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Los mismos protagonistas de sus tragedias no pertenecian a esa tradición que siempre
habia inspirado ibremente desde el mito. Los protagonistas de las tragedias
de Eurípides son, de hecho, hombres comunes. Y es esta característica de sus
personajes lo que indujo a Aristófanesa burlarse de él, calificándolo de "creador de
mendigos". Sus personajes también son inseguros y con problemas, y a menudo son
figuras femeninas. Su Medea, por ejemplo, con el que ganó el tercer premio en el año 431
aC, decidió matar a sus hijos como último acto de resistencia, para no someterse al
matrimonio con Jason.
Eurípides también intensificó el uso del deus ex machina, es un artificio escénico por el
cual una situación particularmente enredada, se resuelve mediante la intervención externa
de una deidad. El uso en el teatro del Deus ex machina proviene de su creencia de que
esto era parte de la imprevisibilidad y la omnisciencia de los dioses, y de la convicción de
que, como tal, sólo los dioses sabían cómo salir de las situaciones más difíciles y
complicadas. Esta innovación suya fue luego malinterpretada por dramaturgos posteriores,
que utilizaron el deus ex machina cada vez no eran capaces de resolver una situación.
En año 408 su salida de la vida griega fue tal que aceptó la invitación del rey de
Macedonia, Arquelaos I. Se estableció así en Anfípolis, donde murió sólo dos años
después en año 406 aC
Obras
De las numerosas obras atribuidas a Eurípides se conservan diecisiete
tragedias y un drama satírico, Los cíclopes. Entre las tragedias de
fecha conocida figuran Alcestis (438 a.C.), Medea (431
a.C.), Hipólito (428 a.C.), Las troyanas (415 a.C.), Helena (412
a.C.), Orestes (408 a.C.), Ifigenia en Áulide (representadas
póstumamente en el 405 a.C.). Entre las obras de fecha incierta
destacan Andrómaca, Hércules, Hécuba, Los
suplicantes, Electra, Hércules loco, Ifigenia entre los tauros, Ión y
Las fenicias.
• Medea (431 a.C.): Jason, famoso por el vellocino de oro, abandona a Medea –
personaje principal, hija del rey de Corinto– causando que ella mate a sus
propios hijos en venganza.
• Los heráclidas (c. 430 a.C.) – cuyo tema central es el conflicto eterno entre el
poder y la justicia.
• Suplicantes (c. 423 a.C.): las madres de los siete capitanes que se alzaron
contra Tebas acuden a Atenas para que los tebanos permitan el entierro
adecuado de sus hijos.
• Electra (c. 417 o 414 a.C.): Electra y Orestes conspiran para destruir a su
madre.
• Troyanas (415 a.C.): con Hécuba nuevamente como personaje central en
medio de un catálogo de la miseria de las mujeres troyanas.
• Ifigenia entre los tauros (c. 412 a.C.): Ifigenia y Orestes luchan contra los
dioses y el destino con un final sorprendentemente feliz.
• Orestes (c. 408 a.C.): Orestes mata a su propia madre e intenta, sin éxito,
vengarse de su tía Helena.