Está en la página 1de 9

Relato: “El Blog de Gambeta”

Por Aurelia Lupis

EL BLOG DE GAMBETA

“Pronto aprendí que la pelota nunca viene hacia uno por donde uno espera que venga
(…) Porque, después de muchos años en que el mundo me ha permitido variadas
experiencias, lo que más sé, a la larga, acerca de moral y de las obligaciones de los
hombres, se lo debo al fútbol”.
Albert Camus, 1957.

Jueves, noviembre 22, 2007

A OTRO PERRO CON ESE YESO

Queridos amigos, esta vez terminé con una pierna enyesada. Cosas del fútbol. Y
como si eso no resultara lo suficientemente tortuoso, como si perder en las preliminares
del intercolegial no fuera terrible para mi ánimo, el profesor de educación cívica
argumentó que, dada mi situación actual de convaleciente imposibilitado de asistir al
último examen del año de su materia, deberé escribir una monografía para aprobar su
asignatura. O me voy marzo. Composición tema: el rol de los organismos multilaterales
en el mundo globalizado contemporáneo. Parece que algun@s todavía no entienden bien
qué es la famosa globalización, y nos mandan a hacer estos trabajos para ver si se les
aclara un poco el panorama.

No me puedo sacar la frustración deportiva de encima. Les juro que hago el


esfuerzo, pero sólo pienso en el campeonato que perdimos. El fútbol es el único tema
que ronda mi cabeza en este momento; y mientras revisaba las características de los
diferentes organismos multilaterales que existen, se me ocurrió que la FIFA bien podría
encuadrarse en esa caracterización.

En fin, agradezco a los que apoyaron al equipo a lo largo de todos los partidos; y
como dijo el entrenador, lo importante fue que “aunque perdimos la batalla deportiva,
prevalecieron los grandes valores: lealtad, espíritu de sacrificio y sentido del deber”.
Pregunto: a esta altura, ¿a alguien le importan esos valores esclerosados?

Sinceramente, espero que sí, porque tendré que ponerlos en juego para zafar el
trabajo de cívica; sobre todo lo de “sentido del deber”. Así que aprovecho el cyber-
espacio para pedirles que colaboren con mi monografía mandándome algún material que
me sirva para empezar. Prometo citarlos a todos. Saludos blogales!

Publicado por Gambeta en 06:40 PM Comentarios: 3


----------------------------------------------------------------------------------
https//www.blogger.com – Blogger: Gambeta
Comentarios

1
ƒ Juanedu dijo…
Dale Gambet! No te deprimas... Ya pasará. Por qué no buscás alguna monografía salvadora en la
web? Menos blog y más laburo, pibe! Ah! Lo de la FIFA como organismo multilateral está bueno,
aunque no creo que al profe le cause gracia… Salu2

08: 07 PM

ƒ Anónimo dijo…
Desde que quedamos afuera del intercolegial somos unos loosers totales. Y encima hay que
bancarse que los profes te digan que jugamos muy bien, y que como segundos somos los
“campeones morales”, y blá, blá. El lado positivo es que gracias al yeso zafaste de la prueba de
Física, que fue muuuuy difícil… Dale campeooooooooón! Abrazo y que te mejores
El Amargo

9:19 PM

ƒ Gambeta dijo…
Juanedu, creo que te voy a hacer caso.
Amargo: Eso de “campeones morales”, de dónde era? Salu2

9:38 PM

-------------------------------------------------------------------------------------------------------

Viernes, noviembre 23, 2007

EL QUINTO ELEMENTO

Leyendo los materiales para el trabajo práctico de cívica, entre el sopor de los
“mercados emergentes” y el aburrimiento de “las ventajas de los procesos de
integración”, me puse a ver la repetición de un partido de la Eurocopa y, no sé bien
cómo, llegué a la conclusión de que el fútbol realmente refleja el carácter global del
mundo contemporáneo.

