José María Arguedas nació en Pueblo Grande en Andahuaylas, en el departamento de
Apurímac un 18 de enero de 1911. Sus padres fueron el abogado Victor Manuel Arguedas y Victoria Altamirano una hacendada andahuaylina. A los tres años de edad quedó huérfano de madre y después de 3 años su padre se casa nuevamente y pasan a vivir con su madrastra. Jose María tuvo una infancia difícil por la mala relación que sostuvo con su madrastra y hermanastro puesto que la madrasta sentía un evidente desprecio y constantemente lo mandada a convivir con los criados indígenas de la hacienda, por su parte el hermanastro lo maltrataba tanto física como psicológicamente es por eso en el año 1921 huyó de casa con su hermano Arístides y se refugiaron en la hacienda “Viseca” donde se crió entre los indígenas quechua hablantes a quienes les tomó cariño. Después de un tiempo es recogido por su padre y esta vez Arguedas lo acompañaba en sus viajes laborales. En 1926 empezó sus estudios secundarios en el colegio San Luis de Ica donde sufrió en carne propia el desprecio de los costeños hacia los serranos, tanto por parte de sus profesores como de los mismos alumnos. En esa etapa se enamoró de una muchacha llamada Pompeya la cuál lo rechazó por ser “serrano” es así que Arguedas quiso vengarse siendo el primero de su clase para así derrumbar la creencia de la incapacidad intelectual del hombre andino. Después de dos años reanudó otra vez a la sierra y estudio en el colegio Santa Isabel aquí en Huancayo y cursó sus dos últimos años de secundaria en el colegio Nuestra Señora de la Merced en Lima. Ya en 1931 con 20 años ingresó a la Facultad de Letras de la Universidad Nacional de San Marcos para estudiar Literatura. Después de ello publicó su primer cuento Warma Kuyay y en 1937 fue apresado por participar en una protesta estudiantil y estando en prisión se dio tiempo para traducir canciones quechuas. Después de Licenciarse Arguedas inició su carrera docente y contrajo matrimonio. Y a fin de complementar su formación profesional se especializó en la Universidad de San Marcos en Etnología. En 1941 publicó Yawar Fiesta, años después el cuento El sueño del pongo y así entre otras obras y novelas más. Arguedas en ese entonces presentó episodios depresivos, aunque en aquel tiempo se recuperó, eventualmente tenía otras recaídas posteriores. Ya en el año 1958 publicó Los ríos profundos que es una novela autobiográfica por la cual recibió el Premio Nacional de Fomento a la Cultura «Ricardo Palma» y esta novela ha sido considerada como su obra maestra.
Arguedas trabajó como catedrático en la Universidad de San Marcos, fue nombrado
director de la Casa de la Cultura del Perú y en 1964 publicó su obra más ambiciosa: Todas las sangres, en la que el escritor quiso mostrar toda la variedad de tipos humanos que conformaban el Perú, sin embargo, esta novela fue criticada severamente durante una mesa redonda y estas críticas fueron devastadoras para Arguedas, según la interpretación de algunos, esas críticas fueron uno de los tantos eslabones que se sumaron a alimentar la depresión de Arguedas, que lo llevaría a su primer intento de suicidio. Y así en 1965 se volvió a casar por segunda vez e hizo numerosos viajes tanto en el extranjero y en el interior del Perú y así publicaba otras obras y novelas. Ya en esos años Arguedas venía recibiendo múltiples tratamientos psiquiátricos ya que, a partir del intento de suicidio, su vida ya no volvió a ser la misma. Se aisló de sus amigos y renunció a todos los cargos públicos que ejercía en el Ministerio de Educación, con el propósito de dedicarse solamente a sus cátedras en la Universidad Agraria y en la de San Marcos.
Finalmente, en 1969 renunció a su cargo en la Universidad Agraria y en ese año se
encerró en uno de los baños de la universidad y se disparó un tiro en la cabeza. Pasó cinco días de agonía y falleció el 2 de diciembre de 1969.