Universidad Nacional de Colombia- sede Bogotá

Facultad de Derecho y Ciencias Políticas

Asignatura: Políticas Públicas de Familia.

Profesor: Luis Eduardo Montoya medina

Estudiante: Erika Noguera García

Fecha: 18/10/2021

Ensayo N. 2

LA INSUFICIENCIA DEL DERECHO EN LAS CRISIS DE PAREJA

En el texto “La insuficiencia del Derecho en las Crisis de Pareja” se sostiene que existe un
problema específico socio jurídico del derecho, y esto se debe a una separación concluyente
entre el derecho escrito y la conciencia de su eficacia relativa, es decir sobre aquellas
expresiones de idea/ realidad. Donde el ideal del derecho es la seguridad y la reiteración de
conductas inalterables, en que los hechos sociales son los que se ajustan a las reglas del
derecho; mientras que en la realidad el Derecho son los hechos, es decir la legalidad, el
sentimiento de legalidad y la conciencia jurídica de los involucrados.

Con esto se quiere significar el derecho escrito es un sistema jurídico que tiene una
normativa recogida por escrito; posee la seguridad jurídica como principio, que se basa en
la certeza del derecho, tanto en el ámbito de su publicidad como en su aplicación. En ese
sentido, los hechos sociales, es decir, aquellos comportamientos y pensamientos
socialmente impuestos por la colectividad deben ajustarse a dichas normas jurídicas escritas
que tienen como objetivo dirigir el comportamiento de la sociedad, quienes deben ofrecer
seguridad de conocer lo prohibido y permitido.

Mientras que la conciencia de la eficacia del derecho hace referencia al conocimiento que
se tiene de la existencia de un orden normativo, la voluntad de cumplirlo y hacerlo cumplir
para preservar. En ese sentido, en toda comunidad hay imposiciones de comportamiento,
usos, costumbres, que se convierten en normas generadas de factores internos y externos de
dominación bajo el precepto de lo que es el Derecho. Es el Estado quien interioriza dichas
normas, las regula y las determina para la sociedad a través de la imposición y la búsqueda
de aceptación de ellas por medio de la voluntad de los particulares.

Ahora bien, podemos decir que el derecho nace en la sociedad, en tanto el derecho surge de
la misma; en los hechos, en los sucesos y en los conflictos precediendo generalmente de la
conciencia jurídica inducida por ideologías, de poder, participación, políticas, éticas,
morales y económicas de los partícipes; de tal manera que se puede afirmar que existe una
conexión entre los contenidos de las relaciones jurídicas, las diferentes relaciones sociales,
y los factores que las condicionan.

En este sentido, se entiende que son las interrelaciones producidas durante los procesos
históricos las que permiten la creación jurídica estatal, la condicionan; y al mismo tiempo
se convierte en un elemento para regular la sociedad, con lo que se llega a identificar al
Derecho como una realidad autónoma, que a su vez es instituido, promulgado y
manifestado para la sociedad misma, como un orden normativo para el cumplimiento de
conductas, el cual se rige por la coacción, ya que el incumplimiento de toda norma trae
consigo una sanción.

Finalmente podemos concluir que, si bien es cierto que en determinada medida el Derecho
llega a ser un elemento conservador, pues todo sistema tiene establecido mecanismos de
defensa para mantenerlos, y determinados procedimientos que los hacen cambiar, pero
siempre, sin modificar su esencia, el Derecho también llega a ser un instrumento de cambio
dentro del orden y la estabilidad, respondiendo a que este surge del interior de una realidad
social determinada.

DEBERIAMOS ESCOGER

El Derecho tiene carácter regulador, fija y consagra lo obtenido, lo querido y como

resultado de tal función se dictan las disposiciones que nacen de los procesos históricos que
se da en determinado grupo social. En efecto, a partir del texto “Deberíamos Escoger” se
puede ver Derecho Comparado a partir de ejemplos de los ordenamientos de diferentes
países, respecto de las reglas del matrimonio y las relaciones de familia de los convivientes,
que se tienen a través de la historia, luego de las grandes luchas y revoluciones; por lo que
se demuestra que cada país es diferente en la forma de concebir su ordenamiento jurídico.

Con todo, se quiere decir que el Derecho es un fenómeno posterior al hecho, como sujeto
legitimador jurídico, portador de la validez formal posterior en tanto concurre al cambio,
pero consolidando jurídicamente las modificaciones que en las costumbres, concepciones e
instituciones que cada grupo social viene originando durante un determinado periodo
histórico, las que tienen estabilidad gracias a la consagración jurídica a través de los textos.

No obstante, el Derecho también es un fenómeno social y un elemento de la realidad, por lo

que no es sólo normatividad posterior, sino que constituye también una parte contextual
donde se aplica y nace de la sociedad que condiciona y moldea las normas jurídicas. Por
tanto, es la interacción de la sociedad lo que permite que el Derecho también se manifieste
como impulsor de transformaciones y promueva al cambio social estimulándolo, como guía
del futuro. Dichas normas jurídicas promulgadas ya sea a través de procesos históricos o a
través de la interrelación de la sociedad, deben aplicarse hacia el futuro a partir de su
vigencia, en aras de la seguridad jurídica que evita que se cambie las reglas de forma
sorpresiva y sin previo aviso, pues ello generaría una incertidumbre en la sociedad por lo
que no se tendría confianza en el sistema legal de cada país.

Referencias

Montoya Medina. L, (2018). Deberíamos Escoger, Bogotá D.C, enero de 2018.

Montoya Medina. L, (2018). La Insuficiencia Del Derecho En Las Crisis De Pareja. Bogotá
D.C