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Ensayo Argumentativo

María Rosa Jiménez Rodríguez

Docente

Análida Pérez Cardona

Corporación Universitaria del Caribe CECAR

Facultad de Humanidades y Educación

Lic. Lingüística y Literatura

Sincelejo

2021
Consumo responsable para el desarrollo sostenible

A medida que pasan los años, estamos cada vez más inmersos en el mundo del

consumismo, en este mundo las compras compulsivas e innecesarias se convierten en pan de

cada día, estas compras son provocadas principalmente por anuncios que nos abruman, y el

último siglo desde entonces, la publicidad a convertirse en un imán para atraer compradores.

Desafortunadamente, dejamos de lado la verdadera esencia del consumo, que es satisfacer las

necesidades actuales o futuras mediante el gasto racionalizado en mercancías, y nos dejamos

seducir por el comportamiento compulsivo del consumo excesivo y recurrir al consumismo. Es

precisamente así que cada año se producen más y más bienes y servicios para promover la vida

de las personas, pero el propósito de estos nuevos productos en el mercado es atraer el interés

de los clientes y generar nuevas demandas, esto no es una necesidad, sino el deseo que generan

los productos y la publicidad que usan al vender, esto es para estimular el consumo y así

alimentar la tesorería de más capitalistas. Pero la publicidad no es el único factor que puede

despertar el deseo de compra de los vendedores. Lo mismo ocurre con el diseño del producto en

sí, porque cuanto más atractivo es, más probabilidades hay de que genere la demanda de

compra del comprador.

Además, se ha establecido un nuevo mecanismo para promover el consumismo, que es el

desguace procesal de varios productos elaborados, que incluye darles una cierta vida útil para

que los consumidores se vean obligados a comprar nuevamente productos iguales o similares. A

lo largo de la historia, ha habido casos en los que grandes empresas intentaron todo lo posible

para acortar la vida útil de sus productos, como Phoebus, un caso en el que una empresa

monopolista se unió para reducir la calidad del producto.

La bombilla tiene una duración de 2.500 horas y finalmente produce 1.000 horas con una

vida más corta; este es el primer paso para que la empresa deje de producir productos duraderos

y de alta calidad y comience a producir productos más frágiles que dejarán de funcionar en el

corto o mediano plazo. El proceso de desguace sigue vigente en la actualidad. Para no detener
las ventas, la empresa produce bienes tienen un "reloj" que puede determinar cuándo deja de

funcionar, lo que obliga a los consumidores a realizar nuevas compras.

La obsolescencia programada de desguace y producción masiva de anuncios y diversos

tipos, colores y diseños de bienes; son los que influyen en la construcción de una sociedad de

consumo, en pos de lo último y de la moda, se convierten en compradores compulsivos y les

ayudan a sumergirse en el mundo capitalista. El hecho de que lo único que se busca es obtener

un beneficio, aunque éste debe ir más allá de la ética, la ecología y la sociedad.

Por eso, la sociedad debe cambiar su forma de pensar en el consumo, aquí es donde entra

en juego el consumo responsable, las personas deben tomar decisiones a la hora de comprar,

pensar en lo que realmente necesitan y dejar de lado sus deseos; hay que tener un buen consumo

que se adapte a sus necesidades actuales.

El consumo responsable se relaciona con varios aspectos, como el impacto que puede

tener un determinado producto en el medio ambiente y la sociedad, y si el producto tiene una

buena relación calidad-precio; son muchos los aspectos que inciden en las decisiones de compra

de los consumidores responsables, pero estos aspectos siempre son está relacionado con los

campos de la ética, la ecología y la solidaridad.

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