Está en la página 1de 24

ÍNDICE:

INTRODUCCIÓN: 3

DESARROLLO: 4
1. La valoración de la prueba en un proceso de crimen organizado. 4
a. Estructura compleja, piramidal y jerárquica: 4
b. Comisión de delitos graves: 5
c. Busca beneficios económicos y poder: 5
d. Ahora bien, ¿Qué es una organización criminal? 5
e. Diferencia entre organización criminal y banda criminal. 6
f. La prueba en el crimen organizado 7
g. La legitimidad de la prueba. 9
- Vertiente de la licitud de la prueba: 9
- Vertiente de la irregularidad de la prueba: 9
2. La prueba ilícita en el crimen organizado y su discusión en nuestro ordenamiento
procesal penal. 10
2.1. Concepto de Prueba Ilícita y de Prueba Irregular. 10
2.2. Mecanismos de control de la prueba ilícita. 12
3. La finalidad de la regla de exclusión de la prueba ilícita. 14
3.1. Las Reglas de exclusión: 14
3.2. Los fundamentos de la regla de exclusión: 15
a. Modelo Norteamericano. 15
b. Modelo Europeo-continental. 16
3.3. Procedimiento de Exclusión: 16
1. Legitimación: 17
2. Oportunidad: 17
3.4. Finalidad: 17
a. Efecto disuasivo: 17
b. Garantizar la integridad de la Administración de Justicia: 18
c. Garantizar niveles de justicia material: 18
d. Garantizar en la Administración de Justicia: 18
4. Las excepciones en la aplicación de la regla de exclusión en el crimen organizado.18

CONCLUSIONES: 21

BIBLIOGRAFÍA: 22
LA REGLA DE EXCLUSIÓN DE LA PRUEBA ILÍCITA EN UN PROCESO PENAL
DE CRIMINALIDAD ORGANIZADA

INTRODUCCIÓN:

El avance de la criminalidad organizada, la corrupción y el lavado de activos es una


realidad. Actualmente, opera como una empresa de estructura piramidal con
asesoría jurídica, económica, con logística, que tiene ejecutores delictivos y se
esfuerza por tener protección legal y política. La respuesta del Estado se ha hecho
sentir a raíz del conocimiento de casos tan emblemáticos que comprometen a
funcionarios públicos y que ha generado alarma social para que se investiguen y
sancionen ejemplarmente. Por ello existe la necesidad de unificar esfuerzos entre
los aparatos del sistema judicial de nuestro Estado para conocer experiencias
comunes, formas de enfrentamiento político-judicial así como para generar
mecanismos de cooperación judicial internacional más eficaces y que se realicen de
manera inmediata.

En el artículo VIII en su inciso 2 del Título Preliminar del nuevo código procesal
penal de 2004 que estipula “Carecen de efecto legal las pruebas obtenidas, directa
o indirectamente, con violación del contenido esencial de los derechos
fundamentales de la persona”, vamos a encontrar impregnada la regla de exclusión
de la prueba ilícita que tiene como finalidad prohibir la admisión y valoración de
esta, debido a que vulnero derechos fundamentales, pero se requiere que esta
vulneración recaiga en el contenido esencial de estos derechos.

Sin embargo, la aplicación de la prueba ilícita es un significativo avance para el


control y el enfrentamiento a la cruda realidad de la criminalidad organizada,
llegando aprobar dichos delitos; pero esto es un sacrificio a las garantías
constitucionales con la finalidad de reconstruir los hechos y alcanzar la verdad. Es
en este punto donde entrar a tallar las excepciones a la regla, donde va existir un
ponderamiento adecuado de los derechos que tenemos en juego, y con el debido
análisis incorporar dicho medio de prueba.
Es por ello que en el presente trabajo desarrollaremos la valoración de la prueba
dentro de una organización criminal, cuales son sus implicancias, los mecanismos
que se tiene que aplicar en el caso se presente una prueba ilícita en donde su
admisibilidad será clave para un caso en concreto. teniendo en consideración los
reglamentos complementarios que se han asignado en el caso de este informe.

DESARROLLO:

1. La valoración de la prueba en un proceso de crimen organizado.

Existen diferentes definiciones propuestas respecto al crimen organizado, llamado


también como criminalidad organizada o delincuencia organizada, ello porque
existen diversas áreas en que operan(actividades delictivas, tratamiento en la
legislación y sectores).

Sin embargo y pese al debate que existe, resulta importante tomar en cuenta la
definición que establece Jay Albanese(2011), un criminólogo estadounidense, en un
marco de reflexión amplio: la delincuencia organizada se ha definido a través del
consenso de los académicos como empresas criminales continuas que trabajan
racionalmente para beneficiarse de actividades ilícitas que a menudo tienen una
gran demanda pública. Su existencia contínua se mantiene mediante el uso de la
fuerza, las amenazas, el control del monopolio y/o la corrupción de los funcionarios
públicos.(Organized Crime in Our Times, 6 edición, Burlington)

En ese sentido, guiándonos de la doctrina predominante en nuestro país, se


identifica la existencia del crimen organizado, en base a la realización de delitos en
los que se incurre y en atención a las siguientes características:

● Estructura compleja, piramidal y jerárquica:


El crimen organizado se encuentra estructurado como una empresa comercial y con
criterios económicos. Se organizan, planifican su trabajo, buscan beneficios y lo
maximizan. El delincuente organizado actúa en calidad de empresario y la
organización como una auténtica empresa criminal.
Aunado a ello, de acuerdo a lo que considera el profesor Prado
Saldarriaga(2013) existe un elemento denominado “permanencia”, el cual
reproduce la imagen material del potencial criminógeno de la delincuencia
organizada, siendo necesario para lograr que su presencia e influencia se
irradien y conserven sobre su entorno.

