¿Dónde está Isabel?

(Novela)
Capítulo I
Fueron muchos los años en que inició la aventura de Isabel
González, una aventura que podía considerarse un extravío en su
vida, jamás pensó que un solo hecho macara una historia
completa para ella. Sus familiares, amigos y enemigos estuvieron
presente cuando debían de hacerlo pero por cuestiones de
privacidad no siempre se pueden guardar secretos debajo de la
almohada.
Isabel, una persona muy cariñosa, muy hermosa, alguien que se es
fiel a sí misma, consiguiendo siempre los lados positivos a las
cosas cotidianas que se encuentran en su camino. La mañana del
22 de abril del 2010 era su cumpleaños número 16, como típico
de su familia le prepararon un excelente desayuno y una canción
cantada por su hermano, quién no canta muy bien en realidad.
Recibió muchas llamadas de sus amigos para felicitarla por su
cumpleaños.
En la tarde hicieron una reunión con familiares, amigos y
conocidos de Isabel con motivo de celebrar su cumpleaños. Cosa
que casualmente hoy mismo inauguraban una nueva discoteca
para jóvenes desde 16 años, Isabel era una chica que le gustaba la
música y sobretodo bailar. Sus padres decidieron que como era su
día le dieron permiso sólo por hoy que fuera con sus amigos a la
nueva discoteca de la ciudad.
Los padres eran muy confiado con su hija, nunca pensarían que
pudiera hacer algo indebido, fueron los mismos padres quienes
llevaron a Isabel y sus amigos a la discoteca después que
culminara la reunión. A veces los errores aparecen inesperados y
no nos damos cuenta de lo que hacemos.
Sus padres eran muy exigentes con respecto a la seguridad de su
hija, tenían solo una y un hijo mayor, no querían que le sucediera
algo malo a su futura generación.
-Isabel debes de avisarnos para buscarte.
-Ok, seguro será antes de las 04:00am.
-Confiamos en ti. Cuídate Isabel ya llegamos al lugar.
-Igual, cuídense los quiero, son los mejores padres del mundo.
Cuando los padres de Isabel quienes eran Humberto y Diosa
llegaron de nuevo a su casa donde aún seguía la reunión con los
familiares nada más, Cecilia tía de Isabel empieza hablar que así
son los jóvenes hoy en día queriendo experimentar cosas nuevas.
Empezaron hablar de su pasado cuando ellos también iban a
discotecas y de lo bien que la pasaban, pero alguien de la familia
había salido justamente cuando fueron a llevar a Isabel a la disco.
Pasada la noche, no había señales de Isabel. Toda su familia
empezó a preocuparse porque no sabían en donde diablos estaba
Isabel. Sus amigos creyeron que se había ido a su casa, pero
Humberto y Diosa se les olvidó irla recoger. Empezó a armase un
escándalo en la familia de Isabel, los amigos no tenían idea de
donde pudiera estar, fue la peor noticia y solo estaba empezando
el nuevo día.
-Humberto que vamos hacer, necesito a mi hija. ¡Humberto! ¿Mi
hija dónde está?
-Cariño también estoy preocupado, no lo sé.
-La he estado llamando pero su teléfono parece estar descargado
decía Cecilia.
Todos los amigos y familiares se habían enterado de la noticia y
rápidamente fueron a la casa de Humberto y Diosa para informase
mejor de lo que estaba pasando. Sin embargo ya era el medio día
y no había rastros de ella pero la familia ya había acudido a un
Centro Policial para notificar un que su hija se había perdido.
Un encargado del Centro Policial decidió participar en esta
investigación que se iba a empezar a realizar. Fue a la casa de la
familia para obtener mejor las informaciones.
-Buenas Tarde soy Carlos, parte del Centro de Investigaciones, he
venido por el caso que se ha planteado en el Centro.
-Buenas Tardes Carlos bienvenido decía Cecilia.
-Verás Isabel y sus amigos fueron anoche a una disco a celebrar
su cumpleaños y hasta ahorita no hemos sabido nada sobre ella y
creemos que está perdida o alguien la secuestró.
-¿Mi hija está secuestrada?
-Cálmese Sra. Diosa aun es una información complementaria
necesitamos investigar el lugar donde estuvieron anoche.
-Es buen paso Sr. Carlos podemos empezar ya.
-Lo siento Sr. Humberto pero es tarea mía ir al lugar a investigar
el asunto junto con mi compañera.
-Ok entiendo es su trabajo.
