECISO
MOMENTO SOLICITO AL TRIBUNAL SUPREMO ELEC-
TORALL QUE PROCEDA
TORA PROCEDA A CONVOCAR EN SESENTA
SESEN TA DIAS
DIAS
A UNA ASAMBLEA NACIONAL CONSTITUYENTE, QUE

PERMITA HACER UNA REVISION DE NUESTRO TEXTO


CONSTITUCIONAL Y NOS
NOS PERMITA
PERM ITA TEN
TENER
ER UNA CONS-
TITUCION QUE SUPERE TODOS LOS PROBLEMAS QUE
LA ACTUAL CONSTITUCION TIENE.
HE ACORDADO, AL MISMO TIEMPO, TOMANDO
UNA RESPONSABILIDAD HISTORICA ANTE LA NA-
CIÓN; RESTRINGIR LAS GARANTIAS, DISOLVER EL
CONGRESO DE LA REPÚBLICA, CAMBIAR LA CORTE
SUPREMA DE JUSTICIA Y LA CORTE DE CONSTITU-
CIONALIDAD, ASI COMO A LOS PROCURADORES DE
LA NACIÓN. ESTE ES EL SISTEMA DE CONTROL DEL
PAÍS.
ENTRE
ENT RE LOS MIEM
M IEMBR
BROS
OS DEL CONGRE
CONGRESO,
SO, LAS COR-
COR-
TES Y LOS PROCURADORES, LAMENTABLEMENTE
HAY ELEMENTOS QUE ME HAN IMPEDIDO AL TOMAR
UNA DECISIÓN TAN GRANDE Y TAN IMPORTANTE.
DURANTE DOS AÑOS Y MEDIO HE ESTADO SOME-
TIDO AL CHANTAJE POLITICO DE PARTE DE ALGU-
NOS MIEMBROS DEL CONGRESO DE LA REPÚBLIICA;
UN CHANTA
CHA NTAJE
JE QUE HACE IMPOSIBLE GOBERNAR EN
BENEFICIO DEL PUEBLO. CREO, SEÑORES, QUE HAY
IRRESPONSABILIDAD EN EL CONGRESO, EN EL EJERCI-
CIO DE LAS FUNCIONES PARA LOS CUALES HAN SIDO
ELECTOS.
QUIERO DECIRLES A USTEDES, QUE MUY POCAS
VECES HE PODIDO DISCUTIR CON AMPLITUD LOS

355

 
OBJETIVOS NACIONALES.
NACIONALES. PERO MUCHISIM
MUCHISIMASAS VECES
VECE S HE
TENIDO QUE HACER NEGOCIACIONES EN LOS CUALES
 YO
 YO SIE
SIENTO
NTO QUE
QUE LOS MISMO
MISMOSS SE H AN VISTO SER
SERIA
IAM
M EN-
TE PERJUDICADOS, Y ESTO NO PUEDE CONTINUAR

ACONTECIENDO
ACONTECIE NDO DE ESTA
ESTA MANER
MA NERA,
A, PORQUE
PORQUE ESTAMOS
CONSTRUYENDO REALMENTE UN ANDAMIAJE JURI-
DICO,, QUE POCO O NADA TIENE QUE
DICO QU E VER CON LO QUE
QUEREMOS PARA EL FUTURO DE NUESTRO PAÍS.
LA IRRESPONSABILIDAD CON LA QUE SE HAN
MANEJADO LOS CASOS DE LOS ANTEJUICIOS EN EL
CONGRESO DE LA REPÚBLICA ES IMPRESIONANTE.
CUANTOS DIPUTADOS QUE HAN SIDO, INCLUSO,

