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procedimiento ordinario civil del sistema jurídico mexicano. Explicando cada una de
las fases procesales que componen un juicio ordinario en materia civil, desde la
presentación de la demanda, hasta el dictado de una sentencia que tenga por
finalidad dirimir la controversia entre las partes. También, se abordarán
generalidades de los medios de convicción que es posible ofrecer al juzgador, con
el objeto de que otorgue la razón jurídica a uno de los litigantes.
INTRODUCCIÓN
Ahora bien el proceso jurisdiccional será civil cuando las controversias que se
pretenden resolver estén relacionados con las personas, la familia, el matrimonio,
el divorcio, la tutela, la patria potestad, la adopción, las propiedad, es la rentamiento
de inmuebles, las sucesiones las obligaciones y los contratos, entre otros.
Las etapas que integran el proceso civil en los diferentes aspectos que se
presentan: durante el desarrollo del proceso constituyen alguna de las fases del
proceso la etapa del planteamiento, de las pretensiones, etapa probatoria, etapa de
alegatos, etapa de Sentencia, etapa de recurso.
• La etapa de planteamiento de las pretensiones: en la cual queda incluido
el auto por el cual se admite la demanda, el emplazamiento, el auto que
recae a la contestación de la demanda, y en su caso la reconvención y la
contestación a la reconvención.
• Los medios preparatorios del juicio son los actos de trámites que tienen
por objeto a llegar los elementos necesarios para poder iniciar un juicio
posterior dichos medios pueden constituir entre otros los siguientes la
petición de declaración bajo protesta de aquel contra quién se propone
dirigir la demanda acerca de algún hecho relativo a su personalidad o a la
calidad de su posición no tienen tenencia.
La petición de exhibición de la cosa mueble que haya de ser objeto de la acción real
que se trate de entablar la petición del legatario o cualquier otro que tenga el
derecho de elegir una o más cosas entre varias la exhibición de ella la petición del
que se crea heredero o legatario la exhibición de un testamento
Las etapas procesales son cada una de las subdivisiones que presentan los
procesos, y en cuyo transcurso tendrán lugar determinados actos materiales y
jurídicos, así como hechos jurídicos, a cargo tanto de las partes como, en su caso,
del juzgador.
Etapa conclusiva. A lo largo de esta etapa, las partes presentan sus alegatos.
Etapa impugnativa. Esta etapa supone la oportunidad que tienen las partes de
promover recursos para efectos de que un tribunal superior al que resolvió en
primera instancia revise el fallo, a fin de que lo revoque, lo modifique o lo confirme.
En ocasiones, esta etapa preliminar puede ser necesaria para poder iniciar el
proceso, como ocurre con la conciliación en el proceso del trabajo o con el
agotamiento de los recursos administrativos en el proceso fiscal. Generalmente, sin
embargo, se trata de una etapa contingente o eventual.
EL JUICIO ORDINARIO
LA LITIS
DEMANDA
La demanda es el acto procesal por el cual una persona, que se constituye por el
mismo en parte actora o demandante, inicia el ejercicio de la acción y formula su
pretensión ante el órgano jurisdiccional. De la anterior definición, se desprende que
la demanda, es el escrito inicial con el cual se inicia el procedimiento, donde el actor
reclama una pretensión a la parte demandada. Asimismo el escrito inicial de
demanda, debe constar por escrito y contendrá:
I. La designación del juzgado ante quien se promueva;
II. El nombre, denominación o razón social de la parte actora y el
domicilio para oír y recibir notificaciones;
III. El nombre, denominación o razón social de la parte demandada y su
domicilio;
IV. La prestación o prestaciones que se reclamen;
V. La narración clara, precisa y numerada de los hechos en que la actora
funda su petición, precisando los documentos públicos o privados que
tengan relación con cada hecho, así como si los tiene a su disposición.
De igual manera proporcionará los nombres y domicilio de los testigos
que hayan presenciado los hechos relativos;
VI. Los fundamentos de derecho o principios jurídicos aplicables;
VII. El ofrecimiento de los medios de prueba que pretenda rendir en
juicio, expresando con claridad y precisión el hecho o hechos que se
tratan de demostrar con los mismos. De no cumplir los requisitos
mencionados, no serán admitidos; y,
VIII. La firma de la parte actora o de su representante. Si no supieren
o no pudieren firmar, pondrán su huella digital, firmando otra persona
en su nombre y a su ruego, indicando estas circunstancias.