-Gracias, les pido por favor a todos tener paciencia que las
mejores cosas tardan en llegar. Su hija aparecerá si todos
ayudamos.
-Gracias Sr. Carlos por su gran entusiasmo pero no me quedaré
tranquila hasta que no vea a mi hija.
-Comprendo.

Ha sido un terrible día para la familia González, sin rastros de

Isabel, problemas que se han generado como la desconfianza
entre la familia con los amigos y conocidos de Isabel. El
investigador Carlos continúa su trabajo junto con su compañera
Katherine quien lo ayuda en estos casos de pérdidas.
-Muy bien Katherine, depende de nosotros este asunto.
-Eso es correcto Carlos. No podemos quedarles mal.
-Vamos a la discoteca por información.
-Ok, yo conduzco.
Mientras iban camino al sitio, el familiar de la noche anterior que
había salido un momento en la reunión era un primo muy cercano
de Isabel, llamado Daniel quienes guardaban un secreto muy
profundo que no sabía nadie. Un secreto que ni la misma Isabel
pensaba en que podía llegar a guardar en debajo de su almohada;
pasaban las horas y la desesperación familiar aumentaba.
-Humberto siento que debo de hacer algo.
-¿Qué debes de hacer Diosa?
-No lo sé pero no puedo estar con los brazos cruzado mientras el
investigador se encarga del caso.
-Yo también estoy así cariño, estaba pensando en preguntarles
bien a los amigos de Isabel exactamente qué había pasado esa
noche.
-Es una buena idea Humberto, yo me encargaré de sus amigas y
primas y tus de los demás. ¿Ok?
-Bien.
La madre desesperada empezaba a recordar las últimas palabras
que su hija le había dicho “Igual, cuídense los quiero, son los
mejores padres del mundo”, se entristecía el saber en dónde
pudiera estar su hija. Incluso llegaba pensar que pudiera estar
secuestrada.
Una vez que los investigadores llegan al lugar donde pasó el
problema, empiezan a hacer preguntas a los respectivos dueños,
quienes no le aseguraron nada en absoluto, la única información
que obtuvieron fue un video de seguridad en donde se ve Isabel
con el pelo corto dirigiéndose a un vehículo. Humberto había
seguido a los investigadores y supo que habían encontrado algo
de información por lo que sugirió que le mostraran.
-Soy el padre de Isabel necesito ver ese video.
-No creo que sea buen momento Sr. Humberto.
-Lo sé pero es mi hija y es mi derecho investigador.
Seguidamente le facilitaron el video donde el padre asegura que el
vehículo se le hace familiar.
-Estoy seguro que conozco ese vehículo.
-¿Está seguro Sr.?
-Por supuesto, tengo seguridad de que es del padre de Daniel,
primo de Isabel.
-Mucha gracias por su ayuda Sr. ¿Sabe en donde se encuentra este
vehículo?
-Sí, y no queda muy lejos de aquí podemos ir ahora mismo antes
de que oscurezca.
-Muy bien.
Al llegar al lugar donde dice Humberto que está el vehículo,
entran a la casa la cual es de su hermano Juan, quien tiene un hijo
llamado Daniel.
-Buenas Tardes Sr. Juan somos los investigadores del Centro de
Investigación y tenemos unas informaciones que nos gustaría que
nos ayudara a comprenderlas mejor.
-Sean bienvenidos decía Cecilia, esposa de Juan.
Los investigadores le muestran el vehículo y aseguran que no es
de su pertenencia. Pero Humberto asegura que ese vehículo es de
Juan.
-¿Está seguro que no es su vehículo Sr. Juan?
-Por supuesto Sr. Carlos.
-¿Daniel en dónde está?
-Salió a dar una vuelta, esto del asunto de su prima lo tiene muy
mal. Dijo Cecilia.
-Muy bien, entonces seguiremos investigando, que pasen una felíz
noche.
-Igualmente señores.
Humberto aun sospecha de que el vehículo sea de Juan solo que
no tiene pruebas suficientes para probarlo, por otro lado no hay
noticia de Isabel todavía. Daniel esconde un secreto que puede
llegarse a descubrirse en un cerrar y abrir de ojos.
Capítulo II
La ciudad en la que se encuentra la Familia González es muy
pequeña pero tiene todo lo necesario para que sea un lugar muy
entretenido como lo son los paisajes naturales. Diosa sueña a
menudo con Isabel en grandes praderas diciendo que necesita
ayuda. Por lo que un día le dice a Humberto.
