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Unidad 5.

Toxicología de herbicidas

1. Introducción

En las siguientes páginas encontrará la información básica sobre algunos de los


herbicidas más comúnmente utilizados: paraquat, diquat, herbicidas clorofenoxi,
propanil y glifosato; y una tabla final que condensa información clínica sobre otros
herbicidas de uso reciente o menos frecuente.

2. Herbicidas bipiridilos

Los bipiridilos son herbicidas sólidos, insípidos e inodoros y muy solubles en agua.
Dentro de este grupo se consideran el paraquat y el diquat. En su forma líquida, el
paraquat se utiliza como herbicida de contacto para destruir las partes verdes de las
plantas en presencia de la luz solar. El uso más frecuente del diquat es como herbicida
acuático.

2.1- Estructura química:

Figura 5.1. Estructura molecular de los herbicidas bipiridilos

2.2- Paraquat

GENERALIDADES
El paraquat es un herbicida categorizado por IPCS/OMS como Clase II con una DL50

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oral aguda en la rata de 100 mg/kg. Considerando que se presenta en concentraciones


20%–27%, en un sorbo (20 ml) se puede alcanzar una dosis letal.

Para evitar el uso inadvertido o con fines suicidas de los productos con paraquat, se les
adicionan sustancias de olor nauseabundo, eméticos y colorantes (p. ej., azul o verde)
para diferenciarlo de productos caseros o bebidas comunes.

Si bien se han descrito casos de intoxicación por vía cutánea, conjuntival y parenteral,
con mayor frecuencia se reportan las intoxicaciones debidas a su ingesta, sobre todo de
tipo intencional suicida.

La ingestión de paraquat es una intoxicación con una elevada mortalidad (60%–70%).


No hay antídoto para su tratamiento y existen aún controversias en cuanto a la eficacia
de los tratamientos planteados hasta el momento.

ALGUNOS NOMBRES COMERCIALES DEL PARAQUAT

Gramoxone®, Gramuron®, Herbaxone®, Pillarxone®, Radex D®, Gramonol®,


Gramocil®, Cyclone®, Speeder®, Katalon®, Uniquat®.

Los preparados comerciales del paraquat vienen formulados en concentraciones


variables y se le agregan anticorrosivos y agentes surfactantes. La mayoría de
las formulaciones tienen un color verde o azul y pueden contener un emético. El
paraquat puede estar asociado a diquat en formulaciones líquidas o granuladas.

TOXICOCINÉTICA

La absorción de paraquat por inhalación, a través del contacto con ojos y la piel intacta
es mínima. Debido a su corrosividad, el paraquat puede ulcerar tanto la piel como la
mucosa respiratoria, pudiéndose incrementar su absorción por estas vías. Igual sucede
si la piel presenta abrasiones o heridas. Varios casos de intoxicación por vía cutánea se
reportan en la literatura.

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La ingestión de paraquat es la principal vía de ingreso al organismo. La absorción


gastrointestinal se produce principalmente en el intestino delgado. Es rápida e
incompleta, por lo general menos del 30%. En caso de compromiso de la mucosa
gastrointestinal, la absorción es mayor.

El pico plasmático ocurre a las 2 horas de la ingesta. Estudios en casos humanos


estiman un volumen de distribución de 1,2 a 2,75 l /kg.

El paraquat se distribuye a muchos órganos como riñones, hígado, músculos estriados


y en particular en los pulmones. El paraquat tiene predilección por aquellos tejidos con
mayor saturación de oxígeno como son los de los pulmones, el hígado y los riñones.

Tanto el paraquat como el diquat son poco metabolizados. La mayoría del paraquat
absorbido es eliminado como tal en las primeras 12 a 24 horas de la ingesta, por
filtración glomerular y secreción tubular renal. La redistribución de paraquat desde los
pulmones y músculos a la circulación sanguínea es lenta, con una vida media de hasta
3 o 4 días. Esto se ha explicado además por otros factores como la aparición de
insuficiencia renal. Esto explica la presencia de pequeñas cantidades de paraquat en
orina por varios días luego de la ingesta.

TOXICODINAMIA

El paraquat es una sustancia clasificada como corrosiva por lo que causa daño por
contacto con la piel y las mucosas.

La capacidad de crear un ciclo redox, generar radicales libres y producir una cascada
de peroxidación lipídica de las membranas, es el mecanismo básico de toxicidad
sistémica del paraquat. Este proceso se produce en todo el organismo, se observa a
nivel hepático, renal y cardiovascular, pero es particularmente importante a nivel
pulmonar por la alta concentración de oxígeno.

En segundo lugar, la generación de radicales libres fomentan la migración de células


inflamatorias (macrófagos, neutrófilos, leucocitos) y mediadores de la inflamación (p. ej.,

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citoquinas, interleucinas, factores estimuladores del colágeno) causando un proceso


inflamatorio.

En el tejido pulmonar, se produce una alveolitis intra-alveolar, producida por los


radicales superóxidos y peróxidos. Este cuadro puede llevar a un edema pulmonar y a
insuficiencia respiratoria. Posteriormente, el proceso inflamatorio lleva a la producción
de pro-fibroblastos y de leucocitos polimorfo nucleares, seguido de la proliferación de
fibroblastos, iniciando un proceso de cicatrización que constituye la fibrosis intra-alveolar
e inter-alveolar.

Esta fibrosis pulmonar produce severa insuficiencia respiratoria, causa principal de la


muerte. En los casos que no son fulminantes, la fibrosis pulmonar se presenta en una a
dos semanas.

El mecanismo de acción del diquat parece ser similar, excepto en sus efectos sobre los
pulmones, que son mucho menos severos.

DIAGNÓSTICO DE LA INTOXICACIÓN AGUDA

El diagnóstico se basa primordialmente en los siguientes pilares:


1. Historia de ingesta de paraquat o herbicida o “mata yuyos”. Siempre sospecharlo
ante la ingesta de un herbicida azul o verde, o si se encuentra coloración azulada
o verdosa en orofaringe.
2. Ardor en la mucosa oral y odinofagia, y/o lesiones cáusticas en boca y faringe.
3. Pruebas de laboratorio positivas.

