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DESACTIVACIÓN
DEL CONFLICTO
POR PARTE DE LAS FUERZAS
MILITARES DE COLOMBIA
(1953-1961)1
“En Colombia, que es la tierra de los hechos singulares,
dan la paz los militares y los civiles dan guerra”
Urdaneta, 7 de agosto de 1877, El Mochuelo, 1
Capitán (RA)
César Castaño
Asesor del Comandante General
de las Fuerzas Militares
Ph. D.
Ricardo Esquivel
Asesor del Departamento Jurídico Integral
del Ejército Nacional
P
ara prorrogar el funcionamiento de la Comi- que hay “archivos no conocidos aún, por ejemplo, los
sión de la Verdad (CEV), hasta junio de 2022, la de la Fuerza Pública y los de la insurgencia” (Jarami-
Corte Constitucional de Colombia aceptó que llo y Torres, 2015, p. 49). Tal acervo permite afirmar
la pandemia de la COVID-19 impidió recoger testimo- que el Estado nación ha intentado desactivar el con-
nios presenciales en algunas regiones del país (Corte flicto, pero, con criterio investigativo, si han fallado
Constitucional, 2021). Según un estudio reciente, en comisiones y diagnósticos derivados, el problema
otros países, aun con conflictos más intensos, tal re- subyace entonces a los supuestos historiográficos
colección tomó únicamente entre 18 y 24 meses. partidistas que han seguido aquellas.
Esos países no tenían el bagaje acumulado por Co- De hecho, a la actual CEV se le impuso como insumo
lombia, los informes y testimonios aportados por 13 el informe de la CHCV, el cual “proporciona como eje
comisiones similares que han funcionado en el terri- de discusión central un marco explicativo desde las
torio desde 1958 (Jaramillo y Torres, 2015, p. 51). Es FARC y el Gobierno [donde] el trabajo de los expertos
más, paralela a los recientes diálogos de paz, funcio- escogidos por el Gobierno fue bastante desarticula-
nó una Comisión Histórica de las Víctimas y el Con- do” (Jaramillo y Torres, 2015, pp. 18, 53). Por consi-
flicto (CHVC), cuyo informe2 —que se estipuló como guiente, este artículo toma como supuesto historio-
insumo obligatorio para la Comisión de la Verdad— gráfico el epígrafe3 y propone como objetivo referir
se preparó en 6 meses y fue entregado en febrero de las iniciativas de las Fuerzas Militares (FF. MM.) para
2015. Poco más de un año antes, en 2013, se publicó desactivar el conflicto armado interno en Colombia
el informe ¡Basta ya!, a cargo del Grupo de Memo- entre 1953 y 1961, por cuanto en este periodo se in-
ria Histórica de la Comisión Nacional de Reparación cubó un nuevo conflicto por parte de los grupos ar-
(CNRR), la cual fue creada en 2007 para el proceso mados de inspiración marxista (Sánchez, 1985).
de desmovilización de los grupos de autodefensa ile-
gales.
1 Este artículo recoge apartes de un estudio que se encuentran adelantando los autores
acerca de los informes de las Comisiones de Verdad en Colombia.
En suma, tal bagaje de diagnósticos, aportado por las
2 CHVC. (2015). Contribución al entendimiento del conflicto armado en Colombia . 809 pp.
13 comisiones previas, han superado las 17 000 pá-
3 En reseña sobre el mariscal Montgomery se reconoce en la historia universal que “los
ginas. Ello, sin considerar que no se ha logrado orga- militares hacen la paz, luego de que los políticos traen las guerras” (Cano, 1970, p. 81); allí
que si el objetivo de toda estrategia es la paz, es responsabilidad de los políticos que esta
nizar los archivos de todas las comisiones; es decir sea duradera.
