Está en la página 1de 11

Tema 4.

Las actividades primarias: agricultura,


ganaderia y pesca.

1. LA ACTIVIDAD AGRARIA.
Los historiadores señalan cómo el hombre, tras haber sido cazador y recolector durante
el Paleolítico, aprendió en el Neolítico el cultivo de las plantas y la cría de animales,
actividades básicas de la moderna agricultura. La Revolución del Neolítico supuso un
cambio para la humanidad de magnitud similar a la de la Revolución Industrial en el
siglo XVIII. En la Revolución del Neolítico, tuvo lugar el descubrimiento de la
germinación no espontánea de las plantas, tras la observación de los ciclos de las
especies. El hombre acompañó este descubrimiento con el de la aplicación de nuevas
técnicas para este trabajo y la fabricación de herramientas.
La preocupación del hombre por la actividad agraria proviene de épocas remotas y se
basa en dos aspectos fundamentales: la necesidad básica del hombre de nutrirse y la de
alimentar a un número cada vez mayor de personas en el mundo. Por ello, toda
agricultura tiene como finalidad la de la alimentación de las personas más próximas al
propio agricultor (autosubsistencia) y por otro, la de sustentar a esa población cada vez
más numerosas (la que originará la agricultura de mercado o agricultura comercial).
En época romana, ya se vio ennoblecida esta actividad cuando Cicerón decía: “La
agricultura es la profesión propia del sabio, la más adecuada al sencillo y la ocupación
más digna de todo hombre libre”. El oficio de agricultor sigue siendo hoy el más
practicado sobre nuestro planeta: el 46% de población activa mundial se encontraba
todavía empleado en la agricultura entre 1999 y 2000. Las mujeres representan más de
la mitad de la mano de obra agrícola y, de todos los niños que trabajan en el mundo, el
70& lo hacen en la agricultura. Es, junto con la construcción y la minería, la actividad
más peligrosa para los trabajadores que se dedican a ella, debido a los riesgos que
conlleva.
1.1. Conceptos básicos de la actividad agraria.
La actividad agraria es extremadamente variada. Para estudiarla y clasificarla podemos
utilizar criterios muy diferentes. Los criterios más utilizados son: el destino de los
productos, el tipo y sistema de cultivo, las estructuras agrarias de propiedad y
explotación, los rendimientos y la productividad.
En función del destino de los productos cultivados se puede distinguir entre:
- Agricultura de subsistencia. Cuando cada familia campesina produce lo
necesario para su consumo personal y el de su ganado de trabajo. Si tiene
excedentes, los venden en el mercado local.
- Agricultura comercializada o de mercado. El agricultor produce para
posteriormente vender su producción en el mercado nacional o internacional.
Esa producción se regula por el precio de mercado.
Entre ambas existen también diferencias respecto a las técnicas de cultivo utilizadas,
mientas que en la primera son rudimentarias, la segunda usa medios más complejos. En
función del tipo de cultivo se distingue entre:
- Cultivos anuales. Tardan unos meses en crecer: herbáceos como cereales,
hortalizas, forrajes etc
- Cultivos plurianuales: tardan varios años en dar fruto y duran décadas o siglos:
árboles y arbustos.
En función del sistema de cultivo se distingue entre:
- Cultivo de secano. Plantas que se adaptan a las precipitaciones a veces escasas,
