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Historia de América Latina III

Leidy Estefany Roldán Morales

Las Memorias de Mamá Blanca

Teresa de la Parra (Ana Teresa Parra Sanoja), hija de padres venezolanos, nacida en

octubre de 1889 en París, es una mujer la cual se inicia en el mundo de la escritura a

muy corta edad bajo la influencia de la literatura moderna, la cual la atrapó. En sus

escritos es muy notorio el interés de resaltar el papel que desempeñaba la mujer y la

importancia de la misma en diferentes épocas, sobre todo a lo largo del siglo XIX.

Aunque sus obras más reconocidas son Ifigenia y Las memorias de mamá Blanca, no se

puede hacer a un lado el largo historial de artículos publicados en varias revistas

venezolanas, así como conferencias y discursos dictados en varios países.

Teresa de la Parra, con unos bastos conocimientos sobre literatura y con unos fuertes

pensamientos ideológicos derivados del libertador Simón Bolivar, logra plasmar y

transmitir en sus obras aquellos sentires del siglo XIX, pues la cotidianidad y costumbre

resalta en sus obras a pesar de que en su discurso sea notable la ironía que utiliza.

Su última obra, Las memorias de mamá Blanca, muestra la vida de una familia

venezolana del siglo XIX, que vive en una hacienda de caña cercana a Caracas, pero a

pesar de estar cerca de la ciudad, se encuentran aislados de todo aquello que pueda

ocurrir allí, pues sólo conciben su vida dentro de la hacienda Piedra Azul. Es allí donde

desarrollan todas sus actividades. La familia constituida por el padre, madre y seis

hermanas, las cuales serían el centro de la novela; y los trabajadores de la hacienda,

quienes tenían como función secundaria cumplir los deseos de las seis hermanas.
Durante el desarrollo de la novela se resalta la crianza de estas niñas, pues contaban con

Evelyn, una mulata inglesa que sería la encargada de la enseñanza de ellas, es en este

proceso donde se muestra una rebeldía por parte de las niñas para acogerse a esas

normas y perfección impuesta por los mayores.

Esta novela trata de las memorias de Blanca Nieves, personaje principal, que sí bien

hace parte de la ficción de la autora, no se puede negar el hecho de que su inspiración

llega de sus propias experiencias y vivencias, relatando así parte de su infancia, pues fue

una joven que vivió en una hacienda rodeada de su madre y sus seis hermanos.

Comienza desde que tenía seis años y como todo niño, podía engrandecer las cosas y

encontrar en su bienestar la vida perfecta. Sin embargo, es de suponer que Teresa de la

Parra, en su obra, pretendía mostrar aquella burbuja en la cual se encontraban

encerradas algunas familias, desinteresadas de lo que ocurría en el exterior de sus casas,

haciendo a un lado los conflictos por los cuales podría estar atravesando su país.

La obra nos puede llevar a diversas interpretaciones, pues a pesar de tener un alto

contenido literario y fantasioso, no se pude dejar a un lado el contenido histórico y lo

que nos puede arrojar, tales como la conformación de la familia y aquella cotidianidad

envolvente, permitiéndonos ver una nación desde adentro. Sin embargo, se ve el interés

de que se conozca aquello que ocurría en la política y la guerra con la creación de

algunos personajes, como primo Juancho y Vicente Cochocho, respectivamente.

También muestra esa moral impuesta por la iglesia, pues personajes como Evelyn y

Carmen María, madre de Blanca Nieves, presionan constantemente a Cochocho para

que acceda a casarse con alguna de sus dos mujeres. Allí se ve una fuerte crítica a esto,

al desafiar las normas eclesiásticas, con la práctica de la monogamia, tratándose de un

personaje incapaz de elegir entre sus dos grandes amores.


La contribución de esta obra en la formación de la nación, fue lograr generar esa

conciencia sobre la ignorancia por la cual atravesaba el país, procurando que exista un

cambio al respecto, ignorancia que se ve reflejada en el desinterés hacia su país; así

como dar cuenta al lector sobre la situación de su país, del conflicto constante que se

presentaba políticamente y de aquellos prejuicios y discriminación de los miembros de

una misma sociedad.

Respecto a los valores republicanos, se puede resaltar ese fuerte compromiso con la

patria por Vicente Cochocho, quien a pesar de no tener la necesidad de pelear por su

país, lo decide hacer sin recibir a cambio alguna gratificación. Por otro lado, las seis

niñas, quienes aceptaban a cada persona, tal cual como era, sin discriminación alguna,

permitía un progreso social, pues estaríamos hablando de una igualdad como personas y

respeto hacia la misma. La venta de la hacienda por parte de Juan Manuel, padre de las

seis niñas, les permite una inclusión en la sociedad, ahora ya no estarían aislados de la

realidad y ese mundo maravilloso ideado por las hermanitas ya no volvería, ahora se

trataba de una realidad, de hacer parte de algo, de una sociedad donde comenzarían a

generar lasos con más personas a su alrededor, dejando a un lado aquella vida

campesina para pertenecer a la ciudad.

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