Cóndores no entierran todos los días (reflexión)

El film titulado “Cóndores no entierran todos los días”, dirigida por Francisco Norden en el
año 1984, relata la historia de violencia vivida en Tuluá (Valle del cauca-Colombia), entre
los años 1946 y 1957, protagonizada por León María Lozano, alias el Condor. A lo largo
del desarrollo de la película se pueden evidenciar diversas actitudes, que se siguen
repitiendo en la actualidad, es por esto que en el siguiente trabajo se expondrán y explicaran
las relaciones de estos hechos con los tiempos contemporáneos.
El primer hecho, que se evidencia en el largometraje, es la violencia en las partes rurales
del territorio colombiano, estos acontecimientos se siguen evidenciado en la actualidad,
aunque el proceso de paz ha mitigado esto, la mala gestión del gobierno con respecto a la
paz, ha ocasionado que se vuelva a dar la violencia rural en el país, con asesinatos,
desapariciones, torturas, entre más acciones horribles.
Hay 2 hechos más que tienen interacción directa con el primero que se expuso antes, dichos
son; la aparición de cuerpos en los ríos y el olvido, por parte del Estado, de las regiones
rurales, la interacción con el primer punto radica en que la aparición de cuerpos en los ríos
son resultado de la violencia que se vivía y se habita en distintas regiones del territorio,
además, es por el olvido del Estado que se da antes que nada la violencia, si hubiera una
participación estatal no se proveerían estas situaciones recientes y del pasado.
Varios puntos de la cinta siguen pasando actualmente, no exactamente los mismos casos,
empero la violencia, la intolerancia, la rivalidad entre los habitantes y el estado corrupto
siguen sucediendo.
La competencia de partidos por el poder, la ambición de los políticos en Colombia es algo
que continuamente a perdurado, en la cinta por liberales y conservadores, ahora la
Colombia humana, el centro democrático, partido verde y aunque no se ve una rivalidad tan
violenta como en los tiempos de anteriormente no es un secreto que en medio de éstos
partidos hay una enorme rivalidad gracias a quien va a tener el poder, y que el estado sigue
acudiendo a la violencia apropiada para lograrlo.
La violencia rural, para Colombia no es un secreto que la población menos favorecida y que
más a sufrido y sigue sufriendo maltrato es la rural, en el campo, los campesinos
incluyendo féminas y chicos se han observado dañados por la violencia armada a lo largo
de toda la crónica de Colombia.