Además en la demanda la parte actora debe adjuntar los siguientes documentos:
I. Los que funden o acrediten la acción;
II. Aquellos que prueben la representación que ostente cuando se
demande en nombre de otra persona;
III. Las copias simples necesarias para el traslado.
Una vez presentada la demanda con los documentos que de referencia, el tribunal
que conozca del asunto deberá dictar un auto de radicación en donde se
pronunciara sobre la admisión, prevención o que deseche la demanda, es decir,
revisara si la demanda presentada por la parte actora, cumple con los requisitos
previamente analizados y si los cumple se admitirá la demanda o si la previene se
tendrá que dar cumplimiento a esa prevención o en su defecto, que no la admita por
las razones que señale las cuales deberán estar fundadas y motivadas por la
autoridad.
El juez o jueza dictará las medidas que estime pertinentes para la práctica de la
diligencia, incluyendo el uso de la fuerza pública.
EMPLAZAMIENTO
Transcurrido el término del emplazamiento sin que la parte demandada haya dado
contestación a la demanda, el juzgado examinará si el emplazamiento fue
practicado en forma legal y, de considerarlo ajustado a derecho, de oficio o petición
de parte hará la declaración de rebeldía.
Se presumen confesados los hechos de la demanda o reconvención que se dejaron
de contestar.
Si el juez o jueza encontrara que el emplazamiento no se hizo conforme a la ley,
hará la declaratoria respectiva y mandará practicarlo nuevamente.
CONTESTACIÓN DE DEMANDA
AUDIENCIA PRELIMINAR
Una vez llegado el día y hora para que tenga verificativo la audiencia preliminar, en
la cual deben estar presentes las partes y además la cual se llevara sin o asistencia
de las mismas, se procederá a desahogar la audiencia la cual tiene por objeto
cumplir con 6 etapas, en la cuales intervendrán las partes actor, demandado y el
juez, .
La audiencia preliminar tiene por objeto:
1. La depuración del procedimiento;
2. La conciliación de las partes;
3. La fijación de acuerdos sobre hechos no controvertidos;
4. La fijación de acuerdos probatorios;
5. La admisión de pruebas; y,
6. La citación para audiencia de juicio.
La audiencia preliminar se llevará a cabo con o sin la asistencia de las partes. A
quien no acuda sin justa causa calificada por el juzgado, se le impondrá una multa
Esta etapa de la audiencia preliminar consiste en que el juez o jueza examine las
cuestiones relativas a los presupuestos procesales y excepciones procesales,
emitiendo la resolución que corresponda, y se resolverán las cuestiones referentes
a los presupuestos procesales, como lo ha sostenido la Suprema Corte de Justicia
de la Nación al resolver la Contradicción de Tesis número 18/2012, en donde definió
que los presupuestos procesales constituyen requisitos sin los cuales no puede
iniciarse ni tramitarse válidamente o con eficacia jurídica un proceso, al ser
cuestiones de orden público y que deben de estudiarse de oficio.
El juez en esta etapa procesal, podrá a petición de las partes llamara a una
audiencia de conciliación de las partes, la cual tiene como finalidad exhortar a las
partes, es decir, actor como demandado a que lleguen un acuerdo para terminar
con la controversia planteada, en la cual pueden pasar dos supuestos, el primero
de ellos sería que las partes llegaran a un acuerdo y tendría como finalidad terminar
con la controversia, claro está revisado el convenio por el juez y aprobándolo y
elevándolo a la categoría de cosa juzgada, como si fuera una sentencia, y en el
segundo supuesto, que las partes no lleguen a ningún acuerdo y como
consecuencia de ello, que el juicio seguiría en sus demás etapas.