del clima local: cereales, vid, olivo, almendro…
- Cultivos de regadío. Plantas que precisan gran cantidad de agua para su cultivo,
ya sea procedente de abundantes precipitaciones: arrozales chinos….o
proporcionadas por técnicas artificiales de riego: huertas mediterráneas.
En función de las estructuras agrarias, podemos establecer diferencias según nos
refiramos a la propiedad o a la explotación. Respecto a la propiedad, distinguimos entre:
propiedad individual y colectiva, y gran propiedad y pequeña propiedad:
- Individual: cuando pertenece a un solo propietario.
- Colectiva: cuando los propietarios son varias personas.
A su vez puede ser:
- Pública: si el propietario es el Estado en sus distintas escalas.
- Privada: si el propietario es una comunidad, sociedad limitada, anónima etc.
- Gran propiedad y pequeña propiedad.
La explotación agraria (conjunto de elementos dedicados a la obtención de productos
agrarios) es la unidad estructural básica de producción. Podemos definirla como una
unidad de producción agraria, con una titularidad jurídica y gestión pertenecientes a una
persona física o jurídica. Ésta puede ponerse en cultivo, bien directamente por el
propietario, en cuyo caso hablaremos de régimen de tenencia directo, o bien por
agricultores que pagan un canon, régimen de tenencia indirecto.
No todos los tipos de actividad agraria obtienen los mismos rendimientos por hectárea.
Según esto distinguiremos entre:
- Agricultura intensiva: cuando el agricultor desea obtener los más altos
rendimientos, aunque eso le suponga mucho esfuerzo de trabajo o una
importante inversión de capital. Los rendimientos por hectárea serán elevados.
- Agricultura extensiva: cuando no se busca obtener los máximos rendimientos.
Puede tener inversión de capital en maquinaria o en mano de obra, pero, muchas
veces, incluso, no se cultiva toda la superficie del suelo cada año, sino que se
deja una parte en barbecho. Los rendimientos por hectárea serán menos
elevados.
El nivel de vida de los cultivadores está en función de la productividad de su trabajo.
Según ello, se habla de agricultura de alta productividad y de baja productividad por
trabajador.
Combinando estos criterios de rendimientos del suelo y productividad del trabajo
podemos clasificar la agricultura en:
- Intensiva y de baja productividad: un elevado número de trabajadores agrarios
intentan obtener del suelo el máximo rendimiento, sin embargo, sus grandes
esfuerzos dan un resultado escaso para cada uno, teniendo en cuenta los medios
de que disponen.
- Intensiva y de alta productividad: escaso numero de trabajadores intentan
obtener un máximo rendimiento posible de sus tierras. Tienen grandes cosechas
gracias a los numerosos medios técnicos que pueden emplear.
- Extensiva de baja productividad: la baja calidad del suelo y los escasos medios
que pueden utilizarse para su cultivo aconsejan el cultivo extensivo de las
tierras. Los esfuerzos de los campesinos tienen lugar sólo en parte del año y el
resultado es de rendimientos escasos.
- Extensiva y de alta productividad: las buenas condiciones de fertilidad del suelo
hacen innecesario el cultivo de todas las tierras y, a pesar de ser poco elevados
los rendimientos del suelo, el trabajador que posee tierra suficiente obtiene
elevada rentabilidad de su trabajo.