CUADRO CLÍNICO

1. SÍNTOMAS LOCALES POR CONTACTO

o El paraquat es corrosivo y, particularmente en su forma concentrada, puede


lesionar los tejidos con los que se pone en contacto. El contacto prolongado

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con la piel produce ampollas y ulceraciones con la subsecuente absorción de


la sustancia en cantidades que, potencialmente, podrían causar síntomas de
intoxicación sistémica.
o La inhalación puede irritar las vías respiratorias superiores y producir
sangrado nasal.
o El contacto con los ojos causa conjuntivitis y si no se retira de inmediato,
puede causar ulcera de córnea.

2. SÍNTOMAS SISTÉMICOS

Como ya fue mencionado, los síntomas por absorción sistémica ocurren con mayor
frecuencia y gravedad ante la ingestión, pero pueden observarse en exposiciones
cutáneas intensas o prolongadas. El paraquat tiene efectos muy severos sobre el tracto
gastrointestinal, los riñones, el hígado, el corazón y los pulmones. En forma típica se
pueden identificar tres fases clínicas:
 Primera fase: se observa inflamación, edema de las mucosas, hasta ulceración,
de la boca, faringe, esófago, estómago e intestino con síntomas como vómitos
reiterados, ardor y dolor orofaríngeo, retroesternal, epigástrico y abdominal;
disfagia, sialorrea, diarrea y hemorragia digestiva.
En ocasiones, puede encontrarse enfisema subcutáneo secundario a perforación
esofágica. Puede presentarse pancreatitis, con intenso dolor abdominal.
Estas manifestaciones tempranas no siempre son inmediatas, sino que pueden
aparecer en las primeras 24 horas.
 Segunda fase: el daño hepático y de los túbulos renales proximales, el miocardio
y el músculo esquelético. Aparece a las 24–48 horas y se manifiesta por cuadros
de insuficiencia hepática, renal y cardíaca.
El deterioro de la función renal puede jugar un papel importante en el resultado
final de la intoxicación, aunque la muerte se asocia con mayor frecuencia a la
insuficiencia respiratoria. La lesión renal se refleja en proteinuria, hematuria,
elevación de la urea y la creatinina. La oliguria o anuria indican necrosis tubular
aguda.

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La lesión hepática puede ser lo suficientemente severa como para causar


ictericia, aunque la hepatotoxicidad raramente es un determinante del resultado
final de la intoxicación.
 Tercera fase o de lesión pulmonar: generalmente se evidencia después de 2 a
14 días de la ingestión del tóxico, aunque en algunos casos el edema pulmonar
se ha presentado solo unas horas después de la exposición. Los espacios
alveolares son infiltrados por hemorragia, líquidos y leucocitos, después de lo
cual hay una rápida proliferación de fibroblastos.
La alteración de los gases arteriales precede la sintomatología pulmonar. Se
presenta, progresivamente: tos, disnea y taquipnea, hasta 14 días después de la
exposición. La disnea es la manifestación clínica más temprana de la lesión
pulmonar por paraquat. La disnea severa y la cianosis progresiva reflejan el
deterioro del intercambio gaseoso en el pulmón. La muerte sobreviene como
consecuencia de un severo deterioro del intercambio gaseoso que produce
anoxemia y anoxia tisular.

La dosis ingerida se correlaciona con la gravedad de la intoxicación, como se muestra


en la Tabla 5.1.

Tabla 5.1. Manifestaciones clínicas y relación con dosis ingerida y pronóstico.


Dosis Efecto y pronóstico
Cantidad de Volumen, ml
tóxico, de paraquat al
mg/kg peso 20%
corporal
<20 7,5 1. Intoxicación leve
2. Manifestaciones gastrointestinales (vómito y
diarrea)
3. Alteración transitoria de las pruebas funcionales
respiratorias
4. Es posible la recuperación

20 – 40 7,5 – 15,0 1. Intoxicación moderada a severa


2. Sintomatología gastrointestinal, fallo renal,
alteración hepática y afectación pulmonar
3. Muerte en 2 a 3 semanas por fibrosis pulmonar

>40 7,5 – 15,0 1. Intoxicación aguda fulminante

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2. Manifestaciones gastrointestinales (ulceraciones


bucofaríngeas, perforación esofágica con
mediastinitis, vómito, diarrea)
3. Fallo multiorgánico
4. Coma y convulsiones
5. Muerte en un lapso de 1 a 7 días

Información basada en Roberts (2015)

PRUEBAS DE LABORATORIO
Los exámenes de laboratorio para confirmar el diagnóstico son la dosificación de
paraquat en sangre y la prueba colorimétrica.

 Dosificación de paraquat en sangre:

Es posible medir el paraquat y el diquat en sangre y orina utilizando espectrofotometría,


cromatografía gas-líquido y radioinmunoensayo, los cuales requieren una
infraestructura que no siempre está disponible en la urgencia o, se encuentra en
hospitales o laboratorios con alta tecnología.
Se cuenta con varios nomogramas que relacionan la concentración plasmática de
paraquat, el tiempo transcurrido desde la ingesta y el porcentaje de sobrevida en las
primeras 6 a 20 horas.
Puede esquematizarse que bajos porcentajes de sobrevida se asocian a:
2,0 mg/l a las 4 horas
0,9 mg/l a las 6 horas
0,10 mg/l a las 24 horas

 Prueba de ditionito

Es una prueba cualitativa, colorimétrica, sencilla, rápida, que se realiza en orina.


Consiste en agregar a 5 cc de orina 0,1 g de bicarbonato de sodio para alcalinizar la
muestra y 0,1 g de ditionito (hidrosulfito de sodio). Si en la orina hay paraquat, aparecerá
casi de inmediato una coloración azul cuya intensidad depende de la concentración.
El límite de detección de la prueba es de 1 µg/ml. Debido a su baja sensibilidad, un
resultado negativo no es concluyente y requerirá un análisis más confiable.

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La prueba de ditionito positiva en las primeras 24 horas puede orientar sobre la gravedad
de la intoxicación, aunque una clara correlación clínica no ha sido establecida.

