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Estimulación temprana

e intervención oportuna

Un enfoque interdisciplinario
biopsicosocial

Jaime Tallis
Gabtiela Tallis
Haydée Echevenia
Jorge Garbarz
Ana María P. de Fiondella
Capítulo VI
Acompañando al bebé y a su familia cuando hay trastornos Prólogo
sensoriales. Ana María Fiondella .......................................... 129

Capítulo VII
Intervención oportuna en niños con riesgo ambiental
Jaime)' Gabriela Tallis ........................................................... 183

Capítulo VIII
La evaluación en estimulación temprana. Jaime Tallis ................ 199

Es para mí un honor responder a la invitación del Dr. Jaime Tallis


a prologar este libro. Considero que preparar un texto que acerque a
cuestiones que hacen a la práctica de una disciplina que ha ido constru-
yendo en los últimos treinta años su bagaje teórico, a partir de la preo-
cupación inicial de la Dra. Lydia Coriat, es útil para los profesionales que
intentan acercarse al abordaje clínico de bebés y niños pequeños con
problemas de desarrollo o en riesgo de padecerlos.
Al hablar de estirnulación temprana se puede aludir a cosas dife-
rentes, según los referentes teóricos de quien enuncie. Estimu/ación no
es lo mismo para todos,.)' temprana es una adjetivación relacionada al
tiempo o momento en que algo sucede o sucederá, pero su significado
cambia en relación a lo sustantivo de lo que se está diciendo.
Por lo tanto, hacer un rápido recorrido por las distintas escuelas o
criterios teóricos de abordaje resulta útil para que el lector pueda saber
de qué se está hablando, a quiénes se dirige esta disciplina clínica, y a qué
apuntan las intelvenciones con los pequeños, según de qué escuelas se
hable. Todo esto se ve reflejado en el presente trabajo.
Cuando nos referimos a seres humanos en proceso de desarrollo
es necesario pensar en las estructuras básicas que lo sostienen (madu-
ración del sistema nervioso central, constitución subjetiva y desarrollo
cognitivo) y en los instrumentos de los cuales se sirve el niño para in-
. 14
STELLA CANIZA DE PAEZ PROLOGO 15

Estas conclusiones se han ido enriqueciendo a través del entre- Se refrescan conocimientos sobre la maduración del primer año de
cruzamiento entre lo biológico del niño, la subjetividad de quienes ejer- vida, dividido en trimestres, y las particulmidades de desarrollo que
cen función materna y paterna, y las peculiaridades del ejercicio mismo pueden observarse en los niños que carecen de un fundamental sentido
de la función, de modo de construir un entramado que sustenta la de comunicación a distancia y capacidad anticipatoria, como es la visión.
constitución subjetiva del pequeño, sostén a su vez de la construcción También se describen algunos rasgos de autismo que suelen observarse
del conocimiento y de la apropiación de los valores de la cultura de en niños ciegos, cuando no se ha podido intervenir adecuadamente,
pertenencia. Una manera pmticular de entender la estimulación tempra- sosteniendo a la madre en el ejercicio de su función.
na como intervención clínica dirigida a la infancia amenazada, a partir de Las actividades de la vida dimia, cotidianas para cualquier bebé,
reconocer el efecto-que tiene en los padres un diagnóstico que implica tendrán mayor importancia para el desanollo del niño si devienen en
dIscapacIdad. Efecto que tiende a con'er al niño del lugar de hijo y a los crianza estimulante. En el capítulo conespondiente se encuentran ele-
padres de saber ser padres; saber cultural que parece perderse, frente a mentos clarificadores en este sentido.
un niño diferente al soñado.
Otro aspecto impOltante desanollado es la preglH1ta acerca de qué
. Esta pérdida de ilusiones, la imupción de Una patología indeseable es visión en cada uno de los primeros años de vida. Un cuadro sintetizador
e mdeseada. representada por el diagnóstico médico, deja marcas en los y un análisis detallado dará infonnación al lector y le aportará elementos
padres, marcas tan fueltes que no sólo fisuran, también facturan. de ret1exión para su clínica.
Fractura de la función materna y quiebre de su ejercicio que en Un tema de preocupación de diversos autores es la incidencia de
muchos casos provocan en el niño patología psíquica sobreagrega.da al la ceguera en el proceso que culmina con la clara aparición de la función
cuadro de base, y que se maniJiesta a través de conductas estereotipadas simbólica y sus cinco conductas características desde el punto de vista
O rasgos de desconexión. piagetiano.
Se podrá leer entonces acerca de algunos ejes centrales de esta Así, la imitación diferida, la imagen mental, el juego simbólico, el
práctica clínica: constitución subjetiva, transferencia, interdisciplina. lenguaje y el dibujo, y su valor de representación de un significado por
También habla el autor de este capítulo acerca de cómo esta clínica se uno O más significantes, tendrán para el niño ciego peculiaridades que es
sostiene a través de un terapeuta único especializado en estimulación necesario conocer para poder intervenir ofertando de manera de facilitar
temprana, como representante y en el seno de un equipo interdisciplina- en todo lo posible la superación de las dificultades probables. Es un tema
no. Esta clínica se ocupa de los bebés con problemas de desanollo y de complejo y apasionante, al que el lector podrá asomarse en este texto.
sus padres. De los avatares de ser infante y de tener un hijito con pato- Se reflexiona también sobre la importancia del encuentro del niño
logías discapacitantes o alto riesgo de padecerlas. con pares y la facilitación de un contacto corporal, más cercano e intenso,
. Es necesario para el pequeño acomodarse al mundo, a pesar de las como modo de favorecer un mayor conocimiento del propio cuerpo y del
dIficultades biológicas para asimilarlo. Esas dificultades puden tener cuerpo del otro, que pennitan una mejor construcción del esquema cor-
caractelísticas generales relacionadas con la patología de base (retm'do poral.
mental. cuadros lesionales, déficits sensoriales, etc.). Conocerlas es El espejo que el otro es para el niño vidente, por el solo hecho de
importante, aunque lo realmente trascendente es poder ubicar la singulari- interactuar compartiendo un espacio, aunque sea' a cierta distancia, no
dad de cada niño y su entorno, el lugar signiJicante que el déficit tiene puede beneliciarplenamente al niño con deficiencia visual importante. En
para cada pareja de padres. En este sentido, este libro ofrece matelial, el texto se plantean caminos facilitadores.
cuando nos introduce en el campo de la deficiencia visual severa, o la La síntesis de lo antedicho surge de la propia autora del capítulo:
ceguera.
"En la medida en que olvidemos la mirada perdida, vamos a hecer posible
PROLOGO 17
. 16 STELLA CANIZA DE PAEZ

que encontremos el deseo de mirar". Esto es válido para cualquier bebé conectado con el mundo, apropiándose de la cultura, acompañado de
con problemas visuales, aunque se trate además de un bebé prematuro padres que pueden disfrutar del hijo y sostenerlo en una red de signifi-
O portador de Síndome de Down.
caciones a pesar de la discapacidad, tiene valor propio. Y está demostrado
La autora nos habla de los niños con cuadros de expresión múltiple, en cientos de historias de vida. Pero no quiere decir que no sea necesano
deteniéndose en la importancia que para todos tiene el querer mirar. El esforzarse por -sistematizar en una investigación los resultados obtenidos
capítulo dedicado a la deficiencia visual es una recopilación de trabajos para fundamentar mejor esta práctica. . .
preparados para distintos eventos por Ana María Fiondella, reconocida En síntesis esta obra contiene capítulos ofrecidos por dlstmtos
como referente en esta especialidad. autores en un ac:rcamiento a la estimulaci6n temprana, a través de di-
Se abre en el capítulo séptimo la cuestión de la intervención versos apol1es teóricos que hacen a la práctica y a cuestiones clínicas más
oportuna, dirigida a niños pertenecientes a núcleos familiares de alto específicas.
riesgo social. La incidencia de necesidades básicas insatisfechas, tanto Un serio intento de ofrecer un referente biográfico para comenzar
en los adultos como en los niños, hace sugerir a los autores la impOltancia a adentrarse en la gran complejidad de la clínica de los más pequeños,
de organizar acciones de prevención primaria o secundaria de problemas cuando su desarrollo está amenazado.
de desarrollo.
El último capítulo, llamado "La evaluación en estimulación tem-
Stella Calliza de Páez
prana", plantea un problema que distintos autores argumentan como el
punto débil de esta disciplina: la falta de investigaciones que cumplan los
requerimientos de la comunidad científica internacional para ser conside-
radas válidas.
Estas críticas, según las cuales no se puede demostrar la "eficacia"
y la "eficiencia" de esta intervención, se justifican en cierta medida. Son
pocas las investigaciones sistemáticas, y menos aún las publicadas. Sin
embargo, clínicamente es evidente el efecto ql!e una intervención bíen
dirigida tiene en los niños.
¿Por qué, si no, los rasgos de desconexión o autismo, considerados
patognomónicas en niñps con Síndrome de Do'Wn hasta hace algunos
años, han disminuido hasta casi desaparecer, siendo inexistentes ~n los
. pequeños adecuadamente sostenidos? O ¿qué determina que cada vez
sean más los niños con discapacidad que pueden integrarse a jardines de
infantes y a escuelas comunes?
Podría argumentarse que esto se debe a cambios en el lugar que la
comunidad le da a sus miembros afectados. Pero ¿cuál es la causa y cuál
es el efecto? Sin duda, coincidimos en alentar a los profesionales
dedicados ··1 tratamiento de bebés y niños pequeños que se propongan
. encontrar soluciones para que su práctica logre el reconocimiento en el
IIlIUldo científico.
Una cara de pequeño, vivaz, interesado en hacer por sí mismo,
Introducción:
de Semántica y Definiciones

Jaime Tallis*

,
I

\
I
Eslimulación temprana, intervención lemprana, intervención opor-
tuna, estimulación precoz, etc. Si son val;as las formas de denominar esta
disciplina o cruce interdisciplinario vinculado al desarrollo normal y/o
alterado de los lactantes y niños pequeños, también son diversos los
conceptos que estos nombres implican y las definiciones de su campo de
acción.
Citemos, por ejemplo, los primeros conceptos publicados en unos
cuadernos especiales de la escuela creada por la Dra. L. Coriat, una de las
más prestigiosas de nuestro medio. Así; en Bases lIeuropsicológicas de
/0 esliJ11ulación temprana, se la definía de la siguiente manera:

"La estima/ación es una técnica para ayudar a/ni/lo con


problemas del desarrollo a superar estos trastornos o a
moderar sus efectos. es a través de la madre que se
imroducen, en el campo de la relación con su hijo, los
elemelltos que apoyarán al niño afectado por defi-
ciencias/!.

*Neuropcdiatra. Coordinador del Grupo Interd iscip línari o de Aprendizaje y


Desarrollo del Hospital Carlos G. Durand.
JAIME T ALLIS INTRODUCCION DE SEMANTICA y DEFINICIONES
21

Estos conceptos, se amplían en Cuadernos de Desarrollo Infantil "La estimu/ación temprana es el conjunto de acciones
nrO. 2: tendientes a proporcionar al niño las experiencias que
éste necesita desde su nacimiento para desarrollar al
"Como estamos hablando de niños)' no de cosas, no se máxinw su potencial psicofisico-social".
trata se reparar sistemas nerviosos o de colocar in- (Mpntenegro, 1978)
formaciones en su debido lugar como se haría en una
biblioteca, sino de ofrecerle al niño la posibilidad de .Es obvio que si bien los objetivos en función del desarrollo guardan
recuperar o construir su lugar como persona ... " más sllruhtudes que diferencias, se parte de conceptos teóricos distintos
que hacen variar enormemente la metodología utilizada.
Más recientemente recortamos otros conceptos de la misma línea Estamos asistiendo simultáneamente a una gran difusión de esta
teórica: disciplina, al mismo tiempo que a un debate acerca de la validez de las
teorías y prácticas que la sostienen, por lo cual nos parece oportuno
"¿ Qué es en definitiva la estil1U1lación temprana ? No es aportar Ideas para esta discusión a través de este libro, producto de la
más que lo que todas las madres hacen espolllánea )' experiencia de distintos profesionales de nuestro medio.
naturalmente con sus hijos en los primeros meses de vida . A.10 largo de esta obra queremos abordar los aspectos biológicos,
desde que la humanidad existe como tal." pSIcológICOS y sociales que sostienen esta práctica. Aunque los autores
(Escritos de la Infancia N" 2, 1993) tengan posturas teóricas determinadas, el hecho de no ser éstas doamá-
. . o
tlcas, permIte un enfoque amplio del tema que lleva a nuestro objetivo:
Como vemos, hay una constancia a través de los años en colocar bnndar Un aporte para entender la complejidad del desarrollo infantil así
el énfasis de la acción terapéutica en la relación vincular madre/hijo, muy como la validez y limitaciones de la estimulaci6n temprana en los c~sos
diferente de las ideas de otras escuelas, como puede evidenciarse en esta en que este desarrollo es afectado.
definición de 1982, en Pediatrícs de Simeonsson:

"podemos definir la intervención temprana como un


período de intervención sistemática llevado a cabo en
lactantes o infancia temprana. La duración de la
illtervención varía de meses a años. Además la defini-
ción de inlen1ención se limitaría a manipulaciones que
son exclusivamente experimentales en su nalttralew.
Típicamente envuelve terapias tradicionales como la
fisica, ocupaciona~ del lenguaje)' amplia combinación
de estimulación físico-social. "

También es dísimil el concepto que Se desprende de definiciones


de escuelas más vinculadas al riesgo social, como la chilena:
Capítulo 1

Características de la lesión
cerebral en los niños.
Acerca de la plasticidad neuronal

Jaime Tallis

Las consecuencias que una agresión encefálica produce en los


niños presenta características que son específicas para esta etapa del
ciclo vital. Los factores noxantes pueden producir su impacto por lesiones
estructurales macro o microscópicas, por alteración de la morfogénesis
o del establecimiento sináptico, por anomalías bioquímicas que impiden
el nomlal metabolismo celular, por distorsiones en el funcionamiento, o
por interferencias madurativas. A veces pueden sólo generar predispo-
siciones consolidadas posteriormente por factores psicoambientales.
Dos circunstancias se destacan en la determinación de la singula-
ridad de la lesión neurológica pediáttica: la maduración y la plasticidad
neuronal. El hecho de que las funciones nerviosas del niño estén en un
proceso de diferenciación y madurez determina que la lesión cerebral no
sea tan localizada como en el adulto, tendiendo a un déficit generalmente
difuso.
En el niño en evolución, la respuesta a la agresión implica una
temprana detención y desorganización funcional con interferencias en las
adquisiciones (Tallis, 1982). En general, cuanto más temprano interfiere
la lesión en la maduración ontogénica, más grave es la expresión de su
trastorno, aunque sólo pueda evidenciarse clínicamente en su totalidad
cuando el niño alcance el estadio madurativo en que la función deba
evidenciarse. Quiere decir que la edad que tiene el niño en el momento de
24 JAIME TALLIS CARACTERISTICAS DE LA LESION CEREBRAL ... 25

la lesión se suma a los efectos de las características de la misma, la dades, reorganizaciones, es necesario ser cautos para que ciertas pecu-
intensidad y localización. La misma lesión, en igual localización, en liaridades observadas tempranamente nos determinen pensar alta
diferentes edades, produce distintas consecuencias. predictibilidad de funcionamiento en edades posteriores.
Vamos a dar un solo ejemplo de esta aseveración. La zona germi- El daño cerebral no sólo implica la injuria tisular irreversible, sino
nativa secundaria adquiere su máximo volumen a las 26 semanas de que desencadena mecanismos que afectan a zonas intactas anatómica-
gestación. En esta zona se generan los precursores astrocitarios con mente, cambiando en su totalidad la biología de ese cerebro. Esta res-
destino a la mitad superior del neocortex y los oligodendrocitos vincu- puesta específica de las edades tempranas es lo que habitualmente se
lados a la formación de mielina. Por otro lado son muy comunes en el conoce como plasticidad neuronal, y es citada como la base del trabajo
pretérmino las hemorragias de la matriz germinal y la leucomalacia de estimulación temprana por distintas líneas de pensamiento. Pero en
periventricular. Al destruir los precursores gliales, estas lesiones interfie- realidad el concepto de plasticidad no sólo debe asociarse a la respuesta
ren eh la mielinización posterior, así como en el desarrollo celular y compensatoria a la injuria, sino que tiene implicancias mucho más amplias.
sináptica cortical (Evrard, 1992). Esta distorsión severa en el desarrollo
sería totalmente distinta si la misma agresión, en la misma zona, se pro-
dujera una vez terminado tanto el proceso de mielinización como el de 1. Concepto }' alcances de la plasticidad neuronal
formación celular y desarrollo sináptico.
En el concepto de lajnterferencia en la maduración y el aprendizllje
es central entender que además de lo que el cerebro no puede hacer, es Para Buchwald (1990), la plasticidad cerebral serían "cambios de
importante lo que no puede captar. Las iíneas generales del desarrollo del estructuras y funciones producidas por influencias endógenas o exóge-
sistema nervioso están genéticamente codificadas y se organizan en nas que en cualquier momento de la vida puede sufrir un individuo".
relación a las influencias ambientales. Cuando este mensaje genético es Desde este concepto corresponde entonces incluir:
imposible de cumplir por la interferencia lesional, el sistema nervioso l. la posibilidad de cambios de estructuras y funciones durante el de-
busca una nueva organización que seguramente será más lábil y menos sarrollo de la neurogénesis, migración neuronal, morfogénesis y
eficaz. Es decir que la agresión, más que bloquear totalmente la madura- sinaptogénesis. lo que determinaría la individualidad de 'cada sistema
ción, altera su curso. El resultado de esta nueva organización, alejada del nervioso humano:
informe genético, se expresará clínicamente en distintos síntOmas y 2. la posibilidad de que la experiencia temprana pueda incidir en la fase
formas de funcionamiento. de aprendizaje sobre una estructura cerebral, sólo delineada globalmente
El sistema nervioso del niño pequeño es diferente en estadios por la información genética, a través de un remodelado porinputsensoriales;
subsecuentes del desarrollo, y su maduración no es homogénea ep todas 3. la reorganización estructural frente a una lesión encefálica, tendiendo
las zonas sino morfológicamente diferenciada de acuerdo a las funciones a compensarlo funcionalmente (para los sistemas funcionales cerebrales,
que deban aparecer. Este principio, que se expresa como que la morfogé- esto implicaría la capacidad de reorganizarse en forma distinta frente a
nesis es asincrónica topográficamente y sincrónica funcionahnente, hace pérdidas de partes de los mismos); y
que nunca pueda imaginarse el cerebro infantil como una réplica pequeña 4. cambios adaptativos en la fase de envejecimiento.
del adulto (Prechtl, 1981). Esto se traduce en que muchos signos y Como vemos, los primeros tres ítems tienen un valor importante en
síntomas sean "edad específicos", y que luego desaparezcan o se modi- el campo de la estimulación temprana, por lo cual los analizaremos más
fiquen para manifestarse posteriormente eI1 una forma diferente. Como el extensamente, no sin antes comentar algunos aspectos genéricos, como
desarrollo neurológico no se produce solamefite como una progresión límites de la plasticidad, costos y beneficios, y período crítico.
lineal de complejidad, sino que también i.mplica regresiones, discontinui- La cuestión de los límites debe extenderse no sólo a la imposibilidad
JAIME TALLlS CARACTERISTICAS DE LA LESION CEREBRAL ... 27
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de la compensación total, ya que la capacidad de cambios anatomofun- acercaron argumentos para pensar que ya no sólo el ambiente intrautelino
eionales sólo puede apartarse discretamente de lo planificado por los sino el contacto con el mundo externo podrían ejercer una influencia en
genes (caso contrario no existiría nunca déficit), sino también a las disc~­ la conforn"ción final del entramado funcional del sistema nervioso
siones sobre la edad en la el'al se expresaría esta capacidad. Segun humano.
nuestro recorrido bibliográfico, en cuanto a la posibilidad de que una Es sabido en los último años que las zonas gernlinativas secunda-
lesión del hemisferio dominante no determine alteraciones en el lenguaje rias persisten en su función durante los primeros años de vida. Esto per-
(Tallis y Soprano, 1991), los autores discrepaban en fijar desde los 12 mite entender que el cerebelo tennine de adquirir su mayor población
meses hasta los 12 años los puntos máximos de capacidad recuperatona, neuronal, las células granulares y gran parte de su glía, después del
existiendo toda una gama de posiciones intermedias. Incluso en este te- nacimiento (Gadsdon y Emery, 1976). Asimismo, según las investigacio- \
ma puntual, no hay acuerdo en que la compensación sea total (Woods nes de Dobbing y Sands (1973), el número final de células cerebrales na I
I
y Teuber, 1978) o que al adulto le sea vedada (Sl. James Roberts, 1981); se alcanzaría hasta alrededor de los dos años de vida postnata!. También 1
volveremos a este tema más adelante, cuando comentemos más extensa- en el tronco cerebral la mitad de su contenido de ADN (evidencia indirecta
mente las consecuencias sobre el lenguaje de una agresión encefálica de población celular) es conseguido en los primeros 18 meses después
del nacimiento.
temprana.
Prechtl (1981) advierte que la plasticidad no ha sido hallada en Estos conceptos, que demolieron las primitivas creencias de que
todos los subsistemas del cerebro y que na todos los procesos son en el sistema nervioso todo estaba completado durante la gestación,
compensatorios: si bien ésta es la tendencia que pelmite modificar el permitieron entender cómo fenómenos acontecidos durante los primeros
impacto de injurias tempranas, lambién puede explicar conexiones erró- meses de vida, por ejemplo la desnutrición severa del lactante, puedan
neas en este afán de compensación. influir en el contenido celular y/o en los contactos sinápticos definitivos.
El concepto de "período crítico" , también de significación para el La temía de la estabilización selectiva de las sinapsis (Changeux y
trabajo en estimulación temprana, implica un período de sensibilidades, Danchin, 1976) es formulada frente hasta las entonces predominantes de
propensión a respuestas o potencialidad para adquirir funciones. Existe la quimioafinidad y la empirista. Según la hipótesis de la quimioafinidad,
durante períodos de la ontogenia una sensibilidad aumentada a ciertos mecanismos bioquímicos constituidos genéticamente determinarían los
estímulos para que se adquieran o estabilicen tipos de conducta. Trans- contactos finales entre las neuronas; mientras que la empirista plantea
curridos estos períodos, las estructuras serían más resistentes al adies- que es la actividad del sistema la que especifica sus conexiones. La
tramiento, lo que implicaría que el niño quedaría ee desventaja. Este hipótesis de Changeux y Danchin sugiere que si bien el genoma programa
conocimiento de un período Clítico facilitador de aprendizajes en cerebros las interacciones sinápticas, éstas tienen inicialmente ciena redundancia
sanos y afectados, también es válído desde el punto de vista estructural y fluctuación: al activarse inicialmente estos circuitos en fonna espontá-
para los, mecanismos de plasticidad compensatorios. nea (en el emblión) o provocada. se estabilizan las conexiones adquirien-
do especificidad y reduciendo la redundancia transitoria.
Dadas las experiencias y observaciones en animales y humanos,
11, Plasticidad durante el desarrollo anatomofuncional la teoría de la estabilización selectiva de las sinapsis ofrece una explicación
del sistema nervioso atrayente de cómo pueden influir las experiencias tempranas en las
conexiones interneuronales.
Para imaginar la dimensión de esta red de conexiones debemos
Los hallazgos de que gran parle de la neurogénesis temlina luego recordar que nuestro cerebro posee 1DII , neuronas y que cada una de ellas
del nacimiento. y la hipótesis de la estabilización selectiva de las sinapsis, establece alrededor de 10.000 contactos. Esta entramada red no se nos da
28 JAIME TALLlS CARACfERISTICAS DE LA LESlON CEREBRAL ... 29

en esta inmensa y apasionada complejidad de una sola vez y para siempre, III. Plasticidad neuronal y aprendizaje
sino que es un proceso continuo desde el nacimiento hasta la adultez. Este
proceso implica permanente remodelado desde una inestabilidad inicial
y redundancia transitoria hasta una estabilizaci6n selectiva por la activi- Es necesario que recordemos lo expresado sobre los límites de la
dad de las múltiples experiencias, y no s610 se graduarla el contacto plasticidad neuronal: en el tema del que nos vamos a ocupar es evidenté
anat6mico sino también la intensidad del intercambio bioquímico. que éstos san más rígidos para el ser humano· que para los animales; la
Al decir de Changeux (1985) los genes perpetúan los grandes ras- mayor parte de las experiencias han sido realizadas en ellos (por razones
gos de la organización neurológica (forma, áreas, arquitectura general) técnicas y éticas) y hay que ser sumamente cautos en su extrapolación
pero la variabilidad humana fenotípica es el resultado de divisiones y al hombre.
migraciones neuronales, navegación del cono de crecimiento, su divi- Spinelli (1990) afirma q~e el cerebro diseñado y construido por el
si6n, los primeros contactos sinápticos y la estabilización selectiva genoma no está totalmente configurado por él, y que termina de consti-
posterior. Esta plasticidad permite una impregnaci6n progresiva del tejido tuirse después del nacimiento guiado por estímulos y retos que son
cerebral por el entorno físico y social. específicos del medio de crianza. Resume sus largos años de experiencia
Limitado por el concepto de período crítico esbozado anteriormen- con la colteza visual del gato, así como con la corteza sensoriomotora y
te, podría suponerse que cieltas estructuras que sostienen funciones el hipotálamo.
iniciales en el lactante son modificadas con el tie.mpo. Prechtl (1981) Respecto de la corteza visual, a través de estímulos que no son
hipotetiza sobre el futuro probable de estas estructuras iniciales, descar- habituales para un gato de colta vida, engendra una población neuronal
tando el concepto de la neurología clásica de su persistencia indefinida con propiedades específicas no hallada en animales no sometidos a estos
sujeta a control por una COIticalización progresiva, ya que existen estímulos, deduciendo que la experiencia había inducido cambios funcio-
momentos de la evolución del lactante (adquisición de la postura erecta. nales en esas neuronas. Por otro lado, el estímulo reiterado de un ante-
de la prensi6n voluntaria, la respuesta plantar, etc.), en los que coexisten brazo provocó que su representación en la corteza sensorial fuera varias
conductas reflejas y voluntarias con avances, retrocesos e inconsisten- veces mayor que el área homóloga del otro hemisferio no adiestrado.
cias que demuestran la presencia simultánea de distintos mecanismos Hallazgos similares, pero más significativos (cuatro veces mayor) fueron
estructurales de control. encontrados comparando la representaci6n de estos antebrazos en la
Para el autor, es evidente que hay regresión y desaparición de corteza motora y en las células del hipotálamo que responden a estímulos
conexiones y funciones con simultáneo desarrollo de nuevos contactos. visuales. Es obvio que este entrenamiento temprano determinó una
En este proceso de transfoltnación y cambio puede haber desaparición asimetría hemisférica y también, según pudo evaluarse, una preferencia
total o parcial de circuitos sensoriomotores, cambios en su composición. manual.
canales sensoriales que modifican su conexión con la respuesta motora Son múltiples las experiencias con ratas, gatos y otros mamíferos
de competencias transitorias. que demuestran conexiones tempranas que luego desaparecen en el
Esta plasticidad durante el desarrollo anatomofuncional del siste- cerebro maduro y modificables por estímulos guiados, Cama así también
ma nervioso hace imposible la existencia cerebros iguales por más similar los datos de confirmación de la hipótesis de la estabilizaci6n selectiva.
que sea la información genética (gemelos homocigotos) ya que no existen Sin embargo, la idea de Spinelli de que a medida que se avanza en
relaciones experienciales idénticas con el medio ambiente. Esto -eviden- la escala filogenética sería mayor la plasticidad neuronal para los apren-
ciable en las conductas resultantes- nOS habla de la posibilidad de una dizajes tempranos, no se confirma con los trabajbS de Swartz y Goldman-
influencia de los aprendizajes sobre la plasticidad neuronal. Rakic (1990) en primates, quienes encuentran que los patrones adultos
de distribución neuronal y las conexiones sinápticas en la coneza de
30 CARACTERISTICAS DE LA LESION CEREBRAL .. ' 31

asociaclOn se establecen por lo menos un mes antes del nacimiento, tempranas, distintas de las de aquellos niños que pelmanecen más tiempo
haciendo imposible su modificación por estímulos ambientales. Por el en la contención uterina.
contrario, los trabajos de l\iIerzenich (1992) de modificación del volumen La especial constitución del cerebro humano en cuanto a su ca-
de representación cortical de las manos en los primates ejercitados rácter único de dominancia y localización funcional asimétrica ha sido
sistemáticamente para efectuar ciertos movimientos, abonana esta hipó- utilizada en extenso como campo de estudio de la plasticidad neuronál
tesis, dado que este investigador considera posible la idea de una mo- fisiológica y la producida en respuesta a lesiones. Esto es especialmente
dificación constante de estas zonas de representación a lo largo de la vida. cierto en relación al lenguaje.
La maduración del cerebro humano eS distinta de la de otros Un ejemplo de lo antedicho son los trabajos recientes de Buchwalc[
primates, por la lentitud con la que alcanza su condición adulta. Al nacer, (1990) demostrando la influencia del medio lingüístico temprano en las
el peso es sólo 24% del que anibará al final del desarrollo, mientras que respuestas evocadas cognitivas (P 300) con la incapacidad de los adultos
el chimpancé comienza con un 60% de su valor final. Sin embargo, el para discriminar estímulos en fonologías distintas de su lenguaje original.
crecimiento es rápido en los primeros años, llegando al peso definitivo Este predominio hemisférico para el lenguaje se vincularía estrechamente
adulto a los 7 años. con la emoción por los fonemas que la expresan. Esto implica que habría
En este cerebro humano hay varios hallazgos que confinnan la también una lateralidad para las emociones adquiridas a través de la len-
posibilidad de quc durante la ontogenia haya una influencia bidirec- gua matema, siendo distinta, por ejemplo, para culturas como la japonesa
cional entre estructura y función. Forssberg (1992) en su análisis de las con gran cantidad de vocales combinadas en forma significativa, que para
adquisición de la marcha, concluye que la misma es controlada por un culturas occidentales, donde estas vocales aisladas carecen de conteni-
sistema complejo que comprende conexiones en la médula espinal, do habitual y no se combinan sino a través de consonantes que son
tronco crancrlios basales. cortex v cerebelo. Las estructuras finales y el registradas en zonas distintas del cerebro.
funcio~;mi;nto específico en lo; humanos es un hecho epi genético que La necesidad -ya no la posibilidad- de los estímulos ambientales
acontece con la práctica, por la cual los inputs resultados de la misma para estabilizar estructuras y funcionamientos puede evidenciarse en las
juegan un rol detelminantc en cl desarrollo de ciertas fases y en el diseño ambliopías de los niños con estrabismo, con pérdida de la función visual
final. del ojo inhibido.
El cerebro inmaduro del pretélmino es un campo interesante de También el detellninismo de la función sobre la estructura puede
observación, al ser distintas las condiciones ambientales entre el medio dar una explicación alternativa a ciertos hallazgos antomopatológicos en
intrautelino en el cual debclía habcr continuado su maduración yelmedio el autismo infantil. En dos niños autistas fallecidos se observó un
externo en el cual queda sumergido. Konischi y col. (1987) observan que aumento del tamaño neuronal en núcleos cerebelosos profundos y en el
la preferencia de giro cefálico temprano y la manual posterior se modifican núcleo olivar inferior, con sugerencia de persistencia de circuitos de
según el pretérnlino se coloque en posición prona o supina, en tanto Ross conexión fetales (Bauman, 1991). Estos hallazgos no se repitieron en
y col. (1987) señalan que los daños cerebrales en estos niños alteran la necropsias de adultos con este síndrome, pero sí estos últimos tenían, en
predisposición congénita a la preferencia manual diestra. distintas zonas del sistema límbico, aumento de la cantidad de neuronas
Boltos y Mmucco (1993) sostienen que los prematuros desarrollan por unidad de volumen y reducción de sus tamaños.
más precozmente algunas habilidades en el plano ventral y en la locomo- Estos hallazgos antomopatológicos son considerados como cau-
ción horizontal (deslizamiento, gateo), mientras que las respuestas sa de algunos síntomas del autismo, pero podemos también jugar con la
anticravitacionales en los miembros inferiores se alcanzan más tardíamen- idea de que podrían ser la consecuencia de los mismos. Es decir, si la
" modificaciones de los patrones medios de adquisiciones moto-
te. Estas hipótesis de la estabilización selectiva que comentáramos nos habla de
ras serían respuestas adaptativas frente a exigencias gravitacionales conexiones redundantes e inestables en los primeros estadios de la
32 JAIME TALLlS CARACTERISTICAS DE LA LES ION CEREBRAL ... 33

constitución neurogénica, la falta de estímulos ambientales que sufre el desan'ollo normal del lenguaje a pesar de las lesiones del hemisfelio
niño autista podria ser la causa de la persistencia de estas conexiones programado genéticamente para su control. Si la afasia se produce
fetales no transformadas. Tomemos esta aseveración solamente como durante o inmediatamente después de la edad de adquisición, la pérdida
una forma de pensar que muy frecuentemente los hechos del hombre. total que acontece es corregida por una readquisición a un ritmo ligera-
sano o enfermo, no ofrecen una única lectura. mente mayor. Entre los 4 y los 10 años, se produce una afasia típica que
Como vemos, desde funciones elementales como la marcha, hasta remite gradualmente, mientras que si la lesión es en la pubertad quedan
desarrollos superiores como el lenguaje y la emoción, pueden modelarse secuelas.
en su registro neuronal según el medio de crianza, y aun considerando Como vemos, Lenneberg (1975) sostiene que la afasia acontecida
como demasiado absoluta la aseveración de Spinelli (1991) de que "la por debajo d~ los 9 años tiene una recuperación total por mecanismos de
persona que suministra atención a un bebé es un modelador cerebral que plasticidad compensatorios. Esta aseveración no siempre fue ratificada
tiene enorme trascendencia en la predisposición de aprendizajes futuros por otras observaciones (Tallis y Soprano, 1992). St.James (1981) efectúa
y capacidad del niño", consideramos que el concepto de plasticidad una revisión de ellas que terrnina por cuestionar la pluripotencialidad
neuronal en el desarrollo normal es de suma importancia para quienes hemisférica.
trabajan en estimulación temprana, como así también la idea de la Hemos hecho un recOlTido somero sobre las específicas caracte-
plasticidad frente a agresiones encefálicas, de la cual nos ocuparemos a rísticas del cerebro infantil que deterrnina el curso del desarrollo y su
continuación. respuesta frente a lesiones. Estos conocimientos son de vital impOltancia
para quienes trabajan en estimulación temprana para saber las posibili-
dades y límites de los niños objetos de su atención.
IV. Lesión encefálica y plasticidad neuronal

Si bien no hay dudas acerca de que el cerebro inmaduro tiene


facultades de compensarse funcionalmente frente a una lesión, hay que
tener en claro lo comentado al comienzo de este apartado sobre plastici-
dad: esta capacidad tiene límites, existen posibilidades de efectos no
beneficiosos. Es conveniente recordar también el concepto de periodo
critico.
Acerca de la influencia de este último, son múltiples las comunica-
ciones de experimentación animal, valga como ejemplo citar los elegantes
resultados obtenidos por Hubel y Wiesel (1977) de la distinta organiza-
ción del cortex visual en monos de acuerdo al momento evolutivo en que
se realiza la oclusión total de uno de los ojos.
En los niños, las evidencias más importantes tienen que ver con la
adquisición del lenguaje posterior a una lesión del hemisferio dominante.
Lenneberg (1975) examina distintos trabajos al respecto y sostiene que
hasta los dos años existe una equipotencialidad de ambos hemisferios
(concepto no compartido por otros investigadores) que permitirá un
38 GABRIELA S. TALLlS EL PSICOANALlSIS TOMA LA PALABRA 39

varios autores, podamos interrogamos sobre el bebé, la madre y su El psicoanálisis evolutivo se diferencia de la psicología clásica y de
encuentro.
la medicina, por la especificidad de su concepción del tiempo. Para el
psicoanálisis, la teoría del "apres-coup" plantea una cuestión fundamen-
tal. SilviaBleichmar(1992) diferencia:
l. El inicio del problema
"... el psiquismo, más que bajo el modelo de una génesis,
más que bajo el modo de algo que se desplegaría por
a. Primeras consideraciones s ul1ratoria, se constituye por el reensamblaje de lo anterior
por parte de lo posterior (... ) lo inscripto que a partir de
Para abordar este tema definiré dos momentos o modelos dentro este a posteriori se ofrece como producto nuevo, nO
del psicoanálisis. Podemos delimitar un primer psicoanálisis (comenzan- previamente existente."
do por Freud) en el que los distintos momentos eran ordenados como
sucesivos. Podríamos denominarlo "psicoanálisis evolutivo ".
En este modelo, la variable "tiempo" es de fundamental importan- b. Otras consideraciones
cia. Los conceptos quc aluden a esa temporalidad san la regresión (que
supone una progresión), el trauma actual, la sexualidad infantil diferente Difícil es intentar desan'ollar una mirada sobre el bebé, considerán-
de la adulta, y la fijación, entre otros. dolo aislado de los fantasmas y posiciones asignadas familiar, social y
Llamaremos "psicoanálisis estructural" a un seo-undo modelo culturalmente. La premisa que sostiene la existencia del bebé es, por lo
que se anticipa en Freud. y es rescatado y reconstruido po~ Lacán. No se tanto, la inevitable presencia de un Otro que instale a partir de la falta Un
basará en una evolución, sino en la organización de un cC/mpo estrllclllral. lugar simbólico en el cual ser recibido.
La estructura se encuentra desde el comienzo. No es un despliegue tem- " Comencemos buscando aquellos autores que definen el principio
poral, sino que ordena distintos momentos lógicos. de esta histo.ia resaltando el estado del bebé. Brazelton (1983) a través
Estos modelos (evolutivo y estructural) determinan diferencias de distintas evaluaciones, puede oponerse a casi todas las teorías
teóricas, y >l"guramente también clínicas. Otras ciencias que se ocupan anteriores atinnando que el bebé al nacer, si bien se encuentra en un esta-
de! niño, po; ejemplo la pediatría, se rigen por un modelo evolutivo. La do de privación muy grande que lo lleva a necesitar del otro para constitu-
diferencia entre ambos modelos será también determinada por los méto- irse como sujeto, tiene en su haber una organización, que el autor
dos utilizados para dar cuenta de su objeto O problema. denomina "pre-organ;wción ", que es compleja y que le pennite estable-
Desde un enfoque evolutivo, se puede destacar el método de cer una comunicación con sus figuras significativas.
observación. Dentro y fuera del psicoanálisis se aplica este método para Kreisler acentúa que el recién nacido no es, como se creyó durante
abordar fundamentalmente al recién nacido. Junto Con la experimenta- mucho tiempo, p0l1ador de un sistema sensOlio motor deficiente, sino que
ción, estos modos de alcanzar el objeto son característicos de la pediatría aparece dotado desde el principio de todos los canales sensomotores:
y de la psicología clásica. olfativos. visual, auditivo; reconoce rápidamente la voz y el olor de la
Este modelo evolutivo permitió reunir fundamentos pediátricos y madre, tiene aptitudes imitativas, Tampoco se halla en un estado pasivo
psicoanalíticos. Buenos ejemplos son Rene Spitz y Donald Winnicott, y monótono, con abruptas alternancias de tensión.
quienes articularon ambas profesiones, O bien los trabajos conjuntos de
Kreisler (pediatra) con Fain y Soulé (psicoanalistas). "Es UIl partícipe activo, dotado de iniciativas )'
· 42 GABRIELA S. TALLlS EL PSICOANALlSlS TOMA LA PALABRA 43

