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PLAN DE CLASES

Cuatrimestre: I - 2002 Clase No.: 10 Fecha: 26/05/22 Turno: Regular Aula: A-2
Asignatura: FILOSOFÍA Carrera: Relaciones Internacionales
Docente: Lic. Jamillet Hernández Galán

Unidad III: EL SER HUMANO Y LA COMPRENSIÓN DEL MUNDO


Contenido:
4.- Sus grandes temas

4.1 La idea de Naturaleza

4.2 Teoría del Conocimiento

4.3 Filosofía de la Existencia

4.4 Temas del Ser (Ontodología)

4.5 Tema del Valor (Axiología)

4.6 La existencia del alma

4.7 Infinitud

4.8 A modo de conclusión: se aprende a filosofar


Objetivos:
Interpretar la comprensión del ser humano y el mundo

Objetivo Especifico:

Identificar los principales problemas que han ocupado el pensamiento filosófico a


lo largo de su historia.

Interpretar los planteamientos filosóficos sobre la comprensión del ser humano y el


mundo, a través de sus grandes temas y desafíos en la época actual.

Actividades de Enseñanza Aprendizaje:

1. Resumen de la clase anterior.


2. Presentar el tema y objetivo de la clase.
3. Mencionar importancia de los contenidos.
4. Exploración de conocimientos previos.
5. Forma Organizativa de la Enseñanza (F.O.E.)
a.- Clase Expositiva – Ilustrativa (Conferencia Educativa), a través de esta se
propone: a) Dar oportunidad a los estudiantes de hacer preguntas y comentarios,
b) Realizar preguntas dirigidas a los estudiantes para desarrollar la capacidad de
argumentar, y adquirir seguridad en sí mismos.
b.- Guía de Autoestudio (Taller), para realizar a través de los grupos organizados
de estudiantes, para valorar conocimientos adquiridos durante desarrollo de la
clase
Conclusiones: (Preguntas de control de los contenidos impartidos)
Asignación de tareas
Se les asignara de acuerdo con los grupos organizados, realizar trabajos
investigativos que permita integrar y aplicar toda la temática desarrollada en la
Unidad desarrollada. Facilita la comprensión de parte del grupo, porque en base a
la solución a la guía de trabajo, los discentes socializan sus conocimientos,
generando un aprendizaje grupal e individual y quienes traen algún error o
comprensión incorrecta de determinado contenido, pues enmienda con los aportes
del colectivo.
“La verdadera función social de la filosofía reside en la crítica de lo establecido
[…]. La meta principal de esta crítica es impedir que los hombres se abandonen a
aquellas ideas y formas de conducta que la sociedad en su organización actual les
dicta. Los hombres deben aprender a discernir la relación entre sus acciones
individuales y aquello que se logra con ellas, entre sus existencias particulares y la
vida general de la sociedad, entre sus proyectos diarios y las grandes ideas
reconocidas por ellos.»
HORKHEIMER, M.: «La función social de la filosofía» (1940), en Teoría crítica,
Buenos Aires, Amorrortu, 1974
“Vivir sin filosofar es, propiamente, tener los ojos cerrados, sin tratar de abrirlos
jamás” René Descartes.
“No puedo enseñar nada a nadie. Solo puedo hacerles pensar” Sócrates.

PRINCIPALES TEMAS FILOSÓFICOS.

La filosofía se pregunta sobre cualquier aspecto de la vida humana y de nuestras


sociedades en el que la ciencia no tenga respuestas.

Desde el sentido de la vida hasta la ética alimentaria, el bien y el mal, o nuestra


relación con lo sagrado o trascendente.

A parte de eso se puede cuestionar situaciones tan diversas como nuestra


legitimación para mal tratar o sobre cómo ha degenerado nuestra percepción y
aprovechamiento del tiempo.

A lo largo de su historia, la filosofía ha tenido por temas la naturaleza, Dios, el


hombre, la historia, la ciencia- ella misma, la filosofía . Como se dice filosofía de la
naturaleza, de la religión, de la historia, para designar aquellas filosofías o partes
de la filosofía cuyos temas son respectivamente la naturaleza, la religión, la
historia, para denominar la filosofía o la parte de ella que se ocupa con la filosofía
misma no hay término más propio que el de filosofía de la filosofía, de Oriundez
Diltheyana.

4.1 La idea de Naturaleza

Noción de naturaleza. En esta acepción general, la naturaleza viene a coincidir


con la totalidad del universo.

