LA PERSPECTIVA NÁWATL

Las raíces etimológicas de la palabra Náwatl son: Nawi

que significa cuatro o cuarta y Atl que significa lo
líquido, es decir, el agua, la sangre, el semen, las
lágrimas, etc. Entonces, Náwatl es la cuarta liquidez, el
habitar la cuarta dimensión, la existencia temporal.

Por tanto, Náwatl se asocia con la noción Wixarika o

uichol de Tzikuri que significa Cosmos u Orden. Y esto
nos conduce a que lexicográficamente Náwatl significa,
lo que es bello al oído, lo armonioso, la existencia en
extática homeostasis.

Náwatl no es el nombre de una determinada etnia. Por

tanto, tampoco es el nombre de un determinado
dialecto o lenguaje.

Náwatl es la perspectiva a través de la cual se desborda

permanentemente la condición colonial, es decir, la
servidumbre voluntaria. La servidumbre voluntaria es el
síndrome formado por la civilización, la educación, la
domesticación, la religión, la violencia, la guerra, la
dominación de la media y todo tipo de limitación sobre
uno mismo que impida desplegar nuestro poder
creativo.

Desde la Perspectiva Náwatl no hay el verbo o

sustantivo Ser, no es posible la
Ontología/Metafísica/Filosofía.

La Perspectiva Náwatl es una Topología, por tanto, Uno

está en la Perspectiva Náwatl cuando deviene absoluta
y enteramente AUTÓNOMO y AUTÉNTICO.

Uno está en la Perspectiva Náwatl cuando está en

permanente transformación, logrando a cada instante la
meta de convertirse en el ancestro más fértil posible y
la única manera de lograrlo es muriendo.

La incondicional afirmación de la muerte como

definitoria de la existencia marca la diferencia más
tajante entre la Perspectiva Náwatl y cualquier otro
tipo de concepción humana posible.

La muerte es lo que le da esencia y motivo a la vida, por

tanto no se concibe como algo a negarse o superarse.

Actualmente el camino del permanente devenir Náwatl

es el Arte Náwatl, la creatividad que transmite el
equilibrio dinámico, la homeostasis, la vuelta al origen
que retroalimenta consiguiendo la catarsis. Es el Arte
que se concibe a través de una inmersión total dentro
de uno mismo para develar la misma fuente originaria
de nuestra propia existencia. Es el escuchar las
milenarias voces de nuestros ancestros para expresarlo
en cada una de nuestras creaciones.

Uno está en lo Náwatl cuando la propia existencia se

vuelve una creación artística Náwatl.

Toda creación proveniente del Arte Náwatl es un

Espejo, una Nierika, una Mandala, donde el artista y el
espectador se encuentran para revelar, compartir y
gozar sus raíces comunes.

El Arte Náwatl es una invitación para reconocerse a sí

mismo desde la Perspectiva Náwatl, desde el centro del
Cosmos, desde el único sitio donde se tiene la
perspectiva de las cinco dimensiones que forman cada
momento de nuestra existencia.

La Perspectiva Náwatl solo es concebible, solo es

percibible desde la Perspectiva Náwatl. Pero esto no
vuelve a la Perspectiva Náwatl una doctrina que se ha
de imponer subyugando nuestra propia esencia, sino un
placer a sentir a través del Arte Náwatl, afirmando
nuestra propia autonomía y autenticidad.

Desde la Perspectiva Náwatl todo acontecimiento, todo

instante se forma de acuerdo al Esquema Topológico
Náwatl. En este Esquema están marcadas las cuatro
dimensiones y colores del Cosmos, las cuales definen
como su centro virtual a la quinta dimensión.

La única manera de leer o interpretar el Esquema

Topológico Náwatl es desde su izquierda hacia su
derecha, es decir, en sentido contrario a las manecillas
del reloj. Esta condición responde al sentido direccional
del movimiento del Planeta y por tanto de toda energía.

Por tanto tenemos que las únicas posibles relaciones

entre las cuatro dimensiones que forman el Esquema
Topológico Náwatl son las siguientes:

La I a través de la II proyecta la III

La II a través de la III proyecta la IV
La III a través de la IV introyecta a
la I
La IV a través de la I introyecta a
la II

Por lo tanto

La I y la II son exclusivamente dimensiones Proyectivas

y por tanto Dimensiones Internas.
 La III y la IV son exclusivamente Dimensiones
Introyectivas o Dimensiones Externas.
Finalmente, la Dimensión V es el origen y el término de
las otras cuatro, entonces la dinámica del Esquema
Topológico Náwatl es definitivamente Espiral.