ADMISIÓN DE PRUEBAS
DESAHOGO DE PRUEBAS
ALEGATOS
“Los alegatos son las argumentaciones que expresan las partes, una vez realizadas
las fases expositiva y probatoria, para tratar de demostrar al juzgador que las
pruebas practicadas han confirmado los hechos afirmados y que son aplicables los
fundamentos de derecho aducidos por cada una de ellas, con la finalidad de que
aquél estime fundadas sus respectivas pretensiones y excepciones, al pronunciar
la sentencia definitiva”. Con los alegatos, las partes exponen sus razonamientos
lógicos jurídicos, con los cuales concluyen, si con las pruebas rendidas acreditaron
su acción o excepción y con ello se les resuelva a favor en la sentencia definitiva.
Escuchados los alegatos por ambas partes, el juez citara a la partes a escuchar
sentencia en el término de 10 días o 15 días dependiendo del asunto por su
complejidad, lo que significa que se cite el expediente para sentencia es que las
partes tanto actor y demandado, ya acabaron con su intervención en el juicio y que
ahora el tribunal en base a todo el material rendido, dictara sentencia que resuelva
el conflicto sometido a su conocimiento.
SENTENCIA
Al termino de los alegatos, el juez señalará día y hora para efecto de dictar la
sentencia definitiva, la cual se publicara al día siguiente en las listas del tribunal o
en la consulta remota.
LA EXCEPCIÓN.
La excepción en el derecho procesal es una figura jurídica que la doctrina ha visto
desde dos ángulos diferentes:
a) El primero de ellos es en sentido abstracto, en el que la excepción es el
poder que tiene el demandado de oponer, frente a la pretensión del actor,
cuestiones que obstaculizan un pronunciamiento de fondo que el juzgador debe de
hacer respecto de la pretensión, o bien, que el pronunciamiento traiga como
resultado la absolución del demandado, que fue la persona que hizo valer en su
favor la excepción.
Este significado abstracto es correlativo de la significación abstracta de la
acción, en cuanto poder jurídico del actor para plantear una pretensión ante el titular
de un órgano jurisdiccional. El derecho de hacer valer una excepción se tiene
cuando se cuenta efectivamente con la posibilidad de formular cuestiones que son
contrarias a la pretensión del actor, con independencia de que se ejerza o no ese
poder e independientemente de la fundamentación o injustificación de las
cuestiones que se hayan opuesto.
b) El segundo ángulo desde donde se contempla a la excepción es en sentido
concreto. La excepción vista desde esta forma, se objetiviza en las cuestiones
concretas que el demandado plantea frente a la pretensión del actor, con dos
finalidades:
I. De oponerse a que la secuela procesal continúe, argumentando como
razón de esta posición, que no se han satisfecho en su totalidad todos y cada uno
de los presupuestos procesales;
II. Oponerse al reconocimiento del juzgador de la fundamentación de la
pretensión que persigue la parte actora, con base en la existencia de hechos
extintivos, modificativos o impeditivos de la relación jurídica descrita por el actor en
su demanda.
DIFERENCIA ENTRE LA DEFENSA Y LA EXCEPCIÓN.
La diferencia entre la defensa y la excepción radica en que ésta última va
encaminada a los presupuestos procesales,3 deteniendo o terminando el proceso.
En cambio, las defensas, desvirtúan y atacan la base sobre la que descansan las
pretensiones, ya que implican la discusión relativa al derecho subjetivo (pretensión
de fondo). Desde esta perspectiva, las defensas corresponden a las excepciones
sustanciales y las excepciones a las llamadas excepciones procesales. La defensa
son las negaciones formuladas por el demandado respecto a los hechos o el
derecho invocado y hecho valer por el actor. Y las excepciones son las afirmaciones
del demandado en relación con los presupuestos procesales o la fundamentación
de la pretensión.
Las excepciones descansan en hechos que por sí mismos no excluyen la acción,
pero dan al demandado la facultad de destruirla mediante oportuna alegación y
demostración de los hechos. En cambio, las defensas o excepciones impropias, se
apoyan en hechos que por sí mismos excluyen la acción, de modo que, una vez
comprobada por cualquier medio, el juez está en el deber de estimarlas de oficio,
invóquelas o no el demandado. Son ejemplos de excepciones en sentido propio, la
compensación, la prescripción, etcétera. Son ejemplos de excepciones impropias o
defensas, el pago, la novación, la condonación del adeudo, etcétera.
