El término comunidad tiene su origen en el vocablo latino communitas, y se refiere
a un conjunto, una asociación o un grupo de individuos, pueden ser de seres humanos, de animales o de cualquier otro tipo de vida, que comparten elementos, características, intereses, propiedades u objetivos en común. Desde el punto de vista antropológico, las comunidades humanas comparten el idioma, las costumbres, la visión del mundo, los valores, las creencias, la ubicación geográfica (país, ciudad, barrio, vecinos), las tareas (cuarteles, cárceles), el trabajo, los estudios, el estatus social, los roles, la edad, los problemas y/o los intereses. La palabra puede referirse a una comunidad no estructurada (concepción individualista), que alude a la reunión de individuos que conforman un determinado sistema o ecosistema, o comunidad estructurada (concepción holística) en la cual existe un alto grado de pertenencia, por tanto, existe un sentimiento de proximidad e igualdad social. Generalmente, en la medida en que una comunidad humana se desenvuelve, los individuos elaboran, comparten y socializan una identidad común, diferenciándose de otras comunidades, esa identidad puede expresarse, por ejemplo, con signos o señales.
El hombre es un ser social y biológicamente es imposible un ser humano fuera de
la sociedad. Aprendizaje, costumbres, comportamientos o relaciones llevan al hombre a la vida que entendemos como humana, importancia que contrasta con la poca atención que se ha prestado a la realidad de este análisis. En principio se produce cuando sociedad civil y Estado son contemplados de diferente manera, aunque durante algo más del siglo su existencia todavía no se ha clarificado suficientemente lo social con variadas explicaciones sobre sus cambios. Los grupos primarios constituyen la red fundamental del entramado social y lo social constituye la verdadera sustancia medular de nuestra ciencia, así los problemas de la sociología se refieren a la naturaleza del vínculo social. El misterio que afrontan los sociólogos es la naturaleza de lo social. Las diferentes maneras de abordar esta solución en con el desarrollo de dos grandes campos: el estático social y el dinámico social. La vida humana es vida social, la evolución supone un paso de lo simple a lo complejo, de lo único a lo plural, una tendencia a la agregación inscrita en la lógica de la vida.
Wilson ve en el parentesco la principal fuerza generadora de la sociedad y el
fenómeno del altruismo, así cuanto mayor es el coeficiente de parentesco mayor es la disposición al altruismo. Esta cultura puede llevar incluso a la transformación de ciertos rasgos físicos. Por otro lado, Aristóteles definió al hombre como ZOON POLITIKON; animal político por naturaleza. Él se refería a la polis como paradigma de sociedad, un sistema de vida, no un agregado de individuos, por tanto esta definición contiene un matiz importante; "su dimensión cultural". Así mismo, el desarrollo de la teoría de Darwin propuso dos ideas fundamentales: la idea del equilibrio del ser vivo-naturaleza y el proceso evolutivo por adaptaciones y desadaptaciones.
En la historia de la evolución el desarrollo humano supone un principio de
autorregulación y una producción autónoma de ambientes artificiales, esto debe explicarse en relación de hasta que punto influye o es condición para el desarrollo humano. Todo esto complementado con la habilidad del propio lenguaje, creatividad, disposición solidaria a cooperar y trabajo con herramientas. En las sociedades de primates existen ciertas protoculturas muy elementales que se desarrollan en los comportamientos grupales lo cual se puede observar con la antropología comparada. Con ello se puede encontrar una cierta línea de continuidad hacia nosotros. El hombre a lo largo de su evolución cultural ha hecho de la sociedad su nicho ecológico dentro de la cual no solo crea sino también fabrica de una manera más compleja que las otras especies por medio de su cerebro y de la diversificación de sus manos (Mano – Cerebro). Esta fabricación es una tarea de grupo cuya cultura se transmite de generación en generación, lo cual posibilita la mejora de las herramientas.
El hombre se ha ido remodelando como especie social, como "ser de praxis"
(Marx). Otro de los aspectos básicos es el de la comunicación entre los seres humanos. La conformación social de los hombres acaba influyendo en su propia evolución como especie, lo social es parte de la naturaleza humana. Wilson expone así mismo que el segundo paso de la ampliación cultural del hombre se basó en la caza. Dicho de otro modo la cultura es la que conforma la personalidad humana permitiendo al hombre sobrevivir y desarrollarse.
La capacidad de socializar entre los diferentes individuos lleva al ser humana a
evolucionar entorno a su capacidad de planificación y con ello llevar a cabo una impecable gestión de proyectos, lo cual consiste en la aplicación de conocimientos, habilidades, herramientas y técnicas a las actividades de un proyecto para satisfacer los requisitos del mismo. Consiste en reunir varias ideas para llevarlas a cabo, y es un emprendimiento que tiene lugar durante un tiempo limitado, y que apunta a lograr un resultado único. Surge como respuesta a una necesidad, acorde con la visión de la organización, aunque esta puede desviarse en función del interés. El proyecto finaliza cuando se obtiene el resultado deseado, y se puede decir que colapsa cuando desaparece la necesidad inicial o se agotan los recursos disponibles. La definición más tradicional «es un esfuerzo planificado, temporal y único, realizado para crear productos o servicios únicos que agreguen valor o cause un cambio retroactivo. Esto en definición con la forma más tradicional de trabajar, sobre la base de procesos, en la cual se opera en forma permanente, creando los mismos productos o servicios una y otra vez». Destacando que un proyecto (del latín proiectus) es una planificación que consiste en un conjunto de objetivos que se encuentran interrelacionados y coordinados. De conformidad con el Project Management Institute (PMI), "un proyecto es un esfuerzo temporal que se lleva a cabo para crear un producto, servicio o resultado único". De estos conceptos, se evidencia que la razón de un proyecto es alcanzar resultados o metas específicas dentro de los límites que imponen un presupuesto, calidades establecidas previamente, y un lapso de tiempo previamente definido.
Por otro lado, un proyecto comunitario es aquel que se asocia a una comunidad (el
grupo de seres humanos o países que mantienen intereses en común). Los proyectos comunitarios forman parte de los proyectos sociales, que tienen la finalidad de mejorar la vida de las personas a través de la satisfacción de sus necesidades básicas. La especificidad de los proyectos comunitarios radica en que suelen ser ideados, desarrollados y concretados por los vecinos. La elaboración de un proyecto comunitario comienza por la etapa de diagnóstico, que consiste en un profundo análisis de la situación de la comunidad y de las problemáticas que le impiden su correcto desarrollo. Para la resolución de los conflictos hallados durante esta fase se puede escoger cualquiera de los siguientes caminos, o bien por los dos a la vez: determinar las herramientas y los recursos que serán necesarios para el trabajo, conseguirlos y ponerse manos a la obra; enseñar técnicas y actividades a la propia comunidad para que participen activamente del proyecto.