-Sabes, he estado soñando con Isabel varias veces en un lugar de
las praderas que hay acá en la ciudad. No sé si es una señal de
algo, simplemente no sé pero creo que es algo importante.
-Cabe destacar que Isabel siempre le ha gustado cabalgar en las
praderas cuando íbamos al campo.
Deberíamos de ir hoy al campo para despejar un poco la mente y
a ver si conseguimos algo.
-Me parece buena idea. Toda la familia.
La mañana empezaba a salir muy bien hasta que recibieron una
carta en la puerta donde no se supo quien la había dejado. Una
carta muy hermosa y tenebrosa a la vez, cubierta de rosas con
cadáveres
donde contenía un mensaje importante, se trataba de Isabel y su
desaparición.
Diosa al momento de ver la carta se sorprende pero no le avisa a
nadie, y rápidamente la abre.
“Buenos días Sra. Diosa, sabemos que está desesperada por
encontrar a su hija Isabel, pero le temo que tendrá que esperar
mucho tiempo para poder encontrarla viva o muerta, a menos que
desee pagar una deuda que de hace tiempo ha estado vigente”
Diosa comprendió que la carta era únicamente para ella, pero
cuando vio que se trataba de una deuda llamó a Humberto para
que le dijera que deuda no había pagado desde hace mucho
tiempo.
-¡Humberto! ¿Cómo es eso que debes una deuda?
-¿Qué deuda?
-Acá, reciba esta carta que termina de llegar.
-Sabes que en la empresa que trabajamos semanalmente
despedimos a gente que no sirve para trabajar y muchos esperan
algo de dinero por su servicio ofrecido, a lo mejor es algún
trabajador obsesionado con recibir tal dinero.
-No lo sé pero hablan de Isabel que la puedo encontrar viva o
muerta y eso me asusta.
-También a mí pero lo que podemos hacer es avisarle al
investigador que investigue esa carta muy detalladamente.
-Ok, pero igual esto no me convence.
La familia al mediodía salió al campo y se quedaron hasta la
tarde. Recordaban los buenos momentos que la pasaban y cuando
Isabel cabalgaba en las praderas con sus primos.
-Eran buenos momentos, ¿Cierto Humberto?
-Sí, ¿Por qué demonio nos pasa esto? ¿Qué hemos hecho?
-Yo siento que esto es una prueba o algo no sé.
El investigador Carlos y su compañera Katherine han llegado
repentinamente al campo de la familia para darles una noticia
muy importante sobre Isabel.
-Sr. Carlos ¿Qué hace por acá? ¿Tiene noticias?
Por supuesto. Verá, la carta que nos envió es de un ex trabajador
de la compañía de su esposo quien realmente hizo la carta sólo
para obtener un dinero, pero es muy lógico que no tiene a Isabel,
pero la empresa de su esposo genera mucho dinero y muchos
enemigos a la vez que quieren tumbarlo y hacer caer a la empresa.
-Que quiere decir exactamente entonces.
-Creemos que alguien específicamente de la familia que trabaje
con Humberto en la empresa, puede tener oculta a Isabel solo
para lograr ser el jefe de la empresa.
-Tiene mucha coherencia Sr. Carlos. ¿Pero quién puede ser?
-Es lo que tenemos que averiguar.
Capítulo III
La familia cada vez más preocupada con la noticia que le daban
sobre Isabel, era un asunto importante y aún no había señales de
ella. Tal era el asunto que salió en muchos medios de
comunicación, donde decían que la hija del jefe de la empresa
más famosa de la ciudad estaba desaparecida. Esto ponía a mil las
mentes de las demás persona pensando en que pudieran hacer
para conseguir a la niña y pedir algo a cambio, pero nadie tenía
idea de dónde podía estar Isabel.
Cecilia era una trabajadora de la empresa de su hermano, era casi
jefa, y junto con su esposo Juan querían lograr sacar a Humberto
de la empresa y quedar ellos como los jefes. Desde tiempo
remotos Isabel no fue de agrado para Cecilia, ella veía a Isabel
como alguien doble cara pero su hijo era muy pegado con Isabel,
tenían una relación muy amorosa que podía llegarse a pensar en
que podían guardar secretos muy profundos.
Cecilia sabía que Isabel significaba mucho Humberto y Diosa, por
lo que pensó entonces que Isabel sería la carnada perfecta para su
plan macabro el cual no lo pensó sola, ella y su esposo idearon
cada paso que se daba en la investigación, pero de los cuales
había muchas sospechas de que los pudieran encontrar como
secuestradores.