CLASIFICACIÓN DE LAS EXCEPCIONES.
De acuerdo con el artículo 35 de la Ley Adjetiva Civil vigente en el Estado, son
excepciones dilatorias, las defensas que puede emplear el demandado para impedir
el curso de la acción. Es la excepción dilatoria la que difiere la acción:
I. Incompetencia del juez;
II. Falta de personalidad en el actor;
III. Falta de personalidad del demandado;
IV. Litispendencia;
V. Falta de cumplimiento de plazo o condición a que está sujeta la acción
intentada;
VI. La oscuridad o defecto legal en la forma de proponer la demanda;
VII. La división;
VIII. La excusión;
IX. En general, las que sin atacar el fondo de la acción deducida, tiendan
a impedir legalmente el procedimiento.
Para Demetrio las excepciones perentorias o perpetuas que producen el efecto
de extinguir para siempre la acción del actor, son tantas cuantas puedan ser las
causas porque se extingan las obligaciones y acciones. Los tratadistas, sin
embargo, enumeran las más frecuentes que son doce:
I. La prescripción;
II. El pago;
III. El pacto de no pedir;
IV. Fuerza o miedo graves;
V. Renuncia del derecho que se demanda;
VI. La non numeratae pecuniae;
VII. Pleito acabado;
VIII. Cosa juzgada y;
IX. La compensación.
Se puede definir a las generalidades de la prueba como “la actividad de las partes
procesales dirigida a ocasionar la evidencia necesaria para obtener convicción del
Juez o Tribunal decisor sobre los hechos por ellas afirmados, intervenida por el
órgano jurisdiccional bajo la vigencia de los principios de contradicción, igualdad y
de las garantías constitucionales tendentes a asegurar su espontaneidad e
introducida en el juicio oral a través de medios lícitos de prueba”.
De la definición anterior se desprende que la prueba es esencialmente un acto de
parte.
Para conocer la verdad sobre los puntos controvertidos puede el juzgador valerse
de cualquier persona, sea parte o tercero, y de cualquier cosa o documento, ya sea
que pertenezca a las partes o a un tercero; sin más limitación que la de que las
pruebas no estén prohibidas por la Ley ni sean contrarias a la moral.
Los tribunales pueden decretar en todo tiempo, sea cual fuere la naturaleza del
negocio, la práctica o ampliación de cualquiera diligencia probatoria, siempre que
sea conducente para el conocimiento de la verdad sobre los puntos cuestionados.
El actor debe probar los hechos constitutivos de su acción y el reo los de sus
excepciones.
El que niega sólo estará obligado a probar:
I. Cuando la negación envuelva la afirmación expresa de un hecho;
II. Cuando se desconozca la presunción legal que tenga en su favor
el colitigante;
III. Cuando se desconozca la capacidad;
IV. Cuando la negativa fuere elemento constitutivo de la acción.
Cuando una de las partes se oponga a la inspección o reconocimiento ordenados
por el tribunal, para conocer sus condiciones físicas o mentales, o no conteste a las
preguntas que el tribunal le dirija, éste debe tener por ciertas las afirmaciones de la
contra parte, salvo prueba en contrario, si previo el apercibimiento que se le haga
de estos efectos, insiste en su oposición. Lo mismo hará si una de las partes no
exhibe a la inspección del tribunal, la cosa o documento que tiene en su poder, si la
tenencia está acreditada legalmente.
Los terceros están obligados, en todo tiempo, a prestar auxilio a los tribunales en la
averiguación de la verdad. En consecuencia, deben, sin demora, exhibir
documentos y cosas que tengan en su poder, cuando para ello fueren requeridos.
La Ley reconoce como medios de prueba:
I. Confesión;
II. Documentos públicos;
III. Documentos privados;
IV. Dictámenes periciales;
V. Reconocimiento o inspección judicial;
VI. Testigos;
VII. Fotografías, copias fotostáticas, registros dactiloscópicos y, en
general, todos aquellos elementos aportados por los descubrimientos
de la ciencia;
VIII. Presunciones;
IX. Y demás medios que produzcan convicción en el juzgador
CONCLUSIÓN
BIBLIOGRAFÍA