Documentos de Académico
Documentos de Profesional
Documentos de Cultura
CLIMA DE LA TUNDRA
La tundra es un bioma que se caracteriza por presentar un clima sumamente frío, vientos
muy fuertes y escasas precipitaciones (entre 500 y 1000 mm anuales). Las pocas
precipitaciones suelen darse en verano
(aumentan en zonas de tundra costera) y dan
como consecuencia un suelo con pocos
nutrientes. La mayoría de las tundras tiene
más que dos estaciones al año: el invierno,
que es más largo que el verano, frío y oscuro;
y el verano, que es corto y tiene ligeras
precipitaciones. Las temperaturas de la tundra
son frías durante todo el año y varían según cada tipo de tundra. Pueden llegar a un
promedio de 5º C en los meses cálidos y por debajo de los -20 ºC en los meses fríos.
Durante el verano, el deshielo de la capa superior del suelo produce zonas de pantanos.
FAUNA DE LA TUNDRA
Los animales de la tundra deben hacer frente a las
pocas precipitaciones y a las bajas temperaturas.
Algunos evitan el invierno migrando a zonas más cálidas
y otros tienen capas de grasa debajo de la piel y un
pelaje tupido y corto que los protege del frío y del viento
de la tundra. Además, es común encontrar animales de
patas cortas y orejas pequeñas, lo que les permite tener la menor cantidad de piel
expuesta a las bajas temperaturas.
La fauna que habita en la tundra varía según el tipo de tundra y las condiciones climáticas
de cada una. Los animales más comunes en la tundra ártica son: la liebre blanca, el lobo,
el zorro ártico, el oso polar, el reno, el buey, los lobos marinos y las focas. Es frecuente
que muchos de estos animales tengan pelaje blanco para mimetizarse con la nieve o el
hielo del suelo de este bioma.
FLORA DE LA TUNDRA
Debido a los fuertes vientos, la vegetación de la tundra es de estructura sencilla y
mayormente baja. Además, los suelos congelados y la falta de agua hacen difícil la
supervivencia de la vida vegetal. Sin embargo, en muchas partes de la tundra el suelo se
siempre verdes. En estos bosques pueden hallarse las famosas sequoias, árboles
gigantes capaces de alcanzar los 275 metros de altura a lo largo de sus miles de años de
existencia, generalmente en los bosques templados norteamericanos. Otras especies
típicas del bosque templado son el arce, los abetos, las piceas y otros árboles de semilla,
como el nogal.
año y vegetación de selva (por ejemplo, en las islas Galápagos o la costa noroeste del
Perú). Y si se habla de la zona tropical con relación al clima tendría que hacer referencia a
toda la zona intertropical, que es la zona latitudinal caracterizada por los climas isotermos,
sin que haya un solo tipo de vegetación (de selva) ni un solo tipo de clima. Al contrario, en
la zona intertropical existen casi todos los tipos climáticos y de vegetación que pueden
encontrarse en todas las latitudes de la Tierra
Una selva tropical es un bioma de la zona intertropical con vegetación exuberante, en
regiones de clima isotermo con abundantes precipitaciones y con una extraordinaria
biodiversidad. Hay muchas especies vegetales diferentes, pero con pocos ejemplares de
cada especie en cada unidad de superficie. Este tipo de bioma se da en climas tropicales,
especialmente en la franja ecuatorial, y algunas veces en las regiones subtropicales, en
este último caso, en condiciones muy específicas y favorables. El nombre de selva
tropical es de uso muy extendido y el nombre de selva ecuatorial es en realidad
equivalente pero definido desde el punto de vista de su localización latitudinal.
Las selvas son el hábitat de dos terceras partes de toda la biodiversidad de fauna y flora
del planeta. Aún quedan por descubrir millones de especies de plantas, insectos y
microorganismos. Las selvas tropicales se suelen llamar “la mayor farmacia mundial”
debido a la gran cantidad de medicinas naturales que provienen de ellas.
CARACTERISTICAS DE LA SELVA
ESTRUCTURA DE LA SELVA
FAUNA DE LA SELVA
Ante el abundante alimento en las regiones selváticas, la variedad de especies exóticas y
endémicas que forman parte de este bioma es impresionante. Principalmente los
animales viven en los árboles y un pequeño porcentaje reducido, hábitat a nivel de suelo.
Se caracterizan por tener una diversidad de insectos amplia cómo; las hormigas, moscas,
mariposas e insectos de palo, entre otros. Como ejemplos de fauna en las selvas
encontraremos; caimanes, monos, tortugas, todo tipo de serpientes, jaguares,
murciélagos, tigre, cocodrilos, un gran número de ranas y tarántulas…etc.