2. LOS GRANDES SISTEMAS AGRARIOS DEL MUNDO.


Se entiende por sistema agrario: el conjunto de técnicas empleadas en una explotación
para sacar alimento o ganancias: utilización del suelo teniendo en cuenta las condiciones
climáticas estacionales, mediante una combinación de cultivos y de ganadería más o
menos diversificados, medios de producción técnicos y humanos.
La primera gran división que se puede establecer es la de sistemas ganaderos y sistemas
agrícolas.
2.1 Sistemas ganaderos.
2.1.1. Nomadismo y trashumancia.
En la ganadería se ha practicado alguno de estos dos sistemas para paliar la necesidad
de agua o pastos que tiene el ganado. El nomadismo consiste en un cambio de
residencia frecuente, cuando se agotan los pastos para el ganado. La trashumancia, aun
cuando también hay un cambio de residencia, consiste en el desplazamiento entre los
pastos de invierno y de verano. Entre ambos sistemas existen semejanzas y diferencias.
Entre las primeras, está la del desplazamiento de los ganados y pastores. Entre las
diferencias, hay que señalar que el nomadismo se da en regiones de gran aridez anual,
los desplazamientos suelen ser muy largos, y los pastores se trasladan con toda su
familia, mientras que la trashumancia se practica en áreas donde la aridez es estacional
y los desplazamientos suelen ser más cortos y son realizados exclusivamente por los
pastores.
El nomadismo se practica por las principales zonas áridas de África y Asia, así como en
las frías tierras del Norte de Europa, Asia y América, ocupando, todavía en la
actualidad, grandes extensiones del espacio agrario mundial.
2.1.2. Ganadería extensiva.
Este tipo de ganadería se practica en zonas donde la pluviosidad es mayor que en el caso
anterior. En ellas puede darse también una agricultura cerealista, con barbecho más o
menos largo. Ocupa en la actualidad extensas zonas de los llamados países nuevos en
las áreas de ranchos o ranching del oeste de EEUU, de la Pampa seca argentina, del
norte de México, zonas secas de Australia y de la República Sudafricana. Se trata de
una ganadería extensiva moderna y muy bien organizada, de ovejas o de vacas,
dedicada fundamentalmente para carne. El rendimiento por hectáreas es bajo, aunque
alto por trabajadores. Son explotaciones de miles de hectáreas de tierras con deneas de
miles de cabezas de ganado y un pequeño número de trabajadores.
2.1.3. Ganadería intensiva.
Este tipo de ganadería se practica fundamentalmente en los países más altamente
industrializados. Los ganaderos deben realizar fuertes inversiones para aplicar los
últimos avances biológicos y técnicos para la mejora de las razas y el cuidado de los
animales. Deben invertir en instalaciones, pienso y demás. Esta ganadería es vacuna
para la producción de leche. Sus rendimientos por hectárea, así como la productividad
por trabajador, son elevados. Las zonas del mundo en las que tiene lugar se ciñe a una
franja en torno al círculo polar Ártico, a los países marítimos de Europa Occidental y
con una importante tradición ganadera, como Alemania, Paises Bajos….
2.2. Sistemas Agrícolas.
2.2.1. Agricultura itinerante
Este sistema agrícola es característico de los países tropicales y ecuatoriales, en las
formaciones de sabana y estepa de los primeros y en las selvas de los segundos. Se
pretende la explotación agrícola, pero evitando la destrucción total del suelo. En estos
países, existe una escasa densidad de población. Es una agricultura tradicional , de
subsistencia, con pocos medios técnicos. Consiste en la roturación, casi siempre por
rozas de fuego, de la formaciones vegetales, en cuyos residuos se siembra
posteriormente. Más tarde, tras la recolección, se deja descansar el suelo el número de
años que necesite. Es quizás la agricultura que se produce desde etapas históricas más
antiguas, aunque obtiene muy escasos rendimientos por hectárea. Este sistema agrícola
supone, según los expertos de la FAO, un derroche de tierra, mientras que para un
geógrafo como P.Gourou se trata de un sabio sistema para conservar el suelo de forma
natural. .
2.2.2 Agricultura mixta.
Recibe este nombre el sistema agrario en el que se combina el cultivo agrícola y la
ganadería. La asociación de la agricultura, mediante la rotación de cultivos con forrajes
o praderas para la ganadería, con esta última, permite, además de mantener dos
economías complementarias, la estercolación del suelo por los animales de forma
natural. Este sistema es propio de regiones húmedas y ocupa algunas extensiones en el
NE de EEUU y SE de Canadá.
2.2.3 Agricultura cerealista.
Los cultivos básicos para la alimentación humana han sido los cereales. La gran
variedad de suelos y climas, así como la enorme extensión de tierras en que se
producen, hace que haya múltiples variedades. Se puede distinguir:
- Con rotaciones de más de dos años de barbecho o descanso de tierra. Se da en
zonas de escasa pluviosidad y suelos raquíticos o esqueléticos. En áreas
montañosas o semidesérticas.