El análisis histórico desde un enfoque cualitativo conveniencia de ejercer directamente el poder políti-
compara en tres momentos diferentes iniciativas mi- co. En segundo lugar, sobre todo, la ausencia de una
litares para desactivar el conflicto; para ello, se partió tradición de gobiernos militares a lo largo de la histo-
de la historiografía más reconocida para contrastarla ria republicana, en contraste con la inmensa mayoría
con notas de prensa de la época. En tal sentido, es de las naciones de América Latina (Pizarro, 2017).
fundamental resaltar que este artículo no pretende
llevar a cabo una descripción exhaustiva del periodo Sobre lo primero, el gobierno militar que instauró el
en mención, ni de cada una de tales iniciativas, ni del teniente general Gustavo Rojas Pinilla, en junio de
régimen político o de la biografía de los personajes 1953, no solo fue imprevisto, sino que las palabras
del político liberal Darío Echandía, históricamente
comprometidos. En concordancia, este documento se
presentes, calificaron esa acción como un golpe de
divide en tres partes: la primera, sobre la tradición
opinión:
civilista; la segunda, contextualiza la desmovilización
llanera; y la tercera, identifica la relación entre la co- No fue vuestro gesto el producto de la ambición ra-
misión de la verdad y los planes militares. paz, sino el abnegado sentido del deber. Tomasteis el
mando en virtud de un golpe de opinión, pues vuestros
Golpe de opinión y tradición civilista esfuerzos no fueron encaminados a destruir un Estado
de derecho, sino a establecerlo, no a imponer la fuerza
Uno de los rasgos más pronunciados de las Fuerzas sobre la legalidad, sino a cambiar la anarquía por el
Militares en Colombia ha sido su carácter civilista; es orden (Echandía, 1953, julio, 1, 15; subrayado de los
autores).
decir, la subordinación militar al poder civil. Mientras
que en otras naciones de América Latina la influencia Pocos días después, la Asamblea Nacional Constitu-
anticomunista estadounidense sirvió de marco legiti- yente, que fue convocada por el Gobierno precedente,
mador para que los estamentos militares asumieran le reconoció el carácter presidencial a Rojas y este
directamente el poder, en Colombia, al menos dos asumió el cargo investido de legitimidad.
factores incidieron para que las FF. MM. se mantu-
vieran subordinadas al poder civil y, por lo tanto, para Lo que había iniciado como una fiesta nacional en fa-
que tal influencia foránea no propiciara el golpismo. vor del gobierno militar, terminó en un festín político
En primer lugar, el ‘síndrome Rojas’, es decir, el re- en detrimento de Rojas y las FF. MM., debido a que se
chazo de los miembros de las Fuerzas Militares de la produjo un sinsabor en los cuarteles por causa del
El general [Rojas] puso fin a la guerra civil no declarada, hizo una Constitu-
yente con participación de los dos partidos. Cuando estos vieron amenaza-
da su permanencia en el uso del poder, olvidaron el drama de los Llanos, de
Boyacá, de los Santanderes, de Antioquia, del Tolima, del Huila y produjeron
el 10 de mayo [de 1957…]; por eso, fue aleccionador ver cómo la casta polí-
tica, cínica y sin autoridad moral, acusaba sin sonrojarse al Ejército de enri-
quecimientos indebidos y al general de usurpador (Testimonio, 1986, p. 14).
[…] fenómenos políticos como los vividos por otras sociedades latinoameri-
El gobierno militar canas en los setenta y ochenta del siglo anterior, conocidos como de tran-
sición a la democracia, a partir de regímenes políticos autoritarios previos,
que instauró el han sido una excepción en nuestro país. [La subordinación al poder civil ha
sido absoluta, tanto que los] ‘pronunciamientos’ de altos oficiales y tensio-
teniente general nes de los distintos presidentes con los ministros de Guerra, primero, y de
Gustavo Rojas Defensa, después, o los comandantes del Ejército, siempre se saldaron con
el paso a retiro de los oficiales de las Fuerzas Militares (Vargas, 2021, p. 114,
Pinilla, en junio de precisiones entre paréntesis cuadrados de los autores).