● Comisión de delitos graves:


Para conseguir sus objetivos, el crimen organizado utiliza medios delictivos graves,
tales como la intimidación, la violencia, y la corrupción. La gravedad de estos medios
utilizados se da en relación con los bienes jurídicos que puedan ser afectados.
Ahora bien, de acuerdo a lo que establece la profesora Zúñiga
Rodríguez(2009) en su libro de Criminalidad Organizada y Sistema de
derecho penal, el uso sistemático de la violencia, tanto interna como externa
se manifiesta en diferentes contextos: violencia en la comisión de los delitos
propios de la actividad ilícita(robos, extorsiones,etc), violencia al interior del
grupo para preservar la cohesión del grupo y resolver conflictos, por ejemplo
para someter a los grupos competidores, hacer frente a las autoridades,
violencia para favorecer la impunidad, y por último, violencia para la
protección de aliados y clientes.

● Busca beneficios económicos y poder:

Los fines de la criminalidad organizada son en definitiva lucrativos, dado que


en su mayoría buscan lograr el poder incluso político, tal como se puede
comprobar en nuestra realidad con ciertos personajes políticos involucrados
en ello.

Ahora bien, ¿Qué es una organización criminal?

En agosto del año 2013, se publicó la Ley N.° 30077, la cual proporciona una
configuración legal de los delitos de criminalidad organizada, en materia penal y
procesal. Es así que de acuerdo a esta ley, en su artículo segundo, preceptúa la
definición de una organización criminal de la siguiente manera:
“… se considera organización criminal a cualquier agrupación de tres o más
personas que se reparten diversas tareas o funciones, cualquiera sea su estructura
y ámbito de acción, que, con carácter estable o por tiempo indefinido, se crea, existe
o funciona, inequívoca y directamente, de manera concertada y coordinada, con la
finalidad de cometer uno o más delitos graves señalados en el artículo 3 de la
presente Ley” (Artículo 2, inciso 1).
En el artículo 3 de la Ley N°30077, tenemos que es aplicable a más de 50 tipos
penales, tales como el delito de trata de personas, secuestro, extorsión, homicidio
calificado, tráfico ilícito de drogas, delito contra la administración pública y lavado de
activos. Además se precisa que son de aplicación a los delitos en los que se
contemple como circunstancia agravante su comisión mediante una organización
criminal y a cualquier otro delito cometido en concurso con los previstos en el
artículo en referencia.

Diferencia entre organización criminal y banda criminal.

El Acuerdo Plenario N°08-2019, ha establecido la diferencia entre banda criminal y


organización criminal la cual radica en el proyecto criminal de estos dos. En la
banda criminal la finalidad o el proyecto es la delincuencia común y urbana, la cual
crea inseguridad jurídica, en donde el modo de operación de estas personas es la
violencia.
Respecto a la organización criminal el proyecto es empresarial(productivo) e ilegal,
en donde el modo de operación de estas personas es no usar medios violentos.
Así también, resulta necesario considerar que además de que una organización
criminal tiene que tener un modus operandi, debe contar con una estructura
organizativa que responda a un plan criminal y permanencia en el tiempo, debe
contar con una pluralidad de agentes que se distribuyan los roles y las funciones,
tiene trascendencia nacional e internacional, por último, tienen una organización
vertical.
Por otro lado, una banda criminal a pesar de que tienen una estructura y un modo
de operación, estos carecen de permanencia en el tiempo, tienen una estructura
horizontal ya que no siempre hay un jefe.
La prueba en el crimen organizado
En el crimen organizado en su mayoría existirá prueba indirecta, esto es cuando la
prueba tiene por objeto algo distinto del delito y de ese objeto mediante raciocinio se
llega al delito. (De Malatesta Framarino. Lógica de las pruebas en materia Criminal.
Tomo 1. pp 179), a excepción de testigos presenciales(prueba directa)
Ahora bien, la valoración de la prueba indiciaria resulta de suma importancia en este
tipo de delitos.
- Indicio: cualquier hecho conocido del cual se infiere la existencia o
inexistencia de otro hecho desconocido, mediante operación lógica o
principios científicos o técnicos especiales
- El hecho indicado no es más que la conclusión extraída como consecuencia
de la deducción hecha a partir de una regla de experiencia y un hecho
indicador
- Valoración de los indicios: estos deben valorarse en conjunto dado que han
sido uno de los requisitos que se ha exigido tanto en la doctrina como en la
jurisprudencia
Cabe resaltar que la prueba indiciaria es muy importante también por la
capacidad de manipulación de las pruebas que tengan las
organizaciones criminales a través de sus bien retribuidos asesores
legales y de otro tipo y sobre todo la capacidad de influencia en el
sistema judicial. Si algo sabe hacer la criminalidad organizada, a través de
sus asesores, es extender la mancha de la corrupción a todo aquello que
toca. Incluso, a veces, a operadores jurídicos que son protagonistas
imprescindibles del sistema judicial y de la respuesta que hay que dar frente
al crimen organizado.
Cuando existe pluralidad de indicios, puede convertirse si apuntan todos ellos
hacia una dirección en prueba inequívoca, así mismo, el hecho base del
indicio (hecho conocido o indicador) debe estar debidamente demostrado
para que podamos hablar de un indicio.
Técnica de Valoración:
Primero se realiza una enumeración de los indicios para finalmente llegar a
una conclusión de certeza
Ahora bien, ¿Cuáles son los medios probatorios más comunes en
crimen organizado?
● Anticipos jurisdiccionales de prueba por testigos protegidos: Se refiere
en el Art. 293 CPP. “testigos que por algún obstáculo difícil de superar
se presume que no podrá recibirse durante el juicio”
Supuestos: Testigo de paso por el país, testigo con enfermedad grave,
testigo o víctima cuya seguridad, vida o integridad física corran riesgo.