- Con rotaciones trienales. En él, existen también muchas variedades. Se daba en
los openfields o campos abiertos de Europa central, con poblamiento
concentrado y trabajo cooperativo. El suelo del término municipal, en unos
casos, o el de la explotación, en otros, se dividía en tres hojas, de ahí el nombre
del cultivo al tercio. Este sistema se ha abandonado hoy en las tierras citadas, sin
embargo, se practica en zonas de pluviosidad escasa, entre 300 y 400mm
anuales, en el interior de EEUU, parte de Australia, antigua URSS..
- Con rotación bienal o de año y vez. Gracias a la utilización de abonos y
fertilizantes, muchas tierras antes dedicadas al sistema trienal, han podido pasar
a la práctica del sistema bienal o de año y vez, evitando el agotamiento del suelo
por el monocultivo. Este sistema consiste en la siembra de un cereal un año, para
dejar la tierra en barbecho el siguiente, o bien se siembra, en ocasiones, plantas
barbecheras de verano, como patatas, remolacha, forrajes, leguminosas etc. Este
sistema se da en algunas regiones europeas, entre ellas en España. Se extiende
por EEUU, Australia, Pampa argentina, llanuras canadienses y antigua URSS.
Es una agricultura extensiva de baja productividad por hectárea y muy alta por
trabajador, donde las explotaciones, de dimensiones grandes, se cultivan por
escaso número de trabajadores; por esta razón, los espacios rurales presentan
escasa densidad de hábitat y población, pero sus habitantes poseen un alto nivel
tecnológico y de mecanización.
- Cultivo de cereales sin barbecho: es una cerealicultura mucho más intensiva, sin
dejar descansar la tierra y, por tanto, produce mayores rendimientos por
hectárea. Es menos competitiva debido a que las estructuras de las explotaciones
son muy diferente, debido fundamentalmente a razones históricas, son de mucho
menor tamaño, en las que, además, no se produce un monocultivo, sino que los
cereales compiten con otros cultivos agrícolas y ganaderos.
2.2.4. Sistemas de cultivos intensos de regadío.
El objetivo fundamental que persigue este sistema de cultivo es el de obtener unos altos
rendimientos de la tierra. Frente a la elevada productividad por trabajador y los bajos
rendimientos por hectárea que presentaba el sistema cerealista extensivo, aquí la
productividad por trabajador es menor, y mayores los rendimientos por hectárea
cultivada. El ejemplo más importante de este sistema de cultivo es precisamente un
cereal: el arroz. Los arrozales de la Asia monzónica que ocupan los grandes valles y
llanuras aluviales, suponen un cultivo cerealista irrigado altamente intensivo. La gran
densidad de población de estas zonas es causa, y efecto, de las altas producciones por
hectárea. También el cultivo del maíz, en la zona tropical húmeda, presenta
características típicas del sistema intensivo de regadío, aunque fuera de ella se cultiva
con el sistema cerealista extensivo que veíamos anteriormente. Procedente de América,
hoy es un producto fundamental en África y Europa. Otro ejemplo de este sistema
intensivo lo constituyen las huertas mediterráneas, en las que, gracias a las condiciones
térmicas favorables, y la aplicación de las técnicas de regadío, cultivos bajo plástico etc,
se pueden conseguir hasta cuatro y cinco cosechas anuales de hortalizas.
2.2.5. Sistemas de cultivo plurianuales: árboles y arbustos.
En estos sistemas, las plantas cultivadas tienen una vida de varios e incluso de muchos
años. Podemos distinguir características positivas y negativas. Entre las primeras
destacan:
- Los cultivos no necesitan ser sembrados todos los años.
- Al tener raíces más largas se adaptan mejor a la sequía.
- Son más resistentes a la competencia de las malas hierbas.
Los aspectos negativos de este sistema son:
- Necesitan un periodo de crecimiento más o menos largo.
- El alto valor de las plantas supone un problema a la hora de reconvertir las
explotaciones.
- En general, presentan dificultades técnicas para llevar a cabo la recolección por
medios mecánicos.
Los sistemas de plantas arbóreas y arbustivas tienen sus antecedentes en la actividad
recolectora primaria. Hoy, son dos los tipos que se pueden englobar en él: las
explotaciones arbóreas y arbustivas específicamente agrarias y las plantaciones, también
arbóreas y arbustivas.
Los dos tipos de estos sistemas de cultivo tienen sus máximos ejemplos en las zonas
mediterránea e intertropical.
- En la zona mediterránea, la vid y el olivo ocupan los secanos desde la más
remota antigüedad en al que, junto con el trigo, formaban parte de la trilogía de
policultivo mediterráneo. La gran variedad de árboles frutales que caracterizaron
a las huertas mediterráneas han dado paso, en los amplios regadíos actuales, a
las extensas plantaciones especializadas en alguno de ellos: cítricos, manzano,
perales, melocotoneros… estos cultivos de la zona mediterránea comprenden no
sólo las áreas europeas y norteafricanas de clima mediterráneo, sino también la
americana (California)