1953, no solo fue
De allí que algunos consideren a Colombia como un país único que cuenta
imprevisto, sino con civiles amantes de la violencia bélica y con militares que han gene-
que las palabras rado espacios de convivencia, desarrollo y reconciliación, puesto que han
sido quienes han tenido que padecer las guerras ordenadas por otros. Sin
del político liberal embargo, a los militares, subordinados totalmente al poder civil y garan-
Darío Echandía, tes de los acuerdos de paz y de lo contenido en las Constituciones, no
se les reconoce absolutamente nada en ciertos espacios intelectuales, de
históricamente construcción de memoria o en los estrados judiciales (Mejía, 2021).
presentes,
calificaron esa Desmovilización llanera: iniciativa de las Fuerzas Militares
acción como un Entre 1948 y 1953, en los Llanos Orientales de Colombia, actuaron grupos
armados irregulares. En parte, estos fueron el resultado de gobiernos de
golpe de opinión. partido tradicional, o sea excluyentes, que dieron tratamiento de enemigos
mortales a los miembros del partido opositor y fomentaron la acción de
tales grupos y de policías políticas. Todo ello hizo que se convulsionaran
extensas áreas; principalmente, del Casanare, Meta y Arauca.
4 Desde 1960 hasta 1980, en Sudamérica, ocurrieron
21 golpes militares en ocho países. Pese a que estos Durante casi un lustro, algunas haciendas y cultivos extensos fueron
compartían similitudes institucionales y sociopolíticas,
hubo golpes militares recurrentes en Brasil, Argentina, abandonados y el comercio quedó paralizado, o se compraba o vendía
Chile, Uruguay, Paraguay, Bolivia, Ecuador y Perú. En
Venezuela, hubo varios conatos de golpe. Colombia fue la muy poco. Del Llano, escasamente algo se sacaba, pero, por orden del
excepción democrática en la región (Duque, 2020).
habló largo rato con un pequeño guerrillero de siete por jóvenes reclutas que recién habían terminado el
años, el cual se sonrojó (Kipper, 1953b). ciclo de entrenamiento, además de oficiales y subo-
ficiales al mando. En su mayoría, los soldados proce-
Luego, dirigiéndose a los unos y a los otros, el general dían de la costa norte del país con edades que osci-
Duarte dijo: laban entre los 18 y 20 años; dos jóvenes tenientes,
“La lucha ha terminado. Todos somos colombianos. Alberto Gómez Restrepo y Rafael Caro, estaban al
Debemos olvidar y perdonar a nuestros enemigos y mando del convoy.
todos de acuerdo debemos trabajar en la reconstruc-
La zona que recorría el convoy era conocida como El
ción de nuestro país”. Una vez más, los guerrilleros
presentaron las armas: los que sólo tenían revólveres Turpial, un sector donde la trocha se cerraba poco a
y conservaban las manos libres, aplaudieron, mientras poco hasta recostarse sobre el barranco del río. En
los más jóvenes, con las manos sobre las costuras del ese lugar, que resultó propicio para una emboscada,
pantalón, dieron un salto en su lugar. Aljure, el jefe de estaban ocultos en matas de monte más de un cente-
las guerrillas liberales, pasó al lado ocupado por sus nar de guerrilleros. Previamente, estos habían atra-
enemigos conservadores de la víspera y les estrechó vesado algunos troncos sobre la huella del camino y
la mano (Kipper, 1953b). montado una base de fuego, con armas automáticas,
cerrando la posibilidad a cualquier escape. Sin con-
Atrás quedarían cruentas escaramuzas y asaltos en templación, los guerrilleros asesinaron 96 militares,
los cuales un número considerable de militares y po- incluyendo a algunos de ellos que quedaron heridos
licías también resultaron víctimas. Una de las accio- y fueron rematados a cuchillo.
nes más recordadas, por la sevicia con la que actua-
ron los guerrilleros, fue la emboscada de El Turpial. En efecto, en una crónica sobre El Turpial, publicada
El 12 de julio de 1952, un convoy del Ejército Nacional, en el Diario de Colombia, el periodista Héctor Polanía
perteneciente al batallón “Vargas”, efectuaba un pa- confirmó que los guerrilleros, al ver caer a su jefe
trullaje sobre la margen derecha del río Meta, cerca por causa del disparo de un soldado agonizante, “[…]
de Puerto López. El destacamento estaba integrado en una frenética gritería, ebrios de sangre, señalaron
Hoy en día, los resultados del Plan Lazo se pueden consultar en escritos de
oficiales del Ejército que enfrentaron el bandolerismo en el Norte del Valle
y el Quindío (Betancourt, 1965; Ejército Nacional, 1965). Por ejemplo, sobre
los resultados operacionales, comenta el general Valencia Tovar:
acantonada. En medio de la alegría para echar bala y usted no quiso Blum para coordinar personalmen-
colectiva navideña, se escuchó una hacerlo, causándonos un daño te el proceso de paz en esa región.