Para que estos sean incorporados el anticipo debe guardar todos los
principios del juicio oral, pues es un anticipo del mismo en cuanto a la
declaración del testigo se refiere. Por ello, y pese a lo que establece el 293
C.P.P, con base en principios constitucionales y convencionales se ha
exigido, según la Sala Tercera de la Corte Suprema de Justicia, N°
2000-01339, debe existir efectiva vigencia de los principios de oralidad,
inmediación y contradicción, así mismo, según la Sala Tercera 2012-240,
Sala Constitucional de la Corte Suprema de Justicia, en el caso del testigo
protegido,no es posible realizar el anticipo con las características físicas
individualizantes ocultas, ni su identidad si se pretende luego incorporar al
debate. El anticipo jurisdiccional de prueba puede ser incorporado al
debate si el testigo no comparece al juicio, siempre que se haya recibido
conforme a los principios indicados o sea presencia de defensa y rostro
descubierto, en el caso de que el testigo comparece al debate, solo puede
incorporarse el anticipo cuando haya contradicciones entre ambas
declaraciones.
● TESTIGO DE LA CORONA ( arrepentido o coimputado colaborador),
este debe cumplir los requisitos establecidos en el artículo 22 del
Código Procesal Penal, así también, La declaración del coimputado
por sí sola no podría constituir prueba de cargo suficiente para
desvirtuar la presunción de inocencia de otro imputado en el mismo
proceso, o en otro aparte, dado que requiere de un análisis profundo y
de dichas probanzas, es decir de corroboración con otros elementos
de prueba ( corroboración extrínseca), cabe resaltar que un requisito
indispensable para que su declaración tenga valor probatorio es que
se produzca bajo los principios de inmediación y contradictorio.
● COMPRAS CONTROLADAS O ENCUBIERTAS: según la 2008-1345
Sala Tercera; 2009-371 TCC, 2013-287 TASC, sí tienen valor
probatorio. Sin embargo, por sí solas no son suficientes para acreditar
el delito de venta de drogas. Es necesario que existan otros elementos
( fijos, filmaciones, decomiso, compra final etc).
● CADENA DE CUSTODIA: es el conjunto de una serie de etapas que
deben garantizar, con plena certeza, que las muestras y objetos por
analizar y que posteriormente serán expuestos como elementos de
prueba en las diferentes etapas del proceso, son los mismos que se
recolectaron en el lugar de los hechos

La legitimidad de la prueba.

La legitimidad en la obtención de los indicios y en su incorporación al proceso, lo


cual se desarrolla dos vertientes:

a) Vertiente de la licitud de la prueba:

Vulnerado los derechos fundamentales en su obtención, lo que


producirá es que la prueba será excluida, ésa y todas aquellas que se
deriven de ella, aplicando esa vieja doctrina conocida de los frutos del
árbol envenenado, cabe precisar que el hecho de que se haya obtenido una
prueba de forma antijurídica no quiere decir que se anulen el resto de las
pruebas del proceso; porque tampoco podemos utilizar la doctrina para dejar
vacío los procesos de pruebas de cargo, y conseguir la impunidad de los
delincuentes que muchas veces son los que tienen un cargo importante

b) Vertiente de la irregularidad de la prueba:

Por infracción de las leyes procesales. Cuando se produce una


irregularidad en la obtención de la prueba por infracción de leyes
procesales ordinarias que no afecten a derechos fundamentales, es
decir, que no tengan alcance constitucional; en ese caso la consecuencia es
que se invalida la prueba concreta, que no puede ser valorada, pero
esto no afecta al resto de las pruebas. Es decir que se deba seguir
adelante con el proceso, podemos seguir llegando a juicio pero con el resto
de las pruebas que no tienen ninguna infracción, que no tienen ningún
estigma de infracción legal

2. La prueba ilícita en el crimen organizado y su discusión en nuestro


ordenamiento procesal penal.
a. Concepto de Prueba Ilícita y de Prueba Irregular.

Al referirse a la prueba ilícita o también llamada prueba irregular,


consta de una base tal como se encuentra proscrita del proceso penal
por mandato constitucional expreso, tal como lo señala el inciso 10)
del art. 2 de la Constitución además del literal h del inciso 24) del
mismo artículo. De ambos es que se infiere que los documentos
privados obtenidos con violación de este precepto no tienen efecto
legal y que carecen de valor las declaraciones obtenidas por la
violencia. Quien la emplea incurre en responsabilidad.
En este sentido es que, al tratar de definir a la prueba ilícita en base a
mencionados artículos es que se interpreta que es aquella que se
obtiene mediante la violación del contenido esencial de los derechos
fundamentales, dicha prohibición se encuentra establecida en el art.
159 del Código Procesal Penal.
Sin dejar de lado, una de las funciones esenciales del proceso penal,
en un estado constitucional y de derecho, es la búsqueda de la verdad
material o, mejor dicho, de la verdad judicial: acercarse a la verdad
respecto del hecho punible y, de ser el caso, castigar al autor o
partícipe de su comisión (Castro, 2020). Lo que lleva a que el sistema
penal, en la búsqueda de ese propósito, sea fundamentalmente
invasivo de las libertades y derechos de los ciudadanos.