Por lo tanto, la observación del lactante o del vínculo es insuficiente secuencia:


para anibar a la constitución del psiquismo. Es en este lugar donde el 10 tiempo. Anatómico-fISiológico: funcionamiento de la necesidad. Este
psicoanálisis estructural organiza la dialéctica entre la necesidad, el tiempo sólo aparece en situaciones patológicas de excepción (prematuros).
deseo y la demanda. 20 tiempo. Concomitancia, en tomo del objeto anátomo-fisiológico Ydel
Aquí se postula como "mítico" el comienzo. Esto es así porque deseo naciente. PeiÍodo de apuntalamiento en una unidad de lugar. La
implicaría una situación no posible dentro de la cultura. Esta situación zona de apuntalamiento se vuelve erógena. Comprende no sólo la
imposible es la del sujeto fuera del lenguaje. Por lo tanto un sujeto no es satisfacción, sino también la señal.
un organismo en relación directa con la necesidad. 3' tiempo. La actividad cobra autonomía e independencia respecto del
La prematuración del neonato implicará que sus necesidades funcionamiento biofisiológico. La inscripción tópica fue al principio
deban atravesar el lenguaje para ser satisfechas, deban ser pedidas a Otro limitada por Freud a la piel y a los orificios;y acabatía por ampliarse hasta
(la madre) con lo cual la necesidad se trocará en demanda. Este Otro llegar al concepto de un cuerpo considerado en su totalidad como una
interpretará esa demanda, devolviendo objetos culturales diferentes a ~ll zo~a eróge.na: éste es el cuerpo libidinal. .
puro objeto de la necesidad. La diferencia entre la dem;nda y la necesidad Freud ( 1915) sostiene que:
da por resultado el deseo.
El psicoanálisis es imprescindible ante el advenimiento de una "... e/nii"io de pecho realiza actos que no sirvell silla para
situación que pueda imposibilitar la construcción de la subjetividad en procurarle un placer y creemos que ha comenzado (l
el niño. Esta situación remite al lugar del hijo en el deseo de la madre. experimentar ese placer en ocasión de la absorción de
Un bebé puede porlar, además de manifestaciones orgánicas, otras alimentos. pero que después ha aprendido a separarlo
agregadas de tipo psicosomáticas: insomnio, anorexia, bulimia, etc., de dicha condición. 11
expresión de dificultades dentro del intercambio en el ví~Cl¡(O .
El desprendimiento de lo biológico y de lo libidinal mmcará la
autonomía de la segunda.
IlI. Una posible historia
"E! cuerpo libidinal se describe en su ClnálOlllo-jisiología:
[(n(l el/voltura, orificios, una 1I1otricidad."
Comencemos por Freud (1915), quien conceptualiza el acto de (Gutton, 1983)
nacer como el "prototipo" del estado de angustia, La tensión Irente al
peligro provoca dolor. Del1ne este momento como de intoxicación: "la La lisiología Oiiticial define tres Lipos de conducta: el placer es
primera angustia es de naturaleza tóxica". oht~nido en el lugar, por incorporación O por excorporación. Todo el
El concepto de pulsión es el puma límite entre lo orgánico y lo cuerpo es susceptible de erogenizarse. pero distIntas investigaciones
psicológico. Se separa el instinto, que pertenecerá al soma, mientras que demuestran que hay ac(i\'idades () :.01lllS corporales lIelllras. De este
la pulsión pemlitirá la enO·ada del inconsciente y de la sexualidad. La modo. la mano no es erógena. pero sin ella, las zonas erógenas quedarían
pulsión es un representante somático en lo psíquico. En un deslizamiento en silencio. La primera acLividad oral constituye una organización coor-
que va de lo biológico (instinto) a lo pulsional, se desvía la necesidad del dinada de pecho, mano y boca.
funcionamiento corporal. Freud (] 905) dice:
Gutton (1983) organiza este movimiento según una detenninada
I
1,
44 GABRIELA S. TALLIS

"El niiio no se sirve de un objeto ajeno para mamar;


EL PSICOANALISIS TOMA LA PALABRA

En 1938, Freud escribe:


45

prefiere una parte de su propia piel porque le resulta más "Tener y ser en el niño. El niño prefiere expresar la
cómodo, porque así se independiza del mundo exterior relación objetal mediante la identificación: yo soy el
al que no puede alÍn dominar, y porque de esa manera objeto. El tener es ulterior y vuelve a recaer en el ser una
se procura UlZa segunda zona erógena si bien de menor vez perdido el objeto. Modelo: el pecho matemo. El
valor". pecho es una pO/te de mí, yo soy el pecho. Más tarde tan
sólo yo lo tengo, es decir, )'0 no lo soy".
Podernos articular los conceptos de autoerotismo, alucinación y
narcisismo. Seguirnos a Green (I 968), quien considera que el narcisismo Distintos momentos de la estlUctura. Sólo en el "yo lo tengo" se
no es una vivencia, sino un concepto. Este autor, al igual que Freud, piensa separa el yo del sujeto del inconsciente.
que la pérdida del pecho es contemporánea con el momento en que se
puede aprehender la persona total de la madre. Pero esta apropiación no
puede ser perceptiva, por lo tanto: IV, Hablemos de la madre

"El autoerotismo firma en las puertas del cuelpo la


independencia respecto del objeto; la alucinación Desde el discurso, el término de "madre" implica el de "hijo". Son
negativa(*) rubrica, .con la percepción total del objeto, referenciables: no existe uno sin suponer el otro. Pero si hemos realizado
la puestafuera-de-yo de aquel a quien suceda el yo-no- una aproximación al hijo, intentemos la epopeya de abordar a la madre.
yo en el que se basará la identificación ". Winnicott (1987) dirá:

Green (1983) deline al narcisis¡;no primario como: "Una madre no necesita tener una comprensión in-
telectual de su tarea, porque su orientación biológica
1. La organización de las pulsiones parciales del yo como caracterización hacia su propio bebé la torna adecuada para ella en sus
unitaria del yo. aspectos esenciales".
2, El narcisismo primario absoluto como expresión de la tendencia de la
reducción de las catexias al nivel cero. "En la primera acepción, se trata Es discutible considerar que lo que guía esta función es de natu-
del yo narcisista como Uno, surgido de pulsiones parciales, gracias a raleza biológica. Definido está que mientras nos encontremos en el campo
la acción de Eros. de la cultura, del lenguaje, nO hay instinto funcionando.
En la segunda acepción, se trata de la expresión (... ) del principio de Aulagnier (1993) sostiene que el ténnino madre se referirá. a un
Nirvana, que tiende al narcisismo primario absoluto ll

sujeto en el que pensamos presentes los siguientes caracteres:
En cuanto al apuntalamiento libidinal, se señala otra característica, o una represión exitosa de su propia sexualidad infantil,

la de la exitación sexual por dolor o displacer. Esto es el "masoquismo o un sentimiento de amor hacia el niño,

originario", coherente con la conceptualización de la pulsión de muerte. o un acuerdo con el discurso cultural al que pertenece acerca de esta

función,
(*) Se puede interpretar que la alucinación negativa se refiere a la o la presencia conjunta de un padre de'este hijo hacia el cual tenga

representación inexis ten te, en blanco (relacionada con el narcisismo negativo sentimientos positivos.
desarrollado por el au tor en el libro Narcisismo).
· 46 GABRIELA S. TALLIS EL PSICOANALISIS TOMA LA PALABRA 47

"En. todos los casos, el análisis del deseo inconsciente El bebé tiene períodos de atención y de inte!Telación con gestos y
de la madre por el nüio mostrará la coexistencia de un actitudes hacia la madre, y momentos en los que "descansa". Es también
deseo de muerte)' de Uf! semimiell/o de clllpa, la inevitable el que a veces inicia y se retira del intercambio.
ambivalencia qlle suscita ese objeto ... 11
Si aceptamos esta descripción del bebé, la madre estará en otra
situación, y pienso que es interesante en la disciplina de la estimulación
Sabemos que la definición elegida por Winnicott no es represen- temprana tener en cuenta que la mamá aguarda algo del bebé para
tativa de su teoría. No pretendemos cliticar al autor, cuyos conceptos de comenzar la relación. La experiencia cotidiana nos demuestra que el
"preocupación materna primaria", las funciones maternas de "sostén", neonato va demandando de un modo específico, que también va mode-
"manipulación" y "mostración de la realidad", son de fundamental im- lando a la mamá. En este punto, es interesante el aporte de Winnicott
portancia. (1960), quien considera que se produce una identificación de la madre con
el bebé, así como del bebé hacia ella.
Hay otra manera de pensar esta primera relación. Sami-Ali (1976)
V. El encuentro conceptualiza un tipo de espacio anterior a cualquier dualismo u oposi-
ción. Lo denomina "espacio de inclusiones recíprocas". En este espaclO
no hay afuera/adentro; yo/no yo. Por lo tanto, la madre está incluida en
Pero para continuar, o mejor dicho, para comenzar esta histolia, el bebé que está incluido en su mamá. Podemos suponer que la madre real
debemos acercar (en este capítulo y en la práctica también) el bebé a su puede asumir su maternidad o no, pero del lado del bebé, n? hay opció~
mamá. Si csto a veces requiere de un tercero profesional (estimulación posible: la presencia de la madre o de quien ocupe su funclOn es garantIa
temprana), es justamente porque no se trata de un orden natural. de superviviencia.
.' Este punto es muy amplio para desauollar, y seguramente quedará Citemos a Freud en el "Proyecto de Psicología para Neurólogos"
Incompleto. Buen lugar para empezar, la incornpletitud. (18C¡5) con respecto a la experiencia de satisfacción:
El bebé es esperado por los padres desde antes de nacer, pero
fundamentalmente por la madre, siendo investido por diferentes deman- "El O1ganisl1lo es en Wl principio incapaz. de llevar a
das y deseos: continuación de su narcisismo, reparación de la castración cabo esta acción específica, realizóndola por medio de
(esperanza fecunda durante el Edipo), cubierta de una dificultad familiar la (Isistellcia ajellll, (l/llamar la atención de una persona
o parental no resuelta. Difícil lugar de comienzo, pero necesario para la experimentada sobre el estado en que se encuentra el
subjetivación y la filiación familiar.
Para hablar de vínculo se supone uf\ bebé y una madre del1nidos
niiio, mediante la cond1lcción de la descarga por la vía
de la aiTeración interna (por ejemplo, mediante el llanto I
como partícipes según un detenninado mar'(x, referencial. Por lo tanto, si del n¡¡io).
del1nimos un bebé "amo activo, el vínculo será diferente de si lo dcfi-
rl
~¡'
Es/a vía de descarga adquiere así la importantísima
niéramos como pasivo. flinción secundaria de lo compresión (comunicación
Distinto es describir un "umbral perceptivo" (Spitz, 1965) que COIl el prójimo) y de la indefinición original del ser !1
mantiene aislado al bebé del mundo exterior, que considerar que hay humano, convirtiéndose así en la fuente primordial de
audición discriminada desde el útero, registro de colores, de gestos, de III
todas las motivaciones morales", 1
olores desde el momento de nacer, así como una intensa búsqueda de l'
interacción y de estímulos. La esU'uctura definida por el narcisismo, el autoerotismo y la 1I
alucinación (comentada en el apartado sobre el bebé), suponen la h
11
11
!l
· 48 GABRIELA S. TALLrS EL PSICOANALlSIS TOMA LA PALABRA 49

presencia de un Otro. El autoerotismo marcará la il/dependencia respecto Para referirme a Lacán, cito a D'Angelo, Carbajal, Marchilli (1984)
del Otro (que no supone su ausencia), la alucinación tendrá relación con en Una introducción a Lacán:
la p~esencia del objéio en su ausencia, en tanto que "atravesar el
narCIsIsmo otorga ser al sujeto. Ser conquistado por identificación" "Más allá de lo particular de cada demanda se perfila
(Rodulfo, J986).
ese deseo de incondicionalidad, que es pedido de amor.
Distintos autores psicoanalistas coinciden en la necesidad del El amoraparece aquí ligado al narcisismo)' encubriendo
otro, de la d~ada, del vínculo, de la madre. Se podría inclusive afirmar que la falta (... ) fónnula lacaniana del amor: dar lo que no
t?dos acentúan este aspecto para el adveniinÍento del Sujeto. Sin embar- se tiene a alguien quien no lo es (.. .) Podemos decir que
go, se refieren a distintos actores teóricos, y a distintas dinámicas de el don de amor es siempre un signo de amor; aquí vale
intercambio y determinación. recordar que Lacándefinealsigno como laque representa
algo para alguien."

VI. ¿Se trata de amor? PieraAulagnier (1979) desarrolla el concepto de alllorcomo uno de
los tres destinos de la búsqueda del placer, siendo los otros alineación
o pasión:
Propongo transcribir tres definiciones de alllor desde las cuales
partir.
"En el análisis de la relación de amor, relación de la Cllal
hice el prototipo de la simetria, he intentado demostrar
Winnicott (1958) lo define así' el compromiso que el amante está obligado a preservar
entre placer)' sufrimiento, entre catectizaciones privi-
"A medida que el Ilhio crece; el significado de la palabi-a legiadas y su posibilidad de cambiar de objeto, entre el
dinor se modifica: Yo pensado)' el cuerpo que él habita, entre el placer de
1; AhíOI" significa eX/sth; respiraryestarvivo, ser amado. gozar de su pensamiento y el de gozar de su cuerpo:
1/; Amor significa apetito. Aquí no hay preocupación compromisos sin los cuales él l10 podda preservar su
alguna, sólo necesidad de satisfacción. . carga de realidad, ya qlle se presupone que eso implica
1Il. Amor significa contacto afectuoso con la madre. la catectización por el pensamiento)' por el Yo de ese
IV. Amor significa illlegración (por parte delnilio) del índice de realidad que le concieme, y que es lo único qlle
objeto de la experiencia instintiva COIl la madre total o puede darle un status de existente par(l.¡ulllirada )' para
el COl1lacto afectuoso; dar se relaciona COII tomar, etc. la mirada de los demás. "
V. Amor significa tener reclamos COII respecto a la madre,
mostrarse compulsivamente ávido, obligat' a la madre a No me propongo hacer un colIage, pero ¿amor es existir?
compel¡sarlo por las deprivaciones (inevitables) de las
que el/a es responsable. ... "amor significa existir"
VI. Amor significa cuidar de la madre (o de un objeto ... "a quien no 10 es"
sustitutivo) tal como la madre cuidó del niño, lo cual ... "existente para su mirada y la mirada de los demás"
presagia ya una actitud responsable adulta."

I
ti
50 GABRIELA S. TALLlS EL PSICOANALlSIS TOMA LA PALABRA 51

"En el amor se apunta al sujeto, al sujeto como fal, en Describe cómo el bebé fija su mirada en el espejo, acompañado de
cuanto se le supone a una frase ar/iculada, a algo que se gestos lúdicos, consiguiendo un aspecto "instantáneo de la imagen".
ordena, o puede ordenarse, con toda IIna vida ". Pero no se trata solamente de la propia imagen reflejada, sino también la
(Lacán, 1973) del medio ambiente, "complejo virtual de la realidad que se reproduce".
Esta experiencia transcune entre los 6 y los 18 meses.
VII. La mirada, la voz, el cuerpo
"El hecho de que Sil imagen especular sea asumida
jubilosamente por el ser sumido todavía en/a impotencia
a. La mirada matriz y la dependencia de la lactancia que es el
hombrecito en ese estadio infans, nos parecerá por lo
P3I1iré de la leyenda de Narciso: tanto que manifiesta, el1una situación ejemplar, la matriz
simbólica en la que yo (je) se precipita en Ull fOI71/G
"Eco era una ninfa que ofendió a Hera porque cuando ésta estaba tratan- primordial, antes de objetivG/"Se en la dialéctica de la
do de espiar una aventura de Zeus, ella no hacía más que charlar con otras identificación con el otro y antes de que el lenguaje le
ninfas. Por eso Hera la desposeyó de la facultad de hablar, y sólo le dejó restituya en lo universal su función de sujeto. "
el poder de repetir las últimas frases de quien le dirigiese la palabra.
Con esta desventaja, .hizo cuanto pudo para enamorar a Narciso. el más Esta fonna es más constituyente que constituida, y se presenta
bello de todos los jóvenes, hijo del río Cefiso de Beocia y de la ninfa Lirí- como una exterioridad anticipatoria. Green (1980) pane de este estadio y
ope. Al ser rechazada por Narciso, la ninfa Eco fue a esconderse, y añade que es posible comprender el papel del espejo y de la mirada:
languideció hasta el extremo de no quedar de ella más que la voz.
Pero Narciso fue castigado por su crueldad. Inclinándose sobre una clara "Espejo, si" duda, de doble faz: forma su supe¡ficie a
fuente para beber, vio su propia imagen reflejada en el agua, y se enamoró partir del sentimiento COJporalycrea, con ello Sil imagen,
de ella. Incapaz de alejarse de allí, permaneció junto a la fuente hasta que pero sólo puede crearla merced a los auspicios de la
mUlió de inanición y de anhelo insatisfecho, convirtiéndose en la flor que mirada, que lo hace testigo de lafornlCl del semejante".
lleva su nombre."
Nos enfrentamos mejor al papel estructurante de la mirada, si a lo
Esta leyenda de la mitología griega fue elegida por Freud como que nos referimos es a la "mirada de la madre" como señuelo, una mirada
modelo para su teoría del narcisismo. La imagen de sí mismo es tomada que nos invita a mirarnos en el espejo.
. como objeto de amor. Winnicoll (1971) se pregunta qué ve el bebé cuando mira el rostro
Freud (I 923) dice queel yo es un "yo corporal" ,pero "noes tan sólo de su madre. Y sugiere que se ve a él mismo. Por lo tanto sostendrá que
un ser de superficie, sino que es también la proyección de una superficie". el precursor del espejo es el rostro de la madre.
Lacán (1966) será el que introducirá al estadio del espejo. Sitúa La imagen en el espejo está sostenida por la mirada de la madre. Esta
como antecedentes los trabajos de Baldwin. Es importante precisar el es la matriz simbólica que precipita la constitución del Yo. P.odemos
estado de prematuración de la cría humana, determinado por el inte'l)retarla como que la madre anticipa y sostiene la completitud, o como
"inacabamiento anatómico del sistema piramidal COmo de ciertas detenninante de la distancia del yo y del ideal del yo de acuerdo a cómo
rcmanencias humorales del organismo materno". se posicione esa mirada. Esto da al niño Stl valor. La ausencia de la mirada
52 GABRIELA S. TALLIS EL PSICOANALISIS TOMA LA PALABRA 53

determina las posibilidades de existencia. La autora dirá que "en el principio de la vida, la voz materna es la
Rodulfo (1986), siguiendo a Lacán, acentúa que es la pulsión que comunica entre sí dos espacios psíquicos".
escópica la que porta los significantes que posicionan de una cierta ma- El término de portavoz es el del papel del discurso de la madre en
nera la mirada. Esta "imago" es la imagen de la especie, que tiene un papel la estructuración de la psique. La prótesis de la psique del infans está dada
pre-figurador, causa del psiquismo, biológicamente determinado. por la psique materna que precatectiza y libidiniza los objetos de la reali-
Este mito de Narciso se relaciona con la tragedia de Edipo Rey. Si dad y del placer. Cuando el niño encuentra estos objetos, ya están mo-
podemos decir que la verdad como tal sólo puede ser expresada en forma delados por su madre.
mítica, podemos decir también que los mitos expresan de una manera Freud (1914) también incluye las voces, pero en relación con el ide-
ficticia las relaciones fundamentales de ser del ser humano (Rubinsztejn, al del yo y el super yo.
1986).
Hasta el final Edipo no sabe quién es, y cuando por fin lo sabe, "La incitación para f0I711ar el ideal del yo, cuya tutela se
primero dice que está muerto (está ciego), pero él dice "no estoy entre el confía a la conciencia moral, partió de la influencia
número de los vivos". crítica de los padres, ahora agenciada por las voces, y
Si de una verdad se habla, en esta asociación que quiero realizar, a la que en el curso del tiempo se sumaron los educadores,
es de la alineación en esa mirada del Otro: existencia sin conocimiento. los maestros y, como enjambre indeterminado e
Edipo llega a saber y se castiga arrancándose los ojos. inabarcable, todas las personas del medio (los prójimos,
la opÍliión pública)".

b. La voz En el mismo' texto de "Introducción al Narcisismo" a!!reua'


o c'

En el mismo mito de Narciso nos encontramos con Eco. Por hablar "El conmovedor amor paternal, tan infantil en el fondo,
cuando se espía, se le quita esa facultad. Luego, de ella sólo queda la V01:. , 110 es otra cosa que el narcisismo revivido de los padres,
Piera Aulagnier plantea que lo que garantiza la supervivencia en el que en Sil transmudación al amor de objeto revela,
estado de prematuración de nuestra especie es el funcionamiento de los inequívoca, su prístina naturaleza. 11

dos pIincipios psíquicos (principio de placer, principio de realIdad). Estos


no son elaborados desde un comienzo sino por la función reservada del Volvemos así a los disfraces del amor, esenciales para la constitu-
discurso de la madre, el portavoz. ción del sujeto.
El espejo y el narcisismo parental se encuentran exageradamente
"Portavoz en el sentido literal del térnzino, puesto que presentes en el cuento de Blancanieves. Leyendo a Bettelheim (1977)
desde su llegada al mundo el infans, a través de su voz, encontramos esta interpretación:
es llevado por un discurso que, en f01711a sucesiva,
comenta, predice, acuna al conjunto de sus mani- "El narcisismo de la madrastra está represelllado por el
festaciones; portavoz también, en el sentido de delegado, espejo mágico y su contínua búsqueda de seguridad
de representante de un orden exterior cuyas leyes y respecto de su belleza (. ..) La reilla, al consultar en todo
exigencias ese discurso enuncia". momellto al espejo sobre sus cualidades -es decir, sobre
su belleza- repite el antiguo mito de Narciso, que se
56 GABRIELA S. TALLIS

la ausencia de la madre.
Notas bibliográficas
Sobre esto podríamos desarrollar el juego del Fort-Da, los objetos
y los fenómenos transicionales, la angustia, y otros modos sostenidos
por los diversos autores.
No hemos trabajado el problema de la triangularidad: la presencia
del padre. El Complejo de Edipo y el Complejo de Castración explicarían
la posición del falo en la estructura. A partir de ese momento se podría
comprender mejor el lugar del hijo para la madre (completud fálica) y el
valor de su falta.
También sucederán otras identificaciones y una nueva distribu-
dón tópica del aparato psíquico a partir de la identificación con el Super
yo parental.
Pero es esta primera relación con la madre la que va a preparar un
primer lugar donde existir. Las demás figuras familiares, fundamental-
mente el padre, van a sostener y permitir este vínculo. AULAGNlER, P. (1979), Los destinos del placer, Ed. Petrel, España.

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Capítulo ID

Importancia de la constitución de la matriz


vincular en los aprendizajes tempranos

Haydeé &hevema'

I. Introducción: Perspectiva interdisciplinaria

Pensar en Ciencias Sociales de manera interdisciplinaria significa


una nueva fanna de pensamiento cuyo primer objetivo será deslindarlo
del concepto de multidisciplina.
Para que exista propiamente interdisciplina debe darse una modi-
ficación en los perfiles específicos de cada uno de los abordajes convo-
cados a la resolución de una problemática científica que actúa como
disparador conceptual.
En el aspecto de nuestra competencia (evaluación del desarrollo)
es importante la organización y planificación de servicios que estén
vinculados con la prevención de patologías, los tratamientos adecuados
y la rehabilitación eficaz.
El modelo más preciso para este enfoque sería el desplazamiento
del eje hospitaVenfermedad hacia el de salud/comunidad. Esto posibili-
taría una reconversión de los recursos humanos ya formados para poder
instalar consultorios pediátricos interdisciplinarios de atención primaria
con un enfoque específico de seguimiento del desarrollo.

*Psicóloga. Profesora titular de la cátedra "Técnicas de exploración y


diagnóstico" de la Facultad de Psicologfa de la U.B.A.
62 HA YDEE ECHEVERRIA IMPORTANCIA DE LA CONSTITUCION DE LA MATRIZ. 63

La posibilidad de atravesar los conceptos de maduración con los como también la noción de apego tan cara a la etología y que fue sufi-
de técnicas de evaluación del desarrollo y con la valoración de los cientemente desarrollada a partir de Lorenz (1971).
esquemas y modelos de aprendizaje del sujeto, constituyen modestos Mahler (1980) elabora la teoría de la separación/individuación
aportes a un proyecto interdisciplinario que trata de proporcionar una materno infantil y su resonancia en la constitución de la vida intrapsíquica.
respuesta a las demandas 'de nuestra asistencia poblacional. Brazelton (1980) es quien por primera vez señala que es el bebé quien
orienta activamente la función pal'ental, es decir, modela las reacciones
del adulto constituyendo un sistema de feed-bak recíproco,
n. La importancia de la matriz vincular Klauss y Kenell (1978) señalan la importancia del "tocar", "tener",
"mirar", vínculos que se constituyen fuertemente en las primeras 48 horas
de vida y cuya consideración hizo revertir el concepto de nursery, tan
Las técnicas de evaluación de la primera infancia (neonatos y bebés preciado por la con;ente anglosajona, cambiándose por el de rooming, a
hasta 3 años) constituyen una conquista de la Psicología en los recientes través del cual la madre está junto al bebé después del parto no siendo
últimos cuarenta años. violentamente separado de ella en función de preceptos higiénicos mal
Las mismas pem1iten encarar, primariamente, el déficit en el desa- entendidos.
rrollo psico-motriz y cognitivo-simbólico, como así también la observa- Los aportes de Klauss y Kenell constituyen la apertura teórica de
ción clínica de la interacción diádica (madre/hijo), posibilitando de esta lo que fueron los conceptos de "manipulación" (handing) y "sosteni-
manera la intervención precoz en una planil1cación de estimulación miento" (holding) elaborados por Winnicott (1968), conceptos impres-
temprana encarada con criterio dinámico. cindibles para entender la relación diádica.
A través de nuestra larea asistencial hemos podido observar la Pallnelée ( 1967) dice que los mejores indicadores de diagnóstico y
eso'echa relación que exisle entre la modalidad de la díada madrefhijo y pronóstico del vínculo afectivo madre/hijo lo constituye la observación
su desalTOllo psi ca-motriz, base de los futuros esquemas de aprendizaje. de la interacción de ambos. Por consiguiente, hemos tomado como
¿En qué medida tiene influencia en la constitución de los plimeros instrumento de observación del vínculo diádico la grilla de observación
esquemas funcionales del aprendizaj~ y la constitución psíquica del de Massie y Campbell (1986) denominada Escala de Apego en condicio-
sujeto la función matemante de la malriz vincular? ¿Cómo influyen, en el nes de stress, por aportar indicadores precoces en situación de riesgo
caso de que los hubiera, los desajustes psico-motriccs en los tres primeros psicológico. Esta grilla de observación es adminisfrada provisionalmente
años de vida en posteriores aprendizajes socializados y sus consecuen- a los I1nes de extraer infonnación que nos oliente la construcción de un
cias, tales como desgranamiento educativo, deficiencias mentales, oligo- instrumento observacional que respete la legalidad psico-socio-cultural
timiasocial, retardo, repitencia? ¿En qué medida se podlÍa implementar un de nuestra población, especialmente ciertas áreas del cono urbano de la
programa de estimulación precoz, luego de comprobados estos déficits') ciudad de Buenos Aires, lugares de mayor concentración poblacional
con N.B.!. (necesidades básicas insatisfechas), .
La población infanti 1 en riesgo correspondiente a estas zonas
In. Antecedentes teóricos e importancia de encarar su marginadas se enfrenta al inicio de la escolaridad con mayores dificulta-
estudio des, dando lugar a problemáticas diversas dentro de la patología del
aprendizaje (institucional y clínica). También se debelÍa consignar que a
través de los datos aportados por este estudio se realizarían planes de
Spitz (1930) dael punto de paltidacon el concepto de díada. Bowlby estimulación precoz y orientación en la capacitación de servicios para
(1976) acuña el término vínculo y las condiciones que lo posibilitan. así futuras mamás.
64 HA YDEE ECHEVERRIA IMPORTANCIA DE LA CONSTITUCION DE LA MATRIZ ... 65

La constitución del sujeto psíquico requiere de condiciones eco- verbales, en los aspectos lógico-matemáticos y en el establecimiento de
nómico-sociales y culturales, las cuales, si son precarias, obstaculizan la causalidad no son sino alteraciones en la constitución diádica fundante
dicho proceso. del narcisismo infantil.
Las pautas de crianza culturales, tradicionales o impuestas, facili- Autores tales como Winnicott y Sarnf Alí (1974) aportaron valiosos
tan en unos casos y en otros obstaculizan la estructuración psicológica elementos teóricos para interpretar la aparición de los espacios transicio-
temprana, de gnm incidencia en la futura vida del sujeto. Migraciones nales y de inclusiones recíprocas, así como también en el área de los
internas, bajos ingresos, deficiente raport afectivo de la madre con su comportamientos inteligentes la concepción piagetiana implica que la
pareja, estable u ocasional, condicionan en parte el vínculo madrelhijo. construcción de la relación sujet%bjeto se da porque un otro significa-
La atención a la díada en estas condiciones es casi siempre de tivo social (madre o madre sustituta) lo sostiene.
emergencia, no permitiendo así una programación orientada a la capaci- Esto lleva también a considerar, como lo hace Stem (1978) desde
tación de profesionales y operadores intervinientes. otra óptica, que en los primeros meses de vida se instaura una interacción
. Pero no solamente enfocamos la evaluación temprana a las pobla- entre la madre y el bebé que puede o no conveltirse en relación.
ciones en riesgo social, sino que también la aplicamos en la orientación La relación se daría como tal a partir del eje interpretativo de la
preventiva de las alteraciones del vínculo proveniente de diversas reciprocidad, y las alteraciones que se darían en el vínculo serían efectos
clínicas interdisciplinarias, tales como: prematuros, deprimidos fetales, de una desarticulación en la simetría del mismo.
hipotiróideos, atresias de esófago, hernias diafragmáticas, cardiopatías A lo largo del tiempo se acumularon una serie de nociones referidas
congénitas, etc. a aspectos neonatológicos que nos han mostrado un bebé pasivo,
Todas estas patologías iniciales pueden revertirse con el correr del encapsulado en un narcisismo autístico y mal organizado. Por el contrm;o
tiempo si las prácticas médicas correspondientes fueron eficientes. Pero dicho bebé tiene una muy organizada y sofisticada dote, un arsenal de
lo que para nosotros, psicopedagógicamente hablando, queda como un funciones que hacen de él un ser activo ypreadaptado. Un ejemplo típico
cono de sombra, son los futuros aprendizajes de estos chicos. Es decir, de esta organización precoz es la capacidad del bebé de sustraerse a
"la prueba" es la iniciación de la etapa de escolarización. ¿Porqué no hacer estímulos nocivos , regulando su input sensorial. Esta capacidad
entonces una detección precoz de estas posibles situaciones anómalas? autogestiva de un estado de vigilancia refleja el potencial organizativo del
El campo de la prevención del vínculo defectuoso madre/bebé bebé.
estaría orientado a preselvar las áreas cognitivas en sus modalidades de Retomado parcialmente el entronque histórico del pensamimento
asimilación/acomodación, comO tan bien lo ha señalado SaraPaín (1968) .. de Brazelton, el rescate de Sptiz cobra un mérito muy especial: el haber
Ciertas dispraxias, trastornos de la lateralidad, que no tienen origen demostrado, de una manera minuciosa, que las reacciones cognitivo-
neurológico, en gran parte están relacionadas con dificultades en la afectivas del neonato tenían un impacto a nivel fisiológico, que el acento
organización y constitución del autoerotismo y narcisismo primario. que Spitz puso en la relación madrelhijo ha sido y es el centro de una
Preguntas tales como "¿quién soy, qué soy para mis padres?" implican corriente de las más import~ntes en la psicología y psiquiatría del bebé:
·una plástica constitución diádica tanto en lo autoconservativo como en la basada en la instancia de la interacción, y que la misma pasa por un
la función libidinizante. diálogo corporal.
¿Quién sino la madre es la que organiza y unifica, transformando Parrnelée (1967), partiendo de Spitz y Brazelton, adhiere a una
el organismo en cuerpo por el reflejo en su mirada del encuentro con el posición interactiva entre la madre y el bebé diciendo que los padres de
bebé? los bebés prematuros establecen un contacto insuficiente con la pobre-
Muchos trastornos que observamos en la organización espacio/ za de recursos de sus hijos. Los bebés, sintiendo esta situación, ensayan
temporal, en la manipulación de áreas, en la comprensión de situaciones provocar respuestas sociales de las más variadas, tales como retirar la
66 HA YDEE ECHEVERRIA IMPORTANCIA DE LA CONSTITUCION DE LA MATRIZ .. ' 67

mirada y agitac~ón como manifestaciones de una interacción deficitaria. asistir a un intercambio y mutua interacción. Trabajos recientes sobre la
Paralelamente a esta situación se da como respuesta, especialmente de instancia interactiva colocan el acento sobre el hecho de saber cómo se
parte de las madres, un comportamiento hiperactivo. Martin y Fields desenvuelven estas relaciones mucho más que en saber cuándo apare-
(1979) llaman a estas madres ;Iltrus;vas, término que nosotros tomamos cen. Aunque desde nuestro punto de vista, bien está decirlo, el aspecto
como indicador del desajuste diádico que provoca en el bebé sobre- cronológico de la apaJición de las funciones tiene su peso considerable.
compensaciones adaptativas. Lebovici (1987) señaló que el objeto es investido antes de ser
Por consiguiente, la Escala de Apego en condiciones de Stress percibido. Con este concepto apuntaría a señalar que los movimientos de
pennite la observación de las modalidades de la interacción madrefhijo por investimlentos fantasmáticos spn plimaJios y no dependen de un estado
aportar indicadores de situación en riesgo. Su forma de evaluación es perceptivo altamente desaITollado.
cuantitativa y cualitativa. Se aplica ent.re el nacimiento y los 18 meses, Los estudios de interacciones precoces dejan entrever que hay
pennitiendo así una intervención temprana. investimientos muy poderosos de las percepciones del rostro materno y
del diálogo tónico que se despliega entre la madre y el bebé en los primeros
Empleo: momentos de la vida del neonato. Este intercambio posibilita una meta-
a. Consultorios de atención pediátrica primaJia. comunicación sobre la que se intalmía una dimensión que se puede llamar
b. Centros maternales: para medir el momento de separación y re- pre-simbólica. Los trabajos de este autor recalcan la importancia de los
encuentro con la madre. desfazajes producidos en esta etapa como condicionantes de fallas en la
constitución del narcisismo prirriario.
Apliac;ón:
a. Documentar la eticacia de la interacción precoz.
b. Registrar la apreciación clínica de la interacción. V. Conclusiones

Parámetros claves:
1. Mirada. Si podemos modalizar tipos de comportamientos cognitivos en
2. Participación afectiva. relación a las características diádicas, tendríamos que las madres que
3. Vocalización. presentan un compOItamiento hiper-estimulativo (intrusiVo) propiciarían
4. Tacto. un modelo de aprendizaje de parte del bebé con preponderancia de
5. Sostén. fornJación de esquemas de hipo-asimilación y tendencia a la hiper-
6. Proximidad. acomodación. Mientras que las madres que presentan un comportamien-
to de características disociadas facilitarían modelos de aprendizaje con
preponderancia de hiper-asimilación y con tendencia a la hipo-
IV. Comentarios acomodación.
Creemos que sería provechoso realizar un seguimiento de estos ni-
ños como así también la confección de una ficha perfil de aprendizaje en
Schaffer (1977) subrayó que en la interacción precoz, la marca de la que figuren la modalidad cognitiva de la construcción del conocimiento
la madre no es tanto crear un orden a partir de un caos, sino adaptar un y datos acerca de la constitución psíquica de su estructuración simbólica.
compOltamiento a una organización que pre-existe y en el que se va a Esto posibilitaría una intervención temprana en el tiempo adecuado.
APENDICE 69

Segundo Momento Relación: 6 meses en adelante


Apéndice
Relaciónreciprocidad
..& estructurante "" CalÍdad de vínculos:.