- En la zona intertropical, las plantas más significativas de su producción son: el


plátano, la piña, el té, el cacao, la caña de azúcar, la palmera aceitera etc. Como
en el caso de la zona mediterránea, las condiciones naturales favorecen la
producción, pero en este caso, además de la temperatura, las precipitaciones
también son propicias. También la demanda en aumento por parte de los países
desarrollados de este tipo de productos, lo mismo para la alimentación como
para la industria, ha sido considerada como la segunda causa de su expansión.
Característica de esta zona es la agricultura de plantación. En este sistema de
cultivo predominan la gran explotación y, en ella, tiene lugar también la
transformación de los cultivos recolectados. Las características de la agricultura
de plantación podemos resumirlas en las siguientes:

- En ella se incorporan todas las innovaciones tecnológicas presentadas por las


ciencias agronómicas, lo que lleva consigo la necesidad de fuertes inversiones de
capital.

- Las grandes compañías explotadoras están vinculadas, por lo general, a capitales


extranjeros.

- Existe la posibilidad de que las compañías explotadoras, generalmente


multinacionales, deseen ampliar sus actividades a otros ámbitos extraagrarios,
como la industria, el comercio, las comunicaciones etc. Lo que les conferirá un
poder que, en algunos pequeños países, entra en competencia con el propio
poder del Estado. Esto genera problemas respecto a la independencia económica
de estos países.

- La producción está mediatizada por los mercados de los países extranjeros, de


quienes provienen la demanda.

2.3. Una teoría de la localización de la actividad agraria: teoría de Von Thünen.


La indudable importancia de la agricultura como principal fuente de recursos
alimenticios y como fundamental actividad económica de la mayoría de los seres
humanos durante milenios, se evidencia en el gran número de estudios teóricos y
experimentales que han tenido lugar hace mas de cien años. La mayor parte de ellos
tienen como base la teoría de la localización de la actividad agraria, basada en la
relación que existe entre la renta diferencial de los cultivos y su distancia a un mercado
central. La teoría fue elaborada por Von Thünen en 1836. La actividad agraria es una
actividad economía que precisa de determinados usos del suelo y es el agricultor quien
decide su disposición en función de su mayor o menor rentabilidad. Ésta será el
resultado de la distancia entre el espacio cultivado y el mercado o centro de consumo,
por lo que el costo del transporte será causa fundamental junto con el suelo donde se
produce.
Aunque en un primer momento de la existencia de las actividades agrarias, las
motivaciones del agricultor no comprendían una rentabilidad económica directa, hoy en
día se acepta que el motor esencial de esas actividades es la renta económica. Los
agricultores optan por unos determinados usos del suelo en función de su rentabilidad.
Ésta está en función del transporte. Las características del espacio cultivado y la
distancia al mercado son factores fundamentales a la hora de elegir un determinado
producto. Los factores físicos del medio pueden considerarse en cierta medida estables,
los factores económicos pueden varias en virtud de distintas circunstancias.
Von Thünen estudió la agricultura de Hamburgo y en 1806 compró una granja en
Tellow. En su larga experiencia como agricultor fue básica la búsqueda de los principios
de su modelo de localización de los sistemas agrarios. Von Thünen escribió dicho
modelo en su obra El Estado Aislado, en 1826. El autor estudia como se disponen los
cultivos en torno a un mercado urbano, aislando la variable costo de transporte y
dejando constantes el resto de los factores que puedan influir en esa disposición.
Con estos supuestos, Von Thüsen procedió a demostrar que los agricultores practicarían
una agricultura menos intensiva cuanto más se alejasen de sus explotaciones del centro
de consumo, es decir, a medida que aumentasen la distancia al mercado. La razón de
ello estribaría en que, al aumentar los gastos de transporte, si se quieren obtener los
mismos rendimientos, hay que reducir las inversiones en la explotación agrícola.
En conjunto, el autor comprueba cómo el factor distancia hace variar la intensidad del
cultivo en el espacio agrario que rodea la ciudad. Los productos más perecederos,
pesados o voluminosos se localizarían cerca de la ciudad. El valor del trabajo de Von
Thüsen se halla fundamentalmente en el método utilizado y los resultados a los que
llega. Es el primero que expone de forma detallada una regularidad en la distribución
espacial de los tipos de explotación agraria. Tras estas aplicaciones se han introducido
muchas modificaciones al modelo. A pesar de las críticas, el modelo de Von Thüsen
sigue teniendo validez, fundamentalmente en pasises subdesarrollados.