Por otro lado, es preciso mencionar a la prueba irregular, es aquella


que se produce por la inobservancia de una norma procesal que
regula su obtención o su actuación, esta inobservancia ameritaría su
exclusión, sin embargo tal y como lo establece el art. 159 del Código
Procesal Penal. La prohibición dirigida al juez de valorar determinada
prueba se da, siempre y cuando esta prueba haya vulnerado el
contenido esencial de un derecho fundamental. Por tanto, la sola
inobservancia de una norma procesal no implica necesariamente su
exclusión. Es decir, se trata de la prueba obtenida mediante omisión
de alguna regla procesal, prueba que podrá ser valorada en tanto y en
cuanto logre ser subsanada, caso contrario deberá ser excluida como
si se tratase de una prueba prohibida. En base al fundamento vigésimo
primero de la Casación N° 591-2015. Para poder realizar la
subsanación de dicha prueba irregular, será pertinente analizar la
entidad de la infracción de la norma concernida, en consecuencia, se
deberá tener en consideración el ámbito específico de regulación de la
norma procesal, el contexto en que se suscitó su inobservancia, la
persistencia en la inobservancia de la norma procesal y la intensidad
de afectación del derecho fundamental, a efectos de constatar si
concurre una mera inobservancia de una norma procesal o una
afectación al contenido esencial de un derecho fundamental. Ahora
bien, en caso no logre ser subsanada en el proceso, tendremos que
remitirnos a la regla de exclusión que opera en este tipo de prueba, la
cual difiere de la exclusión desarrollada para la prueba ilícita, puesto
que no genera efecto reflejo; en otras palabras, la exclusión no
alcanza a las demás pruebas que pudieran derivar de esta, es decir,
no aplica la teoría del fruto de árbol envenenado. Se debe precisar la
distinción de la prueba cuya ilicitud se origina en la infracción de una
norma legal procesal ordinaria o infraconstitucional, la cual a su vez
pueden formar parte, como una expresión específica, del conjunto de
garantías derivadas de otro derecho fundamental sea para su
obtención o práctica, esto es aquella cuyo desarrollo no se ajusta a las
previsiones o al procedimiento previsto en la ley. En este supuesto nos
referimos a una prueba irregular, la cual no es una categoría distinta
de la prueba ilícita, sino una modalidad de esta última.
b. Mecanismos de control de la prueba ilícita.

Los mecanismos de control de la prueba ilícita, entre otros, se señala


que en lo que concierne a las excepciones a la regla de exclusión
probatoria, contemporáneamente se viene empleando los de
proporcionalidad y de ponderación de intereses para decidir la
utilización o no de las fuentes de prueba derivadas de la violación de
los derechos fundamentales, cuyos entornos son definidos
progresivamente y de manera general por la jurisprudencia como
consecuencia del tratamiento que se les da en cada caso concreto.De
ello, es que nos lleva a realizar una comparacion con lo señalado por
los EE.UU. Ya que, se emplea la moción de supresión de evidencia
(motion to suppress). En el caso de Chile se plantea y resuelve la
exclusión en la audiencia de preparación del juicio (art. 276°). En
España la jurisprudencia ha establecido que la prueba ilícita puede ser
controlada en el momento procesal de admisión y al efectuar la
valoración probatoria. Por último, nuestro ordenamiento no regula
sobre el momento procesal en el que se puede plantearla exclusión de
la prueba ilícita. En atención al artículo 155 ° inciso, 2. El juez en la
fase de admisión de pruebas debe excluir las pruebas prohibidas por
la ley, entre las cuales se encuentra la prueba ilícita. Dicho momento
de admisión no es otro que la audiencia preliminar (arts. 351° y 352°).
Sin embargo, ello no significa en modo alguno que en la IP no se
pueda al amparo del art. 71 ° inc., 4 solicitar al JIP se excluya prueba
prohibida.
De ellos, por ejemplo la tortura como mecanimos de obtencion de de
confesion, si bien la prohibición de la tortura atiende también al respeto
por la dignidad e integridad física de las personas, la experiencia
histórica demuestra que la imposición de dolores físicos o mentales
tiene especial relevancia cuando se trata de examinar la actividad
estatales encargados de la investigación penal. Este ligamen entre
proceso penal y tortura aparece confirmado por la norma consagrada
en el artículo 15 de la Convención contra la Tortura y Otros Tratos o
Penas Crueles Inhumanos o Degradantes (cidt), que prescribe la no
utilización como prueba en un proceso de las declaraciones obtenidas
como resultado de tortura. En su aparente simplicidad, esa regla
presenta un problema complejo: no solo reconoce que una información
autoincriminatoria suele provenir de actos de tortura, sino que también
impone, como consecuencia de esta circunstancia, la prohibición de
uso de la prueba obtenida como consecuencia de tales actos.
Para Miranda 20021. La excesiva permeabilidad de la teoría de la
conexión de antijuridicidad ha posibilitado que se cuestione la propia
aplicación de la regla de exclusión de las pruebas ilícitas en el proceso
penal. En este contexto nuestro T.C. ha dado carta de naturaleza a la
excepción de la buena fe, tomando como referente la good faith
exception de la jurisprudencia norteamericana, admitiendo, en
definitiva, la utilización en el proceso penal de pruebas obtenidas
directamente con violación de derechos fundamentales. A la luz de
esta nueva doctrina ya no podemos afirmar con carácter absoluto que
las pruebas obtenidas con vulneración de derechos fundamentales
serán inutilizables en nuestro proceso penal, pues existirán supuestos
en que el propio T.C. admite que puedan ser objeto de valoración por
parte del órgano sentenciador. Estamos ante un verdadero proceso de
norteamericanización de nuestra regla de exclusión de las pruebas
ilícitas. La doctrina de la conexión de antijuridicidad ha producido, de
hecho, en nuestro ordenamiento jurídico un fenómeno de progresiva
desconstitucionalización de la regla de exclusión. Ésta ha perdido su
configuración inicial como garantía constitucional de naturaleza
procesal, convirtiéndose en un mero remedio procesal, por la vía de
fundamentar su aplicación, con carácter principal, en la eficacia
disuasoria de actuaciones ilícitas (deterrent effect), en línea con el
camino seguido por el Tribunal Supremo Federal norteamericano.
3. La finalidad de la regla de exclusión de la prueba ilícita.