Daniel e Isabel a escondidas se amaban e incluso se acostaban y
pasaban noches juntos, Daniel quería escaparse e irse con Isabel a
otro lugar pero Isabel no quería eso, ella igual lo veía como su
primo.
Por otro lado sus primas le tenían mucha envidia a Isabel por ser
una mujer que le daban todo lo que quería lo cual provocaba
mucha envidia incluso a su propio hermano mayor.
Isabel nunca pensó que podría llegar a ser secuestrada por tales
motivos, pero tenía una amiga que si le decía esas cosas, era su
mejor amiga. Ellas planearon un plan, en el cual fingirían el
secuestro de Isabel, para ver lo sí lograban encontrarla y a la vez
todos los que la querían secuestrar se iban a quedar sin planes
como los de Cecilia y Juan.
Isabel se hizo un cambio de look muy diferente al que
acostumbraba tener, su amiga le dijo que se lo hiciera para que no
la descubrieran tan fácilmente. Estaba en una casa encerrada pero
tenía comida y muchas cosas para no aburrirse, pero con el
tiempo se estaba desesperando por salir de la casa, ya estaba
pensando que su amiga en verdad la tenía encerrada.
Era cierto lo que pensaba Isabel, nunca pudo conocer muy bien su
amiga. Ésta pensando bien las cosas se dijo así misma.
-Bien tonta es Isabel pero me da dado el poder ahora de ser la que
mande en este asunto. Ahora que la tengo encerrada en una casa
lejos de la ciudad se hará solo lo que yo diga, tal vez quiera todo
el dinero se su padre y pudiera escaparme pero entonces Isabel me
delataría.
Por lo que pensó en que si hacía eso tendría que matar a Isabel
para eliminar las pruebas. Era mucho peso para ella sola por lo
que necesitaba de alguien más para progresar su plan. Cecilia era
la persona correcta para este asunto.
Capítulo IV
2 Meses después aún estaba vigente la desaparición de Isabel, la
madre ya tomaba la situación muy mal a medida que pasaba el
tiempo. Cecilia y la amiga de Isabel se habían reunido hace poco
para plantear su plan en cómo hacer caer a Humberto de la
empresa pero necesitaban bien qué hacer con Isabel, por lo que
Cecilia pensó aunque fuera su sobrina lo correcto sería matarla y
hacerle un engaño a su propio hermano.
Cecilia era una persona muy fuerte de carácter, casi una persona
sin sentimientos que no le importaban muchas cosas en la vida,
por lo que no le dolía hacer cualquier locura criminal, era muy
ingeniosa y siempre le salían las cosas bien.
La familia ha recibido una llamada en que deben de darle todo el
dinero de la empresa de Humberto a cambio de la entrega de
Isabel el cual sería en un campo lejano de la ciudad en la noche de
ese mismo día. La familia quedó totalmente en shock. Fue una
noticia muy impactante e importante a la vez, no sabían que
hacer.
-Humberto que vamos hacer, ¿Cómo vamos a sacar todo el dinero
de la empresa? ¿Nuestra hija? Dios Santo
-No lo sé cariño.
Los investigadores no tardaron en llegar por lo que estos se
sugirieron un plan muy ingenioso que podría resultar y a la vez
arriesgado.
-Señores debemos estar calmados. El dinero es lo de menos, hay
que esperar que llamen de nuevo y le dirán que llegaran a la hora
con el dinero.
A lo que entra una llamada a la casa.
-Tenemos a Isabel y la podemos matar cuando queramos,
necesitamos el dinero hoy, y sólo podrá ir Humberto sin señales
de policías o muere Isabel.
-Ok, es una situación muy difícil pero no podemos dejar que vaya
usted solo Sr. Humberto
-No estás viendo que si van conmigo matan a mi hija.
-Lo sé por esa razón usted debe de llegar primero y nosotros
después.
-No lo sé detective Carlos pero es algo que puede perjudicar a mi
hija.
-Es lógicamente que si va solo será engañado y no le darna a su
hija.
-Bueno eso también es válido Humberto.
A lo que se deciden que van hacer, Cecilia dejando a un lado su
otra cómplice se ha llevado a Isabel al campo y la tiene amarrada
contra un árbol y sellada su boca para que no grite o pida auxilio.