En serio, ayer linkeé esta página y esta, y así fue como descubrí que la FIFA
como organismo multilateral es uno de los más grosos: hay más países en la FIFA (208
federaciones de fútbol), que en la ONU (192 Estados miembros), la OMC (152) o la OCDE
(30 países). Teniendo en cuenta que no todos los miembros de la primera pertenecen a
la segunda, puede constatarse que la afiliación a la FIFA, más a que a ningún otro
organismo, vendría a confirmar las complejas realidades de cada país. Dos de los que
compiten en canchas mundiales como representantes de sus países, aunque no tengan
plena membresía en los edificios de Nueva York y Ginebra son Palestina y Taiwán, pero
sus equipos juegan en las eliminatorias para mundial de fútbol sin el estatus de ser
estados independientes. Los partidarios de un Puerto Rico independiente o los
palestinos, están expresando con su pertenencia a la FIFA intereses nacionales no
reconocidos o que empiezan a reconocerse; otro ejemplo es el Reino Unido, único país
en el mundo que hizo reconocer por la FIFA cuatro equipos (Irlanda del Norte, Escocia,
Gales e Inglaterra) por un sólo Estado; es decir, la FIFA les dio una igualdad
representativa de la que carecen en otros ámbitos. Es como un mapa dado vuelta.

2
La FIFA tiene sus problemas internos y ha sobrevivido a más de un escándalo,
pero es incuestionable que desde su fundación, en 1904, ha sido una eficaz y organizada
institución planetaria con logros de alcance geopolítico como, por ejemplo, colocar a
Israel, Turquía y Azerbaiyán en el mapa de la Unión Europea de Fútbol (UEFA), o
mediando entre países sin relaciones diplomáticas como Irán y Estados Unidos en torneos
mundiales, e incluso, forjando alianzas como las de Corea del Sur y Japón en la
organización del Mundial de 2002.

Es curioso, pero de alguna manera podría decirse que el fútbol también ayuda a
reafirmar identidades nacionales en disputa. Recuerdo que en el mundial del año
pasado, a propósito del cabezazo de Zidane a Materazzi, me puse a navegar en la web y
–como pasa siempre que uno se cuelga saltando de una página a otra–, terminé leyendo
algo sobre el Frente de Liberación Nacional de Argelia, que en 1958 envió un equipo de
argelinos futbolistas residentes en Francia a realizar una gira mundial anticipando el
reconocimiento diplomático de su país. Algo similar ocurrió con los países que se
desmembraron de la Unión Soviética. Entonces, no es casual que la primera
manifestación de voluntad de los nuevos Estados independientes sea la afiliación a la
FIFA, y no a la ONU. Es más; podría decirse que a los cuatro elementos tradicionales que
–según el libro de cívica– constituyen un Estado-nación: territorio, población, gobierno,
y una lengua común, se le podría sumar, casi como requisito indispensable, la formación
de un equipo de fútbol nacional. Ese sería el quinto elemento! Después de todo, es más
fácil para la población de un Estado naciente movilizarse en torno al equipo nacional del
deporte más popular del planeta que en favor de la creación de una embajada en la
ONU. Saludetes.

Publicado por Gambeta en 7:25 PM Comentarios: 2


---------------------------------------------------------------------------------------------
https//www.blogger.com – Blogger: Gambeta
Comentarios

ƒ El Tío dijo…
Sobrino querido, celebro que tu análisis te llevara por esos caminos. Yo creo que el fútbol es en
realidad el mejor revelador de las virtudes de un país. Y te diría que es durante los mundiales
donde eso se percibe mejor, porque cada enfrentamiento futbolístico se vive de manera
paroxística, como una auténtica guerra ritualizada. Durante un partido los jugadores encarnan las
virtudes de la nación: virilidad, lealtad, fidelidad, espíritu de sacrificio, sentido del deber (como diría
tu profe), sentido del territorio, pertenencia a una comunidad; y entonces el partido se convierte en
una suerte de sacrificio, y es a su vez, una de las pocas ocasiones en las que se expresa, en forma
colectiva, ese mínimo común cultural que sella la adhesión de una comunidad a las virtudes
personificadas por los jugadores. El fútbol pasa a ser un espejo de nuestras sociedades. El título
de “campeón del mundo” no es solamente conquistado por un equipo sino por la sociedad de la
que procede. La colectividad se proyecta en el equipo y pone en él sus esperanzas de conquista,
su energía de ganar, pero también sus frustraciones personales y su agresividad. El fútbol favorece
las energías psíquicas míticas, las proyecciones imaginarias y los fanatismos patrióticos. Por eso
es un fenómeno tan importante. Ah! Lo de “Campeones morales” es del mundial `90, cuando
todavía no habías nacido. Un fuerte abrazo para mi sobrino favorito. Y no te desalientes!