3.1. Las Reglas de exclusión:

Carlos Fidalgo Gallardo (2013), nos habla que “la regla de exclusión,
es aquella regla jurisprudencial, elaborada por la Corte Suprema de los
Estados Unidos de América, según la cual los materiales probatorios
obtenidos por las fuerzas del orden público mediante acciones de
investigación criminal que vulneren los derechos procesales
constitucionales (…).”. En los Estados Unidos fueron formuladas por
primera vez el año 1914 a partir del caso Weeks v. US., las cuales no
son de reconocimiento constitucional ya que se han formulado a partir
de la IV y V enmienda de la Constitución norteamericana.
En los países latinoamericanos, esta regla en los casos de prueba
ilícita, tienen un origen constitucional, puesto que estas son normas
con rango de ley y por lo tanto son las que indican las pautas al
momento de encontrarnos con una prueba de carácter netamente
ilícito. Es así como que, a partir de la interpretación del texto
constitucional, es donde se realiza el análisis debido para cada caso
que se presenta ante los jueces.
Es importante tener en cuenta que en nuestro país los magistrados
formulan sólo una regla de exclusión de la prueba prohibida e ilícita en
los casos de crimen organizado u otros, y que, a su vez, están sujetos
a cuatro excepciones de la dicha regla, la cual viene a ser la siguiente:
● Artículo VIII.2 del Nuevo Código Procesal Penal “Toda
prueba prohibida debe ser excluida del proceso penal”
Finalmente definimos a esta en nuestra realidad jurídica, la cual, en
base a la doctrina, nos menciona que en el proceso penal no puede
usarse cualquier medio para poder lograr averiguar la verdad de los
hechos, es así como en palabras de Arias Orozco, Gutiérrez y Osorio
Ramírez “la regla de exclusión puede definirse como una sanción de
orden constitucional y legal de carácter imperativo, al procedimiento de
obtención de las pruebas con violación del debido proceso; que tiene
como supuestos de hecho la obtención de la prueba con violación de
los derechos fundamentales o afectación o desconocimiento de
formalidades legales”, siendo así, que esta constituye netamente un
condicionamiento de la facultad valorativa del juez, en donde se busca
un convencimiento judicial libre de errores, de tal modo que no se
incurra en un error de derecho por falso juicio de legalidad.

3.2. Los fundamentos de la regla de exclusión:


Esta regla se ha universalizado y sobre todo depende de cual sea la
explicación que se ofrezca acerca de su fundamento. El análisis de
estos fundamentos puede hacerse desde dos modelos teóricos, los
cuales serán explicados y detallados a continuación:

a. Modelo Norteamericano.

Este primer modelo se caracteriza por la


desconstitucionalización de la regla de exclusión en el sistema
procesal penal norteamericano. La Corte Suprema Federal de
Estados Unidos estableció que el fundamento único presentado
en esta era la de disuadir a la policía de llevar a cabo
actividades o investigaciones de carácter ilícito, que era
conocidas como deterrent effect. Este efecto aparece por
primera vez consagrado en los casos de US vs Calandra (414
US 338, 1974) y US vs Janis (428 US 433,1976), en esta se
declara que “el principal propósito de la exclusión de las
pruebas ilícitas, si no el único, es evitar las conductas policiales
ilícitas”. Es por eso que estamos presente ante un modelo
remedio de creación judicial que no descartaría por completo la
aplicación de otros remedios alternativos. Aunado a esto, el
Tribunal Supremo Federal Norteamericano ha descartado la
aplicación de la propia regla de exclusión cuando las pruebas
sean recogidas por particulares o por agentes policiales
extranjeros fuera del territorio estadounidense o, finalmente,
cuando la policía hubiera actuado de buena fe (good faith
exception).
Siendo así como su fundamento en el modelo descrito, que si la
Corte Suprema Federal o el Congreso llegase a la conclusión
de que la regla de exclusión es ineficaz para el logro de su
finalidad ya que existen otros remedios más eficaces, su
aplicación desaparecería y la misma debe dejar de ser aplicada,
pero está aún no se ha producido, pero está bien estipulada y
detallada para posibles eventos fortuitos como el descrito.

b. Modelo Europeo-continental.