8 ~ebV
- Disociado

Imagen mental -Equilibrado


. ~
Representación del Otro: - Intrusivo
Esquema de la relación diádica - Reacción liante el extraño"
(8vo. mes)
- Objeto permanente de Piaget

Primer Momento Interacción: 0-6 meses

Nuevos objetivos:
Interacción "social" asimétrica Construcción de variables y la formulación
de hipótesis relevantes
A partir de: A partir de:
Su propia historia de un sofisticado arsenal
de funciones. A vanees acerca de la construcción de variables:
constitución subjeti- exp. faciales
va vocalización Alto nivel de actividad

:i~~~: ¡~ Variable antecedente: fundón materna

e Madre
Funciónestructurante
Interpretaciones cargadas
devalores:
- transformación de
~~ - Producto de tres factores:

- Con sucesión de
{
Madre
Bebé
Otro Social

Interacción social asim.


organismo en cuerpo
dos momentos estructurantes { Relación recíproca
_ constitución de los esque-
mas precoces de aprendizaje
-Compuesta por dos Constitución de la historia materna
dimensiones { Preocupación maternal prim"ria
70 HA YDEE ECHEVERRIA APENDICE 71

Avances acerca de la construcción de variables (con t.) Avances acerca de la construcción de variables (cont.)

Variable interviniente: situación económico-social


Variable consecuente: constitución de los
esquemas precoces de aprendizaje
Determinada: de acuerdo a parámetros dellNDEC (existencia total o
Posibilidades parcial de N.B.1. a nivel de: vivenda, alimentación, educación, salud y
Proceso de
ocupación).
constitución I 2
Mediatizada por:
ACCIONES PRIMERAS

..
Producidas en Producidas Proceso de interacción mutua y
(relación diádica)
tiempos ndecua- tempranamente per!nanente entre dos términos
dos
que determínacondiciones
marginalesdeexistencia .....
ESQUEMAS PRECOCES:
Interacción entre asimilación y

...
egui librados desiquilibrados Posición en la
acomodación
estructura
Díada
(madrelbebé)
económica y
social
Con perturbación Con invariantes RepresentacionesSociales
ESTRUCTURAS (madre que significa y otorga
a nivel desus funcionales
DE valoraciones a su contexto)
invariantes adecuadamente
APRENDIZAJE
funcionales consolidados
Capítulo IV

Estimulación temprana en niños con


riesgo biológico. El prematuro

Jaime Tallis

La difIcultad de acordar criterios comunes, en cuanto a la necesidad


de colocar en programas de estimulación a los niños expuestos a liesgos
de origen biológico, está ligada a la complejidad de las agresiones en-
cefálicas en edades tempranas, a las diversidades evolutivas, y por
consiguiente a las variabilidades pronósticas.
Si bien un niño que ha sufrido un factor de riesgo bilógico tiene
potencialmente mayor chance de desan'ollar una defIciencia de desarrollo
en relación a la población normal, esto no implica certeza, aun en aquellos
de alto riesgo que presentan una combinación de situaciones que pudie-
ron agredir su sistema nervioso.
Acordado que si bien la estimulación temprana no impide la cons-
titución del daño, sino que atenúa su impacto y evita patologías agre-
gadas, existiIía debida justificación para colocar en programas de este tipo
a todos los niños con riesgo, pero esto implicalÍa un esfuerzo sanitario de
magnitud, en el cual es necesario medir la relación costo/beneficio.
Conocemos la incidencia de las grandes patologías del desarrollo,
Blasco (1991) nos da la siguiente:

Retardo mental 3%

Parálisis cerllbral infamil 0.3 - 05 %


76 JAIME TALLIS ESTIMULACION TEMPRANA EN NIÑOS CON RIESGO ... 77

En un extenso estudio sobre 54.000 embarazadas, de 1959 a 1960,


Autismo 4/ 10.000
Nelson y col. (1986) realiza un análisis multivariado de riesgo en los 189
Trastornos de la comunicación ? casos de parálisis cerebral, concluyendo:
L Nb cdnocemos la causa o causas de la mayoría de las parálisis cere-
Dificultades de aprendizaje
Trastornos de la atención
5 -7 % brales, o éstas se producen muy tempranamente en el desarrollo, hacien-
do imposible intervenciones preventivas.
Ceguera 1 - 5/ 10.000 2. Los datos del embarazo, parto y período neonatal no identifican una
gran parte de los casos.
Sordera 0.1-0.2%
3. Los resultados sugieren un rol pequeño para los factores de embarazo
y parto en el desarrollo de la parálisis cerebral, y pueden confundir la
El saber los porcentajes aproximados de estas patologías no realidad de defectos intrínsecos del feto.
significa que podamos encontrar la causa de la mayor parte de ellas. En Observamos que hay obstáculos imporrantes en querer asignar las
otra obra (Tallis y col. 1993) analizamos extensamente las dificultades de patologías a una única causa, siendo por lo general esta a~ignación
esta búsqueda etiológica, y creemos que aún son válidas las conclusio- arbitraria. y el riesgo de enfermar producto de una suma de corltríliuciones
nes que un comité ad-hoc elevó al Instituto Nacional "de la Salud de los (Levitan, 1987). Incluso hay visiones opuestas sobre el significado de
EE.UU. (1985): ciertos cuadros, por ejemplo el retardo del crecimiento intrauterino,
evaluado como factor de riesgo de trastorno de desarrollo, es considerado
"... El comité observa que mÍentras en el pasado era por Warshaw (1985) como una adaptación exitosa ante un ambiente
bastante simple decir que determinado evento como un irttrauterino cÍltente de nutrientes suficientes y sólo nocivo en grado
trauma obstétrico O WlCl asfixia era causa de trastornos extremo; debiéndose definir el umbral entre la adaptación y la patología.
cerebrales. no es generalmente posible seíialar una lílli- Podemos tener una aproximación a las consecuencias de las
® ca causa y su efecto. LLl capacidad del cerebro normal agresiones neonatales sobre el desarrollo en algunas de las observacio-
para corregir o compensar incluso aLteraciones impor- Íles de Allen (1993):
tantes del desarrollo, junto con las impol1antes y sutiles a. Ciertas patologías obstétricas (placenta previa, distress fetal, hemorra-
interacciones de los factores biológicos, sociales y am- gia maternal anteparto) están asociadas a morbilidad y morralidad neo-
bientales, enmascara la labor de establecer la etiología natal, pero escasamente con pronÓstico de desarrollo. En estos casos la
de Los trastornos cerebraLes. 11 afectación y respuesta neonataÍ son mayores predictores a distancia que .
las variables obstétricas en sÍ.
Esto significa que encontrar a partir de una patología su origen no b. La incidencia de discapacidades mayores en los prematuros van del 5
es sencillo, como tarhpoco lo es su inversa, es decir evaluar el pronós- al 10% en los que presentan un peso inferior a 1.500 gramos, y del 20%
tico a partir de ~na agresión. Este mismo comité admitirá que la mayorparte cuando éste es menor de 1.000 gramos. Sin embargo, del 80 al 95% de los
de los niños con factores de riesgo habitualmente asociados a patologías pretérminos están libres de deficiencias mayores.
motoras, como la prematuridad, el retraso del crecimiento y la asfixia Cuando el pesO es inferior a 1.000 gramos, la posibilidad de alteraciones
perinatal, no presentaban signos de disfunción neurológica, y que el 75% visuales oscila del 5 al 12%, casi similares a las auditivas (6-12%); siendo
de los niños afectados de parálisis cerebral no tenían esos factores de altamente discordantes las cifras de dificultades en el aprendizaje (20-
riesgo en el período neonatal. 65:%).
78 JAIME TALLlS ESTIMULACION TEMPRANA EN NIÑOS CON RIESGO ... 79

Los resultados de seguimientos de pretérminos serán comentados en alteraciones perinatales, y que los efectos de las agresiones tempranas
extenso a lo largo de este capítulo. son modulados por el ambiente de crianza.
c. Aproximadamente entre un 30 y un 60% de los prematuros con hemo- Vohr y col. (J 992) en seguimiento de niños de bajo peso con hemo-
rragias cerebrales severas (grado 3) y ventriculomegalia desarrollan rragias cerebrales, encontraron que la plasticidad neuronal es más
discapacidades mayores, especialmente secuelas motoras. significativa que los factores ambientales en la deternlinación del funcio-
d. Cuando la hemorragia es intraparenquimatosa (grado 4), el riesgo de namiento neurológico general, pero estos últimos tienen mayor peso en
secuelas importantes es del 70 al 90%, y los quistes periventriculares, el desarrollo de las habilidades cognitivas, por lo cual hay una interacción
bilaterales, conllevan un riesgo del 80 al 100%. entre ambos en la deternlinación del grado de recuperación de esa
e. Los niños con retardo de crecimiento intrauterino tienen alta vulnerabi- patología neo natal.
lidad para presentar complicaciones perinatales, y los pretérnlino con bajo Msall y col. (1991) en seguimiento de 75 niños prematuros de 24 a
peso para la edad gestacionaltienen mayor incidencia de parálisis cerebral 28 semanas de edad gestacional, obtienen datos que sugieren que los
y retardo mental que los de térnlino de bajo peso o los prematuros con factores biomédicos confieren mayores riesgos de discapacidades im-
peso adecuado a su edad gestacional. portantes, y los factores sociodemográficos se vinculan a riesgos edu-
f. Las asfixias severas del recién nacido de término tienen un alto !!Tado cacionales. Allen (1993) sostiene que los riesgos ambientales y biológi-
de mortalidad, y de los que sobreviven, más del 30% desarrollan sec"uelas cos tienen efectos aditivos, y que los primeros, si bien muestran poca
motoras o intelectuales. influencia antes de los dos años, correlacionan fuertemente en las
g. Las sepsis neonatales. especialmente con meningitis, tienen alto riesgo performances cognitivas posteriores.
de trastornos de desarrollo, como así también las infecciones conaénitas Estas dificultades de establecer pronósticos tempranos no permi-
sintomáticas al nacer. " ten señalar con certeza poblaciones que debamós incluir en programas
Aunque estas estadísticas parecen impactantes. Allen (1993) afir- de estimulación temprana, y selia una sobrecarga desmedida para los
ma que no todos los niños con deficiencias en su desarrollo tienen padres y el sistema sanitario colocar a todos los neonatos de riesgo en
factores de riesgo al nacimiento, que la mayoría de la parálisis cerebrales estos programas, por lo cual consideramos que deben ser asistidos
tienen pru10 normal, que varias causas de discapacidades son descono- inicialmente sólo aquellos que muestren síntomas de desviación de
cidas, y que tampoco el riesgo de tener alguna patología implica relación desarrollo, y los que denoten dificultades severas en el establecimiento
causal. vincular que comprometan el futuro o den paso a patologías emocionales
Una discapacidad puede instalarse sin factores de riesgo conoci- agregadas. El resto de estos niños debe incluirse en un programa de
dos, y no todos los factores de riesgo, aun los mayores, llevan al desaITOllo seguimiento pediátrico y/o neurológico, con pal1icipación de psicólogos
de un daño. Reiteramos que el pronóstico de una agresión encefálica y asistentes sociales, que permitan una vigilancia estrecha, detecten
depende de distintas variables, entre las cuales debemos considerar tempranamente desviaciones de desarrollo que obliguen a una atención
cierto umbral en la magnitud de la agresión, el momento evolutivo en que especializada, en la cual la estimulación temprana jugará su papel.
este impacto sorprende al niño, las reservas biológicas. la capacidad de Estos programas de seguimiento no son sencillos, y a veces aun
reparación y la existencia o no de daños previos (Tallis y col., 1993). los adecuadamente instalados no pueden predecir alteraciones sutiles.
Así Blackman y col. (1992) en seguimiento de lactantes de alto riesao libre
También en la obra citada señalamos lo intrincado de la relación de " "
de secuelas mayores, no pudieron predecir logros académicos a los' 8 a-
lo biológico con lo psicológico y socioambiental. Blackman (1991) revisa
numerosas investigaciones que han hallado que la situación familiar, los ños con la toma de pruebas específicas (Test de Iowa) a los 5 años; y Ross
niveles de educación. la interacción madre/hijo y las condiciones sociales y col. (1985), señalan consistencias y cambios en el desarrollo de prema-
son indicadores más efectivos de los pronósticos a largo plazo que las turos con hallazgos contradictorios entre el funcionamiento en el perío-
80 JAIME TALLIS ESTIMULACION TEMPRANA EN NIÑOS CON RIESGO ... 81

do sensoriomotor y el preescolar, con peca o ninguna relación cuando la meses, se eleva a los 39 meses para el retardo mental. Estos gruesos erro-
. evaluación inicial es normal, y mayor cuando se encuentran impedimen- res de seguimiento se justifican por ciertos conceptos erróneos no de-
tos neurológicos en el comienzo del seguimiento. bidamente elaborados por los pediatras. Para el autor, uno de los más
También es evidente que hay anormalidades que pueden eviden- significativos es evaluar competencia intelectual per logros motores
c~arse en un área del desarrollo en lactantes y aparecer con otras mani- gruesos, y señala que del 30 al 500/0 de los niños con retardos mentales
festaciones distintas cuando el niño crece y los impedimentos tempranos profundos caminan a los 15 meses de edad o antes.
han desaparecido o disminuido. En este sentido es significativa la pu- Otros déficits, cama la sordera congénita, Son diagnosticados
blicaci6n de Nelson y Ellemberg (1982) señalando que de 229 niños entre los 2 años y los 2 años y medio en promedio. En el caso de los
sospechados de parálisis cerebral al año de edad, 118 estuvieron libres hipoacúsicos leves, el diagnóstico es aún más tardío, a pesar de que los
de impediI?entos motores a los 7 años, pero el 22,3% que resolvieron sus padres de estos niños, aun sin sospechar el cuadro, informan de manera
signos tenían retardo mental no detectado anteriormente. constante síntomas orientadores no tomados en cuenta por los profesio-
A pesar de estas excepciones que tenemos que tener en cuenta, es nales. Tampoco los trastornos del lenguaje son asistidos a tiempo, con
muy probable que un lactante normal evolucione en ese sentido, y que la falsa idea de que no deben ser valorados hasta después de los 2 años,
uno que presente anomalías francas se constituya con daños estableci- y son pocos los pediatras entrenados en detectar habilidades intelectua-
dos. Los casos dudosos no pueden ser predecidos con seguridad en su les a partir de analizar la capacidad de resolver problemas de los niños
sentido evolutivo, y deben ser monitoreados estrechamente. Estos se- pequeños.
guimientos deben prolongarse hasta entrada la edad escolar. La necesidad de tener en cuenta las observaciones y las evaluacio-
lllingworth (1987) advierte sobre los errores comunes en las eva- nes que los padres hacen de sus hijos es marcada por Sonnander (1987),
luaciones del desarrollo. Plantea que debe haber un profundo c~noci­ quien encuentra una alta cOITelación entre estas impresiones subjetivas
miento de lo normal antes de abordar lo patOlógico, que es muy sutil la línea y los resultados de pruebas estandarizadas.
que separa ambas situaciones, y que no hay que basarse en criterios Como conclusión, consideramos que los niños de riesgo biológico
rígidos sobre los momentos en que se debería observar la aparición de las deben ser incluidos en programas de estimulaci6n temprana sólo si
distintsrftdquisiciones. aparecen trastornos vinculares o síntomas sospechosos en los segui-
ESle autor destaca también que algHnos aspectos del desarrollo mientos evolutivos, pero estos últimos presentan complejidades y difi-
Son más importantes que otros (las adquiS\ciones manipulativas son cultades sólo salvables con un adecuado entrenamiento, y dispeniendo
mucho más significatiyas que las motoras gruesas), y que hay conductas del tiempe suficiente para un exámen y una observación detallada.
no señaladas en pruebas estandar que deberían observarse, como el
grado de alerta, el interés del niño en el ambiente, la concentración y
calidad de la mirada. Tan importante cerno el momento de adquisición es I. Consideraciones sobre seguimiento y estimulación
la habilidad y rapidez de la respuesta. El diagnóstico debe hacerse temprana en prematu~os
evaluando la totalidad del niño, y no separando pequeños aspectos. Es
necesario saber que las testificaciones tempranas difícilmente corre-
lacionan con alcances futuros. El avance tecnolóaico
o registrado
_ en las Unidades de Terapia ln-
Blasco (1991) señala también las dificultades en el diagnóstico de tensiva Neonatal (UTIN) ha permitido modificar en forma significativa los
desarrollo. Las discapacidades motoras son identificadas antes que los índices de supervivencia, generándose un debate sobre la necesidad de
déficit cognitivos, independientemente de la gravedad. Así, mientras la estimulación de niños de bajo peso que suelen estar internados por largos
edad promedio de descubrimiento de las parálisis cerebrales son los 14 períodos.
84 JAIME TALLlS ESTIMULACION TEMPRANA EN NIÑOS CON RIESGO ... 85

Frente a quienes planteban que el ambiente de la lJ11N provee Estas descripciones de observaciones continuas dé la ecología del
escasos estímulos para las largas internaciones de ciertos pretérminos, bebé en la lJ11N nos hacen suponer que lejos de ser carente de estímulos,
hace ya 20 años que la Academia Americana de PediatIÍa (1974) alertaba hay en ella un -bombardeo continuo sobre un sistema nervioso inmaduro,
sobre la posibilidad de daño acústico por la combinación del excesivo con efectos potencialmente nocivos.
ruido ambiental sumado a los efectos ototóxicos de algunas drogas
utilizadas terapeúticamente.
En los adultos, el umbra~de daño oscila en los 80 decibeles; en las IV. Relación entre el prematuro y su ecología inicial
incubadoras hay un ruido continuo de aparatología de alrededor de 50 a
86 decibeles; el oxígeno adiciona 2 decibeles; y cuando el niño llora la
intensidad del ruido se incrementa de 90 a 100 db. Estos hallazgos no Es obvio que existen diferencias significativas entre el ambiente
consideran otras fuentes de ruido ambiental, enfermeras, médicos, radios, natural intrauterino en el cual el prematuro debería haber completado su
etc.; y conociendo que la susceptibilidad es mayor en animales jóvenes, maduración, y el que recibe en la lJ11N, tanto en los aspectos táctiles como
no deben extrañarnos las observaciones sobre cambios en el ritmo en los propioceptivos, vastibulares, auditivos y visuales.
cardíaco, vasoconstricción y aumento de la secreción del ACTH con Linn y col. (1985) observan los inicios de conductas de interacción
niveles de 70 decibeles. por parte de¡'prematuro en relación a los niños de ténnino, y concluyen
Con respecto a la contribución del staff en este exceso de estímulos que los primeros producen escasos comportamientos dirigidos a los
sonoros, Long y col. (1980) analizan las fuentes de los mismos, observan- adultos que los cuidah: el 49% nunca vocalizaron, el 37% nunca los
do que es mayor fuera que dentro de las incubadoras, aportando miraban, y el 29% nunca lloraron durante el manejo de los adultos. Esto
contribuciones importantes los monitores, las centrífugas y el teléfono, supone escasas oportunidades de estimulación de modo cruzado.
pero también había incrementos a 70-75 decibeles por cierres de puertas, Por el contrario, la inmadurez fisiológica y neurológica del prema-
risas, conversaciones, limpeza, etc. La intensidad de esta polución turo y su dificultad de evitar la sobrecarga de estímulos condiciona
acústica interfiere con el sueño, y es fuente potencial de hipoxemia y alteraciones de su homeostasis potencialmente nocivas (bradicardia,
morbilidad neonatal, tanto para el pretérmino en incubadoras como para apneas, hipoxemia). Es posible que muchas complicaciones médicas
el que permanece en una cuna abierta. frecuentes. como la displasia broncopulmonar, enterocolitis necrotizante,
Linn y col (1985) comunican un análisis sobre 280 hs. de observa- etc. sean resultado del estrés por la adaptación forzada al ambiente ex-
ción en una lJ11N. No solamente registran la intensidad de los sonidos trauterino (Gorski, 1991).
que llegan al preténnino, sino también las características de los mismos,
prevaleciendo los combinados de actividad no específica y los mecáni-
cos. En cuanto a los niveles de luz, éstos también tienden a ser altos (67 V. Estimular ¿sí o no?
a 75 bujías) careciendo de ritmicidad diurna.
Otro hallazgo acerca de la sobrestimulación en la UTIN son las
manipulaciones del niño acomodadas más a la rutina del staff que Volvamos ahora a nuestro debate: estimular o no al preténnino una
atendiendo los estados del recién nacido, y que estas manipulaciones vez que ha sorteado sus primeros días de riesgo vital, cuando su inter-
pueden producir bradicardia e hipoxemia. Long y col. (1980) en un peri- nación es mantenida a veces durante largo tiempo, a los solos fines de
odo de observación de 20 hs. promedio, registraron alrededor de 50 alcanzar un peso y funcionamiento adecuados para ser llevado a su hogar.
manipulaciones producidas por el staff en el recién nacido, alrededor de Quienes observan la lJ11N como poco estimuladora ofrecen una
2 y media por hora.
88 JAIME TALLIS ESTIMULACION TEMPRANA EN NIÑOS CON RIESGO ... 89

VII. Aportes para resolver la controversia peso adecuado o no a la edad gestacional, y que los factores ambientales
pueden exacerbar o mejorar la influencia de eventos adversos pre o
perinatales. Los seguimientos a largo plazo tienden a oscurecer los
A los efectos de poder tomar posición en esta discusión, además efectos biológicos que expresan mayor influencia en los resultados tem-
de la lectura de los distintos trabajos citados, podemos analizar Olros tres pranos; oúentras que los factores sociales influyen más en la evaluación
elementos: pronóstico a largo plazo, características específicas e indivi- ,cognitiva _que en la neurológica y motora. Si bien no parece haber
duales de los prematuros y ios padres de estos bebés, y la constitución afectación del cociente intelectual en los niños de bajo peso, se sugieren
de la relación vincular temprana. disfunciones sutiles inductoras de dificultades en el aprendizaje.
La importancia de la influencia de factores no biológicos, como los
socioeconómicos y psicológicos, en el pronóstico a largo plazo de los
Pronóstico a largo plazo prematuros también puede leerse en Fava Viziello y col. (1993), quienes
examinan exhaustivamente los factores vinculares, los aspectos psicoló-
Como hemos descrito ya en este capítulo, los trabajos en referencia gicos de los padres, de los niños y la influencia de los mismos en los
a los riesgos específicos del b~o peso y la prematurez son contradictorios, resultados de evaluaciones madurativas y mentales, como así también en
así comO también los resultados en los seguioúentos a largo plazo. Parece los logros finales de los prematuros seguidos por este equipo de Padua.
haber consenso en que el aumento de la supervivencia no ha afectado la También el exhaustivo estudio y seguimiento de Siegel (1982) puso
tasa de secuelas neurológicas mayores, y que éstas dependen más de los en evidencia que los principales factores de riesgo en la evolución a largo
daños agregados que del factor peso. plazo de estos bebés fueron la educación materna y el desarrollo socioeco-
Ya nos hemos referido ai pronóstico de estas complicaciones en nqmico. Si bien algunos hechos perinatales contribuyeron en los alcan-
el prematuro. Sin embargo, pese a que la mayoría de los bebés sin agresión ces de los niños, las variables socioambientales fueron de mayor corre-
acompañante no presentan discapacidades mayores, se describen con lación para el pronóstico.
mayor frecuencia disfunciones cognitivas y del lenguaje con aumento de Las consideraciones efectuadas sobre ventajas y desventajas de
las dificultades de aprendiz~e en edades posteriores. Por ejemplo, Vohr la estimulación en la UTlN permiten afirmar que no es posible ni necesa-
y García Coll (1985) encuentran al 64% de estos niños en educación rio colocar a todos los prematuros en programas especiales, que exísten
especial. pronósticos disímiles a largo plazo, y que en éstos influyen múltiples va-
Aylward y col. (1989) analizan los resultados de 80 estudios efec~ riables.
tuados en la década pasada que exploraron la evolución a largo plazo de Por otro lado, las evaluaciones iniciales pueden no tener correla-
niños de bajo peso al nacimiento. El 270/0 tenían de 1.500 a 2.500 grs., 44% ción con otras efectuadas posteriormente, así Lester y col. (1990) compa-
entre 1.000 y 1,500 grs. Y29% por debajo de 1.000 grs. El origen de estos ran los resultados del Brazelton obtenido a las 2 semanas de edad gesta-
trab~os eran de distintos países de Europa, de USA, Australia y N. cional con el Bayley a los 18 meses, notando que los tres niños cuyos pun-
Zelanda. El total comprendía 4.006 niños y 1.568 controles. Encontraron tajes en las pruebas de orientación estaban por encima de la media, tení-
deficiencias metodológicas importantes relacionadas a aspectos dis- an las más bajas puntuaciones en el Índice de desarrollo mental del Bay-
tintos como selección de población, extensión de la muestra, corrección ley.
de edad gestacional, falta de control de variables sociales, insuficiencia
en las herramientas de evaluación, en los términos de seguimiento, etc.
Concluyen que es necesario considerar como factor de riesgo el
90 JAIME TALLIS ESTIMULACION TEMPRANA EN NIÑOS CON RIESGO ... 91

Características individuales del prematuro bil, permanece largo tiempo durmiendo, y no puede ser alimentado
nomlalmente con pecho o biberón.
Parecena ser una afirmación innecesaria, si no fuese tan a menudo Esta actitud de temor y de rechazo puede mantenerse por largos
omitida por los profesionales: cada prematuro tiene caractensticas que le penados después de haberse superado las situaciones de riesgo inicial.
son propias y que deben ser respetadas en la atención. Así, frente a las indicaciones de manipulación autorizadas por los mé-
El grado de maduración que alcanza cada sistema y la forma de dicos, comienzan a tocarlos muy delicadamente y con sumo temor a
respuesta de cada pretérmino no puede predecirse por la edad gestacional alzarlos para no dañarlos.
o el estado médico del recién nacido, salvo como una OI;entación general 'Estas dificultades iniciales constitutivas del vínculo suelen
(LinnycoI.1985). prolongarse posteriOImente, en parte por el impacto no elaborado de
Esto nos obliga a una observación exhaustiva y diferencial de cada estos comienzos traumáticos, y en parte porque el prematuro mantiene
neonato, a respetar las respuestas evasivas que pueden ser producto de conductas distintas durante meses. Así, Malatesta y col. (1986) en ob-
sus necesidades, a esperar los momentos de iniciación de la interacción servaciones vinculares de prematuros a los 2 meses y medio, a los 6 y a
generados por ellos, y a evaluar su grado de interés y su resistencia a los los 7 meses y medio, describen que los niños establecen pocos contactos
estímulos que podemos ofrecer. oculares, y que las madres no logran decodificar adecuadamente los
estados emotivos de sus hijos.
En el momento del alta hospitalario suelen aparecer en los padres
Los padres del prematuro ell la UTI N las dudas sobre el pronóstico evolutivo, y éstas también contaminarán
la relación con conductas oscilantes. Así, Vietze (1990), evaluando las
A menudo no tenidos en cuenta por los investigadores y por el staff vocalizaciones que la madre realiza con su bebé, observa que luego de un
médico-asistencial, presentan problemas comunes quc dificultan la rela- pelíodo de sobrestimulación, este intercambio vocal se vuelve insuficien-
ción con' sus hijos y que juegan un rol importante en el pronóstico a largo te después del primer mes.
plazo de los mismos. Es entonces evidente que existen dificultades paternas y del niño
Independientemente de sus historias personales y caractensticas para establecer un vínculo adecuado, y que estas dificultades se mantie-
psicológicas, hay una brusca inten'upción en la gestación que fractura el nen l)1ás allá del penado neonatal de riesgo.
vínculo con su fruto, al cual encuentranJuego en una mezcla de niño/tu-
bo/aparato Can aspecto de suma fragilidad.
Sumado a los temores por el desenlace de esta lucha vital, se VIII. A manera de conclusión
encuentran sacudidos por una situación inesperada, sumergidos en un
ambiente de alta complejidad sin saber si pueden jugar un rol en esa lucha.
Un hecho habitual es el duelo anticipado, es decir dar por perdido Frente al bombardeo de infonnaciones contradictorias es necesa-
a su hijo conllevando una parálisis operativa, o por el contrario una rio emprender estudios más exhaustivos sobre la aproximación al pretér-
desmedida depositación y demanda al staff profesional. Este duelo mino, pero consideramos que hay elementos para elaborar ciertos con-
anticipado y esta depositación tendrán implicancias severas en la cons- sensos:
titución diádica postelior.
A esta situación imaginaria hay que sumar que este hijo no emite 1. Necesidad de moderar la sobrestimulación que la estructura y la
señales de iniciación y demanda, la mímica afectiva es pobre, el llanto dé- actividad de la UTIN producen en el prematuro con posibilidad de
92 JAIME TALLIS ESTIMULACION TEMPRANA EN NIÑOS CON RIESGO ... 93

efectos deletéreos. cepciones polisensoriales, se podrán operar a través de 'los padres


Esto debe surgir de un consenso de todo el staff, respetando los estimulaciones mínimas en 'relación a las características individuales
tiempos del niño y limitando al mínimo los ruidos, luces y manipulacio- de cada niño.
nes innecesarios; creemos que esto es posible en nuestro medio, a Estas intervenciones estarán bas'adas en el desarrollo y ser contingen-
pesar de las dificultades de recursos físicos y humanos. tes, ni el aislamiento a todo precio ni las estimulaciones planeadas
como tarea a cumplir con reglas, aseguran un Duen desarrollo. Es
2. La actividad principal del equipo de estimulación debe realizarse con necesario cuidar que el estimulador en sus señalamientos e intercam-
los padres, tratando de involucrar en esta tarea al resto del equipo bios con el bebé no coloque nuevamente a la madre en un rol pasivo
asistencial. y desvalorizado.
Es necesaria la creación de un espacio donde los padres puedan
expresar y elaborar sus temores, con una adecuada explicitación sobre 4. Con respecto a la estimulación temprana post alta, sostenemos los
las características de sus hijos, los pronósticos inmediatos y a largo mismos criterios expresados cuando abordamos a los otros lactantes
plazo, y sobre el papel de toda esa aparatología que es necesaria, pero de alto riesgo.
a la cual no hay que controlar fóbicamente. Lo central es el seguimiento del desarrollo por el pediatra y/o neuró-
Por supuesto que para trabajar con los padres y ayudarlos en su logo infantil, en este seguimiento deberán incorporarse otros profesio-
vinculación con el prematuro deben conocerse en profundidad sus nales que puedan dar señalamientos en los aspectos emocionales y
características personales y respetar las modalidades de acercamien- operar en las dificultades' sociales, sólo la presencia de alguna desvia-
to, no confundiéndolas con' desinterés. ción en este desarrollo justificarán la puesta en juego de una estimu-
Cuando los padres son facultados a contribuir en el cuidado del bebé, lación específica, salvo que ésta se haga necesaria por la observación
deben acompañarse estos contactos, mostrar que están carentes de de alterac!ones vinculares persistentes que pueden ~nsombrecer el
riesgo, los beneficios de los mismos, las respuestas que despiertan en pronóstico.
el niño y ayudar a reconocer y respetar sus formas.
El padre, que habitualmente permanece· fuera de la UTIN, debe ser
incorporado en las charlas de intercambio induciendo a que exprese
sus miedos y preocupaciones para poder operar luego más eficiente-
mente como sostén de la madre.
En la medida que los padres recuperen la confianza en su rol, operarán
más adecuadamente como estimuladores naturales; Tronick y col.
(1990) observaron que los factores con más peso en el bl,o~ueo de esta
función eran la salud y la conducta de los hijos, y que lá interacción
debe ser limitada y determinada por ellos.

3. Partiendo de esta premisa, conociendo la fisiología del pretérmino


que requiere primero de su estabilización homeostática, la regulación
de sus estados de alerta para luego poder prestar atención al ambiente,
y sabiendo también de su imposibilidad de seleccionar y graduar per-
NOTAS BIBLIOGRAFlCAS 95

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LESTER. B. Ycol. (1998), Valoración conductal )' psicofiosiológica
Capítulo V

Estimulación temprana en los


problemas del desarrollo infantil

Jorge Garbarz*

1. Estimulación temprana en los problemas del desarrollo


infantil. Función de los reflejos arcaicos corticalizables

Los reflejos arcaicos presentan una serie de características que nos


interesa precisar para poder estudiar sus funciones en la maduración y
en el desanollo, tanto en la nOImalidad como en la patología, diferenciarlos
de otros reflejos y plantear la pertinencia de su utilización en el campo de
la estimulación temprana,
La primera característica es su temprana aparición en el proceso de
la maduración fetaL Esta particularidad implica que, al igua! que otros
procesos de la organización del sistema nervioso, como por ejemplo la
mielinización, sirven de "'porte estructural para el montaje de funciones
más complejas,
Si bien su asiento inicial es en los niveles subcorticales, especial-
mente en bulbo, protuberancia y mesencéfalo, en condiciones nonmales
sus engramas automáticos se integran en esquemas de acción intencio-
nales, adquiriendo nivel cortical,
Dice Jean Piaget:

*- Kinesiólogo. Subdirector del Centro Lydia Coriat.