SORPRENDIDOS IN FRAGANTI EN LA COMISIÓN DE


DELITOS, Y QUE SE LES HAN PLANTEADO ANTEJUI-
CIOS POR MULTIPLES CAUSAS, EL CONGRESO DE LA
REPÚBLICA NO LES HA DADO TRAMITE, SIN EMBAR-
GO, SI HAN DADO TRAMITE, POR EJEMPLO, AL ANTE-
 JUICIO
 JU ICIO DE UN PROCURADOR
PROCUR ADOR QUE ERA ER A MOLESTO HAS-
HA S-
TA CIERTO PUNTO PARA ALGUNOS.
AL PROCURADOR GENERAL DE LA NACIÓN, EN
FUNCIONES,
FUNCIO NES, SE LE PLANTEA
PLANT EA UN ANTEJUICIO
A NTEJUICIO ESPÚR
ESPÚREO
EO,,
UN ANTEJU
AN TEJUICIO
ICIO PAR
ARA A TENERLO
TENER LO CONTROLADO,
CONTROLADO, Y ESO
NO ES CORRECTO. ESO YA NO ES INDEPENDENCIA DE
LOS PODERES; ESA YA ES UNA MANIOBRA DE CHAN-
TAJE QUE RESULTA INACEPTABLE E INCONSECUENTE
CON LO QUE DEBEN SER LOS CONTROLES Y LA INDE-
PENDENCIA DE ESOS PODERES PARA SU JUSTO Y VER-
DADERO EJERCICIO
EJ ERCICIO..
EL PUEBLO DE GUA
GUATEM
TEMALA
ALA HA
H A MANIFESTADO
MA NIFESTADO REI-
TERADAMENTE SU DESPRECIO POR LA DEMAGOGIA

356

 
QUE EXISTE EN EL SENO DEL CONGRESO, PORQUE
EN LA MAYOR PARTE DE LOS CASOS SE ANTEPONEN
LOS INTERESES PERSONALES O LOS INTERESES PAR-
TIDISTAS A LOS INTERESES DE LA NACION. LAMENTA-

BLEMENTE ESTO NO ES PARA LO CUAL EL CONGRESO


HA SIDO ELECTO. EL PUEBLO DE GUATEMALA ELIGE A
SUS REPRESENTANTES PARA QUE LOS REPRESENTEN
 Y PAR
ARAA QUE H AGAN TODO LO POSI
POSIBLE
BLE PA R A SACAR
ADELANTE TAREAS LEGISLATIVAS QUE LE PERMITAN
AL PAÍS PROSPERAR Y DESARROLLAR. PERO LEJOS DE
ESO TENEMOS
TEN EMOS QUE AGUAN
AGUANTAR
TAR A UN CONGRESO QUE
RESULT
RE SULTAA SIENDO UNA
U NA REMORA,
REMOR A, Y ES MUY DIFICIL SA-

LIR ADELANTE
ADELANT E CON TALES
TALES PESOS Y CONTRAPESOS.
CONTRA PESOS.
POR OTRA PARTE, TENEMOS QUE RECONOCER
QUE LA CORTE
CORTE SUPREM
SUPR EMA A DE JUSTICIA DESDE SU ELEC-
CION ESTUVO VICIADA. QUISIMOS TRABAJAR CON
ELLA PERO LAMENTABLEMENTE SU CONDUCTA DE
APLICAR LA JUSTICIA EN FORMA SELECTIVA HACE IN-
ACEPTABLE, A TRAVES DE LOS PROCEDIMIENTOS ES-
TABLECIDOS, FORTAL
FORTALECER
ECER EL ESTADO DE DERECHO.
LA CORTE SUPREMA DE JUSTICIA NO HA PUESTO
EL EMPEÑO
EM PEÑO QUE SE DEBE PONER PARPARAA RESOLVER LOS
GRANDES CASOS. NOSOTROS HEMOS HECHO GRAN-
DES ESFUERZOS
ESFUER ZOS POR LLEV
LLEVAR
AR DELINCUENTE
DELINCUE NTESS A LA JUS-
TICIA, PERO MAS HAN TARDADO LOS DELINCUENTES
EN ENTRAR
ENTR AR QUE SER PUESTOS
PU ESTOS EN LIBERTAD
LIBERTAD POR JUE-
CES Y POR LA MISMA
MISM A CORTE.
CORTE.
NOSOTROS QUEREMOS ACLARAR AL PUEBLO DE
GUATEMALA QUE DURANTE EL AÑO 1991, EL GOBIER-
NO DE LA REPUBLICA OTORGO LA CANTIDAD DE 48