08: 07 PM

ƒ Gambeta dijo…
Tío: a pesar de tu infinita desazón antropológica me ayudaste un montón! Y decile a mi primo
que no se cuelgue y escriba. Aguante la patria bloggera!!

3
10: 22 PM

---------------------------------------------------------------------------------------------

Domingo, noviembre 25, 2007

LAS “PASTILLAS” DEL ABUELO

Anoche vino a cenar el abuelo; él fue la primera persona que me llevó a la


cancha y me hizo sentir lo que significa esa pasión popular. Entonces aproveché para
contarle mi “descubrimiento sociológico” acerca de la relación entre la política y el
fútbol. Porque él siempre termina relacionando todo con la política… y tiene unas
formas tan enroscadas para relatar sus historias!

Me contó que su padre, que era radical, odiaba los mundiales porque decía que el
hecho de que Argentina hubiera salido segunda ya desde el primer campeonato, había
contribuido a aumentar el desánimo popular que propició la caída de Yrigoyen. Parece
que desde entonces el abuelo heredó la idea de que los mundiales expresan las grandes
crisis nacionales. Y ahí nomás empezó a tirar datos rarísimos, como que el mandato de
Frondizi coincidió casi matemáticamente en su inicio y su fin con dos mundiales, el de
Suecia ’58 y el de Chile ’62 (dos fracasos deportivos con eliminación en primera ronda).
“En aquellos días lo derrocaron y con él se desvanecieron nuestros ideales desarrollistas”
dijo. Contó que Onganía derrocó a Illia pocos días antes de la fiesta inaugural que
desplegaba Inglaterra ‘66. No llevaba un mes en la Casa Rosada cuando se disputó el
célebre partido contra los ingleses en el que Antonio Ubaldo Rattín fue expulsado
injustamente (Y eso que por aquellos años no existía la tarjeta roja). Parece que Rattín
se sentó en la alfombra de la Reina como forma de protesta; lindo gesto nacional y
popular, un tanto fuera de contexto, claro.

Antes del postre hasta mamá se había entusiasmado con la charla; y se acordó
del Mundial del ’70 en México, porque fue el primero que llegó en directo por televisión
a nuestro país (Argentina estuvo ausente porque perdió en las eliminatorias y no pudo
clasificar; nos desplazó Perú). Papá recordó el partido inicial: México 0- URSS 0, no
porque el juego fuera memorable, obvio, sino por la transmisión inédita, y porque
durante ese mismo partido la transmisión era recurrentemente interrumpida por
comunicados oficiales mostrando fotos de varios militantes montoneros que pocos días
antes habían secuestrado a Aramburu. Fue el 3 de junio de 1970 (lo googleé más tarde).
Entonces el abuelo recordó que el día que murió Perón, unas horas antes, Brasil
eyectaba del Mundial de Alemania ’74 a la Selección Argentina. Y que en uno de los
partidos empataron Alemania Federal con Alemania Oriental 1-1. Y guiñándome el ojo
dijo: “Recuerdo el resultado porque en aquel entonces se me ocurrió que ese empate le
habría causado mucha gracia al General”. URSS, Alemania Oriental, Alemania Federal:
qué países raros jugaban en esos mundiales, no?

Terminamos hablando del día que ganamos la primera Copa en el ’78, pero a
papá se le ensombreció la mirada. El, que es tan futbolero, no vio ni un sólo partido de
aquel evento porque por aquel entonces su familia estaba ocupada buscando a su
hermana mayor, que sigue desaparecida. Porque mi viejo siempre dice que el mundial
que se jugó durante la última dictadura sólo sirvió para tratar de ocultar los crímenes de
los militares, procurando apaciguar la campaña internacional en contra del gobierno de

4
facto bajo el slogan: “somos derechos y humanos”. Y es que a veces los logros
deportivos compensan, en el imaginario popular, los fracasos que se producen en otros
ámbitos como los de la economía o la organización política y social.

Hoy descubrí que para cualquier espectador atento la secuencia de los mundiales
cada cuatro años subraya pequeños hitos de su vida personal. Nadie olvida dónde vio los
principales partidos de cada Mundial que le tocó en suerte, con quién lo hizo, la remera
que fue cábala, cómo se las arregló con su laburo, cómo festejó o padeció tras el pitazo
final. O sea, recuerdan quiénes eran sus amigos, dónde trabajaba, y hasta su condición
económica de aquel entonces. Porque las postales mundialistas son un término de
referencia inolvidable para reseñar las peripecias de la propia vida. Inclusive de la mía,
que todavía no pude festejar un campeonato.