I

lOO JORGE GARBARZ 1 ESTIMULACION TEMPRANA EN LOS PROBLEMAS ... 101


¡
"Las adaptaciones hereditarias se refuerzan e1l un
momento con adaptaciones no innatas a las que se van
subordinando. Los procesos reflejo! se integran
¡ Se verifica en este ejemplo un pasaje entre dos tipos de reflejos: de
los arcaicos á los de maduración. pudiendo estructurarse estos últimos
a partir de la existencia y utilización funcional de los primeros.
progresivamente en las actividades corticales... " De la misma manera. podemos estudiar las modificaciones de otros
(Piaget. 1969.pág. 37) reflejos arcaicos en el proceso del desarrollo. El reflejo tónico cervical
asimélrico representa la estructura sobre la que se asientan las futuras
-Este proceso llamado corticalización es una de las 'características coordinaciones entre ojo. mano y boca.
de la maduración del sistema nervioso. el que también se produce en los Mediatizadas por la maduración de las respectivas funciones
distintos procesos que implican un aprendizaje. manifestándose así uno parciales (fijación visual. sensibilidad oral y táctil) y el ejercicio del reflejo
de los aspectos relativos a las capacidades plásticas y funcionales de la se producirán las coordinaciones entre los esquemas (oral. táctil. visual).
organización neurológica. Estos engarces iniciales se integrarán posteriormente a nivel de la línea
Al mencionar más arriba que los reflejos arcaicos presentan modi- media para dar paso a la serie de manipulaciones con diversos objetos en
ficaciones en el devenir de la maduración del bebé. estamos señalando los que el niño desarrollará las experiencias inherentes al jugar. al manejo
el carácter evolutivo de los mismos. Este concepto tiene consecuencias de instrumentos de su vida cotidiana (cubiertos. ropa, etc.) y más adelante
importantes porque nos permite considerarlos como pasibles de ser uti- al uso de elementos para otras actividades de aprendizaje (lápiz) o ex-
lizados en el montaje clínico de la estimulación. presivas (crayones. pinceles. etc.).
Los reflejos orales, particulannente los de búsqueda y succión.
"Esenciales para organizar la actividad de intercambio puestos reiteradamente en ejercicio por su vinculación con el acto ali-
con el medio. que el lactante realiza en las primeras mentario. se organizan rápidamente y permiten eficientes aprendizajes.
semanas de vida, SOIl al mismo tiempo los moldes sobre tales como la aproximación de la boca al pecho. tetina o a su propia mano;
los que se estructurarán los procesos de aprendizaje la coordinación de ambos labios y lengua para el correcto funcionamiento
iniciales del bebé... ". de la succión/deglución; y más adelante para la organización de otras pra-
(Coriat y Jerusalinsky. 1974. pág. 18) xias orales tales como soplar. sorber. masticar. las producciones sonoras
los mecanismos de la articulación del lenguaje.
Los principales reflejos que presentan estas modificaciones son El reflejo de apoyo, enderezamiento y marcha automática contiene
los orales. los oculares. los de las manos, los tónico-cervicales. el de engrama primitivo de la postura vertical y de los movimientos alternantes
apoyo. enderezamiento y marcha automática. y el de extensión cruzada. O'de disociación de los miembros inferiores que constituirán el futuro
RJ:specto del reflejo de Moro. lo consideramos como antecedente patrón de marcha voluntaria.
de las futuras reacciones de defensa ante los momentos de pérdida brusca Consideramos el reflejo de replación como organizado en base a
del eje postura!. Las primeras reacciones del b-ebé cuando se provoca la una 'estructura similar al reflejo recién mencionado. ya que se desenca-
aparición del mismo en el transcurso de los exámenes neuropediátricos <"partir de los mismos estímulos (táctiles y propioceptivos en la
o durante la manipulación del niño en su vida cotidiana. se van atenuando . de Has pies), y la respuesta de extensión y alternancias de los
hasta desaparecer, dando paso a respuestas posturales de defensa cada . no difiere del patrón que se obtiene en la posición
vez más organizadas. adecuadas a la situación de des~ste postural, que
abarcan tanto reacciones segmentarias (de miembros superiores. del 1l!f<'KIiJ.casc podríamos considerar que el ejercicio de la reptación
u'onco o de los miembros inferiores) como generales. es decir del cuerpo ,:sinelcgi,lS que más adelante se manifestarán como coordi-
en su conjunto. ~terse:gmentari,lS al articular los esquemas parciales de cuello.
102 JORGE GARBARZ ESTIMULACION TEMPRANA EN LOS PROBLEMAS .. 103

tronco, y miembros superiores e inferiores en el arrastre y el gateo. podrá alimentarse. Esta estimulación actúa ofreciendo
Respecto del reflejo de Moro, y siguiendo la línea de las hipótesis afecto. cuidados y poniendo en marcha las reacciones
anteriores, podemos considerarlo como el antecesor de las reacciones de que genéticamente trae impresas.
adecuación del cuerpo en el espacio ante la pérdida del eje postural. Estas son respuestas automáticas a estímulos específicos
El funcionamiento de este reflejo, estimulado por las movilizacio- que permiten organizar la actividad de intercambio con
nes espontáneas (al levantar, acostar, jugar desplazando en el espacio el el medio}' !qcilitar la adaptación inicial".
cuerpo del bebé, etc.) facilitará la ulterior organización de: (Fostery Jerusalinsky, 1974, pág. 18)
1. las reacciones de defensa tanto segmentarias como generales,
2. los ajustes tónico-posturales que realiza el niño ante los cambios de Analizaremos ahora el concepto de actividad en relación al ejercicio
postura y desplazamientos activos o pasivos, de los reflejos. Partiremos de lo que sostiene Piaget (1969, pág. 26) al decir
3. los engarces entre el efecto de los estímulos sensoriales, especialmente que "el reflejo se consolida y se afirma en vÍltud de su propio funciona-
los sonoros y visuales, con las respuestas posturales del eje y los miem- miento".
bros. Este funcionamiento necesario para su transformación en esque-
Un ejemplo de lo recién mencionado es la reacción de paracaidismo, mas de acción es un mecanismo que, generado por un estímulo, moviliza
reflejo de maduración que se observa alrededor del quinto mes, y es consi- las estructuras ordenadas en patrones biológicos, ¡:¡roduciéndose allí los
derado como una sinergia en la que intervienen el aparato laberíntico y intercambios con el medio que desembocan en las adaptaciones senso-
el sentido de la vista. Ambos reflejos, el de Moro (reflejo arcaico) y la reac- riomoloras.
ción de paracaidismo (reflejo de maduración) representan la fOlma primiti- Decimos, así, que este proceso de aprendizaje re'quiere de por lo
va y evolucionada de una misma función corporal: los mecanismos de menos dos componentes: el estúnulo como alimento funcional y el uso
defensa. activo de los mecanismos biológicos disponibles.
Hemos mencionado más arriba que el sistema nervioso evoluciona La actividad de los esquemas se confronta con la resistencia del
reconiendo un camino que va desde los reflejos corlicalizables hasta las medio. produciéndose allí las operaciones que conducen a niveles más
praxias en un proceso de complejización y organización progresiva. evolucionados de organización biológica. Este concepto adquiere enor-
El solo transcurTÍr del tiempo no es suficiente para que se produzca me valor para plantear las estralegias terapéuticas dentro de este campo,
esta evolución. Se requiere además de la integridad eSLJuctural del sistema ya que si conocemos la estructura con la que opera el bebé en cada
nervioso y del aparato locomotor, pero Iambién es necesario ofrecer al momento de su maduración, podremos buscar las ofertas adecuadas para
bebé un sostén psíquico y material que genere y ponga en acto estas con- ponerla en actividad.
diciones y posibilidades madurativas. Estos mecanismos funcionan dentro de los lúnites determinados
Es la madre, o quien cumpla la función materna, la encargada de por el nivel de or2anización neuromaduraliva de que el bebé dispone. Si
proveer al niño tanto el soporte afectivo como los eSlímulos necesarios los estímulos tie~en una dislancia excesiva con esta capacidad de la
para este despliegue. estructura para tomarlos, se producirá un choque en vez de una operación
aprendizaje.
"EI nUio nace con premaluridad, es decir, indefenso e La reiteración de estímulos_desproporcionados puede conducir a
incompleto )' necesita de la actividad de su madre no sólo l¡flj'onmaciéin de síntomas clínicos sobreagregados a la patología de base
para ejecutar sus reacciones reflejas sino para subsistir. imolerancia. inhibición, etc.).
Si no se le introduce el pezón o la mamadera all1ilio, lID de corroborar estas ideas, en el año 1970 se planteó una
106 JORGE GARBARZ ESTIMULACION TEMPRANA EN LOS PROBLEMAS. 107

objetos por movimientos al azar o es tornada para acariciarlas, contactarlas n. Apliicaciones clínicas
con el pecho, con la boca o el rostro de la madre.
Pmticulmmente en el reflejo de succión, pero también en los ejem-
plos recién mencionados, no podernos hablar de la existencia de un Para analizar esta cuestión tomaremos a modo de ejemplos gene-
peliodo de silencio. Imaginemos las consecuencias que implicarían la rales dos grupos de pacientes. En el primero ubicaremos a aquellos niños
pérdida temporaria (silencio reflejo) de la succión. que presentan fallas en la organización de los esquemas reflejos, expre-
Sintetizamos así lo antedicho: las características biológicas de los sadas er, un desdibujamiento O ausencia de los mismos. En este grupo,
reflejos (enraizamiento filogenético, estructuración temprana en la onto- incluiremos básicamente a los bebés que presentan cuadros clínicos de
genia) y su ejercicio funcional (actividad espontánea fetal, estimulación etiología genética, acompañados de hipotonía generalizada e hipoactivi-
natural realizada por la madre) promueven las adaptaciones que conducen dad general.
a los aprendizajes tempranos en el bebé. Estudiaremos más adelante otro En el segundo grupo tomaremos a los bebés que presentan pa-
tipo de factores que inciden en este proceso. tología lesional central, en donde los signos prevalentes' son opuestos
El paso siguiente en la investigación fue preguntarnos si la utili- al grupo anterior: hipertonía, hiperreflexia l.'rofunda, y reflejos arcaicos
zación de los reflejos arcaicos producía un adelantamiento en la adqui- vivos y persistentes. .
sición de las pautas de maduración en los niños que fueron estimulados. En relación al grupo de niños mencionados en ptimer término, cuyo
Las estadísticas del seguimiento mostraron que los niños de este paradigma puede situarse en la estimulación temprana de los pacientes
primer grupo cumplían con las pautas promedio de la población general. que presentan Síndrome de Down, nos plantearnos hace más de 20 años
No se obtenía una maduración anticipada, pero sí era evidente una sig- iC""'U¡U las respuestas madurativas obtenidas a partir de la estimulación

nificativa diferencia en la calidad de las producciones en cuanto a soltura. los reflejos arcaicos corticalizables.
destreza, utilización funcional de los esquemas aprendidos y una sólida Partíamos de los resultados de la investigación mencionada en
organización práxica ulterior, respecto del grupo control. normales, calculando que esta oferta podda favorecer la 'madura-
Esto noS pelmite reafirmm' lo mencionado más arriba en cuanto a de los bebés con estas patologías.
los límites de las estructuras neuromadurativas. Las mismas operan de Por otra parte, el estudio de la dinámica del desaJTollo en los niños
acuerdo al nivel de organización que han alcanzado, y no es posible S.índimll1e de Down, y pmticulmmente de su manifestación más
forzarlas. la deficiencia mental, nos remite a considerar:
En condiciones normales, los engarces entre la actividad espontá-
nea de la madre y los recursos neuromadurativos con los que cuenta el en ellos se mantienen invariables los procesos intrínsecos de
bebé a lo largo de su desarrollo, son suficientes para que el bebé recorra del conocimiento. y por ello la esti11lulación se dirige a
los caminos del aprendizaje. Por lo tanto, no somos partidarios de pro- 'xer)' so's[(",e.,./05 mismos;
poner actividades de estimulación programadas para niños nonrlal<:s.
Estas conclusiones, producto del trabajo de investigación, son las condiciones de arganización de base en el bebé y
abren la posibilidad de pensarlas para otro espacio de apI icación: el carnpi¡/ produce en los padres la irrupción temprana de la
iii",no . .

de los problemas del desan'ollo infantil.

xI'J/'es,'ón c1fnica de estas condiciones, se puede reconocer en


del desarrollo de los bebés afectados.
110 JORGE GARBARZ ESTIMULACION TEMPRANA EN LOS PROBLEMAS ... 111

a) Los efectos posturales son muy marcados, determinando actitudes y IlI. Otras cuestiones clínicas
posiciones rigidas en el niño.
b) Persisten sin modificaciones a lo largo del tiempo, siendo entonces
considerados por diversos autores como pau'ones patológicos, ya que Cuando realizamos la consulta inicial, conCUlTen a la misma el niño
su presencia dificulta o impide la adquisición de pautas madurativas, por y sus padres. Sabemos que para un bebé, la presencia e intervención de
lo que se instala el retardo psicomotor. un otro que se ocupe con continuidad de su sostenimiento físico y
Revisando esta cuestión, que constituye un problema clásico para psíquico resulta imprescindible. Por lo tanto debemos analizar la situación
la neurología y la rehabilitación, pensamos que los factores que inciden del niño portador del problema, y la de sus padres o quienes cumplan las
en la fijeza, la persistencia y el efecto de bloqueo del aprendizaje postural funciones materna y paterna, ya que éstos quedan implicados afectiva y
y motriz son las alteraciones del tono)' la falta del ejercicio funcional efectivamente ante la presencia de un problema que irrumpe y altera el
de los esquemas reflejos corticalizables. proyecto gestado para su hijo.
En efecto, el diseno del esquema reflejo na es alterado por las En relación al niño, sabemos que posiblemente se verá afectado en
lesiones corticales y subcorticales, ya que el asiento de los mismos es de la posibilidad de realizar un desarrollo espontáneo en forma armónica y
niveles más bajos (bulbares, protuberanciales y mesencefálicos), y éstas desplegaren los tiempos y calidad promedio los procesos de maduración,
son zonas comúrunente preservadas en la mayOlía de los casos que pre- aprendizaje y circulación social.
sentan lesiones cerebrales. Aunque las limitaciones de su discapacidad inicial pueden ser el
Es la falta de la función inhibidora, producto del daño de las es- obstáculo intrínseco para cumplir algunos o todos los aspectos de sus
tructuras corticales y Subc0l1icales que son responsables de esta activi- potencialidades de desarrollo, consideramos que hay un aspecto central
dad trenadora sobre las motoneuronas medulares, lo que provoca la y excluyente que alienta nuestro proyecto terapéutico: que el bebé, aun
hipertonía. Es esta hipertonía (espasticidad), la que confiere al esquema cuando sea portador de una patología del desan'ollo, recorra el camino de
reflejo arcaico el carácter de rigidez que se describe. su constitución subjetiva; que en él se realicen las inscIipciones fundan-
Para simplificar esta idea diremos que la patología no es del reflejo tes de su filiación, y que la crianza esté diligida. hacia su progresiva
en sí: es la hipertonía o distonía la que lo bloquea e irunoviliza. Este """'U"COJ' en el circuito de la cultura a la que pertenece, al establecimiento
mecanismo, al que se le suma la paresia o parálisis de los sistemas moto- lazo social.
res supraespinales, impide el ejercicio espontáneo y activo de los Nuestra expeliencia al respecto nos enseña que el montaje histó-
esquemas de acción contenidos en los engramas reflejos. Por lo tanto se de esta condición y el tipo de significaciones que desplieguen los
encuentra bloqueada toda la secuencia ultelior, que como vimos antes, estructurarán en el bebé las mallices subjetivas que sostienen los
conduce a la organización de las praxias. instrumentales de sus futuros aprendizajes.
Apoyándonos en estas ideas surgió la posibilided de encarar los El registro del niño no es sólo de la función concreta que la madre
tratamientos en base a intervenciones clínicas que combineR simultánea- sino también, y en forma privilegiada, de estas significaciones
mente la disminución del tono con la estimulación de los reflejos ar- JSCienles que, no obstante ser las que guían sus actos, son desco-
caicos corticalizables. .llis.pa:ra ella misma.
Nuevamente, la práctica clínica nos demosu'ó la eficacia de este explicamos, a modo de breve ejemplo, cómo muchos niños
modelo, al obtenerse modificaciones importantes en la evolución de a pesar de que su madre se ocupe laboriosamente de su
pacientes independientemente de la edad y de la gravedad del caso. estimulación, presentan síntomas que no corresponden a
su patología de base, tales coma rasgos de desconexión,
~
112 JORGE GARBARZ ESTlMULACION TEMPRANA EN LOS PROBLEMAS ... 113

I
inhibiciones o inestabilidad psicomotriz, favoreciendo o estableciendo viabilizando los encuentros entre la madre y su hijo. Desde otro punto de
mayor retardo al clínicamente esperado.
Estos síntomas revelan el efecto de un deseo inconsciente diferen-
te y hasta opuesto al que aparentemente se observa en las mencionadas
operaciones de cuidado en la vida cotidiana.
En un intento de ordenar estas cuestiones, y apoyados en los an-
teriores puntos de vista, intentamos fonnular alguna hipótesis acerca de
vista, su lugar como el representante simbólico de la ley, que se fonnula
más precisamente porel significante del Nombre- del- Padre, está inscripto
anticipadamente en la madre a partir de la estructuración de su femineidad
(Jerusalinsky y Coriat, 1974).
Es así que la "referencia al tercero", implica a esta función materna
como lugar de sustentación primaria de la función paterna o triangula-
I
",

ij
la dinámica de la interacción entre los padres y el bebé. Al respecto ción edípica. En esta instancia, los actos de la madre respecto de su bebé,
redefiniremos el lugar de los padres y del bebé, utilizando como referente en cuanto a la inscripción y el sostenimiento de estos significantes, se
los conceptos de Winnicott (1979), completados por la~ enseñanzas apoyan en este referente simbólico. .
freudianas. Es así que al referirnos a los padres, hablaremos de lafimción En cuanto al bebé, la capacidad de registro de la función materna
materna y de la fimción paterna. En cuanto al niño, consideramos su depende del nivel madurativo en el que se encuentre, de su estado de
capacidad de registro de estas fil1lciones. salud general, del funcionamiento de los sistemas sensoriales y motores,
es decir de sus condiciones orgánicas.
"... la fonción materna es entendida como una estruc- Como es fácil de entender, un niño que presenta alguna alteración
turación intenta, que proporciona inconscientemente anatómica o funcional estará limitado en la disponibilidad de los canales
una gufa para que los intercambios décisivos entre la de ingreso y/o procesamiento de la información, modificándose así la
madre y su hijo ocurran de una manera espontánea (. .. ) capacidad de operacional izar los estímulos maternos.
Estas fitnciones comprenden la sustentación (holding) Este concepto nos pennite situar con precisión el lugar central que
como resol1e de seguridad afectiva, la manipulación todos asignamos a la presencia de la patología por el hecho de constituir
(handling) diferenciada en tallfo modo de libidinizar uno de los dos polos que intervienen en el montaje de los problemas que
selectivamente el cuerpo del bebé, la mostración de los :,afl~ct¡m a los bebés.
objetos del entorno (to show the world), como fonlla de En efeclo. ambas condiciones -el ejercicio de la función materna
dirigir el niño al mundo externo y descellfrarlo de la la capacidad de registro del bebé de las rnismas- constituyen el objeto
relación exclusiva con su madre, la doble traducción, '. este análisis. Ambos tienen un espacio de articulación posible. Es al
acción por lenguaje/lenguaje por acción es realizada por " de cada 11110 de los factores ell jI/ego y al reconocimientQ (fe la
la madre para illferpretar los gestos de su bebé y para 'esl·T/I<:tlll-a de esta encrucijada al que se remite el montaje del encuadre
hacerle llegar las expresiones de su comprensión ... " con el que se puede realizar un diagnóstico correcto y el diseño
(Jerusalinsky y Cols, 1988. pág. 14) los dispositivos terapeúticos.
~i~'·~~, El niño dispone de una serie de engramas constitucionales que
Finalmente, la referencia al tercero remite a la inclusión en la en la relación entre la madre y su bebé. A partir del nacimiento,
madrelhijo de los significantes que viabilizan la instalación de la modo de señales que infonnan a la madre acerca del estado del
paterna. Esta función, cuya representación ante el niño es especialmente de la manera en que el niño va captando momento
inicialmente por la madre, es fundamental para la serie de ü·lscripciclD . las intervenciones que ella realiza.
simbólicas que ordenarán el ingreso del niño en el circuito de la la actividad refleja arcaica, la gestualidad refleja, el tono
En un primer tiempo, el ejercicio de la función paterna se actividad postural y espontánea, y los ritmos biológicos
hacia el sosteninliento de la madre para el ejercicio de Sil Coriat, 1974, pp. 11-17).
114 JORGE GARBARZ ESTIMULACION TEMPRANA EN LOS PROBLEMAS ... 1[5
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I
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Podemos considerar entonces estas producciones como facilita- oculta bajo la superficie. No se ve, pero está, foma parte de la estructura t
doras de los engarces con el ejercicio de la función materna. La condición
de nOlmalidad implica que ambos ténninos (ejercicio de la función mater-
de lo que. les sucede a los padres. Sabemos además que estos elementos
subyacentes tienen formas de manifestarse, por ello es necesario apren-
¡,
na y registro del niño de la misma) tengan algún punto de intersección. i
der a reconocerlos y abrir espacios clínicos para que esto pueda des-
En determinadas circunstancias y por diversas causas, la madre plegarse.
puede mostrar signos de retracción o distancia hacia su bebé. Habitual- En efecto, estas producciones que ocupan la trastienda del discur-
mente, el niño puede registrar esto y manifestar su insatisfacción, so de los padres pueden asomarse y aparecer, en sus gestos, en los puntos
utilizando los recursos de los que dispone (en los bebés, estos engramas suspensIvos de las frases, en los lapsus, en las repeticiones, etc.
constitucionales), en el nivel que su organización neuromadurativa le y estas cuestiones tienen su especial importancia porque también
permite. Así, la demanda sostenida del niño (llanto, paratonía, etc.) actúa modificarán la posición de cada uno de los padres respecto del hijo y,
convocando a la madre circunstancialmente distante a intervenir, tiro- como se observa en la clínica, tendrán su vía de expresión hacia el bebé.
neando y movilizándola de su posición anterior. Es en la modalidad particular que va a adquitir elfuncionamiemo
. En otro ejemplo podemos ver también cómo una mamá atenta y de la filllción m{/(erna que advel1iremos, así como lo registra el bebé, la
disponible convoca a un bebé "tranquilo", introduciéndolo al encuentro presencia de los significantes subyacentes.
de situaciones que promuevan su interés y su actividad. Estamos en presencia de una brecha entre padres e hijos, que existe
El punto de encuentro entre ambos puede estar más cerca de la a pesar de los padres.
madre o del bebé, dependiendo en cada circunstancia de quién busque
y alcance al otro, o del grado de movilidad de que cada uno disponga. "Esta brecha tiene un doble carácter: el de la dificultad
Lo que es necesario es que en algún punto de la recta imaginmia que une afectiva de aceptar a 1111 niño diferen/e, )' el de no ·saber
a ambos, haya un encuentro mucho más que ocasional. cómo acruarpara relacionarse con él)' enseñarle lo que
Este modelo intenta explicitar algunos aspectos de la dinámica precisa aprender".
vincular que en la normalidad, vicisitudes más o menos cotidianas (Caniza de Páez, 1974, pág. 20)
pelmiten que el niño reCOlTa el camino de la constitución subjetiva y rea-
lice los aprendizajes instrumentales en el curso de su desalTollo. Este mecanismo, psíquico e instrumental, detelmina el cambio de
Recordemos que la función materna es la expresión de su posición modalidad en el funcionamiento de la madre que encontramos en la clínica
inconsciente respecto del hijo (Deseo de la Madre), mientras que la de la estimulación temprana, y adquiere las formas en que cada uno de los
capacidad de registro del bebé depende de sus condiciones orgánicas. padres compone su rol ante el bebé.
Hemos situado brevemente estas cuestiones en la nomlalidad. Es- Algunos padres parecen no saber nada de la crianza cuando antes
tudiemos ahora qué puede oCUlTir cuando se diagnostica alguna patolo- lo hicieron eficazmente con otros hijos; otros organizan sus intervencio-
gía temprana del desalTollo. cotidianas alrededor de diversos significantes. Estos aparecen como
Tanto para la madre como para el padre, la presencia de un pro- y propios de y para cada sujeto. Aunque los encontremos
blema que ponga en cuestión el futuro de su bebé, produce un '·1npactq ~tidl)s en distintas madres, para cada una de ellas tendrá un pm·ticular
difícil de imaginar y de dimensionar. Creemos que la magnitud de y modo de puesta en acto.
conmoción se nos revela parciabnente cuando al escucharlos nOS ejemplo parcial de lo recién mencionado. y haciendo la
sus vicisitudes desde el inicio del problema con su bebé. Pero esto de que no es posible establecer una generalización al respecto,
solamente la punta emergente del iceberg. El resto, lo que no se solamente ejemplificar y tomar de la experiencia de trabajo
que no se conoce, lo que se teme, constituye el oscuro montaje de los más comunes. Estos remiten a la idea de sufrimiento,
116 JORGE GARBARZ ES'f!MULAC10N TEMPRANA EN LOS PROBLEMAS
i. 117

fragilidad y enfennedad del niño. . Llegamos entonces al momento en que podemos retornar la diná-
Es así que la decodificación (doblé traducción que hace la madre ~ca de estas interacciones y ubicar algunos aspectos de la estructura del
de las distintas manifestaciones del bebé, que dispone para ello de sus smtoma en el campo de la estirnulaci6n temprana.
engramas constitucionales) está denominada por estos significantes. . . ':'a sea por la reiterada presencia de significantes que modifican la
La mamá, sujeta a ellos, suele así interpretar los gestos, las postu- poslclon del Deseo de la Madre (y que contienen en su estructura lo
ras, los movimietos, las variaciones tónicas u otras conductas de la vida relatIVO a la posición paterna) o por la disminución de la capacidad del
cotidiana corno expresión puntual de su sufrimiento, de su fragilidad, de regIstro del bebé, que abarcan tanto el funcionamiento de 'la función
la enfennedad de su bebé. materna en sus aspectos más instrumentales corno los significantes que
Así, cuando el niño llora porque tiene hambre, lo primero que ope~ desde ella, se produce la brecha que llamamos la fractura de la
aparece en la madre a modo de contenidos irruptivos son precisamente funclOn materna.
esos significantes. En esa situación, la decodificación natural seria: "llora A~uí, la línea imaginaria que diseñamos para explicar la interacción
porque~sufre, porque su enfennedad se lo provoca". Surge asi'el terna de ". m,adrelhlJ Osufre un corte. En este puni¡¡'de-esc¡¡nción, yen tanto esta di-
qVe "el bebé no lo pueda soportar", ya que "su problema lo ha tomado namlca se manifieste en forma violenta o reiterada, se estructuran aspec-
frágil". En realidad, el niñosepodriacalmarcondarteel pechooel biberón, tos fundan tes del síntoma infantil sobreagregado a la patología de base.
sin embargo, antes de llegar a esta intervención se desencadenan diver- Durante un periodo de nuestra indagación ubicamos en la fractura
sas maniobras para atender (en el sentido clínico del término) lo que se d;, la Intera~cl6n madrelhijo el campo en donde Se estructuran los
supone una manifestación de la patología. smtomas auttstas. Estos pueden manifestarse muy tempranamente corno
Masajes en la panza, té de .yuyos, largos paseos en brazos de rasgos te~pranos de desconexión del bebé, que, en tanto no sea posible
distintas personas para tratar de calmarlo, intento de hacerlo dormir y la dIsolUCIón de l~s mIsmos por una intervención terapeútica que modi-
hasta llamados de urgencia al pediatra, son algunos de los recursos que fique ambos términOS en Juego (los relativos a la posición materna y los
hemos escuchado y visto en la clínica en el intento de resolver una si- Inherentes a las condICIOnes orgánicas del bebé), pueden llevarlo al
tuación descontrolada. La irrupción feroz de esos significantes, aun no montaje de una estructura autista. A medida de que ésta se oraaniza,
elaborados, desencadena estados de angustia que los precipitan al acto. ttende a consoltdarse y es más difícil su remisión. b

Se producen así respuestas maternas imperiosas:No hay espacio para un . La otra vía, en la que los significantes patenios quedan forcluídos,
análisis más amplio de las posibles vatiantes en Juego. exclUIdos, mdependlentemente de la existencia de otros determinantes
Son entonces estos significantes, mediatizados por el funciona- pueden lanzar al niño hacia el.campo de la psicosis. '
miento de la función materna, los que en última instancia operan en el bebé. . , La falta de estas marcas dejan al niño desprovisto de los referentes
Si avanzarnos en esta idea diremos entonces que la capacidad de regis- s~Oltcos nece~arios para su constitucióll subjetiva, que este sistema
tro del bebé está directamente ligada a los significantes en juego. ase~ura por la smtesls cultural que está en sus contenidos. Durante el
Así, podernos entender por qué algunos niños cuyas madres los ~nodo que abarca la estimulaci6n temprana es posible detectar los
atienden solícitamente presentan síntomas que no pueden explicarse por smtomas que expresan esta situación e intentar intervenciones clínicas
la presencia de la patología; y también la inversa: se ven bebés muy que, como vImos antes, apunten a su disolución. .
afectados orgánicamente que no tienen síntomas sobreagregados. En En un. momento posterior a esta conceptualización, hemos pensa-
este último caso diremos que los significantes y la función se han dirigido do q~e tambIén es poslb!e hacer una lectura similar en relación a otro tipo
adecuadamente en dirección del bebé, aun cuando éste presente dificul- de slntomas en los bebés, tales como las inhibiciones o las discontinui-
tades para su registro. Estas estructuras y operaciones maternas han en la organización de los aspectos psicomotores, dellengu'!ie del
alcanzado al bebé en el punto en que éste se encuentra. del aprendizaje, etc. '
118 JORGE GARBARZ ESTIMULACION TEMPRANA EN LOS PROBLEMAS ... 119

Estas manifestaciones pueden adquirir formas específicas de Muchas veces les preguntamos a las mamás si sus hijos podrían
presentación en algunos de estos campos, a veces limitados a uno, o comer solos algunas cosas y nos responden que nunca se les había
combinados entre dos o más de ellos. . ocurrido plantearse esta posibilidad, o que "todavía es chiquito" (en
El eje de la intervención terapeútica apunta en primer lugar a niños que ya no lo son).
desmantelar los síntomas que hemos llamado sobreagregados. Ya que Como ejemplo de esta cuestión puntual que ilustra lo antedicho,
éstos fueron conformándose a lo largo del proceso clínico y nO pertene- mencionaré Un caso clínico en donde se observa lo citado anteriormente
cen directamente a lo determinado por la patología de base, es posible-y acerca del uso de las manos en el juego y en la alimentación.
vemOS en la clínica- que estas manifestaciones también pueden remitir.
Cuando esto sucede, se observan evidentes mejorías en la dispo-
nibilidad del niño para aprender, desaparecen algunos síntomas clínicos,
Se trata de un niño de 8 años que presenta una cuadriparesia a
predominio extrapiramidal moderada, cuya mamá, entre otras cosas
abandonada por el marido al tiempo del nacimiento, sitúa a su hijo en un
I
y mejora la interacción entre padres e hijos. lugar que se define con sus propias palabras: "Es lo lÍnico //lío que tengo
Si se loora disolver estos síntomas sobreagregados también pue- en la vida)' 110 quiero perder/o. Todos me han abandollado. Por suerte
o
den identificarse más claramente los síntomas de raíz orgánica que antes ,·os no vas a hacerlo (düigiéndose al niño), vas a ser el compañero de
estaban encubiertos, lo que permite realizar intervenciones específicas mamá. Vos me necesitás porque estás enfeJ1llo,)'o te necesito porque sino
para mejorar las funciones alteradas por la patología de base. _ .. I/Ie q/ledo sola. "
Podemos mencionar como ejemplo clínico los casos de parahsls El riesgo de este niño no es sólo su parálisis cerebral; es el de ocupar
cerebral que presentan como sobreagregada una inhibición psicomotriz. definitivamente este lugar designado por su madre, es decir de ser eterna-
La inhibición implica que en ese niño existe la posibilidad física de reahzar mente un bebé.
una acción, pero no la concreta. Puede hacer, pero no hace.
Como un ejemplo acotado de esto encontramos niños que aun
cuando presentan una torpeza en su manipulación, producto de su
y obviamente, los bebés chiquitos y enfermos no comen solos, no
usan sus manos ni para comer ni para jugar, no adquieren posturas,
movimientos ni lenguaje. Otros niños, con patologías semejantes o que
II
afección orgánica, tienen la capacidad de mover sus manos, tomar ~~ertos inciden más directamente en sus capacidades físicas, pero que no están
situados en este lugar, tienen otras evoluciones. Pueden caminar, solos
!
l'
objetos y llevarlos a la boca. Sin embargo observamos que ese mno no N

toca ciertos otros objetos, o que teniendo una edad sufiCIente para lle- o con ayuda, equipados o no; pueden comunicarse, con o sin dislalias; ¡
varse una galletita a la boca, no lo hace: la toma, la rompe o la tira en una van a la escuela comÚn o especial, etc. ,"
~,

Queremos marcar esta cuestión por la relevancia que tienen estas !


conducta reiterada y hasta estereotipada.
Recorriendo la historia y observando sus producciones actuales, construcciolles, que como vimos se organizan a partir de la existencia del ¡
I
podemos estudiar el montaje que determina su posición como hijo en problema real. Si bien éste incide afectando las capacidades del niño,
cuanto al encadenamiento significante que se estructura en las rnterac- también precipitan el establecimiento de particulares significaciones en
el discurso y en el hacer de sus padres.

II
ciones con sus padres.
Como vimos antes, existen montajes de significaciones que muy Todo esto, en la dinámica panicular que en cada caso se estructure,
habitualmente nos muestran una ligazón con la fragilidad, la enfermedad, se nos dará a ver, se expresará en la presencia de estos síntomas que no
la imposibilidad, la discapacidad. El bebé queda así posicionado en u~ responden a los efectos directos de la patología subyacente.
lugar "de menos". A este niño su mamá no le enseña a comer solo, lo ah- Los terapeutas de la rehabilitación anteriores trab'\iaron durante
m~nta para asegurar su subsistencia. Lo que prevalece en la madre es ga- los siete primeros años del bebé en tratar de enseñarle posturas, movi- ,¡
, lenguaje. en enseñarles a controlar su espasticidad y las dis- ti
rantizar su alimentación a cualquier precio: lo que importa es que coma,
na que aprenda a comer solo. aplicando todos los recursos de las técnicas disponibles, aun las ! ti
120 JORGE GARBARZ ESTIM.ULACION TEMPRANA EN LOS PROBLEMAS ... 121

más actuales. Sin embargo no se explicaban por qué este niño, teniendo so de otras disciplinas, alimentándonos de referentes teórico-clínicos que
potencialidades de aprendizaje, estando bien conectado, bien controla- enmarquen nuestras intervenciones, les den un sentido y sean más
do desde el punto de vista pediátrico y neurológico, había llega?o a los precisas.
8 años funcionando psíquica e instrumentalmente como un bebe que na Este planteo podlia deslizar la idea de que así se invade el campo
alcanzaba a un año de maduración. . de otros especialistas. En este caso, ¿qué autoridad profesional tendría
La posibilidad de esta otra lectura y la intervención en función de un kinesiólogo para responder a cuestiones escolares?
la misma, organizando un dispositivo que permitió trabajar buena parte El restringir las intervenciones al campo específico de cada profe-
de estas cuestiones, produjo una sustancial y- rápida mejoría de sus sional, en cuyo caso la respuesta a la pregunta de la madre sería: "Esta
síntomas. En el primer año de trabajo con el niño y su familia e,n el que cuestión tiene que hablarla con la psicopedagoga del equipo ", tiene
pudimos incluir al padre, que comenzó a tener un rol protagomc~ en altas posibilidades de transformarse en un doble fracaso. El que la madre
muchos aspectos, recorrió todas las etapas previas a la post,ura vertIcal, no concrete esta entrevista y/o que nuestra respuesta, divertida o formal,
pudo pararse con ortesis cortas, comenz~ a hablar, wm~~zo a control~ no sea satisfactoria, ya que lo que nos está preguntando es otra cosa. En
parcialmente sus esfínteres, desapareclO su constlpaclon que p~ecIa todo caso cualquiera de estas opciones dejará afuera la verdadera pre-
crónica y ... come solo. Estamos trabajando su ingreso escolar apoyando- gunta, y 'se verá resentida la posibilidad de abrir al terapeuta a cargo del
nos en el deseo paterno de que así lo haga, pese a las dudas resld~al~s ~aso nuevas cuestiones.
de la madre que me pregunta: tlDigame, cuando la maestra neceslta lr . Este problema, cotidiano en la clínica de la estimulación temprana.
al baño, ¿ los nenes se quedan solos ?". . . se puede plantear e intentar resolver apelando al concepto y uso clínico
Los lectores podrán jugar con su imaginación recomendo las de la transferencia, es decir la atribución que los pacientes hacen a su
respuestas posibles, más de una divertida: "~o señora, I~ maestras no terapeuta de un supuesto saber que éste pos!l~. En nombre de este saber
hacen pipí", o formal "Cuando una maestra llene que sahr, hay otra que supuesto es que le preguntan a ése y no a otro.
la reemplaza, en ning!Ín caso los nil'¡os quedan solos". .
Pero, como en el multiple choise, hay una respuesta espeCIal: la "Su persona se ofrece como pamalla sobre la cual se
famosa "ninguna es correcta". Efectivamente, ninguna es correct~, por- estructllrará un discurrir discursivo. Develar la verdad
que lo que la mam~. pregunta, conociendo su historia y l~ de SUhIJO, ~e puesta allí en juego manifiesta la particularidad de la
parece que apunta a preguntarse a sí misma si el nene (en ultIma m~tancla maniobra del psicoterapeuta, posibilitando así situar el
ella) podrá soportar la separación que implica el ingreso del mno a la saber no ya sobre su persona sino en el decir mismo de
escuela. ., los enullciados que circulan.
El contenido de la pregunta remite a este significante: la separaclOn. Los fenómenos transferenciales 110 son una exclusividad
Por eso es que la respuesta fue: "Por ahora vamos a dejar a UlI cestado de la clínica psicoanalítica. En general, podemos decir
esta pregunta, cuando trabajemos más su decisión de que el niño vaya que las transferencias regulan gran parte de las relaciones
a la escuela, usted podrá contestarse sola, o a lo mejor ya na se humanas, situándose con cierto espesor fimdamen-
preguntará por esto 1,. . talmente en aquellas que enmarcan al médico y a su
Como podrán observar, mi respuesta nada llene que ver con la paciente; al maestro y a Sil alumno.
kinesiologia; tiene que ver con una lectura clínica del dicurso de la madre, O sea que, independielllemente de que nos ratifiquemos
de la realidad del niño, de los significantes en juego. o /la de ello, los fenómenos transferenciales circulan,
Es para que éstas y otras lecturas clínicas nos sean posibles que pero lo que nos legó la enseiiallZ/1 de Frelld es que
1 nOS debemos formar, ampliando nuestro campo específico con el dlscur- solamei1le si podemos sostenernos en ellos y operar des-
I
¡
122 JORGE GARBARZ ESTtMULACtON TEMPRANA EN LOS PROBLEM AS ... 123

de allí, esto es, solamente si podemos soportar un lugar (neurofisiopatología, psicología genética y psicoanálisis) y en los aspec-
al que se le supone un saber, lograremos que el saber tos Instrumentales (comunicación y lenguaje, psicomotricidad, juegos,
circule, circulación que en sr misma enuncia una verdad: aprendizaje, hábitos de la vida diaria y sociabilización). Su formación de
el saber no pertence a nadie sino que se halla en el decir base (kinesiólogo, psicopedagogo, fonoaudiólogo, profesor de educa-
en tanto devenir. ción especial, etc.) facilitará la derivación de los pacientes teniendo en
La posición que sostengamos frente a estas demandas cuenta sus conocimientos específicos.
será efecto de la lectura que realicemos sobre las mismas". Así, es deseable que los niños que presentan problemas cuyo
(Baraldi, 1993, pp. 31-32) componente neurológico o su síntoma sea prevalentemente psicomotor
sean atendidos por el terapeuta único cuya formación provenga del
Entonces, es mejor que nos notifiquemos y utilicemos este concep- campo de la kinesiología. Pero es indispensable que este profesional se
tQ como helTamienta que nos facilitará estas lecturas que consideramos haya capacitado en todos los aspectos que, como vimos antes, deberá
necesarias, porque de esto depende en buena parte nuestra eficacia te- sostener en la clínica de la estimulación temprana.
rapéutica. La tarea del terapeuta único se enmarca en la pet1enencia a un
Nos parece interesante señalar aquí que lo que en medicina se llama equipo interdisciplinario, en un montaje clínico de sostenida y constante
relación médico! paciente, puede ser leído a la luz del concepto de transfe- interacción.
rencia. Quienes operamos desde esta posición, independientemente de Los elementos que entran en juego en el funcionamiento del equipo
nuestro título profesional, hemos visto una ampliación esclarecedora son las supervisiones teóricas y clínicas, las interconsultas en presencia
para nuestro ejercicio clínico, sin que esto implique una invasión ni una o no del 'paciente, las reuniones de equipo, los ateneos generales, la histo-
abstención e n el hacerse cargo de las demandas del paciente. En todo caso ria clínica compat1ida, la coherencia teórica, la libertad para la discusión
nos parece una propuesta que enriquece la interdisciplina y la conduce de ideas, ctÍticas y propuestas tanto entre las personas como entre los
hacia la transdisciplina (pais, J 990). equipos clínicos, admi nistrativos y la conducción de la institución.
Esto nos llevó, entre otras razo nes, a proponer un encuadre clínico El factor común personal e institucional es la ética que sostiene este
particular: el del terapeuta único instalado en el seno de un equipo in- . andamiaje. Todas las intervenciones y movimientos del equipo en su
terdisciplinario. interior, en su relaciones con los pacientes y en la lransmisión revelarán
Esto surce
e de considerar dificultosa la apertura de diversos campos las marcas de esta posición, y serán referentes para la instalación y
para el establecimiento y despliegue de la transferencia de los padres. de despliegue de la transferencia e n cada una de esas inslancias.
considerar que ladas las áreas instlUmentales del bebé se encuentran
indisociadas entre sí (en un mismo acto, el bebé pone en juego las
diferentes áreas simultáneamente y sólo más adelante éstas se irán IV. Síntesis final
diferenciando, en un recorrido de constlUcción progresiva de su anda-
miaje psíquico e instrumental) y en la idea de ofrecer al bebé y a sus padres
un personaje estable que resuma en su posición ética y en sus modahda- Como se deduce de los referenles que juegan en la estructuración
des de intervención una regularidad y una constancia tal que repita en el del síntoma. hablamos de un componente orgánico de base que determina
encuadre tarapéulico las condiciones que consideramos necesarias para dificultades y limitaciones en el niño. Estos síntomas iniciales requieren
que tanto el bebé como sus padres puedan desplegar sus de estudios que permitan anibar a un diagnóstico, realizar
El terapeuta en estimulación temprana deberá formarse en sinltercollsu:ltas que correspondan y diseñar una estrategia de abordaje
nacimiento de los mencionados aspectos estructurales del desarro campo de la estimulación temprana.
124 JORGE GARBARZ

Pero también es necesario detenerse a investigar si se encuentran Notas bibliográficas


o no presentes signos que permitan pensar en la existencia de factores
que puedan considerarse como sobreagregados a la patología de base
porque no Son claramente explicados por la misma.
Es aquí que debemos considerar los efectos del funcionamiento
deseante y su expresión en el ejercicio de las funciones parentales en su
articulación con lo que llamamos la capacidad u organización del registro
del bebé. Su detección temprana pennitirá el intento de desarticularlos,
evitando su estructuración y permitiendo que el niño opere solamente
dentro de los límites que su problema orgánico le impone.
Es en estas condiciones que nuestra experiencia y el registro de la
misma en muchos años nos demuestra que los niños logran la máxima
disponibilidad para desplegar sus potencialidades, y es también aquí que
podemos elegir las intervenciones y la aplicación de técnicas específicas
que los ayuden a poner en acción sus posibilidades de aprendizaje.
ANDRE THOMAS y AUTGAERDEN, M. (1953), "Lesdeux marches",
Estos dos aspectos: la prevención de factores sobreagregados y
Presse Med, 28: 582-584.
la puesta en marcha de la propia actividad del bebé, que como señalamos
antes es un motor esencial del proceso de aprendizaje, constituyen ejes
ARBIB, M. YKAHN ROY, M. (1972), "Cómo nuestro cerebro almace-
fundamentales que ordenan la dirección del dispositivo clínico que pro-
na y elabora las informaciones desde el instante mismo del nacimien-
ponemos.
to", en Revisla Rassegna, vol. 5 nro. 1, Ed. Lepetit, Bs. As.
Como vemos, el campo de la estimulación temprana en esta versión
tiene distintas instancias: el referente conceptual, la lectura clínica de los
BARRAQUER BORDAS, L. (1968), Neurologíajiuzdamental, Ed.
factores que estructuran el síntoma, discriminando los elementos orgá-
Taray, Barcelona, 2da. edición.
nicos de los sobreagregados, el análisis de los elementos que traducen
el modelo conceptual en un montaje clínico (como por ejemplo hemos
BARALDI, C. (1 993),Aprender: la aventura de soportar el equívoco,
trabajado el tema de los reflejos arcaicos), la elección de los dispositivos
Ed. Horno Sapiens, Rosario.
de abordaje (terapeuta único, equipo interdisciplinario, admisión, deriva-
ción y seguimiento, etc.), la organización de la intervención específica y
BOWSHER, D. (1981), Introducción a la anatomia )' fisiología del.
el lugar de las técnicas como recursos instrumentales.
sistema nervioso, Eudeba, Bs. As.
~ Finalmente, la convocatoria a los lectores es a que estas ideas y el
trabajo clínico que nos da cotidianamente la dimensión de su aplicabili-
CANIZA de PAEZ, S. (1974), "La estimulación temprana como sostén
dad, queden disponibles para el intercambio, la reflexión compartida y el
de la función' materna", en Cuadernós del Desarrollo Infantil nro.2, .
enriquecimiento con otras ideas y experiencias.
td. Centro Dra. Lydia Coriat, Bs. As.