357
 

MILLONES DE QUETZALES PARA EL FUNCI


FU NCIONAMIENTO
ONAMIENTO
DE LA CORTE. DURANTE EL AÑO 1992 SE OTORGO LO
QUE CORRESPONDE DE ACUERDO CON LA CONSTI-
TUCIÓN, QUE FUERO
FU ERON
N 57
57 MILLONES,
MILLON ES, MAS
MA S 50 MILLONES
QUE SE ENTREGARON POR UN COMPROMISO ADQUI-
RIDO CON EL CONGRESO DE LA REPUBLICA,
REPU BLICA, ES DECIR,
DECIR,
QUE EN EL AÑO 1992 LA CORTE SUPREMA DE JUSTICIA
RECIBIO 107 MILLONES, DOS VECES LO QUE RECIBIO
EN EL AÑO 1991 Y POSIBLEMENTE TRES VECES O MAS
DE LO QUE RECIBIO
RECI BIO EN EL AÑO 1990.
1990.
DURANTE EL AÑO 1993, CONSTITUCIONALMEN-
TE LE ESTAMOS DANDO A LA CORTE 101 MILLONES DE

QUETZALES, ES DECIR, LO QUE


QUE RECIBI
R ECIBIO
O EL AÑO ANTE-
ANT E-
RIOR POR CONCEPTO DE CONTR
CONTRIBUCION
IBUCION CONSTITU
CONSTITU--
CIONAL,
CIO NAL, MAS
M AS LA CONTRIBUC
CONTRI BUCIÓ
IÓNN EXTRA
EXTR AORDINARIA.
RECIBÍ LA SOLICITUD DEL SEÑOR PRESIDENTE
DE LA CORTE SUPREMA DE JUSTICIA DE 154 MILLONES
MAS, LO QUE QUIERE DECIR QUE PARA 1993 SE PRE-
TENDIA QUE SE LE ENTREGARA A ESE ORGANISMO
CINCO VECES MAS DE LO QUE SE ENTREGO EL AÑO
1991 Y UNA VEZ Y MEDIA MAS DE LO QUE SE ENTREGO
EL AÑO DE 1992.
QUIERO DECIRLES QUE ESAS CANTIDADES DE DI-
NERO NO SON CANTIDADES QUE SE PUEDAN INVEN-
TAR O SACAR DEL AIRE. SON CANTIDADES QUE CUES-
TA MUCHO CONSEGUIRLAS. YO LE MANIFESTE EN SU
OPORTUNIDAD AL SEÑOR PRESIDENTE DE ESE ORGA-
NISMO, QUE ESTABA DISPUESTO A APOYAR LA REFOR-
MA DEL ORGANISMO JUDICIAL Y QUE ME MANDARA
LOS PROYECTOS, SIN EMBARGO, SE NEGO A HACERLO.

358
 

NO SE TIENE PUES, MALA INTENCIÓN SINO TODO


LO CONTRARIO, QUEREMOS SACAR ADELANTE LA
 JUSTICIA
 JUST ICIA EN EL PAÍS
AÍS.. SA
SABEMOS
BEMOS QUE HAY QUE IN INVE
VERR-
TIR EN LA CORTE
CORTE SUPREM
SUPR EMA A DE JUSTICIA, PERO
PERO NO ES-
TOY DISPUESTO A ENTREGAR EL DINERO EN LA FOR-
MA EN QUE
QU E SE ME PIDIO, SIN
SIN DARME
DARM E INDICA
IN DICACIONES
CIONES DE
PAR
ARAA QUE SIRVE
SIRVE Y PAR
PARAA QUE SERAN
SERA N UTILIZADAS
UTILIZ ADAS ESAS
FUERTES
FU ERTES CANTIDADES
CANT IDADES DE DINE
DINER RO, QUE
QUE VUE
V UELLVO A RE-
RE -
PETIR, SERIA PARA EL AÑO 1993, CINCO VECES MAS DE
LO QUE SE ENTREG
ENT REGO O EN 1991
1991..
QUIERO DECIRLES A USTEDES QUE NOSOTROS
CREEMOS QUE ESTAS MEDIDAS SON NECESARIAS