Cuando es positivo, la prueba repetida en forma secuencial puede orientar el


seguimiento hasta que el resultado sea negativo. Concentraciones de paraquat por
debajo de 1 mg por litro (sin cambio de color o cambio a un azul pálido) se asocian con
sobrevivencia, mientras que un color azul intenso u oscuro pronostica un desenlace
fatal.

Según otros autores, el tiempo que demora en negativizarse una prueba de ditionito en
orina es un marcador para predecir mortalidad y/o falla orgánica. Una negativización
mayor a 34 horas plantea mayor mortalidad con una sensibilidad y especificidad del
71,4% y 75,0%, respectivamente.

 Estudios para valorar la gravedad de la intoxicación

Los siguientes 5 estudios deben solicitarse en forma seriada para el seguimiento


evolutivo y valoración de la gravedad de la intoxicación:
I. La creatinina y su tasa de aumento en las primeras 24 horas se ha considerado
un marcador de mal pronóstico.
II. La funcionalidad hepática con dosificación de bilirrubinas y transaminasas
permite detectar el daño hepático en la segunda fase de la intoxicación. El daño
hepático se manifiesta con cifras elevadas de la bilirrubina sérica total, las
aspartato aminotransferasas (AST), las alanino-aminotransferasas (ALT), las
fosfatasas alcalinas y el tiempo de protrombina.
III. La gasometría arterial permite detectar precozmente la alteración de la función
pulmonar y valorará el equilibrio ácido-base.
IV. La radiografía de tórax en la fase inicial puede ser normal o bien presentar
infiltrados irregulares. En etapas posteriores, puede observarse una mayor
opacidad de los campos pulmonares. El daño pulmonar temprano se considera
de mal pronóstico.
V. ECG para valorar el daño miocárdico.

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En la evolución, la tomografía pulmonar de alta resolución puede detectar signos de


fibrosis pulmonar en forma precoz. Alteraciones funcionales pueden detectarse
tempranamente con pruebas de función pulmonar, aunque este estudio se reserva para
el seguimiento de la función pulmonar de los pacientes que sobreviven.

TRATAMIENTO
 General

El tratamiento de la intoxicación aguda debe apuntar a calmar el dolor, mantener el


equilibrio hidroelectrolítico, detener la absorción, aumentar la eliminación y evitar la
progresión del daño parenquimatoso, particularmente a nivel pulmonar.

Las medidas de soporte de funciones vitales se describen en detalle en la Unidad 3.

Se considera importante en la intoxicación por paraquat evitar la administración de


oxígeno de inicio, a menos que el paciente presente franca hipoxia. Se ha planteado
experimentalmente que la administración de oxígeno empeora la toxicidad de paraquat.
Puede ser necesario administrar analgésicos mayores.

 Rescate o descontaminación digestiva (aspectos específicos del paraquat)

Las técnicas para una correcta descontaminación según la vía de ingreso se describen
en detalle en la Unidad 3.

Una característica particular de esta intoxicación es que, a pesar de la causticidad del


producto, se indica el aspirado- lavado gástrico, porque su indicación inmediata aumenta
la probabilidad de éxito terapéutico. Su efectividad es mayor en las primeras 2 horas. La
técnica debe desarrollarse con extrema precaución para evitar mayor daño de la vía
digestiva.

Otra característica especifica de esta intoxicación es que además del carbón activado
como adsorbente (en dosis habituales), se puede usar también tierra de Fuller

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(montmorillonita cálcica) 10%–20% en suspensión acuosa en dosis de 10 g en adultos


o 2 g/kg en niños. Este adsorbente es poco disponible en la región.

 Aumentar la excreción del tóxico

Para favorecer la eliminación del tóxico absorbido se debe mantener una diuresis
adecuada de por lo menos 50–60 ml/h. La diuresis forzada no tiene indicación ya que
no muestra efectividad.

La hemoperfusión y en menor grado la hemodiálisis extraen paraquat de la sangre,


aunque su eficacia clínica no se ha demostrado fehacientemente. La decisión de
utilizar una u otra dependerá de la disponibilidad de la técnica en el plazo de mayor
eficacia.

Ambas técnicas de eliminación extrarrenal tienen mayor efectividad en las primeras 6


horas, por lo que su indicación debe ser temprana ante la sospecha de intoxicación
moderada o grave. Esto se debe a que el pico de paraquat en las células pulmonares
es a las 4–5 horas post-ingesta explicando el beneficio de realizar hemoperfusión en
forma temprana, ya que aumenta la eliminación del paraquat y disminuye su
concentración plasmática, limitando la acumulación de paraquat a nivel pulmonar y otros
tejidos.

Si se realiza la hemoperfusión, es imprescindible vigilar la concentración de calcio y el


recuento de plaquetas, reponiéndolos en caso necesario.

 Tratamiento específico

No hay un antídoto específico o tratamiento farmacológico que por sí solo sea efectivo
en la intoxicación por paraquat. Los tratamientos propuestos están dirigidos a interrumpir
el proceso inflamatorio y evitar la progresión del daño pulmonar hacia la fibrosis.

En la actualidad, se plantea un plan terapéutico, en la intoxicación aguda moderada o


severa por paraquat, con fármacos inmunosupresores y antioxidantes asociados.

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Aunque su eficacia no se ha demostrado fehacientemente, la alta mortalidad de estos


casos y la ausencia de alternativas terapéuticas con similar beneficio, hace que este
plan sea el más utilizado cuando se sospecha una intoxicación moderada o grave.

 Ciclofosfamida: 15 mg/kg en 200 ml dextrosa al 5%, pasar en 2 horas cada 24


horas. (total 2 dosis). Si la PaO2 <60 mmHg o leucocitos >3.000/mm3, repetir la
misma dosis una vez.
 Metilprednisolona: 15 mg/kg en 200 ml de dextrosa al 5%, a pasar en 2 horas
cada 24 horas, por 3 dosis totales (3 días) y continuar con dexametasona, 5 mg
IV cada 6 horas, por 1 a 2 semanas.