PASTIZALES
Son comunidades vegetales donde predominan los pastos con pocos árboles y arbustos.
Pueden ser producto del desmonte de terrenos boscosos, pero aquí nos referimos a los
naturales. En las sábanas pueden existir árboles, pero son escasos y muy dispersos.
DESIERTO
Un desierto es un bioma de clima árido, en donde las precipitaciones son escasas. Estos
suelen poseer poca vida, pero eso depende del tipo de desierto; en muchos existe vida
abundante, la vegetación se adapta a la poca humedad (matorral xerófilo) y la fauna
usualmente se resguarda durante el día para preservar humedad. El establecimiento de
grupos sociales en los desiertos es complicado y requiere de una importante adaptación a
las condiciones extremas que en ellos
imperan. Los desiertos forman la zona más
extensa de la superficie terrestre: con más de
50 millones de kilómetros cuadrados, ocupan
casi un tercio de esta. De este total, 53 %
corresponden a desiertos cálidos y 47 % a
desiertos fríos. Los procesos de erosión son
factores de suma importancia en la formación
del paisaje desértico. Según el tipo y grado de
erosión que los vientos eólicos y la radiación
solar han causado, los desiertos presentan diferentes tipos de suelos: desierto arenoso es
aquel que está compuesto principalmente por arena, que por acción de los vientos forman
las dunas, y desierto pedregoso o rocoso es aquel cuyo terreno está constituido por rocas
o guijarros (este tipo de desiertos suele denominarse con la palabra árabe hamada).
Los desiertos pueden contener valiosos depósitos minerales que fueron formados en el
ambiente árido, o fueron expuestos por la erosión. En las zonas bajas se pueden formar
salares. Debido a la sequedad de los desiertos, son lugares ideales para la preservación
de artefactos humanos y fósiles. También se define desierto como un lugar despoblado,
no habitado por humanos ni apenas por ser vivo alguno. Según esta definición, también
son desiertos los situados en climas más fríos, como el ártico o la tundra.
Las personas han luchado por vivir en los desiertos y las tierras semiáridas circundantes
durante milenios. Los nómadas han trasladado sus rebaños y manadas a donde sea que
haya pastoreo y los oasis han brindado oportunidades para un estilo de vida más estable.
El cultivo de regiones semiáridas fomenta la erosión del suelo y es una de las causas del
aumento de la desertificación. La agricultura en el desierto es posible con la ayuda del
riego y el Valle Imperial en California proporciona un ejemplo de cómo las tierras antes
áridas se pueden hacer productivas mediante la importación de agua de una fuente
externa. Muchas rutas comerciales se han forjado en los desiertos, especialmente en el
desierto del Sahara, y tradicionalmente eran utilizados por caravanas de camellos que
transportaban sal, oro, marfil y otros bienes. Un gran número de esclavos también fueron
llevados hacia el norte a través del Sahara. También se realiza alguna extracción de
minerales en los desiertos y la luz solar ininterrumpida ofrece la posibilidad de capturar
grandes cantidades de energía solar.
Las plantas y los animales que viven en el desierto necesitan adaptaciones especiales
para sobrevivir en un entorno hostil. Las plantas tienden a ser duras y nervudas con hojas
pequeñas o sin hojas, cutículas resistentes al agua y, a menudo, espinas para disuadir la
herbívora. Algunas plantas anuales germinan, florecen y mueren en el transcurso de unas
pocas semanas después de la lluvia, mientras que otras plantas longevas sobreviven
durante años y tienen sistemas de raíces profundas capaces de aprovechar la humedad
subterránea. Los animales necesitan mantenerse frescos y encontrar suficiente comida y
agua para sobrevivir. Muchos son nocturnos y permanecen a la sombra o bajo tierra
durante el calor del día. Tienden a ser eficientes en la conservación de agua, extrayendo
la mayor parte de sus necesidades de sus alimentos y concentrando su orina. Algunos
animales permanecen en estado de latencia durante largos períodos, listos para volver a
activarse durante las escasas lluvias. Luego se reproducen rápidamente mientras las
condiciones son favorables antes de regresar a la inactividad.
camello y el dromedario.
SEMIDESIERTO
El matorral xerófilo o semidesierto es un ecosistema conformado por matorrales en zonas
de escasas precipitaciones, por lo que predomina la vegetación xerófila. El WWF lo
considera un bioma denominado desiertos y matorrales xerófilos y lo agrupa
conjuntamente con los ecosistemas de desierto.
La vegetación es frecuentemente de tipo espino como las cactáceas y bromelias,
presentándose también arbustos achaparrados, árboles caducifolios y pastizal
semidesértico.