CORIAT, L. (1974), Maduración psicomotriz en el primer año de vi-


da, Ed. Hemisur, Bs. As.
Capítulo VI

Acompañando al bebé y a su familia


cuando hay trastornos sensoriales*
Ana María P. de FiondeJla**

1. Estimulación psicomotriz temprana para la futura


integración del niño ciego

Frente al diagnóstico de ceguera en un lactante debemos enfocar


inmediatamente la orientación adecuada al medio familiar en el que se
desarrollará, con el fin de que éste estimule en forma armónica sus
aptitudes sensorio-motrices.
La mirada es la responsable, generalmente, de la primera comuni-
cación entre el bebé y su madre. Ante un bebé ciego la primera discapacita-
da es la madre. Muchas veces es la que descubre la patología y concurre
al pediatra o al oftalmólogo manifestando "no me mira". A partir de esa
realidad el equipo debe ser soporte de la función materna a través de la
cual se implementará la estimulación temprana.
En el caso de un niño ciego se ve con frecuencia retardo en el logro
de sus posibilidades motrices, condicionado por la ralta de movilización

* (NOlll del editor) El presente capítulo está constituido por una serie de
conferencias dadas por la autora. Se ha tratado de conservar lo más fielmente
posible el espíritu de las mismas a fin de poder transmitir la evolución teórica de
su marco de trabajo.
"'*Fonoaudi61oga. Especialista en Estimulaci6n Temprana de niños con déficits
sensoriales.
130 ANA MARIA P. DE FIONDELLA ACOMPAÑANDO AL BEBE Y A SU FAMILIA .. 13t

en que el medio sume al niño por desconocimiento de sus necesidades. Si se mantiene el niño sentado, la cabeza se bambolea en todo
La ausencia de visión resta uno de los elementos primordiales para sentido. Si se introduce un dedo en la palma de su mano, queda fuerte-
la estructuración de la personalidad. El conocimiento del cuerpo a Iravés mente asido a él.
de la mano, con el apoyo de la visión, está perturbado. También se altera En esta edad no hay diferencia en las secuencias de la maduración
la exploración y conquistlJ, de los espacios cercano y lejano. entre los niños ciegos y los de visión nOlmal. El problema puede detec-
Se hace evidente qúe una orientación temprana al medio familiar tarse a través de signos oculares. El reflejo de defensa óculo-palpebral
posibilita un mejor desarrollo de todas las áreas, que deben actuar con consiste en la oclusión de los párpados y rotación de la cabeza en sentido
una carga extfil de estímulos para compensar el déficit que nos ocupa. opuesto al estÚTIulo cuando se ilumina los ojos del niño con una luz muy
Tal vez convenga aclarar que "una carga extra de estímulos" no fuerte: esta respuesta falta en el niño ciego.
significa que se deba desencadenar un bombardeo multisensorial. La La falta de fijación ocular es otro signo a tener en cuenra en niños
carga extra para los sentidos de la audición y el tacto, principalmente, está mayores de 20 días de vida. La ausencia de visión en los dos primeros
dada por la desaparición del canal visual, que con su captación global, meses no ha influido aun en el desan'ollo del niño; su audición es nOnTIal
totalizadora, explica lo que se oye y lo que se toca. La carga extra implica y da una respuesta generalizada ante ruidos violentos; reacciona a la voz
tener que decodificar una señal sonora o una sensación táctil sin haber humana después de los 20 días; sus balbuceos son los esperados y
podido anticipar dónde y cómo se originaron. aparece la sonrisa al cabo de los 2 meses o más como..,n los demás niños.
Simultáneamente se supervisa el desan'ollo del niño, mostrando Por lo general como respuesta a un ruido o un sonido, lo importanre
práeticamente cómo se actúa para favorecer el paso a estadios superiores, será significarla con caricias y palabras para que vuelva a aparecer en
cuando la madurez de la criatura indica que ello es posible. situaciones de relación placenteras.
Denlro del grupo de lactantes ciegos y amblíopes que estudiamos Detallaremos las secuencias del 2do. trimeslre de vida: estando el
y tratamos eonjuntamente en los Servicios de Oftalmología y de Neuro- lactanre acostado boca aniba, la cabeza queda en línea media y solamente
logía del Hospital de Niños de Buenos Aires, las causas más freeuentes rota hacia los costados cuando persigue un objeto con la vista; estos
fueron: cataratas, atrofia del nervio óptico, libroplasiaretrolental, glaucoma giros van a faliar en el niño ciego, que quedará en esa línea media a la cual
congénito, displasia retiniana, retinitis pigmentosa. Entre ellos hay niños también concurren ambas manos, pero sin la posibilidad de ser descubier-
de inteligencia nomlal y otros con problemas neurológicos; en ambos tas visualmente, se enrrechocan y suelen quedar aferradas entre sí,
casos la ceguera puede estar establecida desde el nacimiento o bien privándose de las experiencias táctiles que el ambienre puede brindarle.
perderse la visión en fOnTIa progresiva; deberán tenerse en cuenta las La coordinación visomotriz y la independencia de las manos permiten que
vatiantes posibles para adecuar el tratamiento a las condiciones que se el niño logre rotar hacia los costados cuando intenta asir un objeto
presenten. colocado a un lado de su cuerpo. Ante la ausencia de la moti~ación visual,
A continuación detallaremos la conducta del lactante nOnTIal del eSla movilización se logra más tardíamente aun estimulándola.
primer Irimeslre. En decúbito dorsal mantiene la cabeza rotada hacia un Al intentar sentar al niño tomándolo por sus manos, vemos que a
costado, con extensión de los miembros del lado hacia el cual mira, las partir de los 3 meses ha logrado ya el control cefálico. La falta de estúnulos
manos cerradas, con los pulgares generalmente por fuera de los demás visuales retarda este control, ya que la cabeza no ejercita los movimientos
dedos; si el niño está boca abajo, el brazo del lado facial flexionado, llega habituales de los niños sanos: rotaciones, flexiones, y sobre todo
hasta la boca. Durante los dos primeros meses la pelvis queda elevada, hiperextensión cuando el niño está en decúbito ventral, entre los 3 y 4
y bajo ella los miembros inferiores flexionados; al finalizar el tercer mes, meses.
y siempre en decúbito venlral, el niño apoya los antebrazos y eleva la El decúbito ventral señalará netas diferencias entre el niño vidente y el
cabeza.
:1
I1
ANA MARIA P. DE FIONDELLA ACOMPAÑANDO AL BEBE Y A SU FAMILIA ... 133
132

ciego; al primero lo veremos con la cabeza erecta, vertical, explorando a su de sentado a decúbito ventral, y en esta posición esbozar desplazamien-
alrededor, apoyado cómodamente en sus antebrazos, balconeando; el segun- tos o arrodillarse y pararse, porque todo cambio de posición trae implícito
do r"';haza frecuentemente el estar boca abajo, no le interesa elevar su cabeza mucho temor y el niño se afeITa a su madre.
de! plano de la camilla, y menos aún extender uno de SUS brazos para asir un El lenguaje hasta los 9 meses no se diferencia del niño vidente, pero
objeto. en cuanto se entr.a en el estadio de la comprensión del lenguaje, de la
Detallaremos a continuación la psicomotricidad del 3ro. y 4to. expresión intencional, en que las impresiones auditivas y visuales
trimestre, señalando las diferencias entre ambos grupos de niños, que a adquieren importancia creciente, pueden darse los dos extremos: que el
medida que transcurre el tiempo se hacen más evidentes. Estando el niño niño prolongue largamente el periodo de audimudez fisiológica o que
vidente en decúbito dorsal puede girar su cabeza hacia los lados y hacer entre en una ecolalia indiscriminada que suele dllrar demasiado.
que el tronco la acompañe o no en el movimiento. Las manos, ya bien Es importante dejar constancia de que las diferencias que hemos
conocidas, son utilizadas como medios para alcanzar lo que le interesa y señalado se hacen menos evidentes cuando se cuenta con un resto de
llevarlo a la boca para ser explorado, tal es lo que sucede con sus pies que visión, y pueden acentuarse ante un manejo inadecuado del niño.
son motivo en esa etapa del interés visual, táctil y kinestésicó·. Entre los Pasamos a describir cuáles son las características habituales del
6 y 7 meses todo objeto asido es transferido de una mano a otra mano. manejo materno y cómo va influyendo en la evolución del bebé. Todo niño
En este período en que afianza la posición sentada, incluso trata de compensar instintivamente su déficit visual, dirigiendo su aten-
colabora activamente para pasar de acostado a sentado, aferrándose a las ción a los estímulos auditivos que le llegan sin que el movimiento, las
manos del otro, una vez sentado se apoyará con ambas manos abiertas, fOlTllas o los colores, distraigan su atención; de este modo es un niño
(6 meses) luego con una soloa (7 meses), y a los .S- y 9 meses podrá tranquilo, atento a los ruidos del ambiente, sin solicitar nada de él.
mantenerse sentado sin ningún tipo de apoyo. Los padres po< su parte lo ven sereno y prefieren no molestarlo,
Al final del tercer trimestre el niño ha aprendido a desplazarse de porque realmente muchas veces·el acariciarlo o hablarle lo perturba más
algún modo (reptando, gateando o sentado) lo que posibilita la explora- de lo que lo halaga. La conducta errónea más típica de los padres suele
ción del espacio lejano. Ya en el cuarto trimestre podrá pasar de acostado ser el entretener al niño con ruidos bucales en vez de hablarle o cantarle;
a sentado, de sentado a aITodillado, buscando el apoyo en la pata de un aparecen sistemáticamente una serie de chistidos, sonidos guturales,
sillón o de una silla y finalmente de alTodillado a. parado. silbidos, chasquidos de lengua o simples castañeteos de dedos, tam-
En todos estos intentos es primordial el uso de las manos a través de las borileos, etc. que realmente entretienen al bebé pero lo desconectan del
que adquirirá seguridad para dominar su equilibrio en posición erecta, antes de ......."ou.v impidiéndole hacer las experiencias adecuadas a su edad.

dar lo primeros pasos sin ayuda. Por otra parte, cuando lo tienen en brazos, aun tratándose de niños
Veamos qué aCUITe en el niño no vidente. La falta de estímulos oavores.aeostumbran a hamacarlo y palmearle en fOlTlla rítmica general-
visuales hace que el desarrollo de la prensión sea atípico, sobre todo en rápida, que no hace más que afianzar estereotip;qs en que va
lo que supone el ir hacia el objeto y contactarse con las cosas. General- el niño.
mente se observa negativa en tocar, que se pone de manitiesto en que el Así como se apoyan en el estímulo sonoro, se van alej,mdo de la
niño tira codos y manos hacia atrás en un gesto de rechazo. Lo mismo :iacOllxlral, del estímulo táctil a través de la mano, del conlaeto con
aCUITe ·cuando el niño debe usar sus manos para apuntalarse en la del medio, que por desconocidos no interesan.
posición sentado, motivo por el cual tarda en dominar esta posición. el niño ciego y su medio se da una curiosa rdación nada
Simultáneamente podemos observar que la ausencia de la visión retarda el ser que más necesidad tiene de recibir seg'lridad del
la aparición de la reacción de paracaídas cuando se proyecta al niño en lo rodea, pero su familia es la que más miedo Sl~·nte si al
el aire con la cara hacia la mesa. Rara vez se observará el paso espontáneo las etapas del desarrollo, va logrando su independencia.
134 ANA MARIA p, DE FIONDELLA ACOMPAÑANDO AL BEBE Y A SU FAMILIA ... 135

, Por eso al hablar de orientación lo hacemos refiriéndonos al grupo Antes del dominio de la posición sentada, es la mano la que
fallliliar, aunque deleguemos la representación del mismo en la madre, que apuntala hacia adelante y a los costados, y la que interviene activamente
-e.s la que deberá tener el contacto más directo con el niño sobre todo en la reacción del paracaidismo.
durante'ios 2 ó 3 primeros años de vida. No se piense que es éste un lapso Con respecto a la prensión propiamente dicha, habrá que trabajarla
demasiado largo; insistimos en afirmar que el niño ciecro necesita secru- desde los 4 meses, haciéndole asir objetos en tamaño adecuado de
o • b e
ndad, sólo así podrá asimilar la estimulación que se le brinde y 10fITar su diferentes texturas. Si la mano no es estimulada, hay una tendencia a
independencia cuando esté física, psíquica y emocionalmente I~aduro persistir en una prensión palmar simple, una especie de rascado sobre la
para ello. superficie de la mesa, para asir un objeto. Es evidente, que el niño ciego
La orientación durante el primer trimestre se reducirá a controlar si necesita ese tacto palmar para la localización del objeto, ante la ausencia
el niño cumple con las pautas de maduración ya descliptas para esta edad. de la visión. Es la vista la que coadyuva al logro de la pinza digital fina,
En esta Plimera etapa el estímulo sonoro por excelencia será la voz orientando la dirección de la mano. La coordinación óculo-manual será
humana, y con ella se lo ayudará a rotar la cabecita a uno y otro lado, en en el niño ciego auditivo-manual, acostumbrando al niño a tender su mano
busca de la fuente de ese mismo que le habla, lo besa y lo acaricia. y a girar su cabeza hacia el lugar de donde proviene el sonido.
En decúbito ventral, además de hablarle, también se harán juegos La pinza pulgar índice debe estimularse específicamente, desde el
táctiles, por adelante y por aniba, que lo inducirán a la elevación de su año, a o'avés de la prensión de objetos cada vez más pequeños. También
cabecita. Por supuesto, todo será juego placentero y de relación, que se guiando la mano del niño se le enseña a soltar, si no lo ha descubierto ya
hará en momentos de higiene, cambiado o alimentación, cuando, tanto la solo por el placer que suele proporcionarle el oír caer las cosas. La mano
madre como el bebé estén predispuestos para disfrutar de la situación. La debe usarse desde los 6 meses aproximadamente para llevar alimento a la
boca. .
estimulación del tacto también estará presente en estos juegos.
Después del plimer trimeso'e, durante el cual no hay diferencias Este trayecto lo ha descubierto porque, en un primer momento ya
entre el niño ciego y el que no lo es, tendremos que dar indicaciones más sacó comida de su boca para luego volver a ponerla. Las madres deben
específicas sobre cada aspecto de la maduración, para que pueda cum- ser alertadas sobre la necesidad de estas expeliencias para que no las
plirse sin que se desarrollen rasgos atípicos. inhiban.
El conocimiento de la mano será uno de los jalones para el futuro Hemos podido observar algunas actitudes en el desanollo de la
desanollo del bebé. Sobre ella descansará el conocimiento de sí mismo mano: mantenerlas cen'adas, oponiéndose a contactos con seres y cosas,
del medio, y la falta de una estimulación paulatina y sistemática puede da; movimientos rítmicos de flexión y extensión que imposibilitan el uso de
lugar a severos trastornos de conducta. la mano como instrumento explorador, acercamiento a los objetos con la
En el primer tlimestre el niño lleva su mano a la boca; entre los 4 y punta o el dorso de los dedos, juegos con los dedos movilizándolos o
5 meses, sus movimientos Son simétricos y la aproximación a un objeto encimándolos. Pero estas actividades manuales deben considerarse
debe ser bimanual. manifestaciones de una desconexión del niño con su ambiente; no tocar
Después de los 5 meses, las manos actúan independientemente. es no querer entrar en ese mundo desconocido, por eso estimular el tacto
Debemos ayudarlo a movilizarlas desde atrás para que las tienda hacia y a través de él el uso de la mano que lo llevará a nuevas experienciás
adelante en busca de la cara del otro. táctiles, es uno de los aspectos IRás importantes de la educación del niño
Para que el desillTollo del tacto se cumpla lo mejor posible no se debe CIego.
abusar de los juguetes sonoros, de este modo el niño se acostumbrará a Recordemos finalmente que todo cambio va a requerir una prepa-
su exploración, primero bucal y luego manualmente. ración previa: la incorporación de una cuchara nueva, el paso de vesti-
mentas cortas o largas o viceversa suele ser rechazado, una cuna o Una
136 ANA MARIA P. DE FIONDELLA ACOMPAÑANDO AL BEBE Y A SU FAMILIA ... 137

cama nueva, un juguete de textura diferente a los demás, todo debe ser Cuando el único déficit del bebé es la ceguera, es posible impulsar su
objeto de un conocimiento táctil progresivo y constante, sin dar al niño psicomotricidad y evitar desviaciones de su conducta.
la posibilidad de un rechazo definitivo, pero sí aceptando sus agrados y En estado de vigilia, el bebé debe ser movilizado; es oportuno el
desagrados en foona temporaria, sin dejar de introducir cambios que 10 momento en que se le cambian los pañales y cuando se lo baña. Todas
ayudarán a madurar. las actividades le serán anunciadas previamente, mientras uno se va acer-
A través de ese tacto estimulado y alerta, el niño conocerá su cando: no debe abordarse al niño en foona sorpresiva, es conveniente
cuerpo, por eso se lo guiará en los primeros meses para que así lo haga, hablarle, anticipando de ese modo el próximo contacto corporal, que
tocand~ sus piernas, su abdomen, sus rodillas, sus pies, sus genitales. cuando se haga será suave, evitando los bruscos cambios de posición.
En este primer año de vida se comenzarán las experienci~ junto a En el segundo trimestre se estimula la posición boca abajo y el paso
otros bebés muy livianos de ropas, haciendo que se toquen para ir de acostado a sentado traccionando al niño por las manos por las manos
tomando conciencia del yo y del otro. y esperando su ayuda; al lograr la posición buscada debe encontrarse con
Educando al bebé ciego de esta manera facilitamos su posterior la cara de su mamá que le hablará y lo besará. Estando sentado se le enseña
inte!!ración a !!rupos de niños videntes. De otro modo pueden ser a sostenerse apoyando las manos hacia adelante y a los costados. Es
'"
rechazados '" mismos rechazar la compañía o desear tanto la
o ellos importante estar muy junto al niño transmitiéndole seguridad, y haciendo
proximidad de los otros que se hace casi imposible una experiencia de cada ejercitación un motivo de juego y comunicación.
agradable y beneficiosa. En el tercer trimestre, se estimula el apoyo plantar, -la reacción del
Siempre que se habla de la estimulación de un niño ciego se hace paracaidismo, el paso de sentado a boca abajo, tratando de que eleve bien
evidente la importancia que la audición adquiere en este proceso. El la cabeza en esta última posición. Estando acostado boca abajo se esti-
mundo es eminentemente sonoro, y la privación de un sentido hace que mula la rotación hacia los costados para asir un objeto sonoro o alcanzar
los otros se agudicen; el oído se agudiza porque es estimulado aunque la cara de su mamá. Toda la estimulación motriz debe ser constantemente
no nos lo propongamos, en ningún momento el niño deja de oír, pero sí motivada, sin llegar nunca a convertirse en una estimulación puramente
deja de tocar por no poseer el estímulo visual que lo motiva para ir hacia kinésica, sino por el contrario psicomotriz, y por sobre todas las cosas,
las cosas y asirlas. juego.
Una de nuestras preocupaciones máximas es la de proveer al niño una En el cuarto trimestre el paso de sentado a arrodillado, y de
estimulación constantemente asociada. El mundo es eminentemente sonoro, arrodillad" a parado será el principal objetivo en el área motriz. En estas
pero además es sustancialmente real, con una ubicación en el espacio y en el Illovilil.aciones, cobra vital importancia el uso de las manos como elemen-
tiempo; todo eso lo debemos transmitir como totalidad íntegra a través de los tos de sostén.
múltiples canales que el organismo posibilita, dando en todo momento estí- Nunca se esforzará al niño cuando se lo note con miedo o
mulos asociados que ofrezcan al niño una concepción real y total del mundo inseguridad, todo debe hacerse plácida y serenamente para transmitir
que lo rodea. Sólo así podrá completar más tarde la etapa lógico concep- confianza al niño. Ocurre que muchas veces los padres son los primeros
tual en la foona más rica posible. en manifestar temor e inseguridad, sentimientos que percibe la criatura.
Siendo la audición nuestro máximo aliado para lajarea educativa Criado en foona adecuada, con amor y seguridad, el niño se desarrolla
en el niño ciego, ésta puede llegar a convertirse en un arma de doble filo noonalmente y posee la misma alegría que cualquier otro niño, sin rasgos
si caemos en un verbalismo puro. El lenguaje que desarrolla el niño ciego atípicos que lo diferencien de los demás.
a veces carece de contenidos reales. Un párrafo especial dedicaremos a los rasgos que se suelen percibir
La experiencia nos indica que siempre se puede m~jórar el conte- al examinar niños ciegos\ son los rasgos autistas observables según la
nido del lenguaje del niño ciego, aun en los casos en que es casi perfecto. édad y nivel de maduración: en el primer semestre el rocking cefálico,
ACOMPAÑANDO AL BEBE Y A SU FAMILIA. 139
138 ANA MARIA P. DE FIONDELLA

normales de conducta se ven modificadas ante la presencia de un niño


rechazo al tacto y contacto a nivel corporal y manual, risa y sonrisa sin
distinto al esperado, la actitud de la madre también cambia. Es así como
motivación conocida, manos aferradas entre sí en la línea media, algunos
el niño deja de recibir la estimulación espontánea derivada de la buena
ruidos guturales, frotación de los globos oculares; al faltar el estímulo
relación con su madre. Será función nuestra modificar esta situación.
visual el niño elabora estos juegos entreteniéndóse con su propio cuerpo
Nos preocupa que ese niño pueda desarrollar una personalidad
ignorando el mundo que lo rodea y aislándose de él.
que le permita integrarse paulatinamente a su familia, a un jardín, a una
En el segundo semestre aparece el rascado de cualquier superficie
escuela, a la sociedad toda, ya que la depIivación sensorial no tiene que
produciendo ruido, que escucha abstraído, igual que el golpeteo rítmico
ser la causa de que no se desarrollen el resto de sus capacidades, o lo
de su mano o el sonajero, juego preferencial con papeles cuyo ruido
hagan en forma tardía o deficiente. Poco es lo que se logrará dejándolo
escucha al moverlos o frotarlos.
librado a sus actividades espontáneas, más aún, de ese modo correrá el
Ya más grandes, y sin abandonar los rasgos anteriores, se agrega
riesgo de desconectarse del mundo que lo rodea, de enquistarse en
el rocking corporal estando de pie, con movimientos laterales o
conductas estereotipadas, de desarrollar un lenguaje fonológicamente
anteroposteriores. Sin embargo, siguiendo paso a paso la evolución de
rico pero semánticamente pobre o vacío; y si luego se logra inducirlo hacia
los niños ciegos desde chiquitos, podemos controlar estas desviaciones.
comportamientos normales, persistirán en su personalidad severas
Tal vez lo esencial sea poder hacer una lectura correcta de lo que
falencias difícilmente superables, ya en lo psicomotor, en lo cognitivo o
significan en cada niño. Aunque estas estereotipias, y muchas otras estén
en lo afectivo.
presentes en niños ciegos o de muy baja visión ,cuidémonos de rotularlos
Entonces todo tiempo es valioso. Nunca: -será derriasii1dlJ l'ronto
como autistas.
para datO orientación a los padres de un bebé ciego. Cuanto antes puedan
Planifiquemos con sus padres un "modus vivendi" adecuado para
valorar y amar a su bebé por lo que es, un niño, en vez de solamente
ese niño y esa familia. Reajustemos esos programas cuantas veces sea
pensarlo por lo que no tiene, más rápido sentirán que está en sus manos
necesatio. Sólo así tendremos la satisfacción de haber colaborado para
ayudarlo a realizar, disfrutar e interpretar las expériencias que impulsen su
la real integración de un ser, a la sociedad que le tocó.
maduración.
La estimulación en el primer año de vida tendrá en cuenta la
V Jornadas Nacionales de Pedagogía Asistencial.
necesidad de un enfoque global del niño, considerándolo como unidad
Mendoza, septiembre 1974.
psicofísica, y partiendo de su individualidad en relación con el grupo
famIlIar en que se desatTolla. La estimulación precoz terapéutica es tarea
de equipo. Veamos cómo se van integrando los distintos profesionales
Il. Estimulación precoz en el bebé ciego·
en función de un niño.
Es el pediatra quien primero ha tenido contacto con el niño y su
familia. él fue quien hizo la derivación para una consulta oftalmológica,
El nacimiento de un bebé ciego, cualquiera sea la etiolocría de su
. . D y en caso de considerarlo necesatio solicitará la consulta neurológica.
condICIón, perturba el equilibrio del hogar y de la pareja. Las pautas
Será el oftalmólogo quien haga la derivación a la reeducadora o
terapista con la suficiente convicción para que los padres puedan
*En este trabajo el término "temprana" fue reemplazado por "precoz" porque
es el que se usa en Brasil. La Dta. Coriat siempre adhirió a temprana y no a
comprender que independiente de sus esperanzas sobre cirugía o trata-
precoz porque este término hace referencia a aquello que aparece "antes de mientos curativos, es necesatia la estimulación que a través de una buena
tiempo~' y no es ésa la intención de la estimulación temprana. Ver Cariat y relación con el bebé posibilite el cumplimiento de las distintas etapas
Jerusahnsky: "Definición de estimulación temprana" en CI/ademos del madurativas.
desarrolloinfanti¡, n° 1.
140 ANA MARIA P. DE FIONDELLA ACOMPAÑANDO AL BEBE Y SU FAMILIA ...
ji;. 141

Dentro del equipo, la comunicación de la reeducadora con el ficada según sus múltiples posibilidades, sólo podrá orientar su interés
pediatra ayudará a evaluar el cumplimiento de indicaciones de simple hacia determinado estimulo cuando ese estímulo esté lleno de significa-
puericultura por parte de los padres (hábitos de alimentación, higiene y ción para él.
vestuario) y a discriminar qué conductas del bebé son inherentes a la En la medida en que el mundo que lo rodea lo acepte, lo quiera y se
ceguera y cuáles pueden corresponder a otras patologías o a situaciones lo pueda transmitir, él querrá incorporar los objetos de ese inundo, o sea
pasajeras posibles de ser superadas. conocerlos (tocarlos, sacudirlos, oirlos, llevarlos a la boca, chuparlos,
Consideramos necesario que el oftalmólogo no se desvincule del etc.) Debe tenerse en cuenta, entonces, el significado que tengan para el
bebé ciego, manteniendo controles periódicos. De este modo los padres niño las cosas y las situaciones.
se sienten atendidos y es menos probable que intenten consultas con En las primeras entrevistas con la pareja y su bebé, a la espera de
otros profesionales, que al solicitar nuevos estudios someten al bebé a nuestras indicaciones, será importante no estar frente a ellos sino junto
anestesias y a manipulaciones explorartorias, vividas por él como agre- a ellos, dándoles la oportunidad de intervenir en el manipuleo del bebé,
siones que perturban el equilibrio necesario para un desarrollo normal. desvistiéndolo, hablándole páta que sonría, mientras nos relatan los
La entrevista psicológica es de rutina, ya que en esta consulta se detalles referidos a la alimentación, higiene y vestuario y toda la vida de
encara no sólo el diagnóstico de desaITollo y el diagnóstico diferencial, relación que se desarrolla a su aÍrededbr.
sino que habrá que asumir una actitud psicoprofiláctica en relación a todo De este modo, podremos caracterizar a este bebé e individualizarlo aun
el núcleo familiar, evidentemente perturbado por la presencia de un hijo entre otros de igual diagnóstico, edad y cociente de desarroUo. Debe mostrarse
enfermo. a los padres las pautas de maduración que el niño ya cumple: cómo se sonríe
La estimulación terapéutica brinda apoyo a funciones ya existentes ante ta voz conocida, o cómo queda serio ante la voz desconocida, cómo
en el bebé estimulado, que reciben así un refuerzo para pasar a la etapa chupetea sus manos o se aferra del dedo que le ofrece la mamá.
inmediata superior; además la estimulación actúa a través de la actividad De ésta manera revalorizamos la imagen que tienen del hijo, les
que genera en el niño, y nunca por acciones realizadas pasivamente sobre enseñamos a vedo como un niño, porque así lo vemos nosotros y
él. podemos comuilicamos con él a pesar de su déficit sensorial.
Hemos aclarado ya que la estimulación precoz y terapéutica es tarea La mayor parte de la estimulación posibilita un juego más entre la
de equipo, que partimos de un abordaje global del niño considerándolo madre y el niño. El espacio de juego común es así cada día más amplio y
en su individualidad, pero dentro del contexto papá/mamáfbebé. mejor estnicturado, para ello la reeducadora trata de fortalecer el vínculo
Pro!ITamemos entonces cuáles son las áreas' a estimular, qué matlreJhijo. Por intermedio de esos juegos el bebé ejercitará sus reflejos,
deseamos '"lograr y cómo lo vamos a hacer. Durante el primer aiio será aprenderá la asociación de los Sentidos: audición/tacto (oigo y quiero
sobre todo la madre quien se encargue de incorporar a las actividades de tocar lo que suena), tacto/audición (toco y quiero hacer sonar lo que toco).
la vida diaria los elementos de estimu-lación a través de juegos de De este modo el bebé ciego va poblando su universo con ricas
acercamiento corporal mimoso, caricias ronroneadas, ecos de las voca- imágenes asociadas que se complementan: toco y llevo a la boca, saboreo
lizaciones del bebé, acordes con su edad madurativa. Se lo impulsa así a y huelo, muevo, golpeo, suena-oigo, todo ello le dará el conocimiento
la actividad y se acrecienta el diálogo madrelhijo. Es que en esta época del objeto, orientación en el espacio y en el tiempo.
se destaca la figura materna dentro del grupo familiar, pero no olvidemos: Por otra parte, para poder dar los elementos COncretos que posibi-
hay que tener presente paralelamente la figura del padre, asegurará la ese juego, la reeducadora debe tener bien afianzadas en su mente las
creciente autonomía del niño con su madre, posibilitando así su evolu- :ínlágenes qlue corresponden a las conductas normales del bébé en la etapa
ción. la que atraviesa.
El niño, que recibirá a través de sus padres la estimulación plani-
142 ANA MARIA P. DE FIONDELLA ACOMPAÑANDO AL BEBE Y A SU FAMILIA ... 143