PARA REMOZAR EL ESTADO, PORQUE EL NARCOTRÁ-


FICO EN NUESTRO PAÍS HA CRECIDO DE UNA MANE-
RA IMPRESION
IM PRESIONANTE
ANTE.. BASICAM
BASICAMENTE
ENTE LA CANTID
CAN TIDAD
AD DE
TRÁFICO DECOMISADO DURANTE EL AÑO PASADO Y
ESTE AÑO, SON CANTIDADES SIN PRECEDENTES QUE
SOBREPASAN EN MUCHO EL MISMO PRESUPUESTO DE
LA NACIÓN
NACIÓN..
LO QUE MAS ME PREOCUPA ES QUE CADA DÍA EL

CONSUMO DE DROGAS SE ESTA AFIANZANDO, AFIR-


MANDO Y CRECIENDO EN EL PAÍS, SEGÚN ESTUDIOS
QUE TENEMOS.
DURAN
DUR ANTE
TE EL AÑO
A ÑO PASA
PASADO
DO EL CONSUMO DE DE DRO-
DRO-
GAS CRECIÓ MÁS
MÁ S DEL 150
150 POR CIEN
CIENTO,
TO, QUIE
QUIERE
RE DECIR
QUE POR CADA KILOGRAMO DE COCAÍNA QUE SE
EN EL AÑO 1992,
1992, SE CONSUMIER
CONSUMIE RON DOS KILOGRAMOS
KILOGR AMOS
 Y MEDIO
ME DIO EN EL AÑO 1993. ESTO ES GRA
GR AVE PARA
PAR A LA NA-
CIÓN.
NOSOTROS NECESITAMOS TOMAR ACCIONES

359
 

DRASTICAS, POR ESO EL DÍA DE HOY, MEDIANTE


ACUERDO PRESIDENCIAL ESPECIFICO, SE ESTA DECLA-
RANDO
RA NDO AL
A L TRAFICO
TR AFICO DE DR
DROGAS COMO UN DELITO DE
LESA HUMANI
HUM ANIDDAD EN NUESTRO
N UESTRO PAÍS.
PAÍS.
CREEMOS QUE EL TEMA DE LOS DERECHOS HU-
MANOS ES FUNDAMENTAL PARA PROTEGER A LA PER-
SONA DE LOS ABUSOS DE PODER; PERO
PERO CREEMOS
CR EEMOS QUE
QU E
ESE TEMA DEBE ESTAR LEJOS DE LA POLITICA PARTI-
DISTA
DISTA NACIONAL
NACIONAL E INT
INTERNACION
ERNACIONAL
AL.. POR ESO, EL DÍA
DÍ A
DE HOY VENIMOS ANTE LA COMUNIDAD INTERNA-
CIONAL, A SOLICITAR A NACIONES UNIDAS EL ESTA-
BLECIMIENTO DE UN MECANISMO DE VERIFICACIÓN
DE LOS DERECHOS HUMANOS EN GUATEMALA, POR-
QUE NOSOTROS NECESITAMOS QUE SE VERIFIQUE EL
ESFUERO QUE EL GOBIERNO ESTA HACIENDO EN EL
CAMPO DEL RESPET
R ESPETO
O A LOS DERECHOS HUMANOS.
HUMA NOS.
NECESITAMOS TAMBIEN QUE SE ASESORE Y
ORIENTE
ORIEN TE AL ESTADO PAR
PARAA QUE
QUE PUEDA
PU EDA LUCHA
LUCHARR CON-
CON-
TRA LA DELINCUENCIA DENTRO DE UN MARCO DE
RESPETO A LOS DERECHOS HUMANOS.
HUMA NOS.