La filosofía de la naturaleza no es otra cosa que la reflexión metafísica sobre el


mundo corpóreo en el que el hombre se encuentra sumergido y en dialogo
permanente con el.
El termino naturaleza adquiere un segundo significado cuando lo usamos para
referirnos a clases o conjuntos de cosas; así, cuando no preguntamos por la
naturaleza de tal o cual cosa, por la naturaleza humana, etc. En este caso,
naturaleza viene a significar lo que las cosas son, lo que denominábamos esencia,
modo de ser permanente o constante de las cosas.

El objeto material de la filosofía de la naturaleza es el conjunto de los entes


naturales materiales. La filosofía natural se pregunta con un enfoque metafisico
por su ser, buscando las causas mas profundas. Por ello, el objeto formal de la
filosofía de la naturaleza es el ser del ente corpóreo.

Santo Tomás de Aquino, siguiendo a Aristóteles, afirmaba que el objeto de la


filosofía natural es el ente móvil.

Efectivamente, el ente corpóreo natural se caracteriza por su capacidad de


cambio, o sea, por su movilidad: la materia esta siempre en potencia de adquirir
nuevas formas.

4.2 Teoría del Conocimiento

La oposición entre razón y sentidos.

Los sentidos no bastan para proporcionarnos el conocimiento de lo que las cosas


verdaderamente son, de su esencia o naturaleza. Solamente la razón puede
llevarnos al conocimiento de la realidad.

Es parte importante de la filosofía, pero es impredecible el saber su resultado


preciso ya que comenzó llena de dudas, preguntas, incógnitas y que a través de
los años se han ido resolviendo hasta el son de hoy. En gnoseología pueden verse
definiciones respecto a los diversos planteamientos filosóficos del problema del
conocimiento, y la relación de la denominación teoría del conocimiento con otros
términos como epistemología, igualmente es importante el conocimiento científico
y no científico.

El conocimiento es parte esencial de toda cultura y hoy, más que en otros tiempos,
el conocimiento marca un estatus dentro de la escala social, por ello se habla de la
“sociedad del conocimiento”, la misma que exige de cada individuo una
sistemática investigación y el dominio de la tecnología, unas cualidades cuya
ausencia genera procesos de exclusión (Beltrán, 2004: 80). Pero la exclusión por
falta de conocimientos no es lo peor que ocasiona este tipo de sociedad, sino la
distorsión de la realidad y por ende, de la verdad. Estamos acechados por la
información, pero la falta de control sobre ella degenera el conocimiento en lugar
de alimentarlo. En este caso, la acción de la filosofía debe ser establecer los
parámetros necesarios para regular la información y plantear el método adecuado
para llegar a un conocimiento verdadero, cuyo fin debe ser el bien común y no el
establecimiento de una jerarquía que designe quién tiene el poder y quién se
somete a él

4.3 Filosofía de la Existencia

“De noche, especialmente, es hermoso creer en la luz” Platón.

Este es un tema que causa controversia en nuestro vivir diario, como el de


preguntarnos que finalidad tenemos nosotros que causa traemos al mundo y así
cuestionarnos del porque y para que existimos, en fin esto busca una orientación a
toda aquella pregunta de sí mismo frente al universo.

Los métodos para llevar a cabo una filosofía son incontables, cada filosofo, u
objetivamente, cualquier persona que se haga una pregunta existencial sobre
algún tema fundamental que rodea la vida, crea su propio método para lograr
comprenderlos. Juntando puntos de vista, opiniones, argumentos, imaginación, y
otras prácticas se logra perfeccionar dicho método al estándar de cada uno.

4.4 Temas del Ser (Ontología)

Es el estudio del ser en tanto que ser es decir mas allá que cualquier otra cosa
que es o existe, en una forma más clara la ontología estudia la existencia o no
existencia de ciertos seres y la manera en que se relacionan si existieran.

4.5 Tema del Valor (Axiología)

Es el debate sobre que valor debe tener el pensamiento humano, trata de temas
como la libertad, la igualdad, la política de las cuales se desarrolla nuestro vivir
diario para poder llegar a definir el valor de ser de cada quien.

4.6 La existencia del Alma

El alma viene a concebirse como el principio de la vida y del conocimiento.

El alma y la vida se han encontrado unidas desde la antigüedad. Se consideraba


que un ser estaba vivo en virtud de su “anima”, de su alma. De hecho, cuando
esta abandonaba el cuerpo, era el momento de la muerte. Se deja de vivir porque
el principio vital (el alma) deja de estar unido al organismo. La consideración del
alma como principio vital, es la concepción aristotélica, y como principio racional,
la concepción platónica, aunque ni Aristóteles, ni Platón, fueron tan excluyentes.
4.7 Infinitud

La existencia muestra que el tiempo es un proceso constante y que el universo se


crea y recrea en forma continua, todo cambia, se transforma, pero que nunca
termina siendo nada, porque la nada es inconcebible, ya que el universo es
materia y energía, o sea que siempre hay algo.