Veamos cómo son las indicaciones para un bebé del primer auditiva/táctil (no pensemos en un sonajero, pensemos en la voz y en la
trimestre (de 1 a 3 meses). Aclaremos que en esta edad no hay ninguna cMcia de la mamá) que propulsará al bebé a la acción.
diferencia entre el bebé ciego y el que no lo es. Conviene, al contar con Tengamos presente, más que el dominio de una posición (la de
un diagnóstico precoz, acariciar su carita y sus manos cuando se sentado, por ejemplo), lograr la dinámica del movimiento, o sea que en este
despierta, hablerle mientras uno se acerca, anticipando de este modo que 2do. trimestre, partiendo del decúbito dorsal se estimula la exploración de
se lo va a movilizar o a levantar. Deben ser lentos estos primeros las rodillas y de los pies, y se traccionan los miembros superiores pat'a
manipuleos y cambios de posición, para no desencadenar reacciones de llegar a la posición sentada, donde encontrará la cara de su mamá que lo
sobresalto y llanto; se lo llama y rozan suavemente las mejillas de uno y espera con un beso mimoso. Una vez sentado se estimulará la elevación
otro lado, en ambos decúbitos, para que gire la cabecita. de la cabeza para que la mantenga siguiendo el eje del tronco, ya que
Ya al finalizar el tercer mes se lo ayuda a apoyar los antebrazos generalmente la falta de vista hace que quede flexionada contra el pecho.
mientras se lo llama y acaricia por delante para que intente la elevación de Se lo inducirá al uso de sus manos con fines de sostén, apoyándolas
la cabecita. hacia los costados y al medio. Si el tacto ha sido bien estimulado, el bebé no
Ya en el segundo trimestre (4 a 6 meses), el bebé apoyado en rechazará el contacto de sus manos contra la superficie para sostenerse, en caso
decúbito dorsal queda en línea media, ahora sí faltan en el bebé ciego las contratio se obselva un '''no querer tocar" traducido en la elevación y flexión
pequeñas rotaciones voluntatias de la cabeza por seguir algún objeto con de los miembros superiores o en su extensión hacia abajo y atrás.
la vIsta. Nuestra misión es, entonces, motivarlo para que realice esos giros En ambos decúbitos aparece generalmente el rocking cefálico, más
en forma voluntaria: se reemplazará el estímulo visual porel taetil/auditivo; adelante, tanto en la posición sentada como en el esbozo de gateo, se hace
buscar la caricia de laeara de la mamá que le habla; táctil y gustativo: buscar presente un balanceo rítmico, casi constante.
las tetina de la mamadera que le está rozando la mejilla y saborearla. Son juegos con el propio cuerpo, que se acrecientan en la medida
Esa sonrisa que ya apareciera en el trimestre anterior, es uno de los en que no se le dan al bebé otros modos de exploración y de conocimiento
primeros indicios de comunicación, junto COn los balbuceos, y cada vez que de sí y del mundo que lo rodea. Estas ritmias pueden llegar a convertirse
se esboce en el rostro del bebé hay que datle significación de situación en verdaderos rasgos autistas, signos de la desconexión del bebé con su
agradable y placentera. Para ello la mamá se acerca, lo acmcia, le conversa y medio.
amma SI cara a la del niño, es la respuesta a su sonrisa, a sus ",yós", el bebé Para el bebé del tercer trimestre (7 a 9 meses) sus manos
deseará repetir esa situación, volverá a sonreír cuando la gente se acerque,
cuando lo toquen y lo levanten, porque se le habrá dado significación a su "ya son conocidas y no manifiesta mayor interés en ellas, .
sonnsa, en vez de sonreir sin motivación evidente o sólo cuando escucha el ahora son sólo herramientas para diversos menesteres.
ruido del sonajero que cae o de la heladera que arranca La curiosidad se centra más el! los pies. Con la inves-
La actitud simétrica del bebé en decúbito dorsal posibilita el tigación de los pies recién descubiertos, termina la
contacto de las manos y los pies entre sí, por eso es neceSMO que esté primera, somera autoexploración del Clle/po. El niño
por momentos liviano de ropas, para que la movilización sea más fluida adquiere así, suficientes datos para estructurar un
y comience la exploración de su propio cuerpo. Pero esas manos, al no esquema co/poral elemental y fraccionado".
descubrirse visualmente, pueden al entrechocarse quedar aferradas entre (Coriat, 1974)
si y no realizar las exploraciones táctiles que el ambiente le brinda. Es la
coordina:ión viso-motriz y la independencia de las manos la que posibilita Estas palabras nos hacen pensar en lo esencial que es motivar al niño
que el mno, tentado por un objeto que está al costado, y quiere.asir, rote para la exploración de su cuerpo; y una vez que se logra acompañarla de
haCIa ese lado. Por eso la estimulación psicomotriz programa la motivación conversaciones y contactos con su madre para que el bebé interprete que son
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ACOMPAÑANDO AL BEBE Y A SU FAMILIA ...

actividades compartidas y no solitarias. usadas para llegar hasta un mueble del que se sostendrá para arrodillarse
Debemos Iransmitir a los padres la necesidad de actividades y luego pararse.
conversadas, de esle modo el estímulo será siempre asociado, y podrá Seamos conscientes y sepamos Iransmitir que esas actividades
adquirir una especie de tridimensionalidad en lanto lleguen informacio- deben ser estimulatlas .en el momento oportuno, porque de lo conIrario
nes múltiples (texturas + sonidos + sabor + actividad) y no unilaterales ese caminar, tan deseado como temido, tardará en llegar y no estarán
(solamente sonido). presentes las experiencias que de él derivan.
El niño colabora ahora para sentarse, pero no siempre el niño ciego Paralelamente a la estimulación psicomotriz; habrá que proveer .al'
acepta las nuevas posiciones, muchas veces, a pesar de estar maduro para niño de situaciones que incrementan su socialización, salidas a la vereda,
estar sentado, por ejemplo, prefiere mantenerse en decúbito dorsal, n la plaza, a los negocios, igual que cualquier aIrO niño. Serán los ruidos,
. moviendo su cabecita, o frotando sus ojos. Es difícil que los padres las voces, los olores, las personas que le hablan y lo loquen, los elementos
interpreten la necesidad de los cambios de posición (aun conIra la que le infofilarán cómo es el mundo que lo rodea y al que debe desear
voluntad de los niños), para que las pautas de maduración puedan conocer. El trato con otros niños debe ser cuidadosamente planificado
cumplirse a Iravés de experiencias psicomotrices, variadas y abundantes. para que sean experiencias agradables, recordadas y deseadas.
No puede caracterizarse en forma genérica al niño ciego, ya que a El bebé del cl/arlO trimestre debe pasar la mayor parte de su vigilia
partir de estas edades la gama da la variabilidad personal es muy amplia; en el piso. Allí se siente seguro si sus padres están junto a él para estimular
hay niños Iranquilos, serenos, que no reclaman del medio ni siquiera el movilización y desplazamientos. Allí comenzará a asir objetos, casi
ser alimentados. Son bebés buenos que no molestan, y que corren el siempre con intención de tirarlos hacia atrás, por el solo placer de oirlos
peligro de no ser lo suficientemente estimulados, ellos se acostumbran caer. Por eso es conveniente poner una manta o alfombras en el piso para
a la falta de movilización y luego la rechazan porque les fastidia. A aIras que los objetos casi no suenen al caer.
en cambio, nada los Iranquiliza, son niños ilorones, los padres recurren Con respecto al caminar, el niño da sus primeros pasos
a todo tipo de maniobras para serenarlos: son hamacados en sus cunas,
se los enIretiene con una gran variedad de ruidos bucales, .tamborileos, "cuando está físicamente capacitado para ello porque
chasquidos, etc. En ambos casos (niño tranquilo, niño inquieto) la las reacciones equilibratorias han llegado a ser eficientes
conducta del niño es atípica a lo que. el medio responde también en forma J porque pueda mover sus miembros inferiores, bastante
inadecuada. Será función de la reeducadora o terapista Ori~tar y dismi- firmes ya como para sostenerlos. Pero fimdamentalmente
nuir las desviaciones de conductas, generalmente con ayuda de la da Sl/S primeros pasos porql/e algo le atrae COIIIO para
consulta psicológica. querer ir a buscarlo y se arriesga a esa aventura despl/és
Podemos observar que la ausencia de visión retarda la aparición de de haber aprendido que tras dejar un sitio seguro podrá
la reacción de paracaídas al zambullirlo, en decúbito venIral sobre una volver a él".
superficie plana, paralelamente es difícil observar el paso espontáneo de (Coriat, 1974)
sentado a decúbito ventral para intentar replar O desplazarse, o pasar a
arrodillado al encontrar el sostén de un mueble. Todas estas actividades Todo tipo de seguridades daremos a nuesIro niño para que se
son desencadenadas por un estímulo visual que pone en movimiento al arriesgue a dejar los sostenes seguros. Si no hay ningún inconveniente,
niño.
el niño puede caminar enIre los 14 y los 16 meses aproximadamente.
El paracaidismo es una reacción que se aprende, por lo tanto debe De todo lo antedicho se deduce que el niño ciego estimulado desde
ejercitarse, se estimula así el uso de las manos que también deben ser su nacimiento, cumple las pautas de maduración en forma casi paralela con
ANA MARIA P. DE FIONDELLA ACOMPAÑANDO AL BEBE Y A SU FAMILIA ... 147
146

el niño vidente, pudiendo de este modo integrarse a jardín de infantes y teniendo en cuenta además la patología ocular, para realizar un correcto
a escuela común, con el apoyo de profesores especiales, preservándose diagnóstico rehabilitatorio y educativo, planificando así la estirnulación
de este modo de trastornos de personalidad, difícil de ser superados. adecuada.
La estimulación precoz hace utilizables ~estos de visión que de otro Como consecuencia de esa observación y de la tarea asistencial
modo sólo sirven para que el niño quede fijado a la luz y na reconozca en que comienza simultáneatnente, se llegó a las siguientes conclusiones:
el entorno. Es por eso que sugerinos a este Congreso que aconseje la • El déficit visual congénito interfiere seriamente en la estructuración de
creación de Consultorios de Estimulación Precoz, junto a Consultorios la personalidad infantil.
Oftalmo-Iógicos, de este modo frente a un diagnóstico de ceguera • Los rasgos autistas en que se refugia el niño ciego cuando las
preservaremos la integridad de la personalidad del niño y , como nos condiciones del medio le son desfavorables, contribuyen a crear conductas
recordara el Dr. Hilton Rocha (1987) y al decir de Helen Keller: "Cuando esteriotipadas que lo alejan de la realidad.
una puena de felicidad se cierra, otra se abre, procuremos ver la que • Los padres, al ignorar la fisiopatología de la conducta, caen en actitudes
se abrió 11,
erróneas que inducen, favorecen o al menos no evitan los rasgos
anómalos del hijo.
IV Congreso Brasileño de Prevención de la Ceguera. • En la primera infancia los rasgos autistas no están consustanciados con
Belo Horizonte. Brasil. Julio de 1980. la personalidad, y pueden ser borrados con un manejo adecuado, sin
necesidad de recurrir a drogas anilpsicóticas.
• La progresiva y sistemática conexión del niño ciego con las personas y
III. De las consecuencias secundarias de la ceguera o la el ambiente concreto que lo rodea es la base imprescindible para la
deficiencia visual grave en el niño (su mecanismo de insta- estructuración de su personalidad.
lación). Una propuesta de prevención y tratamiento· La experiencia acumulada en estos años, ha confirmado estas con-
clusiones. Además nos hemos enriquecido con nuevas observaciones:
• No hemos en,ontrado relación entre el grado de severidad del déficit
La ausencia de visión desde edad temprana infl uye en el normal visual y el grado de deterioro global del niño. Muchas veces se comprobó
desatTollo del niño. Hace aproximadamente 14 años, observatnos en el que el mejor desatTollo no correspondía necesariamente al niño con me-
Servicio de Oftalmología del Hospital de Niños de Buenos Aires un mar- jor visión. El remanente visual si no ha sido estimulado correctamente,
cado deterioro en el desarrollo de niños ciegos o profundamente amblíopes. puede convertirse en el desencadenante de juegos estereotipados que
Para investigar sobre el mecanismo de esta patología se consultó no le permiten hacer aprendizajes.
a la Dra. Coriat y se comenzó bajo su dirección la observación y eval uación • Inversamente, tampoco el que ve menos es el más retrasado, ya que
sistemática de niños ciegos y con visión subnormal, con Y sin patologías cuando se ejercita el uso de la visión residual, con motivaciones adecuadas
agregadas. para cada edad, el niño quiere mirar y aprende a ver.
A partir de ese momento se adaptan y enriquecen técnicas de • Hay trastornos de conducta en los niños que nos hacen pensar que son
estimulación ya utilizadas para lactantes de otras patologías, y luego se reacciones a actitudes familiares, y no consecuencia del défict sensorial.
instrumentan nuevas técnicas.Unas para utilizar solatnente con los niños Es óportuno recordar que la vista es un sentido caracterizado por
ciegos y otras para aquellos con visión subnormal. En este último caso, tener un órgano receptor y emisor a la vez. El oído escucha pero no emite
sonidos. El gusto y el olfato captan esas cualidades distintas del objeto,
* Este artículo fue escrito conjuntamente con Alberto O. Ciancia, en homenaje pero no las producen.
a la Dra. Lydia F. Coriat.
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ACOMPAÑANDO AL BEBE Y A SU FAMILIA ...
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El tacto puede considerarse como receptor/emisor, pero no actúa,


Yeso seguirá siendo la visión para todos nosotros por el resto de
mágicamente, a la distancia como'la vista, necesita del contacto para nuestra vIda y en forma conjunta, acumulativa.
ponerse en funcionanúento. .
La vista, al igual que los demás sentidos, posee un órgano, el OJO,
que es receptor y además también es emisor, ya que a través de la mirada
G. Entre Oy 1 año. Visión es comunicación, imitación gestual
y de los matices de la mirada, constituye un medio de comunicación por
excelencia.
Cuando la madre mira ese ser casi libre de sensaciones visuales
En dos miradas que se encuentran hay un lazo invisible que puede
previas, es. ella la imagen visual por excelencia, que aparece una y otra vez
llenar de gozo, serenidad, inquietud, angustia, horror. ..
frente al mño, y a la que él atribuye la ambivalencia del placer/displacer.
Pero podemos enumerar las consecuencias secundarias de una
La ~rrada de la madre además está cargada con los sentimientos que eSe
deprivación sensorial grave, hemos tratado de sistematizar aquello que,
bebé desencadena en ella. Toda esa carga emocional le lIeua al niño' 10
predominantemente significa la visión para cualquier niño según sea la alimenta y estimula para seguir mirando. ",
edad por la que atraviesa. Como consecuencia, la ausencia de visión a esa
edad determinará una severa carencia en las áreas que se señalan: ,. Mirar y ser mirado. Dar y recibir, en un mismo acto y sin contacto
flslco. Esto es, entre otras cosas, la visión, y por eso es, en primera
InstanCIa, comunicación, y a ella debemos apunta¡" cuando la visión falta
desde los primeros meses de vida, para que el prodeso del desarrollo (que
Entre Visión es va a ser dlstmto) se perturbe 10 menos posible . .
El bebé por su parte .estará en un alertalonstante de sus áreas
oy laño ComunIcación. hnitación gestual sanas, a la eSpera de las expenenclas que el mediopueda brindarle. En esta
etapa de COmunicación pre-verbal el niño se expresa en función refleja a
l y 2 años Integración de Sí y del Otro. Ejercio de través de su cuerpo.
la función simbólica Por otra parte, desde los primeros meses de vida es tocado aca-
riciado, levantado, .transportando, apoyado, dado vuelta, 'frotado, 'apre-
2 Y 3 años Desplazamientos e investigación autóno- tado, balanceado, besado, lavado, secado, vestido, desnudado, palmea-
mos. Lenguaje sin distorsión semántica. do, etc., etc. Pocos son los momentos que se dedican a motivarlo para que
sea él quien inicie algunas de esas acciones, y si lo hacemos, generalmente
3 Y 4 años InfOlmación. Exploración activa del espacio la atención Se centra más en un objeto que en el cuerpo del otro.
lejano Si el entorno le hace sentir que interpreta esos mens'\ies de
agitación motriz, balbuceos, llantos, sonrisas, le responde de diferentes
4y5años Dominio total del espacio y la motricidad modos a cada manifestación y posibilita la acción del niño, dejando que
fina. Captación de las relaciones espa- huela, chupe, toque, golpee, éste se sentirá entendido, seguro,
ciales.
"Lo que se hecha de menos en elnil"lo ci~go, aparte de los
5y6años Capacidad de interpretar y repoducir sím- ojos que no ven, es la ÚlIposibilidad de cOlllunicarse con
bolos gráficos. Integración escolar y en él a través del código visual, al que estamos acos-
la vida diaria. tumbrados. Lo ausencia de signos y seiía/es, que son el
150
ANA MARIA P. DE FIONDELLA ACOMPAÑANDO AL BEBE Y A SU FAMILIA ... 151

más elemental y vital sentido del discurso antes de que siempre con la ayuda de otros podrá introducir acciones.
las palabras tengan significado." Es el momento para proponer experiencias que lo lleven a tomar
(Fraiberg,1981) conciencia de que hay un otro que lo mira a él, que interpreta su
movilización, su palabra o su deseo aunque no lo esté tocando. "Para la
L a "rutina" de todos los días será la que brinde situaciones
.,
cans-
1 tr
simbolización está siempre la cuestión del lenguaje" (puig-Izard, 1986).
cientes de comunicación, así iniciará el camino de la relaClon con e o o
que no deberá abandonar en toda su vida.
Otro aspecto, que desde ahora debemos tener en cuenta, es ~ue c. Entre 2)' 3 atlos. Visión es desplazamiento e investigación autónomos.
la imitación gestual sólo podrá hacerse a través del tacto, Y no solo Lenguaje sin distorsión semántica
cumpliendo una consigna verbal. . .
La mano del bebé en la cara de la mamá es la que capta y Slgmfica Un niño bien comunicado, que comienza a tener consciencia de que
esa gestualidad, y será la mirada del otro la que signifique la gestuahdad es uno entre otros, desea explorar e investigar ese espacio en el que le ha
del bebé (qué linda trompita, qué feo como llora). tocado vivir.
Esto no ocurre si el niño ciego es librado a su evolución espontánea.
Es necesario promover los desplazamientos independientes, y la mejor
b. Entre 1 )' 2 años. Visión es integración de Sí y del Otro. manera es prolongando un poco la dependencia que le brinda la seguridad
Ejercicio de la función simbólica de la mano de la madre.
Los estímulos sonoros y táctiles, en forma asociada y siempre con
El niño vidente comienza a sentir que existe a través de la mirada el apoyo del lenguaje, serán desencadenantes de un querer ir hacia.
que recibe de su madre, de su propia mir~da hacia !as partes visibles de Sintiéndose seguro va a querer gatear, desplazarse, correr, trepar,
su cuerpo, y del manipuleo de que es objeto al banarlo y ~eslIrlo. . suspenderse, saltar, agacharse, y habrá que asistirlo para que pueda
El enfoque terapéutico tendrá en cuenta hacerle sentlf que e:lste. hacerlo y disfrute con ello.
Su ser cobra realidad en la medida en que es percibido por los demas, ya La investigación autónoma estará en relación con la evolución del
que éstos responden al estímulo que significa su presencIa.. . uso de la mano. El desarrollo de la prensión, al no contar con la posibilidad
En esta etapa la estimulación busca una toma de conscIencIa de su de una coordinación ojo/mano, va a ser totalmente atípico, y aunque la
propio cuerpo y del de los demás. Haciendo notar, cuerpo a cuerpo, sensibilidad táctil esté hipertrofiada, la prensión evolucionará necesitan-
con'espondencias, semejanzas Y dIferenCIas. Tacto y contacto dIrecto. do siempre de una primera aproximación palmar para la localización del
enriquecido con la voz y la palabra, con sus padres, sus hermanos y otroS objeto. Cada objeto que toque, cada cualidad del objeto, y cada acción
niños de su edad. . que realice deberán ser nominados.
Las difer€ntes conductas motlices, adecuadas, llevan a la organI- Si se ha preservado la buena comunicación, el lenguaje se comen-
zación del esquema corporal. El cuerpo no se considera un instrumento zará a integrar sin dificultades fonológicas, pero comenzaremos a detectar
sino el fundamento de la personalidad. , carencias semánticas y de estructuración sintáctica. Habrá que hacerle
En lo que respecta al ejercicio de la función !imbólica, ~abra que saber que los otros se relacionan entre sí, que en ese interactuar se pasan
ayudarlo a aprender a jugar, primero ese juegofunclonal.a traves del objetos, cónsignas, que pueden dar origen a movilizaciones o desplaza-
podrá repetir en el otro (persona, muñeco) aquellas acclO~es de las mientos.
cotidianamente él recibe su efecto: hIgIene, vestuano. Mas adelante, Para que el niño lo pueda constatar es que se sugieren situaciones
154 ANA MARIA P. DE FIONDELLA
ACOMPAÑANDO AL BEBE Y A SU FAMILIA ... 155

puede ser segregación.


cuerpo. El niño ciego no puede percibir el rostro humano,
Primer Congreso de AAC.E.D.E.M. los desplazamientos de las otras personas, el cuerpo del
Noviembre de 1983 otro el/ su totalidad como lo hacen los niños videlltes·,
tampoco puede percibir su propia imagen en el espejo,
imagen que completaría la que le brinda su propiocep-
IV. Estimulación temprana: el camino hacia el logro de la tividad a través de mensajes fragmentados. Con una
función simbólica en el niño ciego de nacimiento imagen mental deficiente o jragmelllada o distorcionada,
sólo puede elaborar ulla impeifecta imagen de símislllo. 1/

(Coriat, L. Y otros, 1976)


El presente artículo es además de un compartir parte de nuestro
trabajo de todo los días, con sus celtezas y sus dudas, un intento de solu- "El factor afectivo familiar influye en la evolución de las
ción a una situación que preocupa en la habilitación o rehabilitación del perturbaciones señaladas: las madres esperan
bebé ciego: me refiero al logro de la función simbólica en edades comunicarse con sus hijos a través de la mirada)' lafalta
tempranas en el niño ciego de nacimiento. de respuesta por p1ll1e del niiio determina ell ellas una
Nos ocupamos del bebé ciego y no del de visión ~ubnonnal, ya que profunda frustración a la par que descol/cierta; no
los efectos de la rehabilitación deben estar separados desde el comienzo atinan a buscar otros canales de comunicación que
sin compattir metodologías educativas. reemplace al habitual, y se rompe así el circuito de
Cuando el niño ve se lo induce siempre a mirar y se le enseña a retroalimentación de los estímulos: el ni/la no estimula
interpretar lo que ve. La planificación de su rehabilitación se basa en el a la madre para que le hable y lo levallle; la madre no
conocimiento detallado de su patología y las consecuencias que conlle- estimula a Sil hijo que se habitúa a mantener el vínculo
va: luminosidad, tamaño de los elementos, distancia, colores, etc. consigo mismo, a encontrar placer en actividades de
En el niño ciego lapatología noinfluyeparael planteo rehabilitatorio: autoesfinllllación... "
se lo apoya para que a través dG su desarTOllo motor pueda valerse del resto (Fraiberg, 1981)
de los sentidos, estimulados en fOlma organizadamente asociada.
Lrl práctica diaria nos Ueva a afmnar· que el niño ciego logra niveles
"Los nitlos ciegos de nacimiento aparentemente no nonnales de lenguaje hasta los 2 años/2 años y medio. A partir de esa edad se
presentan dificultades en el primer estadio, porque observa una detención dada por la. no inclusión del Yo-Me-Mi, fuera de frases
efectlÍan normalmente la succión y los movimielltos de hech:rs' la peJOistencia en el uso de la tercera persona y la gran dificultad para
las mw/Os, pero como señala Piaget 'está perturbada el diálogo.
desde el principio de la adaptación de los esquemas Esta situación coincide con las serias dificultades que tienen los
Sel/SOlllotores, )' se retarda la coordinación gel/eraL: niños ciegos para una toma de conciencia del Yo y del Otro, evidenciada
Es en el siguiente subestadio, en torno a los seis meses, en la casi total imposibilidad de realizar un juego simbólico en las edades
cuando cOIJlienzall. el pe/filarse problel1Jas Cllín más serios corrientes (entre los 12 y 18 meses).
emanados de la carencia visual; y éstos son/os vinculados De lo que antecede podemos deducir que la ausencia de visión
a la COl/stitución de la imagen totalizada de su propio atrasa la apanción de la función semiótica o simbólica, que debiera
imbricarse aproximadamente a partir del logro de la pennanencia del
objeto.
11
156 ANA MARIA P. DE F10NDELLA ACOMPAÑANDO AL BEBE Y A SU FAMILIA ... 157

Nacimiento de la función semiótica en el niño vidente corporal: muñeca COII pelo, osito, beb¿. La más elegida
es siempre la muñeca. A partir de los 18 meses las
• Consciencia del Yo y del Otro actividades se hacen más sutiles, localizadas con preci-
• Juego simbólico sión COII ayuda del índice y acompañándose COII una
• Lenguaje atención visual sostenida".
(Aberastury,1968)
Planteado así el problema trataremos de sintetizar el nacimiento de
la función semiótica o simbólica en el niño vidente. Enumeremos las Las actividades más frecuentes sobre el cuerpo de la muñeca se
conductas que Piaget incluye dentro de la función semiótica: relacionan con los ojos, luego el cabello, la cabeza y los pies de la muñeca.
i
l. la imjtación diferida, I
2. el juego simbólico, ¡,
3. el dibujo o imagen gráfica, Juego simbólico
4. la imagen mental propiamente dicha,
5. el lenguaje con evocación verbal de acontecimientos no actuales A partir de los 18 meses, el niño es capaz de cepillar correctamente
(12-24meses). el cabello de la muñeca, dealcanzarleel espejo y llevar la cuchara asu boca,
pero frecuen1emente llega a transferir esta actividad hacia sí mismo, como
si aún tuviera necesidad de la referencia del propio cuerpo.
Conciencia del Yo y del Otro
"Sólo es a partir de los 20 meses que el niño puede, por
Continuando con el análisis de la evolución del niño viden1e, con ulla parte, cepillarse delicadamente el pelo, llevar la
respecto a la conscienca del propio cuerpo se observa que: cuchara a la boca)' mirarse en el espejo con gestos bien
adaptados )' precisos, )' por otra parte, cumplir las
"Las actividades orales son las más frecuentes )' misl1lasacciones sobre la muñeca sin vacilación alguna",
constantes elltre los 10)' los 24 meses, se trata a la vez de "Es en esta misma etapa que todas sus experiencias
la satisfacción de una necesidad mu)' primitiva)' de la biológicas se traducirán en juegos con mll/iecas )'
utilizaciólI de la cavidad oral COII filies a explorarlos animales". 'Tazas, platos, ollas, sartenes, cubiertos,
(colltinente/colltenido). " sirvenpara recibir)' dar alimento )' someter a privaciones
(Aberastury, 1968) a sus hijos. Esta expéienciade alimentar)' ser alimentado,
condensa también las experiencias de pérdida y
"Vienen luego: la malla sobre las rodillas, la mano elltre recuperación".
las pie171QS, no se trata solamente de tocar el sexo, sino "Desdemu)'pequeíio,la imagen qlle aparecey desaparece
la parte media del cuO/po, el hueco formado entre las ha ocupado su vida mental. El hecho de 'que la imagen
piernas. Lasdedos en la nariz- La mano sobre los pies. Las -tanto la eJ.1ema cama la propia-sea fi<gitiva lo angustia.
dedos en los ojos frotándolos. La malla en la oreja. La Pero alrededor de los 2 ó 3 mios descubre cómo recrearla
mano al cabello. Cuando se le proponen actividades COII y retenerla mediante dibujos, y de este modo disminuye
juguetes que penniten correspondencia con la imagen la angustia.
160 ANA MARIA P. DE F10NDELLA ACOMPAÑANDO AL BEBE Y A SU FAMILIA ... 161

presentación está llena de peligros. Muchos niños cie- entollces dos premisas básicas de la estimulación
gos no llegan al final. Al llegar a la edad escolar hay terapéutica:
muchos de ellos que no han incorporado a su vocabula- Primera' que la estimulacióll está destinada a brindar
rio el Yo, ni ningún otro pronombre de autorreferencia". impulso a funciones ya existentes en el sujeto estimulado
y susceptibles de avivarse por medio de estímulo.
Hasta acá las conclusiones de Selma Fralberg y su equipo (1981), Segunda: que la estimulación actLÍa a través de la
en total concordancia con nuestras observaciones, como veremos más actividad que produce en el sujeto estimulado y nunca
adelante. a través de acciones experimentadas pasivamente por
Si hemos abordado el problema de la función simbólica intentan- él ",
do un paralelo entre el niño vidente y el niño ciego es porque dentro del (Coriat y Jerusalinsk:y, 1974)
marco teórico que sustenta nuestro modo de trabajo se impone la
intervención temprana y oportuna para ayudar al niño en el aprendizaje Hace 14 años que hacemos estimulación temprana en bebés ciegos,
de la acción promoviendo su desarrollo integraL y estamos conformes con los resultados: los niños están conectados, su
Antes de seguir adelante es conveniente recordar cuál es ese mar- desarrollo motores bueno, poseen un buen lenguaje de intercomunicación
co teórico en el que se basa la propuesta terapéutica: y llegan a los seis años pudiendo ingresar a una escuela común siendo
capaces de seguir el ritmo de los demás niños.
"La estinudación temprana debe cumplirse a través de Pero hay una fraIlja que va de los 3 a los 6 años en la que continúan
técnicas psicopedagógicas y psicomotrices con fun- con ciertas características que se aceptan como algo definitivamente
damentos teóricos básicos en el conocimiento de la inherente al niño ciego, casi sin posibilidades de modificación. Por otra
teoría de la maduración neurológica, la teoría del desa- parte se sabe que al cabo de esos años todo habrá pasado y se habrá
/Tollo cognitivo y la teoría del desarrollo afectivo. superado.
Como estamos hablando de niños y no de cosas, no se trata
de reparar sistemas nerviosos o de colocar infomwciolles en • No usa el YO, ni otros pronombres de lera. persona.
su debido lugar como se hada en una biblioteca, sino de • Persiste el uso de la 3era. persona.
ofrecer al niño la posibilidad de recuperar su lugar como • No realiza juego simbólico.
persona. Por eso proveer de estímulos favorecedores del • No inventa juegos.
desarrollo a niños con problemas, no consiste en 'bom-
bardearlos' para que se despiel1en, sillo entregarles algo Selma Fraiberg aconseja que la educación conceptual se ocupe del
-ideas, sugerencias, imágenes, técnicas, objetos- que tengan fortalecimiento de los vínculos humanos y de la creación de un entorno
para ellos sentido, a la par que lo ayuden a sin/ar su propia que estimule al niño al descubrimiento de sí mismo y del mundo exterior.
significación como personas en relación con el mundo que No basta. Hoy nos preguntamos ¿Qué áreas debe abordar la estimulación
los rodea (.. .) Para Piaget estímulo es un alimento temprana para que sean otros los resultados?
funcional para la actividad, en esta definición se apunta ¿ Un buen soporte afectivo? No basta.
hacia dos conceptos básicos: el de función y el de ¿Una buena relación parental? No basta.
actividad (. . .) Sobre la base de los procesos de ¿Un buen desarrollo psicomotor? No basta.
significación, que son el punto de pal1ida, se instalall Vamos a intentar una mayor aproximación al problema pafa poder
162 ANA MARIA P. DE F10NDELLA ACOMPAÑANDO AL BEBE Y A SU FAMILIA ... 163

luego proponer otro modo de actuar. Como decíamos en una conferencia Estas experiencias que pueden comenzar a partir de los 9 meses,
anterior (ver apartado ID), el niño desde los primeros meses de vida es deben continuar hasta los 4 ó 5 años. A medida que el niño crece podrá
tocado, acariciado, levantado, transportado, apoyado, dado vueltas, preveérsele de experiencias con niños más chicos, para que sea él quien
frotado, rascado, apretado, balanceado ... Pero pocos son los momentos levante. lave, acaricie, peine, envuelva, y de este modo pueda aceptar que I
que dedicamos a que sea él quien realice tales acciones, y si lo hacemos otros mayores lo hagan con él.
creneralmente esas acciones se Centran mucho más en objetos que en los Todos hemos asistido al encuentro de niños, sean ciegos o no. Lo
~uerpos de las personas. Cuando el bebé o el niño pequeño toca el cuerpo destacable del hecho es que el adulto esté allí observando y sólo
del otro, ambos están, la mayoría de las veces cubiertos de ropa, excep- intervenga para asegurarse de que la situación sea una experiencia
tuando las manos y la cara. agradable para los niños.
La toma de consciencia de su cuelpo será muy incompleta o elTónea Todo puede ocunir: aceptación, indiferencia, rechazo, efusividad,
en lanto no se le provea de las experiencias necesarias para compensar agresión ... Es necesaJio que el observador sepa que nada es bueno o es
en parte todo lo que no ve, para poder llegar al conocimiento de su cuerpo malo. son simplemente reacciones posibles que hay que saber canalizar.
y del cuerpo del otro con el que debe comenzar a identificarse. El otro no Son los comienzos de la convivencia. Es la consciencia del )'0 y del otro
serán solamente' los adultos, con los que también deberá bañarse para que comienza a aflorar en la medida que se les dé la posibilidad de in-
comenzar a tener una imagen desprovista de ropas, serán sobre todo, terrelacionarse aunque sea con un tirón de pelo o un empujón.
otros bebés u otros niños de edades cercanas a la suya, ciegos o videntes, Las experiencias referidas allenguqje se ejercitarán en situaciones
con los que deberá compartir el conocimiento de ese cuerpo que todavía similares de interrelación. El niño está acostumbrado a relacionarse con
es tocable. El cuerpo del otro debe percibirse no sólo con las manos, sino una persona por vez, y no sabe qué está ocun'iendo con los otros. Son
con los pies, la espalda, la cabeza. Los cuerpos deben estar en contacto las relaciones interpersonales sin la captación global del proceso lo que
na tanto para conocer y reconOcer sus orificios y saliencias sino para que lo descoloca. Son los desplazamientos mágicos los que no le dan un índi-
se vaya interiorizando esa sensación de acá telmino yo y acá empezás vos. ce de lo que está sucediendo.
El niño debe tener contacto con todo el cuerpo del otro para que Cuando los demás hablan, ¿hablan de él? ¿Cómo saberlo si no lo
esa imagen sea lo menOs fragmentada posible. nombran? Y si lo nombran, ¿hablan con él o hablan de él? Y si lo nombran
y lo tocan ¿por qué le dicen: "Ahora el nene se va a donnir..."?
"Un niño que no ha visto jamás su imagen en un espejo Son mínimos los índices que lo personalizan. Los otros hablan,
construye. sin embargo. una imagen conciente del cuerpo. preguntan, responden, afinnan o niegan. ¿Cómo saber a quién va dirigido
Es lo que Fran<;oise Dolto llama esquema ca/para!. Creo cada mensaje? Es como tcncr un libreto y no saber a quién le toca hablar.
que podenwspreg un!arnos CÓ1110 se o rganÍ:z.a la especular Por eso el niño ciego cst<:l. en el mejor de los casos, expectante, siempre
a partir de los otros sentidos, el tacto, e( olfato, la alerta. buscando un índice sonoro que lo oriente o un contacto corporal
audición, )'Pienso qlle son muy impOJ1allles los receptores que lo ubique.
articulares, el peso y el apoyo (. .. ) a mijuicio, la ut¡¡¡::.ación Hay un código visual con el que emitimos y recibimos mensqjes
del tacto, del contacto cOlporal y de los receptores constantemente, pero que no I~ llegan al niño ciego; y ese código lo
articulares de postura, nos ayudan a integrar seguiremos usando porque es inherente al ser humano.
constalltemente la posición, las diferentes posiciones Hay un código verbal que a los 3 años les resulta casi incompren-
del cue/po ". sible, ya que hay mucho de tácito en los mensajes verbales, hay oraciones
(Puig-Izard, 1986) elípticas que se complementan con una mirada o un gesto.
164 ANA MARIA P. DE F'IONDELLA ACOMPAÑANDO AL BEBE Y A SU FAMILIA ... 165

Hay expresiones que reflejan estados de ánimo a'tnque no sea La adquisición del lenguaje comienza cuando la madre y el niño
nuestra intención el transmitirlos, hay preguntas y respuestas gestuales crean una estructura de acción recíproca que puede servir como un
que se seguirán haciendo aunque haya un ciego en casa. microcosmos para comunicarse y para construir una realidad compartida.
Nuestra propuesta es la programación adecuada de momentos de Los temas de la sensibilidad del contexto y del formato de la
interrelación con el otro, en los cuales el aprendizaje y el ejercicio deljuego interacción madre/hijo sólo aparecen en el desorden de la vida de hogar.
simbólico debe estar unido al lenguje verbal expresivo. Si se cumple la El primer interlocutor de todo ser humano es su madre, con ella inicia el
secuencia adecuada en la enseñanza se llega a una simbolización realmen- diálogo corporal y visual antes que el de las palabras. Se ha señalado que
te interiorizada, que poco a poco conquistará nuevos niveles. la fase primera y más primitiva de la atención conjunta es establecer un
sostenido contacto cara a cara. Su comienzo es tan importante para la
Primer Encuentro Latinoamericano sobre integración madre que es en el momento en el cual comenta que su niño se ha
de personas ciegas y/o disminuidas visuales. convertido en un verdadero ser humano, y al final del segundo mes el
Pichi Ruca, Cipolleti, Río Negro, Argentina, 1984. contacto con acompañamientos vocales está bien establecido. Es el
momento en que la madre del niño ciego dice azorada: lIno me mira n, aun
antes de haber recibido un diagnóstico definitorio.
Veamos entonces de qué modo la comunidad linctiística arreala
~ b
los
V. El comienzo de la vida. La comunicación encuentros del habla. El vehículo principal de ese apoyo es el formato, o
y el lenguaje en el niño ciego de nacimiento sea las situaciones pautadas que permiten al adulto y al niño cooperar para
seguir adelante en el lenguaje.
Antes que el niño pueda manipular objetos, su madre le habla y una
Desde la fonoaudiología tenemos una inclinación por preocupar- de las situaciones que más se repite es el uso de un vocativo atencional
nos por cómo estructura el lenguaje el niño ciego de nacimiento, y cómo (el nombre del niño) para conseguir que el niño mire a la madre o busque
a través de la estimulación temprana podemos seguir paso a paso este un objeto que le interese. De ese modo hay situaciones de acción
proceso, sentimos la necesidad de buscar el modo de intervenir en él, ya conjunta. en las que el niño descubre que la madre está atendiendo algo
que sus primeras limitaciones, fonológicamente casi perfectas, no nos "para mirar".
aseguran una buena com'unicación. ¿Para qué va a llamar la madre a su hijo ciego si éste no la va a mirar,
Hace mucho que sabemos que para que el lenguaje se desarrolle ni va a girar la cabeza hacia donde ella está? Y, en vez de agitar alegremen-
y sea medio de comunicación se necesita algo más que un oído alerta y te brazos y piemas. ¿suspenderá sus movimientos en un "alerta auditivo"
un aparato motor capaz de reprodicir lo que oye. para saber qué pasa?
Cuando se dice que el niño está adquiriendo el lenguaje se habla, Por otra parte los juegos de la infancia y la niñez son el elemento
por lo menos, de tres apsectos del mismo hecho: básico y deleite de la inmadurez humana: las variantes del cu-cú, la
- la corrección de la forma (sintaxis); escondida, el arre-caballito y otros, dependen el! alguna medida, del uso
- su capacidad de referencia y significado (semántica); y del intercambio del lenguaje.
-su función o intento de comunicación (la pragrnáticadellenguje) o "cómo Hay juegos que están constituidos por el lenguaje y que no podrían
conseguir hacer cosas con palabras". '··,',·i<tirsin él. Con frecuencia ofrecen la primera ocasión para el usa sis-
Los procesos de la vida cotidiana nos muestran que estos tres temático del lenguaje del niño con el adulto. Penniten que se dé la pnme-
aspectos no pueden ser aprendidos en forma independiente, son nece- / fa. o¡lODtunid2td de ver que con palabras se consiguen cosas hechas.
sariamente inseparables. Los juegos del cu-cú están llenos de cambios en los cuales las
,
1
166 ANA MARIA P. DE FIONDELLA ACOMPAÑANDO AL BEBE Y A SU FAMILIA. 167
1