terrible explosión. Había estallado peor. Nos disolvió la revolución sin
una bomba que dejó un saldo trági- tiros. Nadie se subleva si no se ti- En tercer lugar, el último aspec-
co de 51 muertos y 108 heridos, en- ñen de sangre sus banderas. Mal- to referido fue que, en 1958, el go-
dita sea, ¿por qué diablos no echó bierno militar de transición, o Junta
tre oficiales, suboficiales, soldados
plomo? Me puso usted en el pa- Militar, creó la primera Comisión de
y civiles, ancianos, mujeres y niños.
pel de asesino y se reservó el de la Verdad en la cual participaron
El individuo que activó el artefacto
redentor que era el que yo había
terrorista, Gustavo Nest Barrabás, representantes de los principales
asumido (Valencia, 1982)
quien fungía como talabartero, estamentos de entonces. Paralela-
pereció en la explosión y luego se mente, el Ejército Nacional adelantó
comprobó que era miembro del Mo- Conclusiones los planes de desarrollo integral, los
vimiento Obrero Estudiantil Campe- cuales fueron promovidos por el co-
Este artículo refirió las iniciativas mandante del Ejército, general Ruiz
sino (MOEC). La bomba correspon-
de las Fuerzas Militares para des- Novoa, entre 1960 y 1962. En parti-
día a la ilustrada en el anexo n.° 8
activar el conflicto armado interno cular, el Plan Lazo se basó en el con-
del folleto “150 preguntas a un gue-
en Colombia, entre 1953 y 1961, y cepto de desarrollismo militar, sub-
rrillero”, impreso y distribuido por
destacaron tres hitos. En primer yacente a la misión Lebret, francesa,
ese grupo procastrista (Moncada,
lugar, el gobierno militar que se que había traído el anterior gobierno
1963), noticia que tuvo un gran im-
instauró en 1953 para frenar la militar. El informe de aquella Comi-
pacto en el país (Occidente, 1961).
violencia política azuzada por los sión, publicado en 1962, por mon-
Paralelo a este tipo de acciones, el partidos tradicionales. De allí que señor Guzmán, también fue acogido
MOEC activó uno de los primeros los líderes de estos partidos aco- por el Ejército Nacional y comple-
focos guerrilleros en Colombia, en gieron el hecho como “golpe de mentó sus diagnósticos.
1961. Este foco era liderado por el opinión”, confirmando también la
médico Tulio Bayer, recién entre- tradición civilista de las FF. MM. de Vale subrayar que, en Colombia, las
nado en Cuba, el hacendado Flavio Colombia que actuaron solo para Fuerzas Militares adoptaron dicho
Barney y el exguerrillero llanero restablecer la seguridad pública. desarrollismo militar en contraposi-
Rosendo Colmenares. Asentado Incluso, cuando los partidos políti- ción a las doctrinas de seguridad an-
en el Vichada, una región de difícil cos, al ver amenazada su hegemo- ticomunista impulsadas por EE. UU.
acceso de los Llanos Orientales, no nía de poder, propiciaron el final de y a los grupos nuevos imitadores del
resulta extraño cómo las FF. MM. ese gobierno, en 1957, los milita- modelo cubano; entre estos últimos,
pudieron desarticular tal foco gue- res no solo regresaron a sus cuar- el grupo MOEC, autor del atentado
rrillero. En el plan militar ‘Ariete’, teles, sino que desde entonces han con bomba explosiva que causó 51
cumplido por el coronel Valencia seguido acatando al poder civil. muertos y 108 heridos en la sede del
Tovar, al mando del batallón “Co- batallón “Palacé” de Buga, en 1961.