NO QUEREMOS QUE LOS DERECHOS HUMANOS


SEAN UTILIZADOS COMO UNA VENTAJA DEL DELIN-
CUENTE EN CONTRA DEL HOMBRE HONRADO GUA-
TEMALTECO, NECESITAMOS QUE NACIONES UNIDAS
NOS ASESORE EN EL DESARROLLO DE MECANISMOS
QUE PERMITAN FORTALECER LAS INSTITUCIONES
QUE, PRECISAMENTE, DEBEN VELAR POR EL RESPE-
TO A LOS DERECHOS HUMANOS, QUE NO ES UNICA-
MENTE LA PROCURADURIA DE LOS DERECHOS HU-
MANOS, SINO QUE TODAS AQUELLAS INSTITUCIONES

360
 

QUE FORTALECEN EL ESTADO DE LEGALIDAD Y QUE


GARAN
GAR ANTIZA
TIZANN EL EJERCIC
EJERCICIO
IO DE LOS DER
DERECHOS
ECHOS LIBR
LIBRES
ES
DE CADA UNO DE TODOS LOS GUATEMALTECOS.
EN EL CAMPO DE LA PAZ, QUEREMOS REAFIR-
MAR NUESTRO DESEO DE ALCANZARLA. EL PUEBLO
DE GUATEMA
GUATEMALALA ES UN
U N PUEBLO
PUE BLO PAC
PACIFISTA.
IFISTA.
QUEREMOS REAFIRMAR NUESTRA CONVICCIÓN
DE IR AL FONDO DE LOS PROBLEMAS QUE PUEDEN SE-
ÑALARSE
ÑALA RSE COMO CAUSAS
CAUSAS DE LA LUCHA INTESTINA
INTE STINA QUE
NUESTRO PAÍS HA VIVIDO.
RECONOCEMOS, Y LO VOLVEMOS A RATIFICAR
ANTE TODO EL MUNDO, COMO VALIDA LA VIA DE LA
NEGOCIACIÓN PARA OBTENER LA PAZ Y LAMENTA-
MOS, ESO SI, LA INTRANSIGENCIA MOSTRADA POR LA
URNG.
UR NG. EN LA RECIENTE REUNION
R EUNION EN LA QUE
QUE PRESEN-
TO DOCUMENTOS CON CARÁCTER NO NEGOCIA
NEGOCIABLE.
BLE.
DEBEMOS ENTENDER QUE CUANDO NOS ACER-
CAMOS A UNA NEGOCIACIÓN ES PORQUE VENIMOS
A ACERCAR Y APROXIMAR POSICIONES. PERO CUAN-
DO UNA DE LAS PARTES PRESENTA POSICIONES NO

NEGOCIABLES, ROMPE TOTALMENTE LA POSIBILIDAD


DE DIÁLOGO Y DE UN ACERCAMIENTO. NOSOTROS
LAMENTAMOS ESTAS POSICIONES, SIN EMBARGO, REI-
TERAMOS
TERA MOS ANT
ANTEE EL MUN
MUNDODO ENTERO NUNUESTRA
ESTRA FIRME
FIRM E
CONVICCIÓN DE ENCONTRAR LA PAZ POR MEDIOS
CIVILIZADOS.
CREEMOS QUE ES OPORTUNO INVITAR NUEVA-
MENTE
MEN TE A NACIONES
NACIONES UNIDAS
UNI DAS PAR
PARAA QUE ORGAN
ORGANICE
ICE UN
MECANISMO
MECA NISMO DE VERIFICACIÓN
VERIFICACIÓN DE LOS DERECHOS HU-
MANOS, QUE NO SEA UNICA Y EXCLUSIVAMENTE QUE