I
madres introducen nuevos procedimientos que gradualmente van En el caso concreto del niño ciego, las preguntas solas suelen no
transmitiendo al niño, tratando de que "donde hubo un espectador haya dar resultado, ya que en vez de devolver una respuesta, vuelve la misma
un participante". pregunta como boomerang, cerrando un ciclo en el que es difícil introducir
No siempre los padres se animan a hacer con sus niños ciegos los modificaciones.
mismos juegos que hicieron con sus otros hijos, sobre todo cuando la Con lo expuesto tenemos una apretada síntesis de lo que es la
referencia al sentido de la vista es muy evidente como en el caso del cu- adquisición del lenguaje desde el comienzo de la vida.
cú (no está) o la escondida. En estos momentos creemos que "el desan·oHo precoz de los
Son a veces los helmanos quienes incorporan estos juegos al sistemas sensoriales frente a la lenta maduración del sistema motor, nos
querer relacionarse con su hermano ciego, al que benefician tíene que hacer reflexionar sobre las funciones que les toca cumplir a los
impensadamente. órganos de los sentidos. Será a partir de ellos que aparecerá la prevalencia
Los padres tienden más a juegos bruscos que son hechos por ellos de la intención sobre la acción" (Bruner, 1984).
sobre los niños, sin buscar su particpación, ni dar tiempo ni atender a sus Aparecerán conductas globales con un significado determinado.
reclamos O peticiones. Madre e hijo comenzarán a elaborar a través del juego las bases de la co-
La atención de los niños alrededor de los 6 y 7 meses está domina- municación temprana.
da por sus esfuerzos por alcanzar, tomar o intercambiar objetos; la a- Se hacen más evidentes ahora las dificultades que deberá vencer
tención conjunta se halla ahora dominada por la acción conjunta, apa- el niño ciego para el uso correcto del habla. Dificultades que podrán
reciendo la señalización del objeto por parte de la madre ("Mirá laflor", superarse en la medida en que padres y educadores reconozcan su exis-
"Dame eso"). A partir de este momento aparecen las etiquetas que ade- tencia y las enfrenten adecuadamente.
más de pertenecer a las cosas que se miran, las madres las afianzan por Es a la estimulación temprana a quien corresponde proveer antici-
medio de las preguntas: "¿Qué es esto? ¿Dónde está la ... ?" refiriéndose padamente pautas de interacción/comunicación (madrelh\jo) con roles
a las partes de la cara ydel cuerpo que se ven yquese tocan. (Bruner, 1984). demarcados que finalmente se convie11an en reversibles. Estas pautas
Por poco que analicemos lo que antecede observaremos que aun se refieren al uso del lenguaje. Por ejemplo: inducir a la madre en el uso
para el niño vidente, la significación de los actos \)0 siempre proviene del de un vocativo atencional (llamar al niño por su nombre) que se
sujeto mismo que los emite. enriquecerá con el acercamiento, contacto y respuesta inmediata de la
Es por ello que tiene sentido plantearse el papel del adulto en el madre ("Acá estoy").
desarrollo de la infancia. Con evidente y sobrada razón se deberá actuar Si a partir de un vocativo atencional madrelhijo logran la rutini-
a través de la estimulación templ1l11a en los niños ciegos de nacimiento. zación de los contextos tendrán una atención conjllma para "ubicar"
La adaptación de las condiciones concretas que el adulto lleve a objetos y hechos a los cuales se refieren. La atención conjunta que es tan
cabo, es la que posibilita el éxito de la acción, lo que da significación evidente a través de las dos miradas que convergen en un punto debe ser
funcional a la acción infantil. reemplazada por las dos manos que se encuentran en el mismo objeto.
Volviendo a las preguntas de las madres que afianzan el uso de las Si la atención se refiere a un sonido del ambiente, la madre debe
etiquetas: "¿Qué es esto? ¿Dónde está la ... ?". La respuesta del niño evidenciar que también 10 ha escuchado y se encuenttll con el hijo en esa
puede ser visual (mira lo que la madre nombra) O responden con las for- percepción simultánea. imitando el ruido ("Pum, hizo la puerta") mien-
mas genéticamente consistentes. Si el niño no responde, la madre inme- tras loca al niño dando una representación táctil del sonido.
diatamente etiqueta. Si el niño responde, la madre le contesta con una Alrededor de los 9 meses debería aparecer la indicación o señali-
afirmación O negación (feed-back) y a veces con una afimlación o ne- zación pllra. Ya que el niño ciego no tiene la posibilidad de señalar en
gación más una etiqueta (Bruner, 1984). forma espontánea. deberemos, en forma simultánea realizar dos opera-
168 ANA MARIA P.-DE FIONDELLA ACOMPAÑANDO AL BEBE Y A SU FAMILIA ... 169

ciones: señalizar y etiquetar, para ello la colocación en su cuna o silla, de "Esa relación cara a cara en el período inmediatamente
elementos bien diferentes, fijos y que agraden al niño, ayudarán a su posterior al nacimiento, puede ser tan crítica como
localización en la medida en que la madre utilice las preguntas básicas: cualquier otro tipo de interacciones, como la lactancia
"¿Dónde está ... ? ¿Qué es esto ... ?" con la respuesta y el contacto inmedia- y los actos de alzar y abrazar al bebé".
tos del objeto ("iAcá está el oso! ila pelota!"). Los objetos más permanen- (Brazelton y Cramer, 1993)
tes que ayudan en la señalización y la etiquetación son las partes del
cuerpo. Esta experiencia que transcurre en nacimientos normales se ve al-
Si somos conscientes de las dificultades del niño ciego para terada muchas veces, y no sólo por la presencia de patologías visuales.
interpretar a qué nos referimos cuando hablarnos, podremos desde el Tan es así que pata promover el apego, Klaus y KenneIl (1978) recomien-
comienzo de la vida ser facilitadores de ese aprendizaje a través del jue- dan: "postergar las medicaciones para los ojos, como el nitrato de plata,
go. Cada una de las situaciones planteadas no tiene que ser otra cosa que hasta que la madre haya permanecido bastaITte tiempo con su niño en la
un juego que satisfaga a la madre y al hijo, por el simple hecho de estar primera hora consecutiva al nacimiento".
comunicándose y entendiéndose alegremente.
Siempre en relación con el apego y la mirada hay otros estudios que
Curso de Estimulación Temprana. dicen:
Río de Janeiro, octubre de 1989.
"Las madres que en el período hospitalario y en los
primeros meses de vida miran más sus niños suelen ser
más sensibles a las señas del niño y le ofrecen una
VI. Para los que ven es tiempo de mirar estinllllaóón más apropiada que las que los miran
menos".
(Bamard, en Klaus y Kennel, 1978)
Si nos vamos a referir a los bebés que sólo portan una patología
visual, conviene recordar las primeras experiencias visuales en la mayoría Podemos decir que toda patología que comprometa la percepción
de los bebés recién nacidos normales. visual desde el nacimiento, convierte al bebé que la padece, en un bebé
de alto riesgo.
Dice Brazelton: El ojo es responsable de la adquisición de casi el 80% del cono-
cimiento humano. Por consiguiente, cualquier alteración en ese órgano,
"La capacidad del recién nacido de ver y oír en la sala compromete en mayor o menor grado el desarroJlo de las aptitudes
de panas puede ser tan importante para el proceso de la intelectuales y psicomotrices, interfiriendo en el caso de los bebés
vinculación como el acto de llevarlo al pecho para que - su comunicación,
succione". • los primeros aprendizajes,
(BrazeltonyCramer, 1993) • eljugar.
El bebé que no se ve, o ve mal, no mira y como no mira, deja de ser
Pero no es sólo importante para el bebé: "Ya en la sala de partos las mirado, y consecuentemente, es menos tocado, menos hablado, es corno
madres desean sostener a su bebé en posición cara a cara" (Klaus y si fuera lentamente abandonado. Así lo siente y eso perturba su desarrollo
Kennell,1978).
170 ANA MARIA P. DE FIONDELLA ACOMPAÑANDO AL BEBE Y A SU FAMILIA ... 171

emocional. Tiende a romper su comunicación con el medio; el niño se La cara de la madre es el estÚTIulo por excelencia, enrique~ida con
repliega sobre sí, el mundo no le inleresa porque el medio no se interesa su voz, sus besos y sus caricias.
por él... Y la comunicación va a eslar rOla o seriamente perturbada.
Cada vez deberemos prestar más atención al relato de los padres. "El objetivo básico de la eSlil/lulación es en priñcipio
Dando un lugar para verbalizar cómo ven a su bebé, las angustias que la que el niño confiera un significado a los estímulos
enfermedad desencadena y el sincero deseo de reparación que comienza visuales que recibe, de modo que pueda llegar a formar
a generarse. un proceso visual y que éste sea potenciado al máximo ".
(Leonhard, 1992)
"Mostrar U" modelo de interacció" frente a U" bebé
disminuido puede servir para reforzar el vínculo de la San las áreas sanas las que dan cabida a la estimulación visual. Un
madre y ayudar a compartir la depresión ". bulto, un contorno, una imagen bOlTOsa tienen significado si los asocio
(Klaus y Kennell, 1978) con la voz, el grito o el sonido que producen, y con el cuerp%bjeto que
les da ongen.
El equipo debe prestar mucha atención al lema de la auloestima de ,I, Dos conceptos quiero rescalar de los que más saben. La Dra. Lea
Hivarinen (1983) dice: "La cuna de color rosa O azul pálido es un impe-
los padres, y eslO "" posible moslrando las habilidades del bebé: {
- el liSO de sus manos, ,1" d,mento efectIVO, el bebé eslá acostado en 'ninguna parte' de color rosa,
.[
- el desarrollo motor, :f azulo blanco".
- sus ricos balbuceos, Finalmente quiero hacer referencia a una reflexión de Brazelton:
- sus risas y sonrisas ...
"¿ Cómo podrían aprender los bebés a COllocerse si no
"Hay interesantes investigaciones sobre /el condIlcta leyerall ell los ojos de los progenitores el significado de
del bebé ante un rostro inexpresivo (. .. ) Primero apare- SIl conducta?"
cen reiterados intentos de suscitar una respuesta de la (Brazelton y Cramer, 1993)
madre, al no consegLúrla sobreviene ww expresión
sombrfa, desvío de la mirada y por último retraimiento", .. Sabemos que este inten'oganle tiene muchas respuestas y muy
(Brazelton yCramer, 1993) posJtJvas. pero me permitiré intenlar un acercamiento referido a la dis-
capacidad que nos ocupa: también el tono de voz y el contacto corporal
Si la mirada sirve para que el hijo vea en la mirada de sus padres pueden inscribir mensajes en ese ser ávido de recibir pistas que le indi-
cuánto lo aman, lodo nos hace suponer que un bebé que ve mal no quen el sentido que sus padres dan a su accionar.
encuentra, no reconoce, en esos rostros la respuesta esperada. . Así como la Dra. Hivannen nos aconseja que: "las diferencias
Para ayudar a las díadas debemos ser capaces de promover una VIsuales se correspondan con diferencias táctiles", tratemos, además,
modificación en su rol para ajustarse a la realidad de su h\jo. que organizadamente nuestras respuestas verbales (tono, intensidad
El apego se inicia más facilmente cuanto anles hayan encontrado coincidan con distintas actitudes corporales, o caricias para qu~
la madre y el niño un sincronismo en la acción reforzando una imagen sa 'mllon borrosa de una cara no fácilmente reconocible, se vea enrique-
borrosa con el contacto (cara a cara), con los diálogos susurrados (boca- las otras cualidades, sí perceptibles llenas de una carga afectiva
oído) en los que no deben faltar espacios para las respuestas. que será el comienzo de un querer mirar.
172 ANA MARIA P. DE FIONDELLA ACOMPAÑANDO AL BEBE Y A SU FAMILIA ... 173

En lamedida en que olvidemos la mirada perdida, vamos a hacer b. El bebé en el hogar. La mirada del bebé,
posible que encontremos el deseo de mirar. La mirada de los padres

Presentado en el Primer Simposio Internacional Cuando el bebé llega al hogar, cuantas imágenes desordenadas de
sobre deficiencia visual en la infancia. rostros que aparecen y desaparecen, van a estar asociadas a situaciones
Sao Paulo. Brasil, 1993. traumáticas de dolor, de luz que no se apaga, de ruido que no cesa ,de
voces que no se entienden ... y qué significativa puede ser una cara
cuando es la que proporciona la mirada que acmicia, que protege, que
acuna.
VII. La experiencia sensorial del prematuro En el mejor de los casos el bebé fue depositario de los desvelos de
los profesionales, recibiendo la mejor y la más adecuada tecnología que
le permitió vivir. Los padres, a su vez, le brindaron lo que pudieron, en
a. El sentido de la vista. Los otros sentidos. encuentros furtivos, tratando de conocerse y amarse. A veces ese bebé
El ver y el mirar queda con algunas secuelas, una de las cuales puede ser la retinopatía
del prematuro.
La vista nos informa a distancia, en forma totalizadora y simultánea De ahora en adelante se tratará de subsanar el desencuentro del
de las caractelÍsticas del mundo que nos rodea, sabemos así del espacio nacimiento, y esas vidas paralelas comienzan a encontrarse en el queha-
de las cosas que lo pueblan y de cómo son e,as cosas en cuanto al color, cer dimio del cambiado, la alimentación y el baño. En esos encuentros ten-
forma, tamaño, desplazamientos y ubicación. drá cabida la estimulación temprana que harán esos padres que ahora
Si pensamos en el oído vemOs que también recibe información a están intentando inaugurar una paternidad feliz.
distancia, pero sólo puede decodificar algunos mensajes por vez.
La vista, por su parte, que es responsable de casi el 80% de nues-
tros conocimientos en el mismo acto, en el mismo momento expresa el e, El bebé y su mamá en la rutina diaria
estado de ánimo, los sentimientos de quien mira, a veces sin intención
deliberada. Ya hemos señalado que toda patología que altere la percepción
Pensando en otro órgano de los sentidos, podlÍamos decir que visual compromete en mayor o menor grado el desarrollo de las aptitudes
también la sensibilidad cutánea puede lograr recibir y emitir información intelectuales y psicomotrices, interftriendo, en el caso del bebé en:
simultáneamente a través de una cmicia, un apretón de manos, un beso. • su comunicación,
Pero para que este proceso se desencadene necesita del contacto físico • los primeros aprendizajes,
y aun así la información que nos proporciona es fragmentada, es parcial. • el juego.
Volvamos al sentido de la vista, el ver nos habla más de la función El bebé que no ve, o ve mal, no mira, y como no mira deja de ser
del órgano visual (con el cerebro incluido), el mirarimplica una actitud más mirado y por eso es menos tocado, menos hablado, es como si fuera
específica. El ver es lo general, el mirar lo particular. lentamente abandonado, así lo siente yeso perturba su desarrollo
Mirar y ser mirado, dar y recibir en un mismo acto y sin contacto emocional, tiende a romper la comunicación con el medio, el niño se
físico, algunas veces en forma distraída y otras esforzándonos en repliega sobre sí, el mundo no le interesa porque poco se interesan por
transmitir alegría, serenidad, amor. él, y la comunicación puede estar rota o seriamente perturbada.
174 ANA MARtA P. DE FIONDELLA ACOMPAÑANDO AL BEBE Y A SU FAMtL1A 175

Si la mirada sirve para que el hijo vea en los ojos de sus padres Como hemos señalado, las áreas sanas las que dan cabida a la
cuánto lo aman, todo nos hace suponer que un bebé que ve mal no estimulación visual. Un bulto, un contorno, una imagen borrosa tienen
encuentra, no reconoce en esos rostros la respuesta esperada. significado si los asocio con la voz, la caricia o el movimiento del cuerpo
Para ayudar a las díadas debemos ser capaces de promover una al que pertenecen.
modificación, un ajuste a la realidad de su hijo. El rol del profesional que
oriente esa estimulación temprana será efectivo si ayuda al sostén de la "Cuando haya material estimulador, debe introducirse
función materna-paterna y colabora descubriendo juntos los adelantos con mucho cuidado, para tener la certeza de que no
del bebé. reemplaza al contacto cO/poral, tan necesario ".
(Hiviirinen, 1983)
"Mostar un modelo de interacción frente a un bebé
disminuido puede se/vir para reforzar el vínculo de la El material puede ser importante, pero más lo es la intención con que
madre y ayudar a combatir la depresión. " es usado. Si el bebé es ciego serán los brazos y la voz de su madre los que
(Klauss y Kennell, 1978) servirán de referencia para comenzar a tener confianza en el entorno y
sentirse seguro.
El equipo debe prestar mucha atención al tema de la autoestima de En muchos casos retinopatía nO es un sinónimo de ceguera, por esa
los padres y esto es posible mostrando las habilidades del bebé: razón, cuando hay retina funcionalmente apta, la estirnulación se orientará
- el uso de sus manos, para lograr la consistencia del deseo de mirar.
- el desarrollo motor,
. sus ricos balbuceos,
- sus risas y sonrisas. d. El "no hacer" ell estimulación temprana. El estar
Veamos algunas situaciones: parece ser que el decúbito lateral es
una buena posición para que, a medida que el bebé crece y madura, esté Debemos aclarar que si bien es cierto que la estimulación temprana
en contacto COn la cara de su mamá que, además, sabrá hablar y callar se inserta en situaciones placenteras y de juego, no todos los juegos o
mientras el bebé la mira e intenta un manoteo. Esperará las señales del bebé las situaciones placenteras son convenientes para el niño. Por ejemplo,
mirando sus manos, su ceño fruncido o su boquita abierta, y entonces, cuando la visión es muy baja, lo que mejor ve el bebé es el brillo de una
como en cámara lenta, volverá a hablar ya callar, a sonreír ya acariciar, lámpara o los rayos del sol reflejados en el espejo, o su mano delante de
con pausas que darán lugar al hijo para que exprese su placer o displacer. los ojos moviéndola en búsqueda de contrastes claros y oscuros, de luces
Todo esto tan intenso para ambos tal vez dure 2 ó 3 minutos. Es suficiente. y sombras. Otras veces es atraído por los golpeteos de un sonajero sobre
La luz deberá iluminar uniformemente los rostros y las cosas. la mesa o por los ruiditos que le hacen sus familiares para entretenerlo.
Estas actividades, si se continúan por lapsos prolongados, no lo bene-
"El rostro humano es UlIO de los elementos de mayor fician para conexionarse con el medio y hacer aprendizajes.
atracción para el ¡-¿cién nacido. En el bebé prematuro De eso se trata cuando a veces hablamos del no hacer pero sí de
se ha obselVado, en algunos casos, la,.dificultad para es/ar, de aprender a observar a ese niño, de escuchar a sus padres en sus
tolerar el colltacto cara a cara, sugiriéndose hacer ese reclamos y necesidades, en ayudarlos a programar juegos, salidas, a
encuentro desde un ángulo en lugar de la abierta conocer a otros padres, a conocer a otros niños.
confrontación de rostros. H Un bebé seguro desea movilizarse y entrar en ese mundo, cada vez
(Martínez, 1993) más amplio, que lo tienta constantemente, y al que ya no le teme. Se
. 176 ANA MARIA P. DE FIONDELLA ACOMPAÑANDO AL BEBE Y A SU FAMILIA ... 177

desplaza, gatea, camina, corre, juega... Será un niño más en su casa, en la vinculaci6n como el acto de llevarlo al pecho para que
plaza, en la escuela. succione".

I!
Pero para que todo esto sea posible, ese bebé tiene que haber
estado en un lugar donde, además del trajinar de todos los días, de la lu- Podemos decir entonces que las primeras experiencias visuales del
cha diaria con la muerte, circula un deseo denso que sostiene a cada uno nacido dependerán tanto de la integridad y madurez de su aparato
de esos bebitos para que logre su humanización. \\'iSllal, como de las oportunidads que le den los padres para encontrar en
El deseo del médico, de la enfermera, de los padres, y del propio ojos el sostén necesario para iniciar el camino de convertirse en
bebé, un deseo que lo inunda, y forma el nido que lo acuna, 10 invade y
¡1I
lo rescata.
>1
2. Con respecto a las patologías visuales más frecuentes en niños con
"Curso anual de actualización de neonatoloaía" Síndrome de Down, son los estrabismos, las inflamaciones y las
II
Unidad de Cuidados Intensivos Hospital Juan A. Femández. infecciones de los párpados, las miopías, astigmatismo, nistagmus y 11
1
7 de junio de 1994. Buenos Aires. Argentina. cataratas.
11
Resulta obvio decir que a un niño son Síndrome de Down se le ti

deben cuidar sus ojos, al igual que a todos los niños, desde que nace, y
f~
VIII; El niño con Síndrome de Down que cuando se observa una molestia ocular debe requerirse la consulta . '1
L
con alteraciones visuales del oftalmólogo de niños, para ser diagnosticado y tratado precozmente. 11.
[1
Parece obvio pero no lo es, porque muchas veces se observan
I1
El presente es el producto de la práctica hospitalaria y privada, patologías visuales que no son tratadas porque se consideran inherentes
I1
realizada durante treinta años. al Síndrome y con pocas posibilidades de mejoría. Y no es así. Tanto no {I

No todos los niños con Síndrome de Down portan patología vi- es así que en las cataratas bilaterales de nacimiento, la diferencia entre. ti
({

sual, pero aquellos que la poseen pueden ver muy comprometido su tratarlas y no tratarlas es ver o 110 ver. 11
. desarrollo, si no se detectan precozmente y se implementan las tarapéuticas
y los controles adecuados.
Las cataratas deben ser operadas en los primeros días de vida, de
lo contrario la visión no de desarrolla porque la retina no recibe los !
En esta comunicación abordaremos tres aspectos:
1. Las funciones de la visión en los primeros meses de vida.
estímulos que desencadenan la función visual.
El estrabismo debe ser tratado precozmente par.a ~vitar la ambliopía
i
l'ti
¡;

2. Las patologías visuales más frecuentes en niños con Síndrome de del ojo no fijador. Los nistagmus que perturban la fijación, pueden mejorar I
Down. cuando se organiza la mirada con actividades lúdicas adecuadas. I!
3. Las alteraciones de la comunicación por patología visual.
Finalmente quiero llamar la atención sobre las alteraciones de la I!
1. En primer término vamos a recordar las primeras experiencias comunicación por patologías visuales. La ausencia de la visión o una i
visuales en la mayoría de los bebés recién nacidos. baja visión sería responsable, en el primer año de una marcada I
DiceBrazelton(1989):

"lLt capacidad del recién nacido de ver y oír en la sala


(t.:nclenciaa la desconexión, en el 2do. año, de dificultades en relación
el otro y un juego pobre estereotipado, y en el 3er. año, de de-
'maSl'ada quietud, aislamiento y lenguaje ecolálico.
!
de panas puede ser tan imp011ante para el proceso de la Será necesario, desde el primer momento atender a la organización
la mirada, que además contribuye a mantener una atención estable.
· 178 ANA MARIA P. DE FlONDELLA

Atención visual estable no significa que el bebé quede fijado a un objeto Notas bibliográficas
o a una luz, sino que vista, audición y contacto interrelacionados en estar,
el decir y el hacer, serán los responsables de un alerta espectante a partir
de la cual todo es posible.
A los dos años es la vista la que perrnite reconocerse en el otro,
sobre todo si son bebés o niños con los que se implementan acercamientos
facilitadores de experiencias que, si las sabemos mirar, son verdaderos
juegos. La vista es la gran integradora de ese rompecabezas que es la
imagen corporaL
Un niño con Síndrome de Down y con visión subnormal corr'e más
riesgo de aislarse y no tender a la búsqueda del otro como complemento
en el juego y la comunicación.
A los 3 años la baja visión dificultará más su deambular indepen-
diente. Es una etapa en la que hay que cuidar que no pierda esa sensación
de seguridad, tan necesatia para animarse a la gran aventura de los
.espacios grandes. Así como al comienzo necesitamos una buena visión ABERASTURY, A.,(1968), Elniiio}' s"sjuegos, Ed. Paidós, Bs. As .
cercana, ahora se buscan los medios (anteojos, lentes de contacto) que
mejoren su visión lejana. Pero independientemente de las patologías ANANIEV, B. Y otros, (1965), "El tacto", en LOs procesos del conoci-
visuales hay otros trastornos relacionados con el sentido de la vista. que miento y el trabajo, Tekné.
no dependen de la agudeza visual del niño ni de su e,trabismo o su miopía,
sino que dependen, única y exclusivamente de la mirada de los otros. de AUSTlN, J. (1982), Cómo hacer cosas CO/1 palabras, Paidós, Bs. As.
la mirada de los padres, de los hermanos, de los maestros, de los médicos.
Todos los niños ven reflejado en la mirada del otro, lo que cada uno BARRAGA, N. C. YER1N,J., (1991), "Discapacidad visual yaprendi-
piensa del otro o cree de éL Así como veo en la mirada de cada uno de zaje". Internacional Council for the Education of the VisuaIly Impaired.
ustedes si creen o no creen en lo que estoy diciendo, si esto les resulta Bundenmission, Ch.; Crespo, S., Córdoba, Argentina.
indiferente O los conmueve, si lo desvalorizan o lo respetan .
... Y lo mismo les pasa a todos los chicos, a todas las personas, desde BRAZELTON, B., (1987), "Bebés y madres", en El primeraiiode vida,
los primeros días de vida, tengan o no Síndrome de Down. Hacen o dicen Emecé, Bs. As.
lo que nuestra mirada les permitió que hicieran o dijeran, y esto no es una
metáfora, es una realidad. Por eso, además de atender la salud de nuestros BRAZELTON, B., (1989), El saber del bebé, Paidós, Barcelona.
niños, además de aprender metodologías que posibiliten sus aprendiza-
jes, cultivemos un modo de mirar despojado de prejuicios, cultivemos en BRAZELTON, B.yCRAMER,B., (1993), "Larelaciónmás temprana",
nosotros la mirada del amor. Padres. bebés y el drama del apego inicial, Paid6s, Barcelona.

Primer Congreso Nacional sobre Síndrome de Down. UL'V''''''''. 1., (1984), Acción, pensamiento y lenguaje, pd. Alianza,
"De los mitos y realidades"
11 al 15 de agosto de 1994. Buenos Aires.
Capítulo Vil

Intervención oportuna en runos


con riesgo ambiental

Jaime y Gabriela Tallis

l. Introducción

Dado que 230 millones de habitantes de Latinoamérica y del Caribe


viven en la pobreza, el conocimiento del impacto de las condiciones socio-
ambientales desfavorables sobre el desarrollo, y el rol que la intervención
oportuna puede jugar para evitarlo o atenuarlo, se convierten en una ne-
cesidad de los profesionales que tienen como objeto la asistencia y
educación del niño pequeño.
Son innumerables los trabajos que dan cuenta de \a relación entre
las condiciones socioculturales y los alcances intelectuales de los niños,
en nuestro país son calcados los mapas de la pobreza, la mortalidad
infantil, la desnutrición, la repitencia de grados, la deserción escolar y el
analfalletismo (Tallis y col., 1991).
Esta sobreimpresión de situaciones tiene determinantes biológi-
cos, psicosociales y de desigualdad de oportunidades.
La desigualdad de oportunidades se refiere a que los niños prove-
inllerltes de sectores marginales tienen al comienzo menores posibilidades
ele' ac:ceder a estímulos suficientes, a que la oferta educativa e.s eScasa
janjinl;s de infantes, y a que la escuela está estructurada en su
Ila~lifi(:aciión para responder a códigos y demandas de 'otros sectores
predominantes, por lo cual opera como un sistema expulsor de
184 J. TALLIS - G. TALLIS INT. OPORTUNA EN NIÑOS CON RIESGO AMBIENTAL 185

las diferencias, en vez de compensador de las diversidades (Tallis y seguimientos que marcaban la influencia del medio social en los rendi-
Soprano, 1991). mientos intelectuales, independientemente del peso inicial y la gravedad
Pero sería absurdo negar que independientemente de la no exis- de las complicaciones perinatales.
tencia de suficientes políticas destinadas a atenuar el impacto de la Rutter (1982) elabora un esquema de causación multifactorial que
desigualdad social sobre los alcances educativos, la posibilidad de estaría en la base de la mayoría de los trastornos de desarrollo de oriaen
retrasos en el desarrollo es mayor cuando se reúnen una serie de factores psicosocial, en los que une a factores de predisposición biológica :ya
que determinan el llamado "riesgo socioambiental": ingresos económi- sean adqumdos o hereditarios- circunstancias ecológicas (factores co-
cos insuficientes, condiciones de habitat desfavorables (vivienda, agua mumtanos, cultu:~, escuela, elc.) y situaciones de crisis de factores pro-
corriente, cloacas, etc.), analfabetismo familiar, madre soltera, madre tectlvos. Este anahsls complejO es el necesario para planificar las accio-
adolescente, condiciones de crianza alteradas, ciertas características nes de intervención oportuna.
psicopatológicas de los padres (drogadependencias, depresión, etc.), Es también frecuente que estos retardos de desarrollo se produz-
poblaciones migrantes, etc. can aun en ausencia de predisposiciones biológicas. Entonces se jerar-
Sameroff (1986) destaca que es difícil que se presente un solo factor qUIza la deficiencia de estimulación y el concepto de "períodos críticos"
aislado. habiendo por lo general una suma de situaciones adversas cuan- durante el proceso madurativo, transcurridos los cuales sin la adecuada
do la incompetencia intelectual y/o socioemocional alcanza niveles ejercitapó1\ se dificultarían las adquisiciones de funciones y habilidades.
significativos. Hacer hincapié en los factores de riesgo social en la maduración y
Bralic y Lira (1979) sostienen que son más importantes como el desarrollo del niño nos lleva a especificar que las diferencias socio-
indicadores de riesgo de dificultades de desarrollo las situaciones fa- económicas no son independientes de subculturas. Estas subculturas
miliares y sociales -<:omo madre o padre ausente-, y la consistencia de definen distintos modos de valorizar la realidad.
las normas de crianza, que otros datos vinculados al nivel socioeconó- . Partirnos de que sólo comprendiendo las prácticas sociales y los
mico. En este sentido podernos señalar que el nivel educativo de la madre SIstemas de representación dentro de uná población dada, accedernos a
parece ser relevante para el pronóstico de los niños. las "identidades sociales" de los actores que nos proponernos conocer.
Estos sectores sociales presentan un "continuum de riesgo" que El concepto mismo de infancia es significado de diversos modos
va desde enfermar más gravemente y morir (y así lo demuestran las tasas según la época histólica, y varía según las diferentes subculturas en cuan-
de distribución de la mortalidad infantil) a presentar más habitualmente to a su representación, duración y función. Asimismo los conceptos de
afecciones que intefieren en el desarrollo físico y mental. Pero no sólo trabajO y de familia detelminan los modos y roles esperados y aceptados
enferman más frecuentemente, sino que las consecuencias de las mismas en el hombre y en la n¡ujer.
patologías son más serias que .:n poblaciones de mejores recursos. Esto
que ha sido llamado "doble impacto"lo hemos ejemplificado (Tallis y col.,
1993) con los hallazgos de Hanshaw (1976) de las secuelas a distancia de Il. La familia y el trabajo
infecciones subclínicas con citomegalovirus, con el seguimiento de Wer-
ner (1987) de niños con complicaciones perinatales, y las conclusiones
del estudio multicéntrico efectuado en U. S. A. (Broman, 1975) en donde Partiremos de la siguiente definición de familia: "institución a cargo
las variables de mayor correlación con rendimiento intelectual fueron el de las tareas ligadas al mantenimiento y reproducción de la población".
estado soioeconómico de los padres y la educación de la madre. .' Para delimitar el concepto de institución tornaremos tres ejes, a
También en esta obra, cuando nos referimos al pronóstico a largo sIstema de normas o regulaciones generales, estructura u oraani-
plazo de los niños de bajo peso, citarnos las concluciones de diversos "
186 J. TALLlS - G. TALLlS
INT. OPORTUNA EN NIÑOS CON RIESGO AMBIENTAL 187

zación social, y lugar de producción y de relaciones de producción.


Desde esle espacio podemos ampliar la primera definición: vos y sociales de los niños.

'En primer lugar (. .. ) la participación de los miembros de


la sociedad en los procesos sociales de producción está Vínculo inicial madre/hijo
basada en la existencia de ulla cuota nada despreciable
de Irabajo invisible o no contabilizado socialmente, qlle Definimos el vínculo como necesario para la supervivencia, para la
se desarrolla en el ámbito privado de la unidad dO/l1éstica subjetivación del sujeto y como la matriz básica de todas las relaciones
(... ). En segundo lugar, la división sexual del trabajo sociales y cognitivas. Este vínculo comienza antes del nacimiento. Se.
existente en las sociedades urbanas actLlales ubica a la halla presente en la concepción y el embarazo.
/1uyercomo responsable principal de las tareas cotidianas La diferencia entre el hecho de que el bebé haya sido deseado o
vinculadas a la reproducción)' mantenimiento de los n.o es s~gnificativa para el futuro del mismo, aunque es posible que esta
miembros de su familia-unidad doméstica (. ..) En tercer sltuaclOn inICIal sea modificada con el curso del tiempo.
lugar, esta responsabilidad implica habitual/l1eme la Dentro de los factores de riesgo sociales, nos enfrentamos con
existencia de presiones cruzadas entre las demandas del distintas situaciones:
rol de lIladre)' lUna de casa, y el de trabajadorafllera del
hogar (. ..) La manera como este conflicto se plantea y es • . Familias numerosas donde, más allá del deseo, no sea posible por
resuelto varía según la sociedad y la clase social ". cIrcunstanCiaS económicas u ocupacionales satisfacer las necesidades
(Jelin y Feijoó, 1989) básicas de todos sus hijos.
• Madres solteras o abandonadas sin ningún apoyo familiar o social.
• Madres cuya fOlmación no les permite conocer los cuidados y necesida-
IlI. Clase social des desde el control del embarazo o en el cuidado de sus pequeños.
• Parejas deterioradas que no pueden sostenerse mutuamente en el pro-
ceso de la crianza.
Las distintas clases sociales pueden ser distinguidas por la dimen- • Padres cuyos desafíos personales impiden un lugar para el niño.
sión de sus "necesidades", que repercuten en cambios en las organiza- • Madre con trastomos emocionales.
ciones intra-familiares. Es imprescindible garantizar la superviviencia de • Niños no deseados.
los miembros y un determinado "modo de vida".
Un modo O nivel de vida no es meramente una manera de sobre- Podríamos seguir enumerando situaciones en donde el vínculo
vivir, sino también una manera de relacionarse y de valorar. Estos factores inicial no pueda ser conquistado.
de riesgo se registran por la presencia de una ecología ambiental desfa- Lil presencia necesmia para esta constitución inicial es la madre o
vorable, los más pertinentes incluyen intensificación del estrés, disminu- quien ejerza su función. Tomando como referencia la teoría de Winnic~tt
ción del apoyo social y depresión de las madres. (i 972), explicitamos que su función consiste en sostener, manipular y
Tomaremos para analizar esta situación dos campos: las caracte- mostrar la reahdad a ese niño. A su vez debe lograr la doble dependencia
rísticas del vínculo inicial madrelhijo y las valoraciones familiares como y certificar en su hijo la "omnipotencia creadora", a saber, que el bebé es
matriz de las repercusiones en el desalTollo de los aprendizajes cogniti- quien crea el objeto que necesita (comenzando por el pecho).
Para que esta situación sea lograda, la madre hará una regresión,
188 1. TALLIS - G. TALLIS INT OPORTUNA EN NIÑOS CON RIESGO AMBIENTAL 189

y a través de una identificación mutua con su hijo, anticipará sus nece- Tomaremos dos variables para articular la importancia del contexto
sidades y deseos. Esto requiere de un ambiente social y personal que le social: las valoraciones, y la organización sOGÍfll y familiar,
facilite apartarse de las tareas y preocupaciones habituales, dando lugar Estas variables fueron seleccionadas porque la primera determina
al estado de "preocupación materna primaria". las significaciones de los objetos y de los conocimientos, mientras que
Ante contextos con mayores dificultades, los antes mencionados, la segunda posibilita la exploración, el encuentro de obstáculos, las ini-
es posible que este estado no pueda ser alcanzado. Esto puede llevar a ciativas autónomas, etc. en las interacciones entre el sujeto y el objeto.
diversas semiologías en el bebé, en cuyo extremo encontrarnos el autis-
mo o la psicosis de la primera infancia. Otros síntomas menos graves, a) Las valoraciones
aunque a veces progresivos, son los clasificados por Gutton (1987), quien
diferencia la hiperactividad de la díada madrelhijo de la hipoactividad de El sistema educativo familiar porta ciertas regularidades en la
lamisma. circulación de la información y un sistema de valores. Estas valoraciones
Define la primera de esta manera: "Las perturbaciones funciona- son acerca de los objetos y de las relaciones (físicas y sociales), Las
les, o disl1tmias precoces, constituyen la expresión semiológica, por parte valoraciones se hallan presentes desde el período sensomotor, el cual no
del lactante, del hipelfuncionamiento diádico". Entre estas semiologías es universalmente igual. Las diferencias son posibles por el hecho de que
incluye el insomnio precoz, la anorexia, las regurgitaciones activas, la dos culturas valoren de distinto modo las áreas del desarrollo cognitivo.
bulimia, la obesidad y la constipación. Las madres de estos niños se de-
limitan por su "solicitud primaria ansiosa". b) La organización social yfamiliar
Respecto de la segunda dice: "El pronóstico es mal conocido,
aunque sin duda su gravedad es mucho mayor que en el caso de los Cada estructura familiar se organiza de acuerdo a los modos de
hiperfuncionamientos diádicos. El problema se centra en las posibilida- " ins,,,ciión en los procesos sociales de producción y reproducción. Esto,
des de bloqueo del desarrollo". Agrupa como expresiones semiológicas a su vez, afecta la definición y rol social de los niños. El apoyo social y
la anoralidad y la oralidad frenética. Los cuidados maternos de estos niños formas de acceso, definen la mayor o menor exclusividad de la familia
son operatorios (sólo biológicos y ritualísticos) o brindados por madres en la transmisión de conocimientos,
depresivas. Analizaremos dos factores que desde lo social influyen para la
Es importante tomar en cuenta que este autor considera que la <C(ln<lim('cii;n de los conocimientos tempranos: el medio y las relaciones
intervención precoz es apropiada cn ambas situaciones.
Definimos el medio como el estímulo social y material con el que
conta:rá el sujeto para realizar sus interacciones. A partir de la construc-
IV. Aprendizajes tempranos y contexto social de esquemas de asimilación y acomodación, estos objetos Se to-
significativos.