Capítulo Final V
El momento llega, Cecilia toda enmascarada esta junto con Isabel
diciéndole.
-Lo siento pero vales mucho y tu padre siempre ha sido un
hombre ignorante, nunca ha sabido valorar a nuestra familia,
aparte que tú era una perra sucia que te acostaba con mi hijo
Daniel. ¿En qué pensabas que no me daría cuenta?
-Ahora estas sufriendo, fingiste un secuestro que se convirtió en
realidad el cual no tendrá un final feliz, bueno para ti no será un
final feliz.
La amiga de Isabel estaba arrepentida de lo que había hecho y
cuando llego a donde estaba Cecilia esta le dijo.
-Que has hecho Cecilia, mira lo que hemos hecho.
-¿Que hablas tú?, tu misma fuiste la que empezaste todo. Y no me
vengas con que estas arrepentida.
-Lo sé, pero ahora tú estás loca, liberemos a Isabel para calmar
todo, no quiero ir presa.
A lo que Cecilia agarra su arma y le dispara a su cómplice
examiga de Isabel.
Ha llegado Humberto al lugar con un bolso pesado en cual no
posee valor.
-¿Dónde estás Isabel?
Isabel escuchó a su padre y rápidamente lograr quitarse la cinta de
su boca y pega un grito. Cecilia queda dispara al aire.
-No dispare aquí tengo el dinero.
-Póngalo en el suelo y váyase.
-No me iré sin mi hija.
-Váyase o el próximo disparo será hacia usted.
A lo que se escuchan las sirenas y Cecilia no tuvo otra opción que
dispararle a su hermano, sólo logró herirlo.
-Cecilia dijo Isabel.

Cecilia rápidamente a ver que las cosas no estaba saliendo como

quería, montó en su caballo con su arma y huyó con Isabel, para
matarla en lo más alto del campo.
-¿Humberto que te han hecho?
-No hay tiempo se han llevado a Isabel y me parece haber oído la
voz de Isabel diciendo Cecilia.
-Los investigadores subieron a lo alto del campo.
Cecilia sabía que la seguían por lo que paró, se bajó de su caballo
y tiró a Isabel, la cual fue bajando la colina mientras iban
amarrada rodando y golpeándose por rocas y hierbas espinosas.
Los investigadores logran conseguir a Isabel y cuando estos ya se
la llevaban Cecilia dispara justamente a Isabel, la cual no logra
matarla solo la ha herido, y antes de que huyera Cecilia, fue casi
capturada por los demás policías que llegaron, Pero esta logró
matar a todos y huyó
-¿Mi vida que te han hecho? Dios mío.
-Madre estoy bien. Decía Isabel toda débil y casi desmayada.
Todos fueron a un centro de sanación cercano para llevar a Isabel
excepto Humberto, dijo que los alcanzaría luego. Consiguió un
caballo y un arma y empezó a buscar a su hermana Cecilia. Luego
de un rato buscándola Cecilia lo encuentra a él desprevenido.
-Moriremos juntos.
-¿Por qué hiciste esto Cecilia?
-Sabes cuál es la respuesta Humberto.
-No entiendo, has tenido todo lo que has querido.
-No todo, siempre quise tener una hija como Isabel y nunca lo
pude, muchas cosas he querido y todas las has logrado tú.
-No es lo que parece he hecho todo mi esfuerzo por lograrlas
Cecilia no te hagas la inocente en este asunto. Dime por.
A lo que dispara Cecilia. Pero Humberto caído no se quedó atrás
y también logró dispararle a Cecilia. Ambos murieron en la
pradera del campo. Diosa no sabía nada que su esposo había
muerto, estaba tan ocupada con el bienestar de su hija.
Finalmente Isabel logra ser salvada justo a tiempo. Diosa se ha
enterado de la muerte de su esposo. Pasa 2 meses después. Diosa
e Isabel vuelven a la pradera donde comienzan a hablar de cómo
sucedió todo. El investigador se volvió muy amoroso con Diosa
por lo que establecen una relación muy íntima.
Poco tiempo después 2 amigas de Isabel han ido a visitarla en el
campo, empezaron a contar historias en las noches.
-¿Oye Isabel aún recuerda todo lo que paso?
-Es algo que nunca olvidaré.
-Lo sentimos tanto. Elizabeth y yo estábamos pensando en hacer
algo parecido con lo que había hecho con tu amiga, algo como un
secuestro.
-¿Está bromeando no?
-No es broma.