4.8 A modo de conclusión: se aprende a filosofar


Todos los temas anteriormente tratados nos llevan a la última parte de este
trabajo: responder a la pregunta sobre si la filosofía se puede enseñar.
Ya con lo abordado se puede dilucidar que la filosofía de ninguna manera se
enseña, se la vive. En todo caso se “aprende a filosofar”, lo que significa que la
actitud filosófica depende de la voluntad, como ya se ha explicado.
A lo que la educación debe propender es a crear los espacios necesarios para que
dicha actitud filosófica pueda ser aprendida y practicada, sin que esto deje de
significar que cada persona debe hacer de la filosofía su opción, es decir, sin
olvidar que la filosofía como vivencia es un acto de libertad.
Tampoco hay que olvidar que para poder empezar a filosofar “es absolutamente
indispensable que el aspirante a filósofo se haga cargo de llevar a su estado una
disposición infantil. El que quiere ser filósofo necesitará puerilizarse, infantilizarse,
hacerse como el niño pequeño” (Morente García, 2000: 28), es decir, el sujeto
debe fomentar en sí mismo esa incesante cualidad de admiración, de
interrogación, de búsqueda y descubrimiento. Solo a partir de esto puede formarse
la conciencia crítica.

El proceso de concientización implica, por lo tanto, ser parte de los procesos de


democratización de manera crítica y activa, no solo de una manera ingenua y
repetitiva. Se trata de pasar del discurso a la praxis y para lograr esto es necesario
obtener las herramientas necesarias que permitan reconocer los datos de la
realidad y sobre todo reconocer en ellos las problemáticas o los nexos que se
establecen entre un hecho y otro. Esto es primordial para la conciencia histórica y
para la conciencia en general.

No se puede negar que el proceso de construcción de la conciencia tiene una


relación estrechísima con la educación, pues en ella se deben encontrar los
espacios necesarios que nos ayuden a romper con los antiguos paradigmas,
valores y conocimientos. La educación, junto con la reflexión filosófica, debe
ayudarnos a crear situaciones que lleven a la persona a darse cuenta y ubicarse
en su propia realidad, para desde ahí criticar los hechos y luego actuar sobre ellos.
Freire, citando a Álvaro Vieira Pinto, dice que la conciencia crítica “es la
representación de las cosas y de los hechos como se dan en la existencia
empírica, con sus correlaciones causales y circunstanciales” (Freire, 2010 [1967]),
es decir, la conciencia crítica es capaz de juzgar los hechos mediante sus causas
y sus relaciones circunstanciales. No se pude analizar y criticar los hechos a partir
de estándares históricos, por decirlo de alguna manera, sino que cada hecho tiene
su propia circunstancia. Además, es importante ser protagonistas del cambio y
participar en el mejoramiento de los hechos que se han identificado. La conciencia
debe encontrar su punto de partida y llegada en la realidad concreta, esto es
imprescindible.

La concientización entendida de esta manera tendría tres partes fundamentales e


imprescindibles:

1. Ubicarse en la realidad, en la situación específica.


2. Analizar y realizar conexiones que se establecen entre los acontecimientos que
tienen lugar en las circunstancias que se presenten e identifiquen, pues esto
genera procesos de criticidad.
3. Dar el paso hacia la transformación o la participación activa dentro de esa
realidad, esto es lo que produce la liberación.

El proceso de concientización implica una retroalimentación, por ello los tres pasos
descritos no pueden separarse uno del otro, de esta manera resulta que entre más
me ubico y conozco mi situación, mejora mi capacidad de ser crítico ante ella y me
convierto en germen del cambio. Pero el proceso no acaba con la praxis, pues hay
que regresar a la criticidad y al conocimiento de la realidad. El proceso de la
concientización es cíclico, se va enriqueciendo y mejorando mientras se lo va
asumiendo y poniendo en práctica.

Como ya se ha dicho, la filosofía y los procesos de concientización deben


encarnarse en la práctica del ser humano. No puede llamarse conciencia o
filosofía a una reflexión que se quede en teorías, de ahí que tanto educación como
filosofía sean importantes para un desarrollo del pensamiento integral. Ambas se
presentan como la mejor vía de solución a los problemas que la sociedad actual
nos presenta. Este debe ser el compromiso impostergable dentro de la educación
y la filosofía, pues solamente a partir de esta postura crítica frente a la realidad se
pueden crear procesos innovadores en el desarrollo del pensamiento, que
contemplen la totalidad de la persona. Invito pues, a cada uno de los lectores, ya
sean estudiantes, docentes, psicólogos, filósofos, autodidacticas… a vivir la
filosofía como una práctica coherente de vida.

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