El tratamiento inmunosupresor se asocia a sustancias antioxidantes. Dentro de ellas, la


N-acetilcisteína, como donante de glutatión, es la utilizada. Si está disponible en forma
oral se administra una dosis carga de 140 mg/kg, seguido de 70 mg/kg cada 4 horas
hasta normalizar la función hepática y renal, manteniendo luego 600 mg cada 6 horas
hasta completar 21 días. Si no tolera la vía oral o existe compromiso digestivo, se
administra por vía endovenosa 150 mg/kg por infusión en 15 minutos, luego 50 mg/kg
en 4 horas y, finalmente, 100 mg/kg en 16 horas.

Otros fármacos, tales como vitamina C, vitamina E, salicilatos, colchicina,


desferroxamina, se han ensayado experimentalmente o en pequeños estudios piloto,
pero no muestran resultados concluyentes.

PRONÓSTICO

No todos los pacientes mueren por la ingesta de paraquat, pero la tasa de mortalidad
es alta. Se han propuesto diversos factores pronósticos, aunque se consideran de mayor
valor los siguientes:
 Desde el punto de vista clínico, la dosis ingerida tal como se describe en la Tabla
5.1.
 La concentración de paraquat en sangre vs el tiempo transcurrido desde la
ingesta.

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 La tasa de aumento de la creatinina en las primeras 24 horas, implica no


solamente la presencia de daño orgánico sino también actúa como coadyuvante
a la disminución de la eliminación de paraquat.

La elevada mortalidad es un factor que contribuye al escaso conocimiento de la


evolución funcional de los casos que sobreviven.

EFECTOS CRÓNICOS

Actualmente hay bastante controversia entre los investigadores acerca de si la


exposición a largo plazo a pequeñas cantidades de bipiridilos, produce efectos
sistémicos. La irritación de la piel, las membranas mucosas y respiratorias expuestas,
la epistaxis, la opacidad corneal y los efectos sobre las uñas son los más comúnmente
observados en los trabajadores expuestos en forma repetida y prolongada.

Se ha observado experimentalmente (y se ha propuesto desde la analogía química con


MPP [1-metil-4-fenilpiridina]) que la exposición crónica a paraquat provoca deterioro de
las neuronas dopaminérgicas y, por lo tanto, se ha postulado que la exposición
prolongada puede asociarse con el desarrollo de enfermedad de Parkinson. En relación
a este efecto, las poblaciones más estudiadas son los trabajadores. La dificultad en
estos estudios epidemiológicos es que la población a estudio está expuesta a más de
un herbicida o plaguicida.

2.3- Diquat

GENERALIDADES
Este herbicida bipiridilo es categorizado por IPCS/OMS como Clase II con una DL50
oral aguda en la rata de 230 a 408 mg/kg. Se presenta generalmente como
concentrado soluble en concentraciones de 20%. Puede presentarse en mezclas con
paraquat.

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ALGUNOS NOMBRES COMERCIALES DEL DIQUAT


Aquacide®, Dextrone®, Ortho Diquat®, Reglone®.

TOXICOCINÉTICA Y TOXICODINAMIA
 El diquat se absorbe en el tracto gastrointestinal, entre un 10% a 20 %, en las
primeras 6 horas de absorbido, según datos experimentales.
 La absorción cutánea es posible si la piel esta inflamada o ulcerada, pero se
considera poco probable que pueda causar toxicidad sistémica por esta vía.
 La principal diferencia con el paraquat es que el diquat no se deposita a nivel de los
neumocitos, por lo que no es esperable el desarrollo de una fibrosis pulmonar.
Algunos estudios muestran su acumulación a nivel renal.
 Tiene una mayor excreción por la bilis en comparación con el paraquat.
 Actúa de forma similar al paraquat, creando un ciclo redox con formación de
radicales libres en forma aguda.

DIAGNÓSTICO DE LA INTOXICACIÓN AGUDA

El diagnóstico se realiza por la noción de exposición, la clínica que presenta el paciente


y la confirmación analítica

CUADRO CLÍNICO

 SÍNTOMAS LOCALES
El diquat tiene efecto corrosivo sobre la piel y las mucosas, por lo que la ingesta o el
contacto con la formulación concentrada pueden causar lesiones severas. Los primeros
síntomas ante la ingesta son: ardor o dolor quemante en la boca, garganta, y dolor
abdominal.

 SÍNTOMAS SISTÉMICOS
Manifestaciones tempranas de la intoxicación incluyen: náuseas, vómitos y diarrea
intensos, a veces sanguinolentos. Se pueden presentar deshidratación, hipotensión
arterial y taquicardia hasta el choque hipovolémico. Son escasos los reportes de esta

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Unidad 5. Toxicología de herbicidas

intoxicación en la última década. Además de los síntomas gastrointestinales, se reportan


síntomas de íleo paralítico, cardiotoxicidad, nefrotoxicidad, coma y convulsiones; se ha
reportado un caso de sangrado intracerebral. No se reportan casos con fibrosis
pulmonar, aunque se han reportado casos con bronconeumonía. Una elevación de
transaminasas hepáticas moderada y de resolución espontánea fue también descrita.

PRUEBAS DE LABORATORIO
 La prueba diagnóstica con ditionito de sodio es también útil para identificar la
presencia de diquat en orina, aunque la experiencia clínica es menor que con
paraquat.
 El diquat en orina produce un color verde. El color verde intenso se ha
postulado como de mal pronóstico.
 Pueden detectarse niveles en suero y orina por técnicas generalmente no
disponibles de urgencia.

TRATAMIENTO
 El tratamiento inicial de la intoxicación por diquat es similar a la intoxicación por
paraquat.
A pesar del efecto corrosivo, las medidas de rescate digestivo deben ser
consideradas en la primera hora post-ingesta.
 Las medidas generales de sostén están mencionadas en la Unidad 3,
destacándose la necesidad de reposición hidroelectrolítica y la analgesia.
 La hemodiálisis o hemoperfusión se indican siempre que haya elementos de
falla renal, como medida de eliminación extrarrenal, no está fehacientemente
demostrada su eficacia, pero puede considerarse en casos severos.
 Debido a la ausencia de daño pulmonar específico, no se plantea el uso de
inmunosupresores. No hay estudios que evalúen la eficacia de fármacos
antioxidantes en la intoxicación por diquat.