3. LA ACTIVIDAD PESQUERA.
Muchos pueblos han encontrado en estas fuentes su alimento o el complemento a otros
productos alimenticios. En la pesca seguimos siendo fundamentalmente depredadores,
si exceptuamos los recientes avances que se han producido en la cría o cultivo de
pescado en piscifactorías. Para terminar, se puede decir que las actividades agrícola y
pesquera tienen algunas semejanzas:
- La pesca, como la agricultura, contribuye a la alimentación humana.
- En la trilogía de Colin Clark, ambas aparecen en el sector primario.
- Tanto una como otra son dependientes de las condiciones naturales
- Ambas dan lugar a auténticos modos de vida, que todavía perduran.
- Ambas influyen en el paisaje.
La aplicación de nuevas técnicas, de avances científicos, la congelación en alta mar, la
mejora de los transportes etc han permitido que la pesca entre en el mercado
internacional como importante actividad económica.
Para algunos investigadores, el mar es fuente inagotable de recursos, pues se fijan en
todas las especies vegetales y animales que lo habitan, y han visto en él la solución a la
falta de recursos en el mundo. Pero la realidad es otra. Para empezar, no es inagotable y
se ha de pensar en una racionalización de las capturas, en una sustitución. A esa
depredación que realiza el hombre, hay que añadir otras dificultades producidas por las
actividades humanas, como la contaminación de las aguas. Todo esto hace pensar en la
necesidad de racionalizar las actividades en esta fuente de recursos tan inmensa.
3.1 Los condicionantes físicos de la pesca.
La pesca es la recolección, por métodos tradicionales o sofisticados, de peces. Los
factores que influyen son los siguientes:
- La profundidad del agua, que lleva a la distinción entre especies que viven en
aguas poco profundas de las que viven a grandes profundidades o de las que
pueden cambiar de profundidad sin problema.
- La tendencia de las especies a desplazarse en alta mar, con frecuencia agrupadas
o al menos en algunas épocas, sobre todo para la puesta de huevos a lo largo de
la costa o incluso remontando ríos para ovar en agua dulce.
- La salinidad del agua, y, eventualmente, otros elementos de su composición.
- La temperatura del agua.
- La presencia de corrientes marinas.
- La ausencia de contaminación
- La presencia de alimento
La pesca está sometida, como la agricultura, a las fuerzas de la naturaleza, climáticas e
hidrológicas especialmente y, a una limitación de las posibilidades de explotación. Los
pescadores tienen una incertidumbre comparable a la de los agricultores, en cuanto a la
cantidad y calidad de capturas.
3.2 Diferentes formas de economía pesquera.
La economía de la pesca es muy compleja. Se deben distinguir diversos tipos, sin contar
con la pesca de ocio por ser marginal en cuanto a cantidad:
- La pesca primitiva, en pueblos para los que constituye su principal actividad.
- La pesca artesanal, según métodos tradicionales, que practican los pescadores
que utilizan los mismos métodos que antes del progreso de la navegación. Se da
sobre todo en países en desarrollo y desarrollados. La pesca tradicional
comprende:
- Una pesca costera, por procedimientos tradicionales.
- Una pesca de alta mar, llamada pesca de altura (salida de algunos días a algunas
semanas) o pesca de lejos (salidas de algunos meses).
- Una pesca en agua dulce, más difícil de modernizar.
- La pesca industrial, especialmente en alta mar, moviliza los navíos de distinto
tamaño, desde barcos tradicionales a barcos frigoríficos.
- Una pesca costera industrial que no es más que la evolución de la pesca
artesanal, utilizando mayores barcos y redes más profundas. Podría señalarse
como límite entre ambas la propiedad de los barcos.
- Una pesca de alta mar, también evolución de la pesca tradicional pero con
mayores recursos.
- Los cultivos marinos y acuáticos conllevan la intervención directa del hombre.
Las especies a las que hace referencia son: algunas especies de peces marinos,
los crustáceos, las especies de agua dulce y la recolección de sal y flora marina
(algas).
La pesca ha evolucionado de manera que se parece cada vez más a la industria, lo que
conlleva la inversión importante de capital, la utilización de mano de obra asalariada,
una dependencia cada vez mayor del comercio, las conserveras y el transporte, lo que
provoca una pérdida de autonomía para el pescador. La pesca representa una gran parte
de la alimentación, sobre todo en los países ricos, mientras que en los pobres practican
poco la pesca o lo hacen de manera artesanal.