Publicado por Gambeta en 05:40 PM Comentarios: 3


----------------------------------------------------------------------------------------------------------
https//www.blogger.com – Blogger: Gambeta
Comentarios

ƒ Juli dijo…
Mi abuelo siempre cuenta que el mundial del ‘34, en Italia, Mussolini consideraba a los jugadores
del equipo italiano como soldados al servicio de la causa nacional y su triunfo contribuyó a la
exaltación del régimen y del ideal fascista del deporte. Si linkeás acá vas a encontrar todos los
posters de los mundiales y uno de los afiches de ese campeonato, que mostraba a un hombre
corpulento haciendo el saludo fascista con una pelota a sus pies. Otro dato: La sede principal del
Mondiale, el estadio de Turín, fue rebautizado y pasó a llamarse Stadio Mussolini. Creo es uno de
los primeros ejemplos de utilización política de un deporte. Que te aproveche!

06: 07 PM

ƒ El Tomy dijo…
Y viejo? Cómo va el trabajo de cívica? Porque anoche te vi en el bar, chamuyándote a esa
morocha… Ahora sí podemos decir que sos un “patadura” !!!

07:13 PM

ƒ El Tío dijo
Sin dudas, el fútbol y la política están profundamente interrelacionados, y la historia nos lo muestra,
como dice Juli. Mirá si no: en 1969 contribuyó a desencadenar una guerra entre El Salvador y
Honduras tras un partido de fútbol que tenía como rivales a las dos naciones vecinas; googlealo y
verás. En ese caso, como en el del mundial de Mussolini, la utilización del fútbol con fines políticos
constituye una muestra más de su poder simbólico. Eso ayuda a reafirmar su condición de “quinto
elemento” (buena esa idea!) constitutivo de los Estados naciones.

11:36 PM

-------------------------------------------------------------------------------------------------------

Lunes, noviembre 26, 2007

TODO UN PALO, YA LO VE

5
Ayer fue un gran día: Empecé la maldita monografía de cívica! Y aunque avanzo
en la descripción formal del tema, no puedo dejar de pensar que el fútbol es el estadio
supremo de la globalización.

Porque el fútbol tampoco es ajeno al proceso de transnacionalización de la


sociedad moderna. Entre copas mundiales, los torneos regionales (la Libertadores, la
Copa Europea y la final intercontinental entre sus campeones) sostienen el carácter
global de las competencias. Bajo ese manto proliferan las organizaciones regionales,
como la UEFA o la Confederación Sudamericana, hasta desembocar en los clubes de
fútbol, que no son ajenos a los emporios económicos transnacionales, como los de
Agnelli o Berlusconi. Sin embargo, los equipos de los países que participan en las Copas
del Mundo tienen una representación más pareja e igualitaria que en la ONU, aunque sin
dejar de traslucir las diferencias culturales que hacen más factible soportar la
homogeneidad del mundo globalizado.

Porque la globalización del fútbol comparte el mismo origen con la observable en


otras esferas. Como sucede en la economía, las finanzas, y los organismos
internacionales, la propagación del fútbol comenzó por iniciativa de los países más
avanzados. Su globalización fue consecuencia del expansionismo británico en el siglo XIX
y tuvo lugar en el momento culminante del poderío de Gran Bretaña, durante el reinado
de Victoria. En 1880, los navíos británicos representaban el 40% de la flota mundial de
barcos mercantes y casi otro tanto de la de guerra. Fueron los marineros y el personal de
las empresas británicas que construían ferrocarriles los que difundieron el fútbol en el
resto del mundo. Fin de las semejanzas.

En el fútbol, el juego se realiza conforme a normas multilaterales establecidas


por la FIFA que son exactamente iguales para todos los que participan, sea cual fuere su
poderío económico o deportivo. En cambio, en el mundo globalizado, las reglas del
juego son asimétricas y favorecen a los países poderosos, el comercio o los mercados
financieros. Es como si, en el fútbol, las tarjetas rojas o la regla del off side se aplicara
sólo a los equipos más débiles, mientras los más poderosos sólo soportaran buenos
consejos del árbitro o sus forward pudieran ubicarse legalmente al lado del arquero del
oponente. En el fútbol la competencia es decisiva pero, en definitiva, todos reconocen,
aprenden y gozan del talento cuando aparecen un Pelé o un Maradona. Porque el poder
en el fútbol depende del talento y la capacidad de creación; en la cancha tiene lugar
una de las máximas expresiones de la libertad individual y de la solidaridad y la
capacidad de organización de recursos.