SEGUIMIENTO Y PRONÓSTICO
En la Tabla 5.2 se presentan las manifestaciones clínicas y el pronóstico de los
casos de intoxicación de acuerdo a la dosis total ingerida.

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Unidad 5. Toxicología de herbicidas

 Existen datos limitados sobre los niveles de toxicidad en suero. Niveles


séricos mayores a 0,5 mg/ml durante las primeras 24 horas se
asociarían con toxicidad sistémica.

Tabla 5.2 Manifestaciones Clínicas y pronóstico según dosis total ingerida

Dosis (g) Efecto y pronóstico


<1 Intoxicación moderada

 Irritación de las mucosas


 Manifestaciones gastrointestinales (náuseas y vómitos)
 Alteración transitoria de la función renal
 Es posible la recuperación

1 – 12 Intoxicación severa

 Vómitos y diarrea, a veces sanguinolenta


 Ulceraciones orofaríngeas y digestivas
 Insuficiencia renal.
 Posible disfunción de múltiples órganos.
 Recuperación posible en 60% de los casos

>12 Intoxicación fulminante

 Muerte en 1 a 2 días por falla multiorgánica

Fuente: Jones G. et al 2000.

EFECTOS CRÓNICOS
 A pesar de su similitud química con el paraquat, no existen datos hasta la
fecha de que presente efectos a largo plazo, tanto a nivel neurológico como
en otros parénquimas.

2. Herbicidas cloro-fenoxi: ácido 2,4-diclorofenoxiacético (2,4-D)

GENERALIDADES
Dentro de este grupo se encuentran incluidos los siguientes herbicidas:
o Acido 2,4-diclorofenoxiacético (2,4-D)
o Acido 4-cloro-2-metilfenoxiacético (MCPA)
o Acido 3,6-diclorometoxibenzoico o DICAMBA

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Unidad 5. Toxicología de herbicidas

El ácido 2,4,5-triclorofenoxiacético (2,4,5-T) se utilizó como defoliante en la guerra de


Vietnam (el "agente naranja") y fue prohibido en la mayoría de los países de la región
debido a que la fabricación de compuestos de 2,4,5-T también produce un
contaminante: el 2,3,7,8-tetraclorodibenzo-p-dioxin (TCDD), que es extremadamente
tóxico.

El 2,4-D es el herbicida más utilizado dentro de este grupo y se clasifica según


IPCS/OMS como Clase II o moderadamente tóxico basado en su DL50 oral aguda en la
rata de 375 mg/kg.

La dosis letal para el ser humano adulto de 2,4-D ha sido estimada en 28 g, la cual se
alcanza con la ingesta de 50 ml (dos sorbos) de una presentación líquida al 48%.
La intoxicación aguda se reporta con baja frecuencia, pero es potencialmente grave.
DICAMBA y MCPA presentan características toxicológicas similares al 2,4-D. También
se clasifican por IPCS/OMS en 2009 como Clase II, moderadamente peligrosos. La
DL50 oral aguda en la rata de DICAMBA es de 1.707 mg/kg. La DL50 oral en la rata de
MCPA es de 700 mg/k.

ALGUNOS NOMBRES COMERCIALES Y PRESENTACIONES


 2,4-D: Agrotec®, Amoxine®, Aqua-Kleen®, Academix®, Actril®, Hedonal®,
Helm®, Helmamina®, Hormonil®, Soldado®, Solution®, Superagromina®,
Superior®, Weedar®
 DICAMBA: Banvel®, Dombell®, Falcon®, Miura®, Wolf®, Malerb®
 MCPA: Agroxone®, Mcpa®

Están disponibles en numerosas formulaciones comerciales como único ingrediente o


en combinación con otros herbicidas como concentrados solubles, polvo soluble y
concentrados emulsionables (con solvente de tipo hidrocarburo), en concentraciones
que llegan hasta el 95%.

Estructura química:

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Unidad 5. Toxicología de herbicidas

Figura 5.2. Estructura molecular del 2,4-D

TOXICOCINÉTICA
En general, todos los clorofenoxi se absorben a través de las vías digestiva, respiratoria
y, en menor grado, por la piel. El 2,4-D es rápidamente absorbido en el tracto
gastrointestinal, habiendo sido hallado en plasma a la hora de la ingesta. Se distribuyen
en el organismo ampliamente y se depositan en riñones, hígado, SNC y SNP y tubo
digestivo.
Presentan escasa conjugación con ácido glucurónido; la biotransformación de estos
compuestos en el organismo es limitada. El 90% se excretan como tal por la orina. No
hay tendencia acumulativa.
La vida media de eliminación ha sido reportada entre 10 y 33 horas para el 2,4-D. La
vida media puede aumentar en sobredosis. El 2,4-D se elimina por vía urinaria como tal,
pudiendo hallarse en orina a las 2 horas de la ingesta.

TOXICODINAMIA
El mecanismo de acción tóxica en el cuerpo humano aún no ha sido totalmente aclarado.
Se plantean como posibles:
 Lesión estructural y alteración funcional de la membrana plasmática.
 Interferencia en vías metabólicas celulares donde interviene el acetil coenzima
A.
 Desacople de la fosforilación oxidativa y depleción de ATP.

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Unidad 5. Toxicología de herbicidas

Todos los herbicidas clorofenoxi son irritantes de la piel y las mucosas. El 2,4-D es
sensibilizante cutáneo y respiratorio.

DIAGNÓSTICO DE LA INTOXICACIÓN
El diagnóstico se basa, principalmente, en los antecedentes de exposición, a herbicidas
clorofenoxi y la sintomatología. En el caso de formulaciones como concentrados
emulsionables, que tienen como disolvente hidrocarburos aromáticos livianos o xileno,
la sintomatología puede asociar los efectos neurotóxicos de estos compuestos. El
cuadro clínico es similar en los tres compuestos clorofenoxi mencionados.

CUADRO CLÍNICO
 Síntomas locales
Los compuestos clorofenoxi son irritantes de la piel, los ojos y las mucosas
gastrointestinal y respiratoria.

El contacto con la piel puede causar síntomas alérgicos. La exposición crónica se ha


asociado a manchas de despigmentación local (manchas blanquecinas).

