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PREGUNTA GUÍA COMENTARIO DE TEXTOS, EVALUACIÓN N°2, CÁTEDRA DE HISTORIA SOCIAL Y

POLÍTICA DEL SIGLO XX

Matías González Gómez, Historia social y política del siglo XX.

05-07-2022.

UAHC.

Comente los aspectos principales (ideas, conceptos y planteamientos) que articulan la propuesta
de Eric Hobsbawm para comprender el siglo XX. Utilice, además, las críticas que Enzo Traverso
realiza a ese modo específico que emplea Hobsbawm para entender el siglo XX.

Eric Hobsbawm (1998), historiador marxista se propone realizar un recorrido en torno a


los principales hitos que articulan al siglo XX, o como él denomina: “el siglo corto”, que se
comprende desde la “época de las catástrofes” (1914), la cual viene a poner en crisis el optimismo
en torno al progreso. Dicha época se comprende desde el hito inicial del siglo corto, que comienza
con los enfrentamientos del imperio austrohúngaros y Serbia, dando paso a la primera guerra
mundial, y que, seguida de la segunda guerra mundial y hasta su fin, comprenden
aproximadamente cuarenta años de desastres sucesivos, que van socavando la ilusión de paz
ofrecida por el desarrollo tecnológico y del pensamiento. Para luego dar paso a una segunda
etapa, la edad de oro.

Para Hobsbawm (1998), el proceso de las guerras pone en crisis a las instituciones
liberales, las cuales le daban soporte al capitalismo, debido a la avanzada fascista, pero
paradójicamente, resulta ser la ayuda del ejército rojo, que permite la subsistencia de la
democracia liberal, específicamente con la derrota del nazismo por parte de la URSS. Es esta
misma subsistencia la cual le da paso a “la edad de oro de 1947-1973”, que, sin precedente alguno
, y sin una explicación clara, según el autor, le otorga un desarrollo agigantado al capitalismo de
forma universal, entregando la posibilidad de una economía universalizada y con aires de
crecimiento indefinido. Pero esta etapa entra en profunda crisis, al verse envuelta en los grandes
problemas que acarreaba el pasado: “el desempleo masivo, graves depresiones cíclicas y el
enfrentamiento cada vez más encarnizado entre los mendigos sin hogar y las clases acomodadas,
entre los ingresos limitados del estado y un gasto público sin límite.” (Hobsbawm, 1998, p.20),
esto, sumado a la ruptura de los países socialistas, o como lo plantea Hobsbawm, al hundimiento,
le da fin a la edad de oro en aproximadamente en 1990, y comienza a manifestarse como un final
de siglo.

Desde otro lugar, Traverso (2011) analiza desde una perspectiva crítica las ideas
planteadas por Hobsbawm. La visión de la historia del siglo XX propuesta por él, si bien ofrecen
una alternativa abiertamente marxista del período, y por lo tanto una alternativa concreta ante la
visión del capitalismo como orden natural del mundo, al mismo tiempo tiene un problema
importante, y es el del eurocentrismo. Traverso para generar la crítica al trabajo de Hobsbawm
analiza no tan solo el libro ya mencionado, sino que se ubica desde un análisis completo a su
“tetralogía”, en donde Hobsbawm no solo realiza un estudio en torno al siglo XX, sino que también
del siglo XIX. Su primera crítica se establece a una puesta en crisis de la forma en que Hobsbawm
comprende la historia del siglo XIX, denominándolo como “el siglo largo”, para lo cual utiliza
referencias concretamente europeas o a lo menos occidentalizadoras. A su vez cuestiona la visión
de “modernización” del autor, ya que universaliza parámetros europeos, que más bien se ciñen
estrechamente a Inglaterra y Bélgica. Incluso al momento de ejercer un análisis del siglo XX, se
podría poner en duda, según Traverso (2011), esta afirmación de “edad de oro”, que, si bien para
una porción de occidente se manifiesta en índices de crecimiento económico, por ejemplo, para
Chin, se establece como un período oscuro de la revolución cultural, o por otro lado también
tenemos la guerra de Vietnam, que dista de una edad de oro. Según Traverso, la visión de
Hobsbawm resulta universalizadora y corre el peligro de caer en la visión de Engels y de origen
Hegeliano de “los pueblos sin historia” (Traverso, 2011, p. 48), en donde se comprenden a los
pueblos subalternos como pueblos sujetos a la repetición de la historia de sus elites. En ese
sentido, las categorizaciones propuestas por Hobsbawm podrían ser completamente desplazables
y moldeables de acuerdo con el espacio utilizado, entendiendo que esta historia planteada por el
autor utiliza parámetros netamente occidentales. Otro punto que establece Traverso para su
crítica radica en la línea transversal de la versión de Hobsbawm, que se estructura a través del
comunismo como hilo conductor del conflicto (entendiendo claramente la perspectiva marxista
del autor), esto levanta la crítica a una visión contada desde “un perdedor” que asume su batalla y
derrota, es decir desde un lugar melancólico.

En conclusión, la forma de comprender la historia de Hobsbawm entrega herramientas y


categorías para comprender la historia del siglo XX, pero esta visión resulta estrecha y no
comprende las complejidades de la colonialidad, ni las perspectivas subalternas del período. Es
importante para Traverso (2011) poner en cuestión la perspectiva de este autor, con el fin de no
instalar esta normalidad universalizadora europea y occidental, es decir, lo europeo como aquel
canon evolutivo de la historia de la humanidad.

Bibliografía:

Hobsbawm, E. J. (1998). “Historia del siglo XX”, Editorial Crítica, Buenos Aires, p. 20.
Traverso, E. (2011). “La historia como campo de batalla”, Editorial La Découverte, Paris, p. 48.

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