Es comprensible que en el mundo del fútbol el reparto del poder sea muy distinto
al de la economía y las finanzas. Los países del Mercosur, que representan apenas el 5%
de la producción y el comercio mundiales, han ganado el 50% de las copas del mundo (9
sobre 18). En esta materia, las “potencias” del Mercosur son los mayores exportadores
de capital y asistencia técnica. Sin embargo, no se les ocurre decirles a los otros cómo
tienen que organizar sus equipos o imponerles los métodos de entrenamiento. Ni,
cuando pierden, cómo tienen que realizar el ajuste. Compiten para afirmar lo propio sin
destruir o someter al otro.

Qué bueno sería, por ejemplo, organizar al FMI conforme a las reglas de la FIFA y
que nadie nos venga a dar consejos, por más poderoso o sabio que sea porque, al final,
todos tenemos derecho a cometer nuestros propios errores.

6
Publicado por Gambeta en 6:57 PM Comentarios: 4
-------------------------------------------------------------------------------------------------
https//www.blogger.com – Blogger: Gambeta
comentarios

ƒ El Tío dijo…
Me gusta la comparación: al fin de cuentas, el fútbol argentino también surgió como un concierto
de naciones. Lo trajeron los británicos y el campeón inicial del fútbol argentino, el Alumni, tenía
sólo jugadores de esa nacionalidad; pero en el primer equipo exitoso del fútbol criollo, el Racing
Club, todos los apellidos eran italianos o españoles. Es decir, comenzó como una cuestión de
gringos que hicieron la patria deportiva. Otra contradicción más de un deporte que, en un mundo
caótico y frágil, unifica las sociedades ayudándolas a buscar mejor sus identidades perdidas.
¿Cómo va el trabajo de cívica?

7:48 PM

ƒ Anónimo dijo…
Gambeta, siguiendo lo que posteabas ayer, no hay dudas de que la participación argentina en los
mundiales ha estado signada por las turbulencias sociales, económicas y políticas del país (y de
paso le damos la razón a tu abuelo): desde 1930, cuando se jugó la primera Copa del Mundo,
Argentina padeció más golpes de estado que mundiales de fútbol. De los dieciocho torneos
disputados, Argentina jugó catorce: no lo hizo en 1938, 1950, 1954 y 1970, y en tres de esos
campeonatos, el seleccionado salió del país con un presidente y volvió con otro. Adiviná cuáles…
Espero no haberte distraído de tus deberes cívicos!
El Datófilo
10:07 PM

ƒ Gambeta dijo…
Datófilo: Buenísimos los datos.

10:56 PM

ƒ Clara dijo…
Pibe, te dejé un libro que te va a servir para lo de cívica; está al lado de la compu, por lo que es
casi imposible que no lo veas! Te marqué las páginas que te van a interesar. Además te
recomiendo clikear acá; es un reportaje que le hicieron al autor. Slds

11:24 PM
-------------------------------------------------------------------------------------------------------

Viernes, noviembre 30, 2007

LA PELOTA NO DOBLA

Hay veces en que la pelota se convierte en una cuestión de Estado. Y cuando


involucra a varios Estados en busca de una “mediación neutral” para dirimir sus
conflictos, una lectura posible es aquella que la vincula con el ámbito de las relaciones
internacionales; allí es donde emerge necesariamente la figura de los organismos
multilaterales tal como los entiende mi profesor de cívica. Van algunos ejemplos.

1) Hasta 1995 el mercado laboral en el fútbol europeo se encontraba protegido por


una serie de leyes y regulaciones. Las diferentes ligas profesionales imponían una