Este modelo siendo el segundo, reconoce a la regla de


exclusión como un componente no sólo ético, sino de origen
constitucional. El fundamento de la regla de exclusión que nos
brinda este modelo es explicado por el profesor Ferrajoli (1995,
537 y ss.) en donde nos menciona que el reconocimiento del
Estado de derecho es garantía de los derechos fundamentales
y que la consagración constitucional de estas es el verdadero
fundamento de la regla mencionada.
Sobre esto debemos de mencionar que, en Italia, su Tribunal
Constitucional nos refiere que las pruebas recabadas con la
vulneración de derechos fundamentales de los ciudadanos son
una prove inconstituzionali.
Finalmente hay que tener consideración que el entorno jurídico
en donde tomó mayor fuerza este modelo, fue en el Tribunal
Supremo alemán que gracias al maestro alemán Claus Roxin
(2000) se nos indica que la incorporación o la exclusión de un
medio probatorio depende exclusivamente de si se afecta el
núcleo central del derecho fundamental o no; y de ser positivo
este debe ser admitido por el Proceso Penal, caso contrario se
excluye declarado judicialmente su ilicitud.

3.3. Procedimiento de Exclusión:

Tenemos el siguiente:
1. Legitimación:
Miranda (1999, p.125) nos menciona que la parte contra la cual se
pretende utilizar el medio probatorio presuntamente ilícito es quien se
encuentra legitimado para solicitar la exclusión de dicho medio pese a
que el mismo no sea el sujeto pasivo del acto ilícito. Todo esto en
razón a que finalmente el derecho a un debido proceso de quien se
encuentra procesado, se pone en juego.

2. Oportunidad:
La fase intermedia de la investigación es la mejor para poder realizar el
análisis de la licitud de los medios probatorios encontrados o
formulados. En nuestro Nuevo Código Procesal Penal en el artículo
352 nos menciona que “Decisiones adoptadas en audiencia preliminar
(…) La admisión de los medios de prueba ofrecidos”. En esta etapa
se despejarán dos incógnitas: si el medio probatorio ha sido obtenido
ilícitamente o es derivada de otra que lo haya sido; y verificar si
alguna de las excepciones a la aplicación de la regla de exclusión se
presenta en el caso.

3.4. Finalidad:

La regla de exclusión presenta las siguientes finalidades:

a. Efecto disuasivo:

Este efecto rige para los organismos de investigación que ante la


posibilidad de no estimar la prueba contraria a la exigencia
constitucional, se negarían a realizar violaciones a las garantías
procesales o a los derechos fundamentales. Chiesa nos menciona que
“disuadir o desalentar a los funcionarios del orden público para que no
violen la protección constitucional; esto es lo que se conoce como
deterrence”. Por eso es que para valorar una prueba ilícita en el
proceso de crimen organizado en su grado de complejidad, es
estimular su consecución, mientras que, restarle la importancia a esta
es evitarla.
b. Garantizar la integridad de la Administración de Justicia:

La administración de justicia debe de estar garantizada ante las


actuaciones irregulares o ilícitas de los organismos de investigación
del Estado, ya que este al ser el eje rector de la defensa de los
derechos fundamentales, es necesario que no se permita el proceso
de validación del actuar irregular a través de la admisión de las
pruebas ilícitas.

c. Garantizar niveles de justicia material:

La Administración de Justicia es una función de carácter permanente


que debe cumplir con los derechos, obligaciones, garantías y
libertades consagradas tanto en la Constitución, como en la Ley.

d. Garantizar en la Administración de Justicia:

La finalidad de este es el impedir que el gobierno tome beneficio de los


actos ilícitos que realiza para que el pueblo peruano no pierda
confianza en el mismo.

4. Las excepciones en la aplicación de la regla de exclusión en el crimen


organizado.

La regla de exclusión de la prueba ilícita en el crimen organizado tiene cuatro


excepciones que se encuentran reguladas de nuestro ordenamiento jurídico
penal y constitucional o que son interpretaciones contrarias a lo que estipulan
en dichos artículos

La primera excepción es la interpretación a contrario del artículo VIII en su


numeral segundo del título preliminar del NCPP, que pone a la mesa a la
prueba ilícita siempre que ésta no vulnere el contenido esencial del
derecho fundamental sustantivo alegado. En esa misma línea, cabe
recalcar que todo derecho fundamental no es absoluto, sino que cada caso
en concreto que se presente de crimen organizado se va a ver limitado por la
presencia de otros derechos y principios con los que va a entrar en conflicto,
por lo que es necesario e imprescindible que se utilice el test de
proporcionalidad o ponderación que va a ser un instrumento
constitucionalmente razonable para amparar el contenido esencial de los
derechos fundamentales.

Por lo que traemos a colación el caso de José Ramos García (Expediente n°


21-2001) de la Sala Penal Especial de la Corte Suprema, donde se discute la
incautación de un video sin autorización judicial previa; por su lado el
imputado busca que se declare la invalidez del video que lo incrimina
haciendo uso del criterio jurisprudencial del “fruto del árbol envenenado”, pero
la sala manifiesta que: “(...) a) el video no se encontraba en poder del
encausado, b) que la pertenencia y secreta custodia le correspondía a
Vladimiro Montesinos Torres, c) que el requerimiento del video se hizo en
domicilio distinto, y d) que la supuesta indefensión de sus derechos, provino
de su actuación ilícita, por lo tanto, la incautación del video y su ofrecimiento
como medio de prueba en la presente causa, no resulta atentatorio a los
derechos constitucionales del citado acusado.