La dermatitis de tipo cloracné se ha observado en trabajadores expuestos durante el


proceso de manufactura del 2,4,5-T, posiblemente por la presencia de la dioxina. Este
efecto no se reporta en usuarios de otros herbicidas clorofenoxi.

La inhalación de aerosoles puede causar una sensación quemante en la nasofaringe y


el tórax y accesos de tos. Puede haber síntomas alérgicos respiratorios.

Después de la ingestión se presentan irritación orofaríngea, vómitos y dolor epigástrico.

 Síntomas sistémicos

El órgano crítico es el sistema muscular y la complicación más grave es la insuficiencia


renal secundaria a la rabdomiólisis.

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Unidad 5. Toxicología de herbicidas

Los síntomas sistémicos característicos de la intoxicación aguda son: debilidad


muscular proximal, espasmos musculares y rigidez. Puede ocurrir rabdomiólisis
(elevación de creatinfosfoquinasa [CPK]) con mioglobinuria y, como consecuencia, falla
renal.

Puede haber acidosis metabólica y elementos de hepatitis. Luego de la ingesta de dosis


masivas, el paciente puede presentarse en coma febril, con hipotensión arterial y
taquicardia, edema pulmonar y falla respiratoria.

PRUEBAS DE LABORATORIO

Se pueden detectar en orina y sangre por medio de cromatografía de gas-líquido. Las


muestras de orina deben recolectarse tan pronto como sea posible después de la
exposición, puesto que los herbicidas pueden ser eliminados completamente en 24–72
horas, dependiendo de la cantidad absorbida y del pH urinario (la alcalinidad la
incrementa). Su presencia permite confirmar el diagnóstico, aunque no hay una
correlación entre los niveles plasmáticos y la potencial gravedad de la intoxicación.

Para establecer la severidad del caso se solicitan:


o Creatinfosfoquinasa sérica (CK)
o Gases en sangre arterial
o Ionograma
o Funcional-enzimograma hepático
o Azoemia y cratininemia
o Sedimento urinario.

TRATAMIENTO

 General
Las medidas generales de tratamiento y las medidas de rescate o descontaminación
digestiva/cutánea, se describen en la Unidad 3.

19
Unidad 5. Toxicología de herbicidas

 Específico
Los herbicidas clorofenoxi no tienen un antídoto.

Aumento de la eliminación renal:


o La diuresis alcalina ha sido propuesta en el tratamiento de intoxicaciones
graves o en presencia de otros indicadores de mal pronóstico tales como
azoemia
o , rabdomiólisis, o concentración plasmática elevadas, de 2, 4-D, igual o
mayor a 0,5 g/l.
o La alcalinización se realizará hasta un pH urinario >7.5, con un bolo inicial de
bicarbonato de sodio de 1 mEq/kg, seguido de una infusión de 100 a 150
mEq de NaHCO3 y 20 mmol KCl en 850 ml de glucosa al 5%.
o En intoxicaciones severas debe considerarse la hemodiálisis.

 Tratamiento de las complicaciones


o Rabdomiólisis: iniciar nefroprotección mediante la reposición de fluidos a
efectos de evitar la precipitación de la mioglobina en los túbulos renales. En
casos de rabdomiólisis severa, la alcalinización urinaria puede estar
indicada, independientemente de su recomendación como medida de
aumento de la eliminación urinaria del tóxico.
o Convulsiones: si se presentan, diazepam en dosis de 10 mg en el adulto,
repitiendo la dosis cada 5 a 10 minutos hasta controlar la convulsión; en el
niño, dosis de 0,25 mg a 0,4 mg/kg de peso corporal cada 5 minutos

PRONÓSTICO Y SEGUIMIENTO
En general, el pronóstico en las intoxicaciones por herbicidas clorofenoxi tratadas
oportunamente, es bueno. Se han descrito casos aislados de neuropatía periférica, de
aparición tardía, luego de una exposición aguda. Aún en ausencia de neuropatía, la
debilidad muscular puede persistir durante meses después del cuadro agudo de
intoxicación.

EFECTOS CRÓNICOS

20
Unidad 5. Toxicología de herbicidas

Se describen distintos tipos de dermatitis en trabajadores expuestos. El contacto


repetido de 2,4-D con la piel puede causar zonas de despigmentación, y se ha asociado
con lesiones de tipo cloracné.

Debilidad muscular y neuropatía periférica fueron reportadas como consecuencia de la


exposición ocupacional a 2,4-D.

Los herbicidas clorofenoxi están clasificados por IARC como posible carcinógeno
(Categoría 2B) desde 1987. Estudios epidemiológicos sugieren asociación entre la
exposición a herbicidas fenoxiacéticos o clorofenoxi (incluido el 2,4-D) y aumento de la
incidencia de sarcomas y linfomas en adultos.

3. Propanil

GENERALIDADES
Herbicida del grupo de las acetanilidas, que actúa por contacto como post-emergente.
Utilizado para controlar numerosas malezas especialmente en cultivos de arroz. Se
clasifica como Clase II según IPCS/ OMS 2009: “moderadamente peligroso” con una
DL50 oral en la rata de 1.400 mg/kg.

ALGUNOS NOMBRES COMERCIALES DEL PROPANIL


Rogue, DPA, Stam, Arrosol, Herbax, Propanilo, DCPA, Propanex.

Las formulaciones generalmente disponibles son: gránulos dispersables al 80%,


suspensiones concentradas al 48% (acuosas) y concentrados emulsionables (con
vehículo hidrocarburo) al 48%.

Estructura química:

21
Unidad 5. Toxicología de herbicidas

Figura 5.3. Estructura molecular del propanil

TOXICOCINÉTICA

El propanil tiene una rápida absorción vía oral y también una rápida distribución en
tejidos. Se detectó una máxima acumulación del mismo a nivel pulmonar, hepático,
renal, esplénico, en glándulas adrenales y a nivel cardíaco en las primeras 6 horas de
la ingesta. Puede haber también absorción por vía inhalatoria.