7
serie de restricciones al número de futbolistas extranjeros que podían jugar en un
equipo. El Juventus italiano, por citar un caso, sólo podía tener a dos jugadores
extranjeros en el campo de juego. Pero en 1995, un jugador belga, Jean-Marc
Bosman, inició un juicio en los tribunales belgas y ante el Tribunal de Justicia de la
Unión Europea, argumentando que su club, el RC Liégois, le impedía jugar cedido en
el Dunkerque de la 2ª división francesa por no haber solicitado ante la Federación
Belga el obligado certificado de transferencia internacional. Bosman argumentaba
que, dado que ese certificado le impedía el libre acceso al mercado de trabajo,
violaba el espíritu del Tratado de Roma en lo concerniente al libre tránsito de
personas y suponía una discriminación por razón de la nacionalidad. En 1995, la
sentencia del Tribunal de Justicia de la UE (la Corte Europea!) dio la razón al
jugador. La sentencia Bosman abrió las fronteras a los jugadores europeos y les
permitió fichar por equipos de otros países sin que se les contabilizara como
extranjeros. A partir de ese momento, los jugadores comunitarios dejaban de ser
considerados extranjeros y podían actuar sin límite de número en clubes de otros
Estados de la Unión Europea. ¿Ahora se entiende por qué los mejores jugadores del
mundo están en equipos del Viejo Continente?

2) Aquí retomaré un tema que ya discutimos en posts anteriores. A fines de mayo de


este año, la FIFA prohibió jugar partidos internacionales en estadios emplazados a
más de 2500 metros de altitud sobre el nivel del mar. La medida afecta a países
como Bolivia, Perú, Ecuador, México y Colombia. El presidente de Bolivia expresó: "El
tema de la altura es una cuestión de soberanía; quienes no tienen valor de ganar
partidos en la cancha recurren a esas viejas artimañas". Así fue como el veto de la
FIFA se convirtió en una cuestión de Estado: Evo Morales calificó la medida como
“injusta y arbitraria”, pidió a los países de la Comunidad Andina que respalden su
reclamo e, incluso, realizó un llamamiento a los presidentes de Argentina y Brasil
para que Bolivia no quede excluida de la práctica del fútbol internacional. También
solicitó por carta a la FIFA “la reconsideración de esta resolución en mérito a que
atenta contra el legítimo derecho de los pueblos a la práctica deportiva del fútbol, la
misma que desconoce el principio de igualdad y universalidad consagrada en la
Declaración de los Derechos Humanos de las Naciones Unidas”.

El 20 de junio, el Secretario General de la Organización de Estados Iberoamericanos


(OEI) Álvaro Marchesi, firmó un comunicado dirigido al presidente de la FIFA, Joseph
Blatter, trasladando su apoyo a la “continuidad de la práctica del fútbol en
competiciones internacionales en cualquier ciudad latinoamericana que reúna los
requisitos establecidos, con independencia de circunstancias orográficas, como es su
altitud respecto al mar”. La Comunidad Andina, por su parte calificó decisión de la
FIFA como un caso de “apartheid futbolístico contra los países andinos”. El respaldo
unánime de la Conmebol a Bolivia en junio fue un factor decisivo para que la FIFA
aceptara que el emblemático estadio de La Paz fuese la sede boliviana para las
próximas eliminatorias rumbo al Mundial de 2010.

¿Puede el fútbol dividir a Sudamérica? Los organismos internacionales (los posta):


¿son un árbitro neutral para dirimir estos conflictos, o sólo representan los intereses de
los poderosos? ¿El mapa geopolítico del fútbol refleja las fuerzas dominantes en el
mundo?

8
Ah! En la sección el pueblo que quiere saber de qué se trata, los pongo al día: al
final, el de cívica me rebotó el trabajo porque le pareció “muy lineal”. Y así llegó la
temida frase lapidaria: nos vemos en marzo.

Y ahora los dejo porque el lunes doy el recuperatorio de Física. Y ahí sí que
puede hablarse de una verdad científicamente comprobada: la pelota “no dobla” porque
la comba depende de la interacción con el aire. La desviación lateral de un objeto en
vuelo (pelota) es generalmente conocida como efecto Magnus: a menor presión
atmosférica, menos pronunciado es el efecto Magnus. La atmósfera tiene 10 km de
espesor; cada 1 km disminuye un 10% la densidad del aire. Entonces, a 3000 metros hay
un tercio de la densidad de aire y por ende, menos resistencia. El balón vuela por efecto
de la gravedad pero dobla por el roce con el aire. No desaparece del todo el efecto,
pero sí es verdad que hay menos comba: un tercio menos. La “pelota no dobla” porque
la densidad del aire a 3000 metros es un tercio menor a la de la llanura.

Esta vez sí que apruebo; seguro. A menos que me tome el pelado fanático del
Turismo carretera, y me salga con uno de esos ejercicios de un auto que salió del punto
X a 100 km por hora y se cruza con otro que viene a 120…

También podría gustarte