SEMINARIO ARQUIDIOCESANO

“SAN BUENAVENTURA”
MÉRIDA- EDO. MÉRIDA
Antropología Teológica
Pbro. Ricardo Vielma.
SUÁREZ PAREDES, WILLIAMS
LA CONCEPCIÓN DEL HOMBRE EN EL LIBRO DE LA SABIDURÍA

Una antropología Bíblica, realizado desde una concepción del hombre en el libro de
Sabiduría. Que fue escrito en griego en año 150 a.C. en donde se estudia de acuerdo a lo que
se narra en el texto, como vocabulario clave de libro: soma, psyché, sárx, pneûma. Pero el
que se va resaltar es el pneûma; de acuerdo como se ve en el Antiguo Testamento, con su
concepción unitaria típica del ser humano: carne animada/ alma encarnada(indistintamente),
y no cuerpo más almas1. El libro de Sabiduría en su primera página emplea las palabras sôma
– psyché. Según el autor dice el 9,15 es un leguaje platónico, por otro lado, habla la
inmortalidad del alma 2,22 en donde dos términos están atanasia – aphtharsía (inmotalidad
– incorruptibilidad). En resumen, el libro del Sabiduría se connota lo siguiente: el hombre es
un compuesto de alma y cuerpo; el alma es inmortal y el cuerpo no; la tensión del alma -
cuerpo se resuelve con la muerte; se desconoce la fe en la resurrección. Hay una fuerte
inclinación helenística en el libro de Sabiduría2, hay una filosofía griega. Aunque algunos
autores puedan decir lo contrario. También hay una característica del libro de Sabiduría, que
Dios es alfarero como en el Genesis, de ese hombre entero al que es infundido el aliento de
vida Sb 15, 11. Los conceptos teológicos en la relación entre hombre y Dios, no como
estructura biológica, sino el uso de la inmortalidad netamente Bíblico de la antropología.

Casi todas las grandes culturas de la humanidad han despreciado el cuerpo humano y
lo han tratado como si fuese una cárcel que retiene a la verdadera humanidad, hecha de

1
Ibid. pag52
2
Cfr. 54
valores intelectuales3. No se puede separar el cuerpo y el alma, en el cristianismo, que,
aunque en los primeros siglos tenían este pensamiento platónico. Lo que en cierto modo
podemos decir que el hombre es su cuerpo y que en su cuerpo está todo lo que constituye su
valor. Recordemos que el evangelio cristiano todo en el hombre es corporal, todo es
espiritual, todo es alma. No hay nada fuera del cuerpo. Porque también el espíritu está en el
cuerpo; es el cuerpo humano en cuanto que se orienta bajo la moción de Dios. Pablo anuncia
una vida eterna en el cuerpo. El cuerpo es entonces capaz de una vida eterna. El cuerpo puede
ser espiritualizado. El cuerpo no es incompatible con el Espíritu; el Espíritu anima al cuerpo
y se hace uno con él, formando una sola vivencia. Para la Biblia el hombre es una unidad; es
aquel ser concreto que se presenta en su cuerpo. Ese cuerpo es también espíritu, alma
viviente, pensamiento. La doctrina teológica de la considero el alma y el cuerpo como dos
cuasi-sustancias asociadas en una unión nunca armoniosa. El cuerpo quedó desprestigiado, y
el alma fue la que se llevó con sus actividades la mejor parte. El alma no tiene ninguna forma
de existencia fuera del cuerpo.

3
Comblin, José. Antropología cristiana, La liberación en la Historia. Colección Teología y Liberación. Pag74