361
 

VERIFIQUE LOS TEMAS GENERALES EN ESE CAMPO


SINO QUE ESPECIFICAMENTE VERIFIQUE EL COMPOR-
TAMIENTO DEL GOBIERNO EN TODO LO RELACIONA-
DO CON LA REINCORPORACIÓN A LA VIDA NORMAL
DEL PAÍS, DE LOS GUATEMALTECOS QUE HAN ESTADO
EN LA LUCHA.
EL ESTADO QUIERE QUE LOS GUATEMALTECOS
QUE ESTAN ALZADOS EN ARMAS Y QUE ESTAN EN LA
ILEGALIDAD ENTREGUEN SUS FUSILES.
LES OFRECEMOS GARANTIAS PARA SUS VIDAS Y
LES OFRECEMOS EL APOYO ECONÓMICO PARA QUE
PUEDAN REINSERTARSE
REINSERTARSE Y TRABAJAR
TR ABAJAR DIGNAMEN
DIGNAMENTE.
TE.
ADEMAS, ESTAREMOS PIDIENDO A NACIONES
UNIDAS QUE SEA QUIEN VERIFIQUE NUESTRO COM-
PORTAMIENTO. NO TENEMOS MIEDO, NO VAMOS A
ESCONDER NADA, NUESTRA VOLUNTAD ES CLARA Y
CRISTALINA, QUEREMOS VER AL PUEBLO DE GUATE-
MALA TOTALMENTE UNIDO.
QUEREMOS TAMBIEN INICIAR UNA CAMPAÑA
FUERTE CONTRA LA CORRUPCIÓN EN EL PAÍS, UNA

CAMPAÑA QUE NOS PERMITA –Y ES POR ESO QUE JUS-


TIFICAMOS
TIFICA MOS ESAS ME
MEDID
DIDAS
AS-,
-, HACER UN CAMBIO
CAM BIO DE LAS
TANTAS COSAS QUE AFECTAN AL PUEBLO DE GUATE-
MALA.
PRIMERO: VAMOS A CLARIFICAR LOS SISTEMAS
DE COMPR
COMPRASAS DE LAS PRINCIPAL
PRINCIPALESES DEPENDENCIAS DEL
ESTADO, CON PLICAS PÚBLICAS Y ABIERTAS, PARA LO
CUAL ESTAREMOS INVITANDO A UNA COMISIÓN DE

DIFERENTES SECTORES PRODUCTIVOS DEL PAÍS PARA


PONERNOS DE ACUERDO EN LOS PROCEDIMIENTOS

362
 

QUE DEN ESA GARANTIA.


GARAN TIA.
EN SEGUNDO LUGAR, ESTAREMOS ELIMINANDO
LA CORRUPCIÓN DE LAS ADUANAS, TRATANDO DE
QUE SEAN
SEA N AUDITOR
AUDITORES
ES PRIV
PRI VADOS Y ESTATALES
ESTATALES LOS QUE
QU E
TRABAJEN
TRA BAJEN A TRAVES
TRAVES DE ALMACENADORAS
A LMACENADORAS O DEPOSI-
TOS FISCALES PARA EVITAR LA GRAN CORRUPCIÓN
 Y EL GR
GRAN
AN CONT
CONTR
R A BAN
BANDODO QUE ESTA AFAFECTAN
ECTANDODO
TREMENDAMENTE, NO SOLO LA PRODUCCIÓN DEL
PAÍS SINO QUE LOS INGRESOS DEL FISCO GUATEMAL-
TECO.
TAMBIEN HEMOS INICIADO DESDE EL DÍA DE
AYER, LA ORGANIZACIÓN DE UNA COMISION QUE SE
DEDICARÁ EXCLUSIVAM
EXCLUSIVAMENTE
ENTE A PLANTEA
PLANT EAR
R LA REFOR-
MA DE LA GUARDIA
GUAR DIA DE HACIEND
HACIEN DA Y DE LA POLICIA NA-
CIONAL, PARA HACER QUE ESTOS DOS ESTAMENTOS
PUED
PUE DAN RESPONDER
R ESPONDER EN MEJOR FORMA A LA PROTEC-
PROTEC-
CIÓN DE
DE LA POBLACIÓN
POBLACIÓN CIVIL
CIV IL Y HONRADA.
HONR ADA.
ES TAMBIEN UN RETO CONTRA LA CORRUPCIÓN
HACER CAMBIOS SUSTANTIVOS EN LA DIRECCION GE-
NERAL
NER AL DE MIGRAC
MIGR ACION,
ION, EN EL DEPART
DEPARTAM
AMENTO
ENTO DE PER-
PER-
SONAL DEL MINISTERIO DE EDUCACION Y EN OTRAS
DEPENDENCIAS DE ENTIDADES CENTRALIZADAS Y
DESCENTRALIZ
DESCENTR ALIZADOS
ADOS EN LAS CUAL
CUALES
ES LA CORRUPCIÓN
HA CAMPEADO
CAM PEADO EN FORM
FORMA A INDISCRIMINADA.
ADEMÁS, ESTAMOS DISPUESTOS A DAR INICIO EN
FORMA RAPIDA A PROGRAMAS DE DESARROLLO SO-
CIAL, TALES COMO EL FONDO DE INVERSION SOCIAL,
QUE LLEGARA A NIVEL DE ALDEAS Y CASERIOS PARA