Desde una perspectiva psicogenética abordaremos el lugar que "Como lo ha se/la lado Re/lchlin, por su parte, pareciera
ocupa el medio (físico y social) en las construcciones cognitivas. Acen- que 1111 medio apto para volverse /In objeto de COIlO-
tuarnos que la equilibración progresiva de los esquemas de acción cimiento no puede ser aleatorio, SillO que tiene que
constituye un mecanismo integrador de factores biológicos, físicos y presentar /lna ciena organización y ser previsible, De no
sociales, ser así, impondría permanentes tentativas de acomodación
· 190 J. TALLlS . G. TALLlS INT. OPORTUNA EN NIÑOS CON RIESGO AMBIENTAL 191

destinadas todas al fracaso, puesto que no sería posible, Parmelee (1976), fija en el noveno mes el momento en que se pue-
por definición, ninguna integración generalizable". de determinar qué niño viene con riesgo acumulado y cuál no, pero no es
(Castorina, 1984)* posible predecir a esta edad rendimientos posteriores.
Si bien el retraso de desarrollo puede afectar todas las áreas, el
Si la ecología ambiental es variable o escasa, disminuyen las posi- impacto mayor se hará sentir en el lenguaje y en los alcances intelectuales,
bilidades de equilibración. La ausencia de juguetes, de objetos que esti- por lo cual suelen persistir retardos mentales leves con interferencia en
mulen la acción, así como el no mantenimiento de personas constantes, los aprendizajes escolares. Por ejemplo, Gasmuri y col. (1979), encuentran
es un medio no facilitador para el conocimiento del niño. en Chile un 26% de retrasos leves en la población escolar de estratos bajos,
Castorina (1984) cita a Lautrey, quien clasifica los medios por su en comparación con un 1% en grupos altos y un 4 % en los medios.
regularidad, y por la posibilidad de equilibraciÓn. Concluye que un medio Debemos insistir en que los tests clásicos de medición pueden ubicar
flexible es el más favorable. erróneamente como deficientes intelectuales a niños de sectores des-
En cuanto a la organización familiar, citando al mismo autor, favorecidos por una serie de características que describimos en otra obra
Castorina (1984) dice: "Ias reglas de comportamiento y los hábitos intro- (Tallís y Soprano, 199 1) por lo cual debemos ser cautos en su interpreta-
ducen regularidades que permiten al niño hacer previsiones sobre su ción y emplear métodos de evaluación alternativos para evitar segrega-
propia acción." ciones escolares que acentúen aún más las diferencias.
Desde la familia, la posibilidad de presionar y determinar las Del mismo modo que los resultados de ladeprivación socioambien-
conductas de los miembros es mayor cuanto menor es la gama de alter- tal se harán evidentes en su totalidad en el largo plazo, las acciones de
nativas de sobrevivencias de los mismos (Jelin y Feijoó, 1989). Las intervención oportuna deberán ser evaluadas si alcanzan efectividad en
consecuencias para los aprendizajes resultan negativas cuando un el momento de la inserción escolar, pero sin perder de vista el criterio de
sujeto es dominante y el otro dominado. La asimetría resultante dispone prevención -que implica un comienzo temprano-, y los criterios de
a que esa interacción no sea fructífera. La aceptación pasiva no implica continuidad y diversidad, que significan acciones simultáneas en vatios
un mayor equilibrio en la adaptación o en la organización de esquemas frentes con permanencia de las mismas durante un tiempo prolongado.
o estructuras en el niño (Gilly y col., 1988). Justamente el criterio 'de complejidad de las acciones, hace prefe-
rible que en este campo utilicemos la denominación de intervención
opo!1tma, pues la estimulación es una heITamienta más al servicio de la
V. La intervención oportuna prevención del retardo.
Es obvio que la mayOlía de los niños provenientes de poblaciones
en silUación de pobreza no tienen trastomos de desarrollo, y justamente
Si bien las discusiones no están cerradas, y hay autores como la intervención oportuna debe movilizar aquellos recursos que espontá-
Wach (1971) que encuentran ya en edades tempranas desviaciones en neamente tienen aquellas familias que llevan a buen témlino el crecimiento
el desarrollo de niños con riesgo socioambiental, la mayOlía de los se- y desarrollo de sus hijos aun en situaciones adversas, a los que se debe
guimientos coinciden en señalar que estas deficiencias no se evidencian sumar el apoyo social que poseen los organismos de salud y educación,
de inmediato (Roy y col., 1985), y se instalan en fonna progresiva ma- a pesar de la insuficiencia de los mismos.
nifestándose con mayor claridad en la etapa escolar. Rutter (1982), a partir de su análisis de la multicasualidad e interac-
ción de los sistemas, plantea distintas dificultades para planear acciones
de prevención en los niños con riesgo psicosocial:
* El subrayado corresponde a la cita de Reuchlin tomada por este autor.
192 J. TALLlS - G. TALLlS INT. OPORTUNA EN NIÑOS CON RIESGO AMBIENTAL 193

1. Es complejo determinar por dónde comenzar las acciones cuando es peso (Ventura, 1977) y sus hijos están más expuestos a factores de riesgo
diffcil discernir la modalidad del impacto de los diversos factores en social. Se citan mayores índices de maltrato infantil (Lauer y col., 1974),
cada niño en particular. abandonos, trastornos psicológicos y problemas educativos (Einsenberg,
2. La etiología multifactorial de la mayoría de los desórdenes psi- 1962). A su vez, las madres adolescentes tienen mayor incidencia de
cosociales. inestabilidad matrimonial, interrupción de su escolaridad, problemas
3. El "quién" (por qué sí a un niño y a otro no, cuando el medio es el económicos y dificultad en la crianza de sus hijos (Furstenberg, [976).
y
mismo) el "cuánto" de los factores adversos han influido. Field ([ 982) relata tres experiencias efectuadas COn niño~ de madres
4. Si las acciones planeadas están realmente dirigidas y llegarán al adolescentes que nos permiten entender el sentido de la amplitud que
blanco destinado. debe tener la intervención oportuna. En uno de los trabajos, las madres
Este autor considera que los problemas de prevención primaria sólo recibieron mostración de las capacidades de sus bebés durante la
pasan por un hiato entre la identificación de un factor de riesgo y el toma del Test de Brazelton. Estos niños, pretérminos de pocos meses de
conocimiento de cómo reducirl Cl o eliminarlo; que las mejoras en lo vida, tenían al cabo de un año mejores puntajes de desarrollo que un grupo
inmediato rarameJ1le tienen beneficios a largo plazo; si bien una medida de control. En otra experiencia, los hijos de madres adolescentes de bajo
puede ser efectiva hay dificultades en asegurar que llegue a la población nivel social fueron visitados en su hogar cada dos semanas, y entrena-
que la necesita; que a pesar de que se puede y se debe intervenir a dos en ejercicios apropiados para la edad por sus madres, quienes recibían
cualquier edad, los patrones de desventaja establecidos tienden a pautas de desarrollo. Al cabo de un año, estos niños tuvieron mejores
persistir, por lo cual se debe comenzar lo más tempranamente posible; y desarrollos en peso y en talla que el grupo control, como asimismo mejores
por último, se debe determinar en cada programa la relación costal rendimientos en las escalas mentales. Por otra parte, eran emocionalmente
beneficio. más estables, con adecuadas relaciones madrelhijo.
Ya habíamos mencionado la necesidad de respetar las pautas Pero el impacto mayor en la vida de las madres se obtuvo en la
culturales y con ello la modalidad de crianza cuando se planifican in- tercera experiencia, cuando a las visitas domiciliarias se sumó la asistencia
tervenciones. Para ejemplificar con un extremo, Eisenberg (1981) citaa las del niño a una guardería durante 20 horas semanales, lo que les permitía
madres de una tribu del este de Africa, los Digo, quienes comienzan el a las madres recibir un trabajo pago e incentivos para continuar sus
adiestramiento esfinteriano de sus hijos a las dos semanas de vida. estudios. Al año, los niños de este tercer grupo tenían percentilos de
colocándolos en posición adecuada entre· sus piernas. El 90% de estas crecimiento y puntajes de rendimiento mental mayores que los del grupo
madres comunicaron éxitos entre los 4 y 6 meses de edad. Sin llegar a estas con visitas domiciliarias únicamente. Pero lo que posiblemente sea su
excepciones notables, los grupos culturales tienen modelos de crianza mayor impacto en el largo plazo fue que las adolescentes ind~'¡das en el
que a los ojos de nuestra educación pueden ser insuficientes o alterados, último programa permanecieron en mayor número en las escuelas, y tu-
pero que es necesario respetar para tener éxito con las intervenciones. vieron menores recurrencias de otros embarazos.
El sentido amplio que le damos a la intervención oportuna implica Ya que citamos los jardines maternales, podemos hacer un comen-
acciones que van más allá de la estimulación aislada. Las madres adeles- tario sobre cómo asistir integralmente a otro grupo de madres de riesgo,
centes son consideradas madres de riesgo, y en las últimas décadas ha las que trabajan. Es grupo de riesgo en cuanto a la relación madrelhijo y
habido un incremento de los partos entre los 14 Y 15 años (Baldwin, 1980). de quien sea la persona encargada de la atención dd niño durante su
En nuestro país, el porcentaje de las madres adolescentes aumentó del ausencia. A falta de cifras locales, en U.s.A. en 1988, elSI % de las muje-
9.8% al 18.8% en las poblaciones de menores recursos. Además de tener res entre 18 y 44 años con recién nacidos menores de un año estaban
mayores complicaciones durante el embarazo y el parto, estas niñas! incorporadas al trabajo. Para las mujeres de bajos recursos, la necesidad
madres socialmente desventajadas tienen alta incidencia de niños de bajo de retomar al trabajo rápidamente es mayor, y menor la posibilidad de un
194 J. TALLIS - G. TALLIS
INT. OPORTUNA EN NiÑOS CON RIESGO AMBIENTAL i95

adecuado cuidado de su bebé, habitualmente confiado a manos inexper-


tas y a figuras cambiantes. comprometiendo en lo posible a padres y hermanos, pues en definitiva
Son numerosos los trabajos sobre los beneficios y riesgos de los se trata de lograr un cambio de actitu~ del núcleo familiar en el cuidado
jardines maternales, y una buena actualización sobre su influencia en la del niño".
relación madrefhijo, y en el desarrollo psicológico y social puede encon- El énfasis selÍa colocar la estimulación como parte de las activida-
trarse en el trabajo de Dilks (1991). Pero hay una realidad social que des del control integral del niño, para contrarrestar los efectos adversos
determina la necesidad de los mismos en la intervención oportuna a niños socioambientales.
de madres que deben emplearse rápidamente y no tienen posibilidades Otros grupos de trabajo emplean distintas modalidades. En nues-
adecuadas de alternativas de crianza. En este sentido, hay consenso en tro hospital (C. Durand), con mayor experiencia en riesgo biológico que
que la calidad de la prestación brindada determina el impacto sobre el social, el trabajo se centra fundamentalmente en lo vincular, y no se utilizan
desarrollo, en función de la estabilidad del personal a cuidado del bebé, guías estandarizadas para señalar ejercitaciones, sino que se induce que
la cantidad de intercambios ofrecidos y la posibilidad de trabajar al mismo las modalidades de las mismas suf.ian más espontáneamente creadas
tiempo con las madres para fortalecer el vínculo con sus hijos en el retorno desde la madre en los descubrimientos paulatinos de las potencialidades
al hogar. y requerimientos de sus hijos.
Son múltiples los programas inslaurados en el mundo de interven- Pero de acuerdo a lo señalado a lo largo de este capítulo, ninguna
ción oportuna en riesgo socioambiental, y muy variadas las modalidades modalidad de estimulación es suficiente si no se acompaña de otras inter-
de l¡ls acciones planeadas y el tipo específico de estimulación implemen- venciones que pennitan atenuar las dificultades de crianza que surgen
tado. Desde el Head Stard de U.S.A. de 1960 hasta nuestros días, las como consecuencia del medio social.
divergencias se han centrado no sólo en las acciones sino en cuándo Bennet y Guralnik (1991), cuyo trabajo comentaremos en extenso
comenzarlas y hasta qué edad continuarlas. En Latinoamérica debemos en el .capítulo de evaluación, señalan que en riesgo social la intensidad
citar las experiencias chilenas (Montcnegro y col., 1977), las colombianas de los programas (cantidad y amplitud del contacto con el niño y su famiiia)
(Suescun y col., 1977) y las de Venezuela (proyecto ARYET). tiene directa relación con los alcances psicointelectuales de las poblacio-
En nuestro país, los trabajos del grupo de la maternidad R. Sardá, nes incluidas en los mismos, y que las acciones deben iniciarse desde el
encabezado por la Dra. E. Roy fueron de referencia para otros centros. Es- nacimiento y extenderse como mínimo hasta la entrada a la escuela, acom-
te grupo pone énfasis en los conu'oles y seguimientos de los niños, en pañándose con servicios de apoyo a los padres que deben ser incorpo-
donde los pediatras deben saber detectar precozmente desviaciones de rados a programas educativos.
desaITollo, y en donde las madres de liesgo reciben indicaciones sobre Creemos que es una necesidad incorporar el concepto de interven-
estimulación de sus hijos. ción oportuna en riesgo socioambiental en profesionales y educadores,
Los fundamentos teóricos del programa, según lo resumen los no sólo por las acciones individuales de prevención que puedan empren-
autores (Roy y col., 1985) se basan en los conocimientos de los reflejos der, sino como parte de la concientización creciente que debe realizarse
y funciones psicológicas del lactante normal y en la teolÍa psicogenética en la población sobre la obligación que nos cabe con un grupo de nuestros
de Piaget. El plan, reproduciendo lo publicado "incluye fundamental- niños con riesgo de tener alteraciones de desarrollo por haber nacido en
mente la ejercitación de los reflejos y funciones psicológicas acompañan- familias marginadas de los planes de desarrollo económico-sociales.
do el curso normal de maduración del SNC. sin forzarlo. Esta ejercitación
no requiere de tiempo extra; se incluye dentro de las tareas rutinarias de
la atención del niño (baño, alimentación, cambio de ropa, etc.). Se realiza
en el hogar, incentivando a la madre como agente estimulador, pero
198 J. TALLlS - G. TALLIS

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internacionalde estimulación psicosocial precoz del lactante y pre-' En los últimos años asistimos a dos fenómenos de alguna manera
escolar, vol. n, Santiago de Chile. contrapuestos: por un lado una gran difusión entre profesionales y po-
blación en general de la estimulación temprana, con demanda creciente
T ALLIS, J. YSOPRANO, A., (1991), Neuropediatría, neuropsicología de atención y formación de recursos humanos; y por otro lado la aparición
y aprendizaje, Ed. Nueva Visión, Bs. As. de cuestionamientos sobre su real eficacia en el pronóstico de los niños
incluidos en distintos programas de esta modalidad terapeútica.
T ALLIS, J. y col., (1991), Dificultades en el aprendizaje escolar, Miño Quienes asistimos al VI Congreso Internacional de Neurología
y Dávila editores, 2da. edición, Bs. As. Infantil. escuchamos con preocupación las palabras introductorias al
Simposio sobre Intervención Temprana, en el que el Dr. Martín !3.ax se
TALLIS, J. Y col., (1993), Retardo mental, Miño y Dávilaed., Bs. As. mostraba escéptico sobre los resultados de esta tarea a largo plazo, y
resumía como "deprimentes" las conclusiones de distintos trabajos eva-
VENTURA, S., (1977), "TeenageChildBearing U. S. 1966-1975", Vital luativos efectuados por varios autores.
Health Stal. 26: 1. Por supuesto que enseguida nos preguntamos qué resultados se
medían, si todo se limita al mayor o menor grado de movilización articu-
WACH, T. D. Y col., (1971), Cognitive Developmelll in Infants of lar de un niño con una parálisis cerebral. Porque el debate sobre efecti-
Different Age Levels and from Enviromental Backrollnd, M. Palmer vidad a su vez tiene dos aristas: quienes exigen resultados de cualquier
Quartely, 17: 285. programa bajo la necesidad de evaluar la relación costolbeneficio, y las
discusiones entre distintos abordajes de 10S.niños con alteraciones en su
WERNER, E. Ycol., (1987), Hawai Children Come ofAge, University desarrollo para determinar cuál es el correcto.
of Hawai press, Honolulu, Hawai. Pero este último debate no ha salido hasta ahora del plano de la
teoría, ya que no existen en nuestro pafs verdaderos trabajos de segui-
WINNICOTT, D. (1972), Realidad y juego, Gedisa, Bs. As.
200 JAIME TALLIS
LA EVALUACION EN ESTIMULACJON TEMPRANA 201

miento que aporten argumentos válidos, y es necesario hacer consciente


que una teoría sola no justifica una inversión sanitaria por más armónica lacióQ combinadas (motoras, cognitivas, lenguaje y sociales) y un tercio
que sea y más difusión que tenga. Sólo una práctica reglada con eva- ponía énfasis principalmente en la terapia física. El 70% de los programas
luaciones sistematizadas podrá sostener una inserci6n de la especialidad asignaban roles a los padres.
en los organismos oficiales e imponer la validez de una línea de trabajo Para evaluar los resultados sobre el desarrollo, el 70% de los auto-
sobre la otra. res utilizaban escalas estandarizadas (Bayley, Denver o Griffith), el resto
El problema del diseño de los trabajos de seguimiento y la evalua- s610 descripciones de exámenes individuales o impresiones subjetivas.
ción de resultados no es sólo de nuestro medio, sino que preocupa en los En el 59% de los trabajos hubo tratamíentos estadísticos de los
últimos años a todos los centros internacionales. datos, cuando éste fue realizado, la efectividad de la estimulación fue
Feny (1981 ),luego de señalar los miles de profesionales de distintas considerada del 48%, pero cuando fue evaluada subjetivamente, los au-
disciplinas empleados en programas de desalTollo o estimulación infantil, tores la consideraban positiva en un 93% de los casos.
señala las deficiencias metodológicas de los estudios realizados: mues- Diversas hipótesis son sugeridas para explicar esta discrepancia:
tras pequeñas, no uso de grupos de control, evaluación de aspectos par- a) Existen progresos que no obtienen significación estadística para
ciales del desarrollo, uso de pIUebas de medición estandarizadas y vin- muestras de escaso tamaño.
culadas pobremente a lo que se quiere medir, seguimientos longitudina- b) Los avances se realizan en áreas no medibles por tests estandarizados
les cortos, no inclusión de variables como nivel mental de los padres, salud (conducta, estilo de respuestas). Por otro lado, puede evaluarse como
emocional y condición socioeconómica. Concluye que si bien la inves- positiva la no ocun·encia de regresiones o complicaciones secundarias.
tigación en animales parece demostrar la influencia de los estímulos so- e) Las mejoras pueden no ser directamente en los handicap iniciales, pero
bre la plasticidad neuronal, esta posibilidad no está demostrada aún en sí en otros aspectos como la alimentación, las convulsiones, etc.
los niños. d) Los progresos se obtienen en la familia y en la relación de la misma con
Simeonsson y col. (1982), luego de fijar una definición amplia de la el niño.
intervención temprana, revisa 27 estudios publicados entre 1975 y 1982, Dado que existen obstáculos éticos para diseños de evaluación
buscando responder a cuál es el campo de trabajo de esta terapéutica y con población control, se sugiere que el método clínico puede ser con-
qué medios se utilizaron para evaluar su efectividad. Señala que mientras siderado como evidencia de efectividad, y que la misma debe ampliarse
los estudios longitudinales mostraron resultados alentadores en los ni- a áreas no medibles como comunicación, temperamento, estilo de con-
ños con riesgo social, éstos son contradictorios en los niños con difi- ducta, afecto, etc.
cultades de origen biológico. El metanálisis de Tirosh y Rabino (1989) se refiere específicamente
Respecto del primer interrogante, comenta que no son claros los a la fisioterapia en niños con parálisis cerebral. Revisan 15 años de pu-
criterios de inclusión de pacientes; las muestras son heterogéneas en blicaciones (1973-1987) buscando efectividad, y sólo hallaron 9 artículos
función del diagnóstico, grado de discapacidad, edad cronológica y men- referidos a la misma evaluando aspectos motores y ortopédicos. De ellos,
tal. El tamaño de la muestra variaba de 2 a 75 casos, las edades de 2 meses 3 trabajos eran metodológicamente correctos; 6 de los 9 artículos consi-
y medio.a 6 años. Con respecto a la intervención misma, podía ser desde deraron útil la fisioterapia precoz, pero los 3 que utilizaron análisis es-
una sesi6n diaria a dos por semana; la duración, de 5 minutos a toda una tadísticos concluían que no era eficaz. Como comen talio final se expresa
mañana, pudiendo prolongarse según los trabajos desde 4 semanas a 2 que na hay una adecuada evaluación, y que existen aspectos metodo-
años. lógicos y éticos no resueltos para la realización de trabajos valederos.
En relación al lugar de realización, podían ser centros especializa- Palmery col. (1988) se refieren también ala fisioterapia, en estecaso
dos, en los domicilios o en ambos; la mitad utilizaba terapias de estimu- :en una patología más uniforme: diplejía espática. Toman 48 niños dividi-
I
LA EV ALUACION EN ESTIMULACION TEMPRANA 203
202 JAIME TALLlS

laborales, etc.
dos en dos grupos: uno de ellos derivado a terapeutas que aplican Castro y Mastropieri (1986) efectúan un metanálisis con 74 estu-
fisioterapia de acuerdo a la metodología Bobath; el otro, estimulado dios de estimulación temprana en diversas patologías instaladas, en tanto
durante 6 meses por los padres en forma natural, y luego otros 6 meses que Sharav y Slomo (1986) lo hacen con 31 trabajos en niños con Síndro-
por profesionales. La evaluación, realizada con escalas objetivas a los 6 me de Down. Ambos metanálisis, aun criticando aspectos metodológicos
y 12 meses, mostró resultados superiores en los niños del segundo grupo. a los cuales ya hicimos referencia, encuentran un impacto discretamente
Esta recuperación del papel de los padres, aun en lugares donde positivo en los niños que fueron incluidos en los programas.
la rehabilitación ha sido manejada clásicamente con criterios de estímulo! Bennett y Guralnik concluyen que la estimulación temprana está
respuesta, ha sido también señalada en una reciente revisión de Bennett lejos de haber logrado demostrar la validez de sus propósito~, y que en
y Guralnick (1991), en referencia a los resultados de la estimulación en el campo de las discapacidades instaladas los mejores efectos se obtienen
niños con riesgo biológico, siendo más alentadores los resultados de los cuanto más temprana es la edad de inicio de las acciones, cuanto mayor
programas que incluían a los padres. Pero quizás lo más interesante para énfasis se logra en la participación de los padres, mejorando la relación
nuestro debate es que no fueron utilizados meramente como continua- con sus hijos, pero, por supuesto, el factor más importante que determina
dores de la labor de los terapeutas -lugar donde habitualmente se los del 50 al 75% de las variaciones en los logros es la gravedad inicial de la
destina-, sino que los objetivos estaban centrados en mejorar la calidad discapacidad.
de la relación madre/hijo. Cuando uno repasa estos trabajos sobre evaluación de eficacia, la
Con referencia a los programas de seguimiento de este grupo de primera pregunta que se formula es qué es lo que realmente debe evaluarse
pacientes, especialmente los prematuros, concluyen que los progran@s como resultado positivo, y por supuesto que la respuesta tiene que ver
con enfoques amplios y que están dirigidos a doble riesgo -biomédico con los objetivos que cada línea de trabajo se plantea como correctos.
y social-, son los que obtienen mejores resultados. Estamos persuadidos de que en nuestro país serían probablemente dis-
La inclusión de la variante social mejora la eficacia, y las planifica- tintos de la mayoría de los analizados anteriormente, pero también lo
ciones modernas se plantean las acciones en el hogar de los niños, algo estamos de que una vez fornmlados estos objetivos, la justificación de
que aún no ha sido tomado en cuenta en los programas de nuestro me- la forma de abord~e no puede limitarse a hermosas y acabadas formula-
dio, pero que consideramos una estrategia valiosa. ciones teóricas, sino que debe ser basada en la contrastación de los re-
Con respecto al análisis de las acciones en los niños con riesgo sultados con los objetivos.
social, los autores citados observan que sólo aquellos que comienzan No nos son ajenas las dificultades de efectuar investigaciones sis-
tempranamente, que incluyen a los padres y se continúan hasta la entrada temáticas en nuestro medio; estamos inmersos en él, especialmente en
a la escuela, persisten en sus efectos benéficos a largo plazo. campo de cruce interdisciplinario. Algunas guías de planificación
En relación a la intervención en la unidad de Terapia Intensiva i.mled,ef ser tomadas de la comunicación de Ellison y Kopp (1985) sobre
Neonatal, tema al cual ya hicimos referencia en otro capítulo, se señala que mv'estlgalciém interdisciplinaria en desarrollo infantil.
las nuevas tendencias se orientan al trabajo con el personal y los padres Dado que gran parte de los profesionales que trabajan en estimu-
para interpretar los estados del preténnino y mejorar la calidad de las la abordan desde un marco psicoanalítico, se reactualiza un viejo
interacciones tempranas. En este sentido, también los aspectos sociales sobre los métodos de investigación de esta disciplina. Al respecto
interfieren el pronóstico. Es citada la experiencia de Brown y col. ( sid,~rarnos interesante reproducir los conceptos de Bleger (1980)
acerca de las dificultades para trabajar con madres desventajadas so<;ial- en un curso realizado en el Hospital de Niños de La Plata.
mente que tienen sus niños intemados durante períodos pf()IOlng"dc1s i:'n,nte a las afIrmaciones de Musso (1980), quien sostenía que el
debido a las dificultades de desplazamiento desde sus casas, la ne,:es:idal :¡análiSIS debía revalidarse en su marco teórico utilizando el mismo
de atender otros hijos, los alojamientos inadecuados, los pr()bl<~m,
204 JAIME TALLIS LA EV ALUACION EN ESTIMULACION TEMPRANA 205

método hipotético-deductivo de las otras ciencias "duras", Bleger ataca relación que se establece entre ellos. Hay que someter a verificación no
la supuesta objetividad del método científico, diciendo que aísla al in- sólo lo que se ve o escucha, sino también lo que se siente; esto trae una
dividuo objeto de estudio, y no puede verificar y controlar la actividad nueva dimensión que es la incorporación de los subjetivo, pero para que
específicamente humana del investigador: la comprensión de los datos ello no implique alejarse totalmente de' la pretendida objetividad del
y resultados de la investigación. Es aquí, sostiene, que el psicoanálisis método científico, es necesario' profundizar y fundamentar lo que se in-
puede ayudar a los métodos avalados por la ciencia, pero éstos no pueden terpreta, lo que se comprende y la operación que tiene lugar durante la
replicarse en esta disciplina que tiene Como pilar fundamental la com- comprensión, a través del desarrollo de formas específicas de validación
prensión. que hagan imposible que otro psicoanalista considere como absurdas las
Plantea como falsas las oposiciones objetividad/subjetividad, ra- interpretaciones realizadás.
cionalidad/irracionalidad, y recuerda que la metodología sólo sirve para Klimosvsky (1980) en su interv~nción en el curso, señalaba que la
dar coherencia en los pasos a seguir por el investigador, pero nunca investigación en psicoanálisis, como en otras ciencias, juega un rol im-
"descubre" por sí. Esto es un acto subjetivo, por 10 cual amputar al sujeto portante para los descubrimientos, y que en el contexto de la justificación,
sólo brindana una ilusión de objetividad, "la metodología de las ciencias verificación y sostenimiento teórico, es necesario recurrir a un método
de la naturaleza sólo resulta exitosa en la verificación, pero no puede decir que ponga a prueba sus resultados.
nada sobre el descublimiento". También considera elTóneo confundir el Una parte de nuestras hipótesis en la labor cotidiana a menudo no
hecho de tomar cama objeto de estudio los "fenómenos irracionales" co- es construida sobre bases científicas sino impregnada de ideología, pero
mo el inconsciente, con el hecho de que el conocimiento que se adquiera justamente nuestras hipótesis necesitan ser velificadas y contrastadas,
sea irracional. ser consideradas como transitorias sin descartar que alguna vez las po-
. Formular que el método clásico no puede dar respuestas cen'adas damos cambiar, pese a la fuerza con que en la actualidad se nos presenta .
a la investigación psicoanalítica no implica que ésta no deba desarrollar Cuando más de una línea teólica se adjudica a priori ser la conecta
sus propias bases de trabajo, y es criticable la indiferencia de estos profe- para explicar hechos y obtener resultados -y esto sucede en estimulación
sionales a cualquier tipo de metodología. temprana- sólo los trabajos de investigación COlTectamente emprendi-
Bleger cita a Freud, quien en "Análisis tenninable o interminable" dos. con las dificultades y especificidades que tiene el campo, que per-
pone énfasis en la investigación y no en la eficacia terapéutica, para cliticar mitan evaluar las prácticas cotidianas, darán las respuestas adecuadas y
a los psicoanalistas que sólo jerarquizan su carácter clínico y no aplican asignarán las cuotas de verdades, nunca absolutas ni permanentes, só-
sus posibilidades como instrumento de investigación. En esto influen- lo parciales y transitorias, ya que el conocimiento siempre es pm'cial y
cimian tendencias dogmáticas que transformanan los conceptos de va- provisorio y debe renovarse frente a las nuevas experiencias de la propia
lor operativo en entelequias y que la institucionalización llevó más a una disciplina y de las otras ciencias.
defensa doctrinaria que a la formación de investigadores. Creemos que ha llegado la hora de que los profesionales de es-
Revertir este concepto de cosa inefutable creará la necesidad de timulación temprana, que deben tener en su fOlmación elementos de
comprobación de la teona, "toda investigación lleva implícita la negación metodología científica, comiencen a crear sus propios callÚnos de inves-
como forma de superación". En este sentido, los trabajos deben separar tigación que les pennitan obtener lugm'es crecientes de inserción en salud
claramente, a través del método, la eficacia terapéutica de la verificación y educación, ya que cuando una teoría resiste los embates de la experien-
teórica. cia sucesiva, comienza a ser considerada con respeto por toda la comu-
Dadas las caractensticas específicas del psicoanálisis, los obser- nidad científica.
vables no son claros, y las definiciones imprecisas. Es muy difícil descri-
bir lo que ocurre en una sesión centrada en el paciente, el terapeuta y la
1
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Q¡lección Enfoques en educación

- Psicología genética. J. A. Castorina)' col.


- Escuela, producción y familia campesina. C. Flood y col.
- Dificultades en el aprendiz'\ie escolar. J. Tallis y col.
- Orientación vocacional. Marilla Miiller
~ La escuela como investigación. Francesco TOllllCci

- Universidad y profesiones. Emilo Tellti y Víctor Gómez


- Nosotros, educadores. Jorge Fasee )' Rolando Martiñá
- Problemas en psicología genética. 1. A. Castorina y col.
- Regionalización del curriculum y capacitación docente. E Lllcarelli
- Hacia '-lna didáctica de lo grupal. Marta SOllto
- Directores y direcciones ... de escuela J. Fasce y col.

Serie Flacso (Facultad Latinoamericana de Ciencias Sociales)

- El proyecto educativo autoritario. Tedesco, Braslavs")' y Carciofi


- La discriminación educativa en la Argentina. Cecilia Braslavsky
- Conducción educativa y calidad de la enseñanza media - Alternativas Pedagógicas. Sujetos y prospectivas
e. Braslavsky y G. Tiramonti de la educación Latinoamericana
- Adolescentes entre la escuela y el trabajo. Silvia Llol1wvatle Adrianll Puiggrós y Marce/a Gómez (comp.)
- Cuniculum presente. Ciencia ausente. Autores: Gómez, Zeme/man, Puiggrós, Cueva, Perazza, Carl/,
Normas. teorías y críticas.Tomo 1 Rodríguez, De la Peña, Tenti, Braslavsky, Buenfil, Pérez,Granja,
Frigerio, Braslavsky, Entel, Liendro, Lanza José, Vázquez, Ruiz.
- Cuniculum presente. Ciencia ausente. - Escuela. conocimiento y cuniculum. Ensayos críticos
La enseñanza de la Biología en la Argentina de hoy. Tomo TI Tamaz Tadeu Da Silva
Elizabeth Liendro. con la colaboración de Laura FUl1lagalli
- Cuniculum presente. Cieneia ausente.
La enseñanza de la Historia en la Argentina de hoy.Tomo lll. Colección Psicopedagogía y Aprendiz.a~e
Hilda Lanza y Silvia Finocchio
- Cuniculum presente. Cieneia ausente. Tomo IV. - Interactuar y conocer
El modelo didáctico de la Educación Física escolar Anne-Nelly Perret-ClemlOnt y Mic/¡el Nicolet (comp.)
y la formación docente. A. Aisenstein - La lengua escrita en la escuela
- La formación de profesores. Impacto, pasado y presente GueL/er, Gmnfeld, Kosiner
e. Braslavsky y col.
- Poder económico, ideología y educación. Pablo Gentili
- ¿Es posible concertar las políticas edueativas? Cuadernos Flacso (Facultad Latinoamericana de Ciencias Sociales)
FlacsolFundación ConcretarlFlllldación FordlOrealclUnesco
- Escuela y conocimiento. Alicia Entel
- La escuela pública. e.BraslavsJ..:y y N. Krawczyk
Colección Educación, crítica & debate - Analfabetismo y analfabetos en Argentina. Silvia Llomovalte
Coedición con el Instituto de Investigaciones en Ciencias de la - ¿Hacia dónde va la burocracia educativa? Gil/emlina Tiramonti
Educación, de la Universidad de Buenos Aires

- Maestros: Formación. práctica y transformación escolar Colección Polúicas públicas


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Autores: Lerena, Tenti, Gimeno Sacristán, Carriza/es, - El Estado benefactor. Un paradigma en crisis.
Popkewitz, Batallán, Barrow, Vare/a. Giroux. {suani, Lo Vuolo y Tenti
- Psicología educacional. Experiencia de trabajo en talleres de - La Reforma Previsional Argentina. Opciones y riesgos
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Ovide Menin (comp.) - La mano izquierda del Estado. La asistencia social
Autores: Menin, Bixio, Boggino, Altvarg, Bloj, según los beneficiarios. Útmí, Golbe/1 y Tentí .
Digrazia, Kahan, Penecino, Sánchez. - Universidad y empresa.
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- Durkheim y la educación. lean-C/aude Filloux

Davis, Krotsch, Musto, Rouban, Tenti.


- La nueva oscuridad de la política social. Del Estado populista
Historia de la Educación Iberoamericana. Tomo I
al neoconservador. Lo Vu% )' Barbeito A. Plliggrós y C. Lozano (comp.)
- Nos los representantes. Crítica a los fundamentos del
sistema representativo. R. Gargarella
Revista Propuesta educativa, Ilros. 5, 6, 7, 8, 9, 10, 11

Revista Hacer escuela, nros. 10 y 11


Colección Retardo mental y educación especia/
Revista del Instituto de investigaciones en Ciencias de la Educa-
- Retardo mental. Apuntes sobre la deficiencia mental. 1. Tallis )' col. ción, nros. 2, 3 , 4 Y 5.
. Estimulación temprana e intervención oportuna. l. Tallis)' col.
Ruralia. Revista Argentina de estudios agrarios de la Flacso
(Facultad Latinoamericana de Ciencias Sociales) nro. 4
Serie Educación Internacional del Instituto Paulo Freire

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Freire, Sirvent, Gadotti, Hernández, Fischman
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Colección Aprendizaje y subjetividad

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dialógica al estudio de la alfabetización. Ramírez Garrido

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