Ficha bibliográfica: SEMORILE, Zulema. 2009. “Interculturalidad, Naturaleza, sociedad y
territorio en Patagonia”. XXVII Congreso de la Asociación Latinoamericana de Sociología. VIII Jornadas de Sociología de la Universidad de Buenos Aires Disciplina de conocimiento: interculturalidad, administración territorial y medio ambiente Objetivo del texto: Contextualizar la disputa por la apropiación del territorio por parte del movimiento Mapuche, que focaliza sus reivindicaciones en torno a la interculturalidad y la defensa y protección del medio ambiente. Principales hipótesis:
• La incorporación de los Mapuche a una “nueva organización social” –el Estado
argentino– ha sido en detrimento de la organización social, la identidad y la soberanía territorial de aquel Pueblo Originario • No ha existido un correlato entre la posición Mapuche y la implementación de políticas públicas para los Pueblos originarios, sobre todo respecto a la falta de autonomía en sus territorios. • Las experiencias del movimiento Mapuche –particularmente en “Pal de vida Pulmari” y el “co-manejo del Parque Nacional Lanín”– pueden ser vistos como alternativas frente a las políticas de Estado; incluso a las políticas indígenas que se impulsan desde allí Conceptos: interculturalidad, otredad, co-manejo Aspectos metodológicos: El texto corresponde a un ensayo sobre los proyectos que se han hecho desde las comunidades Mapuche en búsqueda de un reconocimiento pleno de sus derechos sobre el territorio y de su autonomía como Pueblo Originario Resumen: Semorile comienza mencionando que la región de la Patagonia ha sido motivo de disputa territorial, en el que la explotación de los recursos naturales ha dejado una “huella ecológica” que reduce las posibilidades de desarrollo regional y perjudica inevitablemente a sus habitantes. Con todo esto, se han dado importantes movimientos de resistencia y defensa de los territorios –como es el caso de los Pueblos Originarios– que ven amenazada su plena supervivencia por “la invasión de las multinacionales”. Los pueblos Mapuche han ejercido una resistencia significativa al modelo extractivista, centrando sus reivindicaciones en torno a la defensa del territorio y de sus recursos naturales bajo la bandera de la interculturalidad. Aquí Semorile entiende la interculturalidad como los “procesos de construcción de conocimiento ‘otros’, de una práctica política ‘otra’, de un poder social ‘otro’ y de una sociedad ‘otra’ (...) parte de una estrategia de lucha, desde una política de la diferencia que se desvincula del poder dominante (Walsh, 2006: 21 en Semorile, 2009: 3). No obstante, afirma que para los fines del texto, la interculturalidad es comprendida como un concepto formulado y significado más allá del mundo académico hegemónico; el mismo movimiento Mapuche “ya desde 1995 lo define como ‘un principio ideológico’ en tanto estrategia de lucha” (Semorile, 2009: 3). Hay que tener en cuenta que los Mapuche han sido víctimas de una eliminación sistemática de sus normatividades como comunidad, incorporándolos a la fuerza al Estado argentino mediante políticas indigenistas que si bien le ha otorgado territorios propios, los subordina respecto a la cultura hegemónica, invisibilizando las normativas propias de las comunidades y su identidad misma como Pueblos Originarios. Dice Semorile (2009: 4) que “para los Mapuche el Territorio es ‘el espacio en el que se desarrolla la cultura Mapuche, el cual comprende como un todo (waj mapu) los recursos naturales, la superficie y el subsuelo de la tierra, el aire, la historia de sus relaciones sociales, culturales, filosóficas y económicas, como también su evolución’”; por lo que cabe mencionar estas agresiones ambientales de las que han sido víctimas, pero también vale la pena resaltar las experiencias de “co- manejo” entre los Mapuche y Parques Nacionales de las Áreas Protegidas que les han sido asignadas. Si bien la comunidad Mapuche no ejerce autonomía en sus territorios, Semorile afirma que ha habido ciertos avances respecto al reconocimiento de sus derechos. El caso del Parque Nacional Lanín puede ser pensado como una experiencia “alternativa” respecto a las normatividades estatales que aplican a la comunidad Mapuche. Tanto la comunidad como el Parque plantearon que era necesaria cambiar la relación subordinada reglamentada por la Administración Nacional de Parques Nacionales para entrar a debatir y negociar entre los distintos actores el manejo del parque procurando un co-manejo. Así construyeron normativas que han transformado el escenario de la toma de decisiones en cuestione centrales como “el rol de guardaparque, manejo ganadero y otras actividades productivas: el aprovisionamiento de leña y la actividad turística se desarrollen y se aborden desde la interculturalidad” (Semorile 2009: 6). No obstante siguen habiendo ciertas dificultades como la toma unilateral de algunas decisiones que se siguen considerando inherentes al Estado y sobre las cuales la comunidad debe ser receptiva. Respecto a esto, Semorile argumenta que esto significa la necesidad de cambiar el papel histórico del Estado como ente regulador superior para pasar a una construcción política que articule integralmente al Pueblo Mapuche y a las autoridades estatales con el fin de “revertir más de un siglo de dominación y marginación” (Semorile 2009: 7). Los Mapuche plantean dos ejes centrales, indispensables para que se lleven a cabo estos procesos: la “interculturalidad”, entendida como “(...) una nueva forma de relación que sienta sus bases en el mutuo reconocimiento y efectivización de los legítimos derechos de los actores (...)” (entrevista V.H., 2009 en Semorile 2009: 7) y la “participación que implica un “reconocimiento de que la realidad se va construyendo a partir de diferentes perspectivas (...) y que por ello es necesario un abordaje integral con el que intentaremos combinar diferentes perspectivas y modalidades de acercamiento a esta nueva forma participativa para interpretarlos en su totalidad” (entrevista V.H., 2009 en Semorile 2009: 7). El otro caso que refiere Semorile es el de la elaboración de un “Plan de vida” para el territorio de Pulmarí en el año 2006, derivado del conflicto que se dio con la Corporación Interestadual Pulmarí en el año 1995, en el que la comunidad Mapuche de la zona perdió parte de su territorio por la concesión de tierras a empresarios. Este plan de vida aparece como una oportunidad de desarrollo intercultural desde la cosmogonía Mapuche ya que plantea “el manejo sustentable de los recursos naturales en gestión conjunta, que garanticen la conservación del patrimonio natural y cultural; y que posibiliten mejorar la actual situación de pobreza en territorio mapuche en jurisdicción de la Corporación Interestadual Pulmarí” (INAZUAM; COM: 2007 en Semorile 2009: 9). Para concluir, Semorile afirma que para las comunidades Mapuche, la interculturalidad es un factor clave para la construcción de un Estado plurinacional en concordancia con una transformación de la sociedad que promulgue una responsabilidad con y hacia el Otro. Tanto el “Plan de vida” de Pulmarí como el co-manejo del territorio del Parque Nacional Lanín “plantean la posibilidad de espacios de generación de políticas y tomas de decisiones participativas e interculturales, que implica un ejercicio de relación entre culturas distintas, superadora de la visión homogenizante y monocultural” (Semorile 2009: 10) para que finalmente se asuman visiones interculturales y coexistan en una relación igualitaria las distintas comunidades. Palabras clave: interculturalidad, territorio, co-manejo Elaborado por: Carolina Díaz, antropóloga, socióloga en formación