RESOLVER SUS PROBLEMAS MÁS INGENTES, O COMO


EL FONDO NACIONAL PARA LA TIERRA, CON EL QUE
363

CONTINUAREMOS ATENDIENDO LAS NECESIDADES


DEL CAMPESINO, EL FONDO NACIONAL PARA LA VI-
VIENDA, FOGUAVI, Y EL FONDO PARA LA NIÑEZ.
QUIERO ANUNCIAR AL PUEBLO DE GUATEMALA,
QUE EL PRESUPUESTO
PR ESUPUESTO DEL CONGRESO
CONGRESO DE LA REPUBLI-
R EPUBLI-
CA DE ESTE AÑO,
AÑO, SERA TRASLA
T RASLAD
DADO TOTALM
TOTALMENTE
ENTE AL
AL
MINISTERIO DE SALUD, PARA LA REMODELACIÓN DE
LOS HOSPITALES QUE
QU E ESTAN EN SITUA
SITUACION
CION BASTAN
BASTANTE
TE
DRAMATICA. COMO USTEDES PUEDEN VER, LAS ME-
DIDAS SON DETERMINANTES, SON DRÁSTICAS, PERO
NECESARIAS.
GUATEMA
GU ATEMALA
LA NECESITA UNA OPORTU
OPORTUNIDAD
NIDAD PARA
SACUDIR SU INFRAESTRUCTURA JURÍDICA, Y PARA
RESPONDER A LO QUE TODOS LOS GUATEMALTECOS
HEMOS AÑORADO
AÑORA DO..
QUIERO VOLVER A REPETIR AL PUEBLO DE GUA-
TEMALA
TEMA LA DE QUE
QUE NO ME QUED
QU EDAR
ARE E EN LA PRESIDENCIA
UN DÍA MÁS
M ÁS DE LOS QUE ME CORRESPONDEN
CORR ESPONDEN..
 YO
 YO FUI LEGÍTIM
LEGÍT IMA
A Y POPU
POPULA
LAR
R M ENT
ENTEE ELECTO POR
EL PUEBLO
PUE BLO DE GU
GUATEMA
ATEMALALA PAR
PARAA UN PERIODO DE CIN-
CO AÑOS Y CUMPLIRE EXACTAMENTE MI PERIODO.
LO QUE NO PUEDO PERDONARME,
PERDONAR ME, BAJ
BAJO
O NINGUN
PUNTO DE VISTA, ES ESTAR EN LA PRESIDENCIA DE LA
REPUBLICA,
REPU BLICA, VER TODO LO QUE HE VISTO Y SALIR CON
LA FRUSTRACION DEDE NO PODER HACER LO QUE TEN-
GO QUE HA
H ACER.
ES POR ESA RAZÓN QUE,
QUE, HISTO
H ISTORICAMEN
RICAMENTETE ASU-
MO LA RESPONSABILIDAD
RESPONSA BILIDAD DE LOS ACTOS
ACTOS QUE HOY ES-

TOY COMUNICANDO A MI PUEBLO, Y LE PIDO A DIOS


QUE ME AYU
AYUDE
DE A SALIR ADELANTE.
ADELANT E.

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