La vida media de eliminación de propanil es de aproximadamente 3 horas. El principal


metabolito del propanil es un oxiderivado de los ácidos láctico o succínico, el 3,4-
dicloroanilida (DCA). El DCA es formado poco después de la absorción del propanil y
es detectable hasta por 48 horas después. Este metabolito es el principal responsable
de la formación de la metahemoglobinemia y la anemia hemolítica.

TOXICODINAMIA

El propanil es un principio fuertemente irritante para la piel y los ojos. Su metabolización


genera un compuesto con capacidad de oxidar el hierro de la hemoglobina, causando
metahemoglobina. Ésta es una hemoglobinopatía que lleva a la hipoxia tisular por la
imposibilidad de transportar oxígeno a los tejidos y se manifiesta como una cianosis gris
generalizada.

DIAGNÓSTICO DE LA INTOXICACIÓN AGUDA

22
Unidad 5. Toxicología de herbicidas

CUADRO CLÍNICO

 Síntomas locales
El contacto con la piel causa irritación local con eritema y ardor. La inhalación causa
irritación de vía aérea superior con dificultad respiratoria y tos. La ingestión causa
síntomas de irritación de la vía digestiva, ardor, dolor epigástrico, náuseas y vómitos.

 Síntomas sistémicos
No se conoce con exactitud cuál es la dosis de propanil que causa
metahemoglobinemia. Se reportan casos con dosis mayores a 400 mg/kg.

La hipoxia ocasionada por metahemoglobinemia es la responsable de la


sintomatología: cianosis gris, mareos, cefaleas, grados variables de depresión de
consciencia llegando al coma, isquemia cardíaca, arritmias, etc.

La aparición de metahemoglobinemia puede retrasarse 6 a 8 horas ya que se requiere


de la formación del metabolito con acción oxidante: el DCA.

La mortalidad se ha descrito en un 10% de los casos, asociada a


metahemoglobinemia severa, con cianosis, acidosis metabólica, hipotensión y coma.
Este herbicida puede formularse con vehículos de tipo hidrocarburo aromático (p. ej.,
xileno), por lo que en caso de ingestión puede asociarse depresión de consciencia,
hasta el coma y presentar neumonitis por aspiración.

 Por pruebas de laboratorio

La determinación de propanil y sus metabolitos en sangre u orina no es útil para el


manejo clínico del paciente. El principal estudio de laboratorio es la dosificación de
metahemoglobina (MHb). El hemograma con reticulocitosis y la dosificación de
bilirrubina indirecta en el funcional hepático son claves para descartar una anemia
hemolítica. También se solicitan gasometrías arteriales para valorar repercusión de la
hipoxia y ECG para valorar signos de isquemia.

23
Unidad 5. Toxicología de herbicidas

En Hospitales que no cuentan con determinación de MHb, se ha descrito un método a


través de una “carta de colores de metahemoglobina” (CCMHb) para determinar de
forma semi-cuantitativa la metahemoglobina del paciente dentro de un rango de valores.
Se hace una comparación visual entre el color de la sangre del paciente y la CCMHb,
siendo posible estimar el valor de MHb y dirigir oportunamente el tratamiento.

En la Tabla 5.3 se representa la clínica relacionada a la concentración de


metahemoglobina.

Tabla 5.3 Manifestaciones clínicas relacionadas a la concentración de metahemoglobina.


Porcentaje de Cuadro clínico
Metahemoglobina (%)
15 – 20 Cianosis clínica, gris azulada (en general asintomática)
20 – 45 Cefaleas, letargo, mareos, síncope, disnea
45 – 55 Aumenta la depresión del sistema nervioso
55 – 70 Coma, convulsiones, choque
>70 Alta mortalidad
Fuente: Crapanzano et al., (2012)

TRATAMIENTO

 General
Se describe en la Unidad 3

 Específico
La presencia de MHb es indicación que se debe administrar el azul de metileno como
antídoto. Se administra el antídoto cuando el paciente presenta niveles de MHb a partir
de 15% o cuando se encuentra sintomático y no es posible medir el nivel de MHb.

El azul de metileno se administra en una dosis de 1–2 mg/kg diluidos en dextrosa 5%,
intravenosa a pasar en 30 minutos. Puede repetirse luego de 1 hora si persisten
elementos clínicos de metahemoglobinemia.

Debido a que la vida media del metabolito DCA es mayor que el propanil, puede ser

24
Unidad 5. Toxicología de herbicidas

necesario repetir la dosis de azul de metileno o instaurar una infusión de azul de metileno
a razón de 10 mg/h por aproximadamente 10 horas.

Cuando el paciente no presenta buena respuesta al azul de metileno, podemos estar


frente a una deficiencia de glucosa-6-fosfatodeshidrogenasa (G6PD) o a la asociación
con hemólisis. En caso de tratarse de la deficiencia del G6PD, se plantea la
administración de ácido ascórbico.

La presencia de hemólisis es indicación que se debe comenzar con hidratación


parenteral con criterios de nefroprevención.

Como en otros casos de metahemoglobinemias refractarias al tratamiento con azul de


metileno, se ha planteado la exsanguinotrasnfusión.

PRONÓSTICO Y SEGUIMIENTO

Es bueno cuando el diagnóstico y tratamiento fueron oportunos y adecuados. La


mortalidad se reporta en un 10% de los casos. No se describen secuelas específicas
por intoxicación con propanil.

EFECTOS CRÓNICOS

Exposiciones repetidas en trabajadores durante la formulación han causado


afecciones cutáneas como cloracné. Estos síntomas se han asociado a la presencia
de contaminantes como el 3,4,3',4'-tetracloroazobenceno (TCAB). En estos
trabajadores se han reportado también niveles elevados de metahemoglobinemia.

4. Glifosato

CARACTERÍSTICAS GENERALES
El glifosato es la N-fosfonometil glicina, utilizada como herbicida no selectivo en
pastos, agricultura y forestación. Es uno de los herbicidas más utilizados en todo el
mundo. Su uso se asocia particularmente a los cultivos transgénicos que se diseñan

25
Unidad 5. Toxicología de herbicidas

para ser resistentes a este principio activo. El glifosato se formula en mezclas de sales
de fosfonometil glicina con surfactantes.