Teniendo en cuenta el Esquema Topológico Náwatl y

sus condiciones definidas es posible plantear el núcleo
de la Perspectiva Náwatl a través de los siguientes
esquemas esenciales:

I II III IV V

In Akatl In Tekpatl In Kalli In Tochtli In Nawi Ollin

In Yollotl In Kwikatl In Ixtli In Xochitl In Matzewalli

Hikuri Kauyumarie Iku Tatewari Mara’kame

Espejo Red Ofrenda Uno Mismo Nierika-Tetzkatl

Wirikuta Utotavita Haramara Xapawiyeme Kwiepa

Nariwame Tzakaimuta Haramara Xapawiyeme Tayaupa/Tatewari

Iyari Kwikari Yeiyari Tuturi Nierika

 Lenguaje Experiencia Perspectiva
Sabiduría Arcana Cultura Mítica
Simbólico Histórica Nawatl

Logos Aestheos Ethoos Episteme Noûs

Logoi Psique Soma Aphros Autós

Mente Alma Cuerpo Carne Uno Mismo

Poiética Hermenéutica Científica Antropológica Artística

Energeia-
Pathos Pharmakon Paideia Katharsis
Existentia

Ritmo Forma Situación Montaje Coreografía

Dialéctica Dialecto Diálogo Diálisis Aletheia

Kranein Creativo
Poiesis Mnémesis Téchne Mímesis

Significado Símbolo Referencia Signo Sentido

Fonética Semiótica Semántica Sintaxis Expresión

Alter Cautivación Profano Mestizaje Hierofanía

Origen Muerte Personalidad Encarnación Mito

 Oído Olfato Vista Gusto Tacto

Agua Aire Tierra Fuego Sangre

Helenismo Medievo Renacimiento Romanticismo Actualidad

Sabia Pasión Placer

Deseo Mortal Ofrenda Ritual Éxtasis Encarnante
Transferencial

Religiosa Servidumbre
Ignorante Dolor Inmortal Temor Alucinante Amor Voluntaria
Compasión

Autodesprecio Servidumbre Educación Guerra Civilización

La definición de cada una de las nociones de los

Esquemas Básicos se basa en su perfil etimológico y en
la asociación libre.

TONATLPOWALLI
Tonatlpowalli etimológicamente significa, la cuenta de
la sangre, la genealogía existencial de cada persona de
acuerdo a su MOMENTO ORIGINARIO.

Los símbolos náwatl son 20 en el sentido ordinal, no

tienen carácter progresivo o jerárquico sino topológico.

Tonatlpowalli (la cuenta de tu existencia) es la

repetición cíclica de los 20 símbolos trece veces, de tal
manera que se forma una serie circular de 5 anillos con
260 posiciones o casillas, las cuales corresponden al
ciclo anual lunar, y al período aproximado de gestación
humana.

El primer símbolo es el número 1 y el último símbolo, en

el sitio 260, es el número 20, de tal modo que es un
proceso espiral sin fin.
 A continuación los 20 símbolos, mostrando primero el
Signo y luego el Nombre/Noumen/Personaje
Mitológico/Ancestro, respectivamente.
Recordar que desde la Perspectiva Náwatl los elementos
básicos de interpretación son el perfil etimológico y la
libre asociación.
Por otra parte, la principal manera de asociar los
símbolos entre sí es la Relación Numerológica (por
ejemplo 15=6, 10=1, 13=4, etc.).

01. Tzipaktli - Tonakatekutli 02. Yeyekatl –

Ketzatlkoatl 03. Kalli - Tepeyolotl
 04. Kwetzpallin – Wewekoyotl 05. Koatl –
Chatlchitlikue 06. Mikitztli – Texitztekatl
 07. Mazatl Tlalok 08. Tochtli – Mayawel
09. Atl –Xiutekutli
 10. Itzkwintli – Miktlantekutli 11. Otzomatztli –
Xochitlpilli 12. Malinalli – Patekatl
 13. Akatl – Tetzkatlipokatl 14. Otzelotl –
Tlatzotlteotl 15. Kwautli – Xipetotek
 16. Kotzkakwautli – Itzpapalotl 17. Ollin – Nanawatzin
18. Tekpatl – Chatlchitlikue

19. Kwiawitl – Tonatiu 20.

Xochitl - Xochiketzatl
A cada Uno le corresponden dos símbolos, uno respecto
del mes y otro respecto del día. El primero es el
esqueleto/estructura/forma, el segundo es la
carne/contenido/rostro, de Uno.

Durante su existencia cada persona, en su devenir

náwatl, ha de encarnar cada uno de los dieciocho
restantes a través de su experiencia histórica personal,
para así llegar a cumplir la meta del devenir náwatl:
conocer por experiencia personal los 20 símbolos, para
así seguir el camino que le convierta en el ancestro más
fértil al morir.