La segunda excepción que no permite la exclusión de la prueba prohibida es


cuando está favorezca al imputado, lo tenemos estipulada en el artículo VIII
en su numeral tercero, en este caso estamos frente a una situación donde se
descubre un hecho nuevo; pero resulta que este hecho beneficia al imputado
por lo que la prueba ilícita debe ser admitida. Aunado a ello, la doctrina sobre
la infracción constitucional beneficiosa para el imputado, admite que la
prueba ilegal puede ser utilizada a favor del imputado, porque “si bien es
razonable absolver a quien tiene la conciencia de ser culpable, cuando esa
culpabilidad se acreditó ilegítimamente repugna condenar a quien se sabe
inocente, con aquel mismo argumento" (RUIZ VADILLO).

La tercera excepción se da cuando exista una evidente o notoria realidad


de los hechos que pretenda demostrar, esto en primacía del derecho a la
verdad de la víctima o agraviado, y el ius puniendi del Estado (Art. 44 de
nuestra constitución). Esto implica que el hecho que se ha descubierto
mediante la prueba ilícita es muy evidente para ser descubierto y aunado a
ello también a través de pruebas lícitas.
Luego tenemos como cuarta excepción a la exclusión de la prueba prohibida
Cuando esta se refiera a derechos fundamentales de naturaleza
procesal (derecho de defensa, derecho a la prueba, etc.) los cuales deben
ser tratados mediante las reglas de la nulidad (art. 150.d NCPP).

Es de especial importancia, el conocer algunas reglas establecidas por la


jurisprudencia nacional que limitan la aplicación de la regla de exclusión, sin
demeritar la vigencia de las garantías fundamental, ante el conflicto que se
presenta entre el respeto a los derechos y garantías fundamentales del
acusado y la tutela efectiva en un Estado de Derecho:
● La Fuente Independiente: consiste en demostrar que si la evidencia o
prueba señalada como espuria, fuera obtenida por otros medios
distintos a los actos indicados como ilegales, la evidencia sería
igualmente admisible por cuanto se desprendió de otro elemento, y no
necesariamente del acto violatorio de la Constitución
● Teoría del descubrimiento inevitable: Se utiliza cuando la prueba ilícita
(o sus derivados) se hubieran encontrado, de forma indefectible, por
otras vía en el futuro de la investigación.
● Regla de atenuación: la cual indica que la “evidencia'' fruto de la
información ilegal, también puede ser destruida si el Gobierno puede
demostrar que la conexión entre la prueba ilícita y la evidencia de la
fiscalía, se ha vuelto tan atenuada que se ha disipado la
contaminación. Así mismo la Sala Tercera 2015-612 indica que es
donde lo que interesa medir es la gradualidad de la conexión entre la
conducta ilegal inicial y el descubrimiento legal de la evidencia, la cual
puede ser tenue, de mediano o alto impacto.
● Teoría del riesgo: se utiliza frente a pruebas que inicialmente se
podrían considerar ilícitas, pero que pierden esa naturaleza, cuando el
titular del derecho fundamental lesionado, asume el riesgo o da un
consentimiento tácito para que sus manifestaciones (autoincriminarse)
o actos (delictivos), sean conocidos por otros sujetos.
● La buena fe: implica que los agentes de han actuado de buena fe y en
ese caso el juez versará su razonamiento en la justificación de estos
sobre las formas y las circunstancias en las que fue obtenida la prueba
ilícita.
● La ponderación de intereses o proporcionalidad: permite la valoración
de la prueba ilícita cuando se encuentra de por medio intereses de
mayor intensidad; esta excepción ha sido reconocida por la Corte
Suprema el Pleno Jurisdiccional Superior Nacional Penal de 2004
(Rafel Chanjan). Aquí tenemos como ejemplo, los constituidos por los
bienes jurídicos que se protegen en la criminalidad organizada o en los
delitos de corrupción.
● La destrucción de la mentira del imputado que implica que la prueba
ilícita va aportar al descubrimiento destruyendo la mentira del
imputado, cabe resaltar que no se usa para probar su culpabilidad.

Es necesario mencionar que se tiene dos oportunidades para ejercer un


control de la prueba ilícita y evitar que los jueces de juzgamiento no tengan
contacto con estas; la primera la tenemos a la tutela de derechos en la etapa
de investigación preparatoria, y exclusión de la prueba ilícita en el debate del
control de la acusación (control probatorio) en la etapa intermedia que podría
terminar con un auto de sobreseimiento poniendo fin al proceso penal debido
a que la acusación fiscal versa en prueba ilícita. La finalidad es evitar las
consecuencias derivadas de la prueba ilícita, como puede ser la condena del
imputado con prueba prohibida que se obtuvo con vulneración a un derecho
fundamental (Miranda, 2004).

CONCLUSIONES:

1. La prueba indirecta, es la prueba más utilizada en delitos de crimen


organizado, por lo que debe ser analizada en cuanto a los requisitos que
tiene que cumplir según lo dispuesto en la normativa, además para ser
valorada es imprescindible conocer las reglas establecidas por la
jurisprudencia nacional que limitan la aplicación de la regla de exclusión, sin
demeritar la vigencia de las garantías fundamental, ante el conflicto que se
presenta entre el respeto a los derechos y garantías fundamentales del
acusado y la tutela efectiva en un Estado de Derecho
2. La prueba ilícita se distingue de la prueba irregular, puesto que sólo esta
última es pasible de ser subsanada; en cuanto a la regla de exclusión que
opera en ambas, la teoría del fruto del árbol envenenado no se aplica para la
prueba irregular.
3. Podemos observar que la exclusión de la prueba ilícita en un proceso penal
de crimen organizado, ofrece mayor protección a los derechos
fundamentales, los cuales como hemos mencionado en el trabajo tienen
mención en el Modelo Norteamericano o el Modelo Europeo. Además, que
como se recalca en sus finalidades, la búsqueda de la verdad siempre debe
estar amparada por la no violación de las garantías procesales o de los
derechos fundamentales, que son de vital importancia y de recalco para los
jueces que desempeñan la labor de valorar las mismas a lo largo de la etapa
intermedia, que es la etapa favorable para el desarrollo de las mismas.
4. En nuestro ordenamiento jurídico se admite cuatro excepciones a la regla de
exclusión de la prueba ilícita cuando está: a) no vulnere el contenido de
derechos fundamentales; b) favorezca al imputado; c) exista una notoria y
evidente realidad de los hechos; d) cuando se trate de una afectación a
derechos de naturaleza procesal. Así también, la jurisprudencia trae a
colación a las excepciones el descubrimiento inevitable, fuente
independiente, teoría de riesgo, la buena fe, la ponderación de intereses, la
destrucción de la mentira del imputado, la teoría del riesgo, entre otros. Estas
excepciones a las reglas de exclusión de la prueba ilícita tienen como
finalidad abrir un camino para el esclarecimiento de los hechos y con ello
conocer la verdad.

BIBLIOGRAFÍA:

Leyes y Documentos Legales:

● Acta de la sesión del pleno jurisdiccional superior nacional penal


"problemática en la aplicación de la norma penal, procesal y penitenciaria”.
http://cdn01.pucp.education/idehpucp/wp-content/uploads/2018/08/15213017/
pleno-jurisdiccional-superior-nacional-penal-11-12-2004.pdf
● Código Procesal Penal. Decreto Legislativo Nº 957, 22 de julio de 2004.
● Constitución Política del Perú [Const] Art. 2, 29 de diciembre de 1993
● Corte Suprema de Justicia de la República. Sala Penal Permanente.
Casación N° 591-2015, Huánuco.
https://lpderecho.pe/doctrina-jurisprudencial-vinculante-efectos-juridicos-prue
ba-irregular-diferencias-prueba-ilicita-casacion-591-2015-huanuco/#_ftn1
Libros:
● Castro, C. (2020). Derecho procesal penal lecciones (2.° ed.). Instituto
Peruano de Criminología y Ciencias Penales.
● Miranda, M. (2004). El concepto de prueba ilícita y su tratamiento en el proceso
penal. (2.° ed.). Tirant Editorial.
Páginas Web:
● Chanjan, R. (s.f.). Sobre la ¿ilicitud? de unas pruebas y una sentencia breves
apuntes sobre la sentencia del caso petroaudios.
https://idehpucp.pucp.edu.pe/wp-content/uploads/2012/07/comentario-petroa
udios.pdf
● Fidalgo, C. (2013). La Regla de Exclusión de pruebas inconstitucionalmente
obtenidas de los Estados Unidos de América.
https://www.moreana.es/wp-content/uploads/2013/10/Fidalgo-La-regla-de-exc
lusio¦ün.pdf
● Miranda, M. (s.f). La prueba ilícita: La regla de exclusión probatoria y sus
excepciones. Revista Catalana de Seguretat Pública, [en línea], 2010, Núm.
22, p. 131-5. https://raco.cat/index.php/RCSP/article/view/194215
● Orrillo Carhuajulca, J. (2004). Algunos apuntes sobre prueba ilícita y su
tratamiento en la jurisprudencia peruana.
https://portalrevistas.ucb.br/index.php/rvmd/article/download/2568/1561
● Pariona, S. (17 de diciembre de 2018). La prueba ilícita conforme al nuevo
proceso penal peruano. Pasión por el Derecho.
https://lpderecho.pe/prueba-ilicita-conforme-nuevo-proceso-penal-peruano/#:
~:text=Son%20s%C3%B3lo%20cuatro%20las%20excepciones,los%20hecho
s%2C%20o%20(iv)

Tesis:
● Apolinario Rosales, L. & Valdiviezo Ocrospoma, K. (2018). Excepciones a la
regla de exclusión de la prueba ilícita en delitos cometidos por funcionarios
públicos, en el proceso penal peruano. [Tesis para optar por el título de
abogado, Universidad Nacional del Altiplano]. Repositorio Institucional –
Universidad Nacional del Altiplano, Puno.
https://repositorio.ucv.edu.pe/bitstream/handle/20.500.12692/26309/apolinario
_rl.pdf?sequence=1&isAllowed=y
● Condori Vengas, E. & Zapana Sanizo, L. (2018). Inclusión de las reglas de
exclusión de la prueba ilícita y las excepciones a la regla en el proceso penal
peruano para una eficacia probatoria en tiempos de criminalidad organizada y
corrupción. [Tesis para optar por el título de abogado, Universidad César
Vallejo]. Repositorio Institucional – Universidad Cesar Vallejo.
http://repositorio.unap.edu.pe/bitstream/handle/UNAP/8848/Condori_Venegas
_Efrain_Zapana_Sanizo_Lupo_Agustin.pdf?sequence=1&isAllowed=y
● Flores Reyes, C. & Vargas Castillo, E. (2013). Excepciones de la prueba
ilícita como protección de los derechos fundamentales en el proceso penal.
[Tesis para optar por el título de abogado, Universidad Nacional de Trujillo].
Repositorio Institucional – Universidad Nacional de Trujillo.
https://dspace.unitru.edu.pe/bitstream/handle/UNITRU/8254/FloresReyes_C
%20-%20VargasCastillo_E.pdf?sequence=1&isAllowed=y

También podría gustarte