3.3. La cuantía de las capturas de pescado.
La pesca aporta, todavía hoy, sólo el 1% de las calorías consumidas en el mundo y el
15% de las proteínas animales. Desde comienzos del siglo XX las capturas de pesca no
dejan de crecer. De todas las capturas, el 9% se realizan en ríos y lagos.
El rendimiento de algunos caladeros ha bajado debido a las capturas masivas y a esa
actitud depredadora de la que hablábamos anteriormente. Otro aspecto fundamental, al
que es necesario hacer referencia, son los productos acuáticos y su distribución mundial.
La localización de las grandes zonas pesqueras del mundo sufrió variaciones a lo largo
del siglo XX. Antes de la WWII, la pesca se localizaba en las regiones circumpolares y
frías del Hemisferio Norte. La tradicional superioridad de las aguas del Atlántico, en el
que se capturaba el 35% del total de la pesca mundial, dio paso a la preponderancia de
las capturas del Pacífico, que en el momento actual proporciona más del 50% del total.
En el último cuarto del siglo XX, aparecieron otros países que compiten con los
anteriores en la cantidad de capturas de pescado. Los países de la fachada Atlántica de
África, desde Sudáfrica hasta los países del Golfo de Guinea, han surgido con fuerza,
pero no han desbancado a los anteriores. Japón y la antigua URSS suponen todavía el
10% de la captura mundial.
4. LA ACTIVIDAD MINERA.
Se trata también de una actividad muy antigua, prehistórica. En la actualidad, sólo la
minería en pequeña escala ocupa a mas de 13M de personas en el mundo, y se calcula
que dependen de ella para su subsistencia en torno a 100M.
La corteza terrestre está compuesta aproximadamente por un 99% de ocho elementos:
oxígeno, silicio, aluminio y hierro, seguidos de calcio, sodio, magnesio y potasio. El
restante 1% se compone de alrededor de 90 elementos. Unos son geográficamente
abundantes en términos económicos, como el carbón y otros se encuentran concentrados
en algunos lugares como algunos metales menores y minerales industriales.
Con la llegada de la Revolución Industrial en el siglo XVIII, los minerales se convierten
en imprescindibles. Las materias primas minerales se definen como el material bruto
que proporcionan las explotaciones mineras, siendo su uso muy diverso, pero
fundamentalmente industrial.
En Geografía, las materias primas extraídas de la tierra se suelen integrar en cuatro
grandes grupos: minerales energéticos, metálicos, no metálicos y productos de cantera.
Otra clasificación muy aceptada es la siguiente:
- Minerales metalíferos
- Minerales de energía
- Minerales industriales y de la construcción
- Diamantes y piedras preciosas
- Minerales que poseen un valor lo suficientemente alto como como para ser
comercializados en el mercado internacional.
- Minerales que tienen un valor suficientemente alto por unidad de peso que
pueden ser comercializados en grandes regiones , aunque no lo sean
internacionalmente.
- Minerales con valor muy bajo por unidad de peso y que son comercializados,
fundamentalmente, a escala local.
La producción de estos minerales depende de la mayor o menor demanda existente y
ésta se encuentra en función, a su vez, de los usos industriales. Tradicionalmente los
minerales se utilizaban en las regiones que se encontraban, o en sus proximidades.
Actualmente, el costo del transporte, relativamente bajo, facilita la globalización de gran
parte de la producción.
Los metales comunes se producen, en su mayor parte, a partir de minerales, en donde el
principal metal recuperable constituye una alta proporción del peso mineral.
El modelo de minería, según productos y localización de la actividad minera, ha
cambiado y esas dinámicas tienen implicaciones importantes para la contribución del
sector al desarrollo sustentable. Como ejemplo, en las dos últimas décadas ha
disminuido la minería de carbón en Europa y ha habido un rápido aumento de la
producción de cobre en America Latina, así como la aparición de China.
En el estudio de minerales, cabe diferenciar un doble concepto, el de reserva y el de
recurso, y es fundamental el hecho de la imposibilidad de un equilibrio entre la oferta y
la demanda. La idea fundamental en la que se pueden resumir las actividades mineras es
que los espacios productores no coinciden con países industrializados; por tanto, no son
consumidores y viceversa, la mayoría de los países industrializados, grandes
consumidores, no poseen en su subsuelo estos productos o , si los tienen, no son
suficientes para sus industrias.

También podría gustarte