El Programa Internacional de Seguridad Química (IPCS/OMS) en su versión 2009


considera al glifosato, en Clase III con una DL50 oral aguda de 4.230 mg/kg para el
producto técnico puro.

Las manifestaciones clínicas de esta intoxicación se describen habitualmente como


leves a moderadas debido a que se asocian a exposiciones involuntarias, en bajas
dosis. La mortalidad se asocia a ingestas de dosis elevadas intencionales (intentos de
suicidio).

ALGUNOS NOMBRES COMERCIALES Y PRESENTACIONES

Roundup®, Ranger®, Rodeo®, Landmaster®, Fusta®, Squadron®.

Se encuentra disponible en formulaciones líquidas como concentrados solubles de color


ámbar entre 48% y 73%; la formulación sólida, en gránulos al 75% u 80% y en algunos
países hay herbicidas de uso doméstico con glifosato al 1%.

Las formulaciones de mayor relevancia por su toxicidad aguda (como se menciona más
adelante) son las soluciones acuosas, que se asocian a surfactantes de tipo aniónicos,
la mayoría de las veces es la polioxi-etilendiamina (POEA).

Estructura química:

26
Unidad 5. Toxicología de herbicidas

Figura 5.4. Estructura molecular del glifosato

TOXICOCINÉTICA

Si bien los datos toxicocinéticos en humanos son limitados, el tracto digestivo es la


principal vía de absorción. En modelos animales, se absorbe del 15% al 35% de la
dosis ingerida. Presenta escasa absorción por vía cutánea y se distribuye ampliamente
en todo el organismo.

Tiene escasa metabolización y se excreta rápidamente como tal por la orina. Su


principal metabolito es el ácido aminometilfosfónico (AMPA), que representa
aproximadamente el 0,5% de la dosis. La vida media de eliminación en humanos con
función renal normal se estima en 2 a 3 horas.

TOXICODINAMIA

El mecanismo exacto de toxicidad en seres humanos es aún desconocido. Se presume


que el glifosato interfiere con la fosforilación oxidativa. Presenta un efecto irritante ocular
severo y es levemente irritante para la piel y las mucosas. El surfactante actúa
directamente por alteración del surfactante pulmonar (favoreciendo la injuria pulmonar
aguda) y actuaría interfiriendo con la función mitocondrial por daño de su membrana.

DIAGNÓSTICO DE LA INTOXICACIÓN AGUDA

27
Unidad 5. Toxicología de herbicidas

CUADRO CLÍNICO
 Síntomas locales por contacto

Se observan lesiones cutáneas por contacto repetido o prolongado con las diluciones
de glifosato durante su aplicación, dermatitis irritativa y cambios en la coloración de la
piel.

El contacto ocular determina irritación local y conjuntivitis.

La irritación de la vía respiratoria superior y la irritación faríngea se observan en la


exposición inhalatoria a aerosoles de glifosato.

La ingestión de glifosato causa un cuadro clínico que inicia con síntomas irritativos
gastrointestinales: ardor orofaríngeo, dolor epigástrico, náuseas, vómitos y diarrea son
las manifestaciones más frecuentes. En casos severos, pueden observarse signos de
corrosividad gastrointestinal, habiéndose reportado hemorragias digestivas.

 Síntomas sistémicos
La ingestión de más de 85 ml de formulaciones de glifosato líquido se asocia con
casos severos. Los síntomas inician en las primeras dos horas luego de la ingestión.
En dosis muy altas, el paciente puede presentar en las primeras horas hipotensión,
shock cardiogénico y, como consecuencia de la disminución de la perfusión, falla renal
y daño hepático. Los casos severos pueden presentarse además con alteración de la
consciencia y distrés respiratorio.

Desde el punto de vista metabólico e hidroelectrolítico ocurre acidosis metabólica e


hiperkalemia severa. Se postula que la hiperkalemia se asocia particularmente a la
ingesta de sales potásicas de glifosato, pero se ha observado también en sales de
isopropilamina.

PRUEBAS DE LABORATORIO

28
Unidad 5. Toxicología de herbicidas

El glifosato y su principal metabolito, AMPA, se pueden cuantificar a nivel sérico por


cromatografía gaseosa y la cromatografía líquida acoplada a espectrofotometría de
masa. La determinación permite confirmar la exposición, aunque no hay correlación
con la clínica.

La identificación de glifosato en orina permite también confirmar la intoxicación.

Se deben solicitar estudios de función renal y enzimas hepáticas, especialmente ALT.


La radiografía de tórax puede mostrar injuria pulmonar aguda por aspiración o edema
pulmonar.

La realización de endoscopía digestiva se plantea en pacientes con sospecha de


injuria gastroesofágica.

TRATAMIENTO

 General
Se plantean las medidas generales de sostén de funciones vitales y descontaminación
digestiva como se describen en la Unidad 3. Cuando se sospecha intoxicación, se debe
monitorear al paciente desde el punto de vista cardiovascular, respiratorio, renal,
hepático e hidroelectrolítico.

 Específico
No existe un antídoto específico para la intoxicación por glifosato. El glifosato puede ser
removido por hemodiálisis. El uso de la hemodiálisis en forma temprana se recomienda
en los casos severos y cuando se ha ingerido más de 200 ml.

PRONÓSTICO
Se consideran factores de mal pronóstico, la presencia temprana de: taquicardia, distrés
respiratorio, insuficiencia renal, acidosis metabólica e hiperkalemia.

EFECTOS CRÓNICOS

29
Unidad 5. Toxicología de herbicidas

Los síntomas más frecuentes en la exposición crónica de trabajadores que aplican


glifosato son los asociados con una dermatitis irritativa. El glifosato no se considera una
sustancia con poder de sensibilización cutánea o respiratoria.

Ha sido clasificado como 2A “probablemente cancerígeno para los seres humanos” por
la IARC (International Agency for Research of Cancer). Tal conclusión surgió a raíz de
evidencia limitada en la asociación con linfoma no-Hodgkin en poblaciones rurales y por
evidencia convincente de desarrollo de cáncer en animales de laboratorio. Nuevos
estudios experimentales sugieren un efecto de disrupción endócrina.

30
Unidad 5. Toxicología de herbicidas

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