En segundo lugar, fue el mismo go- En efecto, pese a este atentado, el
lombia”, se insistió en apoyar a la
bierno militar el que, en 1953, pro- Ejército Nacional desarticuló una
población rural del Vichada y ais-
movió la desmovilización y entrega fracción armada del grupo MOEC en
lar así al grupo (Valencia, 1992; La
de armas de los grupos armados el Vichada empleando acciones de
Nueva Prensa, 1965).
irregulares en todo el país. Ello, desarrollo de la población rural.
Sobre su derrota moral y militar, pese a que en los Llanos Orienta-
por parte del coronel Valencia To- les, en particular, recién estos gru- Lo escrito permite constatar que
var, diría Bayer, años después: pos habían emboscado un convoy las FF. MM. de Colombia han pro-
del Ejército Nacional y causado la curado generar una respuesta in-
Usted es un ejemplar extraño de muerte de 96 militares. El gobierno tegral para lograr la paz en el país.
soldado. Los militares se hicieron militar encargó al general Duarte Desconocerlo, sería el resultado
de una historiografía tradicional Ejército Nacional, VIII Brigada (1965). De la Landazábal, F. (1975). Factores de violencia.
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narrada a conveniencia de los di-
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General
2022: “Año del liderazgo, la moral combativa y la Eduardo Enrique Zapateiro Altamiranda
Comandante del Ejército Nacional
contundencia operacional”
General Eduardo Enrique Zapateiro Altamiranda
Comandante del Ejército Nacional 4 Mayor General
Carlos Iván Moreno Ojeda
Segundo Comandante del Ejército Nacional
Alineados con los planes de la institución
6
Mayor General
Brigadier General Miller Vladimir Nossa Rojas Mauricio Moreno Rodríguez
Comandante del Comando de Educación y Doctrina Jefe de Estado Mayor Generador de Fuerza
Mayor
DIME y PEMSITIM: dos marcos para entender el ambiente Luis Fernando Barco Giraldo
estratégico y operacional Director de la Dirección de Gestión,
20
Estandarización y Difusión de Doctrina
Sargento viceprimero Nixon Vargas Chaparro
Orgánico del Comando de Apoyo de Combate de Inteligencia Militar
Editora general
Planeamiento conceptual como medio cognitivo para Ph.D. (c) Luz Martha Melo Rodrigues
determinar los retos del ambiente operacional (Conducción
del Plan Democracia) Diseño, diagramación y conceptualización
30
Coronel (RA) Jorge Eduardo Rojas Rojas José Vicente Gómez
Asesor del Centro de Doctrina del Ejército John Vanegas
36
Teniente Coronel (RA) Omar Leonardo Gómez Parrado Corrección de estilo:
Asesor del Centro de Doctrina del Ejército Tatiana Fadul
Traducción: Escuela de Idiomas
y Dialectos del Ejército (ESIDE)
Desactivación del conflicto por parte de las Fuerzas Fotografía: Archivo fotográfico del CEDOE,
Militares de Colombia (1953-1961) Ejército Nacional.
Capitán (RA) César Castaño
Asesor del Comandante General de las Fuerzas Militares Impresión: Publicaciones Ejército
44
Ph. D. Ricardo Esquivel Correo electrónico (e-mail)
Asesor del Departamento Jurídico Integral del Ejército Nacional experticia.militar@cedoc.edu.co
Los artículos de reflexión sobre conceptos de doctrina
y opiniones publicados por autores militares y civiles
Trabajo autónomo del inglés para los integrantes del en Experticia Militar, Revista Profesional del Ejército,
Ejército Nacional de Colombia son de su exclusiva responsabilidad y no reflejan
56
Profesora Yury Andrea Yepes Landinez necesariamente la política o posición oficial del
Ejército Nacional de Colombia.
Docente de inglés en la Escuela de Idiomas y Dialectos del Ejército Nacional
Los términos doctrinales se encuentran alineados
con las definiciones establecidas en el MFRE 1-02,
Términos y símbolos militares. Esta aclaración obedece
a que, en algunos casos, estas palabras se pueden
encontrar definidas en diccionarios o en otros
documentos con distintas acepciones que no incluyen
la interpretación precisa para el contexto militar.
MILITAR
EDICIÓN 15, ABRIL - JULIO 2022
BOGOTÁ D. C., COLOMBIA
ISSN 2590-8782